REVISTA MEXICANA DE CIENCIAS AGRÍCOLAS
ISSN: 2007-9230
editora en jefa
Dora Ma. Sangerman-Jarquín
editor asociado
Agustín Navarro Bravo
José Alfredo Castellanos Suárez
editores correctores
Dora Ma. Sangerman-Jarquín
Agustín Navarro Bravo
José Alfredo Castellanos Suárez
Moisés Martínez Gutiérrez
Ma. De Lourdes Aguilera Peña
Universidad Autónoma Chapingo
José Alfredo Castellanos Suárez. Coordinador del Centro de Investigación Interdisciplinario
y de Servicio en Ciencia, Naturaleza, Sociedad y Cultura (CIISCINASYC)
Ma. de Lourdes Aguilera Peña. Departamento de Preparatoria Agrícola
Roberto Flores Pérez. Departamento de Preparatoria Agrícola
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Universidad Autónoma de Guerrero
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Universidad Nacional Autónoma de México
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Moisés Martínez Gutiérrez (CIALC)
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Universidad Autónoma de Baja California Sur
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TES-I
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Josué Vicente Cervantes Bazán
Universidad Autónoma del Estado de México
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IHC
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Miguel Ángel Esquivel Pérez
Universidad Nacional de Luján, Argentina
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Universidad Autónoma Metropolitana-Azcapotzalco
Carlos Durand Alcántara
Universidad Autónoma de Coahuila
Hernán Venegas Delgado
Universidad Santiago de Cali, Colombia
Germán López Noreña
Universidade Federal da Integração Latino-Americana, Brasil
Hernán Venegas Marcelo
Instituto Tecnológico de Zacapoaxtla, Puebla
Guillermo Mejía Méndez
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Árbitros
Dora Ma. Sangerman-Jarquín. INIFAP
José Alfredo Castellanos Suárez. Universidad Autónoma Chapingo
Antonio Alexander Cordero Trejo. Tecnológico de Estudios Superiores-Ixtapaluca
Gaudencio Sedano Castro. Universidad Autónoma Chapingo
Jesús Castillo Aguirre. Universidad Autónoma de Guerrero
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Roberto Flores Pérez. Universidad Autónoma Chapingo
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Carlos Durand Alcántara. Universidad Autónoma Metropolitana-Azcapotzalco
Hernán Venegas Delgado. Universidad Autónoma de Coahuila
Germán López Noreña. Universidad Santiago de Cali, Colombia
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Guillermo Mejía Méndez. Instituto Tecnológico Superior de Zacapoaxtla, Puebla
Carlos Ferra Martínez. Departamento de Sociología Rural. Universidad Autónoma Chapingo
Félix Hoyo Arana. Departamento de Sociología Rural. Universidad Autónoma Chapingo
CONTENIDO
Página
Física y filosofía en Heisenberg: lógica y lógica no bien definida en la formación teórica.
José Alfredo Castellanos Suárez y Jorge Coutiño Velásquez.
5-13
Crisis y educación en el capitalismo global neo-industrial.
Mario Magallón Anaya.
15-22
Raíces históricas de una cultura solidaria.
René González Barrios.
23-28
Negacionismo e historiografía: indios esclavos del norte novohispano en Cuba y sus rebeliones en
Cuba (fines del siglo XVIII-principios del siglo XIX).
Hernán Maximiliano Venegas Delgado, Bárbara Oneida Venegas Arbolaez e Israel García Moreno.
29-37
Reflexiones sobre la tecnología.
Moisés Martínez Gutiérrez
39-43
Educación y capitalismo del saber.
Renata Báez Romero y Arturo Vilchis Cedillo.
45-51
La epistemología en la ciencia y la tecnología.
Luis Manuel Román Cárdenas.
53-59
Historia efectual en la constitución de la percepción social.
Lorenzo Espinosa Gómez.
61-67
El papel de la inteligencia artificial. Algunas reflexiones desde la cultura.
Gil Santomé Kau.
68-74
El trabajo de las mujeres y niños(as) en México: Pachuca, Real del Monte y algunas regiones de
Puebla, durante el siglo XVIII y XIX.
Danae Duana Avila y Elías Gaona Rivera.
75-82
La larga resistencia yaqui contra el despojo: desde la colonia hasta la era del capitalismo global.
Carlos R. Ferra Martínez.
83-89
La pedagogía crítica y la alteridad en tiempos del paradigma de la economía global en la perspectiva
de la construcción de ciudadanía.
Germán López Noreña.
91-97
Reflexiones para la creación una materia curricular sobre interculturalidad y desarrollo sustentable.
Fabiola García Hernádez.
99-106
Evaluación de la inteligencia emocional a partir del tmms-24 en estudiantes de bachillerato.
Ma. De Lourdes Aguilera Peña y Lorenzo Espinosa Gómez.
107-111
Analogías para una comprensión primaria de la di-señación de una ética Möbiusiana en los procesos
e-comunicacionales.
Rodrigo Lisarazú Borda.
113-120
CONTENIDO
Página
Competencias lectora y de pensamiento reflexivo en estudiantes de agronomía.
Rosa María Rodríguez Cortés.
121-125
La educación ambiental como herramienta significativa para la formación del hombre en el siglo XXI.
José David Peñuela Lizcano.
127-133
Territorio y reforma energética su impacto en los pueblos campesinos e indígenas de México.
Carlos Humberto Durand Alcántara y Marcela Suárez Escobar.
135-143
Etica planetária e uso sustentável da natureza pelos povos indígenas.
Thais Luzia Colaço y Fernando da Silva Mattos.
145-151
Análisis de las variables económicas de la producción de naranja en México.
Ignacio Caamal Cauich, Felipe Jerónimo Ascencio, Verna Gricel Pat Fernández.
153-162
Pueblos Mágicos: intervención estética e ideología en Mazunte, Oaxaca.
Natalia Helena Jarquín Sánchez y José Alfredo Castellanos Suárez.
163-169
La reparación concesiva y la negociación de la afiliación en el discurso de los hombres y de las mujeres.
Juan José Torres Romo.
171-177
Consideración terminológica para discernir respecto a la economía social.
Graciela Soria Sánchez.
179-186
Pedagogía de la comunicación radiofónica.
Francisco González López.
187-193
Cambios de la legislación agraria para la modernización del campo.
Joel Cervantes-Herrera, José María Salas-González, Artemio Cruz-León, Guillermo Torres-Carral y José A.
Castellanos Suarez.
195-203
Migración y autodeterminación: re existencia como permanencia social.
Zuleima Rojas González.
205-210
Gobernanza, actores sociales y desarrollo en las áreas rurales: una propuesta metodológica para
analizar experiencias en México y España.
Efraín García Palacios.
211-216
La convivencia de la memoria y el olvido en el presente.
Arcos Miranda Evaristo y Serrano Arenas Denys.
217-224
La ciudad, la urbanización y la pobreza urbana.
José Pedro Vizuet López, José Alfredo Castellanos Suárez e Ivan Marcelino Ugalde Morales.
225-232
Movimientos sociales como resultado de la búsqueda de la identidad contra la desterritorialización.
Edelia Denisse Castañeda de la Cruz.
233-239
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 5-13
Física y filosofía en Heisenberg: lógica y lógica no
bien definida en la formación teórica
José Alfredo Castellanos Suárez1 y Jorge Coutiño Velásquez2
1
Centro de Investigación en Ciencia, Naturaleza, Sociedad y Cultura (CIISCINASYC). Departamento de Sociología Rural-Universidad Autónoma Chapingo, México.
Maestría en Sociología Rural-Universidad Autónoma Chapingo.
2
Pero si el principio de incertidumbre de Heisenberg es una de las fórmulas más malinterpretadas de la historia, es por
sus supuestas implicaciones ilosóicas. Se la ha utilizado como prueba tanto del libre albedrío como del
azar del destino (o incluso como recurso para justiicar la telepatía o la parapsicología).
Francisco Doménech
Introducción
Werner Heisenberg planteó una serie de consideraciones
ilosóicas en su obra Física y Filosofía (1958) que precisan
ser examinadas en este artículo, a in de dejar bien sentadas
ciertas premisas ilosóicas y cientíicas (en su alcance), en
particular a lo que signiica realizar vínculo con las ciencias
sociales y el conocimiento cientíico.
Lo primero que se destaca es el papel secundario que asume
la ciencia convencional, por ser limitada a un experencial
(similar al a priori formulado por Kant). Para poder
establecer supuestos sólidos se recurre a la matemática
probabilística, que se considera el mecanismo cientíico
para llegar a un aproximado cientíico. El impacto ilosóico
radica en el planteo de revisión del tercero excluido, que
denomina lógica no suiciente.
Ante el principio de incertidumbre, entonces lo que hay que
revisar son las bases de la lógica entre el tercero excluido y
el tercero incluido. De manera que lo que está en juego es la
dialéctica y su método.
Planteos fundamentales de la física cuántica
Aún más confuso para nuestras pobres mentes:
la relatividad requiere que la situación sea simétrica.
Robert Oerter.
De lo primero que se ocupa Werner Heisenberg para
establecer la base ilosóica es historizar el proceso de
elaboración de categorías de la mecánica cuántica, pues
considera que es a partir de Max Plank que se empiezan a
sentar las bases de la física cuántica, cuando en 1900 sostiene
que la energía sólo podía ser emitida o absorbida del cuanto
discreto de energía (airmación que no concilia con las leyes
de la radiación caloríica y termodinámica de aquel entonces,
se proponía adjudicar a la luz), que resultó tan novedosa
que no era comprensible por la física tradicional o clásica.
Innovó a lo que a la postre se le conocería como constante de
Plank: que es la energía transportada por una onda luminosa
en un múltiplo de la energía (hv) (Hacyan, 2008, 44).
Albert Einstein retomó las formulaciones del cuanto para
comprender las vibraciones elásticas del átomo del cuerpo
sólido, a in de revelar la existencia del cuanto de acción de
Plank en fenómenos que no se relacionaban directamente
con la radiación del calor. De modo que se trataba de una
descripción diferente de la imagen ondulatoria de la luz, pues
también podía interpretarse que la luz consistía en ondas
electromagnéticas (según Maxwell) o bien en cuantos de
luz o como paquetes de energía que atraviesan el espacio
a la velocidad de la luz (Oerter, 2011, 46-49). Maxwell, en
1865, tuvo en cuenta el campo magnético (planteado por
Faraday), concepto que fue establecido en cuatro ecuaciones
6 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
en formulación matemática precisa, que dieron sustento
a las leyes de las fuerzas eléctricas y magnéticas (Oerter,
2011, 35). Einstein retomaba el viejo camino abierto por
Newton al considerar que la luz es una partícula (Oerter,
2011, 38, 66), abriendo el camino a la dualidad, con lo cual
se tornaba abismal la separación radical entre la mecánica
de Newton y la nueva mecánica en formación (Hacyan,
2008, 44-45). Sin precisar si podían ser ambas cosas
(asunto que le competería a Heisenberg con el principio
de incertidumbre).
En 1923 el francés Louis de Broglie extendió el dualismo
entre ondas y partículas al electrón, demostrando que “un
electrón en movimiento le correspondía cierta onda de
materia, del mismo modo que una onda de luz corresponde a
un cuanto de luz en movimiento”, estableciendo un dualismo
(Heisenberg, 1958, 23), ya que la partícula posee longitud
de onda conexa dependiente de su masa y su velocidad, si
la partícula se mueve más rápido es menor su longitud de
onda, que al igual que los fotones, la longitud de onda menor
expresa mayor energía (Oerter, 2011, 69).
Esto condujo a la formulación matemática que dio por
resultado en 1925 el formalismo matemático denominado
mecánica de matrices -ecuaciones similares entre matriceso mecánica cuántica (que remplaza las ecuaciones de la
mecánica newtoniana). Las matrices de representación
de posición y las de cantidad de movimiento no pueden
intercambiarse, lo cual implica -según el británico Paul
Dirac- la diferencia con la mecánica clásica.
En 1926 el austriaco -luego naturalizado irlandés- Erwin
Schrödinger dedujo los valores energía estacionarios del
átomo de hidrógeno a través de su propuesta que denomina
función de onda (Hacyan, 2004, 124), como valores propios
de su ecuación ondulatoria, transformando el sistema
de ecuaciones clásicas de movimiento en ecuación
ondulatoria, equivalente al de la mecánica cuántica
(Heisenberg, 1958, 24-25), cada nivel de energía está
espaciado de manera irregular de manera que los electrones
que se ubican en el primer nivel liberan más energía y emiten
más fotones ultravioletas con longitud de onda menor; en
cambio, los electrones de un nivel superior al tercero liberan
menos energía y emiten fotones con longitud de onda
infrarroja mayor. Eso es lo que conforma los espectros de
luz y sus niveles (Oerter, 2011, 76). Permitiendo explicar
la “coniguración electrónica de los átomos y la forma en
la que éstos se pueden combinar entre sí para formar las
moléculas… [posibilitando] calcular y predecir efectos
José Alfredo Castellanos Suárez y Jorge Coutiño Velásquez
del mundo atómico con una enorme precisión, aunque su
derivación parece deberse a un acto de intuición…” (Hacyan,
2004, 125).
Más allá de esto, comenta Heisenberg (1958, 26-27), Niels
Bohr introdujo la onda de probabilidad, como una tendencia
hacia algo, que situaba “a mitad de camino entre la idea de
un acontecimiento y el acontecimiento real, una rara clase
de realidad física a igual distancia de la posibilidad y la
realidad.” Ya que el electrón “puede ocupar algunas órbitas
estacionarias en las cuales no irradia energía, y los procesos
de emisión y de absorción son concebidos como transiciones
del electrón de una órbita estacionaria a otra.” (Biografías
y vidas. La enciclopedia biográica en línea. http://www.
biograiasyvidas.com/biograia/b/bohr.htm).
La onda de probabilidad no es una “onda tridimensional como
las electromagnéticas…, sino una onda en un espacio de
coniguración mutidimensional, una cantidad matemática
más bien abstracta, pues.” (Heisenberg, 1958, 26-27).
Más aún, no podía ijarse con exactitud la posición y la
velocidad de un electrón de manera simultánea, lo que
condujo al principio de incertidumbre o de indeterminación,
a contrapelo de la mecánica newtoniana, ocasionando que
los antiguos conceptos no se ajustaran a la naturaleza.
Schrödinger describió el átomo formado por el núcleo
y las ondas de materia (ondulatoria y corpuscular,
ondas y partículas), lo que daba paso al concepto de
complementariedad (de la misma realidad), a manera de
sobrepasar las contradicciones.
La teorética física: lógica clásica y lógica no bien deinida
...la función de probabilidad contiene el elemento objetivo
correspondiente a la ‘tendencia’, y el subjetivo del
conocimiento incompleto, aun en el caso de que haya
sido hasta entonces un “caso puro”. Por esta razón, el
resultado dela observación no puede, generalmente,
ser pronosticado con certeza; lo que se puede predecir
es la probabilidad de obtener cierto resultado de la
observación, y esta airmación acerca de la
probabilidad puede ser veriicada repitiendo
la experiencia muchas veces. A diferencia
de lo que ocurre en la mecánica newtoniana,
la función de probabilidad no describe
un acontecimiento determinado, sino
un conjunto de posibles sucesos.
Werner Heisenberg
Física y filosofía en Heisenberg: lógica y lógica no bien definida en la formación teórica
7
Cuadro 1. Principales planteamientos de la física cuántica.
Físico
Max Plank
(alemán)
Año
1900
Albert
Einstein
(alemán)
1915
Louis de
Broglie
(francés)
1923
Paul Dirac
(británico)
1925
Erwin
Schrödinger
(austriacoirlandés)
1926
Planteamiento
La energía sólo puede ser emitida o absorbida del cuanto
discreto de energía
Constante de Plank
Para comprender las vibraciones elásticas del átomo en cuerpo
sólido. Se puede interpretar que la luz consiste en ondas
electromagnéticas (como decía Maxwell) o bien en cuantos de
luz o como paquetes de energía que atraviesan el espacio a la
velocidad de la luz.
Un electrón en movimiento le corresponde cierta onda de
materia.
Del mismo, una onda de luz corresponde a un cuanto de luz en
movimiento.
Las matrices de representación de posición y las cantidades de
movimiento no pueden intercambiarse (hace la diferencia de la
mecánica cuántica).
Remplaza la mecánica clásica.
Transforma el sistema de ecuaciones clásicas de movimiento en
ecuación ondulatoria, acorde a la mecánica cuántica.
Complementariedad de la misma realidad (ondas y partículas,
ondulatorio y corpuscular).
Gato de Schrödinger.
Consideración
No concilia con leyes de
radiación vigentes
No precisa si pueden ser
ambas cosas
Establece el dualismo entre
ondas y partículas en el
electrón.
Mecánica de matrices,
ecuaciones similares
entre matrices: mecánica
cuántica.
Deduce los valores
estacionarios del átomo de
hidrógeno como valores
propios de la ecuación
ondulatoria.
Fuente: elaboración propia. Datos tomados de: Heisenberg, 1958.
Hasta aquí la complementariedad y la incertidumbre han
servido para abordar la onda de probabilidad que conduce
hacia la idea de diferenciar lo que es un acontecimiento y
el acontecimiento real: la posibilidad y la realidad. Dando
ocasión al papel decisivo al proceso de la observación. De
manera que el acontecer como posibilidad está en manos
del observador y este observante utilizando la ciencia debe
de convertirlo en realidad o acontecimiento real. ¿Cómo
lo logra? Con la matemática. Este acontecer del mundo
atómico será llevado de manera mecánica al mundo social,
cuando su pertenencia es el mundo subatómico. ¿Cuál sería
su equivalencia en el ámbito social y antropológico? El
lenguaje (en el nivel mental, que dará paso posteriormente
a el entendimiento del nivel de realidad).
Heisenberg advierte que la observación es decisiva en el
suceso y que la realidad varía, según la observemos o no. Al
intervenir el observador lo hace de manera subjetiva (que
se da en llamar como sentido común) y de manera racional,
con instrumentos que se inmiscuyen en el establecimiento
de la realidad, por eso esta realidad es variante (en lo que
toca a la física clásica).
En física atómica el objeto es pequeñísimo, advirtiendo
Heisenberg que “una gran parte del universo, incluido
nosotros mismos, no pertenece al objeto” (1958, 38). Los
fenómenos naturales conocidos entran en la explicación
de la física clásica, pero no son objeto de la física cuántica
que se constituyen en objeto, éste es el mundo atómico. De
modo que la ciencia convencional queda fuera de la propia
consideración científica (en gran parte por ser realidad
explicada por el observante). No obstante, se hacen esfuerzos
por llevar al ámbito de explicación social (por citar un
par de ellos, Basarab lo hace a través del sujeto hacia la
metodología interdisciplinaria; Basarab https://es.scribd.
com/document/135739255/tjesno-1-12-2010; mientras que
Luhmann lo hace en el sistema social, Urteaga, 2010, 304,
http://www.uma.es/contrastes/pdfs/015/contrastesxv-16.pdf).
Por ello la función de probabilidad sigue leyes cuánticas, las
transformaciones en el curso del tiempo -que es continuose calculan a partir de condiciones iniciales. De esta forma,
desde el principio el objeto -gracias a la probabilidad- queda
fuera del observante. Entonces la probabilidad articula
elementos objetivos y subjetivos (concedidos por el lenguaje
8 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
cientíico convencional), dado que contiene tendencias o
airma posibilidades que son objetivas, sin depender de
observador alguno, aunque “contienen airmaciones acerca
de nuestro conocimiento del sistema, las que, naturalmente,
son subjetivas en la medida que diieren según el observador.
En casos ideales, el elemento subjetivo de la función de
probabilidad puede llegar a ser prácticamente insigniicante
en comparación con el elemento objetivo. El físico habla,
entonces de un ‘caso puro’.” (1958, p. 38-39). Entonces
Heisenberg precisa que las incertidumbres se consideran
subjetivas al referirse al conocimiento incompleto del
mundo. El elemento objetivo pertenece a lo tendencial.
Lo subjetivo al conocimiento incompleto (incluso si se
le considera como caso puro), digamos a una ciencia
incompleta, que es la ciencia convencional
Por esta razón, el resultado de la observación no puede,
generalmente, ser pronosticado con certeza; lo que se puede
predecir es la probabilidad de obtener cierto resultado de
la observación, y esta airmación acerca de la probabilidad
puede ser veriicada repitiendo la experiencia muchas veces.
A diferencia de lo que ocurre en mecánica newtoniana, la
función de probabilidad no describe un acontecimiento
determinado, sino un conjunto de posibles sucesos
(Heisenberg, 1958, p. 39).
Transitar de lo posible a lo que está en acto es producto de la
observación, dice Heisenberg. De esta manera la observación
se halla en el límite de la construcción de conceptos, que,
si bien incompletos, sirven para establecer el paso de lo
posible hacia las matrices probabilísticas que en lenguaje
matemático muestra las posibles vías hacia la explicación
del acto, para ello la reiterada demostración validará su
consideración y consistencia cientíica.
En torno a lo atómico lo que sucede sólo aplica a la
“observación, no al estado de cosas entre dos observaciones”
(Heisenberg, 1958, 40). El proceso del suceso -como
espacio- se imbrica con la observación, pero ésta no puede
estar a la vez -a través del tiempo- en el estado de las cosas,
deben de estar unidos de manera vinculatoria tempoespacial. Al respecto nos dice Wald:
El intervalo espacial (esto es, la distancia) entre dos
eventos simultáneos tiene un signiicado bien deinido e
independiente del observador. Sin embargo, esto no es
verdadero para dos eventos no simultáneos. Un observador
que esté presente en ambos eventos no simultáneos asignaría
naturalmente a éstos un intervalo espacial nulo ya que, con
José Alfredo Castellanos Suárez y Jorge Coutiño Velásquez
relación a su marco de referencia, aquellos ocurren en el
mismo lugar; de manera semejante, otros observadores
asignarían naturalmente, a esos mismos eventos, un intervalo
espacial diferente a cero. Sólo en el caso de que los eventos
sean simultáneos, todos los observadores estarán de acuerdo
(Wald, 1998, 24-25).
Tiene que ver con el “acto físico (no al psíquico) de la
observación”, entonces no se relaciona con el acto de registro
en la mente del observador (Heisenberg, 1958, 40). De manera
que se desagregan los aspectos subjetivos y más aún los
psíquicos, pues el acto mental tan sólo se limita a servir de enlace
entre la potencia y el acto, la posibilidad y la realidad, pero no
se desenvuelve en ésta. La aplicabilidad de la descripción es al
acto físico, la transición se da u ocurre en la interacción entre el
objeto y el instrumento de medida (agrega el autor: y el resto
del mundo), al decir aristotélico se da en el paso de la potencia
al acto (en este caso mediada por el instrumento de medida),
por ello es que -cabe repetir- no interviene el acto psíquico
y el mental. Lo expuesto no responde al proceso de registro
objetivo de la ciencia clásica, pues en ésta sigue interviniendo
el sujeto, la objetividad -o creencia, por paradoja- se mantiene
en el terreno del mundo, pero no en teoría atómica. ¿Es posible
que el sujeto sea posible de estudiarse cientíicamente? ¿Qué la
psique intervenga en el proceso del conocer? ¿Qué la mente y la
subjetividad sean parte del proceso? En el sentido autoanalítico,
la respuesta es: no. Conforme a los propios considerandos de
Heisenberg, éste es el punto ilosóico de quiebre, si bien esta
es la base ilosóica del autor.
De manera que la teoría cuántica no tiene rasgos subjetivos,
puesto que bajo ninguno sentido se presupone o se contempla
la introducción de la mente (ni menos de la psique) del físico
en el acontecer atómico. Es curioso (hasta paradójico), pues
se emplean los conceptos clásicos como efecto del modo
humano de pensar como consecuencia directa del método
cientíico, pero al hacerlo así, al intervenir lo humano,
se considera que la descripción deja de ser objetiva
(Heisenberg, 1958, p. 41).
Heisenberg previene que al intentar tratar la parte de materia
del fenómeno como objeto del tratamiento teórico hay quienes
desean separar los instrumentos de estudio, sin percatar que
se introduce el elemento subjetivo en la descripción, puesto
que el instrumento de observación fue construido por un
observador, de modo que lo observado no es la naturaleza
en sí, sino la naturaleza que se presenta a nuestro método de
investigación. En este punto de paradoja es cuando ocurre la
formación de raíz de la estadística. De manera que el “trabajo
Física y filosofía en Heisenberg: lógica y lógica no bien definida en la formación teórica
9
cientíico en física consiste en hacer preguntas acerca de la
naturaleza con el lenguaje que tenemos, y en tratar de obtener
respuestas de la experimentación, con los métodos que están
a nuestra disposición” (1958, 43) (de ahí el papel objetivo
-asegura Heisenberg- de la estadística).
sin comprometerse, a que el aspecto mental sea analizado
por los procedimientos de la cuántica, pero tan sólo a lo
que toca a la posibilidad de incertidumbre de una decisión
o elección, que puede manejarse estadísticamente. Sin que
eso signiique da pie al papel de la mente.
En el capítulo reservado a Lenguaje y Realidad Heisenberg
recurre a propuestas muy próximas al estructuralismo, a
la fenomenología (de Husserl) y a la acción comunicativa
(de Habermas), ya que considera al lenguaje como base
del pensamiento, además de ser medio de comunicación.
Recurre a los trabajos del físico Carl Friedrich von
Weizsäcker para fundamentar sus planteamientos ilosóicos
(Comas, 2007, http://elpais.com/diario/2007/05/03/
agenda/1178143207_850215.html), ya que de su discípulo
se nutrió de las corrientes ilosóicas que imbrica de manera
paralela con el avance de la física (que es la relexiva de los
capítulos intermedios de la obra analizada).
Justamente el punto de ruptura con la vieja noción de
naturaleza sucedió con el espacio y el tiempo de orden
newtoniano y kantiano (Hacyan, 2004, 46 y 92), el nuevo
tiempo-espacio es reconceptualizado primero por la
relatividad y luego por la cuántica. Esto lo que revela, en el
fondo, es que el lenguaje no resulta consistente con la nueva
situación para ser aplicado en ella. No sólo sucedía con
el sistema microscópico sino con el sistema general, pues
existe una interacción con el sistema (Heinsenberg, 1958,
167). De nueva cuenta el autor abre sin fundar.
De esta forma considera que la ciencia se basa en el lenguaje
como medio de comunicación importante, pues los moldes
lógicos cumplen la función de experiencia previa como
soporte a la matemática estadística. Aunque el lenguaje
cumple un papel central, es de notar que queda relacionado
con la ciencia clásica y con el carácter de experiencia (previa).
Heisenberg relexiona que en “la ciencia natural tratamos
de deducir lo particular de lo general, para interpretar el
fenómeno particular como consecuencia de las simples leyes
generales. Al ser formuladas en lenguaje, las leyes naturales
sólo pueden encerrar unos cuantos conceptos simples; de
otro modo la ley no sería simple y general” (1958, 160).
En el proceso mental se originan conceptos del lenguaje
ordinario que, según Heinsenberg -por lo que se ha visto-, son
imprecisos y con vaga deinición, sin alcanzar distinciones
de variedad de conceptos de fenómenos posibles. Entonces
se requieren de determinadas premisas para fortalecer las
conclusiones que colaboran en los conceptos de las leyes
generales, que para ser deinidos con absoluta precisión se
recurre a la abstracción matemática (1958, 161).
La complementariedad no pertenece tan sólo al mundo
atómico, según Heisenberg, ya que una decisión o una
elección por parte de las personas nos lleva a puntos
contrapuestos, al punto de que los conceptos clásicos
incurren en una situación vaga, que pueden ser articulados
con la realidad en su significación estadística (1958,
169), esto es emplazado en principio por la física clásica
y pueden ser de utilidad. De modo curioso, el autor da pie,
De modo que no se puede emplear un lenguaje con los
moldes lógicos normales. Y aunque “es un lenguaje que
produce imágenes en nuestra mente, pero juntamente con
ellas la noción de que las imágenes sólo tienen una vaga
relación con la realidad, que representan solamente una
tendencia hacia la realidad” (Heisenberg, 1958, 170). De
ahí el carácter subjetivo, lo experencial y no cientíico de la
física y de la ciencia clásica, por ser tendencial o probable.
Heisenberg (1958, 175) concluye el capítulo de lenguaje y
realidad, reiriendo que en lo que respecta a las partículas
atómicas hay que utilizar el esquema matemático como
suplemento del lenguaje que tan sólo describe los hechos, o
bien, combinar con un lenguaje que usa la lógica modiicada
o una lógica no bien deinida. En los aconteceres atómicos
hay que encarar con cosas y hechos, con fenómenos tan reales
como los de la experiencia cotidiana. Da la casualidad que los
átomos y las partículas elementales no son tan reales, es un
mundo de posibilidades o potencialidades, más que de cosas
o hechos. De ahí que no se puede trasladar mecánicamente
teoría y método a otros ámbitos del conocimiento.
Disyunción paradójica o consecuencia lógica: tercero
excluido (Tertium non datur) y tercero incluido
Los principios de la lógica de identidad excluyen, por
deinición, que dos estados contradictorios entre ellos puedan
coexistir al mismo tiempo y bajo la misma relación. Sin
embargo, desde sus comienzos, la ilosofía griega, al mismo
tiempo que teorizaba esta lógica, reconocía lo contradictorio
en sí bajo el nombre de potencia (Platón), y de materia
(Aristóteles).
Dominique Temple
10 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
José Alfredo Castellanos Suárez y Jorge Coutiño Velásquez
Después de todo lo establecido y fundado en el principio
de complementariedad y de incertidumbre, Heisenberg
concluye que la ley fundamental de la lógica, tertium non
datur (una tercera cosa no se da) o principio del tercero
excluido debe de ser modiicado, pues “sería contradictorio
describir en lenguaje natural un esquema lógico que no se
aplica al lenguaje natural” (1958, 171). Este es un paso muy
calculado -implícito, no explicado- por el autor, pero no
preciso, pues es tanto como intentar dar un golpe de gracia a
uno de los métodos más añejos de la historia: a la dialéctica. Sin
siquiera aludir a ella. Sin esta ley del tercero excluido la lógica
se ve no sólo mermada sino herida de muerte. No fundamenta
el por qué, tan sólo lo deduce al establecer la probabilidad y
la posibilidad. De manera que lo ilógico funda otra razón que
no puede ser la basada en la lógica clásica, por ello es que la
nueva nominada lógica no bien deinida recurre al sistema,
a la probabilística, a lo tendencial (de ahí a lo complejo), a
otro lenguaje, al neo lenguaje. Pero que decanta en el mismo
manejo lógico y aunque ocurra una paradoja, la contradicción
no sólo se mantiene, sino que se expresa en las posibilidades
abiertas. Nada más (ni nada menos) que ahora en el lenguaje,
que debe de ser estadístico: matemático, es decir simétrico
y similar con la realidad, sin intervención subjetiva humana.
Eso es lo que nomina sin decirlo: el tercero incluido.
manera acertada, que la exclusión ha servido para justiicar
la expulsión y la exclusividad: “…inaugura esta partición
entre un adentro -lógico, racional, dominable, calculable
y normativizable- y un afuera al que es expulsado aquello
que no logra adecuarse a las categorías de la racionalidad
occidental. Mientras que una de las coniguraciones del
adentro de la lógica tradicional se da bajo la forma del
derecho, el tercero excluido es -digamos- el loco, el homo
sacer- ver al respecto: http://homo-sacer.blogspot.mx/. La
igura es incluida en el derecho a base de su consideración
de exclusión- el animal, la vida desnuda y en un sentido más
general lo indecible y el resto. Tercero también es el ser si es
pensado como lo que ha sido excluido del ámbito de los entes,
y luego olvidado.” (Candiloro, 2011, 97). Esto muestra el
carácter cerrado y conservador del tercero excluido al estar
en manos del poder y de las oligarquías, si bien no hay que
olvidar que también tiene la otra faceta que es la creativa,
transformadora y revolucionaria (al no aludirla, se quiere
soterrar). Pero el tercero incluido no sólo es libertario en
su apertura, sino también es revolucionario en su aspecto
constructivo, que puede ser usado en forma contraria -y de
hecho así pasa- para la estabilización sistémica asimilando a
los inconformes, pero éstos o son asimilados poiéticamente
o aniquilados por el sistema.
En este punto resulta oportuno referir a lo que dice Moisés
José Sametband: “todo indica que para los sistemas caóticos
sigue siendo válido el determinismo, si bien se requiere
una descripción probabilística de su comportamiento”
(Sametband, 1999, 8). Sin llegar a extremos ortodoxos, se
sigue considerando la naturaleza y lo que ello entraña que es
la esencialidad que ahora es abordada de manera compleja
(como toda realidad y como todo método), para recuperar la
propia lógica que ofrece el primer principio de identidad, la
dialéctica que ofrece el camino a la creatividad (la creación,
a diferencia de lo increado, ahora en manos del hombre, del
sujeto), la transformación y las leyes que rigen el análisis
fenoménico. Veamos un poco de polémica al respecto. Pues
justo la probabilística de comporta es otra de las vías de
apertura en el propio camino de su acotamiento en sentido
metodológico de su propio abordaje, pero en otro nivel de
construcción dialéctica de la realidad.
La faceta que no se toma en cuenta es que el tercero excluido
es fruto, de lo que diría Hegel, la creación, del trabajo (en
un sentido diferente al otorgado por Marx: transformación
productiva consciente del potencial humano), que en su
límite ha forjado una realidad distinta -esencialmente
hablando- de la que le dio origen (es la negación de la
negación de la identidad original), dando paso a un proceso
de distinta complexión y dimensión, justamente en sus
límites da origen a la apertura del tercero incluido, de modo
que ambos están indisolublemente unidos, ni uno o el otro,
el uno en el otro.
Es así que el tercero incluido es parte de la lógica -así se
reconoce y no hay otra- y frente a ello Hernán Candiloro
le depara un estatuto diferente. Al respecto dice: “la
exclusión del tercero es el origen de la lógica puesto que…
es la instancia por la cual ésta produce su afuera a la vez
que traza su propio límite” (2011, 97). Este autor funda, de
Ante esto Guillermo Bustamante nos remite a Aristóteles:
“si empiezas considerando que hay A, no lo olvides en
el camino (…) si empiezas considerando que hay A, y
encuentras en el camino que no hay A, entonces tienes otro
comienzo” (Bustamante, 2008, 26), no la exclusión que es lo
que supuestamente se busca con el tercero incluido. Que es
la resulta del tercero excluido y que se imbrica con el tercero
incluido en dos niveles distintos y vinculados de tratamiento
de la misma y distinta realidad, por ser cualitativamente
distinta, pero provienen de la misma esencia y naturaleza.
Bustamante recupera el factor inclusivo del principio de
identidad:
Física y filosofía en Heisenberg: lógica y lógica no bien definida en la formación teórica
“…los físicos se sorprenden de que haya algo: se preguntan
por qué hay algo, en lugar de haber nada; no se explican
racionalmente el punto de partida, a saber: hay A. Desde ahí,
pueden explicar muchas cosas, pero se les escurre entre los
dedos la causa primera (por eso, en este punto, la ciencia parece
no poder salir del ámbito de la religión) (Bustamante, 2008, 26).
El segundo principio de no contradicción no escapa a la
contradicción, sino que asegura que lo que se ha sostenido
se puede probar y demostrar porque se ha dicho. No habría
argumentación si todo lo que se dice no se impone un límite,
un valor y un alcance (no habría demostración). Entonces
Bustamante asegura que “no es que se haya objetado el
principio de no-contradicción, sino que -como explica
Capra- la terminología disponible (‘onda’, ‘partícula’,
‘causalidad’) es insuiciente para describir los fenómenos
atómicos…” (2008, 27). El autor invoca de nueva cuenta
a Aristóteles: cuando alguien intenta dar cuenta de algo, lo
mínimo que Aristóteles le pide es que tenga en cuenta que
lo dicho ha sido airmado y que si va a cambiarlo lo diga
o que, en todo caso, se atenga a las consecuencias si sus
interlocutores se dan cuenta. Esto explica que el principio
de incertidumbre de Heisenberg se reiera a la imposibilidad
de describir, al mismo tiempo, velocidad y posición de las
partículas subatómicas. Es decir, no se trata exactamente
de una propiedad de la naturaleza, sino de una diicultad de
nuestra aproximación o, como intento demostrar aquí, de
nuestra argumentación (Bustamante, 2008, 27).
El tercer principio, del tercero excluido, considera que dos
proposiciones antitéticas no pueden ser, a la vez, verdaderas
al mismo tiempo y en la misma relación. Bustamante
comenta que en las proposiciones contradictorias existe
la posibilidad de ser verdaderas, dependiendo si es para
momentos diferentes o relaciones distintas. O sea que al
decir no sólo que es verdadera o falsa, sino que puede haber
matices entre ambas, se llega justo al tercer principio pues
adquieren sentido en su respectiva relación o tiempo pues
se ha puesto otra condición (Bustamante, 2008, 28), otro
comienzo, otro punto de partida de la argumentación. El
intento de poner cotos a la proposición (estructura lógica en el
lenguaje) para hacer pensable una relación, es para no incluir
un juicio ocasional o ininito, de lo contrario “se obtiene el
ininito, o sea la imposibilidad de pensar” (2008, 29).
Pero justo los cotos -paradójicamente- son los que abren la
siguiente relación, de lo contrario la dialéctica no mostraría
su lado abierto e ininito, es entonces que trabaja en otra
dimensión y en otro nivel de realidad, pues la síntesis no es
11
más que la expresión de la contradicción de la contradicción,
propiciando un sistema abierto y en complejidad, como dice
Sametband, según el nivel de que trate, pues “designa el
estudio de los sistemas dinámicos que están en algún punto
intermedio entre el orden en el que nada cambia…y el estado
de total desorden o caos…” (Sametband, 1999, 9). De modo
que las posturas de Bustamante y Candiloro lo que hacen es
limitar en la apertura y aperturar para reordenar acotando el
sistema (en lo local y en lo global). Ambas se desplazan en
distintos ámbitos de poder, en la lógica no transformadora,
no creativa, no revolucionaria. Es momento de buscar el lado
transformador, creativo y revolucionario, a través de nuevas
posibilidades lógicas.
Conclusiones
Desde el comienzo del siglo XX se tiene un nuevo sentido de
lo natural en la materia, al considerar la energía como producto
del cuanto “discreto”, que forma base del campo cuántico. La
onda luminosa se consideró como onda de probabilidad, las
vibraciones elásticas del átomo constituyen los paquetes de
energía, se acepta el dualismo de ondas y partículas, si bien no
es posible establecer la simultaneidad de posición y velocidad
de dichas partículas, se demuestra su movimiento ondulatorio
en las coniguraciones espectrales y en sus distintos niveles
bajo el principio de complementariedad, considerando las
ondas en un espacio de coniguración multidimensional bajo el
principio de incertidumbre. Todo ello es lo que ha historizado
Heisenberg en la primera parte de su obra analizada, para
establecer las nuevas bases teóricas.
Complementariedad e incertidumbre ofrecen la ocasión
para la probabilidad, bajo lo cual el autor distingue entre lo
que es un acontecimiento y lo que es un acontecimiento real,
la posibilidad y la realidad, en los que la observación y el
observante juegan un papel decisivo. Debido a que el acontecer
está como posibilidad en manos del observador, mientras que
el observante utiliza la ciencia y, sobre todo, la matemática con
las cuales debe de convertir en realidad o acontecimiento real.
Se vale para ello de del lenguaje, que es llevado de la mente a
lo intuitivo, a lo cotidiano, a la experiencia cotidiana (gracias
la ciencia convencional y a la lógica clásica).
En física cuántica las partículas subatómicas no pertenecen
al universo (lo cual incluye a los seres humanos), por eso no
puede participar la física clásica, cuya tarea es analizar los
fenómenos perceptibles al sujeto. De modo que transitar de lo
12 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
José Alfredo Castellanos Suárez y Jorge Coutiño Velásquez
posible a lo que está en acto es producido por la observación.
De tal modo que la tarea cientíica tiene que ver con el acto
físico (para nada con el psíquico) de la observación, sin
vincularse con el acto de registro en la mente del observador.
De este modo establece su base ilosóica Heisenberg, apoyado
en gran parte por su alumno Carl Friedrich Wiezäcker.
En la discusión del tercero excluido y el tercero incluido,
Hernán Candiloro ha establecido posturas en las que airma
que la exclusión del tercero no sólo traza límite, sino que
justiica la expulsión y la exclusividad, lo racional, lo
normativizable. Lo de afuera es el homo sacer, lo animal
(lo tolerado en lo excluido). Evidenciando el carácter
conservador que contiene la exclusión.
Considerar la onda y la partícula es dar pie a la incertidumbre,
que sólo puede ser emprendida por la estadística probabilística.
Ya no por el lenguaje cotidiano y cientíico convencional, ya
que éste se expresa en términos de cotidianidad que describe
las experiencias de la vida diaria (pasando de lo subjetivo a lo
racional), quedando en un estado experencial. Es entonces que
se precisa de una nueva lógica no bien deinida, pues el lenguaje
es base del pensamiento y como tal funciona como medio de
comunicación, pero está en el sujeto (en la subjetividad).
Pero cabe referir que la dialéctica no es sólo expulsión,
exclusión, estabilización, pues también propende al
sistema, a la apertura, a la inclusión, a la identidad de
nuevos principios, a la dinámica, a la revolución y a la
transformación (para quienes sientan demasiado pesada
la carga revolucionaria, digamos que Galileo lo fue, lo fue
Newton, Einstein, etc.).
Heisenberg hace hincapié -en tan sólo un pasaje de su obra- en la
relación entre el mundo físico y el mundo subatómico, al decir
que la complementariedad no sólo pertenece al mundo atómico
sino también al proceso de elección de las personas, aunque
es justo donde los conceptos cásicos incurren en una situación
vaga que, de inmediato precisa el autor, pueden ser articulados
con la realidad en su signiicación estadística, normalizando
toda su exposición ilosóica. Con mayor precisión dice que los
átomos y las partículas elementales no son tan reales, por ello es
que estamos en un mundo de posibilidades o potencialidades,
más que de cosas o hechos. Por eso es que no se puede aplicar
y trasladar de manera mecánica la teoría y los métodos hacia
otros ámbitos del conocimiento.
La incertidumbre abierta por el comportamiento ya como onda
o ya como partícula, es que Heisenberg propone que la ley del
fundamental de la lógica que es el tertium non datur o principio
del tercero excluido debe de modiicarse, en aras de posibilitar
el tercero incluido. En virtud de que no se puede explicar en
lenguaje natural lo que no se aplica con el propio lenguaje.
La lógica no bien definida recurre al sistema, a la
probabilística, a lo tendencial, gracias al lenguaje de
la matemática, dando ocasión y aperturando al mundo
subatómico. Esto evita la intervención subjetiva humana
que es el terreno objetivo del tercero incluido. Si bien en
los sistemas abiertos el determinismo sigue siendo válido
(que es el fundamento del principio de identidad del
tercero excluido, con lo cual ocurre una paradoja), dada la
descripción probabilística del comportamiento.
En cambio, Guillermo Bustamante también presenta el
reverso de contenido de los tres principios del tercero
excluido que ofrecen la posibilidad de la contradicción en
la que, si aparece disyuntiva de verdadera o falsa, lo que
indica es que se debe de pensar en un nuevo camino de la
argumentación. Abre lo que es cerrado, pero de nueva cuenta
lo organiza. Es abierto e ininito, pero bajo control, en otra
dimensión y en otro nivel de realidad.
Bustamante y Candiloro terminan por limitar la apertura y
aperturar para reordenar y acotar (entran en contradicción
y paradoja), de esa manera se acota el sistema en lo local y
en lo global. Se desplazan en distintos ámbitos, pero recaen
en el poder, cuando la esencia es crítica y transformadora
(revolucionaria, insistimos).
Literatura citada
Bustamante, Guillermo. 2008. Los tres principios de la lógica aristotélica:
¿son del mundo o del hablar? Revista: Folios. Segunda época,
Núm 27. Primer semestre. http://www.scielo.org.co/pdf/folios/
n27/n27a03.pdf.
Candiloro, Hernán J. 2011. La lógica del tercero incluido. Revista:
Instantes y Azares. Escrituras nietzscheanas, 9. ile:///C:/
Users/usuario/Downloads/Dialnet-LaLogicaDelTerceroIncl
uido-3906884.pdf
Comas, José. 2007. Carl Friedrich von Weizäcker. Diario El
País. 3 de mayo. http://elpais.com/diario/2007/05/03/
agenda/1178143207_850215.html.
Domenech, Francisco. Ventana al conocimiento. Heisenberg, el ilósofo
de la Cuántica. https://www.bbvaopenmind.com/heisenbergel-ilosofo-de-la-cuantica/
Física y filosofía en Heisenberg: lógica y lógica no bien definida en la formación teórica
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es/~sferna18/ejercicios/2013-14/fisica_y_filosofia-werner_
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13
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www.biograiasyvidas.com/biograia/b/bohr.htm.
Oerter, Robert. 2011. La teoría del casi todo. México. Fondo de Cultura
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Wald, Robert. 1998. Espacio, tiempo y gravitación. La teoría del “Bing
Bang” y los agujeros negros. México. Fondo de Cultura
Económica (FCE).
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 15-22
Crisis y educación en el capitalismo
global neo-industrial
Mario Magallón Anaya
CIALC/UNAM. mariom@unam.mx.
Resumen
En el presente, la educación superior (en general) y la
universidad pública (en particular) están inluenciadas por
los intereses transnacionales del capitalismo global y por
las instituciones inancieras: Banco Mundial (BM), Fondo
Monetario Internacional (FMI), Banco Inter-Americano de
Desarrollo (BID), etc., los cuales han puesto a los países en
desarrollo del hemisferio sur en una situación económica,
política y cultural inestable. La educación y la universidad se
han vuelto instituciones “fetichizadas” que inluyen, aunque
no totalmente, en la cultura, en lo humano, en el conocimiento,
en las humanidades, en las ciencias sociales y naturales y en
la tecnología, de manera que son limitadas y deinidas como
meros instrumentos del proceso de producción y el mercado
global. Esto signiica que necesitamos repensar nuestra
realidad dominante, tema de éste estudio, proponiendo
alternativas para superar el orden global neoliberal.
Palabras clave: educación, conciencia, historicidad.
Ciencia, de las Humanidades y de las Ciencias Sociales,
desde los grandes discursos epistémicos y ontológicos,
en la resemantización y la reconstrucción de la ilosofía
de la historia, de la ética, de la ilosofía política, de la
antropología ilosóica, de la semiótica, de la semántica,
de la gramatología, etc., en la construcción e interpretación
de nuevos lenguajes y de formas discursivas, ilosóicas,
políticas, sociales y culturales. Esto es, la recuperación, con
nuevo sentido de la poética, de la imaginación y creatividad,
en la producción de mundos utópicos posibles más ética e
históricamente humanos.
Por ello es necesario reevaluar la importancia y la cuantía
de la imaginación, de la creatividad, de la poiesis para
pensar mundos utópicos posibles enraizados en la historia,
desde un presente más comprometido con el cambio
y la transformación del orden dominante existente de
inequidad e injusticia, el cual no nos agrada, porque afecta
al género humano en el mundo, a la vida, a la existencia
toda.
Introducción
Crisis de la educación y universidad
La educación y la universidad son concebidas para el sistema
económico global como el rescoldo, el sobrante de un tiempo
iniquitado de la modernidad unitaria occidental fenecido,
donde la cultura y toda producción espiritual humana son
concebidas superluas y prescindibles.
En la actualidad, con los remezones y los desengaños del
capitalismo global, de la posmodernidad y del pensamiento
único se empieza a plantear una nueva concepción de la
La conciencia tecnocrática global del neocapitalismo sólo
está preocupada por cuestiones técnicas y tecnológicas que
no relejan y más bien excluyen y marginan el mundo de la
ética, del compromiso y de la responsabilidad con los seres
humanos; es, de cierto modo, la represión del ethos, de las
formas de existencia de la vida cotidiana, de la subjetividad
y sensibilidad inmediata; es supresión de la eticidad como
categorías de vida, de existencia, en el modo de ser de la
convivencia humana y de relación con la alteridad y de
Mario Magallón Anaya
16 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
reconocimiento del otro en equidad solidaria, de caritas,
de ser con el otro en la horizontalidad del modo de ser en
el mundo, en la historicidad existencial.
Por ello es necesaria la crítica a la concepción de la
modernidad occidental, a la posmodernidad, al pensamiento
débil, a la globalidad, a través del análisis hermenéutico de
las relaciones analógicas y simbólicas buscando el justo
medio de la proporcionalidad epistémica, para plantear
una modernidad alternativa y radical que cuestione las
formas autoritarias y de control por parte de los “santones
de la ilosofía mundial”, que ponga en crisis el sentido
“patriarcal” de las verdades y busca el diálogo comprometido
y responsable con el género humano; allí donde la validez de
los principios y valores de verdad ontológica y epistémicas
no son deinitivos sino dialécticamente abiertos al diálogo, la
discusión, la discrepancia y la compresión incluyente del otro
sin exclusiones racista, xenofóbicas, de género, educación,
cultura. Es decir, la inclusión de la humanidad toda en algo
que afecta a todos y a la pertinencia necesaria futura. Es el
espacio humano y social donde todos axiológicamente tienen
valor ininito y no cuantiicable.
En la sociedad moderna los agentes sociales definían
claramente su código de pertenencia: partidos políticos,
sindicatos, órdenes religiosas, asociaciones profesionales,
ecologistas, feministas. […] Se partía de una cierta cohesión
ideológica o de intereses, la promoción profesional, la
propaganda, son conceptos devaluados y sospechosos,
impregnados de todas las críticas que sobre la modernidad
se vertieron y debilitaron su pujanza; frente a estos, la
“conciencia ciudadana se alza como única legitimación,
que hace abstracción de la orientación profesional en
aras de una imagen global compartida. Ello emana de
una serie de condicionantes actuales definitorias de la
sociedad transmoderna: individualismo (en la dimensión
social: sociedad civil frente al estado en instituciones),
realización personal (versus seguimiento de morales del
deber), dimensión mediática (presencia de los medios de
comunicación antes que dinámica de grupos cercano) cibersociedad en red (dimensión global frente al contacto local).1
La situación actual en la que se encuentran inmersas
la Universidad y la Educación Superior en el mundo
requiere replantear la posibilidad de construir un sendero
de desarrollo económico y un proyecto ético-político
más igualitario como práctica solidaria con los otros, que
Rosa Ma. Rodríguez Magda, Transmodernidad, España, Anthropos, 2004. p.
146.
1
supere los principios del capitalismo, como el egoísmo, el
individualismo, la exclusión social y de género. Allí donde
se dé una práctica social solidaria de equidad con justicia, a
partir de una democracia social radical.
Ante esta realidad,
La democracia, cuyos fundamentos deben satisfacer las
necesidades de una sociedad con justicia social, muestra una
fractura radical al responder a los intereses de los agentes
económicos dominantes en los mercados inancieros en
el curso de la crisis económica. La restricción al empleo,
la reducción del ingreso y la imposición de las medidas
racionales para sustentar la ganancia de los inversionistas
internacionales rompe con los circuitos internacionales. Las
cadenas productivas se rompen, la ganancia del empresario,
cuya lógica es la ampliación de la producción, mayores
inversiones y más empleo, se detienen para disminuir o
desaparecer. La empresa termina cerrando la fuente de
trabajo. Una gran masa de la población pasa al desempleo.
La depresión se profundiza y llega a lo hondo del ciclo
económico. Justo a partir de este momento el régimen
democrático en su límite busca alternativas para satisfacer
los intereses de todos los agentes económicos.2
En la actual situación de emergencia económica, política,
social y cultural las instituciones de educación superior y
en consecuencia, la Universidad en el mundo tienen que
reconfigurar y reestructurar sus proyectos académicos
y de investigación, que vayan más allá de la conciencia
positivista, neopositivista e hiperpragmática del sistema
capitalista neoliberal global. Ello demanda que se organicen
los contenidos y estructuras curriculares profesionales y
posgrado, para ir más allá de los conceptos cosiicados y
utilitaristas de la ciencia y la tecnología; lo cual requiere
trasgredir de forma calculadora y cuantiicada el valor
económico y la ganancia, la eficiencia y la “calidad
empresarial”, que hasta la actualidad han sido violatorios
de los derechos humanos, de las condiciones ontológicas y
epistémicas de la existencia humana.
La discusión sobre el impacto de los factores culturales que
se han venido transmitiendo de generación en generación,
como es el factor económico, argumentado por Max Weber,
crucial para el desarrollo del capitalismo, la contraparte
de Karl Marx quien centra la discusión en el desarrollo
2
“Editorial. Desarrollo, ética y democracia”, en Problemas del desarrollo. Revista
Latinoamericana de Economía, Volumen 43/Número 171, Octubre-diciembre
2012. Instituto de Investigaciones Económicas, p. 4.
Crisis y educación en el capitalismo global neo-industrial
tecnológico y la división social del trabajo en la sociedad,
de la cultura, las relaciones de poder, las instituciones,
las formas ideológicas, etc.; en cambio Antonio Gramsci
extiende y amplía el análisis de Marx al considerar que estas
relaciones tienen el poder y valor de determinar las creencias
y valores sociales de una sociedad a través de la hegemonía
para perpetuarse en el poder.
En la actualidad la explicación dominante que los
investigadores, académicos y economistas, cientíicos, etc., le
asignan a las instituciones, y no precisamente a los valores, la
responsabilidad de estas diferencias al desarrollo económico
es muy desigual y profundamente variables e inestable. Se
cree que mientras que unos países desarrollan a lo largo
del tiempo un sistema inclusivo de gobierno que permita a
todos participar y beneiciarse del crecimiento, otros países
no han conseguido instalar gobiernos “neutrales”, donde la
democracia tiene sólo el carácter procedimental y operativa
e ideológicamente funcional, como en los países coloniales
en el mundo tuvieron que convivir con la depredación de
las élites extractivas y de explotación que gestionan los
grandes capitales empresariales, el Estado y el mercado
en su beneicio. Es regiones poscoloniales, en general son
ahora mucho más pobres que antes. Por ello puede airmarse,
contrario a lo que se ha creído, no son los valores éticos,
políticos, sociales y culturales, sino las instituciones de los
grandes capitales empresariales y las del Estado, las que
determinan la economía y el desarrollo mundial.
Es necesario que la comunicación, la lingüística, la
gramatología, las formas discursivas y los lenguajes
especializados no borren el lenguaje ordinario como
referente de la interacción del lenguaje formal declarativo y
de otras formas expresivas a través de las cuales se transmiten
valores, tradición, historia, a mundo donde las reglas de
convivencia han cambiado de manera radical; ello implica
sustituirlos por un sistema cientíico y humano, donde el
dominio y la ideología surjan bajo nuevas condiciones que
no distorsionen el diálogo, la comunicación horizontal
de relación dialógica de entendimiento y de comprensión
solidaria con nosotros (comunidad latinoamericana y
caribeña) y los otros (comunidad mundial).
En esta dimensión ética y política del desarrollo se inserta
el individuo en la sociedad y da sentido al proyecto de
transformación social colectiva que habrá de contribuir a
materializar los múltiples y diversos proyectos de vida. Es
en la democracia radical donde se hace posible la dinámica
de la diversidad y del desarrollo con justicia y equidad.
17
Esta “nueva ideología”, de reconstrucción semántica,
semiótica y epistémica deberá ser capaz de afrontar los retos
que el mundo contemporáneo demanda. Por ello se requiere
relexionar, no sólo sobre el interés tecnológico y cientíico
del proceso productivo y del trabajo, en las empresas
globales poscapitalistas, sino, especialmente, sobre las
instituciones de educación superior y las universidades y el
papel que han de jugar en el futuro.
Por ello es urgente mantener y defender la intersubjetividad
de la comprensión interpersonal de las relaciones
humanas, sociales, políticas y derechos; de recuperar la
individualidad, como parte del sujeto social, la identidad
sujetiva diferenciadora, motores de las relaciones sociales
y humanas; luchar por establecer la comunicación,
el diálogo y el entendimiento menos presionados y
dominados por los medios de relación comunicativa de
los massmedia, regida y dirigida por las empresas globales
fundadas en un mundo desigual, injusto, inequitativo,
excluyente y poco solidario con el género humano, con
la Humanidad.
De tal manera puede decirse que las ciencias especializadas
y sus vertientes teórico-cientíicas, como: el positivismo, el
neopositivismo, el pragmatismo, el hiperpragmatismo, el
funcionalismo, el neofuncionalismo, el estructuralismos y
el neoestructuralismo, etc., son, desde nuestra perspectiva
teórica y epistemológica, formas técnico-productivistas que
parcializan y, en algunos casos, orientan el dominio y control
de segmentos de la naturaleza y en otros, la han mediatizado
y devastado por los intereses del capitalismo y del mercado
mundial que han propiciado y permitido la explotación, la
miseria, la opresión y la exclusión social, lo que ha generado
angustia en la sociedad.
Lo cual muestra la decadencia teórico-epistemológica de
la eticidad y de la desestructuración de la existencia, de la
vida cotidiana, del ethos, de la subjetividad humana toda,
hasta el extremo del enfrentamiento y de lucha de todos
contra todos; donde la violencia se reposiciona tomando
el lugar de la razón, allí, precisamente, donde se dirimen
el bien común, la libertad, la justicia, la equidad y la
solidaridad humana.
El problema del sistema económico global neoliberal
posmoderno es que las relaciones humanas y sociales se
han desvanecido para ser sustituidas, por el alejamiento
y la distanciación, de ser con los otros solidariamente con
justicia con el individuo, el sujeto social y con la comunidad,
Mario Magallón Anaya
18 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
cuando todo ha sido mediatizado y virtualizado, hasta caer
en el absoluto relativismo y en lo efímero. Es el espacio
donde se hace presente el fantasma, el espíritu del cine, de
montajes y de escenografías multidiversas.
Se descubre excediendo lo que acontece a los cuerpos,
dando a los acontecimientos incorporales las cualidades,
los signos, que no niegan a los cuerpos, sino más bien
los trascienden inmanentemente sin proyecciones
ultramundanas, una vez que el tiempo no es lo derivado,
sino que, al dislocarse del eje teológico se emancipa de
los acontecimientos que daban contenido y se convierte
en forma vacía que se tiende hacia delante repitiendo
la novedad, porque es tiempo no rutinario, sino siempre
pasado-y-futuro a la vez. El presente que pasa y se fuga de
sí, como signo de la síntesis pasiva, y el pasado persistente
que se reconoce en todos los presentes y se releja en todos
los futuros como síntoma de la síntesis activa3.
Slavoj Zizek ha señalado, con razón, sobre la locura
relativista y disgregante de la posmodernidad, de la
poshistoria, de la posmetafísica, de la globalización etc., allí
donde todas estas formas expresivas han sido concebidas
como representaciones melancólicas, de lo que fue y ya no
volverá y no podrá ser nunca más. Es decir, se está ante la
incertidumbre total; es la representación y la personiicación
en escenas y escenografías de formas representativas en
diversos escenarios, donde hace presencia y se muestra el
fantasma en diversos y variados escenarios, de un mundo
virtualizado que cambia y muta de rostros y se disuelve al
actuar humano en una proto-ontología y donde la existencia
es ya inaprensible.
Así, nos hallamos en un mundo en escenas de una realidad
nueva multidiversa y plural, inaprensible y disolvente.
Nos encontramos así en el ámbito alucinatorio del fantasma
realizado. La antigua expresión “perder la cara”, designa
normalmente una situación de vergüenza y humillación
morales, adquiere en este caso un signiicado literal: la
supericie de la piel de nuestras caras se convierte literalmente
en la cara que llevamos, una máscara que es posible cambiar,
sustituir por otra. Lo que aquí desaparece es precisamente la
noción de una supericie de piel propia de nuestro cuerpo:
llevamos máscaras que pueden ser sustituidas, y lo que
por debajo de la máscara artiicial sustituible ya no es la
supericie de piel y músculos. Ha dejado de ser la cara
3
Sonia Torres Ornelas, (Montajes) Entre ilosofía y cine, México, Editorial Torres,
2012, p. 285.
que alguien puede ver: mi cara es una máscara que puedo
quitarme. Se abre por consiguiente una brecha ontológica,
una brecha que también suele ser manipulada.4
En el sistema-mundo de hoy todo se encuentra en crisis:
las humanidades, el humanismo, las ciencias: sociales
y naturales, la eticidad, los valores morales, las artes, la
Educación y la Universidad. Así la Universidad colonizada
por las ciencias, la técnica, las tecnologías y las humanidades
ha devenido en una infernal máquina que devora a los seres
humanos para mediatizarlos y convertirlos en medio, y no
en el in de la Educación y de la cultura.
Todo ello es poner en entredicho la modernidad occidental,
donde se potencia el enmascaramiento y la simulación
en el corazón mismo de la Filosofía, para hacer presencia
la apariencia, que se consolida frente a lo verídico y se
reproduce como una ilusión el supuesto modelo, para mostrar
la forma disminuida de la idea, concebida históricamente
como fantasía o construcción conceptual orteguiana.
El sentido del simulacro es la Simulación, lo que acontece
fuera de la dialéctica de la episteme y la doxa. La simulación
es la voluntad de enmascaramiento, de disfraz, de
trasvestimiento, de lo que no se deja ver sino como lo otro de
sí mismo, en su diferencia íntima; lo que sugiere seres de otra
índole, imágenes sin semejanza, con una dis-paridad esencial
y ajenos a la lógica de la Semejanza interior y la identidad.5
La ilosofía del siglo XX relegó al olvido la construcción
de utopías y de horizontes utópicos poniéndolas en el
archivo de las cosas periclitadas para las humanidades,
las ciencias sociales y la nueva Ciencia y la Tecnología.
La emancipación, la iluminación y la tecniicación del ser
humano pretendieron desmitiicar corrientes ilosóicas
como: el evolucionismo, el marxismo, el neopositivismo,
el psicoanálisis, la semiótica, el posestructuralismo, la
antropología, cultural y la antropoética de la educación, etc.
Vivimos sacriicándonos al instante presente por un futuro
incierto. Como entes teleológicos hemos despojado al
presente de valor intrínseco, lo cual es una paradoja que
hace difícil cambiar el rumbo de nuestro horizonte y
destino histórico-político futuro. Por ello, en la actualidad
es imprescindible recuperar la utopía como proyecto
esperanzador de un futuro seductor y factible.
4
Slavoj Zizek, ¿Quién dijo Totalitarismo? Cinco intervenciones sobre el (mal)
uso de la noción, España, Pre-textos, 2002, p. 210.
5
Sonia Torres Ornelas, (Montajes) Entre ilosofía y cine, México, Editorial
Torres, 2012, p. 45.
Crisis y educación en el capitalismo global neo-industrial
Educación, universidad y cultura en el
mundo
La incertidumbre del futuro de la Educación y de la
Universidad en todos sus niveles trae consigo angustia sobre
el futuro de los seres humanos, debido a que éstos ignoran
el resultado de sus decisiones, pues no tienen un centro
fácilmente identiicable. Por ello el ser humano se angustia
al desconocer los resultados de su elección. Le preocupa el
pasado pero éste ya quedó atrás; el presente ocupa y domina
nuestras decisiones y posibilidades; el futuro nos angustia,
puesto que no sabemos que es lo va a suceder con cada uno
de nosotros y con los otros.
La incertidumbre que el futuro trae consigo nos causa
inseguridad, porque pensamos que el porvenir nos prepara
algo; pero es mejor creer que cada hombre va forjando su
futuro desde el presente con la fuerza de las elecciones.
El único problema es que no hay nada cierto ni seguro,
el destino deseado está oculto por una capa de niebla que
aumenta nuestra angustia. El futuro se vislumbra, se intuye
o preigura, se muestra sin mostrarse en cada elección que
se toma, pero se vuelve a esconder; constituye el motor que
nos impulsa a seguir el sendero de la vida, es nuestra razón
de ser: Somos aquello que proyectamos y este proyectar
nos determina cuando elegimos entre opciones que nos
presentan.6
Porque, como bien había señalado, hace tiempo, el maestro
José Gaos, el futuro adquiere valor y sentido hoy:7 lo que
ha de hacerse actualmente ante las situaciones inciertas del
mundo, es considerar como necesario e imprescindible,
crear formas alternativas urgentes, para rescatar el papel
de la Educación y de la Universidad entre nosotros como
en el mundo.
Es decir, la diferencia de visiones e interpretaciones del
pasado, desde el presente, hace diferente entender el
pasado, como las visiones del pasado mismo, lo cual ha
impedido ir perilando, desde el pasado-presente, el futuro
como posible.
Francisco Macías, “Futuro: posibilidad de ser”, Dossier de ilosofía: destino,
futuro y utopía”, en La Colmena. Revista de la Universidad Autónoma del Estado
de México, julio-septiembre, número, 75, 2012, pp. 19-20.
7
José Gaos, La ilosofía en la universidad, México, UNAM, 2000, p. 261. (“Lo que
se hace presentemente, se hace con vistas al futuro, como se dice; lo que quiere
decir que hacer conformidad con la imagen (del mundo) con previsión de futuro.
Y el pasado va viéndose, esto es imaginándose, recordándose, concibiéndose, de
diferente manera a medida de que va transcurriendo el tiempo, la vida, la historia.”
6
19
Por ello,
La universidad no ha sido nunca, ni es ahora tal, como para
deber renovarse en delante de raíz. Más bien lo contrario.
Tiene una tradición secular, sostenida hasta el mismo día de
hoy, que tan sólo porque todo lo humano es indeinidamente
perfectible, obliga simplemente a acendrarla.8
Así la educación y la universidad en el mundo y, en
específico: la universitaria y mexicana tiene como
horizonte a la tradición educativa, su historicidad y el
compromiso del cultivo del saber, del conocimiento,
de la docencia y de la investigación, lo cual la coloca
más allá del desfallecimiento de la impertinencia y de la
incertidumbre de la verdad “cientíicamente” construida.
Pues es el espacio donde lo ontoepistémico se uniica
con las verdades, según la unidad del conocimiento
epistemológico que se desea sustentar. Es la total unidad
con la vida material, económica, política y social y del
espíritu de las colectividades y de los individuos. Este
ha sido el ideal perseguido en la institución universitaria
mexicana desde hace ya mucho más de dos siglos.
En el mundo actual coexisten polaridades, donde no
concurren en un centro problematizador que oriente
racional y humanamente, más allá del interés y del
capital, lo cual lo ubica, lo coloca, en la disolución y en la
fragmentación de la vida, de la existencia, para no atinar
hacia dónde dirigir los proyectos humanos, sociales y
colectivos; ni como, precisamente, buscar alternativas
y estrategias para la protección y la conservación de la
naturaleza y de la vida.
En la práctica, la universidad sin condiciones nunca ha
existido. En nuestros días no parece apropiado pedir el
estudio de lo humano de ‘lo humano’ a las instituciones
destinadas a preparar al personal que requieren las cadenas
de producción; tampoco parece oportuno pedirle a una
institución en la que la investigación es entendida como
simple develamiento, porque, como decía Kant, para el
cientíico galileano esta actividad no es la de un escolar
a quien la naturaleza enseña, sino la de un juez que va a
aprender a un testigo; pero, sometiéndolo a un interrogatorio
que previamente ha forjado, con el preija lo que quiere
investigar.9
8
Ibid, p. 519.
Herminio Núñez Villavicencio, “Derrida, la universidad, las humanidades y
la literatura”. Dossier de ilosofía: destino, futuro y utopía”, en La Colmena.
Revista de la Universidad Autónoma del Estado de México, julio-septiembre,
número, 75, 2012, p. 23.
9
20 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Hace muchos años, el maestro José Gaos,10 coincidiendo con
Justo Sierra y Samuel Ramos, había señalado que la tradición
histórica de la Universidad ha de buscar nacionalizar la
ciencia y la técnica, para ponerla al servicio de la humanidad
y de la nación mexicana.
La Universidad de antes, como la de hoy, ha sido hecha para
el debate, para el diálogo, para el uso público de la razón, para
la crítica, lo cual permite el avance, la creación y la recreación
de los conocimientos, de manera innovadora, creativa y
novedosa. De tal forma, la universidad del presente-futuro
deberá propiciar espacios para la universalización de
las ideas que posibilite el acceso a todos y a todas, a los
aprendizajes signiicativos y cognitivos para la vida (para el
trabajo productivo), pero en la vida misma, como vivencia
experiencial de vida práctica, de relexión, de análisis y
de crítica. Por ello, la educación universitaria, como la
educación en general, deberá ser continua y permanente e
ir más allá de los “muros escolares”, así lo requieren y lo
exigen los nuevos tiempos.
Educación, universidad y cultura en nuestra
américa
La universidad, la educación superior y la cultura en
México, en América Latina y el Caribe han sido reducidas
a medios y no a ines, puede decirse que lo mismo acontece
con la Educación en general, para caer en la repetición y
en el mantenimiento de los valores y de los avances del
pasado, lo cual ha terminado en la reproducción estéril de
lo conocido. Los esquemas y los modelos, las teorías y las
prácticas educativas, que habían venido repitiéndose desde
hacía siglos de forma generalizada, hasta la actualidad donde
unidimensionalizan proyectos y objetivos que habrán de
responder a los intereses del capital global.
En la actualidad en la universidad pública, como la
instituciones de educación superior en general, ha puesta en
disputa su pertinencia, vigencia y alcance práctico y, a la vez,
José Gaos, Op. cit, p. 219. (“Es la tradición de la Universidad, sin duda la de
“nacionalizar la ciencia, mexicanizar el saber”, según las palabras mismas de
su gran restaurador, el Maestro Justo Sierra, en la oración famosa que pronunció
en acto al que sólo es equiparable el presente; pero es también la de considerarse
como americana en general, por ser característica de los pueblos americanos
una solidaridad mutua sin parte entre los demás pueblos. Y en esta solidaridad
funda nuestra Universidad su declarada ambición y esperanza de que numerosos
ciudadanos de otros países americanos vengan a serlo de esta Ciudad (universitaria)
y lleguen a reconocerse hijos de esta madre nutricia, de esta alma mater.)
10
Mario Magallón Anaya
que ha conirmado o disconirmado -según desde donde se
mire-, el valor y el desarrollo de los países latinoamericanos
y del Caribe.
Hoy la educación y la universidad en el sistema mundial
nos hablan de algo tradicionalmente entendido, como la
“perfectibilidad” humana y material, considerada como el
ideal educativo, lo cual se concibe desde un universalismo
“normalmente” acrítico, frente al saber transmitido por
la autoridad del maestro en el aula y en el laboratorio de
investigación.
Así, el eslogan escolástico medieval magister dixit, el cual no
había variado durante tantos siglos en cuanto la transmisión
de conocimientos, que se identiicaba con el principio de
autoridad, que no daba las razones necesarias y suicientes
sobre los saberes, porque la transmisión del conocimiento
solía ceñirse a los irmes muros del centro escolar y del claustro
universitario. En la actualidad, ya no cuadran, ni empatan con
el mundo de la vida y de la existencia toda.
Esta situación, hasta la actualidad, no ha cambiado en algunas
Universidades públicas y privadas en la región, se insiste en
defender la libertad de cátedra y de investigación, para buscar
ir más allá de la rutinización del conocimiento y plantear
nuevos caminos en la enseñanza-aprendizaje del proceso
educativo, de investigación de punta y aplicada, en ciencias
naturales y formales, en las humanidades, y en las ciencias
sociales, no obstante, y a pesar de las resistencias, del Banco
Mundial y del Fondo Monetario Internacional.
Una Universidad que deberá ser puesta al servicio de los seres
humanos en la transformación de un mundo más justo, equitativo
y humano. Allí donde todos los seres humanos estén incluidos,
sin la exclusión de clase, de partidos políticos, de grupos
sociales, religiosos, de las mayorías, de las minorías, como de la
diversidad de color de piel, de género, de preferencia sexual, etc.
Esto es, la recuperación del sujeto social, de la historia, de la
ilosofía, de la razón y de las racionalidades, lo cual demanda
reconstruir las esperanzas utópicas de un mundo mejor, pero,
desde la historia presente. Así pues, es necesario plantear
y de poner en cuestión, el orden establecido en el sistemamundo del capitalismo global neoliberal en todos los órdenes
humanos y materiales.
La Educación Superior, la Universidad Pública y la
Educación en general, en la producción de conocimientos,
deberá realizarse en una práctica democrática de análisis, de
Crisis y educación en el capitalismo global neo-industrial
crítica, de colaboración y de intercambios de experiencias,
entre los estudiantes y los maestros, los investigadores y con
la sociedad; con el compromiso y la responsabilidad ética
con la realidad contemporánea, que se ha caracterizado por
la injusticia, la exclusión y la marginación, para transformar
el espacio universitario en un mundo onto-epistemológico
y ético de creatividad y de imaginación, desde un trabajo
poiéticode responsabilidad con el ser humano, con la
sociedad, con la Naturaleza y con el Mundo, de forma
igualitaria y solidaria.
Es romper con los viejos principios de la modernidad
europea y de la razón instrumental de origen cartesiano.
Es la invitación a redeinir las relaciones entre educación,
universidad y Estado, lo cual requiere de redeinir el bien
común aristotélico y la res pública romana, aquello que
ha de ser social y colectiva, democrática y socialmente
comunitario en equidad y justicia.
21
Allí donde todos(as) estén incluidos(as) y comprometidos(as)
con el cambio por una sociedad democrática y radical. Es aquí
donde la Educación y la Universidad deberán ser redeinidas
y puestas al día sobre las demandas y las necesidades de los
tiempos actuales.
Ello implica la aceptación de la coexistencia de las polaridades
temporales que producen las grandes turbulencias en las
viejas distinciones y fragmentaciones del pensamiento
crítico, social y político; así como entre las dicotomías entre
las tácticas y las estrategias, como entre el reformismo y la
revolución del conocimiento y de los saberes. Lo cual trae
como consecuencia un sentido paradigmático, como sería
“el cambio civilizacional”, susceptible de “apropiaciones
contradictorias” y no necesariamente de síntesis ni de
superación histórica de modernidad occidental, sino,
más bien, de plantear la modernidad alternativa múltiple
latinoamericana y caribeña12.
Esto es, como bien señala Boaventura de Sousa Santos,
volver a la historia pasada de Occidente con humildad;
para “desoccidentalizar” ideológicamente las conciencias,
descolonizar las nuestros haceres, quehaceres y prácticas.
Es decir, de todas las formas del saber, del conocimiento,
de la ilosofía y de las ciencias. Es, volver a las tradiciones
de manera creativa e imaginativa que permitan entender
mejor la realidad del mundo actual y que trasciendan el
“teleologismo” de la “tradición canónica eurocéntrica” de
la historia europea y del mundo globalizado.
Esta incertidumbre es la condición de nuestro tiempo, como
de la inagotable diversidad del mundo, para colocarnos
ante la paradoja de la initud y de la ininitud, puestas ante
la posibilidad de un mundo mejor y más humano. Esta
paradójica realidad nos coloca ante desafíos epistemológicos
y políticos nuevos.
Es pensar y repensar desde un nuevo horizonte histórico
educativo universitario, el distanciamiento de las viejas
teorías epistémicas, de los sistemas, de los métodos, de las
ilosofías, de las ciencias y de las tecnologías que se han
convertido en objetos mercantilizables para ponerlos al
servicio de la humanidad entera, de todos los seres humanos,
sin exclusión.
Aboites Hugo. 2010. La evaluación que tenemos, la evaluación que
necesitamos. Intercambio. Por una evaluación para la
educación, no para la exclusión, Año 3 No. 1 julio.
Benjamin Walter. 2007. Conceptos de ilosofía de la historia, Argentina,
Terramar Ediciones, Caronte ilosofía.
Bodei Remo. 2006. Destinos personales. La era de colonización de las
conciencias, Argentina, El cuerno de plata/Estudios ilosóicos.
Bourdieu Pierre y Jean-Claude Passeron. 1988. La reproducción.
Elementos para una teoría del sistema de enseñanza, España,
Laia,
Cazés Daniel. 2007. Disputas por la universidad. Cuestiones críticas para
confrontar su futuro, México, CEIICH/UNAM.
Collins Randall, Sociología de las ilosofías. 2005. Una teoría global
de cambio intelectual, Barcelona, España, Hacer. Editorial.
Desarrollo, ética y democracia”, en problemas del desarrollo.
Revista Latinoamericana de Economía, Volumen 43/Número
171, Octubre-diciembre, 2012. Instituto de Investigaciones
Económicas/UNAM.
De Sousa Santos Boaventura. 2009. La ilosofía a la venta en Educación
Superior. Cifras y hechos, año 8 números 45-46, mayo-agosto
de.
Reconocer la necesidad de subvertir la disciplinariedad y
la de aceptar la construcción compleja de los saberes, del
conocimiento, de las ciencias y de las tecnologías en una
relación de intercambios disciplinarios, interdisciplinarios,
trans y multidisciplinarios. Lo cual equivaldría a mirar a la
epistemología desde el Sur, esto es surearnos en un sentido
más propio, en una relación libre, equitativa, igualitaria,
justa y solidaria desde miradas nuevas e incluyentes del
género humano11.
11
Cfr. José Guadalupe Gandarilla Salgado compilador, La universidad en la
encrucijada de nuestro tiempo, 2009.
Literatura citada
12
Cfr. Ibid. Loc. Cit.
22 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Macías, Francisco. 2012. Futuro: posibilidad de ser”, Dossier de
ilosofía: destino, futuro y utopía, en La Colmena. Revista de la
Universidad Autónoma del Estado de México, julio-septiembre,
número, 75.
Malishev, Mijail. Peripecias del destino. 2012 “Dossier de ilosofía:
destino, futuro y utopía”, en La Colmena. Revista de la
Universidad Autónoma del Estado de México, julio-septiembre,
número, 75,.
Mario Magallón Anaya
Núñez Villavicencio, Herminio. 2012. “Derrida, la universidad, las
humanidades y la literatura”. Dossier de ilosofía: destino,
futuro y utopía”, en La Colmena. Revista de la Universidad
Autónoma del Estado de México, julio-septiembre, número, 75.
Zizek Slavoj. 2002. El frágil absoluto o ¿Por qué merece la pena de luchar
por el legado cristiano? España, Pre-textos,
Zizek Slavoj 2002 ¿Quién dijo totalitarismo? Cinco intervenciones sobre
el (mal) uso de una noción, España, Pre-textos.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 23-28
Raíces históricas de una cultura solidaria
René González Barrios
Presidente del Instituto de Historia de Cuba.
El capitán italiano Natalio Argenta, veterano garibaldiano y
destacado músico y poeta, había cautivado a los emigrados
revolucionarios cubanos en Estados Unidos por la pasión
con que defendía la causa de la independencia de Cuba.
Inspirado en ella, compuso un Himno, que estrenó en el
Instituto Patriótico y Docente San Carlos, en Key West y
varios poemas. Eran los días en que el mayor general Calixto
García preparaba la Guerra Chiquita.
Inmerso en su entusiasmo, Argenta se enroló en la expedición
de la goleta Hattie Haskiel. Fracasada esta, desde Jamaica
acompañó al general Pío Rosado y en un bote se trasladan
al Oriente cubano, logrando desembarcar cerca de Santiago
de Cuba, a ines de junio de 1880. Por una delación, Argenta
y sus compañeros, entre los que se encontraba el mexicano
Félix Morejón, fueron capturados y conducidos a la ciudad de
Bayamo. El 07 de julio de 1880 fue fusilado.Ante sus implacables
verdugos gritó a todo pecho: !Viva la República Universal!.
Aquellas palabras reflejaban el espíritu de solidaridad
y universalidad, en que se forjaron los ideales de los
revolucionarios cubanos desde la primera mitad del siglo
XIX. Decenas de criollos se dirigieron a México y Venezuela
buscando apoyo para lograr la independencia de Cuba.
Inmersos en la consolidación de la causa americana, echaron
su suerte con los patriotas de ambas naciones y ayudaron a
la forja de la Patria Grande. Treinta cubanos alcanzaron los
grados de generales peleando en México entre 1821 y 1867,
contra las invasiones extranjeras. Otros escribieron junto a
Bolívar, páginas de gloria en Carabobo, Junín y Ayacucho.
La Guerra de Secesión vería a cubanos peleando por la
abolición de la esclavitud y el pueblo dominicano sentiría el
apoyo de hijos de la mayor delas Antillas durante la Guerra de
Restauración. En el ideario independentista cubano, Puerto
Rico, siempre, formó parte del concepto de Patria.
Los más grandes próceres de nuestra Independencia
patentizaron su ideal solidario. Carlos Manuel de Céspedes,
en el Maniiesto del 10 de octubre, expresaba su idea sobre
el alcance de la naciente Revolución: “…Cuba aspira a ser
una nación grande y civilizada para tender un brazo amigo y
un corazón fraternal a todos los demás pueblos…” El mayor
general Máximo Gómez, genio militar dominicano, y cubano
por derecho propio, en la nobleza de su espíritu magnánimo,
dejaba explícito en carta al capitán general español Ramón
Blanco y Erenas, la dimensión de su pensamiento: “…Yo
solo creo en una raza: la humanidad…”
El general Antonio Maceo vivió obsesionado por los
sufrimientos y la suerte de la hermana gemela de Cuba,
Puerto Rico, la isla que latía al ritmo de nuestras emociones,
privaciones y victorias. Y para dejarlo patentizado ante la
historia, como legado testamental, el 06 de junio de 1884
escribió desde San Pedro Sula, Honduras, al patriota cubano
Anselmo Valdés: “…Cuando Cuba sea independiente
solicitaré del Gobierno que se constituya, permiso para hacer
la libertad de Puerto Rico, pues no me gustaría entregar la
espada dejando esclava esa porción de América; pero si
no coronare mis ines, entregaré el sable pidiendo a mis
compañeros hagan lo mismo.”
En 1880 brotaron en el Departamento Oriental de Cuba
las primeras células de la Liga Antillana, con el propósito
de fundar “…la Federación de Cuba, Puerto Rico y Santo
Domingo”. En ella los patriotas cubanos contaron con el
espaldarazo del general dominicano Gregorio Luperón y
de los patriotas puertorriqueños Ramón Emeterio Betances
y Eugenio María de Hostos. Renacía el espíritu sagrado
de la Patria común, por la que cubanos y puertorriqueños,
habían fundado en Nueva York, en 1865, la “Sociedad
Republicana de Cuba y Puerto Rico”, con el apoyo
dominicano.
24 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
José Martí fundó en 1892 el Partido Revolucionario Cubano
para organizar la guerra por la independencia de Cuba y
auxiliar la de Puerto Rico. En el Maniiesto de Montecristi,
firmado junto a Máximo Gómez en aquel poblado
dominicano, patentizó: “…La guerra de independencia de
Cuba, nudo del haz de islas donde se ha de cruzar, en plazo
de pocos años, el comercio de los continentes, es suceso de
gran alcance humano, y servicio oportuno que el heroísmo
juicioso de las Antillas presta a la irmeza y trato justo de
las naciones americanas, y al equilibrio aún vacilante del
mundo. Honra y conmueve pensar que cuando cae en tierra
de Cuba un guerrero de la independencia, abandonado tal vez
por los pueblos incautos o indiferentes a quienes se inmola,
cae por el bien mayor del hombre, la conirmación de la
república moral en América, y la creación de un archipiélago
libre donde las naciones respetuosas derramen las riquezas
que a su paso han de caer sobre el crucero del mundo….”
La Guerra de Independencia de Cuba y la República
en Armas que forjó las bases del futuro estado cubano,
llevaban en su esencia el espíritu universal clamado por
el capitán italiano Natalio Argenta ante el pelotón de
fusilamiento. De ello dio fe la presencia de más de tres
mil extranjeros en el Ejército Libertador, treinta y seis
de los cuales alcanzaron el generalato mambí. En ese
clímax creció la juventud revolucionaria en la república
neocolonial, que solidaria, fraguó en la lucha la Revolución
victoriosa del 1ro de enero de 1959.
Cuba ha construido una nación nueva, en la que la sabia
internacionalista alimenta la cultura política de un pueblo.
El 26 de julio de 1978, expresaba el Comandante en Jefe
Fidel Castro Ruz: “…El internacionalismo es la esencia
más hermosa del marxismo- leninismo y sus ideales
de solidaridad y fraternidad entre los pueblos. Sin el
internacionalismo la Revolución Cubana ni siquiera
existiría. Ser internacionalista es saldar nuestra propia deuda
con la humanidad…”
El apoyo popular en México, Venezuela, Costa Rica, Panamá,
Ecuador, Estados Unidos, entre otras naciones, fue garantía
de la legitimidad de la causa revolucionaria que triunfó el
1ro de enero de 1959. Desde entonces, y hasta su retiro
oicial de la vida pública, fue una constante en el discurso
político de Fidel, sus alusiones a lo que llamó indistintamente
solidaridad humana, solidaridad revolucionaria, ayuda
solidaria, sentimientos internacionalistas, vocación
internacionalista, deber internacionalista, conciencia
internacionalista, espíritu internacionalista, entre otros.
René González Barrios
La deuda de gratitud de la revolución naciente, solo podría
pagarse construyendo una Patria sólida y ejemplar, dispuesta
a tender la mano a quien la necesitase.
El 23 de enero de 1959 arribaría Fidel a Venezuela en su
primera salida al exterior tras el triunfo revolucionario del
1ro de enero. En la Plaza Aérea del Silencio, en Caracas,
se referiría a “…la formidable y extraordinaria victoria
del pueblo de Cuba que, sin más ayuda que la simpatía y
la solidaridad de los pueblos hermanos del continente, sin
más armas que las que supo arrebatar al enemigo en cada
combate, libró durante dos años una guerra cruenta contra un
ejército numeroso, bien armado, que contaba con tanques,
con cañones, con aviones y con armas de todo tipo, armas
modernas, las que se decía que eran invencibles…”
En ese mismo día, en la Universidad Central de la capital
venezolana, deiniría el compromiso político de la naciente
revolución con los pueblos del planeta:
“…A los estudiantes, que tan extraordinariamente han
honrado a nuestro pueblo en la tarde de hoy, quiero decirles,
para inalizar, una cosa: tengan la seguridad de que somos
hombres conscientes de nuestra responsabilidad con
nuestra patria, de nuestra responsabilidad con los pueblos
oprimidos y de nuestro deber ineludible de solidaridad con
todos los pueblos del continente americano; que somos
revolucionarios, y que ser revolucionario no es llamarse
así como se llaman muchos. Ser revolucionario es tener
una postura revolucionaria en todos los órdenes, dedicar
su vida a la causa de los pueblos, dedicar su vida a la causa
de la revolución de los pueblos, a la plena redención de los
pueblos oprimidos y explotados….”
Durante su viaje a Estados Unidos, el 24 de abril de ese
año, en un mitin en el Parque Central de New York, en
las mismas entrañas del imperio, reirió sin ambages cual
sería la posición internacional de la Revolución: “…Desde
aquí decimos que Cuba y el pueblo de Cuba y los cubanos,
dondequiera que estemos, seremos solidarios con los anhelos
de liberación de nuestros hermanos oprimidos…” Y añadía:
“…Pero hay algo que los pueblos oprimidos necesitan y es
la solidaridad, hay algo que los pueblos oprimidos necesitan
y es el sentimiento de los demás pueblos. Y puedo hablar
de eso, porque recuerdo aquellos días difíciles de nuestra
lucha revolucionaria; recuerdo aquellos momentos duros de
los primeros reveses y en aquellos instantes para nosotros
nada valía tanto como saber que los demás pueblos nos
Raíces históricas de una cultura solidaria
acompañaban con su solidaridad, que los demás pueblos nos
acompañaban con sus sentimientos y que en cualquier lugar
de América una voz se levantaba para defendernos, que en
cualquier lugar de América los pueblos se levantaban para
defendernos. (…).
Y es que lo que hace posible las grandes empresas
libertadoras es la fe y el aliento, sembremos fe y estaremos
sembrando libertades, sembremos aliento y estaremos
sembrando libertades, sembremos solidaridad y estaremos
sembrando libertades.
Tras su viaje a Estados Unidos, Fidel pasó a Canadá, Trinidad
Tobago y visitó Argentina, Uruguay y Brasil. Nuevamente
el tema de la solidaridad fue eje de su discurso. El 5 de mayo
en la explanada municipal de Montevideo, remontándose a
sus días de combatiente guerrillero, haría públicamente una
declaración de fe, de su vocación solidaria e internacionalista:
“…Entonces, echaba de menos a aquellos días. Sentía no ser
otra vez el estudiante en vez del gobernante, sentía no ser el
hombre anónimo —decía— para poder empuñar de nuevo
un arma con que ayudar a libertar a un pueblo hermano. Y lo
sentía porque mis deberes de gobernante me lo impedían…”
Convencido del papel de la solidaridad en la lucha de los
pueblos, agregaba, “…¡Evidenciemos nuestra solidaridad
a todos los pueblos oprimidos y estaremos ayudando a
libertarlos!...”
Sobre el papel de Cuba en los destinos de los pueblos de
América, y su martiana responsabilidad histórica, declaraba:
“…No podemos sacriicar la esperanza que Cuba es hoy
para los pueblos de América. Cuba -y lo digo sin sentido
de orgullo, porque para nosotros eso no significa sino
responsabilidades- es hoy como una lucecita que se enciende
para América, como una lucecita que puede señalar un
camino; Cuba, país pequeño, que surge sin ambiciones de
dominio alguno, que surge con su Revolución sin ambiciones
personales de ninguna índole; Cuba, que es hoy, en su
Revolución, todo desinterés, todo generosidad, Cuba es
como una luz de la que nadie puede sospechar, a la que nadie
puede mirar con recelo, porque jamás podrá verse en Cuba
sino que toda entera se da a los demás pueblos hermanos, que
toda entera se solidariza con los demás pueblos hermanos.
Tras el periplo internacional, el 8 de mayo, en la entonces
Plaza Cívica, hoy Plaza de la Revolución José Martí,
expresaba Fidel a nuestro pueblo:
25
“…Nuestra Revolución necesita la solidaridad de los demás
pueblos hermanos de América Latina, nuestra Revolución
necesita de la solidaridad de la opinión pública de todo
el continente, para hacerse más fuerte, para hacerse más
irme, y para llevar adelante un programa de la más vasta
dimensión. Nuestra Revolución necesita el respaldo de la
opinión pública de todos los pueblos del continente para
obtener un triunfo más seguro en su obra creadora. La
Revolución necesita el respaldo de la opinión pública de
los demás pueblos del continente para llevar adelante su
obra, de manera segura e inevitable, para que los enemigos
de nuestra Revolución no encuentren aliados en los pueblos
confundidos con la mentira o la calumnia…”
El 12 de julio, en el acto de clausura del Primer Foro Nacional
de Reforma Agraria, volvería Fidel a resaltar el signiicado
de la solidaridad para los cubanos:
“…Todos los que tengan una idea limpia del destino del
hombre y un sentido elevado del hombre; los que no vean
al hombre como un ser miserable y lo vean digno de que por
él se hagan los mayores esfuerzos; los que tengan fe en los
pueblos; los que tengan fe en la humanidad; los hombres
que crean en que avanza la humanidad por encima de todos
los obstáculos, por encima de todas las diicultades; los que
crean que existe la solidaridad humana; los que crean que
pueda sentirse el ser humano más feliz cuando le hace bien
al hombre, al semejante, que cuando lo maltrata o cuando
lo esquilma; todos los que aquí, como en cualquier parte de
América o del mundo, sean capaces de sentir esas verdades,
¡esos estarán de acuerdo con lo que nuestra Revolución está
haciendo!...”
El 19 de octubre, en acto celebrado con los trabajadores
bancarios, refería la necesidad de la solidaridad internacional
con la Revolución, en especial la del pueblo de Estados
Unidos: “…Hace falta lograr que los pueblos se solidaricen
con nosotros, entre ellos el pueblo norteamericano. Frente
a la campaña de los “Time”, los “Life” y todos esos
órganos que son instrumentos de los grandes monopolios,
que le hacen tanto daño al pueblo norteamericano como
a nosotros, tenemos que buscar la solidaridad del pueblo
norteamericano…”
El 2 de septiembre de 1960, Fidel convocaría al pueblo
en la Plaza de la República, para contestar a las ofensas
de la OEA en su reunión de Costa Rica. Ante un millón de
personas reunidas en magna Asamblea Popular, conocida
26 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
como Primera Declaración de La Habana, enfatizaría en su
artículo séptimo la irrenunciable vocación internacionalista
de la Revolución:
“…La Asamblea General Nacional del Pueblo de Cuba
postula: El deber de los obreros, de los campesinos, de
los estudiantes, de los intelectuales, de los negros, de los
indios, de los jóvenes, de las mujeres, de los ancianos, a
luchar por sus reivindicaciones económicas, políticas y
sociales (APLAUSOS); el deber de las naciones oprimidas
y explotadas a luchar por su liberación; el deber de cada
pueblo a la solidaridad con todos los pueblos oprimidos,
colonizados, explotados o agredidos (APLAUSOS), sea
cual fuere el lugar del mundo en que éstos se encuentren y
la distancia geográica que los separe. ¡Todos los pueblos
del mundo son hermanos!...”
Dos meses después, en el Palacio de los Deportes, analizaba
la importancia de resistir y triunfar, como ejemplo
para otros pueblos del mundo. “…De nada valdría la
solidaridad internacional si nosotros no fuésemos capaces
de presentar, desde el primer segundo, una resistencia tenaz
e invencible…” El 8 de junio de 1961, en la clausura de la
reunión del Comité Ejecutivo de la Unión Internacional de
Estudiantes, efectuada en el Capitolio Nacional, declararía:
“…El mundo ha sido solidario con Cuba y por eso Cuba se
siente cada día más y más solidaria con todos los pueblos del
mundo. Cuba ha tenido la ocasión de experimentar lo que es
la solidaridad de los pueblos, esa palabra está llena de sentido
para los cubanos y por eso nosotros que sabemos lo que es
la solidaridad mundial, nos sentimos obligados con todos
los pueblos que necesitan de nuestra solidaridad y Cuba le
debe a esa solidaridad en gran parte, haber podido resistir los
ataques del imperialismo y Cuba sabe que con esa solidaridad
continuará luchando y continuará resistiendo….”
En esa cita, profetizando lo que sería una de las más bellas
ideas y práctica de la Revolución Cubana, anunciaba la
convicción de convertir la Isla en una gran escuela para
estudiantes del Tercer Mundo:
“…Estudiantes, que esta visita sirva para estrechar más los
lazos de unión entre todos nosotros, que esta visita de ustedes
a Cuba sirva para acercar más a nuestros pueblos, que esta
visita a Cuba sirva para que marche adelante la lucha de
los pueblos por su soberanía, por su independencia, por su
justicia. Que esta visita sea un eslabón más para que en todos
los pueblos del mundo algún día pueda decirse como hoy
René González Barrios
aquí, como hoy aquí podemos decirle nosotros al estudiante
del África, del Asia, de Europa o de América Latina, sea
cual fuere el rincón del mundo de donde venga: estudiante,
esta es tu casa; estudiante, esta es tu tierra; estudiante, este
pueblo es hermano tuyo; estudiante, eres bienvenido….”
La ayuda estratégica que la Unión Soviética brindó a Cuba
tras la ruptura de relaciones de Estados Unidos con la Isla
y la ofensiva imperial para derrocar la Revolución, fue
decisiva para su sobrevivencia. Desde todos los órdenes,
la mano amiga soviética y de los especialistas del campo
socialista, contribuyeron a la consolidación del proyecto
revolucionario. Con armas soviéticas, los cubanos con Fidel
al frente, derrotaron la invasión mercenaria de Playa Girón.
El 1º de octubre de 1962, al referirse a la ayuda soviética y
de los países socialistas, declaraba en la clausura del Primer
Congreso Nacional de la Federación de Mujeres Cubanas,
celebrado en el teatro “Chaplin”:
“…Naturalmente que en esta etapa difícil hemos contado
con un factor trascendental, que es la solidaridad del campo
socialista, muy especialmente la Unión Soviética, lo que
nos ha permitido a nosotros vencer exitosamente las etapas
más duras de nuestra economía, y que nos permitirá en el
curso de pocos años haber desarrollado ya nuestros recursos
hasta un grado tal en que con nuestros propios recursos ya
podamos seguir adelante….”
Es por esa época, que tras los desencuentros motivados por
la Crisis de Octubre,
La identiicación apasionada de Jruschov con la causa de
Cuba, le traería no pocos contratiempos en el seno de su
Partido y Gobierno.
El 21 de enero de 1964, Fidel, visita en Moscú. Para los
cubanos, habían quedado atrás los recuerdos de la Crisis
de Octubre de 1962. En una comparecía ante la Televisión
Central, al referir su opinión sobre Nikita Jruschov y la
amistad del pueblo soviético, airmaría:
“…En primer lugar, hay un tipo de relaciones entre el
Gobierno soviético y nuestro Gobierno que no se parece
a ningún tipo de relaciones de las que existen en el mundo
occidental, llamado occidental, en que las relaciones entre
los países grandes y los países pequeños están normadas de
una manera muy distinta. Por supuesto que los representantes
de un país pequeño reciben siempre mal trato, poca
consideración por parte de los países de más importancia.
Raíces históricas de una cultura solidaria
Sin embargo, cuan diferentes son las relaciones entre
nuestros dos gobiernos, independientemente del tamaño,
de la importancia mundial, los recursos, el poder de esos
dos países.
Nosotros somos representantes de un país pequeño, muy
aislado; sin embargo, hemos recibido aquí un trato especial,
un trato lleno de generosidad, de consideraciones por
parte de la Dirección soviética, del Gobierno soviético.
Y en realidad son unas relaciones muy distintas; nuestras
relaciones son realmente fraternales, realmente socialistas,
realmente comunistas, realmente revolucionarias, realmente
honradas, realmente sinceras, realmente desinteresadas. Y
eso se maniiesta también en nuestro trato. Nuestro trato es
amistoso, fraternal, casi familiar.
Nosotros al compañero Nikita Sergueievich tenemos una
larga serie de cosas que agredecerle a él, de atenciones,
desde antes de conocer siquiera a Nikita. Y en cada uno de
los momentos difíciles, cuando el petróleo, cuando el azúcar,
cuando las amenazas, siempre llegaba un mensaje, siempre
llegaba una comunicación, siempre llegaba una ayuda,
siempre estaba el compañero Jruschov como representante
del Estado soviético ofreciéndonos la solidaridad, la ayuda.
Eso fue creando una gran simpatía, un gran cariño hacia él…”
El año 1966 fue crucial en la definición del proyecto
internacional de la Revolución. Agredida, aislada en el
escenario internacional por las presiones del gobierno
de los Estados Unidos, Cuba se convirtió en la capital
mundial de los movimientos de Liberación Nacional y la
lucha contra el imperialismo y el colonialismo en cualquier
rincón del planeta. La resistencia del pueblo de Viet Nam,
era fuente inspiración revolucionaria. La solidaridad fue la
premisa contagiosa del pueblo cubano. El año, de hecho,
fue nombrado oicialmente “Año de la Solidaridad”. El
15 de enero de 1966 se celebra en La Habana la Primera
Conferencia de Solidaridad de los pueblos de Asia, África
y América Latina (Tricontinental). Un año después, en
agosto de 1967, se celebraría la Primera Conferencia de la
Organización Latinoamericana de Solidaridad (OLAS). Ese
mismo año, moriría el comandante Ernesto “Che” Guevara
en Bolivia. En la velada solemne en su honor en la Plaza
de la Revolución de La Habana, el 18 de octubre, Fidel
sentenciaría: “…¡Ningún hombre como él en estos tiempos
ha llevado a su nivel más alto el espíritu internacionalista
proletario!...”
27
Haciendo del internacionalismo un pilar de nuestra cultura
política y ciudadana, Fidel priorizaría la ayuda a otros
países del mundo no solo por la vía armada, sino también
ante situaciones de desastres como los terremotos de Perú y
Chile. En Iquique, Chile, el 16 de noviembre de 1971 diría
en una concentración popular: “…De manera que por eso
ustedes podrán contar con nuestro país y con nuestro pueblo,
en la medida de sus modestos recursos, en la medida de sus
posibilidades. La palabra hermano aquí tiene un sentido
concreto y verdadero. La palabra solidaridad aquí tiene un
sentido concreto y verdadero...”
En junio de 1975 visita Cuba el Primer Ministro del Reino de
Suecia Olof Palme. En un acto de masas celebrado en honor
del visitante en la Ciudad Escolar 26 de Julio en Santiago de
Cuba, Fidel expresó:
“…El internacionalismo es una de nuestras banderas
más sagradas, y desarrollamos nuestra conciencia
internacionalista en la práctica del internacionalismo
(APLAUSOS). Y sumándonos también modestamente, en
la medida de nuestras fuerzas, a la tarea de colaborar y luchar
también por otros pueblos.
Este espíritu internacionalista es la esencia de nuestros
ideales revolucionarios…”
Ese mismo año comenzaría la Operación Carlota, en la que
el pueblo cubano bajo la conducción de Fidel escribió una
de las más bellas páginas de altruismo y humanismo en la
historia. Miles de cubanos, civiles y militares, ayudaron al
pueblo angolano a consolidar su independencia y construir
una patria digna y soberana. Lo mismo habían hecho antes en
Viet Nam, y harían después en Etiopía, Nicaragua y Granada.
El historiador italiano Piero Gleijeses, en entrevista que le
hicieses el periódico Granma en junio del 2015, declararía
que “…No existe otro ejemplo en la era moderna en el que
un país pequeño y subdesarrollado haya cambiado el curso
de la historia en una región distante. El internacionalismo
de los cubanos es una lección política y moral plenamente
vigente…”
Entre 1989 y 1991 se desmoronó el campo socialista. Cuba
perdió 85% de su comercio exterior. Comenzaba el período
especial. Ni en esas condiciones dejó la Revolución liderada
por Fidel de ser solidaria. La atención médica a las víctimas
del accidente de Chernobil es el más vivo ejemplo.
28 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Los organismos internacionales como la ONU, el CAME o
el Movimiento de Países no alineados, entre otros, han sido
escenarios donde los cubanos han dado batallas solidarias
por los pobres de la tierra. Fidel convirtió el podio de la Sala
de Sesiones de la ONU, en las reuniones de jefes de estado y
gobierno, en tribuna solidaria en defensa de la vida humana
y de las causas nobles.
La Escuela Latinoamericana de Medicina y la Brigada
médica Henry Reeve, se unen a las brigadas de maestros
internacionalistas Ernesto Che Guevara y Augusto César
Sandino, que llevaron el saber a pueblos de África y
América Latina. Con ellas hacia Fidel realidad los sueños
de Céspedes, Martí, Gómez y Maceo.
Pero si una relación especial de solidaridad e
internacionalismo ha tenido la revolución cubana en los
últimos años, de agradecimiento sincero y basado en raíces
históricas, es con el pueblo de Venezuela. El 23 de enero
de 1959, cuando arribaba Fidel a Caracas, en el propio
aeropuerto declaraba:
“…Vengo, en nombre del pueblo que hoy les pide ayuda
y solidaridad, a decirles a los venezolanos que también
pueden contar con nuestra ayuda y nuestra solidaridad
incondicional y de cualquier forma cuando la necesiten…
(…). Me falta solo decirles a mis hermanos de Venezuela
que nunca tendrá Cuba con qué pagarles este gesto de
solidaridad, que nunca tendrá Cuba con qué pagarles este
formidable y grandioso apoyo moral que el pueblo de
René González Barrios
Venezuela le ha dado hoy, y que nunca, nunca tendré con
qué expresarle al pueblo de Venezuela mi reconocimiento
por el aliento que he recibido aquí.
Como si estuviera prediciendo el futuro, el joven y visionario
Comandante añadía:
“…¿Hasta cuándo vamos a permanecer en letargo, fuerzas
indefensas de un Continente a quien el Libertador concibió
como algo más digno y grande? ¿Hasta cuándo vamos a estar
divididos, víctimas de intereses poderosos? La consigna ha
de ser la unidad de las naciones… Venezuela ha de ser el país
líder de la unidad de los pueblos de América, pues Bolívar
es el padre de la unión de los pueblos de América…”
Pudiera airmarse que, en la misma línea de pensamiento de
Carlos Manuel de Céspedes, José Martí, Máximo Gómez y
Antonio Maceo, quienes pensaron en la Revolución Cubana
como faro de libertad continental, antiimperialista y solidaria,
Fidel levantó las banderas e identiicado plenamente con
la sabia de los libertadores, convirtió en esencia vital, la
cultura del internacionalismo revolucionario. Sus relaciones
ejemplares con Chávez, Evo, Correa, Maduro, Ortega,
Cristina, Lula, y muchos otros dirigentes latinoamericanos,
como lo fueron ayer con Allende, Ho Chi Mint, Neto, Cabral,
entre otros muchos hombres dignos, están sustentadas en el
respeto, y el amor a la independencia y la soberanía plena de los
pueblos. Como dijera en una ocasión el Comandante en Jefe
Fidel Castro Ruz, “…quien no sea capaz de luchar por otros,
no será nunca suicientemente capaz de luchar por si mismo.”
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 29-37
Negacionismo e historiografía: indios esclavos del norte novohispano en Cuba y
sus rebeliones en Cuba (fines del siglo XVIII-principios del siglo XIX)
Hernán Maximiliano Venegas Delgado1, Bárbara Oneida Venegas Arbolaez2 e Israel García Moreno3
Escuela de Ciencias Sociales- Universidad Autónoma de Coahuila. (hvenegasdelgado@yahoo.es). 2Sede Universitaria de Trinidad de Cuba. 3Universidad de Camagüey, Cuba.
1
Los fundamento
Si hay algo que la historiografía en general ha tratado
parcialmente, salvo excepciones, es el proceso de esclavización
de los indios en América, en particular en este caso que
estudiamos en la frontera común del imperio español en
América del Norte con las colonias británicas en expansión.
El parámetro temporal se limita a la época de las reformas del
Despotismo Ilustrado hispano tardío, tras la ascensión al trono de
Carlos III y hasta Fernando VII en lo que se reiere a los procesos
independentistas hispanoamericanos de la década de 1820.
Otro problema historiográico que nos ocupa es que tanto
aquel sector de la historiografía que se dedica a estudiar
el norte novohispano como de su correspondiente en el
llamado Southwest norteamericano que realizan “cortes”
un tanto arbitrario sobre un problema común, que es el de
los movimientos de los pueblos nómadas y semi nómadas
indígenas a ambos lados de esa frontera o borderland.
Las líneas de demarcación establecidas por los imperios
coloniales europeos y, posteriormente, por los estados
independientes surgidos tras sus respectivos procesos
independentistas engloban una cuestión y la otra: la de los
espacios regionales habitados por los pueblos indígenas,
cuyos límites aproximados no concuerdan con los
establecidos arbitrariamente por las potencias europeas.
Se trata, en cuanto a los pueblos indígenas, de un concepto
de ocupación del espacio macro regional1, que se agranda
o se achica acorde con las épocas y estaciones del año
Véase al respecto la deinición de región histórica que realiza el autor de este trabajo,
en los apartados “Concepto de región” y “Conceptos regionales asociados” -sobre todo
estos últimos-, en su libro Metodología de la investigación en Historia Regional y Local.
Santo Domingo, República Dominicana,Archivo General de la Nación, 2010, pp. 59 a 67.
1
que permiten o limitan, por razones de la búsqueda de
alimentos de origen vegetal o animal, que sus fronteras se
contraigan o amplíen, utilizamos para ello el concepto de
región holística, entendiendo a ésta como la conceptúa el
investigador ítalo-mexicano Francisco Panico como. “El
espacio cubierto por los desplazamientos de estos grupos
(quizás apresuradamente deinidos como nómadas), [que]
representa una unidad de sentido que ampliaba los límites
del signiicado de hogar…El hogar ya no era un lugar
identiicado con un punto ijo del espacio, sino que se
transformaba en un territorio demarcado por una dotación
de sentido holístico, concebido desde el movimiento y
reiicación de ocupaciones sucesivas pero vistas como una
unidad de posesión” (las itálicas son de HMVD)2.
Este concepto, otro investigador, norteamericano, lo
delimita aún más argumentando, desde su perspectiva,
acerca del pivote que representaba para estos pueblos
en movimiento las grandes cuencas hidrográficas,
“debido a que el agua era tan esencial para la movilidad
y la supervivencia [de esos pueblos nómadas, como por
ejemplo] la cuenca del río Grande [que] interconectó a
esos grupos en forma tal que garantiza analizarla como
una región coherente”3
2
Francisco Panico. “Mazapil: historia agro-minera y nuevos conflictos
ambientales”, en revista Altepetl, Universidad Veracruzana-Instituto de
Investigaciones Histórico-Sociales, Xalapa, Ver., números 5-6, p. 84, en www.
uv.mx/altepetl (bajado de internet el 25 de enero de 2013).
3
Paul T. Conrad. Paul T. Conrad. “Captives Fates: Displaced American Indias in the
Southwest Borderlands, Mexico, and Cuba, 1500-1800” Dissertation for the Degree
of Doctor of Philosophy. The University of Texas at Austin, Agosto de 2011, p. 7.
Hernán Maximiliano Venegas Delgado et al.
30 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Tierras y aguas, explica el grado de confrontación extrema
ocurrido entre los indígenas y las potencias colonizadoras,
cuando sus límites respectivos, aún imprecisos, entran en
confrontación. Así, por ejemplo, en 1729 el brigadier general
español Pedro de Rivera y Villalón, trató de evitar, a través
de una regulación, que los militares que hiciesen prisioneros
de guerra entre esos indígenas, se los repartiesen, con ines
evidentemente non sanctos. Ésta fue una situación que se
repetiría y prevalecería hasta casi cuarenta años después,
como se pudo constatar en 1767, acorde con los resultados
de la expedición militar de inspección encabezadas por el
marqués de Rubí4, y que también en otros sitios de América se
repiten y se repetirán entonces, en este caso con la presencia
cercana de los comerciantes ingleses.5
Los procesos de esclavización de los indios
Existen noticias, de inicios del siglo XVIII, sobre los
indios prisioneros enviados como esclavos hacia las islas
del Caribe hispano, en particular hacia Cuba, debido tanto
a su posición estratégica como a sus riquezas naturales
potenciales (tierras, puertos, agua abundante, etc.).
Precisamente de una acotación marginal en un plano de la
época. En el transcurso del siglo XVIII y en los primeros
años del siglo XIX el fenómeno era un hecho. Uno de
los grupos indígenas sobre los que se tiene noticia en
el norte novohispano, en el llamado Bolsón de Mapimí
-actual noreste mexicano-, nos la proporciona William B.
Grifen, quien reporta “rancherías de cocoyomes, chisos y
coahuileños [que] guerreaban hasta mediados de los años
1720 cuando la mayoría fueron capturados y deportados
de la provincia al centro de la Nueva España o a las islas
del Caribe”6. Todo parece indicar que esta cita de Grifen
se corresponde con las cartas enviadas por el virrey Juan
de Acuña, marqués de Casafuerte, al monarca español, con
fechas 20 de marzo, 24 de mayo y 10 de noviembre de 1723,
4
Referencias tomadas del libro de Andrés Reséndez The Other Slavery. The
Uncovered Story of Indian Enslavement in America. Boston-New York,
Houghton Milin Harcourt, 2016, p. 205, quien a su vez resume el asunto a
partir de otros autores, aparte de asumir sus propias consideraciones.
5
Uno de los tantos ejemplos ha sido puesto de nuevo sobre el tapete de
la discusión historiográica por el historiador Nelson Eduardo Rodríguez
Hernández en su artículo “La amenaza cuna: política de indios del gobernador
Andrés Ariza en el Darién durante su primera década de gobierno en el siglo
XVIII”, en Historia Caribe. Colombia, Universidad de los Andes, vol. XI, no.
28, enero-junio de 2016, pp. 211-239.
6
William B. Grifen. “Aspectos de las relaciones entre indios y europeos en el
norte de México”, en Ysla Campbell (coord.) El contacto de los españoles e
indígenas en el norte de la Nueva España. Ciudad Juárez, México, Universidad
Autónoma de Ciudad Juárez, 1992, pp. 52-53.
aunque no concuerden los nombres de esas naciones, lo que
es comprensible por las indeiniciones entonces en boga
-que aún se lastran hasta nuestros días-. En estas cartas
se le informa al rey del apresamiento de 311 indígenas de
las diversas naciones que debían enviarse hacia Veracruz
como destino inal en el virreinato y, desde este puerto,
se les embarcase en buques de guerra de la Armada de
Barlovento, para ser repartidos en La Habana, Santo
Domingo y Puerto Rico. Las misivas también aseguraban
al monarca que los gobernadores de estas tres colonias en el
Mar Caribe quedaban prevenidos para que se les recibiese y
se les distribuyese en las haciendas de esas islas, con vista
a trabajar en sus labores agrícolas, siempre y cuando se les
instruyese en la doctrina cristiana.
Aunque aherrojados estos indios en parejas, escapaban a
los montes cercanos durante el trayecto Puebla-Veracruz,
después de pasar por la Ciudad de México -donde también
permanecieron algunos como esclavos mayormente
domésticos-, junto con los que se remitirían después,
constituían un grupo compuesto por 92 indios, de diferentes
naciones, de una cifra inicial para el primer grupo comentado
de 311 integrantes. En consecuencia, Felipe V emitía una real
cédula, con fecha 14 de enero de 1725, en la que ordenaba
que el virrey Acuña continuase sus labores hasta conseguir el
total sosiego de la Nueva Vizcaya en este caso, que condujese
a la captura -y extinción en la práctica- de los mencionados
indios rebeldes, en conformidad con lo ordenado antes en
su despacho de 03 de mayo de 17227.
El abogado de la Ciudad de México José Rodríguez
Gallardo, conectado con las altas esferas de poder de esa
capital, creía que era posible remover a toda la nación seri
(del noroccidente novohispano), computada en unas 3
000 personas a principios del siglo XVIII, según cálculos
aportados por el antropólogo e historiador Thomas E.
Sheridan8. El citado Rodríguez Gallardo creía que, hombres
y mujeres de esa etnia, a partir de los ocho años, debían
ser enviados fuera de sus tierras, preferiblemente por vía
marítima, para evitar posibles retornos. Para los menores
Esta información ha sido proporcionada amablemente por el Dr. Gilberto S.
Sánchez Luna al autor de este trabajo, que además incluye la real cédula enviada
al virrey novohispano, titulada “Traslado de los indios cocoyomes, acodames
y chizos de la provincia de Nueva Vizcaya”, con fecha 14 de enero de 1725,
todo en Archivo General de Indias (AGI), 23.7.7.18, Guadalajara, 233, 1. 11,
fos. 195v-198v, todo lo cual comentamos también en nuestro artículo “Ataques
indios y transformación económico-social en el norte novo-hispano: el real de
Minas de Mazapil y sus regiones circundantes (siglo XVIII)”, en Chacmool.
Cuadernos de trabajo Cubano-Mexicano. Mérida-La Habana, Universidad de
Oriente-Casa de la Historia de la Educación de Yucatán, 2015, pp. 118-119.
8
Cifra mencionada por Andrés Reséndez, según cálculos de Sheridan, en la obra
antes citada del primero, p. 204.
7
Negacionismo e historiografía: indios esclavos del norte novohispano en Cuba y sus rebeliones en Cuba (fines del siglo XVIII-principios del siglo XIX)
de ocho años su destino eran las guarniciones hispanas con
la frontera apache, con vistas a utilizarlos como refuerzos
de las tropas coloniales9.
La decisión no se hizo esperar: enviarlos a las “islas de
ultramar”. En cualquier caso, para Andrés Reséndez los seris
eran deportados junto a reos de derecho común y militares
castigados10. Por cierto, que estas deportaciones conjuntas de los
indígenas con los reos y militares castigados se han convertido
en un verdadero problema metodológico e historiográico
en general a la hora de contabilizarlos al menos, dado el
ocultamiento premeditado de la información que al respecto
brindan las fuentes españolas sobre Cuba, para no trasparentar
el carácter de esclavos de dichos indígenas en la Isla11.
Los grupos deportados más numerosos -aunque difícilmente
cuantiicables, y luego esclavizados-, provenientes del norte
novohispano fueron los de los apaches y los chichimecas,
enviados a las posesiones españolas del Golfo- Caribe, pero
en particular a Cuba y, dentro de ésta, a trabajar como esclavos
en las fortiicaciones habaneras, en su reconstrucción y en las
nuevas construcciones de este tipo, a la vez que las mujeres y
niños eran enviados a laboral como esclavos domésticos en las
casonas habaneras e incluso en establecimientos religiosos.
Para los hombres indios esclavizados -junto con esclavos
africanos- queda como testimonio el trabajo esclavizado de
todos ellos en la construcción del imponente castillo de San
Carlos de La Cabaña y en los deAtarés y del Príncipe, además de
en otras obras defensivas menores y en obras navales de la rada
habanera. Estos trabajos en verdad monumentales a nivel de
fortalezas se produjeron tras la retirada británica de La Habana,
ocupada junto a su hinterland inmediato entre 1761 y 176212.
9
Ibídem, Reséndez, pp. 210-211
También citado por Reséndez (ibídem, pp. 210-211), recomendamos analizar
directamente el asunto a través de las conclusiones a las que arriba el historiador
Thomas E. Sheridan en su libro Empire of Sand: The Seri Indians and the
Struggle for Spanish Sonora 1645-1803. Tucson, University of Arizona Press,
1999, pp. 165-168.
Una concreción de esas deportaciones de seris hacia Cuba la realiza el historiador
mexicano José Luis Mirafuentes Galván. “Los seris en 1780: sobre la necesidad
de su deportación a La Habana”, en Históricas no. 20, México, 1986, pp. 23-36.
11
Sobre el asunto consúltese a Hernán M. Venegas y Carlos M. Valdés en su
libro La ruta del horror. Prisioneros indios del noreste novohispano llevados
como esclavos a La Habana, Cuba. Saltillo, México, Gobierno del Estado
de Coahuila de Zaragoza, 2024, pássim (existe una edición previa, de 2011,
efectuada en la Ciudad de México por la editorial Plaza y Valdés).
12
La argumentación y pruebas documentales sobre este proceso de esclavización
de los indios norteños novohispanos en Cuba a ines del siglo XVIII e inicios
del siglo XIX aparece en el libro antes citado de Hernán M. Venegas y Carlos
M. Valdés, en particular en sus capítulos VI al IX. También consúltese en este
libro el proceso del traslado de las colleras, desde el norte virreinal hasta el
centro de México y Veracruz y luego hacia La Habana, como muestras de
esclavización de seres humanos a niveles tan crueles que hacen recordar a sus
similares en cuanto a las condiciones de traslado desde África a América: los
africanos esclavizados en estas tierras.
10
31
Historiografía y semántica
Otro tema que la historiografía sobre Cuba apenas ha
investigado es el de las rebeliones de indios norteños en la
Isla, con muy pocos trabajos sustanciosos, que solo han ido
apareciendo con el siglo XXI prácticamente, en particular el
libro de Armando Abreu Morales13, dedicado a analizar una
rebelión de éstos, conjuntamente con esclavos africanos,
en las montañas del occidente cubano, y el artículo de
Antonio Santamaría García y Sigfrido Vázquez14. También
varios investigadores norteamericanos o vinculados con
instituciones de educación superior e investigativas de ese país
han hecho referencia al tema de las sublevaciones de esclavos
indios norteños novohispanos, aunque en un contexto más
amplio relacionado con los diversos aspectos que tienen que
ver con la esclavización de los indios, varios de éstos bajo la
tesis de The Other Slavery, o sea, la de la esclavitud del indio15.
En cuanto a la historiografía cubana, aparte del tratamiento
del asunto en sus perspectivas trans insulares en el libro
citado La ruta del horror… (2011 y 2014), ahora es que
podemos acercarnos a otras de estas rebeliones en el centro y
centro-este de la Isla y no solo a las montañas de su extremo
occidental en rigor, tras un detenido proceso de investigación
documental en los archivos provinciales (regionales) del
centro y centro-este de la Isla, además del Archivo Nacional,
situado en La Habana.
Uno de documentos es del inaugurado Real Consulado de
Agricultura, Industria y Comercio, establecido en 1795, para
desarrollar la Isla sobre la base de la esclavitud y en particular
la manufactura azucarera esclavista. El documento, fechado
en 2 de noviembre de 1799 por el Alcalde Provincial de
Jaruco, localidad situada en la región habanera, estaba
dirigido al Real Consulado y denunciaba a un grupo de
“apalencados” que combatían:
13
Armando Abreu Morales. Indios feroces de la Vueltabajo. Pinar del Río,
Cuba, Ediciones Loynaz, 2014, 62 págs.
14
Antonio Santamaría García y Sigfrido Vázquez. “Indios foráneos en Cuba a
principios del siglo XIX: historia de un suceso en el contexto de la movilidad
poblacional y la geoestrategia del imperio español”, en Colonial Latin
America Historical Review, no. 1, invierno del 2013, pp. 1-34.
15
Entre los autores contemporáneos más importantes que tratan sobre la
esclavización de los indígenas del norte novohispano en Cuba, dentro de una
perspectiva histórica prolongada en el tiempo, situamos al antes mencionado
Andrés Reséndez, The Other Slavery. The Uncoverend Story of Indian
Enslavement in America. Boston-New York, Houghton Milin Harcourt,
2016; Jason M. Yaremko, Indigenous passages to Cuba, 1515-1900. Florida,
University Press of Florida, 2016; Paul T. Conrad. “Captives Fates: Displaced
American Indians in the Southwest Borderlands, Mexico, and Cuba, 15001800” Dissertation for the Degree of Doctor of Philosophy. The University of
Texas at Austin, Agosto de 2011, entre los principales.
Hernán Maximiliano Venegas Delgado et al.
32 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
“en un peñón en elebacion considerable; de donde han
apedreado la gente [ilegilbe] que los cavezas [los cabecillas
de dicho apalencados] con desverguenzas ponian las Nargas
para que les apuntaran con amenazas y desverguenzas
propias de su Caracter […por lo que…] baxo el [mando de
un grupo de “rancheadores”] dado de 29 hombres, y ocho
perros, […] los Cimarrones con vejucos [ilegible] se apearon
por la parte opuesta y a la mañana aclarando y descubriendo
hallé el rastro logrando la aprehension solamente de dos […]
Confesaron ser 25, y el Capn. [de estos] un forzado [guachi]
nango (Pablo) practico en todos Montes. Dicen asimismo
haber venido 12 de aquellos Negros poco há de la buelta
de arriba [norte del extremo occidental de Cuba, contiguo
a la región habanera] á buscar ropa, y más compañeros,
todos son de estos Yngs. inmediatos á excepcion de uno […
concluyendo que los habitantes del lugar les tenían temor.]”
Dado el caso que la cuadrilla de rancheadores no había
podido capturar al grueso de los esclavos y mucho menos
a su ya famoso cabecilla, el guachinango Pablo, el Capitán
General de la Isla, mediante escrito de 7 de noviembre de
1799 propone ofrecer una recompensa mayor por la captura
de estos apalencados, “señalando uno de alta consideracion
por el Guachinango Pablo, caveza del Palenque”. Tanta
fama tenía este guachinango que se le compara con otro jefe
de palenque, un esclavo negro llamado “Melchor manco”,
“por haber sido siempre [el guachinango] cabeza de motin,
acostumbrado á formar Rancherías de más de treinta
Negros”. Finalmente, otro informe, fechado en La Habana
el 11 de marzo de 1800, airma que ya había sido apresado
el “Guachinango Pablo”, al que se sumaban otros 11 negros
esclavos aprehendidos, según añade inalmente un Acuerdo
de la Junta del Consulado de 12 de marzo de 1800.
Sin embargo, en el mismo expediente consultado, aparece
a continuación otro oficio, firmado por el marqués de
Someruelos, Gobernador y Capitán General de la Isla, y
dirigido al Prior y los Cónsules del Real Consulado, en que
les comunica, con fecha 11 de julio de 1800 acerca de otros
“dos Palenques de más de cinqüenta Negros” en las zonas
habaneras de Jaruco y Perú, encargando a dos de sus más
prominentes hacendados que se les eliminase totalmente16.
El expediente consultado nos brinda numerosas informaciones,
sobre un guachinango, todo un jefe de partida de esclavos
negros sublevados y que está en conexión con sus similares
de las montañas de la Vuelta Arriba, o sea, del noroccidente
cubano. La historiografía sobre Cuba nunca ha esclarecido
es el peso que tuvieron en la historia cubana, a la retirada
británica de La Habana en 1762 y hasta la década de 1820,
con la irrupción del envío de estos indígenas novohispanos
debido al proceso de la independencia mexicana.
No se le ha dado una respuesta totalmente satisfactoria
al término “guachinango”, entendiéndoseles como “las
personas oriundas de Méjico y de todo el territorio que
comprendía Nueva-España”, deinición que enraiza Esteban
Pichardo en su Diccionario provincial casi razonado de
vozes y frases cubanas (1836)17. Otros diccionarios del siglo
XX corroboran en uno u otro sentido esa acepción general
básica, como la Enciclopedia Universal Ilustrada EuropeoAmericana (1925), la Enciclopedia del idioma (1947), de
Alonso Martín, el Diccionario enciclopédico UTEHA.
(1951) y el Diccionario enciclopédico hispanoamericano
(sf). Una acepción para el concepto de guachinango fue
establecida por Antonio Bachiller y Morales en su libro Cuba
primitiva. Origen, lenguas, tradiciones e historia de los
indios de las Antillas Mayores y las Lucayas (1880), deine
el término guachinango de la siguiente manera: “Se llamaba
así a los mexicanos en el departamento occidental [colonial
cubano]; en el central parece que tuvo una signiicación más
bélica, pues se hablaba de haberse armado a los veteranos,
guachinangos y voluntarios en cierta ocasión en Villa clara.
(Véase la Historia de Villa-clara por el señor González)”18,
haciendo alusión a la defensa efectuada en esa villa contra
un posible ataque británico a la misma, proveniente de la ya
ocupada capital colonial cubana de La Habana.
Nuestra investigación en los archivos de las provincias
centrales cubanas vemos como se emplea indistintamente
ese término relacionándolo con las partidas de reos de delitos
comunes, presidiarios militares, esclavos negros e indios
sublevados, sin una total deinición del mismo, excepto
en un documento localizado en el Archivo Provincial de
Camagüey, que deine e identiica inalmente al guachinango
con el indígena esclavizado del norte novohispano que
entonces recorrían, junto a las demás categorías más arriba
mencionadas, las jurisdicciones centrales insulares. Así,
en la sesión capitular de la villa de Puerto Príncipe fechada
el 11 de noviembre de 1801 uno de sus funcionarios se
compromete “à salir a practicar la diligª. de captura del Yndio
Tomado de la edición de 1985 efectuada en La Habana por la Editorial de Ciencias
Sociales, 1985, p. 290.
18
Citado por Fernando Ortiz en su Nuevo Catauro de Cubanismos. La Habana,
Editorial de Ciencias Sociales, 1974.
17
16
Todos estos documentos se encuentran en el Archivo Nacional de Cuba (en
adelante ANC), Fondo Real Consulado-Junta de Fomento, legajo 140, expediente
6890.
Negacionismo e historiografía: indios esclavos del norte novohispano en Cuba y sus rebeliones en Cuba (fines del siglo XVIII-principios del siglo XIX)
o Guachinango” que atacaba a la jurisdicción19, lo que deja
claro la identiicación de ambos conceptos, sin pretender
por supuesto que el segundo de estos términos, es decir,
el de guachinango, se aplicase también, en general a otras
personas, particularmente a otros deportados, provenientes
de la Nueva España.
Esos indígenas del norte novohispano, rebeldes deportados
y esclavizados en Cuba, provenían de dos grupos étnicos.
Se trata de los términos de apache y chichimeco (o “meco”,
según su abreviatura al uso), que han resultado ser las
dos etnias mayoritarias expulsadas hacia Cuba y que los
documentos consultados en el Archivo General de la Nación
en México y en el Archivo General de Indias en España,
fundamentalmente, separan a la vez que los confunden
en sus denominaciones. Existe en el estudio realizado una
identiicación especial del concepto de “indio meco” como
indio salvaje, bárbaro y vengativo cuando se sublevaban, así
como peligrosos en cualquier momento para la estabilidad
colonial cubana, que aparece como un provincialismo
en México, que conceptúa al meco como “indio salvaje”
(Diccionario Salvá, 1846 y Diccionario de la Real Academia
Española de la Lengua, 1869, entre otros)20.
Sus rebeldías en el centro y centro-este
de Cuba. Negacionismo historiográico y
realidades heredadas
Pasemos a analizar las rebeldías de los indios mecos
y apaches, englobados pues como guachinangos o
sencillamente indios, en el centro y centro-este cubano de
los últimos años del siglo XVIII y principios del siglo XIX.
Un primer problema es el de la concepción de que los
indígenas desaparecieron de Cuba inmediatamente después
de la conquista española de la isla, dejando en la práctica
solo unos “remanentes”. Si consideramos los más recientes
estudios realizados por genetistas norteamericanos y
cubanos sobre el asunto, aquella “verdad” perogrullesca se
viene abajo estrepitosamente y, lo que es más grave aún, es
que se ha hecho caso omiso especíico hasta de documentos
de los siglos XVI y XVII que dan fe de la pervivencia del
indígena en Cuba, que en este caso focalizamos la región de
Puerto Príncipe, actual Camagüey.
Archivo Provincial de Camagüey (en adelante APC). Fondo Ayuntamiento, Acta
Capitular de 11 de noviembre de 1801, folio 81 vuelto.
20
En: buscon.rae.es/ntlle/SrultGUIMenuNTlle?cmd=Lema&sec=1.0.0.0.0. y en:
dle.rae.es/?id=jbyum8R, (bajado el 7 de septiembre de 2016).
19
33
Como resultado de la visita del obispo fray Diego de
Sarmiento a Puerto Príncipe y en informe rendido en La
Habana, el 25 de julio de 1544, éste consigna, entre otros
datos, que en la primera villa “Hay 14 vecinos. Hay en la
villa 235 indios encomendados a vecinos […] hay 160
negros e indios de Yucatán esclavos”21, a la que sigue, en
1570, la visita pastoral del obispo Juan del Castillo, quien
consigna también que en Puerto Príncipe hay 25 familias de
españoles y 125 indias, incluyendo también a negros e indios
de Yucatán22 . De igual forma, en 1603, la historiadora cubana
Amparo Fernández Galera airma que en Puerto Príncipe
existe un asiento de indios “Yucates”, probablemente de
mayas yucatecos23.
Tales resultados se avienen perfectamente con los resultados
actuales de estudios genéticos realizados en Estados Unidos
y Cuba que corroboran que, pese a ese negacionismo
historiográfico sobre la presencia en nuestros genes
comunes de aborígenes cubanos o de otras latitudes,
la población indígena dejó una huella destacada entre
nosotros, a pesar de la masiva importación de esclavos
africanos situada entre ines del siglo XVIII y hasta al menos
la medianía del siglo XIX. Un estudio de las genetistas
cubanas Beatriz Merchaca Teruel, con la colaboración de
Evelyn Fuentes Smith y realizado en 2012 en Cuba, nos
demuestra, con “un diseño que abarca a todas las regiones”
cubanas, que 12% de los genes de la población cubana son
de origen nativo americano24, lo que obviamente incluye
el ancestro común de los indígenas llegados previamente
a la isla antes de la conquista española, como de aquellos
llevados forzosamente a ésta, como esclavos, a partir de la
conquista española.
Pasemos a los actos de rebeldías en el centro y centro-este de
Cuba. En 1789, cuando aumenta la intensidad de las colleras
en suelo novohispano y el envío de sus componentes indígenas
a Cuba, el cabildo de Sancti Spíritus, en sesión capitular de 21
de agosto de ese año, al tratar sobre el ahorcamiento efectuado
en La Habana de Francisco Javier López,
21
Citado por Hortensia Pichardo Viñals. “Cuba a mediados del siglo XVI: Visita
pastoral del obispo Sarmiento. Carta del Obispo al Emperador”, en su obra
Documentos para la Historia de Cuba. La Habana, Editorial de Ciencias Sociales,
1971, tomo 1, p. 100.
22
Tomado de Levi Marrero Artiles. Cuba, economía y sociedad. Río Piedras, Puerto
Rico, Edit. San Juan, 1972, p. 25.
23
Amparo Fernández Galera. Cultura y costumbre en Puerto Príncipe. Camagüey,
Editorial Ácana, 2005, p.62.
24
Beatriz Marcheco Teruel. “Identidad genética de la población cubana: mestizaje
y relación entre ancestro genómino, color de la piel y medidas cuantitativas de la
pigmentación de la piel”, en Catauro. Revista Cubana de Antropología. La Habana,
Fundación Fernando Ortiz, año 14, no. 27, 2013, p. 75.
Hernán Maximiliano Venegas Delgado et al.
34 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
“natural de aquí [de Sancti Spíritus], por el homicidio aleve
que perpetró en la persona de José Francisco de Casas
también de este vecindario la madrugada [del 21 de mayo de
1786, quien también había sido] “un salteador […] teniendo
aterrorizado al pueblo por el uso continuo de armas de fuego
con que caminaba en sus inmediaciones acompañado de una
cuadrilla de guachinangos y negros alzados habiendo antes
de todo esto ocurrido el grave delito de robarse una moza
doncella blanca que vivía en el recogimiento de sus abuelos”
(los subrayados y negritas son de hmvd)25.
Este documento pone en evidencia la perspectiva de
“bandoleros”, que es la que ha prevalecido, cuando en
realidad se trata de seres humanos esclavizados luchando
por su libertad, aliados, eso sí, con reos de delito común y
desertores del ejército, para liberarse.
Si tenemos en cuenta de que actuaban en las “inmediaciones
[sic]” de una villa, como la de Sancti Spíritus, que en ese
periodo precisamente aumentaba sus índices poblacionales
y productivos, para pasar de 6 599 habitantes en 1778 a
10 496 en 1792, de los cuales 15.7% eran esclavos para
la primera fecha, y 22.8% para la segunda, lo que indica
el peligro a que se hallaban expuestos los propietarios
de éstos ante las incursiones de las partidas. Las cifras en
cuanto a propiedades también indican cada vez mayores
riesgos para esos propietarios, con una clara tendencia al
aumento de los ingenios azucareros con predominio de la
fuerza de trabajo esclava de origen africana, que en 1778
contaba con 15 ingenios y en 1792 con 44 de estas unidades
productivas, además de con una media sostenida de 190,
entre ambas fechas, del número de propiedades ganaderas
(hatos y corrales) y un aumento, también entre ambas fechas
censales, de 229 a 357 sitios y estancias agropecuarias de
uso múltiple26.
Los actos de rebeldía continúan, según un acta capitular de 18
de septiembre de 1795 del cabildo de Sancti Spíritus, conforme
a un auto del Gobernador de Cuba, Luis de las Casas:
“de algún tiempo a esta parte en los pueblos interiores de
esta Y las permaneciendo tranquilamente y á la vista de
las Reales Justicias muchos desertores de tropa y Marina
reos criminales y demás á que es relativo […para…]
proceder contra todos y cada uno de los sujetos de las clases
expresadas contra sus auxiliadores y protectores, […a lo que
se suman…] vagos y guachinangos presidiarios y desertores
de que hay noticias” (subrayados de hmvd)28.
A ello responde el cabildo espirituano solicitando el no
envío de “una cuerda de ellos por falta de caudales con que
costearlos […] al Ministro de Marina de esta Provincia, [por
la debilidad del cuarto que sirve de Cárcel], por la falta de
tropa que los resguarde y por el efecto de cantidad con que
facilitar el transporte”. Esto -añade- “sucede en todas partes,
y esto depende de la falta de custodia y miranse estos lugares
con desprecio”29.
Esta amarga queja se generaliza a otras regiones, estado
de ánimo que parece haber inluido en el cumplimiento
de una orden fechada en La Habana previamente, el 9 de
junio de ese año de 1795, para que se atendiese el paso por
el interior de la Isla del Alcalde de la Hermandad y el Lic.
Granados, presumiblemente provenientes de La Habana,
quienes se dirigirían primeramente a Trinidad y a Santa
Clara. La orden reitera la impunidad con que actuaban estas
partidas de rebeldes, con la evidente presencia de los indios
(guachinangos) entre los reos de derecho común y desertores
de los cuerpos militares30.
Pocos años después, según acta capitular de 14 de junio de
1800, la población de la villa cabecera municipal, Sancti
Spíritus, poseía un “vecindario [que] pasa de diez y seis mil
almas”27, alrededor de un 40% más del total de la población
de toda la jurisdicción en 1792.
Sobre Santa Clara si se tiene información en 1803 por parte
de su cronista o historiador local decimonónico, Manuel
Dionisio González (1858)31 y otra más sobre la región de
Remedios, situada al norte de Santa Clara, que en similar
fecha reporta su cronista, Facundo Ramos (1832), la
presencia de similar indio, quien utilizaba el arco, las lechas,
y el chuzo o arpón y que era muy ágil en sus maniobras y
25
28
Archivo Histórico Provincial de Sancti Spíritus (en adelante AHPSS). Fondo
Ayuntamiento, Colonia no.2, Actas Capitulares. Leg. 4, exp. 186, fo. 222.
Inventario 1, 1774-1799.
26
“Extracto del Padrón General de Havitantes de la Isla de Cuba correspondiente
a in de Diciembre de 1778”, en Archivo General de Indias (AGI). Indiferente
General, legajo 1, 527, y en “Padrón General de los Habitadores de Cuba
formado en el mes de Diciembre de mil setecientos noventa y dos…”, en
Memorias de la Real Sociedad Económica de La Habana, 32 (1) 1846.
27
AHPSS. Fondo Ayuntamiento. Colonia no. 2. Actas Capitulares, leg. 6, exp.
188, Inventario 1, 1800-1808, fo. 22.
AHPSS. Fondo Ayuntamiento, no. 186, leg. 4, 1774-1799, fos. 357-358.
Ibídem, fo. 358.
30
Ibídem, fo. 359, al que sigue otra acta capitular, de 9 de octubre de 1795
(fos. 361 y 361 v.), que hace referencia a los gastos que se producirían para
sufragar el recorrido de ambos agentes (y sus acompañantes seguramente) y los
problemas de jurisdicción que se suscitan al respecto.
31
Manuel Dionisio González. Memoria histórica de la villa de Santa Clara y su
jurisdicción (4a. ed.), Villa Clara, Imprenta La Ristra, 1942, capítulo XIV, “El
indio bandido. Algunos de sus hechos. Su persecución. Es muerto en Puerto
Príncipe”, pp. 149-157.
29
Negacionismo e historiografía: indios esclavos del norte novohispano en Cuba y sus rebeliones en Cuba (fines del siglo XVIII-principios del siglo XIX)
desplazamientos32. Evidentemente que no se trataba de
solo un indio quien aterrorizaba a estas jurisdicciones ni
las contiguas, como airman estos y otros cronistas que, por
cierto, en el caso de la villa de Santa Clara y en 1803 “se
compone como de 750 casas, dé estas como cien de tejas
y las demás guano y paja como embarro”, catalogándose
de “brillante estado de la población” a seguidas, en
180433, lo que indica una mejoría económica, aunque
no tan prominente relativamente a las de sus vecinas del
centro cubano San Juan de los Remedios, Sancti Spíritus
y Trinidad, pero sí, en todos los casos muy preocupante
para las autoridades coloniales por las incursiones de las
partidas de rebeldes.
Se trataba de partidas mixtas de sublevados que recorrían la
Isla buscando terminar o al menos escapar de la esclavitud
y de las penas impuestas. El problema era mucho más grave
según el gobernador. Las Casas en 1795 y que seguía sin
resolverse aún en los primeros años del siglo XIX, pese al
interés del gobierno central colonial de la Isla en controlar
estas rebeldías, en particular en jurisdicciones como la
espirituana, que en los albores del nuevo siglo, en 1803, se
ufanaban de su “su ganado, cuya cria es la ocupasion de estos
vecinos que lográn extraer en cada áño cerca de veinte mil
cabezas para la Capital y otros pueblos”34.
Era preocupante el caso de la región vecina de Puerto Príncipe
(Camagüey), aún con mayores exportaciones de ganado que
sus vecinas, hacia la capital colonial fundamentalmente. En
Puerto Príncipe aparecen noticias sobre las rebeldías de los
indígenas novohispanos, esclavos de origen africano y sus
aliados eventuales en los reos de derecho común y desertores
militares, en el año de 1792 cuando, en sesión de su cabildo
de 23 de marzo de ese año, se acuerda “la aprehensión. De
los bandoleros que andaban en Quadrillas”, a la vez que
tres meses después, según sesión capitular del 19 de junio
de 1792, se reporta indirectamente la existencia de una
de esas cuadrillas a partir de la aprehensión de uno de sus
integrantes35.
32
Facundo Ramos y Ramos. Cosas de Remedios, Colección revisada y anotadas por
José A. Martínez-Fortún y Foyo y Carlos A. Martínez Fortún y Foyo. Remedios,
Imprenta “Luz”, 1932, pp. 38-39.
33
Sesiones capitulares de la villa de Santa Clara, con fechas respectivamente de 11
de noviembre de 1803 y de 24 de febrero de 1804, en Archivo Histórico Provincial
de Villa Clara (AHPVC). “Ayto. de Sta. Clara. Estracto de los principales acuerdos
capitulares tomados desde el año de 1800 hasta 1903. Trabajo llevado a cabo por
el empleado José A. Gomarra. Año de 1904”, fo. 2.
34
AHPSS. Fondo Ayuntamiento. Colonia 2. Actas Capitulares, leg. 6, exp. 188,
Inventario 1, 1800-1808.
35
Archivo Histórico Provincial de Camagüey (en adelante AHPC). Fondo
Ayuntamiento de Camagüey. Legajo 22, fos. 299-299v. y 328-328v.
35
Se informa en sesión capitular de 7 de noviembre de 1801
la necesidad de aprehender al “guachinango” o indio
que atacaba las haciendas del norte de la jurisdicción
puertoprincipeña, a la vez que se buscaban recursos entre
los vecinos para combatirlo36. Aquí estamos de nuevo
ante similar problema historiográico al detectado en los
historiadores locales de corte positivista -y otros actuales,
por cierto- de las regiones vecinas antes comentadas: el
de que cómo era posible que un solo indígena en rebeldía
aterrorizase a toda una jurisdicción, como en el caso de la de
Puerto Príncipe, que entre 1778 y 1792 había visto crecer su
población en c. 40% (16 514 a 27 418), con un porcentaje de
esclavos de ésta de c. 34% y de c. de 53 ingenios azucareros
promedio para ambas fechas; que disfrutaba de más de 100
grandes propiedades ganaderas, exportadoras de grandes
cantidades de ganado y de centenares de otras propiedades
agropecuarias menores, también entre ambas fechas37.
Así, en sesión del cabildo de Puerto Príncipe efectuada
el día 7 de noviembre de 1801, llama “à evitar los graves
prejuicios qe. según es notorio esta iniriendo al publicó
en las haciendas del Norte de esta jurisdin. un Yndio,
ó Guachinango qe. con arrojo é insolencia, asalta a los
animales, los mata y causa otros estragos de concideracn.
sobre qe. pa. su remedio y aprehencion no han bastado las
comiciones qe. han librado las justis. interesadas en su
captura”, solicitando una contribución de quinientos pesos
entre los vecinos para que se “aprehenda vivo, o muerto al
expresado Yndio ò Guachinango”, ijándose cedulones al
respecto, a lo que se añade que “al que diere aviso segun
[ilegible] facilite la captura si esta se consigue sele dara al
denunciante cien ps. y quatrocientos a la aprehensora”38,
encontrándose a continuación una muy débil respuesta en
una próxima sesión capitular de 11 de noviembre de ese
año 180139.
En sesión capitular del 16 de mayo de 1804, se traza un plan
de captura del indígena sublevado, la propuesta de 1 000
pesos incrementa a 2 000 pesos, destinados para “la captura
del mal hechor [que] há de seguir y perseguirlo aunque. sea
en extrañas jurisdicciones”, añadiéndose, en cuanto a estas
36
Ibídem, Libro 24 (1801-1805). Sesión capitular de 7 de noviembre de 1801,
folios 80-82.
37
Los datos numéricos han sido tomados del “Extracto del Padrón General de
Havitantes de la Isla de Cuba correspondiente a in de Diciembre de 1778”, en
Archivo General de Indias (AGI). Indiferente General, legajo 1, 527, y en “Padrón
General de los Habitadores de Cuba formado en el mes de Diciembre de mil
setecientos noventa y dos…”, en Memorias de la Real Sociedad Económica de
La Habana, 32 (1) 1846.
38
AHPC. Fondo Ayuntamiento. Actas Capitulares, leg. 24, fos. 80-80v.
39
Ibídem, fo. 81 v.
Hernán Maximiliano Venegas Delgado et al.
36 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
jurisdicciones vecinas, la propuesta de un edil “qe. por el trãl
[tribunal] que corresponda se circulen ordenes a los demas
lugares de la Ysla pa. qe. en un mismo dia en todos se proseda
a la práctica de la premeditada aprehencion”40.
En el “Plano de operacion, que forma el Diputado, por el
Cabildo Dn. Juan de Dios Betancourt, instructivo de las
dilijencias que deben practicarse, consequente al auto de
S.A. para la aprehención del mal hechor Yndio, que hace su
asedio desde el camino de Nuebitas hasta Magarabomba”,
de 1804, se denota un vasto territorio de la jurisdicción,
que va desde el norte de ésta hasta su porción occidental,
indicando una amplia zona de operaciones. Por otro lado,
dicho Plano preceptuaba que los “havitantes pudientes” de
ese arco territorial descrito “deben aportar dies quadrillas
compuesta cada una de tres hombres, con dos fusiles, y
correspondientes municiones, un buen caballo de silla,
desharretadera, y cada uno su machete; colocando las
quadrillas principalmente. En las alturas crusadas de
caminos reales, y trasbersales pasajes obligados, en las sejas
de mónte y aguadas. Después de este campo bolante, cuya
obligación es la de explorar todo el continente de la que
llevamos igurada, se duplicaran otras tantas quadrillas, con
el mismo número de hombres de apie, cada una, dos fusiles,
sus respectivos machetes, una lanza, y un buen perro, las
quales estaran de pie irme en los puntos que se observaren
más oportunos, a lograrse la presa aque conspíramos” Se
estimula que los hacendados locales contribuyesen con
sus esclavos a la persecución, compensándoseles con 400
pesos del fondo público por la muerte de cada uno de éstos
y de 600 pesos si fuese uno de los capitanes de cuadrilla, a
entregar en este caso a su mujer e hijos.
También se ordena la comparecencia de “dos soldados
armados por compañía de las que componen el Batallon de
Milicias disiplínadas de esta Villa ò con lo que el Gobierno
estime por conveniente”, a lo que se añade una contribución,
prácticamente forzosa, que debería imponérsele a cada
hacendado para sostener las cuadrillas de a caballo -las
de a pie se costearían por el cabildo-, luego de un cálculo
proporcional de sus caudales, que permitiría, a su vez, el pago
de 9 reales diarios por cuadrilla, más los gastos de pólvora
y otros enseres militares. Las especificaciones siguen
abundando en el plano operacional, previéndose cuestiones
como las de mantener vigilancia en sitios claves, los relevos
de destacamentos necesarios, las erogaciones para mantener
las familias de los milicianos movilizados, todo lo cual es un
seguro indicativo de cuánto temor causaba “el iero Yndio”,
40
Ibídem, fos. 333-334v.
“el Yndio mal hechor”, “el perverso Yndio” -inspirándose
en similares procederes ejecutados por el Real Consulado
en La Habana-41 e, insistimos una vez, por lógica, de los
guerrilleros acompañantes al supuesto indio solitario. En
otra sesión capitular, de 9 de junio de 1804, los funcionarios
“acordaron qe. se execute el reprto de dos mil ps., mil pa. la
fratiicasn. qe. esta ofrecida al aprehensor, y los otros mil
pa. espensar las espediciones qe. se formaren seg. El plano
de los diputados y qe. el prorrateo se execute nol solo entre
los hasendados qe. constan de la lista formada, sino en todas
las demas personas pudientes”42.
De igual forma se precisa en otra sesión capitular, de 28
de junio siguiente, que el prorrateo se distribuiría entre
trescientos cincuenta y tres “sujetos qe. a considerado
pudientes”, distribuyéndoseles por categorías43, a lo que se
une la propuesta de uno de sus hacendados, Juan de Dios
Betancourt, de suplir “de su peculio la cantd. de mil ps.
ofrecidos al aprehensor, à reserva de indennisarse segun
la contribusion qe. debe hacer el Publico”, dando ya por
aprehendido el indio con la colaboración directa de un
esclavo negro al que se le gratiica44.
Otras noticias directas sobre la muerte del indio en
rebeldía no aparecen sino a través de la tradición oral y
la leyenda, cuando se cita que su muerte, ocurrida el 11
de junio de 1803, según el historiador local Juan Torres
Lasqueti, “causó tanto regocijo público, que no obstante
lo intempestivo de la hora de la media noche del mismo día
11 en que fué conducido el cadáver á la Villa, se echaron
á vuelo las campanas de todas las Iglesias” de Puerto
Príncipe. Si a esto sumamos que en vida este “Indio Bravo”
“infundió tanto pavor á los habitantes de ella [de la villa]
que desde el toque de oraciones cerraban las puertas de sus
casas, y él quedaba en completa libertad de pasearse y hacer
lo que se le antojara en la población”45, no nos queda otra
alternativa que reconocer que, en una villa y su jurisdicción
con miles de habitantes, custodiada por fuerzas milicianas
y del gobierno español, no se trataba de solo un indígena
esclavo sublevado, sino de muchos más.
41
Todo en “Plano de operacion, que forma el Diputado, por el Cabildo Dn. Juan de
Díos Betancourt, ínstructivo de las dilijencias que deben practicarse, consequente
al auto de S. A. para la aprehención del mal hechor Yndios, que hase su asedio,
desde el camino rl. de Nuebitas hasta Magarabomba”, en ibídem. Fechado en
Puerto Príncipe el 14 de mayo de 1804, fos. 335-336.
42
Ibídem, en acta capitular, fos. 338 y 338v.
43
Ibídem, fo, 343 v.
44
Ibídem, fos. 350-353.
45
Juan Torres Lasqueti. Colección de datos históricos-geográicos y estadísticos
de Puerto del Príncipe y su jurisdicción. La Habana, Imprenta “El Retiro”, 1888,
pp. 117 y 111-112, respectivamente.
Negacionismo e historiografía: indios esclavos del norte novohispano en Cuba y sus rebeliones en Cuba (fines del siglo XVIII-principios del siglo XIX)
37
Está pendiente de estudio en la porción oriental de la Isla,
cuando un historiador cubano, en este caso del siglo XX,
Gerardo Castellanos, plantea la tesis de que este indio (¿y su
partida?) operó hasta Santiago de Cuba46, en el extremo oriental
de la Isla, lo que da una magnitud total para la colonia en cuanto
a las operaciones de estos rebeldes. Tienen también mucho que
decir la arqueología y la antropología histórica, a lo que abona
un balance efectuado entre 1797 y 1815, redactado por el Real
Consulado de Agricultura, Industria y Comercio, al concluir
sus cuentas de casi veinte años, informa que del total de gastos
efectuados para perseguir a los esclavos negros cimarrones
(fugados), 44.3% del total de los gastos efectuados se destinó
a la persecución de apalencados “de Yndios y quadrillas”47.
obstinaciones peninsulares por negar la existencia de esa
“Otra Esclavitud” o The Other Slavery, o sea, la del indio,
en el largo proceso colonial. Para el caso cubano la fuerte
tradición historiográica positivista de los historiadores
regionales hasta la actualidad, unida al negacionismo de
la metrópoli de reconocer esa esclavización in situ, en la
isla de Cuba, han resultado en un fenómeno común en el
cual ese negacionismo, en este caso historiográico, ha
lastrado de inicio incluso el reconocimiento que, según
encuestas genómicas recientes aproximadamente, el doce
por cierto de la población actual de la isla-archipiélago es
de origen indígena, realidad hasta ahora sistemáticamente
rechazada.
Eso explica por qué el gesto de estos indígenas novohispanos
y de sus acompañantes no se borrará jamás de la leyenda y
de la tradición popular. Varias décadas después, su ejemplo
será tomado como estandarte por los revolucionarios
camagüeyanos de los procesos independentistas de la segunda
mitad del siglo XIX, bautizando a uno de sus principales
grupos conspirativos precisamente con el nombre de “Indio
Bravo”, lo que subraya toda una tradición de lucha por la
libertad en Cuba y por la dignidad plena de los seres humanos.
Consecuentemente las rebeldías, en particular de los indios
nómadas norteños novohispanos, apenas han tenido un
espacio en la antes mencionada historiografía regional de
corte positivista e incluso en la que se realiza aún en nuestros
días. Se trata de sus rebeldías en el centro y centro-este de
Cuba, toda vez que ya resultan un tanto más conocidas
sus rebeliones en el extremo occidental de la isla -y esto,
recientemente-, rebeldías en la que estos indios nómadas
novohispanos integraron extensos grupos integrados además
por esclavos negros y mestizos y reos de derecho común,
mismas que mantuvieron en vilo a las regiones centrales
y del centro-este de la isla y en particular a sus villas y
ciudades capitales, cuyo conjunto llegó a amenazar los
abastecimientos, particularmente ganaderos, de las mismas
a la capital colonial. Se trata, evidentemente, de una gesta
libertaria de proporciones hasta ahora no conocidas y mucho
menos estudiadas.
Conclusiones
Los estudios sobre la esclavización de los indios en América
han adolecido muchas veces de un manto de silencio,
que no ha sido sino una prolongación de las ancestrales
46
Citado por Manuel de la Paz Sánchez, José Fernández Fernández y Nelson López
Novegel en su libro El Bandolerismo en Cuba (1800-1933). Presencia canaria y
protesta rural. Islas Canarias, Centro de Cultura Popular Canaria, 1993, pp. 34-37.
47
Hernán M. Venegas Delgado y Carlos M. Valdés Dávila. Obra citada, p. 81, que
toma y comenta esta información que aparece en “Resumen en que presenta á la
Junta de Gobierno del Real Consulado, su Contaduría de los esclavos cimarrones
que hán sido depositados en dicha oicina desde 21 de Julio de 1797 que se puso
en práctica el actual reglamto. de la materia hta. 31 de Dizre. del 1815, en Archivo
Nacional de Cuba (ANC). Fondo Real Consulado-Junta de Fomento, Legajo
141, no. 6913.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 39-43
Reflexiones sobre la tecnología
Moisés Martínez Gutiérrez
Investigador independiente. campamocha76@gmail.com.
Resumen
La técnica moderna y la razón formal
Hoy, los sistemas técnicos ya no son una simple mediación
en la realización de los proyectos del hombre, sino que son
los sistemas técnicos mismos el objetivo de tales proyectos.
Esto tiene consecuencias en los diferentes ámbitos de la vida
del hombre como son la política, la economía, la educación,
etc., La relaciones que se van tejiendo y la concepción de
la realidad van a cambiar. De ahí la importancia de retomar
el discurso crítico que explica esta situación, objetivo del
presente ensayo.
Permítanme comenzar con el siguiente comentario de
Polanyi (1994), en referencia al primer siglo de la revolución
industrial:
Palabras clave: autonomía, poder, razón.
Introducción
En el ensayo que sigue me centro en la discusión ilosóica y
social que sobre la tecnología moderna se hecho. Un especie
de dialogo con algunas de las principales ideas que siguen
teniendo vigencia en la actualidad. Al respecto, se recuperan
las tesis de Heidegger (el dominio del Ge-stell), Vallenilla
(la voluntad de poder), Feenberg (la dialéctica en la técnica),
Bacca (la omnímoda disponibilidad), Horkheimer (razón
formalizada), entre otros. Esto con la inalidad de hacer
evidente la complejidad del fenómeno, pero también para
darnos cuenta que hay más similitudes que diferencias en el
tratamiento del problema. Si bien cada uno de ellos tiene su
propio enfoque crítico, todos comparten el hecho del peligro
que implica para el hombre y la naturaleza la soberanía e
indeterminación de los sistemas técnicos, con la consecuente
pérdida de la autonomía del sujeto.
En efecto, el capitalismo liberal fue la respuesta inicial del
hombre al reto de la revolución industrial. A in de usar
maquinas complejas y potentes, transformamos la economía
humana en un sistema de mercados autorregulados y
permitimos que esta extraña innovación modelara nuestros
pensamientos y nuestros valores (251).
En efecto, la suerte de la riqueza material y sus fuentes no sólo
quedaron en manos de un mecanismo emancipado del tejido
social (el mercado de precios), además se fue acrecentando
la organización racional de la vida humana. Para Illich
(1985), ésta es la verdadera amenaza que enfrenta el hombre
contemporáneo, “la instrumentación incontrolable”, por
encima del enriquecimiento particular o colectivo.
La dualidad progreso económico-progreso tecnológico se
presenta hoy como la única posibilidad de liberación del
hombre de sus limitaciones naturales y culturales. La utopía
tecnocrática de crear subsistemas sociales de acuerdo a la
lógica medio-in traza el camino de una modernidad artiicial
(des-contextualizada) y sienta las bases para la fetichización
de la razón (su formalización), que se auto-objetiva como
mediación.
Inicialmente, habría que preguntarse sobre las razones que
han llevado a una crítica de la técnica moderna. Así, por
ejemplo, Heiddeger (1997) arguye que, con el nacimiento
40 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
de la técnica moderna, transcurrimos hacia el dominio del
Ge-stell, un modo de advenir lo presencial marcado por una
doble acción provocante: el hombre es conducido a liberar
y controlar las energías de la naturaleza, pero además, el
propio hombre aparece en esta fase como el ser-provocadorprovocado, alienado al llamado que lo conmina. Esta nueva
modalidad de develamiento ya no es, continuando con en
el argumento de Heidegger (1997), un abrirse por sí solo,
en libertad, o por otro como voluntad relexiva. Así, la
naturaleza y el hombre tendrán un nuevo destino.
La explicación que da Heidegger sobre la técnica moderna
se centra en una modalidad hasta entonces inexistente en
la técnica natural y la técnica artesanal, una modalidad
que teniendo como base a la ciencia moderna, es decir, la
posibilidad de calcular y controlar, va a cambiar el rumbo
de la historia de la relación del hombre con la naturaleza y
del hombre mismo. Si es éste el único camino del develar, el
que se impone según Heidegger, sería conveniente ampliar
la crítica preguntándonos cuál es la raíz de la modalidad
destinal provocante. Pero antes de seguir, no debemos
perder de vista que la esencia de la técnica no es algo
invariable, sino que se va deiniendo de acuerdo al tiempo
histórico. Solamente escapa al tiempo histórico la forma
natural útil inmediata1.
En éste sentido, lo que caracteriza históricamente a la
técnica moderna es que por primera vez sigue sus propias
leyes y su dinámica interna está emancipada del exterior,
Vallenilla (1983), en otras palabras, no se somete a criterios
no-técnicos. Es así que el hombre contemporáneo enfrenta
un gran dilema, ya que, airma Vallenilla (1983), el horizonte
de existencia supra-natural que ha creado, de acuerdo a un
plan racional, le ha superado, generándole impotencia.
La pregunta por la técnica moderna, en el discurso teórico
crítico de Vallenilla (1983), halla su respuesta en la voluntad
de poder. Incluso va más allá, ahí donde el hombre reconoce
su inevitable finitud. Finitud que lo moviliza hacia la
consecución de un mayor control de la realidad física y
social. De éste modo, la razón proyecta una forma de la
existencia que al ser cada vez más planeada (programada)
crea la apariencia de la seguridad. En realidad, sostiene
Vallenilla (1983), lo que se va generando es una progresiva
sustitución de las expectativas y anhelos del hombre por un
designio racional.
1
Illich (1985) caracteriza la estructura de la herramienta distinguiendo la actividad
creadora e independiente (la obra), la actividad natural (la labor), la actividad
rítmica industrial (trabajo) y la actividad del operador.
Moisés Martínez Gutiérrez
El hombre cree superar su initud creando un ser a su imagen
y semejanza, derecho original de la divinidad, pero además,
y esto es importante destacar, el ser que crea el hombre es
un ser perfectible: la esperanza artiicial.
Dicho más precisamente: dentro de semejante plan no existe
el Ser en cuanto tal, y los entes se ven despojados de cualquier
esencia […] para quedar convertidos en simples objetos
cuyas virtualidades y características obedecen al designio
del proyecto en que se insertan (Vallenilla, 1983: párr. 13).
La razón que moldea el mundo no es una potencia liberadora
sino un instrumento de la voluntad de poder, algo formado
a la vez formadora.
Pero la ratio technica, en cuánto manifestación de la
subjetividad trascendental, no es una potencia que se
moviliza […] por iniciativa propia […] su actividad y obras se
suscitan por el acicate de un agente que está consubstanciado
al ser mismo del hombre: su voluntad de dominio o poderío.
Es de semejante fuente, como raíz originaria de la ratio
technica, de donde surgen y se desarrollan los proyectos
[…] (Vallenilla, 1983: párr. 12).
En este contexto, las categorías de la ratio technica (sistema,
totalidad, inalidad, perfección, automaticidad) son ahora las
que organizan el proceso del trabajo, a través de las cuales
la voluntad de poder se maniiesta y desarrolla, Vallenilla
(1983). Todo esfuerzo por desplegar y perfeccionar al
sistema técnico racional como totalidad (Vallenilla, 1983),
hace imposible que el trabajo se organice de acuerdo a un in
no-tecnico. En consecuencia, el trabajo adquiere un nuevo
sentido: posibilitar el auto-cumplimiento del sistema. La
cualidad particular, la diversidad, la creatividad humana,
están ausentes en el proceso del trabajo ya tecniicado, pues
impiden la autorregulación del sistema.
Con la racionalización del proceso del trabajo va implícita
la no-complacencia con el sistema natural viviicante. La
experiencia viviicante, que el hombre tiene de su relación
vital con la naturaleza, contradictoriamente se ha vuelto
extraña. Nace, Vellenilla (1993), una utilidad supra-natural.
Siendo así, la experiencia viviicante es simplemente la
excusa para la realización de la experiencia virtual.
Si bien el proyecto de la ratio technica parece apuntar a
un in estrictamente técnico, queda oculto el a priori que
lo fundamentó: el poder y la disponibilidad sin límites.
Por otro lado, pero en el mismo sentido, las categorías
de la ratio technica se vuelven el modo de interpretar la
Reflexiones sobre la tecnología
realidad. Su operación conjunta comienza a extenderse
más allá de sus contornos, alcanzando las actividades y
las relaciones no-técnicas. En otras palabras, para que el
sistema técnico racional sea totalmente perfecto requiere
que las categorías de la ratio technica se universalicen.
Hablamos de su normalización en el sistema educativo, de
salud, transporte, etc.
Con la tecniicación del comportamiento humano, aparece
una nueva igura en el horizonte existencial supra-natural: el
homo-tecnita (Vallenilla, 1983). Esta igura, con-sustancial
al homo economicus, representa una cambio profundo del
hombre, ya que las relaciones que construye llevan el a
priori técnico racional. Un mundo tecniicado es un mundo
donde el hombre pierde su autonomía, vive en el anonimato
y están ausentes los compromisos. Así, en las relaciones
sociales virtuales no hay aproximación sino mediación,
por lo tanto la inter-acción se cosiica. Lo mismo sucede
con el lenguaje que, al limitarse al código técnico, genera
una representación común virtual, no histórica ni cultural,
y cierra la comunicación en lugar de abrirla. En suma, el
mundo tecniicado es un mundo des-politizado.
En su momento, Illich (1985) consideró que la preeminencia
de la técnica estaba generando un tipo de relación que
trastocaba la convivencia, y que en el fondo estaba el
dogma economicista del crecimiento acelerado. Por
lo tanto, había que cambiar de rumbo, distinto al de la
valoración de la función operacional, devolverle al hombre
el derecho de decidir el modo de vida material, pues éste
estaba ordenado por el monopolio radical de la producción
y el consumo. El reto era (y como vemos sigue siendo),
comentaba Illich: “Trasladarse de la productividad a la
convivencialidad […] sustituir un valor técnico por un
valor ético […]” (1985: 29). Por este sendero camina
también Vallenilla. En éste sentido, es la voluntad de amor
y no la voluntad de poder la fuente ontológica existencial.
Pasar de la técnica a eros.
La emergencia de la conciencia genérica, la conciencia
que reconoce al otro como su semejante, llega a ser por
eros (Vallenilla, 1993), lo que mediaría entre los hombres
y determinaría inalmente la estructura técnica. La razón
iluminada por eros, la desvincularía de su modalidad
instrumental, hoy dominante. Voluntad de amor que rompe
con el anonimato del proceso técnico racional y devuelve
al hombre su dignidad. Ello no signiica, (Vallenilla, 1995),
la renuncia a crear libremente, más bien la renuncia a crear
condicionada e ilimitadamente. Esto es lo que la distingue y
41
separa de la voluntad de poder. Desde otro ángulo, poder,
como posibilidad de proyección existencial que tiene el
hombre, es un poder limitado.
Si para Vallenilla (1983) la initud del hombre explicaría la
creciente tecniicación racional de su existencia, para Bacca
(1987), lo que está en su origen es la perenne insatisfacción
que ha caracterizado al hombre desde el renacimiento. La
técnica está al servicio de un hombre insatisfecho, corporal
y espiritualmente, llevándolo por el camino del control
absoluto de su existencia.
Si en un primer momento la naturaleza (physis) determinó
los contenidos de la técnica, pues solamente en aquella era
la causa eiciente, en un segundo momento, lo natural, es
el substrato para ines y inales inventados (Bacca, 1987).
No es la perfección de la naturaleza sino la perfección de lo
inventado la prioridad que va a tener el hombre, algo con que
identiicarse y superar todo determinismo, aunque al inal lo
inventado acabe por determinarlo. Lo más preocupante es
que lo inventado tenga un in y inal destructivo.
La técnica moderna, sobre todo la actual, ha hecho el
descubrimiento […] de que la sustancia, el núcleo de casi
ininitesimales dimensiones del universo es explosivo,
es ininidad, y a tal descubrimiento ha seguido otro, más
desconcertante aún y tremefaciente: tal ininidad, real,
física, comprobable, es «regulable» […] «graduable» por
instrumentos inventados (Bacca, 1987: 42).
La visión cientíica que surge a partir de éste descubrimiento
es una visión de lo infinito que permea en la actitud
técnica: la capacidad de darse otro ser, superior a sí mismo,
indeterminado por la naturaleza o la divinidad.
Ahora, guiados por el «axioma» de San Anselmo: «Dios es
lo máximo que podemos concebir», hemos de aventurarnos
a decir: «lo máximo que el hombre puede concebir […]
es lo de ser planiicador e inventor» […] Las llamadas
esencias y naturaleza, comenzando por la propia, son
material para inventos, para inventarse un nuevo ser […]
(Bacca, 1987: 47).
El hombre cientíico cree encontrar en la realidad física el
motivo y la fuente de su proyección existencial. Lo natural es
des-inalizado de su función vital, como potencia producente,
para re-conducirlo hacia una inalidad opuesta: la muerte.
Pero no todo lo inventado, el nuevo ser del horizonte supranatural (Bacca, 1987), llega a tal extremo. El nuevo ser de
Moisés Martínez Gutiérrez
42 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
la técnica moderna tiene como in calmar temporalmente
esa perenne insatisfacción del hombre. En otros términos,
el nuevo ser es reinventado permanentemente.
instrumentalización secundaria). Esta última es la que da
un cuerpo social diverso a la estructura técnica, un ritmo y
un curso no-técnico, desde un horizonte autónomo.
Se entiende entonces que, así como hay una perenne
insatisfacción, así mismo hay una perenne disponibilidad.
Siendo inherente a la técnica moderna el disponer sin límites
y en grado desproporcionado (Bacca, 1987), se generan
desequilibrios en la naturaleza. Así también entre el sistema
de capacidades y sistema de necesidades del hombre.
Concretando, para Bacca (1987) el in del hombre actual es
la omnímoda disponibilidad: el nuevo ser es lo que puede
ser sin nunca llegar a ser, como una posibilidad temporal, de
acuerdo a un plan racional. ¿No será más bien que el paisaje
artiicial es sólo el consuelo de lo que el hombre es incapaz
de controlar?
Feenber (2002) se reiere a esta doble acción integral como
un proceso dialéctico. De éste modo, hay un cambio del
proceso propiamente técnico al propiamente dialéctico,
de una coniguración a diversas coniguraciones, de una
objetivación a diversas objetivaciones. Así, la crítica que se
hace no es a la orientación técnica, sino al modo en que se
ha hecho (el sesgo técnico racional del capitalismo), pues
en el modo está la proyección del hombre en el mundo.
La tendencia a la racionalización de la vida pública y
privada, y a identiicarla con una vida prospera y feliz,
ha llevado a Feenberg (2002) a pensar que la sociedad
actual pareciera que se va adaptando a los ritmos del
progreso técnico (el cual sigue un patrón único), cayendo
peligrosamente en un determinismo. Ese ritmo lleva a una
tecno-lógica en la que el hombre se ve envuelto, como
esperando el siguiente momento del desarrollo tecnológico
(Feenberg, 2002).
A la luz de la crítica de Marcuse sobre los sistemas
racionales, Feenberg (2002) se cuestiona si la ciencia podría
transformarse a sí misma, dentro de su campo, considerando
que parte de una racionalidad falsa, y va más allá, a un nivel
en el que el poder está enraizado: el de la construcción del
conocimiento o epistemológico. Con ello deja entrever
la complejidad que adquiere la crítica de la racionalidad
cientíico-técnica y la importancia de volver a los criterios
no-técnicos.
Teniendo en cuenta el sesgo técnico racional en que se
apoya el sistema capitalista (un pragmatismo que valoriza
la función y la mera utilidad), distingue dos tipos de
instrumentalización: la instrumentalización primaria
y la instrumentalización secundaria (Feenberg, 2002),
los cuales van a ser centrales en su crítica a la técnica
moderna. Feenberg (2002) avanza en el tema airmando
que la orientación y realización propiamente técnica
(la instrumentalización primaria) adquiere sentido y
contextualidad (ausente en los sistemas racionales)
por otra acción no-técnica que trasciende a aquella (la
Y es que tanto la modalidad de la técnica moderna como
la de la razón formal se han vuelto más sutiles. El giro
histórico de la razón que explicaba Horkheimer (1969) a
mediados del siglo XX, en torno a la cultura industrial, hoy,
en el siglo XXI, ha dado un nuevo giro. Horkheimer había
caracterizado esa etapa de la razón por su orientación hacia
la organización y determinación de los medios de acuerdo a
un in determinado. Hecho hasta entonces sin precedentes.
Sostenía lo siguiente:
cuando se concibió la idea de razón, ésta había de cumplir
mucho más que una mera regulación de la relación entre
medios y ines, se la consideraba como el instrumento
destinado a comprender los ines, a determinarlos […]
luchaba contra la razón subjetiva, formalista (Horkheimer,
1969: 22).
El vacío y relativismo en que estaba sumergida la razón
tenía una explicación: la normalización de las categorías
del proceso del trabajo capitalista industrial. Hoy, continúa
esa situación, la razón sigue operando como una potencia
instrumental, pero con una gran diferencia, esa potencia
tiende a separarse del hombre: ella es independiente
y literalmente virtual. Ello en correspondencia con el
desarrollo de los sistemas técnicos racionales autoregulables.
Conclusión
Se ha creído, o mejor dicho, nos han hecho creer que el
modelo existencial proyectado por la razón instrumental
es el modelo ideal para el hombre, que logra trascender
la diversidad cultural y hace in-necesario el libre
Reflexiones sobre la tecnología
pensamiento, ambos intolerables para el sistema técnico
racional. Frente a éste dogmatismo de la técnica,
insoportable para el hombre, el discurso crítico debe ser
retomado, devolviéndole al sujeto su papel en la historia,
lo cual supone pasar de la autonomía de la técnica a la
autonomía del hombre.
A través del ensayo hemos tratado de dar algunas pistas que
puedan orientar la relexión sobre la técnica moderna, la
cual toca distintos aspectos de nuestras vidas. El tema no es
menor, ya que la tendencia a la híper-instrumentalización y
sus consecuencias deben ser valoradas.
43
Literatura citada
Bacca, J. (1987). Elogio de la técnica. Barcelona: Anthropos.
Feenberg, A. (2002). Transforming technology. A critical theory revisited.
New York: Oxford University Press.
Heidegger, M. (1997). Filosofía, ciencia y técnica. Santiago: Editorial
Universitaria.
Horkheimer, M. (1969). Crítica de la razón instrumental. Buenos Aires: Sur.
Illich, I. (1985). La convivencialidad. México: Joaquín Mortiz/Planeta.
Polanyi, K. (1994). Nuestra obsoleta mentalidad de mercado. Cuadernos
de Economía, 14(20), 249-266.
Vallenilla, M. (1993). El sueño del futuro. Caracas: Equinoccio.
Vallenilla, M. (1983). Ratio Technica. Caracas: Monte Ávila.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 45-51
Educación y capitalismo del saber
Renata Báez Romero1 y Arturo Vilchis Cedillo2
1
Maestría en Ciencias Sociología Rural-Universidad Autónoma Chapingo. 2Integrante de la editorial América Nuestra-Rumi Maki.
Sólo el hombre pobre en ideas, después de haber concebido una con trabajo,
la oculta cuidadosamente para ponerle más tarde la estampilla de su nombre.
El hombre de poderosa inteligencia, fecundo en ideas, las siembra a manos llenas;
sufre si no puede compartirlas, lanzarlas a los cuatro vientos.
Kropotkin.
Resumen
En este texto compartimos una reflexión acerca de la
transformación de la educación en México, de una educación
de función social a un sistema gerencial-empresarial que
impregna las formas del conocimiento, estableciendo
nuevas formas de relación en la enseñanza, la investigación,
y la producción escritural, que ya no tienen que ver con la
difusión del conocimiento, sino de un relación abiertamente
del capitalismo del saber, es decir la pérdida cada vez
más profunda de la educación como bien común, ético y
social, que se concibe hoy en día como una producción
por la producción, una actividad amoral, en cierto sentido
e individualista, de la cual no están exentos, el docente, el
estudiante y el investigador.
Palabras clave: educación, producción, empresa.
Introducción
En las últimas dos décadas el proceso de coniguración de
una educación empresarial-gerencial en las universidades
públicas y en la educación superior en México, se ha
acelerado de forma vertiginosa, la enseñanza, los programas,
la investigación y el conocimiento se están moviendo bajo
un enfoque de ejes de producción del saber, que maniiesta
la pérdida de un libre ejercicio del pensar, del enseñar y
conocer, como fundamentos de la educación, debido a
la dinámica de las políticas públicas neoliberal que en
diversos mecanismos empiezan a saturar la realización
del quehacer universitario. Las formas de escribir, publicar
e investigar, así como las prácticas de enseñanza, cada día
van perdiendo su carácter de orientación, la pérdida de un
horizonte común, de la enseñanza para y en todos, ya que
se está girando hacia una práctica egoísta, de competición
y sobreexplotación.
Desde diversas manifestaciones en la educación superior
se habla de una educación integral, misma que en su
concepción y plena práctica no comprende la relación
de apoyo y trabajo conjunto, por lo contrario, esta
nueva acepción de educación integral emerge como un
proceso de instrucción y aprendizaje que incentiva el
individualismo y la competencia desleal entre los seres
humanos. Lejos queda la idea de que la educación es
desde y en la socialización, de integración, pero no de
alineación entre el docente/investigador, el estudiante
y los conocimientos. Frente a una ética individualista
por la competencia y la pretensión individual de la nueva
educación de “competencias” hay que plantear una ética
que asuma una dialéctica, que signiique escuchar, debatir,
discutir los saberes y conocimientos, los razonamientos
pero no en un acto mecánico y de apresuramiento, sino de
relexión y análisis, con la plena conciencia de sembrar
en el otro el conocimiento y no sólo con el simple interés
individual de producir.
46 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
La educación superior como práctica
empresarial de competencia
El acto de educar y aprender adquiere una carga de sentido
ideológico, social, político y epistémico, su desarrollo y
argumentación supone una cierta situación y circunstancia
histórica, en la cual opera como espacio de constitución y
como referente discursivo; como obra del ser humano es
una articulación de lo objetivo y lo subjetivo, en su unidad y
construcción teórico conceptual y en su realización práctica.
En las últimas décadas en el ámbito educativo a nivel
superior y posgrado[y quizás un poco atrás, al nivel medio
superior] nos encontramos ya con el uso indebido de
conceptos económico empresariales, uso e incorporación
que desgraciadamente se vuelve más común y que se
asumen sin reflexión o cuestionamiento alguno, como
eiciencia, productividad, etc. términos que se fundamentan
en el proceso llamado de modernización unívoca de la
educación, que tiene su bagaje conceptual y practicidad en
los ámbitos empresariales y gerenciales que cada día con
mayor intensidad circundan el ámbito pedagógico de las
universidades públicas.
El uso indebido de conceptos no sólo no tienen una
fundamentación cognoscitiva y mucho menos epistémica,
sino que es la pretensión de asumirse como valores educativos
de un proceso oicial de una “modernización”; y que en el
fondo obedece a consideraciones políticas, ideológicas,
económicas y sociales de amoldar las sociedades a
orientaciones y vertientes del liberalismo económico,
donde el capitalismo, la desigualdad, la injusticia social y
la exclusión siguen siendo los fundamentos ideológicos.
Desde este panorama, la educación a nivel superior a través
de los programas y planes educativos se ha ido moldeando
bajo los estatutos de las organizaciones mundiales del
ámbito económico, resultado de la reconfiguración de
las tácticas del capitalismo, de su imposición de grupos
hegemónicos que a nivel interno (en el país) y externo (a
nivel mundial) representan un grupo económico que impone
su ideología y que niega perspectivas a la demás población.
Sin embargo hay que señalar que la educación, la enseñanza
y el aprendizaje en las universidades públicas deben ser una
construcción social, cultural e histórica que está muy lejos de
parecerse a lo que la normatividad institucional asume por
imposición de las políticas públicas educativas gerenciales
del BM, el FMI y la OCDE indican.
Renata Báez Romero y Arturo Vilchis Cedillo
Bajo la dinámica de estos grupos quienes giraron su perspectiva
hacia la educación, se vienen planteando y asumiendo en la
práctica modelos que desde la investigación, la educación y
el conocimiento aparentan ser neutrales, es decir que están al
margen de cualquier orientación o compromiso, de cualquier
ideología, porque al reconigurarse el capitalismo y adquirir
diversas modalidades: neoliberalismo, globalización, etc.,
también reconiguró su perspectiva, y una de ellas, fue la
manifestación de ciertas prácticas pedagógicas, ya que los
planes y programas se fueron adecuando a los nuevos ejes
del conocimiento, la educación y el aprendizaje. Es así que
se postuló que si no se manifestaba una reformade los planes,
programas a nivel superior, entonces la continuidad de los
mismos sin asimilarse a un proceso reformatorio, manifestaría
que en cierto momento se volverían “inadecuados”,
“anticuados” al proceso de modernización- globalización
que el país y el mundo estaba llevando a cabo.
A partir de la injerencia de las organizaciones mundiales
y de estos grupos hegemónicos, comienza un proceso de
desmantelamiento de la educación a nivel internacional
y nacional como señala Díaz Barriga (2000) con el plan:
mejoramiento de los sistemas educativos, que en la práctica
han signiicado, la modiicación de currículos, programas con
las necesidades y demandas del mercado, de los “clientes”.
Modiicar no en sentido del conocimiento y auxilio del ser
humano, sino en correspondencia a una perspectiva y una
ética mercantil, neoliberal, donde la educación se vuelve una
inversión cuantitativa: de una educación que busca formar
vendedores, consumidores, clientes, donde ya no se habla
de seres humanos, sino de “capital humano e intelectual” en
sentido de objetos de consumo en el mercado.
Bajo la autoridad inobjetable de la Organización para
la Cooperación y Desarrollos Económicos (OCDE), las
instancias educativas en todos los niveles, en nuestro caso, el
de la educación a nivel medio y superior, comienzan a girar
hacia el aparente y llamado proceso de “mejoramiento”, y ello
signiica que el aprendizaje, la impartición del conocimiento,
de la ciencia y la tecnología deben ser evaluados. Inicia así
un proceso de desarrollo de mecanismos de evaluación,
bajo tres instrumentos de “medición”: Manual Frascati,
Manual Canberra y Manual de Oslo, se dictan (en el sentido
de dictadura), como recetas de cocina en el país y otras
naciones de Nuestra América, la implementación al pie
de la letra, para no sufrir las consecuencias innegables de
las organizaciones mundiales directrices de la educación,
la economía y la política, y por ende no estar fuera de los
parámetros de la economía del “conocimiento”.
Educación y capitalismo del saber
Desde este ámbito, en los ratos de ocio o como señala esta
nueva organización del conocimiento, desde su fundamento
empresarial: el tiempo improductivo e insignificante;
se puede revisar, cotejar y analizar, las directrices del
CONACYT y los cauces de investigación en nuestro país,
con los elementos del Manual de Frascati ([1963] 2003),1
ociosidad permisible gracias a la transparencia pública, otra
de las modalidades del proceso reformador, o sí se quiere
mal concebido como “modernización”, que agrupa a las
políticas públicas bajo el disfraz del ejercicio democrático.
Hablar entonces de una economía del conocimiento es
remitirnos al bagaje conceptual y del conocimiento que
involucra el giro de la educación hacia una subordinación
de los quehaceres de la economía mundial, del mercado
y de sus principios de producción a ultranza y consumo.
En la búsqueda por una sistematización de la educación
empresarial o gerencial y sin redundantes buscando un
sustento “epistemológico”, la educación superior y a nivel
posgrado se encamina desde hace unos años hacia una
economía del conocimiento (Cacho Carranza, 2016) . Esta
nueva deinición de economía del conocimiento, obviamente
viene de las directrices de las políticas educativas en
particular del BM quien en 2001,(Aprendizaje permanente
en la economía global del conocimiento, 2003)deinía, que
la nueva economía del conocimiento se crea, transmite
adquiere y utiliza con mayor efectividad por los individuos,
las organizaciones y las comunidades para promover el
desarrollo económico y social, por supuesto la deinición
no implica que los principales benefactores de este proceso
de reforma educativa son los mismos grupos amparados
en el sistema neoliberal, ya que el papel predominante de
esta economía del conocimiento al generar y explotar la
enseñanza, la investigación y el conocimiento es la creación
de riqueza, en el supuesto del valor moral del egoísmoindividualismo de acumulación distanciado del bienestar
equitativo, libre y común, para y de todos.
Aparece desde una ética empresarial-neoliberal la
“normatividad” ética de la competencia, se educa no
por la solidaridad, sino por el individualismo (que no
individualidad); se genera una educación mecánica,
empresaria, despersonalizada e individualizada, indiferente
La imposición y el “convencimiento”de las líneas a seguir por parte de la OCDE
y el Manual de Frascati para las naciones latinoamericanas, respecto al cauce que
debía llevar la creación y desarrollo de la educación, la ciencia y la tecnología, llevó
a la creación de seminarios y talleres. Al respecto para ver la forma maquiavélica
de este proceso veáse Adam Holbrook (1998) principal promotor de Seminarios
y talleres que proyectaron la adaptación y creación de diversos manuales y cómo
algunos dieron nacimiento al Manual de Bogotá (2001).
1
47
a un proceso de educación ética, humanística, de función
social comunitaria, y así, se procede al lucro en vez de lo
humano, donde el educado y el educador, ambos hacen lo
que sea desde una forma soez de lucro, por estar en la esfera
de la eiciencia terminal.
Las instituciones educativas públicas a nivel superior
-y posgrado- se organizan entonces, desde una visión
empresarial del ser humano, del mundo, donde la gestión y
administración funciona de la misma manera y la axiología
que orientan y desarrollan son iguales: la producción,
la eficiencia, la evaluación, el control, la cantidad, la
predicción y los resultados “se adecúan desde los parámetros
empresariales de calidad y producción.” (Díaz, 2000)
Aspectos que no contribuyen a comprender y cuestionar
el ser y deber ser de la educación y de las instituciones
educativas. Se transforman los valores axiológicos y las
prácticas de enseñanza y aprendizaje, se imponen valores
empresariales que se constituyen en una verticalidad
estructural del sistema y de forma paralela, también se
transforma la naturaleza del conocimiento, de las habilidades
y talento de los individuos: estudiantes, docentes e
investigadores, ya que se requiere de un nuevo empleado, un
nuevo educando y un nuevo educador, en síntesis, una nueva
gama de explotados; así las instituciones educativas de nivel
superior someten la conciencia de sus participantes, por
medio de la imposición de valores sociales, de mecanismos
de producción, efectividad y competencia, con la práctica
más frecuente del silencio, de la pérdida de la crítica, de “el
trabajo por el cual los hombres intentan pensar lo que hacen y
saber lo que piensan...” (Castoriadis, 1983: 11); se sucumbe
a la automatización, a la mecanicidad de la producción y
dejan de ser sujetos humanos, pasan a ser objetos, cifras, y
como ellas, son sustituibles. La inalidad en este proceso de
transferencia es que la educación y las instituciones dejen
de ser espacios del pensamiento crítico, de la creación y
discusión, de posibilitar un ser humano crítico.
La vertiente hacia donde debe orientarse la educación, el
conocimiento, la ciencia y la tecnología, deja de ser un
problema de las universidades y se remite a las Instancias
internacionales quienes rubrican una clasificación de
saberes, de conocimientos productivos, se asume jerarquías
en las ciencias y en la educación y se da importancia a ciertas
disciplinas del conocimiento que están circunscritas con
la tecnología, con lo instrumental operativo y funcional,
mientras se excluye y discrimina disciplinas y saberes
circunscritos a la relexión crítica, al debate y la discusión. La
marginación de disciplinas del conocimiento y la enseñanza
de las mismas, que tienen que ver con el cultivo y la siembra
48 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
en el ser humano, de alimentación de la creatividad,
del análisis y la crítica, son excluidas, por la misma
complejidad que encierra un instrumento de evaluación y
por supuesto porque desde una estructura de producción
por la producción, estas disciplinas no son asimilables a
los ejes de la productividad.
Se reiere a un capitalismo del saber, como una organización
en la educación y en las instituciones educativas de nivel
[medio y] superior, donde la producción rige por encima
del saber y de la reciprocidad del saber, donde la raíz
fundante es el producir por producir, y que llevan a la
educación y al conocimiento a convertirse más que en un
servicio público en un producto de consumo mercantil, con
todas sus características de ofrecerse al escrutinio de los
compradores; la educación deja de ser así un servicio y se
transforma en un bien de consumo, donde el mercado oferta
y el cliente exige. La producción extrema es el fundamento,
la sobreexplotación del conocimiento, de la fuerza mental se
une a la sobreexplotación de la mano de obra, donde no se
admite el espacio para relexionar sobre lo que se aprende y
lo que se enseña y con ello sin lugar para la crítica dialéctica,
el debate y la oposición.
Un capitalismo del saber y de la educación que impulsa
la enseñanza lineal y jerárquica, representativa de una
organización rígida, clasista y excluyente. Un capitalismo
del saber que intenta regir todo desde la mercantilización
y comercialización del conocimiento, donde el saber y el
conocimiento se vuelven fuerza de trabajo, se venden como
mercancía y rige la ley de la obtención del máximo beneicio
posible, generando desde la ética una relación entre los
humanos de reserva y desconianza, de una moral egoísta e
individualista con ines de lucro.
Y nos preguntamos acerca del capitalismo del saber ¿dónde
quedó la crítica, la posición y la ética del bien común (que
incluye no sólo al ser humano, sino a los demás seres con
los que el ser humano sobrevive y actúa en un contexto
especíico, y que se puede sintetizar como la inclusión de
la naturaleza)? Ante este horizonte queda en duda hasta
dónde continúan vigentes, los tres postulados principales
del quehacer y responsabilidad social de las instituciones
universitarias: el rigor cientíico en la producción de
conocimientos y en el aprendizaje; la ética en la academia
y la crítica social frente al avance vertiginoso de la ciencia
y la tecnología, y la vigencia de su condición de bien social
y público.
Renata Báez Romero y Arturo Vilchis Cedillo
Producir por producir
El conocimiento a través de la educación es algo intangible
como producto cuantiicado, que no puede ser localizado
sino en los métodos, en los lenguajes, habilidades, formas
de aprender y en la transferencia de la enseñanza. Debe
formar hombres capaces de pensamiento y de acción
inteligente, decididos y realizadores, pero no impulsivos o
intuitivos, evitando el peligro de que con la idea de formar
hombres prácticos se formen individuos de horizontes
limitados. Sin embargo la constitución de la educación desde
ámbitos empresariales, ha modiicado tangencialmente esta
percepción, lejos queda la concepción de que en América
tenemos un modo especíico de producción, y “es de bien
escribir” (Gaos: 1990, 58), ahora traspuesto por el producir
por producir.
En los últimos años, debido a las presiones de los planes,
programas y ajustes de las instancias del control de la
investigación y del desarrollo como docente, investigador
e incluyendo a los estudiantes, se han desarrollado prácticas
de producción académica, de un aceleramiento por producirescribir e investigar que ante la creciente facilidad de las
redes, de las comunicaciones, provoca que la profundidad
de lo que se escribe-publica e investiga se vuelva efímero,
un instante en el saber. Así encontramos que las dimensiones
teóricas y los métodos, se reducen a uno sólo, aparece así
como prácticas de investigación, de publicación y por qué
no, también de enseñanza, el “método del copiar y pegar”,
el “copyleft” se va postulando como la única herramienta
de conocimiento, además se conigura como el árbol del
saber a la internet y las redes sociales, porque la “empresa
educativa”, del capitalismo del saber, exige no quedarse
fuera del entorno de la globalización-modernización. Es el
contexto que algunos llaman de la aparición de las teorías y la
“cultura del instante” (Virno 2003), de la “moda académica”,
de esa “incómoda posmodernidad” (Magallón, 2002), que
diluye el discurso de una educación y del conocimiento con
profundo sentido político e ideológico.
La economía del conocimiento regidora de la educación
superior y de posgrado se constituye en la fuente más
importante y se maniiestan diversas prácticas del producir
por producir, escribir y publicar para acumular “constancias”
e incrementar el ego, el individualismo académico, echando
de menos la educación y monopolizando conocimientos y
saberes, porque el capitalismo del saber, es una máquina que
Educación y capitalismo del saber
gobierna sobre los estudiantes, profesores e investigadores,
miembros, personas y grupos que se circunscriben al ámbito
de la academia.
Aparece una ética neoliberal fundada en una asimilación
proveniente del darwinismo social, de “sobrevivencia del
más fuerte sobre el débil”, que se asimila a la circunstancia
académica, universitaria y del mercado del saber:
“sobrevive el que más pública”, en revistas arbitradas y el
que incursiona en más eventos académicos, principalmente
en los que tienen mayor puntuación para las instancias de
evaluación, sea SNI o las propias Instituciones de Educación
Superior quienes proclives a mantener el sistema proveen
de mayores estímulos a la productividad de incentivos
institucionales a aquellos congéneres que incursionen en
estos ámbitos.
Una ética neoliberal, un capitalismo del saber, que no es una
problemática reciente, sino que era un proceso ya percibido
desde los años 50 del siglo XX, por el ilósofo José Gaos,
para quien el producir por el producir era un fenómeno
del distanciamiento de la academia y de la educación
universitaria del acontecer político y social del docente y
del estudiante, de la introducción del capitalismo desde una
forma muy concreta en la educación:
Henos aquí, pues, atrafagándonos por leer, por traducir,
por escribir, por publicar -a como dé lugar, según la
expresión mexicana; aunque no hagamos más que acumular
trivialidades o banalidades, muchas veces ni siquiera
disimuladas con simulación de originalidad o profundidad;
o glosas, repeticiones, plagios igualmente descarados en
muchos casos, y en todo caso perfectamente superluos–,
acumulación abrumadora en la balumba de la cultura. No
basta que seamos órganos de transmisión iel y escrupulosa,
acuciosa y entusiasta, de la cultura de las generaciones
pasadas a las generaciones incipientes; tenemos que ser
órganos de reproducción sin creación, y de amontonamiento
aplastante, de pronta basura cultural (Gaos, 2009: 346).
La productividad vacua y frívola sustituye un valor ético
por un valor técnico, de una “comunidad epistémica” que
pierde la recuperación de las prácticas y la naturaleza del
trabajo académico, con sentido humanista y capacidad
crítica, del trabajo grupal-colectivo por un trabajo
académico individual donde cada uno de sus productos:
libros, artículos, etc., son simples medios para conseguir un
ingreso creciente sin que importe demasiado su contenido.
Se pierde la autonomía creadora, ya que la producción se
cubre de las expectativas del momento, de las inluencias
49
preponderantes: las presiones por parte de las evaluaciones
y sostenimientos de la “economía del conocimiento”.
Queda magro el sentido de vocación por enseñar y seguir
aprendiendo y se enquista la idea de enseñar, investigar
y publicar, únicamente como el elemento central para
aumentar la productividad, la competitividad, el consumo,
así como la manera en que podría lograrse un “liderazgo y
posicionamiento nacional e internacional” del docente, del
investigador; es decir, en términos del capitalismo del saber:
los makers del conocimiento.
La producción va perdiendo, la argumentación formal,
que es una operación cognitiva (si bien proto-cientíica)
y la implicación ideológica, que está relacionada con la
postura ética del docente su toma de posición en el mundo
presente de la praxis social. Y esta postura ética no se pierde
simplemente converge en un egoísmo- individualismo. Así
aparece el plagio en diversas formas:2 sin intentar hacer una
taxonomía del mismo, mencionaremos los más frecuentes:
el plagio directo o común de todos bien conocido; el plagio
del discurso de autoridad, es decir, del “pago de ingreso” al
mundo de la investigación y la producción de publicaciones,
de los estudiantes, quienes deben aceptar la autoría de un
docente y investigador en su producción aunque éste no haya
realizado ninguna labor; el plagio de la nombrada maquila
intelectual: que como su nombre lo indica es la realización de
la investigación generalmente por parte de los estudiantes y la
adjudicación del profesor o docente de la misma. Sin olvidar, la
autoría o producción múltiple de un documento o investigación,
donde aparece la “gran productividad de los llamados autores
fantasmas.” (Sánchez, 2016: 2). Y que por cierto, al realizar
una producción múltiple o colectiva, en la actualidad muchos
no lo hacen por un acto de comunidad, de compartir ideas y
conocimiento, sino porque en las nuevas evaluaciones de las
Instituciones rectoras de la investigación y la educación, tiene
mayor mérito de eiciencia, o de puntuación, una investigación
colectiva que una individual (Sánchez, 2016).
Volveral sendero de una educación compartida
El neoliberalismo apela al olvido, a perder la memoria y
se niega a escuchar. El paso relevante por una institución
de educación media superior y superior implica “[…] una
2
Además del plagio existen otras modalidades que el capitalismo del saber ha
planteado en las Instituciones de Educación Superior: un muestra es la certiicación,
sea a programas y/o a productos orgánicos, que más que ser una valoración de los
mismos, es una economía del mercado: de la venta de las certiicaciones. Tema
problematizado en otro momento.
Renata Báez Romero y Arturo Vilchis Cedillo
50 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
pedagogía política por la ética y más aún la estética,” (Gaos,
1990: 87) de mayor alcance y profundidad, formativa, de
creación, construcción y renovación, no sólo del conocimiento
sino del hombre y su circunstancia, del ser humano en lo ético,
lo social, político y económico y ello incluye el estar y hacer
con los demás. Porque la educación superior no puede tomar
distancia de la crítica social al “modelo de desarrollo” que
favorece el bienestar de una minoría y la desigualdad entre
la mayoría. Ya que no solo son instituciones de difusión de
conocimientos, sino entidades de producción y transferencia
de los mismos, de difusión de la cultura y de la pertinencia
y articulación con el contexto nacional. Por ello, la tarea por
hacer no es sólo educativa, sino que su espectro se amplía a
lo social, económico y político. Transformar los modelos
pedagógicos, programas y currículums de organización,
involucra que la acción educativa, que la reproducción de
los saberes se funde en la unidad de la diversidad, en la
reconstrucción de nuevos objetos y sujetos de conocimiento,
en la relexión sobre el otro, de bases igualitarias entre y para
todos, de una sociedad participativa, crítica y abierta al diálogo
y buscar de forma explícita terminar con el modelo de mercado
y de formación individualista, de políticas mercantilistas que
ponen al conocimiento como un bien privado.
Esta recuperación es signiicativa para reconstruir otra
noción del saber, de la educación y de la investigación donde
no se busca una sed de dominación, sino que se plasma
en la tradición humanística, de compartir y conllevar el
conocimiento, más allá del predominio académico. En la
noción que los ácratas nombraban como una eticidad, una
posición política, que concibe a la educación, el conocimiento
y a la investigación, como una práctica por la libertad de y
con todos, y un bastión en contra de la explotación del ser
humano, y de la naturaleza (Reclus, 1908). Las prácticas de la
producción en la educación superior deben llevar otro ritmo
que no sea el del aceleramiento, retornar a la temperanza
y paciencia de aprender, de educar, escuchar y producir,
takaltakal (Lenkersdorf, 2004), el poco a poco que señalan
los tojolabales. El producir conocimiento y enseñanza debe
ser como el tiempo de la tierra, sembrar el conocimiento no
es de inmediato, hay que esperar, así como la tierra necesita
tiempo para recuperarse, regenerarse y poder producir de
nuevo, así el que guía, la enseñanza y el que aprende, debe
ser una relación a largo plazo no un suceso de un instante, de
lo efímero por producir y obtener constancias o incentivos
económicos individuales.
Transformar, revolucionar desde su raíz el capitalismo del
saber, signiica realizar un proceso social de la educación
en las instituciones universitarias, establecer un modo
propio, que articule las relaciones entre universidad y
sociedad, lo que implica no sólo reconfiguraciones de
carácter pedagógico, de planes y programas educativos y
metodológicos, sino de forma simultánea, implicaciones
epistemológicas a la par que implicaciones políticas, sociales
y económicas. Porque la intencionalidad de buscar el saber y
reproducir el saber, son también elecciones éticas y políticas.
Literatura citada
Articular la educación y el conocimiento, la ciencia, la
tecnología, su enseñanza y desarrollo, con el sentido social
del ser humano, construir modelos y planes educativos
incluyentes, democráticos y equitativos. Pero principalmente
la educación debe producir nuevamente comunidad entre
todos: “la educación produce comunidad en la cual los
educandos y educadores participan” (Lenkersdorf, 2004:
72). La educación es entonces que debe realizarse de forma
comunitaria, de común acuerdo y no de forma competitiva,
como se realiza por desgracia cada vez más comúnmente en la
actualidad. Estudiar, aprender e investigar, deben ser prácticas
no para manifestar al mejor, sino para resolver o buscar
alternativas a problemas comunes, donde el docente, el
investigador más que una autoridad, debe ser un orientador.
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Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 53-59
La epistemología en la ciencia y la tecnología
Luis Manuel Román Cárdenas
Lmrc7b@hotmail.com.
Resumen
La disciplina filosófica de la epistemología incide de
manera contundente en la problemática de la ilosofía de la
ciencia, toda vez que establece la génesis del conocimiento
que esta última asume para su fundamentación. Desde la
antigua ilosofía griega estuvo presente la epistemología
en lo que podemos denominar el conocimiento empírico de
los presocráticos y el conocimiento racional de Sócrates,
Platón y Aristóteles. Posteriormente en la modernidad se
retoman dichos conocimientos como fuentes de lo que es el
conocimiento cientíico. Los ilósofos empiristas ingleses
como son Bacon, Locke, Berkeley y Hume con los ilósofos
racionalistas como Descartes, Leibniz, Spinoza y Kant serán
los pensadores más representativos que sentarán las bases
de lo que desde la época Moderna se nos presenta como la
teoría del conocimiento que sustenta la ciencia de aquella
época así como la ciencia actual.
Palabras claves: filosofía, empirismo, racionalismo,
conocimiento, tecnología.
La ilosofía tiene como disciplinas ilosóicas primarias a
la epistemología y a la ontología, ambas enlazadas han
dado cuenta del ser, así como la manera en que se genera
el conocimiento del mismo. En esta tesitura nuestra
relexión se orienta en las concepciones ilosóicas que
desde el antiguo pensamiento griego predominaron y
han predominado a lo largo de nuestra cultura occidental.
Siendo el objeto de estudio de la epistemología los
diversos métodos que relacionan al sujeto y al objeto como
elementos constitutivos del proceso del conocimiento,
nuestro análisis inicia con el debate del método empirista
y del método idealista que los ilósofos presocráticos y
Sócrates, Platón y Aristóteles nos plantean en torno a las
teorías del conocimiento de lo que podemos llamar el
conlicto de las sensaciones con las ideas.
En este tenor, los ilósofos presocráticos como Tales de
Mileto, Heráclito, Anaxímenes, Demócrito, Empédocles,
etc., por primera vez plantearon el método de conocimiento
empirista o sensualista, que consistía en sostener que el
principio de todas las cosas eran los cuatro elementos
(agua, tierra, aire y fuego) mismos que se concebían
mediante las sensaciones. Tal concepción epistemológica
fue refutada por los diversos y diferentes signiicados
que tuvo el Logos con Sócrates, Platón y Aristóteles
que plantearon como base del proceso cognoscitivo los
elementos racionales: el concepto, juicio y raciocinio.
Es pues a partir del Logos que estos últimos pensadores
refutaron al empirismo de los presocráticos ya que
consideraron al Alma como propia de la Intelección o
pensamiento como el receptáculo que produce las ideas
mediante las cuales se conoce la esencia de las cosas. Así,
la teoría de conocimiento de los ilósofos presocráticos
es sustituida por la nueva concepción de los ilósofos
idealistas en la que los elementos racionales son los
generadores del conocimiento. En este sentido, Platón, en
El diálogo del Teeteto, argumenta en contra Protágoras:
Por consiguiente, el saber no radica en las impresiones,
sino en el razonamiento que hacemos acerca de estas. Aquí,
efectivamente, es posible aprehender el ser y la verdad, pero
ahí es imposible.1
1
Platón, Diálogos, p. 266.
Luis Manuel Román Cárdenas
54 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Como vemos, el carácter idealista de la teoría del
conocimiento de Platón se confrontará con la empirista de
los ilósofos presocráticos que podemos sintetizarla en la
siguiente sentencia de Protágoras: “El hombre es medida
de todas las cosas, tanto del ser de las que son, como del no
ser de las que no son”.2
En este orden de ideas, Aristóteles también diiere de la
teoría de conocimiento de los presocráticos sobre todo en
lo que respecta a las propiedades del alma, que consisten
en inteligir y pensar, siendo por lo tanto diferentes a la
percepción sensible de los presocráticos:
Es usual deinir al alma primordialmente a través de dos
notas diferenciales, el movimiento local y la actividad de
inteligir y pensar… El inteligir y el pensar, por su parte,
presentan una gran ainidad con la percepción sensible:
en uno y otro caso, en efecto, el alma discierne y reconoce
alguna realidad… Tampoco inteligir, digo, es lo mismo que
percibir sensiblemente3.
Por otra parte también Aristóteles nos expone algo similar
a su concepto de alma en relación a la imaginación. En
este sentido Aristóteles comprende a la imaginación como
aquella que participa de la imagen y pensamiento en lo
que tiene que ver con discernir entre la verdad y el error en
estrecha relación con la opinión, intelecto y ciencia:
Pues bien, si la imaginación es aquello en virtud de lo
cual solemos decir que se origina en nosotros una imagen
–exclusión hecha de todo uso metafórico de la palabra- ha
de ser una de aquellas potencias o disposiciones, por medio
de las cuales discernimos y nos situamos ya en la verdad ya
en el error. Y estas son sentido, opinión, intelecto y ciencia.4
Posteriormente la polémica epistemológica de la
Modernidad entre el Racionalismo y el Empirismo
determino la orientación de la ciencia Moderna, toda vez
que estas dos concepciones epistemológicas postularon una
nueva visión del mundo acorde con una nueva ciencia que
será empírica y racional en la medida que la investigación
cientíica aplicará la experimentación así como la exactitud
matemática en primer lugar con la ciencia de la astronomía.
Su duda metódica es decisiva que mediante su nos propone
a la sustancia pensante como el primer principio de su
pensamiento racionalista. En El discurso del método
Descartes postula en primer lugar a su cogito ergo sum
como la sustancia pensante y como génesis del sujeto de
conocimiento:
Pero en seguida note que si yo pensaba que todo era falso,
yo, que pensaba, debía ser alguna cosa, debía tener alguna
realidad; y viendo que esta verdad: pienso, luego existo
era tan irme y tan segura que nadie podría quebrantar su
evidencia, la recibí sin escrúpulo alguno como el primer
principio de la ilosofía que buscaba5.
En seguida Descartes postula la realidad de la substancia
extensa mediante la prueba ontológica y cosmológica de la
existencia de Dios, en tanto que de los atributos de lo ininito
y lo perfecto de Dios es posible la existencia de nuestro
mundo tiene, de tal modo que la sustancia pensante y extensa
existen a partir de la divina: “La única solución posible era
que aquella idea hubiera sido puesta en mi pensamiento por
una esencia más perfecta que yo y que encerrara en sí todas
las perfecciones de que yo tenía conocimiento”6.
Por otra parte, el pensamiento cartesiano es pionero en sentar
los fundamentos de la ciencia a través de la razón. Desde la
geometría analítica Descartes sienta dichos fundamentos
con los principios de las Ideas claras y distintas que el sujeto
del conocimiento hace suyas. La relexión epistemológica
desarrollada por Descartes en su duda metódica se desarrolla en
consonancia con las ideas innatas. Yes en este proceso de la duda
metódica donde Descartes construye los principios racionales
de la ciencia Moderna estableciendo cuatro reglas que guían
el proceso del conocimiento, como nos lo reiere el mismo:
La primera consistía en no recibir como verdadero lo
que con toda evidencia no reconociese como tal, evitando
cuidadosamente la precipitación y los prejuicios, y no
aceptando como cierto sino lo presente a mi espíritu de
manera tan clara y distinta que acerca de su certeza no
pudiera caber la menor duda.
La segunda era la división de cada una de las diicultades
con que tropieza la inteligencia al investigar la verdad, en
tantas partes como fuera necesario para resolverlas.
La tercera, ordenar los conocimientos empezando siempre
por los más sencillos, elevándome por grados hasta llegar
a los más compuestos, y suponiendo un orden en aquellos
que no lo tenían por naturaleza.
2
Ibidem., p. 267.
Aristóteles, Acerca del alma, p. 134,135,136.
4
Ibidem. p. 137.
3
5
Cfr. Descartes R., Discurso del Método, p. 16.
Cfr. Ibidem. p.22.
6
La epistemología en la ciencia y la tecnología
La cuarta, consistía en hacer enumeraciones tan completas
y generales, que me dieran la seguridad de no haber
incurrido en ninguna omisión7.
Ahora bien, la ciencia Moderna no sólo tiene su génesis
epistemológica en el racionalismo de Descartes, sino que
también la teoría de conocimiento empirista de francis Bacon
contribuye al surgimiento y desarrollo de la ciencia. En este
orden de ideas, la concepción epistemológica de Bacon
desarrolla su carácter metodológico en la experimentación a
través de las tablas de semejanza y diferencia. Así, Bacon nos
propone un nuevo método de investigación que tiene que ver con
el método experimental que asume la ciencia moderna, mismo
que valiéndose de principios contrarios a la deducción lógica,
crea y desarrolla la inducción en la investigación cientíica. Es
así como la ciencia moderna tiene su fundamentación en el lado
opuesto al racionalismo. Se trata del método empirista, que al
igual que el racionalismo, contribuye a la fundamentación de
la ciencia mediante la analogía y la inducción como las nuevas
formas de hacer investigación cientíica.
De este modo, Bacon nos propone por primera vez un nuevo
método de investigación cientíica, el mismo que valiéndose
de principios contrarios a la deducción lógica, propone la
analogía y la inducción que crean y desarrollan la investigación
cientíica. Dicho método de Bacon no sólo propondrá el
método experimental en la investigación cientíica, sino que
junto con este, la crítica a las doctrinas ilosóicas escolásticas
se ponen de maniiesto a través de un lenguaje metafórico que
habla de cuatro ídolos. En primer lugar, Bacon refuta toda la
tradición escolástica mediante lo que él da en llamar los ídolos
de la tribu, que son los que se adueñan de la naturaleza humana
mediante las costumbres y hábitos de la comunidad, misma
que puede arribar al verdadero conocimiento si logra abolirlos:
Los ídolos de la tribu tienen su fundamento en la misma
naturaleza del hombre, y en la tribu o el género humano. Se
airma erróneamente que el sentido humano es la medida de
las cosas, muy al contrario, todas las percepciones, tanto de
los sentidos como del espíritu, tiene más relación con nosotros
que con la naturaleza8.
La crítica de Bacon a la tradición escolástica está también
dirigida a los ídolos de la caverna, que son aquellos que
anidan en la opinión individual de cada persona: en sus
creencias y dogmas; en la medida misma en que la opinión
se acata a un modo absoluto o dogmático de actuar:
55
Los ídolos de la caverna tienen su fundamento en la
naturaleza individual de cada uno; pues todo hombre
independientemente de los errores comunes a todo el
género humano, lleva en sí cierta caverna en que la luz de
la naturaleza se quiebra y es corrompida9.
En tercer lugar, los ídolos del foro dan motivo a Bacon para
cuestionar el lenguaje, que de manera acrítica el sentido
común lo asume en las reuniones que el vulgo frecuenta,
tergiversando el lenguaje verdadero que no llega al
verdadero conocimiento de las cosas:
Existen también ídolos que provienen de la reunión y de
la sociedad de los hombres, a los que designamos con el
nombre de ídolos del foro, para signiicar el comercio y la
comunidad de los hombres de que tiene origen10.
Por último, Bacon nos habla de los ídolos del teatro, los que
considera como la continuidad de las diversas doctrinas
ilosóicas y cientíicas que mediante la tradición venimos
asumiendo con su peso de autoridad:
Hay, inalmente, ídolos introducidos en el espíritu por los
diversos sistemas de los ilósofos y los malos métodos de la
demostración; llamémosles ídolos del teatro11.
El estudio de la epistemología nos lleva a revisar los
fundamentos de la ciencia de la Moderna, tal y como nos lo
reiere Cassirer en torno al pensamiento de la Ilustración,
que tuvo su auge en la ciencia del siglo XVII y XVIII. Según
Cassirer la Ilustración rompe en general con la metafísica
del siglo XVII, sobre todo con los nuevos métodos de
investigación cientíica. Así, el concepto de razón ya no
tendrá el significado abstracto propio de los sistemas
ilosóicos del siglo XVII, sino que ahora la investigación
tiene que ver con los derroteros facticos que la razón concibe
a través de su método experimental. En este sentido, la
investigación cientíica del siglo XVIII ya no tendrá la
connotación abstracta de los sistemas metafísicos del siglo
XVII, sino que ahora dicha investigación tiene que ver con
los derroteros facticos propios de la experimentación. La
razón, desde este punto de vista, es una razón observadora
y no metafísica, ya que su fundamento no descansa en los
principios de la razón ilosóica, sino que su orientación se
determina por lo formal de las matemáticas y la observación
empírica que emplea en su método el análisis y la síntesis:
Cfr. Bacon, Op. Cit. p.42.
Cfr. Ibid. p.42.
11
Cfr. Ibid p. 43.
9
7
Ibidem p. 21.
8
Cfr. Bacon F., Novum Organum, p. 42.
10
Luis Manuel Román Cárdenas
56 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
La razón científica, nos dice Cassirer, es una razón
observadora y no metafísica, ya que su fundamento no
descansa en los principios de la razón ilosóica, sino que
su orientación se determina por la razón y la observación
empírica que se lleva a cabo en el análisis matemático y la
experimentación 12.
Como hemos visto, esta nueva caracterización de la
ciencia rompe con todos los sistemas metafísicos que
venían sustentando las concepciones epistemológicas de
racionalistas y empiristas. La ciencia moderna surge pues con
una nueva visión del mundo fundamentada en su proceder
formal y empírico. De este modo, la investigación cientíica
aplica el modelo matemático y el método experimental en las
ciencias naturales como la astronomía, la física, la química y
la biología. En este sentido, la ciencia moderna, contraria a
la metafísica, no válida ningún principio que no haya pasado
por sus pruebas formales y empíricas correspondientes.
Esta orientación observadora de la razón está presente en los
cálculos matemáticos de Kepler y las constataciones empíricas
de Copérnico y Galileo. También la química moderna ve con
los mismos ojos a la alquimia. La razón cientíica, como nos
dice Cassirer, es una razón observadora y no metafísica, ya que
su fundamento no descansa en los principios de la metafísica,
sino que su orientación la determina la observación que se
lleva a cabo de la naturaleza. En este sentido la nueva ciencia,
contraria a la metafísica, no válida ningún principio que no
haya pasado por sus pruebas correspondientes.
De esta manera la razón científica está presente en los
cálculos matemáticos y las constataciones empíricas que
iniciaron Copérnico, Kepler y Galileo en la astronomía y que
concluyo Newton en su física. En este sentido, contraria a la
metafísica, la nueva ciencia no válida ningún principio que
no haya pasado por sus pruebas a priori correspondientes.
Como hemos visto, esta nueva caracterización de la ciencia
rompe con todos los sistemas metafísicos que se venían
sustentando en los principios ilosóicos de las concepciones
epistemológicas de racionalistas y empiristas, de tal manera
que esta orientación observadora de la razón está presente
en los cálculos matemáticos (método analítico) y las
constataciones empíricas que iniciaron Copérnico, Kepler y
Galileo y que concluye Newton, al respecto nos dice Cassirer:
Newton, nos dice Cassirer, termina lo que Kepler y Galileo
habían iniciado, y los tres nombres no designan sólo a
tres grandes personalidades de la investigación, sino que
signiican los hitos del conocimiento y del pensar cientíico
natural. Kepler parte de la observación de los fenómenos
celestes y conduce esta observación a un grado de exactitud
matemática como no se había alcanzado hasta entonces 13.
No obstante y todo, el análisis de Cassirer sobre la Ilustración,
nos remite a la continuidad y las rupturas del pensamiento
ilosóico y cientíico de los siglos XVII y XVIII. Así, para
Cassirer, la Ilustración del siglo XVIII rompe en general con
la cultura ilosóica y cientíica del siglo XVII, sobre todo
en lo que concierne a las nuevas teorías que traen consigo
diferentes enfoques metodológicos que conceptualizan
a la naturaleza de manera más objetiva. De este modo, la
razón observadora sienta las bases metodológicas de toda
la ciencia Moderna. En este sentido, el concepto de Razón
del siglo XVIII ya no tendrá la connotación abstracta propia
de los sistemas ilosóicos del siglo XVII, sino que ahora
dicha Razón tiene que ver con los métodos empíricos que
las ciencias fácticas le imprimen a través de su observación.
Como nos lo hace ver Cassirer, está Razón, de acuerdo a
su nueva naturaleza observadora, está en la búsqueda de
verdad como algo que se adquiere a través de un proceso y
no como algo innato:
No es el nombre colectivo de las ideas innatas, que nos son
dadas con anterioridad a toda experiencia y en las que se
nos descubre la esencia absoluta de las cosas. La razón
lejos de ser una tal posesión, es una forma determinada
de adquisición. No es la tesorería del espíritu en la que se
guarda la verdad como moneda acuñada, sino más bien la
fuerza espiritual radical que nos conduce al descubrimiento
de la verdad y a su determinación y garantía14.
En este orden de ideas, el método cientíico se asume en el
nuevo método de investigación en la unidad de lo analítico
y lo sintético, o en lo que Cassirer da en llamar el método
de lo resolutivo y lo compositivo. Sin embargo, dicho
método no sólo se aplica a las ciencias naturales, sino que
también se aplica en la psicología y en la ciencias sociales.
De esta manera, tanto en el estudio de la naturaleza como el
estudio de la sociedad tiene un enfoque analítico y sintético.
Sin embargo, el carácter formal del modelo matemático
sienta las premisas en todas y cada uno de los campos de
la investigación cientíica. Así, la geometría analítica será
el modelo que asumirán las ciencias naturales sociales
mediante el método analítico. Este carácter cuantitativo,
propio del modelo matemático, sienta las premisas por medio
Cassirer E. Op Cit., pag. 30.
Ibidem. pag. 29.
13
Cfr. Cassirer E. Filosofía de la Ilustración, pag. 30.
12
14
La epistemología en la ciencia y la tecnología
de las cuales la taxonomía de la naturaleza, las motivaciones
y las relaciones humanas son abordadas desde el análisis
que se ejerce sobre todo objeto de estudio. Al respecto nos
dice Cassirer:
El siglo XVIII recoge el problema y lo resuelve en el sentido
de que si se comprende por espíritu geométrico el espíritu
del puro análisis, su aplicación es ilimitada y no se vincula
a ningún terreno particular de problemas. Se trata de probar
esta tesis en dos direcciones diferentes. El análisis, cuya
fuerza se demostró hasta ahora en el dominio de los números
y de las magnitudes, se aplicará en adelante por un lado al
ser psíquico y por otro lado al ser social”.15
Es así como el método analítico se aplica a los fenómenos
naturales y sociales, siendo la expresión deductiva de la
investigación cientíica, ya que la geometría analítica posibilito
la exactitud y la precisión de los fenómenos naturales y sociales,
que desde las ciencias formales (lógica y matemáticas) y
las ciencias factuales (ciencias naturales y sociales) son
investigados. Sin embargo, el análisis que se aplica en el estudio
de ambos fenómenos va acompañado de la síntesis, toda vez
que los principios explicativos de la ciencia se obtienen a
través de su intrínseca relación. La ciencia Moderna surge y
se desarrolla de este modo a través de su carácter abstracto y
concreto que las leyes y teorías cientíicas expresan.
Siendo el sujeto de conocimiento el elemento constitutivo de la
ciencia Moderna tiene su más alta expresión en la epistemología
de Kant en lo que se reiere a la génesis del conocimiento.
La polémica epistemológica entre el Racionalismo y el
Empirismo retomada por Kant. De Descartes y Leibniz retoma
los principios racionalistas, mientras que de Bacon, Locke,
Berkeley y Hume los principios empiristas. Kant empieza
por cuestionar dicha dualidad al ver las limitantes de ambas
concepciones en su punto de vista extremo. Aún cuando en
principio Kant asuma el logicismo de Leibniz y el sensualismo
de Hume (que lo saca de su sueño dogmático), no obstante,
Kant propone la unidad del sujeto y el objeto desde una nueva
perspectiva epistemológica del sujeto de conocimiento que
rompe con la dualidad del racionalismo y el empirismo.
Desde estos principios la ciencia moderna y nuestra ciencia
contemporánea se desarrollan en la perspectiva del sujeto de
conocimiento kantiano.
57
conocimiento? Y, ¿En qué perspectiva epistemológica se
ubica dicho sujeto? La propuesta epistemológica kantiana,
basada en la síntesis del racionalismo y el empirismo,
nos da la primera respuesta del sujeto de conocimiento
kantiano. Es la unidad de las sensaciones y los conceptos
la génesis epistemológica de lo que Kant da en llamar la
unidad originaria del conocimiento, en la que las intuiciones
y los conceptos realizan la síntesis del conocimiento
mediante el juicio sintético a priori. En sentido estricto,
este juicio es el juicio cientíico que la ciencia emplea
como juicio nomológico de la ciencia. En efecto, unidad
de las concepciones epistemológicas del racionalismo y
el empirismo es la misma unidad originaria del sujeto del
conocimiento, en la que los conceptos sin intuiciones son
vacios y las intuiciones sin conceptos son ciegas, tal y como
él mismo lo expresa:
El entendimiento, al contrario, es la facultad de pensar el
objeto de la intuición sensible. Ninguna de estas propiedades
es preferible a la otra. Sin sensibilidad, no nos serían dados
los objetos, y sin el entendimiento, ninguno sería pensado.
Pensamientos sin contenido son vacios; intuiciones sin
concepto, son ciegas. De aquí, que sea tan importante y
necesario sensibilizar los conceptos, es decir, darles un
objeto en la intuición, como hacer inteligibles las intuiciones
(someterlas a conceptos). Estas dos facultades o capacidades
no pueden trocar sus funciones. El entendimiento no puede
percibir y los sentidos no pueden pensar cosa alguna.
Solamente cuando se unen, resulta el conocimiento 16.
Dicha perspectiva nos lleva a plantearnos las siguientes
interrogantes: ¿Cómo se construye el sujeto de conocimiento
kantiano? ¿Qué elementos integran a este sujeto de
Así, pues, la unidad originaria kantiana tiene que ver
necesariamente con el sujeto trascendental kantiano que
desde el entendimiento se plantea sus propios límites y
alcances. Esta unidad originaria de las sensaciones y los
conceptos es la expresión misma del juicio sintético a
priori en el que se unen lo a priori y lo a posteriori. Así, este
juicio da cuenta del mundo fenoménico como único mundo
cognoscible o como mundo posible de experiencia. En
este orden de ideas, como ya lo mencionamos, la polémica
epistemológica entre racionalistas y empiristas, es superada
por Kant en lo que respecta al proceso de conocimiento. Kant
en la crítica de la razón pura nos presenta las posibilidades
humanas del conocimiento mediante su sujeto trascendental
que se plantea en primera instancia los límites y alcances
del conocimiento humano. Siendo de este modo, la
epistemología kantiana sienta las bases epistemológicas del
sujeto trascendental a través del juicio sintético a priori que
expresa las leyes y teorías de nuestro mundo fenoménico.
15
16
Ibidem. p. 31.
Cfr. Kant M, Crítica de la razón pura, p. 202.
Luis Manuel Román Cárdenas
58 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
En lo que concierne a la investigación cientíica también el
positivismo sostiene que es el único método como criterio
de verificación de las hipótesis, toda vez que para los
positivistas lógicos la verdad cientíica expresada en los
enunciados nomológicos de la ciencia no dejan ninguna
duda como los enunciados metafísico. De ahí que el método
cientíico contraste y refute a todo enunciado metafísico, ya
que carece del sentido lógico propio de la verdad cientíica.
No obstante y todo, la problemática epistemológica en torno
a la ciencia fue retomada en la segunda década del siglo
XX por los ilósofos y cientíicos del Círculo de Viena (los
Positivistas Lógicos), que si bien tiene como antecedente
el positivismo clásico; sin embargo, los hechos ya no tienen
tanta relevancia, pues el lenguaje formal de la lógica y la
matemática los remplaza. En este tenor el hecho empírico
se expresa en el lenguaje protocolario de las proposiciones
atómicas y moleculares.
El método correcto de la filosofía -dice Wittgensteinsería éste: No decir nada sino excepto lo que se puede
decir, esto es, las proposiciones de la ciencia natural, o
sea, algo que no tiene nada que ver con la ilosofía y más
tarde, invariablemente cuando alguien quisiera decir algo
metafísico, demostrarle que a determinados signos de sus
proposiciones no le ha otorgado signiicado. Este método
sería insatisfactorio para él –no tendría la sensación de que
le estemos enseñando ilosofía- pero sería el único método
estrictamente correcto 17.
Desde el punto de vista, el Tractatus de Wittgenstein planteará
las premisas a todos los ilósofos y cientíicos del círculo de
Viena, en la adopción de este lenguaje protocolario en lo que
respecta al lenguaje de la ciencia. En lo que concierne a la
investigación cientíica los positivistas lógicos sostuvieron
el mismo método de veriicación que los positivistas clásicos
venían asumiendo. El criterio de verdad está de este modo
en la contrastación de las hipótesis, toda vez que para los
positivistas lógicos la verdad cientíica está en la prueba de
las hipótesis y en los principios explicativos de los hechos
naturales y sociales. Es así como dicha verdad se opone a todo
enunciado metafísico en tanto que este enunciado carece del
sentido que la verdad cientíica le coniere.
En este mismo orden de ideas, continuaremos nuestra
exposición con el método falsacionista de Karl Popper,
que retomando la problemática epistemológica de los
positivistas lógicos, nos propone para la investigación
Ayer, El positivismo lógico, pag. 29.
17
científica el método de la falsación. Karl Popper nos
plantea en su Logik der Forsching que lo que debe requerir
un enunciado factico, que en principio sea capaz de ser
desmentido, es el criterio de falsación, que consiste en que
los hombres de ciencia formulen hipótesis que someten
a prueba buscando ejemplos contrarios, de modo tal que
cuando se descubre un ejemplo contrario, se desecha la
hipótesis o se la modiica. En este sentido el ensayo y error
son los elementos fundamentales que se emplean para
falsar las hipótesis en vez de veriicarlas. El ejemplo más
ilustrativo que nos presenta Popper es el del cisne negro
como criterio de falsación de los cisnes blancos.
Lakatos, seguirá la misma propuesta de Popper, siendo
consecuente con la refutación mediante la falsación de
las teorías cientíicas que no cubran el dominio de nuevas
teorías, en lo que respecta al dominio de explicación de
nuestra realidad.
El método dialéctico de Hegel es decisivo en la constitución
de las ciencias sociales toda vez que en él tienen su
fundamentación. Este carácter dialéctico será entonces
determinante para la interpretación de nuestra historia
occidental. Este método va más allá del sujeto trascendental
kantiano toda vez que el pensamiento y la realidad en su
devenir son una y la misma cosa. Por ello, el sujeto hegeliano
no es tan sólo un instrumento o un medio del conocimiento
como lo concibe Kant, sino que la dialéctica de Hegel está
planteada en su exposición y desarrollo de muestro proceso
histórico en lo que respecta la totalidad de la vida humana.
De este modo, Hegel nos presenta el enlace necesario de la
razón teórica y la razón práctica a lo largo de toda nuestra
historia. De hecho la lógica dialéctica de Hegel es una
ontología que uniica los dos campos de la ciencia a través
de la categoría de la totalidad.
Así, pues, el método dialéctico de Hegel se nos presenta a
través de una serie de categorías dialécticas que constituyen
el proceso subjetivo y objetivo del espíritu. El primero
corresponde al proceso de la conciencia en autoconciencia,
mientras que el segundo se reiere a la historia humana
real. Precisamente, el método dialéctico de Hegel logra la
identidad de lo subjetivo y objetivo (del ser en sí y del ser
para sí), como nos muestra la exposición del mismo Hegel:
“todo lo racional es real y todo lo real es racional”.18 Así,
la ilosofía dialéctica de Hegel se concibe como la ciencia
de la totalidad sobre todo si tomamos en cuenta que dicha
ilosofía realiza una labor racional y objetiva, tal y como
Cfr. Hegel, ilosofía del derecho, ed. U.N.A.M. México 1975, p. 14.
18
La epistemología en la ciencia y la tecnología
nos dice Hegel: “la necesidad interna –- de que el saber
sea ciencia radica en su naturaleza, y la explicación
satisfactoria acerca de esto sólo puede ser la exposición
de la ilosofía misma”.19
Es evidente que el método dialéctico de Hegel se encuentra
inmerso en su propia autogénesis en tanto que el sujeto
teórico-práctico genera y desarrolla su verdad. Es sugerente
al respecto el subtitulo de la Fenomenología del Espíritu: La
ciencia de la experiencia de la conciencia. En este sentido,
el método dialéctico de Hegel postula la ascensión de la
conciencia ingenua (sentido común) a la verdad cientíica
(ilosóica). Este carácter del método dialéctico de Hegel se
confronta con la formalización lógica-matemática, puesto
que dicha formalización no profundiza en nuestra realidad.
El error de tal formalización radica en que la explicación
es externa al ser social que nos lo presenta mediante la
razón práctica en nuestra historia, tal y como lo expresa
el mismo Hegel.
En el conocimiento matemático la intelección es exterior
a la cosa, de donde se sigue que con ello se altera la
cosa verdadera. De ahí que, aún conteniendo sin duda
proposiciones verdaderas el medio, la construcción y la
demostración, haya que decir también que el contenido es
falso… Su in o concepto es la magnitud. Es precisamente
la relación inesencial, aconceptual. Aquí, el movimiento
del saber opera en la supericie, no afecta a la cosa misma,
no afecta a la esencia o al concepto y no es, por ello mismo,
un concebí 20.
No obstante, todo son pertinentes algunas interrogantes:
¿Qué diferencias metodológicas se ponen de maniiesto
en las concepciones epistemológicas de Marx y Hegel?
¿Es tan sólo una diferencia metodológica la que subyace
en estas concepciones? En La introducción a la crítica de
la economía política Marx nos plantea el signiicado de su
método en lo que él da en llamar lo material traspuesto en la
cabeza del hombre; siendo la antítesis del método de Hegel.
Marx aplica el método dialéctico al sistema social capitalista
como una totalidad concreta, la que inalmente posibilita
llegar a la explicación de su esencia de las circunstancias
histórico-sociales, como las decisivas en la interpretación
de nuestro sistema capitalista. Es así como el método
dialéctico de Marx diiere de la de Hegel, no sólo en lo que
respecta su carácter epistemológico, sino que se aplicándose
59
fundamentalmente a la historia humana, más allá de la teoría
de conocimiento, se nos presenta como una teoría de nuestra
historia, al respecto nos dice:
Mi método dialéctico -refiere Marx- no sólo es
fundamentalmente distinto del método de Hegel, sino que
es, en todo y por todo, la antítesis de él. Para Hegel, el
proceso del pensamiento, al que él convierte incluso, bajo el
nombre de Idea, en sujeto con vida propia, es el demiurgo de
lo real, y esta la simple forma externa en que toma cuerpo.
Para mí lo ideal no es, por el contrario, más que lo material
traducido y traspuesto a la cabeza del hombre.21
Literatura citada
Aristóteles. Acerca del alma. Ed. Gredos, Madrid, 2000.
Ayer, A. J. El positivismo lógico. Ed. FCE. México, 1972.
Bacon F., Novum Organum, ed. Porrúa, México. 1991.
Bachelard, G. La formación del espíritu cientíico, ed. Siglo XXI, México,
1984.
Cassirer, E. Filosofía de la Ilustración, ed. FCE. México 1975.
Comte, A. Primeros ensayos, ed. F.C.E. México 1981.
Comte, A. La física social, ed. Aguilar, Madrid 1981.
Chalmers, A. ¿Qué es esa cosa llamada ciencia, ed. Siglo XXI, México
1982.
Descartes, R. El discurso del método, Meditaciones metafísicas, Reglas
para la dirección del espíritu, ed. Porrúa, México1995.
Feyerabend, P. La ciencia en una sociedad abierta, ed. Siglo XXI, México
1982.
Kant M. Crítica de la razón pura, ed. Losada, México, 1988.
Platón. Diálogos, ed. Gredos, Madrid 2000.
Hegel, G. W. F. Filosofía del derecho, ed. U.N.A.M. México 1975.
Hippolite, J. Génesis y estructura de la fenomenología del espíritu, ed.
Península, Bacelona 1974.
Hegel, G. W. F. Fenomenología del espíritu, ed. F.C.E., México 1973.
Hume, D. Tratado de la naturaleza humana, Editora Nacional.
Leibniz, G. W. Nuevos ensayos sobre el entendimiento humano, ed.
UNAM, México 1976.
Locke, J. La conducta del entendimiento, ed. Anthropos, Barcelona 1992.
Kuhn, T. La estructura de las revoluciones cientíicas, ed. F.C.E., México
1986.
Popper, K. Conjeturas refutaciones, Paidos, Barcelona 1972.
Popper, K. La sociedad abierta y sus enemigos, ed. Paidos, Buenos Aires
1982.
Marx, K. Manuscritos económico-ilosóicos de 1844, ed. Grijalbo, México
1968.
Marx, K., Engels F. La ideología alemana, ed. Ediciones de Cultura Popular,
México 1970.
Marx, K. El capital, ed. F.C.E. México, 1973.
Wittgenstein, L. Tractatus lógico-philosophicus, ed. Alianza Editorial,
Madrid 1973.
19
Cfr. Hegel, Op. Cit., p. 9.
Cfr. Hegel, Op. Cit., ps. 29, 30.
20
21
Cfr. Marx C., El capital, p. XXIII.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 61-67
Historia efectual en la constitución
de la percepción social
Lorenzo Espinosa Gómez
Humanidades-filosofía. Universidad Autónoma Chapingo. México. Tel: 55 57 36 71 36. lore@xanum.uam.mx.
Resumen
Introducción
En esta exposición se pretende hacer un desglose de la
concepción hermenéutica de la historia efectual desde la
concepción gadameriana misma, que sirva de hilo conductor
que permita situarnos y así hacer comprensible aquella
situación que se quiere comprender; en este sentido la
categoría de horizonte cobra importancia, pues éste será
el campo de visión (territorial, temporal e intelectual)
hermenéutico que permita encontrar las relaciones entre
pasado y presente, incluso la proyección al futuro; así la
conciencia histórica que aspire a pretensiones de verdad
estará implicada por la historia efectual desde una posición
de horizonte histórico, por lo que el aporte del hermeneuta
(situado en el presente) se vuelve crucial para el proceso
de comprensión, ya que el comprender es un proceso de
fusión de distintos horizontes, entre pasado y presente. De
esta manera el hermeneuta en su calidad de intérprete debe
atender la conciencia histórica y hacer valer su opinión en
la fusión de horizontes y no sólo reproducir lo que observa
en su horizonte histórico. La historia efectual nos remite
a valoraciones de tipo moral y el sustento de éstas lo
encontramos en estructuras políticas (estructuras de poder)
por tal motivo en esta exposición que pretende conigurar la
constitución de la percepción social, es decir, la percepción y
valoración (moral) del entorno social hecha por el colectivo
de individuos que habitan ese entorno social, lo que parece
encaminar la investigación a una topología política, es
decir, el espacio y el lugar como ámbito de constitución
normativa moral.
La historia efectual tiene sus orígenes en el texto Verdad y
método de Gadamer, H.G. cuya primera edición salió a la
luz en 1960, han transcurrido más de 50 años desde entonces
y esta concepción hermenéutica mantiene una importancia
que sigue al alza pues continúan las investigaciones desde
distintas aristas ilosóicas y sus repercusiones sociales.
Para poder comprender este proceso será menester aclarar
primero el origen del término hermenéutica, del cual se
desprende la llamada historia efectual. “Hermenéutica” está
en relación con el dios griego Hermes que era el encargado en
el Olimpo de llevar los mensajes secretos a sus destinatarios
y una vez con ellos era el que debía descifrarlos; así tenemos
que Hermenéutica procede del griego hermeneutikos,
del término hermeneuo que puede traducirse como “yo
descifro”, de la palabra tekhné que signiica “arte” y del el
suijo -tikos que es sinónimo de “relacionado a” por lo que
literalmente se puede exponer que este término que nos
ocupa es el arte de explicar textos o escritos, obras artísticas.
En otro momento y más allá del mito o de la etimología, fue
Friedrich Daniel Ernst Schleiermacher (1768-1834) quien
inició la relexión sobre la hermenéutica.
Palabras clave: hermenéutica, historia, horizonte, política.
Desde su punto de vista, éste es el arte de comprender
un texto, su aportación desarrolla ciertas ideas respecto
del conocimiento humano, el cual se haya mediado por
la comprensión previa del sujeto. Esto ocurre, a decir de
Schleiermacher, de manera muy particular en la lectura
de textos escritos. Los símbolos dados en la escritura no
son llevados a la conciencia en sentido “fotográfico”;
sino que van siendo inevitablemente interpretados por el
62 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
lector. Schleiermacher tenía la intuición que no se puede
ofrecer la explicación de un producto de actividad creativa
del espíritu sin hacer referencia a una comprensión del
proceso creativo que lo ha engendrado, en este sentido
consideraba la interpretación como el arte de llevar a cabo
“una reconstrucción histórica e intuitiva; es decir, objetiva
y subjetiva del texto”, A decir de Brugger, Schleiermacher
generó la apertura hermenéutica a través de la «teoría del arte
de comprender» (Brugger, 1994). El aporte hermenéutico
de Schleiermacher puede deinirse así.
La doctrina hermenéutica de Schleiermacher brota en
primer lugar y esencialmente de la conluencia entre las
cuestiones suscitadas por la práctica de la interpretación –en
el curso de interés romántico por las grandes producciones
históricas del “espíritu” y la instancia metodológica de la
ilosofía trascendental, orientadas hacia la identiicación
de las condiciones «objetivas» de la actividad del espíritu a
través del análisis estructural de la conciencia «subjetiva»
(Sequeri, 1985).
De esta manera la interpretación, entendida bajo tal propuesta,
asume una igura «circular» donde la posibilidad de éxito está
en proporción directa con el grado de identiicación del acto
interpretante con el acto creativo; en este sentido la tarea de
Schleiermacher fue el intento de develar el sentido que, en
cada caso, puede otorgarse a lo singular y lo concreto frente a
la contingencia y universalidad de las leyes y los conceptos.
Otro pensador destacado en el ámbito de la hermenéutica es
Wilhelm Dilthey (1833-1911) cuya tesis principal se opone
a la tendencia de fundar un conocimiento sobre temas de
lo humano siguiendo el mismo proceder de las ciencias
naturales. El momento en que Dilthey está desarrollando su
pensamiento ilosóico, se encuentra en boga la tendencia
positivista de las ciencias que pretende fundamentar todo
conocimiento cientíico sustentado en lo empírico de la
experiencia, pero este modo de actuar cientíico no se
correspondía a los hechos históricos. Si Kant en su momento
se preguntó por la posibilidad de la ciencia natural, Dilthey
se preguntará ¿Cuál es el fundamento de posibilidad de las
ciencias del Estado, la religión, el arte y la sociedad? En
este sentido su trabajo se dirige al ámbito epistemológico,
mismo que lo conduce a la dimensión histórica de la vida
humana (Dilthey, 1980).
Para Dilthey, la experiencia concreta y no la especulación
representa el único punto de partida admisible para
desarrollar lo que llama las ciencias del espíritu o del hombre
Lorenzo Espinosa Gómez
(Geisteswissenschaften), en este proceso de experiencia es que
Dilthey se enfoca en la dimensión histórica de la vida humana;
si bien toda ciencia es ciencia de la experiencia, resulta
entonces que toda experiencia encuentra su nexo original
y la validez que ésta le presta en las condiciones de nuestra
conciencia, dentro de la cual se presenta, y en ese sentido es
la totalidad de nuestra naturaleza. Por ello el concepto clave
en las ciencias del espíritu, retomando a Schleiermacher, es
el entendimiento o la comprensión (Verstehen). Si bien las
ciencias naturales generan conocimiento por medio de la
explicación de la naturaleza; los estudios del hombre (es decir,
las ciencias del espíritu) lo hacen a través de la comprensión
de las expresiones de la vida.
La comprensión permite acceder al conocimiento de la
entidad individual, sin embargo, no es el entendimiento de
la otra persona, sino del mundo que se presenta a través de
ellos y sus manifestaciones. Las ciencias naturales sólo se
preocupan de lo individual como un medio para hacer una
generalización posterior que corresponda a la tipología
tratada. Bajo esta perspectiva, las ciencias del espíritu,
debieran ser epistemológicamente anteriores a las de la
naturaleza, es por ello que toda ciencia natural es también
un producto histórico. Así pues, toda la humanidad vive en
la historia, pero no todos lo saben. La conciencia histórica
es considerada como un modo de ver y de ser, como una
actitud, que nos envuelve en nuestra propia historicidad.
Después de tener un panorama del proceso evolutivo
de la hermenéutica, desde lo mítico, lo etimológico, la
interpretación circular de la ilustración con Schleiermacher
y la interpretación en la conciencia histórica de Dilthey;
observemos ahora la propuesta hermenéutica en Gadamer,
que de alguna manera recupera las anteriores y además
incorpora el proceso fenomenológico existencial. Desde
la perspectiva de la ilosofía defendida por Hans Georg
Gadamer, el concepto de hermenéutica describe a la
denominada teoría de la verdad y constituye el procedimiento
que permite expresar la universalización de la capacidad
interpretativa desde la personal y especíica historicidad.
Así pues, para Gadamer el punto de partida es la historicidad,
para ello se centra en el fenómeno de la comprensión pero
nos dice que la interpretación debe evitar las arbitrariedades
y limitaciones de los hábitos mentales, esto es, la capacidad
de comprensión se encuentre circunscrita a la manera en
que aprendimos el uso de la capacidad mental y en ese
sentido ya es un limitante que actúa de manera arbitraria,
por ello menciona que el uso de la capacidad mental deberá
Historia efectual en la constitución de la percepción social
ser centrando la mirada en las cosas mismas, en los textos.
Es importante señalar que en el desarrollo gadameriano
al mencionar el texto, no se reiere de manera exclusiva
al proceso de escritura, hace referencia a todo hecho o
suceso que entra en el fenómeno de la comprensión, todo
aquello que puede ser comprendido e interpretado es texto.
Retomando a Dilthey en este sentido, Gadamer no pretende
hacer distinción entre el método de las ciencias del espíritu y
las ciencias de la naturaleza “no hay diferencia de métodos,
sino de objetivos de conocimiento” (Gadamer, 1998, p. 11).
Si consideramos estos dos tipos de ciencias como formando
parte del conjunto de las experiencias humanas, entonces la
cuestión esta enfocada en la posibilidad de comprension; para
ofrecer una respuesta es necesario auxiliarse de la ontología
existencial de Heidegger, en especíico en el “ser ahí” o “ser
en el mundo” donde el ser se encuentra entregado a si mismo,
en un estado de arrojo, es decir arrojado a la tarea de vivir y
en este vivir está envuelto en diversas acciones especíicas o
autointerpretaciones a desempeñar en un contexto mundano
(Heidegger, 2009), algo que más bien sería el estar haciendo
algo ahí. De manera categórica es la relación entre el ser
humano y cualquier acción encaminada hacia el logro de un
propósito; entonces, el propósito (parecido al concepto de
intencionalidad) es conocido y procesado intelectualmente
pero aqui la acción no goza de las mismas condiciones ya que
de alguna manera es una acción preconsciente, no procesada,
no cuestionada; sencillamente concurre, se hace; y eso es “ser
ahí” (Dasein). Ahora el “estar ahí” es el modo de estar en el
mundo, es la cotidianidad del ser en el mundo, el modo de
ser que no se esta quieto mirando la cotidianidad, sino que
se encuentra atravezado por la cotidianidad misma.
El “estar ahí”, el estar en le mundo es un modo de “estar
siendo en el mundo” y en esta cotidianidad de estar siendo,
nos muestra que su modo de ser es la comprensión y ésta, la
comprensión, es común a toda manera de comprender, por ello
el estar ahí en su fundamental modo de ser en la comprensión,
tiene un carácter universal y es así mismo perteneciente a la
historia efectual (que vermos más adelante). El colocar a la
comprensión en un nivel ontologico, existencial y universal
del estar ahí nos remite de inmediato al lenguaje porque “el
ser que puede ser comprendido es el lenguaje” (Gadamer,
1998, p. 567-568) Para Gadamer el lenguaje es el punto de
convergencia entre el yo y el mundo, otorgándole unidad
originaria, centro especulativo de un acontecer inito; en
donde la estructura especulativa del lenguaje consiste en
anunciar una totalidad de sentido y no precisamente en que
el lenguaje sea la copia de algo dado y ijado.
63
Es más bien que lo dado, la cosa misma es lo “que el
pensamiento padece”. Así que lo que capta el hablante es
la especulación de la cosa misma, otorgándole sentido al
lenguaje, es decir, el lenguaje como dador de sentido se
constituye ontológicamente en una estructura universal de
todo aquello susceptible de comprensión, pero dentro de su
universalidad se advierte la constitución óntica de aquello
lo comprendido en referencia a su objeto de interpretación.
Como vimos en el parágrafo anterior el ser-ahí en su estado
de arrojo se encuentra a sí mismo, de manera inmediata en
lo que hace, usa, espera; en lo más próximo que revela su
ser-en-el-mundo. Todo ello es una experiencia pre-cognitiva.
Esté concepto de experiencia en Gadamer adquiere gran
relevancia, pues en primera instancia es para romper con el
cerco cientiicista, pues lo concibe de manera más amplia
que como lo ha aceptado la ciencia; incluso la noción de
conocimiento no queda reducida a conocimiento sensorial,
sino que acepta un tipo de experiencia distinta a la experiencia
sensorial pero que proporciona a su vez conocimiento. La
experiencia del arte, por ejemplo, tiene una pretensión de
verdad, no igual a la de la ciencia, pero tampoco inferior
a ella. Es una especie de conocimiento, el que permite
esta noción de experiencia que rebasa todo conocimiento
conceptual (Gadamer, 1998, p. 139). En segunda instancia
es que se abre a la experiencia hermenéutica, es decir, a la
comprensión como acontecer de sentido, para ello Gadamer
prosigue el camino de Heidegger, la fenomenología es una
ontología del estar- ahí, el ser no ya como fundamento, sino
como realidad temporal, el ser es tiempo y es en el tiempo
donde se desarrolla la experiencia del ser.
En este sentido encuentra Gadamer una conexión con el
planteamiento trascendental kanteano, pues en la posición
trascendental el conocimiento se ocupa, no de los objetos,
sino de nuestro modo de conocer los objetos en cuanto es
posible a priori. En este sentido es trascendental el conocer de
la posibilidad de conocimiento a priori; así que trascendental,
en este sentido del argumento, no es lo que esta fuera de toda
experiencia, sino más bien lo que antecede a toda experiencia
(a priori) aún no estando dirigido a otra cosa que hacer
posible el simple conocimiento empírico. Ahora el estarahí es comprender, el comprender es la forma originaria
de realización del ser-en-el-mundo. En este planteamiento
trascendental, la comprensión es el factum existencial previo
a toda ulterior diferenciación por lo que Gadamer la utiliza
como una pre-estructura de la comprensión haciendola
incidir en la historicidad de la comprensión y en este
contexto transforma el problema epistemológico al dirigirlo
64 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
al ámbito histórico, pues considera que la razón solo puede
ser real e histórica, lo que a su vez lleva a considerar que la
hermenéutica tendrá que mostrarse en la comprensión de la
realidad de la historia.
Para poder explicar lo anterior Gadamer muestra que la
experiencia tiene diferentes facetas, primero la experiencia
que se encuentra sometida a control, que es la experiencia
de la ciencia, es una experiencia limitada y sin embargo en
los circulos epistémicos se le reconoce gran valor por los
aportes de datos que ofrece, pero es limitada en el sentido de
que está enfocada a la formación de generalidades típicas,
desatendiendo la historicidad existente en la experiencia, pues
el objetivo de la ciencia es el tratar de objetivar la experiencia a
grado tal que ésta quede exenta de todo aspecto histórico. Los
métodos cientíicos le adjudican validez a una experiencia en la
medida en que se conirma, es decir, en tanto sea reproducible
es válida, cancelando su propia historia, desconectandola del
pasado. Por ello Gadamer considera que la adquisición de la
verdad por medio de la experiencia adquiere ciertos tintes
ideologicos, pero “adquieren fundamento por las cosas
mismas” (Gadamer, 1998).
Segundo, la experiencia con carácter histórico, aquella
experiencia que tiene conciencia histórica por un pasado
que adquiere presencia y relevancia al momento mismo de la
experiencia, tal como Aristóteles describe en la primera parte
del libro 1 de la Metafísica “muchos recuerdos de una cosa
hacen una experiencia” (Aristóteles, 2003,4) es la unidad
de diversas percepciones de muchas cosas individuales
retenidas como algo general, es la idea de lo común e
indiferenciado de muchas observaciones individuales del
pasado y eso hace posible cierta capacidad de previsión.
En este sentido la conciencia histórica de la experiencia nos
muestra que la experiencia sólo se da de manera actual en las
observaciones individuales que quedan en la memoria como
imágenes que se retienen de manera peculiar para adquirir la
experiencia, que de manera repentina une aquello con esto,
de improviso más no sin preparación, haciendo valedera la
experiencia hasta que llegue una nueva experiencia, según
Aristóteles esto permite la generalidad del concepto y la
posibilidad de la ciencia misma. Sin embargo la posición
aristotélica de pensar la experiencia sólo en referencia a la
ciencia, como si fuera su cualidad esencial, considerando
aquellos elementos típicos de la experiencia sin contradicción
alguna, ello se conigura como la generalidad del concepto
cual fundamento ontológico, como si lo único importante
para Aristóteles fuera la formación de conceptos, por esto
la experiencia no se puede concebir de una manera lineal,
Lorenzo Espinosa Gómez
sin disrrupciones de estas generlidades típicas. Es más bien
que las falsas generalizaciones se muestran refutadas por la
experiencia y aquello que se tenía por típico, habrá de ser
destipíicado, para poder develar aquello que se encuentra
oculto, esta será la experiencia con carácter historicó; lo cual
lleva a considerar que la experiencia relevante es negativa.
Tercero, la negatividad de la experiencia, esta concepción
tiene que ver con el doble sentido lingüístico cuando
hablamos de experiencia, por una parte como la experiencia
que se encuentra de acuerdo a nuestras expectativas dadas
por la memoria y se conirman; por otra parte se reiere a la
experiencia que se “hace” y que es negativa en el sentido que
la experiencia no cumple nuestras espectativas, no cumple
con lo típico que se esperaba de la experiencia, es una ruptura
con sentido productivo, pues vuelve visible algo que estaba
oculto, así que:
Cuando hacemos una experiencia con un objeto
esto quiere decir que hasta ahora no habíamos visto
correctamente las cosas y que es ahora cuando por in
nos damos cuenta de cómo son. La negatividad de la
experiencia posee en consecuencia un particular sentido
productivo. No es simplemente un engaño que se vuelve
visible y en consecuencia una corrección, sino que lo que
se adquiere es un saber abarcante. En consecuencia el
objeto con el que se hace una experiencia no puede ser
uno cualquiera sino que tiene que ser tal que con él pueda
accederse a un mejor saber, no sólo sobre él sino también
sobre aquello que antes se creía saber, esto es, sobre una
generalidad. (Gadamer, 1998, 428-429)
En este sentido negativo la experiencia es única, pues no
es repetible; es nueva porque durante la experiencia misma
ha sucedido lo inesperado y quien experimenta se hace
conciente de lo novedoso del evento; así que cuando se ha
consumado la experiencia, ya se la posee, de ahí su carácter
irrepetible. El considerar de esta manera la experiencia es
contraria a la concepción que la mantenía ligada a la ciencia
y al control, pues lo que que en un momento fue inesperado,
ahora ya es previsto, el mismo evento no puede convertirse
en experiencia nueva para quien ya lo experimento, hasta
entonces no surja lo inesperado y pueda proporcionar la
vivencia de una experiencia nueva.
Ahora, quien experimenta y puede estar conciente de su
experiencia, en ese sentido ha ganado un nuevo horizonte
de comprensión que estará siempre relacionado con
experiencias anteriores; en este sentido el objeto de
Historia efectual en la constitución de la percepción social
experiencia permite visibilizar lo que antes estaba ausente,
abre la posibilidad a un mejor saber sobre el mismo objeto de
experiencia y modiica el saber y la generalidad adyacente.
Como podemos ver en esta sección, la experiencia relevante
para el desarrollo hermenéutico que pretende Gadamer es la
experiencia de carácter histórico, con conciencia histórica,
esta es la que llama experiencia historica efectual que
permite llegar a la experiencia hermenéutica y en este sentido
mantiene como característica su aspecto trascendental.
La experiencia hermenéutica es aquella que mantiene un
vínculo estrecho con la tradición en el sentido de un pasado
que permite el acceso a la experiencia, no como el apropiarse
de un acontecer que se conoce y domina, sino por el lenguaje
que se expresa por si mismo como si fuese un tu; aclarando
que el tu no es objeto, se comporta respecto a objetos; sin caer
en la malinterpretación de considerar a la tradición como si
fuese la opinión de algún otro, que es a su vez un tú. Gadamer
está convencido que la comprención de la tradición no puede
entenderse como el texto que trasmite como manifestación
vital de un tú; lo entiende como un contenido de sentido, lo
entiende libre y sin conexión directa de los que opinan que
son el yo y el tú.
El sentido de la experiencia hermenéutica analiza el
comportamiento del tú de la tradición, cual compañero de
comunicación al que estamos necesariamente vinculados,
como el yo al tú. Lo anterior le otorga especiicidad a
la experiencia del tú, que no es objeto pero él mismo se
comporta respecto a uno. Así el objeto de la experiencia,
como momento estructural, adquiere un cuasi-carácter de
persona, por lo que la experiencia ya es un fenómeno moral,
como tambien lo es el saber que emana de tal experiencia
como comprensión del otro; tal estructura de la experiencia
permite discernir la experiencia del tú de la experiencia
hermenéutica.
En la experiencia del tú, que observando el comportamiento
humano encuentra elementos típicos y por ello es capaz de
adquirir previsión sobre ellos (conocimiento de gentes) en
ese sentido su comportamiento previsible puede servir como
medio para nuestros ines. En sentido moral es unicamente
referencia a sí mismo, lo que resulta poco aceptable respecto
del imperativo categórico de Kant que no debe utilizar al otro,
jamás como un medio, sino sólo como un in en sí mismo.
El comprender la tradición de esta manera y convertida en
objeto, es tanto como considerar que le es totalmente externa
y no le causa afectación. Aquí encontramos un correlato a la
fe ingenua en el método que pretende otorgar objetividad,
65
alejandose de su realidad histórica, que dicho sea de paso, es
el método de las ciencias sociales del siglo XVIII extraido
programáticamente por Hume (Gadamer, 1998, 435). El
enfocarse sólo en el comportamiento humano de manera
esquemática en cuanto a lo típico y regular, nos deja sólo
en la parcialidad.
En esta experiencia y comprensión del tú, también es el
otorgarle el reconocimiento de persona, reconocer el pasado
como alteridad, como un tú con la intención de apropiarselo,
sin embargo esta manera de la comprensión sigue siendo
la referencia a sí mismo, relación del yo y el tú de manera
dialéctica, que no es inmediata, sino relexiva, en donde la
comprensión del otro es la pretensión del uno, comprensión
de aprender y anticipar relexivamente desde la posición del
otro. En este sentido todo lo que pueden tener de histórico
las relaciones vitales, queda reducido a una lucha por el
reconocimiento recíproco, lo cual encamina a una relación
dialéctica en sentido hegeliano, que puede alcanzar el
pleno dominio de un yo por el otro yo. Así las cosas parece
que la experiencia del tú adquirida de esta manera, puede
considerarse más adecuada que el conocimiento de gentes
basado en el cálculo. El considerar al otro como manejable y
totalmente dominable, resulta ilusorio pues ya nos advierte
Nietzsche que hasta en el siervo existe una voluntad de poder
que se puede volver contra el señor (Nietzsche, 1999). En
esta dialéctica de reciprocidad presente en la relación del yo
y el tú, se encuentra oculta para la conciencia del individuo,
pues el comprender al otro, para que de manera funcional y
en realidad, se mantenga a distancia de la pretención del otro.
En la experiencia hermenéutica lo que enciontramos es el
correlato de la conciencia histórica, la experiencia del tú,
es decir, advertir la alteridad del otro, así como la alteridad
del pasado, adjudicandole al tú un carácter personal. No
se buscan casos de regularidad o generalidades en lo otro
del pasado, de manera contraria lo que se busca es algo
históricamente único. Pero hay que tener en cuenta que si este
reconocimiento tiene la pretension de elevarse por encima de
su propio condicionamiento, lo que hace es enmarcarse en la
apariencia dialéctica que lo lleva a convertirse en señor del
pasado, así como sucedió con la pretensión especulativa de la
ilosoia de la historia universal o con el ideal de la ilustración
que nos indique el camino a la experiencia de toda ciencia
histórica, como era la intención en Dilthey; algo irrealizable
pues se apoya en la ilusión de la falta de prejuicios en su
proceder y niega su condicionamiento histórico, sin alcanzar
a comprender que su actuar aparentemente libre no es más
que una muestra de cuan activamente se encuantra bajo
66 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
otros prejuicios. Así que la conciencia histórica que pretende
comprender la tradición debe tener conciencia plena de sus
propios juicios y prejuicios que lo envuelven como parte de
su propia historicidad, es el estar en la tradición, pero no por
ello se limita la posibilidad de conocer, sino que le ofrece
una apertura al conocimiento mismo.
La experiencia hermenéutica es eso, el conocimiento y
reconocimiento que se desprende de la apertura a la tradición
que posee la historia efectual. Ahí encontramos el correlato
en la experiencia del tú, que no invalida ni pasa por alto su
pretensión, es el dejarse hablar por él. En este sentido la
apertura hacia el otro es la disposición a dejar valer en mí
algo que es contra mí, este es el correlato de la experiencia
hermenéutica Uno tiene que dejar valer a la tradición en
sus propias pretensiones, y no en el sentido de un mero
reconocimiento de la alteridad del pasado sino en el que ella
tiene algo que decir (Gadamer, 1998,439). Ahora, el estar
abierto a la tradición es tambien el saber que la conciencia
histórica no se encuentra en una apertura auténtica, pues el
hacer una lectura de los textos con pretensión histórica, es
saber que esta historia de la tradición ya ha pasado por el
mismo racero y al interiror de su propio saber no se puede
custionar ni poner en duda.
En este orden de ideas, el problema epistemológico se
transforma en tanto que la razón sólo puede ser real e
histórico, esto lleva a considerar que la hermenéutica
tendrá que mostrarse en el campo de la comprensión de la
realidad de la historia. Inclinarse por la autorelexión no es
lo decisivo, pues la comprensión relexiva se encuentra en
un “acontecer” en el que se condensa la “realidad histórica”.
Ahora, la historia efectual es el saberse que la comprensión
está bajo los efectos de la historia y por ello el ser histórico, de
manera ontológica, quiere decir que no puede agotarse nunca
en el saberse, pues todo saber parte de una predeterminación
histórica. Así que la conciencia de la historia efectual
es conciencia de la situación hermenéutica, misma que
mantiene una relación de vínculo del pensamiento ligado a
un horizonte de comprensión.
El horizonte de comprensión es el posicionar el ser
ahí en un punto determinado de manera ontológica y
gnoseológica, se posiciona en él y no frente a él. A partir
de este posicionamiento es que la razón trascendental
inicia su trabajo hermenéutico, en donde el entorno social,
cultural, epistémico, etc. conforman aquello que llamamos
realidad, pero no esa realidad concebida platónicamente en
la República (Platón, 1992, VII) esa realidad que está ahí
Lorenzo Espinosa Gómez
y se encuentra a la mano (Heidegger, 2009); el horizonte
de comprensión se enfoca en la realidad entendida como
texto, como un tejido dialógico en el cual la convivencia y la
interacción humana permite la interpretación, la racionalidad
que interpreta por vía del lenguaje (que no se reduce a la
materalidad del habla) otorgando valor a signos, simbologías
o lenguas.
Es en éste carácter dialógico del ser del hombre, de lo humano,
que lo hace capaz de acciones simbólicas, ello es ya un dar
vida a la comprensión recíproca y a la comunicación misma;
en tal sentido la humanidad en cada particular caso, es un
sujeto con circunstancias individuales de carácter histórico
culturales concretas, por lo que la tabula rasa deviene
imposible, la posibilidad se encuentra en la comprensión
previa, en la pre-comprensión. Así tenemos que opiniones,
expectativas, juicios de valor, etc. que conforman el bagaje
cultural y que se imbrican en los procesos educativos,
formales e informales, todo ello conforman los prejuicios
dados por una tadición cultural. Es decir, los prejuicios dados
por una tradición cultural adquieren un carácter positivo
en Gadamer, pues es la pre-comprensión la que muestra la
circularidad del proceso comprensivo, ya que su resultado
se encuentra anticipado en los pre-juicios; esto sustenta el
insuprimible horizonte que hace posible la comprensión y
ese horizonte en el cual se mueve la existencia humana es
la lingüícidad.
Aunado a lo anterior, es que se concibe el individuo como
sujeto histórico, sujeto en el cual le afecta un sentido de
autoridad que actúa de manera anónima, de manera velada y
sin percibirlo, es la tradición misma. Por otra parte también
existe la autoridad que se toma de manera libre y racional, es
un TÚ al que se le admite que conoce más y de mejor manera,
es la educación. Ámbas autoridades le conieren al sujeto
histórico categorias a priori de comprensión, esto es, pasado
y presente expresado en la cultura y ello le coniere una
manera de comprender su entorno, su mundo y en tal sentido
expresa su initud y evidencia sus límites, de igual manera
determina su horizonte, que es el ámbito de visión que abarca
y encierra todo lo que es visible desde un determinado punto,
tal concepto de situación es el que limita las posibilidades
de ver, de observación y en ese sentido ija un horizonte de
visión, por lo cual considera Gadamer:
La elaboración de la situación hermenéutica, signiica
entonces la obtención del horizonte correcto para las
cuestiones que se nos plantean de cara a la tradición.
(Gadamer, 1993, 366).
Historia efectual en la constitución de la percepción social
67
Esto quiere decir, por lo tanto, que el horizonte se desplaza
con el observador, no se encuentra un horizonte del presente
por sí mismo, como tampoco se encuentran horizontes
históricos por ganar, lo que se encuentra es una fusión de
horizontes en donde viejo y nuevo, pasado y presente crecen
juntos.
estructura política, también se encuentra atravezada por
una historia efectual hermenéutica, la cuestión central
ahora es determinar si tal historia efectual que constituye la
percepción social tiene una determinación intencional. La
aporía permanece vigente.
Así lo que encontramos de fondo es una metodología de
la historia que va conformando un proceso de percepción
social, tal metodología se sustenta en una teoría de la
relación axiológica, es decir que un fenómeno pasa a ser un
hecho histórico por la relación que guarda con un sistema
de valores, o que legitima el conocimiento histórico y a su
vez ofrece unidad cultural, es decir, adquiere historicidad.
Este aspecto de legitimación por vía de la historicidad ofrece
auto certeza desde una posición psicológica que viene a
legitimar la continuidad del proceso histórico (Dilthey,
1980). Lo anterior viene a dar fundamento hermenéutico
del sentir colectivo de la moral misma, como fenómeno
de la percepción social, que si bien se fundamenta en una
Literatura citada
Alcalá, R. (2001). Gadamer: historia y experiencia. Intersticios, 83-93.
Aristóteles. (2003). Metafísica. Madrid: Gredos.
Dilthey, W. (1980). introducción a las ciencias del espiritu. Madrid:
Alianza Universidad.
Gadamer, H. G. (1993). Verdad y método. Salamanca: sígueme.
Heidegger, M. (2009). Ser y Tiempo. Madrid: Trotta.
Nietzsche. (1999). Así hablo Zaratustra. Barcelona: Altaya.
Palmer, R. E. (2002). ¿Que es la hermenéutica? Madrid: Arco.
Platón. (1992). República. Madrid: Gredos.
Sequeri, P. A. (1985). “Hermenéutica y filosofía”. En V. (Eds.),
Diccionario teológico interdisciplinar, I-II. (pág. 1122).
Salamanca: Sígueme.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 69-74
El papel de la inteligencia artificial. Algunas
reflexiones desde la cultura
Gil Santomé Kau
Conservación del Patrimonio Paisajístico. CIIEMAD/IPN. gilunam@yahoo.com.mx.
Resumen
La tecnología nos promete avance cientíicos de vanguardia,
capaces de revolucionar la vida del ser humano. Todos los
días se nos informa de un nuevo descubrimiento cientíico,
donde los inventos de la ingeniería cibernética van
evolucionando las formas de concebir a la realidad. En un
futuro no muy lejano se propone una vida más confortable,
con una calidad de vida reducida de los riesgos cotidianos. La
inteligencia artiicial se promociona como un invento capaz
de ofrecer grandes ventajas, aunque en la sociedad actual
aún hay pensadores para criticar este avance y del peligro
que puede traer a toda la humanidad entera. La cultura es
un elemento que nos permite relexionar acerca de algunas
cuestiones de los nuevos robots y su impacto en la vida social,
por ello retomamos algunos actores acerca de relexionar
de la vida actual, y proponer algunas concepciones que se
tiene acerca de este tipo de tecnología y su impacto en los
próximos años.
Palabras clave: inteligencia artiicial, posmodernismo,
cultura.
Introducción
La tercera revolución tecnológica ha permitido en los últimos
sesenta años, descubrimientos increíble en el campo de la
biotecnología, la genética, la robótica y el desarrollo del
software y hardware, cuyos adelantos han sido aplicados
en la cadena de producción de la economía, así como en el
mejoramiento de la calidad de vida de los seres humanos.
Tenemos aplicaciones como el Internet, que desde un invento
de tipo militar, logró expandirse al alcance de todos, y
llamarse la “supercarretera de la información”. Y los avances
no se detienen, porque cotidianamente, las personas se van
integrando al campo de lo digital, teniendo como ejemplos,
la creación de identidades y mundos virtuales. Se ha logrado
crear un mundo artiicial, atractivo para la mayor parte de
la población Pero deberíamos preguntarnos cuales son los
alcances de estas tecnologías, de las formas de inluir en las
sociedades, del impacto en su aplicación. Existe una parte de
la población mundial quien desconfía de este tipo de avances,
indicando los retos y los peligros que conllevan, porque lo
tanto, es necesario una investigación de las formas en que
avanza el desarrollo tecnológico.
La inteligencia artificial es un avance que involucra
microsistemas y robótica, así como la aplicación de
algoritmos matemáticos, creando organismos artiiciales
capaces de procesar información, analizarla y emitir
una respuesta. Desde la última mitad del siglo XX, los
experimentos han avanzado para promover como en un
futuro automatizado donde los robots tienen un papel
primordial. La inteligencia artiicial permite abrir un mundo
de posibilidades, donde se desarrollen prototipos que
mejoren las formas producción de la sociedad, y aporten
nuevos beneicios. Por ejemplo, las inteligencias artiiciales
pueden realizar acciones consideradas peligrosas como lo
sería la desactivación de una bomba, reduciendo las muertes
humanas inherentes a la realización de este tipo de actividad.
O tenemos la aplicación de los drones, encargados de vigilar
por aire las acciones sucedidas en tierra. Hoy en día muchos
70 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
de estos ejemplos, no son autónomos, sino dependen de
la dirección humana para su funcionamiento, pero no
se descarta la posibilidad de poder ganar más libertad,
obteniendo con ello, el desarrollo de sistemas complejos que
hagan posible la toma de decisiones de una manera lógica y
racional de una forma propia.
La tecnología genera interrogantes acerca de cómo
interactuar con nuevas inteligencias, y de los roles sociales
que tomarán. La teoría social posmodernista desconfía de
los avances de la tecnología, donde con su desarrollo hay
más desafíos que oportunidades. Se crítica el avance de la
tecnología por traer a discusión dilemas éticos y políticos,
donde los posmodernistas sostienen que aunque la tecnología
cuando mejora sus condiciones sociales, por cada mejora
hay una interrogante o un miedo de lo que podría acontecer.
Los avances de la inteligencia artificial
En el desarrollo de las inteligencias artiiciales tenemos
el caso del 11 de mayo de 1997, cuando una computadora
creada por la empresa IBM, se enfrentó con el campeón
de ajedrez Gary Kasparov, y logró tener después de varios
movimientos, una victoria en contra de su contrincante de
tipo humano. Esta acción fue un cambio en el paradigma,
al argumentar como los programas de inteligencia artiicial
podrían tomar decisiones racionales para ganarles a los
humanos. La empresa IBM capitalizó el evento al airmar
que era posible innovar en nuevas inteligencias, para obtener
los inventos de máquinas con decisiones propias. Y a partir
de entonces, las computadoras han prometido la facilidad
del análisis de grandes cantidades de información, abstraer
datos y anticiparse a los hechos futuros. A casi veinte años
de juego de ajedrez, Kasparov, acepta como “ya no se puede
vencer a un ordenador”,1 aceptando la idea de un crecimiento
de las inteligencias artiiciales en formas de razonar mejores
a los de los seres humanos.
Y desde la última década del siglo XX, la informática fue
avanzando para incluir mejores sistemas computacionales
con nuevas aplicaciones para ser aplicados desde las
matemáticas y la ingeniería hasta las formas de organización
social. Y fue un éxito extendido a otros países para la mejora
del software en los chips computacionales. Desde la ENIAC
1
Raúl Andreu “Gary Kasparov: ya no se puede vencer a un ordenador” en
Mundo Deportivo, 27 de febrero de 2014 http://www.mundodeportivo.
com/20140227/otros-deportes/gary-kasparov-ya-no-se-puede-vencer-a-unordenador_54401791071.html.
Gil Santomé Kau
con sus tarjetas perforadas, el mundo ahora se mueve en la
cadena del silicio, con operaciones más complejas y con una
inluencia en otros países del mundo.
En la actualidad, los países adaptan este tipo de inteligencias
artiiciales, con conianza de obtener los mejores inventos
para nuestras acciones rutinarias. Uno estos países con
mayores avances en la computación y los robots, es la
sociedad japonesa, donde desde la segunda guerra mundial,
los japoneses han estado al tanto de las novedades en el
campo de la informática y de la robótica. Y así se han
enfocado a la creación de diferentes robots, para poder
ayudar a la cadena de producción de las empresas. De
hecho, un hotel en Japón abrió recientemente con su
personal totalmente robotizado, desde la recepción hasta
los maleteros, donde se prescinde del elemento humano,
y los visitantes deben de dictar las órdenes para tratar de
hacer su visita desagradable. Este hotel es denunciado por
los investigadores al airmar que en el futuro, los trabajos
humanos serán reemplazados por máquinas eicientes y
sin sentimientos.
Y los robots también ayudan en los temas de la salud, como
son las operaciones que requieren de una precisión para tener
operaciones seguras y coniables. Y también Se utilizan en
la educación como una herramienta lúdica presente en los
juguetes y en las universidades, donde nos enfrentamos
a la manera de convivir con este tipo de inteligencias,
donde la programación determina la serie de órdenes a
seguir, evolucionando para tomar más decisiones con
menor cantidad de información o de requerimiento. Estos
avances son utilizados por muchas empresas con el afán de
tener medios de producción, y desarrollar productos a la
venta. Y las inteligencias artiiciales pueden ser aplicadas
a los usos industriales y a los del hogar, al trabajo o al
entretenimiento, donde cada vez se incluye en las actividades
de las sociedades.
La empresa Google, famosa por su buscador de información,
también tiene una división empresarial para la creación de
un automóvil de manejo independiente con sistemas de
conducción por computadora, donde las personas tendrían
la oportunidad de viajar en una forma segura, y llegar a sus
destinos de una forma eicaz, sin necesidad de conducir y
estresarse por el tráico, mientras la computadora planea
una ruta menos descongestionada. Los autos automatizados
son una realidad, pero aún la tecnología no ha avanzado lo
suiciente ni siquiera para estacionarse de una precisa, y
donde viajar en uno de estos tipos de automóviles tienen
problemas de reconocer a otros autos y personas. Otra
El papel de la inteligencia artificial. Algunas reflexiones desde la cultura
compañía en desarrollar este tipo de autos es Tesla Motors.
“El Model S de Tesla utiliza un sensor de radar y una cámara
frontal como medios de visión para el piloto automático
instalados en sus vehículos eléctricos. Ninguno de los dos por
desgracia, por desgracia, detectó un camión blanco contra
un cielo brillante antes de un choque que... causo la muerte
de un conductor.2” Y por ello hay un serio peligro de muerte,
aunque los prototipos siguen desarrollándose por las empresas
para que en un futuro no muy lejano, puedan hacerse realidad.
Otro ejemplo de la utilización de robots son los drones,
máquinas con capacidad de volar y actuar en zonas donde la
presencia humana puede tardar en llegar, o de ser de difícil
acceso. Estas máquinas comenzaron a ser desarrolladas
en las organizaciones militares, y han sido efectivos para
localizar sitios donde están los enemigos, o la vigilancia de
personas sospechosas. Pero los drones ya no son exclusivos
del gobierno, sino están al alcance de la población civil,
donde ya quieren ser aplicados en el comercio. La empresa
Amazon tiene el proyecto de poder entregar los productos de
este portal de Internet por medio de drones conectados a los
puntos de distribución, para eliminar el contacto humano, y
lograr más productividad a la empresa. Y esta situación no “...
es descabellada desde el punto de vista técnico.”3 Y de aprobar
los trámites exigidos, el objetivo de la empresa, es depender
más de la sistematización de computadoras y máquinas para
poder mejorar su negocio. Donde se enfrenta una oposición
por parte de un sector de la sociedad, quien considera que
no se debe de seguir dejando las decisiones a máquinas sin
sentimientos.
La inteligencia artiicial en la cultura
El desarrollo de una nueva generación de robots causa un
impacto sociológico en los grupos humanos, por el papel que
jugarán, su interrelación con otras entidades y su impacto en
general en las presentes y futuras generaciones. Una de las
críticas más desarrolladas de estos impactos, provienen desde
los años setenta del siglo XX, cuando con la automatización,
los investigadores de diferentes campos del conocimiento
( desde ingenieros, biólogos y administradores, etc.) se
preguntaban por el futuro y las formas de trabajar con los
robots en el gobierno y hasta en las casas.
2
Andy Kessler “Ahí llegan los robots, démosle la bienvenida” en Wall Street
Journal Américas en periódico Reforma, jueves 25 de agosto, México DF, Sección
Negocios, pág. 7.
3
José Luis de Haro. Amazon. Un nuevo modelo de negocio a un golpe de click.
Ed. Conecta, México DF, 2015. Pág. 138.
71
Y uno de los primeros elementos de crítica, son el remplazado
de la mano de obra humana por artiicial, donde con la
automatización de los procesos, se pierden empleos, con
una gran cantidad de personas despedidas con la necesidad
de buscar un nuevo medio para subsistir. Y los robots tienen
la ventaja de no cansarse, pueden ser utilizados por muchas
horas, y pueden ser reemplazados. Su uso en la industria
puede lograr abaratar los costos. “... según un estudio de la
Universidad de Stanford de 2013, algunos de los robots en
plantas fabriles, cuestan el equivalente de unos $4 dólares
por hora, son más eicientes y más baratos”4 Y estos robots
no están sindicalizados y pueden trabajar continuamente,
donde después de los años ochenta se comenzaron a encender
las alarmas por el desempleo a causa de los robots, como
una razón para odiarlos por parte de la sociedad, además de
desconiar de sus beneicios.
Observemos a los bancos, quienes ya cuentan con cajeros
automáticos que realizan una gran cantidad de operaciones
(no solo el depósito y retiro de dinero) y con ello se dejan
de contratar a cajeros humanos, y pueden ser usados las
24 horas al día, por los 365 días al año, pero requieren del
manejo de instrucciones básicas en el plano de informático,
desconocidos por un grupo amplio de la población, por lo
que algunas ocasiones se tiene que usar el elemento humano
en algunos casos, aunque este elemento desaparecerá en
cuanto las inteligencias artiiciales evolucionen para mejorar
la interacción con las personas humanas.
Vivimos con los robots desde hace más de 50 años, y
aunque no los conocemos a fondo, estamos cada vez más
inmersos en este espacio tecnológico. Una persona puede
tratar de apartarse de estos avances, pero lo cierto es, que el
mundo se mueve a un ritmo vertiginoso, donde si no estás
relacionado con este tipo de tecnologías corre el riesgo de
quedarte fuera de la sociedad. Este periodo de transición ha
sido visto por muchos intelectuales para poder debatir acerca
de los peligros o beneicios de este de avance tecnológico,
por lo que a continuación se retoman algunos autores, para
concebir a este de innovaciones como peligrosas.
Pero no solo hay críticas en el plano de los estudios sociales
y técnicos, sino en la literatura, donde el campo de la ciencia
icción, ha logrado abrir oportunidades para los escritores,
para poder imaginar otros mundos en el provenir. Así se
pueden concebir avances y su impacto. Los escritores de
ciencia icción escriben historias que nunca puedan hacerse
realidad, pero sus relatos historias, nos ayudan a imaginar
4
Andy Kessler op. Cit.
72 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
las sociedades del futuro, donde los robots tienen un papel
principal. Y las novelas de tipo fantástico pueden ser las
historias para impulsar a los cientíicos reales a tratar de
alcanzar los avances, como en las novelas de Julio Verne,
donde los cientíicos se basaron en sus historias para poder
crear el helicóptero, el submarino, el tanque, etc.
Hay algunos científicos que consideran a este género
literario como un instrumento con falta de valor para analizar
el desarrollo tecnológico, pero es indudable que estas
expresiones han logrado impulsar las innovaciones humanas,
para primero imaginar lo imposible, y después tratar de hacerlo
posible. A pesar de las críticas no debemos dudar como: “... los
críticos y los novelistas, los dramaturgos y los poetas han sido
los principales, si no los únicos, formuladores de inquietudes
individuales y hasta de problemas públicos.”5 Sus ideas han
podido inluir en las grandes mentes, para poder adaptar la
icción a la realidad. Y puede ser que muy pronto, por las ideas
en la literatura de ciencia icción, tengamos al alcance de la
mano, inventos antes no conocidos.
Uno de los novelistas más conocidos en el tema de la
inteligencia artiicial, es sin duda Isaac Asimov, un cientíico
con doctorado en Biología, pero que incursionó tanto en las
Ciencias Naturales, así como en las Ciencias Sociales y en
la Literatura. Para Asimov, “... en una historia de icción,
hay bastante más ciencia que lo contiene...”6 Por lo tanto, es
muy factible hacer una visión prospectiva con los elementos
futuros, para indicar como los sistemas de inteligencia
evolucionarían de la cadena de números, donde habría una
presencia de este tipo de inteligencias desde los ámbitos más
complejos hasta los sencillos, como el hogar. Cada una de
sus historias logró prever situaciones sobre el tratamiento
de los robots, si podrían tener conveniencias propias.
Con sus descubrimientos de su época, Asimov imaginó
sociedades futuras con alta dependencia a las inteligencias
artiiciales, y con ello, el autor realizaba una crítica a la
conianza ciega de la tecnología por parte de la gran mayoría
de los cientíicos, porque había condiciones de peligro en
el desarrollo de los robots. Si está comprobado que todo el
universo tiende a la entropía, era muy factible prever que
aunque se diseñarán robots para seguir las órdenes humanas,
con el avance cientíico era factible que las inteligencias
artiiciales lograrán tener sus propias ideas y decisiones. Una
de sus obras más conocidas de Asimov sobre este asunto,
C. Wright Mills. La imaginación sociológica. Ed. Fondo de cultura Económica,
México DF, 6ª reimp, 2014, P. 37.
6
Isacc Asimov Sueños de robot. Ed. De Bolsillo, México DF, 2004, p. 16.
5
Gil Santomé Kau
es el libro de “Yo robot”, 7donde se expone las tres leyes de
robótica donde los seres humanos trataban de controlar a las
inteligencias no humanas para evitar su rebelión, por ello los
robots deberían ser programados con leyes para respetar la
vida de los seres humanos. Las leyes de Asimov son:8
Un robot no puede dañar a un ser humano o dejar que por su
inacción se haga daño a otro ser humano.
Un robot siempre debe de acatar las decisiones humanas,
excepto si entra en conlicto con la primera ley.
Un robot tiene que proteger su existencia, siempre y cuando
no viole la primera y la segunda ley.
Y pueden parecer estas leyes, un invento descabellado del
mismo escritor, pero en el análisis, comprendemos una
inquietud, de la manera de seguir programando a los robots,
para evitar daños en contra de sus creadores. Porque en
las leyes se menciona, la necesidad de programar reglas
exclusivas para los robots, para evitar que las invenciones
puedan tener decisiones más autónomas, evitando tener
un grado de razonamiento o sentimientos, donde de no
programar así a estos robots, habría peligro de desarrollar
inventos con la posibilidad de acabar con la raza humana.
Y se mencionaba que a pesar de tratar de tener un robot
controlado, podrían existir fallas de robots, donde estos
podrían rebelarse contra su creador, un temor muy antiguo,
donde uno de los ejemplos más conocidos en el mundo de
la literatura, es el caso de Víctor Frankenstein.
Para Asimov era imparable tener una evolución de los robots
donde obtuvieran nuevos elementos de tratar y analizar en el
mundo. En uno de sus cuentos, el autor hablaría acerca de la
posibilidad de tener automóviles con inteligencia para poder
realizar muchas de sus funciones bajo criterios propios.9
Porque se nos indica la existencia de un automóvil, con un
cerebro electrónico, pero de sentimientos femeninos.10 Por
lo tanto, hay eiciencia acerca del modo de conducir, pero
además el mismo sistema para comprender las actitudes de
las personas, y hacer reaccionar al automóvil, para poder
demostrar sentimientos como el enojo o la alegría, lo que sería
un complemento muy adecuado para las personas con falta
de capacidad de relacionarse con los seres humanos, porque
tendrían la oportunidad de interactuar ahora con los objetos.
7Convertida en película de uno de los estudios de los Estados Unidos de América.
8
Isacc Asimov. I, Robot, Ed. Signet, Estados Unidos de América, 1950, 192 pp.
9
Un invento que se ha materializado en la realidad a partir de las ideas del siglo XX.
10
Isaac Asimov. Cuentos completos. Vol. 1 Ed. Punto de Lectura, México Df,
1990, 816 pp.
El papel de la inteligencia artificial. Algunas reflexiones desde la cultura
La tecnología ha avanzado, para crear nuevos chips
conductores de la información, capaces de analizar una gran
cantidad de datos, y poder hacer múltiples soluciones a un
solo problema. En otra novela de Asimov, llamada “Sufragio
Universal” propone una máquina para poder elegir a los
mejores representantes humanos dentro del gobierno11.
Una máquina, en base a todos los datos recopilados por
las personas haría cálculos matemáticos para detectar sus
fortalezas y debilidades humanas, y así elegir a las personas
óptimas en el mundo, para ocupar un cargo de representación
popular, evitando los problemas de la corrupción y la mala
de toma de decisiones, dejando en manos de esta máquina
las decisiones más importantes de la política por encima de
los métodos democráticos.
73
Pero ante el panorama pesimista de una máquina malvada,
también se considera la posibilidad de tener una inteligencia
artiicial con sentimientos buenos y altruistas, En la película
de Luna 1099 días, se explora la posibilidad de tener una
inteligencia que apoya a encontrar la verdad, y se opone
a los planes de programación impuestos por el hombre,
donde esta inteligencia ayuda al tripulante. Y también es
otra novela de Asimov, llamada Hombre Bicentenario, de
un robot que anhela parecerse a los seres humanos, lo que
nos pone logrando vivir sentimientos como el amor o la
bondad, lo que nos pone a relexionar sobre los efectos de
interacción.
El análisis desde la cultura
Y las máquinas también lograrían ayudar a la humanidad en
la conquista del espacio, ayudando a los tripulantes humanos,
con la posibilidad de estar en funciones en lo que dure el
viaje intergaláctico. Pero también aquí hay discusión acerca
del grado de intervención de las inteligencias artiiciales en
la nave. En la icónica película de Stanley Kubrick, Odisea
al Espacio, el modelo de computadora HAL 9001, es un
programa diseñado para lograr a ayudar en las funciones
esenciales para la nave espacial, y de soporte del sistema de
vida de los astronautas. Pero la máquina toma vida propia,
rebelándose en contra los de los humanos, por considerarlos
peligrosos por su existencia, y trata de aniquilarlos a todos
los sujetos humanos.
Y esta posibilidad de que una inteligencia artiicial se rebele
en contra de los humanos, es un temor muy conocido, un
ejemplo, en la franquicia hollywoodense del Exterminador,
se propone la creación de un sistema de defensa militar
cibernético, que cobra vida, acabando con la mayor parte
de la raza humana. Esta película en la década de los años
noventa, despertó la imaginación de muchos cinéilos,
quienes consideraban que si era posible este escenario,
y donde deberíamos de mostrarnos escépticos ante los
nuevos desarrollos tecnológicos, para evitar los inventos
para desarrollar una maquina capaz de destruir a todos. Y
fue una franquicia exitosa porque apelaba a la conciencia
de las personas, el de creer en la posibilidad de efectuarse
estos eventos por partes de las máquinas, en contra de los
seres humanos, también retomada en una novela de terror de
Stephen King, donde todos enseres domésticos toman vida
propia, para hacer daño a los seres humanos, por lo tanto, hay
un anhelo por la vida pasadas más simple y menos peligros.
Eduardo Caccia. “No soy un robot, todavía” en periódico Reforma, sección
Opinión, México DF, domingo 28 de agosto de 2016, p 10.
11
Las máquinas robotizadas ocupan un lugar cada vez más
privilegiado en la vida común de las personas, gracias a
ellas, se han podido mejorar los sistemas de comunicación,
así como la creación de inteligencias capaces de poder
responder a los sistemas humanos, para poder otorgar
una respuesta en base a los estímulos humanos. Y aunque
muchas personas no se dan cuenta de esto, cada vez
las inteligencias artiiciales van ocupando un espacio
mayor en nuestros sistemas de producción, para recordar
como el ingenio humano avanza más allá de lo esperado,
proporcionando elementos para evitar los trabajos pesados
y peligrosos.
Hay un temor fundado en una parte de la sociedad, para
rechazar los beneicios de la tecnología, solo por el simple
hecho de tomar los avances sin ningún tipo de previsión,
porque la ciencia avanza para ayudar a los seres humanos,
pero genera otra serie de contradicciones, para los cuales
tenemos que tener un espíritu crítico para poder estos
avances y su impactos. Los robots tendrán un rol social más
importante en los seres humanos, sea indicado en la literatura
de icción o por parte de todo tipo de películas. Podemos
considerar a los robots como seres para la exploración del
espacio, o como vigilantes de la seguridad al muy estilo de
Robocop, efectivos de librar nuestras guerras por nosotros,
como lo hace en alusión Alvin Toler en uno de sus libros12,
y donde la presencia humana se hace a control remoto, como
lo hacen los drones. O podemos pensar en los robots para
ayudar a mejorar la vida de los seres humanos, como robots
sirvientes o trabajando por nosotros.
Alvin y Heidi Toler. Las guerras del futuro. Ed. Plaza y Janes, Barcelona
España, 1995, 416 pp.
12
Gil Santomé Kau
74 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
A pesar de nuestra concepción sobre los robots lo cierto
es, que las tecnologías seguirán desarrollándose, y las
inteligencias artiiciales serán desarrolladas por todo tipo de
empresas y universidades. Y tal vez sea inevitable el futuro
enunciado por Alan Turing (cientíico quien diseño una
máquina para poder derrotar a otra máquina, y quien concibió
las primeras teorías de los algoritmos computacionales), al
airmar que: “En algún momento habrá que esperar que la
máquinas tomen el control”13 Y por lo tanto estos avances no
pueden ser contenidos.
Conclusiones
A pesar de todos los avances logrados, el desarrollo de las
inteligencias artiiciales se encuentra a un debate cuyos
resultados aún no concluyen. Todas estas tecnologías tienen
un impacto sobre la sociedad, cuyos efectos son aceptados
pero; sin embargo, otra parte de la misma sociedad se resiste
al cambio, por el ánimo del cambio los estilos de vida, por
nuevas formas de interacción entre las máquinas y los
seres humanos. Los conlictos como el perfeccionamiento
de la tecnología, no solo son el problema del desarrollo
de la tecnología, sino hay un debate ilosóico acerca de
la promoción de este tipo de inteligencias. Pero en este
intercambio de ideas debe de realizarse al considerar que hay
una solución única al problema, sino hay diferentes posturas
convergentes y divergentes. Al inal no hay respuestas
correctas y equivocadas al considerar que:
“Tener respuestas exactas, y tener cosas absolutamente
incorrectas y equivocadas reduce la necesidad de
pensar...”14
Eduardo Caccia. Óp. Cit.
Isaac Asimov. La relatividad del error. Ed. Planeta, México DF.
13
14
Se requiere de tener opiniones de cualquier tipo, para conocer
cómo pueden existir beneicios en este tipo de tecnología, pero
también se debe de considerar los posibles riesgos al tratar
de implementar este tipo de avances. Y cuando los valores
sociales puedan cambiar, para poder aceptar un mundo más
automatizado, veremos como las preocupaciones del ente
colectivo, puedan disiparse, pero siempre y cuando logren
conocer los beneicios al usar estos tipos de tecnologías,
con los elementos de seguridad y de confort para la misma
población. Al final del análisis de la cultura, podemos
conocer las formas de unión de la tecnología en la sociedad, y
lograremos dar un impulso a la innovación de las inteligencias
artiiciales o promover su retroceso.
Literatura citada
Andreu, Raúl “Gary Kasparov: ya no se puede vencer a un ordenador”
en mundo deportivo, 27 de febrero de 2014 http://www.
mundodeportivo.com/20140227/otros-deportes/gary-kasparovya-no-se-puede-vencer-a-un-ordenador_54401791071.html
Asimov, Isaac. Sueños de robot. Ed. De Bolsillo, México DF, 2004, 485 pp.
Asimov, Isaac. Cuentos completos. Vol. 1 Ed. Punto de Lectura, México
DF, 1990, 816 pp.
Asimov, Isaac. La relatividad del error. Ed. Planeta, México DF, 244 pp.
Asimov, Isaac. I, Robot, Ed. Signet, Estados Unidos, 1950, 190 pp.
Caccia, Eduardo. “No soy un robot, todavía” en periódico Reforma, sección
Opinión, México DF, domingo 28 de agosto de 2016, pág. 10
De Haro, José Luis. Amazon. Un nuevo modelo de negocio a un golpe de
click. Ed. Conecta, México DF, 2015, 189 pp.
Kessler, Andy “Ahí llegan los robots, démosle la bienvenida” en Wall
Street Journal Américas en periódico Reforma, jueves 25 de
agosto, México DF. Sección Negocios, pág. 7
Toler, Alvin y Heidi Las guerras del futuro. Ed. Plaza y Janes, Barcelona
España, 1995, 416 pp.
Wright Mills C. La imaginación sociológica. Ed. Fondo de cultura
Económica, México DF. 6ª (Ed). 2014, 255.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 75-82
El trabajo de las mujeres y niños(as) en México: Pachuca, Real del Monte
y algunas regiones de Puebla, durante el siglo XVIII y XIX
Danae Duana Avila1 y Elías Gaona Rivera1
Ciencias Económico Administrativas-Universidad Autónoma del estado de Hidalgo. Área de Comercio Exterior- Campus ICEA-La Concepción. Circuito la Concepción,
km 2.5, San Juan Tilcuautla Municipio de San Agustín Tlaxiaca, Hidalgo. C. P. 42161. Tel: 01 (771) 717 2000, Ext 4171. (duana@uaeh.edu.mx; duananos@yahoo.com.mx).
1
Resumen
A lo largo de la historia, alrededor del mundo, las mujeres
y los niños han estado presentes en distintas actividades
económicas y en los procesos productivos. Por tanto,
el objetivo de este trabajo será analizar las diferentes
actividades económicas que realizaban las mujeres y los
niños en México, poniendo énfasis en el sector minero.
Las mujeres en México durante el siglo XVIII y XIX se
desempeñaban como: enfermeras, cuidadoras de nodrizas,
nodrizas, cocineras, galopinas, mandaderas, costureras,
lavanderas, maestras de labor, panaderas, atoleras,
chichiguas, amas de crías, amas de llaves, sirvienta, celadora,
sobrestante, etc. En la minería novohispana realizaban las
funciones de pepenadoras, planilleras, morrongo, lavadoras
y guardas. En general las profesiones de las mujeres eran las
más bajas y no requerían de conocimientos especializados.
En relación con el trabajo infantil José María Borrás, et al,
coordinó el libro “Trabajo infantil en España (1700-1950)”,
el primero dedicado especíicamente al trabajo infantil
en España. En doce capítulos se aborda el trabajo infantil
durante el siglo XVIII y la primera mitad del XX. En este
observamos que las niñas y los niños eran empleados en la
agricultura, la manufactura, la pesca, la minería, la industria
y el sector servicios.
En el caso de México, en el periodo novohispano, los
niños se desempeñaban como: sirvientes, barberos, sastres,
tlachiqueros, carpinteros, herreros, pintores, trajinantes,
veleros y zapateros, entre otras. En el sector minero los niños
realizaban las funciones de pepes (ayudante del barretero
quien alumbraba, recogía el metal y lleva la barra a sacar punta,
zorras niños que bajan a las minas; sin percibir salario, para
aprovechar los desperdicios del metal tanateros). De acuerdo
con los datos encontrados, el número de trabajadores de los
niños fue siempre superior al de las mujeres. En relación con el
salario que percibían, tanto niños como mujeres, éste siempre
fue inferior al recibido por los hombres.
Para la elaboración de este trabajo se consultaron varios
archivos históricos: 1) El Archivo General de la Nación, 2)
el Archivo Histórico de la Secretaría de Salud, 3) El Archivo
del Arzobispado de la Ciudad de México, 4) el Archivo
Histórico y Museo de Minería A.C., y 5) Archivo Histórico
del Municipio de Real del Monte.
Palabras clave: Pachuca, Real del Monte, niños(as),
mujeres, trabajo, salarios.
El trabajo de las mujeres
Las mujeres han laborado en todos los sectores económicos,
el primario, el manufacturero y el de servicios1. En el periodo
novohispano, en el siglo XVI, en las minas del Potosí las
mujeres trabajaban como palliris (Serrano, 2004: 22). La
palabra palliri procede del aimara palla-ri, el que recoge. De
esta forma, las Palliris eran las mujeres que recolectaban,
en las afueras de las minas y entre los desmontes mineros,
piedras que aún conservan algo de minerales. De igual forma,
en la Nueva España en el siglo XVIII, en la ciudad de México,
El sector primario incluye el trabajo en la agricultura, ganadería, la pesca, la
explotación forestal y la minería.
1
Danae Duana Avila y Elías Gaona Rivera
76 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
encontramos que las mujeres desempeñaban las funciones
de: maestras2, cocineras3, costureras4, hilanderas5, portera6,
panaderas7, etc. También laboraban en fábricas de Tabaco y
algunas llegaron a ser maestras de mesa8. En cuanto a este
producto, las fábricas más importantes se localizaban en
México y Querétaro. Esta última región ocupaba a unos 3000
jornaleros, entre los cuales se encontraban 1900 mujeres
(Humboldt).
En el siglo XIX, en España, las mujeres trabajaban como
obreras en fábricas de tabaco y en la industria textil, realizaban
servicio doméstico y se dedicaban a actividades agropecuarias
(Sarasua, 2005). En el mismo siglo, pero en el México
independiente, en la capital del país, tenemos que las mujeres
se desempeñaban como: enfermeras, cuidadoras de nodrizas9,
nodrizas o chichigua, cocineras, galopinas10, mandaderas,
costureras, lavanderas, maestras de labor, panaderas, atoleras11,
celadora, lavandera etc. En el sector minero realizaban las
funciones de pepenadoras12, planilleras13, morrongo, lavadoras
y guardas. En general las profesiones de las mujeres eran las
más bajas y no requerían de conocimientos especializados.
A continuación veremos dos autores que mencionan
y describen las actividades que realizaban las mujeres
dentro de la minas. Así por ejemplo, Humboldt (2011:
354) nos dice que en la mina la Valenciana “añadiendo
1300 persona (entre hombres, mujeres y muchachos) que
trabajan en los malacates, en el transporte de los minerales
y en los pepenados, resulta que estaban empleados 3100
individuos en las varias labores de la mina”14. Por su parte,
2
Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Regio Patronato
Indiano/ Capellanías (019)/ Volumen 248/.
3
Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Inquisición/ Inquisición
(61)/ Volumen 1338/.
4
Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Regio Patronato Indiano/
Matrimonios (069)/ Volumen 102/.
5
Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Inquisición/ Inquisición
(61)/ Volumen 1181/.
6
Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Regio Patronato Indiano/
Hospitales (054)/ Contenedor 11/ Volumen 28/.
7
Archivo Histórico de la Secretaría de Salud, fondo: Casa de Niños Expósitos,
Sección: administración, libro7, año: 1788-1793.
8
Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Real Hacienda/ Archivo
Histórico de Hacienda (008)/ Volumen 1004/.
9
Nodriza. Mujer que amamanta o cría niños que no son suyos.
10
Galopina. Es la persona que limpia las mesas y ayuda al mesero (a veces) a servir,
son las que se llevan los platos sucios a la cocina.
11
Atolera. Mujer cuya labor era realizar "Atole" una bebida que se elabora con maíz
cocido, molido, diluido en agua o leche y hervido hasta darle cierta consistencia;
es típica de México y de otras zonas de América Central.
12
Pepenadora: Era quien limpiaba y escogía el metal que contenía plata,
separándola de tierras inútiles.
13
Planillera: Persona encargada de lavar la amalgama de plata. Operación con la
cual le quitaban las impurezas a la plata.
14
Suponemos que las mujeres realizaban las labores de pepena.
Mentz (2001: 564) menciona “En el exterior de las mina
se quebraban las piedras, mientras que la pepena….. se
hacía de manera manual y en muchas minas participaban
mujeres”15.
En los hombres, durante el periodo de nuestro estudio,
distinguimos varios tipos de trabajo, los cuales coexistieron
durante el periodo novohispano: 1) el repartimiento
o cuatequil, 2) la mano de obra esclava y 3) el trabajo
asalariado. En el caso de las mujeres y los niños no hemos
encontrado información que nos indiquen que trabajaran
bajo la modalidad de repartimiento, pero si del modo esclavo
y asalariado. En el Archivo General de la Nación aparecen
ejemplos de las actividades que realizaban las esclavas. En un
documento sin fecha, Francisco de Baeza y Moncada, teniente
de caballería, pide una esclava de los ingenios de un colegio,
que le sirva de chichigua (nodriza), edad de 15-24 años. No se
especiica cantidad ni sitio. De 1810 aparece una lista de los
salarios pagados a las maestras de mesa, de la Real Fábrica de
Cigarros de la Villa de Guadalupe. De 1796 hay una petición
presentada por las Maestras de Mesa de la Fábrica (de puros)
para que se les aumente el salario por tener mayor trabajo (no
se especiica el incremento salarial, ni su salario)16.
Mujeres trabajadoras en Pachuca y Real
del Monte
En la ciudad de Pachuca, en el padrón de 1768, encontramos
que de un total de trabajadores registrados, 5.18% eran
mujeres, las cuales se desempeñaban como: amas de crías,
amas de llaves, cocineras y sirvientas. De las cincuenta
mujeres, 88% eran sirvientas, 6% amas de crías, 4%
cocineras y una sola persona, que representaba 2%, realizaba
el trabajo de ama de llaves. Indias, mestizas, españolas,
mulatas y moriscas se desempeñaban como sirvientas, en
orden de importancia, como se señalaron arriba17. Como
ama de crías solo aparece registrada una mestiza y la
función de ama de llaves era realizada por una española. En
el caso de las 2 mujeres cocineras, una era mestiza y la otra
mulata. En el padrón de Real del Monte, del mismo año que
el de Pachuca, solo aparecen registradas dos mujeres que
laboraban en ese lugar, una era sirvienta y la otra cocinera,
Los tiros a los que se reiere pertenecen a las minas de Sultepec, ubicadas en el
estado de México, y el periodo es del poririato; es decir, a inales del siglo XIX.
16
Archivo General de la Nación/ Instituciones Coloniales/ Indiferente Virreinal/
Cajas 1-999/ Caja 0554/ Expediente 005.
17
No en todos los casos aparece indicada la casta.
15
El trabajo de las mujeres y niños(as) en México: Pachuca, Real del Monte y algunas regiones de Puebla, durante el siglo XVIII y XIX
ambas eran mestizas18. Con estos datos podemos observar
claramente que en Pachuca predominaba el trabajo de las
mujeres, respecto a Real del Monte, siendo que la población
total era mucho mayor en el segundo lugar, que en el primero.
Esta situación se puede deber a que Pachuca era cabecera
municipal, por tanto, tenía varias poblaciones sujetas a esa
cabecera, entre las cuales se encontraba Real del Monte19.
La población en éste último lugar era de 7 159 personas,
mientras que en Pachuca eran sólo 3 556.
Con respecto a Real del Monte, en los archivos del Museo
de Minería de Real del Monte y Pachuca del fondo del
siglo XIX, encontramos en los libros semanales de
salarios el nombra de varias mujeres y las actividades que
desempeñaban. En la semana del 5 de abril de 1828, dentro
de las haciendas de beneicio de Regla aparecen registrados
144 trabajadores en total, de los cuales 14 eran planilleras, es
decir el 10.2 %. El peso de las mujeres en la plantilla laboral
de las haciendas de beneicio se va a reducir, en términos
relativos, porque la plantilla laboral va a crecer hasta 336
trabajadores en 1862, manteniéndose ijo el número de 14
planilleras, por lo que en porcentaje sólo representan el 4.1
%20. En estos casos no aparece el nombre de las trabajadoras
planilleras. Sin embargo, en una semana de 1882, Matilde
Juárez, aparece registrada como pepenadora, de igual
forma, en la semana del 29 de marzo de 1884 aparece el
nombre de Celia Hoguera, quien se desempeñaba como
morrongo. Según Enciso (1995), morrongo era un niño de
10 a 12 años encargado de llevar los alimentos a los mineros,
generalmente hasta el interior de la mina. Por tanto, la
función de morrongo no era especíica de niños, quedando
claro que las mujeres también reaizaban esta funcion. El
oicio de lavandera aparece en tres semanas, de tres años
diferentes, éstos son: 2 de febrero de 1889, 20 de diciembre
de 1890 y 9 de mayo de1991. Los nombres de las mujeres que
aparecen en esas fechas son: Cayetana Vera y Rosa Valdez.
Esta última aparece dos veces. En todas las semanas de los
años señalados arriba, la plantilla de trabajadores superaba
a los mil, por tanto, la relación era de 1/100021.
18
Los dos padrones se analizan con más detalle en el capítulo V.
A inales de la colonia, la Nueva España estaba organizada en intendencias, las
cuales a su vez se dividían en cabeceras municipales, siendo elegidas éstas por ser
las regiones más prosperas.
20
Datos obtenidos de Archivo
Histórico y Museo de Minería A.C, Fondo siglo XIX, sección negociaciones,
serie, haciendas de beneicio, subserie hacienda de regla: 2)1828 abr.5-1832jul28
y 9)1860 jul.30 -1862 ago.23.
21
Datos obtenidos de Archivo Histórico y Museo de Minería A.C, Fondo siglo XIX,
Sección: Contaduría General; Serie: Memorias; Subserie: memorias semanarias,
Volúmenes (94,99, 105,111).
19
77
El trabajo de los niños(as)
No todas las tareas efectuadas por los niños han de catalogarse
como trabajo infantil. La participación de los niños en trabajos
que no quebrantan su salud y su desarrollo personal ni
interieren con su escolarización se considera positiva. Entre
otras actividades, cabe mencionar, la ayuda que prestan a sus
padres en el hogar o la asistencia en un negocio familiar. Este
tipo de diligencias son beneiciosas para el desarrollo de los
infantes y el bienestar de la familia; les aportan caliicaciones
y experiencia, y les ayuda a prepararse para ser miembros
productivos de la sociedad en la edad adulta.
La Organización Internacional del Trabajo es muy clara al
momento de deinir el Trabajo Infantil: “Es aquél que priva
a los niños de su niñez, su potencial y su dignidad, y que es
perjudicial para su desarrollo físico y psicológico”22. Así
pues, se alude al trabajo que:
Es peligroso y prejudicial para el bienestar físico, mental o
moral del niño;
Interiere con su escolarización puesto que:
Les priva de la posibilidad de asistir a clases;
Les obliga a abandonar la escuela de forma prematura, o
Una vez aclarado lo que es el trabajo infantil, procederemos
a analizar el trabajo infantil durante el periodo de nuestro
estudio. El trabajo infantil era el rasgo más característico
de la Revolución Industrial. No obstante, el trabajo infantil
también se utilizó en las minas de Almadén, en España en el
siglo XVIII. Menéndez (1991: 169) señala que:
Desde muy niños comienzan a tratar con los minerales.
Hay niños, que ya de ocho, o nueve años asisten a fregar los
caños de los hornos de fundición. Y desde tan tierna edad se
sujetan sus cuerpos a los acicates de los Minerales…. Por
esta razón desde tan jóvenes padecen el temblor, lacidez
en articulaciones, malos colores, palidez, inlamaciones
de boca, y muchos otros accidentes. Tambien hay indicios
de que se utilibaba trabajo infantil en las minas del potosí
durante el periodo novohispano, Serrano (2005: 23) nos dice
que los menores eran empleados como mano de obra barata
en las minas del Potosí, desempeñando la función de palliris.
En relación con el trabajo infantil José María Borrás et al.
(2011) coordinó el libro “Trabajo infantil en España (17001950)”, el primero dedicado especíicamente al trabajo
22
Organización Internacional del Trabajo: http://www.ilo.org/ipec/facts/lang--es/
index.htm.
Danae Duana Avila y Elías Gaona Rivera
78 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
infantil en España. En doce capítulos se aborda el trabajo
infantil durante el siglo XVIII y la primera mitad del XX.
En este trabajo se aprecia como las niñas y los niños eran
empleados en la agricultura, la manufactura, la pesca, la
minería, la industria y el sector servicios. Del trabajo de
arriba, sobresale el capítulo “El trabajo de los menores en
la minería española, 1840-1940” de Pérez de Perceval et
al. (2001:158). Al interior de éste se muestra el porcentaje
de menores en la minería española de 1868 y hasta 1939,
sin incluir, Murcia, Almería y Albacete. Desde los años 60’s
del siglo XIX y hasta el in de la Primera Guerra Mundial
el porcentaje luctuó entre el 10 y el 14 del total de los
trabajadores mineros. Las edades de los infantes luctuaban
entre menos de 10 años y 17. Los oicios que desempeñaban
eran de: picador y marrero23.
El oicio dominante es el de sirvientes, 71.2% de un total
de 52 niños que aparecen en el padrón. Los castizos,
mestizos y españoles desempeñaban esa función 2425.
Otros oficios realizados por los niños eran: barbero,
sastre, tlaquichero, carpintero, herrero, pintor, platero,
trajinante, velero y zapatero. Los 52 niños registrados
hacían referencia a Pachuca y a las poblaciones sujetas a
esa cabecera: Atotonilco el Chico, Omitlán, Pachuquilla,
Real del Monte, Tizayuca, Tolcayuca, Villa de Tezontepec
y Zapotlán (Cuadro 2). El treinta y uno por ciento de los
niños pertenecían a Pachuca y el resto a las poblaciones
sujetas a esa región, destacando el pueblo de Tezontepec
con 19% del total. Por otro lado, podemos airmar con
toda seguridad que todos los niños eran aprendices de esos
oicios debido a su corta edad.
El trabajo de los niños(as) en Hidalgo: Pachuca, Ixmiquilpan
y Real del Monte
Cuadro 2. Número de niños(as) con oicios, en Pachuca y
alrededores, 1791.
Lugar
Pachuca
En el caso de México, en el padrón de Pachuca de 1791 hay
un apartado que lleva como título “Relación de muchachos que
se aproximan a la edad de diez y seis años, en la cual aparece
una columna con los oicios que desempeñaban (Cuadro 1).
Cuartel del Centro
Cuartel de Jerusalén
Hacienda de Cadena
Hacienda M.rica
Hacienda de Pitayas
Hacienda de San Javier
Hacienda del Palmar
Hacienda de San Miguel
Poblaciones sujetas a Pachuca
Partido de Real del Monte
Partido de Tizayucan
Pueblo de Torcayuca
Pueblo de Real del Monte
Pueblo de San Francisco Acayuca
Pueblo de Tizayuca
Pueblo del Real Del Chico
Pueblo de Tezontepec
Rancho de I. Cosac
Rancho de Guatongo
Rancho del Coyado
Rancho del Pavo
Total
Cuadro 1. Niños(as) de Pachuca y de sus alrededores, así
como sus oficios, 1791.
Oficio
Núm. Porcentaje
Casta
Sirviente
37
71.2 Castizo, Mestizo, Español
Barbero
2
3.8
Español
Sastre
2
3.8
Español
Tlachiquero
2
3.8
Castizo, Mestizo
Carpintero
1
1.9
Español
Herrero
1
1.9
Mestizo
Pintor
1
1.9
Pardo24
Platero
1
1.9
Español
Sin Oficio
1
1.9
Español
Trajinante
1
1.9
Mestizo
Velero
1
1.9
Español
Zapatero
1
1.9
Mestizo
No Identificado 1
1.9
Español
Fuente: AGN, Bienes Nacionales (014), volumen 808, expediente. 5BIS.
Picador. En minería, persona que tiene por oicio arrancar el mineral por medio
del pico u otro instrumento semejante. Marrero. Ayudante de perforista.
24
Serna (2005: 262), nos dice que “pardo/ zambo” era la mezcla entre negro e indio,
de los cuales el zambo era el menos habitual; el pardo más común, pero menos
preciso en tanto que signiicante racial. Por otro lado, Gibson señala que pardo y
coyote es el resultado de mezclas de indio y negro, sin embargo, se desconocen los
criterios utilizados para deinirlos e identiicarlos en los registros coloniales y que
es improbable que los problemas que plantean puedan resolverse satisfactoriamente
algún día (2003: 146).
Núm. de niños(as)
23
7
1
1
2
1
2
1
1
6
3
3
1
2
2
1
10
2
2
1
3
52
Fuente: AGN, Bienes Nacionales (014), volumen 808, expediente. 5BIS.
En el capítulo cinco se desarrolla el tema de las castas.
En el capítulo cinco se desarrolla el tema de las castas.
24
25
El trabajo de las mujeres y niños(as) en México: Pachuca, Real del Monte y algunas regiones de Puebla, durante el siglo XVIII y XIX
Braulio Ramírez deine al aprendiz, al oicial y al maestro de
la siguiente manera:1) Aprendiz era el niño o adolescente
que ingresaba, para ser capacitado, en el taller u obrador
y cuya edad oscilaba entre los nueve y los dieciocho años.
Por regla general, el aprendiz seguía el oicio del padre,
circunstancia que se conocía como heredad en el oicio; 2)
El oicial, llamado también compañero, se caracterizaba
por haber concluido satisfactoriamente su aprendizaje.
Era un asalariado con pretensiones de alcanzar el rango
de maestro; y 3) Maestro era la persona que transmitía
su experiencia y su técnica al aprendiz. Los mentores,
excepcionalmente, además de adiestrar a sus pupilos,
retribuían el servicio de éstos; al contrario, por no existir
cláusulas que delimitaran las condiciones de trabajo,
se produjeron abusos que incidían marcadamente en la
precaria situación económica de las familias26.
En otra región del actual estado de Hidalgo, Ixmiquilpan,
también encontramos trabajo infantil, en el padrón de esa
región en el año de 1971. Esta región también era cabecera
municipal, por lo que las poblaciones sujetas a ella eran:
Chilcuatla y Cardonal. Cincuenta y cuatro fueron los niños
registrados (Cuadro 3).
Cuadro 3. Número de niños(as) con oicios, en Ixmiquilpan
y alrededores, 1791.
Oficios
Herrero
Sastre
Sirvientes
Núm. identificado
Núm. de
niños(as)
1
1
46
(%)
Casta
1.9
1.9
85.2
6
11.1
mestizo
español
español, mestizo y
castizo
español, mestizo
Fuente: AGN, Bienes Nacionales (014), volumen 808, expediente. 5BIS.
Aunque el número de niños registrados en Ixmiquilpan
fue ligeramente mayor que los de Pachuca, no obstante,
la variedad de oficios fue mucho menor ya que solo
encontramos tres, a diferencia de los 11 localizados en la
otra cabecera municipal. El oicio predominante, de nueva
cuenta fue el de sirviente, el cual era realizado por castizos,
mestizos y españoles. El 57% de los niños pertenecían a
Ixmiqilpan y el resto a las poblaciones sujetas a esa región
(Cuadro 4).
Ramírez, Braulio, El trabajo, las ordenanzas y los gremios en la Nueva España,
en http://biblio.juridicas.unam.mx/libros/2/730/28.pdf [consultado el 13 de abril
del 2016] pp. 347-356.
79
Cuadro 4. Número de niños(as) con oicios, en Ixmiquilpan
y alrededores, 1791.
Lugar
Ixmiquilpan
Pueblo de Ixmiquilpan
Hacienda de Ocosza
El Cardonal y Chilcuatla
Pueblo del Cardonal
Hacienda de la Florida
Pueblo de Chilcuatla
Hacienda de Asuchichan
Hacienda San Antonio Buena
Ranchería de Jacouloya
Núm. de niños(as)
31
1
9
1
7
1
3
1
Fuente: AGN, Bienes Nacionales (014), volumen 808, expediente. 5BIS.
Trabajo infantil en Puebla: Teziutlán, Atempan,
Xiutetelco, Chignautla
El estado de Puebla se divide internamente en siete regiones
socio-económicas desde 1986 debido a las necesidades
de planeación y de construir unidades de desarrollo
más homogéneas. Fueron establecidas de acuerdo a
las características sociales, políticas y económicas de
los municipios del estado. Las regiones son: Región I,
Huauchinango; Región II, Teziutlán; Región III, Ciudad
Serdán; Región IV, San Pedro Cholula; Región V, Puebla;
Región VI, Mixteca; Región VII, Valle de Tehuacán y Sierra
Negra. La región II se ubica al noreste del estado de Puebla
y está conformado por 30 municipios, entre los cuales se
encuentran: Acateno, Atempan, Xiutetelco, Chignautla y
Teziutlán27.
En el AGN Teziutlán aparece con el nombre de Teusitlan.
En los cuatro lugares mencionados en el párrafo de arriba,
encontramos a 162 niños que laboraban, con edades entre los
13 y los 16 años. En los pueblos de Acateno y de Xiutetelco
había 7 niños en cada uno, en Chignautla, 6, en el pueblo
de Atempan había 14, mientras que en Teziutlán había 128.
Encontramos que en esos lugares los niños desempeñaban
diversos oicios (Cuadro 5). Siendo más número el de
labrador (82.1%), seguido del de herreros (3.7%), zapatero
(1.9%), sastre (1.2%), mientras que con un solo trabajador
(0.6%), se encontraban: carpintero, curtidor, dorador,
jabonero, pastor, circense, sirviente, sombrerero y velero.
Había un estudiante y 8 niños que no tenían oicio (4.6%).
26
Actualmente el Estado de Puebla está constituido por 217 municipios.
27
Danae Duana Avila y Elías Gaona Rivera
80 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Cuadro 5. Oficios y salarios de las mujeres, por un mes de trabajo. Los salarios son en pesos.
Oficios / Años
Atolera
Barretero
Chichigua
Cocinera
Costurera
Cuidadora De Nodrizas
Galopina
Lavandera
Mandadera
Maestra de Mesa
Mujeres guardas
Sobrestante
Oficios / años
Atolera
Chichigua
Cocinera
Costurera
Cuidadora De Nodrizas
Galopina
Lavandera
Maestra de Mesa
Mandadera
Mujeres Guardas
Sobrestante
1788
1789
1790
12
12
12
3
4
3
2
2
2
2
2
1791 1794 1801 1808 1824 1831 1832 1833 1834 1836
2
2
2
2
2
12
12
12
12
12
12
12
12
12
12
6
6
3
3
3
2
3
3
3
3
3
2
2
2
1845
1846
4
4
4
4
4
4
4
2.4
2.4
2.4
3
3
3
3
3
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
2
21
21
21
1847 1848 1853 1854 1866 1867 1868 1869 1870 1873
1841
3
2
2
4.5
6
4
2.4
4
11
2.4
4
5
5
5
5
6
2.5
5
3
6
2.5
4
2.5
4
2.5
3
3
6
6
2.5
3
3
3
Fuente: 1788-1791, Archivo Histórico de la Secretaría de Salud, Casa de Niños Expósitos, Sección: administración, Libro 7; 1808, Archivo General de la Nación/ Archivo
Histórico de Hacienda ( Primera serie) / Volumen (1015 (1) / expediente 8; 1801, 1822, Archivo Histórico de la Secretaría de Salud, Casa de Niños Expósitos, Sección:
administración, Libro 8; 1831-1847, Archivo Histórico de la Secretaría de Salud, Casa de Niños Expósitos, Sección: administración, Libro 14; 1848-1854, Archivo
Histórico de la Secretaría de Salud, Casa de Niños Expósitos, Sección: administración, Libro 20; 1866-1873, Archivo Histórico de la Secretaría de Salud, Casa de Niños
Expósitos, Sección: administración, Libro 30.
Salario infantil y de las mujeres en México
Por otro lado, el salario para los peones de la construcción
era de 3 reales (37.5 centavos), mientras que el salario en las
haciendas era por lo general de 2 reales (25 centavos) por
día de trabajo para los peones, con tasas equivalentes para
otros empleados: 2 reales al día para los cuidadores de mulas.
Debajo de estos trabajadores se encontraban los vaqueros
y sus ayudantes los cuales podían recibir 1 real y medio al
día; y al inal se encontraban los pastores y los muchachos,
los cuales recibían un real al día (12.5 centavos).
En relación con el salario de los niños, prácticamente
carecemos de información, sin embargo, disponemos de
algunos datos que nos arrojan un poco de luz. A inales
del siglo XIX, 1881-1890, en las haciendas de beneicio
denominadas de Guadalupe y de Bartolomé de Medina,
en Pachuca, los muchachos percibían salarios de 18 y 35
centavos, respectivamente (Canudas, 2005: 1665-1666).
Estos valores representaban el 37.5 y 70% de los ingresos
que percibían los barreteros de Real del Monte, quienes
ganaban 50 centavos al día. En el caso de los niños que
laboraban en esta última región, encontramos que en las
haciendas de regla, los salarios de los niños, en el año en
El trabajo de las mujeres y niños(as) en México: Pachuca, Real del Monte y algunas regiones de Puebla, durante el siglo XVIII y XIX
81
el año de 1900, eran de 18 ¾ y de 25 centavos diarios,
respectivamente; es decir, l37.5 y 50% en relación con los
50 centavos que ganaban los barreteros.
aire libre, por ejemplo en la agricultura, es de ocho francos
escasos en la Mesa Central, y de nueve y medio cerca de las
costas29 (Humboldt, 2011: 370).
En relación con los salarios de las mujeres, tenemos que éstos
dependían de acuerdo con la actividad que desempeñan. De
esta forma, tenemos que los salarios más bajos los percibían
las atoleras (2 pesos mensuales), las lavanderas (2 pesos
mensuales), las mandaderas (2 y 3 pesos mensuales), le
seguían las galopinas (2.4 y 2.5 pesos mensuales), las
cocineras (3, 4 y 5 pesos mensuales), costureras (4 pesos
mensuales), cuidadoras de nodrizas (4 y 6 pesos mensuales),
chichihuas (6 pesos mensuales) (Cuadro 5).
Sin embargo, al comparar los salarios de los barreteros, con
el de las mujeres que laboraban en las fábricas de cigarros,
tenemos que el salario de las mujeres era muy superior al de
los barreteros mineros. El salario de estos últimos representaba
57% del de los trabajadores de las fábricas de cigarros, tanto
de mujeres como de hombres. Por tanto, los trabajadores de
elite o aristócratas del trabajo no eran los trabajadores mineros,
sino, los trabajadores de las fábricas de cigarros.
Las trabajadoras que sobresalían por sus salarios eran las que
trabajaban en las fábricas de cigarros, entre ellas tenemos a los
siguientes oicios: a) maestra de mesa, b) mujeres guardas y
c) sobrestante (capataz, persona que gobierna a trabajadores).
Las tres trabajadoras ganaban 21 pesos mensuales, cada una.
El salario más bajo de las trabajadoras mostradas arriba, era de
2 pesos, los cuales representaban sólo 9.5% de lo que ganaban
las trabajadoras de cigarros. El dato que tenemos acerca de
los salarios de las trabajadoras de cigarros pertenece al año de
1808, mientras que si observamos los salarios que ganaban,
en 1873, las cocineras y las cuidadoras de nodrizas, 6 pesos
mensuales, los cuales eran los más altos de la información
disponible en ese año, tenemos todavía una considerable
brecha salarial, ya que los 6 pesos constituían 28.5% de los
21 de las trabajadoras cigarreras. Los salarios femeninos de
éstas últimas estaban equiparados a los de los hombres; es
decir, tanto hombres como mujeres ganaban lo mismo por
las mismas funciones realizadas.
El salario de los barreteros, en las minas de México, era de
50 centavos diarios y normalmente laboraban seis días a la
semana, por tanto, podían ganar 3 pesos por semana o bien
12 pesos mensuales. Brading (2012:201) señalaba que los
trabajadores mineros eran bien pagados. Por su parte, Mentz
(2001:586) y Frédérique Langue (1991:464) describían a
los trabajadores mineros como “trabajadores de elite”, la
primera, y como “aristocracia del trabajo”, el segundo, por
los “altos” salarios que percibían.
En el mismo sentido Alejandro Von Humboldt (2011),
señalaba: el minero mexicano es el mejor pagado entre
todos los mineros; gana a lo menos de 25 a 30 francos28 por
semana de seis días, cuando el jornal de los que trabajan al
28
25 francos equivalían a 70 centavos (5.6 reales) y 30 francos equivalían a 95
centavos (7.6 reales). Cálculos propios con base en las notas y anexos que realiza
Juan A. Ortega y Medina dentro de la obra de Humboldt (2011, pág., CXLIII).
No obstante, encontramos información del año de 1866,
en la que identificamos los salarios que ganaban los
hombres, por los siguientes oicios: cocinero, galopino y
lavandero. Pudimos identiicar que los salarios obtenidos
por los hombres fueron superiores al de las mujeres, quienes
realizaban las mismas actividades (Cuadro 5).
Conclusiones
A lo largo del siglo XVIII y XIX las mujeres mexicanas
laboraron en distintos sectores económicos: manufactura
y principalmente el de servicios, desempeñándose como:
atoleras, cocineras, chichiguas, cuidadora de nodrizas,
galopinas, lavanderas, mandaderas, sirvientas, porteras, etc.
Dentro de las fábricas se desempeñaron como: hilanderas,
tejedoras, maestras de mesa, en las fábricas de cigarros,
sobrestantes y guardas. En Pachuca, durante el periodo
novohispano, las mujeres se desempeñaban principalmente
de sirvientas y quienes realizaban esta actividad eran indias,
mestizas, españolas, mulatas y moriscas.
En cuanto a los salarios de las mujeres, la brecha salarial era
muy grande entre los salarios más bajos, 2 pesos mensuales
(atolera, mandadera, lavandera) y los más altos, 21 pesos
mensuales, maestras de mesa, sobrestantes y guardas. Este
último salario ubica a las mujeres, como trabajadoras de
elite, ya que su salario era mayor al de los barreteros, quienes
supuestamente eran los mejor pagados de México.
La airmación que hace Humboldt en cuanto a las diferencias salariales podría
ser cierta, ya que en la actualidad en México existe el salario mínimo, sin embargo,
éste es diferente en cada región geográica, ya sea A ó B. Antes del 23 de noviembre
del 2012 existían tres zonas o regiones: A, B y C. La región A percibe un salario
mínimo mayor que la región B. El área geográica A está integrada por: Baja
California, Baja California Sur, Guerrero, Chihuahua, Distrito Federal, Jalisco,
Estado de México, Nuevo León, Sonora, Tamaulipas y Veracruz. En la región B
se encuentra el resto de los Estados de la República Mexicana.
29
82 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
En relación con el trabajo infantil, los niños también estaban
inmersos en los sectores económicos de manufactura y
de servicios. En la manufactura se desempeñaban como:
sastres, carpinteros, herreros, plateros, veleros, tlachiqueros
y zapateros. En el sector servicios se desempeñaban como:
barberos, pintores, trajinantes y principalmente como sirvientes
en Pachuca. Los salarios obtenidos por los niños en las haciendas
de beneicio de Pachuca eran inferiores al de los adultos.
Literatura citada
Borrás. Trabajo infantil en España (1700-1950) (págs. 153-231).
Barcelona: Icaria.
Brading, D. (2012). Mineros y comerciantes en el México borbónico
(1763-1810). México : FCE.
Danae Duana Avila y Elías Gaona Rivera
Canudas, E. (2005). Las venas de Plata en la historia de México: Sintesis
de Historia Económica. Universidad Juárez Autónoma de
Tabasco: Utopia.
Gibson, C. (2003). Los aztecas bajo el dominio español 1519-1810.
México: Siglo Veintiuno.
Humboldt, A. (2011). Ensayo político sobre el reino de la Nueva España.
México: Porrúa.
Langue, F. (1991). Trabajadores y formas de trabajo en las minas
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Mentz, V. (2001). Trabajo minero y control social durante el poririato.
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española, 1840-1940. En J. Borrás, Trabajo infantil en España
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Vinson III, B. (2005). Estudiando las razas desde la perifería:las castas
olvidadas del sistema colonial mexicano (lobos moriscos,
coyotes, moros y chinos). En J. De la Serna, Pautas de
convivencia étnica en la América Latina colonial: (indios,
negros, mulatos, pardos y esclavos) (págs. 247-308). México:
UNAM.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 83-89
La larga resistencia yaqui contra el despojo: desde la
colonia hasta la era del capitalismo global
Carlos R. Ferra Martínez
Profesor-Investigador de la Universidad Autónoma Chapingo.
Resumen
La guerra del Yaqui hace referencia a la resistencia de la
tribu Yaqui contra el despojo de sus recursos. Durante la
colonia los conquistadores se interesaron principalmente
por los recursos mineros de la región e intentaron someter
primero por la fuerza a los grupos indígenas poseedores de
los territorios localizados en dicha zona. La resistencia de
los indígenas, principalmente yaquis, pero también mayos,
ópatas y pimas obligó a los conquistadores a buscar otra
vía para acceder a los recursos naturales en poder de los
pueblos indígenas. Los jesuitas comenzaron una labor
de evangelización entre los mayos y luego los yaquis,
interesados en aprender técnicas agrícolas introducidas por
los misioneros entre aquellos, los invitaron a emprender
una labor similar en sus pueblos. Los colonizadores, que
comenzaron a posesionarse de tierras dentro de los límites
del territorio yaqui. La tribu respondió rebelándose contra
las autoridades de la sociedad colonial y, desde entonces
mantuvieron una resistencia constante, frecuentemente
armada. La fase más intensa de esta resistencia tuvo lugar
en el siglo XIX y hasta principios del siglo XX. Primero los
gobiernos del México independiente intentaron someter a
los yaquis, pero ante la resistencia de la tribu se dispusieron
a exterminar a la etnia. Durante el porfiriato miles de
yaquis fueron deportados a Yucatán y a Oaxaca reducidos
prácticamente a la condición de esclavos. Durante la
Revolución de 1910, la tribu se integró a las fuerzas que le
ofrecían respeto a sus recursos y a sus tradiciones. En 1937
Cárdenas decretó una serie de medidas y restituyó parte
de las tierras a la tribu, así como derechos para utilizar un
porcentaje de las aguas del río Yaqui. Después de Cárdenas
los gobiernos priistas se esforzaron por arrancar a la tribu
sus recursos, siendo la última ofensiva la construcción del
Acueducto Independencia.
Palabras clave: Yaquis, despojo, resistencia.
Juramento Yaqui
Para ti no habrá sol, para ti no habrá muerte,
para ti no habrá dolor, para ti no habrá calor, ni sed, ni
hambre, ni lluvia, ni aire, ni enfermedad, ni familia.
Nada te causará temor, todo ha terminado para ti, excepto
una cosa: Hacer tu trabajo. En el puesto que has sido
asignado, ahí te quedarás para la defensa de tu nación,
de tu gente, de tu raza, de tus costumbres, de tu religión.
¡Juras cumplir con el divino mandato!
El despojo ha sido un mecanismo presente en todas las
formaciones sociales desde las sociedades esclavistas hasta
nuestros días. Las guerras imperialistas (o de rapiña, como
a veces se les llama) siempre terminaron en el despojo
de los vencidos de sus bienes e incluso de las personas
mismas. Sin embargo, no fue este mecanismo el aspecto
fundamental que diferenció a unas formaciones sociales de
otras. En la sociedad esclavista la contradicción principal
entre explotados y explotadores se daba entre el esclavista
y el esclavo; en el feudalismo entre los señores feudales y
el campesino reducido a la condición de siervo y, según el
planteamiento marxista, en el capitalismo la contradicción
fundamental tiene lugar entre capitalistas y obreros.
Carlos R. Ferra Martínez
84 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Para Marx el desarrollo del modo producción capitalista
requiere del obrero libre de toda propiedad, salvo la de su
propia fuerza de trabajo. Sin una masa de obreros que se
ve obligada a vender su fuerza de trabajo el capitalismo no
puede funcionar. De ahí que el primer acto del capitalismo
consista en el despojo de la población. A este proceso Marx
le llamó “Acumulación originaria”. 1
De esta airmación muchos marxistas sacan la conclusión de
que en el capitalismo desarrollado este tipo de acumulación
originaria queda reducida a su mínima expresión, si no
es que desaparece completamente, para dar paso a la
acumulación propiamente capitalista.
Entre ines del siglo XX y principios del XXI, dentro del
mismo marxismo y fuera de él, otras interpretaciones del
capitalismo actual y del imperialismo plantean que el
despojo y otras formas de apropiarse de la riqueza que Marx
atribuyó a la fase de la prehistoria del capital y del régimen
capitalista, no sólo no han desaparecido, sino que han
cobrado fuerza a tal grado que llegan a tener más importancia
que lo que Marx denominó “acumulación capitalista”.2
D. Harvey (2007) es quizá el representante más notable de
esta última interpretación y quien más ha avanzado en la
construcción de un marco teórico que de sustento a dicha
concepción.
Reiriéndose a las hipótesis de Marx sobre la acumulación
originaria, escribe Harvey (2007, 116):
“El inconveniente de estas hipótesis es que relegan la
acumulación basada en la depredación, el fraude y la violencia
a una ‘etapa original’ ya superada o que se considera como
en el caso de Luxemburg algo ‘exterior’ al capitalismo como
sistema cerrado. Una reevaluación general del papel continuo
y persistente de las prácticas depredadoras de la acumulación
‘primitiva’u ‘originaria’en la amplia geografía histórica de la
acumulación de capital es, por lo tanto, muy necesaria, como
han observado recientemente varios autores”. Y, más adelante
agrega (1979, 121) que “El cordón umbilical que vincula la
acumulación por desposesión y la reproducción ampliada
queda a cargo del capital inanciero y las instituciones de
crédito, respaldados, como siempre, por poderes estatales.”
1
“La llamada acumulación originaria no es, pues, más que el proceso histórico de
disociación entre el productor y los medios de producción. Se le llama “originaria”
porque forma la prehistoria del capital y del régimen capitalista de producción.
Marx, 1979, P. 608.
2
“La inversión de la plusvalía como capital o la reversión a capital de la plusvalía
se llama acumulación de capital”. Marx, 1979, P. 488.
Esta interpretación, sin embargo, genera dudas. Sólo
mencionaré una, ya que no es este tema el propósito principal
de esta ponencia.
En el concepto de acumulación capitalista de Marx hay de
por medio un proceso de producción cuyo resultado es un
valor incrementado sobre el valor del capital al inicio del
ciclo productivo. Pero ¿dónde y cómo se ha generado la
riqueza objeto de despojo? Esta riqueza ha sido generada en
ciclos productivos previos, no necesariamente capitalistas,
o son recursos proporcionados por la naturaleza a grupos
humanos o individuos que los tienen en posesión.
Sea como sea, e independientemente del debate sobre la
interpretación de las formas de acumulación en el capitalismo
contemporáneo, el pueblo yaqui ha sostenido una resistencia, a
veces pacíica, otras veces violenta, en contra del despojo de su
territorio. El inicio de esta resistencia se ubica en el año 1533,
cuando el conquistador Diego de Guzmán intentó someter
al pueblo yaqui y se vio obligado a retirarse. En 1617 los
sacerdotes católicos Andrés Pérez de Rivas y Tomas Basilio
inician la evangelización de los yaquis.
El pueblo yaqui, que hasta entonces habitaba en rancherías
muy apartadas unas de otras, fue concentrado en ocho
pueblos para su mejor control y evangelización3. Como
resultado de la evangelización tuvo lugar una modiicación
de la cultura del pueblo yaqui, a cuyas creencias y otras
prácticas culturales fueron integradas creencias y prácticas
cristianas. Pero, independientemente de todos los cambios
políticos y culturales que los procesos de evangelización
y colonización trajeron consigo, el propósito fundamental
del pueblo yaqui fue desde entonces y hasta nuestros días
la defensa de su territorio. A este propósito supeditaron sus
alianzas políticas y militares con otros pueblos de la región
y con facciones políticas de la sociedad colonial. Por esa
razón se sumarán a las fuerzas conservadoras durante los
primeros años del México independiente, y a las del imperio
de Maximiliano durante la invasión francesa.
Durante la época colonial comenzó la colonización del
territorio por blancos y mestizos. Pero, a pesar de la pérdida
del control de algunas partes de su territorio, el pueblo yaqui
mantuvo una autonomía relativa, y conservó gran parte de
sus tradiciones culturales. Construyó una nueva ediicación
social y cultural con su cultura y elementos tomados del
catolicismo y de la sociedad colonial.
Los ocho pueblos que, con algunas modiicaciones, existen hasta hoy son: Cócorit,
Bácum, Vícam, Pótam, Tórim, Huírivis, Ráhum y Belem.
3
La larga resistencia yaqui contra el despojo: desde la colonia hasta la era del capitalismo global
Las actividades económicas más importantes de Sonora en
ese período fueron la minería, la agricultura y la ganadería.
Muchos yaquis emigraron de las ocho poblaciones en que
habían sido concentrados por los misioneros, hacia las zonas
mineras en busca de empleos.
A pesar de lo que algunos historiadores llaman “la guerra del
yaqui”, se desarrolló básicamente en el siglo XIX, durante
el período colonial se registran varios levantamientos de
rebeldía: en 1696 (de yaquis y otros pueblos, como los
zuaques); en 1740-1741, rebelión que culminó con la
ejecución de sus líderes principales Muni y Bernabe.
Pero fue en el siglo XIX y principios del XX cuando la
resistencia yaqui alcanzó su máxima expresión y heroísmo.
En esta fase de la resistencia yaqui sobresalen los nombres de
cuatro de los más grandes jefes militares del pueblo yaqui:
Juan Ignacio Juzacamea (Juan Banderas; 1825-1839); José
María Leyva Pérez (Cajeme; 1833-1887); Juan Maldonado
Waswechia (tetabiate; asesinado por el ejército en 1901) y
Juan José Sibalaume.
Juan Banderas encabezó una rebelión en los albores de la vida
independiente de México. El gobierno federal decretó un
conjunto de medidas que atentaban contra los intereses de los
pueblos del estado de Sonora. En alianza con mayos, ópatas
y pimas los yaquis emprendieron una guerra, frecuentemente
apoyada y fomentada por sacerdotes católicos que veían
en las políticas del gobierno nacional una amenaza para
la posición del clero católico en la sociedad mexicana.
Banderas llamó a los pueblos indígenas de la región a
organizarse como una federación autónoma, y a acabar
con los blancos y mestizos que se habían establecido en los
territorios indígenas. Condujo a varios miles de indígenas a
los que, aprovechando la experiencia que había obtenido en
el ejército mexicano, adiestró en el uso de las armas de fuego
y organizó militarmente. El ejército mexicano complementó
las batallas formales con acciones terroristas en contra de
la población indígena. Finalmente, después de heroicas
batallas, los rebeldes fueron derrotados y sus líderes, entre
ellos Banderas, ejecutados.
Juan María Leyva Pérez, mejor conocido como Cajeme (el
que no se detiene ni a beber) nació en Hermosillo en 1835,
participó como integrante del ejército mexicano en el combate
contra los ilibusteros encabezados por el francés RaoussetBoulbon que intentaron ocupar el puerto de Guaymas en
1854. El gobierno del estado de Sonora lo nombró Alcalde
mayor del yaqui, con el ánimo de utilizarlo para mantener
85
la paz en la región. Pero en lugar de ello Cajeme comenzó a
organizar la resistencia. Se convirtió en el líder militar pero
se apoyó en los gobernadores nombrados de acuerdo con las
tradiciones yaquis, aplico los conocimientos sobre la guerra
adquiridos como integrante del ejército mexicano e inició
la guerra, continuando algunos de los propósitos de Juan
Banderas. Obtuvo algunas victorias militares y combinó las
acciones formales con tácticas guerrilleras. Finalmente fue
derrotado. Habiéndose refugiado en casa de unos amigos
en la ciudad de Guaymas, fue denunciado por un vecino,
aprehendido por militares y ejecutado por la espalda en Tres
Cruces de Chumampaco en 1887.
Durante todo este período los líderes políticos del estado
y federales aspiraban al sometimiento del pueblo yaqui
para utilizar la mano de obra de sus integrantes4. La guerra
se volvió muy cruenta y cruel, a veces por parte de los dos
bandos. El ejército federal comenzó a pagar recompensas
a mestizos por cada yaqui que asesinaran. Por parte del
ejército y del gobierno federal la guerra se transformó en
una guerra de exterminio de la población yaqui. Miles de
hombres de la etnia, mujeres y niños fueron deportados al
sureste del país en donde fueron sometidos a condiciones
de semiesclavitud. Muchos de ellos murieron víctimas de
la sobreexplotación y muchos otros que intentaron escapar
fallecieron en el intento. Los que sobrevivieron regresaron
a su pueblos al estallar la Revolución de 1910.
Juan Maldonado Waswechia, Tetabiate, sucedió a Cajeme
en el liderazgo militar de los yaquis. La guerra se hizo más
cruenta aún. Tetabiate convocó a los pueblos indios de
Sonora y en alianza con los Pimas bajos, Ópatas y Mayos
llamó a organizar la “Confederación India de Sonora”,
con un gobierno autónomo constituido de acuerdo con las
tradiciones indígenas y con un ejército propio. Los yaquis
combinaron batallas formales con la táctica de la guerra de
guerrillas. En mayo de 1897 los rebeldes yaquis liderados
En un informe que el Coronel Ángel García Peña dirigió al secretario de guerra el
26 de mayo de 1900, decía que uno de los principales enemigos del gobierno era la
mujer yaqui. Y proponía sacarlas de ahí, llevarlas a otros lugares de la República
donde podrían engendrar hijos y educarlos de manera diferente, sin el odio al yori.
Sacar a toda la tribu, decía el coronel, causaría un trastorno económico al Estado
“cuyas consecuencias no son calculables. El Yaqui está incrustado en nuestro
modo de ser social: es el peón del campo, el vaquero del rancho, el peón de raya
de las labores, el barretero de las minas, el trabajador en las reparaciones de los
ferrocarriles, el peón de mano de obra de albañilería de la ciudad, el atrevido
marinero y, en muchos casos, el hombre de conianza de las familias. ¿No se
cometería al deportarlos, un acto de injusticia y hasta de ingratitud, con el que
sirve con la excelencia de su energía física, todas las manifestaciones del trabajo?
Por otra parta, no pudiendo por el momento sustituir al Estado de estos brazos, ¿de
qué magnitud sería el trastorno para el propietario, para el industrial, el minero,
etc., arrancándole los únicos de que puede disponer para su negocio?” http://www.
memoriapoliticademexico.org/Efemerides/11/08111899.html.
4
Carlos R. Ferra Martínez
86 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
por Tetabiate, irmaron con el gobierno del estado la “Paz de
Ortiz”, donde reconocían y prometían obediencia al gobierno
federal a cambio del respeto de sus tierras. Tetabiate fue
nombrado Capitán General y reconocido por el gobierno
como parte del ejército. Según la “Paz de Ortiz” las tierras
serían fraccionadas en parcelas de 4.5 has por cada yaqui
adulto, más media ha por cada menor.
Poco después de irmada la paz el gobierno comenzó a
autorizar o tolerar la colonización de partes del territorio
yaqui. Además, una parte del pueblo yaqui no aceptaba
la entrega de la tierra en parcelas individuales, pues su
tradición se identiicaba más con formas de explotación
colectiva.
Cuando en 1899, los yaquis volvieron a rebelarse y tomar
las armas sus líderes declararon que una condición de la
“Paz de Ortiz” era que los blancos y el ejército abandonarían
su territorio, misma que no había sido cumplida. En
los primeros momentos de la rebelión Tetabiate fue
comisionado por el gobierno para desarmar y aprehender
a un grupo de rebeldes. Por ello, al estallar la rebelión
en Vícam, los líderes del movimiento lo detuvieron y
estuvieron a punto de fusilarlo, pero, inalmente decidieron
mantenerlo preso, destituirlo como Capitán General y darle
el grado de Capitan. En su lugar fue nombrado Capitán
General Ignacio Mabitai.5
ancianos que huían de la represión. Herido en una pierna,
Tetabiate fue ocultado por sus compañeros entre unas rocas
pero fue descubierto y acribillado por los soldados. 7
Para muchos historiadores la guerra del yaqui terminó en
Mazocoba. Pero en realidad ésta continuó hasta 1914 y
siguió habiendo acciones de pequeños grupos armados
hasta 1937 cuando el pueblo yaqui estableció acuerdos
con Lázaro Cárdenas. Los yaquis rebeldes se refugiaron
en la sierra y, desde ahí, realizaban acciones contra los
yoris en las partes bajas. A Tetabiate le sucedieron otros
grandes líderes de su pueblo. Sobresale entre ellos Juan
José Sibalaume, quien estableció nexos con los partidarios
de Ricardo Flores Magón.
En el curso de la guerra los yaquis habían ido construyendo
redes que incluían contactos en las zonas urbanas del
estado y en ciudades estadounidenses cercanas a la frontera
con México, como Tucson y Phoenix. A través de estas
redes obtenían información sobre los movimientos del
ejército, y se abastecían de armas y municiones. En esta
última fase los magonistas consideraron a los yaquis
como un aliado estratégico cuando preparaban una
revolución para derrocar al gobierno federal y establecer
un gobierno popular, que respetaría el territorio de los
pueblos indígenas.8
7
El 18 de enero de 1900 tuvo lugar la que muchos historiadores
consideran la batalla más heroica de los Yaquis, en las
cañadas del cerro de Mazocoba. Cientos de combatientes
yaquis murieron en la batalla, muchos otros se suicidaron
usando sus armas o arrojándose al precipicio antes que
permitir ser hechos prisioneros.6 Al parecer Tetabiate no
participó en esta batalla. Meses después una partida militar
se enfrentó a un grupo de rebeldes yaquis cerca de Mozocoba
encabezada por Tetabiate. Protegían a mujeres, niños y
5
Paco Ignacio Taibo II, 2013, 143 y siguientes.
Manuel Balbás, un médico militar testigo presencial de la batalla de Mazoocoba
describe así la escena después de los combates: “Allí había centenares de heridos:
allí había ancianos demacrados, cuyos miembros desnudos parecían esqueletos
forrados con piel humana; allí habían madres que cargaban en sus brazos, desde
la víspera, los cadáveres de sus pequeños hijos; allí había niños que chupaban
desesperados el seno de la madre muerta, allí había doncellas que miraban con
ojos atónitos los ojos sin vida de sus prometidos; allí había sangre humana que
chorreaba, huesos rotos que crujían, vísceras desgarradas, cráneos estrellados; allí
había todos los horrores, todas las crueldades de la guerra, y sin embargo, ¡aquella
masa humana no se quejaba. Su silencio imponente oprimía el alma!
“Aquellos viejos, aquellas madres, aquellas doncellas, y lo que es más admirable
todavía: aquellos niños, no lloraban.
“Los heridos se suicidaban con sus propias armas, se arrojaban a los precipicios,
antes que rendirse al enemigo”. Ignacio Lagarda (2016), Tetabiate. http://
casadelasideas.com/ignacio-lagarda-lagarda/tetabiate/
6
Ignacio Lagarda dice que el 10 de julio de 1901, una partida militar se enfrentó a
un grupo de indígenas yaquis rebeldes: “Mientras los indios se batían en retirada,
uno de los hombres le informó a Villa (Loreto Villa – CFM) que por el cañón se
veía un marcado rastro de sangre, y de inmediato ordenó que a paso veloz siguieran
las huellas hemáticas. Mil metros adelante los soldados dieron alcance a ocho
indios que conducían a un herido, obligados por la urgencia, los yaquis dejaron al
herido tras una roca y huyeron hacia la altura para situarse en un punto desde donde
pudieran defenderlo, teniendo segura la retirada y desde ahí siguieron haciendo
fuego sobre sus perseguidores.
“Mientras tanto, el herido, que tenía la rodilla izquierda destrozada por un tiro
de Máuser, se defendía heroicamente disparando con serenidad dos cargas
consecutivas de su Winchester.
“Por in, un sargento que había logrado colocarse a corta distancia del herido, logró
asestarle un tiro en el pecho y otro en la mandíbula: el indio cayó exánime, sus ocho
defensores huyeron por la montaña en dirección al Buichorito y se dispersaron
por diversos rumbos.
Los soldados de Villa se quedaron profundamente sorprendidos al ver el cadáver
que tenían a sus pies, era el famoso Tetabiate, que un año antes había librado en
el Mazocoba, el más importante y sangriento combate de la historia moderna de
la tribu. Hay quienes dicen que Villa, le dio un tiro de Gracia.” Taibo II (2014),
sin embargo, pone en duda que Tetabiate haya estado en la batalla de Mazocoba.
8
En el número 177 del periódico Regeneración del 21 de febrero de 1914, Ricardo
Flores Magón escribió: “Enviamos un fuerte abrazo a nuestros queridos hermanos
yaquis. Así es como se conquista Pan, Tierra y Libertad, así es como deben obrar
todos los trabajadores que quieren ser libres de verdad.
“Adelante hermanos yaquis. Si de hoy en adelante se acerca a vosotros algún
comisionado de algún gobierno proponiéndoos alianza, arrancadle la cabeza
y mandádsela al gobernante con estas palabras: hora ven tú para arrancártela
también.“No admitáis que pise territorio ningún político, pues estos se dan maña
para desvirtuar todo movimiento puro.” http://archivomagon.net/obras-completas/
art-periodisticos-1900-1918/1914/1914-16/
La larga resistencia yaqui contra el despojo: desde la colonia hasta la era del capitalismo global
Entre 1937 y 1940 el gobierno de Cárdenas estableció
acuerdos y decretó varias medidas en favor de los yaquis.
Como parte de éstos fueron restituidas al pueblo yaqui
485 mil hectáreas en propiedad comunal, se le concedió el
derecho a utilizar hasta el 50% de los escurrimientos del río
Yaqui desde la presa de La Angostura (o Lázaro Cárdenas),
se canalizaron recursos económicos para promover el
desarrollo económico, programas de educación y el gobierno
se comprometió a respetar las tradiciones políticas y
culturales de la tribu.9
Pero después del gobierno de Cárdenas, la ofensiva contra
la tribu se reanudó. El Banco Rural comenzó a tomar todas
las decisiones relacionadas con la producción agrícola y
ganadera, excluyendo prácticamente la participación de
las autoridades tradicionales. La población yaqui no podía
disponer plenamente de las aguas a que tenía derecho
debido a problemas técnicos y maniobras políticas. Aparte
de que la infraestructura en canales de riego era insuiciente
para manejar el volumen de agua al que los yaquis tenían
derecho en 1952 se construyó otra presa (El Oviachic o
Álvaro Obregón) y en 1962 otra más entre las dos anteriores,
destinada a la generación de energía eléctrica (Presa del
Novillo o Plutarco Elías Calles). 10
Durante el período postcardenista los gobiernos priistas se
dieron a la tarea de desmantelar la reforma agraria de Cárdenas.
Entre la población mestiza que había sido beneiciada con
la distribución de tierras mediante la creación de ejidos
colectivos, el gobierno y los terratenientes promovieron
la división de los ejidatarios entre los que eran defensores
del ejido colectivo y los llamados “individualistas”, que
propugnaban por el fraccionamiento de los ejidos en parcelas
individuales. Esta división dio lugar a encuentros violentos
entre ambos grupos, en los que hubo muertos y heridos.
En 1954 los terratenientes locales, charros de la CTM y
autoridades estatales y municipales planearon y consumaron
el asesinato de Maximiliano R. López uno de los dirigentes
históricos más notables del ejido colectivo en el sur de Sonora.
Latifundistas y gobiernos de todos los niveles emprendieron
también la tarea de recuperar los recursos concedidos a la
tribu por los decretos de Cárdenas. Promovieron la división
9
Lerma Rodríguez, 2014, 255.
10Lerma Rodríguez, 2014, 260. Airma la autora de este artículo que “Este sistema
de presas provocó la reducción signiicativa del agua asignada –y a la larga el
empobrecimiento de la tierra- que en algunas localidades actualmente se muestra
salitrosa y con poco suelo. Aunque los yaquis han planiicado en distintos momentos
la apertura de nuevos campos de cultivo y la distribución de la tierra entre sus
miembros para ines agrícolas, la escasez de agua echa por tierra los proyectos.”
87
interna en los pueblos yaquis a tal grado que llegó a haber
dos gobernadores en cada uno de ellos, unos elegidos según
las tradiciones culturales de la tribu y otros por grupos
disidentes que fueron apoyados (según su conveniencia)
por los gobiernos del estado y municipales.
En 1976, cuando solicitantes de tierra de los valles del
Yaqui y Mayo ocuparon armados varios latifundios de la
región y fueron protagonistas de grandes movilizaciones
por la tierra, los yaquis que no habían cerrado ilas con el
gobierno, apoyaron las movilizaciones. Hacia la segunda
mitad del siglo XX porciones importantes del territorio yaqui
se encontraban arrendadas a agricultores mestizos, otras
estaban siendo explotadas por personas ajenas a la tribu sin
su consentimiento, y algunas dotaciones de ejidos se habían
hecho invadiendo partes del territorio yaqui.
En el año 2010 el gobierno del panista Guillermo Padrés
Elías (gobernador del estado de Sonora de 2009 a 2015)
lanzó el megaproyecto Sonora Sí mejor conocido como
Acueducto Independencia y que consiste en la construcción
de un ducto desde la presa del Novillo hasta la ciudad
de Hermosillo para atender las necesidades de consumo
humano e industrial de dicha ciudad. Las autoridades
yaquis se opusieron inmediatamente al proyecto e iniciaron
acciones legales y políticas para detenerlo. El gobierno de
Padrés argumentó ante autoridades agrarias y judiciales
que la tribu yaqui no existía y carecía de personalidad
jurídica para realizar algún reclamo contra el acueducto.
A pesar de que la tribu ganó amparos y mantuvo diversas
manifestaciones de protesta (movilizaciones y bloqueo
de carreteras), y recibió apoyos de otros sectores sociales
y organizaciones locales, nacionales e internacionales, el
proyecto no se detuvo.
La escasez de agua en Hermosillo es un problema antiguo.
Pero los gobiernos nunca hicieron nada serio para planiicar
el desarrollo urbano y las actividades agrícolas. El carácter
depredador del capitalismo es quizá, más que las condiciones
naturales, el causante de este problema. Se han instalado en
la ciudad industrias, algunas de empresas transnacionales,
que consumen enormes cantidades de agua. Para colmo de
males, el mismo gobernador construyó un dique que contiene
aguas arriba del río Sonora, privando a muchos pueblos del
vital líquido, con el único propósito de abastecer a uno de
sus ranchos. Cuando la minera México, que explota la mina
de Cananea, provocó un derrame tóxico sobre corrientes de
agua de las que dependen miles de pobladores de la Sierra
y los periodistas denunciaron la existencia de este dique, el
gobernador ordenó dinamitarlo.
88 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Hacia la sexta década del siglo pasado, la agricultura de
la Costa de Hermosillo, aparecía como un ejemplo de la
agricultura altamente tecniicada. Todo el riego en la Costa
se hacía por “bombeo”. En su afán de lograr las mayores
ganancias, los latifundistas extraían agua más allá de las
recargas que recibían los mantos subterráneos. Al inal
provocaron una catástrofe ambiental, pues el descenso
del nivel de las aguas subterráneas fue tal que permitió
la iniltración de aguas salinas del mar y las tierras se
ensalitraron. Ahora una buena proporción de tierras de la
costa permanecen improductivas. Algunos agricultores
cambiaron el patrón de cultivos, de trigo, algodón y soya,
a otro de menor consumo de agua, como la uva y cítricos,
en los que pueden utilizar riego por goteo. Pero a pesar de
ello, la Costa nunca ha recuperado el esplendor que tuvo a
mediados del siglo XX.
En la década 1970 el gobierno estatal de Carlos Armando
Biebrich anunció y emprendió un plan para resolver el
problema de la escasez de agua. Se llamaba Plan Hidráulico
del Noroeste (PHLINO) y consistía en construir un sistema
de canales para interconectar las presas desde el estado
de Nayarit hasta la Costa de Hermosillo. Pero problemas
políticos y de inanciamiento convirtieron el proyecto en
un fracaso.
Ha sido pues, la voracidad de latifundistas e industriales,
sumada a la falta de planiicación del desarrollo urbano
la causa principal de la escasez de agua en la ciudad de
Hermosillo. La solución más fácil ha sido ésta: arrancar los
recursos en poder de la comunidad yaqui, lo que en el futuro
se traducirá en otro desastre ambiental.
También la parte mestiza del valle del Yaqui se ha encontrado
al borde del colapso. El exceso de riegos ha hecho subir el
nivel de las aguas subterráneas y amenaza con ensalitrar
los suelos agrícolas. A ello hay que sumar los efectos
contaminantes de una agricultura basada en el consumo
masivo de agroquímicos, los cuales se han ido acumulando
en los suelos a lo largo de muchos años. En este período de
la resistencia enfocada contra el acueducto Independencia
la tribu Yaqui se ha vinculado a otros movimientos y
organizaciones sociales. Lerma Rodríguez (2014, 264)
menciona los siguientes:
“Encuentro de los Pueblos Indígenas de América, del 12 al
14 de octubre de 2007, en Vícam. Organizado conjuntamente
con el EZLN, el CNI y autoridades tradicionales del gobierno
yaqui de Vícam. Se acordó en esa ocasión la Declaración de
Carlos R. Ferra Martínez
Vícam, en donde los indigenas señalaron su derecho a la libre
determinación respetando las diferentes formas de gobierno;
el rechazo a la guerra de conquista y "la destrucción y
saqueo de la Madre Tierra". Se pronunciaron en contra de las
semillas transgénicas y aseguraron que seguirán utilizando
sus semillas nativas y formas de cultivo tradicionales.
Se denunció que "la guerra agudiza la explotación de los
pueblos a través de la migración, las maquilas, las grandes
plantaciones, llegando a casos de esclavitud y trabajo
forzado" (Bellinghausen, 2007).
“Primer Foro en Defensa del Agua, los días 20 y 21 de
noviembre del 2010, en Vícam, Sonora. Fue convocado
por la tribu yaqui y el CNI. Como parte de los resolutivos
hubo un pronunciamiento en contra de la construcción
del Acueducto Independencia; contra los intereses
inmobiliarios, turísticos y agroindustriales que despojan a
los yaquis del agua, sin consulta previa a la tribu. Se denunció
el "exterminio deinitivo de la tribu, así como la afectación
profunda del equilibrio ecológico en el sur de Sonora y la
ruina de los agricultores del Valle del Yaqui". Aunque el
pronunciamiento abarca otros aspectos, en relación con el
agua en el segundo punto se señaló: "Rechazamos el despojo
y la apropiación privada del agua, arroyos, manantiales,
aguas profundas, escurrideros, lagunas, esteros, costas,
mares, playas y de todo lo que integra los territorios de
nuestros pueblos, así como la construcción de acueductos y
represas para el acaparamiento del agua y su uso comercial.
Nos oponemos rotundamente a que el agua, fundamento de
la vida, pueda ser acaparada por intereses privados y a que
sea considerada como una mercancía susceptible de venta y
compra. Asimismo, nos oponemos a las leyes, reglamentos
y políticas gubernamentales tendentes a la privatización del
agua (CNI, 2010).
“Segundo Foro Internacional del Agua, realizado el 20 y 21
de noviembre de 2012, en Vícam, Sonora, fue convocado
por la tribu yaqui y el Movimiento Ciudadano por el Agua
(MCA), conformado por productores agrícolas del sur de
Sonora. En esta ocasión se acordaron las estrategias de
resistencia en contra del Acueducto Independencia y se
refrendaron los lazos de apoyo entre la tribu y otros sectores
de indígenas organizados.”
La larga lucha de la tribu Yaqui por su territorio y su cultura
es un ejemplo de la energía y el heroísmo que muestran los
pueblos ante los embates de un régimen social, político,
económico y cultural que busca imponerse sobre toda la
especie humana, sin reparar en el daño socio cultural y
La larga resistencia yaqui contra el despojo: desde la colonia hasta la era del capitalismo global
ambiental que provoca y que amenaza con un desastre
universal que podría hacer inviable un futuro mejor para la
especie humana.
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Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 91-97
La pedagogía crítica y la alteridad en tiempos del paradigma de la economía
global en la perspectiva de la construcción de ciudadanía
Germán López Noreña
Universidad Santiago de Cali. Centro CESPE. gerlopnor@gmail.com.
Resumen
El presente ejercicio discursivo versa sobre el abordaje a
algunos elementos de la pedagogía crítica, la alteridad
y el paradigma de la economía global en la perspectiva
de construcción de ciudadanía. En él se tratan aspectos
de la pedagogía crítica tales como la aproximación de su
deinición y sus principios, a la vez que de la alteridad;
para inalmente repensar la emergencia de los estudios
pedagógicos de la alteridad y realizar un contraste de los
anteriores conceptos en tiempos del llamado paradigma
de la economía global. Siendo lo anterior tratado a la
luz de la antigua concepción de ciudadanía en la antigua
Grecia y los tiempos actuales llamados la sociedad del
conocimiento.
Palabras claves: pedagogía crítica, alteridad, economía
global, paradigma de la economía global, paideia, ciudadanía.
Introducción
Vivimos en un mundo de apariencias, y los que dirigen la
educación superior así lo perciben y lo asumen, y quizás por
eso se preocupan tanto por promover la simulación, como si
tuvieran un profundo amor por el teatro, sin entender que el
teatro va mucho más allá de la simulación y de
las apariencias. Vivimos en un mundo quebrado, decía, roto,
separado, disperso, y quizás por ello, algunos sentimos este
impulso hacia el encuentro, hacia la exaltación de aquellas partes
que yacen separadas y que debemos recuperar, rescatar, integrar.
(Luis Porter, 2005: Colección Educación Superior).
Sin duda el escribir una relexión en torno a temas tan
complejos como la pedagogía -y especíicamente para
este escrito sobre la pedagogía critica-, la alteridad y el
“paradigma de la economía global” en la perspectiva de
construcción de ciudadanía y el logro de la articulación
teórica de estas temáticas, en verdad de además de ser una
oportunidad de provocación académica, lo es también una
signiicativa empresa de síntesis a ser acometida.
Desde la anterior óptica inicialmente en este ejercicio escrito
se trasegan algunos elementos de la Pedagogía Critica
como elemento propedéutico de la inteligibilidad de las
realidades del mundo actual, en el que hace presencia la
Alteridad. Siendo ella más que un concepto abordado por
investigadores de diversas disciplinas y ilósofos como
Emmanuel Lévinas y Enrique Dussel, sino como una
realidad, que a todos nos compete y la que de una u otra
manera se nos desconoce en todos los ámbitos de nuestra
existencia. Y que mejor expresión de la negación de la
Alteridad que el fenómeno de la erróneamente diseñada y
aplicada Globalización. Siendo su más reinada concepción
el llamado “paradigma de la economía global” con sus
más adeptos hiperglobalizadores a la cabeza, quienes
como “jinetes apocalípticos” dictaminan la defunción
de la Economía Clásica y hacen realidad un mundo de
miseria para el excluido y el marginado: a los que Eduardo
Galeano3 ha denominado “Los Nadies”.
Acto seguido se aborda algunas generalidades del concepto
de Alteridad, siendo ello, una reseña histórica de la
emergencia del mismo, su conceptualización por el ilósofo
92 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Germán López Noreña
Lituano Emmanuel Lévinas (1997) y el tratamiento de su
presencia en el contexto educativo americano por parte del
ilósofo e investigador Enrique Dussel (1973).
Algunas aproximaciones a la definición de
pedagogía crítica
Siguiendo el orden discursivo de este tejido escrito, se
repiensa algunos elementos del llamado Paradigma de la
Economía Global (López Noreña, 2010e) y para ello de
manera recurrente se realiza un breve análisis de su gestor
y mayor exponente en estos los tiempos llamados de la
Sociedad del Conocimiento y la Globalización (López
Noreña, 2010f), el connotado hombre de negocios y prolijo
escritor Kenichi Ohmae (2005).
Por cierto, al hablar propiamente de una definición
consensuada de Pedagogía Crítica, establecida por los
investigadores en este campo de académico, hay que decir
que ella no existe en los inicios del Siglo XXI. En rigor a
la academia y los cánones formales de la investigación,
necesariamente se debe hablar en lo que respecta a este
tópico, sobre aproximaciones a su deinición.
Desde este enfoque, analicemos algunas de ellas:
Finalmente se argumenta alrededor del concepto de
ciudadanía en el contexto educativo del siglo XXI, y en este
sentido se vuelve la mirada a la antigua Grecia y al concepto
de Paideia (López Noreña, 2010b) concebido y comprendido
éste, como el imaginario de formación de la antigua Grecia. El
concepto de Paideia, se asume en este trabajo como un ítem
fundamental a volver sobre él desde la concepción griega, en
estos tiempos del siglo XXI en el quehacer educativo y en el
logro de competencias ciudadanas en los discentes.
De la definición y principios de la pedagogía
crítica
Con frecuencia, en los últimos cinco años de esta ya
iniquitada primera década y media del siglo XXI, inmersa
en el marco de la globalización y el llamado paradigma
de la economía global, caracterizada por la exclusión en
todos los niveles y secundada por las llamadas sociedad del
conocimiento4 y la economía del conocimiento, se escucha
en las universidades latinoamericanas sobre la necesidad
e importancia de la implementación y el desarrollo del
pensamiento crítico articulado a la pedagogía crítica en su
quehacer diario, y esto en el marco de sus ya reconocidas
funciones sustantivas: investigación, docencia y proyección
social. En este sentido las universidades colombianas no han
sido ajenas a este clamor. Ahora bien, en aras de dilucidar
estas cuestiones, en una primera instancia incursionaremos
en algunos aspectos de los ines y propósitos de la pedagogía
crítica –no sin antes, develar algunas aproximaciones a la
deinición de pedagogía crítica.
La pedagogía crítica es un eslabón imprescindible para la
construcción de un hombre nuevo constructor de un mundo
nuevo, teniendo en cuenta que este hombre es el sujeto principal
del proceso de cambio
(Ania Mirabal Patterson, Cuba: 2008)
Deinimos la pedagogía crítica como un abordaje emancipador
de la formación para entender y resolver los problemas
relacionados con la práctica pedagógica, mediante la
investigación, la relexión crítica y toma de conciencia
orientada a transformar la praxis, "donde la verdad se pone
en tela de juicio en el ámbito de la práctica no de la teoría"
(Grundy, 1998, p.215).
(Oly Olmos De Montanez; 2008)
Esta línea de la pedagogía se plantea señalar cómo se pueden
superar las desigualdades educativas y sociales. Para ello
han elaborado una serie de teorías y conceptualizaciones que
se pueden enmarcar en la perspectiva dual de la sociología,
en la medida que contemplan tanto la importancia de los
sistemas, como de la acción de las personas y colectivos en la
construcción de la sociedad y de sus instituciones.
(Roger Camdepadrós y Cristina Pulido; 2009; Pág. 69)
[Son] aquellas corrientes pedagógicas que parten de una
concepción educativa problematizadora, en palabras de Freire.
Es decir, que promueva la relexión, la crítica y la posibilidad de
transformación social y la disminución de las desigualdades de
género, etnia, posición económica, etc.
(Aubert, A y García, C; 2009: Pág. 235)
La pedagogía crítica y la alteridad en tiempos del paradigma de la economía global en la perspectiva de la construcción de ciudadanía
Algunos de los principios fundantes de la
pedagogía crítica
1. Es necesario desarrollar una pedagogía de la pregunta. Siempre
estamos escuchando una pedagogía de la respuesta. Los profesores
contestan a preguntas que los alumnos no han hecho.
2. Mi visión de la alfabetización va más allá del ba, be, bi, bo,
bu. Porque implica una comprensión crítica de la realidad social,
política y económica en la que está el alfabetizado.
3. Enseñar exige respeto a los saberes de los educandos.
4. Enseñar exige la corporización de las palabras por el ejemplo.
5. Enseñar exige respeto a la autonomía del ser del educando.
6. Enseñar exige seguridad, capacidad profesional y generosidad.
7. Enseñar exige saber escuchar.
8. Nadie es, si se prohíbe que otros sean.
9. La Pedagogía del oprimido, deja de ser del oprimido y pasa a ser
la pedagogía de los hombres en proceso de permanente liberación.
10. No hay palabra verdadera que no sea unión inquebrantable
entre acción y Relexión.
11. Decir la palabra verdadera es transformar al mundo.
12. Decir que los hombres son personas y como personas son libres
y no hacer nada para lograr concretamente que esta airmación sea
objetiva, es una farsa.
(Paulo Freire. Pedagogía del oprimido).
La lectura de las anteriores frases célebres, plasmadas por
Paulo Freire en la obra citada, invita a pensar sobre los
principios y ines de la pedagogía crítica. Centrándonos
especíicamente en la educación universitaria y contexto
histórico social, la relación entre teoría y práctica, y relación
entre docencia universitaria e investigación; por cierto
cuestiones problémicas de la Pedagogía Crítica y mucho
más aun en aras de su articulación con el objetivo central
de este escrito. Acto seguido veamos en que consisten estos
tres principios.
La relación teoría y práctica: para la pedagogía crítica, la
generación del conocimiento en el campo universitario se
fundamenta en la relación dialéctica entre teoría y práctica,
donde a la par se cuestionan y enriquecen, mediante la
práctica pedagógica reflexiva-crítica, en aras de hacer
inteligible y transformar la realidad.
La investigación-acción6 emancipadora se erige en esta
relación con inusitada fuerza, la que es concertada
y consensuada entre los docentes, estudiantes y la
comunidad universitaria, como un elemento mediador
entre la teoría y la práctica. Así, la praxis está constituida
por la acción y la relexión del docente y los estudiantes,
93
en la que necesariamente se requiere una teoría y supone la
relación de la teoría y la práctica. Aspecto que concuerda
con el pensamiento de Freire (1976), quien conceptúa, de
cómo el conocer constituye un proceso dialéctico entre la
acción y la relexión, en la que se generan nuevas acciones.
La contextualización: la pedagogía crítica, sin duda alguna
es propedéutica y favorece la producción de conocimiento
del educando. Conocimiento caracterizado por la estrecha
relación con su contexto y otros escenarios, en la que se
propende por el análisis de los contrastes y las ainidades
entre ellos. Pues se sabe que el contexto está constituido
y se reiere al conjunto de elementos socio-históricos,
económicos, culturales, geográicos, políticos, en los que
se da la interacción del sujeto, y desde ellos interpreta y
realiza una aprehensión inteligible de la realidad con un
pensamiento relexivo y crítico. En esta perspectiva, es
deber del docente el considerar las relaciones del contexto e
inferir su posible incidencia en el proceso formativo del ser
humano, ante lo cual es necesario el propiciar las relaciones
entre el sujeto y la realidad. Las que al ser interpretadas deben
gestar la comprensión de la realidad, para luego lograr la
transformación por parte de quien se forma de la misma.
La investigación-acción deliberativa colaborativa:
la pedagogía crítica forma al docente en una didáctica
fundamentada en una investigación-acción deliberativa,
colaborativa y autónoma. La que es llevada a cabo en
unión con los colegas y sus discentes en lo relacionado
con y acerca de su práctica pedagógica diaria. Todo lo
anterior en la perspectiva de cualiicarla sobre la base de la
construcción y reconstrucción permanente de la misma y
de los fundamentos teóricos que la sustentan, a partir de la
relexión crítica. En este sentido y de esta manera, se hace
del tópico curricular una tarea colectiva e integradora de
conocimientos, en oposición al currículo tradicional, el cual
es fragmentado.
Algunas generalidades sobre la alteridad
Sueñan las pulgas con comprarsen un perro y sueñan los
nadies con salir de pobres, que algún mágico día llueva de
pronto la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte;
pero la buena suerte no llueve ayer, ni hoy, ni mañana, ni
nunca, ni en lloviznita cae la buena suerte, por mucho que
los nadies la llamen y aunque les pique la mano izquierda, o
se levanten con el pie derecho, o empiecen el año cambiando
de escoba.
94 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Germán López Noreña
Los nadies: los hijos de nadie, los dueños de nada
El uso actual del término alteridad se debe a Emmanuel
Lévinas, explicitado en una compilación de ensayos bajo
el título alteridad y trascendencia. El vocablo “alteridad”
se aplica contemporáneamente al descubrimiento que
el “él” hace del “otro”, lo que hace surgir una amplia
gama de imágenes del otro, del “nosotros”, así como
visiones múltiples del “él”. Tales imágenes, más allá de
las diferencias, coinciden todas en ser representaciones
más o menos inventadas de personas antes insospechadas,
radicalmente diferentes, que viven en mundos distintos
dentro del mismo universo.
Los nadies: los ningunos, los ninguneados, corriendo la liebre,
muriendo la vida, jodidos, rejodidos:
Que no son, aunque sean.
Que no hablan idiomas, sino dialectos.
Que no profesan religiones. Si no supersticiones.
Que no hacen arte, sino artesanías.
Que no practican cultura, sino folklore.
Que no son seres humanos, sino recursos humanos.
Que no tienen cara, sino brazos.
Que no tienen nombre, sino número.
Que no iguran en la historia universal, sino en la crónica roja de
la prensa local.
Los nadies, que cuestan menos que las balas que los matan.
(Los Nadies-Eduardo Galeano)
Siempre que se piense en una experiencia pedagógica
se espera un encuentro con el otro, y casi siempre, y en
especial para la intencionalidad de este escrito con los
“Nadies”. Ese otro estigmatizado y excluido como se
percibe en las anteriores frases del pensador uruguayo
Eduardo Galeano. Encuentro a ser caracterizado por el
papel del maestro no desde el poder del conocimiento
-siguiendo a Giddens 2003-, es decir en el que él no
se busca la transformación del otro desconociendo sus
particularidades y llevarlo a lo mismo. El educador,
debe convertirse en el otro, asumiendo necesariamente
una postura en donde su papel de formador deja de ser el
epicentro de la formación para convertirse esencialmente
en un dinamizador de la experiencia.
La alteridad (del latín alter: el "otro" de entre dos términos,
considerado desde la posición del "uno", es decir, del yo) es la
concepción ilosóica de "alternar" o cambiar y evolucionar
en la propia perspectiva por la del "otro", pensando y
teniendo en cuenta el punto de vista, la concepción del
mundo, los intereses, la ideología del otro; y no dando por
supuesto que la "de uno" debe prevalecer por encima de la
del “otro”, y en caso extremo el de ser la única posible.
La alteridad en la historia
La alteridad es una metacategoría cuyos orígenes se
remontan a la edad antigua. El Diccionario de pensamiento
contemporáneo en su versión de 1997 hace explícito de su
emergencia en las obras de Platón en el siglo IV a. de C y
Aristóteles en el VI a. de C. Platón, coloca la Alteridad como
uno de los cincos géneros máximos del ser.8 Aristóteles,
concibió la Alteridad como algo más que la diversidad; por lo
tanto, no se trata de distinguir un género en distintas especies,
sino también de la diferencia entre su misma especie
(Abbagnano, 2007). Es así como el estagirita y su maestro
postula las bases y fundamentos para el acercamiento teorico
a la alteridad en la Modernidad.
Ya en la modernidad, a decir de González Silva (2009):
“Descartes (1983) de un giro al desarrollo del metaconstructo
alteridad al postular la concepción del hombre basada del
pensamiento. Es decir, el hombre es un ser quien piensa y
existe gracias a su autoconciencia. Dentro de este marco
histórico, Kant (citado por Laín, 1961) hace del otro un eje
para concepción moral de alteridad. En otras palabras, remite
al sujeto más allá del sí mismo. Finalmente, un autor quien
acerca el término a una comprensión metódica fue Hegel
(1966). Este ilósofo plantea concebir la alteridad como
parte del proceso de la dialéctica. Puesto en otros términos,
el movimiento dialéctico parte de un sujeto para volver a él
tras recoger, relexionando, su alteridad.”.
[…] el primer proceso europeo de modernización, de
civilización, de "subsumir" o (alienar) al Otro como "lo
Mismo"; pero ahora no ya como objeto de una praxis
guerrera, de violencia pura, sino de una praxis erótica,
pedagógica, cultural, política, económica, es decir del
dominio de los cuerpos por el machismo sexual, de la
La pedagogía crítica y la alteridad en tiempos del paradigma de la economía global en la perspectiva de la construcción de ciudadanía
cultura, de tipos de trabajos, de instituciones creadas por una
nueva burocracia política, etc., dominación del Otro. Es el
comienzo de la domesticación, estructuración, colonización
del "modo" como aquellas gentes vivían y reproducían su
vida humana. Sobre el efecto de aquella "colonización" del
mundo de la vida se construirá la América Latina posterior:
una raza mestiza, una cultura sincrética, híbrida, un Estado
colonial, una economía capitalista (primero mercantilista y
después industrial) dependiente y periférica desde su inicio,
desde el origen de la Modernidad (su "Otra- cara". El mundo
de la vida cotidiana (lebenswelt) conquistadora-europea
"colonizará" el mundo de la vida del indio, de la India, de
América (1.994:62).
Ahora, parafraseando a González Silva (2009) dejemos
el itinerario multidisciplinar histórico de la alteridad, y
centremenos en la emergencia de la articulación de la
pedagogía con ella.
La alteridad en la pedagogía
Capítulo especial en el estudio del análisis de la realidad
latinoamericana y la Alteridad9 lo constituyen los trabajos
del ilósofo y teólogo argentino, naturalizado mexicano
Enrique Dussel.10 Este autor en su obra para una ética
de la liberación latinoamericana en el tomo I, le da un
tratamiento a la alteridad implementando un nuevo
método: la analéctica.11 En 1980, Dussel en su texto la
pedagógica latinoamericana trata de llevar la alteridad
a la realidad pedagógica : “En dicho tratado se presenta
la escuela como una de las tantas salidas de la totalidad
hacia la alteridad. El análisis realizado conduce a la
consideración de que la pedagogía juega un papel esencial
en la bipolaridad palabra-oído, interpelación-escucha y
acogimiento de la alteridad para servir al Otro como otro.
En esta obra, Dussel también propone una postura para el
docente: discernir entre lo que el opresor ha constituido
en el colonizado como su máscara y el rostro bello del
colonizado como autóctono, otro. Mostrar esa distancia,
hacer autovalorar la alteridad es la tarea del maestro.”
(González Silva, 2009, pág. 122).
Luego, veamos en este ensayo una breve argumentación
en torno a la pedagogía y la Alteridad en la perspectiva
del llamado “paradigma de la economía global”, veamos
entonces algunos aspectos de él.
95
O del “paradigma de la economía global”
El libro del connotado estratega de negocios y exsocio
mayoritario de McKinsey & Company Kenichi Ohmae
(2005) titulado El próximo escenario global desafíos y
oportunidades en un mundo sin fronteras ha sido concebido
como una de las instancias de mayor trascendencia en la
socialización al campo académico del llamado “paradigma
de la economía global”. Texto en el que Ohmae no sólo
expone su paradigma del mundo globalizado, sino también
realiza predicciones del devenir económico del mundo. En
este sentido y ante los inusitados y velocísimos cambios
acaecidos, y las exigencias al respecto, de igual manera
a Drucker Peter (1993), exponente del pensamiento
occidental, quien pregonaba la necesidad evolutiva de un
Estado-Nación a una sociedad poscapitalista.
Volumen conformado por doce capítulos, integrados en
tres grandes apartados, el escenario, la dirección escénica
y el guión. Libro por cierto, cautivador de una muy buena
cantidad de adeptos, y también dinamizador de diversidad de
críticas exacerbadas. Sus partidarios conciben el manuscrito
como un valioso aporte a áreas como la política, los negocios
y el desarrollo individual. Mientras que para sus críticos
es la consumación de un entramado teórico liderado, entre
otros y siendo uno de los más radicales, por su autor, con
directrices muy claras hacia la concreción de las políticas de
la globalización y uno de sus productos, el neoliberalismo,
en los llamados países tercermundistas.
Ohmae nacido en la isla Kyushi en el año 1943, en una
instancia argumentativa, dialógica y metafórica nos
introduce exponiéndonos en el símil de un teatro con sus
componentes –escenario, dirección y guión- el mundo
empresarial y económico en el marco de La Globalización
y La Sociedad de la Información.
La alteridad y la pedagogía en la perspectiva
de construcción de ciudadanía
Ya mencionados los anteriores elementos de la pedagogía
crítica, la alteridad, el llamado “paradigma de la economía
global” y la ciudadanía pensemos en cuáles serían las
exigencias y los retos a cumplir para una educación en la que
se tome en cuenta la alteridad y se logre eliminar los múltiples
Germán López Noreña
96 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
problemas de exclusión de la hoy llamada globalización, es
decir preguntémonos sobre qué posibilidades tendría una
educación global.
Educación global que de las muchas aproximaciones a su
deinición tomaremos la presentada por el Centro Norte-Sur
del consejo de Europa-Lisboa 2008 coordinado por Miguel
Carvalho Da Silva, titulado pautas para una educación
global conceptos y metodología sobre educación global para
educadores y responsables de políticas en materia educativa;
y en la que se escribe lo siguiente:
La educación global es una perspectiva educativa que nace
del hecho real indiscutible acerca de la interacción cada vez
mayor de la población en un mundo globalizado. Por ello, es
fundamental que la educación brinde a todos la oportunidad
y competencias para relexionar y compartir sus puntos de
vista y roles en una sociedad global e interconectada, así
como para comprender y argumentar acerca de las complejas
relaciones en temas comunes sociales, ecológicos, políticos
y económicos, de tal modo que deriven en nuevas maneras
de pensar y actuar. Sin embargo, la educación global no
debe presentarse como una propuesta que todos podríamos
aceptar sin críticas, porque entendemos que hay dilemas,
tensiones, dudas y percepciones diferentes en un proceso
educativo cuando se tratan temas globales.
Deinición en la que se puede observar el no ser ajena
al común denominador de los muchos documentos
internacionales en los que se trata el concepto de educación
global. Pero debemos preguntarnos, qué de ello se ha
cumplido. La verdad es que muy poco o mejor casi nada.
Hay que decir que una pedagogía que de cuenta de las
múltiples variables que conlleva el problema de la Alteridad
en el marco del mundo globalizado y en aras de construcción
de Ciudadanía está en ciernes y en ello se está dando los
primeros pasos. Pasos significativos y encarnados en
pensadores para la América Latina como Enrique Dussel, y
en Las propuestas pedagógicas de Freire, Giroux, McLaren
y Monzo.
Otro aspecto importante a resaltar como alternativa
educativa para el continente americano, lo es hoy por
hoy y ya desde sus inicios el Centro CESPE gestado y en
cabeza de su presidente el Dr. Carlos Viltre Calderón, como
instancia de emancipación educativa a la lacaya dictadura de
la Globalización con su exacerbado economicista modelo
por competencias.
No menos importante es el tejido discusivo que ya en varios
años viene desarrollando el investigador de la Educación
en el marco de la Globalización, y adscrito la Universidad
Pedagógica Nacional de México, el Dr. Prudenciano
Moreno Moreno. Moreno Moreno propende y plantea un
modelo pedagógico antagónico al modelo insensible y
para nada humano de la Hiperglobalización. Él reclama de
manera efectiva y asertiva el volver entre otros aspectos a
esa romántica y efectiva Paideia griega, dar ruptrura a la
Alexitimia Docente tan característica el proceso educativo
globalizador del siglo XXI, y que ente el volver a dar
la hombre sus esencia humana, lo dotará de elementos
latamente positivos para el ejercicio de su ciudadanía.
Conclusiones
A manera de cierre de esta corta relexión escrita en la
que se hace mención a algunos aspectos de la pedagogía
crítica, la alteridad, el “paradigma de la economía global”,
y la ciudadanía, iniciaremos en un primer momento
estableciendo la necesidad del logro de la aprehensión
conceptual de estas por parte de los educadores del mundo,
para que ya puestos en la práctica se haga posible el llegar a
un mundo más equitativo en lo socioeconómico y lo socio
político.
Son innegables las necesidades de la aplicación de las
múltiples potencialidades en lo formativo de la pedagogía
crítica, como elemento base de la relexión del acto educativo
para estos tiempos de zozobra y de desesperanza que vive
el hombre en los inicios de este el siglo XXI.
La alteridad, no es un concepto, es una realidad. El
“nadie” es decir el excluido, subsumido y relegado
comparativamente e históricamente a una mismidad que
lo estigmatiza y lo hace inferior, debe ser reivindicado
desde la educación, sustentada en una pedagogía para la
alteridad con un contenido altamente humano. El docente,
debe ser ese otro desde su mismidad, para con el otro, que
tienda el puente de la superación, y coadyuve a la ruptura
de paradigmas aún vigentes de la modernidad en las
añejas estructuras de poder en la hoy por hoy denominada
sociedad del conocimiento.
Sin duda, no aceptar las bondades del desarrollo actual de
la ciencia y las nuevas tecnologías de la comunicación y
de la información, sería un caso extremo de necedad. Pero
La pedagogía crítica y la alteridad en tiempos del paradigma de la economía global en la perspectiva de la construcción de ciudadanía
si hay que abogar desde nuestro papel de maestro por más
oportunidades e igualdad en el uso y el acercamiento de las
mismas.
Otro aspecto e suma importancia es empoderarnos de las
propuestas de pensadores como Freire, McLaren, Monzo,
Giroux y Moreno Moreno, Carlos Viltre con CESPE, Pupo
entre otros, sin desconocer la existencia de otras propuestas
alternativas, para formar educativamente en ciudadanía,
en el amor y en el respeto y la dignidad humana a nuestros
discentes, como elemento contestarlo al nefasto e inhumano
modelo educativo hiperglobalizador Finalmente, hay que
decir que el futuro de nuestras generaciones está echada,
y que los ases están sobre la mesa; luego es necesario que
los profesionales y en especial para nuestro caso los de la
educación en el mundo entero seamos lo suicientemente
coherente con nuestro discurso para jugarlos.
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Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 99-106
Reflexiones para la creación una materia curricular sobre
interculturalidad y desarrollo sustentable
Fabiola García Hernádez
fabygarh@gmail.com.
Resumen
El presente trabajo se propone revisar los conceptos de
interculturalidad y desarrollo sustentable para relexionar
sobre la necesidad de incluirlos en las aulas a través de
materias curriculares. Se plantea a la interculturalidad como
eje para el desarrollo sustentable, pues sin el respeto por las
culturas y formas de ver de los otros, no es posible el respeto
hacia el medio ambiente. Se elabora una revisión general
sobre el mapa curricular de la Preparatoria Agrícola de la
UACH y se plantea la posibilidad de generar una materia
que aborde estos temas dirigido a los jóvenes que llegan a
la UACH desde sus lugares de origen.
Palabras clave: medio ambiente, interculturalidad.
Introducción
Una institución como la Universidad Autónoma Chapingo
(UACH), decididamente una de las más importantes en el
área de agronomía, no puede ni debe permanecer al margen
de las discusiones emergentes en nuestro país sobre medio
ambiente y diálogos entre culturas, habida cuenta de que
se trata de una de las instituciones educativas con mayor
número de estudiantes provenientes de culturas originarias,
así como por estar orientada a la formación de profesionales
en las áreas agrícolas del conocimiento.
Sin embargo, parece enfrascada en discusiones políticas
endogámicas y en la carrera por el inanciamiento público
y privado, con lo que se deja de lado la urgente necesidad
de que participe de forma contundente en la formación de
agrónomos críticos, interdisciplinarios y con bases sólidas
para generar el desarrollo sustentable. En contraposición
con el profesional individualista, formado en competencias
para seguir “explotando la tierra”, súper especializado, etc.
Desde que el estudiante es recibido en la preparatoria
agrícola de la UACH, es preparado para recibir esa
formación de visión cuasi empresarial que completará en el
nivel licenciatura con absoluto desarraigo de sus orígenes y
sin ninguna orientación directa hacia los temas ambientales
(no existe ninguna asignatura que aborde estos temas) que,
dicho sea de paso, deberían ser un eje transversal en una
institución como la que hacemos referencia.
Además de una exagerada carga académica ampliamente
especializada en agronomía, no existe en el currículum una
materia en la que se inserte al estudiante de manera integral
hacia el respeto por sus orígenes, ni en relación con el cuidado
y protección de los ambientes naturales de los que muchos
de los estudiantes provienen.
Es de interés recalcar que algunos de estos jóvenes hablan
alguna lengua materna distinta del español, dato que
coloca a la UACH como una de las universidades con
mayor pluriculturalidad en su matrícula. Según datos de
administración escolar de la UACH (a octubre del 2016), la
matrícula general es de 9 496 estudiantes en los niveles medio
superior y superior, mientras que la matrícula estudiantil
indígena es de 2 701 registros. La lengua sigue siendo el
criterio para identiicar a los estudiantes indígenas, por
100 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
lo que 28.44% de la población identiicada es hablante de
una lengua indígena o descendiente de un grupo autóctono
(http://saeweb.chapingo.mx/estadisticas/?sae=esta&rpt=6).
Es en este sentido que se presenta un análisis general del
mapa curricular de la preparatoria agrícola, con el objetivo de
esbozar una propuesta para incluir una materia que se ocupe
de escuchar la pluriculturalidad e insertar a través de la metadisciplina el concepto de la sustentabilidad para generar un
espacio de diálogo entre jóvenes que por encontrarse en los
primeros semestres de su formación media superior, aún no
han sido absorbidos por el sistema educativo del modelo
Chapingo.
La educación en el contexto del desarrollo
sustentable
De acuerdo con lo planteado por Baruch Belmar Cerda en
su ensayo “la educación como base del desarrollo social
sustentable”, lo realmente relevante, es que tengamos
calidad y idelidad respecto de aquello que es “común” y
que nos agrupa e identiica como grupo social. La historia
humana nos señala que la educación, en sus inicios, no fue
una acción institucionalizada sino que, por el contrario, era
una actividad natural y cotidiana.
Airma que cuando hablamos de educación lo ligamos
inmediatamente e inconscientemente a un quehacer
institucionalizado y sistemático, “muy por el contrario,
soy un convencido de que en la medida que cada uno de
nosotros nos percibimos racional y afectivamente como
seres inacabados, en ese mismo instante debiéramos iniciar
un proceso que nos permita superar nuestras limitaciones y
deiciencias” (Cerda, 1998).
Educación es sinónimo de mejoramiento, más cualitativo
que cuantitativo, es decir, debemos tender a mejorar nuestros
comportamientos y actitudes en términos de calidad,
más que limitarnos a acrecentar nuestros conocimientos
indistintamente de cuales sean ellos. Saber más no implica
necesariamente ser mejor. Lo relevante es saber qué uso daré
a esos nuevos o mayores conocimientos (Cerda, 1998). Los
currículum vigentes nos son pertinentes a estas realidades,
no tan sólo por estar absolutamente desarraigados con su
realidad y su cultura, sino porque las metodologías utilizadas
no les son propias.
Fabiola García Hernádez
Para que la educación realmente mejore el entorno de
nuestras sociedades se requiere de la participación de
los actores interesados en la educación: la familia, las
organizaciones comunitarias (culturales, religiosas,
productivas, etc.), y los alumnos. Se requiere además,
iniciar un proceso educativo a partir de la cultura que
le es propia al sector. Para ello es necesario, en primer
lugar, conocerla, en segundo lugar, aceptarla y, como
consecuencia, valorarla. Se debe también incorporar a
los diversos agentes educativos, tanto primarios como
secundarios al proceso educativo. La escuela y el proceso
educativo no es pertenencia de ninguna persona o institución
en particular.
Es relevante hacer un proceso educativo a partir de las
experiencias previas y cotidianas de los niños y no de
situaciones hipotéticas y ajenas a sus ser. Es decir, realizar
el proceso de aprendizaje en contacto con la realidad y
naturaleza, no encarcelarlo en un rectángulo frío y muchas
veces despersonalizado de una sala de clases. Baruch Cerda
agrega que toda acción orientada a provocar desarrollo
sustentable debe abarcar a todos los estratos de la población
(sexo, edad, nivel educacional, etc.) con el propósito, por un
lado, que los cambios se logren en un menor tiempo porque
signiicará que en la familia todos los integrantes saben lo que
los demás están haciendo, lo que provocará necesariamente
un sentimiento de identidad grupal.
Enrique Lef aborda la situación del desarrollo sustentable
en el marco de la educación: debe estar orientada a su
contexto y con la participación de todos. Es pertinente
señalar que las ideas sobre sostenibilidad y luego
sustentabilidad nacen hace ya varias décadas en los países
industrializados (mediados de los 70´s), a raíz de una serie
de problemas ambientales. La preocupación generalizada
hace que se conformen organismos internacionales que
busquen soluciones conjuntas y tracen rutas para tales
planteamientos.
Sin embargo, en países como México tarda mucho en llegar
la ola ambientalista. Como lo expresa Enrique Lef (2002)
“la complejidad creciente y la agudización de los problemas
socioambientales, generados por el triunfo de la racionalidad
económica y de la razón tecnológica, han llevado a plantear
la necesidad de reorientar los procesos de producción y
aplicación de conocimientos, así como la formación de
habilidades profesionales, para conducir un proceso de
transición hacia un desarrollo sustentable”.
Reflexiones para la creación una materia curricular sobre interculturalidad y desarrollo sustentable
Sin embargo, aclara Lef que la dependencia tecnológica que
padecen los países periféricos, hace que sus condiciones de
subdesarrollo se vean agravadas, pues requieren importar
conocimientos y tecnologías limpias para iniciar sus
procesos. “Las estrategias de apropiación de la naturaleza
(la biodiversidad) y el control de los equilibrios ecológicos
(el cambio climático) de los centros de poder económico,
cientíico, tecnológico de los países del Norte, generan una
desigual distribución de los costos y potenciales ecológicos,
así como de las oportunidades de acceso y aprovechamiento
de los recursos del planeta, en los niveles nacional, regional
y mundial”.
El saber ambiental no emerge de una reorganización
sistémica de los conocimientos actuales. Éste se gesta a
través de la transformación de un conjunto de paradigmas
del conocimiento y de formaciones ideológicas, a partir de
una problemática social que los cuestiona y los desborda. El
saber ambiental se construye por un conjunto de procesos
de naturaleza diferente, que genera sentidos culturales y
proyectos políticos diversos, incontenibles en un modelo
global, por holístico y abierto que éste sea (Lef, 2002).
Interculturalidad y desarrollo sustentable
Desde hace diez años se ha usado y abusado de esta triada
para referirse, con rigor teórico diverso, a las situaciones
en donde actúan, entran en contacto, armonizan o divergen
individuos o grupos sociales de culturas distintas. No se
trata de un asunto menor, pues en la mayor parte de los
casos lo que subyace al empleo de esto términos es el debate
sobre la posibilidad de construir sociedades pluriculturales
democráticas, y, en el caso particular de México, el
reconocimiento de y el respeto a los derechos de los pueblos
indígenas y otros sectores sociales (Zolla, 2011).
Para Zolla (2011: 88), la pluriculturalidad es sinónimo de
multiculturalidad y la deine como un dato de hecho, una
característica social veriicable y concreta: México es una
nación pluricultural o multicultural que alberga hoy a más de
60 pueblos originarios, hablantes de casi un centenar de lenguas
y dialectos autóctonos. En ella coexisten más de 13 millones
de indígenas con otros pueblos originarios que han migrado a
México desde Centroamérica y con grupos de origen africano,
pero también con una población numerosa y mayoritaria,
diversa por sus orígenes, mestiza, con rasgos culturales que
deinen y asumen identidades peculiares y diversas.
101
Se puede decir que una sociedad multicultural es aquella
en cuyo seno existen grupos que se distinguen entre sí
sobre la base de criterios con gran fuerza social divisoria,
como son los criterios de pertenencia etnorraciales,
etnonacionales, religiosos y/o lingüísticos. Normalmente,
en toda sociedad con estas características hay un grupo
dominante, que suele ser el que posee las mayores cuotas
de poder político y económico. En estas sociedades suele
haber una tendencia a reducir o eliminar la diferencia
cultural que representan los grupos minoritarios o menos
poderosos (Pulido, 2005: 21).
La interculturalidad no es un concepto, es una manera de
comportarse. No es una categoría teórica, es una propuesta
ética. Más que una idea, es una actitud, una manera de ser
necesaria en un mundo paradójicamente cada vez más
interconectado tecnológicamente y al mismo tiempo más
incomunicado interculturalmente (Tubino, 2004, citado por
Pulido, 2005: 25).
En uno de los ámbitos donde se comenzó a utilizar el término
es en la educación. Para Poblete (2005), la educación
intercultural es uno de los temas sociales de gran interés y se
aborda desde diferentes perspectivas (políticas, educativas,
antropológicas y sociológicas, entre otras), porque abre
la comprensión hacia asuntos como la construcción de
ciudadanía, los procesos de inclusión-exclusión social;
también problemas educativos como racismo, xenofobia,
discriminación inmigración y minorías sociales. De
acuerdo con Poblete (2005), si la educación intercultural
ha pasado a formar parte del discurso pedagógico oicial en
los numerosos países que intentan aplicarla, es porque de
alguna forma el contexto social, es decir, la diversidad, se
ha impuesto como una realidad ineludible para los Estados
que ven en esta modalidad educativa la forma precisa de
afrontarla y controlarla.
El reto de construir un Estado intercultural, tal como lo
airma Zolla (2011), no culmina con el solo reconocimiento
de las diferencias y de la diversidad de los sectores sociales,
o con la creación de espacios deinidos por la coexistencia de
diversos valores y prácticas, como ha ocurrido en México.
La interculturalidad debería garantizar que los más diversos
sectores -y no sólo los indígenas frente al Estado- puedan
vincularse a través de lo que los une y los distingue. Los
cambios sustanciales en las políticas de Estado deben
conducir al establecimiento de un orden institucional que
fomente la interculturalidad, como condición básica de gran
parte de los consensos sociales.
102 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Fabiola García Hernádez
Este mundo del conocimiento (especialmente el
institucional), ha olvidado una gran fuente de nociones:
los saberes populares. Si bien los saberes populares no se
atienen al método cientíico, han constituido desde siempre
una fuente de éste (Carral, 2015). Desde siempre, han sido
vigentes a pesar de haber sido excluidas de los procesos
institucionales de la educación y la investigación cientíica.
El más allá disciplinar al que hace referencia Carral (2015),
no está encerrado en la enseñanza ni en el aprendizaje
institucional, “sino el conocimiento comunicativo que reside
en el diálogo universal, general, particular y singular”, ese
más allá disciplinar incluye los aspectos de la vida mágicoreligiosa y se encuentra en otros mundos del conocimiento
que no se pueden ignorar.
VI: de los estudiantes, artículo 132, dice: “Para la selección
de los alumnos de la Universidad, se dará preferencia a los
solicitantes de escasos recursos económicos y provenientes
del sector rural, tomando en cuenta la caliicación obtenida
en el examen de admisión”.
El caso de la UniversidadAutónoma Chapingo
Criterio por etnia indígena. Seleccionar la parte proporcional
de cada etnia indígena con las más altas caliicaciones, sobre
la base de 200 para preparatoria y 100 para propedéutico,
a partir de un mínimo de 4 por cada etnia. El total resultará
de la suma de la base de cada nivel, más el complemento
a 4 para los grupos cuya proporción resulte menor que
4. En caso de empate en la caliicación se considerará la
condición socioeconómica rural marginal del aspirante.
Criterio por municipios pobres. Con base en los índices
de marginación de la Comisión Nacional de Población
(CONAPO), seleccionar a quien haya obtenido la máxima
caliicación por cada municipio de los declarados con muy
alto grado de marginación del país. En caso de empate se
considerará la condición socioeconómica rural marginal
del aspirante (consultado en http://saeweb.chapingo.
mx/?sae=dapb2&modulo=dapb).
La Universidad Autónoma Chapingo (UACH) sostiene en
su ilosofía la atención a los grupos más desfavorecidos,
por lo que desde sus orígenes ha mantenido una matrícula
estudiantil proveniente de diferentes regiones y culturas
del país. Una de las características más importantes de la
UACH es que brinda educación gratuita a sus estudiantes,
bajo un sistema de becas y servicios asistenciales
(dormitorios, comedores, servicios médicos), lo que
permite a sus estudiantes de bajos recursos asegurar
su educación y dedicar tiempo completo a la misma
(Oseguera, 1992).
Desde que la Escuela Nacional de Agricultura (ENA) se
transformó en la UACH, la Ley que Crea la Universidad
(art. 3º, Fracc. I y III) delineó el peril de quien ingresa a la
institución al plantear entre sus objetivos:
Impartir educación de tipo superior -técnico, de licenciatura
y de postgrado- para formar personal docente, investigadores
y técnicos con juicio crítico, democrático, nacionalista y
humanístico que los capacite para contribuir a la solución
de los problemas del medio rural.
Preservar, difundir y acrecentar la cultura y promover la
realización del hombre especialmente en el medio rural
para lograr una sociedad más justa y creadora. En ese
mismo tenor, el estatuto de la universidad, en el capítulo
La UACH tiene entre sus atributos planear estrategias
de ingreso de sus estudiantes y en esta medida, uno de
los criterios de selección establecidos ha sido aceptar
a jóvenes hablantes de alguna lengua indígena para
reforzar la presencia de la matrícula estudiantil indígena.
Existen actualmente nueve criterios de selección y al
menos dos de ellos refuerzan la idea de matricular a
jóvenes de zonas rurales marginales y/o pertenecientes a
una etnia indígena:
Desde siempre, la UACh ha mantenido en su matrícula a
estudiantes provenientes de zonas rurales, muchas veces
marginadas, pero es a partir del reconocimiento de que
somos una nación pluricultural (dato que se establece en
la Constitución mexicana desde el 2004) que Chapingo se
preocupa por mantener una estrategia para captar mayor
matrícula indígena.
Desde luego que este es un aspecto que enriquece la matrícula
estudiantil ampliamente, lo desafortunado es que de nada
le sirve a la institución porque lo capitaliza la fortaleza que
implica tener la convivencia de tantos saberes distintos a los
establecidos en la institución.
Reflexiones para la creación una materia curricular sobre interculturalidad y desarrollo sustentable
103
El actual mapa curricular de la preparatoria agrícola de la UACH.
Años
Segundo
semestre
Primero
1
Álgebra I
2
Álgebra II
1
Geometría y
trigonometría
Introducción
a las ciencias
experimentales
Física I
Física II
Tercero
2
Geometría
analítica
Geografía
Historia I
2
Cálculo integral
Física III
Biología I
Química I
Historia II
1
Cálculo diferencial
Biología II
Biología vegetal
Biología animal
Química II
Genética
Química III
Problemas
Sociedad política y El problema rural
cultura
en las sociedades
socioeconómicos
de México
contemporáneas
Desarrollo humano I Desarrollo humano II
Taller de expresión
oral y escrita I
Taller de expresión
oral y escrita II
Interculturalidad y
desarrollo sustentable
Literatura I
Literatura II
Introducción a
la ilosofía
Ética
Lógica
Filosofía de la
ciencia
Inglés IV
Cómputo I
Cómputo II
Inglés I
Inglés II
Inglés III
Agronomía I
Agronomía II
Agronomía III
Agronomía IV
Meteorología
Sistemas de
producción forestal
Sistemas de
producción animal
Sistemática y
taxonomía
Topografía
Natación
Natación
Fuente: elaboración con programas de materias consultado en http://prepa.chapingo.mx/?sec=mapa.
Áreas de formación
Matemáticas
Ciencias experimentales
Ciencias sociales
Humanísticas
Especialidad agronómica
Otras habilidades idioma extranjero y cómputo
Deportivas
104 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
El mapa curricular de la Preparatoria Agrícola de la UACH
está sobrecargado de materias. Los dos primeros semestres
los estudiantes estarán sometidos a siete materias en distintas
áreas de formación pero ninguna de ellas que fortalezca
el respeto por sus orígenes y por la diversidad cultural, y
no qué decir por el respeto al medio ambiente. A partir del
primer semestre del segundo año en la preparatoria agrícola,
los estudiantes cursarán ocho materias, en una de ellas
deberán familiarizarse con el idioma extranjero inglés. Es
importante mencionar que algunos de los estudiantes que
llegan a Preparatoria tienen una lengua materna diferente
del español, por lo que en muchas ocasiones no dominan
plenamente el idioma oicial de la institución, pero ya son
obligados a adquirir un tercero. Una vez más, sin que sea
considerado, valorado, su origen.
En el tercer año, primer semestre, los alumnos cursarán 9
materias y en el último año 10, desde luego, elevando la
complicación de algunas de las asignaturas por cursar.
Actividades complementarias: tutorías y
actividades deportivas
También como complemento (por si tuvieran espacio de
ocio) los alumnos pueden cursar algún taller artístico.
Todos los estudiantes de primer año están obligados a tomar
como co-curricular una materia deportiva. En los semestres
recientes se ha obligado a los estudiantes de primer y segundo
semestres del primer año a cursar natación como deporte.
Medida tomada porque en los viajes de estudio han ocurrido
decesos por ahogamiento, el remedio es que todos cursen
natación.
No hay nada sobre ecología y sustentabilidad
No hay materias optativas, todas son obligatorias.
No hay estadística, podría ser una optativa. Se usa para las
carreras sociales y ciencias aplicadas (bosques, economía,
sociología, entre otras).
Propuestas para el mapa curricular
Generar optativas que desde el primer semestre del tercer
año (quinto semestre) oriente al estudiante hacia su peril
profesional. Con materias especíicas para esas áreas del
conocimiento. Proponer lexibilidad curricular para que
Fabiola García Hernádez
los estudiantes puedan cursar otras materias optativas que
complementen su peril profesional como lo deseen. Hacer
efectiva la posibilidad de que el estudiante mejore o adquiera
una lengua indígena como la enseñanza del idioma. Eliminar
cursos de los últimos dos semestres. Dejar como máximo
7 cursos en cada semestre, considerando la posibilidad de
cursar optativas.
Propuesta de materia curricular
Nombre de la materia: interculturalidad y desarrollo
sustentable. Planteamientos generales:
Conocer en qué consiste la diversidad cultural -respeto a las
culturas y a las identidades-.
Reconocerla para que se respete y posteriormente, valorarla
como componente fundamental del equilibrio social.
La exigencia de repensar nuestras prácticas educativas.
No puede circunscribirse a simples cambios curriculares
porque la construcción del conocimiento incluye a todo el
sujeto: cognitivamente, emocionalmente, volitivamente y
políticamente.
El campo de la educación ambiental al igual que la
interculturalidad son también espacios emergentes.
Se precisa de una nueva relación en el aprendizaje. Una
organización para el trabajo. ¿Qué debemos enseñar en las
escuelas? ¿Cómo debemos organizarnos en las escuelas?
¿Qué clase de pedagogía necesitamos? (la sociedad moderna
parece más preocupada por promover la autorrealización
individual).
La educación ambiental y la interculturalidad en la UACH
no han merecido la atención debida.
El currículum no incorpora ninguna asignatura en el
área básica o en las áreas de las líneas de formación en la
preparatoria agrícola
Los objetivos de esta materia son:
Establecer el eje que permita construir una educación
intercultural y una educación ambiental.
Reconocer y aprovechar la pluriculturalidad de la matrícula
estudiantil a través de una construcción meta-disciplinar.
Características de la propuesta
La propuesta es que la materia deberá ser impartida de
manera interdisciplinaria en forma de taller con profesores
del área de disciplinas humanísticas y sociales, así como con
la orientación de especialistas en medio ambiente:
Desarrollo humano
Literatura
Reflexiones para la creación una materia curricular sobre interculturalidad y desarrollo sustentable
Taller de expresión oral y escrita
Historia
Filosofía
Medio ambiente
Orientarse hacia la comprensión de la interculturalidad y el
medio ambiente
Se impartirá a jóvenes de primer semestre del primer año de
preparatoria agrícola
Programa de la materia
Unidad I. Sociedad, conocimiento y medio ambiente
1.
2.
3.
4.
Sociedad global y diversidad biológica y cultural
La relación entre cultura y naturaleza
La relación entre cultura y medio ambiente
El diálogo y la construcción del conocimiento y
propuestas de acción ante los problemas ambientales.
5. Diversidad cultural y modos de producir conocimiento.
Unidad II. Medio ambiente y pueblos indígenas
1. Introducción a la problemática ambiental contemporánea
2. Países megadiversos
3. Pueblos indígenas de México y zonas prioritarias de
conservación ambiental
4. La diversidad de modos de la relación sociedadnaturaleza y el concepto de “bioculturalidad”
5. Política ambiental: conlictos y oportunidades
6. Ejemplos de desarrollo sustentable comunitario
7. Contribuciones éticas de los pueblos indígenas a la
sustentabilidad ambiental
Unidad III. Interculturalidad y educación
1.
2.
3.
4.
5.
Marco legal de la educación intercultural.
Legislación nacional referida a la educación intercultural.
Estereotipos, prejuicios y prácticas pedagógicas.
El estereotipo como clasiicador de personas y grupos.
Función de los estereotipos; intereses subyasentes.
Conclusiones
Pensar en la interculturalidad y en la ambientalización
del currículum parece una tarea utópica. Sin embargo,
en el momento en que se realiza un cruce de conceptos
105
(interculturalidad-sustentabilidad ambiental), los objetivos
que persiguen ambos conceptos se refuerzan uno a otro. Es
imposible que exista el pensamiento sustentable si antes no
se respeta al otro y su forma de ver el mundo. De esta forma,
se plantea utilizar como eje ético y político del desarrollo
humano sustentable a la interculturalidad.
La Universidad Autónoma Chapingo es tierra fértil
para trabajar en esta doble vía. La matrícula estudiantil
multicultural ofrece la posibilidad de desarrollar un trabajo
meta-disciplinar (más allá de las disciplinas), un diálogo con
las distintas formas de ver al mundo que en esta institución
se conjuntan, y no solamente imponer, como hasta ahora
se ha hecho, un currículum centrado en la acumulación de
conocimientos “cientíicos”.
Sin embargo, es importante repensar la manera en que
se han estado formando las generaciones de agrónomos
en Chapingo, con un planeamiento hacia el desarrollo
agrícola que no se ha visto beneiciado por la orquestación
internacional, con miras a encajar laboralmente en un mundo
cambiante, pero bajo las mismas estructuras, sin pensar que
en esa carrera nunca llegaremos hacia las metas establecidas
internacionalmente. Es necesario empezar a reconocernos
como diferentes y pensar formas diferentes de enfrentar al
mundo globalizado.
La propuesta de iniciar en preparatoria agrícola con una
materia sobre interculturalidad tiene el sentido de integrar
pensamientos de jóvenes estudiantes con ánimos de
cambiar al mundo, de aprovechar la multiculturalidad y
de hacerles saber que su potencial es justamente la suma
de ideas diferentes que no se invalidan unas a otras.
Desde luego, es apenas una mirada hacia la posibilidad de
construir un currículum que tenga como eje transversal a la
interculturalidad y a la sustentabilidad. Para ello, se precisa
de arduo trabajo, al menos interdisciplinar.
Literatura citada
Carral, G. T. (2015). Educación ambiental para el desarrollo compatible.
México: UACh-Juan Pablo Editores.
Cerda, B. B. (1998). La educación como base del desarrollo social
sustentable. In: J. R. Aurelio Pedroza, Desarrollo rural
sustentable. Experiencias, enfoques y perspectivas (págs. 2-11).
México: Universidad Autónoma Chapingo.
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escolar. Breve recuento de una historia azarosa. Profesorado.
Revista de currículum y formación del profesorado, 16-24.
106 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
González, M. V. (2014). Agroecología, agri-cultura y sustentabilidad.
In: B. Mata, El sector agropecuario de México. Una visión
crítica con esperanza (págs. 109-117). México: Universidad
Autónoma Chapingo- GES.
Leff, E. (2002). Saber ambiental. Sustentabilidad, racionalidad,
complejidad, poder. México: S. XXI.
Mata, B. L. (2014). El sector agropecuario en México. Una visión crítica
con esperanza. México: Chapingo-GES.
Pedroza, S. R. (1998). Desarrollo rural sustentable. Experiencias,
enfoques y perspectivas. México: Universidad Autónoma
Chapingo.
Ramón Bedolla, A. M. 2016. La educación ambiental para la
sustentabilidad a considerar en el diseño de un currículo.
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rev/atlante/2016/curriculo.html.
Poblete, R. (2005). “Educación intercultural bilingüe y pensamiento
indigenista”, en Fernández, G. y Molina, J. G. (coords.).
Multiculturalidad y educación (pp. 249-263). Madrid: Alianza
Editorial.
Fabiola García Hernádez
Pulido, R. M. (2005). “Sobre el signiicado y los usos de los conceptos
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Molina, J. G. (Coord.). Multiculturalidad y educación (pp.
19-35). Madrid: Alianza Editorial.
Programas de materias de la preparatoria agrícola, consultado en http://
prepa.chapingo.mx/?sec=mapa
Subdirección de Administración Escolar, estadísticas de alumnos en
http://saeweb.chapingo.mx/estadisticas/
Universidad Intercultural de Chiapas, programa de la materia:
“antropología ecológica”, consultado en www.unich.edu.mx/
------------------------------, mapa curricular de la licenciatura en desarrollo
sustentable, Plan de Estudios 2011.
Universidad de la Frontera (2010), programa de asignatura:
“Interculturalidad y educación”, consultado en: www.ufro.cl.
Universidad de Granada (2006-2007), Departamento de Antropología
Social, Facultad de Ciencias de la Educación, programa de la
asignatura: “Interculturalidad y Educación”.
Zolla, C. y Zolla, E. (2011). Los pueblos indígenas de México. 100
preguntas. México: UNAM.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 107-111
Evaluación de la inteligencia emocional a partir del
tmms-24 en estudiantes de bachillerato
Ma. De Lourdes Aguilera Peña y Lorenzo Espinosa Gómez
Área de Disciplinas Humanísticas- Universidad Autónoma Chapingo.
Resumen
El presente trabajo tuvo como objetivo conocer las
habilidades emocionales en cuanto a percepción,
comprensión y regulación emocional, de alumnos de
segundo semestre de bachillerato, en el ciclo 2015-2016,
de la preparatoria agrícola de la UACH, y de la Preparatoria
Texcoco de la UAEMéx. Fue una investigación de tipo
exploratoria con un nivel de análisis mixto. Se conformó
una muestra de 101 mujeres y 96 hombres. El instrumento
aplicado fue el Trait Meta-Mood Scale, en su versión
reducida y modiicada denominada TMMS-24 (FernándezBerrocal, Extremera y Ramos, 2004). Resultados: en el
factor percepción, los hombres, tanto de la Preparatoria
Texcoco como de la Preparatoria Agrícola, consideran
que han desarrollado habilidades para identificar y
reconocer de forma adecuada sus sentimientos. En el
factor comprensión, casi la mitad de los integrantes de la
muestra, tanto hombres como mujeres, reportaron que no
han desarrollado habilidades que les permita reconocer
sus emociones, así como identiicar la transición de un
estado emocional a otro o reconocer las causas generadoras
de sus estados anímicos y las futuras consecuencias de
sus acciones. Con relación al factor regulación, en la
Preparatoria Texcoco el 84% de hombres y 83% de mujeres
y en la Preparatoria Agrícola el 73% de hombres y 78% de
mujeres reportan que han desarrollado habilidades que les
permiten estar abiertos a los sentimientos, tanto positivos
como negativos, y relexionar sobre ellos, moderando
las emociones negativas e intensiicando las positivas
logrando un crecimiento tanto emocional como intelectual.
Conclusión: Los resultados obtenidos en la aplicación
del TMMS-24 permitieron obtener una estimación de
las habilidades en cuanto a percepción, comprensión y
regulación, pero esta información no reportó la capacidad
emocional real de los mismos.
Palabras claves: evaluación, inteligencia emocional,
bachillerato.
Introducción
La implementación en México, del Sistema Nacional de
Bachillerato por Competencias (SNBC) emitido por el
Gobierno Federal, a través de la Secretaría de Educación
Pública (SEP-ANUIES, 2008), ha implicado, entre otras
cosas, dirigir nuestra mirada al conocimiento de la población
estudiantil de este nivel educativo, y de manera particular,
generar información relacionada a las competencias a las que
apunta la modiicación curricular, en el sentido de evaluar
los saberes y experiencias de los alumnos para identiicar los
puntos de partida en la construcción de los nuevos aprendizajes.
El concepto de competencias que adopta el SNBC es el
propuesto por (Perrenoud, 1999), quien plantea que “una
competencia es una cualidad intrínseca de la persona en
términos de capacidad o aptitud para hacer algo, determinada
por la presencia de un conjunto integrado y articulado -un
sistema- de atributos diversos, a los que varios autores reieren
como recursos”. Para que la competencia se despliegue es
necesario que el individuo haya adquirido previamente
estos recursos, y dado que la naturaleza de la competencia es
108 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
potencial (al ser una capacidad que puede manifestarse o no, en
función de la situación), el proceso de aprendizaje escolar sólo
puede garantizar, por un lado, la adquisición de los recursos
(conceptuales, cognitivos, precedimentales y actitudinales)
que compongan una competencia especíica, y por otro, el
ejercicio de aplicación integral de estos recursos en diversas
situaciones didácticas, con la inalidad de incrementar su
potencial de aplicación (UAEMéx, 2010).
En la propuesta Federal (SNBC), se definen once
competencias genéricas y ocho competencias disciplinares
básicas. El presente trabajo, se enfoca a la competencia
genérica 1, la cual hace referencia a lo siguiente:
Se autodetermina y cuida de sí. Se conoce y valora a sí mismo
y aborda problemas y retos teniendo en cuenta los objetivos
que persigue.
Atributos:
a) Enfrenta las diicultades que se le presentan y es consciente
de sus valores, fortalezas y debilidades.
b) Identifica sus emociones, las maneja de manera
constructiva y reconoce la necesidad de solicitar apoyo
ante una situación que lo rebase.
c) Elige alternativas y cursos de acción con base en criterios
sustentados y en el marco de un proyecto de vida.
d) Analiza críticamente los factores que inluyen en su toma
de decisiones.
e) Asume las consecuencias de sus comportamientos y
decisiones.
f) Administra los recursos disponibles teniendo en cuenta
las restricciones para el logro de sus metas.
A pesar de que la competencia 1 no menciona de manera
explícita el desarrollo de la “inteligencia Emocional” o
de “competencias emocionales”, se observa de manera
implícita la atención a esta área.
A partir de lo anterior, en el presente trabajo se plantean los
siguientes objetivos:
Objetivo general:
Conocer las competencias emocionales de alumnos de
primer año de Bachillerato, en el ciclo 2015-2016.
Ma. De Lourdes Aguilera Peña y Lorenzo Espinosa Gómez
Objetivo especíico:
Describir los resultados en función de:
a) Género
b) Pertenencia al subsistema de educación media superior:
Escuela Preparatoria Texcoco (Universidad Autónoma del
Estado de México) y Preparatoria Agrícola (Universidad
Autónoma Chapingo).
c) Las tres variables del instrumento utilizado: percepción,
comprensión y regulación emocional.
Revisión de literatura
Se retoma el modelo de inteligencia emocional (IE)
de Mayer y Salovey (1997), el cual plantea que la IE
se puede concebir como una estructura piramidal
con cuatro habilidades básicas, que son: “la habilidad
para percibir, valorar y expresar emociones con exactitud;
la habilidad para acceder y/o generar sentimientos
que faciliten el pensamiento; la habilidad para
comprender emociones y el conocimiento emocional, y
la habilidad para regular las emociones promoviendo un
crecimiento emocional e intelectual” (Mayer y Salovey,
1997).
a) La percepción emocional consiste en:
• Habilidad para identiicar las propias emociones.
• Habilidad para identiicar emociones en otras personas:
diseños, arte, lenguaje, sonidos.
• Habilidad para expresar correctamente los sentimientos
y necesidades asociadas a ellos.
• Habilidad para discriminar entre expresiones emocionales
honestas y deshonestas
b) La facilitación o asimilación emocional implica:
• Habilidad para tener en cuenta los sentimientos cuando
razonamos o solucionamos problemas.
• Ayuda a priorizar los procesos cognitivos básicos,
focalizando la atención en lo que realmente es importante
para la persona.
• En función de los estados emocionales, los puntos de
vista de los problemas cambian, incluso mejorando el
pensamiento creativo.
Evaluación de la inteligencia emocional a partir del tmms-24 en estudiantes de bachillerato
c) La comprensión y análisis de las emociones:
conocimiento emocional reiere a:
• Habilidad para desglosar el amplio y complejo repertorio
de señales emocionales, etiquetar las emociones y
reconocer en qué categorías se agrupan los sentimientos.
• Conocer las causas generadores del estado anímico y las
futuras consecuencias de las acciones.
• Conocer cómo se combinan los diferentes estados
emocionales dando lugar a las emociones secundarias
(por ejemplo, los celos pueden ser una combinación de
admiración y amor a alguien).
• Interpretar el signiicado de las emociones complejas (por
ejemplo, el remordimiento que surge tras un sentimiento
de culpa y pena por haber hecho algo de que se arrepiente
ahora).
• Reconocer las transiciones de unos estados emocionales
a otros y la aparición de sentimientos simultáneos y
contradictorios (por ejemplo, sentimientos de amor y
odio hacia una misma persona).
d) La regulación emocional observa:
• La habilidad más compleja de la IE. Regulación
consciente de las emociones para lograr un crecimiento
emocional e intelectual.
• Incluye la capacidad para estar abierto a los sentimientos,
tanto positivos como negativos y relexionar sobre ellos
para descartar o aprovechar la información que los
acompaña en función de su utilidad.
• Habilidad para regular las emociones propias y ajenas,
moderando las emociones negativas e intensiicando las
positivas.
• Abarca el manejo del mundo intrapersonal y el
interpersonal. Capacidad para regular las emociones de
los demás, poniendo en práctica diversas estrategias de
regulación emocional que modiiquen los sentimientos
propios y de los demás.
Estas cuatro ramas forman una jerarquía, de forma que
la percepción de emociones es la habilidad de nivel más
básico y la regulación emocional es el componente de
mayor nivel y complejidad en la jerarquía; de este modo,
la habilidad para regular las propias emociones y las de
los demás se construye sobre la base de las competencias
representadas en las otras tres ramas. (Extremera y
Fernández Berrocal, 2009).
109
Método
Es una investigación de tipo exploratoria con un nivel de
análisis mixto.
Población y muestra
Se conformó una muestra de 101 mujeres (63 de la
Preparatoria Texcoco y 38 de la Preparatoria Agrícola)
y 96 hombres (44 de la Preparatoria Texcoco y 52 de la
Preparatoria Agrícola). En ambos subsistemas se trata
de alumnos que actualmente se encuentran cursando en
segundo semestre de Preparatoria.
Instrumento
Se aplicó el Trait Meta-Mood Scale (Salovey, Mayer,
Goldman, Turvey y Palfai, 1995) en su versión reducida y
modiicada denominada TMMS-24 (Fernández-Berrocal,
Extremera y Ramos, 2004). Contiene tres dimensiones claves
de la IE con 8 ítems cada una de ellas: Percepción emocional,
Comprensión de sentimientos y Regulación emocional.
Procedimiento
Se aplicó el instrumento dentro del aula y en hora de clase,
siguiendo las instrucciones que marca el mismo TMMS-24,
enfatizando las consignas que se debe contestar de manera
individual, que no hay respuestas correctas o incorrectas,
ni buenas o malas; además de no emplear mucho tiempo en
cada respuesta.
También se señaló a los participantes la voluntariedad, la
inalidad del trabajo y la conidencialidad de los resultados
individuales.
Procesamiento de datos
En el análisis cuantitativo, los datos obtenidos se agruparon
por subsistema y por género. Posteriormente, de cada
participante se sumaron y registraron las respuestas emitidas
a los ítems 1 al 8 para el factor percepción, ítems 9 al 16
para el factor comprensión e ítems 17 al 24 para el factor
regulación. En el análisis cualitativo se tomaron como
referencia las claves para la interpretación (FernándezBerrocal, Extremera y Ramos, 2004), los porcentajes y
frecuencias de cada variable del estudio.
Ma. De Lourdes Aguilera Peña y Lorenzo Espinosa Gómez
110 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Resultados y discusión
Con base en las sugerencias descritas en las claves para la
corrección del TMMS-24 (Fernández-Berrocal, Extremera
y Ramos, 2004), se obtuvieron los siguientes resultados
concentrados en el Cuadro1.
Se observa, en el factor percepción, en la dimensión
“escasa”, que el mayor porcentaje lo obtuvieron las mujeres
de la Preparatoria Agrícola (50%), y el menor porcentaje los
hombres de la Preparatoria Texcoco (23%). En la dimensión
“adecuada” el mayor porcentaje (63%) también los hombres
de la Preparatoria Texcoco y el menor porcentaje (45%), lo
obtuvieron las mujeres de la Preparatoria Agrícola. En la
dimensión “demasiada” el mayor porcentaje lo obtuvieron
los hombres de la Preparatoria Texcoco y de la Preparatoria
Agrícola con 15% y 14% respectivamente, y el menor
porcentaje lo obtuvieron las mujeres de la Preparatoria
Agrícola con 5%. Lo anterior nos indica que en general, los
hombres de la Preparatoria Texcoco han desarrollado mayor
habilidad para identiicar y reconocer tanto los propios
sentimientos como los de aquellos que les rodean. Además,
se observa que los hombres han desarrollado la habilidad
para identiicar convenientemente los estados y sensaciones
isiológicas y cognitivas que éstas conllevan.
Cuadro1. Porcentaje obtenido en el TMMS-24 en alumnos de segundo semestre. Preparatoria Agrícola Chapingo y
Preparatoria Texcoco de la UAEMéx. Ciclo 2015-2016.
Factor
Dimensión
Porcentaje hombres
Porcentaje mujeres
Prepa
Agrícola
Prepa
Texcoco
Prepa
Agrícola
Prepa
Texcoco
Percepción
Escasa
Adecuada
Demasiada
31%
54%
15%
23%
63%
14%
50%
45%
5%
33%
59%
8%
Comprensión
Escasa
Adecuada
Excelente
42%
54%
4%
41%
50%
9%
45%
53%
2%
41%
51%
8%
Regulación
Escasa
Adecuada
Excelente
27%
62%
11%
16%
70%
14%
21%
63%
16%
17%
56%
27%
En el factor comprensión, dimensión “escasa”, se obtuvieron
porcentajes similares tanto en hombres como en mujeres
de ambos subsistemas (42%, 41%, 45%,41%). Lo mismo
se observa en la dimensión “adecuada” (54%, 50%, 53%,
51%). En la dimensión “excelente” el mayor porcentaje lo
obtuvieron los hombres y mujeres de la Preparatoria Texcoco
(9% y 8%), y en menor porcentaje lo reportan los hombres
y mujeres de la preparatoria agrícola (4% y 2%). Se puede
observar, a partir de los porcentajes obtenidos, que casi la
mitad de los integrantes de la muestra no han desarrollado
habilidades que les permita identiicar el amplio y complejo
repertorio de señales emocionales, etiquetar las emociones y
reconocerlas, así como identiicar la transición de un estado
emocional a otro. Tampoco han desarrollado habilidades
para reconocer las causas generadoras de sus estados
anímicos y las futuras consecuencias de sus acciones.
En el factor regulación, dimensión “escasa”, el mayor
porcentaje (27%), lo obtuvieron los hombres de la Preparatoria
Agrícola, y el menor porcentaje (16%) lo obtuvieron los
hombres de la Preparatoria Texcoco. En la dimensión
“adecuada”, el mayor porcentaje (70%) lo obtuvieron los
hombres de la Preparatoria Texcoco y el menor porcentaje
(56%) las mujeres de la misma escuela. En la dimensión
“excelente”, el mayor porcentaje lo obtienen las mujeres
de la preparatoria Texcoco (27%) y el menor porcentaje lo
presentan los hombres de la preparatoria agrícola (11%).
Si se suman los porcentajes obtenidos en las dimensiones
“adecuada” y “excelente” encontramos resultados similares,
esto es, en la Preparatoria Texcoco: hombres 84% y mujeres
83%. En la preparatoria agrícola: hombres 73% y mujeres
78%. Esto nos indica que un alto porcentaje de alumnos
Evaluación de la inteligencia emocional a partir del tmms-24 en estudiantes de bachillerato
consideran que han desarrollado habilidades que les
permiten estar abiertos a los sentimientos, tanto positivos
como negativos, y relexionar sobre ellos para descartar o
aprovechar la información que los acompaña en función
de la utilidad que representen en ese momento. También
consideran que han desarrollado habilidades para regular
de manera consciente emociones propias y las de otros,
moderando las emociones negativas e intensiicando las
positivas, poniendo en práctica diversas estrategias que
modiican tanto sentimientos propios como los de los demás
logrando un crecimiento tanto emocional como intelectual.
Conclusiones y sugerencias
La información obtenida en la aplicación del TMMS-24
permitió obtener una estimación de las habilidades en
cuanto a percepción, comprensión y regulación, pero esta
información no reportó la capacidad emocional real de
los mismos. El ejercicio realizado a partir de la aplicación
del TMSS-24 nos lleva a tomar en cuenta que, al ser una
evaluación de autoinforme, las respuestas emitidas por los
alumnos pueden estar sesgadas.
Esta evaluación no se contextualiza en un programa de
educación emocional, por lo cual se identiicó la necesidad de
tomar acciones concretas que lleven a la formalización de un
programa de intervención. Es necesario, integrar programas
transversales de educación emocional, especialmente en
este nivel educativo en donde se trabaja con adolescentes,
para evitar conductas de riesgo. Puede ser a través de la
creación de talleres para los alumnos, con el propósito de
fomentar habilidades de interacción social y reconocimiento
y desarrollo de sus emociones. Incluir temas como:
comunicación, formación del trabajo en grupo y aprendizaje,
autoconocimiento emocional, autoestima, asertividad, toma
de decisiones, autorregulación emocional.
111
Se identificó la necesidad de realizar investigaciones
enfocadas a observar cientíicamente la instrumentación
de programas de educación emocional, así como la relación
entre IE y conductas de riesgo y desempeño académico, en
el contexto mexicano, incluyendo también la evaluación de
los instrumentos utilizados.
Literatura citada
Extremera, N. y Fernández-Berrocal, P. (2009). Inteligencia emocional,
afecto positivo y felicidad: En Fernández-Abascal, E. (2009).
Emociones positivas. Madrid. Pirámide.
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Fernández-Berrocal, P., Extremera, N. y Ramos, N. (2004). Validity and
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y profesores. Facultad de Psicología. Universidad de Málga:
En Repetto, E., y Morales, E., (2009). Programa de Doctorado
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Reppeto, E., Beltrán, S., et al. (2009). Formación en competencias
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Madrid. Ed. La Muralla.
Salovey, P., Mayer, J. D., Goldman, S. L., Turvey, C. y Palfai, T. P. (1997).
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Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 113-120
Analogías para una comprensión primaria de la di-señación de una
ética Möbiusiana en los procesos e-comunicacionales
Rodrigo Lisarazú Borda
Universidad Católica Boliviana-San Pablo. Cochabamba, Bolivia. rlisarazu@upal.edu.bo.
Resumen
Los procesos e-comunicacionales se desarrollan en
ciberespacios en los que es posible una paralógica, es decir,
una lógica no tradicional, no binaria, capaz de viabilizar el
ser siendo del e-comunicador. En estos procesos “…estamos
en el inicio de alguna cosa” (Deleuze): la di-señación de una
ética-existencial denominada ética möbiusiana que se origina a
través de la e-comunicación de sus propias señas y que actúa en
forma análoga a las características de una Banda de Möbius. El
presente texto es una adaptación de un informe de investigación
mayor y discurre en la ejecución crítico-relexiva de analogías
entre tres características de una Banda de Möbius y el hacer
e-comunicacional en un ciberespacio. La intención global es
ofertar una propedéutica primaria para la comprensión básica
de la di-señación de una ética möbiusiana en los procesos
e-comunicacionales gestionados en el ciberespacio.
en la práctica, la intensa absorción de la luz de los astros
débiles cerca del horizonte solo nos permite contemplar un
tercio, unas 2 660 estrellas como máximo a la vez y desde
un mismo punto en una noche muy clara y sin luna; en las
grandes ciudades ni siquiera hay forma de ver los astros
débiles, eso signiica que un observador puede, con suerte,
contar entre 100 y 150 estrellas a la vez y ni una más, 100
ó 150, 8 ó 9 docenas de estrellas brillando tímidamente en
una noche muy clara, y esta noche, hay nubes.
Eso signiica varias cosas, una es que los poetas son poetas y
por lo visto no están al corriente de la realidad, esa es la primera
cosa […] y la segunda es que el mundo, se mire como se mire,
es un lugar engañoso, ilusorio y mal iluminado, así es el mundo
y así es el cielo y si no te podes iar del cielo que es más o
menos igual en todas partes, no te podes iar de muchas cosas.
Palabras clave: ciberespacio paralógico, procesos
e-comunicacionales, di-señación de una ética möbiusiana,
banda de Möbius.
Introducción
Nuestra galaxia alberga al menos 100 mil millones de
estrellas, bastantes según mi parecer; los poetas hablan a
menudo de las milliadas de estrellas del ejercito celestial,
pero lo cierto es que a simple vista y en el mismo momento
solo son visibles 7 646 como mucho, eso sumando los dos
hemisferios, un solo observador podría por lo tanto ver en
condiciones ideales más o menos la mitad, sin embargo
Martín Circo Martín El concursante.
Pre-ocupados por la relación entre ética y comunicación, en
búsqueda de nuevos vértices de compresión no tradicional,
y movidos por los claros signos de nuestro tiempo, nos
formulamos la siguiente pregunta: ¿(Existe una di-señación
de una ética möbusiana) Se origina una ética möbusiana a
partir de la comunicación de sus propias señas a través de
procesos e-comunicacionales de lo ideativo, lo sociológico
y lo productivo desarrollados en una cuenta de una Red
Social Virtual “X” (RSV “X”)1?
1
Usamos la denominación Red Social Virtual “X” para referirnos a una red muy
conocida y usada en Sudamérica y cuyo nombre no podemos nombrar debido a que
hasta el momento la empresa propietaria de dicha red no emitió el correspondiente
permiso de uso de su marca en este documento.
Rodrigo Lisarazú Borda
114 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Decidimos adecuar una propedéutica que ayude (a través
de analogías) a comprender lo que es una ética möbiusiana
e introduzca al lector en la consideración de su diseñanación en los procesos de e-comunicación. En términos
metodológicos, la elaboración de las analogías (presentadas
sintéticamente aquí) correspondió, en la investigación
realizada, al método de la comparación constante del modelo
de investigación y elaboración de teoría fundada de corte
sustantiva de Glaser y Strauss. Cabe recalcar que este tipo
de investigaciones se ejecuta cuando sobre el tema a tratar
no existe investigación alguna Cuadro 1.
la Banda de Möbius para la construcción de puentes
colgantes, casas, stadiums, esculturas urbanas, diseño de
muebles, joyas, etc. Quizá uno de los usos más originales
fue el ejecutado por el afamado maestro Johann Sebastian
Bach que en 1747 compuso el enigmático Allegro from
"Musikalisches Opfer, BWV 1079" cuya partitura está
escrita sobre una Banda de Möbius y al ser ejecutada en doble
vía (de ida y vuelta simultáneamente) da lugar a dos voces
que evolucionan e involucionan simétricamente (Figura 1).
Cuadro 1. Principales procedimientos analíticos cualitativos
en función de sus propósitos.
Propósito
Generación de
teoría nueva
(Sustantiva)
Sí
Prueba provisional de la teoría existente
(formal) ¿al momento, existe teoría
formal?
Sí
No
Inducción
analítica
(Znaniecki)
Método de
comparación constante
(Glaser y Strauss)
Teoría Fundada
Macho-Stadler (2009).
Figura 1. Usos musicales de la Banda de Möbius.
Análisis de
Descripción etnográica
contenido clásico
(Spradley)
(Berelson)
La Banda de Möbius presenta al menos tres características
topológicas: a) Una sola cara; b) Es no orientable; c) Es de
disolución compleja.
Sandoval (2011).
El lazo o tira rectangular ayudan a la construcción de una
Banda Circular y ambas poseen dos caras y dos bordes como
se aprecia en la Figura 2.
No abundaremos en procedimientos metodológicos sino en
algunos de sus resultados. En pro de un primario encuentro
con la Banda de Möbius y sus cualidades. La Banda de
Moebius es una supericie geométrica descubierta en 1858
de forma independiente por el matemático y astrónomo
August Ferdinand Möbius (1790-1868) y por Johann
Benedict Listing (1808-1882, considerado como fundador
de la topología)2.
Elaboración propia, 2014.
No
Esta banda tiene diversas utilidades. En 1923 Lee de Forest
desarrolló una cinta magnetofónica que puede grabar el
doble de tiempo que las cintas normales; en 1949 Owen H.
Harris inventó una correa abrasiva sin in, también doble
de duradera que una normal; por su parte Nicholas Kondur
en 1971 creó un cartucho con cinta de tinta para escribir o
imprimir. En arquitectura, ingeniería, literatura, ebanistería
y otras disciplinas y quehaceres se siguió la lógica de
Figura 2. Construcción de una Banda Circular.
Ahora bien, las éticas tradicionales del mundo no virtual,
siendo éstas teleológicas3 o deontológicas4, son binarias.
No permiten que un acto humano tenga igual medida de
bien y mal en el instante mismo en el que ejecutamos un
bien o un mal, por ejemplo, en las éticas teleológicas se
produce un bien y se evita un mal con el logro de la sabiduría
3
2
Rama de las matemáticas que estudia las propiedades de las figuras con
independencia de su tamaño o forma.
Como el eudemonismo de Aristóteles, el hedonismo cirenaico, el hedonismo
catastemático, el utilitarismo cuantitativo, el utilitarismo ideal o el utilitarismo
de preferencia.
4
Por ejemplo: la ética formal y autónoma de Kant o la Teoría de la justicia de Rawls.
Analogías para una comprensión primaria de la di-señación de una ética Möbiusiana en los procesos e-comunicacionales
(eudemonismo), con el logro del placer y la evasión del
dolor (hedonismos en general) o al hacer o producir algo
útil (utilitarista); un tanto de lo mismo sucede en las éticas
deontológicas, el bien se produce al cumplir con el deber y
con ello se evita el mal.
La Banda Circular es una analogía de la vida en el mundo
no virtual sino real, pues ésta posee una cara interna y otra
externa, un borde “a” y otro “b” y si circulásemos por uno
de esos bordes o por una de esas caras, no nos sería posible
circular por el otro borde o cara al mismo momento y en la
misma medida; nuestra existencia en el espacio de la realidad
real y en el instante que dura un presente, es similar.
Banda de Möbius, analogía de la cara del ser siendo posible
y aceptable en un espacio e-comunicacional. Cuando
giramos 180º uno de los extremos de la tira rectangular y
luego unimos los extremos, lo que obtenemos es una Banda
de Möbius Figura 3.
Bitácora 12 (2013).
Figura 3. Construcción de una Banda de Möbius.
Entendamos en adelante a la Banda de Möbius como una
representación de lo que puede ser nuestra existencia ética
en un ciberespacio e-comunicacional.
Una Banda de Möbius posee una propiedad topológica muy
evidente: una sola cara sin posibilidad alguna de otra. En la
Banda de Möbius las dos caras de una cinta o de una Banda
Circular, se conjugan, se combinan en una sola (sucede lo
mismo con los bordes). Esta propiedad nos demuestra que
una Banda de Möbius es incluyente o combinadora.
Algo similar sucede con la ética Möbiusiana que se desarrolla
en los procesos e-comunicacionales del ciberespacio. Y es
que el ciberespacio es un terreno ideal para la gestación y la
realización de procesos e-comunicacionales que trascienden
las típicas salidas lógicas binarias donde sólo es válido
lo bueno o lo malo, el sí o el no, etc., o al menos ambas
cosas no son viables en la misma cuantía y a la vez. En el
ciberespacio, gracias a su cualidad de representación de la
realidad real son factibles procesos de e-comunicación en
los que el e-comunicador no está obligado a ser lo uno o lo
115
otro, sino, le es posible la expresión de una tercera salida
lógica, es decir, le es dable expresar su ser y al mismo tiempo
su no ser, pero al momento de hacer tal expresión lo que
logra, también, es expresar un ser siendo, como si de una
lógica trivalente se tratara. Las fotografías personales usadas
para la propia identiicación son una forma de ser ante los
demás, pero a la vez una forma de exponer lo que no se es,
bien sea porque la fotografía está retocada o porque relata
un milifragmento de tiempo que instantáneamente empieza
a formar parte del pasado del e-comunicador y no es la
viva representación de un presente inmediato; la fotografía
personal, al querer expresar el ser del e-comunicador,
comunica inmediatamente su no ser, de manera que en sí,
se maniiesta ante los demás un ser siendo.
El ciberespacio, la RSV “X” y la e-comunicación son teatros
de operaciones y herramientas, en los que se expresan el ser
desde el no ser (o del no ser desde el ser) como si se estuviese
desarrollando una comunicación existencial del ser siendo.
El ciberespacio, al generar espacios de existencia virtual,
se constituye en recinto ideal para el desarrollo de una
alternativa lógica de ser5, por ejemplo: usted, llamándose
Juan, al participar en el ciberespacio se inventa y utiliza un
nick o sobrenombre “x”, éste no contraría su ser Juan, sino
lo oculta, lo camula, lo transigura, lo contradice. Su nombre
designa una identiicación con su ser en el espacio real, su
sobrenombre realiza lo mismo en el espacio de la virtualidad.
Entonces, el que Juan (del mundo real), de 20 años, de
nacionalidad boliviana, estudiante universitario, etc., se
haga pasar (en el mundo virtual) por Julia, de 30 años, de
nacionalidad argentina, de profesión arquitecta, etc., no
contraria, no anula necesariamente el ser masculino, la edad,
la nacionalidad y las labores de Juan; es cierto que este juego
podría llegar a afectar las emociones de Juan, pero seguirán
siendo las emociones de Juan representado como Julia…
Juan seguirá siendo Juan en el mundo real.
Sí, todos saben que cuando te pones a chatear en [la RSV
“X”] con alguien que no conoces, y más cuando entras a un
chat público lo mejor es no dar tus datos reales, por ejemplo
en [la RSV “X”] los maleantes pueden saber dónde vives,
a dónde vas, cuándo hay poca gente en tu casa y cosas que
pueden usar para sus fechorías o para secuestrarte, además,
las mismas páginas dicen que no des muchos datos reales
[…] en el internet es más fácil inventar o mentir que en la
vida real […] (entrevistada 31, 2012: en línea).
5
De ser, de actuar, de estar…
Rodrigo Lisarazú Borda
116 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Para la realización de un trabajo, abrí dos cuentas en [la RSV
“X”] cada una con una identidad, sexo, edad y en general
una vida distinta, en una era una chica de 20 años, en la
otra un señor de 56, […]. A tu pregunta sobre la posibilidad
de ejercitar identidades paralelas… pues creo que por
investigación, por curiosidad, por enfermedad mental o por
lo que sea, en la virtualidad y el ciberespacio sí es posible
ejercer lo que tú llamas paradoja y paralógica (entrevistada
24, 2012: en línea).
Debemos también entender o al menos querer suponer dos
asuntos que se anexan a lo anterior:
Que realidad real y realidad virtual pueden también ser
realidades que actúan en paralelo la una de la otra y, siendo
dos campos paralelos, ambos a la vez poseen sus propias
lógicas que son el modelo que da estructura a sus seres, por
lo tanto.
Así, además, es compresible que, parte del origen de la
virtualidad tenga sus raíces en la necesidad de ser, practicar
o entrenar algo que no puede hacerse en la realidad real
sin correr un riesgo en algunas ocasiones mortal; de ahí
la virtualización de haceres en simuladores de vuelo, de
combate, de deportes de riesgo, etc. La virtualidad tiene
en sí impresa la lógica de la posibilidad, es de hecho, una
posibilidad ante la realidad real.
Los espacios del ciberespacio donde Juan puede e-comunicar
virtualmente su ser no hacen que Juan necesariamente
niegue su ser de la realidad, sino son ámbitos en los que
Juan puede ser siendo y puede comunicar su ser siendo. El
ser es una cara y a la vez el ser que se puede desarrollar en
la e-comunicación es la otra; en tanto que el ser siendo, se
da en el trabajo colectivo de ambas caras desarrollado
en el hacer e-comunicacional, el ser siendo es la inclusión
de ambas caras en una misma.
Analogías en relación a la no orientabilidad
de la banda de möbius
No implicancia de una redefinición existencial del
e-comunicador möbiusiano.
Otra de las propiedades topológicas de la Banda de Möbius
es aquella que deine que esta Banda es una supericie no
orientable. Si deslizamos un reloj por la línea central de un
cilindro, al volver al punto de partida el reloj se encontrará
en la misma posición inicial, marcará la misma hora y tendrá
la misma apariencia que a un inicio. El cilindro obliga al
objeto a mantener su orientación. Figura 4.
Elaboración propia (2015).
Figura 4. Supericies orientables.
Si el mismo reloj se desliza por la línea central de una Banda
de Möbius, observamos que, tras completar el giro, el reloj
se encontrará invertido Figura 5.
Elaboración propia (2015).
Figura 5. Supericie no orientable.
El reloj puesto en la línea central de la Banda marca al inicio
las 3:00 horas y tras deslizarlo sobre la línea central y llegar
a dar una media vuelta observamos que el reloj marca las
9:00, en tanto que al completar la vuelta podemos notar que
el reloj marca las 3:30. No debemos olvidar que la Banda
de Möbius tiene una sola y única cara.
La ética Möbiusiana es una ética que se corresponde con la
lógica paralela del ciberespacio, por esto, como ya indicamos
antes, en ella es dable una salida lógica alternativa que hace
viable que el e-comunicador 1) sea lo que es (en el mundo
real), 2) pueda, al mismo tiempo, ser lo que desea ser (de
forma virtual) y 3) al suceder 1 y 2 a la vez, se desarrolle un ser
siendo, mas… sin que necesariamente todo esto implique,
por sí mismo, una redeinición del ser del e-comunicador.
La praxis interpersonal y a-direccionalidad existencial del
e-comunicador.
Beck, tratando de comprender las transformaciones de la
modernidad, en sus múltiples denominaciones actuales,
distingue una primera de una segunda modernidad. Mientras
la primera tuvo que ver con las sociedades Estado-nación,
Analogías para una comprensión primaria de la di-señación de una ética Möbiusiana en los procesos e-comunicacionales
117
con sentidos territoriales y con ciertos grados de seguridad
del ciudadano, la segunda modernidad socavó los principios
de controlabilidad, certidumbre o seguridad de la primera
activando procesos y fenómenos de globalización,
individualización, revolución de géneros, subempleo y
riesgos globales. La segunda modernidad dio paso a un
nuevo ordenamiento de las cosas y, con ello, emergieron
nuevos tipos de sociedad y de persona.
ésta. En tanto que estas preguntas son innecesarias en
el ciberespacio, ahí, puede importar poco la deinición
del ser, ya que en este espacio es posible ser según las
necesidades, impulsos, deseos o fantasías inmediatas
y es operable desechar la coniguración virtual del ser
en tanto el medio e-comunicacional se lo consienta;
veamos esto en las respuestas dadas por algunas de nuestras
entrevistadas.
La sociedad ya no se hace en convención social, sino a partir
del individuo que personaliza y privatiza sus relaciones
societales y determina (bloquea, acepta) el lujo societal
que en sus espacios de interacción se darán y apela al
seudónimo o a la invisibilidad en su espacio para ejercer
una participación social a su medida.
Siempre me identiico en [la RSV “X”] con una foto mía […]
Por lo general selecciono una foto con la que me siento a
gusto y que represente mi estado de ánimo. A veces la retoco
o le doy algún efecto con el photoshop […] ¿Si tuviera un
accidente y me deformará la cara…? yo creo que no pondría
una foto de después del accidente, en especial en sitios en los
que tengo muchos contactos que me conocen personalmente,
creo que mis contactos están acostumbrados a verme como
soy […] además creo también que sería bueno que la gente
vea una foto de como era antes y así me recuerden cuando
vean mi foto, creo que me animaría a poner una foto de
después del accidente en los lugares en los que tengo pocos
amigos o conocidos, por ejemplo en Twitter, ahí nadie me
conoce y tengo pocos contactos con los que casi nunca
intercambio cosas (entrevistada 14, 2012).
La identidad, en atención de estas prácticas, es asumida como
una actuación. En este sentido tiene la posibilidad de cambiar
[de aparentar] según la conveniencia y necesidades de cada
persona, y dicho ejercicio tiene la facilidad de descentrarse
en cualquier momento. Es estratégica, dinámica, cambiante y
en el contexto de las relaciones de poder y la ética: negociada
(Rojas, 2006:40).
Ahora bien, lo cierto es que estas paralógicas
ciberinteracciones e-comunicacionales, cargadas a veces
de ambigüedades u ocultamientos de la realidad, si bien son
en su gran mayoría moralmente (colectivamente) aceptables,
nada sabemos sobre el desarrollo, evolución o involución
que éstas producen en la ética personal. Tan sólo podemos
conjeturar que con estas ciberinteracciones podríamos haber
abierto una puerta que nos conecta directamente con otra
dimensión en la que aún existen referentes sobre el bien
o el mal (moral), sobre lo real o lo virtual, pero en la que
probablemente se va diluyendo la distancia relexivo-ética
sobre lo bueno y lo malo, lo justo o lo injusto, etc., porque
simplemente, la virtualidad da la posibilidad de ejercitar
ambos contrapuestos o a la vez da la eventualidad de ensayar
lo uno como lo otro y/o lo otro como uno.
Más como ya dijimos arriba, el ciberespacio, se conigura
como un espacio existencialmente a-direccional como lo es
la Banda de Möbius, ello porque:
a) Las preguntas existenciales ¿de dónde vengo? ¿a dónde
voy? ¿quién soy dentro de una sociedad convencional?
demandan una respuesta que direcciona la existencia del
ser para formar parte de la sociedad o de una porción de
Selecciono una foto con la que quiero que me identiiquen
mis contactos, y a veces, a esa foto le hago algunos retoques
con el photoshop, aumento o quito colores, brillos, cambio
texturas, quito dimensiones (kilos) etc, sé que no soy yo
realmente, pero eso que muestro es lo que quiero mostrar
y con lo que me identiico y por lo menos en este espacio
es lo que soy aunque nunca deje de ser conciente de que en
el mundo real soy otra cosa no muy distinta pero de todos
modos otra cosa (entrevistada 16, 2012).
b) La a-direccionalidad existencial del ciberespacio tiene
que ver con la inmediatez del ser que le es posible gracias a
la inmediatez de la e-comunicación. En la e-comunicación el
ser puede adquirir formas inmediatas y deshacerse de ellas en
cualquier momento y sin ningún peso de conciencia, es más,
sin que necesariamente nadie considere la presencia, o no,
de una enfermedad de tipo mental, esto último porque (entre
otras razones) en el ciberespacio existe una convención
socio-moral por la cual todos los e-comunicadores saben
que se encuentran ante representaciones no necesariamente
ieles a la realidad y que todos se encuentran participando
de un “engaño” consensuado en la e-comunicación de
proyecciones virtuales.
Rodrigo Lisarazú Borda
118 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Analogías sobre la disolución compleja de
relaciones entre realidad y virtualidad
Existen otras dos características de la Banda de Möbius al
realizarse divisiones de dos o tres partes a lo largo de ésta
y efectuando cortes en estas divisiones. En el primer caso,
dividiendo en dos partes iguales el ancho de la Banda de
Möbius y efectuando un corte a lo largo de esa división. Al
terminar, obtenemos una Banda que ya no es de Möbius sino
una Banda Circular el doble de larga y la mitad de ancha que
la Banda de Möbius original, pero curiosamente con dos
giros, por ello con dos caras y dos bordes, Figura 6.
Normas y haceres, contradicciones anilladas.
La existencia de las normas en la RSV “X” (Principios y
declaración de derechos y responsabilidades de [la RSV “X”]
que “rigen” el proceder de los e-comunicadores) está anillada
a la existencia de e-comunicadores por el hecho de pertenecer
ambas al mismo ciberespacio, aunque sus relaciones sean
del orden de la contradicción. E-comunicadores y normas
morales de la RSV “X” co-existen, a veces se niegan sin
anularse, sin que necesariamente los primeros respeten
siempre las normas morales de la RSV “X”.
Ciertos grupos pueden ignorar, violar o “desintegrar”
las normativas morales de la RSV “X”, mas éstas no
desaparecen, sino que, anudadas y en franca contradicción
a ellas, aparecen nuevas normas convenidas en tales
microsociedades en la RSV “X”.
Elaboración propia (2014).
Figura 6. Banda de Möbius dividida a lo largo en dos.
Si el ancho de la Banda de Möbius es divido en tres partes
iguales y realizamos un corte, el resultado es una Banda de
Möbius igual de larga a la original pero su ancho es de un
tercio del ancho de ésta. Entrelazada a esta nueva Banda de
Möbius queda una Banda Circular (igual a la obtenida en la
Figura 6); esto puede apreciarse en la Figura 7.
Elaboración propia (2014).
Figura 7. Banda de Möbius dividida a lo largo en tres.
La Banda Circular (con dos torsiones) anillada a una Banda
de Möbius puede ser entendida en sentido igurado de
algunas maneras:
Vinculaciones posibles entre las normas morales del
ciberespacio y el hacer de los e-comunicadores, o entre la
realidad y la virtualidad.
RSV “X”-cuenta personal (2012).
Figura 8. Violación a la norma sobre la protección de los
derechos de otras personas.
Por otro lado, la vida virtual y la vida real de un grupo de
e-comunicadores están entrelazadas. La nueva Banda de
Möbius obtenida tras el corte representa la vida virtual de
Analogías para una comprensión primaria de la di-señación de una ética Möbiusiana en los procesos e-comunicacionales
un grupo o comunidad de e-comunicación, en ésta vida los
e-comunicadores pueden ser lo que desean como grupo
(grupo racista, homofóbico, artístico, etc.), en tanto que
no es posible una negación de la vida real particular del
e-comunicador, ya que entre realidad virtual y realidad real
sólo es posible una negación en el orden de la contradicción.
Mientras cada individuo del grupo pretenda su pertenencia
al grupo virtual, existirá un lazo entre su vida real y su vida
virtual, aunque entre ambas exista una contradicción.
Virtualidad y realidad anilladas
El ciberespacio puede ser aprovechado para la expresión
plena del ser desde la manifestación de su no ser. Virtualidad
y realidad están ligadas en tanto la virtualidad exista y
brinde a los e-comunicadores la oportunidad para poder
potenciar o superar una cualidad o defecto con el que
viven en el mundo real.
Sí, […] sé que aunque esté en el mundo real siempre,
mientras haya ciberespacio, podré volver a él y hacer ahí
lo que normalmente hago o quiera hacer o ser (entrevistada
34, 2012).
En cuanto a la Banda Circular, ésta puede entenderse
como una analogía de un retorno a la realidad real
que se encuentra, ahora, anudada a (y que no puede
ya “desprenderse” de) la realidad virtual, ésta última
representada por la Banda de Möbius.
Es inevitable, se vuelve una necesidad, todos tus amigos
están ahí, tus compañeros de curso, tu pareja, tus parientes,
etc. es difícil dejarlo o pensar que un día de esos no habrá
más, además es como cuando pruebas algo y descubres que
de verdad te gusta o te sirve para algo, siempre quieres volver
a usarlo o a probarlo, a mí me pasa que aunque no entre
[la RSV “X”] unos dos días al tercero tengo la necesidad
de hacerlo, quiero saber cosas, estar contactado con los
demás y también jugar mi rol en esta comunidad de amigos
(entrevistado 15 2012).
Nuestros entrevistados también airman que el ciberespacio
parece constituirse a sí mismo como un lugar inseparable
de la realidad real, cada vez es más necesario para poder
existir, comunicarse, hacer negocios, compartir datos, vidas,
sentimientos, etc.
119
Yo creo que sí, podría dejar el [la RSV “X”] u otra red
social por el resto de mi vida, pero pienso que igual estará el
ciberespacio ahí y muchos datos de personas que conozco
o que me podría dar ganas de conocer en el futuro, creo que
de todos modos por el hecho de dejar de usarlo no va a dejar
de existir y más gente va a estar metida ahí, al inal creo que
volvería a usarlo, pero no quiero que se haga parte vital de
mi vida, aunque parece que la humanidad ya no podrá existir
igual sin el ciberespacio y sus medios (entrevistado 21, 2012).
Existe una innegable vinculación existencial entre el
espacio de lo real y el espacio de lo virtual, ambos espacios
se implican a sí mismos y a la vez se requieren. En el
marco de nuestro objeto de estudio, el e-comunicador es un
sujeto que vive en el mundo real y a la vez existe en el de lo
virtual, y en la medida que sea un e-comunicador no podrá
deshacerse de ninguno de los dos, e incluso si dejase de ser
e-comunicador y restringiera sus comunicaciones a solo el
mundo de lo real, no podría negar que el mundo real ya tiene
un vínculo inherente con el mundo de lo virtual.
Por último, el ciberespacio o espacio virtual requiere de un
espacio real o en el cual se produzca.
Conclusiones
El ciberespacio es paralógico, en él se puede ejecutar una
lógica alternativa a la convencional del espacio de la realidad
real.
También dicho ciberespacio es contradictorio, más
no contrario, al espacio de la realidad real. Por ello, el
ciberespacio es ideal para el desarrollo de las di-señaciones
de una ética möbusina por parte de los e-comunicadores.
La e-comunicación al inscribirse en el ciberespacio comparte
con éste sus características paralógicas y contradictorias
y, los e-comunicadores pueden desarrollar procesos de
e-comunicación igualmente paralógicos y contradictorios,
en especial cuando sus acciones e-comunicacionales
son realizadas para la satisfacción de ines o necesidades
inmediatas.
Además, la paralógica da al e-comunicador las
posibilidades de contradecir su ser real sin necesariamente
contrariarlo, por ello el e-comunicador puede adoptar
Rodrigo Lisarazú Borda
120 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
otras identidades, edades, sexo, estados civiles, presentar
estados de ánimo alternos al real, publicar fotografías
propias que no coincidan necesariamente con su identidad
o ser real.
El ejercicio de la paralógica, la paradoja y la contradicción, no
contrariadora, suponen a la vez el ejercicio de una lógica ya
no tradicional o meramente bivalente en la que el ser contraria
a al no ser; sino, en la paralógica de la e-comunicación el ser
puede contradecir al no ser, pero no anularlo; de igual modo, el
no ser puede comprenderse como parte constitutiva e incluso
complementaria del ser. Entonces:
Al e-comunicador le es viable proyectar su ser desde la
publicación de su no ser;
El e-comunicador puede ser siendo, es decir, puede ser en
la virtualidad lo que no es en la realidad, mas su ser en la
virtualidad no anula (no contraria) su ser en la realidad;
El no ser no es anulación del ser, sino puede ser usado como
proyección y/o complementariedad del ser.
En consecuencia y en relación analógica con las
características topológicas de la Banda de Möbius: Ser y
no ser pueden conjugarse como se conjugan las dos caras
de una Banda Circular en la única cara de una Banda de
Möbius.
Se origina una ética que existencialmente provee al
e-comunicador un horizonte de posibilidades de ser y
hacer; pero al igual que la Banda de Möbius, no direcciona,
por sí misma, la existencia real del e-comunicador, éste
puede reorientar su existencia desde su exposición en el
ciberespacio, si gusta.
La proyección del ser desde su no ser, puede ser desechada
por el e-comunicador una vez utilizada y alcanzados los
ines deseados, es decir, el e-comunicador puede retornar
al espacio de la realidad real cuando guste, pero anudado al
espacio de la realidad real se encuentra (como posibilidad
de ser) el espacio de la realidad virtual, así como sucede
cuando se corta una Banda de Möbius dividida en tres
partes a lo largo de su extensión y cuyo resultado es una
nueva banda de Möbius anillada a otra Banda Circular,
esto, en franca representación de una vinculación
entre espacio de la realidad real y espacio de la realidad
virtual.
La ética möbiusiana en la RSV “X” no es en sí misma una ética
relexiva y deontológica, sino que su vertiente teleológica en
suma con la paralógica y las posibilidades de contradicción de
la e-comunicación, la convierten en una ética plurivalente que
da al e-comunicador la posibilidad de ser siendo sin dejar de
ser; en este sentido, la ética möbiusiana actúa como la Banda de
Möbius en su cualidad topológica no direccionable, es decir,
la ética möbiusiana no direcciona el ser del e-comunicador.
La ética inscrita, transmitida y profesada en la RSV “X” es
una muestra de los signos de nuestro tiempo paralógico e
individualista, de sociedades privadas y, la e-comunicación
es una de las principales herramientas para el desarrollo y
establecimiento de un modo möbusiano de ser.
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Superior ICFES.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 121-125
Competencias lectora y de pensamiento reflexivo
en estudiantes de agronomía
Rosa María Rodríguez Cortés
Departamento de Fitotecnia-Universidad Autónoma Chapingo. Correspondencia: adiv77@hotmail.com.
Resumen
Se trata de un proyecto de continuación, el cual iniciamos
en el año 2013 y que ha contado con diferentes enfoques
que lo han llevado a multiplicarse. En un inicio el proyecto
tenía como objetivo central evaluar la competencia lectora
en estudiantes de agronomía a in de detectar cual era la
relación entre el desarrollo de esta cualidad y la obtención
de buenas caliicaciones. Pionero en ese ámbito puesto que
la evaluación de la competencia lectora se ha practicado,
sobre todo, en el ámbito de la enseñanza básica y media,
pero no a nivel de la educación superior. El reto de intentar
parámetros de evaluación creados especíicamente para este
nivel de enseñanza. En ese sentido, decidimos experimentar
con la escala elaborada por Benjamín Bloom y usarla para
medir los niveles de comprensión de lectura. A lo largo de
estos periodos de investigación hemos incluido también
como necesaria la evaluación de la competencia relexiva,
pues los datos obtenidos han mostrado que los estudiantes
que presentan mayor nivel de competencia lectora, también
tienden a relexionar mejor las lecturas y en general a tener
una visión crítica de su entorno
Palabras clave: competencia, educación, estudiantes, leer,
relexión.
Introducción
El enfoque o teoría desde el cual parte esta investigación
arranca en lo fundamental de los conceptos vertidos por
la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico (OCDE) en la cual la competencia lectora es
deinida como la capacidad individual para comprender,
utilizar y analizar textos escritos con el in de lograr objetivos
personales, desarrollar conocimientos y posibilidades y
participar plenamente en la sociedad. También reforzamos
esta idea con los principios de la pedagogía conceptual la
cual plantea que la apropiación de conocimientos en los
procesos educativos debe asignar una interpretación de la
realidad acorde con el momento histórico, de tal manera que
el producto de esa interpretación sea el conocimiento de la
propia cultura. Asimismo partimos del modelo pedagógico
conceptual que plantea que la relexión en el ser humano es
una disposición natural y espontánea, y que el desarrollo
de la competencia relexiva es una actividad aprendida
que requiere de un análisis metódico, instrumentado y
sereno. La competencia reflexiva se adquiere con un
entrenamiento voluntario e intensivo, que requiere de una
actitud metodológica y una intencionalidad por parte de
quien la ejercita.
Cuando se pretende identiicar estas competencias -lectora
y relexiva- en estudiantes universitarios, nos enfrentamos
al reto de intentar parámetros de evaluación creados
especíicamente para este nivel de enseñanza. En ese sentido
durante la presente investigación, decidimos experimentar
con la escala elaborada por Benjamín Bloom. A lo largo de
estos periodos de investigación, los cuales se orientaron en un
primer momento a la evaluación de la competencia lectora,
hemos podido constatar que los estudiantes que presentan
mayores niveles lectura, ostentan mejores rangos de crítica
a los esquemas de tecnología y del entorno social. Es decir,
122 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Rosa María Rodríguez Cortés
que los estudiantes que leen bien y mucho, son personas
que cuestionan lo que leen y en general la información que
reciben. En ese sentido, nos adentramos a investigar si existía
una competencia en especíico que trabajara los niveles de
comprensión del entorno y de la vida en general y fue así
como nos encontramos con la denominada “competencia del
pensamiento relexivo”, propia de los niveles universitarios
y la cual postula que cuando se promueve el pensamiento
relexivo en los estudiantes:
En ese sentido, entendemos que la competencia lectora es la
capacidad que posee el estudiante para relexionar, a través
de la lectura, sobre sus conocimientos y experiencias y si
puede llegar a poner en juego lo aprendido en el ámbito
escolar para resolver situaciones nuevas en la vida personal.
La Competencia en Lectura se deine como la comprensión,
utilización y relexión sobre textos escritos para alcanzar
metas personales, desarrollar el conocimiento propio y
potencial y participar en la sociedad (OECD-PISA, 2006).
a) Desarrollan la capacidad para identificar y superar
concepciones previas
La competencia en Lectura involucra las habilidades y
estrategias que los individuos construyen en la interacción
de la vida social. La lectura es un proceso de construcción
de signiicados, se construye el sentido de lo que se lee a
través de distintas interacciones con el texto, durante este
proceso los esquemas de conocimiento también sufren
modiicaciones. La lectura es una habilidad compleja que
abarca el conocimiento de los signiicados del lenguaje, el
progreso de la información y el signiicado del tema además
de las situaciones de lectura, estructura de los textos y
procesos cognitivos que los estudiantes ponen en marcha.
Las lecturas son clasiicadas de la siguiente manera:
b) Identiican elementos clave de la situación o problema
c) Formulan preguntas adecuadas que enmarcan el problema
d) Desarrollan la capacidad para representar formas de
pensamiento
e) Tienden a superar las situaciones de bloqueo mental
f) Pueden reconstruir y verbalizar un pensamiento elaborado
g) Desarrollan conciencia sobre la importancia del contexto
y las implicaciones morales.
En ese sentido, esta investigación dio seguimiento a las
evaluaciones de competencia lectora desarrollada en
cuatro años y en el último y más reciente agregando un
enfoque en la competencia de pensamiento relexivo. La
lectura es importante como herramienta para el trabajo
intelectual, motiva el bagaje cultural, proporciona
información y conocimientos, amplia el contexto de los
individuos al tener contacto con otros lugares, gente y
costumbres, exige colaboración participación y actitud
dinámica respecto a lo que se lee, mejora la capacidad de
relexionar, estimula y satisface la curiosidad y desarrolla
el análisis y el espíritu crítico de las personas. Para
evaluar la competencia lectora, se toman en cuenta tres
aspectos: velocidad, luidez y comprensión de la lectura.
La comprensión lectora es la habilidad del alumno para
entender el lenguaje escrito, implica obtener la esencia del
contenido, relacionando e integrando la información leída
en un conjunto menor de ideas más abstractas, pero más
abarcadoras, para lo cual los lectores derivan inferencias,
hacen comparaciones, se apoyan en la organización del
texto.
Lecturas en el contexto educativo, es decir, qué materiales
se han dado a leer en el transcurso de la escuela; Lectura
ocupacional, es decir, qué textos han buscado para encontrar
información sobre problemas de la carrera, lectura personal
o privada, aquella que los estudiantes buscan para satisfacer
una preferencia o necesidad particular, lectura en el ámbito
público, es requerida para participar en actividades sociales,
como documentos oiciales.
La lectura es una actividad intelectual compleja, que implica
formulación de hipótesis acerca del mensaje del texto, el foco
de la lectura está en el signiicado. El lector eiciente desarrolla
estrategias de predicción y de corrección para procesar claves
en gráicos, sintácticas y semánticas. Goodman (1982).
Por otra parte, la comprensión no consiste simplemente en un
problema de signiicado de palabras, sino que implica algo
más amplio y es que el lector aporte la suiciente experiencia
y el bagaje conceptual indispensable para poder entender
cabalmente lo que está leyendo.
Dominios de la competencia para la lectura:
a) Dominio lingüístico referido al conocimiento de la
estructura y funcionamiento de la lengua respectiva.
Competencias lectora y de pensamiento reflexivo en estudiantes de agronomía
123
b) Dominio referencial, relativo al conocimiento del tema o
tópico al que el texto se reiere, cuanto mayor es el caudal
de experiencia o conocimiento del lector sobre el tema
de un texto escrito, mayor será su competencia textual o
de lectura.
nos hace vivir una catarsis liberadora en virtud de la cual
ya no somos los mismos, nos da la certeza del objeto de
conocimiento.
c) El dominio pragmático relacionado con el conocimiento
de los usos estrategias y normas vigentes en las relaciones
entre los interlocutores, así como el conocimiento de
los factores que inluyen en la selección de los recursos
lingüísticos y por ende la correcta interpretación de estos
recursos.
Detectar y evaluar los niveles de competencias lectora y
pensamiento relexivo en estudiantes de agronomía de la
especialidad de Fitotecnia.
d) El dominio textual que se refiere a la habilidad de
recepción de textos como mensajes organizados.
Caracterizar las cualidades de aprendizaje que han
desarrollado los estudiantes con grados altos de competencias
lectora y de relexión.
La competencia para la lectura supone conocimiento y
experiencia en el uso del sistema lingüístico. En sentido
estricto la competencia de lectura implica ser capaz de:
captar prontamente y sin vacilación el tema o los temas
de un texto de la interpretación de las señales textuales
y extra-textuales, aprender. Respecto a la evaluación
de competencias podemos decir que esta facilita la
observación del alumnado en las áreas de currículo, los
estándares de aprendizaje evaluable y establecen una
gradación en los niveles de desempeño. Facilita y guía un
proceso de aprendizaje centrado en el desarrollo integral del
alumno. En esta evaluación la competencia en Lectura no se
considera como una habilidad que se adquiere solamente en
los primeros años de escolarización sino que se constituye
como un conjunto de conocimientos, habilidades y
estrategias que se expanden y que se construyen a lo largo
de la vida.
Por su parte, la comprensión signiicativa constituye un
proceso cognitivo, socio-afectivo y operativo en virtud del
cual un sujeto cognoscente hace uso de un conocimiento
en el seno de su experiencia de vida personal y social,
y a partir de ahí, gana certeza y utilidad (arboleda)
Exige pasar del plano de la información a la esfera del
conocimiento, y de este al uso del mismo, es decir, pasar a
la organización de la información y usar el conocimiento,
aplicarlo, generarlo o complejizarlo. Un asunto es
aprenderse de memoria la deinición de “planta” y otro
examinar el enunciado, descomponiéndolo en cuestiones
importantes, preguntándose el porqué de las mismas. La
lectura comprensiva requiere poner en juego todos los
procesos constructivos y el lector intenta dotarlos de una
interpretación signiicativa. Lo que leemos nos transforma,
Objetivos
Probar y desarrollar metodologías que nos lleven a evaluar
asertivamente las capacidades de lectura y relexión.
Indagar sobre los factores que favorecen el desarrollo de las
competencias lectora y de pensamiento relexivo, a in de
hacerlas accesibles a todo el estudiantado.
Conocer las postulaciones críticas que poseen los estudiantes
con pensamiento relexivo, sobre el entorno, la educación
y el país.
Metodología
Se ha seleccionado un grupo de estudiantes del departamento
de Fitotecnia, de la Universidad Autónoma Chapingo, que
presentan diversidad en su lugar de origen, edad y género.
Se les proporcionó el material de lectura: “si yo volviera a
ser extensionista” de Polan Lacki, funcionario de la ONU.
Se evaluaron las competencias lectora y relexiva de acuerdo
a la escala de Bloom y a la elaboración de una Rúbrica que
contenía los puntos fundamentales.
Se realizó una valoración cualitativa del ejercicio.
Para poder caliicar los niveles de competencia lectora y
relexiva hemos utilizado desde el año 2014 la escala de
Benjamín Bloom. Durante el año 2016, también incluimos
una rúbrica. Se entiende por este elemento un instrumento de
evaluación en el cual se establecen criterios y estándares por
niveles que permiten determinar la calidad de la ejecución de
los estudiantes en unas tareas especíicas Amezcua (2015).
Rosa María Rodríguez Cortés
124 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Resultados
Rúbrica
Regular
4
Bueno
10
2. Opina sobre el concepto “culpa” que expone el autor
2
12
3. Ubica el lenguaje neoliberal
2
4. Ubica el término “paternalista”
8
24
4
20
Nulo
Bajo
1.Advierte el nuevo paradigma que propone el autor
5. Ubica cuáles son los recursos que ya posee el campesino
6. Cita y comenta la frase: “En el mundo moderno el éxito económico depende
más de los conocimientos adecuados que de los recursos abundantes”
7. Entiende el por qué es importante organizarse
8. Entiende las bondades de realizar un diagnóstico
2
8
2
9. Entiende por qué es más importante una vaca que muchas vacas
2
4
10. Entiende por qué hace falta aplicar conocimientos elementales
2
2
11. Entiende qué es exógeno y qué es endógeno
2
6
12. Entiende qué es la gradualidad y la diversiicación.
13. Entiende por qué es necesario cambiar a valor agregado.
8
2
14. Asume una posición personal
12
Ningún texto fue considerado nulo en estas competencias,
pues todos poseían aunque sea un grado bajo de interpretación
(se tomó como herramienta base la escala de Bloom citada
para evaluar los niveles).
Los textos tuvieron que estar narrados en tercera persona
(“el autor dice…”, “Polan Lacki opina…” etc.) pues de esta
manera se crea una distancia entre el alumno y el autor que
le permite una visión más crítica.
Nulo
Bajo
Regular
Bueno
Interpretación de datos
Existen trabajos que sólo se quedaron el nivel uno de la
Escala de Bloom; es decir, escrito textual, repetitivo, pero
al inal pusieron una conclusión, lo que los llevó a colocarse
como “buenos” en la rúbrica.
De los textos revisados, eliminamos aquellos que sólo
enumeraban los factores, en vista de que estos habían sido
transcritos y carecían de interpretación. También fueron
eliminados aquellos textos que se copiaron entre los mismos
alumnos.
En la rúbrica registraron mayor incidencia, el punto 4 y el
punto 6. El primero se reiere al “paternalismo” y el segundo
al de otorgar mayor importancia a los conocimientos que a
los recursos. Sobre todo en el primer punto podemos hablar
de que el término les suena “familiar” a los alumnos, por eso
Figura. 1 Frecuencias de aprovechamiento lector y reflexivo
en la rúbrica utilizada para el ejercicio.
Competencias lectora y de pensamiento reflexivo en estudiantes de agronomía
125
lo ubican rápidamente. Recordemos que la referencia no es
necesariamente por haberlo leído, el “paternalismo” es un
término de uso común, muy usado en el discurso político.
que ayuda al surgimiento de la competencia relexiva, es
que el alumno esté familiarizado con términos en voga
(en este caso el disparador fue “paternalismo”), lo que le
permitió explayarse y opinar con mayor fundamento. Los
docentes estamos obligados a realizar o asomarnos a este
tipo de investigaciones sobre los factores que favorecen
el desarrollo de las competencias, a in de mejorar los
procesos de un aprendizaje genuino, signiicativo, útil y
duradero.
Es notorio también que 12 alumnos, de los 50, al inal dieron
una conclusión personal, aún cuando no fue solicitada. Esto
puede implicar que los jóvenes están acostumbrados a ese
estilo de trabajo, de reproducir en forma acrítica todo el texto
y al inal “dar su opinión personal”, estilo que es muy propio
de los niveles de enseñanza básica y media.
De los puntos con menos incidencias, se registra el11 que se
reiere al factor endógeno y exógeno, conceptos que no son
muy frecuentemente usados, es decir que no cuentan con un
marco referencial para el alumno.
Conclusiones
La competencia lectora es una cualidad que poseen los
alumnos de este nivel universitario, aún en grados bajos.
Leen y logran por lo menos reproducir coherentemente
el texto. Y no sólo eso, también pueden alcanzar buenos
niveles de interpretación, si bien esto no atañe a la mayoría.
Encontramos también la presencia de la competencia
relexiva en alumnos que a) Marcaron su distancia respecto
a los planteamientos del autor; b) Llegaron a puntos
nodales; y c) Ofrecieron una conclusión inal. Un factor
Literatura citada
Amezcua, Karen F. 2015. Evaluación del aprendizaje, México, ANUIES.
Arboleda, Julio César. 2005. Estrategias para la comprensión signiicativa.
Didácticas congnoscitivas y socioafectivas. Colombia,
Didácticas Magisterio.
Argudin, Yolanda. 2005 Educación basada en competencias, México.
Ed Trillas.
Bloom, Benjamín. 2005. Taxonomía de los objetivos de la educación.
México, El Ateneo.
Cázares Leslie. 2008. Estrategias educativas para fomentar las
competencias. México, Ed. Trillas.
Goodman, K. 1994. El proceso de lectura: consideraciones a través de
lenguas y desarrollo. In: Ferreiro y Gómez Palacio (Comp.).
Nuevas perspectivas sobre el proceso de lectura y escritura,
México, Siglo XXI editores.
Hymes, D. 1971. Competence and performance in linguistic theory. Nueva
York, USA, Ed. Huxley.
Neis, Ignacio Antonio, 2001, Por una gramática textual, Brasil, Pontiicia
Universidad Católica de Río Grande.
Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia p. 127-133
La educación ambiental como herramienta significativa
para la formación del hombre en el siglo XXI
José David Peñuela Lizcano
Resumen
Este documento pretende, además de relexionar acerca de
la relación “Hombres-Naturaleza” generar conciencia de
la imperiosa necesidad de educar al hombre del siglo XXI
ante la irracionalidad globalizadora económica dominante.
Las cumbres mundiales del medio ambiente han sentado
bases teóricas/conceptuales para reducir tal problemática,
sin embargo, la realidad concreta es otra; la pesadilla
ambiental continúa, pareciera que la actual sociedad del
conocimiento adoleciera de una cultura ética y ambiental.
Surgen planteamientos como: ¿Quiénes socialmente deben
tomar o asumir un papel mucho más participativo para
fomentar, promover, divulgar la Educación Ambiental?
¿Qué papel Socialmente Responsables están asumiendo
las instituciones educativas (públicas y privadas) en sus
procesos de formación? ¿Por qué seguir asumiendo modelos
económicos que no responden a la realidad socioeconómica
de nuestros territorios? ¿Qué papel pueden jugar las
economías alternativas?
Palabras clave: cultura-ética, educación ambiental,
problemática ambiental, sostenibilidad, territorio.
Introducción
Milenariamente, el hombre ha utilizado los recursos
naturales para satisfacer sus necesidades en pro de
mejoramiento de su calidad de vida, explotándolos con
cierta racionalidad social y económica, evolucionando en
el tiempo, hasta convertirse en lo que actualmente lo es: “la
sociedad del conocimiento”. Sin embargo, este grado de
racionalidad fue subestimado por la falsa concepción que
los recursos naturales eran inagotables-ininitos, alteraron en
cierta forma la cosmovisión del hombre sobre la naturaleza,
ya no era suiciente crear excedentes para la subsistencia
humana, sino la creación de excedentes productivos,
monetarios y inancieros para la acumulación de capital.
Se había iniciado así, la revolución industrial, consumidora
en masa de recursos naturales como de materias primas y el
posicionamiento del capitalismo como sistema dominante
bajo el lema de la “libertad” en todas sus expresiones
posibles, el cual implícitamente relaciona la producción y
el consumo.
De esta manera, el uso de los recursos naturales en los
últimos 150 años en pro del crecimiento económico,
parece ser de magnitudes inconsumerable, hoy en día, las
sociedades del siglo XXI poseen un gran desafío ambiental.
Especialmente, los países subdesarrollados quienes están
sometidos a obtener tasas de crecimiento económico
satisfactorias, que les brinde los recursos monetarios
necesarios para mejorar el bienestar social de sus pueblos.
Por otra parte, los países desarrollados, en algunos casos
han agotado sus recursos naturales y son escasos o los han
declarado “en conservación”, en respuesta han traslado sus
procesos industriales y comerciales mediante la táctica de la
globalización (fundamentalmente vía inversión extranjera)
a los países subdesarrollados, aprovechando su dotación
factorial, sin abandonar el ideal del crecimiento económico
y la acumulación de capital, ahondando la brecha entre
centro-periferia.
Para reducir la problemática ambiental y aportar al desarrollo
sostenible, se requiere de una educación significativa/
integral/holística, de una educación ambiental que posea
José David Peñuela Lizcano
128 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
principios y valores coherente y pertinente con los ideales
del actual sistema capitalista dominante. En suma, se
deben adicionar los compromisos adquiridos por el Estado
Colombiano en las cumbres mundiales de Estocolmo, Río
de Janeiro y Johannesburgo, los cuales crean las bases para
la creación del ministerio del medio ambiente. En síntesis,
se apremia una educación ambiental signiicativa/integral/
holística, ante la realidad concreta que vive la sociedad
del siglo XXI. Al parecer, el actual modelo de educación
superior parece no poseer procesos claros de formación
vinculantes con el desarrollo sostenible, donde se resalte
la Educación Ambiental como una verdadera herramienta
signiicativa de formación para el hombre integral, holístico,
visionario del siglo XXI.
Las universidades (públicas y privadas) tienen una
responsabilidad social empresarial-corporativa (RSEC)
mucho más apremiante con la sociedad, en la medida que
ellas deben identiicar las bases epistemológicas para la
reinterpretación de esta nueva cultura-ética del mundo
globalizado. Además, son ellas quienes poseen el potencial
y los recursos para posicionar/fortalecer la Educación
Ambiental como una herramienta significativa en la
formación integral del ser, ya que ellas son los núcleos
donde se genera el conocimiento, la ciencia, la tecnología,
las redes de conocimiento, mediante la investigación
de calidad, generada en los centros, grupos y líneas de
investigación, especialmente, cuando deciden fortalecer
e implementar la relación universidad-empresa-gobiernocomunidad, creando y transiriendo valor social agregado
a las comunidades que intervienen, es decir; cuando
efectúan la extensión y la proyección social. Finalmente,
surgen inquietudes como: ¿Quiénes socialmente deben
tomar o asumir un papel mucho más participativo para
fomentar, promover, divulgar la educación ambiental?
¿Qué papel socialmente responsables están asumiendo
las instituciones educativas (públicas y privadas) en sus
procesos de formación?
Este documento está organizado en cuatro secciones
incluyendo como primera la introducción, la segunda
sección expresa los principales argumentos de la Educación
Ambiental (E.A). La tercera sección plantea una serie
de preguntas orientadoras, que tienen como propósito
fundamental relexionar, ahondar el debate de la importancia
de la E.A. La última sección evidencia las principales
conclusiones.
La educación ambiental como herramienta
significativa de formación
Pero, ¿cómo nace la EA, de donde proviene, ¿cuáles son
sus cimientos? ¿cuál es su ilosofía? Antes de responder
estas preguntas, es necesario mencionar brevemente los
principales aspectos que le dan vida o asiento a la educación
ambiental y que están fuertemente relacionados con el
desarrollo sostenible1.
La necesidad de crear una educación ambiental como
herramienta para el desarrollo sostenible, se deriva
implícitamente desde la identiicación de la problemática
ambiental planteada e identiicada a inicios de la década de
los años 70, producto fundamentalmente de las controversias
“expresadas en el manifiesto por la supervivencia, de
Goldsmith y el planteo de los límites del crecimiento, de
Meadows”
Posteriormente, estos esfuerzos se logran conceptualizar/
teorizar en 1983, gracias al informe producido por la
comisión Mundial para el Medio Ambiente y Desarrollo de
la Organización de Naciones Unidas (ONU); la Comisión
Brundtland “Nuestro Futuro Común” En este mismo
documento, según Jankilevich2 (2003), se “formaliza el
concepto de Desarrollo sostenible, como un desarrollo que
necesariamente deberá abordar la protección del ambiente y
el crecimiento económico como una sola cuestión, con el in
de “satisfacer las necesidades de las generaciones presentes
sin comprometer el derecho de las generaciones futuras
a satisfacer sus propias necesidades,” pero además aclara
que: “el concepto de Desarrollo Sustentable incorpora el
tema de la equidad, tanto social como intergeneracional y
plantea la necesaria articulación entre ambiente y desarrollo,
colocando a la sustentabilidad ambiental en el tema central a
ser considerado al momento de deinir el modelo de desarrollo
a seguir” (8). En este mismo informe se identiicaron tres
dimensiones, el económico, social y ambiental.
1
Para un análisis mucho más profundo del origen del concepto de desarrollo
sustentable y los efectos ambientales causados por el crecimiento económico véase
a: Pierri, Naína. Capítulo 2. Historia del concepto de desarrollo sustentable. S.f.
pp. 33. Disponible en la red:http://soda.ustadistancia.edu.co/enlinea/eduvirtual/
Seminario _ ecoturismo/documentos/Unidad%201%20-Sustentabilidad/
Desarrollo%20Sustentable_capitulo_2.pdf [Consultado en abril del 2014].
2
Jankilevich, Silvia. Las cumbres mundiales sobre el medio ambiente. Estocolmo,
Río y Johannesburgo. 30 años de Historia Ambiental. Documento de Trabajo N0
106, Universidad de Belgrano. 2003, pp. 8. Disponible en la red: http://www.ub.edu.
ar/investigaciones/dt_nuevos/106_jankilevich.pdf [Consultado en abril de 2014].
La educación ambiental como herramienta significativa para la formación del hombre en el siglo XXI
Ahora, Sepúlveda et al. (1998)3, adiciona una dimensión
más, denominándola político-institucional. “La cual es
referida al gasto público dirigido a mejorar las condiciones
de vida de las comunidades agrícolas, como infraestructura,
salud, vialidad, entre otras” (251). Mientras, Serna (2004)4
profundiza en el concepto de Sostenibilidad, “la evolución
que ha tenido este concepto, deja claro que existen
unas dimensiones de la sostenibilidad, que bien pueden
considerarse como sostenibilidades, y que dan paso a la
sostenibilidad global. En este sentido la “Sostenibilidad” se
concibe como un sistema o estructura dinámica y como un
proceso (desarrollo del sistema en el tiempo)”, al nombrar
“dimensiones de la sostenibilidad global, integrada por:
sostenibilidad, ecológica, social, política, educativa,
económica, institucional, ideológica y cultural” (pp. 34- 36).
La EA es una realidad inaplazable, es más que necesaria para
entender/comprender lo que Martínez (sf)5 deine como la
utopía del desarrollo sostenible.
En síntesis y teniendo en cuenta los anteriores referentes,
explícitamente la educación ambiental se debe visualizar/
concebirse como una herramienta de vital importancia,
de alta prioridad, asumiendo roles protagónicos en los
devenires de la sociedad moderna. Surgen planteamientos
de ¿Qué papel están asumiendo las instituciones educativas
de educación superior? ¿Qué tan articulado tienen la EA
en sus microcurriculos? ¿Estos microcurriculos expresan
competencias de formación según su nivel (básicas,
transversales, especíicas)? ¿Por qué la ciudadanía del
hoy posee una escaza concientización de la problemática
ambiental? ¿Por qué el conocimiento en E.A es ambiguo?
¿Se está asumiendo con responsabilidad el objetivo
fundamental de la EA? ¿Qué papel o rol debe asumir a
la E.A como herramienta signiicativa de formación que
ayude a armonizar la relación “hombre-naturaleza”? ¿Cuál
es la responsabilidad social de cada uno de nosotros como
ciudadanos, como profesionales, como padres, hijos, o
caso este conjunto de actitudes/aptitudes no está muy
bien deinidas en las actuales reglas de comportamiento
humano?
3
Citado por Pérez, Juan, J. Dimensión ética del desarrollo sostenible de la
agricultura. Revista de Ciencias Sociales (Ve), núm. 2, mayo 2005, pp. 246-255.
Disponible en la red: http://www.redalyc.org/pdf/280/28000204.pdf o http://www.
redalyc.org/articulo.oa?id=28000204 [Consultado en abril de 2014].
4
Serna M., Ciro A. Desarrollo sostenible, economía ambiental y economía
ecológica. Departamento de publicaciones de la Universidad de Manizales, pp.
33. Mayo de 2004.
5
Martínez, R. Miguel. Concepto de desarrollo sostenible. (s.f), pp. 20 -22.
Disponible en la red: http://es.scribd.com/doc/187469997/1-Miguel-MartinezRamos [Consultado en abril del 2014].
129
Conceptualización de la educación ambiental
(EA)
A continuación, trataremos de dar respuesta ¿Qué
entendemos por EA, cuáles son sus definiciones más
comunes? Smith-Sebasto, N J. la plantea como: “La
educación ambiental, en un sentido amplio, incluyendo la
concienciación y el entrenamiento, provee el complemento
indispensable de otros instrumentos del manejo ambiental”,
El termino educación para el desarrollo sostenible sería
un término más compresible, ya que indica claramente
el propósito del esfuerzo educativo: educación sobre el
desarrollo sostenible, el cual es en realidad la meta de la
EA. De hecho, el consejo sobre el desarrollo sostenible [del
presidente Clinton, Estados Unidos] sugirió que la EA está
evolucionando hacia la educación para la sostenibilidad,
que tiene un “gran potencial para aumentar la toma de
conciencia en los ciudadanos y la capacidad [para que
ellos] se comprometan con decisiones que afecten sus
vidas. El autor aclara que existen varias deiniciones, donde
“no existe consenso universal sobre algunas de ellas. Por
último identiica un conjunto de acciones para poder crear
su propio concepto, deiniendo como: “un proceso que
incluye un esfuerzo planiicado para comunicar información
y/o suministrar instrucción (…), diseñado para apoyar el
desarrollo de actitudes, opiniones y creencias, que apoyen a
su vez la adopción sostenida de conductas, que guían tanto a
los individuos como a grupos, de manera que minimicen lo
más que sea posible la degradación del paisaje original o las
características geológicas de una región, la contaminación
del aire, agua o suelo, y las amenazas a la supervivencia de
otras especies de plantas y animales”6.
Otra deinición de EA, es la propuesta por la Internacional
para la Conservación de la Naturaleza (UICN), donde
“es el proceso de reconocer valores y aclarar conceptos
para crear habilidades y actitudes necesarias, tendientes a
comprender y apreciar la relación mutua entre el hombre,
su cultura y el medio biofísico circundante. La EA también
incluye la práctica de tomar decisiones y formular un código
de comportamiento respecto a cuestiones que conciernen
a la calidad ambiental”7 “El MARN (1986), define la
Educación Ambiental como el proceso mediante el cual se
conduce la formación de un hombre capaz de comprender
6
Citado en http://www.jmarcano.com/educa/njsmith.html [consultado en abril
de 2014].
7
Citado en http://www.mailxmail.com/curso-educacion-ambiental/deinicion-ea
[consultado en abril de 2014].
130 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
la complejidad producida en el ambiente por la interacción
de sus componentes naturales y socioculturales, a la vez
que le permiten emitir juicios de valor y adoptar normas
de comportamiento, implicando un proceso continuo de
adquisición de conocimientos, cambios de conducta en
relación con el ambiente y una participación de la defensa,
protección y mejoramiento del mismo para un desarrollo
sostenible”8
Novo (2009), plantea “¿Cómo avanzar en esta dirección?
¿Podremos sustituir la codicia y el dominio que están en la
raíz de la crisis ambiental por unas actitudes responsables y
equitativas…? La educación, si se deja interpelar por estas
preguntas, tiene que caminar hacia una renovación inteligente del
arte de vivir y avanzar hacia la “convivencialidad”, restituyendo
la comprensión del valor de la naturaleza y contribuyendo a
la equidad social y la diversidad cultural. Educar es favorecer
el progreso humano, pero el de toda la humanidad, no el de
una pequeña parte privilegiada a costa del resto, como viene
sucediendo históricamente”. Ahora, Tomando como referente
el informe Framework for the UNEDESD International
Implementation Sheme (Unesco, 2006), la autora continua
profundizando e identiicando cuales pueden ser los “campos
en los cuales debería ser incorporada la educación para el
desarrollo sostenible”: Derechos humanos, Paz y seguridad y
seguridad humanas, equidad de género, diversidad cultural y
entendimiento intercultural, salud, sida, gobernanza, recursos
naturales (agua, energía, agricultura, biodiversidad), cambio
climático, desarrollo rural, urbanización sostenible, prevención
y mitigación de desastres, responsabilidad social corporativa,
economía de mercado”9 (200).
Enfoque y política de educación ambiental
colombiana
La política de la EA en Colombia tiene sus inicios en los
años de 1991, sus “esfuerzos fundamentales han estado
orientados a la inclusión de la temática, tanto en el sector
ambiental como en el sector educativo especíicamente. En
el sector educativo, la E.A se ha venido incluyendo como una
de las estrategias importantes de las políticas, en el marco
de la reforma educativa nacional y desde los conceptos de
autonomía y descentralización”. Buscando como objetivos
fundamentales:
8
Citado en http://rescatedelambiente.blogspot.com/ [consultado en abril de 2014].
Novo, María. La educación ambiental; una genuina educación para el desarrollo
sostenible. Revista de educación, número extraordinario 2009, pp.195-217.
9
José David Peñuela Lizcano
Promover la concertación, la planeación, la ejecución y la
evaluación conjunta a nivel intersectorial e interinstitucional
de planes, programas, proyectos y estrategias de Educación
Ambiental formales, no formales e informales (…).
Proporcionar un marco conceptual y metodológico que
oriente las acciones que en materia educativo-ambiental
se adelanten en el país, tanto a nivel de educación formal
e informal, buscando el fortalecimiento de los procesos
participativos (…).
Formular estrategias que permitan incorporar la EA como eje
transversal en los planes, programas y otros, que se generen
tanto en el sector ambiental, como en el sector educativo y
en general en la dinámica del SINA (…).
Proporcionar instrumentos que permitan abrir espacios para
la relexión crítica, a propósito de la necesidad de avanzar
hacia modelos de desarrollo, que incorporen un concepto
de sostenibilidad (…).
Estos esfuerzos, se complementan con la “organización
formal del sector ambiental en el país”, mediante la
implementación de la ley 99 de 1993, que le da vida a la
creación del Ministerio del Medio Ambiente, estableciendo
en “sus marcos políticos el mecanismo de concertación con el
Ministerio de Educación Nacional, para la adopción conjunta
de programas, planes de estudio y propuestas curriculares en
materia de educación ambiental”. A su vez, la Ley 70 de 1993,
incorpora en varios de sus artículos la dimensión ambiental
dentro de los programas de etnoeducación, dirigidos a las
comunidades afrocolombianas que habitan los territorios
aledaños al mar Pacíico.
Ahora, el programa nacional de educación ambiental se
viene fortaleciendo mediante la estrategia de promoción
en “la conformación y consolidación de los comités
técnicos interinstitucionales de educación ambiental,
departamentales y locales. Estos comités buscan organizar
la Educación Ambiental en cada uno de los rincones del
territorio nacional, a través de planes en los que participan
todas las instituciones, con competencias y responsabilidades
en el campo particular. Adicionalmente, estos planes buscan
obtener recursos inancieros que garanticen la sostenibilidad
de la propuesta, en el contexto de la descentralización y de
la autonomía local.
La educación ambiental como herramienta significativa para la formación del hombre en el siglo XXI
Desde el ámbito educativo, los marcos legales que se han
venido planteando, la inclusión de la dimensión ambiental en
el sector formal, parte del reconocimiento de la problemática
ambiental local y de la formulación de proyectos integrales
e interdisciplinarios, que desde la escuela permitan lecturas
contextúales, para la comprensión de la mencionada
problemática y para la ejecución de acciones orientadas a la
búsqueda de soluciones compartidas y de posible aplicación
y proyección, no sólo para los actores de la escuela, sino para
todos aquellos que están inmersos en la problemática misma.
De esta manera, la inclusión de la EA en el currículo no se hace
ni a través de una materia más, ni a través de una cátedra, ni a
través de una disciplina o de acciones aisladas, no inscritas
dentro de un proceso secuencial y permanente de formación.
La EA en la reforma educativa, está concebida desde la visión
sistémica del ambiente, metodológica y estratégica. En
términos generales, la propuesta se puede plantear desde los
siguientes tópicos: Trabajo por problema ambiental, a través
de proyectos escolares (PRAES); “Construcción de escuela
abierta, con proyección comunitaria; Formación permanente
de maestros y dinamizadores ambientales a través de
la investigación; Construcción de currículos flexibles;
formación para el trabajo intersectorial, interinstitucional e
intercultural; Formación para el trabajo interdisciplinario;
y, Formación para el reconocimiento de género. ” (9 al 14)10.
En conclusión, se puede argumentar que el marco general
de la política nacional ambiental, especialmente la
relacionada con la EA, “posee una visión sistémica del
ambiente que se traduce en relexiones holísticas, a propósito
de la aproximación interdisciplinaria requerida para la
construcción del conocimiento, en contextos educativo
ambientales”. Este enfoque esta compartido por el Ministerio
de Educación Nacional y el Ministerio del Medio Ambiente,
en la ejecución de planes, programas y estrategias, “con el
in de lograr los impactos requeridos en lo que se reiere a
formación de ciudadanos y ciudadanas éticos y responsables
en el manejo del ambiente”.
Las universidades como núcleos formadores
Ahora, teniendo en cuenta los antecedentes planteados hasta
este punto, más las deiniciones de EA ¿Cómo se puede
generar una educación ambiental con responsabilidad social
Sistema Nacional Ambiental (SINA). Política Nacional de Educación Ambiental
SINA. Ministerio del medio ambiente y Ministerio de Educación Nacional. Bogotá,
D.C., Julio de 2002.
10
131
como estrategia de empoderamiento? Fundamentalmente,
este papel lo deben asumir los distintos entes educativos,
especialmente las Universidades (públicas y privadas)
con sus centros y grupos de investigación, la divulgación
y publicación social del conocimiento generado, la
extensión y la proyección social. Son ellas las llamadas a
tomar la vocería mediante la investigación aplicada y la
generación de un modelo educativo pertinente y coherente
con el entorno socioeconómico que las rodea, usando como
estrategia las bondades que brinda la implementación de la
responsabilidad social empresarial-corporativa (RSE/C).
Mediante la implementación de la RSE/C se pueden unir
esfuerzos, las universidades pueden generar los insumos
de investigación tan requeridos por el poder público para
poder tomar decisiones eicientes, las empresas pueden
transferir fondos a los centros y grupos de investigación para
adelantar proyectos de impacto y que están relacionados
con el entorno socioeconómico-ambiental en el cual
se encuentran ubicadas. Así, las universidades pueden
transferir valor social mediante la implementación de
la RSE/C en las comunidades intervenidas, creando así,
soluciones mucho más viables, coherentes y pertinentes
con las realidades sociales.
Las instituciones de educación superior, también pueden
crear redes de investigación regional, nacional e internacional
haciendo uso de su planta docente especializada. En cierta
manera, esta planta docente especializada (doctorados) esta
subutilizada, en parte porque las universidades no poseen los
recursos necesarios para iniciar investigaciones de frontera,
segundo; porque su participación es medianamente regular
en la construcción de políticas públicas, especialmente
las de carácter municipal y regional. En Colombia, solo
las universidades de gran envergadura han logrado
traspasar su rol esencial de formar11, es decir; han sido
capaces de trasladar su conocimiento a otros sectores,
como, por ejemplo, a la comunidad, al sector público,
al orden regional-nacional e internacional mediante la
consultoría. Conjuntamente, han especializado sus centros
y grupos de investigación captando recursos del sector
público y privado, fortaleciendo alianzas estratégicas con
universidades de ranking mundial, creando investigación,
conocimiento, ciencia y tecnología en pro del desarrollo
sostenible.
11
Se hace relación a las universidades que han logrado obtener procesos de
Acreditación Institucional, donde a su vez han obtenido acreditación de alta
calidad para ciertos programas académicos. Algunas de estas universidades
han fortalecido la investigación, sus centros y grupos de investigación poseen
estándares de reconocimiento, avalándolos para captar recursos del Estado
mediante convocatorias públicas para diseñar y ejecutar proyectos.
José David Peñuela Lizcano
132 Filosofía, historia y educación de frente a la tecnocracia
Es necesario por medio de las reformas curriculares (se
contemple la EA), no solo una ética empresarial, sino una
cultura-ética mucho más vinculante con el contexto de la
globalización. Posiblemente se requiere, una cultura-ética
para el ciudadano del común y corriente, una culturaética para el mundo de los empresarios, una cultura-ética
política, una cultura-ética institucional, una cultura-ética
comunitaria, una cultura-ética globalizante. Para alcanzar tal
visión, es necesario crear, concebir nuevas formas y espacios
de cómo generar capital social y natural, empoderando la
relación: universidad-gobierno-empresa-comunidad.
currículos académicos de programas profesionales? ¿Qué
se requiere para que la EA sea asumida como una verdadera
herramienta en los procesos de formación integral del
hombre? ¿Qué tan necesaria es una cultura-ética mucho más
vinculante con la cosmo-visión de la globalización? ¿Cuál
es el papel de las instituciones educativas, especialmente
las de educación superior en la promoción, divulgación y
fomento de la EA, como una herramienta para el desarrollo
sostenible? ¿Qué se requiere para fortalecer la relación
universidad-empresa-gobierno-comunidad?
Por último, Martínez (sf), identifica cual es la ciencia
necesaria para tratar de reducir la problemática ambiental y los
cuales en este trabajo se relacionan con la EA: “Información
más integrada sobre estructura y funcionamiento de
ecosistemas, umbrales de vulnerabilidad/capacidad de
carga ecosistemica, indicadores básicos de la “salud”
de ecosistemas y de cambios irreversibles, “manual de
prácticas” de sentido común a escala, local, regional y global,
participación de cientíicos sociales en colaboración irme
con cientíicos de aéreas naturales (interdisciplina), generar
legislación para proteger derechos de propiedad intelectual
sobre recursos naturales, lograr una agricultura sustentable
y económicamente competitiva a escala global y garantizar
mantenimiento de diversidad genética, deinir pros y contras
de plantaciones para captar carbono (e,g., incluir criterios de
biodiversidad), deinir el valor económico de los servicios
ecológicos e instrumentarlos, mejor conocimiento y
sistematización de recursos biológicos, deinir amenazas y
niveles aceptables de pérdida de biodiversidad (20, 21 y 22).
Conclusiones
En síntesis, las universidades por medio de sus centros y grupos
de investigación poseen un alto potencial para desarrollar una
educación (EA) coherente y pertinente con la realidad social
y exclusivamente con la problemática ambiental, empleando
como estrategia la responsabilidad social empresarial
corporativa, básicamente; fortaleciendo, empoderando la
relación Universidad-Empresa-Gobierno-Comunidad. A
través de esta relación se pueden reorientar recursos, esfuerzos y
capital humano para la generación de investigaciones de frontera.
Preguntas orientadoras para profundizar
el debate
¿Qué procesos se requieren para posicionar la EA en
las acciones cotidianas de nuestras vidas? ¿Por qué la
implementación de la EA es escasamente vinculada a los
Implícitamente, el actual modelo de educación superior
colombiano parece no tener procesos solidos de formación
vinculantes con el desarrollo sostenible, donde se resalte
la E.A como una verdadera herramienta signiicativa de
formación para el hombre integral, holístico, visionario
del siglo XXI. En ellas, son muy mínimos los currículos
académicos que contemplan núcleos y ejes temáticos que
vinculen la E.A.
Las instituciones educativas, especialmente las universidades
(públicas y privadas) por medio de sus centros, grupos de
investigación, divulgación y publicación de la investigación,
redes de investigación, la extensión y proyección social,
poseen un alto potencial para promover, fomentar y
posicionar una EA coherente y pertinente con la realidad
social, contribuyendo significativamente, mediante la
implementación de la responsabilidad social empresarial
corporativa a la problemática ambiental.
Se debe fortalecer la relación universidad-empresa-gobiernocomunidad, creando redes de conocimiento e investigación,
uniendo esfuerzos y recursos, para la aplicación y generación
de conocimiento de frontera, tan necesario para que las
instituciones públicas puedan tomas mejores decisiones
eficientes y la educación ambiental del ciudadano que
conforma los distintos estamentos de la sociedad.
Literatura citada
Jankilevich, S. Las cumbres mundiales sobre el medio ambiente.
Estocolmo, Río y Johannesburgo. 30 años de Historia
Ambiental. Documento de Trabajo Núm. 106. Universidad de
Belgrano. 2003, pp. 8. http://www.ub.edu.ar/investigaciones/
dt_nuevos/106_jankilevich.pdf.
La educación ambiental como herramienta significativa para la formación del hombre en el siglo XXI
Pérez, J. J. Dimensión ética del desarrollo sostenible de la agricultura.
Revista de Ciencias Sociales (Ve), núm. 2, mayo 2005. pp.
246-255.
Novo, M. La educación ambiental; una genuina educación para
el desarrollo sostenible. Revista de educación, número
extraordinario 2009, pp.195-217.
Martínez, R. M. Concepto de desarrollo sostenible. (s.f), pp. 20 -22.
Disponible en la red: http://es.scribd.com/doc/187469997/1Miguel-Martinez-Ramos [Consultado en abril del
2014].
133
Pierri, Naína. Capítulo 2. Historia del concepto de desarrollo sustentable.
S.f. pp. 33. http://soda.ustadistancia.edu.co/enlinea/eduvirtual/
seminario_ecoturismo/documentos/unidad%201%20
-sustentabilidad/desarrollo%20sustentable_capitulo_2.pdf.
Serna, M. Ciro A. Desarrollo sostenible, economía ambiental y economía
ecológica. Departamento de publicaciones de la Universidad
de Manizales, pp. 33. mayo de 2004.
Sistema Nacional Ambiental (SINA). Política nacional de educación
ambiental SINA. Ministerio del medio ambiente y Ministerio
de Educación Nacional. Bogotá, D.C., Julio de 2002.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 135-143
Territorio y reforma energética su impacto en los
pueblos campesinos e indígenas de México
Carlos Humberto Durand Alcántara1 y Marcela Suárez Escobar2
Departamento de Derecho-Universidad Autónoma Metropolitana Azcapotzalco. 2Departamento de Humanidades-Universidad Autónoma Metropolitana
Azcapotzalco.
Resumen
En este trabajo conirmamos los postulados de un sistema
inicuo, dirigido por el capital inanciero a nivel mundial
y con sus emisarios internos en lo que queda del Estado
mexicano, también establecemos las circunstancias
especíicas en las que está colocando la hegemonía reinante
a millones de campesinos, e indígenas, es decir, a las
clases trabajadoras del agro. Se trata de avizorar no sólo el
entreguismo a las empresas nacionales y transnacionales
de nuestros bienes naturales, sino de ubicar la magnitud
que guardará, de aplicarse plenamente, la deconstrucción
agraria. Bajo esta idea se establecerá un balance acerca
de los impactos que dejará lo que quienes gobiernan han
dado en llamar eufemísticamente en el periodo 2012- 2018
“reformas estructurales”, en particular la energética Se trata
de adentrarnos en circunstancias complejas en que nos ha
colocado el ejercicio del poder fundamentalmente en los
signiicados que guardan las relaciones sociales y las de
propiedad en el campo mexicano.
No obstante, la tendencia por deshabitar el campo y
reducir su población, ya sea a partir de su itinerancia,
expulsándolos de sus lugares de origen, y en el mejor de
los casos bajo diversos “procesos migratorios”, así como
de la violencia que emerge en todos los espacios del Estado
y cuyos resultados son alarmantes, y cuya expresión de
una guerra no declarada, en el caso mexicano ha dejado al
derredor de 163 mil muertos, los más en las zonas rurales,
y en donde el narcotráico viene sentando sus reales, pero
fundamentalmente la insistencia falaz de ciertos sectores del
gobierno, de plantear la supuesta “inoperancia y decadencia
de las economías campesinas”, a lo que contrario sensu
en nuestros días existe una tenaz resistencia de millares de
campesinos, ejidatarios, indígenas, jornaleros, pobladores,
posesionarios quienes de distinta forma se agrupan por la
defensa de sus territorios.
Palabras clave: impacto territorial, reforma energética,
medio rural
La adecuación jurídica en la política agraria
de Peña Nieto
La estrategia gubernamental en materia rural se sustentó
conforme al Acuerdo 01/2013 del Ejecutivo Federal, por
el que se emiten los "lineamientos para dictaminar y dar
seguimiento a los programas derivados del Plan Nacional de
Desarrollo (PND) 2013-2018", en los cuales se establecen
los elementos y características que deben contener los
programas que deriven del plan; este programa contiene
objetivos, estrategias y líneas de acción que relejan las
actividades prioritarias y concretas que se llevarían a cabo
en esta administración. De manera particular dicho plan
reiere a su vez, al programa sectorial de desarrollo agrario,
territorial y urbano 2013-2018.
136 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Si bien en la lógica inicial del discurso peñista subyace,
(por lo menos en apariencia) el estilo Gramsciano1, a partir
de la búsqueda del consenso, aspecto que se dio con ciertas
fracciones partidistas, algunas de ellas mayoritarias (Pacto
por México), también existe un aislamiento con las clases
trabajadoras a las que inalmente se han aplicado una serie
de reformas que afectan sus intereses.
Meses atrás el mundo había conocido la infamante acción
en Atenco, estado de México, en la que siendo gobernador
el actual Presidente, se victimizó el movimiento social y se
colocó en el marco del ejercicio del poder el interés particular
de los núcleos hegemónicos y de las transnacionales frente a
los haberes de la sociedad, fundamentalmente agricultores
– campesinos del valle de México.
Más allá del formulismo jurídico y en el contexto de
la post modernidad el peñismo ya habría definido a
partir del Tratado de Cooperación Asia Transpacíico el
eslabonamiento de su política agraria a los intereses que
realmente guían la política mundial, el de las corporaciones
y que en el caso mexicano han encontrado en el gobierno
un aliado principal (además de constituirse en algunos
casos, en accionistas y socios de los propios oligopolios)
afín a los intereses en la intensiicación de la reproducción
ampliada del capital.
Los eventos que con frecuencia observamos, en este caso
los que competen a la nueva ruralidad, y que agudizan las
contradicciones sociales en que se desenvuelven millones
de campesinos, parceleros, ejidatarios, auténticos pequeños
propietarios, indígenas, posesionarios y fundamentalmente
los jornaleros, no constituyen hechos coyunturales, o
producto de una “inercia social” por parte de los pobres
del campo (a los que la actual estrategia globalizadora les
concibe como “residuos sociales” o “atípicos al sistema
capitalista”), sino más bien forman parte de una política neo
maltusiana, iniciada con el llamado Club de Roma, en el que
por cierto intervino Felipe Calderón, y que se organiza desde
los grandes centros inancieros.
Gramsci reiere que el papel del Estado se sitúa en dos campos en el ejercicio de la
hegemonía, la que, por un lado, se puede manifestar como opresión – represión, pero
también, se puede expresar abiertamente en el ejercicio de la “violencia legítima”,
aspecto que se maniiesta en el manejo de las fuerzas armadas, las policías, las
cárceles, el control de los movimientos sociales, entre otros aspectos,
Y el otro talante que sitúa Antonio Gramsci, compete a la búsqueda de la
“legitimación” del Estado, a través de lo que denominó consenso. Sobre las
consideraciones de Antonio Gramsci consultar Christine Buci Glucksmann.
Gramsci y el Estado. Hacia una Teoría Materialista de la Historia. Ed. Siglo
XXI. Madrid España. 1978.
1
Carlos Humberto Durand Alcántara y Marcela Suárez Escobar
No obstante, las graves contradicciones entre la intermitente
inercia de la mayoría rural, las pretensiones del gran capital,
y un Congreso a modo, Enrique Peña Nieto decretó las
aspiraciones de la hegemonía en materia económica a
partir de profundas reformas a la Constitución General de
la República, las que si bien guardan diversidad de aspectos
contienen también sus propios signiicados en el marco del
Derecho agrario y de las nuevas formulaciones en lo relativo
al régimen propiedad en el campo.
Reforma petrolera y despojo agrario a los
pobres del campo
Uno de los preceptos que trascienden en la nueva política
gubernamental en materia de la producción de energía en
el contexto agrario, corresponde en lo fundamental a la
continuación de la desposesión o despojo que se pretende
aplicar a miles de ejidos y comunidades.
Más allá de las implicaciones ideológicas que subyacen en
un enmarañado marco legal hoy supuestamente fundado en
21 ordenamientos, (en algunos casos se trata de reformas
y adiciones)2 nuestro afán es el de entrar en un análisis
minucioso de carácter no sólo doctrinario, e histórico, sino
incluso hermenéutico y semiótico acerca de la manera en
que se pretende justiicar un nuevo “asalto de la propiedad
campesina e indígena”.
Básicamente me reiero a la Ley de Hidrocarburos, Ley de Inversión Extranjera,
Ley Minera, Ley de Asociaciones Público - Privadas, Decreto por el que se expiden
la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos, se reforman, adicionan y derogan diversas
disposiciones de la Ley Federal de Derechos y de la Ley de Coordinación Fiscal
y se expide la Ley del Fondo Mexicano del Petróleo para la estabilización y el
Desarrollo, Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos, Ley Federal de Derechos, Ley de
Coordinación Fiscal, Ley del Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización
y el Desarrollo, Ley de Inversión Extranjera, Ley de la Industria Eléctrica, Ley de
energía Geotérmica, Ley de Aguas Nacionales, Ley de Petróleos Mexicanos, Ley
de Órganos reguladores Coordinados en Materia Energética, Ley de la Comisión
Federal de Electricidad, Ley de la agencia Nacional de Seguridad Industrial y de
Protección al Medio Ambiente del Sector Hidrocarburos, entre otras, que fueron
reformadas o adicionadas o ambos aspectos. Como observamos dada la magnitud
que implica la reforma petrolera, al decir de Sikkink. Kathryn, es un fenómeno
jurídico “en cascada”. Cf. La Cascada de la Justicia. Cómo los juicios de lesa
humanidad están cambiando el mundo de la política. Gedisa. Barcelona. 2013. Si
bien aún no existe un estudio concienzudo de dicha legislación, independientemente
de cada uno de los Decretos que han sido editados por la Secretaría de Gobernación
y cuyos textos digitalizados aparecen en la Web habría que acotar que existe una
edición de dicha codiicación legal coeditada por SEDATU/Procuraduría Agraria, al
tenor del Marco Legal de la Reforma Energética, la que en un destello de “populismo
peñista”, se alude en su portada que el texto de referencia se publica en el Centenario
de la Ley Agraria del 6 de Enero de 1915, Ed. SEDATU/Procuraduría Agraria…
¡qué ironía y desprecio por las luchas del derecho social agrario.
2
Territorio y reforma energética su impacto en los pueblos campesinos e indígenas de México
En el decreto que dio a conocer Peña Nieto publicado en
el Diario Oicial de la Federación el 11 de agosto de 2014
y cuyas raigambres habría que ubicarlas en el paradigma
económico actual, se establece el supuesto de que “la Nación
continúa siendo propietaria del territorio y en particular del
subsuelo”, airmación que indudablemente es indispensable
delinear por su significado e importancia, al respecto
encontramos que la nueva adaptación al artículo 273 señala:
(…)
“Tratándose del petróleo y de los hidrocarburos sólidos,
líquidos o gaseosos, en el subsuelo, la propiedad de la
Nación es inalienable e imprescriptible y no se otorgarán
concesiones. Con el propósito de obtener ingresos para el
Estado que contribuyan al desarrollo de largo plazo de la
Nación, ésta llevará a cabo las actividades de exploración
y extracción del petróleo y demás hidrocarburos mediante
asignaciones a empresas productivas del Estado o a
través de contratos con éstas o con particulares, en los
términos de la Ley Reglamentaria”4.
¿Por qué insiste Peña Nieto y sus asesores, en mantener
aún, el tan ya desgastado discurso, acerca del supuesto
“nacionalismo mexicano” en este caso en materia petrolera,
cuando en los hechos la política de desincorporación
territorial, para entregar el petróleo y la Nación entera, al
sector privado y los oligopolios internacionales ha sido una
constante que tiene ya, más de tres décadas? Aspecto que
indudablemente en la actual coyuntura adquiere para las
clases trabajadoras caracteres dramáticos.
Una y otra administración, priista, panista, perredista, en su
desgobierno, el sindicalismo “charro y blanco”, controlado
también por el Estado y los empresarios, la gigantesca
burocracia, los “contratos aleatorios”, el desgaste de la
infraestructura petrolera, la dependencia tecnológica frente a
los EE. UU, los accidentes nunca explicados, la clase obrera
aristocratizada y de cuello blanco (que prácticamente en el
sindicalismo petrolero se mantuvo en franca alianza con
la CTM), el compromiso de pagar gran parte de la deuda
externa a los organismos inancieros con petróleo y otros
recursos naturales, en pocas palabras el saqueo de la Nación
por uno y otro gobierno neoliberal, aspectos que no sólo
ponen en entredicho la idea de un país supremo y soberano,
3
Decreto por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. En: Marco Legal de la
Reforma Energética. Centenario de la Ley Agraria del 6 de enero de 1915, Ed.
SEDATU/Procuraduría Agraria. México 2015. Pp. 11-13.
4
Subrayado del autor.
137
sino lo más riesgoso que constituye embarcar a nuestro país
en el paradigma neoliberal que como se sabe es el causante
del desastre planetario.
Hermenéuticamente queda claro que “la nueva idea de
Nación” en el contexto de los ingeniosos creadores de
la política Peñista, rompe cánones en una ocurrencia de
transiguración lingüística5 y en todo caso en una distinta
idea de Nación la Neoliberal que se iltra en lo que queda
del Estado mexicano a la par de la hegemonía detractora
mundial. Y no sólo ello, sino que quienes han formulado la
nueva legislación, no sólo carecen de memoria histórica,
sino de la debida agudeza intelectual, de técnica jurídica y
fundamentalmente de conocimiento doctrinario en materia
de lo que solemos comprender como derecho en general y en
particular derecho agrario. Al inal entendemos que se trata
de brillantes tecnócratas, probablemente egregios doctores
de Harvard6 que en su nueva sustentación jurídica advierten
evidentes carencias, aquí valdría señalar en primer término
que el carácter general de la nueva formulación legal carece
Transiguración de la lengua se reiere a composiciones breves en cuya estructura,
literariamente (…), se ajustan las palabras precisas, exactas, cinceladas a modo de
sencillas deiniciones, sentencias, máximas, aforismos o proverbios, que Fernando
Rielo denomina transiguraciones. (…) cazar instantes, que se implican, pasando
por la vivencia espiritual, en su peril cultural, ilosóico y religioso, adobado con
estados anímicos, sicológicos y de connatural altruismo, sin duda marcados por un
“dolor sin amargura” (…) que se asocian con situaciones que atañen al individuo,
a la sociedad, a la cultura. Los temas que se entretejen en estas composiciones son
de diversa índole: la mística, la religión, la moral, la ilosofía, el derecho, el arte,
la ciencia. Cf. Fernando Rielo: Un diálogo a tres voces, (Libro de entrevistas por
Marie-Lise Gazarian), Nueva York, 1993, F.F.R., Madrid, 1995, p. 109.
6
“El liderazgo lo llevó el Council of Foreign Relations (con sede en Washington),
a través de su apoyo nacional en el Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales
(Comexi) y la Red Mexicana de Energía en el Instituto Autónomo de México
(ITAM), en 2013 el liderazgo en el cabildeo ha correspondido al Woodrow Wilson
Center Mexico Institute, con una ilial en el ITAM. Cabe destacar que algunos de
estos centros de pensamiento han formado en México sucursales y fuertes nexos con
organismos académicos y empresariales aines. Sus orígenes son las instituciones
inancieras y corporaciones. En México, el Comexi es un centro de pensamiento
cuyos socios corporativos son: Exxon-Mobil, Telmex, Bimbo, Kansas City
Southern, Toyota, FEMSA, Banamex, Scotiabank, Grupo México, Union Paciic.
Entre sus ex presidentes se hallan Luis Rubio (Centro de Investigaciones para el
Desarrollo, A.C., CIDAC) y Andrés Rozental (hermano del ex canciller mexicano
(Jorge G. Castañeda), quien preside su propia consultora, especializada en asesorar
a empresas multinacionales sobre sus estrategias corporativas en América Latina.
Además de ser consejero del transnacional HSBC. El presidente actual de Comexi
es Jaime Zabludovsky. En 2013, el Woodrow Wilson Center cabildeó en favor de
los intereses corporativos (Mexico’s Intelligence, de George Baker) y del gobierno
de Estados Unidos, para inducir cambios mayores en México, bajo el marco de
la integración profunda en América del Norte. Por recomendación del Woodrow
Wilson Center, en noviembre de 2012, el documento “Un nuevo comienzo para
el petróleo mexicano: principios y recomendaciones para una reforma a favor
del interés nacional”, solicitaba dar “claridad” conceptual a la diferencia entre
el dueño y el operador. Al dueño se le dejaba la determinación de las formas en
que el recurso sería explotado, en tanto que el operador, “dado que ha irmado
una concesión o un acuerdo de producción compartida”, podría contabilizar
las reservas sin tener la propiedad del subsuelo. Cf. Vargas Rocío. “La Reforma
Energética: a 20 años del TLCAN”. Revista Problemas del Desarrollo UNAM,
vol. 46, enero – marzo de 2015.
5
138 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
de un punto medular, el de su consenso real y no político
(por llamarle de alguna manera), bajo esta idea queda claro
que los principios que construyen en cualquier latitud
mundial a la denominada democracia no fueron aplicados
en este caso, sino más bien referiríamos agolpamiento del
Poder legislativo mexicano, que se supeditó a los intereses
de las transnacionales, rompiendo el principio que supone
su primigenia circunstancia de representación popular, no
es factible que la posible negativa de asumir las dichosas
reformas estructurales, por la mayoría de mexicanos,
la confirmen aproximadamente quinientos individuos
(legisladores), aspecto que evidentemente reduce ésta y otras
reformas constitucionales a la ignominia7, o en el mejor de
los casos, se expresa en el poder de unos cuantos.
Parafraseando a Juan Brom… para
comprender la historia… entre problema
agrario, nacionalismos y política petrolera
La construcción de nuestra Nación hunde de manera vigorosa
sus raíces culturales a la Patria, la que perilaron Zapata, Villa,
Flores Magón y Cárdenas, y en nuestros días el neo zapatismo
en el sureste del país, y diversos movimientos vindicativos,
dentro de ellos los del Sindicato Mexicano de Electricistas
(SME) y la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la
Educación (CNTE), y también aquella que de alguna manera,
en su versión moderna describieron y plasmaron de forma
magistral Rivera, Orozco, Siqueiros, Fuentes, Revueltas, Rulfo
y tantos otros y en donde el problema agrario jugó un papel
crucial, a partir de construir un México contemporáneo a través
de la identidad de aquellos quienes nos brindan con sus manos
la riqueza del campo y la ciudad, y no tan sólo en la prospectiva
productiva, sino en la valoración de nuestra diversidad cultural,
y también por supuesto, aquella que en nuestros días vindica
el neo zapatismo, entre otros movimientos sociales.
7
“La mayoría de la población mexicana se opone drásticamente a la inversión
privada en la industria energética propuesta por el gobierno de Enrique Peña Nieto,
así como a la aplicación del IVA en alimentos y medicinas, según las encuestas
y consultas realizadas hasta el momento. Este rechazo popular se manifestó en
la consulta que acaba de realizar en todo el país Alianza Cívica, donde 80% de
los mexicanos expresó su desacuerdo en modiicar la Constitución para permitir
la inversión privada en la explotación y transformación del petróleo y del gas.
Mientras que 87% se opuso a la aplicación del IVA en alimentos y medicinas
porque esa medida perjudicaría sobre todo a las clases más desprotegidas. La
Cámara de Diputados realizó su propia encuesta, en la cual 54% de la población se
pronunció en contra de la inversión privada en Pemex. Y en la encuesta del Centro
de Investigación y Docencia Económica (CIDE), 65% de los mexicanos se opuso
a tal medida. Cifra muy similar al 62% que rechazó la privatización de Pemex en
la encuesta realizada por Buendía y Laredo. Mientras que la de Parametría arrojó
49% de rechazo y 16% a favor de la privatización” (…). Cf. Rodrigo Vera. “Rechazo
Popular” en Revista Proceso No 1923, septiembre de 2013. p.8.
Carlos Humberto Durand Alcántara y Marcela Suárez Escobar
Hoy el sustento de los neoliberales constituye la plena
desaparición del derecho agrario como un derecho social,
de los trabajadores del campo, aspecto evidentemente
contradictor a la idea de “Nación” en que pretenden
involucrarnos los que desgobiernan a partir de cánones
como los sustentados actualmente en el artículo 27, el cual
se funda en el paradigma reinante.
Un primer acercamiento al tenor de la
fundamentación jurídica neoliberal en
el manejo de la política petrolera y su
repercusión en los ejidos y comunidades
Cinco son los parámetros o iguras jurídicas “híbridas”
que asumen los “intelectuales” orgánicos del capital para
supuestamente justiicar la desposesión de los ejidos y
comunidades y en su caso ensanchar el capital privado en
la nueva geografía de las explotaciones petroleras.
Especíicamente la adecuación constitucional y la nueva
Ley Reglamentaria en materia de Hidrocarburos8 mencionan
como epicentro de la afectación campesina las siguientes
iguras jurídicas:
a) La ocupación. Intervención por parte ya sea de Pemex
o fundamentalmente de particulares (transnacionales y
empresarios mexicanos) en la supericie, ya sea, ejidal,
comunal, privada, y de las áreas naturales protegidas, entre
otras del orden federal9, o inclusive y en menor medida
de las colonias. La cual supone la nueva ley puede ser,
parcial, total y temporal o permanente dependiendo de
la asignación que haya “migrado” Pemex, vía contrato
con particulares, nacionales o extranjeros. Párrafos atrás
interrogábamos a cerca del fundamento legal de esta igura,
la cual sería inexistente en relación a que las asignaciones
como acto jurídico -administrativo- no pueden ser ejercidas
por particulares, además de que se contrapone con los
derechos fundamentales de cientos de miles de campesinos e
Enrique Peña Nieto. Ley de Hidrocarburos. Diario Oicial de la Federación del
11 de agosto de 2014. En: SEDATU. Marco Legal de la Reforma Energética.
Centenario de la Ley Agraria del 6 de enero de 1915, Ed. SEDATU/Procuraduría
Agraria. México 2015.
9
Es importante señalar que como ya ha venido ocurriendo, prácticamente desde
el sexenio de Salinas de Gortari (tómese como ejemplo el que corresponde a la
Petroquímica de “Pajaritos” en Coatzacoalcos Veracruz, acreditada a particulares y
en la que por cierto recientemente fallecieron más de una treintena de trabajadores),
además de los diversos servicios que competen a Pemex, la nueva Ley contempla
la adquisición de los pozos en funcionamiento y su diversa infraestructura, de ahí
que el carácter otrora inalienable como bienes de la Nación tiendan a subsumirse
al interés transnacional.
8
Territorio y reforma energética su impacto en los pueblos campesinos e indígenas de México
indígenas, y por no situarse en el ejercicio de la ocupación
a partir del debido sustento relativo a la consulta ecológica
(consulta popular) o medio ambiental, o en el caso de los
pueblos indígenas, a la consulta previa e informada, y
por qué además, la agricultura que aplican los pueblos
y comunidades, tiene una función pública y cumple una
evidente función social, justiicando y legitimando su
permanencia, frente a intereses particulares de alrededor de
80 transnacionales y empresarios mexicanos que aducen un
sentido general y “legítimo” de la norma petrolera en que
se funda la supuesta ocupación y en cuyo caso, contrario
sensu a la dinámica gubernamental, es indispensable
establecer prioridades en términos de la utilidad pública
y la función social, respecto de la agricultura y el petróleo
en términos de las transnacionales y de toda la sociedad
mexicana.
b) Afectación. Formulación que evidentemente implica
un cambio en el régimen de propiedad rural en el que no
sólo puede corresponder a las áreas en común de un ejido o
comunidad, sino que según sean los polígonos (los que por
cierto aún no están del todo deinidos), o la cartografía que se
diseñe para las explotaciones petroleras y mineras, acorde con
los cánones impuestos por la Sener vía la comisión nacional
de hidrocarburos, pueden afectar zonas urbanas, de ejidos
y comunidades, infraestructura agrícola, bodegas, silos,
caminos, calles, urbanización, y aún áreas que conforme a la
actual Ley agraria mantienen su condición de inalienabilidad,
inembargabilidad, e intransmisibilidad (parcelas escolares, o
Unidades agrícolas e industriales para la mujer) salta a la vista
la interrogante acerca del interés que deberá prevalecer y en
donde existen evidentes lagunas de la Ley.
En el caso de los pueblos indígenas, además de lo consignado
en el Convenio 169 de la Organización Internacional del
Trabajo (OIT), y en el que es extensivo el criterio inherente
a la inalienabilidad de sus territorios, aspecto que de igual
forma consigan, tanto el artículo 27 Constitucional como
la Ley agraria vigente, de manera particular dicho tratado
internacional, (el que irónicamente correspondió ratiicar
a Salinas de Gortari ), advierte espacios que culturalmente
guardan características particulares, como lo son, los
centros ceremoniales, panteones, lugares sagrados, y que se
enmarcan en los principios que forjan a la autodeterminación
y autonomía de los pueblos de referencia, esto no solamente
sustentado bajo la óptica no hegemónica o estatal, sino
insistimos, bajo la convencionalidad, lo cual determina que
nos encontramos frente a dos intereses disímbolos, respecto
de los cuales se requiere establecer de cara a la Nación un
profundo debate por lo que esto implica.
139
c) Servidumbre en materia agraria. Si bien esta figura
jurídica con antecedentes muy remotos y fundada en el
derecho de gentes, o civil en Roma, constituye una de las
instituciones que de alguna forma se han adaptado al régimen
de propiedad rural subyacente en el agro mexicano y cuyas
características aducen a la facultad de dominio público
y general en tareas que le son asignadas al Estado en sus
diversas manifestaciones, trátese del gobierno centralizado
o paraestatal, así ha sido común establecer servidumbres
como el derecho de vía de paso por comunidades y ejidos,
como son los tendidos férreos, autopistas, caminos vecinales,
echados eléctricos, ductos petroleros etc.
d) Sin embargo, como así lo veremos, la manera en que
está planteada la “nueva servidumbre” puede implicar la
ocupación geográica total, del propio ejido y/ o del pueblo
indígena de que se trate, a través de la infraestructura
petrolera, viviendas de los trabajadores, urbanización
acorde con la petrolización, incluyendo la ediicación de
pozos, etcétera, lo que en un momento determinado puede
determinar la ocupación completa de la extensión territorial
de dichas unidades de producción ejidales y comunales.
De forma tal que, desde la doctrina, la jurisprudencia,
incluyendo la especíicamente agraria10, se denota que el
carácter formal de la servidumbre ha sido rebasado, en virtud
de que la inserción del capital transnacional, es integral y
no se reiere a la otrora formulación de un derecho de vía
de paso11, sino a la plena intervención de los derechos del
10
Increíblemente y no obstante lo preceptuado en la Ley Orgánica de los Tribunales
Agrarios, que dan pauta a que los Tribunales en materia agraria sean generadores
de jurisprudencia, no se ha proveído por esta institución la debida sistematización
de dicha fuente emisora de derecho, esto no obstante de la cantidad de tesis que
por centenas han sido emitidas desde hace más de tres décadas por los tribunales
de referencia. Resulta inverosímil que la fundamentación de la justicia agraria
se limite a citar a la (“vieja”) Jurisprudencia emitida por la Corte, cuando en los
hechos la reforma de Carlos Salinas le dio el carácter de “tribunales especiales” al
ubicarlos por fuera del Poder Judicial, y cuyo in en su momento fue evidente, al
facilitar el mercado de tierras a partir de lo que el Estado denominó la búsqueda de
la certeza jurídica a través de la “aplicación de una justicia agraria expedita”. Este
fenómeno que amerita un profundo estudio advierte que detrás de esta aparente
inoperancia existe la fragilidad en que se ubica la administración de la justicia
agraria mexicana y enmarca a qué intereses corresponde su ejecución.
En otras palabras, en el momento en que se sistematicen quizás miles de
jurisprudencias subyacentes en los tribunales podrían dar un cauce distinto – social
- a la administración de la justicia.
11
La Ley de Derecho Civil de Galicia recoge la igura de la servidumbre y la regula en
los Art. 76 a 81. Es una igura jurídica que antes de la Ley de Derecho Civil de Galicia
ya tenía una gran importancia consuetudinaria. El Art. 76 la deine como: Paso o
camino privado de titularidad común y sin asignación de cuotas, cualquiera que
sea lo que cada uno de los usuarios o causantes hubiera cedido para su constitución,
que se encuentra establecido sobre la propiedad no exclusiva de los colindantes y
que tienen derecho a usar, disfrutar y poseer en común a efectos de paso y servicio
de los predios. No es necesario que exista un predio dominante y otro sirviente, a
diferencia de la servidumbre de paso, lo fundamental es el desconocimiento del
dominio o identidad individualizada del camino o vía colindante.
140 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Carlos Humberto Durand Alcántara y Marcela Suárez Escobar
otro régimen de propiedad preexistente (ejidal y comunal).
Sin embargo, en la lógica neoliberal parece que el lenguaje
jurídico puede trascender a las formas de su lógica jurídica,
en cuanto a fondo y forma y no sólo ello, sino que también el
Estado mínimo trata de “tender puentes jurídicos”, a través
de híbridos o instituciones que no corresponden a su forma
tradicional, para inalmente viabilizar el acceso del capital.
la naturaleza que no tendría precedente. El suelo rural es
irrecuperable en virtud de que se trata de material orgánico
(humus por su nombre cientíico) que se conformó al paso
de millones de años, de manera que pensar que será factible
indemnizar a los ejidatarios o indígenas, (por más expertos
que resulten los valuadores), resulta una ironía ya que el
suelo agrícola desaparecerá.
e) Expropiación. Contrario sensu al peril del que les dotó
el Estado Benefactor, sobre todo durante el cardenismo
esta institución que guarda sus orígenes de igual forma en
el derecho romano, advirtió la afectación de los intereses
contrarios a la Nación, como así aconteció con centenares
de Latifundios que fueron expropiados por causa de utilidad
pública, a través de la aplicación de la Reforma Agraria, sin
embargo, en las tres últimas décadas esta igura ha permitido
la afectación de centenares de ejidos y comunidades en
beneicio del capital transnacional.
Compra. Corresponderá en el contexto ejidal en ciertos
espacios de los hoy denominados asentamientos humanos,
áreas en común, parcelas y derechos alícuotos en aquellos
que tengan el régimen colectivo. Lo cual también puede
aplicarse en el caso de las colonias, y de la propiedad privada
(pequeña propiedad) en virtud de la existencia de derechos
reales que advierten la posible transmisión del régimen de
propiedad del suelo.
En la actual coyuntura (año 2016), la prospectiva de esta
institución se perila de manera tangencial, en el sentido
de que toda expropiación implica necesariamente, la plena
justiicación de la utilidad pública, la que, desde nuestro
punto de vista, la ubicamos de forma confrontada entre
intereses de la población campesina cuya función social de
sus tierras, justiica en buena medida, la condición general de
la utilidad pública, y de sus derechos humanos fundamentales.
Y en el caso de las transnacionales petroleras y empresarios
nacionales cuyo criterio es evidentemente el de sus ganancias,
la obtención de plusvalía y sobre todo el manejo de la renta
petrolera, observamos que su manejo del suelo es debatible,
en términos de la función social y de beneicio que exista para
la sociedad mexicana. De ahí que la postura que justiica el
acto expropiatorio guiado por estos argumentos constituya
un atentado a las economías campesinas.
Un aspecto soterrado en la reforma petrolera corresponde al
pago o indemnización, quizás este es un aspecto medular por el
cual, para el Estado aparentemente será “más sencillo afectar,
u ocupar los territorios ejidales y comunales”, en virtud de
que sólo exige al particular empresario a un pago nimio que
implica dicha igura, además de un pequeño excedente que
converge en el marco de las ganancias obtenidas.
Otro ámbito indemnizatorio corresponde a posibles daños
que ocasionen los inversionistas al medio agrario, o la
infraestructura impactada, en ejidos y comunidades lo
que no obstante la amplia explicación que sustenta la ley
de hidrocarburos, existe tanto un impacto social como de
Esta igura que en apariencia corresponde a una “simple
compraventa” puede incorporar diversos problemas, que
van en el caso del ejido, desde el dominio pleno de la parcela,
por parte del ejidatario, el cual depende de las asambleas
mayoritarias o “duras”, de los ejidos, por tratarse de una
persona moral. Hasta, la subsistencia de los avecindados
respecto de quienes subyacen derechos inherentes a sus
casas y solares en el área de asentamientos humanos o zona
urbana ejidal.
Y lo más candente de las relaciones de propiedad ejidal,
se ubica en relación con los posesionarios, que debido
a “prácticas clientelares” (curiosamente ligadas al PRI,
vía la Confederación Nacional Campesina (CNC), así
como a ciertos comisariados ejidales convertidos en
caciques regionales, a la Liga de Comunidades Agrarias,
más recientemente antorcha campesina) permitieron el
asentamiento de gigantescas áreas hoy ocupadas en el marco
de los más de 31 mil ejidos por posesionarios que han sido
en algunos casos reconocidos por el Estado neoliberal12.
Bajo los cánones mencionados se hace patente si acaso la
“petrolización” de la ruralidad mexicana es la vía por la
que deberá de transitar el Estado mínimo, y en donde cabría
razonar también, en sentido inverso, es decir, considerar
primigeniamente a los propios ejidos y comunidades
como potencialmente acreedores a ser “migrantes de las
asignaciones” que hoy profesa el Estado, que si bien puede o
no ser el proyecto que deinan los pueblos indígenas y ejidos,
Conforme a datos de Héctor Robles Berlanga, situados en el Marco de los
Censos agropecuarios de 2007, encontramos: Un millón 447 mil posesionarios
y dos millones 447 avecindados. Cf. Del autor. www.subsidiosalcampo.org.mx
(Consulta julio 24 de 2016).
12
Territorio y reforma energética su impacto en los pueblos campesinos e indígenas de México
también constituye un presupuesto constitucional, en esta
tesitura encontramos: … “bajo criterios de equidad social,
productividad y sustentabilidad se apoyará e impulsará a
las empresas de los sectores social” (…)13, es evidente que
más allá de la simple interpretación jurídica se encuentra
básicamente el proyecto de un país democrático y el cual
sin lugar a dudas también puede encontrar sus simientes en
la mayoría poblacional.
En el contexto del análisis en cuestión observamos que la
vertiente transnacional y empresarial en que se colocan las
tierras ejidales y comunales se enmarcan dos percepciones
jurídicas las cuales, según la ley, cumplen la función social
y la utilidad pública, como así corresponde a la agricultura y
las explotaciones petroleras; sin embargo, cuestionamos de
nueva cuenta ¿en qué medida la renta petrolera constituirá
un beneicio para la Nación, cuando su iniciativa emerge
desde los centros de poder hegemónico? y ¿de qué manera
la agricultura reditúa en beneicio general de los productores
del campo y de la propia Nación?
Pero, además, desde nuestros mejores doctrinarios
abocados al derecho constitucional, administrativo y
agrario encontramos que entre otros, el criterio de legalidad
de cualquier norma se funda en ser general, el Artículo 25
plantea:
(…)
“impulsará a las empresas de los sectores social y privado
de la economía, sujetándolos a las modalidades que dicte
el interés público y al uso, en beneicio general” (…).
De ahí que ante el carácter impositivo del cual emergió
esta reforma deberá de ser necesariamente reformulado
su debate y debido encuadramiento, en el marco de la
legalidad que establece el derecho nacional.
Conclusiones
Más allá, de los posibles impactos en que puede derivar
la aplicación de la nueva política petrolera, no existe en la
adecuación constitucional indicador alguno que considere
de forma congruente al régimen de propiedad agrario que
pretende afectar y mucho menos a los signiicados en que
ubicará a las áreas naturales protegidas (ANAPRO) que
también resultarán afectadas. Valga precisar inclusive que
Artículo 25. Constitución General de los Estados Unidos Mexicanos. Porrúa,
2016.
13
141
ni siquiera el marco conceptual que incorpora dicha ley
que fue publicada el 11 de agosto de 2014, se reiere a los
principales afectados, tanto individuales como colectivos,
y que pretende desposeer el Estado, como asentábamos;
los campesinos, ejidatarios, comuneros, indígenas,
pescadores, aparceros, posesionarios, avecindados,
auténticos pequeños propietarios, medieros, jornaleros,
colonos y los pueblos indígenas, aspecto que, rompe la
convergencia de las garantías individuales y de los derechos
humanos contenidos en nuestra legislación así como en
los tratados internacionales que le son aplicables al caso.
Parece que nuestros brillantes tecnócratas creadores de
leyes olvidan que más allá de cualquier implicación de
orden ideológico o cultural, el ejido y los pueblos indígenas,
como personas morales o jurídicas con personalidad
jurídica y patrimonio propios guardan por substancia y
técnica jurídica deiniciones que son históricas y producto
de un decreto que fue promulgado por el Presidente de la
República, ya sea para la creación de los ejidos y en su caso,
para haber restituido o conirmado y titulado a los pueblos
indígenas de México, y en cuyo tema ninguna disposición
o ley reglamentaria, como así se pretende en este caso con
la de hidrocarburos, puede facultar simple y llanamente a
particulares para que sustenten mediante un contrato (y ni
siquiera “sugerirlo”) la intervención territorial en los ejidos,
comunidades, pueblo indígena, ranchería, barrio, caserío u
otro que se enmarque en el agro.
En esta tesitura y volviendo al carácter social y al in que
debe guardar el régimen de propiedad, puntualizamos que
suponiendo que lleguen a operar las petroleras, por tratarse
de un beneicio para todos los mexicanos, ¿de qué manera
le podrán resarcir, ya no digamos a los pueblos afectados,
a los ejidos a las comunidades los daños generados al suelo
rural, cuando en los hechos se sabe que en algunos casos
serán ocupados 100%, y en donde el suelo, o el denominado
científicamente “humus” en el que se desarrollan las
actividades rurales es producto de millones de años para su
existencia?, por otro lado, ¿de qué forma le podrán pagar
las transnacionales a partir de su enriquecimiento, a todo el
planeta el daño que le están causando a la Tierra?
Evidentemente no existe precio, así la decantada ley de
hidrocarburos dentro de sus sutiles apreciaciones señala
que según sea la ocupación del espacio, (supericie), la
temporalidad, o afectación de recursos etc., se tornará el
pago a manera de indemnización para el ejido o comunidad
indígena de que se trate. Cualquier argumento supuestamente
compensatorio que sustente la reglamentación de esta ley
142 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
resultará “inocente”, para los trabajadores del campo ya que
remembrando al Jefe Seattle ningún pueblo de México, ha
dispuesto por convicción sus tierras en el mercado.
Y en materia de compensación a la explotación petrolera
el Estado, vía Secretaría de Energía (SE) y la comisión
nacional de hidrocarburos, señala que se pagará entre el .5
y hasta 2%14 del total de hidrocarburos que se obtengan por
parte de cada asignatario o transnacional, a los ejidatarios
e indígenas, una vez más estamos frente a la lógica
profundamente asimétrica y vergonzante que advierte
nuevos trazos de reproducción ampliada del capital en
beneicio de unos cuantos.
Más allá de los diversas garantías y derechos humanos
que se violan en el marco constitucional con los aspectos
ya trazados de la llamada reforma estructural en materia
petrolera, resulta de igual forma trascendente, situar
ciertos aspectos, por lo que hace a lo señalado por el VIII
Congreso de las Naciones Unidas para la prevención
del delito, que se emitió en Milán, Italia en el año de
1985, acerca de la declaración sobre los principios
fundamentales de justicia para las víctimas del abuso del
poder conforme al cual:
“Artículo 18. Se entenderá por víctimas las personas
que, individual o colectivamente, hayan sufrido daños,
inclusive lesiones físicas o mentales, sufrimiento emocional,
pérdida inanciera o menoscabo sustancial de sus derechos
fundamentales, como consecuencia de acciones u omisiones
que no lleguen a constituir violaciones del derecho
penal nacional, pero violen normas internacionalmente
reconocidas relativas a los derechos humanos”.
Conforme a esta fundamentación el ejecutivo en turno
publicó en el Diario Oficial de la Federación el 10 de
enero de 1994, la sustentación jurídica respecto de la
cual el Estado mexicano asume (…) de manera directa y
solidaria la responsabilidad derivada de los daños, tanto
materiales, como morales, causados dolosamente por sus
14
Valga tan sólo por mencionar un ejemplo, la experiencia obtenida en lo relativo
a la materia minera. En su intervención ante el Foro Nacional Minero “Los
conlictos socio ambientales provocados por el modelo extractivista; procesos
de resistencia y la responsabilidad del Estado mexicano”, que se organizó en la
Universidad Iberoamericana, Ciudad de México, los días 30 y 31 de mayo, de
2016, el especialista e investigador sobre la cuestión minera Miguel Mijangos Leal,
explicó que de lo que supuestamente deberían de brindar las empresas mineras y el
Estado a los pueblos y municipios afectados, solamente se entrega un aproximado
del 10%, es decir, que ni siquiera dentro de las ínimas aportaciones que van del
2,5 al 6,5, se les dota a los ejidos y comunidades afectadas, lo que legalmente
corresponde. Por otro lado, al decir del especialista, si canalizamos lo pagado no
alcanzaría “ni siquiera para dotar de drenaje a alguno de los municipios” afectados.
Carlos Humberto Durand Alcántara y Marcela Suárez Escobar
agentes o representantes; tal responsabilidad comprende el
pago de perjuicios, el daño moral se presume si se prueba
la realización del acto ilícito mediante el cual se le causó,
aun cuando no se pruebe el daño mismo; se establece la
obligación de asignar una partida presupuestal para encarar
tal responsabilidad, se simpliican y amplían los mecanismos
legales para lograr el pago de indemnizaciones por daños
derivados de actuaciones ilícitas de servidores públicos,
pudiendo reclamarse mediante el ombudsman15.
Literatura citada
Berrón Gonzalo y Brennan Brid. Tratado internacional de los pueblos
para el control de las empresas transnacionales. Diciembre
2014. http://www.stopcorporateimpunity.org/wp-content/
uploads/2015/02/PeoplesTreaty-ES-dec2014 1.pdf.
Buci Glucksmann Christine. Gramsci y el Estado. Hacia una teoría
materialista de la historia. Ed. Siglo XXI. Madrid España. 1978.
Constitución General de los Estados Unidos Mexicanos. Porrúa, 2016.
15
Dada la complejidad en que ha colocado el capital transnacional a diversos
Estados se ha generado prácticamente desde hace dos lustros un debate inherente
a los casos que compete a su inserción a nivel planetario en diversos ámbitos que
conciernen a los bienes naturales, en nuestro caso los que competen en particular
a la energía eléctrica, los energéticos, el agua, la minería, entre otros, este aspecto
ha derivado en la veriicación de diversidad de foros, cumbres, congresos y como
tal se ha rescatado el denominado: Tratado de los pueblos para el control de las
empresas transnacionales.
“El objetivo central de esta iniciativa es someter la arquitectura jurídico-política que
sustenta el poder de las empresas transnacionales, a normas y reglas de protección
de los derechos humanos.
Es un tratado diseñado fuera de la lógica jurídica clásica del Derecho Internacional.
Son numerosas las fuentes institucionales, sociales, sindicales, de tribunales de
opinión y de las propias comunidades afectadas, que han constatado la persistencia
de las sistemáticas violaciones de los derechos humanos en un régimen de
permisividad, ilegalidad e impunidad generalizada en los comportamientos de
las empresas transnacionales.
El Tratado pretende recoger la experiencia acumulada de las diferentes luchas
contra las empresas transnacionales, contra los Estados e instituciones inancieras
cómplices. Es un trabajo colectivo.
Las propuestas de los movimientos sociales y de las comunidades deben tener
preeminencia en los debates jurídicos y poder interpretar y proponer normas al
Derecho Internacional de los Derechos Humanos ‘desde abajo’.
El debate entre lo técnico y lo político toma plena actualidad en la caracterización
del control de las empresas transnacionales. El lenguaje de los conocimientos
especializados de los abogados oculta el carácter político de su intervención y de
la representación de los intereses hegemónicos y tiende a suplantar o tergiversar
la participación de las organizaciones sociales, movimientos y comunidades.
La simpliicación de la realidad basada en capacidades técnicas, competencias y
procesos efectivos junto al control del conocimiento no puede marcar el devenir del
Tratado. De ahí que las propuestas alternativas de control de las multinacionales no
puedan ser asunto exclusivo de despachos de abogados, ni de expertos en cuestiones
internacionales, sino que son, fundamentalmente, propuestas desde la base. Avanzar
hacia un Tratado de control de las transnacionales exige confrontación y una lógica
normativa constituyente muy diferente”.
Cfr. Gonzalo Berrón y Brid Brennan Tratado Internacional de los Pueblos para
el Control de las Empresas Transnacionales, diciembre 2014. En http://www.
stopcorporateimpunity.org/wp-content/uploads/2015/02/PeoplesTreaty-ESdec2014 1.pdf. consulta 1 de junio de 2016.
Territorio y reforma energética su impacto en los pueblos campesinos e indígenas de México
Mijangos Leal Miguel. Foro nacional minero. “Los conlictos socio
ambientales provocados por el modelo extractivista; procesos
de resistencia y la responsabilidad del Estado mexicano”,
Universidad Iberoamericana, Ciudad de México, mayo, de 2016.
Peña Nieto Enrique. Ley de hidrocarburos. Diario Oicial de la Federación
del 11 de agosto de 2014. En: SEDATU. Marco legal de la
reforma energética. Centenario de la Ley Agraria del 6 de enero
de 1915, Ed. SEDATU- Procuraduría Agraria. México 2015.
Rielo Fernando. Un diálogo a tres voces. Libro de entrevistas por MarieLise Gazarian. Nueva York, 1993, FFR. Madrid, 1995.
Robles Berlanga Héctor. Censos agropecuarios.www.subsidiosalcampo.
org.mx. Consulta julio 24 de 2016.
143
SEDATU- Procuraduría agraria… Decreto por el que se reforman y
adicionan diversas disposiciones de la Constitución Política de
los Estados Unidos Mexicanos. In: marco legal de la reforma
energética. Centenario de la Ley Agraria del 6 de enero de 1915,
Ed. SEDATU/Procuraduría Agraria. México 2015.
Sikkink. Kathryn. La cascada de la justicia. Cómo los juicios de lesa
humanidad están cambiando el mundo de la política. Gedisa.
Barcelona. 2013.
Vargas Rocío. “La reforma energética: a 20 años del TLCAN”. Revista
Problemas del Desarrollo UNAM, vol. 46, enero- marzo de 2015.
Vera Rodrigo. “Rechazo popular” en Revista Proceso No 1923, septiembre
de 2013.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 145-151
Etica planetária e uso sustentável da
natureza pelos povos indígenas
Thais Luzia Colaço1 y Fernando da Silva Mattos2
Departamento de Direito-Universidade do Extremo Sul Catarinense-UNESC. thaisluziacolaco@gmail.com. 2Ministério Público do Estado do Paraná. fsmattos@
live.com.
1
Resumo
A sociedade contemporânea está passando por um momento
de ápice da crise ambiental, tal situação somente será
amenizada com uma transformação radical na relação
(espiritual/material) do ser humano com a natureza. Partese do pressuposto de que somente com a mudança de
subjetividades será possível haver uma maior preservação
ambiental. E tal mudança deve partir da consideração de que
a prática tradicional do uso sustentável da natureza pelos
povos indígenas, é tida, para os ins do presente trabalho,
como uma ética holística compatível com os mandamentos
da ética “planetária” do pensador Edgar Morin.
volvimento de práticas especíicas que tendam a modiicar
e a reinventar maneiras de ser no âmbito da vida cotidiana.
Ou seja, reconstruir o conjunto das modalidades do “ser em
grupo”, da convivência entre os seres humanos. Segundo
airma, não bastam somente intervenções “comunicacionais”
mas também modiicações existenciais atinentes à essência
da subjetividade. (Guattari, 2012: 15-16).
Introdução
Dessa forma, mudanças de ordem política e social não podem
vir desacompanhadas de uma mudança das subjetividades.
Reformulações e reconstruções de mentalidades, conceitos
e princípios éticos se apresentam como condições
indispensáveis para a ruptura com o agravamento da crise
ambiental. Até porque a própria “deinição do que seja
natureza depende da percepção que temos dela, de nós
próprios, e, portanto, da inalidade que daremos a ela”
(Carvalho, 2003: 13).
A sociedade contemporânea está passando por um momento
de crise ambiental em grandes proporções nunca vistas antes
na História, tal situação somente será amenizada com uma
outra relação (espiritual/material, individual/coletivo) do
ser humano com a natureza. Guattari chama de “ecosoia” a
articulação necessária entre três registros ecológicos (o do meio
ambiente, o das relações sociais e o da subjetividade humana)
como condição para enfrentamento da crise ambiental.
Assim, parte-se do pressuposto de que somente com a
mudança de subjetividades será possível haver uma maior
preservação ambiental. E tal mudança deve partir da
consideração de que a prática tradicional do uso sustentável
da natureza pelos povos indígenas, é tida, para os ins do
presente trabalho, como uma ética holística, compatível
com os mandamentos da ética planetária do pensador
contemporâneo Edgar Morin contidos em sua obra “o
método: ética”.
O mencionado pensador enfatiza a importância da
modiicação das essências das subjetividades humanas, o
que denomina “ecosoia social”, que consiste no desen-
Espera-se, demonstrar que muito mais importante do que
o incremento de técnicas modernas de desenvolvimento
sustentável, é a observância dos conhecimentos tradicionais
Palavras-chave: ética planetária; sustentabilidade
ambiental, povos indígenas.
146 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
das comunidades indígenas, na sua relação espiritual e
material, individual e coletivo, exitosos em questões de
preservação ambiental e uso sustentável da natureza. Nesse
cenário, imperioso que haja um reencontro com a relação
entre passado, presente e futuro.
Aéticaplanetária:dalógicadodesenvolvimento
para a lógica da preservação
A expressão “Tempo é dinheiro” relete bem a relação que
a sociedade contemporânea estabelece com o tempo. Não
utilizar adequadamente o tempo no sistema capitalista
globalizado é perder dinheiro, deixar de gerar lucro.
Conforme salienta Bauman (2007: 16-17), o “progresso”,
que já foi uma promessa de felicidade universal permanente
e compartilhada, se afastou totalmente em direção ao polo
oposto. Ao invés de augurar a paz e o sossego, pressagia
somente a crise e a tensão, impedindo que haja um momento de
descanso, pois um momento de desatenção resulta na derrota
irreversível e na exclusão irrevogável. Em vez de grandes
expectativas e sonhos agradáveis, o “progresso” invoca uma
insônia cheia de pesadelos de “ser deixado para trás”.
Para Bauman, citando Castel (2007: 63), a sociedade
moderna tem vivido sobre a areia movediça da contingência,
substituindo as comunidades e corporações estreitamente
entrelaçadas, que no passado deiniam as regras de proteção
e monitoravam sua aplicação, pelo dever individual do
interesse, do esforço pessoal e da autoajuda. Seguindo
essa lógica desenvolvimentista, pensa-se atualmente em
preservação do meio ambiente de forma dissociada do
passado e do futuro. Exemplo disso são as denominadas
“unidades de conservação da natureza”.
No cenário geopolítico contemporâneo, instituindo-se
“unidades de conservação da natureza”, determinadas áreas
são isoladas a im de que não tenham mais contato pleno com
os seres humanos e não ingressem na relação economicista
que estes estabelecem com o tempo. Vive a humanidade,
assim, dupla relação com o tempo. Uma economicista
e outra ambiental. A primeira vê no tempo uma fonte de
dividendos, algo a ser explorado ao máximo a im de gerar
cada vez mais lucro. A segunda considera o tempo presente
como algo a ser perenizado, intocado, preservado e possível
de ser visualizado no futuro, preponderantemente por razões
estéticas e de fomento ao turismo.
Thais Luzia Colaço y Fernando da Silva Mattos
Nesse contexto, alerta Diegues (2007: 4) para os riscos de
tal visão separatista de criação de espaços de conservação
ambiental, airmando que os parques nacionais acabam
representando um “hipotético mundo natural primitivo”,
intocado, mesmo que considerável extensão já tenha sido
gerida por populações tradicionais durante gerações, o que
acaba por criar paisagens mistas de lorestas já transformadas
e outras que raramente sofreram intervenções por partes
dessas mesmas populações tradicionais. Tais espaços
lorestados constituídos dessa forma são, então, paisagens
em grande parte resultantes da ação humana, o que é
resultado de uma política conservacionista equivocada que
transforma esses lugares em não lugares. Airma que, como
manda o manual neoliberal, a expulsão das populações
tradicionais abre espaço para que esses não lugares sejam
utilizados para pesquisa das multinacionais ou de convênios
entre entidades de pesquisa nacionais e internacionais para,
após, serem “privatizados”, o que, inclusive, justiica o fato
de que as grandes entidades conservacionistas internacionais
e os governos associem de forma tão íntima a conservação da
biodiversidade e as áreas protegidas vazias de seus habitantes
tradicionais e de sua cultura.
De forma diversa, como enfatiza Morin (2011a: 108), as
sociedades tradicionais sempre valorizaram a inter-relação
entre passado, presente e futuro, vivendo seu presente e
seu futuro sob as ordens do passado. Impensável seria,
por exemplo, a criação de Unidades de Conservação da
Natureza pelas comunidades indígenas quando habitavam
exclusivamente o território brasileiro, a título de exemplo.
A preservação da natureza para as comunidades indígenas
tradicionais é algo inerente ao tempo da sua própria vida, não
podendo ser isolada num espaço físico-temporal separado
das suas relações sociais e espirituais, pois, conforme ensina
Diegues (2007: 2-3):
[...] para estas últimas, não existe uma classiicação dualista,
uma linha divisória rígida entre o “natural” e o “social”,
mas sim um continuum entre ambos. Assim, Descola
(1997) sugere que para os Achuar da Amazônia, a loresta
e as roças, longe de se reduzirem a um lugar de onde se
retiram os meios de subsistência, constituem o palco de
sociabilidades diversas onde convivem seres humanos, a
lora e a fauna. Para eles, o que consideramos natureza são
alguns seres cuja existência é tida como maquinal e genérica.
Mais ainda, para muitos grupos indígenas, os humanos
podem tomar-se animais e estes converter-se em humanos.
Nesse sentido, ainda segundo Descola, as cosmologias
indígenas amazônicas não fazem distinções ontológicas
Etica planetária e uso sustentável da natureza pelos povos indígenas
entre humanos, de um lado, e um grande número de animais
e humanos de outro. O autor enfatiza a ideia de interligação
entre essas espécies, ligadas umas às outras por um vasto
continuum, governando pelo princípio da sociabilidade,
onde a identidade dos humanos, vivos ou mortos, das plantas,
dos animais e dos espíritos é completamente relacional e,
portanto, sujeita a mutações.
Essa conexão dos indígenas com a natureza resultou num
manejo respeitoso dos recursos naturais, possibilitando sua
maior preservação. Nestes termos:
Basta observarmos as riquezas estratégicas que se
encontram nos territórios indígenas, dos quais eles são não
apenas donos, mas principalmente guardiões e aguerridos
defensores. A principal delas, e com a qual os povos
indígenas contribuem para a riqueza socioeconômica do
país, é a megabiodiversidade existente em suas terras, que
representam quase 13% do território brasileiro, a maior parte
totalmente preservada. Fotos de satélites mostram que as terras
indígenas são verdadeiras ilhas de lorestas verdes rodeadas
por pastos e cultivos de monoculturas, com a predominância
da soja. Esta não é apenas uma riqueza dos índios, mas de
todos os brasileiros e dos viventes do planeta, na medida em
que são lorestas que contribuem para amenizar os graves
desequilíbrios ambientais da Terra nos tempos atuais. Por
esta razão, o Brasil e o mundo deveriam contribuir para que
os povos indígenas continuassem a proteger essa imensurável
riqueza vital. (Luciano, 2006: 219).
Josafá Carlos de Siqueira (2002: 23) ressalta a inexistência
de dualismo entre homem e natureza nas sociedades
tradicionais, airmando que a terra não pertence ao homem,
mas o homem que pertence a terra, pois há uma verdadeira
simbiose intimamente relacionada entre o espaço geográico
e as formas bióticas e abióticas. A terra é a mãe geradora da
vida e não apenas o lugar onde se desenvolvem as múltiplas
relações entre o cosmológico e o antropológico. Ressalta
ainda que “nessa íntima relação entre terra-homem é que
se torna antiética qualquer atitude agressiva de venda e
destruição da terra, pois tudo o que agride a terra é também
uma agressão ao homem”. (Siqueira, 2002: 23).
147
e frutas nativas, está profundamente relacionada com as
estações do ano. Também existe uma unidade entre ritmos
naturais e ritmos sócio-antropológicos, tanto na economia
e saúde, como nas festividades e celebrações rituais. Ao
contrário de nós que na agitação da vida moderna já não
somos capazes de perceber uma lua cheia ou uma mudança
de estação, os povos dos ecossistemas continuam airmando
seu ethos histórico numa relação ética mais integradora e
contemplativa. (Siqueira, 2002: p. 25).
Corroborando os aspectos mencionados, tem-se a entrevista
concedida pelo indígena Davi Kopenawa Yanomami
à Revista Trip (2012). Considerado uma das maiores
lideranças indígenas brasileiras, responde à pergunta “Qual
a diferença entre a forma de o povo indígena ver a natureza
e a terra e a forma que os outros veem?” da seguinte forma:
Nós somos bem diferentes. O povo da terra é diferente.
Napë, o não índio, só pensa em tirar mercadoria da terra,
deixar crescer cidade... Enquanto isso o povo da terra
continua sofrendo. Olha aqui em volta [aponta para
território Yanomami ao sul de Boa Vista, o qual estávamos
atravessando], tudo derrubado. Fazendeiro desmata para
criar boi, vender pra outros comer e ele ganhar dinheiro.
Aí pega dinheiro e continua desmatando, criando boi,
abrindo mais fazendas... Napë só pensa em dinheiro, em
botar mais madeira ou o que for pra vender, negociar com
outros países. Nós pensamos diferente. A beleza da terra é
muito importante pra nós. Do jeito que a natureza criou tem
que ser preservado, tem que ser muito cuidado. A natureza
traz alegria, a loresta pra nós índios é muito importante. A
loresta é uma casa, e é muito mais bonita que a cidade. A
cidade é como papel, é como esse carro aí na frente: branco,
parece um papel jogado no chão. A loresta não, a loresta
é diferente. Verde, bonita, viva. Fico pensando... por que
homem branco não aprende? Pra que vão pra escola? Pra
aprender a ser destruidor? Nossa consciência é outra. Terra é
nossa vida, sustenta nossa barriga, nossa alegria, dá comida
é coisa boa de sentir, olhar... é bom ouvir as araras cantando,
ver as árvores mexendo, a chuva.
Ademais, os ritmos da natureza determinam a vida das
comunidades indígenas, pois:
São concepções amparadas pelo denominado novoconstitucionalismo latino-americano, diversas daquelas que
orientam as relações do homem com a natureza na sociedade
ocidental contemporânea.
O verão motiva as grandes caçadas, o inverno condiciona
um trabalho mais agrícola e artesanal. Toda a luta de
sobrevivência na caça, na pesca, na colheita de mel, de raízes
Com efeito, o novo-constitucionalismo latino-americano
possui uma feição ecocêntrica, reconhecendo direitos à
natureza bem como o que denomina de buen vivir. Bolívia
148 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
e Equador figuram como países irradiadores de tais
concepções autenticamente latino-americanas, cujas
constituições de 2009 e 2008, respectivamente, incluíram
os povos indígenas e outros grupos historicamente
marginalizados como construtores de uma nova forma de
Estado, “entre os quais sobressai o respeito à natureza e ao
ambiente, vale dizer, o respeito prioritário à vida” (Moraes:
Freitas, 2013: 109).
O buen vivir vem ganhando espaço como um princípio
ético-filosófico e um novo projeto político-social
embasado nas práticas, nos saberes e nas lutas históricas
dos povos indígenas contra o colonialismo, o capitalismo
e o modelo de progresso e de desenvolvimento que
caracterizam a modernidade, apontando para construção
de outros modos de vida e de organização social (Fuscaldo;
Urquidi, 2015: 3).
Segundo Boaventura de Sousa Santos (2013: 124) são
propostas audaciosas e inovadoras de uma nova consciência
ambiental global, onde o novo, o presente, está enraizado
no passado, no ancestral, por meio da consciência indígena
da Pachamama. Pachamama, é um termo composto pelos
vocábulos ´pacha´ que significa tempo, mundo, lugar,
universo e ´mama´ que signiica mãe. É um mito andino
que diz respeito ao ´tempo´ e sua vinculação com a terra
(Tolentino; Oliveira, 2015: 316). Conforme Zelma Tomaz
Tolentino e Liziane Paixão Silva Oliveira (2015: 315-316):
Segundo tal mito, é o tempo que cura os males, o tempo que
extingue as alegrias mais intensas, o tempo que estabelece
as estações e fecunda a terra dá e absorve a vida dos seres
no universo. O signiicado ‘tempo’ advém da língua Kollasuyu, falada pelos aborígenes que habitavam a zona dos
Andes durante o processo de colonização. No transcorrer dos
anos, com o predomínio de outras raças e de modiicações
na linguagem, pachamama passou a significar ‘terra’,
merecedora do culto. Os aborígenes, antes do contato com os
espanhóis, na língua Kolla-suyu, chamavam a sua divindade
de PachaAchachi; depois substituíram a expressão ‘Achachi’
por ‘Mama’, designando mãe, talvez em razão da noção de
ternura da Nossa Senhora, a senhora principal, decorrente da
inluência do catolicismo apregoado pelos colonizadores.
Assim, na atualidade, há um consenso entre os autores que
defendem que, entre os índios da Cordilheira dos Andes
(Peru, Equador, Colômbia, Bolívia, Chile e Argentina), a
Pachamama traz em si o sentido de “tierra grande, diretora y
sustentadora de la vida”. (Paredes, 1920: 38).
Thais Luzia Colaço y Fernando da Silva Mattos
Deve-se interpretar tal concepção como uma contribuição
indígena ao mundo inteiro, que progressivamente vem
angariando adeptos na medida em que a degradação
ambiental está conduzindo a humanidade a um suicídio
coletivo (Santos, 2013: 124). Bolívia e Equador, ao
reconhecerem a terra como algo sagrado, como um sistema
vivo no qual o ser-humano é apenas mais um elemento,
trazem à tona necessidade de equilíbrio do sistema para a
sobrevivência de todas as espécies, tornando o direito à vida
efetivo, em suas variadas dimensões (Tolentino: Oliveira,
2015: 332).
Trata-se da necessidade de incorporação de uma noção
de temporalidade cíclica, onde há um presente contínuo
que se funde com o passado e com o futuro. Nada pode ser
considerado estático ou linear, pois saber viver signiica
entrar no tempo intenso de uma vida plena. Busca-se
desconstruir a monocultura da temporalidade linear
e progressiva que constitui a modernidade ocidental
capitalista, “apontando para a possibilidade de uma nova
convivência social pautada naquilo que Santos (2004)
denomina uma ´ecologia das temporalidades´” (Fuscaldo;
Urquidi, 2015: 9).
Embora seja possível airmar, assim, que existe uma ética
indígena em matéria de preservação ambiental, é imperioso
que se reconheça que nem todas as comunidades indígenas
ainda a sigam em todos os seus elementos fundamentais. Há
comunidades indígenas que degradam o meio ambiente por
vezes na mesma proporção que não indígenas, violando a
sua própria ética. Isso porque os índios com o tempo foram
sendo inluenciados por todas as vicissitudes existentes na
sociedade envolvente, principalmente pelo fato de serem
alvos de uma política integracionista que visou a eliminar
sua cultura a im de que se adequassem ao modelo de vida
tido por hegemônico.
Ante tal política integracionista, alcançou-se um quadro
de desrespeito à cultura indígena e desvalorização de seus
conhecimentos tradicionais, o que coincide com o período
de avanço em relação à degradação do meio ambiente. A
sociedade, depositando toda a sua coniança na ciência e
na sua superioridade, afastou-se não só dos indígenas, mas
também, e ao mesmo tempo, do meio ambiente. Nesse
cenário, é necessária a retomada dos princípios éticos das
comunidades indígenas voltados à proteção da natureza.
Passado e presente devem se unir, a im de possibilitar a
existência de um futuro mais seguro às futuras gerações.
Etica planetária e uso sustentável da natureza pelos povos indígenas
Reconhecendo-se existir uma ética indígena voltada
à preservação do meio ambiente, entende-se que os
seus princípios fundamentais podem ser extraídos
dos elementos antes expostos e coincidem com os
mandamentos estabelecidos pelo pensador contemporâneo
Edgar Morin1 ao tratar da ética planetária em seu livro “O
Método 6: ética”.
No mencionado livro, entre outros pontos, Morin
(2011b:162-163) airma que pela primeira vez na história
humana o universal tornou-se realidade concreta, havendo
uma intersolidariedade objetiva da humanidade, na qual
o destino global do planeta sobredetermina os destinos
singulares das nações e na qual os destinos singulares
das nações perturbam ou modiicam o destino global. O
universalismo abstrato do antigo internacionalismo que
não podia reconhecer as comunidades concretas das etnias
ou pátrias cede passagem a uma ética planetária, que é
uma ética do universal concreto; uma ética da comunidade
humana que respeite e integre as éticas nacionais.
Segundo Morin, a ética planetária só pode airmar-se a partir
das tomadas de consciências capitais que elenca em nove
mandamentos, quais sejam:
Tomada de consciência da identidade humana comum na
diversidade individual, cultural, de línguas.
149
Tomada de consciência da initude humana no cosmos, o que
nos leva a conceber que, pela primeira vez na sua história, a
humanidade deve deinir os limites da sua expansão material
e ao mesmo tempo empreender o seu desenvolvimento
psíquico, moral e espiritual.
Tomada de consciência ecológica da nossa condição
terrestre, que compreende nossa relação vital com a
biosfera. A Terra não é a soma de um planeta físico, de uma
biosfera e de uma humanidade. A Terra é uma totalidade
complexa física-biológica-antropológica em que a Vida é
uma emergência da sua história e o homem uma emergência
da história da vida. A relação do homem com a natureza
não pode ser concebida de maneira redutora ou separada.
A humanidade é uma entidade planetária e biosférica. O
ser humano, ao mesmo tempo natural e sobrenatural, deve
buscar novas forças na natureza viva e física da qual emerge
e da qual se distingue pela cultura, pelo pensamento e pela
consciência. Nosso vínculo consubstancial com a biosfera
nos leva a abandonar o sonho prometeico do controle da
natureza pela aspiração ao convívio na terra.
Tomada de consciência da necessidade vital da dupla
pilotagem do planeta: combinação da pilotagem consciente e
relexiva da humanidade com a pilotagem eco-organizadora
inconsciente da natureza.
2
Tomada de consciência da comunidade de destino que liga
cada destino humano ao do planeta, até na vida cotidiana.
Tomada de consciência de que as relações entre seres
humanos são devastadas pela incompreensão e de que
devemos educar-nos para a compreensão dos próximos, mas
também dos estranhos e distantes do nosso planeta.
Edgar Morin é admirador da cultura indígena. No livro “Saberes Globais e
Saberes Locais – o olhar transdisciplinar”, que é a transcrição de uma mesaredonda promovida pela Universidade de Brasília tendo como participantes, além
de Morin, o índio Marcos Terena, deixa evidente tal admiração ao dizer: “Tenho
muito prazer e interesse em sentar-me ao lado de Marcos Terena, porque pertenço
a uma associação internacional chamada Survival International, cuja missão é lutar
pela proteção cultural das minorias e ocupa-se bastante das minorias indígenas
do Brasil e da América do Sul. Recentemente escrevi uma carta ao presidente
da Colômbia pedindo proteção a um povo indígena ameaçado pela atividade de
extração do petróleo. [...]. As pequenas civilizações com linguagem, sabedoria e
cultura próprias estão ameaçadas porque são pequenas e falta-lhes o poder para
se defenderem. A sua proteção hoje é muito difícil. A proteção não consiste em se
fazer reservas – na concepção de zoo. Proteção não é apenas integrar, porque isso
também signiica desintegração das culturas. Por essa razão, mais do que ajuda
do exterior, a proteção está na tomada de consciência das próprias populações e
em sua capacidade de federar-se”. (Morin, 2010: 24-25).
1
A prolongação no futuro da ética da responsabilidade e da
solidariedade com os nossos descendentes (Hans Jonas), de
onde a necessidade de uma consciência teleobjetiva, mirando
alto e longe no espaço e no tempo.
Tomada de consciência da Terra-Pátria como comunidade
de destino/de origem/de perdição. A ideia de Terra-Pátria
não nega a solidariedade nacional ou étnica e não tende
de forma alguma a arrancar cada um da sua cultura.
Acrescenta aos nossos enraizamentos um enraizamento
mais profundo na comunidade terrestre. A ideia de TerraPátria substituiu o cosmopolitismo abstrato, que ignorava
singularidades culturais, e o internacionalismo míope, que
ignorava a realidade das pátrias. Acrescenta à fraternidade
a fonte necessária da maternidade inerente ao termo
“pátria”. Nada de irmãos sem mãe. A tudo isso soma-se
uma comunidade de perdição, pois sabemos que estamos
perdidos no universo gigantesco e estamos todos fadados
ao sofrimento e à morte.
2
Ressalta-se que no livro há um salto do mandamento 6 ao 8, sem qualquer
explicação.
150 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Com a leitura dos mandamentos da ética planetária de Edgar
Morin, percebe-se total harmonia com o uso sustentável da
natureza e a ética praticada pelas comunidades indígenas nos
termos antes apontados. Assim, pode-se nominar a relação
homem/natureza indígena de ética planetária. É uma ética
que: 1) reconhece a identidade humana na diversidade; 2)
tem consciência da unidade de destino entre o ser humano
e o planeta; 3) é baseada na necessidade de educação para
compreensão das diferenças; 4) considera a initude humana
como elemento determinante para contenção da expansão
material e para a mudança das subjetividades; 5) enfatiza
a simbiose existente entre o ser humano e a natureza; 6)
reconhece o controle compartilhado da natureza, entre a
humanidade e o meio ambiente; 7) propugna a responsabilidade
e solidariedade expandidas no tempo; y 8) estabelece a
consciência de que a Terra-Pátria é uma comunidade que
liga o destino (futuro) incerto à origem (passado), mediante
a solidariedade e fraternidade no presente.
Estes são os mandamentos que, ao nosso sentir, podem
ser tidos como componentes da ética ambiental das
comunidades indígenas. Considera-se que tais mandamentos
tradicionalmente foram incorporados aos costumes e aos
hábitos das comunidades indígenas mediante transmissão
oral, principalmente com base em seu sistema de crenças
e transmissão de tradições. Certamente nem todas as
comunidades indígenas seguem os mandamentos da ética
planetária nos tempos atuais, conforme salientado no curso
do texto, o que não desqualiica o reconhecimento da sua
existência enquanto fenômeno normativo extrajurídico,
responsável pela preservação da natureza e da humanidade
durante grande parte da história do planeta.
A consideração dos mandamentos da ética ambiental indígena
acima elencados pode auxiliar a humanidade a conter os rumos
catastróicos que o planeta está tomando, reorganizando-se
conceitos e ações tendentes a uma maior reaproximação
simbiótica entre os seres humanos e o meio ambiente em
que está inserido e também ao restabelecimento da relação
hipertroiada entre as lições do passado, a força destruidora
do presente e a responsabilidade para com o futuro.
Conclusão
A crise ambiental vem ganhando cada vez mais corpo e
caso não haja mudança de rumo em curto espaço de tempo,
presume-se que a sobrevivência na Terra restará inviabilizada.
Thais Luzia Colaço y Fernando da Silva Mattos
Nesse cenário, diversas propostas exsurgiram no sentido
de defesa de mudanças em diversos níveis da vida em
sociedade. O presente artigo retratou mais uma proposta,
fulcrada na reformulação de subjetividades embasada na
ética indígena, tida, para os ins do presente trabalho, como
compatível com os mandamentos da ética planetária do
pensador contemporâneo Edgar Morin.
O desenvolvimento de mecanismos modernos de
preservação do meio ambiente ou o isolamento de
determinadas áreas, por si só, não se apresentam como
instrumentos que garantirão a sustentabilidade ambiental.
Num cenário neoliberal em que o lucro é alçado a
condição de força motriz do desenvolvimento humano,
as prioridades sempre serão diversas daquelas que
nortearam a ética ambiental das comunidades indígenas,
hoje consagradas como direitos de Pachamama no âmbito
do novo-constitucionalismo latino-americano, e que
tradicionalmente se mostraram eicazes para a conservação
do meio ambiente.
Defende-se que somente o ser humano, reconhecendo-se
como integrante da natureza, numa verdadeira relação
simbiótica que considera todos os elementos do tempo,
poderá pensar em perspectivas preservacionistas mais
eicazes, para a presente e para as futuras gerações.
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151
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latino americano. “Veredas do Direito”, v. 11, p. 313-335.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 153-162
Análisis de las variables económicas de la
producción de naranja en México
Ignacio Caamal Cauich1, Felipe Jerónimo Ascencio1, Verna Gricel Pat Fernández2
1
DICEA-Universidad Autónoma Chapingo. Tel: 01-595-95-2-15-00, Ext. 5001. (icaamal82@yahoo.com.mx; fjascencio@yahoo.com.mx). 2Preparatoria Agrícola-CISECA.
UACH. Chapingo, Estado de México. gricelpat@hotmail.com.
Resumen
Introducción
Los cultivos citrícolas, entre los que destacan las naranjas,
los limones y las limas, tienen una gran importancia para los
países que cuentan con climas tropicales. Los principales
países productores de naranja en el mundo son Brasil, EE.UU.,
China, India, México y España, quienes aportan alrededor del
65% del volumen total de la producción mundial. En México el
cultivo de la naranja es de gran importancia económica para el
campo mexicano, especialmente para los estados productores,
ya que aporta un alto valor de la producción citrícola, genera un
alto número de empleos y aporta una buena proporción de las
divisas que ingresan a México por las exportaciones de naranja
en fresco y jugo concentrado. El objetivo de este trabajo es
caracterizar las variables de producción (supericie sembrada,
supericie cosechada, rendimiento y volumen de producción)
y económicas (precio y valor de la producción) del cultivo
de la naranja en México, en el periodo de 1980 a 2014. Los
resultados obtenidos relejan que en 2014, México registró
una producción de 4 533 428 toneladas de naranja, cerca
de 6% de la producción total mundial, de las cuales 52% lo
generó el estado de Veracruz, quien se ubica como el principal
productor, 13% Tamaulipas, 9% San Luis Potosí, 7% Nuevo
León, 5% Puebla, y 14% los otros estados productores. La tasa
de crecimiento de la supericie cosechada, del rendimiento y
del volumen de la producción de naranja en los últimos treinta
y cinco años fue de 98.6, 30.9 y 160.1%, respectivamente. El
crecimiento de la supericie cosechada, del rendimiento y del
volumen de la producción releja que el cultivo de la naranja
en México se encuentra en expansión y es rentable.
Los cultivos cítricos representan una de las ramas frutícolas
de gran importancia a nivel mundial y nacional. En el
sector agrícola mexicano los cítricos representan cerca de
37.3% de la supericie frutícola cultivada en el año 2014
(SIAP, 2016).
Palabras clave: superficie cosechada, rendimiento,
producción, tasa de crecimiento.
El origen de la mayoría de las especies del género Citrus
se ubica en zonas tropicales y subtropicales de Asia y
del Archipiélago Malayo, de esta parte del mundo se
distribuyeron a todas las zonas actuales productoras de
cítricos. La mayoría de los cítricos se desarrollan en casi
todo el mundo, en las regiones comprendidas dentro de la
banda de los 40° de latitud Norte y Sur (Martínez, 2016).
La naranja es una fruta muy apreciada en el mundo, puesto
que se utiliza como aperitivo o postre, la cual se consume
principalmente como fruta fresca o en jugo, además sus
gajos también son aprovechados para ser adicionados en
ensaladas, rellenos, platos de arroz, cocteles de fruta y
mermeladas; asimismo, se pueden obtener aceite esencial
de la cáscara del fruto que se usa, sobre todo, como agente
aromatizante (SAGARPA, 2012). De acuerdo con datos
nutricionales del USDA (2012), la naranja contiene un
alto porcentaje de vitamina C, así como vitamina A,
calcio y hierro, además, proporciona carbohidratos y
ibra dietética.
La naranja es un cultivo generador de empleos, de divisas
y de una fuerte derrama de dinero en las zonas donde se
produce y se procesa para su comercialización, puesto que
una proporción de la producción se exporta como fruta
154 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Ignacio Caamal Cauich et al.
fresca y como jugo concentrado. Al generar empleos atrae
la emigración de trabajadores a las zonas productoras,
quienes obtienen un empleo, ingreso y aumentan su
bienestar.
supericie sembrada, supericie cosechada, volumen de
producción, rendimiento, precio y valor de la producción
durante el periodo de 1980-2014.
Los indicadores de producción tales como la supericie
sembrada, la superficie cosechada, el rendimiento,
el volumen de producción, el precio y el valor de la
producción se consideran como indicadores económicos
que reflejan la competitividad del cultivo, producto.
(SAGARPA, 2005).
Metodología
El comportamiento de los indicadores se miden a través
de la tasa de crecimiento, que releja la proporción en que
se incrementa o disminuye una variable de un periodo a
otro, relejan la disminución o expansión, la rentabilidad
y competitividad del cultivo o producto (Caamal, 2006).
Metodología general
La información para la realización del estudio se obtuvo
de bases de datos especializadas, internacionales y
nacionales. Posteriormente, la organización y el análisis
de la información del trabajo se llevó a cabo utilizando el
método deductivo, partiendo de lo general a lo particular, a
nivel mundial, a nivel nacional y a nivel estatal.
Obtención y sistematización de información
Cuando las variables económicas (supericie sembrada,
supericie cosechada, rendimiento y producción) tienen
tasas de crecimiento positivas, signiica que el cultivo,
producto, se encuentra en expansión y es rentable, a pesar
de que los precios reales tiendan a disminuir. Mientras que
cuando las tasas de crecimiento de esas variables estén
disminuyendo, signiica que el producto, cultivo, se está
retrayendo y está perdiendo rentabilidad, e incluso puede
ser no rentable.
Las principales variedades de naranjas producidas en
México son la Valencia, Criolla, Hamlin y Washington.
La supericie establecida, el rendimiento y el volumen de
producción de la naranja se han incrementado en 99.1, 30.9 y
160.1%, respectivamente, durante el periodo de 1980-2014,
lo que releja expansión y rentabilidad del cultivo.
México se ubica en cuarto lugar a nivel mundial por la
supericie cosechada y en el quinto lugar por el volumen de la
producción aportado. A nivel nacional, el estado de Veracruz
se caracteriza por contar con la mayor supericie plantada de
naranja, en el año 2014, con 166 554 hectáreas que representan
49.7% de la supericie total sembrada con este cultivo y con
un nivel de producción de 2 353 670 toneladas (51.9%),
ubicándolo en el primer lugar a nivel nacional, destacando
regionalmente Tuxpan y Martínez de la Torre, que en conjunto
aportan 85.3% de la producción estatal.
Debido a la importancia del cultivo en México, el objetivo
del presente trabajo es analizar las principales variables
económicas de producción de la naranja, tales como
Obtención de información. Consistió en la obtención de
estadísticas en el ámbito mundial, nacional y estatal, para lo
cual se consultaron las bases de datos de la FAO (FAOSTAT),
del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera
(SIAP) y del Sistema de Información Agroalimentaria de
Consulta (SIACON) de la SAGARPA.
Sistematización de la información. Se ordenaron las
variables más importantes en matrices para observar las
proporciones y los cambios en el desarrollo del cultivo, como
son: supericie sembrada, supericie cosechada, rendimiento,
producción, precio medio rural y valor de la producción.
Cálculo de indicadores. Posteriormente se realizaron
los cálculos para la determinación de los valores totales,
valores parciales, proporciones, tasas de crecimiento y
valores reales de las variables expuestas anteriormente,
lo que permitió hacer la caracterización general y
especializada de la producción nacional y estatal de la
naranja.
Procedimientos de cálculo
Para poder determinar la estructura y comportamiento del
cultivo de naranja, se emplearon los siguientes conceptos
y fórmulas:
Valores totales. Los valores totales se reieren a la suma de
los valores parciales, los cuales se obtienen de la siguiente
manera:
Análisis de las variables económicas de la producción de naranja en México
155
VT = ∑ VP
Tasa de crecimiento. La tasa de crecimiento se reiere al
incremento porcentual que tiene un valor determinado en un
periodo de tiempo. El procedimiento de cálculo es:
Donde: VT= valor total; VP= valor parcial.
Precio real. El precio real se reiere al precio de un bien
expresado en moneda con un valor adquisitivo determinado,
al que se le ha eliminado el efecto de la inlación a partir de
un año base. El procedimiento es el siguiente:
r%(a1 - an)=(( Van / Va1 )-1)X 100
Donde: r%(a1-an)= tasa de crecimiento del año 1 al año n;
n= número de años; Van= valor en el último año; Va1= valor
en el año 1.
PR = PN / IPua
Donde: PR= precio real; PN= precio nominal; IPua= índice
de precios en unidades acumuladas.
Resultados
Precio nominal. El precio nominal se reiere al precio de
un bien expresado en moneda a precios de mercado de cada
momento. El precio nominal se puede obtener a partir de un
precio real o base. El procedimiento de cálculo es:
Ubicación en el total de cultivos
PN = PR * IPua
Donde: PN= precio nominal; PR= precio real; IPua= índice
de precios en unidades acumuladas.
Proporción. La proporción se reiere al valor que representa
la participación de un valor parcial con respecto de un total.
El procedimiento de cálculo es:
% = (VP / VT) * 100
Donde: %= participación porcentual; VP= valor parcial;
VT= valor total.
De acuerdo con datos del SIACON (2016), los cultivos
cíclicos ocupan 70.8% de supericie agrícola sembrada de
México y los cultivos perennes 13.2% restante; sin embargo,
la proporción del valor que generan los perennes es mayor
a la proporción de la supericie sembrada, lo que indica una
mayor eiciencia de los cultivos perennes.
Ubicación en los cultivos frutales
Dentro de los cultivos perennes, los frutales tienen gran
peso en la producción de México, puesto que contribuyen
con el 23.4% de la supericie sembrada, generan el 10% de
la producción y aportan el 53% del valor de la producción
de los cultivos perennes, siendo la naranja el cultivo más
importante, seguido del mango, aguacate, limón y nuez,
entre otros.
Cuadro 1. Cultivos cíclicos y perennes en México, 2014.
Cíclicos Supericie
%
sembrada
(ha)
Cíclicos 15 720 036 70.8
Supericie
cosechada
(ha)
15 099 961
71.4
31.4
473 587 416
Valor
%
producción
(Millones $)
70.9
238 559
57.2
Perennes 6 482 748
6 061 528
28.6
32.1
194 405 992
29.1
178 787
42.8
22 202 784 100.0 21 161 489 100.0
31.6
667 993 408
100.0
417 347
100.0
Total
29.2
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
%
Rendimiento
Volumen
(ton/ha) producción (ton)
%
Ignacio Caamal Cauich et al.
156 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Cuadro 2. Cultivos frutales en México, 2014.
Cultivo
Naranja
Mango
Aguacate
Limón
Nuez
Plátano
Manzana
Tuna
Piña
Durazno
Otros
Total
Supericie
Sembrada
(ha)
334 849
186 939
175 940
171 609
108 012
76 726
60 410
55 254
38 164
37 055
271 514
1 516 471
%
22.1
12.3
11.6
11.3
7.1
5.1
4.0
3.6
2.5
2.4
17.9
100.0
Supericie
Cosechada
(ha)
321 683
175 774
153 771
154 803
75 349
74 585
55 447
51 598
18 961
31 195
259 097
1 372 263
%
Rendimiento
(ton/ha)
23.4
12.8
11.2
11.3
5.5
5.4
4.0
3.8
1.4
2.3
18.9
100.0
14.1
8.3
9.9
14.1
1.7
28.8
12.9
11.0
43.1
5.6
20.1
14.2
Volumen
Producción
(ton)
4 533 428
1 452 340
1 520 695
2 187 257
125 758
2 150 520
716 865
568 405
817 463
173 464
5 202 945
19 449 139
%
23.3
7.5
7.8
11.2
0.6
11.1
3.7
2.9
4.2
0.9
26.8
100.0
Valor
Producción
(Miles $)
6 727 474
4 849 350
20 715 986
8 989 669
6 173 538
6 305 790
4 205 593
1 626 573
2 761 956
1 329 924
30 867 558
94 553 411
%
7.1
5.1
21.9
9.5
6.5
6.7
4.4
1.7
2.9
1.4
32.6
100.0
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
Ubicación en los cultivos cítricos
Dentro de los cítricos, el cultivo más importante en México
es la naranja, ya que aporta el 60.4% de la supericie
cosechada y 58.5% de la producción total de este grupo
de cultivos, seguido por el limón que aporta alrededor de
30% de la supericie cosechada y 28% de la producción
total de cítricos. En conjunto, estos cultivos representan
89.4% de la supericie cosechada total y 86.7% de la
producción total.
Cuadro 3. Cultivos cítricos en México, 2014.
Cultivo
Naranja
Limón
Mandarina
Toronja
Tangerina
Otros
Total
Supericie
sembrada
(ha)
334 849
171 609
21 550
18 051
12 693
6 732
565 484
%
59.2
30.3
3.8
3.2
2.2
1.2
100.0
Supericie
cosechada
(ha)
321 683
154 803
21 228
16 201
12 429
6 191
532 535
%
Rendimiento
(ton/ha)
60.4
29.1
4.0
3.0
2.3
1.2
100.0
14.1
14.1
14.0
26.2
15.7
18.6
14.6
Volumen
producción
(ton)
4 533 428
2 187 257
297 326
424 678
194 712
115 043
7 752 445
%
58.5
28.2
3.8
5.5
2.5
1.5
100.0
Valor
producción
(Miles $)
6 727 474
8 989 669
421 496
642 848
362 547
165 283
17 309 316
%
38.9
51.9
2.4
3.7
2.1
1.0
100.0
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
La producción agrícola en general y la citrícola en
particular están en función de la supericie establecida y los
rendimientos por hectárea, y el valor de la producción en
función del precio unitario por tonelada y la producción. En
el caso de los principales cítricos como la naranja y limón,
la supericie sembrada y cosechada es alrededor de 50%
menor en el limón en comparación con la supericie de la
naranja, situación que repercute en la producción total, ya
que el rendimiento por hectárea es semejante para ambos
(14.1 t ha-1), pero por el valor de la producción, el limón
supera a la naranja en cerca de 34%, esto sucede porque la
naranja es de consumo nacional en fresco y poca producción
para la industria y una cantidad mínima para la exportación,
con bajos precios; en cambio, los limones incursionan en
el mercado nacional y están fuertemente vinculados con la
exportación y con la agroindustria, con mejores precios.
Análisis de las variables económicas de la producción de naranja en México
Distribución de la producción de naranja en México
En el año 2014, de acuerdo con datos del SIACON (2016),
se registraron 334 849 hectáreas de supericie sembrada y
321 683 hectáreas de supericie cosechada, las que generaron
una producción total de naranja de 4 533 428 toneladas,
lo que representa 58.5% de la producción de cítricos en
México; el rendimiento promedio fue de 14.1 toneladas por
hectárea, mientras que el valor de la producción ascendió
a 6 727.5 millones de pesos que corresponde al 38.9% del
valor productivo generado por los cítricos.
El estado de Veracruz ocupa el primer lugar en la supericie
sembrada de naranja con 49.7% del total y 50.2% de la
supericie cosechada, ocupa el tercer lugar en rendimiento
por hectárea y el primer lugar por volumen de producción al
generar 51.9% del volumen de la producción total; en cuanto
a producción le sigue el estado de Tamaulipas con 9.1% de la
157
supericie sembrada y 9.0% de la supericie cosechada, con
un rendimiento de 20.7 toneladas por hectárea y con el 13.2%
del volumen de la producción aportado. El estado de Sonora
tiene los rendimientos más altos por hectárea (25.4 t ha-1),
pero solamente participa con 1.9% del total de la supericie
establecida, lo que explica la baja participación de este estado
en el volumen y valor de la producción.
El cultivo de la naranja prospera en climas donde las
condiciones de temperatura y humedad le son más favorables y
en áreas donde únicamente la limitante puede ser la humedad,
así se tiene que el estado de Veracruz posee 166 554 hectáreas
de las cuales 4.2% de la supericie corresponde a riego, San
Luis Potosí tiene el 8.8%, mientras que Tabasco apenas
cubre el 0.1% bajo riego. Los estados que destinan la mayor
supericie de naranja bajo la tecnología de riego son Sonora
(100%), Yucatán (96.4%) y Tamaulipas (89.2%). En general
la naranja es un cultivo de temporal (74.6%) en México.
Cuadro 4. Principales estados productores de naranja, 2014.
Estado
Veracruz
Tamaulipas
San Luis Potosí
Nuevo León
Puebla
Yucatán
Sonora
Tabasco
Otros
Total
Supericie sembrada (ha)
166 554
30 563
38 433
26 212
23 342
12 306
6 199
8 169
23 072
334 849
Fuente: Elaborado con datos de SIACON, 2016.
%
49.7
9.1
11.5
7.8
7.0
3.7
1.9
2.4
6.9
100.0
Supericie cosechada (ha)
161 567
28 859
37 924
25 348
19 773
12 051
5 457
8 157
22 548
321 683
%
50.2
9.0
11.8
7.9
6.1
3.7
1.7
2.5
7.0
100.0
Rendimiento (t ha-1)
15
21
11
12
11
13
25
10
12
13
Cuadro 4. Principales estados productores de naranja, 2014 (Continuación).
Estado
Veracruz
Tamaulipas
San Luis Potosí
Nuevo León
Puebla
Yucatán
Sonora
Tabasco
Otros
Total
Volumen de
producción (t)
2 353 670
596 891
412 193
305 285
222 656
151 548
138 713
81 196
271 277
4 533 428
Fuente: Elaborado con datos de SIACON, 2016.
%
51.9
13.2
9.1
6.7
4.9
3.3
3.1
1.8
6.0
100.0
Valor de la producción
(Millones $)
2 864
1 113
608
606
233
242
371
138
553
6,727
%
42.6
16.5
9.0
9.0
3.5
3.6
5.5
2.1
8.2
100.0
Precio medio
rural ($/t)
1 217
1 864
1 474
1 985
1 046
1 597
2 672
1 702
2 455
2 230
Ignacio Caamal Cauich et al.
158 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Cuadro 5. Supericie de riego y temporal de naranja por estado (ha). 2014.
Estado
Veracruz
San Luis Potosí
Tamaulipas
Nuevo León
Puebla
Yucatán
Tabasco
Sonora
Otros
Total
Total
166 554
38 433
30 563
26 212
23 342
12 306
8 169
6 199
23 072
334 849
%
49.7
11.5
9.1
7.8
7.0
3.7
2.4
1.9
6.9
100.0
Riego
3 594
7 526
27 268
20 313
70
11 856
55
6 199
8 294
85 174
%
4.2
8.8
32.0
23.8
0.1
13.9
0.1
7.3
9.7
100.0
Temporal
162 960
30 908
3 296
5 899
23 272
449
8 114
14 778
249 675
%
65.3
12.4
1.3
2.4
9.3
0.2
3.2
0.0
5.9
100.0
Fuente: Elaborado con datos del SIAP, 2016.
Cuadro 6. Comportamiento de las variables de producción de naranja en México.
Año
Supericie sembrada (ha)
Supericie cosechada (ha)
Rendimiento (t ha-1)
Volumen de producción
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2014
TC (∆%)
168 208
181 222
239 929
327 601
337 049
336 770
339 389
334 849
99.1
161 937
127 646
176 003
273 186
323 618
317 280
334 573
321 683
98.6
10.8
13.9
12.6
13.1
11.8
13.0
12.1
14.1
30.9
1 743 212
1 770 208
2 220 338
3 571 541
3 812 683
4 112 711
4 051 632
4 533 428
160.1
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
La producción de naranja en México en el periodo de 19802014, se ha venido incrementando en 160.1%, al pasar de
1 743 212 a 4 533 428 toneladas; la supericie sembrada se
incrementó en 99.1%, llegando a las 334 849 hectáreas en
2014. En cuanto a rendimiento, se tiene que en el año de
1980 era de 10.8 toneladas por hectárea y en 2014 fue de
14.1 toneladas por hectárea, lo que representa un incremento
de 30.9%. Las tasas de crecimiento de las variables de
producción de la naranja son positivas, lo que releja que el
cultivo de la naranja se encuentra en expansión y es rentable.
E
n el período de 1980-2014, la mayoría de los principales
estados productores de naranja presentaron un incremento
superior al 100.0% en la área establecida con este cultivo,
destacando el estado de Tabasco que tuvo un incremento del
1 188.5%, le sigue Puebla con 641.0%, Yucatán con 162.2%,
Veracruz con el 130.7% y Tamaulipas con 101.9%. El estado
de Nuevo León presentó un decrecimiento en la supericie
sembrada del 23.4%.
Los rendimientos de la producción de naranja por hectárea
en México han crecido en un 30.9% en el periodo de 19802014, en el caso de los principales estados productores, muy
pocos presentaron incrementos considerables, tal es el caso
de Sonora, Veracruz y Tamaulipas que incrementaron su
rendimiento en 66.1, 56.5 y 44.1%, respectivamente; por
otro lado, los estados de Yucatán y Tabasco presentaron
los mayores decrecimientos en su rendimiento de 38.5 y
33.6%, respectivamente. Cabe señalar, que aunque el estado
de Morelos presenta el rendimiento más alto, después de
Sonora, su producción no igura dentro los principales estados
productores debido a que la supericie sembrada es baja.
Análisis de las variables económicas de la producción de naranja en México
159
Cuadro 7. Comportamiento de la supericie sembrada de naranja por estado (Miles ha).
Estado
Veracruz
San Luis Potosí
Tamaulipas
Nuevo León
Puebla
Yucatán
Tabasco
Sonora
Otros
Total
1980
72.2
23.3
15.1
34.2
3.2
4.7
0.6
3.5
11.4
168.2
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
1985
86.1
29.6
14.9
24.4
3.1
6.4
7.1
n.d.
9.5
181.2
1990
120.3
31.8
17.2
22.6
6.3
14.0
n.d.
7.7
20.0
239.9
1995
153.3
39.8
22.2
26.8
10.7
17.0
20.1
9.9
27.8
327.6
2000
144.6
40.3
37.8
25.1
15.9
17.9
17.0
8.8
29.4
337.0
2005
147.7
45.3
35.2
25.7
16.9
16.4
8.0
8.3
33.4
336.8
2010
161.4
44.2
32.2
25.4
21.1
13.3
8.2
8.0
25.6
339.4
2014
166.6
38.4
30.6
26.2
23.3
12.3
8.2
6.2
23.1
334.8
∆%
130.7
64.7
101.9
-23.4
641.0
162.2
1,188.5
79.1
102.8
99.1
Cuadro 8. Comportamiento del rendimiento de naranja por estado (t ha-1).
Estado
Veracruz
San Luis Potosí
Tamaulipas
Nuevo León
Puebla
Yucatán
Tabasco
Sonora
Otros
Total
1980
9.3
8.4
14.4
12.0
10.0
20.5
15.0
15.3
12.0
10.8
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
1985
17.9
9.2
17.5
1.3
16.5
12.5
8.0
n.d.
10.8
13.9
1990
14.5
7.4
8.0
6.0
15.2
11.8
n.d.
20.3
9.3
12.6
1995
15.0
11.1
16.8
11.3
12.4
13.5
0.1
17.1
10.2
13.1
2000
13.4
7.3
12.7
7.8
12.5
14.4
9.5
17.9
10.0
11.8
2005
14.3
8.6
14.0
11.4
12.1
12.5
9.9
26.4
11.5
13.0
2010
12.4
9.1
15.9
9.3
12.3
11.5
9.9
25.1
10.5
12.1
2014
14.6
10.9
20.7
12.0
11.3
12.6
10.0
25.4
11.6
14.1
∆%
56.5
29.9
44.1
0.1
12.2
-38.5
-33.6
66.1
-3.2
30.9
Cuadro 9. Comportamiento de la producción de naranja por estado (miles t).
Estado
Veracruz
San Luis Potosí
Tamaulipas
Nuevo León
Puebla
Yucatán
Tabasco
Sonora
Otros
Total
1980
653.7
190.1
185.6
407.6
31.1
79.7
8.9
52.9
133.7
1 743.2
1985
1 116.6
270.2
152.9
11.3
46.9
65.0
22.6
n.d.
84.6
1 770.2
1990
1 493.6
157.3
98.5
38.2
71.7
92.4
n.d.
122.2
146.4
2 220.3
1995
1 874.2
419.4
374.5
253.9
132.1
156.3
1.7
161.5
198.0
3 571.5
2000
1 911.1
294.2
423.6
195.6
198.4
216.5
161.1
137.4
274.8
3 812.7
2005
2 034.2
346.0
477.5
292.6
204.7
164.4
79.1
202.3
311.9
4 112.7
2010
2 006.2
393.1
512.9
236.5
256.9
137.7
80.9
185.7
241.7
4 051.6
2014
2 353.7
412.2
596.9
305.3
222.7
151.5
81.2
138.7
271.3
4 533.4
∆%
260.1
116.8
221.7
-25.1
616.4
90.2
809.8
162.0
102.8
160.1
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
La producción de naranja en los principales estados
productores, durante 1980-2014 en términos generales
maniiestan un incremento, siendo Tabasco el que ocupó el
primer lugar con una tasa de crecimiento de 809.8%, al pasar
de 8 925 a 81 196 toneladas, le siguen el estado de Puebla
con 616.4%, Veracruz con 260.1%, Tamaulipas con 221.7%
Sonora con 162.0%, y San Luís Potosí con 116.8%; cabe
señalar que el estado de Nuevo León tuvo un decrecimiento
Ignacio Caamal Cauich et al.
160 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
en la producción del 25.1%, lo anterior releja que el cultivo
en este estado tiene problemas de producción y rentabilidad,
mientras que en los demás estados se encuentra en expansión
y es rentable y prometedor.
Por otro lado, en los principales estados productores, los
precios pagados son inferiores a los que se pagaron en los
estados con menor producción, lo que se explica por las
relaciones de oferta y costos de transporte.
Comportamiento del precio nominal de la naranja en
México
En general, el precio medio rural nominal de la naranja
en México se ha venido incrementado durante el periodo
de 1980 a 2014, pero en una proporción menor al
crecimiento de la inlación, que genera una pérdida de
valor.
El precio promedio nominal pagado al productor (precio
medio rural) en las principales zonas de producción de naranja
en México en 2014, fue de $1 484 pesos por tonelada, el cual
representa un incremento de 51 248.4% durante el periodo
de 1980 a 2014. La tasa de crecimiento del precio medio rural
es menor a la tasa de crecimiento de la inlación en el mismo
periodo, lo que conlleva a la pérdida de valor del producto.
Los mayores precios promedios nominales pagados al
productor por tonelada de naranja fueron en los estados con
menores niveles de producción, tales como Durango con $3
763 pesos por tonelada, le siguen Baja California (3 563 $/t),
Guerrero (3 391 $/t) y Colima (3 302 $/t), los cuales están
relacionados con el periodo en que sale la producción y los
costos de transporte.
Comportamiento del precio real de la naranja en
México
En términos reales, durante el periodo de 1980 a 2014, el
precio promedio de la naranja en México ha presentado
decrecimientos signiicativos, puesto que pasó de 2.9
pesos por tonelada de naranja en 1980 a 1.1 pesos por
tonelada en 2014, lo que signiicó una disminución del
precio real de 62.6%. Esto quiere decir que la naranja
perdió valor en cerca de dos tercios en ese periodo, por
el efecto de la inlación, que creció en mayor proporción
que el precio de la naranja.
Cuadro 10. Comportamiento del precio medio rural nominal de naranja en México, estados con menor producción.
Estado
Durango
Baja California
Guerrero
Colima
Campeche
Jalisco
Aguascalientes
Baja California Sur
Otros
Total
1980
3
5
3
6
3
5
n.d.
4
4
3
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
1985
60
58
n.d.
n.d.
24
48
50
39
42
26
1990
1 000
750
1 100
1 488
452
644
700
805
627
425
1995
689
992
960
511
718
1 101
660
523
808
558
2000
1 578
1 566
2 809
1 623
1 006
1 591
1 200
922
1 252
794
2005
2 541
1 595
1 898
2 617
1 225
1 642
1 000
1 679
1 174
652
2010
4 017
2 550
2 452
2 984
2 745
2 030
3 000
3 747
1 550
1 204
2014
3 763
3 563
3 391
3 302
2 819
2 620
2 500
2 499
1 881
1 484
∆%
150 415.2
71 155.6
112 938.7
58 753.1
93 860.3
52 300.8
4 900.0
65 658.2
52 706.1
51 248.4
Cuadro 11. Comportamiento del precio medio rural nominal de naranja en México, principales estados productores.
Estado
Veracruz
San Luis Potosí
Tamaulipas
Nuevo León
Puebla
Yucatán
Tabasco
Sonora
Otros
Total
1980
4
2
2
2
3
2
2
3
4
3
1985
21
22
42
28
32
24
60
n.d.
48
26
Fuente: Elaborado con datos del SIACON, 2016.
1990
357
431
475
278
370
299
n.d.
1 225
778
425
1995
577
425
650
497
500
500
699
514
898
558
2000
764
672
756
1 311
645
657
293
929
1 582
794
2005
488
608
835
821
591
676
666
1 032
1 621
652
2010
1 005
1 448
1 600
1 048
1 133
909
1 282
1 562
2 262
1 204
2014
1 217
1 474
1 864
1 985
1 046
1 597
1 702
2 672
2 455
1 484
∆%
30 244.1
63 455.6
80 596.5
115 327.3
30 677.9
94 382.2
85 019.0
83 403.1
59 307.6
51 248.4
Análisis de las variables económicas de la producción de naranja en México
161
Cuadro 12. Comportamiento del precio medio rural real de naranja en México, principales estados productores.
Año
INPC
INPCua
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2014
TCu*
29.8
63.7
29.9
52.0
9.0
3.3
4.4
4.1
1.0
12.1
151.6
354.3
759.9
947.8
1 178.8
1 371.6
Nacional
PMRN
PMRR
2.9
2.9
25.5
2.1
424.6
2.8
557.9
1.6
794.3
1.0
652.1
0.7
1 203.7
1.0
1 484.0
1.1
512.5
-62.6
Veracruz
PMRN
PMRR
4.0
4.0
20.9
1.7
357.3
2.4
576.8
1.6
764.0
1.0
488.0
0.5
1 004.7
0.9
1 216.8
0.9
302.4
-77.9
San Luis Potosí
PMRN PMRR
2.3
2.3
21.9
1.8
431.2
2.8
425.0
1.2
672.0
0.9
608.2
0.6
1 448.4
1.2
1 474.5
1.1
634.6
-53.7
Tamaulipas
PMRN PMRR
2.3
2.3
41.7
3.5
475.0
3.1
650.0
1.8
755.7
1.0
835.3
0.9
1 599.9
1.4
1 864.1
1.4
806.0
-41.2
Donde: INPC=Índice nacional de precios al productor; INPCua=Índice nacional de precios al productor en unidades acumuladas; PMRN=Precio medio rural nominal;
PMRR=Precio medio rural real; TCu=Tasa de crecimiento en unidades. *La tasa de crecimiento del PMRR esta expresada en porcentaje. Fuente: Elaborado con datos
del SIACON y Banco de México.
Cuadro 12. Comportamiento del precio medio rural real de naranja en México, principales estados productores
(Continuación).
Año
INPC
INPCua
1980
1985
1990
1995
2000
2005
2010
2014
TCu*
29.8
63.7
29.9
52.0
9.0
3.3
4.4
4.1
1.0
12.1
151.6
354.3
759.9
947.8
1,178.8
1,371.6
Nuevo León
PMRN
PMRR
1.7
1.7
28.2
2.3
277.9
1.8
497.2
1.4
1,311.5
1.7
820.7
0.9
1 048.1
0.9
1 985.4
1.4
1 153.3
-15.8
Puebla
PMRN PMRR
3.4
3.4
31.5
2.6
370.0
2.4
500.0
1.4
644.8
0.8
590.7
0.6
1 133.4
1.0
1 046.5
0.8
306.8
-77.6
Yucatán
PMRN
PMRR
1.7
1.7
23.8
2.0
299.2
2.0
500.3
1.4
657.2
0.9
676.0
0.7
909.5
0.8
1 596.8
1.2
943.8
-31.1
Otros
PMRN PMRR
4.1
4.1
48.0
4.0
778.5
5.1
898.2
2.5
1 582.1
2.1
1 620.6
1.7
2 262.1
1.9
2 454.8
1.8
593.1
-56.7
Donde: INPC=Índice nacional de precios al productor; INPCua=Índice nacional de precios al productor en unidades acumuladas; PMRN=Precio medio rural nominal;
PMRR=Precio medio rural real; TCu=Tasa de crecimiento en unidades. * La tasa de crecimiento del PMRR esta expresada en porcentaje. Fuente: Elaborado con datos
del SIACON y Banco de México.
Los precios pagados al productor diieren de un estado
productor a otro estado productor. El estado de Veracruz,
principal productor de naranja, presentó el mayor
decrecimiento del precio medio rural real, el cual fue de
77.9%, ya que pasó de 4.0 pesos por tonelada en 1980 a 0.9
pesos por tonelada en 2014, en términos reales, le siguen
el estado de Puebla con una disminución en el precio real
de 77.6%, San Luis Potosí con 53.7%, Tamaulipas con
41.2% y Yucatán con una disminución de 31.1%. Las
tasas decrecientes de los precios medios rurales reales de
la naranja, relejan perdidas de valor y del ingreso de los
productores, los cuales se explican por los periodos de
producción y costos de transporte. El decrecimiento de los
precios reales puede ser compensado con el incremento de
la supericie sembrada y el rendimiento.
Conclusiones
En México existen las condiciones climáticas favorables
para llevar a cabo la producción de cítricos, siendo una
de las razones que le han permitido al país colocarse
como el quinto productor de cítricos, segundo en la
producción de limas y limones y quinto en la producción
de naranja.
El cultivo de la naranja es el principal cítrico en México,
por supericie sembrada y volumen de producción, ya que
contribuye con 59.2% de la supericie sembrada, 58.5% de
la producción y generó 38.9% del valor de la producción
total de cítricos.
162 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Las variables de producción de la naranja en México
presentan tasas de crecimiento positivas en el periodo
analizado, que en términos generales se han incrementado
en alrededor del 100% tanto en supericie sembrada como
en supericie cosechada y en cerca del 160% en volumen de
producción, mientras que el rendimiento sólo se incrementó
en 30.9%.
El estado de Veracruz es el principal productor, ocupó
49.7% de la supericie sembrada y aporta cerca de 52% de
la producción total de México, le sigue Tamaulipas, San
Luís Potosí y Nuevo León. El estado de Veracruz mantuvo
un crecimiento en las variables de producción, superior al
100% durante el periodo de 1980-2014, a excepción del
rendimiento que se incrementó en 56.5%
El cultivo de naranja es un cultivo en expansión y
rentable que genera una gran derrama económica en las
zonas productoras, promueve la generación de empleos,
beneiciando a miles de familias.
Literatura citada
Caamal, C. I. 2006. Producción y exportación hortofrutícola de México
en el contexto del TLCAN. PRONISEA-DICEA-UACH.
Chapingo, México.
Curti, D. S. A. 1998. Manual de producción de naranja para Veracruz y
Tabasco. CIRCOG. INIFAP. SAGAR. Libro técnico No. 2.
Veracruz, México. 175 p.
Ignacio Caamal Cauich et al.
Del Ángel, H. J. C. 2009. Análisis de la producción y comercialización de
naranja (Citrus sinensis L. Osbeck) en el municipio de Alamo
Temapache, Veracruz. UACH. Chapingo, Estado de México.
FAOSTAT. 2016. Bases de datos estadísticos de la FAO. http://faostat.fao.org/.
Financiera Rural. 2009. Monografía de la naranja. Versión electrónica,
consultado en enero de 2012: http://www.inancierarural.
gob.mx/informacionsectorrural/documents/monografias/
monograf%c3%adas%20anteriores/monograf%c3%adanara
nja%28jul2009%29lc.pdf.
Gómez, C. M. A. y Schwentsius, R. R. 1997. La agroindustria de naranja
en México. UACH- CIESTAAMM. Chapingo, México.
Martínez, H. J. 2016. Evolución de los residuos de plaguicidas en
frutas cítricas frescas. Incidencia sobre los jugos cítricos
concentrados. Universidad Politécnica de Valencia. Tesis
doctoral. Valencia, España.
Morín, C. 1983. Cultivo de cítricos. Segunda Edición. San José, CR, CIDIA.
607 p (IICA: Serie de Libros y materiales educativos; no. 51).
Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y
Alimentación (SAGARPA). Competitividad. Consultado 29
de noviembre de 2008. http://www.sagarpa.gob.mx/v1/subagri/
pages/comp/index.htm.
Secretaría deAgricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca yAlimentación
(SAGARPA). 2012. Padrón de productores de cítricos con predios
georreferenciados. 2010-2012. SIAP-SAGARPA-Tamaulipas.
México. http://www.sagarpa.gob.mx/delegaciones/tamaulipas/
documents/padron_citricos%202010-2012.pdf.
Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP). 2016.
Producción agrícola. SAGARPA. México. http://www.
gob.mx/siap/acciones-y-programas/produccion-agricola33119?idiom=es.
Sistema de Información Agroalimentaria de Consulta (SIACON). 2016.
Producción agrícola. SAGARPA. México.
United States Department of Agriculture (USDA). 2012. Hoja informativa
de USDA Foods para el hogar. Naranjas, frescas. https://www.
whatscooking.fns.usda.gov/sites/default/files/factsheets/
HHFS_ORANGES_DEc2012(Spanish)%20EE.pdf.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 163-169
Pueblos Mágicos: intervención estética
e ideología en Mazunte, Oaxaca
Natalia Helena Jarquín Sánchez y José Alfredo Castellanos Suárez
Universidad Autónoma Chapingo. nataliahjarqui@gmail.com.
Resumen
La presente investigación tiene como objetivo exponer la
intervención ideológica- simbólica del programa federal
“Pueblos Mágicos” desde las formas tradicionales de la
Estética a través de la re-signiicación de la cultura rural a
partir de la práctica turística. Para tal efecto se analizó el caso
del recientemente nombrado Pueblo Mágico, Mazunte en el
estado de Oaxaca en el cual se evidencia paradójicamente un
distanciamiento entre lo que hace auténtica a la comunidad para
ser transformada en un destino que encaja en las tendencias
de consumo. Si bien este programa surgió como estrategia
de desarrollo comunitario a partir de la revalorización de la
autenticidad de los pueblos, implícitamente expone al turismo
como vehículo transformador de la diversidad cultural en
productos rentables al tiempo que reestructura las condiciones
del espacio para su oferta. Esta intervención evidencia un
impacto profundo no sólo en la implantación de infraestructura
y planeación urbanística bajo los parámetros de lo bello de una
estética valorativa tradicional, sino que rebasa los límites de lo
regional y expande su impacto sobre la relación entre lo urbano
y lo rural a través del mercado y la experiencia turística. En
este sentido se analiza el alcance del programa a partir de las
transformaciones estéticas desde el campo de lo imaginario
hasta su consumación en lo ideológico.
Palabras clave: turismo, estética, ideología.
Introducción
Pueblos Mágicos nace como una estrategia de desarrollo
que promueve y oferta la riqueza cultural e histórica
maniiesta en la belleza arquitectónica, artística y vida
cotidiana a través de la actividad turística. Este programa
cubre algunos aspectos del desarrollo regional como
inversión en las localidades para la realización de obras
de pavimentación, restauración de fachadas y ediicios
representativos, instalación de infraestructura urbana
adecuada al paisaje rural, promoción turística, entre
otras; sin embargo estas reconiguraciones se limitan al
ejercicio de la Estética como doctrina de las cualidades de
nuestros sentir o mociones de sentimiento amortiguado
según Freud (1992).
Diversos trabajos de investigación han abordado las
inconsistencias, la incompatibilidad, los impactos
socioeconómicos y medio ambientales, así como el parcial
cumplimiento del bienestar social y el mejoramiento
en las condiciones económicas de las localidades
Hoyos y Hernández (2008); Velarde et al. (2009);
Hernández (2009) y García y Guerrero (2014). En
los últimos años el programa Pueblos Mágicos ha
despertado el interés de investigadores por abordar el
entramado que conforma al mismo desde interpretaciones
como la narrativa, la metáfora, la arquitectura y la carga
simbólica e imaginaria implícita en la marca Velázquez
(2012); Fernández et al. (2013); Méndez (2015); García
(2015).
Este trabajo pretende exponer el papel de la Estética en
la operación del programa Pueblos Mágicos en Mazunte
a partir de la inserción de valores en los repertorios
simbólicos que coniguran la cultura rural de la localidad
hasta su aianzamiento a nivel ideológico en el registro
imaginario sobre todo del visitante.
164 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Diseño del estudio y metodología
Para el cumplimiento del objetivo de la presente investigación
y en razón a un previo diagnóstico e investigación documental
de los principales procesos históricos de Mazunte que han
devenido hasta su nombramiento como Pueblo Mágico, se
determinó realizar un análisis cualitativo con base en dicho
material, además de una serie de 37 entrevistas en profundidad
con base en preguntas para conocer la percepción de los
residentes en relación a la identidad del pueblo, su historia,
el posible impacto y alcance del programa, así como sobre
los cambios estéticos en el paisaje e inquietudes al respecto.
También se aplicaron 40 cuestionarios dirigidos a visitantes
nacionales y extranjeros con el in de conocer su percepción
en relación al concepto pueblo mágico, lo rural y lo auténtico.
Estas herramientas permitieron a través de la historia oral
dar a conocer la complejidad social, cultural, económica y
política que rodea el tema que nos ocupa.
De acuerdo al censo y conteo de población y vivienda
realizado en 2010 por el INEGI, el tamaño del universo es de
873; es decir, el número total de habitantes en la comunidad,
considerando una varianza del 10, margen de error 1 y un
nivel de conianza de 95%, el tamaño de la muestra resultó
de 37, por lo que se realizaron 37 entrevistas a residentes
elegidos al azar y 40 a visitantes tanto nacionales como
extranjeros durante la tercer visita que abarcó del 16 al 28
de mayo de 2016.
Cabe destacar que la recuperación del valor de las
perspectivas cualitativas como la historia social, la historia
oral y la historia de vida implica la consideración del
sujeto antes invisible para la historiografía convencional,
de nuevas miradas críticas sobre las fuentes de la historia
oicial, la posibilidad de afrontar el desafío de construir
sistemáticamente “nuevas fuentes” con base en la palabra e
innovar conceptos, métodos y fuentes Aceves (2000).
La historia oral no sólo aporta herramientas para interpretar
y analizar los hechos, sino que a través de ésta es posible
correlacionar conceptos y significaciones mediante la
recuperación de información clave dictada desde las voces
de quienes hacen y/o fueron posible hacer de los hechos una
huella en la realidad. Abre horizontes a partir los cuales es
posible fusionar miradas y percepciones sobre un fenómeno,
permite la posibilidad de reivindicar la memoria colectiva,
de recuperar el reconocimiento de las voces silenciadas o
ignoradas, promueve la sensibilización de quienes participan
Natalia Helena Jarquín Sánchez y José Alfredo Castellanos Suárez
en ella mediante el contacto entre el investigador y la voz
informante, permite redescubrir la mirada del “otro” y
derrumbar antiguos prejuicios, incluso revaloriza lazos
intergeneracionales.
Mazunte a la lista de Pueblos Mágicos
Pueblos Mágicos pertenece al Programa de Gestión
de Destinos de la Secretaría de Turismo y de acuerdo
al Diario Oficial de la Federación (DOF) (2014) se
crea en 2001, como una estrategia para el desarrollo
turístico, orientada a estructurar una oferta turística
complementaria y diversiicada hacia el interior del país,
basada fundamentalmente en los atributos históricos y
culturales de localidades singulares.
Se considera requisito dentro de las reglas de operación de
este programa cumplir con lo descrito en dos de sus más
signiicativos conceptos:
Atractivo Simbólico: elemento natural o cultural único,
auténtico y emblemático de la localidad aspirante que la
diferencie de otras localidades en el estado, región y país.
Localidad Pueblo Mágico (en adelante Pueblo Mágico):
localidad que a través del tiempo y ante la modernidad,
ha conservado su valor y herencia histórica cultural y la
maniiesta en diversas expresiones a través de su patrimonio
tangible e intangible irremplazable y que cumple con los
requisitos de permanencia.
El programa está dirigido a localidades cuyas manifestaciones
culturales evidencien una importante carga simbólica
dispuesta a transformarse como un producto turístico de
amplia rentabilidad y tiene como objetivo fomentar un mayor
lujo de inversiones y inanciamiento en el sector turismo,
así como la promoción eicaz de los destinos turísticos, para
lo cual se establece como una de sus líneas de acción, la
de detonar el crecimiento del mercado interno a través del
desarrollo de nuevos productos turísticos, para consolidarlo
como el principal mercado nacional (Diario Oicial de la
Nación 2014), sin embargo queda al descubierto como parte
de las tendencias de globalización que la magia del proyecto
es perceptible sólo para una pequeña parte del pueblo.
Recientemente el programa se implementó en la comunidad
rural de Mazunte en el Estado de Oaxaca, que hasta principios
de la década de los 60 contaba con una población incipiente
y que representa desde los años 70, aunque con mayor auge
Pueblos Mágicos: intervención estética e ideología en Mazunte, Oaxaca
a partir de los 90, un destino para el turismo alternativo tras
la veda de tortuga y desde la creación del Museo Vivo de la
Tortuga (hoy Centro Mexicano de la Tortuga), así como a la
llegada del grupo ecologista Ecosolar A. C. Morales (2009).
Este grupo trajo consigo una serie de transformaciones que
se internaron profundamente en el devenir de la comunidad
en razón de ofrecer alternativas de ocupación laboral tras
la depredación en la localidad de especies marinas como
la tortuga. Ecosolar A. C, inició acciones de limpieza, la
creación de un centro de acopio de basura en el cual se
realizaban tareas de separación de desechos y la organización
del encuentro internacional de ambientalistas “consejo
de visiones”, que trajo consigo una importante derrama
económica por lo que el 8 de mayo de 1992, el pueblo decide
en Asamblea General, convertirse en la primera Reserva
Ecológica Campesina del país (Morales 2009).
Tras varias intervenciones por parte de iniciativas
principalmente privadas por hacer de Mazunte una
comunidad donde pudieran desarrollarse actividades
productivas en relación a la conservación y manejo del medio
ambiente, así como el impulso a proyectos culturales como
el Festival anual de Jazz para atraer visitantes y contrarrestar
las crisis económicas de la temporada baja , la Secretaría de
Turismo inalmente otorga al lugar el reconocimiento de la
marca Pueblos Mágicos el 25 de septiembre de 2015.
El 13.5% de los entrevistados, es decir 5 de ellos,
mencionaron que la existencia de un predio propiedad de
Gabino Cué, actual gobernador del Estado, es la principal
razón por la cual Mazunte recibió el nombramiento de
Pueblo Mágico. Aseguran que el gobernador tiene especial
interés en impulsar el desarrollo urbanístico en el lugar para
emprender un importante complejo turístico.
Cabe mencionar, que 43.2% de los entrevistados (16)
hizo mención (de alguna manera) sobre la premura del
nombramiento, pues a 8 meses de ser declarado Pueblo
Mágico, sólo se han realizado dos asambleas en las que
únicamente se ha tratado el tema en relación a los beneicios
económicos y de urbanización que traerá, sobre créditos y
los trabajos de pavimentación que se llevan a cabo hasta hoy.
No se ha visto ni hablado acerca de un plan de desarrollo,
manejo de aguas negras en la comunidad, el cual carecen,
situación frente a la que sienten incertidumbre, pues si bien
son conscientes de las posibilidades de mejoramiento en
cuanto a la generación de empleos y ventas dentro del sector,
abre la interrogante en relación a los impactos negativos que
165
esto pueda traer a propósito del tratamiento de desechos,
además del temor de ser marginados y expropiados de sus
terrenos.
…ahora dicen que va a servir para traer más turismo, que
va a venir más gente de Huatulco [visitantes cuyo destino
turístico principal o lugar de pernoctación es Huatulco] pero
y si de por sí tenemos un pedo con la basura y el drenaje,
porque no tenemos drenaje, ahora se imagina si viene más
gente ¿a dónde se va a ir toda la caca?, pues al mar, pero
no piensan en eso, les vale madre, nosotros vamos a salir
perdiendo y los que agarren hueso pues a lo mejor si les
resuelven pero ¿usted cree que hasta acá van a hacer algo?
Fragmento de entrevista
Es de suma importancia resaltar que la mayoría de los
entrevistados (87.5%, 14 de 16) que mostraron mayor
preocupación y/o interés e información al respecto del
nombramiento, son propietarios de establecimientos que
ofrecen servicio de hospedaje o alimentos, lo cual sugiere
que a pesar de ser el turismo la principal actividad económica
seguida de la pesca en la comunidad, sólo una pequeña parte
de la población que no tiene a su cargo o es propietario de
algún espacio para la prestación de servicios turísticos,
considera relevante el tema en relación al impacto que tendría
el Programa en su calidad de vida.
El 56.7% de los entrevistados (21) mostró desconocer
detalles sobre el programa, sin embargo hicieron mención
del otorgamiento de créditos para mejorar sus casas o locales,
situación que anima a la mayoría debido a las numerosas
tormentas tropicales y huracanes que cada año deterioran
signiicativamente sus hogares y negocios.
…ps [sic] lo único que sé es que según van a dar créditos para que
todas las casas se vean igual, o sea los techos, pero no nos han
dicho cuánto ni cómo o qué y ps ve que andan arreglando esta
calle, y que va a venir más turismo, ps eso, ¡ah! Y que ahora sí no
van a poder construir más de dos pisos, no sé qué vayan a hacer
con los que ya construyeron, si de por sí no se puede, pero ps…
Fragmento de entrevista
Aproximaciones de estética e ideología
En la tradición platónica, la estética se expresa frente a lo
creado por el razonamiento, la creatividad y la inteligencia
para el cumplimiento de una causa que deviene en lo
166 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
percibido sensiblemente como una imagen de algo bello
(Platón, 2001). Esta concepción es rescatada de Timeo o de
la naturaleza a partir de lo expuesto en la creación del mundo
y el hombre en tanto construcciones llenas de armonía, de
proporción, de perfección y dispuestas de un alma dinámica
en el espacio y creativa en el tiempo. Esta idea hace parte de
lo que denominamos las formas tradicionales de la Estética
y que inluye directamente en las trasformaciones visuales
que procura el Programa “Pueblos Mágicos” a través de la
intervención en una infraestructura visualmente ad hoc con
el entorno rural.
Sin embargo esta concepción queda rebasada por la
expuesta en Hegel (1989) la cual nos ocupa en relación a la
forma simbólica del arte, al concebir a la estética como un
proceso de trascender la mera experiencia de los sentidos, de
interpretación de la realidad sensible a propósito de la acción
perteneciente al espíritu humano. Para Hegel la estética
corresponde a la ilosofía del arte bello y evidencia su alcance
sensible en la signiicación y las formas simbólicas del arte.
En este sentido la magia que se presume en estas
comunidades frente a lo auténtico de sus representaciones
artísticas culturales como mitos, leyendas y rituales guarda
en sí misma la unidad consumada entre signiicación y
la representación de lo bello, que aprehendidas por el
imaginario colectivo pasan a conigurarse ideológicamente,
haciendo de Pueblo Mágico una referencia de la realidad
construida sin ser por ello arte.
La esencia subjetiva en la creación artística tiene la cualidad
de imprimir a la obra signiicado y existencia en sí misma bajo
el orden del tiempo y el espacio a través de la intervención
sensible, racional y técnica del espíritu humano, en este
sentido la estética como ilosofía del arte bello, opera en la
transformación de la realidad por medio de la apropiación
simbólica hasta su conformación ideológica.
Ricoeur (1997) explora el pensamiento marxista sobre la
ideología en el cual, el paradigma de una imagen invertida
de la realidad resulta de suma importancia, pues Marx retoma
esta metodología de Feuerbach pero ahora con respecto
a una relación que encuentra entre las representaciones
y la realidad de la vida, también llamada praxis. En este
sentido, la comunidad contempla una vida real, es decir la
praxis y por otro lado contempla el relejo de esa vida pero
en la imaginación, es decir la ideología que representa el
ser o tener la experiencia de visitar un Pueblo Mágico. De
esta manera la ideología forma parte de un proceso en el
Natalia Helena Jarquín Sánchez y José Alfredo Castellanos Suárez
cual la praxis se distorsiona por medio de la representación
imaginaria y a la ideología se le designa una función de
producir una imagen invertida y adquiere a partir de aquí
una concepción despectiva.
La importancia de integrar un marco que reconozca la
estructura simbólica social al concepto de ideología como
deformación es crucial, pues si la vida social no tiene
estructura simbólica, no existe manera de comprender cómo
vivimos, hacemos cosas y proyectamos esas actividades en
ideas, acaso productos en el caso del turismo, por lo que no
hay manera de comprender cómo la realidad puede llegar a
ser una idea, ni como la vida real pueda producir ilusiones
pues éstos se reducirían a simples hechos místicos (Ricoeur,
1997).
Pueblo Mágico® parodia del resplandor estético
El programa ha sido puesto en marcha principalmente en
ciudades cuya historia e identidad generalmente puede
ligarse a un pasado novohispano que se observa relejado a
través de su patrimonio arquitectónico en el que reposa un
potente discurso que nutre cierto imaginario de nación, el cual
además de abrigar en su coniguración urbana fundacional
la concentración de los poderes fácticos de la época en el
palacio, el templo, la plaza de armas y la arquitectura civil de
alcurnia, también cobija algunas representaciones de la vida
cotidiana como mercados y casas que expresan la poética
del espacio vivido García (2015).
Sin embargo en Mazunte, ante la carencia de ese tipo de
patrimonio histórico material de carácter arquitectónico,
se propone poetizar la cultura rural a través de la estética
en el paisaje natural y a una intervención urbanística que
embone con las representaciones simbólicas características
de un pueblo mágico.
Lo rural representa por así decirlo, además de un medio
de escape para la sociedad moderna que se halla en una
especie de crisis bajo la tendencia de una existencia urbana
artiicial (MacCannell y Greenwood en Santana, 1997),
un ingrediente intangible denominado patrimonio cultural
inmaterial por la UNESCO, que a través de estrategias como
el programa puede formar parte sustancial de la oferta.
Como se señala anteriormente, el programa tiene entre sus
tareas una suerte de intervención estética sobre el paisaje
con el in de inyectar valor agregado al lugar y hacerlo más
atractivo al visitante.
Pueblos Mágicos: intervención estética e ideología en Mazunte, Oaxaca
…No sé la verdá… lo que pasa que casi no voy a las
asambleas, pero dicen que va a venir más gente y van a
arreglar para que se vea más bonito y parejo, por las casas
que se vean igual y las calles…
Fragmento de entrevista
…De que van a dar para que arreglen los de la playa, o las
casas no se bien, para que se vea mejor, de que no se vea feo,
por eso están arreglando la carretera…
Fragmento de entrevista
Zoido (2012) propone encontrar en el concepto de
paisaje una forma de abordar la estética, la ética y la
política a propósito de seis actitudes: conciencia de la
dimensión espacial, ser y estar en el mundo, asombro
ante él, contemplación y sublimación de la naturaleza,
voluntad de describir, representar, comprender y explicar
el mundo exterior, propósito de darle forma conveniente
u ordenarlo y por último, la búsqueda de un paradigma de
respeto e integración. Para Zoido (2012), en el paisaje se
insinúan manifestaciones estéticas primarias que aportan el
fundamento básico de la apreciación de la belleza a través
de él, y son éstas las que representan en Mazunte el material
simbólico dispuesto al turismo para su consumo.
El 90% de los visitantes a los que se les pidió dar signiicado a
la palabra “mágico” hizo evocación a palabras relacionadas a
lo diferente, único, especial. En relación al concepto “pueblo
mágico” la tendencia se mantuvo con 92.5%. Cabe destacar,
que el signiicado del concepto es ya apropiado por la mayoría
de los visitantes nacionales (90%) a través de la evocación
de palabras como tradición, cultura, belleza y auténtico,
mientras que para 80% de los visitantes extranjeros evocaba
tranquilidad, silencio y naturaleza. Similares respuestas se
obtuvieron por parte de visitantes nacionales en referencia
a la palabra “pueblo” con 95%.
Es importante considerar el peril de cada grupo, además de
la temporada en la cual fueron levantados los cuestionarios,
pues el turista nacional tiende a realizar la visita
acompañado, sea en pareja, familia o grupo, previamente
ha conocido otros “destinos turísticos” nacionales y tiene
antecedentes de lo que es un Pueblo Mágico. Por otro lado,
los visitantes extranjeros suelen viajar solos y provienen
de diversas culturas, que en sí representa una diferencia
importante.
167
Cabe subrayar que Pueblos Mágicos representa una marca
distintiva del turismo en México, como valor agregado de la
oferta turística de nuestro país. En este sentido, el concepto
de la marca Pueblo Mágico, viene a constituir lo que
Schopenhauer (Quesada, 1988) expone como la reunión
de lo múltiple y lo diverso en una misma representación,
para lo que es preciso eliminar las diferencias, de manera
que la aprehensión del concepto -de la marca- depende de
la facultad de abstracción a través del lenguaje. De ahí el
interés por la representación simbólica a través de la palabra
‘mágico’ y ‘pueblo’ como ‘signos sensibles’ (ijados y
retenidos sensiblemente en la conciencia) (Schopenhauer
en Quesada 1988:45), signiicados aprehendidos por el
visitante.
En tanto las expresiones culturales contemplan la historicidad
de lugar, leyendas, ritos, iestas, tradiciones, gastronomía,
artesanías, entre otras, que por su singularidad, ofrecen al
visitante (generalmente residentes de megalópolis), una
novedosa y atractiva forma de extraerse de la cotidianeidad
de la ciudad, lo auténtico de un lugar es neutralizado por
el estereotipo que generan las necesidades del visitante a
través de la marca (García 2015), la cual condensa en la
evocación de la palabra “mágico” todos esos atributos que
“emanan en cada una de las manifestaciones socioculturales,
y que significan hoy día una gran oportunidad para el
aprovechamiento turístico” según la SECTUR Fernández
et al. (2013) y que hacen único a un lugar.
Esta condición frente al consumo de lo rural cargado de
signiicaciones simbólicas frente a lo bello, lo mágico y lo
excepcional, surge frente a la obligación de la experiencia
turística -en tanto industria de la cultura, de borrar distancias
entre el arte y el observador.
Para Adorno (1971), esta aproximación de actitudes se ha
hecho fácil porque, en nuestra época de superproducción,
el mismo valor de uso de los bienes es cuestionable y cede
ante el goce secundario del prestigio, del goce de estar al
día, en deinitiva del goce de la mercancía: mera parodia del
resplandor estético.
El paisaje rural y las implicaciones que tiene Mazunte como
pueblo ambientalmente responsable y lo que ello representa
a través de una metáfora de lo ideal frente a lo caótico y
depredador de las metrópolis se vuelve una tendencia de
consumo, al cabo un fetiche, ‘la forma fantasmagórica de
una relación entre cosas’ (Marx en Žižek 2012).
168 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
El rasgo esencial del fetichismo de la mercancía, explica
Žižek (2012), no consiste en el famoso remplazo de los
hombres por cosas, sino en un falso reconocimiento que
puede tener lugar en una relación entre cosas, así como
entre hombres, con respecto a la relación entre una red
estructurada y uno de sus elementos; en el último de los
casos, el principio de identidad a partir de las relaciones de
dominio y servidumbre presente en la dialéctica hegeliana
del amo y el esclavo.
Si bien el paisaje rural no se considera como tal una obra de
arte o bien la cultura rural en sí, se obliga a través de la poética
a encajar como una a través de la inserción de evocaciones
de lo que sí es.
Los polos entre los que se da la pérdida de la esencia artística
son el que se convierta en una cosa más entre las cosas y
el que sirva como vehículo de la psicología de quien la
contempla (Adorno 1971). Todo aquello que las obras de
arte cosiicadas ya no pueden decir, lo sustituye el sujeto
por el eco estereotipado de sí mismo que cree percibir en
ellas (Adorno 1971).
Conclusiones
La naturaleza e historicidad de los denominados “Pueblos
Mágicos”, permite a la actividad turística no sólo reforzar el
sentido de nación a través de la re-signiicación de lo urbano
y lo rural desde el imaginario, sino que sincretiza, yuxtapone
ambas esferas en un producto rentable con valiosas cargas
simbólicas de lo diverso, lo particular, lo bello y lo auténtico.
El turismo nacional se perila como el principal mercado
a quien va dirigida esta estrategia, misma que aprehende
el signiicado de la marca a nivel ideológico con mayor
facilidad al evocar identidad e historicidad a través de la
experiencia del viaje.
La operación transformadora de la realidad a la que se reiere
el poder de la intervención estética de Pueblos Mágicos,
constituye un gancho escenográico que opera a través de
lo simbólicamente y metafóricamente mágico, hacia su
apropiación ideológica entorno a las posibilidades de un
desarrollo comunitario a partir de la adscripción al programa
que simbólicamente es percibido en el embellecimiento del
entorno.
Natalia Helena Jarquín Sánchez y José Alfredo Castellanos Suárez
La ideología, además de su función deformadora contiene
en sí otra que otorga legitimación, es decir, la representación
imaginaria de los valores atribuidos a los pueblos mágicos se
concede por parte de residentes y visitantes, reproduciendo
así el modelo de desarrollo icticio a pesar de no representar
beneicios reales en la calidad de vida de la comunidad.
Esto responde al cuestionamiento sobre la continuidad en
la búsqueda del registro al programa a pesar de las malas
experiencias de los habitantes de comunidades adscritas a
Pueblos Mágicos.
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Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 171-177
La reparación concesiva y la negociación de la afiliación
en el discurso de los hombres y de las mujeres
Juan José Torres Romo
Universidad Autónoma Chapingo. jjtromo11@gmail.com.
Resumen
En este estudio se da una explicación del habla de género
en las zonas rurales del municipio de Ojuelos, Jalisco. El
habla de hombres y de mujeres se caracteriza por ciertos
rasgos distintivos como es el uso generalizado del marcador
discursivo pues y la formulación extrema positiva en las
reparaciones concesivas de los hombres, mientras que
las mujeres usan principalmente la formulación extrema
negativa y no tienen un gran uso del reforzador pues. Se hace
un breve recuento de las corrientes que se han abocado al
estudio del habla de género. Por ser la reparación concesiva
una estrategia argumentativa para obtener la ailiación del
oyente, tiene importancia para constatar el orden social
que impone ciertas formas estratégicas en su uso dentro de
los distintos roles sociales que desempeñan los hombres
y las mujeres en sus comunidades. El valor simbólico de
las expresiones obtiene así su mayor valor con respecto a
la función social que tienen sus usuarios, puesto que ellos
hablan de acuerdo a la identidad que desean tener y ser
considerados por sus interlocutores (Bourdieu 1991).
Palabras clave: marcador discursivo pues, reparación
concesiva, ailiación, género.
Introducción
El estudio del habla de género ya tiene una larga tradición en
los trabajos sobre el uso del lenguaje. Se puede hablar de tres
corrientes al respecto. La primera surge con Otto Jesperson
en 1922, el cual presenta como inferiores a las mujeres en el
uso del lenguaje. En los años 70 surge una segunda corriente
bajo tres vertientes diferentes: el estado de subordinación de
las mujeres (Robin Lakof 1975), la dominación y el control
del lenguaje por parte de los hombres (Dale Spender 1980), y
los estilos diferentes pero igualmente válidos entre hombres
y mujeres (Deborah Tannen 1990). La tercera corriente se
encuentra perfectamente representada por Mills y Mullany
(2011). Las autoras señalan que las diferencias en el habla
entre hombres y mujeres se debe a la pertenencia a diferentes
clases sociales, a una distribución asimétrica del poder entre
los mismos, y a prácticas sociales diferenciadas entre ellos
(Cameron, 2007 y 2008).
Este artículo es una contribución a este extenso campo
de estudio Harrington et al. (2008). Nosotros tratamos
la interacción en diez entrevistas, de cinco hombres y
cinco mujeres en las zonas rurales del Municipio de
Ojuelos, Jalisco. Aquí nos concentramos en la forma en
que los hombres y las mujeres negocian la ailiación de su
interlocutor por medio de lo que Couper-Kuhlen, Thompson
(2005), Couper-Kuhlen (2002), y Tanskanen y Karhukorpi
(2008) llaman la reparación concesiva. En esta reparación
encontramos dos aspectos que diferencian el habla entre
hombres y mujeres. Por un lado, está el Marcador Discursivo
(MD) pues en las reparaciones concesivas, como reforzador
argumentativo González (2004). En las 10 grabaciones
encontramos las siguientes diferencias: los hombres usan el
MD 1 238 (71.03%) en sus distintas realizaciones fonéticas
(e.g. pos, po, pwes, pwe, pus, pu, ps, etc.), mientras que
solamente se registran 505 (28.97%) casos en las mujeres,
en todos los diferentes contextos de la interacción. Aparece
172 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
así dos veces más su uso en los hombres que en las mujeres.
Esto hace que sea un rasgo característico del habla masculina
en la región con respecto al habla de las mujeres. Por otro
lado, el tipo de la reparación concesiva es diferente entre
hombres y mujeres.
De acuerdo a Bourdieu (1991) el uso de ciertas expresiones
es el deseo del hablante de obtener la mayor ganancia
dentro del mercado simbólico del lenguaje comunitario.
Por lo tanto, las airmaciones masculinas son reforzadas
como prácticas comunitarias de quién es el que realiza
las órdenes y las airmaciones dentro de una comunidad
Eckert y McConnell-Ginet (1992, 2008). En este artículo
veremos cómo la reparación concesiva no tiene como
inalidad corregir errores en el momento de la interacción,
sino de prevenir potenciales problemas en la interpretación
o entendimiento de las posiciones del hablante. Por lo tanto,
se auto corrige o modiica lo dicho para obtener la ailiación
de su interlocutor (Tanskanen y Karhukorpi 2008), al tomar la
perspectiva de éste de forma colaborativa en el entendimiento
mutuo Linell (1998).
El corpus
El material estudiado aquí corresponde a diez grabaciones de
cuarenta y cinco minutos a una hora. Los entrevistados fueron
principalmente delegados políticos de las comunidades y
comisarios ejidales. En las mujeres también se buscó
a representantes oficiales del DIF o de la Presidencia
Municipal. Las diferencias en los usos del MD pues se releja
principalmente en las historias personales de los hablantes,
más que en la diferencia de edades entre ellos. En las
mujeres, por ejemplo, hubo una universitaria que utilizaba
más la forma estándar que todas las otras realizaciones
fonéticas. En otra mujer por su puesto de segunda delegada
y de encargada del DIF local, el uso de las realizaciones
fonéticas (i.e. pos, po, pus,pus, etc.) se asemejaba más al
de los hombres. Sin embargo, ningún aspecto sobre las
realizaciones fonéticas del MD pues, se abordarán en este
estudio, debido a que se harán referencias generales a la
distribución en el uso de las diferentes variantes de las
reparaciones concesivas, y al uso o no uso del MD en general
dentro de la concesión de las mismas, ya que es el tema que
nos ocupa en este momento.
Aunque fueron entrevistas orientadas por el investigador,
eran abiertas y en un ambiente de cordialidad en donde el
entrevistado decía de forma extensa sus propias opiniones.
Este método tiene la virtud de poder tratar temas que son
Juan José Torres Romo
muy difíciles de salir en una conversación informal. Se puede
decir, por lo tanto, que los hablantes usaron libremente el MD
pues como reforzador discursivo de sus opiniones y puntos
de vista ante las preguntas que se les hacían en la entrevista.
Se obtuvieron de esta manera la frecuencia y la variación del
MD en su uso generalizado en las comunidades.
Las entrevistas se realizaron con un cuestionario sobre
temas específicos que consideramos en ese momento
importantes para las comunidades: los niveles educativos
que obtienen los hombres y las mujeres, la implementación
de los programas de planiicación familiar, los programas
de apoyo al campo, las acciones de los partidos y sus
resultados en las comunidades, la gestión de los diferentes
presidentes municipales, la emigración a Estados Unidos de
América, las uniones libres de los muchachos, la tenencia
de la tierra después de recibir sus títulos de propiedad y
la accesibilidad a un empleo. Como todos estos temas
son asuntos cotidianos de las pequeñas comunidades, se
obtuvo una participación bastante amplia en cada uno de
los puntos tratados. Obviamente había asuntos delicados
para los entrevistados como eran sus opiniones sobre los
distintos presidentes municipales o las autoridades federales
en general. En estos casos se evitó hacer manifestaciones de
puntos de vista personales que no fueran en concordancia con
el entrevistado, para no llevarlo a una situación incómoda
en la entrevista. No se leyeron las preguntas, sino se dijeron
solamente de forma verbal como en una conversación.
¿Qué se entiende por reparación?
La reparación
La reparación se ha relacionado tradicionalmente con el
lenguaje hablado, pero actualmente se estudia en textos
escritos, como son los mensajes en los correos electrónicos
(Tanskanen y Karhukorpi 2008). Por lo tanto, ya no
solamente pertenece al campo del análisis conversacional.
Desde el inicio los autores dedicados al estudio de la
reparación distinguieron entre lo que era una corrección de
error y una reparación. Mientras que la corrección reemplaza
un error, la reparación maneja los potenciales problemas
que se pueden presentar en la conversación; es decir, en la
fuente del problema del elemento lingüístico que se repara.
(Tanskanen y Karhukorpi, 1589).
Uno de los aspectos fundamentales de la reparación en
general es que es un aspecto social y no un asunto sicológico
privado, ya que es de acuerdo a normas sociales establecidas
La reparación concesiva y la negociación de la afiliación en el discurso de los hombres y de las mujeres
en las comunidades, como podremos ver en los resultados
de nuestro estudio Hayashi et al. (2013). La parte de la
posición del hablante que es considerada como problemática
en las reparaciones concesivas puede ser de cualquiera de los
interlocutores. En otras palabras, el hablante puede evaluar
que lo que pretende decir no es lo que se debe decir, o que
no es interpretado de forma correcta por parte del oyente. El
oyente, a su vez, puede no interpretar de forma adecuada lo
que le dice su interlocutor. Por lo tanto, el hablante busca la
participación cooperativa de su interlocutor para que se de
una interpretación adecuada sobre lo que dice. La estrategia
de las concesiones es así reparar la fuente del problema de la
interacción (Tanskanen y Karhukorpi, 1589).
El patrón común de las reparaciones se ha dividido en cuatro
diferentes tipos relacionados. 1) La reparación puede ser
auto iniciada y auto completada por el mismo hablante que
origina el problema; 2) puede ser iniciada por otro pero es
auto completada por el hablante que produce la fuente del
problema; 3) puede ser auto iniciada por el causante del
problema pero completada por otro interlocutor, y por último
4), puede ser iniciada por otro y completada por otro. Las
reparaciones concesivas pueden ser iniciadas por otros, pero
173
siempre son completadas por el hablante. De esta manera la
reparación concesiva forma parte de las auto reparaciones
como forma predominante sobre la reparación realizadas
por otro u otros Scheglof et al. (1977).
La reparación y la negociación de la ailiación
Los autores que se han dedicado al estudio de la reparación
concesiva señalan que el hablante modiica sus airmaciones
con formulaciones extremas por medio de una retractación
de lo dicho, al considerarlas que contienen presuposiciones
erróneas o pueden producir un desacuerdo con la postura
del hablante (Thompson y Couper-Kuhlen 2002; CouperKuhlen y Thompson, 2005). Por su parte Mori (1999)
las considera como una negociación de opiniones. Las
reparaciones concesivas contienen tres distintas fases: el
hablante primero hace una airmación extrema, de la cual se
retracta, niega, o minimiza en la (concesión), y inalmente
formula una afirmación modificada (una afirmación
revisada). Son de tres tipos las reparaciones concesivas:
formulaciones extremas positivas, formulaciones extremas
negativas y no formulaciones extremas. Estos tres tipos de
formulaciones se muestran en el Cuadro 1.
Cuadro 1. Los tres tipos de reparaciones concesivas (tomado de Tanskanen y Karhukorpi 2008).
Formulación extrema airmativa
Formulación extrema negativa
Formulación no extrema
Deinición
Se retracta de una aseveración
airmativa con una concesión negativa
o que tiene una implicación negativa; la
revisión de la declaración es airmativa
y es típicamente iniciada con pero
El hablante hace una negación
categórica, de la cual en
seguida se retracta. La revisión
de la declaración es iniciada
con pero
El hablantes hace una
airmación cuando no es
una airmación extrema. Se
considera a pero como una
cualiicación necesaria.
Formulación
extrema
R: Estoy bastante contento de que
mañana es día de entrenamiento y
puedo tener un cambio.
Bueno, no realmente un cambio, pero tú
sabes un descanso
R: No he comido un solo
pedazo de carne
L: Sería interesante que
supiera tejer
E: Comí tacos la última noche,
ahí había un poco de carne pero
no mucha.
L: Bueno, sí se tejer pero
no lo disfruto.
Concesión +
airmación
revisada
(). Traducción de la autora.
Las reparaciones concesivas se caracterizan por una relación
polar. La primera parte de la reparación de la secuencia,
la concesión tiende a ser la polaridad de la airmación
extrema que trata de modiicar o de minimizar. La segunda
parte, la airmación revisada, tiene la misma polaridad que
la airmación extrema. Por ejemplo, cuando el hablante
introduce una airmación extrema negativa, la debilita con
una concesión airmativa. Después de la cual el hablante
modiica o modera su posición de su airmación inicial. De
tal forma que se puede sostener el sentido original de su
airmación (Tanskanen y Karhukorpi, 2008).
Para hacer una diferencia en el uso del MD pues y el
tipo de reparación concesiva entre hombres y mujeres
tomamos las oraciones que tienen el marcador discursivo
en la concesión y las que no lo tienen, además del tipo de
174 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
reparación concesiva que se daba. Como se podrá ver en los
resultados, existe una diferencia bastante marcada entre ambos
géneros, tanto en el uso del MD como en el tipo de reparación
concesiva. A diferencia de Tanskanen y Karhukorpi (2008),
nosotros encontramos en casi todos los casos la clásica forma de
reparación concesiva como lo sostienen Thompson y CouperKuhlen 2002 y Couper-Kuhlen y Thompson 2005). Es decir, en
todos los casos se presenta la airmación extrema, la concesión
y la introducción de la revisión de la airmación con pero.
Solamente dos casos se pueden considerar como reparaciones
concesivas sin pero o sin la revisión de la airmación.
La reparación concesiva en el habla de
género
Juan José Torres Romo
airmación con “por lo mismo...”, el cual es enfatizado con
otra repetición similar con el reforzador pues. En nuestros
hablantes encontramos una toma de responsabilidad
explícita con lo que se dice al inicio de la concesión en las
formulaciones positivas extremas. En este caso la expresión
“le aseguro” es asumir la responsabilidad de lo que se
menciona. La expresión del sonido “mmm” con la lecha
hacia arriba indica el énfasis que se le da a la presuposición
negativa de que no serían pocos los que andarían en las
drogas, estableciendo así la relación polar entre la airmación
extrema y la concesión. Por último, restablece el valor de
la airmación extrema con una airmación modiicada de la
misma al decir “pero pu:: stá la gente aquí muy apenas pos
también ¿con qué?”.
La formulación extrema negativa
La formulación extrema positiva
Couper-Kuhlen y Thompson (2002) y Tanskanen y
Karhukorpi (2008), señalan que una formulación extrema
positiva es típicamente negada por medio de una concesión
negativa (no) y con otro marcador (of course en inglés).
En nuestro caso se da con “le aseguro” como toma de
responsabilidad de lo que se dice. La concesión de la misma
manera es seguida con una aseveración positiva que revisa
la airmación inicial, y es introducida por pero. El hablante
niega así la implicación no intencionada de la airmación
extrema. Véase el siguiente ejemplo:
En la formulación extrema negativa el hablante trata
de retractarse de una airmación negativa. De acuerdo
al principio de polaridad, la concesión es siempre una
airmación que en este caso es introducida por “nomás”. En
otros casos es por medio de otros adverbios contrastantes.
La formulación negativa revisada por su parte es introducida
por pero Tanskanen y Karhukorpi (2008). Veamos lo anterior
en el este segundo ejemplo:
(2)
(1)
El hablante inicia con una expresión típicamente extrema al
decir “poca juventú” (Couper-Kuhlen y Thompson 2005, y
Pomerantz 1986)1. Después hace un comentario sobre esa
Las marcas que tienen las transcripciones como son las lechas ( ) hacia
arriba indican que se sube el tono de voz y cuando están hacia abajo
indican que se baja el tono voz ( ). Los pequeños círculos (°) indican que
se dice todo en voz muy baja. Y los dos puntos (:) o más de dos puntos
señalan el alargamiento que se hace de la letra que le sigue. Los números
1
En este extracto 2, el tópico trata sobre las limitaciones
que tenían los poseedores de la tierra por parte del
dueño del terreno. La reparación concesiva consiste en
que los dueños de todos modos no viven ahí y eso hace
imposible que ellos puedan tener un control total sobre sus
propiedades. Sin embargo, la reairmación de la negación
extrema se da por el hecho de que ellos tienen un vaquero
entre paréntesis son el tiempo de silencio de los hablantes. Nosotros
estamos utilizando la transcripción más simpliicada posible para que
sea posible la lectura de los extractos. Por lo tanto, solamente se utiliza
la anotación pertinente que nos indica alguna variación signiicativa en
las reparaciones concesivas.
La reparación concesiva y la negociación de la afiliación en el discurso de los hombres y de las mujeres
que asume el cuidado de los bienes. De esta manera se
evita un malentendido por parte del oyente de que no hay
limitación alguna.
La formulación no extrema
De la misma manera que todos los autores citados en este
trabajo sobre la reparación concesiva, las formulaciones
no extremas no son las formas más típicas de este tipo de
reparación. Sin embargo, debido a que una airmación
necesita una cualificación funciona con los mismos
principios que las formulaciones extremas. Un ejemplo
de formulación no extrema, se puede ver en el siguiente
extracto:
(3)
175
decisión metodológica, decidimos cuantiicar todos los
casos de las reparaciones concesivas independientemente si
presentaban alguna realización fonética o no del Marcador
Discursivo pues. Los resultados globales se pueden ver en
la Figura 1.
Reparaciones concesivas con y sin el MD pues
Número total de casos
Hombres
Mujeres
60
50
40
30
20
10
0
Formulación extrema
positiva
Formulación
extrema negativa
Formulación no
extrema
Figura 1. Ejemplos observados con el formato de la reparación
concesiva.
Como se puede ver en el ejemplo anterior, la hablante no se
retracta generalmente de la airmación hecha, pero desea
cambiar su argumentación, o la implicación que podría
conducir a un malentendido o a un desacuerdo CouperKuhlen y Thompson (2005). En efecto nuestra hablante
inicia diciendo que trabajó en la granjas Bachoco, pero
minimiza su importancia al indicar que no pagaban bien
en la reparación concesiva. Sin embargo, restablece la
importancia de trabajar en Bachoco al decir pero tenían
servicio de transporte. Esto indica que de todos modos su
salario quedaba íntegro sin el gasto de los transportes. Este
tópico se implantó anteriormente al decir que los salarios son
muy bajos en la región, y que si se tiene que salir el salario
se gastaría casi en su totalidad en el transporte.
Los resultados
La reparación concesiva y el habla de género
En todos los ejemplos encontrados en nuestras entrevistas
con el formato de la reparación concesiva, vemos una
marcada diferencia entre hombres y mujeres. Por una
Como podemos ver en esta figura, hay tres resultados
importantes. Primero, en la formulación extrema positiva
los hombres predominan en su uso al registrarse 51 casos,
mientras que en las mujeres solamente aparecen 21 ejemplos.
De esta manera los hombres usan más del doble este formato
con respecto a las mujeres. En segundo lugar, la formulación
extrema negativa registra no solamente un caso inverso, sino
que las mujeres utilizan este formato más de cinco veces que
los hombres. Es decir, en los hombres solamente encontramos 7
ejemplos con respecto a los 50 casos que se registran en el habla
de las mujeres. Por último, el formato de las formulaciones no
extremas con respecto a las formulaciones extremas son casos
menores y casi distribuidos equitativamente entre hombres y
mujeres, con 14 y 15 ejemplos respectivamente.
Las reparaciones concesivas con el MD pues
El reforzador del MD pues de la misma manera que los datos
anteriores nos muestra un uso diferenciado entre hombres y
mujeres. Mientras que en los hombres se registran por mitad
el uso y no uso del Marcador Discursivo pues en los tres
diferentes tipos de reparaciones concesivas, en las mujeres
aparece en la mayoría de los casos de la reparación concesiva
sin este reforzador, como se puede ver en la Figura 2.
En efecto, si comparamos los datos de la (Figura 1 y 2),
veremos que las mujeres no usan el marcador discursivo
pues principalmente en las formulaciones extremas
negativas y en las formulaciones no extremas. En el primer
176 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
caso encontramos 34 veces de los 50 ejemplos vistos en la
Figura 1. En la formulación no extrema 14 de los 15 ejemplos
no tienen este marcador si se comparan las dos gráicas. Por
su parte, en los hombres en los tres tipos de reparaciones
observamos una diferencia de casi 50% entre los totales de la
(Figura 1) y los resultados de la Figura 2. En las formulaciones
extremas positivas 24 ejemplos no tienen el marcador de los 51
registrados en la primera igura en las formulaciones extremas
negativas 4 de 7, y en las formulaciones no extremas 7 de 14.
Reparaciones concesivas sin el MD pues
Subtotal de número de casos
Hombres
Mujeres
Juan José Torres Romo
En efecto, si comparamos las tres gráicas, vemos que tanto
los hombres como las mujeres tienen un ligero incremento
en el uso de este reforzador, o al menos está por encima de
la media de los datos en la formulación extrema positiva. En
los hombres encontramos 27 casos con el reforzador y en
las mujeres 12 cuando estos mismos tipos sin el reforzador
son 24 y 9 respectivamente. Obviamente no se podría decir
que son números signiicativos estadísticamente, pero si
los enlazamos con las otras formulaciones no extremas y
extremas negativas, vemos que hay un patrón hacia un menor
uso en estos dos últimos casos, y por lo tanto son diferentes
con respecto al primero.
35
30
Conclusiones
25
20
15
10
5
0
Formulación extrema
positiva
Formulación
extrema negativa
Formulación no
extrema
Figura 2. Las reparaciones concesivas sin el marcador
discursivo pues.
La concesión con el MD pues
En estos últimos datos es interesante notar que las
formulaciones extremas positivas tienen un mayor uso del
reforzador pues, mientras que las otras formulaciones en
general tienden a tener menor presencia del reforzador. Si
esto es así, entonces a las formulaciones extremas positivas
se les otorga un mayor énfasis que las demás formulaciones,
como nos muestra la Figura 3.
Reparaciones concesivas con el MD pues
Subtotal de número de casos
Hombres
Mujeres
Tres son los aspectos importantes que podemos ver
en nuestros resultados. Primero, el tipo de reparación
concesiva utilizado por las mujeres y los hombres. El
segundo, es el uso del reforzador pues mayoritariamente
por los hombres, y por último la tendencia de usar este
reforzador en las formulaciones extremas positivas,
mientras que en las otras formulaciones disminuye
drásticamente especialmente en las mujeres. Se observa de
esta manera, una marcada diferencia entre ambos géneros
en el uso de los recursos lingüísticos. Mientras que los
hombres tienden a usar más el reforzador para plantear
su posición con respecto a lo que han dicho, las mujeres
lo dejan pasar como algo no necesario en la reparación
concesiva. De la misma manera las formulaciones extremas
positivas y negativas, nos indican funciones diferenciadas
en la comunicación entre hombres y mujeres. Esto responde
sin duda alguna a funciones sociales más amplias, como es
el caso de quién puede decir qué dentro de los roles sociales
comunitarios, ya que el empleo de una u otra es una forma
estratégica de obtener la mayor ganancia simbólica de las
palabras (Bourdieu, 1991).
30
25
20
15
10
5
0
Formulación extrema
positiva
Formulación
extrema negativa
Formulación no
extrema
Figura 3. Las reparaciones concesivas con el marcador
discursivo pues.
Como señala Ochs (1992, 2008) estos rasgos son algunos de
los que indexan directamente y exclusivamente al género,
debido a que el lenguaje está inluenciado por los roles
locales que desempeñan, sus derechos y expectativas entre
ambos géneros. Esto quiere decir que nos dan una idea clara
de la diferencia de los derechos ejercidos entre hombres y
mujeres de las comunidades estudiadas. Sin embargo, este
constructo social puede ser modiicado por la transferencia
de nuestros conocimientos y estudios discursivos a las
comunidades a través de cursos de equidad de género en
la educación media superior, en la implementación de
La reparación concesiva y la negociación de la afiliación en el discurso de los hombres y de las mujeres
los programas comunitarios por parte de las instancias
gubernamentales, y por medio de cursos especializados
sobre el tema en las comunidades estudiadas.
Literatura citada
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leading to possible misapprehension”. Paper Presented 1 March
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Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 179-186
Consideración terminológica para discernir
respecto a la economía social
Graciela Soria Sánchez
Diseño y Evaluación de Políticas Públicas para el Desarrollo Rural-CIESTAAM. Universidad Autónoma Chapingo. soria.ssg@gmail.com.
Resumen
La economía social (ES) se ha manifestado como una
extensión de la política, teniendo entre sus principales
exponentes a economistas franceses y alemanes, siendo en
la escuela europea donde se realizaron diversas propuestas
y acciones en el mundo occidental. Su concepto evoca
toda una serie de términos que han sido utilizados como
sinónimos, generando en diversas ocasiones imprecisiones
y confusión para su comprensión. Por tanto éste trabajo
analiza las implicaciones terminológicas de la ES desde la
corriente europea. Observándose que la concepción actual
de ES mantiene un enfoque empresarial en armonía con
la economía de mercado, ante un contexto de economía
globalizada, en donde el cooperativismo moderno se ha
alejado de la lógica original del asociacionismo obrero y de
los principios que lo distinguían.
Palabras clave: asociación económica, cooperativismo,
economía social Europea.
Introducción
Si bien toda economía en su manifestación práctica es
social, la economía neoclásica no otorga mayor importancia
a las relaciones sociales de los sujetos ni mucho menos
los considera parte fundamental del sistema económico
dado que, los cánones del sistema económico actual se
fundamentan en la relación medios-ines colocando a la
escasez de los recursos como base del sistema.
Desde esta perspectiva, la economía puede adoptar formas
institucionales construidas sobre la base de las relaciones
sociales adoptadas por los sujetos y su relación con los
medios de producción, los procesos de producción y
el consumo, lo que deine las distintas formas de hacer
economía. La economía social y Solidaria es una de ellas,
siendo los términos comúnmente enunciados para evocar
una forma de hacer economía en la cual se coloca al hombre
como el centro del proceso económico y no al capital. Esta
concepción ha adoptado diversas variantes generando
toda una polisemia en el término, por ejemplo, en América
Latina evoca una alternativa económica transformadora
del sistema económico convencional, mientras que
en otras regiones la Economía Social representa un
cooperativismo empresarial. Ante esta heterogeneidad
quedan lagunas para comprender las variantes en el
término, de dónde surgió, ante que contexto surgió y como
se ha ido transformando.
Al respecto se conoce que el término economía social (ES)
es reconocida como corriente económica en el siglo XIX
en Europa; sin embargo, aún no hay consenso respecto a
su término, por ello en el presente trabajo únicamente se
analizará las implicaciones del término ES desde su corriente
europea. Por tanto el objetivo del presente trabajo consiste
en el análisis de las implicaciones teóricas y terminológicas
del concepto Economía Social desde su corriente teórica
europea. Para ello se recurrió al análisis interpretativo de las
investigaciones realizadas por los principales exponentes del
tema en Europa, con el in de que el lector relexione en torno
Graciela Soria Sánchez
180 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
al entramado terminológico del término ES, permitiéndole
adquirir elementos para discernir en torno a las economías
alternativas.
Orígenes del término de economía social
Las raíces del término economía social en Europa encuentra
sus raíces en el asociacionismo obrero del siglo XIX, con
base en un contexto histórico en donde convergen diversas
doctrinas utópicas, teniendo entre sus principales y más
conocidos exponentes se encuentran a Robert Owen, Henri
de Saint-Simon, Charles Fourier, Pierre-Joseph Proudhon.
A modo de resumen el Cuadro 1 muestra las corrientes
ideológicas que dieron origen al término ES, dejándose ver
que no es posible asignar a ninguna de las corrientes aquí
descritas la supremacía en el desarrollo del concepto dado
que, todas han sido inluenciadas por movimientos sociales
en diferente contexto histórico principalmente económico
y político. Sin embargo, se percibe que el concepto ES
surgió como un modo de interpelación al estado-industria,
fundamentado en los movimientos obreros asociacionistas
que dieron origen al movimiento cooperativista.
En sentido estricto, el término surge en Francia en 1830
a partir de la propuesta de economía con enfoque moral
de Charles Dunoyer (economista liberal) plasmado en su
publicación Traté d’économie sociale, considerándose
que desde entonces y hasta inales del siglo XIX la ES
pretendía ser una forma de hacer economía política
fundada en la vivencia del coste humano que dejó la
revolución industrial. Bajo esta premisa se reprochaba a
la ciencia económica dominante la nula sensibilidad hacia
la dimensión social.
Cuadro 1. Fuentes de la economía social.
Escuela
Figuras
principales
Fundamento
Se coloca principal interés en la “asociación” ligada a una intervención del Estado.
Hasta 1870, los pensadores socialistas-asociacionistas adquieren inluencia dentro
-Pecqueur
del movimiento obrero internacional para identiicar la idea de socialismo y economía
Socialista-Francois Vidal social; sin embargo, una parte del movimiento obrero negó la función de la economía
asociacionismo
-Benoít Malón social en el proceso de transformación de la sociedad, considerándose al movimiento
en el mejor de los casos como un medio de mejorar la condición de los pobres y
educarlos, o como una herramienta para unir fuerzas en el combate político.
SocialCristiana
Liberal
Solidarista
-Le Play
-FrédericRafeisen
Se apela a los "cuerpos intermediarios" para luchar contra el aislamiento del individuo
(tara del liberalismo), y contra la absorción del individuo por el Estado (trampa del
jacobinismo). Estas micro-estructuras, aunadas a la airmación de la autonomía de
los individuos, generan el concepto de “subsidiaridad”, implicando a una instancia
superior no acaparadora de las funciones de la instancia inferior.
Se coloca a la libertad económica por encima de todo y se rechazan las eventuales
injerencias del Estado. Se fundamenta principalmente en el principio del self-help. La
-Charles Dunoyer postura de Leon Walras (aunque distan de ser idénticas) podría asociarse a la postura
-Fréderic Passy liberal, principalmente por la importancia que otorga a las asociaciones populares, a
John Stuart Mill en los trabajadores y a Hermann Schulze (Alemania) y Luigi Luzatti
(Italia) en su importante papel en el nacimiento de las cooperativas de crédito.
Promueve fundamentalmente la cooperación en la producción. La escuela Nímes hace
-Charles Gide que la cooperación en el consumo sea el centro de la renovación social. En este sentido,
(escuela de
encuentra coincidencias con los socialistas cristianos ingleses e implantan en Francia el
Nímes)
modelo de Rochdale. Paralelamente a esta rama cooperativista de inspiración cristiana,
-Auguste Ott A. Gueslin propone al solidarismo como una rama laica y republicana inspiradora de la
mutualidad francesa.
Fuente: elaboración propia con base en (Monzón y Defourny, 2000:6-7).
Consideración terminológica para discernir respecto a la economía social
(Monzón, 2013; Monzón y Defourny, 2000). El tratado
de Dunoyer surge bajo el contexto de pobreza que generó
la Revolución Industrial y en donde la clase obrera fue la
más afectada, por tanto, la visión de economía social y
su discusión tiene su raíz en los problemas económicos,
políticos y sociales de los trabajadores, en la procuración
de propuestas para abatir los estragos en la población
trabajadora. En este sentido, la discusión se enfocó bajo
dos premisas principalmente: “desde exigencias morales
traída de la ética católica (…) desde posiciones de
orientación socialista” (Montolio, 2002:3).
En el siglo XIX es reconocido por primera el concepto de
economía social en los estudios económicos, encabezado
por dos prestigiados economistas por un lado John Stuart
Mill, por un lado, y por otro Leon Walras. El primero
centró su atención en el asociacionismo de cooperativas y
mutuales y su fomento, mientras que el segundo observó a las
cooperativas como una parte del sistema económico. Ambos
autores consideraron que las cooperativas solucionaban
conflictos sociales, pues ejercían un importante papel
económico y moral que no suprimía al capital sino más bien,
permitía construir un mundo menos capitalista al introducir
democracia en los procesos de producción. En 1896,
Walras publica el Estudios de Economía Social: teoría de
la distribución de la riqueza social, con la cual se distingue
la ruptura del enfoque original de la ES, este texto pasa a
formar parte de la ciencia económica convirtiéndose en el
espacio de las cooperativas, mutuales y asociaciones tal y
181
como se conocen en la actualidad (Monzón y Chávez, 2012).
En este sentido, Walras (quien fue uno de los economistas
más sobresalientes del análisis económico) consideraba a
las cooperativas como una parte complementaria del sistema
capitalista, dado lo cual suponía que:
La acción cooperativa permite iniciar a los trabajadores en
las leyes y mecanismos del capital liberal, considerando
que las cooperativas donde mejor pueden desenvolverse
es en el área de la producción antes que en la distribución
(…) y concluye que las cooperativas (…) cumplen su gran
papel económico que son suprimir el capital sino hacer
que el mundo sea más capitalista, y también un papel
moral, no menos considerable, que consiste en introducir
la democracia en el mecanismo de la producción (Monzón,
2003:20).
Por tanto las bases que dieron origen a los estudios y al
término de la ES se encuentra en los movimientos obreros
organizados en cooperativas, y que posteriormente fueron
retomadas por la ciencia económica. Desde nuestra
perspectiva la lógica bajo la que operaba la organización
colectiva del trabajo asumida por los obreros, fue retomada y
reinventada por la ciencia económica para servir al sistema,
lo que en gran medida se contrapone con los ideales del
movimiento cooperativista. Al respecto la Figura 1, muestra
la transformación del término ES sobre bases teóricas
europeas, y a partir de la cual se desarrolló en las diferentes
regiones del mundo.
Fuente: elaboración con base en información del Istituo Naciona de Economía Social (2013).
Figura 1. Desarrollo histórico conceptual de economía social.
182 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Es interesante observar como el término ES se difunde
ampliamente en la década de los setentas en donde se
asocia un emprendimiento (empresa) fundamentado en el
tipo de propiedad de los socios trabajadores, visto de este
modo y desde nuestra perspectiva, ante la competencia
de los pequeños propietarios se crea una nueva forma de
organización con el objetivo de unir fuerzas para enfrentar
las exigencias del sistema económico de manera colectiva,
lo que nos hace pensar que es el sujeto competitivo lo que
da origen a una ES desde el contexto europeo.
Graciela Soria Sánchez
del sistema económico y que se encuentra vigente en
la actualidad. En éste se consideran cuatro interfaces
interconectadas con otras esferas: a) sector público estatal
(estatal); b) público local (sector comunitario e informal);
c) el sector privado (fundamentalmente empresarial);
y d) el sector sindical (trabajadores). A partir de ello se
consideran tres formas de organización que representan el
sector de la economía social o tercer sector: las cooperativas,
mutualidades y asociaciones (Figura 2).
La economía social y su definición clásica
contemporánea
Como ya se había mencionado el concepto de economía social
se encuentra sumamente arraigado en las organizaciones
colectivas de mayor tradición al servicio de sus miembros:
las cooperativas, las mutualidades y las asociaciones.
Éstas, a lo largo del tiempo se han redeinido, han creado
alianzas, y se les ha colocado una normatividad especíica.
Todo ello a través de distintas declaraciones y principios
a partir de instituciones creadas por ellos mismos y/o por
instancias gubernamentales. El concepto de economía social
toma relevancia en 1980 cuando el “Comite nacional de
liaisondes activités des activités coopératives, mutuelles et
associatives” diera a conocer la carta de la economía social,
deiniéndola como:
El conjunto de entidades no pertenecientes al sector público
que, con funcionamiento y gestión democráticos e igualdad
de derechos y deberes de los socios, practican un régimen
especial de propiedad y distribución de las ganancias,
empleando los excedentes del ejercicio para el crecimiento
de la entidad y la mejora de los servicios a los socios y a la
sociedad (Monzón, 1987:20). Esta deinición dio pié para
que en otros países se formularan otras deiniciones, en las
cuales se encuentran elementos comunes como el del carácter
privado de la organización, gestión democrática, distribución
de beneicios, etc., sustentados fundamentalmente bajo
las clásicas organizaciones a saber: las cooperativas, las
mutuales y las asociaciones (Monzón, 2006).
Otro maniiesto que otorgo importancia a la delimitación
del concepto de ES fue la carta de economía social diseñada
por Henrry Desroche, la cual fue promovida por diferentes
organismos sociales en Francia en 1983. Esta manifestaba
el modo en que la economía social debería operar dentro
Fuente: Desroche (1983).
Figura 2. Delimitación de la economía social de Desroche.
Es fundamental destacar que la delimitación de Desroche
hace énfasis en una economía mixta en donde conluyen
el sector: público (gobierno estatal y local), el privado
(empresas), e incluye al sector sindical, y como en antaño
la base del sistema del sector de la ES se constituye
por cooperativas, mutuales y asociaciones, quienes se
interrelacionan con los demás sectores. Sin embargo, la
delimitación más importante y que antecedió al moderno
concepto de ES fue aportada en 1989 por la antigua
comunidad europea, hoy Unión Europea (UE) a partir
de la: comunicación sobre las empresas de la economía
social y la creación de un mercado europeo sin fronteras.
El comunicado colocaba especial singular importancia a las
cooperativas, mutualidades y asociaciones agrupadas en la
forma de economía social y su participación en el mercado
sin obstáculos. La comunicación bajo la indicación de las
empresas de Economía Social y la creación de un mercado
europeo sin fronteras aglutinaba el concepto central del
término en la siguiente forma:
Una empresa pertenece a la economía social si su actividad
productiva se basa en técnicas organizativas especíicas.
Estas técnicas se fundamentan en los principios de
solidaridad y participación (que normalmente responde
a la norma un hombre un voto) entre sus miembros, sean
estos productores, usuarios o consumidores, así como en los
valores de autonomía y de ciudadanía (…) El carácter social
Consideración terminológica para discernir respecto a la economía social
de estas empresas viene determinado por sus ines (…) y por
sus formas de organización y gestión y no por la naturaleza
de los bienes o servicios producidos” (Montolio, 2002).
.
Por otro lado Montolio (2002) considera que la delimitación
más reciente elaborada por los propios actores se generó en
2002, en donde se incluyen siete principios que distinguen
a las organizaciones de la ES. Dichos principios fueron
promovidos en la conferencia Europea permanente de
cooperativas, mutualidades, asociaciones y fundaciones y han
sido plasmados en la carta de Principios de la Economía Social,
la cual considera que si bien las formas jurídicas pueden varia
para los diferentes países miembros los principios propuestos
distinguen a las cuatro familias de entidades de la ES que las
diferencia de las empresas del capital.
La premisa que diferencia a las empresas de ES en comparación
con las empresas de capital se enunciaron de manera resumida
en la Conferencia Internacional de Budapest en 1999,
aludiendo a que las empresas de economía social deben:
No perseguir un beneicio sobre el capital comprometido
sino una razonable distribución de recursos entre los socios o
usuarios. Responder, por lo general, al principio “un hombre
183
un voto”. Flexibilidad y adaptabilidad en correspondencia
con una sociedad cambiante. Tratarse, por lo común, de
asociaciones de personas, basadas en la libre participación
y en la responsabilidad.
Ante este escenario podemos observar que la delimitación
de la ES se ha fundamentado principalmente sobre una base
jurídica (cooperativas, mutualidades y asociaciones) y una
normativa (los 7 principios de las entidades de ES). En este
sentido Defourny (2009) considera que la deinición más
adecuada para delimitar las ES será la combinación de: la
forma jurídica-institucional que adquiere la organización;
y 2) los rasgos comunes que estas adquieren, generando un
tercer sector (Figura 3).
Como podemos ver ante los inminentes cambios que
generan la globalización así como el cambio tecnológico
en el mundo, las cooperativas, mutuales y asociaciones
se han adaptado y han generado representaciones
económicas en todos los sectores de la economía,
encontrándose formas jurídicas que permiten alianzas
con organizaciones de capital privado, las cuales
incluso, se han convertido en grandes empresas
trasnacionales.
Fuente: elaboración con base en información de (Chaves y Monzón, 2001; Defourny, 2009; Montolio, 2002).
Figura 3. El dualismo de la deinición de la economía social.
184 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
En este sentido el International Center of Reseach and
Information on the Public, Social and Cooperative
Economy (CIRIEC) por sus siglas en español ha
jugado un importante papel, la cual es una organización
cientíica no gubernamental con presencia internacional,
considerada una de las principales instituciones de
investigación en torno a las empresas de economía social.
CIRIEC- Internacional representa un organismo paraguas
de referencia, en sus investigaciones reúne diversas
experiencias y tradiciones a nivel mundial con el in de
llegar a la convergencia de conceptos y metodologías de
estudio, CIRIEC-I utiliza el término “Economía Social”
y asume que en el término existe una gran diversidad
de personalidades jurídicas y de comportamiento en
diferentes partes del mundo.
Economía social de mercado y no mercado
La segunda definición más reciente parte de las
investigaciones de CIRIEC en 2006, a dicha deinición se
le ha otorgado el mayor crédito a nivel internacional y ha
sido aceptada por el consejo económico y social europeo.
La propuesta fue desarrollada por Monzón y Chaves (2012)
en 2006, quienes por encargo del consejo económico y
social europeo (CESE) deinieron y delimitaron la ES
considerando los contextos de los países miembros. La
delimitación tomó como base los Sistemas de Contabilidad
Nacional de la Unión Europea adecuando las características
de las entidades de ES, con lo que llegaron a la siguiente
deinición:
Conjunto de empresas privadas organizadas formalmente,
con autonomía de decisión y libertad de adhesión, creadas
para satisfacer las necesidades de sus socios a través del
mercado, produciendo bienes y servicios, asegurando o
inanciando y en las que la eventual distribución entre los
socios de beneicios o excedentes, así como la toma de
decisiones, no están ligadas directamente con el capital o
cotizaciones aportados por los socios, correspondiendo un
voto a cada uno de ellos. La economía social también agrupa
a aquellas entidades privadas organizadas formalmente con
autonomía de decisión y libertad de adhesión que producen
servicios de no mercado a favor de las familias, cuyos
excedentes, si los hubiera, no pueden ser apropiados por
los agentes económicos que las crean, controlan o inancian
(Monzón y Chavez, 24).
Graciela Soria Sánchez
Podemos apreciar que la deinición enmarca una moderna
forma de clasiicar al sector de la ES (dado la versatilidad de
experiencias de ES) bajo dos vertientes, las organizaciones
de mercado y de no mercado en donde las organizaciones
sin ánimo de lucro son sustanciales.
La doble vertiente se sustenta en el “manual de cuentas
satélites de las empresas de economía social” realizado por
CIRIEC (Barea, 2004). El manual explica una metodología
con la que se podrán elaborar estadísticas fiables y
armonizadas en el marco de la contabilidad nacional (SEC
1995) (Monzón y Chaves, 2012:109), al considerarse cinco
grandes grupos de empresas que se involucran en la lógica
de la ES:
Cooperativas, mutuas, grupos empresariales de la economía
social, otras empresas similares de la economía social e
instituciones sin ines de lucro al servicio de las empresas
de ES.
Dicha clasiicación resulta muy útil para el análisis de la
actividad económica y en conformidad con los sistemas
de contabilidad, diseñando para ello un “Manual de
orientación para la elaboración de una cuenta satélite de las
empresas de la Economía Social”, dado que los sistemas
de contabilidad convencionales sólo permiten cuantiicar
los grandes agregados económicos privados (capitalista)
y público (complementario) (Monzón y Chaves, 2012;
Monzón, 2013).
El fundamento de la metodología tiene su base en la
clasiicación de las organizaciones a partir de dos principios
considerados:
a) El de subsector de productores de mercado: conformado
principalmente por cooperativas, grupos empresariales
controlados por cooperativas, mutuas, empresas sociales,
ciertas empresas sin ines de lucro al servicio de las empresas
de ES, entre otras.
b) El subsector de productores de no mercado: en éste se
encuentran aquellas entidades de ES de acuerdo a los criterios
que establece la contabilidad nacional en donde se establece
que son productores de no mercado las organizaciones cuya
producción se dirige mayoritariamente de forma gratuita o a
precios económicamente no signiicativos, principalmente
asociaciones y fundaciones sin embargo, también se pueden
encontrar de organizaciones de otras formas jurídicas.
Consideración terminológica para discernir respecto a la economía social
Cabe destacar, que en la deinición establecida se acepta la
inclusión de entidades voluntarias no lucrativas aún y cuando
no posean una estructura democrática, siempre y cuando
sean productoras de servicios no de mercado a favor de las
familias (Cuadro 2).
Desde esta perspectiva la visión de CIRIEC maneja
una deinición que se relaciona con el Sistema Cuentas
Nacionales de las Naciones Unidas de 1993, así como el del
sistema europeo de cuentas. Si bien consideramos que es
un aporte metodológico importante desde el punto de vista
185
cuantitativo, a nuestro juicio, el manual sólo profundizó
en las entidades del subsector mercado, en donde el aporte
metodológico en torno a las entidades de ES ha sido
sumamente importante desde el punto de vista cuantitativo
al sustentarse en el aspecto jurídico, permitiendo medir y
clasiicar a las entidades de la ES. Sin embargo, se corre el
riesgo de dejar entidades de la ES emergentes y que no se
encuentran catalogadas desde la formalidad, pues es bien
sabido que durante las crisis económicas se crean colectivos
sociales con nuevas estrategias que le permitan cubrir sus
necesidades principalmente ante el desempleo.
Cuadro 2. Delimitación de la economía social con base en los sistemas de cuentas nacionales en la Unión Europea.
Características identitarias de la ES en Europa a partir de la cúpula representativa:
Social Economy Europe
1. Primacía de la persona y del objeto social sobre el capital.
2. Adhesión voluntaria y abierta.
3. Control democrático por sus miembros.
4. Conjunción de los intereses de los miembros y del interés general.
5. Defensa y aplicación de los principios de solidaridad y responsabilidad.
6. Autonomía de gestión e independencia con respecto a los poderes públicos.
7. Destino de la mayoría de los excedentes a la consecución de objetivos a favor del desarrollo sostenible, la mejora de los
servicios a los miembros y el interés general.
Sector
Características
Agentes
institucional
a) Creadas para satisfacer las necesidades de
autoayuda, son empresas en las que habitualmente
se da la doble condición de socio y usuario de la
actividad
Productores
de Mercado
Productores
de No
Mercado
b) Son productores de mercado, por tanto su
producción de dirige fundamentalmente a la venta
a precios económicamente signiicativos. También
se pueden considerar las cooperativas, mutuas,
sociedades “holding” otras empresas similares
e instituciones inancieras que se encuentran al
servicio de las del apartado anterior
c) Pueden distribuir beneicios o excedentes entre
los socios usuarios, pero no en proporción al capital
o a las cotizaciones aportadas por los mismos, sino
de acuerdo con la actividad que éstos realizan con
la entidad.
a) Son entidades privadas organizadas formalmente
con autonomía de decisión y libertad de adhesión
que producen servicios no de mercado a favor de
las familias, cuyos excedentes si los hubiera, no
pueden apropiarse los agentes económicos que los
crean, los controlan o los inancian
Fuente: elaboración con base en Monzón y Chaves (2012; Monzón (2013).
Sociedades no financieras
● Cooperativas (de trabajo asociado, de
consumidores, agrarias, enseñanza, mar, transportes,
viviendas, etc.)
● Empresas controladas por los trabajadores
● Empresas Sociales (orientadas a colectivos
vulnerables o en riesgo de exclusión social)
● Cofradías de pescadores
● Empresas mercantiles no inancieras controladas
por la ES
● Otros productores de mercado privados (algunas
asociaciones, fundaciones y sociedades mercantiles)
Sociedades financieras
● Cooperativas de crédito
● Mutuas de seguros
● Mutualidades de previsión social
● Cooperativas de seguros
● Asociaciones de Acción Social
● Fundaciones de Acción Social
● Otras instituciones sin ines de lucro al servicio de
los hogares
186 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Graciela Soria Sánchez
Conclusiones
Literatura citada
El término ES en Europa ha evolucionado en gran medida,
sus raíces tienen origen en los movimientos obreros
que pretendía hacer frente a los efectos de la revolución
industrial, como consecuencia del avance tecnológico y la
explotación del trabajo que pauperizaban sus condiciones
económicas y sociales.
Barea, J. (2004). Economía social: concepto y delimitación. Mediterráneo
económico. La actividad económica al servicio de las personas,
No. 6, pp. 23-34.
Defourny, J. (2009). Economía Social. In A. D. Cattani, J. L. Coraggio,
J. L. Francia (Eds.), Diccionario de la otras economía.
Colección lecturas sobre economía social (pp. 163-169).
Universidad Nacional de General Sarmiento/Altamira/
CLACSO Coediciones.
Desroche, H. (1983). Pour un traité d’Economíe sociale. París: CIEM.
Chaves, R. y Monzón, J. L. (2001). Economía social y sector no lucrativo:
actualidad cientíica y perspectivas. CIRIEC-España, Revista
de Economía Pública, Social y Cooperativa, 37, 7–33.
Instituto Nacional de la Economía Social. (2013). Diagnóstico del
Programa de Fomento a la Economía Social. Resumen
ejecutivo. 2013 (Vol. 15). México.
Monzón, J. L. (2013). La economía social desde la perspectiva europea. In
L. Oulhaj y F. Saucedo (Eds.). Miradas sobre la economía social
y solidaria en México (1a ed., pp. 75–89). Puebla: Universidad
Iberoamericana Puebla.
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borrosas y ambigüedades conceptuales del Tercer Sector.
CIRIEC-España, Revista de Economía Pública, Social y
Cooperativa. 56:9-24.
Monzón, J. L. (2003). El cooperativismo en la historia de la literatura
económica. CIRIEC-España, Revista de Economía Pública,
Social y Cooperativa. 44:9-32.
Monzón, J. L. (1987). La Economía Social en España. CIRIEC-España,
Revista de Economía Pública, Social y Cooperativa, pp. 19-29.
Monzón, J. L., y Chaves Ávila, R. (2012). La Economía Social en la
Unión Europea. Bélgica: Comité Económico y Social Europeo.
Monzón, J. L. y Defourny, J. (2000). La economía social, entre economía
capitalista y economía pública. Santiago de Chile: Universidad
de Chile.
Montolio, J. (2002). Economía social: concepto, contenido y signiicación
en España. CIRIEC-España, Revista de Economía Pública,
Social Y Cooperativa. 42:5-31.
Actualmente el término de ES, desde la corriente europea
se ha adaptado a los grandes cambios económicos a nivel
mundial, el cual tiene una mayor orientación empresarial y
en armonía con la economía de mercado.
Las propuesta de CIRIEC en Europa, a partir de las cuentas
satélite del sector social, han concedido importantes avances
al distinguir una economía social del subsector mercado y del
subsector de no mercado. Sin embargo se debe tener presente
que esta clasiicación permite un mayor ajuste del término en
los tres sectores de la economía (público, social y privado)
debido a que su base se encuentra en el aspecto jurídico lo
que le facilita la identiicación y medición estadística en las
entidades de la ES.
Ante este contexto es difícil llegar a un consenso conceptual,
dado las diferentes disciplinas bajo las que se estudia, así
como la diversidad de experiencias bajo las que se desarrolla,
por ello será necesario realizar un trabajo transdisciplinario
para conciliar términos ante un contexto de economía
globalizada y en donde el cooperativismo moderno dista
cada vez más de representar una verdadera alternativa
económica centrada en el hombre y no en el capital.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 187-193
Pedagogía de la comunicación radiofónica
Francisco González López
Universidad Pedagógica Nacional-Unidad Ajusco.
Resumen
A casi un siglo de cumplirse el inicio de las primeras
transmisiones radiofónicas a nivel mundial y en nuestro
país, la radio sigue siendo el medio de comunicación masiva
con mayor poder de penetración. Esta característica la ha
convertido en el medio idóneo para promover contenidos
que contribuyan al desarrollo de las comunidades y en
ese sentido aporta un servicio a la sociedad como acción
educativa. Las acciones educativas que se emprenden a
través del medio radiofónico no sólo dependen de las técnicas
comunicativas que se apliquen en la realización del mensaje
radiofónico sino de la ejecución de aspectos relacionados con
la pedagogía de la comunicación radiofónica. Esto implica el
estudio y conocimiento permanente del medio radiofónico.
de este trabajo se parte de dos premisas: en primera
instancia, la radio seguirá siendo para la población mundial,
independientemente del estrato socioeconómico, el medio
de comunicación masiva con mayor poder de penetración
y, en segundo lugar, el medio a través del cual pueden
promocionarse objetivos de desarrollo dadas las condiciones
de diversidad y simultaneidad que posee el medio2.
Introducción
Esta simultaneidad lleva a que un mayor número de personas
de casi todos los pueblos tengan acceso a la radio, por muy
pequeños que sean estos o por muy aislados que estén, hacen
la escucha habitual y efectiva de la radio. Sin embargo, debe
partirse del hecho de que la comunicación radiofónica no sólo
habla de una profesión, un medio radial o una especialización
en las formas de hacer la radio, sino que va más allá: se trata
de considerar a la radio como un instrumento tecnológico
que no es coto exclusivo de profesionales formados en ella,
sino como un medio que aporta un servicio a la sociedad
como acción educativa y que en consecuencia implica un
proceso educativo.
Los progresos tecnológicos que la radio ha experimentado,
así como su gran versatilidad, han favorecido que cada vez
un mayor número de personas tengan acceso a ella y que la
tendencia a la miniaturización de productos y dispositivos
electrónicos e informáticos le hayan favorecido más que a
ningún otro medio de comunicación masiva, hasta integrarse
a una serie de productos que aseguran una gran presencia
y persistencia del medio radiofónico1. Para la elaboración
Aquí se verá que muchas de las acciones emprendidas
en el medio radiofónico no sólo dependen de las técnicas
comunicativas que se apliquen en la realización del mensaje
radiofónico y no porque estas no sean importantes, sino de
la ejecución de aspectos relacionados con la pedagogía de
la comunicación radiofónica, como lo sugiere el título de
esta exposición. Esto reviste gran importancia, pues es a
partir de aquí es donde comienza a gestarse la pedagogía
de la resistencia llevada al medio radiofónico. Para ello
Palabras clave: desarrollo de las comunidades, acción
educativa, mensaje radiofónico, pedagogía de la
comunicación radiofónica
González I Monge, Ferrán (1989) En el dial de mi pupitre: las ondas, herramienta
educativa. Gustavo Gili. Barcelona. pp. 72
1
2
Ídem pp.84
188 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
es necesario desarrollar a detalle cómo es que se plantean
aspectos trascendentales del quehacer radiofónico para
instrumentarla como una tarea educativa bien planeada,
organizada, coherente y con una estructura interna
sólida; sin ella no es posible entender la articulación de la
pedagogía de la resistencia la cual incluye la revaloración
del radioescucha. La pedagogía de la resistencia no surge de
la nada, ni se da en la resistencia por la resistencia misma,
tiene un fundamento basado en el conocimiento y estudio
de las posibilidades comunicativas del medio radiofónico
y como una forma de superar los vacíos, fallas, errores y
las inercias que ha generado el modelo comunicativo de la
radio comercial:
“La mayoría de los fallos que cometemos no viene tanto
de las carencias técnicas cuanto del hecho de que no nos
hemos planteado nuestro folleto, nuestro video, nuestro
radiomensaje, nuestro tebeo educativo, nuestro periódico,
como un problema de comunicación……”3. Lo anterior
lleva a afirmar que la radio puede ser utilizada para
mejorar las condiciones de vida de los pueblos, sobre
todo de los más empobrecidos en los países de más bajo
desarrollo. Un sistema nacional de comunicación debe
proporcionar cuatro servicios principales: educación,
comunicación para el desarrollo, comunicación interactiva
y entretenimiento4.
Es necesario examinar el papel que ha de desempeñar como
sistema de producción para la educación y la comunicación
para el desarrollo, aun cuando se han reconocido las
limitaciones inherentes al medio radiofónico, éste papel
limitado incide en el desarrollo de una comunicación
interactiva. La validez de la radio para llevar a cabo la
instrumentación de programas de educación, pudiera estar
reñida con el proporcionar entretenimiento (educación
informal), pero lejos de excluirse estos campos se
complementan. Desde la invención de la radio, como
medio de comunicación masiva, se han reconocido las
posibilidades que ha tenido para instrumentar por esta vía
programas educativos formales; instituciones educativas
de Europa, Estados Unidos y América Latina, aunque
este interés haya sido desplazado hacia un medio como la
televisión, por cuestiones de costos, alcance e igualdad la
radio ha conservado las funciones educativas que diversos
autores e intelectuales le habían asignado y se ha integrado
en proyectos de educación no formal e incluso de educación
popular. Los usos de la radio en la educación no formal,
informal, escolarizada y popular derivan en tres categorías:
mejorar la calidad y relevancia de la educación; disminuir
los costos de producción y difusión, así como facilitar el
acceso a la educación, principalmente en las zonas rurales
e indígenas, pero también en zonas de alta marginalidad
urbana.
Cabe destacar que en nuestro país se impulsaron proyectos
de educación formal vía medios, entre los que destacan el uso
de la radio y la televisión. Durante los años sesenta y setenta
del siglo pasado la extinta Dirección General de Educación
Audiovisual (DGAV), que actualmente se desempeña como
Dirección General de Televisión Educativa, dependiente de
la Secretaría de Educación Pública, impulsó los programas
“Radio Primaria”, “Alrededor de la Música”, “Juegos para
aprender español” y “Tele secundaria” como una forma de
llevar la educación formal a zonas y sectores de la población
marginados: de esos programas el único que sobrevive hasta
nuestros días es el proyecto de “Tele secundaria”5. Algunos
de los aspectos en los que ha incidido la educación a través del
medio radiofónico, corresponden a una primera dimensión
de la comunicación radiofónica para el desarrollo, estos
rubros son:
Motivación para la población
De manera casi invariable los sistemas de comunicación,
particularmente la radio, hacen uso de la motivación hacia
su audiencia para reforzar una serie de valores o modos
de conducta existentes en sus públicos y para lograrlo
acuden a los distintos formatos radiofónicos a través de los
cuales puede dirigirse al público y también se induce hacia
conductas nuevas, principalmente a través del uso de los
promocionales, cuya duración es aproximada a los veinte
segundos y que se repiten de manera constante, durante
un determinado periodo de tiempo, que por lo general es
breve6. Es necesario, destacar que aun cuando estos mensajes
contengan elementos cognoscitivos relevantes se apela
a la afectividad de los destinatarios. La orientación de la
comunicación para el desarrollo adopta esta inalidad para
motivar políticamente hacia una determinada tarea tendiente
a alguna actividad en beneicio de la propia comunidad
radioescucha.7
Noguez Ramírez, Antonio (1982) La telesecundaria. SEP. México. pp.26.
6http://www.uco.es/servicios/publicaciones/revistas/index.php/edmetic/article/
view/263/261
7
Díaz Bordenave, Juan (1977) Comunicación y desarrollo rural. UNESCO. París.
pp. 78.
5
Kaplún, Mario (1998). Una pedagogía de la comunicación. Ediciones de la Torre.
Madrid. pp. 13.
4
Mcquaill, Denis (1972). Dirección de estaciones de radio y televisión. Ed Diana.
México. pp. 54
3
Francisco González López
Pedagogía de la comunicación radiofónica
En el caso de las radios comunitarias la concientización ha
sido una de sus actividades primordiales, principalmente
en zonas rurales. Este tipo de tareas, encuentran en la
motivación una forma más especíica para fomentar la
participación en tareas orientadas al desarrollo: en este
sentido el trabajo comunitario es motivador por cuanto se
generan expectativas de desarrollo y el papel que viene
a desempeñar la radio está en colaborar junto con sus
radioescuchas en su realización. Este tipo de tareas no
son creación exclusiva de la radio, sino una forma de su
utilización en beneicio de las propias comunidades. Este
tipo de educación radiofónica, considerado como modelo
endógeno, subraya la educación que pone énfasis en el
proceso, pues:
“….destaca la importancia del proceso de transformación
de la persona y las comunidades. No se preocupa tanto de
los contenidos que van a ser comunicados ni de los efectos
en términos de comportamiento, cuanto a la interacción
dialéctica entre las personas y su realidad; del desarrollo de
sus capacidades intelectuales y de su conciencia social”.8
Al pretender hacer uso de la motivación para la escucha de
la radio, se procura que los radioescuchas relexionen sobre
los temas que se les presentan por medio de distintos géneros
radiales; pero no sólo la relexión, sino que se actúe de
manera organizada en torno a una determinada problemática.
Los programas con temáticas sociales o políticas pretenden
crear consciencia sobre las problemáticas que se exponen;
por ejemplo, los programas con temas relacionados con
el medio ambiente pretenden que las audiencias sean más
sensibles en temas ambientales.
Información de noticias locales
El uso de la radio con propósitos informativos incluye
programas de noticias locales, nacionales e internacionales;
noticias relacionadas con la agricultura, la temperatura
ambiente o información acerca de actividades sociales o
servicios de interés para los oyentes. En esta categoría cabe
agregar los promocionales sobre servicios educativos,
sociales, educativos difundidos por dependencias
gubernamentales. Esta visión nos conduce a concebir a
la radio como un proveedor de información y en el medio
rural e indígena ha generado la necesidad hacia una mayor
cantidad de información que demandan sus audiencias,
a su vez esta necesidad deriva hacia una concientización
sobre su importancia y la gama de posibilidades en torno a
189
su utilización con respecto a la forma en que a través de la
radio se pueden abordar distintas o nuevas problemáticas
que aquejan a la propias comunidades.
Este es un aspecto relevante en la revaloración del
radioescucha. La difusión de noticias locales es uno de
los pilares del trabajo de las radios comunitarias: se parte
del hecho de otorgar importancia comunicativa a los
acontecimientos que ocurren en las localidades en donde
transmiten y que sus radioescuchas caigan en la cuenta de que
aquellos sucesos que les importan merecen tener tratamiento
noticioso. Como forma de acercamiento hacia la audiencia
radial es una estrategia que permite discernir del ninguneo
al que somete la radio comercial a su auditorio y marca una
línea muy clara en cuanto a los criterios de lo que merece o
no ser considerado como noticia:
“La cuestión es cómo acercarnos a las masas populares
para comprender sus niveles de resistencia, saber dónde se
encuentran y cómo se expresan y trabajar sobre eso”9
El trabajo de deinir las líneas noticiosas y editoriales en
los noticieros radiofónicos y televisivos parte de una línea
política autoritaria, de imposición de estos criterios hacia
la audiencia: dicha labor está regulada en veces por un
grupo de comunicólogos especialistas o por la orientación
ideológica e intereses de las grandes cadenas informativas.
Para las grandes empresas de la comunicación aquello que
ocurra en algún pueblo, localidad o región poco interés
puede despertar, a menos que pueda tener tratamiento
sensacionalista o de tipo talk show que permita ser explotado
mediáticamente en aras de producir ganancias económicas
o elevar los puntos de rating.
En el caso de la radio comercial mexicana, cada barra de
programación debe estar regulada por puntos de rating y de
ello no están exentos los espacios noticiosos: lo que signiica
que para este modelo comunicativo la orientación en la
acción comunicativa no precisa acercamiento o comunión
con su público.
Los ejes de la noticia residen en el tipo de noticia que es
considerado como importante y que se supone puede y debe
interesar al radioescucha y por ende aquellos que la fuente
emisora decide son los más importantes: en este sentido,
poco interés reporta aquello que ocupa y preocupa a los
pueblos, comunidades o sectores de la población los cuales
9
8
Kaplún, Mario (1998). Op. cit. pp.19.
Freire, Paulo (2013) Por una pedagogía de la pregunta. Critica a una educación
basada en respuestas a preguntas inexistentes. Siglo XXI. México. Pp. 59.
190 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
sólo deben escuchar todo aquello que se les emite de manera
pasiva y sin posibilidad de ejercer el derecho de réplica. Para
este modelo lo único que interesa es la pasividad que se cree
debe tener el radioescucha, como una forma de justiicar el
acatamiento del autoritarismo, e interioriza la imposición de
su pretendida inferioridad contra la superioridad y autoridad
que, se cree, tienen las radios comerciales, con la intensión
de crear una radioaudiencia dominada y apática.
Educación
Por lo que respecta a la categoría de uso de la radio para
la enseñanza se hace alusión a la adquisición de destrezas
de pensamiento más generalizadas, comunes a otras
actividades. Esto es, a través de la radio se puede emprender
el fomento de la lectura, interpretación y ejecución de
instrucciones y esto constituyen destrezas generales de
acceso a la información.
Aunque este tipo de destrezas se adquieren de manera
especíica a través de la educación formal, pueden ser
abordadas por el medio radiofónico, independientemente
del nivel de escolaridad del radioyente. Los medios de
comunicación masiva educan, su ámbito corresponde a la
educación informal: la radio puede y debe ser empleada
para enseñar: distinguir cómo articular los usos y estrategias
que pueden impulsar el desarrollo de las comunidades en
donde se insertan las radios comunitarias: es una de las
metas a establecer en los proyectos de creación de dichas
emisoras, pero siempre a partir de generar un tipo de escucha
activo que implica suscitar y estimular en los radioyentes su
intervención y acompañamiento en el trabajo de las radios10.
La comunicación para el desarrollo abarca aquellos usos que
se les da a las emisoras de radio, no incluidas en programas
de educación formal o de entretenimiento y desde aquí es
que debe surgir la forma de diferenciarse del modelo de
comunicación establecido por las radios comerciales, debido
a que en ellas se “………..dicta ideas, no hay intercambio de
ideas. No debate o discute temas…… le impone una orden
que él no comparte, a la cual sólo se acomoda. No le ofrece
medios para pensar auténticamente, porque al recibir las
fórmulas dadas, simplemente las guarda. No las incorpora,
porque la incorporación es el resultado de la búsqueda, de
algo que exige de parte de quien lo intenta, un esfuerzo de
re-creación, de invención”.11
Freire, Paulo. (1998) ¿Extensión o comunicación? Siglo XXI. México. pp. 54
Freire, Paulo. (1969). La educación como práctica de la libertad. Siglo XXI.
México.
10
11
Francisco González López
Contrariamente a lo que se ha airmado, los medios de
comunicación masiva no promueven la inactividad o la
pereza mental de sus audiencias, una de las funciones
signiicativas a través de estos medios, y particularmente
a través de la radio reside en la importancia de enseñar
destrezas activas: esto es, habilidades que puedan ser puestas
en práctica con el objeto de incidir en la vida personal,
familiar y en la colectividad. En este sentido, quizá una de
las enseñanzas más notables que se desprenden del uso de
la radio esté en el desarrollo de un modelo de educación
informal. Quizá una de estas enseñanza consista en la
capacidad que desarrollan los radioescuchas de transferir las
destrezas cognoscitivas adquiridas por medio de la escucha
radiofónica a situaciones de aprendizaje nuevas, aplicadas
a la esfera de su vida cotidiana.
La adquisición de estas destrezas son el resultado de una
exposición continua a los mensajes y a la programación
radiofónica que conlleva también la adopción de los valores
y normas del núcleo social que integra la comunidad:
estas destrezas activas o formas habituales de pensar son
instrumentadas por el medio radial para empatizar con su
audiencia y es el trabajo desplegado por el medio radiofónico
para abordar estas destrezas de aprendizaje.
Modificación de conductas
Por su propia naturaleza la radio es el único medio iable para
llegar a amplios sectores de la población, particularmente el
rural e indígena por ejemplo con respecto a la planiicación
familiar, el cual era uno de los aspectos centrales de la
educación informal durante los años ochenta del siglo
pasado; esta temática se ha trasladado a una serie de aspectos
en los que se destaca la igualdad de género, la violencia
intrafamiliar, el respeto a la diversidad cultural, lingüística,
sexual.
Se ha discutido acerca de si los medios de comunicación
masiva pueden ser utilizados en la modificación de la
conducta, éste aspecto se reiere a aconsejar sobre una
determinada actividad, sin que se profundice mucho en ello,
por ejemplo las campañas de vacunación, las inscripciones
escolares. El uso o los usos de la radio, como instrumento
de comunicación, no debe pasar por la imposición, la
persuasión o la recompensa: estas estrategias comunicativas
no consideran a los destinatarios, ni los escuchan, parten
siempre de considerar que toda acción o estrategia
radiofónica debe incidir en el cambio de conductas para bien
de la audiencia, y que si la gente se niega a aceptar dichos
mensajes es más bien por ignorancia:
Pedagogía de la comunicación radiofónica
“Para sustituir algo no es indispensable discutir los efectos
de lo anterior. Es mejor resaltar las ventajas de lo nuevo que
se propone e insistir en la recompensa. Cuando el mensaje
no está de acuerdo con los valores del medio social del que
forma parte el destinatario, se debe omitir toda referencia a
ese desacuerdo”12
La segunda dimensión para considerar a la radio comunitaria,
como medio auxiliar para el desarrollo hace alusión a las
estrategias para el uso de la radio. Por estrategia radiofónica
se está entendiendo las formas de organización de la radio
para lograr las metas programadas y hacerse portavoz de las
expectativas de su audiencia.
Las estrategias se agrupan en cuatro categorías:
Emisiones abiertas
Las características de la emisión radiofónica abierta se
centran en el tipo de mensaje que se difunde, llegan a las
personas, el radioescucha tiene acceso a ellas a través de
su aparato receptor que puede estar ubicado en su hogar,
lugar de trabajo, en el transporte o en cualquier lugar que se
encuentre, las modiicaciones tecnológicas que ha observado
la radio la hacen susceptible de captar la señal de transmisión
en dispositivos cada vez más pequeños, que facilitan el
llevarlo prácticamente a cualquier lugar.
A través de la emisión abierta no se intenta enseñar conceptos
o manejar grandes cantidades de información o hacer
cambios abruptos de conductas; más bien, se pretende
motivar a través del manejo de cantidades dosiicadas de
información, con las que se pretendería hacer pequeños y
paulatinos cambios de conducta. A través de esta estrategia
se parte del supuesto de usar el entretenimiento como
una forma de atraer mayor audiencia y, simultáneamente,
educar. Para ello, la estrategia comunicativa ha de adoptar
un enfoque de mayor creatividad en el trabajo de producción
radial, así como mejorar de manera permanente la calidad
de los programas de radio. En este sentido, hay tres formas
valiosas en que la radio comunitaria ha logrado resultados
de aprendizaje valiosos:
Revisar que la publicidad que se transmite tenga aplicaciones
concretas a la educación de sus audiencias.
Propiciar la participación del público en la producción de
sus programas.
191
Son un ejemplo concreto de una concurrencia educativa que
avanza hacia una forma de participación colectiva.
Si la radio comercial apela a la difusión de una publicidad
que parte del principio de motivar al público para incentivar
su escucha, la radio comunitaria no debe suponer que
esta motivación ya está dada, sino que debe avanzar en la
construcción de sus propias técnicas de fascinación, aunque
en algunas ocasiones éstas deban tomar algunos de los
elementos en los que se basa la persuasión empleada por la
radio comercial. Aquí nos encontramos con una situación
interesante: el trabajo comunicativo de las radios comunitarias
no debe partir de supuestos y que sólo por tratarse de una radio
comunitaria considerar que se tiene asegurada la audiencia.13
En la emisión abierta debe tomarse en cuenta en todo momento
la insoslayable necesidad de crear programas que cuenten
con la participación activa de las comunidades cercanas a
la emisora, pueden seguirse distintas y variadas vías para
lograrlo y una de ellas está en la igura del corresponsal
comunitario. La gente habla de lo que le preocupa y le
interesa, comunica sus ideas, comparte información, invierte
parte de su tiempo en la elaboración de los programas, está
dispuesta a colaborar aun cuando no se le asegure algún
ingreso económico por su participación. Esto marca un
punto de diferenciación con respecto a la orientación que
mantiene la dinámica de la radio comercial. El punto de
quiebre es muy evidente, para las emisoras comerciales el
radioescucha suele ser por lo regular un punto más en el
rating, que conduce a cotizar favorablemente los servicios de
publicidad, el único aprendizaje que resulta de esta relación
consiste en que el oyente sabe que le complacerán en sus
peticiones musicales y la relación no va más allá de eso.
En tanto para el radioescucha común constituye una
experiencia inapreciable el tener la oportunidad de hablar
de lo que le interesa o de las preocupaciones que le aquejan
y compartirlo con la comunidad de radioyentes que quizá
tengan tribulaciones semejantes: esto se constituye como
un aprendizaje de amplias dimensiones: el saber que tiene
voz, que es escuchado por otros y que las problemáticas
comunes pueden ser resueltas de manera colectiva y no sólo
de forma individual. La identiicación, permanencia, empatía,
idelidad, constancia, persistencia y arraigo con un medio de
comunicación masiva se construyen sobre la base de estos
aspectos y sobre lo que la audiencia espera en correspondencia
del trabajo de los medios.
13
12
Kaplún, Mario (1998). Op. cit. pp.35.
Winocur, Rosalía (2002) Ciudadanos mediáticos. La construcción de lo público
en la radio. Gedisa. Barcelona. pp. 55.
192 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Francisco González López
En esta función también pueden percibirse el atractivo que
resulta de la capacidad de un buen entretenimiento para
motivar y enseñar, debe quedar claro que la programación
de la radio comunitaria ha de tener en cuenta el interés de
sus radioyentes. Al mismo tiempo, debe destacarse que
el pretendido cambio de actitudes y conductas no se da
en el corto plazo, ni es resultado de una intensa campaña
publicitaria por muy buena producción que tenga; los
resultados deben preverse a largo plazo y dichos cambios
no serán instantáneos ni espectaculares.
Los usos de la radio orientados a llegar a grupos o sectores
especíicos de audiencia han tenido una serie de aspectos
positivos, principalmente para la educación informal y no
formal. Las radios comunitarias han centrado su atención
en el público campesino de zonas rurales, en donde han
detectado mayores necesidades de acompañamiento de un
medio como la radio. Este planteamiento coincide con los
principios de aprendizaje derivados de la naturaleza del
medio radiofónico, aprendizajes que han sido apropiados
por las comunidades escuchas.
Campañas
Para que los proyectos radiales comunitarios lleven adelante
su propósito comunicativo, cultural y educativo deben
asegurar su independencia de las políticas y lineamientos
gubernamentales. Esta independencia asegura el no caer
en un tipo de educación estancada, que debe guiarse por el
análisis, abordaje y tratamiento de las distintas problemática
rurales y urbanas.
Algunos de los rasgos característicos de las campañas
radiofónicas son: concentración del experimento
comunicativo en un periodo de tiempo relativamente
corto; se ubica o delimita en el logro de pocos objetivos bien
determinados y con gran atractivo hacia el público escucha;
intenta motivar, interpelar e involucrar a distintos sectores
o estratos de la sociedad; organización del público oyente
durante el tiempo de duración de la campaña; el papel que
desempeña el auditorio en apoyo a las campañas; deinición
de propósitos en el uso de la radio para publicitar aspectos
relevante y/o trascendentes para la vida de las comunidades.
Distintas experiencias de campañas impulsadas desde
el sector público nos remiten a la forma en que puede
integrarse a la radio en este tipo de experiencias educativas,
con una incidencia signiicativa en las zonas rurales. De
aquí resaltan las ventajas del uso de la radio, ventajas que
se desprenden de las estrategias comunicativas empleadas,
adecuadas a la naturaleza de la radio. Entre estas ventajas
destacan el poder llegar a un gran número de personas; el
método de aprendizaje a través de la persuasión, como una
forma de suministrar información a los grupos de oyentes; la
adecuación de esta estrategia con los objetivos y necesidades
de desarrollo de las propias comunidades y la integración y
participación de los propios radioyentes en el logro de los
objetivos establecidos en las campañas radiales.
Grupos o sectores de audiencia regular
El uso de la radio, así como de las redes de comunicación y
participación de los pueblos en los proyectos impulsados por
las radios comunitarias ha permitido incursionar en nuevas
formas de cultura comunicativa a nivel urbano y rural, pues
ha permitido el desarrollo de una estructura de toma de
decisiones participativa que deriva en el impulso de la acción
con base en los intereses de los grupos de radioescuchas.
La radio como medio de comunicación interactiva
Las emisiones abiertas comprenden los usos de la radio
basada en la producción y emisión de mensajes radiales,
que no van acompañadas de envío de material en apoyo de
los oyentes, como se ha realizado en el caso de programa de
educación no formal. Para el caso de las radios comunitarias,
pueden ubicarse los grupos de audición regular, esto exige
una organización de los grupos de audición local, municipal,
en la comunidad que se reúnen con regularidad para
analizar, discutir, relexionar los mensajes recibidos y que
con frecuencia emprenden acciones con respecto a dichas
informaciones.
En cuanto a las campañas, en ellas se hacen presentes
aspectos de las categorías ya descritas como uso de la
radio para la enseñanza y la modiicación de la conducta.
Las campañas radiofónicas por lo regular se emplean por
períodos breves, se elaboran en función de un tema concreto
y tienen objetivos limitados.
Las estrategias radiales están en función de los diferentes
formatos o géneros radiales.
Con respecto a los usos de la radio, surgen cinco preguntas
en torno a la radio en la comunicación para el desarrollo.
¿Funcionan las estrategias de adopción de la radio como
elementos para impulsar el desarrollo?; ¿Alcanzan las
estrategias adoptadas para que la inluencia de este medio
Pedagogía de la comunicación radiofónica
sea signiicativa en la resolución de problemas inherentes
a las comunidades?; ¿Cuáles son las diicultades para la
implementación de las estrategias radiofónicas?; ¿Existen
otras posibilidades mediáticas para alcanzar los propósitos
comunicativos atribuidos al uso de la radio? ¿Resulta fácil o
difícil la aplicación de estrategias radiofónicas para impulsar
el desarrollo?
Literatura citada
Díaz Bordenave, Juan (1977) Comunicación y desarrollo rural. UNESCO.
París.
193
Freire, Paulo (2013) Por una pedagogía de la pregunta. Critica a una
educación basada en respuestas a preguntas inexistentes. Siglo
XXI. MÉXICO.
Freire, Paulo. (1998) ¿Extensión o comunicación? Siglo XXI. México.
pp. 54.
Freire, Paulo. (1969). La educación como práctica de la libertad. Siglo
XXI. México.
González I Monge, Ferrán (1989) En el dial de mi pupitre: las ondas,
herramienta educativa. Gustavo Gili. Barcelona.
Kaplún, Mario (1998). Una pedagogía de la comunicación. Ediciones
de la Torre. Madrid.
Mcquaill, D. (1972). Dirección de estaciones de radio y televisión. Ed
Diana. México.
Noguez, R. A. (1982) La telesecundaria. SEP. México.
Winocur, R. (2002) Ciudadanos mediáticos. La construcción de lo público
en la radio. Gedisa. Barcelona.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 195-203
Cambios de la legislación agraria para
la modernización del campo
Joel Cervantes-Herrera1, José María Salas-González1, Artemio Cruz-León1, Guillermo Torres-Carral1 y José A. Castellanos Suarez1
1
Posgrado en Ciencias Agrarias. Universidad Autónoma Chapingo.
Resumen
Introducción
Hacia 1992, en México se había repartido más de 50% del
territorio nacional. La estructura agraria creada permitió a
la agricultura tener buen desempeño entre 1940 y 1975, pero
después se hizo signiicativa la importación de alimentos,
situación que persiste hasta hoy. Entre 1980 y 1990, en
el marco del proceso de reestructuración internacional
del modelo de acumulación de capital, México realizó
profundos cambios legislativos relativos a la economía, los
mercados y las funciones del gobierno. En el ámbito agrario
se modiicó el artículo 27 constitucional y la Ley Agraria
para permitir la compra venta de la tierra ejidal y comunal
e facilitar su concentración en grandes explotaciones
(Reforma-92). Ello, impulsaría el flujo de capital y
tecnologías al sector para consolidar ventajas comparativas
y elevar su competitividad. Aunque en 2013 se aprobó
la Reforma Energética, con repercusiones agrarias, este
trabajo solo tiene por objetivo analizar: cómo se conformó la
Reforma-92, la intencionalidad de los cambios y los efectos
generados. Mediante análisis comparativo de información
con cobertura nacional, se concluye que dicha reforma no
generó los efectos esperados, por el contrario; la tierra más
que privatizarse se ejidalizó y no se concentró, en cambio es
evidente el aumento de la dependencia alimentaria, pobreza y
migración rural. Todo indica que el desempeño del sector no
depende del título con que se acredite la posesión de la tierra,
sino de la función y prioridad que, en la política pública, en el
gasto nacional, tenga la agricultura y el contexto económico
nacional e internacional.
A partir de la década de 1970, en el plano internacional
se registró una reestructuración global del modelo de
acumulación de capital que requirió la apertura de los mercados
y cambios en la función normativa, económica y social de los
gobiernos nacionales. Estos ajustes se realizaron en países
centrales y después en los países subdesarrollados y fueron tan
relevantes que se les equiparan en magnitud e impacto mundial,
a los ocurridos una centuria antes (1870), “cuando también
ocurrió una importante expansión del comercio internacional
y notables ajustes en el proceso de acumulación de capital, a
nivel de los capitales rectores de la economía internacional”
(Bernstein, 2012:12). Dichos reajustes fueron incorporados
diferenciadamente por cada estado-nación, pero al iniciar
1990 el nuevo esquema de acumulación se había globalizado.
Palabras clave: tenencia de la tierra, reparto agrario,
concentración de la tierra, reforma agraria.
En 1986, México ingresó al Acuerdo General sobre Aranceles
y Comercio GATT, Zapata, Martí Ricardo y Gabriele V.
Alberto. 1994) y en 1992-3 se inscribió en el proceso de
globalización económica, modificando su marco legal
general, para adecuarlo al nuevo esquema internacional
de acumulación. En la agricultura comprendió la apertura
del mercado de tierras, la privatización de las formas de
propiedad social y la concentración de la misma en medianas
y grandes explotaciones, con capacidad para elevar su
competitividad. El nuevo marco legal económico-agrario
mejoraría la producción para el mercado, la distribución
del ingreso y la disposición de productos básicos a bajos
precios. Sin embargo, dichos cambios implicaron cambios
en los mecanismos económicos de ijación de los precios
agrícolas, que tuvieron efectos diferenciados en los distintos
tipos de productores, productos y regiones del país.
Joel Cervantes-Herrera et al.
196 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Dada la relevancia de los cambios legislativos realizados con
la reforma de 1992 y la magnitud de los efectos esperados
en la estructura agraria y la dinámica socio-productiva de la
agricultura del país, el presente estudio centra su atención
en la sistematización del conjunto de cambios contenidos
en la reforma-92, la intencionalidad de los mismos y la
constatación de los efectos generados. Para ello, se utilizaron
técnicas de análisis comparativo y estadística descriptiva para
el análisis y sistematización de la información captada en
los censos agropecuarios de 1991 y 2007, sobre la tenencia
de la tierra, así como otras fuentes especializadas sobre la
producción de alimentos, comercio y migración rural. El
presente estudio toma relevancia ante nuevas iniciativas
aprobadas, que profundizan y amplían el ámbito de
privatización de los recursos naturales, aún en contra de
la voluntad de los poseedores de esos territorios, donde se
encuentra 22% de la población nacional (INEGI, 2010).
Antecedentes
Sobre la organización de la sociedad prehispana sustentada
en la familia y el trabajo colectivo, con una forma de tenencia
comunal de la tierra” (Durand, 2005:269), España legitimará
la propiedad absoluta de todo en la Nueva España, con la
“Bula Novaran Universo” que el Papa Alejandro VI, dictó
el 4 de mayo de 1493” (López, 2006:278). Así, “desde un
principio se organizó la propiedad privada de la tierra, sobre
una base de desigualdad absoluta; por una parte con un
acrecentamiento de la propiedad individual de los españoles
y, por la otra, la decadencia gradual de la propiedad de los
indios” (Mendieta y Nuñez 1979:84). Solo a partir de las
Leyes de Indias de 1572 se respetó la posesión de algunos
pueblos indígenas, donde en parte se recreó la tenencia
comunal de la tierra, entendiendo por “tenencia de la tierra”,
al conjunto de “relaciones sociales, deinidas en forma
jurídica o consuetudinaria, entre personas en lo individual
o colectivo, con respecto a la tierra… que tiene un carácter
multidimensional, por su relación con aspectos sociales,
técnicos, económicos, institucionales, jurídicos y políticos
de la sociedad” (FAO–ONU, 2003:9).
Hacia 1810, la compleja relación entre España y Francia,
posibilitó que criollos y mestizos, proclamaran la
independencia de México, aunque con poco efecto en la
distribución de la tierra, que se había concentrado en la
iglesia. A partir de 1856 se inicia el combate al latifundio
improductivo con la Ley de Desamortización de Bienes de
la Iglesia y de Corporaciones Civiles, ‘Ley Lerdo’, también
utilizada para despojar “legalmente” de sus tierras a los
indígenas. En dicha ley se estableció que:
Todas las incas rústicas (tierras agrícolas) y urbanas que hoy
tienen o administran como propietarias las corporaciones
civiles o eclesiásticas de la República se adjudicarán en
propiedad, a los que las tienen arrendadas… (Art. 1).
Bajo el nombre de corporaciones se comprenden todas
las comunidades religiosas de ambos sexos, cofradías
y archicofradías, congregaciones, hermandades,
ayuntamientos, parroquias… todo establecimiento o
fundación que tenga el carácter de duración perpetua o
indeinida (Art. 3).
Poririo Díaz (1877-1910), intensiicará la aplicación de
la Ley Lerdo y la formación de grandes haciendas mineroganaderas y agrícolas, las cuales crecieron de 5 869 a 8 431
entre 1877 y 1910, la mayoría de las cuales tenían entre 20 y
50 mil hectáreas (Cuadro 1). También invitó a extranjeros a
fundar colonias en México, de las que aún persisten 29 621
(Registro Agrario Nacional, RANa, 2000:219-220).
Cuadro 1. México 1910: estratiicación de haciendas y
supericie (hectáreas).
Tamaño (ha)
Hasta 1 000
De 1 001 a 20 000
De 20 001 a 50 000
De 50 001 a 300 000
Más de 300 000
Total
Núm.
1 153
1 637
104
52
1
Supericie (ha)
367 382
7 879 848
3 266 656
4 677 635
418 193
16 191 521
Nota: las cifras no incluyen todos los estados del país. Fuente: conformado a partir
de datos de: Secretaría de Economía. Dirección General de Estadística 1956:41-42.
La tierra en la Constitución Mexicana de 1917
La polarizada estructura agraria existente, con gran
proporción de peones desposeídos sujetos a las tiendas de
raya, en 1910 detonó la Revolución Mexicana y la irrupción
social en ella impuso la demanda: “Tierra y Libertad”. El
artículo 27 de la Constitución Mexicana de 1917, establece
un principio nodal:
“La propiedad de las tierras y aguas comprendidas
dentro de los límites del territorio nacional, corresponde
originariamente a la Nación, la cual ha tenido y tiene el
Cambios de la legislación agraria para la modernización del campo
197
derecho de, transmitir el dominio de ellas a los particulares,
constituyendo la propiedad privada… La nación tendrá en
todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privada
las modalidades que dicte el interés público, así como el
de regular, en beneicio social, el aprovechamiento de los
elementos naturales susceptibles de apropiación, con objeto
de hacer una distribución equitativa de la riqueza pública…
y el mejoramiento de las condiciones de vida de la población
rural y urbana” (H. Congreso de la Unión, 2014:26).
En la ley agraria se reconocen las formas de propiedad
siguientes: 1) propiedad pública, áreas de interés público y para
la seguridad (inalienables, imprescriptibles, intransferibles
e inembargables “IIII”); 2) propiedad privada, que es la
tierra asignada a los particulares, regida en leyes del fuero
común; 3), propiedad social tenencia colectiva donde las
decisiones se toman democráticamente, tiene dos variantes:
ejido y comunidad, ambas con rasgos de “IIII”, regida por la
Ley Agraria; 4) fraccionamiento rural, con normas legales
especíicas de los estados donde existe (estado de Zacatecas,
2008:5) y colonia rural, extensiones (29 631) entregadas a
extranjeros en el siglo XX (RANa, 2000:219-220).
Después de más de 70 años, en 1992 México se dio por
concluido el reparto agrario, que transformó la estructura
agraria y las relaciones sociales en el campo. La intensidad
del reparto y la calidad de la tierra repartida, varió en el
espacio y en el tiempo (Cuadro 2). El reparto de tierra
comprendió más de 50%, de los casi 200 millones de
hectáreas con que cuenta el país, beneiciando a poco más
de cinco millones de personas-familias, de ellas poco más
de 4 millones fueron dotadas de parcelas agrícolas, por lo
que se le ha considerado una de las reformas agrarias más
profundas y exitosas de Latinoamérica.
Cuadro 2. México: reparto agrario, tipo de tierra por periodo presidencial (hectáreas).
Periodo
Presidente
Riego
1900-14
*
27 179
1915-34
**
1934-40
Temporal Agostadero
Monte
Desérticas
Otro
Total
58 743
18 391
16 975
64 604
203 857
246 675 1 389720
2 046363
1 509 004
188 770
6200467
11581000
Lázaro Cárdenas
939 300 3 381480
9438 086
3 691 449
300 576
1033230
18784121
1940-46
Manuel Ávila C.
95 460
1 007792
3924778
1 410 763
9 473
838005
7 286 271
1946-52
Miguel Alemán V.
62 082
738 037
2664902
833 940
36 601
296,512
4 632 073
1952-58
Adolfo Ruíz C.
78 741
902 493
2973381
632 351
606
1468217
6 055 789
1958-64
Adolfo López M.
159 660 1 354 449
5526897
579 211
17 740
1232930
8 87087
1964-70
Gustavo Díaz O.
71 740
2 038 411
16124228
1 773 715
81 635
4645796
24 735526
1970-76
Luis Echeverría A.
111 134
656 584
7 536660
344 898
171 172
3953553
12 774000
1910-76
Subtotal a 1976
1977-82
José López Portillo
17 964
1 791 972 11 486 930 50294039
10 793 722
823 548 19733315 94 923 525
79 323
869 992
4012198
220 697
42 220
1172570
6 397 000
1982-88 Miguel de la Madrid 123 976
365 832
2980007
609 720
0
999 941
5 079 476
n.d.
n.d.
n.d.
n.d.
n.d.
803 000
6992205
830 417
42 220
2172511
11 476 476
1988-94 Carlos Salinas de G.
n.d.
1976-1994 Subtotal a 1976-1994 203 299 1235 824
Total
Reparto entre 1991-2007 (%)
1 995 271 12 722 754 57286244
11.3
10.8
13.9
11 624 139
7.7
865 768 21905826 107 203 001
5.1
Notas: * varios presidentes de la república. Fuente: elaboración propia, a partir de datos publicados por Zepeda, Guillermo (2000:24).
11.0
12.1
198 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Las cifras acumuladas (según Zepeda, Guillermo)
pueden variar respecto a cifras de INEGI, debido a que
la información de las hectáreas dotadas, las obtuvo de las
resoluciones publicadas en el Diario Oicial de la Federación.
Las supericies estimadas tienen un margen de error de
alrededor de 0.2%, debido al número de dígitos usados
por Zepeda, Guillermo. La proporción de tipos de tierras,
corresponde a los registrados al momento de la formalización
del reparto agrario.
Globalización de los mercados y reforma agraria
En el periodo 1940-1975, con una estructura agraria
semejante a la actual, con alrededor de 11% menos
de tierras arables repartidas (Cuadro 2), la agricultura
mexicana mostró buen desempeño con tasas de crecimiento
mayores a 4% anual; sin embargo, hacia 1975 se perdió la
autosuiciencia alimentaria. Los cambios veriicados entre
1975 y 1990 en los países centrales y gran cantidad de países
subdesarrollados, fueron tan relevantes como los ocurridos
en 1870, pues “ambos cambios en la forma y escala del
proceso de acumulación de capital, derivaron en una enorme
expansión de los lujos internacionales de mercancías y de
capitales, marcando 1970 el inicio de la competitividad
descendente de la industria de los EE. UU, como en 1870
había ocurrido con la industria de Inglaterra” (Bernstein,
2012:12). En la década de 1980, diversos países, entre ellos
México (en 1986), se adhirieron al Acuerdo General sobre
Aranceles y Comercio (GATT) y a inicios de la década de
1990 se integraron a los principales bloques económicos del
mundo. México entró al bloque de Norteamérica irmando
el Tratado de Libre Comercio (TLCAN). Asimismo, “el
gobierno abandonó la preocupación por el desarrollo con
equidad y promueve el ajuste estructural y la estabilización
macroeconómica. Ahora el principio básico será: la libre
operación de los mercados, que se identifican como
“naturales” y se adopta la idea de que la regulación del
gobierno reduce el bienestar” (Gutiérrez, 2008:26).
En el aumento de la productividad, la tecnología agrícola es
pieza clave, pero México sólo podía disponer de la técnica
generada en EE.UU en el período de la posguerra, para
una agricultura de planicies y lomeríos suaves, dominada
por grandes y medianas empresas, donde el aumento
de la productividad se logró sustituyendo el trabajo por
capital en maquinaria y equipos. Así, la posibilidad de
lograr economías de escala, requería que el tamaño de las
Joel Cervantes-Herrera et al.
explotaciones fuera adecuado a los equipos y tecnologías
disponibles, para “favorecer la acumulación en la agricultura
y contribuir al desarrollo.
Una reforma agraria más (reforma-92)
En el Plan Nacional de Desarrollo de México 1989-94, se
adoptaron como prioridades del país, las recomendaciones
hechas por los acreedores internacionales: saneamiento de las
inanzas públicas, control de la inlación, atracción de capital,
pago de la deuda, retiro del Estado de la actividad económica,
adelgazamiento del gobierno, entre otras. Téllez (1994:11-14)
señala que en la rama agrícola, se pretendía llegar a tener
un sector agrícola como el de los países desarrollados (con
PEA agrícola baja, tamaño de las explotaciones grande, PIB
agrícola bajo, creciente productividad, etc.).
Lograr lo anterior, hacía necesaria la modiicación de las
leyes para: a) atraer el capital extranjero al campo, la ley
de inversión extranjera; b) liberar el lujo de capitales en
la agricultura y la economía, la ley de asociaciones civiles
y mercantiles y ley de inversión extranjera; c) liberar los
mercados de mercancías y servicios, las leyes sobre el
comercio y Ley de Aduanas; d) privatización de empresas
estatales, la ley sobre bienes nacionales y administración
gubernamental; e) facilitar la entrada y salida del capital
del país, modiicación de la ley de inversión extranjera; y
f) para liberar el mercado de tierras y su concentración,
la modiicación del Artículo 27, constitucional y la Ley
Agraria. Adicionalmente, el gobierno mexicano (19891994) planteó en su Plan Nacional de Desarrollo incentivar:
el incremento de la productividad, mayor selectividad de
los subsidios, retiro de subsidios a los bienes comerciables
(identiicado como paternalismo), apoyo a la actividad
agroexportadora y apoyos selectivos a segmentos y cadenas
productivos estratégicas. “Para los campesinos menos
favorecidos se creó el Programa Nacional de Solidaridad”
(Rojas, 992:440).
Así, la concentración de la tierra sería la piedra angular de
la estrategia, por lo que era necesario eliminar los rasgos de
seguridad social que tenía la tenencia ejidal y la comunal
(imprescriptible, intransferible, inembargable e inalienable).
Esto “introducirá un cambio importante en la forma de
tenencia de la tierra y en las dinámicas agrarias” (Bouquet,
1996:16). Los límites de la propiedad establecidos en el
nuevo marco legal, se consignan en el Cuadro 3.
Cambios de la legislación agraria para la modernización del campo
Cuadro 3. México: modiicación del Artículo 27 constitucional
en 1992.
1. Finalización del reparto 2. La posesión-propiedad
agrario
de tierra por persona será
la establecida en la Ley
Agraria*.
3. Las sociedades
4. La materia agraria es
mercantiles por acciones
competencia federal
(SA) pueden tener hasta
y se crean tribunales
25 veces la supericie por
autónomos y otras
persona permitida por la
instituciones para la
Ley. (2 500 has de riego
administración de la
por S A o 12 500 ó más
ley…
para ganadería, ó 20 000
has forestales por S A.
5. Ejidatarios y comuneros 6. Los núcleos de población
pueden asociarse con el
ejidal y comunal, se
reconocen como personas
Estado o con terceros
y pueden transmitir
morales, propietarias de
los núcleos de población
derechos parcelarios de
tierra o supericie de uso
y pueden enajenar parte
del núcleo…
común.
*Nota: dimensiones de la pequeña propiedad: Agrícola: 100 hectáreas de riego, 200
de temporal, 150 para cultivo de algodón, 300 para cultivos especiales (plátano, caña
de azúcar, café, henequén, hule y palma). Ganadera: La supericie necesaria para
mantener hasta 500 cabezas de ganado mayor o su equivalente en ganado menor.
Pequeña propiedad individual: se introduce la pequeña propiedad forestal, que
comprende 800 hectáreas de bosque o selva. Salazar, Adame Florencio (2004:11).
Fuente: conformado a partir de información de Zepeda (2000:75).
Para consolidar la reforma-92, el gobierno mantuvo y/o
creó instituciones para regularizar la tenencia de la tierra
e incentivar el cambio de las formas de propiedad social a
la privada, entre las que destacan: la procuraduría agraria
(PA) para la solución de problemas agrarios; la Secretaría de
Reforma Agraria (SRA) para la realización de los trámites
agrarios; también se operó el programa de certiicación de
derechos ejidales y titulación de solares (PROCEDE), entre
otros organismos agrarios de nivel federal. En 1994, se
creó un programa de apoyo a los agricultores, denominado:
programa de apoyos directos al campo (PROCAMPO),
mediante el cual se canalizaron pagos directos a los
productores de granos básicos, en base al promedio de la
supericie sembrada.
Según Arturo Warman, “con este Programa, entre otros,
se pretendía compensar las desventajas estructurales de la
agricultura mexicana frente a la de EE. UU y brindar apoyo
a los pequeños productores” (Warman, 2006:5). En realidad
el PROCAMPO solo concentró los subsidios anteriormente
199
canalizados a través de los precios de productos e insumos,
que siempre beneiciaron más a los productores comerciales
grandes.
Los estudios del contenido y orientación de la reforma-92,
arrojaron resultados diversos según la perspectiva teórica de
análisis utilizada, pero todos coincidieron en que se trataba de
cambios agrarios estructurales relevantes, que establecían un
nuevo “pacto social” (Luiselli, 1992:19). Desde la perspectiva
campesinista, se planteó que la reforma-92 representaba una
ruptura de la relación histórica campesinos-gobierno, pues
abría el camino a la privatización de la cuantiosa propiedad
social (ejidal y comunal) y a una profunda concentración de
la tierra en pocas manos, en perjuicio directo de los pequeños
campesinos. Se vio como algo posible que 10 933 sociedades
mercantiles, como las permitidas con la reforma-92, podrían
ser las propietarias de toda la tierra del país, situación nunca
imaginada en el poririato (Calva, 1993:85).
Por su parte, los proletaristas sostuvieron que desde antes, la
relación social del capital había penetrado la agricultura
y que ahora requería que se abandonara la pretensión
de la autosuiciencia y dejar de compensar a un sector
ineiciente (campesinos-indígenas), pues su protección y
apoyo a través de precios, subsidios y ayudas se relejaba
en generosas ventajas para los más eicientes. Se consideró
que con la reforma-92 se desamortizaría el ejido, entraría
al mercado de tierras y se abriría la posibilidad a una nueva
concentración de la propiedad. “La riqueza entregada al
ejidatario en usufructo se transmutará en capita. Con lo
que se repetirá la inmensa redistribución (de riqueza) que
se logró mediante el reparto agrario masivo -Cardenista-”
(De la Peña, 1992:50). Es certera la airmación de Sergio
de la Peña, pero no aclara que el efecto sería inverso al
generado por el reparto de Cárdenas.
Así, la reforma-92 incluyó la modiicación de la legislación
agraria de modo que se pudiera privatizar y vender la
tierra ejidal y comunal, haciendo posible la conformación
de grandes empresas, que pudieran adquirirla y aplicar
ágilmente maquinaria y tecnología para consolidar ventajas
comparativas y elevar la rentabilidad y competitividad de la
agricultura. La citada reforma comprendió también, como
parte de la inserción de México en el proceso de globalización
económica, la apertura de los mercados agrícolas de EUACan.-Méx., lo cual indiscutiblemente situó en una notable
desventaja a los pequeños productores de México, buena parte
de los cuales corresponde con los campesinos-ejidatarios y
comuneros.
200 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Procedimiento metodológico
Para el abordaje del problema se parte de considerar que la
agricultura es parte de un conjunto de ramas productivas
que se integran en una estructura económica y social que se
soporta en el marco legal de un estado-nación determinado
o en marcos legales internacionales, en la medida que se
comparten mercados y/o compromisos.
Se adoptaron herramientas del método comparativo
(Lijphart, 1971), que permitieran verificar los efectos
observados en la estructura agraria mexicana, asociados
con la operación del nuevo marco legal, aquí identiicado
como una intervención consciente, contrastando situaciones,
variables e indicadores, de antes y después de la intervención
hecha deliberadamente para influir en la evolución de
fenómenos económicos-sociales en el agro mexicano.
Este procedimiento metodológico se ha desarrollado y
utilizado en un creciente número de países para lograr
resultados más precisos y dar mayor efectividad a las acciones
de intervención gubernamental (económica, social, política,
etc.). El análisis comparativo esencialmente consiste en la
realización de contrastaciones de variables de cierto fenómeno
o proceso, en dos momentos de tiempo, espacios o situaciones
distintos o bien de dos fenómenos o procesos que suceden con
variación de contenidos internos, externos o contextuales, con
el propósito de identiicar y destacar los cambios-diferencias
encontradas entre unos y otros.
En fenómenos sociales, como los considerados en este
estudio, “no es posible el uso de experimentos a partir de
los cuales se puedan obtener generalizaciones de aplicación
universal, pues se caracterizan a menudo por la escasez
del número de casos y por lo elevado del número de
variables que intervienen” (Lijphart, 1971:684). Además,
pueden detectarse-analizarse relaciones entre variables de
intervención y efectos asociados con ellas, en los objetos
de estudio y/o sus contextos.
Resultados
Se preirió utilizar información con cobertura nacional,
para estructurar elementos que aporten evidencias para el
logro del objetivo planteado, conforme a lo que se presenta
a continuación.
Joel Cervantes-Herrera et al.
Intencionalidad de los cambios estructurados en la
Reforma-92
La Reforma-92 ocurre en el contexto de la re-estructuración
del modelo fordista de acumulación de capital global,
orientada a lograr: crecientes garantías para el libre lujo
del capital y de mercancías, intensiicar la extracción de
excedentes, mayores espacios para su inversión en los
países subdesarrollados, asignando nuevas funciones a los
gobiernos. De acuerdo con Téllez (1994), en la agricultura,
centralmente la estrategia consistía en favorecer el lujo
de capital a la agricultura, lo cual se lograría impulsando
la concentración de la tierra en medianas y grandes
explotaciones privadas eicientes.
Para ello, se hacía indispensable: detener la pulverización
de la tierra, terminando el reparto agrario; entregar la tierra
en dominio pleno (enajenable) al campesino, acelerar
el deslinde parcelario; legalizar la privatización de la
propiedad social de la tierra, para favorecer su renta,
compra, venta, entre otras formas de concentración. Se
esperaba tener un agricultor moderno, orientado por el
mercado, con mejor productividad que dinamizara el
sector y abriera opciones de ingreso para la población
rural (Téllez, 1994:11-14).
Lo anterior, releja la intencionalidad que la reforma-92 tuvo
en la rama agrícola y es curioso observar la coincidencia
puntual de los objetivos a lograr en las cuestiones agrarias,
que en México fueron tan debatidos, con lo que en 1990
se señalaba en las conclusiones del estudio “mejora de la
contribución de la reforma agraria de méxico al desarrollo
agrícola” llevado a cabo por John R. Heath para el Banco
Mundial (BM), donde pueden consultarse (Heath, 1990).
En cualquier caso, la intención de los cambios promovidos
permite delimitar con claridad en qué ámbitos se esperaban
los principales efectos de la operación del nuevo marco legal.
Los datos del Cuadro 4 muestran que antes de la reforma-92,
la tierra en propiedad social (ejidal + comunal) sólo
representaba 31.7% del total de tierra repartida, de modo que
asociar la crisis agrícola nacional al “mal desempeño” de
30% del total, fue una evidente sobrevaloración del segmento
de propiedad social.
En relación al crédito agropecuario. Se sostuvo que,
por ser inembargable, la propiedad social era un
obstáculo al lujo de crédito al campo, por lo que debía
Cambios de la legislación agraria para la modernización del campo
201
privatizarse. La evidencia muestra que el crédito ejercido
se redujo conforme se definían e implementaban las
reformas. De 1988 a 1992 el crédito agrícola disminuyó
83.2% y la supericie agrícola asegurada se redujo 95%
(Cuadro 5).
Entre 1991 y 2007, el crédito agrícola siguió disminuyendo:
en 1991 de las 3.876 millones de unidades de producción
existentes, sólo 744.4 mil recibían crédito, pero en 2007 la
supericie cubierta con crédito se redujo a 104 987 unidades
(-86%). Durante los primeros años de vigencia del TLCAN.
Cuadro 4. México: tenencia de la tierra (ha).
Supericie total
Año
Tenencia de la tierra (ha)
Comunal
Privada
De colonia
4 338 099
70 493 193
2 166650
Pública
1315197
1991
108 346 084
Ejidal
30 032 643
2007
112 743 247
37 057 776
3 783 888
70 014 723
1 393803
493 054
2007-1991
4 397 163
7 025 133
-554 210
-478 469
-772846
-822142
Variación 2007-1991 (%)
4.06
23.39
-12.78
-0.68
-35.67
-62.51
Fuente: elaboración propia a partir de información de: INEGI (1994). VI censo Agrícola, Ganadero y Forestal. Aguascalientes, México. INEGI (2009). VIII Censo Agrícola,
Ganadero y Forestal. Aguascalientes, México.
Cuadro 5. Volumen de crédito al campo y supericie agrícola asegurada 1988-1992.
Componente
1988
1992
Crédito total otorgado (mill N$)
7 234.30
1 215.31
Seguro agrícola en maíz (ha)
2 966 692
141 061
Disminución (1988-1992)
(millones de N$)
(%)
6 018.99
83.20
2 825 631
95.25
Fuente: INEGI-CONAL. (1995). El sector alimentario en México. México.
Cuadro 6. Crédito agrícola como porcentaje del crédito agrícola total y del PIB (1994-2000).
Concepto
Banca de desarrollo
Porcentaje del crédito total
1994
1995
2.24
2.63
1996
2.57
1997
1.84
1998
1.53
1999
1.55
2000
1.70
Banca comercial
6.15
4.21
4.95
4.83
4.77
4.06
3.71
Total
8.38
6.84
7.52
6.67
6.30
5.61
5.41
Porcentaje del PIB. 2/
Banca de desarrollo
0.73
0.84
0.72
0.44
0.35
0.34
0.31
Banca comercial
1.99
1.35
1.39
1.15
1.08
0.89
0.68
Total
2.72
2.19
2.11
1.59
1.43
1.23
0.99
Fuente: tomado de: Cámara de Diputados (2004). Servicio de investigación y análisis SIID. División de Economía y Comercio del Servicio de Investigación y Análisis
de la Cámara de Diputados con información de Presidencia de la República y el CNA.
202 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
El monto total de crédito agrícola, respecto al % del PIB que
representa, “se redujo más de 50% en el período (Cuadro 6),
siendo restrictiva e insuiciente, para promover la innovación
tecnológica e incrementar la competitividad en el sector”
(H.C. de Diputados, 2004:16).
Conclusiones
Aunque la intencionalidad de la modiicación y operación
del marco legal se orientó a lograr la libre operación de
los mercados, lo cual motivaría la concentración de la
tierra, la inversión y la elevación de su competitividad de
la agricultura, las evidencias reunidas permiten concluir
que contrario a lo esperado, la tierra no se concentró, el
crédito a la agricultura disminuyó, la tierra ejidal creció
en 7 millones de has y la privada disminuyó medio millón
de ha, la asociación de inversionistas-agricultores no
se incrementó sensiblemente y la tierra utilizada como
garantía de créditos fue poco signiicativa. En cambio, los
indicadores muestran que entre 1991 y 2007 se profundizó
la pobreza rural, la dependencia alimentaria y la migración.
Así, la reforma-1992 demostró su incapacidad para lograr
los objetivos que pretendía.
Los resultados conirman que los procesos sociales tienen
notable complejidad y que a mayor simpliicación para su
explicación - mayor alejamiento del conocimiento certero de
los fenómenos y por ello menor capacidad real para incidir
en el desarrollo de la sociedad rural. El tipo de tenencia de
la tierra no modiica los resultados de la operación de los
mecanismos económicos de un sistema globalizado, ni cambia
la lógica de los agentes económico participantes en el mercado
y poco determina el desempeño general de la agricultura de
un país, pues ello depende de la prioridad que tenga en la
política pública y en el presupuesto nacional el desarrollo de
la agricultura y de la operación de políticas redistributivas a
favor de aquella, en reconocimiento a su relevancia en ámbitos
como el ambiental y el identitario-cultural.
La Ley Agraria derivada de la reforma-92 abrió diversas
posibilidades para que la tierra de propiedad social se pudiera
privatizar y concentrar. Los resultados de este trabajo indican
que ello no parece haber ocurrido signiicativamente en el
ámbito agrícola, ante lo cual sería interesante analizar el
fenómeno desde otras perspectivas, como las siguientes: a)
la reforma-92 se hizo paralela a la apertura de los mercados
la cual provocó la caída de precios de los productos agrícolas,
Joel Cervantes-Herrera et al.
afectando a los países en desarrollo que no cuentan con
políticas agrícolas sólidas y haciendo poco atractiva la
inversión de capital en sus agriculturas; y b) la reforma-1992
se orientó más a mercantilizar o legislar-legalizar el despojo
de la mayor parte posible de los recursos naturales, ubicados
en las tierras de propiedad social (indígena y campesina).
Estas perspectivas de análisis habrán de utilizarse en
próximos trabajos.
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Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 205-210
Migración y autodeterminación: re existencia
como permanencia social
Zuleima Rojas González
Universidad Autónoma Chapingo. zuleimazul13@hotmail.com.
Resumen
Ante la necesidad de un fortalecimiento social que haga
frente al sistema capitalista. En este texto se advierte la
relevancia de la reconiguración del espacio comunal; como
resultado de las relaciones establecidas entre la población y
la migración, que invita a una disertación del espacio social
(sentido de pertenencia) que fortalece la resistencia indígena.
El texto tiene como objeto interpretar la transformación del
espacio social en el tiempo de la migración trasnacional;
bajo la conservación, defensa y fortalecimiento de las
formas y condiciones que resultan indispensables en la
resistencia indígena. Asimismo comprender este espacio
como pilar de la autodeterminación de los pueblos con
prácticas de permanencia en lo global y local. Sin embargo,
la autonomía indígena se niega en el interés de dominio de
la modernidad sobre la naturaleza humana y no humana. El
reconocimiento del indígena entra en especulación de no
admitir su autodeterminación como verdad plena, siendo
sólo la negación de una realidad que choca con el desarrollo
impuesto por Europa. Que obliga a someterse a las decisiones
de la sociedad burguesa, pero con relaciones construidas
propias y arraigadas que dan al indígena la expresión de su
resistencia y acción consciente de su emancipación. Las
transformaciones subjetivas que la población indígena
ha podido recrear en su afrenta social, son a través de la
transformación de sus espacios sociopolíticos y simbólicos
que representan su autodeterminación. De manera que
la resistencia se traza desde su exclusión de la historia,
desde su olvido, desde sus fronteras. En que han resistido a
desaparecer y han recreado espacios de emancipación que
se creían controlados por el sistema eurocéntrico-colonial.
La movilidad cedió sectores a la población indígena, es
decir han recreado sus y otros espacios que contrarrestan
su exclusión -espacios considerados geopolíticos, y que
son necesarios representar en un escenario trasnacional y
transfronterizo.
Palabras clave: migración, autodeterminación, re existencia
Introducción
El actual estudio tiene un carácter subjetivo que arroja el
indicio de cambios espaciales, sociopolíticos y simbólicos
que complementan el análisis de movilidad. Donde la
migración es un escenario de resistencias dentro de la
exclusión social, y resultado de la hegemonía que el propio
sistema intenta establecer bajo un proceso modernizador.
En que se enaltecen los valores y creencias que caracterizan
el modo capitalista de entender la vida como nación. Una
visión que deja fuera las nuevas interpretaciones que están
dando cuenta de los cambios en el orden espacial bajo las
relaciones establecidas “desde abajo”.
Sin embargo, en el proceso migratorio también se incluyen
manifestaciones colectivas de organizaciones y empiezan
aparecer las voces indígenas como testimonios del mismo
proceso productivo del campo político. Para evitar caer en un
error metodológico y teórico en este texto se particulariza el
conlicto de los pueblos de la periferia sur del país (mixteca
206 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
oaxaqueña). Como representación de la relación entre
la población indígena y su espacio trasnacional desde la
coniguración (espacio-tiempo).
De modo que se conciba el armado político y económico
del capital que caracterizan a la sociedad actual mediante
el dinamismo, la movilidad y la movilización espacial y
temporal, que recrea relaciones sociopolíticas y simbólicas
que integran la resistencia indígena. La resigniicación
de su dignidad constituye una base importante para su
emancipación y resistencia a nivel local y global.
En la apertura del capitalismo se dio una reconiguración
del papel de la clase trabajadora. En estos primeros lustros
del siglo XXI -en la crisis del capitalismo atado a una
exacerbada globalización-, los trabajadores globales, los
migrantes, son los que inspiran a comprender su nuevo
papel en la creación de nuevos grupos de sociedades. Para
muchos la encarnación de la promesa de transformación
social, los hombres nuevos que [dan] la antítesis de la
civilización1. Por lo que la migración como acción social
requiere ser tratada desde el propio fenómeno alejado de una
interpretación desde las altas esferas de lo supranacional. Y
realmente aunado a caracterizar la resistencia de los pueblos
indígenas, mediante procesos para reforzar su arraigo en lo
local. En un plano global que logra ser visualizado desde la
migración, que enriquece su práctica individual y colectiva,
su permanencia comunal y su movilización sociopolítica.
Resistencia y emancipación desde la migración
Es en el capitalismo donde la migración resulta un asunto
condicionado por otros, mediante políticas económicas
globales. Pero a su vez, dicho fenómeno se presenta como
solución de articulación (explotación) a las políticas
restrictivas que manipulan la libertad de movilidad. Por lo
que actualmente la problemática de exclusión económica,
política y social, se puede contrastar en un proceso mundial
relativamente nuevo o que en los últimos años se ha hecho
evidente.
La globalización de la economía capitalista se puede ubicar
históricamente en la expansión europea y la colonización
del nuevo continente. No obstante, esta globalización se
hecho evidente a partir de los procesos económicos que se
Cfr. Eric R. Wolf 1982. Europa y la gente sin historia. Capítulo XII. Los nuevos
trabajadores, pág. 428.
1
Joel Cervantes-Herrera et al.
crearon para consolidar su dominio en los espacios locales,
y que se advierten como contención de la sociedad. A pesar
de esto, la globalización ha comprendido una incertidumbre
dentro de las propias esferas de lo político y lo privado. Esto
debido a los problemas de articulación de la multiplicidad
de espacios y tiempos que componen la dimensión global
con un carácter heterogéneo de su constitución2.
Mezzadra establece que el capital es una maquinaria que
articula su dimensión global a través de cubrir y capturar
la composición del trabajo vivo mediante múltiples
modalidades (ibid.3). Y es en esta multiplicidad de
los espacios laborales que existen las condiciones de
someter la libertad (pertenecer a otro). Si bien el actual
capitalismo global requiere el empleo de la violencia y
la dominación para transitar hacia una modernidad sobre
contextos coloniales heterogéneos. Su articulación resulta
en la conexión global del capitalismo como polarizante.
Es decir, bajo una lógica de expansión mundial, el
capitalismo produce una desigualdad creciente entre
quienes participan del sistema. Esta encierra el ajuste
unilateral a las tendencias mundialmente dominantes y
que condena a los países más débiles a una acentuación
de su “periferización”3.
La relación del capital con el trabajo es a través de
construcciones sociales de diferencia que intensiican las
relaciones de explotación. Por lo que la coniguración
espacial, temporal y global de la migración concierne al
capitalismo. “El impulso de acumulación de capital [ha]
conducido […] a una búsqueda incansable de nuevas líneas
de productos, nuevas tecnologías, nuevos estilos de vida,
nuevas formas de trasladarse, nuevos lugares que colonizar
[…] El capitalismo, […] siempre ha prosperado con la
producción de la diferencia” (Harvey; 2007:137-38). En este
sentido, el sometimiento se da bajo un tiempo fragmentado,
de un tiempo escandido por las aceleraciones, los retardos
y los vacíos determinados por el sistema. Sin embargo,
Jacques Rancière advierte formas de emancipación en los
espacios económicos y sociales signados por la migración
y el hibridismo cultural y lingüístico:
“Articular escalas geográicas, políticas, legales, sociales y culturales radicalmente
heterogéneas en la dimensión global de los actuales circuitos de acumulación es una
de las tareas más importantes a las que se enfrenta el capitalismo contemporáneo”.
Sandro Mezzadra “Vivir en transición Hacia una teoría heterolingüe de la multitud”.
Traducción de Marcelo Expósito, pág. 2.
3
Samir Amín 2001. “Capitalismo, imperialismo, mundialización”, en José Seoane
y Emilio Taddei (comps.) en Resistencias Mundiales. De Seattle a Porto Alegre.
Buenos Aires: CLACSO, pág.17.
2
Cambios de la legislación agraria para la modernización del campo
“[…] la emancipación no es el producto del proceso normal de
la dominación, ni un fenómeno que se desarrolla al extremo,
al borde del precipicio. Es un fenómeno que se desarrolla en
los espacios intersticiales: los espacios del tiempo dividido
y los de las fronteras inciertas entre los modos de vida y las
culturas. [Es] posible observar determinados fenómenos
contemporáneos: en primer lugar existe el desarrollo de todas
las formas de intervalo del trabajo; es decir, no solamente
las formas intermitentes sino también las formas que oscilan
entre autonomía y dependencia, entre el mundo del estudio
y el del trabajo, el mundo del trabajo y el de la cultura […].
Por otra parte existen fenómenos de inmigración, que
siempre tendieron a verse como la llegada de los condenados
de la tierra, cuando más bien constituyen formas de
circulación entre experiencias y culturas donde los que
vienen aportan saberes que se revelan generalmente más
útiles para la lucha y la negociación que para trabajos que son
frecuentemente inferiores a sus capacidades y a su estatuto
de origen. También hay fenómenos de circulación de saberes
y prácticas artísticas y culturales […] No obstante, lo [...]
importante es la disponibilidad considerable de formas de
saber y de modos de expresión” (2010:10).
Jacques Rancière (2010) apunta que dentro de la dominación
como tiempo homogéneo. Existen dos tipos de distorsión.
Por un lado, las maneras imprevisibles con que los agentes
sometidos a esta temporalidad renegocian su relación
subjetiva con las escansiones del tiempo. El autor se
reiere a la emancipación en función de reapropiarse de la
fragmentación del tiempo para crear formas de subjetividad
que vivan otro ritmo que el del sistema. Y por otro, las
irrupciones o “momentos”, en que se detiene una de las
maquinas que hacen funcionar el tiempo (trabajo/escuela).
Oponiendo un propio orden del día a la agenda de los aparatos
gubernamentales. Para el autor mutaciones efectivas
del paisaje de lo visible, de lo decible y de lo pensable,
transformaciones del mundo de los posibles.4
Es precisamente en estos espacios de destino migratorio que
se instalan estas condiciones de re-existencia política y social.
La migración cierra la brecha entre aquellos (migrantes) que
se inscriben socialmente en la relación directa entre capital
y trabajo y aquellos (población indígena) que no están
inscriptos sino indirectamente en esta relación. Por lo que
este orden espacial/global de la migración, repercute en la
resistencia de las poblaciones esencialmente locales.
4
Cfr. Entrevista a Jacques Rancière Por el Colectivo Situaciones en La noche de
los proletarios: archivos del sueño obrero, Buenos Aires: Tinta Limón, 2010.
207
Ahora bien, población y comunidad diieren en su contenido
conceptual, ya que comunidad es la entidad singular de la
población. Consideremos la comunidad mixteca oaxaqueña
conformada del total de la población indígena de México. O
de todo el continente. Retomemos algunas consideraciones
generales al respecto. David Harvey considera que la
comunidad es un proceso de reunión que se da por “la
lucha tangible para deinir sus límites y su alcance [incluso
su territorio especíico] y sus normas y condicionamiento
para la participación y la pertenencia [cruciales para
construir identidad]. La lucha social por crear y sostener sus
instituciones [mediante redes sociales y fuerzas colectivas].
Tales luchas modelan simultáneamente la comunidad, la
percepción de cuál es la forma de vivir adecuada, y [la
identidad] de quienes se encuentran dentro de su esfera de
inluencia” (2007:208).
El autor apunta que en estas luchas se encuentran los indicios
y posibilidades de formas insurgentes de cambio. De manera
que advierte que la comunidad suele enfrentarse a una frágil
estabilidad debido a fuerzas políticas externas. Señala la
necesidad de mantenerse alimentadas por procesos de
formación y reairmación de la solidaridad. Y añade que
uno de los medios para mantenerse viva para sus partes es
estar integrada en procesos más amplios de cambio social.
En este estudio, la migración cumple con lo anterior bajo
los requisitos -según Harvey- de un movimiento que se
alarga en el espacio y el tiempo, formando nuevos procesos
político/económicos más amplios. Su importancia radica en
las relaciones establecidas hacia dentro con los individuos
que las componen y hacia fuera con el mundo más amplio,
por la relación capital/trabajo.
En los recientes cincuenta años, la movilidad ha marcado
las condiciones para la aparición de distintos movimientos
sociales. La categorización primer y tercer mundo, centro
y periferia, norte y sur, este y oeste; se limitó en aportar una
distinción de lo económico, cultural, político y social en
el espacio/tiempo del capital. Lo que obligo a que fueran
invadidos los centros por parte de las periferias como práctica
socioeconómica. La apropiación de los espacios signiicó no
sólo la apertura de acceso a la masa de trabajadores(as). Sino
también la reducción en la distinción entre primer y tercer
mundo. Es decir, la migración como producto de desequilibrios
económicos y políticos de explotación, se convirtió a su vez en
variable de la geografía del capital, donde hay cada vez más
periferia en el centro y más centro en la periferia5.
5
Sandro Mezzadra (2005) Derecho de fuga. Migraciones, ciudadanía y
globalización Pág. 20.
208 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Joel Cervantes-Herrera et al.
Este acceso al orden global signiicó atravesar una fase, lo
que Harvey denomina «comprensión del espaciotiempo»:
“de repente el mundo parece más pequeño, y los horizontes
temporales en los que podemos pensar acerca de la acción
social se acortan mucho. La percepción de lo que somos, a
donde pertenecemos y qué abarcan nuestras obligaciones
[…] se ve profundamente afectada por la percepción que
tengamos de nuestra ubicación en el espacio y en el tiempo”
(2007:140).
medidas de protección social, producción agrícola destinada
a la exportación y caída de precios, etc.). Actualmente se
pueden distinguir espacios locales mantenidos a través
de interacciones directas o de interacciones deinidas y
fortalecidas por procesos más globales como la migración,
lo que produce sociedades interdependientes en la relación
espacio-tiempo, aumentando así las posibilidades de acción
espacial y de su impacto en la construcción de nuevas formas
de territorialidad6, temporalidad y permanencia.
La configuración de la comunidad desde la migración
transnacional, produce y reproduce relaciones que
desafían a las intransigentes fuerzas externas. Llenando
de posibilidades subjetivas a los movimientos sociales que
plantean una alternativa al capitalismo modernizador. Por
lo que “la práctica revolucionaria real se reiere al nivel de
producción. La verdad no nos hará libres, pero sí lo hará el
tomar el control de la producción de la verdad. La movilidad
y la hibridez no son liberadoras, pero tomar el control de la
producción de movilidad y estasis, pureza y mezclas sí lo
es” (Hardt y Negri; 2002:134).
La entrada del capital a nuevos territorios significó
la ordenación mediante la creación y el refuerzo de
fronteras políticas entre los múltiples espacios globales;
fragmentación establecida en divisiones geográficas y
sectoriales que constituye una de las consecuencias de la
lógica de lo global. Algunas transformaciones del espacio
han sido producidas por la declinación de los Estadosnación como limites que marcan y organizan las divisiones
del mando global (Hardt y Negri; 2002:283). Por lo que se
considera que las resistencias son aun esencialmente locales
frente a la reproducción mundial del capital, en señal de
Néstor Canclini: Cuando David no sabe dónde está Goliat.
Rancière asume que es por estas formas subjetivas por
las cuales se toma distancia de las imposiciones de la
condición, es decir, a la vez son modos de romper con el
sistema de dominación y modos de vivir con él. Es el caso
de los migrantes, “trabajadores precarios e intermitentes
de la actualidad que viven su tiempo fragmentado en el
doble modo de la explotación sufrida y de la posibilidad
de una cierta libertad en el seno de la explotación […] La
emancipación es una manera de vivir la desigualdad según
el modo de la igualdad” (2010:9).
De modo que en los espacios de intersticio, esta emancipación
se lee como el método de la crisis. Para Holloway dicho
método, condiciona pensar el mundo en el sentido de una
dialéctica de inadecuación: quisiéramos comprender a la
pared, pero no a partir de su solidez, sino desde sus grietas
[…] comprender al capitalismo pero no como dominación,
sino desde la perspectiva de sus crisis, contradicciones, sus
debilidades, y […] entender como nosotros mismos somos
esas contradicciones (2011:10).
Es así que se apunta una paradoja en cuanto a los espacios
étnicos: “la paradoja fundamental de la política étnica en el
mundo actual es que lo primordial se globalizó […] Debido
a una interacción inestable y dislocada entre el comercio, los
medios de comunicación, las políticas nacionales y las fantasías
de los consumidores, la cuestión de la etnicidad, que una vez
supo ser un genio contenido en la lámpara de la localidad,
actualmente pasó a ser una fuerza global, deslizándose para
siempre a través de las rajaduras de los estados y las fronteras”
(Appadurai; 2001:54). Es mediante estas fronteras que el capital
opera su articulación en heterogéneos espacios y tiempos.
Precisamente fronteras “geopolíticas” que articulan su
carácter “transnacional”, las fronteras legales que reducen la
movilidad y los derechos de las personas migrantes, los límites
culturales y sociales producidos por los procesos de etnización,
las fronteras de producción, las fronteras temporales que
separan diferentes tiempos históricos y hacen posible que éstos
sean traducidos al lenguaje unitario del valor7.
Ascensión Barañano, José L. García, María Cátedra y Marie J. Devillard (eds.)
Diccionario de relaciones interculturales. Diversidad y Globalización. Editorial
Complutense. 2007, España, pág.110.
7
“… debemos pensar en ellos como algo que está constantemente haciéndose,
dado que se enfrentan a una serie de prácticas, comportamientos e imaginarios
subjetivos que los desafían. Es este desafío lo que hace de las fronteras y los límites
relaciones sociales atravesadas por la multiplicidad de tensiones que existen entre
el “reforzamiento de las fronteras” y el “atravesamiento de las fronteras” Sandro
Mezzadra “Vivir en transición Hacia una teoría heterolingüe de la multitud”.
Traducción de Marcelo Expósito, pág. 11.
6
Durante las últimas dos décadas, las luchas indígenas han
conformado poblaciones más integradas directamente en
las relaciones del capital. A partir de librar la emancipación
del imaginario social han afectado sus prácticas simbólicas,
políticas y sociales en su espacialidad. Actuando frente a
los procesos de empobrecimiento por la globalización de
la economía (programas de ajuste estructural, supresión de
Cambios de la legislación agraria para la modernización del campo
La conexión entre lo global y lo local no puede ser negada
en su inluencia en la coniguración de los espacios. Pero la
producción de lo local ante el gigante occidental ha quedado
reducida al “atraso” de los pueblos sin historia. Con un
destino dominado por el occidente capitalista y por diversos
socialismos tecnológicamente avanzados, los pueblos
marginales ya no inventan futuros locales. Lo que es diferente
en ellos permanece aferrado a los pasados tradicionales,
estructuras heredadas que resisten o ceden ante lo nuevo
pero no pueden producirlo8. Ante este imaginario occidental,
el etnógrafo James Cliford (2001) señala en cambio un
espacio ocupado por vías abiertas a través de la modernidad.
Entre ellas, las invasiones de personas de origen incierto que
han cuestionado las relaciones coloniales. Después de 1950
los pueblos empezaron a hablar y actuar por sí mismos en
un escenario global, donde se diicultó mantenerlos en sus
lugares de origen (tradicionales). Distintos modos de vida
destinados alguna vez a fundirse con el "mundo moderno"
reairmaron su diferencia, en formas novedosas (pág. 21).
Para el autor, la lucha ha sido por revivir e inventar maneras
de vivir como indios en un mundo invasor. Y es precisamente
dentro de una mínima especiicación y menor determinación
en el mundo moderno, que la asimilación parece ahora menos
deinitiva. Por lo que su autodeterminación indígena dentro
de un sentido de resistencia se deberá entender no como una
supervivencia arcaica sino como un proceso en marcha,
cuestionado en lo político e inconcluso en lo histórico.
Conclusión
En consecuencia, esta migración -entre lo local y lo global,
ha contribuido al conlicto de interpretación y delimitación
de los conceptos de “cultura”, “etnicidad”, “comunidad”,
“identidad” y “territorio”. Si se considera cierto grado de
“inautenticidad” al intervenir en un mundo interconectado:
atrapado entre culturas, implicado en otras (op.cit. 26), ¿la
pertenencia dentro de los pueblos indígenas con base en su
etnicidad parecería obsoleto?
Por lo que la coniguración de la migración trasnacional
y trasfronteriza exhorta a cuestionar ¿Bajo qué dominio
se encuentra la identidad espacial o la autenticidad de un
grupo? ¿Cuál es la actuación y la relación que asumen el
digno y el indignado en los encuentros transculturales y en las
Cliford, James. 2001. Dilemas de la Cultura Antropología, literatura y arte en la
perspectiva posmoderna, 1ª reimp. Editorial Gedisa, Barcelona España. Pág. 20.
8
209
modernas relaciones interétnicas de la migración? ¿Cuáles
son los elementos esenciales y los límites de su movilidad?
¿Qué alteraciones de desarrollo, pérdida e innovación en el
espacio pueden explicar el presente curso de movimientos
locales de oposición?
Este análisis es necesario para relexionar una realineación
de la historia que suprima el presente excluyente de los que
son dominados por la cultura modernizadora. Orientada
a desarticular los distintos rostros del capitalismo global,
mediante movimientos de resistencia y emancipación:
resistencia para no dejar de ser pueblos, emancipación
para no seguir siendo colonias (López Bárcenas; 2008:25).
Es preciso revisar estas prácticas como formas de tránsito,
donde el sujeto se autodetermine como una nueva realidad
individual/colectiva, a partir de lo local/global. Este
aprendizaje tendrá que resolver el reconocimiento reducido
como dominio colonial de las poblaciones indígenas. En tanto
que desafíe el proceso económico mundial que echa mano de la
migración atropellada, obstaculizada y desgarradora. Siendo
primordial la defensa y rescate de su condición de pueblos,
reivindicando los componentes étnicos como resistencia que
fortalece su dignidad frente a la modernidad.
Los procesos que han reforzado la resistencia indígena a
través del vínculo local/global de la migración. Son aspectos
de análisis que representan el reordenamiento espacial de la
población indígena y dan cuenta del arme, desarme y rearme
de sus conjuntos simbólicos (cultura, identidad, etnicidad),
políticos (espacio/territorio) y sociales (comunidad). Uno es
la movilidad espacial bajo tránsitos temporales, un segundo
es el dinamismo de dispersión en redes que reproduce el
arraigo comunal, y inalmente, la movilización etnopolítica
de emancipación, considerados procesos que determinan la
relación de permanencia dentro de espacios y en tiempos
fragmentados por el capital.
Estos procesos tendrán que ser revisados a profundidad
para generar la real autenticidad, autoconformación y
autoidentiicación de las poblaciones dentro de lo local hacia
lo global; que determinan redes que conectan lo periférico
y lo céntrico, en que entran y salen poblaciones prístinas de
la Historia eurocéntrica, colonial y moderna. Y logran su
plena autodeterminación en las prácticas de representación
de su comunidad. En que existen a través de nuevas formas
de su ser indio.
210 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Literatura citada
Appadurai, Arjun 2001 La modernidad desbordada. Buenos Aires.
Ediciones Trilce- Fondo de Cultura Económica
Barañano, Ascensión, José L. García, María Cátedra y Marie
J. Devillard (Eds.) 2007. Diccionario de relaciones
interculturales. Diversidad y globalización. Editorial
Complutense, España.
Cliford, James. 2001. Dilemas de la cultura antropología, literatura y
arte en la perspectiva posmoderna, 1ª reimp. Editorial Gedisa,
Barcelona España.
Hardt, Michael y Antonio Negri 2002 Imperio, traducción Eduardo Sadier.
http://www.chilevive.cl
Harvey, David 2007. Espacios del capital hacia una geografía crítica.
Ediciones Akal. Madrid España.
Joel Cervantes-Herrera et al.
Holloway, John 2011 Agrietar el capitalismo. El hacer contra el trabajo,
Ediciones Herramienta, Bnos. Aires
López Bárcenas, Francisco 2008. Autonomías indígenas en América
Latina, colección derechos indígenas, MC editores, México.
Rancière Jacques 2010. La noche de los proletarios: archivos del sueño
obrero, Buenos Aires: Tinta Limón.
www.inventario22.com.ar/textocomp.asp?id=47147.
Samir, Amín 2001. “Capitalismo, imperialismo, mundialización”, en José
Seoane y Emilio Taddei (comps.) en Resistencias Mundiales.
De Seattle a Porto Alegre. Buenos Aires: CLACSO
Sandro, Mezzadra 2005. Derecho de fuga. Migraciones, ciudadanía y
globalización. Traicantes de sueños. España
Sandro, Mezzadra. 2007 “Vivir en transición hacia una teoría heterolingüe
de la multitud”. Traducción de Marcelo Expósito.
www.eipcp.net/transversal/1107/mezzadra/es
Wolf, Eric R. 1982 Europa y los pueblos sin historia. México. Fondo de
Cultura Económica.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 211-216
Gobernanza, actores sociales y desarrollo en las áreas rurales: una propuesta
metodológica para analizar experiencias en México y España
Efraín García Palacios
IESA-CSIC y Eduardo Moyano Estrada (IESA-CSIC). (efrayin.palacios@gmail.com; emoyano@iesa.csic.es).
Resumen
En el marco de las transformaciones que experimenta la
agricultura en México, se han impulsado diversos programas
de desarrollo (sectorial, territorial y regional) con el
objetivo de disminuir las disparidades existentes, buscando
incrementar el bienestar socio-económico en las regiones
más atrasadas. Ante la incapacidad de esos programas de
impulsar una mejora del bienestar de las áreas rurales, resulta
importante y necesario analizar los enfoques en los que se
basan los programas de desarrollo territorial. El trabajo a
que hace referencia esta comunicación analiza el sistema de
gobernanza y las dinámicas locales que intervienen alrededor
de los programas de desarrollo territorial en áreas rurales, para
determinar los factores que inciden en el éxito o fracaso de
dichos programas. Para el caso de México, se ha seleccionado
el programa proyecto estratégico para la seguridad alimentaria
(PESA) y para España el programa LEADER que se aplica
en los territorios de la Unión Europea. Para abordar este
análisis se utilizará el enfoque del “capital social” con objeto
de estudiar hasta qué punto las redes sociales y los sistemas de
gobernanza facilitan las estrategias de cooperación y el buen
funcionamiento de los proyectos de desarrollo.
Palabras clave: gobernanza, dinámicas locales, programas
de desarrollo territorial, áreas rurales.
Introducción
Los programas de desarrollo territorial en México y
España muestran resultados contradictorios. De acuerdo
con diversos estudios, estas iniciativas han dado lugar, por
un lado, a la mejora evidente de las condiciones de vida
en diversas comunidades locales, donde los territorios
avanzan en su desarrollo, mientras que, por otro lado, existen
territorios donde, aún con altas inversiones económicas y
la intervención de varios agentes públicos y privados, las
comunidades locales no logran apuntalar acciones que
mejoren sus condiciones de vida, mostrando resultados que
no justiican los recursos invertidos.
Los enfoques multidisciplinares del “capital social” y de la
“gobernanza” permiten analizar los factores que, en torno a
las relaciones de conianza, las redes sociales, los vínculos
de cooperación y los sistemas de gobernanza, dan respuesta
al problema de los desiguales efectos de los programas de
desarrollo. La construcción de espacios de participación a
partir de lo local, permite reivindicar las formas de como el
espacio local se organiza y se articula en el contexto de su
propio desarrollo.
Las experiencias en Europa (caso Leader) indican que
una disminución del intervencionismo estatal en la
economía local no es algo negativo, sino que puede ser
una vía para impulsar las iniciativas privadas, siempre
que esté garantizado en los territorios un nivel adecuado
de infraestructuras, equipamientos y servicios sociales.
Esas experiencias muestran también la importancia de
aspectos tales como la conianza, los lujos de información
o las normas de reciprocidad existentes en una comunidad
(Moyano, 2009). Desde su aparición como un programa
piloto en 1991, la Iniciativa europea Leader se ha constituido
como un modelo que incluye un enfoque territorial, una
estrategia de abajo hacia arriba y una perspectiva integrada,
212 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
innovadora y descentralizada, impulsando alianzas
horizontales y promoviendo la colaboración en redes
(Delgado y Ramos 2003) y la diversiicación económica.
En el caso de México, el proyecto PESA se inicia en
2002 como un programa de producción de alimentos,
evolucionando hacia una estrategia diferenciada de
desarrollo rural para zonas marginadas. El PESA se ejecuta
actualmente mediante la formación de capital humano y la
promoción del capital social, buscando que las comunidades
que conforman el territorio de aplicación del Programa
logren combinar sus recursos y activos para incrementar la
producción de alimentos y aumentar los ingresos. A ello se
le suma una estrategia dirigida al empoderamiento de las
comunidades locales mediante diversas experiencias de
autogestión.
Marco de referencia y planteamiento del problema
En México, la apertura comercial y las políticas neoliberales
de ajuste estructural implantadas a mediados de los ochenta,
crearon un escenario desfavorable para gran parte del
sector rural, agudizando la polarización entre las regiones
productivas del país: por un lado, regiones avanzadas y
altamente eicientes en el sector agropecuario, y por el
otro, territorios con desarrollos más lentos, poco eicientes
y donde prevalece la agricultura familiar y de subsistencia.
Son el “norte” y el “sur”, como algunos investigadores lo
llaman por ser evidentes los tipos de desarrollo en la parte
septentrional y meridional de México, respectivamente.
Estas diferencias se identiican también entre las áreas
urbanas y rurales: es un hecho que en las áreas rurales
continúan los problemas de marginación y aislamiento,
principalmente en relación al acceso a los servicios de
educación, salud y asistencia social, y en lo que se reiere a
la conexión con los mercados.
Ante esta situación, se han implementado diversos
programas de desarrollo con el objetivo de disminuir
estas disparidades y buscar incrementar el desarrollo de la
población más desfavorecida. Sin embargo, el Estado, como
máximo promotor del desarrollo regional, ha provocado
con sus acciones diversos efectos a la hora de implementar
las políticas y programa de desarrollo regional. De acuerdo
con Delgadillo et al. (2001), cabe destacar entre esos efectos
los siguientes: a) la discontinuidad temporal y territorial de
los planes de desarrollo, b) la imposición de un esquema
centralizado y vertical en la toma de decisiones, c) el
Efraín García Palacios
predominio de planes y programas meramente normativos,
d) la inviabilidad económica de muchas de las acciones
propuestas y e) el carácter asistencial y clientelar de los
programas.
Por tales razones, resulta importante y necesario analizar
los enfoques en que los programas de desarrollo se insertan
en los territorios, ya que es una forma de determinar su
éxito o fracaso. El nivel de intervención de los actores y
la apropiación social e institucional de los proyectos de
desarrollo, así como la existencia de bases de acuerdo sobre
prioridades y necesidades que engloben a todas las partes del
territorio, son factores que inluye en un correcto desarrollo
territorial.
Los actuales estudios desde el ámbito de las ciencias sociales,
han dado una nueva mirada a la importancia del desarrollo
local, regional y/o territorial, asignando a los actores sociales
e institucionales un papel fundamental en las estrategias del
desarrollo. En este sentido, las redes locales, el capital social
y las instituciones públicas surgen como los eslabones del
desarrollo de los territorios, sin que ninguno de ellos pueda
arrogarse un protagonismo exclusivo en la gran cadena que
representa el desarrollo territorial.
Objetivos
Objetivo general
Analizar los sistemas de gobernanza y las dinámicas
locales que surgen alrededor de los programas de desarrollo
territorial en áreas rurales de México y España, para
determinar su inluencia en el éxito o fracaso de dichos
programas.
Objetivos especíicos
Analizar las bases del funcionamiento del programa de
desarrollo territorial en México (PESA) y en España
(LEADER), mostrando sus objetivos, alcance y metodologías
de intervención.
Identiicar la estructura social de las comunidades que
integran los territorios seleccionados, identificando
los diferentes actores, las redes sociales, las formas de
organización social, así como las dinámicas y las bases de
la cooperación existentes.
Gobernanza, actores sociales y desarrollo en las áreas rurales: una propuesta metodológica para analizar experiencias en México y España
213
Analizar los sistemas de gobernanza puestos en marcha
en los territorios de actuación para la participación de la
población local en la implementación de los programas de
desarrollo territoriales.
entrevistas individuales semiestructuradas, entrevistas
grupales,…) dirigidas a los actores sociales, económicos
e institucionales que intervienen en los territorios
seleccionados.
Principales preguntas de investigación
La primera etapa consiste en una revisión bibliográica,
mediante la cual se ha realizado una indagación de las
principales aproximaciones conceptuales sobre los factores
relacionados con el “capital social” y la “gobernanza”
como ejes fundamentales de la investigación; asimismo,
se recogerá información sobre los programas de desarrollo
territorial que se aplican tanto en México como en España.
En la época reciente se ha valorizado el margen de acción y
el potencial endógeno de desarrollo que tienen los territorios.
Diversos autores coinciden en la importancia que juegan las
dinámicas ancladas en los territorios, más allá de los procesos
de carácter estructural.
Dichas evidencias refuerzan la importancia que ha tomado
el desarrollo con enfoque ascendente (bottom-up). Sin
embargo, dado los resultados poco satisfactorios que se han
producido con este tipo de planteamientos en América Latina,
es necesario corroborar y plantear en el contexto teóricopráctico nuevas formar de abordar el reto del desarrollo
de los territorios rurales. Autores como Albuquerque y del
Castillo (2003) han basado sus trabajos en estos enfoques
ascendentes, a escala regional y local, mientras que Moyano
(2009) airma la necesidad de combinar esos enfoques
con los enfoques descendentes (top- down), ya que, en su
opinión, eso permitiría comprender mejor los problemas
del desarrollo.
Las preguntas a las que pretendemos responder son las dos
siguientes:
a) ¿Qué grado de influencia tienen en el éxito de los
programas de desarrollo las redes sociales y las bases de la
cooperación existentes en una comunidad?
El desarrollo de la presente investigación ha requerido
la utilización de fuentes de información primarias y
secundarias. Las fuentes secundarias han proporcionado
elementos para la construcción de las dos primeras partes
de la investigación (aspectos epistemológicos de la
investigación y el desarrollo territorial en México y España).
Una segunda etapa estará destinada a realizar una primera
visita exploratoria a los territorios seleccionados: la microregión de Ixtapan del Oro-Donato Guerra, ubicada al poniente
del Estado de México (México), y las comarcas andaluzas
de “Sub-bética cordobesa” y “Medio Guadalquivir” en
Córdoba, situadas en la región de Andalucía (España). En
el marco de esa visita se recopilará información sobre la
estructura social y económica de esos territorios, así como
sobre su historia, cultura y sistema organizativo.
Metodología
En la tercera etapa se abordará el trabajo de campo. El periodo
de levantamiento de información en México se ha realizado
durante los meses de julio a septiembre, y se llevará a cabo
en España en los meses de octubre a diciembre de 2016. De
acuerdo con el tipo de estudio y el nivel de complejidad, se
determinó la aproximación metodológica y las herramientas
para abordar de la mejor manera la investigación. A su
vez, se establecieron los procedimientos y estrategias a
utilizar, centrándose alrededor de la observación directa
o participativa, la entrevista semiestructurada, los grupos
focales y las notas de campo.
Una vez delimitados los objetivos, se ha definido la
metodología y las etapas en las que se prevé desarrollar
el estudio. Cabe señalar que la investigación responde
a la categoría de los estudios exploratorios, por lo que
se utilizarán técnicas de tipo cualitativo (observación,
Para el caso de México, las entrevistas se realizarán a
diferentes actores en el territorio como son: a) técnicos de
la Agencia de Desarrollo Rural (ADR), b) beneiciarios
del programa PESA; c) líderes o protagonistas de las
comunidades locales; d) agentes del grupo operativo estatal
y regional; y e) funcionarios municipales, entre otros actores.
b) ¿Qué papel desempeñan los sistemas de gobernanza
implementados en el territorio para construir consensos
y afrontar el “pacto territorial” necesario para afrontar los
retos del desarrollo?
214 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Para el caso de España las entrevistas se realizarán a las
siguientes personas: a) técnicos de los Grupos de Acción
Local (GAL), b) beneiciarios del programa Leader; c)
líderes y actores sociales y económicos de la comarca; y
d) funcionarios de las administraciones regional y local,
entre otros actores. Finalmente, la última etapa corresponde
al análisis y contraste de datos. En ella se llevará a cabo
una ordenación de la información recabada en campo, su
interpretación y análisis y una contrastación con los enfoques
teóricos.
Referencia de otros estudios y aportaciones
Autores como Kandel y Cuellar (2007) reivindican la
importancia que tienen los territorios como un espacio
socialmente construido, cuyas fronteras son deinidas no por
las características biofísicas ni por las divisiones políticoadministrativas, sino por las dinámicas de los actores sociales
que intervienen en ellos y que los transforman. Según esta
idea, para que los programas y proyectos de desarrollo se
puedan construir, es indispensable que se produzca una
apropiación social del espacio y se establezcan formas de
cooperación entre los diferentes actores territoriales para
afrontar los retos que plantean tales procesos sociales de
cambio. Son precisamente esas formas de cooperación las
que hacen posible el desarrollo de la vida productiva y social
de un territorio.
La construcción de espacios de participación a partir de lo
local, permite reivindicar la importancia que tiene en las
estrategias de desarrollo el modo como el espacio local
se organiza y se articula. En otras palabras, es importante
estudiar el potencial endógeno de desarrollo existente en cada
territorio (Wadley, 1988). Resulta, por tanto, resaltar el papel
que deben jugar las dinámicas ancladas en un determinado
territorio, más allá de las asumidas o sobrepuestas por los
procesos de carácter estructural.
Los actuales enfoques de desarrollo territorial se cimentan
en una visión muy optimista de la cooperación nivel local,
visión que se traduce en destacar la importancia que tienen
los programas de desarrollo basados en la convergencia de
intereses entre los diferentes agentes y direccionados por
el Estado. Pero es posible que en la práctica la viabilidad
de estos programas dependa de otros factores, tales como
el capital social existente, las relaciones dentro y fuera del
territorio, el sistema de gobernanza y la interacción de las
diversas instituciones ahí presentes.
Efraín García Palacios
De acuerdo con la FAO (2000), la inalidad del desarrollo rural
territorial es “establecer las capacidades institucionales y
sociales locales que conduzcan al mejoramiento sostenido de
las condiciones de vida en los territorios y al Buen Vivir de los
pueblos indígenas, en coherencia con sus patrones culturales”.
Sin duda es pertinente ubicar en sus justas dimensiones
las posibilidades reales de que este impulso en los procesos
de cooperación basados en los patrones culturales de las
poblaciones locales (indígenas o no) se lleven a cabo de
manera eicaz, ya que hay que tener en cuenta las relaciones de
poder presentes en los territorios y los marcos normativos que
guían las acciones de sus agentes y/o de los propios actores.
En concordancia con Ortega y Moyano (2015), el debate
está en si verdaderamente los territorios son capaces de
potencializar por sí solos y de manera autónoma su desarrollo
a través de acciones colectivas que promuevan estrategias
viables, o si es necesario acompañar esas acciones con el
apoyo del Estado mediante inversiones en infraestructuras
y equipamientos sociales. Esto signiica que, de acuerdo
con las posibilidades reales y el contexto en que se mueven,
las iniciativas de desarrollo no pueden sólo locales y
ascendentes (bottom-up), sino que deben combinarse
con políticas más amplias (regionales, nacionales,…) de
naturaleza descendente (top-down).
No obstante, existen, de acuerdo con Ortega y Moyano
(2015), experiencias autónomas impulsadas “desde abajo”
que están tomando importancia en los territorios, en donde
el protagonismo de la sociedad civil es fundamental
para lograr mejores condiciones de competitividad en
mercados altamente dinámicos. Por ejemplo, el programa
europeo LEADER aplicó, con buenos resultados en sus
dos primeras etapas, el método ascendente y participativo
(botton-up), pero posteriormente ha ido dando más espacio
a la intervención de las instituciones regionales para una
gestión más eicaz de los fondos públicos (Ramos y Delgado,
2003). Aun así es innegable que el programa LEADER ha
creado una forma de capacitación de la población local que
ha permitido la consolidación de ciertos actores y grupos
de la sociedad civil a nivel de los territorios estimulando su
participación activa en los procesos de desarrollo.
Según Schucksmith (2000), una de las esencias del programa
LEADER ha sido la construcción de capacidades, induciendo
una cultura de la cooperación basada en la conianza (capital
social), que beneician al conjunto de la comunidad local. Las
Gobernanza, actores sociales y desarrollo en las áreas rurales: una propuesta metodológica para analizar experiencias en México y España
diversas formas de capital social inducias por el programa
LEADER son percibidas como un “bien público”, como un
recurso clave para continuar con los procesos de desarrollo
en territorios rurales de la Unión Europea (UE).
Sin embargo, como indica Moyano (2009), las experiencias
de desarrollo rural en la Unión Europea no signiica la
retirada del Estado de su compromiso con el desarrollo de
las áreas rurales, sino una reorientación de las funciones
que tradicionalmente ha desempeñado. De una función
intervencionista se ha pasado a una función de impulso
y promoción de las iniciativas locales y al desempeño de
funciones relacionadas con la inversión en infraestructuras
y equipamientos. Esa reorientación del papel del Estado ha
permitido la emergencia del potencial endógeno y de las
dinámicas sociales, generándose una cultura cooperativa
basada, como hemos señalado, en la conianza, los lujos
de información y las normas de reciprocidad.
Bajo esta lógica, el sistema de gobernanza es fundamental
para canalizar las dinámicas locales capaces de impulsar
el desarrollo territorial. Su importancia radican en primer
lugar, en que promueve la integración de intereses diversos
en instancias de concertación en pro de un interés general
(pacto territorial) y, en segundo lugar, en que favorece la
interacción entre los diversos actores sociales, económicos
e institucionales presentes en el territorio, participando de
manera conjunta en una estrategia amplia de desarrollo
(basada en la diversiicación de las actividades productivas y
en la puesta en valor de otros recursos endógenos, como los
culturales o ambientales).
El análisis integral (no sectorial) de las dinámicas
territoriales contribuye, sin duda, a un mejor entendimiento
de la multiplicidad de relaciones complejas que existen en
los territorios, y, con ello, permite comprender hacia donde
se podrían orientar las estrategias de desarrollo. En ese
contexto, una tarea pendiente, quizá sea profundizar aún más
en la dimensión histórica de las coniguraciones económicassociales y ambientales de los territorios, tarea ésta que los
estudios sociales la han considerado desde siempre, pero no
quizá con la debida profundidad.
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Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 217-224
La convivencia de la memoria y el
olvido en el presente
Arcos Miranda Evaristo1 y Serrano Arenas Denys2
1
Sociología Rural-Universidad Autónoma Chapingo. clandestino_7manonegra@yahoo.com.mx. 2Ciencias en Educación Agrícola Superior-Universidad Autónoma
Chapingo. dserrano837@gmail.com.
Resumen
El presente trabajo profundiza en la función que el olvido
social y la memoria colectiva poseen en la construcción de la
realidad, y como estos elementos son empleados por el Poder
y el Estado para la manipulación social y la legitimización
de su existencia y proceder. Por tanto, la memoria y el olvido
son abordados a partir de dos posturas teóricas la primera
surgida del pensamiento de Paul Ricoeur y la segunda de
Marc Auge, quienes muestran tanto los tipos de memoria
(impedida, manipulada, obligada) como las iguras de olvido
(retorno, suspenso, reinicio), que una vez desglosados
permiten comprender el papel positivo o negativo que
se deprende de cada uno de estos elementos cuando son
empleados a nivel sociocultural. Discusión teórica que es
nutrida con la postura histórica de Walter Benjamin quien
a través de la metáfora del Ángel de la historia muestra la
importancia de la memoria colectiva para enfrentar al olvido
social, empresa sobre la que el presente trabajo descansa,
debido que para mejorar el presente y proyectar un futuro
saludable es necesario evaluar el pasado del que se proviene.
Palabras clave: olvido social, memoria colectiva, y iguras
de olvido.
Introducción
Considerar que se vive en una época de crisis social es
necesario para comprender las dinámicas de olvido que
han envuelto a los sucesos históricos que conformaron la
realidad que nos rodea, que conocemos y que habitamos. Es
la rapidez de la modernidad con la que actualmente se vive
uno de los impedimentos principales para la consolidación del
recuerdo, la prisa desmedida en la que ahora subsiste gran parte
de la población impide la signiicación de los sucesos, cosa
que potencia el olvido social, (Mendoza , 2007). En esto han
inluido en gran medida los medios de comunicación masiva
que han sido empleados para la enajenación y manipulación
social. El olvido sólo beneicia al poder. El olvido es lo
contrario de la memoria, por ello su aniquilamiento se vuelve
una prioridad para el sistema capitalista.
El abordaje al estudio del olvido se ha realizado desde focos
muy diversos, sin embargo, llama la atención que el estudio
del olvido se deje de lado el aspecto central: la memoria. El
principal acuerdo entre los autores que investigan este campo
del conocimiento ha sido rescatar al olvido para no olvidar,
porque si es posible identiicar el proceder de este elemento
es posible por igual modiicar su interacción con el presente,
basado en razones teleológicas, abriendo posibilidades de
re-signiicación y la comprensión de un momento sociohistórico. Sin embargo, el principal interés en este trabajo es
analizar la relación de memoria y olvido como posibilidad
de retorno, cuyo afán es comprender cómo la sociedad
permanece ajena a la impunidad. Basado en lo anterior, el
supuesto del trabajo es que la posesión de memoria permite
generar consciencia sobre el sometimiento sustentado en la
quimera: modernidad como sinónimo de progreso.
De manera que, la relación entre las concepciones que se
tienen de memoria y olvido social, puede entenderse con
su principal característica: la búsqueda del recuerdo; éste
218 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
puede estar almacenado en lo profundo del pasado, porque
la memoria salvaguarda los hechos históricos a través del
tiempo y la distancia generacional( Ricoeur, Paul, 2000).
Por lo tanto, recordar signiica la realización de un esfuerzo
para mantener la vigencia y la importancia que almacena el
pasado, conigurando la pertenencia, la identidad y la unidad
social. Por el otro lado se encuentra el olvido, que es en sí
mismo una memoria anulada y que impide la valorización
del pasado y de todo aquello que haya sucedido en tiempo
pretérito, por lo tanto es una agresión a la historia, que
impide el crecimiento de la conciencia social y colectiva,
considerando que; “sobre la base del olvido no puede
construirse el presente y mucho menos un futuro”(Mendoza
J. , 2007, pág. 46), de esa forma, el olvido es uno de los peores
y mayores lagelos de la sociedad, porque una sociedad
incapaz de recordar, es al mismo tiempo una sociedad ciega
que avanza sin saber de dónde proviene, ni a dónde se dirige.
Para sustentar lo mencionado anteriormente, el artículo se
estructura en tres apartados: el primero presenta los tipos
de memoria en cuanto a la descripción de sus prácticas en la
realidad desde los postulados de Ricoeur, relacionado con las
iguras de olvido plateadas por Auge. El segundo, introduce
y utilizala postura histórica de Walter Benjamin a través
de la metáfora del Ángel de la historia, con la intención de
relexionar sobre la importancia del diálogo entre el pasado
y el presente en la conformación de la memoria colectiva.
Por último, se discuten brevemente la memoria colectiva
como alternativa de esperanza ante realidad impuesta y
gobernada por el olvido.
Objetivo
Analizar la convivencia de la memoria colectiva y el olvido
social dentro de la realidad, mostrando como la utilización
intencionada de la memoria puede oponerse al olvido, así
como a los mecanismos con los que el olvido es empleado
por el poder y el Estado para la opresión y manipulación
social, ponderando a la memoria como una alternativa
de superación, quien a través de la recuperación del
pasado puede intervenir en el mejoramiento del presente
posibilitando el surgimiento de un futuro saludable.
El olvido
“La memoria y el olvido guardan en cierto modo la misma
relación que la vida y la muerte” (Auge, 1998, pág.
104), donde recordar signiica mantener la vigencia y la
Arcos Miranda Evaristo y Serrano Arenas Denys
existencia del pasado. Por el contrario, el olvido simboliza
el asesinato de todo aquello que conformó el presente. Bajo
el manto del olvido debe comprenderse que el sacriicio del
legado histórico conlleva un desgarramiento cultural que
desarticula el funcionamiento de la sociedad y coloca a los
individuos en bandeja de plata para la consolidación del
capitalismo neoliberal, que sólo contempla a los individuos
como objetos para la producción y el consumo. Para este
sistema económico el individuo existe como productor
o consumidor. Los seres no incluidos en este binomio
no existen. Esta amnesia social es sin duda producida
por intereses particulares, los cuales en muchas de las
ocasiones están solapados por el Estado y sus gobernantes.
Estos intereses están presentes en los partidos políticos,
que son una expresión de los intereses económicos y de
clases sociales. Así, estos partidos guardan en sí mismos
periodos históricos y “voluntades colectivas”, las cuales son
canalizadas y utilizadas para ines políticos que en muchas
ocasiones excluyen a sus propios simpatizantes (Gramcsi,
1998, pág. 10). Sobre todo, cuando éstos dejan de serles
útiles. Cuando ello ocurre sus demandas son almacenadas
dentro del silencio y por lo tanto olvidadas.
De manera que, el olvido se vuelve legítimo cuando es
producido. Ello es una realidad frecuente en ciertas esferas
sociales, debido a que son los grupos hegemónicos quienes
tienen en sus manos la historia, y cuentan con la libertad
y la impunidad para manipularla, adaptarla, cambiarla,
borrarla u omitirla, produciendo un pasado diferente del que
puedan sacar provecho. Tiene que considerarse entonces
que la historia de los vencedores representa una historia
de opresión y manipulación social, por lo que conocer la
versión de aquellos que fueron vencidos adopta cada vez
mayor importancia, porque ésta guarda aquel pasado que no
se cuenta, que no se dice y que por lo tanto se desconoce, a
pesar de que es precisamente el que puede explicar el devenir
de las cosas y explicar la situación de crisis por lo que se
atraviesa en el presente (Gandler, 2009).
Pero los recuerdos que existen, que son transmitidos de
generación en generación, y que son presentados como
sucesos incuestionables, son aquellos impuestos por el
poder, por lo tanto, se está imponiendo a la sociedad lo
que debe recordar, a esto se le denomina “falsa memoria”
La falsa memoria no es otra cosa que un mecanismo de
destrucción de la memoria colectiva y una imposición del
olvido como un ejercicio de dominación (Mendoza , 2007).
Una sociedad sin recuerdos es vulnerable ante los vaivenes
del destino, debido a que ha perdido el piso y la guía para
un promisorio andar.
La convivencia de la memoria y el olvido en el presente
Se habla de los usos y los abusos que pueden suscitarse dentro
de la utilización de la memoria, por el hecho de que brindar
demasiada importancia a un aspecto de la vida, signiica de
manera automática restarle importancia a otro ( Ricoeur,
Paul, 2000). Si en este punto se destaca que en el presente
existen millones de personas que subsisten en condiciones de
pobreza y pobreza extrema, podría entenderse que los seres
humanos que conforman estas clases sociales, dedican casi la
totalidad de sus pensamientos y energía a buscar alternativas
para subsistir, restando o anulando la existencia de otros
procesos cognitivos que podrían ayudarlos a comprender
el porqué de su situación.
Las urgencias que el presente demanda al excluido, alejan
su pensamiento del mañana y del futuro a largo plazo. Esta
dinámica de su memoria ocupada en resolver el presente,
es por lo tanto una condicionante de olvido potenciada por
la necesidad de subsistir. Los abusos de la memoria pueden
gestarse de manera cotidiana y en muchos de los casos es
casi imperceptible.
En este sentido, los medios de comunicación masiva
omnipresentes en la vida, han inluido en demasía en la
población, debido a que sin tregua invaden la mente de los
individuos con información y programación intrascendente
y tendenciosa que desvía su atención de los acontecimientos
de verdadera importancia. Los medios, sobre todo los
electrónicos, han convertido a la sociedad en consumidora de
información vacía y deseosa de sensacionalismos absurdos.
Las noticias relacionadas al espectáculo son quizás la máxima
expresión del inmenso vacío que le han labrado decenios
de manipulación mediática y de discursos demagógicos por
parte de quienes debieran oponer disertaciones inteligentes
a la agresión televisiva: los políticos.
Las personas son vistas por los medios como meras
consumidoras, lo que da forma a una de las modalidades
más elevadas del capitalismo, el consumismo que potencia
el individualismo y el antropocentrismo, estas conductas
se maniiestan en los individuos en su eterna necesidad de
destacar a base de consumir y tener, olvidándose de sí mismos
y convirtiéndose en lo que poseen. (De la Rosa, 2001).
De esta manera olvidan su esencia humana, y a la naturaleza
que es la principal afectada por su modo de actuar y de ver
la vida. El estrato superior de la pirámide social es el único
beneiciario en el sistema capitalista. La dinámica de olvido
que orilla a los humanos a olvidarse de su propia humanidad
consolida aún más el poder que el sistema adquiere. Entonces
219
la memoria que se enfoca en recordar solo la existencia del
individuo, ocasiona que éste olvide todo lo demás, por lo
tanto, este abuso de memoria es un abuso de olvido ( Ricoeur,
Paul, 2000).
Las formas del olvido y los tipos de memoria
Marc Auge muestra que el olvido puede manifestarse en tres
formas distintas: el retorno, el suspenso y el reinicio. Por su
parte Paul Ricoeur hace mención de tres tipos de memoria;
impedida, manipulada y obligada. Estas formas de olvido
y estos tipos de memoria muestran cómo opera dentro de
la sociedad el pasado y la historia, reconociendo al mismo
tiempo las funciones que éstos tienen y las problemáticas
sociales que les acompañan. Por lo tanto, comprender las
maneras en las que el olvido y la memoria se presentan es
vital para salvaguardar el recuerdo y el legado histórico que
dio origen al mundo tal como lo conocemos.
Paul Ricoeur, inicialmente aborda la memoria impedida,
la cual hace referencia a una memoria maltrecha y herida.
Puede entenderse que se encuentra en este estado por una
situación traumática que ha decidido dejarse atrás, más el
proceso no es nada sencillo, en este punto puede hablarse
también de la memoria colectiva, considerando que el
infortunio puede ser masivo e involucrar a más de un sector
poblacional, por lo tanto, olvidar no es una solución, sino
todo lo contrario ( Ricoeur, Paul, 2000).
Es en este momento de ruptura cuando debe re-signiicarse
lo sucedido y hacer acopio de él para no volver al mismo
atolladero, esto conlleva enfrentar el recuerdo mórbido y
sacarle provecho superando las secuelas de la neurosis, por lo
tanto, el proceso del duelo no puede evitarse ( Ricoeur, Paul,
2000). La sociedad debe asumir que está en un momento de
duelo porque ha sufrido pérdidas graves como la soberanía
alimentaria y laboral, por ejemplo. Asumir lo perdido
signiica tomar conciencia de lo que se debe recuperar…
son estas heridas históricas que deben ser sanadas, las cuales
deben impedir que la sociedad olvide quién o qué se las
ocasionó. Por lo tanto, esta memoria invita a una superación
del pasado sin olvidarlo, y sacar provecho de los tormentos
que éste le produjo.
Un ejemplo fehaciente es el caso de la reaparición de las
patrullas comunitarias que constituye el retorno de una
práctica social antigua, que había sido descontinuada, pero
220 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
que, ante la barbarie de los sucesos actuales, la sociedad
se ha visto obligada a recurrir a los métodos antiguos
para salvaguardar la vida. En este aspecto se habla de un
retorno obligado por las circunstancias, pero que muestra
la posibilidad de retornar a las prácticas pasadas y recuperar
gran parte del legado histórico que ha ido quedando
sepultado con el paso del tiempo y que se ha llevado consigo
gran parte de la riqueza cultural como lo era el respeto a los
ancianos y la dignidad humana.
Debe comprenderse que el retorno no signiica la presencia
de un recuerdo vengativo, sino la presencia de un recuerdo
nostálgico que busca alternativas del pasado para mejorar
el presente. Así, el retorno y la memoria representan una
cuerda de vida social, que busca comprender el pasado y
evaluar el presente para cimentar un porvenir. Recopilar
elementos que permitan dar marcha atrás y frenar este
naufragio debe realizarse de manera urgente, y a la vez con
medidas sociales que involucren y siembren conciencia
dentro de la población, especialmente dentro de los
sectores afectados por este sistema capitalista que son la
abrumadora mayoría.
Posteriormente aparece la memoria manipulada, en la que
se cimientan los abusos que pueden suscitarse dentro del
pasado y el patrocinio del olvido, sobre todo “por quienes
tienen el poder”… debido a que estos agreden la memoria,
la pertenencia y la identidad social, esta memoria, como los
abusos de memoria, son consecuentemente abusos de olvido
( Ricoeur, Paul, 2000, pág. 110). Ello repercute en la relación
que tienen los individuos con el tiempo, impidiendo que
éstos puedan analizar el presente y programar su futuro. Esta
desvinculación tiempo–sociedad, legitima una memoria
quimérica que rompe tradiciones reales e impone falsas que
sólo son benéicas para aquellos que manipulan la historia,
para lograr esto recurren a la imposición de ideologías
respaldadas por relatos inventados que modiican y adaptan
los hechos para la consolidación del poder (Ricoeur, Paul,
2000).
Ello ocurre con la llamada historia oicial a la que el pueblo
debe brindar tributo y aceptar en forma acrítica, de esta
manera, se está formando a la sociedad bajo una historia
creada a modo, por lo que es comprensible que la misma
sociedad adopte una identidad equivocada, debido a que se
le impuso desde su origen cuál era su supuesto surgimiento,
por lo que es posible entonces dirigir de manera intencionada
su futuro ( Ricoeur, Paul, 2000).
Arcos Miranda Evaristo y Serrano Arenas Denys
Se puede considerar que se vive un estancamiento histórico
donde el pretérito es impuesto, se desconoce y carece de
valor, se habla entonces de un “suspenso”(segunda forma
del olvido) entendido este como un momento de estabilidad
socio-histórico,(Auge, 1998, pág. 93), donde actualmente el
pasado pierde vigencia y su preponderancia disminuye ante el
discurso que emite el poder. Sin embargo, el suspenso puede
funcionar de forma opuesta, y construir un dique de recuerdo
frente a la memoria manipulada. Y es que el suspenso
constituye la segunda fase del retorno… considerando que si
es posible retornar es posible también suspender, buscando
el momento óptimo en que deba hacerse, rescatando las
virtudes más positivas y las mejores intenciones del antes,
para reconstruir el ahora, (Auge, 1998).
Si consideramos que los momentos históricos, son al
mismo tiempo situaciones culturales, podemos reforzar la
aparición de un suspenso nutritivo, en este punto retomar el
concepto de Habitus acuñado por Bourdieu ilustra cómo las
conductas colectivas son determinadas por las condiciones
de existencia, debido a que el habitus es representado por,
“sistemas de disposiciones duraderas y transferibles,
estructuras predispuestas a funcionar como estructurantes,
es decir como principios generadores y organizadores de
prácticas” (Bourdieu, 2007, pág. 80).
Se habla también de un tercer tipo de memoria, la memoria
obligada, esta sobre pasa la supericie del recuerdo para
traerlo nuevamente a la vida, porque invita a la memoria
a hacer un recorrido por el pasado y comprenderse a sí
misma, lo que es un “deber de memoria” fundamentado en la
regulación de los usos y abusos de la propia memoria, porque
decir; “tú te acordarás es decir también no te olvidarás” (
Ricoeur, Paul, 2000, pág. 118), lo que conlleva una secuencia
en la transmisión del pasado en dirección al futuro.
Ello permite que las nuevas generaciones sepan de dónde
provienen y así consolidar la memoria como la directriz para
alcanzar nuevas realidades, tomando conciencia de que las
libertades que ahora poseemos son herencia de aquellos
antiguos que dieron la vida, y de ese modo hacerle justicia al
legado de los antecesores, de aquellos “que ya no están pero
que estuvieron” ( Ricoeur, Paul, 2000, pág. 120), por lo tanto,
la memoria obligada es aquella que se opone a la memoria
manipulada y a la falsa memoria, rompiendo el silencio para
la resurrección del pasado, el cual no debe desconocerse, ni
olvidarse, sino que debe ser atesorado como punto de partida
que no deja de mirar el objetivo inicial que le dio existencia.
La convivencia de la memoria y el olvido en el presente
Existe una fuerte correlación entre el reinicio que es la
tercera forma del olvido y la memoria obligada, sobre todo
porque el reinicio busca entender todo el pasado y empezar
nuevamente. Se debe hacer énfasis en que esta forma de
olvido pretende un nuevo comienzo que de in a las prácticas
colectivas que agreden y degradan la historia para empezar
otra vez (Auge, 1998, pág. 99). Entonces el reinicio que se
plantea, conlleva la comprensión y valorización del legado
histórico para resurgir correctamente, sin volver a los errores
ya cometidos y renacer como una sociedad que se perila a
un destino mejor.
Estas son las formas de olvido y de memoria que habitan el
mundo social, comprenderlas, conocer las repercusiones que
pueden acarrear y la manera en que pueden ser utilizadas para
el mejoramiento de la conciencia social, se vuelve cada día
más importante para la conformación de una sociedad critica
que pueda defenderse y velar por sus intereses ante quien la
oprime, esto en sí mismo es una obligación social-histórica,
que es por lo tanto un deber de memoria.
El ángel de la historia y la memoria colectiva
Dentro del presente se localiza el pasado, y a pesar de que
sea ignorado o no resalte a la vista, se encuentra en todas
partes, y aunque es aniquilado de manera impune, siempre
deja marcas que no pueden pasarse por alto. Walter Benjamin
reiere a que “no hay un solo rincón en el que no hubiese
dejado su huella quien lo habita” (Benjamin, 1994, pág.
153). Por lo tanto, el mundo que conocemos alberga el rastro
que dejaron quienes vivieron en el antes que nosotros, siendo
su legado histórico lo que ahora tenemos y que en muchas
ocasiones no valoramos, la prueba clara de la anterior
airmación se encuentra en que la sociedad civil no hace nada
ante la impunidad con la que se gobierna la nación, como lo
muestran las actuales reformas al sector educativo, laboral y
energético, que están totalmente enfocadas a la privatización
de dichos sectores, lo que signiica al mismo tiempo, borrar
las huellas que dejaron los antecesores.
Se vive entonces dentro de una época de crisis que amenaza
el presente y el futuro, por lo que recurrir al pasado y
adoptar elementos que poseía este tiempo anterior, puede
fungir como una alternativa de esperanza que despierte la
memoria colectiva y la participación social. Para esto debe
considerarse que debe vivirse “el momento presente sin
olvidar el pasado que habita en él” (Auge, 1998, pág. 99).
221
Entendido con esto que la sociedad no debe asumir que lo que
posee existe de manera natural y gratuita, sino que proviene
de una contienda histórica que costó grandes esfuerzos y
sacriicios a los antepasados.
Benjamin menciona que la nostalgia de la humanidad solo
puede caminar en dirección al pasado, debido a que la
añoranza solo puede surgir de eso que dejamos atrás, que
es como ”el aire que hemos respirado, entre los hombres
con los que hubiésemos podido hablar, entre las mujeres
que hubiesen podido entregársenos” (Benjamin, 1994, pág.
178), por lo tanto, la envidia de las actuales generaciones está
incada en las posesiones comunes del antaño, no en las que
posiblemente puedan existir después, porque de éstas no se
tiene la menor certeza, sino solo una total incertidumbre si
algún día verdaderamente existirán.
Benjamin recurre a la metáfora del Ángel de la historia para
explicar la vorágine y la crisis que han envuelto el presente,
el cual se ha ido desgajando de manera constante con la
búsqueda del mito llamado progreso, de esta manera se
describe que el Ángel “ha vuelto la mirada hacia el pasado”
y tiene una mueca de asombro y terror, porque se encuentra
anonadado por lo que sucede actualmente, por lo que “bien
quisiera él detenerse, despertar a los muertos y recomponer
lo despedazado” (Benjamin, 1994, pág. 183); sin embargo,
se encuentra siendo arrastrado por las nebulosas del olvido, y
no puede hacer otra cosa que mirar hacia atrás, lo que es una
invitación a que todos los demás hagan lo mismo y busquen
alternativas para virar el camino.
Así, el Ángel principalmente busca las huellas de los que
anteriormente estuvieron, deslindándose de la falsa historia
creada en beneicio de los que ostentan el poder, para resaltar
aquella que pertenece verdaderamente al pueblo y sobre la
que deben basase las expectativas, para un nuevo surgimiento,
creado sobre una memoria colectiva que pueda producir una
conducta política diferente, que apoye, entre otras cosas,
la resistencia a este capitalismo neoliberal que lucra con la
vida humana. De este modo mirar hacia atrás es una crítica al
progreso que no llega, ni se acerca a un mejor futuro porque
en realidad no mira a ninguna parte, por lo que mirar hacia
atrás es una lucha encarnizada contra el olvido que agrede
la conformación de la memoria colectiva (Gandler, 2009).
El Ángel de la historia “mira hacia atrás porque mira hacia
allá, a donde quiso detenerse, pero no lo logró” (Gandler,
2009, pág. 53), porque fue aventado contra su voluntad por
aquella mentira capitalista nombrada progreso futurista, que
222 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
agrede la vida del presente y borra las metas del pasado,
cosa que termina conformando olvido en la sociedad.
El empobrecido concepto de historia impuesto por los
capitalistas debilita de manera severa la memoria social,
debido a que un pueblo que conoce su historia es un pueblo
al que no se puede engañar, ni dominar con facilidad, porque
existe en él la fuerza mesiánica que Benjamin destaca,
pues una sociedad que vive en armonía y con conciencia
de su pasado, tiene el suiciente criticismo para generar la
ideología política adecuada que rompa con las fuerzas que
la manipulan, porque sin lugar a vacilaciones el objetivo
de la memoria es cambiar el presente, lo que sin duda es un
peligro para el poder, al cual lo que le conviene es tapar con
el manto del olvido todo acto pasado (Hoyo, 2013).
Entonces, el estudio del pasado y de la historia debe pugnar
por la aparición de una conciencia ética que beneficie
la libertad y soberanía de los pobladores, y que luche de
manera paralela por detener la ficción destructiva del
progreso que bien describe el Ángel como catástrofe, para
construir un inicio mejor, fundamentado en la esperanza y la
conservación de la tradición,(Hoyo, 2013), y de esa manera,
poder conjuntar todas las voluntades y todos los recuerdos,
logrando la formación de una memoria colectiva que permita
hacer frente a este enemigo de apetito insaciable bien
conocido como capitalismo neoliberal, y de esta manera,
apoyar a que el Ángel cierre sus alas y ya no sea arrastrado
haca un futuro de caos y debacle.
Contribución: la memoria colectiva, frente
al olvido
Los recuerdos de un individuo no pueden ser transferidos
a la mente de otro, porque estos pertenecen a su portador,
lo que convierte a la memoria en una guía de supervivencia
diaria para quien los posee, por el solo hecho de que las
personas no olvidan quiénes son de un segundo a otro; no
obstante, como se ha visto anteriormente, la función de la
memoria no recae sobre la simple supervivencia cotidiana,
sino que tiene una misión mucho más amplia que esa, como
la vinculación de los individuos con su historia y la creación
de una conciencia colectiva que permita el crecimiento social
( Ricoeur, Paul, 2000).
Hacer memoria signiica al mismo tiempo hacer historia,
pero una historia incluyente que releje realmente al pueblo
al que pertenece y al cual debe brindarle su servicio. En este
Arcos Miranda Evaristo y Serrano Arenas Denys
punto retomar la concepción de Estado se vuelve prioridad,
tomando en cuenta que los hombres deben adaptarse a un
mundo que fue creado antes de su llegada (Ávalos, 2006)
y que por lo tanto fue erigido sobre conceptos básicos que
pueden ser cambiados si se buscan históricamente otros
principios filosóficos que puedan reorientar el destino
caótico de la sociedad que hasta ahora prevalece.
Aquí resalta la concepción filosófica de Hegel, quien
consideraba que el Estado consistía en la unión armoniosa
de la sustancia ética, la familia, el amor y la razón (Hegel,
2011). Por lo que la sociedad debe acordarse de la existencia
del pensamiento antiguo y recurrir a los clásicos porque
estos ilustran con su pensamiento una salida hacia el
porvenir, de este modo hacer memoria signiica buscar en
el pasado alternativas de superación, tomando en cuenta
que para lograrlo se deben tener fundamentalmente los
cimientos ilosóicos que creen un pensamiento sólido para la
realización de acciones que ciertamente tengan repercusión
en el nacimiento de una nueva realidad.
Por lo tanto, la memoria colectiva es una lucha contra el olvido
impuesto por el poder, porque es el olvido una gran amenaza
para la conformación histórica, por ende, la destrucción de “las
huellas” que dejó la humanidad con su andar y que fungirían
como faro en situación de tormenta social, se convierte en una
misión de gran importancia para los promotores del olvido.
Debe entenderse que estas huellas conforman todo el legado
forjado por los ancestros, por lo tanto, su destrucción signiicaría
perder los antecedentes y los vínculos con el pasado del que se
proviene ( Ricoeur, Paul, 2000). Ello va más allá de signiicar la
pérdida de la riqueza cultural e identidad social, repercute en la
conducta social, porque una comunidad a-histórica es incapaz
de oponerse a la forma en la que es gobernada y de construir una
ideología política para liberarse de quien solo la utiliza, debido
a que “quien no es capaz de reinterpretar su pasado quizá no
sea tampoco capaz de proyectar concretamente su interés por
la emancipación” (Hoyo, 2013, pág. 32).
Así, el olvido impuesto es aquel que oculta los hechos
vergonzosos de los que ostentan el poder, porque éstos se
han encargado de silenciar las voces de aquellos que pueden
gritarles verdades incómodas, por lo que es preferible
censurar la verdad y patrocinar mediante el miedo, olvido,
logrando con esto envolver a la sociedad en un “aquí no
pasa nada”, ello termina favoreciendo a la legitimidad de la
mentira, el ocultamiento de los sucesos como la existencia
de movimientos armados que se oponen al neoliberalismo,
es también una dinámica de olvido (Mendoza J. , 2007).
La convivencia de la memoria y el olvido en el presente
Esconder y callar lo que sucede se ha convertido en el pan de
cada día, con esto se desarticula la unión que podría existir
dentro de la sociedad, porque para dominar a plenitud a una
cultura, el tirano debe corromper, manipular y aniquilar su
memoria, con esto estaría consolidando un etnocidio sociohistórico que le permitiría hacer lo que se le venga en gana
(Mendoza J. , 2007).
En este aspecto es la memoria quien se opone al olvido,
desenterrando el pretérito para sacarlo a la luz, recreando y
reconstruyendo el pasado para exponerlo. Debe entenderse
que la memoria es “necia, terca, que siempre tiene algo que
decir, algo que comunicar… cuando era posible susurrar
y después gritar”, (Mendoza J. , 2007, pág. 406), por lo
tanto cada vez que la sociedad genera intentos de producir
memoria, el poder contrataca con alguna artimaña para
producir olvido, porque esta es peligrosa e incontenible,
porque como el agua una vez que se congela revienta todo
molde que la aprisione, así la memoria, por lo tanto debe
ser apoyada socialmente para que no libre esta batalla sola.
Para ello que enunciar, expresar, hablar, narrar, en las
concisiones que se puedan. Ahora están apareciendo
testimonios, narraciones sobre lo ocurrido en esas décadas de
represión: foros, encuentros, congresos, conferencias libros,
memorias, etcétera, expresiones que permiten ir dibujando
lo ocurrido, aunque doloroso, pero necesario, para dejar
en claro que ocurrió en esos tiempos y sus impactos en el
presente (Mendoza J. , 2007, pág. 406). El olvido pretende
impedir que se recuerde lo malo y lo vergonzoso, pero
también es necesario que se comprenda que la sociedad no
puede vivir recordando sucesos solamente negativos.
En ese sentido debe quedar claro que no recordarlos
continuamente, no signiica olvidarse de ellos, por lo tanto
estamos haciendo referencia a un “olvido del no olvido”,
para que de esa manera la sociedad alcance el perdón consigo
misma, entrando en una etapa de duelo que le impulse a
conmemorar y recuperar lo perdido, porque si algo debe
quedar claro, es que el perdón social es para la sociedad
misma ( Ricoeur, Paul, 2000), no para los agresores y tiranos
que la dañaron, debido a que no se debe perdonar a quien no
tiene remordimientos, ni siente culpa y no ha pedido perdón.
De esta manera no se habla de perdonar por perdonar, sino
de enfocar esta acción a la comprensión del pasado para
construcción del presente.
223
Conclusión
Bloch menciona que “el deseo y la capacidad de vivir
sin apresuramientos miserables, de ver lo importante
y olvidar lo insigniicante”, puede ser semejante a que,
hacer memoria signiica en sí mismo un acto de resguardar
aquellos sucesos trascendentes que configuraron la
realidad y que son maltratados en el presente, porque si
bien la humanidad debe seguir su andar no puede dejar
de comprender su surgimiento, debido a que olvidarlo
signiicaría perderse nuevamente y terminar siendo otra
cosa, (Bloch, 2004, pág. 68).
La conjunción de memoria más memoria colectiva, podría
lograr la revolución de la conciencia que derrumbe los muros
erigidos por el olvido. De esta manera se le diría no al olvido,
y sí a la memoria…como una forma de superación de las
malas épocas, implantando en la mente de los individuos
el sueño de una vida y un destino mejor, formando así un
ejército de humanos capaces de hacer memoria, lo que en
conjunto formaría una trinchera de recuerdos, para frenar
los estragos que la falsa memoria y el olvido han provocado
en la sociedad (Bloch, 2004).
Comprender que la memoria es el refugio del pasado y el
eje vertebral sobre el que debemos seguir construyendo
la historia, permitiría subsanar la mirada nostálgica y
desgarrada del Ángel que no deja de mirar hacia atrás,
porque si algo desea el Ángel de la historia es la oportunidad
de retornar al pretérito, para suspender el tiempo en un
momento digno de ser vivido, para de esta manera reiniciar,
volver a empezar de una forma distinta y mejor, liberando
la memoria de los abusos de los que ha sido víctima, y
formando dentro de la sociedad una “memoria feliz, que le
permita reconocerse a sí misma a través del tiempo, y así
dar pauta a la existencia de los “sueños diurnos” (Bloch,
2004, pág. 106) que anhelan la llegada del amanecer y la
abolición de esta larga noche de olvido, porque si algo
guardan estos sueños es: esperanza.
Literatura citada
Auge, M. (1998). Las formas del olvido. Barcelona: Gedisa.
224 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Ávalos, T. G. (2006). El monarca, el ciudadano y el excluido: hacia una
crítica de lo político. México: UAM-X, CSH.
Benjamin, W. (1994). Discursos interrumpidos . México: Planeta.
Bloch, E. (2004). Principio de esperanza . Madrid: Trotta.
Bourdieu, P. (2007). El sentido práctico. Buenos Aires: Siglo XXI.
De la Rosa, R. (2001). La revolución ecológica. Barcelona: Icaria.
Gandler, S. (2009). Fragmentos de Frankfurt. México: Siglo XXI.
Gramcsi, A. (1998). La política y el estado moderno. Madrid: Fontamara.
Hegel, G. W. (2011). Enciclpedia de las ciencias ilosóicas. México:
Porrúa.
Arcos Miranda Evaristo y Serrano Arenas Denys
Hoyo, A. J. (2013). Dialéctica, estado, derecho, libertad y enmancipación.
G.W.F. Hegel, Karl Marx y Los marxismos [Tesis doctoral].
México: UNAM.
Mendoza , J. (2007). Reconstruyendo la guerra sucia en México: del
olvido social a la memoria colectiva. Revista Electrónica de
Psicología Política [en línea], 1-23.
Mendoza, G. J. (2010). Movimientos armados y guerra sucia en México
1965-1984: una aproximación desde la memoria colectiva
[Tesis doctoral]. México: UAM.Ricoeur, Paul. (2000). La
memoria, la historia y el olvido. Argentina: FCE.
Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 225-232
La ciudad, la urbanización y la pobreza urbana
José Pedro Vizuet López1, José Alfredo Castellanos Suárez2 e Ivan Marcelino Ugalde Morales3
1
Ciencias en Ciencias Agrarias- Sociología Rural. Universidad Autónoma Chapingo. (vizuetk@hotmail.com). 2Sociología Rural-Universidad Autónoma Chapingo.
(josealfredocs@hotmail.com). 3Ciencias Políticas y Administración Pública- Universidad Autónoma del Estado de México. (ivan_um@live.com.mx).
…La ciudad sólo convierte sus problemas en soluciones, sus conlictos en progreso, si deine proyectos colectivos…
Jordi Borja
Resumen
El presente trabajo plantea el acercar de manera teórica a
tres ejes fundamentales que son determinantes en diferentes
momentos, partiendo de la construcción, relación y efectos
del desarrollo de la sociedad y su aglomeración para crear
nuevas formas de vida en un siglo que alude a una idea
de crecimiento sin importar de qué. La ciudad en primera
instancia como madre, escuela y educadora de todos sus
habitantes con una relación estrecha entre la urbanización
que la caracteriza por el crecimiento acelerado de la
población, que la obliga a recrear nuevas condiciones para
cada individuo al interior de ella, y por último la pobreza
urbana que surge de este desfogue no gradual que intensiica
la degradación de ciertos grupos al no permitir un desarrollo
igualitario dentro del sistema que establece como forma de
supervivencia. De aquí la relevancia del presente artículo
que debe generar no solo una aproximación, sino un punto de
relexión que permita abordar la construcción teórica como
un problema de estudio y de notabilidad en nuestros días.
Palabras clave: ciudad, pobreza, urbanización, sociedad.
Introducción
Desdeñar a la ciudad es deinirla desde diversas cosas a
la vez, un lugar de trabajo para el campesino que deja su
tierra, un lugar de estudio para el niño o el joven estudiante,
un lugar donde se venden y compran toda clase de cosas,
un lugar donde la gente asiste a diversiones, un lugar donde
se concentra la miseria y la riqueza, y un lugar donde
viven los artistas, los ladrones y todo tipo de gente. La
ciudad fundamentalmente es un lugar de intercambio. En
primer lugar, de intercambios materiales: es un lugar más
favorable para la distribución de productos manufacturados
e industriales, y para el consumo de bienes y servicios
diversos.1
A dichos intercambios materiales se ligan inseparablemente
los intercambios espirituales: la ciudad es, por excelencia,
el lugar del poder administrativo y es representativa del
sistema económico, social y político. Al mismo tiempo,
es el espacio privilegiado para la función educativa y para
numerosas diversiones: espectáculos y representaciones que
requieren un público bastante denso para realizarse. Todos
estos intercambios conforman la civilización.
La ciudad es, a la vez, su expresión y su soporte. Se han dado
múltiples deiniciones de lo que es una ciudad, muchas de
ellas, sin ser contradictorias, ser completamente distintas.
Esto se debe a que la ciudad, fenómeno complejo, se puede
analizar desde puntos de vista distintos, con lo cual se
obtienen conceptos de ciudad completamente diversos.
El concepto “Ciudad”, no solamente hace referencia a
un espacio de tierra urbanizado, o donde se mantiene la
tecnología; sino hace referencia a factores de interés social
el cual permite que un grupo determinado de personas
decidan implantarse dentro de esa área. El cual llevará
Ducci, Elena, 2009. Conceptos Básicos de Urbanismo, Trillas, México, D.F. p.19.
1
226 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
elementos entrelazados como: intereses personales en los
que indudablemente se relacionan con la sociedad, es decir,
un gran número de personas implantadas en una porción de
tierra que será víctima de un proceso de urbanización.
La ciudad
“…para pensar, soñar y escribir sobre la ciudad hay que tener:
el amor del poeta, la memoria del historiador, la perspectiva del
ilósofo, el conocimiento de cientíico y tener acceso al placer de
lo estético…”
Juan Ñuño
La ciudad se considera como un espacio o sitio donde lo
urbano sublima su existencia, pues es el lugar donde se
concentran elementos esenciales, allí se resguardan las
diversas actividades que se desarrollan para la satisfacción
de las necesidades, como la industria, el comercio, arte,
tecnología, entre otros, que hacen que una ciudad evolucione
en su totalidad. Las ciudades se han desarrollado por diversas
etapas, donde grandes pensadores han manifestado sus
posturas para deinir que es la ciudad y como se conforma.
Existe un contexto en el cual las ciudades deben ser
reconstruidas y comprendidas como hechos históricos,
sociales, políticos, y económicos, la producción de la
Ciudad, son las relaciones sociales dominantes que existen.
Recordando que la ciudad se considera autónoma y que
dentro de ella está el individuo que se forma a través de
los diversos conceptos que existen, así mismo, generan
la urdimbre, que se utiliza para relacionar los lazos de la
población y fortalecer la ciudad por medio de sus leyes
establecidas y las diversas formas de trabajo existente.
Generar un acercamiento a la ciudad, es perderse en un
cúmulo de percepciones que parten de un auge histórico y
perceptivo que emite un entramado que genera relaciones
al interior de ella, por ello no se debe errar generando sólo
un esquema que determine su estructura o composición; es
decir, abordando como parte de la estructura del pensamiento
una forma de vida que radica en ser parte de ella sin hacer
notoria nuestra presencia.
La ciudad no es sólo un fenómeno urbanístico; está
constituida por las sinergias entre instituciones y los espacios
culturales que nos brindan la posibilidad de aprender en
la ciudad; entre la producción de mensajes y signiicados
que nos permiten, al propio tiempo, aprender de la ciudad
y, también, entre su pasado y su presente, muchas veces
José Pedro Vizuet López et al.
desconocido, que nos invita hacer parte de ella, creando una
identidad y una apertura al mundo. “El in de la ciudad es el
ciudadano y éste desarrollará un sentido de pertinencia en la
medida que opte por conocerla, construirla y cuidarla”.2 Por
ello existe un proceso continuo y dinámico de aprendizaje,
construcción y crítica, en el cual los seres humanos crean
y recrean cultura, que a su vez los produce y reproduce, la
memoria colectiva tendrá que recuperar sus quehaceres, sus
saberes y sus tipos de organización si se quiere privilegiar
la solidaridad.
Otra postura en la formación de la ciudad, la menciona Weber,
según este pensador la tribu, la familia, se constituyen para
que cada una sea independiente y cada división conforma una
institución para que se pueda formar una ciudad. Mientras
que en un Estado las tribus se reúnen y esta reunión forma
la ciudad, este proceso permitió que se respetara cada una
de las asociaciones entre las instituciones que se formaron,
pues la ciudad “era considerada una confederación de grupos
constituidos antes que ella y que seguirán existiendo”.3
[…] un tipo ideal de la ciudad, a un arquetipo que debe
evitarse tomar como solución. Si la ciudad proyecta sobre
el terreno una totalidad social, es evidente y comprobable
que la historia entra en esta totalidad, así como el tiempo. Y
esto doblemente: el tiempo entra con la historia en tanto que
pasado cristalizado y en tanto que por las razones anteriores
se hará una deinición solo en el ámbito sociológico ámbito
actual, y las partes reactúan sobre el todo […]4
Lo anterior plantea, que cualquier cosa tiene una razón de
ser, la “ciudad”, también va a mantener una historia de su
formación la cual este autor la maneja en tiempo y espacio;
ya que para formar un término es necesario analizar de
lo particular a lo general, sobre todo porque el fenómeno
social es el que gira a través de su historia debido a que
es, el que le da sentido de signiicancia, y no solo se hará
mención del concepto “ciudad” a una supericie reconocida
institucionalmente, sino también este concepto será parte de
un asentamiento, el cual tendrá su importancia en un tiempo
y espacio para dar como tal el concepto de “ciudad”.
Dentro de este concepto Marx también menciona a la
alienación:
Rodríguez Rodríguez, Jahir, 1999. El palimpsesto de la Ciudad, Ciudad Educadora,
Colombia. p. 08
3
Gasca Salas, J. (2005). La Ciudad: Pensamiento Crítico y Teoría. Instituto
Politecnico Nacional, Biblos. (En línea) México, disponible en http://www.libros.
publicaciones.ipn.mx/PDF/1392.pdf (accesado el día 15 de noviembre de 2013).
4
Lefebvre, H. (1970). De lo rural a lo urbano: La vida social en la ciudad, Ediciones
Península, Barcelona, p.142
2
La ciudad, la urbanización y la pobreza urbana
[…] la que proviene del trabajo, y la que deriva de las
necesidades que la ciudad produce y que impone al hombre
a una práctica de consumo que no guarda relación con el
mundo de sus propias necesidades sino, más bien con el de
las fuerzas económicas que la ciudad representa5.
Es decir, de acuerdo al protocolo de la ciudad donde hay
una organización establecida debido a sus necesidades
el individuo se tiene que adaptar bajo estas condiciones
de niveles tanto económicas como laborales buscando su
desarrollo dentro de la sociedad la cual va a ser mediante
el trabajo donde igura que el individuo no cubre todas sus
necesidades sino trata de estabilizarse mediante un tejido
social de acuerdo a su nivel económico.
Por último, Marx hace mención de cómo interviene la
Revolución Industrial en el proceso de la “ciudad”, se
reiere a un proceso territorialmente urbano el cual provoca
transformaciones en la vida social y en el individuo. También
analiza los efectos de la gran industria en la agricultura y en
los vínculos primarios del hombre. Así, el gran crecimiento
registrado por la población urbana da cuenta, por una parte,
de la utilización por el capital de lo que Marx llama la
fuerza histórica motriz de la sociedad y por otra parte de la
destrucción del metabolismo entre el hombre y la tierra.6
Es decir, para Marx otro elemento que inluye en la “ciudad”
es la globalización, ya que debido a este concepto se da el
urbanismo y comienza nuevamente una división del trabajo,
aunque este fenómeno no solo es exclusivo de la ciudad sino
también del campo. El hombre va acaparando porciones de
tierra donde se establece y comienza a formar una alineación,
es decir, una organización mediante jerarquías laborales
por que la economía es importante en el asentamiento de
cualquier individuo de acuerdo a este autor.
Weber define el término “ciudad”: “Analizando los
asentamientos humanos desde la perspectiva de la
función económica pero también recurre al análisis de sus
implicaciones político-administrativas”.7 Para este autor el
concepto gira en torno al desarrollo de conductas sociales
dentro de un asentamiento; las relaciones humanas que
van a tener este conjunto de personas pertenecientes a una
dimensión, donde se llevan a cabo actividades individuales,
Lezama, J. (1993). Teoría social, espacio y ciudad: Los clásicos y la ciudad, El
colegio de México.p.119.
6
Lezama, J. (1993). Teoría social, espacio y ciudad: Los clásicos y la ciudad, El
colegio de México.p.123.
7
Lezama, J. (1993). Teoría social, espacio y ciudad: Los clásicos y la ciudad, El
colegio de México, p.119.
5
227
sociales e incluso industriales que generan una economía de
acuerdo a lo que ellos laboren persiguiendo un objetivo. Su
principal enfoque a la “ciudad” de Weber son las relaciones
personales que se mantienen para formar cualquier concepto.
Otro factor es el comercio que también tiene normas y reglas
que además de generar capitalismo también tendrán una
estrecha relación. Por lo tanto para Weber “la ciudad” dará
el nacimiento y el desarrollo de las relaciones en lo laboral
formando así al capitalismo que marcará su desarrollo
mediante su distribución de bienes y productos para un in
de conjunto social.
Abordar la perspectiva ilosóica y conceptual pretende dar
cuenta de algunas concepciones que se han tenido sobre la
ciudad, y cómo esclarecer su evolución, lo que ha permitido
hablar de la “ciudad educadora” como tal. En cuanto que la
ciudad también es un ente, un hecho cultural y espiritual;
no sólo es producto de la evolución material y de las
necesidades de los hombres, sino también sus concepciones
y preocupaciones ilosóicas en un momento dado de la
historia del pensamiento y la humanidad.8
Si bien lo menciona Durkheim, “La ciudad, en este
contexto, es por deinición un lugar propio de la división
del trabajo y esto es así porque ahí se presentan los procesos
más importantes de la vida moderna”.9 De acuerdo a esta
deinición, es debido a un incremento de la población, va a
girar determinadas conductas sociales interviniendo valores
morales, normas y reglas pero también problemas sociales.
El tejido urbano ha adoptado nuevas formas; asume
nuevas funciones; se dispone en nuevas estructuras. Si en
las ciudades modernas la calle no es ya lo que fue en las
ciudades medievales o antiguas, es decir, fundamento de
la sociabilidad, no por ello ha devenido simple lugar de
tránsito y circulación, simple conexión entre lugares de
trabajo y residencia. Conserva una realidad propia, una vida
especíica y original10.
Por último, es preciso preguntar si valdría la pena indagar
qué papel juega la urbanización dentro de la construcción de
una ciudad para entender el entramado y los miles de códigos
que al interior alberga, de esta forma no sólo se plantearía a
la ciudad como un ente que no tiene una fuerza de atracción
Rodríguez Rodríguez, Jahir, 1999. El palimpsesto de la Ciudad, Ciudad Educadora,
Colombia. p. 18.
9
Lezama, J. (1993). Teoría social, espacio y ciudad: Los clásicos y la ciudad, El
colegio de México, p.130.
10
Lefebvre, H. (1970). De lo rural a lo urbano: La vida social en la ciudad, Ediciones
Península, Barcelona, p. 181
8
228 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
hacia el exterior, sino que da un mensaje y es guía para que
no solo mantenga lazos interiores, a través de procesos se
dé un aceleramiento poblacional sin precedentes que parte
de la búsqueda de “mejores condiciones y oportunidades
para vivir” para quienes ven en la ciudad una esperanza que
resuelva u oriente su estilo de vida.
La urbanización
Hasta fechas relativamente recientes, el tratamiento del
fenómeno urbano en el mundo, estuvo coninado a meros
trazos tendientes a resolver problemas inmediatos, que sin
ser los más agudos constituían fuentes de descontento entre
los sectores medios y altos de la sociedad. En esta discusión,
aún más insipiente en muchos otros lugares, sea soslayado
sistemáticamente a los pobres de la ciudad.
Estos se han concretado a protestar contra el sistema
desigual dominante abandonando sus lugares de origen,
para incursionar por las lujosas avenidas de los atractivos
centros urbanos, cambiando su miseria sin esperanza,
por un amplio panorama de expectativas que a la postre
resulta contener más limitaciones. Recientemente, sin
embargo, han empezado a reconocer sus potencialidades
de oposición actuando en forma desarticulada y en
ocasiones organizada a in de obtener un mínimo de
satisfactores11.
De ahí que se produzcan situaciones y actividades
especíicas derivadas del empalme o superposición de
lo urbano con fenómenos y manifestaciones propias
de los ámbitos, rurales, lo que genera una simbiosis
con expresiones territoriales y determinadas entre dos
entes que parecen autónomos pero que crean un lazo de
reciprocidad. Dichas manifestaciones se expresan en el
contexto de las actividades productivas, de la cultura, de
quienes ahí habitan, del medio ambiente, entre otras, en
situaciones muy especíicas. “Se trata del reconocimiento
de territorios o ámbitos simbióticos, donde se expresan
situaciones o actividades inherentes a lo urbano y lo rural,
en un marco físico donde la presencia de la ciudad es
determinante en la organización del territorio”.12
Montaño, Jorge, 1976, los pobres de la Ciudad en los Asentamientos Espontaneos,
Siglo XXI, México, D.F, p.07
12
Ávila Sánchez, Héctor, lo urbano- rural, Universidad Nacional Autónoma de
México, centro regional de investigaciones multidisciplinarias, Cuernavaca,
Morelos, 2005, p. 20.
11
José Pedro Vizuet López et al.
Así entonces para explicar al urbanismo tendríamos que
decir que este fenómeno ha existido desde que el hombre
empieza a vivir en ciudades y a organizar conscientemente
sus espacios, pero la palabra urbanismo surgió a principios
de este siglo y solo en las últimas décadas ha pasado a
ser de uso común. Como el urbanismo es una disciplina
en formación, las distintas deiniciones que se den de él
son, muchas veces, incompletas y hasta contradictoritas.
Etimológicamente, el termino urbanismo proviene de urbe
= ciudad; urbano = lo que es de una ciudad (derivado del
latín: urbanus).Por lo tanto, se reiere a todo lo relacionado
con la ciudad.
La urbanización ha traído cambios en todos los países,
cambios en la estructura interna de las ciudades y en el sistema
mundial. Las grandes urbes, junto a sus áreas metropolitanas
son centros de innovación, de gestión política, económica,
y obviamente de concentración de la población. Las
ciudades de menor rango actúan como enlace y difusión de
las novedades tecnológicas, intelectuales y económicas. El
proceso de urbanización es uno de los conceptos que más
se ha presentado a confusiones y comúnmente se utiliza con
signiicados distintos.
El problema reside en que en español la palabra urbanización
se usa indistintamente de dos formas. La primera parte de la
aceptación más común para la sociedad, es la de transformar
en terreno urbano, un terreno utilizado con ines no urbanos
(un terreno agrícola o baldío), de modo que se incluyan en
él los diversos servicios (agua, drenaje, luz y pavimento)
y se fraccione para su venta y ediicación. Así, se habla de
urbanización. La otra aceptación es empleada por urbanistas,
sociólogos, etc., y se reiere a un proceso iniciado en el
mundo con la revolución industrial, que adquirió gran
rapidez en este siglo e hizo que la población del mundo se
concentre cada vez más en las ciudades. Desde el punto de
vista ecológico- demográico, el proceso de urbanización
es el proceso de concentración de la población y de las
actividades humanas en determinados puntos del espacio
(las ciudades).13
Un enfoque sociológico considera insuficiente la
deinición anterior y sostiene que es un proceso tanto
de concentración de población y actividades, como de
forma de vida urbana. Para que exista un proceso de
urbanización, es necesario que la población urbana crezca a
una velocidad mayor que la población total. “Esto empieza
a ocurrir ininterrumpidamente en el mundo como una
Ducci, Elena, 2009. Conceptos Básicos de Urbanismo, Trillas, México, D.F, p. 33.
13
La ciudad, la urbanización y la pobreza urbana
229
de las consecuencias de la revolución industrial y se ha
transformado en una de las características más importantes
del siglo XX”.14
Migración rural-urbana, cambio de la forma de vida (más y
mejores servicios, mayor número y variedad de productos
para consumo, etc.).
Los países que se encuentran en vías de desarrollo (el Tercer
Mundo), la urbanización ocurre con una velocidad mayor. A
su vez los países industrializados se encuentran en una etapa
casi inal, con una pequeña parte de la población rural que
tiende a mantenerse y con una gran cantidad de población
urbana que crece lentamente. Los países que se industrializan
todavía tienen una importante proporción de población rural
(40%-80%), pero su población urbana aumenta aún más
rápidamente no solo por una alta tasa de crecimiento natural
de la misma, sino también porque los campesinos emigran
en gran cantidad hacia las ciudades, especialmente hacia las
ciudades más grandes.
El proceso de urbanización produce también efectos o
consecuencias de dos tipos:
Con todo, lo anterior se reiere solo al volumen de población
que habita en las ciudades o en el campo; así, se ve que
el proceso de urbanización es también un cambio hacia
un modelo de vida urbano. En este sentido, también hay
diferencias entre países industrializados y en vías de
industrialización. En los primeros, parte de la población
va a vivir a pequeños núcleos fuera de la ciudad, pero no
por eso hay que pensar que las personas se “ruralizan”. En
estos países, los avances técnicos en las comunidades y
el transporte hacen que aun las personas que viven lejos
de la ciudad tengan una forma de vida urbana; es decir,
servicios semejantes, acceso a los mismos productos y
posibilidades de trasladarse diariamente a trabajar a la
ciudad. Así, se puede decir que en este tipo de países el
tamaño no tiene importancia para determinar una forma de
vida urbana, porque la población vive en el campo y tiene
un comportamiento urbano.
En los países de tercer mundo, el tamaño del asentamiento
tiene gran importancia para deinir la forma de vida: las
ciudades más grandes son las que tienen mejores servicios,
(escuelas, comercio, transporte), mientras que conforme
disminuye el tamaño, los niveles de servicio y consumo
también disminuyen. En ambos casos, la medición del
proceso de urbanización es completamente distinta.
El proceso de urbanización tiene ciertas características o
manifestaciones generales, como las siguientes:
Aumento de la población urbana con respecto a la población
total, extensión física de las ciudades.
14
Unikel, Luis.1972. La Dinámica de Crecimiento de la Ciudad de México,
Fundación para Estudios, México, p.11.
a) Intra-urbanos, o sea, en el interior de las ciudades:
corresponden a la concentración de las actividades
industriales, inancieras, comerciales, culturales, políticas,
administrativas y a un gigantesco aumento de las necesidades
de vivienda y servicios.
b) Inter-urbanos; es decir, entre ciudades: la urbanización
produce mayor dependencia entre las ciudades y entre las
ciudades y su región inmediata (si hay más gente y más
industria concentradas en la ciudad, esta necesita más
alimentos y materia primera para su industria).
El proceso de urbanización produce ciertas ventajas
indiscutibles, por ejemplo:
Permite el avance cientíico, tecnológico y cultural, facilita
la industrialización, reduce la presión demográica sobre
la tierra en la labor (recursos limitados) por medio de la
migración campo-ciudad, permite dar servicios de mayor
calidad a mayor número de personas.
Crea expectativitas y eleva el nivel de aspiraciones de las
personas (aún cuando muchas de estas aspiraciones son
exageradas por los sistemas masivos o de comunicación, y
generan frustración)
Paralelamente, también hay ciertas claras desventajas
producidas por el mismo proceso, como las siguientes:
Escases de empleo, debido a la existencia de una alta oferta
de mano de obra, superior a la que necesita la ciudad.
Costos de urbanización superiores a las posibilidades
inancieras de los países en desarrollo. Los gobiernos de los
países que se industrializan no tienen la capacidad económica
para dotar de la vivienda, servicios y equipamiento que
necesita su población en rápido crecimiento, que se
concentra cada vez más en las ciudades. La escasez de
vivienda, servicios, etc., aumenta, a pesar de los esfuerzos
de los gobiernos por disminuirla.
230 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Problemas ecológicos (contaminación del agua, aire y
demasiado ruido), problemas sociales (marginalidad y
delincuencia), y político-administrativas (diicultad creciente
de controlar a la población que crece aceleradamente y no
puede ser incorporada rápidamente al proceso económico).
Mala distribución de los beneicios que brinda la ciudad y del
pago de los costos que se supone el funcionamiento de esta.
Tomando en cuenta las ventajas y desventajas que produce
la urbanización surge la interrogante ¿Por qué emigra la
población a la ciudad? Hasta la fecha, la población sigue
emigrando, lo cual indica que, por muy malas que sean las
condiciones de vida para una gran proporción de la masa
urbana, estas no son peores que las que ofrecen el campo. A
pesar de la existencia de grandes desventajas, se deben aceptar
que los grandes problemas urbanos no eliminan las ventajas
que ofrece la ciudad. Así, para afrontar el estudio y la búsqueda
de soluciones a los problemas, se debe considerar a la ciudad
como un elemento básico para el avance social, económico
y político de toda la sociedad.
El urbanismo nuevo debe reconstituir la integralidad de sus
funciones, y también su carácter transnacional, es decir,
estético (exposición de objetos muy diversos, usuales o no)
y simbólico.
La pobreza urbana
Existen distintas razones demográicas y económicas que
permiten la explicación de la construcción de la pobreza,
durante las últimas dos décadas la pobreza en el mundo se
ha visto cada vez más concentrada en los centros urbanos,
tendencia que se manifiesta con más claridad en los
denominados países en vías de desarrollo, debido a las crisis
económicas y a las políticas de reestructuración que son
sometidos por las instituciones económicas internacionales.
El fenómeno se maniiesta de forma aguda en los llamados
cinturones de miseria que rodean a las principales urbes. En esos
gigantescos asentamientos de pobres se registra el desempleo y
los más bajos salarios; predomina el sector informal; el déicit
de vivienda es muy alto; hay poca atención a la educación, a la
cultura y al deporte, y una asignación de presupuesto público
para la provisión de los servicios públicos básicos15.
15
Pérez Abel Zamorano, 2010. Marginación urbana, editorial Porrúa, México
D.F., p.13.
José Pedro Vizuet López et al.
Las principales causas de la expansión de la pobreza y la
indigencia (pobreza urbana) están relacionadas con las
características del modelo de acumulación de capital que
buscó consolidarse en el inicio de la década pasada. El
mismo ha tenido una débil capacidad de generar empleos
de calidad. Esto no solo se expresó en puestos de trabajo de
carácter informal o bajo contratos por tiempo determinado,
si no en una creciente baja remuneración de los trabajadores.
Este modelo económico incremento la incidencia de la
desocupación y una tasa de empleo reducida.16
Es preciso decir que en todo el mundo los pobres aumentan
cada día en número y en condición de pobreza; por ello,
aunque por muchos años y desde el poder se ha pretendido
posponer el tema, este irremediablemente ocupa uno de los
primeros lugares en las agendas de los asuntos mundiales.
Incluso los órganos internacionales promotores del modelo
que tantos pobres ha generado, están inmersos sobre las
posibles salidas a tal situación a que han dado lugar. En todas
partes existe el temor de que los niveles de pobreza en que
viven millones de personas puedan derivar en inestabilidad
social generalizada. Hoy resulta imperativo construir
una propuesta económica, política y social que acierte a
resolver los problemas de pobreza que ponen en juego las
posibilidades mismas de vida de grandes segmentos de la
humanidad.17
La pobreza urbana se deine como aquella carencia que
sufren las personas para alcanzar una vida digna, ya sea de
salud, educación, vivienda, seguridad, laboral o cualquier
otra que se reiere a cuando los individuos no pueden
satisfacer sus necesidades básicas. A diferencia de la
pobreza rural que se puede medir comparando cualquier
sitio de muestreo con una medida estándar para todos, la
pobreza urbana se mide de diferente forma en cada lugar,
porque cada lugar es afectado de manera diferente por
las características enormes de la ciudad, su población, su
territorio, recursos y economía.
Cuando hablamos de pobreza urbana podemos hablar de
dos tipos de especímenes los pobres y los indigentes; los
primeros se reieren a una persona o a un núcleo conformada
por varias de estas personas con características como no tener
para comer, falta de recursos para salir adelante, no tener
casa, empleo, estudios, no tener acceso a servicios médicos,
16
Arteaga, Nelson, 2003. Pobreza Urbana perspectivas globales, nacionales y
locales CEMAPEM, (Centro de Estudios sobre marginación y pobreza). México,
Estado de México, p.48.
17
Gallardo, Gómez Luis Rigoberto, 1998. Los Rostros de la Pobreza, editorial
LIMUSA, México D.F., p.09.
La ciudad, la urbanización y la pobreza urbana
no tener lo que desean, y la mayoría de los pobres relacionan
a la pobreza con los satisfactores inmediatos como la comida
la vivienda o la falta de dinero.18
Mientras que la indigencia que es la última consecuencia de
la pobreza urbana se debe deinir como uno de los grandes
lagelos considerados dentro de cualquier sistema social que
excluye al individuo.
Los problemas planteados por el asentamiento de la
población emigrada en los centros urbanos no sólo
originaron nuevos procesos de empobrecimiento, sino que
las situaciones de pobreza resultantes presentaban carencias
diferentes de las tradicionales en las áreas rurales. Dado que
los primeros estudios sobre la pobreza se hicieron teniendo
en cuenta la realidad del campo, el estudio de la pobreza en
las áreas urbanas planteó que las mediciones de la pobreza
existentes no eran capaces de captar las especiales exigencias
de la vida en las poblaciones urbanas. Se achacaba un sesgo
rural a los instrumentos analíticos y conceptuales sobre la
pobreza y se imponía su revisión para adecuarlos a las nuevas
manifestaciones propias de la ciudad.
En la consideración los procesos de empobrecimiento
urbano se destacan dos diferencias básicas. La primera, la
inadecuación de las deiniciones de los umbrales de pobreza
existentes para establecer los niveles que determinan cuando
realmente un lugar o una persona debe considerarse pobre.
Para quienes estudiaban la pobreza urbana las líneas de
pobreza que se asemejaban no relejaban las exigencias de la
vida en las ciudades, ya que no tenían en cuenta el costo real
de los bienes y servicios que son mucho más caros que en el
campo. En segundo lugar no solo los bienes y servicios son
más caros en la ciudad, sino que también la supervivencia
urbana exige la adquisición de servicios y bienes que en el
campo no son necesarios. Para la población urbana el dinero
tiene una gran relevancia dentro de su vida cotidiana que
para la población rural.
En consecuencia, se puede resaltar que no sólo el crecimiento
poblacional ha expandido la pobreza (paralelo a la
focalización de las políticas sociales que dejan desamparadas
a las grandes mayorías), sino también la poca existencia para
la práctica continua de valores que permitan regenerar un
nuevo tejido social que permita construir ciudadanía con
más y mejores empleos.
231
Esto ha obligado a incorporar a más miembros de las familias
al empleo (informal, desde luego) y a la participación
creciente de niños, trabajadores produciéndose el
incontrolable incremento del subempleo. Sin hablar
de la desnutrición y las enfermedades, ni de los costos
adicionales que estas generan, los cuales merman el salario
y la calidad de vida. Sin embargo, el gobierno muestra
información indudablemente maquillada. Desde luego
que en el campo mexicano la pobreza se ha extendido.19
La ciudad ya no es sólo el conglomerado urbanístico y de
pobladores, sino una gran alma, una ciudad viva, un cuerpo
que siente, que se mueve, una ciudad con corazón propio,
un ambiente y un contexto global de vida y aprendizaje.
Si se considera que en México habitan alrededor de 25
millones de personas en áreas rurales, resulta que 17.5
millones de pobladores rurales son pobres, mientras que
los otros 80 millones que habitan en las ciudades, lo son de
30 a 32 millones de mexicanos. De lo anterior se desprende
que de la cantidad total de pobres en el país, la mayoría
se concentra en las ciudades; según los datos anteriores,
la pobreza urbana representa un 66% de la pobreza total,
y 34% la rural. Esto signiica que la pobreza rural se ha
transferido a las ciudades en este modelo de desarrollo,
más que haberse radicado.20
La ubicación geográfica importa en relación con las
causas y consecuencias de la pobreza. Si bien los
pobres urbanos comparten muchas características con
sus contrapartes rurales, la ubicación geográica es un
componente clave para comprender la estructura y las
tendencias de la pobreza, así como las políticas requeridas
para luchar contra ella. Sin embargo, las áreas urbanas
son sumamente heterogéneas, tanto entre ellas como al
interior de las ciudades. Finalmente se puede entender
que la relación recíproca entre la ciudad, el urbanismo y
la pobreza es amplia, es sumergirse en el más complejo
sistema creado por el hombre en la medida que avanza
su evolución social. Estos tres conceptos constituyen un
complejo vivo, asumido desde diferentes perspectivas y
diferentes ángulos, según su naturaleza y sus funciones, en
permanente mutación. Por consiguiente se adoptan como
términos polifacéticos y multidimensionales, es decir entre
más se quieran deinir estaremos cada vez más lejanos de
su propia esencia y construcción epistemológica.
19
18
Vizuet, José Pedro. 2012. La Pobreza Alimentaria en la Zona de la Montaña
Municipio de Texcoco, Estado de México, 2009-2010, p.21.
Torres, Guillermo. 2012. Desarrollo compatible: nueva ruralidad y nueva
urbanidad. Editorial Plaza y Valdés. México, D.F., p. 178.
20
Torres Carral, Guillermo. 2012. Desarrollo compatible: nueva ruralidad y nueva
urbanidad. Editorial Plaza y Valdés. México, D.F., p. 178.
232 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
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2 -ISSN: 1688- 5317 la ciudad y la urbanización
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Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental p. 233-239
Movimientos sociales como resultado de la búsqueda
de la identidad contra la desterritorialización
Edelia Denisse Castañeda de la Cruz
Sociología Rural-Universidad Autónoma Chapingo. edelia_27@hotmail.com.
Resumen
Movimientos sociales en busca de la identidad
En este trabajo se aborda el movimiento social que
surge del llamado a la identidad, dirigido contra una
dominación que tiene el nombre de Estado, quien ha
despojado al hombre de su territorio para la creación de
proyectos. Este fenómeno también es conocido como
desterritorialización, la cual se reiere a que el hombre
puede vivir sin territorio, que la sociedad puede existir
sin territorialidad, pero esto no así, ya que el movimiento
de destrucción de territorios ha existido siempre, y el
hombre, de algún modo, reconstruye su territorialidad
sobre nuevas bases, y esta es la razón por la cual el término
desterritorialización se considera como un mito. El
territorio, visto por muchos desde una perspectiva política
y así mismo cultural, es enfocado aquí en una perspectiva
geográfica, intrínsecamente integradora, que ve la
territorialización como un proceso de dominio (políticoeconómico) y de apropiación (simbólico-cultural) del
espacio por los grupos humanos. De dicotomías estamos
llenos y el discurso de la desterritorialización está repleto
de ellas: materialidad e inmaterialidad, espacialidad y
temporalidad, naturaleza y cultura, espacio y sociedad,
global y local, movimiento y estabilidad y en esta última
se enfoca el presente trabajo, donde los movimientos
sociales se oponen al concepto de desterritorialización.
Un movimiento social es siempre portador de un nuevo orden
social de valores y de poder. Touraine propone luchar contra
falsas concepciones de la sociología y darle al sociólogo
una función de compromiso con su realidad social.
(Sociología de la acción y la “intervención sociológica”
en movimientos sociales a través del planteamiento de
hipótesis). En la perspectiva y el contexto del movimiento
es indispensable referirse a los actores sociales desde el
análisis sociológico; se trata de examinar una categoría
(ejidatarios, sectores populares), donde existe una
transformación del actor-sujeto: a) Los actores de este
movimiento se identiican y estructuran a partir de cierta
identidad, demandas y principios, con particularidades por
su condición sociocultural de la categoría social a la que
pertenecen; b) por sus mismas demandas o reivindicaciones
respecto a su condición, y c) por las características
organizacionales e institucionales del medio en que se
desenvuelven (Munck, 1995).
Palabras clave: movimiento social, desterritorialización,
territorio.
Alain Touraine (1995) considera a los movimientos sociales
como una acción conflictiva, donde cualquier acción
colectiva supone la existencia de un actor, de otros actores
portadores de intereses diferentes de los suyos, y de un
objetivo o campo social en donde se sitúan sus relaciones.
Los actores son fuerzas sociales que se proponen ejercer
cierta resistencia a decisiones que se impondrán a una
colectividad.
234 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Las diversas conductas colectivas se sustentan en: a)
Las reivindicaciones organizativas, b) las tensiones
institucionales y c) las protestas modernizadoras. La idea
de modernización se introduce y se analiza a propósito del
cambio social, si bien existen movimientos que tienden a
pasar del presente al futuro en nombre de la modernización,
otros se deinen por la lucha en nombre del presente contra
el pasado o en defensa del pasado contra el futuro incierto
(Giddens et al., 2001: 33-34).
Las orientaciones de un movimiento social no dependen
únicamente del estado del sistema político o de la organización
social; adquieren también diferentes formas según el estado
de evolución de las relaciones de clase. Los conlictos sociales
tienen una historia natural (Touraine, 1995).
La identidad, la oposición y la totalidad son elementos que
se consideran en el análisis conceptual para la comprensión
de los movimientos sociales. Los problemas se sitúan en un
mismo campo. Los adversarios hablan siempre el mismo
lenguaje, sin el cual no podrían debatir y combatirse.
1) La identidad. Es la deinición del actor por sí mismo. Un
movimiento social puede organizarse si esta deinición es
consciente. El problema es lo que constituye y organiza al
actor. Es habitual que el actor se deina en primer lugar en
términos organizativos o institucionales. La práctica de las
relaciones sociales es la que sitúa y deine al actor histórico,
al movimiento social, así como al campo de decisión que
deine al actor político.
2) El principio de oposición. Un movimiento se organiza a
partir de que puede nombrar a su adversario, pero su acción
no presupone esta identiicación. El conlicto hace surgir al
adversario, forma la conciencia en presencia; sólo se puede
hablar de principio de oposición si el actor se siente enfrentado
con una fuerza social general en un combate que ponga en
entredicho orientaciones generales de la vida social.
La dimensión del conflicto es fundamental en todo
movimiento social. Este conlicto puede ser parcialmente
tratado a nivel institucional, pero nunca por completo. Tal
vez recurra a un árbitro, a un mediador o a los tribunales.
Pero es una táctica; por lo anterior, el conlicto es vivido por
el movimiento social como un conlicto comunitario, de las
localidades y de los municipios en problema. Airmación que
no signiica reducir la idea de que todo movimiento social
lucha por intereses económicos.
Edelia Denisse Castañeda de la Cruz
3) El principio de totalidad no es sino el sistema de
acción histórica, cuyos adversarios, situados en la doble
dialéctica de las clases sociales, se disputan el dominio. No
existe un movimiento social que se deina únicamente por
el conlicto. Todos poseen lo que se denomina principio
de la totalidad.
El movimiento social sólo es identiicable como elemento de
un campo de acción histórica; es decir, de las interacciones
entre el actor colectivo del que se trate, su adversario y las
expresiones relativamente autónomas del sistema de acción
histórica, en particular del modelo cultural. Así, Touraine
considera que los movimientos sociales se forman y se
organizan en la medida en que sus elementos, identidad,
oposición y totalidad, tienen una expresión concreta; es
decir, es visible para todos.
Estos movimientos no caen dentro del modelo tradicional
del grupo de interés de la política. Los grupos de interés más
convencionales se dedican a demandas economicistas, por
lo general materiales por naturaleza, que intentan obtener
del Estado. Por el contrario, los movimientos nuevos se
enfocan en gran medida a las relaciones sociales, al punto a
veces de ser apolíticos.
Desde el movimiento zapatista, el asunto de “la lucha por
la tierra” se ha vuelto un asunto muy delicado. La defensa
de lo local vs lo global se presenta como un movimiento
que puede ser considerado como nacional; las fuerzas
que anteriormente se expresaban a nivel local o regional
logran una nueva coordinación con distintos sectores de la
sociedad y grupos inconformes. Desde el sexenio salinista
y zedillista se ha acumulado una serie de movimientos
sociales de distintas características, donde los movimientos
“por la tierra” aparecen como los más incómodos, delicados
y complicados en su solución (La Jornada, el 28 de junio
de 2004).
“La identidad nos es impuesta desde el exterior. No me dice
quién soy ni el sentido de lo que hago, sino quien debo ser
y cuáles son las conductas que la sociedad espera de mí, so
pena de sanción. La identidad sólo puede ser la sumisión
dependiente, heterónoma y alienante de un poder” (Touraine,
1978, pp. 243-244).
“La identidad social sólo puede ser la acción que combina
esas dos vertientes de la actividad social (Dios de majestad
y el lenguaje del inierno), el modelo cultural y las leyes de
la «naturaleza humana»” (Touraine, 1978, p. 245).
Movimientos sociales como resultado de la búsqueda de la identidad contra la desterritorialización
Un movimiento social se distingue de otros tipos de
conductas colectivas en que se orienta hacia valores, hacia
una concepción de la sociedad y del hombre” (Touraine,
1995, p 249).
“… lo propio de un movimiento social no es estar orientado
hacia valores conscientemente expresados (…) Un
movimiento social no es la expresión de una intención
o de una concepción del mundo. No se puede hablar de
un movimiento social sino se puede deinir a su vez el
contra movimiento al que se opone. El movimiento obrero
no es un movimiento social más que sí, más allá de las
reivindicaciones contra la crisis de la organización social y
las presiones para la negociación, pone en tela de juicio la
dominación de la clase dirigente” (Touraine, 1995, p. 250).
“El principio de identidad es la deinición del actor por sí
mismo. Un movimiento social no puede organizarse más
que si esta deinición es consciente. El conlicto es lo que
constituye y organiza al actor” (Touraine, 1995, p. 250).
“No se puede deinir la identidad del actor independientemente
del conlicto real con el adversario y del reconocimiento del
objeto de lucha” (Touraine, 1995, p. 251). “El conlicto hace
surgir al adversario, forma la conciencia de los actores en
presencia” (Touraine, 1995, p. 251).
“La acción de un movimiento social sólo es útil si permite
poner en evidencia la existencia de un tipo muy especíico
de acción colectiva, aquel por el cual una categoría
social, siempre particular, pone en cuestión una forma de
dominación social, a la vez particular y general, e invoca
contra valores, orientaciones generales de la sociedad que
comparte con su adversario para privarlo de tal modo de
legitimidad” (Touraine, 1996, p. 100).
Un movimiento social jamás se redujo a la defensa de los
intereses de los dominados, siempre quiso abolir una relación
de dominación, hacer triunfar un principio de igualdad, crear
una nueva sociedad que rompiera con las formas antiguas
de producción, gestión y jerarquía” (Touraine, 1996, pp.
101-102).
“… se ignoraban las relaciones asociativas y organizativas
de los integrantes de la sociedad que ahora se juzgan
arcaicas, por no contribuir a explicar el comportamiento de
los actores sociales, entramados como sujetos en una nueva
red de comprensión de lo social. Entonces surgió la moda
de explicar a través del sentido cultural en los lenguajes
235
comunicativos que a través del lenguaje y de los símbolos
(semióticos) permitía construir y explicar la ediicación
cultural, eso sí era humano, eso sí era social…
El espacio-tiempo fue entendido y relacionado con la red
social de la multiplicidad y multipolaridad de actores, de
manera que la historicidad conseguida por los sujetos se
alcanzaba por los sentidos comunicativos que direccionaban
al sistema, entendido como sistema cultural. La movilidad
física de sujetos se entiende como expresión emotiva -por
su sensibilidad, por su inconformidad irracional, por su
lucha, por su actitud levantisca, por su rebeldía, porque
su movilización es producto y expresión de pasiones
subjetivas-, que en nada colabora en la orientación y en
la explicación racional y cultural del sistema, de manera
que el movimiento social solo es comprensible en el
sentido cultural que se aporta –poieticamente- al sistema”
(Castellanos, 2016).
La identidad colectiva es una construcción sociocultural. La
construcción del sentido de pertenencia está estrechamente
relacionada con las interacciones sociales, la cultura y el
contexto social macro y micro.
La identidad se genera en las interacciones sociales
cotidianas que mantienen los sujetos entre sí, a través de las
cuales van delimitando lo propio contra lo ajeno.
El presente trabajo estudia a un movimiento social concreto
inmerso en un ambiente social y político, donde el despojo
explica su constitución y acción colectiva a partir de su
contexto histórico, de mundialización capitalista, de su
pertenencia socio territorial, su subjetividad consolidada,
de relaciones sociales de poder y de conlicto, desarrollado
en un proceso simultáneo que complementa al conjunto del
movimiento social mientras se confronta con sus enemigos
para defender su territorio y su identidad, ya que la inalidad
no solo es defender tierras, sino toda una historia.
El movimiento social surgió y se constituyó como respuesta
ante el despojo de su territorio por el gobierno y el capital
inanciero, a través de su defensa y su valorización, en un
campo de conlicto, mediante la acción colectiva (basada
en la solidaridad) y su forma de organización, que produjo
cambios en la subjetividad y potenció la construcción de un
actor social -con identidad colectiva-, que debió ediicar un
contrapoder mediante su forma de lucha -estrategia-, capaz
de cambiar la relación de fuerzas y desestabilizar los límites
del sistema para el logro de sus objetivos.
236 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
Territorio y defensa
La relación entre territorio y defensa, que se encuentra
en los orígenes del término y que se difundió también por
medio de la concepción neodarwinista de territorialidad,
no es una característica ultrapasada, presente en diversas
concepciones contemporáneas, especialmente la de neorealismo en el análisis de las relaciones internacionales, por
ejemplo, conceptualiza territorios como “espacios que las
personas deienden por la exclusión de alguna actividad e
inclusión de aquellas que realzan más precisamente lo que
ellas quieren defender en el territorio”
Viniendo hasta autores más recientes, sin embargo ya
tornados clásicos, como Claude Rafestin y Robert Sack,
parece haber un consenso, de que la dimensión política,
para además de su perspectiva jurídica y estatal, es la que
mejor responde por la conceptuación del territorio. Dada la
importancia de ese carácter político, es a partir del amplio
sentido relacional que asumimos para poder (el que incluye
el propio poder simbólico).
Tomemos el ejemplo de una sociedad indígena. Fácilmente
podemos afirmar que la construcción de su territorio
como área controlada para usufructo de sus recursos,
especialmente los recursos naturales (algo bastante genérico,
y, por lo tanto, variable entre los diferentes grupos). Pero
los referentes espaciales, ahí, también son parte de la vida
de los indios como elementos indisociables, en la creación
y recreación de los mitos y símbolos, pudiendo al mismo
tiempo ser responsables por la propia deinición de grupo
en cuanto tal.
Edelia Denisse Castañeda de la Cruz
no tiene por qué coincidir con otras concepciones, como
la de territorio político o “legal” y territorio geográico,
él completa: Si el territorio es susceptible de un estudio
antropológico, y no meramente geográico o ecológico,
es precisamente porque existen indicios para creer en el
carácter subjetivo del mismo, o, dicho de otra forma, porque
(...) entre el medio físico y un hombre se interpone siempre
una idea, una concepción determinada (p. 21).
García cita el “posibilismo” geográico de Vidal de La
Blache, la “morfología social” de Marcel Mauss (donde
las condiciones del medio son mero “sustrato de vida
social”) y los indios de Brasil Central en Lévi Strauss (cuyo
miedo de la sequía sería mucho más una creación de sus
mitos de que la sequía real a la que estaban sujetos) para
sustentar su tesis de que no son las características físicas del
territorio las que “determinan” la creación de signiicados,
su “semantización”. “Dicho de otra forma”, él airma, “la
semantización del territorio se puede explicar parcialmente a
partir del medio, pero la investigación del medio físico nunca
nos permitirá concluir que se debe dar un tipo determinado
de semantización” (p. 52).
El territorio “semantizado” para García signiica, en sentido
amplio, un territorio “socializado e culturalizado”, pues todo
lo que se encuentra en el entorno de hombre está dotado de
algún signiicado. “Es precisamente este signiicado o “idea”
la que se interpone entre el medio natural y la actividad
humana que, con relación al territorio, tratamos de analizar
(...). El estudio de la territorialidad se convierte así en un
análisis de la actividad humana en el que se dice respecto a
la semantización del espacio territorial” (García, 1976: 94).
El mismo concepto de Maurice Godelier, situado aquí sobre las
perspectivas materialistas de territorio, presenta importantes
matrices, reivindicando también la incorporación de una
dimensión ideal o una “apropiación simbólica”, pues: ... lo
que reivindica una sociedad al apropiarse de un territorio y
su acceso, el control y su uso, tanto de las realidades visibles
como los poderes invisibles que los componen, y que parecen
partir el dominio de las condiciones de reproducción de la
vida de los hombres, tanto propia de ellos en cuanto a los
recursos de los cuales ellos dependen ( Godelier, p. 114).
La geografía, como era de esperarse, al contrario de la
Antropología, tiende a enfatizar mucho más la dimensión
material del territorio. Aún la llamada geografía cultural,
de emergencia relativamente reciente, pero que algunos ya
llegaron a levantar como un nuevo paradigma, asociado a
la corriente humanista o idealista de la Geografía, preiere
usar otros conceptos, como lugar o paisaje, para analizar
fenómenos ligados a la dimensión cultural de espacio18.
Aun así, encontramos algunos autores que enfatizan más
abiertamente la perspectiva ideal-simbólica del territorio.
Entre ellos están los geógrafos franceses Bonnemaison y
Cambrèzy (1996).
Uno de los trabajos que focalizaron de forma más directa
la discusión sobre territorio en la Antropología fue
Antropología del Territorio, de José Luis García, escrito aún
en 1976. Defendiendo que el territorio en la Antropología
Para Bonnemaison y Cambrèzy, la lógica territorial
cartesiana moderna, pautada en el “quiebre de cabeza” de
los Estados naciones, que no admite sobre posiciones y da
Movimientos sociales como resultado de la búsqueda de la identidad contra la desterritorialización
poca énfasis en los lujos, en el movimiento, es suplantada
hoy por la “lógica culturalista, o, si preferimos, posmoderna,
que la geometría no permite medir y la cartografía, menos
todavía, representar. En esta (...) perspectiva la pertenencia
del territorio implica la representación de la identidad
cultural y ya no la posición en un polígono. Ella supone redes
múltiples, se reiere a geosímbolos más que a fronteras, se
inscribe en los lugares y caminos que ultrapasan los bloques
de espacio homogéneo y continuo de la “idea geográica”
(término de Gilles Sautter para deinir la visión de espacio
cartesiano moderno).
Para estos autores hay un enfrentamiento, hoy, entre la lógica
funcional estatal moderna e la lógica identitaria posmoderna,
contradictorias, reveladoras de dos sistemas de valores y de
dos éticas distintas frente al territorio. Aunque no sea una
simple cuestión de cambio de escala, también tiene una
revalorización de la dimensión local. El territorio refuerza
su dimensión en tanto representación, valor simbólico.
El abordaje utilitarista del territorio no da cuenta de los
principales conlictos del mundo contemporáneo. Por eso
“el territorio es primero un valor”, después “la existencia,
y la misma e imperiosa necesidad para toda la sociedad
humana de establecer una relación fuerte, o una misma
relación espiritual con su espacio de vida, parece claramente
establecida” (p. 10).
Prosiguiendo, Bonnemaison y Cambrèzy airman: El poder
del lazo territorial revela que el espacio está investido de
valores no sólo materiales, sino también éticos, espirituales,
simbólicos y afectivos. Es así que el territorio cultural
precede al territorio político y todavía con más razón
precede al espacio económico (1996: 10).
En las sociedades agrícolas pre-industriales y en las
sociedades “primitivas” de cazadores y recolectores,
“el territorio no se deinía por un principio material de
apropiación, sino por un principio cultural de identiicación,
o, si preferimos, de pertenencia. Este principio explica la
intensidad de la relación con el territorio. Éste no puede ser
deinido a penas como una posesión o como una entidad
exterior a la sociedad que lo habita. Es una parcela de
identidad, fuente de una relación de esencia afectiva al
mismo tiempo amorosa del espacio”.
De cualquier forma, una noción de territorio que desprecie su
dimensión simbólica, entre aquellas que enfatizan su carácter
eminentemente político, está predestinada a comprender
apenas una parte de los complejos meandros de los lazos
237
entre espacio y poder. El poder no puede de manera alguna
quedarse restricto a una lectura materialista, como puede
ser debidamente localizado y “objetivado”. En un sentido
también aquí relacional, el poder como relación, y no como
cosa a la cual poseemos o de la cual somos expropiados,
envuelve no apenas las relaciones sociales, pero también
las representaciones que ellas vinculan y, de cierta forma,
también producen. De este modo, no hay como separar el
poder político en el sentido más estricto y el poder simbólico.
Crear nuevos recortes territoriales – nuevos Estados o
municipios, por ejemplo, es al mismo tiempo un acto de
poder en el sentido más concreto y el reconocimiento y/o la
creación de nuevas referencias espaciales de representación
social. Se puede, con un nuevo recorte o “frontera”, legitimar
ciertas identiicaciones sociales previamente existentes o,
el que es más común, al mismo tiempo crear o fortalecer
otras. Como todo proceso de representación territorial es
altamente selectivo, solamente algunos espacios serán
“representativos” de la(s) identidad(es) que ellas ayudan a
producir o reforzar.
De este modo, podemos afirmar que el territorio,
relacionalmente hablando, o sea, en cuanto mediación
espacial del poder, resulta de la interacción diferenciada
entre las múltiples dimensiones de ese poder, desde su
naturaleza más estrictamente política hasta su carácter más
propiamente simbólico, pasando por las relaciones dentro del
llamado poder económico, indisociable de la esfera jurídicopolítica. En ciertos casos, como el de grandes conlictos
territoriales de origen étnico y religioso, la dimensión
simbólica-cultural del poder se impone con mucha más
fuerza, en cuanto en otras, probablemente las dominantes, se
trata más de una forma de territorialización, a in de regular
conlictos dentro de la propia esfera política o de ésta con
determinados agentes económicos.
Por eso, con base en la distinción entre dominio y apropiación
del espacio de Lefebvre (1986), proponemos que: El
territorio envuelve siempre, al mismo tiempo (…), una
dimensión simbólica, cultural, a través de una identidad
territorial atribuida por los grupos sociales, como forma de
“control simbólico” sobre el espacio donde viven (siendo
también, por lo tanto, una forma de apropiación), y una
dimensión más concreta, de carácter político-disciplinar
[y político-económico, deberíamos sumar]: la apropiación
y ordenación del espacio como forma de dominio y
disciplinarización de los individuos (Haesbaert, 1997:42)
Lefebvre (1986) caracteriza la dominación del espacio
238 Cultura y sociedad, territorio, sustentabilidad, trabajo, pobreza y deterioro ambiental
a partir de la transformación técnica, práctica sobre la
naturaleza. Según él para dominar un espacio, especialmente
en la sociedad moderna, en general la técnica impone
formas rectilíneas, geométricas, “brutalizando” el paisaje.
La dominación, que nace con el poder político, va cada vez
más perfeccionándose. Pero el concepto de dominación sólo
adquiere sentido cuando contrapuesto, de forma dialéctica, la
concepción de apropiación –distinción que el propio Marx,
a pesar de haber diferenciado apropiación de propiedad, no
habría deinido con claridad.
En relación a la apropiación del espacio, Lefebvre airma: De
un espacio natural modiicado para servir a las necesidades
y las posibilidades de un grupo, se puede decir que éste grupo
se apropia de él. La posesión (propiedad) no fue sino una
condición y más frecuentemente un desvío de esta actividad
“apropiativa” que alcanza su ápice en la obra de arte, un
espacio apropiado se asemeja a una obra de arte, lo que no
signiica que sea su simulacro (p. 192, destaques del autor).
En otro momento, la relación entre apropiación y dimensión
simbólica queda todavía más evidente cuando Lefebvre
se reiere a los espacios más efectivamente “apropiados”
como aquellos ocupados por símbolos: “(…) los jardines
y los parques que simbolizan la naturaleza absoluta, o los
ediicios religiosos que simbolizan el poder y el saber, o sea,
lo absoluto puro y simple” (1986:423).
Otra lucha irritada e identiicada por el autor entre las fuerzas
racionalizadoras del “Logos”, vinculado a dominación, y las
fuerzas más subjetivas del “Eros”, vinculado a apropiación.
En cuanto el Logos “inventaría, clasiica”, asociado a saber y
poder; Eros o “el gran deseo nietzscheano” intenta superar las
separaciones entre obra y producto, repetitivo y diferencial,
necesidad y deseo. Del lado del Logos se presentan las fuerzas
que apuntan controlar y dominar el espacio: “la empresa y
el Estado, las instituciones y la familia, el establecimiento
y el orden establecido, las corporaciones y los cuerpos
constituidos”. Del lado del Eros están “las fuerzas que
intentan la apropiación del espacio: las diversas formas de
autogestión de las unidades territoriales y productivas, las
comunidades, las elites que quieren cambiar la vida y que
intentan sobrepujar las instituciones políticas y los partidos”
(p. 145) y que se colocan francamente al lado de la idea de
creación de contra-espacios efectivamente autónomos.
Podríamos decir que el territorio, en cuanto a relación de
dominación y apropiación sociedad-espacio, se desdobla
a lo largo de un continuum que va de la dominación
Edelia Denisse Castañeda de la Cruz
política-económica más “concreta” y “funcional” a la
apropiación más subjetiva y/o “cultural-simbólica”.
Aunque sea completamente equivocado separar estas
esferas, cada grupo social, clase o institución puede
“territorializarse” a través de procesos de carácter
más funcional (económico-político) o más simbólico
(político-cultural) en la relación que desenvuelven con
sus “espacios”, dependiendo de la dinámica de poder y de
las estrategias que están en juego. No es preciso decir que
son muchos los potenciales conlictos a desdoblar dentro
de ese juego de territorialidades.
Para Lefebvre, dominación y apropiación del espacio
deberían estar juntas, “pero la historia (aquella de
acumulación) es también historia de su separación, de su
contradicción. Quien vence es el dominante” (1986:193).
Aunque inicialmente haya habido apropiación sin
dominación, gradualmente, con el papel creciente de los
ejércitos, de la guerra y del poder político del Estado,
aumentan las condiciones y los conlictos entre esos dos
procesos; y es la dominación la que inalmente se impone,
reduciendo drásticamente el espacio efectivamente
“apropiado”. Así, de acuerdo con el grupo y/o la clase
social, el territorio puede desempeñar los múltiples papeles
de abrigo, recursos, control y/o referencia simbólica. En
cuanto, algunos grupos se territorializan en una razonable
integración entre dominación y apropiación; otros
pueden estar territorializados básicamente por las vías de
dominación, en un sentido más funcional, no apropiativo.
El hecho de considerar el territorio en un sentido amplio,
multidimensional y multiescalar, jamás restringido a
un espacio uniescalar como el de los Estados nación, no
implica menospreciar sus especiicidades geo-históricas,
su diferenciación de acuerdo con los contextos históricos y
geográicos en que es producido.
Así mismo, si privilegiamos la deinición más estricta de Sack,
de territorio como control de procesos sociales por el control
de accesibilidad a través del espacio, es imprescindible
veriicar el cuánto este “control” cambia de coniguración y
de sentido a lo largo del tiempo. En cuanto, en las sociedades
modernas “clásicas”, o sociedades disciplinares, como
afirmó Foucault, dominaban los territorios-zona que
implicaban la dominación de áreas (la expansión imperialista
por el mundo hasta “cerrar” el mapamundi en términos de
un gran mosaico estatal, es el ejemplo de mayor amplitud),
lo que vemos hoy es la importancia de ejercer control sobre
lujos, redes, conexiones.
Movimientos sociales como resultado de la búsqueda de la identidad contra la desterritorialización
Territorializarse, de esta forma, signiica crear mediaciones
espaciales que nos proporcionen efectivo “poder” sobre
nuestra reproducción como grupos sociales (para algunos
también como individuos), este poder es siempre multiescalar
y multidimensional; material e inmaterial, de “dominación”
y de “apropiación” al mismo tiempo. ¿Qué sería fundamental
“controlar” en términos espaciales para construir nuestros
territorios en el mundo contemporáneo? Además, de su
enorme variación histórica, precisamos considerar su
variación geográica: obviamente territorializarse para
un grupo indígena de la Amazonia no es lo mismo que
territorializarse para los grandes ejecutivos de una empresa
transnacional. Cada uno desdobla relaciones con o por
medio del espacio de las formas más diversas. Para unos, el
territorio es construido mucho más en el sentido de un áreaabrigo y fuente de recursos, a nivel dominantemente local;
para otros, él interesa en cuanto articulador de conexiones
o redes de carácter global.
Volvemos entonces para la especificidad histórica
del territorio y, más propiamente, de la territorialidad
contemporánea, donde se airma, están proliferando más los
procesos de desterritorialización que de (re)territorialización.
¿Qué cambia en relación al mundo moderno y en relación
a las sociedades más tradicionales? ¿Habría, al final,
una “desterritorialización post-moderna” al superar la
“territorialización moderna”, o sería más propiamente
una nueva forma de territorialización, conviviendo lado a
lado con otras diversas formas, distintas e históricamente
acumulativas?
Una de las propuestas más interesantes es aquella que coloca
la posibilidad, hoy, de la construcción de territorios en el y por
el movimiento, “territorios-red” discontinuos y sobrepuestos,
superando en parte la lógica político-territorial zonal más
exclusivamente del mundo moderno. Las propuestas
innovadoras de territorio y de desterritorialización en la
ilosofía de Deleuze y Guattari, a pesar de las restricciones
que hacemos a su fundamentación post-estructuralista y
239
la excesiva cobertura de sus conceptualizaciones, pueden
trazar algunas pistas para la articulación de esas nuevas
lecturas.
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