Arsène Wenger no descarta volver a entrenar

Wenger dirigiendo un partido del Arsenal

Wenger dirigiendo un partido del Arsenal / EFE

Carlos López

Arsène Wenger se marchó del Arsenal hace dos temporadas después de entrenar al conjunto 'gunner' durante más de dos décadas. Actualmente es director de desarrollo del fútbol mundial de la FIFA, y a sus 70 años, no descarta volver a entrenar algún día.

El técnico alsaciano ha hablado en una entrevista a la Agencia de Prensa Francesa (AFP), con motivo de la presentación de su autobiografía, donde ha afirmado que no puede olvidarse tan fácilmente de su oficio de entrenador: ''No se deshace de esta droga de la noche a la mañana. Echo mucho de menos los banquillos''. Arsène Wenger estuvo entrenando al Arsenal durante 22 años, donde fue capaz de conseguir tres Premier League, siete FA Cup y siete Community Shields. 17 títulos en 22 años, sin duda, su nombre está escrito con letras de oro en la historia del Arsenal. 

Ha sido preguntado por si lo echa tanto de menos como para querer encontrar un club para cuando cumpla los 71 años: ''No lo sé. Me niego a decir nunca más porque me dolería mucho. Creo que la sabiduría es decir que he sobrevivido a tanto estrés durante tanto tiempo que tal vez sea mejor no hacerlo. Provocar al diablo. Pero la pasión te dice: 'Mientras vivas, vive tu pasión al máximo'. Arsène también ha hablado de lo que sufría con cada derrota de los suyos: ''Nunca pensé que haría esta profesión durante 36 años. Al principio, a menudo me decía: 'No estás hecho para este trabajo'. Sufro demasiado, no soporto las derrotas, estoy físicamente enfermo después de las derrotas''. 

Cuando dejó el banquillo del Arsenal fue tanteado por muchos clubes de Europa, de hecho, según 'Le10sport' el Barça le sondeó este mismo verano tras no estar claro el futuro de Quique Setién en el Barça. Además, mientras estaba a los mandos del club gunner llegó a rechazar dos veces al Real Madrid, una de las decisiones más difíciles de su vida. En mayo de 2019 el Olympique de Lyon lo quería para reemplazar a Bruno Genesio, pero prefirió rechazar la oferta: ''Hoy, me pregunto si no me equivoqué al no dirigir al Lyon. No estaba listo. Me parecía demasiado pronto para volver a bucear. No había llorado del todo''.