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ALBERTO DURANDelegación Provincial
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El Testamento de José Antonio: por Juah de la Borbolla. La Unidad de la Vietoria: por Jiménez Caballero. Carta a D. Fulano sobre la Normalidad: por Rafael Garría Serrano, Carta de una Madre Española al Caudillo. José Antonio, Capitán de la Nueva Juventud: por Jorge de Manrique. Una Interviu Celeste: por Vicente Serna. Rojos en Franeia, _La Huída de un Asesino, Romance Triunfal, Los Enen(1igoe Pequeños: por Franciseo Casares. Cuentas Pendientes (Réplica). Soledad.
Actividades de la Falange del Exterior en Sud América. El Camarada Sánchez Mazas, fué allado vivo en Barcelona, los Sacerdotes a sueldo de los Rojos. Brindis de R. Sánchez Mazas, Nuestro Mérito ha sido la fe en España, *
Por Juan de la Borbolla.
En el numero correspondiente al día 30 de abril del presente año EL NACIONAL de Meyjco publica un artículo firmado por José Loredo Aparicio, primer secre-tario y encargado de negocios de la embajada roja durante- los dos últimos años dejuerra, con el mismo título que encabeza eslas lineas.
No podía Loredo Aparicio, que duranteel trempo de su actuación en Méjico dedicó,valieéndose-del clima político prapicio de que disjruta en aquel pairs, la mayor parte de él a insultar a los españoles que en casi su to-talidad respondieron desde el primer día alllamado de Franco; que intrigó cuanto le fuéposible ante las autoridades mejicanas paraque las oficinas de aquella Falange Españo-la Tradicionalista y de las J. O. N. S. fue-ran registradas por la policía y.sus Jefes yafiliados detenidos en numerosas ocasiones,lo que culminó a última hora con la expul-sión decretada contra nuestros camaradas Villanueva, Celorio y Riestra; que en sus ar-ficulos llenos de odio y despecho llamaba rerugnante al Glorioso Imperio español delsiglo XV y que se mostraba emocionadocuando en la Cámara de Diputados de Mé-jico, en su presencia y en sesión que segúndijeron era de homenaje a España , el di-putado Miguel Angel Menéndez llamaba a Hernán Cortés ladrón y bandido, asegurari=do que había sido el primer fascista que hu-biera puesto los pies en América , no podía,repito, dejar de hacerse eco del testamento apócrifo de nuestro Mártir José Antonio,que los rojos, paladines de todo lo absurdo,han hecho público con fines bieñ claros depropaganda sectaria y antiespañola, pero,tan torpemente, que hasta aquellos mismosa quienes tratan de engañar se dan cuentainmediata de que están siendo víctimas de una falsedad.
Han querido los propagandistas rojos
presentar a José Antonio a través del testamento que ellos escribieron, con una visión mediatizada de las cosas de España, en un plan de inocentes preocupaciones libera-les, tal y como hubiera hecho en vísperas de elecciones cualquier político de izquierda o de derecha que se sentara ante su mesa de trabajo a escribir un programa de ambiente preelectoral.
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El verdadero testamento de José Anto-nio, escrito de su puño y letra en aguella sombria cárcel de Alicante donde fué asesinado por las hordas comunistas al servicio de la anti-España, ha sido dado a la publicidad por el Gobierno Nacional y constituye, co-mo todo lo suyo, una obra maestra, rebosante de patriotismo y caridad cristiana, epilogo lógico de quien. como él, dedicó todos los actos de su vida joven al servicio de nuestra Patria.
Aun en los últimos momentos, cuandola checa le hizo comparecer por última vezen presencia del tribunal encargado de legalizar el asesinato que en su persona iban a cometer, dió rienda suelta a su vocación de apostol para predicar a seres infrahumanos la verdad de nuestra Doctrina, haciendo que en los ojos de aquellos que en su retina solo podían grabar la imagen del crimen, apare--ciera una chispa de luz, como si Dios quisie-ra aprovechar este momento dramático para que pudiera entrar en su alma un poco de la verdad de España, de la verdad Nacional Sindicalista, que el verbo cálido y entusiasta del Mártir hacía llegar al fondo de los corazones, iluminando cerebros cerrados a toda concepción patriótica, por culpa de quienes, como Loredo Aparicio, se aprovechaban del hambre y sed de justicia de un pueblo conansias de cristiana redención en beneficio de loso intereses de un partido, del que espe-raban sacar, a la postre, el placer de una vi-da regalada.
Perseguido, día tras día, durante suvida, por la sublime inguietudque su cora-zón sentía por España, no tiene hoy nuestroJosé Antonio el consuelo de saber que susenemigos respetan su memoria. Todavía lopersiguen queriendo aprovechar su últimavoluntad para hacer propaganda en contra
de la Patria que los vió nacer; pero nosotroslos conocemos bien y sabemos a qué atener-nos.
Se trata, como dijo en Méjito, precisa-mente, Miaja, de pandillas de asesinos y la-drones,
Antes fueron tres siglos de descielodestcrrados del mayo de lo Eterno, y el alma, deshojada en el invierno de España, ragabunda por su hielo.
Corazón de trasmundo sin latido, roto el reloj de torre de la Historia,ni párpado de luz, ¡ay!, ni memoria en las grutas obscuras del olvido.
Pero viniste tú, en el verbo el nido de primavera, y levantaron vuelodel charco estrellas y águilas del lodo.
Y, émula de tu amor y tu sentido, la muerte vino a darle prisa al cielo,pues es la humana vida corta y todo Eugenio MONTES
DEBIDO A CIRCUNSTANCIAS ESPECIALES, AJENAS A NUESTRA VOLUNTAD. NOS HEMOS: VISTO OBLIGADOS A UNIFICAR EN ESTE NUMERO, LOS DOS CORRESPONDIENTES AL MES-.DE JUNIO.
Del Hacho al Pirineo has ascendido, Vega de Espadas, con el pie hgero ; Y desde tu Galaico mar primero, El de Ulises contemplas redimido.
Al oficio de Alcázar ascendido, De campamento duro y sol guerrero. Nueña otra vez el Orbt por sendero Tu solar de Castilla defendido.
Padre de armas y paz: por tu promesaVuelve Oceidente a revelar su empresa, Y el -Levante dilata su hermosura,
Es proa al Sur y el Norte asegurado.Y tú en cuartel, de pueblo acompañado, Que exige en ti su joven aventura.
Dionisio RIDRUEJO
ESPERANDO LA MAGNANIMIDADDE NUESTROS COMERCIANTES
SIMPATIZADORES Y FAVORECEDORES.
Pu Nues Viete eon | Nu canza ee ap más triun de Es Ya no ha ;Nc No h aire nas e Ni al ho explo paraj La noles elevei boea cámai tros ¿ las q y ve dillo. ' cesári arena mient corea:
La cio el una e que s abril VÍscer los m canal su ap rico.
Es filtra¿ doras, gías y teras
Pueblo de España: Nuestra unidad es la unidad de la Victoria- Que nada tiene que ver con las falsas unidades de la paz.
Nuestra unidad es la unidad- alcanzada en la guerra. Que nos hace apretarnos en Falange cada vez más franca y férrea. Y aunque el triunfo corone las sienes nacionales de España no hablemos de paz'
Ya lo dijo el Caudillo: La guerra no ha terminado.
No! La guerra no ha terminado. No ha terminado porque ya en el aire de Esnaña sólo suenen campanas en vez de sirenas.
Ni porque los fusiles marchen ya al hombro en paseos de instrueción. O en desfiles de apoteosis triunfales.
Ni porque los o dos descahñsen de explosiones. Y los ojos, de otear parapetos y alambradas,
La guerra no ha terminado espaholes! porque nuestras naves sólo eleven sus cañones a las núbes, la boca muda y sin proyectil en la recámara.- Ni porque feposen nuestros aviones de su fatiga de águilas que supieron mirar cara al sol y vebeer. Ni porque nuestro Caudillo haya alzado su máno como un cesáreo gladiador victorioso en la arena de España y'*del Mundo mientras elarines, flores y vítores corean su triunfo universo.
La guerra sigue. Sigue en silencio en frente blancoe invisible. Y una guerra tan implacable como la que sufrieron-hasta el primero de abril nuestros cuerpos y nuestrás vísceras.- Es la misma guerra: sonlos mismos eñemigos. Es la mismacanalla que ño se resignará hasta su aplastamiento definitivo. Histórico.
Es cierto que ese enemigo ya nofiltra; por las fronteras ametralladoras, gases, obuses, aparatos, cirugías y víveres, pero, porque las fron-teras ¡son nuestras! Las conquis-
por Giménez ('ABALLERQtamos con nuestras bayonetas ybombas de mano. Y las eerramosdefinitivamente: sin necesidad deaquellos Comités ginebrinos ño-in-tervencionistas.
Y es cierto que ya el enemigo noazuza ni envenena a sus antiguashordas. Pero es porque esas hordas,en nuestro poder, comiénzan a de-jar de ser hordas. Porque los ro-jos, prisioneros de ahora como an-tes tantos otros van siéndo porhosotros uno a uno recuperadospara España, y desintoxicados, vanhaciéndose otra vez españoles her-manos, y aceptando con delirio ysed de revancha la gloria de com-partir nuestro destino incontenibley próximo.
Ya el enemigo ño puede pasar ar-mas de muerte para los cuerpos, nipropagandas de veneno para las al-mas de todas las masas popularesa las que engañó y asesinó durantetres años imborrables. Terribles.
Pero su plan de destruir a Espa-ña no se ha suspendido. Su guerracontra España no se ha interrumpi-do. La guerrá sigue. Sigue en unfrente invisible. Intentando romperla unidad de nuestra victoria. Rom-per la falange cerrada de los triun-fadores,
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Un día. tienta aún ese enemigocon invisibles y secretos tentácu-los el apierar sobre las viejas guar-dias de José Antonio. Para ador-mecidas robarles otra vez el ca-dáver. Y explotarlo una vez másentre las gentes. ¡ Ellos, los que leasesinaron! ¡ Ellos, los :que le difa-maron ! ==
Pero el espíritu de José Antonioe: inmortal. Y está ya ineorpora-de a la Victoria. Su espíritu se hi-zo ya substancia nacional y reen-carnación española en el símbolodel Caudillo. Y todas las etapas an-teriores de este Movimiento desdelas iniciales J.O.N.S. : han cuaja-do ya en úna Falange Nacional, to-talitaria, combatiente y vietoriosa.bajo Franco! ¡Unidad de viejas yhuevas guardias!
Otro día el enémigo busca el en-tubiar los viejos pózos históricosdel earlismo y la lealtad milenariade Navarra.
Pero Dios se ha hecho lema dehuestra victoria. La Patria, ¡la he-mos reconquistado! Y el Zar elque había de regir absolutamente,sin relativismos . constitucionalesha entrado bajo el símbolo absolu-to de Franceo ¡en Bilbao y en Ma-drid! Con la boina roja y cuestelo que eueste. Los Gremios se cua-jaron en Sindicatos Nacionales. Ylos Fueros, en Pan y Justicia.
Y de las dos Navarras la espa-hola y la afrancesada la de Sanehoel Mayor, fundador de Castilla, yla de las Casas de Albrit, de Evreuxy de Foix , de las dos Navarras históricas; la que fué cabeza de leónespañol y la que después, fueristay separatista, se hizo cola de ratónfrancés, ha pasado a encabezar e in-tegrar nuestro Movimiento la Na-varra cabeza de león, cabeza del 18de julio, en el Norte; Ja Natvarra deSancho el Mayor y castellana; laNavarra antifraneesa, totalitaria ynacional. La Navarra requeté.; Re-quetespañola !
Otro día el- enemigo busca el te-clear las viejas notas melancólicasy románticas de aquel piano fin desiglo que se llamó la Restauraciónsnovista. lLa que entre chisteras,vatillas, banquetes, tubos de quin-qué e interpelaciones parlamenta-rias nos hizo perder Cuba y Filipi-nas. -Y derramar un río de sangreen un mezquino protectorado ma-rroquí. Y transformar a España en una nación intelectual y progresista, con una juventud anti-impe-rial-socialista y de la F. U. E:
Perc los lerítimos herederos de aquella dinastía, tan mal ntilizada entonces son hoy soldados deFranco , según declaración pro-pia. Y la aristócracia de aquellaépoca (sólo en contadas excepciones) quedó con nuestro Movim1feu-:
to: renacionalizada, restablecida sublimada! Con aportaciones maravillosas de sacrificios. No el menor de lós cuales ha sido el aceptar la realidad de un poder rector firme y auténtico que evite de nuevo un 14 de abril, un 16 de febrero; un ludibrio_ y asesinato de títnlos nobiliarios, de mansiones señoriales prostituídas y de riquezas eentenarias, tradicionales, destruídas para ciempre. Entre la desuelta oligarquía aristocrática de los viejos tiempos monárquico-liberales, y entre la revolución marxista de las masas, consecuencia de aquella olicarquía, estos nobles españoles saben ya Jealmente cuál ha de ser su exacta función histórica. Y por .<0 han sido los primeros en dejar desalquilados a todos los abogados que traten vulgarmente _<lo hacer cobre pergaminos de rancia y sacra España nobiliaria un ¡md_e.sth político $ un bufete de conspiraciones.
Todo el que hoy intente la menor maniobra contra Franeo y su Falange lo saben los más altos y los más bajos de España ocupa (:l puesto que ayer ocupó el rojo. El enemiro.
Otro día las fuerzas hostiles buscan el socavar los fondos proletarios que aun quedan sin reruperar todavia.. Busca el tocar la vieja canción de lo $ocial en muestras masas.
Pero: el enemigo no sabe que en la España victoriosa, hay tres categorías de hombres: Los que han vanado, los que no hicieron nada por ganar y los que nos atararu¡1.
Y los.que han ganado esa Falange nacional de combatientes hecha Ejército férreo rodea al Caudillo con sus bayonetas. Y el resto de las gentes: no podrán ascender hasta el Caudillo, señero de esa je rarquía >upremasde la nación. más que a través de deberes ¡y ho de derechos! A través de servicios ¡y no de reclamaciones! A través de trabajo ¡y no de huelgas. Tras una dienificación militar v nacional. que les haga de nuevo adquirir el ttulo de españoles, que perdieron h su rebelión y en su derrota.
Utro día el enemigo trata cou ar-
tilugios misteriosos y capciosos, allende las fronteras de intervenir en nuestro catolicismo. Y habla de restaurar nuestras iglesias. Y traer, por ejemplo/a Avila, el culto de Santa 'Teresita del Niño de Jesús santa francesa junto al de Teresa la española. Y dice que nuestro Movimiento es pagano. Y nosotros ateos y desereídos.
Pero ya en España, y hasta en la reciente España liberada y levantina, están reedificando iglesias, como en la Edad Media eristiana, con el dinero de unos y la aportación personal de otros. En arranques de fe y de contrición. Y nosotros sabemos todos, lo .que es ser ya misioneros y no políticos de nuestra santa relición. Y sabemos los hombres de Franco, ganar almas para Cristo. Las. mismas -que perdieron aquellos que nunca debieron dejar d.. perderlas.
Unidad de Cataluña y Vaseinra con España
Otro día esta filtración invisible de ese enemigo incansable, insidioto, tenaz y a muerte llega hasta Catatúña. y hasta Vasconia. Y vuelve a tocar el arpa romántica de los divorcios y las autonomías y las lenguas ernáculas y las leves particularistas.-.
Pera Cataluña y Vasconia saben dos cosas - que no las hemos Tecuperado en uras elecciones amistosas, zaragateras y femeninas. Que las hemos reconquistado como los hombres.
Y saben qué infinitos catalanes y vascos han derramado su sangre por nuestra España: Una, Grande y Libre.' Y que con esa sangre preciosa, mártir y abnegada, han redimido todos los viejos pecados de sus padres. Y han nacionalizado para siempre a las eternas tierras cspañolas de Vaseonia y Cataluña.
Y en fin otro día es el eñsavar adormidoras sobre el espíritu de nuestros combatientes y soldados. pintándoles con colores enternecedores la vuelta a un hogar de idilio, a una cama de donde no se harten de dormir. a una novia o una esposa que no les separe punca los brazos del cuello, y a una ofictna donde se pongan manguitos; se
pasen leyendo el periódico todo el día, e inundando de colillas todo el suelo!
Peroel enemigo no sabe una cosa. Que apenas sonado el último -tiro, Corrió por nuestros combatientes una hoticia que ignoro su veracidad: el necesitar Japón voluntarios contra el comunismo y la democracia. Y que nos vemos negros para calmar a-:esa legión voluntaria y de la muerte, a la flor de nuestra cente de combate presta de nuevo a morir.
El enemigo no sabe que nuestro Ejéreito victorioso se hará de una parte milicia o guardia de nuestra civilidad conquistada. Y de otra parte, una nueva fuerza expansiva aun superior a_ la que hemos utilizado para esta.victoria. ¡Oh vieja canalla enemiga! Aprende de una vez: ¡que ya nuestro Ejército no se aburguesará! Ni se hará jamás covachuelista, pacifista, choeho y: abogadil! Que nuestro. Ejército se acaba de ejercitar en pegaros la más histórica: paliza del mundo y es por eso. ¡Ejército! ¡Y qué *Ejército!
No 0%s? ¡No oís las nuevas bofetadas imperiales que ya suenan en el aire?
¡Unidad! ¡Unidad!
¡Sed cautos, españoles! Precavidos, hermanos míos!
La guerra no ha terminado.
Si no oís los disparos, sabed que los disparos siguen. -Y Jla preparación de minas subterráneas para volar cuernos de defensores y almas de edificaciones.
Sabed que el frente es hoy invisible. Yse llama intriga. Se llama murmuración.
Murmuración e intriga en lo político, en lo social, en lo religioso, en lo nacional.
¡Pera no temáis! Todos los antros y nidos de murmufaciones e intrigas, serán aplastados por nuestra artillería. Seguimos, firmes y alertas en las avanzadillas. Los dispositivos están montados. El plan es perfecto. Y la hora H de nuestro avance, quizá ya está a punto de sonar.
Franco-va a nuestra cabeza. ¿No le oís ? Como siempre, sereno. Como siempre, sonriente. Como siempre, implacable en su tesón triunfal. Como el galaico Santiago en caballo (Sigue en la página 21)
"
Ataban de bandear a gloria de marzo veintiocho de marzo todas las campanas de la ciudad. Todavía hay bullicio en las calles y en los balcones está el júbilo bicolor de las banderas. nacional-sindicalistas. Un joven, :en su cuarto del hospital, vela sobre una euarti: lla, la pluma eorriendo.
Mi querido don Fulano (Aquí Don Juan o Don Pedro o Don Antonio, desde luego un señor eon más de cincuenta años en el alma, prudente -y gordo, aunque es fácil que tambén sea delgado, pero menos).
querido don Fulano: Contesto 2.su carta una noche en qué nos une el gozo a los españoles. Esto es lo que nos une: el gozo, porque todavía quedan gentes que no han sufrido, que han sabido' esquivar el dolor con un regate hábil, único regate que los relaciona con la dureza:de un juego descorrocido para su pobre cuerpo de habitantes de café; acabo de retirarme al hospital, en pleno campo y oigo a lo lejos:como simulan los cohetes otras plosiones que no me sonaban tan lejos hace unos meses. Traigo el corazón contento, repleto de una seria alegría que hasta hoy ha fido inédita para mí. Y su carta, mi querido Don Fulano, me ha hecho reir. Ve usted, ahora sí que le doy la razón somos una juventud irres*tuosa. Pero usted me lo perdona, porque sabe que en el fondo no soy del todo malo. Me: figuro, amiguito, vuestra satisfacción explosiva : hemos ganado la guerra y volvemos, dichosamente, a la normalidad. Bien muchachos, os habéis portado como nunca lo ere. Pronto podriés retornar a vuestros estudios y particularmente tú, que sientes verdadera voeación por la cárrera que elegiste, con qué gusto vas a olvidar entre los libros estos días amargos de la guerra '
Yo sé como le vá a sorprender lo que le digo: no siento, mi querido Dor Fulano ninguna gana de olvidar la guerra. ¿ Verdad que acaba usted de fruncir las cejas? Y ahora las vuelve a fruncir y hace un pucherete enojado y deja la carta sobre el tapete de la camilla y mira mi retrato para prenderme en efi-
Por Rafael GARCIA SERRANOcie. Perdóneme Don Fulano, tengo el humor levantado. ¿ Qué es es-tc invisible.que nos separa a losdos, tan buenos amlgos a pesar dela diferencia de años? Muchas veces pienso que tanto wusted eomoyo. pertenecemos a dos generacio-nes de choque. Usted y los suyos ven morir lo que en su juventud fuébandera y novedad alzada por sus abuelos. hbertad, ¡gualda¡l fraternidad. Nosotros, jóvenes, hemos matado eso que ven ustedes morir; he aquí por qué nos separa un cadáver que apesta. Ustedes quieren olvidar su desgracia y nosotros no queremos olvidarla, que es nuestra gloria y el triunfo de lo que creímos artículo de fe, al día siguiente dc abandonar 'los consejos que ustedes nos daban, para razonar con el eántico del corazón.
Con mucho gusto vuelvo a esa ficticia normalidad de los apacibles guardias paseándose, de mi cartera de estudiante, llena de papelotes. ..
Pero qué angustia mirar a mi alrededor en el primer día de aula y ver los amigos que faltan. .Les eamaradas que ganaron este día y aquellos amigos de enfrente que quisieron ganarlo sólo para ellos. la normalidad. áparente hemos de reformarla por. razones de estética y enseguida, mi querido Don Fulano, vendrá la revolución. Digo vendrá porque uústedes siempre la han visto llegar en un vagón de mercancías, desarrapada y pintoresca. La revolución no es pintoresca: es terrible y en estos tres años han tenido tiempo de convencerse, La nuestra también es terrible porque deshace todas las convieciones de usted y sus amigos. Don Fulaño: permítamé en esta noche de gloria que le falte al respeto nuevamente. Don Fulanró, acabada la guerra vamos a destruir la normalidad que usted rememora y recibe con palmas. Créame, no merece la pena haberse batido durante tres años para restaurarla. La vamos a deshaeer y solamente tres días al año la dejaremos suelta por la calle: su normalidad la de usted y sus amigos, mi querido señor Don Fulano será la grncn de nuestroscarnavales.
Preparo el ánimo para los estudios, que naturalmente se me apare-cen difíciles como una posición inexpugnable. Ya la asaltaré; sin ol-vidar los días duros de la guerra, antes al contrario, apliearé toda mi voluntad a perfeccnonarme en la sa-biduría para ayudar a mis compa-triotas a recordar diariamente queen los campos de Espana quedó enterrada una generae¡on beróica.
Usted conoció a Eduardo, aquel muchacho alto, moreno, tan simpático en su gesto decidido. Lo asesinaron en Madrid. Y a Albinelio se lo presenté la misma tarde en que acabó su licenciatura en derecho ; cayó en los montes de Vizcaya. Miguel un maestro que le hablaba siempre de teatro, salió al frente malcurada su enfermedad y la convalecencia entre los tiros lo mató. Y a tantos, José y Manolo desaparecieron y nada se sabe de ellos. ¿En qué cuneta estarán enterrados? ¿Quiere usted que olvidando la guerra, olvidemos con ella a estos magníficos camaradas Mi buen Don Fulano: si yo sé que le saltan las lágrimas al leer sus nombres y qué envidia los veinte años, ya bajo tierra, que les permtieron luchar ceara al sol. ¿Por qué no dejar que aleemos nosotros la Patria que ganaron al perder la vida? Somos: demasiado jóvenes pero ya no nos falta aquella experieneia que ustedes. hicieron famosa: Ante la muerte se aprenden cosas que ustedes ignorarán siempre.
Espero poder abrazarle pronto y pedirle personalmente perdón que solicito con el fin de está carta. Mi salud mejora.
Brazo en alto.
X XX
De cada hospital de España sa1ió una epístola como esta a la caza de un señor Don Fulano cualquiera. El señor ese la abre ahora y el joven aguarda. la respuesta. Cuando la reciba la romperé sin
-., abrirla. Diga que s o que nó el jóven va á obrar de idéntica manera.
Rafael García Serrano. Colabomcxoneu Jorge Manrique.
Esta guerra nuestra. csta guerra de España coutra toda la anti-Españade afuera y también de adentro, esa anti-España que-se nos había infiltradocautelosamente y nos roía la entraña misma con sús traiciones y sus injus-ticias, con sus crímenes contra la Patria y sus delitos contra sus nijos, con-tra muestra histórica grandeza para sumirnós en el desprestigio y hasta elridíeulo y contra nuestra altura de vida para someternos a la miseria y lapequeñez, la mezquindad y los odios, es por sobre todas las cosas la guerradel pueblo, de todo el legítimo pueblo español,
Es la guera nacional, la de la liberación y la de reconquista de tedoJo propio en el orden internacional y en el orden interno de la Patria. Porcso pueden darse en elia ejemplos magníficos, soberbios, emociónantes co-mo el de esta carta de una madre, de una de esas heroicas mujeres de Es-paña, que escribe con un inmenso fervor y un incomparable heroismo, ex-presando y brindando la ofrenda más sagrada para una madre, la de sushijos, la carne y la sangre de sus entrañas, para que sobre su dolor $ su sa-erificio sublime, esta Patria nuestra edifique de nuevo su grandeza.
Carta que merece ser grabada en piedra, como un monumento más parainmertalizar nuestra guerra,
Héla agní, con 'su admirable sencillez y su inmensa ejemplaridad:
A manos del general Franco ha llegado lá siguiente carta, firmada porMaría Hidalgo Ruiz, residentc en la Argentina. No necesita comentarios.
...
*Soy la madre de Luis Ramárcz Hidalgo, soldado de Legión. Mi hijo,de dieciocho años, salió para España a defender la santa bandera de nues-tra Patkia. Murió en el día del socorro heroico a Teruel. Otro hijo me que-da, de diccisiete gños, llamado Fernando, y, salc en el barco hacia Españapara ocupar-n la Legión, si es posible, el puesto que con honor cubrió suhermano. . Le he dado un beso para que lo ponga en la tierra. santa quecubre él currpo de aquel hijo querido, y sí no da con el lugár; que bese laspiedras de.Teruel. Si ha de morir también, que Dios sea loado. Sola enel mundo me quedaré, pero con orgullo de haber dado lo mejor que tenía parami Espaiq.'
la carta tiene esta posdata :
* Mi hijo hará entrega en el Cuartel General de Su Excelencia de unoheque de 32,000 pesos argentinos, producto de una finca que vendí en ho-nor de 7Í¿vh:_m Luis. Me queda otra finca de parecido valor; sí muere mihijo Fn"1ffnrlo, la venderé también, y yo misma <ré a llevar su importe aSu Ercclencia y a Ingresar después en-un convento de mi querida España.
de deeadencia, no había de ser larazón la que regúlara nuestra ma-nera de ver las cosas, sino la Histo-ria. Impulsos de afuera y no ac-tividad de dentro.
Para la dirección del Movimiento decir que, como en todas las épocasÍ:venil, que había de eulminar enfundación de la Falange Espa-Bola, se contaba con jefes dotados deamplia visión del mundo y ardo-roso empuje combativo.
Onésimo Redondo y Ramiro Le-desma Ramos eran dos hombres, ennienes las núevas ideas se confun-Ían con una' cultura extraordina-Fia y una magnífica voluntad detriunfo. Hubieran sido valientesdirectores de la arrolladora orga-nización. Pero en el momento de-Císivo se presentó José Antonio Pri-mo de Rivera. Es admirable el jú-bilo y la unanimidad de pareceres,que el nuevo Capitán produjo en?u voluntades de aquellos arries-gados iniciadores de la actual ge-neración. Giménez Caballero exela-mó al saber la noticia que aquelloera algo magnífico, insoñable. ¿Québabía en José Antonio? Una ju-entud encendida de amor a Espa-l¡, una cultura atrayente y exqui-Sita, una convepción cristiana delMmundo, una simpatía irresistible acia el pueblo sano e irredento,por fin, envolviéndole todo en au-reola de garantía y prestigio, nobleza y brillante bistoria militar revestida de laureles y rondecoraciones.
Cuando José Antonio emergió a la luz de la vida pública, lo encontró todo'listo para eél triunfo y el medro nal. Sin mueho esfuer. zo hubiera. logrado brillar en el eandelero. En el aspecto político en el social, en el intelectual. Hubiera sido un gran hombre. Pero José Antonio reflexión e indepen.dencia hizo un alto en su carrera. Observó que .aquellos altos puestos que le brindaban únicamente con detrimento de su dignidad podía aceptarlos. Tendría que modificar su concepción de la vida para que eneajara perfectamente enaquel marco estrecho, tortuoso y complicado que encuadraba la His-- toría contemporánea de España. Es
¡ Quién se resigna a semejante es-elavitud? Modifiquemos la Historiay ho nos dejemos llevar por ella eo-mo esclavos. Hagamos historia pe-ro no seamos hechos por ella. Loprimero es providencia cristiana; lo segundo fatalidad oriental.
Parecido fué el pensamiento queimpidió a José Antonióo a no querer militar en ninguno de los existentes cuadros de combate, sino aabrirse eamino por rutas inéditas de ver y sobre todo de actuar.
La impresión que el mundo leprodujo al despertar en su alma laconciencia nacional está bien elaramente expuesta en el Diseurso de la Fundación de la Falange.: Fa
Así resulta que cuando .nosotros, los hombres de nuestra generación, abrimos los ojos, nos encontramos con un mundo en ruina mo-ral, un mundo escondido en todasuerte de difereneias; y por lo que nos toca de cerea, nos encontramos una España en ruina moral, una España dividida por todos los odios y por todas las pugnas. Y así, nos-otros hemos tenido que llorar en el fondo de mnuestra alma euando recorríamos los pueblos de esta España maravillosa; esos pueblos, en donde todavía, bajo la capa más humilde, se descubren gentes dotadas de una elegancia rústica que no tiene un gesto excesivo ni una palabra ociosa, gentes que viven sobre una tierra seca en aápariencia, con sequedad exterior, pero que nos asombra con la fecundidad que estalla en el triunfo de los pámpanos y de los trigos. Cuando recorría-
mos esas tierras y veíamos esas gentes, y las sabíamos torturadas por pequeños caciques, olvidadas por todos los grupos, divididas, envenenadas por predicaciones tortuo-
sas teníamos que pensar de todo ese pueblo lo que él mismo cantaba del Cid, al verle errar por campos de Castilla, desterrado de Burgos: ¡Dios, que buen vasallo si oviera buen señor! Eso vinimos a encontrar nesotros en el movimiento
que empieza en este día: legítimo señor de España, pero un señor como el de San Franeisco de Borja, un señor que no se nos muera. Y para,que no se tios muera ha de ser un señor que no sea al propio tiempc esclavo de nn interés de grupo ni de un interés de elase , Ei problema nacional y el problema económico fueron las dos grandes preocupaciones de José Anto-nio. Que España fuera España. que dejara de ser Franeia y no empezara a ser Rusia. Que volviera a su unidad de destino en lo Universal. En todos sus discursos se advierten bien marcados estos dos rasgos del pensamiento de José Antonio.
Algunos se escandalizaron de que se diera tanta importancia a lo económico, a lo social. Como si quisieran tildar al nuevo movimiento- de poca preocupación por los intereses espirituales. Ignoraban los tales que sin el arreglo de la cuestión social no se puede edifiear ningún edificio sólido de Nación oecidental y cristiana. Precisamente esa inquietud avasalladora por armonizar a España socialmente fué uno de los gestos más originales, más simpáticos y cristianos de la juvenil e impetuosa organización.
Por lo demás la concepeión eristiana de la vida, que José Antonio recuró imprimir siempre a sus faanges es indiscutible. A ella hace alusión en todos sus discursos. Nada más hermoso y revelador que aquellas palabras: Solo se respeta la libertad del hombre cuando se le estima como nosotros le estimamos, portador de valores eternos; cuando se le estima envoltura corporal de un alma, que es capaz de condecorarse y de salvarse .
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No me preguntéis como fué. Sólosé deeiros que, en un momento desuperación, logré despojarme de lamateria y sentí un aleteo que meremontó a los Jueeros.
Lo- luceros son mundos perfee-tos; allí todo es transparencia, to-de -es pureza, diafanidad d todo.Son los lugares desde donde losCaidos hacen poéticamente la últi-ma guardia y se despiden de la tie-rra para colocarse luego a la dies-tra de Dios Padre.
Cuando yo subí a ellos cabalgan-do sobre el espíritu que aleteaba.en sus arcadas triuntales, arcadasque tan sólo las traspasan los queen la tierra hicieron ensayos paraamar infinitamente, me esperaba laGuardia Eterna. La guardia de losque en el altar de las trincheras,ofrecieron en holocausto al EternoHacedor la vida de sns cuerpos pa-ra purificar las de sus almas.
La Guardia Eterna es tan per-fecta, se adentrá tanto en el espíri-de los que aún estamos apegadosa la tierra, que no necesita dar lavoz de ¡Alto! La coneiencia mismase envrarga de contestar sin-ser inte:rrogada.
¿-..? Soy un soldado de la Mi-licia de la Tierra.
¿-..? Mi espada es la pluma, micampamento las cuartillas y comobuén español, mi quijotada. la deadquirir en la tierra un certificadode locura pará subir a curarme alas regiones ancestrales.
¿... ? La sangre que vosotros de-Framásteis en los campos de batalla,era fecunda y la tierra al ser porella regada, promete nha epifaníaal rayar del alba cuyos primerosrayos cual flechas de amor divinolos sentimos ya en el fondo del al-ma.
¡...? Allá abajo, por cegueraancéstral, se llama muerte a la quees Vida y vida á la que es Muerte.Yasí resulta que, muchas madres,muehas esposas y muchas novias,Viven entre la Muerte, llorando lapara ellas inexistencia de vosotrosQue empezásteis a vivir cuando dis-teis-el ádiós a los parapetos parahacer guardia eterna en los lueeros,
¿...? La guerra, sigue siendosanta porque con ella se persigueun algo que está basado en las doe-trinas del que-murió en las alturasdel Gólgota. Cada proyectil es unrayo de JUSTICIA, eada descan-so un momento de perdón, cada, ad-vertencia un pedazo de PAN. cudaarenga un concepto de PATRIA ycada trinchera una tumba de már-tires.
los que sobre ellos hacen guardiasin relevo. _ Pero es tal la grandeza., -la gloria y la majestad de que sehallan revestidos que, enmudete lalengua al querer interrogar.
Por eso en vez de interviuvar. hesido interviuyado y en lugar de re-flejar en el rostro la satisfacción ín-tima de haber arrancado algunafrase célebre a los Ausentes, ventotímide y lleno de temores por sien el frente de Incha por Dios y porEspaña o en mis trincheras socia-les por la Patria, el Pan y la Justi-cia, no hice lo suficiente.
te los excomulgados
¿-..? Para los que comulgamos todos los días eon el Credo Azul,vuestra desaparición,*es una +trans-firuración que; por denmominarlade alguna manera comprensible anla llamamosAnsencia Pero bien sabemos quevosotros estáis a nuestro lado pe-rennemente. Por eso, en los mo-nfentos solemnes, al pronunciar unopor uno vuestros nombres, con elbrazo en alto quiere decir aspira-ción divina, contestamos . todos:¡Presente!
Lector; no me preguntes comofué. Sólo sé que en un éxtasis deazul infinito, me trahsporté a losceros para hacer una interviú a
Ay de losque siguen su vida cómoda y a véces de crápula mientrassus semejantes padecen privaciones y entregan generosamente gota a gota la sangré toda de sus venas para redimir a España' Poned las manos sobre vuestras conciencias,sabed arrepentiros a tiempo y des-de lo más profundo de vuestro corazón aprended a decir Arriba Es-paña que es grito de Cruzada y an-sia de que España viva alta, muy alta.
Létra y Música por Ramón Morlá
Vibran todas las campanas, Los clarines por la gloria ; ¡Brazo en alto, Camaradas' Saludemos la VICTORIA.
Es l¿: gran España Nueva, De patriotas que han moldeado, Con la sangre de sus venas. Conquistada palmo a palmo.
De laureles coronada. Héroes, Santos. Misioneros. vitoreada,
Y de ausentes
Que hacen guardia en los luceros.
'Con la Cruz y con la Espada Del invicto gran Caudillo; Del más eruel fiero enemigo, Ya la España se libró.
Vuelve airosa nuestra Enseña, Las Banderas victoriosas
37Ug', y Flººh8.& ('ill('0 r083$ Del más fúlgido esplendor.
Con inquietudes de Imperio, Abrazada a Cristo Rev, Surge ¡UNA! ¡GRANDE!¡LI
Pan y Justicia por Ley.
Uno: Viva Franco! Todos. ¡Viva! Uno. Arriba España' Todos. Arriba!
Santuree, P. R. 18 de Abril, 1939. Año-de la Vietoria.
(BRE!
Con clarivideneia que la realidad enteramente abona, apuntó el Caudillo más de una vez, las suspicacias y equívocos que podía ocasionar la actitud adoptada por el Gohierno francés de resuelta apoyo
franco, a veces, encubierto otras, «ierto, siempre a los republicanomarxistas de España, marcando un ostensible divorcio, por un lado, de los principios generales del Derechc internacional y, por otra parte, de los sentimientos manifestados por zonas muy sensibles de la opinión francesa, que se daba clara «nenta de la estrecha relación existente entre nuestra Cruzada y la Civilización común a los pueblos de terminado emplazamiento histórico, geográfico y moral.
No era precisamente la conducta serhida por los Blum o los Cot y por otros que no han dejado de influir en el rumbo de la política francesa la más indicada para montar en pie de mutuo afecto las relaciones futuras de Francia y España. La victoria de Franeo no ha bodido por menos de alucinar en los términos previstos a los elementos vinculados al Frente Popular de allá, y 'al Gobierno de París no: le era ya dado hacer otra cosa que tender su mano, en natural ademán de reconocimiento diplomático, al Gobierno indiscutible de la España victoriosa. Ya no cabía opción.
Pero he aquí que cuando todo debía augurar un afectuoso y estable contacsto y conste que para lograrlo, España procuró que no terciase el recuerdo de lo inmediatameénte anterior, el paeto BérardJordana por la erisis de morasidad; al menos harto conocida. y comentaáda. mientras algún hecho nuevo autoriza a tener la superviveneia, sobremanera extraña e inJustificable, de unas relaciones entre el Gobierno francés y los rojos de España, más ilegítimas e incomprensibles aún que en el perodo mismo de la guerra.
Protección a los separatistas 1"ascos
Aludimos a la protección que, se-
gún tedos los testimonios y referen-cais, encuentran muchos refugiados: vascos, en lugares próximos. a lafrontera, por parte de las autorida-des-correspondientes de la repetidaRepública. Protección que ha llegado a extremos de tal naturaleza,que la Prensa nacional se ha visto.en la necesidad de tovar el delicadísimo tema, formulando una protesta que bien puede cifrarse en un ¡Hasta cuándo...? cadr. impaciencia.
de justifi-*
Adviértase que los favorecidos con esa -protección son rojos val-ga la expresión por partida doble . va que colaboraron con losComités revolucionarios de Madridy de Barcelona, porque el triunfo. de éstos: implicaba la independencia de la región que ellos trataron de envenenar con las toTinas de un nacionalismeo completamente absurdo, dados todos los puntos de vista. Y esas provincias españolas que los rojos llamaron inventando el vocablo ** Euzkadi , son precisamente las que tocan a cierta parte de la raya fronteriza. . Este punto, sumamente neurálgico, queda señalado con algún certero comentario periodístico, así concebido e insinuado: * En los momentos pasados de crisis internacionales, se decía que Francia guardaba a estos conocedores del país como eventhales gnías en las provincias vascas españolas"'. Pero es que. en todo ceaso. y para no pecar de suspicares, bastaría con que encontrasen en Francia favorecedores y emúresarios los separatistas vascos, para que España, con erisis internacionales o <sin ellas, se alzase en reclamación de estrieta justicia, contra el Gobierno de un país que ny puede de ninguna manera extende sa pabellón sobre los que, no contentos con soñar una España roja, deliran, además, en pesadilla tenebrosa e imbécil, con una España desmenbrada y rota.
Parece absurdo y no lo es que volvamos a manejar argumentos que perdieran toda su actualidad, cuando el triunfo' aplastante
de Franco dió al traste, natural-mente, no ya con la guerra armada,sino con su dialéctica peculiar ycon su propaganda. Pero no pode-mos preseindir de llamar la aten-ción de las gentes sobre el hecho in-cuestionable de que determinadoselementos directivos de la políticafrancesa y auñ de su propio Es-tado , asistan ;¡todavía ! , delmodo que sea, a la veneida revolu-ción que los rojos españoles pro-movieron, traicionando a su Patria,para dar libertad a dos regionesfronterizas con Francia: la vasea yle catalana.
Y algo más hay que subrayar: lacoineidencia/de esa protección a losrefugiados Vascos con el recrudeci-miento de cierta campaña de pren-sa, mediante la cual se trata de im-presionar al mundo gn pro-de losseparatistas que sufren condena en prisiones nacionales, por su proba-de actuación en la guerra civil y-en la revolución marxista. No haypor qué ocultar que algunos de esosencarcelados previo juicio sus-tanciado con sentencia firme , sonsacerdotes: circunstancia que nopuede ser considerada -sino en fun-ción de las culpas contraídas, en lotemporal y civil, por quienes trai-cionaron su propio ministerio y sucondición de españoles, sirviendoconsignas lanzadas. por los enemi-gos de la religión y de la Patria. Deesta Patria española cuyo NuevoEstado, nacido de nna Cruzada, es-tá reconocido por la Santa Sede.
Deshacer los ecuívocos en queaparecen eomplicadas las más tur-bias intenciones; purificar el airede toda malevolencia; quitar cual-quier ocasión de nocivas confusiones; esclarecer el dudoso coneepto de esa hospitalidad a que tanabusiva interpretación dan las au-'toridades francesas, es cosa que primordialmente interesa resolver al Gobierno de la República francesa si quiere y nosotros, a nuestra vez, no lo queremos .dudar -. mantener, auténtica y limpiamente, las relaciones amistosas que hay derecho a esperar, desde el día mismo en que un Embajador salió de París, con bien elegida aureola de (Pasa a la página 16)
El famoso eoronel Lister, organizador y jefe de las brigadas internacionales y principal peligroso, teniendo en su conciencia el pesodel asesinato de tantas víctimas ino-centes, se había refugiado con su familia en Francia, en Chatillonsur-Loire, donde residía. Pareceque ahora, Lister y su familia, han abandonado hace algunos días y en circunstancias hasta hoy misteriosas su forzosa residencia, hacia un destino desconoceido. La prensa Francesa de izquierdas guardó un absoluto silencio con respecto a esteasunto, pero ciertos periódicos de-rechistas denunciaron la precipitada huida del coronel y fué abierta una información. La pelicía francesa, prevenida demasiado tarde para impedir la marcha de Lister y de su familia, parece suponer que los fugitivos lograron embarcarse a bordo de un buque con destino a Méxjico: Pero la opinión pública está muy impresionada por esta extraña desaparición y no puede cómprender que un hombre tan peligroso como Lister haya sido tan poco vigilado.
Algunos confusos detalles de la desaparición de Lister recuerdan singularmente la de Lydia Grozovsky, acaecida el año pasado en análogas circunstaneias. Detenida en París a petición de los investigadores suizos, el agente de la G. P. U. Lydia Grozovsky fué acusada de complicidad en la muerte del exagente soviéticdd Ignacio Reiss, refugiado en Suiza, ejecutado por orden de Moseñ. Puesta en libertad provisienal aunque vigilada * por la policía francesa, logró huir en un coche proporeionado por la/ embajada de los Soviets. Recordé-mos además que en este obscuro negocio la policía francesa - obligó a la justicia suiza a cerrar su instrueción sobré el asesinato de Ignacio Reiss.
Y ahora, otro gran criminal refugiado eh -Francia, aunque vigilado, encuentra el medio de desaparecer eon toda su famiia, sin dejar rastro!
El coronel ' Lister, jefe de las brigadas intermacionales, era responsable de muchos asesinatos cometidos por los rojos de España.
Por eso mismo era. extraordinaria-mente estimado por los soviets, ins-piradores de estos crímenes.|A pro-pósito de esto. es interesantísimo notar que la prensa de | Moseú(*Pramda del $ de abril e Iz-westia del 9 del mismo mes) dió la noticia de que el GeneralísimoFranco iba a pedir al gobierno fran-cés la extradicción de Lister a cám-bio de un diputado franeés detenido en Alicante. Los periódicos soviéticos creían que las autoridadesTfrancesas estaban dispuestas a sa-
tisfacer esta petición y poner a Lis-ter en-manos de la justicia españo-la. Manifestaban su indignacióna este respecto y la necesidad de in-tervenir en dicho asunto.
Una semana más tarde Lister. apesar de la vigilancia de la poli-eía francesa, huía con toda su fa-milia.
Una vez más, ha operado la G.P.U.
...Cuando llegó el momento,contra las cinco puntas de la estrella,emblema de tiranos de las hordas soviéticas,se alzaron en España yugos cruzados por sus cinco flechas,las cinco letras de Deber y Duelo,los cinco dedos de la mano abierta,y del Hijo de Dios las cinco llagasy el manojo de rosas de la ofrenda...
Febrero 111 Año Trinufal, Buenos Aires.
Valencia: El Desfile de la Victoria. Fotografía tomada desde un edificio cercano a la Tribuna del Caudillo, desde donde se conte mplaba esta compacta muchedumbre aclamandoó al Caudillo.
30 de abril, Buenos Aires, (Por el JefeRegional, Rafael Duyos)
¡Españoles! ¡Camaradas de la España Inmortal"!¡'Sspañoles de la España de Franco!¡Escuchad!
¡Ya rie la Primavera! ¿Ya ríepor Cieto, Tierra y Mar! En todo el mundo millones de almaslo aprenden a cantar...
¡Ya están de vuelta las banderas!y en la mitad de Mayo desfilarándelante del Caudillo con júbilo floral...Y TRAERAN PRENDIDAS CINCO RO(SAS
laY así, como cantó el Profeta,las cinco rosas florecieron ya...¿Primavera de la Revolución Española...?
Las dos columnas del Plus Ultra tiendenel puente claro de la fe imperial...España estaba muerta. La crucificaronlogias y sinagogas. Un imánvenenoso, a sus hombres teníasujetos... ¡No se podía más!
Y la crucificarón y al tercer añocon Dios, igual que Dios, ha podido resucitar.¡Frente a la logia! ¡Frente a la sinagoga!¡¿Por Santiago! ¡La Catedral!
Frente a la hipocresía, la claridad...
.Frentea la división en partidos,la unidad...
Frente a la dispersión sin brú jula,el sentido procesional... *
Frente al puño cerrado de la falsa biblia,la mano abierta de la cristiandad...
Frente al proletariado engañado:
¿Un pueblo con una Justicia Social!
¡Ay, mes de mayo de Madrid!
¡Qué lejos y qué cerca de nosotros estás!
Los españoles de Américate sentimos pasarmes de mayo, con rosas y laurelesdesde las playas de Ultramar...
¿En dónde estás.;¿Duben Daríaon tu verso sonoro de concento y compás?
¿En dónde tú, Ruben, para cantar la eterni(dad de Españadesde tu eternidad...?
¡Españoles de América!
¡Escuchad!
Solo hay una Falange, la que a todosune en un mismo afán...
Solo hay un signo para reconocernos por las (rutas del mundo,¡el Yugo y las Flechas en haz!
Así lo manda FRANCO.
¡Asílo manda quien puede mandar!¡FRANCO! Conjunción de todas las Espa-i (ñas...
¡FRANCO Atador de la Revolución con lo (Tradicional...
¡El Cesar de Jerez y la Santa de Avilacon yn mismo ideal...!
Falange es misionera del amor,de un amor que nos quisieran mixtificar,de un amor para todos, ¡para todos!sin castas... ¡para todos por igual!
¡La Falange de FRANCO contra la políticade derechas e izquierdas, con una ansiedad,la de salvar aquello por lo que han muertolos que al morir, la vida, con la muerte nos (dan...
¡Solo hay una Verdad, la Falange de las (Huelgas de Burgos!
¡Y FRANCO, al frente de ella, jurando has-(ta la muerte ser un Capitán...!
No tiene España otro camino,
m otro En el t: ¡Franc El es, ¡Dios+
Una R sobre u lo defie todo el Franco el temn ¡Por la como a Señor a Señor d Porque lograre ¡Y la1 hasta p en nues y hoy v ¡Se aca ¡Somos ¡Todos en el m: Patria, venimo: Patria, para el ¡Niuna ¡Ni una ¡Sobera para vi Madre ( Islas y ¡España vamos q Un Dos en el ae
ni otro quehacer... ¡Alerta, hispanidad!
En el trono de Isab¿l y Fernando¡Francisco Franco está!
El es, el dueño legítimo. Dispone de lo suyo.Dme ha vuesto en sus sienes la corona im(perial!Una Revolución Sindicalista,sobre un eimiento Tradicionallo defiende y lo exalta.* Franco tienetodo el poder real.
Franco tiene en su espada y en su almael temple de la Majestad...
¡Por la gracia de Dios, R() nuestro ,(omo aquellos que duerme1¿ en el E'scor¿alSeñor de la vietoria en la guerra,Señor de la Victoria en la Paz,Porque con él sin revivir las viejas luchas,lograremos el sueño secular.
¡Y la Falange al frente! con los brazos (abiertoshasta para los que no quisieron entraren nuestras filas, en gañados,y hoy vienen conve ncidos, a laborar y a co7 . (laborar...
¡Se acabaron Io.s rojos y los blancos!¡Somos azules, como el cieloy el mar..¡Todos los (f.spanolcs unidos,en el mismo. fervor misional ... Patria, Pan y Justicia, venimos de recobrar... Patria, Pan y ]ustzczapara el campo y para la ciudad... -¡Ni una sola in fluencia extran¡era¡Ni una sola cesión territorial!,S(¡I¡(»ranía plena,para vivir, para soñar..Madre Castzlla bajo el solIslasy costas junto al mar..¡España para España! Un Dos de Mayovamos a celebrar...
Un Dos de Mayo ha sido el 18 de Julioen el aeródromo de Tetuán...
¡Manteles de la Victoria!
¡Pan y vino de la hispanidad! *¡Brmdcmo.s españoles,porque no ÍZGJG un hoqarsin lumbre, por no hayaun hogar sin pan...
Parque se cum pla lo que sonaba JOSE AN(TONIO,que se está (umplwnd(¡ya..Porque se cumpla lo que soñaba JOSE CAL-(YO SOTELOcuando lo fueron a matar...¡Una España por todos florc( idade Amor y Autoridad...
Porq1t¿» se cumpla lo que soñaba Ramiro de(Maeztu, en la cárcel,C uandu su hermana María lo fue a visitar...¡Porque se cumpla el por qué de la guerra...7Los muertos mandan! ¡No los podemos de(fraudar!¡Una Falange de muertos nos empuja!A1 un paso atrás!Bmuas rojas y camisas azules,mantzcmn el aliento vertical! rHay dos sendas de peregrinaje..-Hay dos rutas benditas que caminar..Una ;por CRISTO! de Zaragoza a C 0mpos(tela...otra ;¡por JOS7 ANTONIO! desde Alicante (al Escorial.
La Victoria es del Mundo, para el mu¡¿d0¡Le regalamos al mundo ¡¿uest¡ºa Paz...
La mano abierta anuncia los laureleszunto a la pompa femenina del rosal...¡Clarines del Imperio, alzad las m lodza,sRube n Darío ¿dónde estás?
Ven junto a mí, Rubén.Ven ¡m¿t0 a mi, para gritar;¡Ya viene el mrt()]o de las Falanges ven(cedoras! marcha triun(jal.. 1!!
¡¡¡Que .suene y resuene tu
(Viene de la página 12)
extráordinario prestigio. puso - su planta en tierra española.
Y a proposito. ..
Motivos más que suficientes tiene Francia para conocer la calidad de los refugiados rojos vasicos n0 que gusta de amparar. Los conoce, sin duda, por los actos de violen¿ia y depredación que han perpetrado con la profusión y en el grado de delincuencia que han recogido las Agencias informativas de todo el mundo. Y-es notorio que el calificativo de indeseable ha sido el menos grave que ha recaido obre la masa de gentes. presidiarias que Francia se creyó en el caso de acoger, Hegada que fué la hora expansiva de nuestras últimas verdades. Del Pirineo transcendió a Francia toda la razón de nuestra guerra, por medio de las bandas fueftivas de combatientes, de facinerosos, de desvalidos, de familias en pleno, con carga terrible de miserias físicas y morales. Cada huída por una u otras razones, constituía una prueba plena y viva de la eriminalidad, o de la impoteneia, o de la infamia, o de la ineficacia, del Gobierno rojo. Los refugiados en tesis general, despertaron terrible alarma, toda suerte de temores, en la población francesa del Midi. Todas nuestras alegaciones en contra del caos republicano-marxista cobraban cuérpo, se '"hacían visibles
Pero cuando ni pensibamos siquiera que todavía rodasen por el mundo los dirigentes de la sección bolchevique en la prensa españo la, nos encontramos en algunos periódicos de París con una carta que Luis Araquistain dirige a Martínez Barrio. Presidénte dice de las Cortes republicanas: de España . Bien es verdad que Juego, en el pro pio texto epistolar, califica a aquéllas de fantasmagóricas. . Pues bien: én esa carta se formula unña confirmación más de todas las vileZas, delitos e irregularidades que la España Nacional denunció al mundo. la monstruosidad del régimen liquidado por Franco era de tal haturaleza que nuestro pueblo se levantó contra aquél. Y muúchos que habían apoyado la República roja, acabaron por reeonocer todas sus táras y estigmas.
En la carta de Araquistain se
pene de manifiesto el trágico simulacro de la legalidad que amañaron unos cuantos desalmados para :cazar democracias, no siempre incautas: más bien, maliciosas... Ne acusa la horrenda realidad, que eP vano intentaran ocultar, de una estáúpida y brutal dietadura comunista , ejercida por agentes dóciles e incondicionales de Moscú, como Negrín y Vayo, dictadores al dictado dice más allá del partido comunista . Se revela el hajo fondo de inmoralidades administrativas, cometidas por: los agentes del Gobierno en el extranJero . Se denuncia el hecho de que altas personalidades del régimen republicano posean sumas
importantes, de justificación difícil, en bancos ingleses y norteame:ricanos . Se pregunta por el em-pleo y paradero de oro sustraído alTesoró nacional. Se justifica plenamente la sublevación de marzocontra Negrín y su cuadrilla...
Nada de esto necesitaba conocer-lo la España de Franeo. Lo sabíade antemano, y por saberlo hizo laguerra, obtuvo la victoria y orienta hoy el nuevo Estado de la paz y del futuro. Pero sépanlo quienes por ighorarlo o por aparentar que loignoraban , ayudaron, protegie-ron, colaboraron en la única empresa de desatar contra mnuestraPatria todas:las potencias del mal, gloriosamente aniquiladas ya...
De cuando en cuando se tropiezauno con gentes que, por las trazas,creen que en España no ha pasadonada. La vida habitual, la seguri-dad plena, la mesa indefectiblemen-te servida, d£ café pletórico de ter-tulias, y hasfa las pesetillas que elBaneo facilita sobre la garantía delo que se dejó en Madrid, o en Bar"_celona, son, sin duda, magníficosfactores expositivos de úna norma-lidad que a nosotros, los españoles,nos enorgullece, y a los que noscontemplan y nos saben les asom-bra. Pero toda esta vida, tan ado-rablemente normal, proyecta un fe-nómeno especial sobre algunos es-píritus. Que es,- precisamente, esede no darse cuenta de todo lo queha ocurrido. Y no meditar un po-co sobre lo que tiene que ocurrir.
Los que crean que la vuelta a lanormalidad total va a significar unpase de libre circulación por la zo-na de las viejas eostumbres, estánen un profundo y lamentable error.
No, señores míos. Las cosas hancambiado fundamentalmente. Y losdeberes de todos nosotros, también.Los gue no se han querido enterrarde esto, que tiene una gran impor-tancia, lo van a pasar muy mal. Es-tá bien j ya lo creo que está bien?que la vida en la nacio-nal sea tan absolutamente normal,que apenas pueda advertirse unadiferencia sensible respecto de laque cada uno de nosotros hacía an-tes de la guerra. Pero es precisoque hagamos las cosas enterándo-nos de por qué las hacemos. Que ela-vemos unas cuantas ideas fijas ennuestro espíritu. Una de las cosasque no se puede hacer, en estos mo-mentos, es ser tacaño. Eso se aca-bó. Sobre todo, en lo que se refie-re a las obligaciones de tipo nacio-nal. Ese óbolo tan insignificanteque hay que dar cada quinee días'para Auxilio Social, debe parecer-nos, no una incomodidad, ni unsacrificio la palabra es ya pordemás desproporcionada , sino
una fórmula que se nos brinda pa-ra demostrar nuestra adhesión yhuestro entusiasmo. La prueba esbien soportable y liviana. TDebe-mos considerarla como un símbolo.Y desear que, en cada instante, sehos brinde coyuntura y ocasión detestimoniar la alegría de ser espa-ñoles de la única España habitable,en lo moral como en lo físico.
Los que hemos estado en la zonaroja tenemos, en general, una ideamuy elara de todos estos problemasrelarionados con lo que significa ha-llarse aquí. Y con los deberes queello determina. No quiere eso decirni mucho menos que los quetuvieron la fortuna de hallarse, des-de el primer día, en la zona libe-rada no sepan la magnitud de suventura, y-lo que hubiera sido demuchos de ellos en el caso contrario.No. Pero las razones, cuando nosarañan en la propia carne somoshumanos se hacen muceho másperceptiples y más fáciles de en-tender. Los que hemos sufrido, enel otro lado, vejaciones, tortnras,perseeución 0, en el mejor de loscasos, simplemente miedo - ¡ah, es-to de haber tenido miedo es hatante importante' . estamos espe-cialmente preparados para com-prender todo lo que significa viviraquí, en paz, con respeto y consi-deraciones, con libertad de movi-mientos, y compartiendo además. el-ambiente de optimismo,de fe y deilusión que ha forjado la serenidadinteligente de quien nos rige y quehan cimentado sus propias armasvietoriosas. Para nosotros, sin hi-pérbole, todo lo que se nos ha dado0 se nos ha hecho posible, ademúsde la vida quee llegó a ser mercan-eía tan depreciada , nos pareceun lujo y una añadidura superfiua.Y esta idea, esta concepción de loque tenemos, y por qué lo tenemos.crea, realmente, una mentalidad ym¡)_emiw un especial tipo de reac-
No se puede ser ambicioso wá
hablaré de las escalas que tiene laambición, desde la noble de ver aEspaña reinstaladaen sí misma,hasta las subalternas de populari-dad, o de luero , ni se puede ser,tampoeo, cicatero. o tacaño, paracumplir las pequeñas obligacionesque el estado - de guerra impone.
Hay frases que no por incursas envulgaridad, a fuerza de ser repeti-das, dejan de tener un sentido irre-prochable de definición. Así, porejemplo, cuando se dice de muchaseentes que fueron torpes porque noquisieron dar cuatro, y les costó laesistencia, cuatrocientos. Si le da-mos la vuelta a la frase, habrá quereconocer que ya está bien que de-mos ahora, voluntaria y. gustosa-mente, glos, o cuatro, o lo que sea,hecesario, ya que se nos permiteconservar el resto. =z
Hay que dar más de lo que se nospida. Porque lo solicitado puedequedar en el límite fácil de una obli-cación, nunca demasiado onerosa.Pero lo que demos de más, implica-ré voluntad.
Y en esto de mostrarvoluntad, en todos los momentos yen todos los órdenes, estriba, enbuena parte, la realización, brillan-tey presta, de la gran tarea histó-rica en que nos hemos metido. No<e olvide que esos mozos que van alfrente, con la canción y la alegríaen los labios, y para los que entre-gar su vida en sazón es un acciden-te orgulloso, se Hlaman.-en buenaparte, voluntarios. Voluntarios,porque han puesto en acción su vo-luntad de servir a España. Sea-mos voluntarios, aquí,: los demás,que parece que es mueho más senci-lla esta voluntariedad que la dehuestros admirables muchachos lu-chadores. -Y uno de los aspectos*n que se puede mostrar la capaci-dad de voluntad de-que andamosdotados, es éste de dar más, muchomás de lo que se nos pida Y dar-lo con tal alegría, con tal prisa, que
La mala impresión que producenen España las demoras. por partede Francia, respecto al cumplimien-to del acuerdo Jordana-Bérard, es-tá plenamente Justificada, entreotros; motivos, porque parecía llega-da la hora de que la República ve-cina borrase el penoso recuerdo deMNuy acusadas complicidades, me-diantc el fácil recurso de cumplirlo pactado con el robierno de Fran-(O, Lejos de sa;/h¡bsmnuln lo hechopor Franciaen el trauscurso denuestr? Gudrra, se incorpora hoy almemorial de nuesteos agravios esamorosidad ¡.|;XT;¡f_j.»(-¡¡¡-¡(')¡¡ del alu-dido acierdo- testimonio, «uandomenos, de una negligeneja que bienpuede parecer maliciosa. Natural eineludiblc es que la reacción de loscspañoles se produzca en tárminosde irritada sorpresa.
lWnelga recordar la obligación enque se encuentra el Gobierno de laRepública francesa de hacer honora si palabra y firma. -Pero es que,aún no mediando formalidad jurí-dica alguna, debiera pesar sobre elQuai d 'Orsay razones muy conside-rables de índole política yv moralque, por lo visto, no' erávitan so-bre las determinaciones de aquelpaís, antorizando a pensar que todolo actuado en estos últimos meses,2 título de rectificación y eoneor-dia, se hizo de mala gana, a remol-que de los hehos eonsumados, y eoncierto propósito de entorpecer, re-trasar o hasta eludir, sí esto fueraposible, el cumplimiento del acuer-do.- ¿Cómo así...?
Acabamos de aludir a las razonesmorales y políticas que aconsejan,sin duda, a Francia otro modo deproceeder, porque es evidente que sucrédito se comprúmete en este epi-sodio y que el juego limpio en re.lación con España su vecina fa-tal y su posible amiga no es aje-no a las conveniencias francesas detipo internacional, a su política dedefensa, que tanto la importa, y asus relaciones de todo orden. Pare-cía que Francia había acabado pordarse cuenta clara de todas las exi-
gencias que nuestra Vietoria la re-presenta en la esfera de lo diplo-mático, y la misión confiada, en unprimeipio, a Mr. Leon Bérard, comol nombramiento luego, del Maris-cal Pétain para desempeñar la Em-baajda de su país cerea del Gene-ralísimo, permitía confirmarlo así.Pero la realidad de las cosas depo=e categóricamente en contra, y lascláusulas del repetido acuerdo pen-den todavía al cabo de dos me-ses de una ejecución que distamucho de consumarse en- todas ycada wna de sus partes.
Le devolución de algunos de losbarcos abanderados por los rojos yque, por unas u otras razones, sehallaban surtos en puertos france-ses, no bastan, por mueho q. se tra-te de ponderar por la prensa ofi-ciose francesa, lo que no es ni te-nía por qué serlo un rasgo de ge-herosidad sino el cumplimiento deun deber previsto. Ya el DerechoRomano, en aforismo milenario, re-.cogió la voz de las cosas que clamanpor sus dueños, donde quiera que sencuentren. Y esos bareos elama-ban, a grito herido, por España, suindiscutible propietaria. De suer-te que Francia, al devolverlos. noha hecho otra cosa que lo justo ylo obligado. Pero el clamor deotros expolios persiste, y preeisa-mente para acallarle en definitiva,se ajustó al pacto Jordana-Bérardcuya íntegra realización no puedeEspaña por menos de exigir, econtraresistencias pasivas o contra el ex-plícito afán de sortear lo conveni-do.
Clama, en efecto, por su restitu-ción al Gobierno de España, el ar-mamento entrado en Francia por lahorda roja, al huir de los abando-nados frentes de combate en Cata-luña. Se trata de cañones. de avio-nes, de ametralladoras, de fusilestambién de ganado . que no per-tenecen a Franeia, sino ineguívoca-mente a España, por mandato ele-mental e indisentido de los prinei-pios que rigen en materai interna-cional. Y existen indicios a lo lar-go del tiempo transcurrido, de que
el material de guerra en cuestiónestá siendo sustraido a toda posibi-lidad de reintegro, sirviendo de ma-teria a nuevas especulaciones ilíei-tas. Dijérase que quienes fabrica-ron o vendieron material de guerra,enfilándolo contra nuestra Patria,no se avienen a que la España vie-toriosa se apodere de las armas yque la hubiesen aniquilado, parapurificarles con el nuevo destinoque la Victoria impone.
Pero es- que también retieneFrancia todavíe el oro depositadoen París por el Baneo de España, auyors accionistas pertenece con tí-tulo tan legítimo que ineluso lo ha-cc irrecusable una sentencia firmede los propios Tribunales franeeses.No cabe, por tanto, excusa, ni pre-texto, ni ardid procesal, ni recurso,por habilidoso que pudiera ser.
Un últimc argumente en pro dehuestras razones, para hacer cum:plir el pacte Jordana-Bérard, po-dría formularse de esta manera :Púesto que Francia lo suscribió, ca-be preguntar si lo habría definitiva.mente suscrito, de haber deseubier-to en nuestras alegaciones algún res-quicio que permitiera la impugna-ción. Es obvio que no lo halló: noIc podía hallar, y, sin reparo queoponer, asintió, firmó y rubricó.
Porque nuestre derecho es cate-górico y porque le sirve de ejecu-toria un acuerdo eon plena virtudJurídica, España tiene que estar, ylo está efectivamente, nada satis-fecha , eomo acaba de decir nues-tro Embajador en Rarís, don JoséFélix de Lequerica, con el tasadísi.mo lenguaje que incumbe a todo di-plomático. Piensen el Gobiernodela República franeesa y toda Fran-cia tras él, en el módulo que marcapara las relaciones fran. idel porvenir la morosidad en elcumplimiento de un acuerdo quefué ajustado en las cireunstanciasque todos recordamos perfectamen-te y que España, por cierto, no tie-ne interés alguno en olvidar. Por-qué es a Francia precisamente aquien conviene dar motivo para quelos españoles no sientan el deseo de
remover y avivar sus memorias dela guerra contra los rojos y sus co-laboradores y áfines.
Periódicos de París como LeJour! y Le Petit Parisien, in-teresados en que las gentes no con-fundan a los Gobiernos extraídosdel Frente Popular con la real yauténtica opinión francesa, vienenexcitando en estos días a Mr..Da-ladier y a Mr. Bonnet para que re-sueltamente liquiden los equívocosque ellos crearon, por la cuenta que
Ms
pudiera acarrearles. A ellos, des-de luego, corresponde, en esta pal--maria crisis de comprensión y afec-to, el aclarar, el rectificar, el cum-plir...
Una- sonrisas y unas frasesamables no pueden hacer olvi-dar... , acaba de decir a este res-peeto el Ministro de la Goberna-ción, Sr. Serrano Suñer. insinuan-do que miestra actitud de reclama-ción no ha de quedar desarmadacon simples palabras. Hechos ha-
cen falta, y no otra cosa. Todo con-tribuye a exigirlos: la necesidad deliquidar un pasado, la- de consoli-dar un presente que sólo en preca-rio parece resuelto, y la de garan-tizar un futuro, purificado en abso-Into de recelos. España, por aufortuna y por su esfuerzo, se en-cuentra en condiciones admirablespara sostener el diálogo con Fran-cig en el tono que el interlocutormarque, y para cortarlo, si es pre-
Jres niños lloraban al sentirsesolos; habíari perdido a sus padres.Su madre había muerto meses an-tes de la iniciación de la Revolu-ción Española. El padre, que eraun labrador muy conocido por todala ribera del Moneayo; sintió al ini-ciarse el movimiento salvador unimpulso ineludiblede ir al frente adefender a España del marxismoinvasor que la amenazaba. Aquélhombre abandonó a sus tres hijosal cuidado de una parienta suya ypartió de las tierras arafronesas endonde vivían para incorporarse alos ejéreitos que luchabanen Casti-lla la llana.
Y aquél padre amántísimo queconsagraba el fruto de su trabajo ala educación de sus hijitos; cayóherido de muerte en una de las más¿picas batallas, en tiérras de Bru-nete. Se convirtió en héroe el la-briego y dejó de existir el padre quetanta falta hiciera a sus tres hijos.Los niños quedaron varios. meses alcuidado de la persoña familiar aquien se los había confiado, pero losmeses pasaron y aquella personatuvo que seguir a otras y no tenien-do recursos vióse en la necesidad deabandonar a los tres niños a_ la ca-ridad ajena. Aquellos tres niños,Martita de 6 años, Carmen de 8 yLuis de 9 años, fueron puestos amereed del Auxilio Social. Erantres bellos ejemplares de la raza a-ragonesa, las dos niñas rubias y deojos eastaños, el muchacho morenoy de pelo rizado; los tres enérgicos,fuertes, animosos y entusiastas dela causa del glorioso ejército. Lostres, después de Dios, .adoraban a
Franco.- Los tres ante las marchasmilitares y las banderas, levantabansus brazos y en sus ojos se veía bri-llar una emoción purísima de sen-tido patriótico.
Orgullosos estaban de saber quesu padre había sacrificado por lapatria todo lo que se debe sacrificar,hasta la vida. Con ser niños teníanmás fe que muchos hombres, por-que en su fe no cabían los desenga-ños ni ese exveptisismo que 'anidamás que una idea, la de que Espa-ña se salvara con Franco y sus e-jércitos de requetés y falangistas.
Aquellos tres niños, si hubiesenvivido en la otra España sin Dios,tal vez habrían tenido un padre queperdiese la vida tan noblemente co-mo la perdió el de ellos, péro des-pués no habrían tenido quien leshiciese sentir que su padre :habíaempleado bien su vida ofreciéndolapor su patria, no... después ha-brían sentido la pena, el desenga -ho, el dolor de ver a tantos seresegoístas y mezquinos tratando dehacer valer sus crímenes al mismoprecio que la heroicidad de su pa-dre. Después habrían visto comolas ciudades, día a día, se empobre-cían y se despauperaban, habría pa-sado miseria y terror y al final ha-bran sido enviados a Rusia.
Como tuvieron la infinita suertede nacer en tierras de la anteriorEspaña, su soledad no ha sido dolo-rosa; hoy visten bellos trajes y dis-frutan de cariño maternal y poseenJuguetes y rien alegres y dichosos.¿Cómo el milagro? Porque no enbalde existen en el mundo mujerescomo doña Soledad Alonso de:Drys-
dale. Mujeres que laboran sin des-canso, que consagran su vida a tanaitruistas ideales, mujeres que re-parten su corazón con ellos, muje-res de España que siembran de fio-res los caminos de los niños huér-fanos y que viven para hacer eari-dades cristianas.
La distancia de los mares todoel océano no basta para que elbien se aparte, el bien no tiene dis-tancia. Las horas que consagra So-ledad Alonso de Drysdale a reco-lectar millones para España, sonluego muy pronto horas de ventura,horas de amor, horas de Juz en esoslugares donde los niños huérfanosno se sienten solos, ni tristes;dondelos niños huérfanos se sienten satis.fechos de sus padres.
Consciente del momento de Es-paña, una española de aquellas tie-rras de Almería, circundados- porlas sierras de Berja y las playas deAdra, una española con millones,en vez de emplear como otras sufortuna en su propio bienestar, nosólo la comparte con España, sinoque también sacrifica sús horas, susdías enteros durante estos años, enlaborar y en tratar de ponerse encontacto con todo el que quiera ayu-darla.
A esta excelentísmia señora dehecho, Franeo la hizo de derecho.Hoy una gran cruz premia su la-bor y adorna su pecho por fuera.Ella sabe que la verdadera grancruz, que adorna su pecho, no la ve-rá nadie. Es la eruz de su cora-zón consagrado a los niños huérfa-
(Continúaen la página 21)
( Viene de la página 20)
nos. Es la eruz de su corazón quesc ha repartido entre miles y mi-les de criaturas, y como es tan gran-de a todos beneficia y a todos con-suela y a todos les llega y a todoslos basta.
¡Soledad Alonso de Drysdale '¡Viva España! ¡Viva Franco¡Arriba España, que con muj¿rescomo tú tiene que seguir siendosiempre Una, Grande y Libre.Excelentísima labor, excelentísi-ma Señora. Justicia del CAUDI-LLO, risa en los labios de los ni-ños de España.
Leandro N AV ARRO
(Viene de la páy. 6)
blanco. Santiago matarrojos; el decerrar España y abrirla para Diosnuestro Señor. BEspaña ya está enpie sobre la tierra. Y sus hombres,tras Franeo marchan como legiónimperial, expedicionaria y unita-ria. ¡Con nnidad de vietoria
X X X
En España españoles ¡ya haamanecido! Las rosas florecieron enhaz. Y mirando cara al sol reomolas águilas de imperio ascende-mos hacia el mediodía cenital denuestra historia: hacia arriba'¡Unidad! ¡Unidad!
España
España
Es hora también de advertir serena- ROmenteatodosm ,aaquélthque se complacen en destacar los defee-tos que en él puednn'e¡inir,'_v fingen escandalizarse con estos defeetos, cuando para ello son motivos de regocijo, porqueol que temen en el Movimiento hacionalho son sus defectos, sino sús virtudes. A estas gentes que sistemáticamente cierran ecntra el partido y contra sus mejores una -ofensiva taimada y cobárde, cuando »o canalla, a éstos hay que advertirles que para ellos nunca- para éllos nunca porque si para ellos estuviera abierto perderíamos esta gran coyuntura de salvación, Ramón SERRANO SURER. (Discurso de Sevilla).
». u (De ¡ARRIBA !, de Buenos Aires)
EL CAMARADA DUYOS EN SU CARACTER DE IN SPECTOR, VISITA BOLIVIACONFERENCIAS EN LA PAZ, ORURO Y COCHABAMBAMAGNIFICA LABOR. EL SANTUARIO DE COPACABANA
En funciones de su cargo de Ins-pector, nuestro Jefe Regional, ca-marada Rafael Duyos, realizó unviaje por la demareación de la Je-fatura Regional de Bolivia, al regre-so del cual, entrevi 0 por unoa_ie huestros redactores formuló las .interesantes declaraciones que pue-den leerse a continiación-Expresó nuestro Jefe, que a sullegada a La Paz, fué objeto de uncordial recibimiento de parte de losfalangistas de la capital del Alti-plano, encabezados por su jefe, elcamarada Aranguren, quien comotodos los demás camisas azules deLa Parz, hiceiron en todo momentocuanto estuYo a su aleance para ha-cerle arradable su estadía en la ca-pital boliviana.
La actividad del Inspeetor, ca-marada Duyos, fué muy intensa,dando numerosas conferencias de
divulgación de la verdad de Espa-ña, las que se vieron conceurridisi-mas de público numeroso y entu-siasta, que apreció en todo su va-lor la palabra que venía a traerles -por primera vez el sabor y el estilode nuestra Revolución NacionalSindicalista.
La primera conferencia la pro-nunció nuestro Jefe Regional en elTeatro Municipal de La Paz. desa-rrollando el tema: Vida de JoséAntonio Primo de Rivera" en laque eon palabra poética y galana,pintó a grandes rasgos la vida se-ñera del Precursor. En el mismoteatro pronunció pocos días despuésotra disertación que despertó sin-gular interés en los círeulos litera-rios locales, sobre el tema: Paisa-je de la poesía Española . Ambasconferencias fueron recibidas conentusiastas manifestaciones de
obligado el camarada Duyos a pro-nunciar otras dos en el Teatro SanCalixto, de la sapital boliviana, queversaron respectivamente sobre:Franco y sus romanees de gue-rra y Doctrina del MovimientoEspañol"'
Finalmente y cerrando su profi-cua actuación de divulgación doc-trinaria en La Paz, dictó en la Ca--a de España dos Lecciones a laFalange , desarrollando el tópicode Doctrina -y Estilo NacionalSindiealista", que despertaron sin-gular interés entre los camisas azu-les de aquella J. O. N., ansiosos deoír de boca de quienha vivido losprimeros tiempos de muestra Gue-Ta de Liberación, la verdad y Jus-ticia de nuestra santa rebeldía.
Desde La Paz se trasladó nuestroJefe Cochabamba, donde también fué objeto de múltiples agasajos.Allí pronunció una conferencia enel transcurso de la cual los comu-nistas intentaron haeer una antima-nifestación en el propio teatro enque se desarrollaba. Pero gracias a la serenidad imperturbable delorador y el buen sentido del públi-co, pudo ser frustrado tal intento,convirtiéndose el acto en el éxitomás extraordinario de toda la ex-cursión. El público, al finalizar laconferencia, ovacionó al orador. Deincidente tan acertadamente resuel-to resultó una magnífica propagan-da en pro de nuestro Movimientoy en contra de las tendeucias sovietizantes.
De Cochabamba pasó el camara-da Rafael Duyos a Oruro, dondeusó de la palabra en el logal :de F.E. T., sobre el tema: Lección ala Falange . Interrogrado nuestroJefe, sobre la marcha de nuestraOrganización por las tierras del Al-tiplano, afirmó que la Falange Ex-terior está allí en plena marcha yCs ya una magnífica realidad, soste-nida por el entusiasmo unánime dela colectividad.
Tuvo también palabras emociona-das al recordar su visita al Santua-rio de la Virgen de Copacabana.
-> Allí, a 4,000 metros de altura fla-meaban hermanadas las banderasde España y. de Bolivia. Y állí an-te la imagen marfileña fle la Virgenindia, indios; hombres de bronce,arrodillados, oraban- en español.
Era, nos dijo, la estampa viva deltriunfo de la Hispanidad que no sa-be de razas, ni de fronteras, sinode almas afines.
A una pregunta de nuestro re-dactor sobre la actitud de las auto-ridades de Bolivia con respecto anuestro Movimiento, afirmó que erade plena simpatía y que no teníapalabras con que agradecer las aten-ciones de que le habían hecho ob-Jeto.. El camarada Duyos fué reci-bido por el Presidente de la Repú-blica, teniente coronel GermanBusch que le concedió una audien-cia especial de más de media hora,encargándole trasmitiese un-men-saje de salutación a S. E. el CAU.DILLO, interesándose. además, vi-vmaente por e contenido doctrina-
rio de mestro Movimiento. Faci-litó en gran modo este contacto. elRepresentante del Gobierno Nacio-nal de España, Formerio Gonzá-lez, ilustre ingeniero de minas, quegoza en todos los círeulos distingui--dos de generales simpatías por elteato y habilidad con que desempe-na sus funciones.
Expresó también su agradeci-
miento al Jefe Regional de F. E.T. por todas las deferencias quepara con él tuvo, y por la formaeficaz en que facilitó su labor.
En resumen manifestó el cama-rada Inspector, que venía satisfe-chísimo de la jira y de la marchaprogresista de nuestra Organiza-ción en el Altiplano.
Rafael Sánchez Mazas, camisavieja de aquella Falange Girioosade las catacumbas. Rafael SánchezMazas, camarada dilecto, el de losdicursos de perfección académicay contenido demoledor está vivo.
Los camisas azúles auténticos, losque sentimos arder en el corazón lahama inextinruible que encendieraen eilos el verbo profético, la vozhehka fuezo de amor por España deJosé Antonio, César, nos regocija-mos en lo más ntimo de nuestroscorazones.
Rafael Sánchez Mazas ha vividouna verdadera odisea, antes de re-cobrar la libertad, al ser reconquis-tada Bárcelona.
Condenado a muerte por los ro-jos y llevado al trágico paredón,Sánchez Mazas pudo escapar des-pués de la primera descarga, de laque resultó indemne, y alcanzó laslíneas nacionales al cabo de variosdías de lucha contra su propia fa-tiga y extenuación, a través de mon-ltes y escarnas.
Tué el genio poético de la Falan-ge; el colaborador íntimo de JoséAntonio en la honda ráfaga lírica
que estremeció el corazón de las ju-ventudes españolas llevándolas ale-gremente al sacrificio por una Es-paña mejor. Comenzó su vida deescritor como cronista de la últimaguerra de Africa. Aquellos artícu-los suyos publicados en El Pue-blo Vasco de Bilbao y un delicio-so libro titulado Memorias de Ta-rín destacaron rápidamente su fi-gura en el mundo de las letras. Fuécolaborador y corresponsal en Ro-ma del diario A B C durantemuchos años; y a.su regreso de lta-lia, se entregó por entero a la obrade la Falange. Gran parte de loseditoriales de Fe ', de Arribay de No Importa , periódicos ca-si elándestinos que se vendían a ti-ros en los suburbios de Madrid, sa-lan de la pluma de Sánchez Mazas.
Su Oración a los caídos quedacomó la mejor pieza de exaltacióna la muerte por la patría en la an-tología lírica del Movimiento.
Detenido a raíz de las últimaselecciones españolas juntamentecon José Antonio Primo de Rivera.,Ruiz de Alda, Fernández Cuesta yotros miembros de la junta políti(Pasa a la página 24)
DEBEANUNCIARSE EN ESTA REVISTA
La entereza del elero español an-te la cruel persecución que se des-encadenó contra la Iglesia en lasregiones de España sometidas a latiranía roja, ha caúusado, la admi-ración de todo el mundo. Muchoshan sido los religiosos sacrificadosen el suelo español por los comunis-tas que deberán ser elevados a losaltares, y con razón se ha dieho quela persecueión última ha dejadoatrás a las de los primeros tiemposdel cristianismo, tanto por el núme-ro de los mártires, como por la fir-meza de los cristianos.
Casos de apostasía en el clero, nose conocen, No podría aducirse co-mo tal la actitud de la media doce-na de desgraciados sacerdotes queánduvieron por esos mundos hacien-do el juego del Gobierno rojo. Eranya escándalo de los fieles antes de'a revolución; los unos estaban pri-vados de licencias, otros malmira-dos por los Ordinarios de las res-»ectivas diócésis.
La actuación de esos pocús sacer-dotes ha sido a menudo mal inter-pretada, sobre todo en el extranje-rc, donde les han visto presenta-dos como ilusos o engañados. Laverdad es qué fueron mucho peorque todo eso. fFueron instrumen-tos al servieio de la propaganda ro-Ja, viviendo de lo que esa propagan-dr. les reportaba.
La acusación que nosotros hace-mos, que había sido ya formuladaotras veces por dedueción, podemosreforzarla con datos ciertos, comoson algunos documentos encontra-dos en lo que fué Subseeretaría idePropaganda del gobierno rojo.Uno de esos documentos abarcaJuntos a los principales de aquéllosinfieles clérigos. Se trata de unacarta dirigida el :9 de Diciembrede 1938 por el Jefe de Propagan-da General , Fermín Solozábal, alSubsecretario del Presidente delConsejo ', José Prat, y dice:
La creación por la Presidenciadel Consejo de un Comisariado Ge-neral de Cultos, me obliga a diri-girle esta carta, para que su conte-nido llegue a conocimiento del Co-misario General D. Jesús MaríaBellido Golferichs,
Por sus relevantes trabajos enfavor de la legalidad republicana.están agregados a los servicios deesta Subsecretaría los sacerdotes si-guientes:
Canónigos: D. Jerónimo GarcíaGallego.
D. Luis López DórigaSacerdotes: D. Juan Vilar Costa.D. Leocadio Lobo Canónigo.
D. Manuel Cardona Iñigo (fraySalvador de Hijar).
Los que pueden prestar excelen-tes servicios al Comisariado, a quienhacen por este medio su ofrecimien-to personal .
Otro documento viene a comple-tar cl anterior, diciéndonos ineln-so el sueldo de que algunos de eso:;sacerdotes disfrutaban. En un ofi-cio dirigido por el Jefe de Propa-«anda General al Subserretario dePropaganda q. señala para ManuelCardona Iñigo el sueldo de 650 pe-setas mensuales y para Leocadio Lo-bo. Jerónimo Gare'a Gallego y LuisLópez Dóriga, el de 500 pesetasmensuales.
Aparte del sueldo fijo, tenían lesfamosos sacerdotes rojos otrasentradas, eomo eran, por ejempl»,las dietas percibidas con motivo delas frecuentes excursiones de pro-paganda por el extranjero. Y a es-te propósito viene bien recordar elviaje que realizaron con motivo delCongreso Eucarístico de Budapesttres sacerdotes vascos. Costó laexcursión 21,000 francos, según eldocumento que a continnación setranscribe
Viste la earta que con fecha 22 de junio de 1936 le dirige álExmo. Sr. Ministro de Estádo D.Julio Alvarez del Vayo, el tambiénMinistro del Gobierno de la Repú-blica D. Manuel Irujo, solicitandoel abono de 21,000 francos france-ses, que fueron los gastos ocasio-nados por'el viaje, estancia e inter-vención en el Congreso Eucarísti-co celebrado en Budapest, los días24 al 29 de Máyo de 1938, de la De-legación española compuesta porlos sacerdotes vascos D, Alberto deOnaindía, Canónigo; D. Eduardo
de Lejárraga, Rector del Seminario
de Vitoria; y D. José Miguel de Ba-randiarán, Vice-Rector del mismoSeminarioó.
Cúmpleme informar, después derealizadas las gestiones necesarias,que la antorización de pago porcuenta de la propaganda q. pdra la|causa de la legalidad republicanarepresentaba la asistencia al Com-yreso citado de la Delegación de sa-cerdotes españoles la realizó |verbalmente en Parísel Exmo. Sr.Ministro de Estado " del Gobiernoautónomo de Euzceadi Sr. D. JoséAntonio de Aguirre.
Por todo lo expuesto solicito elpago de 21,000 francos francesés a|D. Alberto Onaindía; Canónigo,|cor residencia en París, con el pre-vo informe de la Sección de Con-abilidad ,
Luego, naturalmente. viene la au-torización.de Contabilidad que lle-va fecha 15 de agosto de'1938.
Otros documentos se han encon-trado de verdadero interés. Porejemplo, una carta del Delegado dePropaganda y Prensa de Madrid aSubsecretara de Propaganda delMinisterio de Estado en que dice:
. En el día de ayer me visitó elP«ftire Lobo, con quien me une bue-na amistad, para hablarme de laconveniencia de dar semanalmente"nos minutos de charla sobre elEyangelio en las emisoras de esta-Zona y muy especialmente sobre elréspeto que a la Religión inspira laepública (sic), dedicada a los pue-blos de América .
La respuestaes muy curiosa : unanegativa absoluta, al propio tiem-0 que un incesar al Padre Lobo .La carta está concebida en los trespuntos signientes:
la.- La situación del Padre Lo-bo para con,esta Sub-secretaría, esla de colaborador, afecto a la Sec-ción. de Propaganda General, cu-yos artículos y charlas por Radiose haceñ de acuerdo con las orien-taciones de esta Subsecretaría.
2a No es permisible realizarcharlas radiadas sobre el Evangelio,interín dure la guerra, pues de la (Pasa a la página 25)
(Viene de la pág. 22)
ca de la Falange, pudo ponerse ensalvo antes que estallase el Movimiento Nacional. Oculto en Nava-rra, llegó a Madrid en los días queprecedieron al levantamiento del ge-neral Franco. Desde entonces suvida ha sido una constante fuga,volatilización permanente de su fi-gura a través de cien refugios ycatacumbas.
Estaba en la legación de Finlan-dia, en Madrid, como asilado enan-do el edificio fué asaltado por las-tirbar y pudo huir Consiguió tras-
ladarse a Barcelona y allí fué de-tenido y condenado a muerte, esca-pando en la forma casi milagrosaque dejamos relatada.
ARRIBA! recibe jubilosamenteila noticia de la liberación del ca-marada Sánchez Mazas y hace votosporque pronto le veamos prestandoa Falange y a España su valiosí-simo concurso. En otro lugar deesta revista reproducimos para regalo de nuestros lectores un trabajodel camarada rescatado.
Cuando se ha dado todo a la Patria, no se ha dado bastante. España pide tu O Ro.
A la juventud pidió España su sangre y su vida, y generosamente las entregó a la Patria. A tí te pide 14 U K O: sé tan desprendido como los combatien-
Y
Nos complacemos en informar a nuestros lectores y simpatizantes de la EspañaImperial, que las películas de actualidad es pañola, serán exhibidas en las fechas. si-guientes:
Teatro Paramount, Domingo 30 de Julio. a las 10:30 A. M.Teatro Capitol, Lunes 31 de Julio y Martes,1 de Agosto, Matinees a las 4 p. m. ydos tandar por la noche, a las 7:30 y 9:15 p. m Precios corrientes -
del Ebro; escenas emocionantes de la toma del Pico de Pandols, duranteé la camdel Ebro; brillantes desfiles en Burgos, Valladolid, Zaragoza, Centa, y otras ciudadesespañolas; como viven y, trabajan los prisio neros rojos en los campamentos de concen-tración; la gran obra social del General Quei po del Llano en Sevilla; interesantísimas es-cenas de Castellón, Burriána, Nules, Bilbao, Cádiz, Málaga, San Sebastián, Asturias,Galicia y otras 8rovincias; completo repor taje de la Ciudad Universitaria; y un colo-sal discurso del Caudillo Victorioso, que es aclamadc entusiásticamente en togoa los mo-mentos de estas interesantes nelículas.
No pierda esta ocasión de verlas, y com probaráde España ivi
Almacén de Provisiones de todas clases.
Calle Denpósito No. 6, Marina.
Nuestra lema es:
MAXIMOS SERVICIOS A MINIMOS PRECIOS.
L Por eso tenemos una brillante clientela satisfeeha NN
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la hermosa obra de reconstrucciónGeneralísimo FRANCO, Caudillo de
De todo para la Oficina.
Teléfonos 528 y 529 - San Juan, P. R.
PRONUNCIADO EN MADRID EN OCASION DE UNACTO DE FALANGE, EL 20 DE MAYO DE 1935.
Camaradas de yu¿o y flechas:
El acto de hoy ha sido tan com-pleto, tan- rotundo, tan alto de es-ritu y estilo que no cometeré yoel error de ponerle añadiduras, Co-mo mantenedores de la idea de uni-dad sabemos, que ella no soportaañadiduras ni mutilaciones.
El cuadro de piedra escurialen-se, modelo de unidad imperial, notolera ser prolongado. Se puedehacer en sus jardines para la horadel reposo y el recreo, una easitadel príncipe que es como una anée-dota. Así, para la sobremesa, 0svoy a contar una pequeña historiaantigua de la que sacaremos, brevelección.
Había, en la ciudad griega deAbdesa, tantos| pártidos sucios yrencorosos como en España, tantospartidos palafreneros y electoreros,que habían eonvertido en un infier-no la vida eivil Y había un poe-ta, Demóerito, que con una eríticaacerba eoh un despiadado sarcas-mo, quería corregir la mala con-ductá de sus compatriotas. Pero lasátira era imútil.
Entonees, pasó por la ciudad unacompañía de tragedias que repre-sentaba las obras de Eurípides. Enuna escena de la Andrómedaaquélla que Perseo libertó del mons-truo como nosotros hemos de liber-tar a España la voz de la heroí-na, puso en este verso toda la po-tencia del alma:
Amor, alma del cielo y de la tie-
Pues dicen que este verso corrióde alma en alma de tal modo, quemudó las pasiones de la ciudad ycomo por' un sortilegio, los odiosmezquinos , ton loque la ciudadanía se rehizo fuertey entera, espiritual y generosa.
Pues os quiero decir que en no-sotros más fuerza aun queel espí-ritu de combate tiene el espíritude amor. Ante todo tenemos queser la más leal compañía de espa-
ñoles de nuestros tiempos. Tenemosuna h y una capitaníaJuradas . En el amor a España, enel amor entre nosotros, en el amoral Jefe radica nuestro fervor, nues-tra nuestra disciplina,las fuerzas esenciales de la Falan-ge. Sobre las flechas del combatepesa siempre el yugo de amor. Mi-rad que para expresar la idea delmás -recto, sacramental y fecundoamor humano se dice conyugal por-que el yugo como símbolo elásico nosda esta idea de conducir juntos conamor, con unidad de mando y dedestino. Esta no es todavía unacomida conyugal, pero sí es ya unacomida, de desposorios con la Es-paña que hacemos iíntegramentenuestra y a lá que vamos a impri-mir y a devolver los signos augus:tos de su irremediable destino. Sonmuchos hoy los camaradas que nohan podido venir aquí a compartirla mesa porque su pobreza se loimpedía y ellos están aquí presen-tes en espíritu dando testimoniocon su aúsencia material, de esa co-mún pobreza que nos enorgullece.'Una lucha entre el amor a Españay la pobreza por España somos no-sotros.
Esta es la lucha más virily entrañable de todas: la lueha en-treelmorydhlmbte,med insaciable deseo del espíritu y losmateriales obstáculos ante la pri-mera necesidad. Cuando un padre
(
Viene de la pág. 23)
m:siña forma podrían m¡fmrsc los sacerdotes de d¡fee$u reli-giones.
30. Teniendo en cuenta la nece-sidad de aclarar por todos los me-dios la verdad, para que con su afec-to el prestigio de la legalidad republicana se abra camino eh la con-
pagada esta S ía, y mamdop;ter&, lo referente al aspeeto religioso, digno de ser aclarado siempre, para demostrar que la clerecía nos llevó a la guerra yque jamás existió persecución delpueblo contra la religión Católica. Por ello nó hay inconveniente en que las charlas dedicadas a Amériea 0 a cualquier otro p:¡¡: a evl: denciar el respeto y esión a legalidad del Estado español. ,
Y, esto lo realiza muy bien el Padre Lobo, hombre de buen sentido político, excelente umt¡faseata buen psicólogo, orador y escritor
En otras palabras los extremas anteriores se tradueen así: Como propagandista nos intéresa, comio sacerdotes nada.
Otro: muchos documentos de la especic podríamos adecir. No merece la pena que nos alarguemos demasiado en ello. Para muestra bastaun botón,y es tan repugnan-te el papel de los citados apóstatasal huif a toda prisa, alumbradospor el resplandor de los incendiosprovocados por sus W?º yprotectores los bandidos de Lísteren su retirada hacia Francia, quesu memoria ha de quedar en España simplemente como la de otros tantos Judas.
S. A
Cuanto esté en tu po- ¡º der, no es tuyo, es de / la Patria; entrégaselo.
nuestra alegría. Demos gracias aDios que nos ha dado a compartutep¡nyutevinoy gudlmnt¡fheopa.m dqnna la santa memoria de nuestrosmuertos.
P
Radiantes de gozo y de -entusiasmo saltamos al área de la-vida pública. -Sin duda manifestamos en nuestro rostro y en nuestros mismos ademanes un empuje irresistible. Eramos entonees los benjamines de la juventud española. Veníamos de decir el último adiós a la adolescencia. Nos faltaban para llegar a la veintena los mismo cuatro o cin*ca años de vida, teníamos candor, ten'amos entusiasmo, sobre todo teníamos fe en la salvación de España y la comunicábamos pródigamente.
Tanto debimos exteriorizarnos que un Néstor ultraprudente tres mil años después todavía no ha cesado de .ser de actualidad este persoñaje homérico nos amonestó con exquisitá y paternal benevolencia.
'Vais equivocados, jóvenes. El mundo no corresponde a vuestra concepción de él. Noexiste el ideal.Ni el sacrificio. Ni el heroismo. Nila virtud. Mucho menos la/posibilidad de salvación o regenéración. Estais desviados, si intentáis ramihar por ahí. lo mismo que vosotros pretendieron muchas otras generaciones, y todas fracasaron. Vehis al- mundo con ansias de volar.' Pero, jóvenes, en una atmásfera dé granito no pueden emprenderse hazañas tan sutiles e inmateriales. Os estrellaréis ,
Mientras habló el Nestórida adoptamos la postura que en tales ocasiones resulta más elegante. Nos pusimos a oirle con ademán indife-rente y distraido y cuando puso fin a la arenga, un brinco de entusiasmo, una protesta bullanguera de aversión a la elocuencia senil y de anhesión a nuestras firmes convicciones. Enfrente de la ineredulidad del viejo seguimos teniendo fe de jóvenes.
A nuestra pertinencia colaboraron eficazmente dos circunstancias, de que ahora voy a hablar.
La coyuntura de nuestra apari-
ción en la vida pública contaba entre otras muchas crisis la crisis del tópico. E-a el tiempo en que las ánforas de todos los adagios, proverbios y Ciehos comunes rebosaban hasta los bordes. Estaba saciado el público. Asqueado de tanta profusión fra.eológica.
La reacción fué la que inevitablemente sigue a todas las harturas e indigestiones: la abstinencia y el aborrecimiento. Se empezó a no hacer caso del tópico, a despreciarle a no creer en él
Especialmente los jóvenes intensificamos la crueldad contra los aforismos y refranes, que se empeñaban en mordisquear las prerrogativas de muestra juventud. ¿Cómo que a nuestras ansias de eternidad y de expansión imperial no corresponde en el mundo ninguna realidad objetiva ¿Por qué no va a ser posible la salvación de España ?'
Por fortuna nuestra aludo a la segunda cireunstancia favorable germinaron a la sazón en España soberanos guías y caudillos que apoyaron.y ungieron nuestro juvenil impulso. Ramiro de Maeztu, embriagado de metafísica hispánica; Ramiro Ledesma, el que soñaba mientras hacía; Calvo Sotelo, sostén y columna de la fe en Espa-
Llegará un momento en que sea necesario apartarE e, como de apesatdos, de quien tenga la osadía de erhabirse con alhajas, ya que tal erhibicifin no serú otra cosa que una proclamá de su falta de amor a España.
ha: José Antonio Primo de Rivera, Juventud, empuje, sosiego, autoridad, arquetipo, idea platónica. Todos ellos nos dijeron que hacíamos bien. Y mnosotros a pesar de que España se iba desmoronando seguíamos teniendo fe en España, y a pesar de que ve'amos con nuestros-ojos un Azaña cínico y repugnante soñábamos con nuestra fantasía un Franeo simpático, victorioso adoerable.
Y ¿qué resultó?
Que un día aquella realidad enorme, quimérica, excesiva hizo irrupción en España. Los de generaciones pasadas no hacían más que admirarse de lo que veían, palpaban y respiraban: Pero los jóvenes, como si a fuerza de soñar aquella magnífica realidad ya no les hicieN ..re impresión, no dieron ningún signo de extrañeza. La esperaba como se espera la conclusión después de dos premisas bien puestas, como después de la noche se espera la llegada del nuevo día.
Entonces les tocó a ellos amonestar a Nestórida:
¿Decías que este amanecer de España eran ilusiones de la juventud, delicta iuventutis? Pues mira: hoy han alcanzado dimensión nacional; son protegidas por la alta oficialidad del Ejército, las representan en el extranjero eminentes patricios y diplomáticos. ¿ Véis como todo el pueblo canta nuestros himnos, cómo la toga cándida de la locura es ahora el máximo emblema del honor y de la fidelidad a la Patria? Un eaudillo con toda la seriedad y brillantez de su historia ha recogido y sublimado a la altura de sus preoeupaciones nuestras bagatelas, nuestras utopías, nuestras grandes insensateces y nuestras muchachadas. Ciertamente no tuvimos sabiduría, ni riquezas, ni aureolas de prestigio, pero somos acreedores a un mérito indisentible: el de haber conservado la fe en España cuando tantos desfallecían,
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