ALHAMBRA – Para varios agentes del Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles y su personal administrativo, comenzó la cuarta “Batalla de las Placas”.
Sin embargo, para algunos de los 45 participantes de los cuatro equipos (11 hombres y 34 mujeres) que buscaran perder peso ha iniciado la batalla por su propia vida.
Continuando su misión de ayudar a aproximadamente el 80% de las fuerzas del orden que tienen sobrepeso (33% de los cuales son obesos), médicos expertos y enfermeras de Lindora Clinic comenzaron el programa que durará 10 semanas.
Este año, alguaciles uniformados competirán con sus compañeros de trabajo de las áreas administrativas con el objetivo de que cada uno pierda al menos el 10% de su masa corporal, mediante ejercicio moderado, cambios de hábitos alimenticios y herramientas motivacionales.
“Yo no deseo ponerme metas demasiado altas”, dijo Concetta Weaver, telefonista en las oficinas centrales del LASD. “Lo importante es que tengo todo el apoyo de mi familia”.
Weaver pesa 221 libras y su función administrativa le mantiene sentada durante su turno laboral por ocho horas consecutivas frente a la computadora y los teléfonos.
La mujer está lista para decirle adiós a la barbacoa y a todas las cosas dulces, especialmente los chocolates.
“Quiero estar más sana y más feliz”, dijo.
La “Batalla de las Placas” es parte del Programa de Bienestar del Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles.
Además de la transformación física y mental para perder algunas libras de más, ex competidores ahora son la motivación de sus propios compañeros porque han reducido los niveles de colesterol, y, en algunos casos, han revertido la línea que estaban a punto de cruzar hacia la diabetes.
“Nuestra esperanza en establecer la Batalla de las Placas fue crear ‘Héroes Saludables’ entre nuestros participantes”, declaró Cynthia Stamper, presidenta ejecutiva de Lindora Clinic, quien acaba publicar el libro “The New Lean for Life” (La Nueva Carne sin Grasa para la Vida). “Como parte de la ‘Batalla para la Vida’, los participantes abrazan un nuevo estilo de vida y un aspecto más delgado, están demostrando ser modelos a imitar e inspiran a todos los que se encuentran a su alrededor para tomar acción”.
Pearl Cruz, oficial de 40 años de edad es quien ha inspirado a muchos de sus compañeros de profesión a verse y lucir mejor.
Hace once meses, Cruz se enroló en el programa de Lindora Clinic. Pesaba 204 libras y al terminar su reto perdió 52 libras.
“Antes era una mujer floja y lenta”, dijo Pearl a UNIDOS. “Hasta tenía problemas para levantarme a tiempo para ir al trabajo”.
El problema principal de Pearl era consumir diariamente grandes porciones de comida a cualquier hora, principalmente carne asada, burritos, frijoles y arroz.
“Mi vida ha cambiado radicalmente”, dijo. “Ahora reviso cada producto que compro en el mercado, y me dijo que no contenga demasiados carbohidratos, es decir, mi comida ya es saludable”.
Por su parte Eli Celnik, un guardia de seguridad del Departamento del Alguacil experimentó en su cuerpo el adiós a 105 libras de peso, de las 292 que cargaba por varios años.
“Mi vida estaba en riesgo a causa de la obesidad; tenía altos los niveles de colesterol y sufría de alta presión”, reveló Celnik. “Muchos me preguntaban cuál fue mi secreto y solamente les respondí que tuve la fuerza de voluntad suficiente para completar el programa de Lindora Clinic”.
El ex cirujano de Estados Unidos, Richard Carmona, caracterizó la obesidad como “el terror dentro de nuestro país”, cuando se dirigió a personal de las fuerzas del orden.
De hecho, oficiales de policía y del alguacil están 25 veces más propenso a morir de enfermedades cardiovasculares relacionadas a su sobrepeso y obesidad que a acciones criminales.
Según datos proporcionados por Lindora Clinic, agentes del orden viven un promedio de 15 años menos que el promedio de los estadounidenses y la obesidad es uno de los factores que mayormente contribuyen a ello.
Su cociente de vida es de apenas 66 años y aproximadamente la mitad de ellos sucumbirán a causa de enfermedades del corazón cinco años después que se retiran del trabajo.
“Yo quiero verme mejor, sentirme mejor y vivir más tiempo”, fue el comentario de Vivian Verduzco, de 48 años de edad y guardia de seguridad en Los Ángeles Trade Tech College, quien reveló que incluso en una caminata sentía que le faltaba la respiración. “No podía cumplir profesionalmente con mis actividades diarias”.
Los 45 competidores de la “Batalla de las Placas” representan a 28 ciudades del Sur de California, desde Valencia, Calabasas, Pasadena y Downey, a Riverside, Anaheim Hills, Palos Verdes Península y Diamond Bar.
“Voy a comenzar un nuevo estilo de vida”, mencionó Michael Tadrous. “Mi hijo también tiene sobrepeso; juntos vamos a vencer en esta batalla”.
