¿Qué es la hipervitaminosis?

En el ambiente clínico, hipervitaminosis se refiere a la acumulación excesiva en el organismo de vitaminas por un consumo arriba de lo normal”. ¿Y qué son las vitaminas?
Las vitaminas son sustancias orgánicas presentes en cantidades muy pequeñas en los alimentos, pero indispensables para el metabolismo de las personas*. Las consecuencias por un consumo insuficiente de vitaminas se han documentado ampliamente, pero también la ingesta excesiva de estos compuestos puede desencadenar desde alteraciones metabólicas hasta una intoxicación, y en este caso se estaría hablando de una hipervitaminosis. La principal causa es por el consumo desmedido y por periodos largos de tiempo de complementos alimenticios.
A pesar de ser poco frecuente la hipervitaminosis, algunos efectos secundarios son:
Vitamina A: De los pocos casos de hipervitaminosis, aquella por exceso de vitamina A es la más frecuente. El consumo adecuado de retinol puede favorecer la visión, la piel y prolongar la vida celular, pero un consumo excesivo podría ocasionar vómitos, nauseas, visión borrosa, irritabilidad o pérdida de cabello.
Vitamina C: A pesar de ser una vitamina soluble en agua y de no reconocerse algún efecto tóxico por el consumo elevado, se ha relacionado el exceso de vitamina C con mayor riesgo de litiasis por oxalatos.
Vitamina D: La exposición a la luz solar es suficiente para sintetizar el calciferol –vitamina D- que el cuerpo requiere, Aunque por raro que parezca, la deficiencia de vitamina D es muy común, por lo que es importante su aporte en la dieta. El consumo excesivo de complementos de esta vitamina puede ocasionar hipercalcemia aumento de calcio en sangre o depósitos de calcio en riñones y/o tejido cardiaco.
¿Cómo evitar la hipervitaminosis?
Cuando se llegan a presentar casos de hipervitaminosis, el tratamiento consiste en dejar de consumir dosis altas de vitaminas especialmente por complementos alimenticios. En caso de presentar algún síntoma como: vómito, visión borrosa, cambios en el estado de conciencia, somnolencia o nauseas, lo mejor siempre será consultar al profesional de salud de confianza.
Un nutriólogo podrá evaluar si la alimentación de un individuo necesita complementarse con algún multivitamínico. Existen condiciones fisiológicas específicas -mujeres embarazadas, púberes o deportistas- que requieren el consumo extra de algunos minerales como el calcio, hierro o vitaminas del complejo B.
Una alimentación completa, variada y equilibrada aporta todas las vitaminas y minerales que el cuerpo necesita. Además, el consumo habitual de Lactobacillus casei Shirota puede contribuir al equilibrio de la microbiota intestinal y favorecer la absorción de nutrientes. ¡Consume probióticos!
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