Del protagonista al deuteragonista

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Hemos visto en el primer episodio que existen trasfondo, argumento y personajes en cada historia. Vamos a revisar un poco que tipos de personajes existen, diferenciándolos por su función dentro de la narración. Porque al fin y al cabo, toda narración depende de un conflicto, y los personajes deben ser parte del mismo de una manera u otra.

En general, los personajes principales son elementos del argumento (lo protagonizan, lo entorpecen, colaboran o se enfrentan), mientras que los secundarios son más frecuentes como parte del trasfondo. Veamos a los personajes principales según su función:

- Entre los personajes principales tenemos, habitualmente, un protagonista central. Se trata del centro indiscutible de la acción. Suele tener una meta, una motivación, en torno a la que gira el argumento. Otras veces, la historia gira en torno a él y su papel es más reactivo que activo. De un modo u otro, el protagonista es la perspectiva esencial de la narración, sin importar que esta sea en primera o en tercera persona, y el resto de personajes principales son definidos por él (o ella).

Tradicionalmente el protagonista es un héroe bueno y virtuoso, ya que la narración servía tanto para entretener como para inculcar valores. Hoy en día vemos ejemplos de protagonistas buenos pero con defectos, buenos en general pero dispuestos a ser crueles, villanos con un propósito noble, o villanos sin más. Esto es interesante de explorar, pero lo haremos en próximos episodios. En lo que quiero centrarme es en que el protagonista es quien tiene más vigencia, más tiempo "en escena" y en quien se centra la historia.

- El segundo en importancia es el deuteragonista. Este tipo de personaje es el segundo en importancia; sus formas más habituales son ser el "escudero" del protagonista (es decir, su aliado más relevante y que tiene más presencia en la historia junto a él) o un enemigo tan presente que tiene más tiempo "en escena" que ningún otro aliado.

El deuteragonista es complementario al protagonista. Será el Sancho Panza (un señor de pueblo, bajo, grueso, inculto, manso y cuerdo) para Don Quijote (descendiente de nobles venido a menos, alto, flaco, leído, apasionado y loco). Será el Vegeta (príncipe de élite, obsesivo, arrogante, cruel y para el que la lucha es una herramienta) de Son Goku (guerrero de casta baja, relajado, dispuesto a aprender, amistoso y para el que la lucha es una pasión). El Loki (príncipe legítimo de los Jotun, adoptado, mago, astuto, deseoso de ser reconocido por Odin) de Thor (príncipe legítimo de Asgard, hijo de Odín, guerrero, directo, deseoso de ser rey).

(Para los fans de los comics: si, me refiero al Loki y Thor de la película, tengo claro que la dinámica es distinta en los tebeos. Entended el ejemplo y no toquéis las narices)

- En ocasiones podemos ver uno o varios tritagonistas. Tercero en su orden de relevancia, tiene menos presencia "en escena" que los anteriores, siendo básicamente el rival, el otro miembro del grupo de interés, etcétera. La misma distancia que hay entre protagonista y deuteragonista, la hay entre deuteragonista y tritagonista. Pero lo más relevante de este tipo de personaje, lo que lo continúa haciendo un personaje principal, es que como lectores o espectadores podemos involucrarnos emocionalmente con él. Sea para apreciarlo o para detestarlo.

- Y me preguntaréis donde entra, a todo esto, el antagonista. Bien, el antagonista puede ser deuteragonista o tritagonista; lo único que no será es secundario. Este término sólo define a su papel: es la oposición del protagonista y obstaculiza que logre su objetivo. Puede ser malvado o simplemente un competidor con la misma meta. Es más, el protagonista puede ser un villano y el antagonista un héroe. Para estos términos no es relevante su postura moral, únicamente cuanto se implica un personaje en la historia, cuanta presencia tiene, y si va a hacer avanzar el objetivo principal o va a intentar impedir que se logre.

El caso es que estos roles son flexibles, debido a que un personaje puede desarrollar mas relevancia o cambiar de bando. Veamos algunos ejemplos:

· Naruto: Cuando se forma el Team 7 al principio de la serie, Naruto es el protagonista, con Sasuke como deuteragonista y Kakashi como tritagonista (Sakura fue y será secundaria, qué le vamos a hacer). Vemos los problemas de Kakashi para guiar a su equipo, vemos a Naruto y Sasuke compitiendo de forma "amistosa" y desarrollándose mutuamente, motivándose el uno al otro.

En el arco argumental del examen de Jounin, Naruto mantiene su rol, pero Gaara se convierte en el deuteragonista dándonos ocasión de verle con frecuencia, empatizar con sus emociones, compararlo con Naruto en sus paralelismos y diferencias. Sasuke se convierte en tritagonista, siendo su rivalidad con Naruto uno de los motores emocionales de la saga, pero tiene comparativamente poca presencia.

Más adelante, cuando Sasuke deja Konoha y se convierte definitivamente (durante la mayoría de lo que queda de serie, al menos) en enemigo de Naruto, recobra su rol de deuteragonista, llevando la mayoría del peso del argumento convirtiéndose en antagonista en el proceso.

· The Big Bang Theory: En series de múltiples protagonistas como esta, en cada capítulo cambian los roles de los personajes. En las primeras temporadas, el argumento gira en torno a si Leonard, como protagonista, podrá superar los problemas que le da Sheldon, su deuteragonista, y conseguir que Penny, la tritagonista, se fije en él. Y como un capítulo entero dedicado a esta historia se haría pesado, mientras tanto Howard hace de protagonista de una subtrama que ocurre paralelamentea la principal, con Koothrapali como deuteragonista. O a la inversa.

A medida que avanza la serie, vemos capítulos donde Sheldon protagoniza la trama principal, con su novia Amy como deuteragonista y Penny o Leonard como tritagonistas. Ocasionalmente hay episodios sobre Koothrapali y Howard, con el foco de la historia sobre ellos.

Como veis, los roles van y vienen dependiendo del formato de la historia a narrar, y serán más flexibles según cuantos personajes tengamos en acción. Combinamos esto con el concepto de idea básica y estereotipo que vimos en el capítulo 2, y tenemos un amplio surtido de opciones para dar juego a los principales y secundarios por igual.

Si esto fuera un dibujo, apenas habríamos dibujado un boceto de la silueta. Vamos a profundizar más y empezar a añadir detalles en los próximos episodios.


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