Tras la aparición del cadáver mutilado de un joven, el alienista Laszlo Kreizler encuentra similitudes con un crimen sin resolver relacionado con un expaciente suyo.

El hermano de Giorgio le cuenta a Sara un interesante dato mencionado por la policía, Kreizler reúne al equipo para una misión y John investiga en el burdel.

Sally y Kreizler tratan de encontrar la relación entre el asesino y sus víctimas. Tras el hallazgo de un nuevo cadáver, Sara detecta que existe un patrón geográfico.

Kreizler visita a una expaciente para entender el sadismo. John propone una teoría sobre la sonrisa de plata. La señora Santorelli recibe una perturbadora carta.

Gracias a un detalle en la carta, Kreizler averigua la fecha del próximo asesinato. Cuando Roosevelt se entera de quién es el sospechoso, decide ocuparse personalmente.

El equipo utiliza a Stevie como cebo para el asesino, Sara se enfrenta a Kreizler a cuenta de una incomprensible mentira y Connor descubre que Williem se ha escapado.

Las mutilaciones del cadáver más reciente sugieren algún vínculo entre asesino y el oeste. Kreizler se ve obligado a reflexionar sobre cómo trata a sus subalternos.

En el hospital de St. Elizabeth, Kreizler y John identifican a un soldado que encaja en su perfil. A raíz de esta información, Sara visita su hogar natal en Nueva York.

Mientras Cyrus planea su venganza contra Connor, Sara conduce al equipo hasta la Oficina del Censo, donde hallarán una pista sobre el paradero del sospechoso.

John le abre su corazón a Sara, agobiado tras la desaparición de Joseph. Por su parte, Sara y Kreizler comparten traumas del pasado y Kreizler se enfrenta al asesino.