El pueblo gallego de Allariz quizá te suene: hace ya unos años que descubrimos su maravillosa iniciativa para crear una decoración sostenible cada Navidad. Entonces, nos contaron que gran parte de los materiales que utilizaban eran estructuras de otros eventos, sobre todo, del Festival Internacional de Jardines de Allariz, que tiene lugar anualmente desde 2010.
El evento, pionero en su temática en toda la península (solo se celebra uno parecido en Portugal, en Pontes de Lima), vuelve con fuerza este año, extendiéndose a través de más de 37.000 metros cuadrados de agua, sonidos, colores y vegetación. "Son tres hectáreas en las que se mezclan arte y naturaleza, originando un espacio propio para la contemplación y la imaginación del visitante", explican desde el Concello.
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Y continúan: "Se trata de un espacio verde que mantiene durante el año una estructura fija y renueva cada primavera, a través de un concurso, doce jardines asignados a la creatividad y a la innovación de paisajistas de todo el mundo. El Festival es un concurso de ideas y diseños de jardinería expuestos de mayo a octubre a orillas del río Arnoia".
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JARDINES QUE SANAN
Este año, el tema es Jardines Terapéuticos, Diseños Sanadores, por lo que las diez creaciones, a manos de paisajistas gallegos, madrileños, austriacos, montenegrinos, italianos, colombianos y estadounidenses, se han centrado “en la terapia de espacios abiertos y los beneficios que aportan estos a nuestra salud”, según los organizadores.
Los espacios verdes podrán ser disfrutados (y votados) hasta el próximo 30 de octubre por los más de 40.000 visitantes anuales que recibe el festival. Fuera de concurso quedan el jardín ganador de la última edición, El camino de la emigración de Rosalía, y el diseñado por los alumnos de las escuelas de Allariz, bautizado como: El juego cura. Más parque y menos pantallas.
ALLARIZ, MUCHO MÁS QUE JARDINES
Aunque sean uno de sus atractivos principales, los jardines temáticos no son el único encanto de Allariz, uno de los pueblos más bonitos y con más peso cultural de Galicia gracias a la decidida apuesta de sus gobernantes por mantenerlo vivo. “Aquellos pueblos que invierten en calidad de vida, en bienestar social, en espacios que contribuyen al encuentro con uno mismo y a la relación con el entorno natural y humano, son pueblos que apuestan fuertemente por el futuro y que se preocupan de ellos mismos”, explica su alcaldesa, Cristina Cid.
El lugar, además, se apoya sobre un rico pasado histórico: el rey Sancho IV lo consideró la llave del Reino de Galicia en el siglo XI, y más tarde se convirtió en el escenario de la educación y madurez de Alfonso X el Sabio, de donde salieron sus famosas Cantigas.
Solo hace falta darse un paseo por el casco viejo y admirar su vasto patrimonio (como la casa-torre de Santiago o el Convento de Santa Clara) para comprobarlo: Allariz derrocha leyenda. Además, la población cuenta aún con restos de la antigua muralla y con un sorprendente barrio judío.
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Otro de sus escenarios interesantes, que, por cierto, ha aparecido en la película Cuñados, es el Restaurante Portovello. Su comida no solo es deliciosa: además, el establecimiento tiene mucha personalidad, pues era una antigua fábrica de cuero que funcionaba con molinos de agua.
Allariz también cuenta con varios museos, entre los que se cuentan el de la Moda y el del Juguete, además de ser un destino perfecto para adquirir productos de proximidad de calidad como leche, quesos de oveja, miel, jabones, leche de burra, cerveza artesana, castañas, carne de buey… Todos se pueden encontrar cada sábado en el Mercado de productos de la Reserva de la Biosfera, uno más de los atractivos de esta sorprendente villa gallega.
*Este artículo fue publicado el 18 de julio de 2021 y actualizado el 28 de mayo de 2022.