Obama declara en emergencia Texas ante la llegada del huracán Alex

La tormenta tropical Alex se hizo mayor y, ya  convertido en huracán, ha obligado a la Administración estadounidense a declarar el estado de emergencia en el Estado de Texas en espera de que se alcancen vientos de hasta 120 km por hora.

Lo adelantó el martes el Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami: "El centro de la tormenta girará en las próximas horas hacia el noroeste y este mismo martes podría alcanzar la categoría de ciclón". Esta tormenta tropical, la primera de la temporada, dejó el fin de semana pasado 10 muertos en América Latina.

Efectivamente, el fenómeno se alejaba el martes lentamente de la península de Yucatán para dirigirse hacia el sur del Golfo de México, con vientos sostenidos de 100 kilómetros por hora. Pero, con el paso de las horas, los vientos que trae Alex ganaron vigor y, pese a estar en la categoría más leve de ciclón, perjudicará las labores de recogida de crudo en la plataforma de BP.

Alex podría obstaculizar la puesta en marcha de un tercer barco de recuperación de crudo así como las operaciones de construcción de un nuevo pozo de socorro que debía detener por completo el vertido de petróleo en el mar.

El almirante de los Guarda Costas estadounidenses, Thad Allen, a cargo de las operaciones de limpieza, aseguró que cualquier tormenta en la zona tendrá como efecto un mayor desparramamiento del crudo.

Las autoridades de Mississippi anunciaron el domingo que una gran cantidad de crudo se había vertido en las playas del estado, donde el petróleo sólo había aparecido hasta ahora en forma de pelotas.