2. Es increíble que los jóvenes practiquen la
autoagresión (agredirse así mismo), ya que al
practicarlo no beneficia, ni soluciona sus
problemas.
En nuestro país existen varias formas de
autoestima, pero en realidad no encontramos
el motivo del porque de la autoagresión.
Hoy en día aplano siglo XXl los jóvenes no han
analizado, ni comprendido que auto agredirse
implica muchas consecuencias
principalmente no buena si no, al contrario
implica muchos desordenes principalmente
emocionales.
3. Produce una dificultad para sentir
sentimientos positivos (alegría, placer,
goce, entusiasmo, deseo), por el
contrario, deja intacta la capacidad de
sentir lo desagradable (un ruido molesto,
una contrariedad, lo penoso y trabajoso,
el trato hostil o áspero de los demás).
4. consiste en hacerse daño a uno mismo. Cuando uno se daña
hace a la
vez de sujeto irascible, de verdugo ejecutor, y al mismo tiempo
de
víctima pasiva -que es la parte que en realidad hace que la ira
se
transforme en dolor y tristeza.
5. • insultarse y despreciarse constantemente (``soy imbécil'', ``estoy
hecho un asco'')
• auto-críticas destructivas (``nunca ha valido para nada'', ``no soy
capaz de reaccionar'')
• auto-evaluaciones negativas (``lo hago todo mal'', ``no doy pie con
bola'')
• dejar de hacer cosas agradables (elegir el alimento menos sabroso,
sentarse en el asiento más incómodo, no ir a ver la película que
teníamos intención de ver, renunciar a una visita o a un favor, consuelo
o ayuda que nos ofrecen)
• llevar a cabo acciones de ``auto degradación'' tales como cortarse
el pelo, ir con la ropa más lúgubre, poner música fúnebre en el
tocadiscos, complacerse en los estímulos que proporcionan pena y
dolor (determinadas fotos y cartas, evocar recuerdos desagradables,
traer a colación viejas ofensas)
• autolesiones (golpes, pellizcos, quemaduras) e intentos de suicidio.
6.
7. El comportamiento pasivo es una forma indirecta -y por
ello mismo, generalmente inadecuada- de protestar y
vengarse de los que han suscitado en nosotros la ira
desatada. Dejar una ventana abierta por descuido en
pleno invierno, quemar la comida, ponerle demasiada sal
o elegir el menú que sabemos que menos le gusta a la
persona diana, no hacer o hacer mal lo que habíamos
prometido o en lo que nos habíamos responsabilizado
(por lo tanto el no hacer ni dejar hacer), olvidar tomar la
medicación o no colaborar en la recuperación para que
los demás se preocupen y no se vean aliviados o se vean
``castigados'' con nuestro empeoramiento, son algunos
ejemplo de tácticas que la mayor parte del tiempo se
llevan a cabo con nuestro sacrificio y nuestro dolor, y por
ello mismo nos quitan más que nos dan.
8.
9. Los jóvenes creen que al lastimarse
consiguen placer, pero lo único que es
seguir aumentando el dolor emocional y
físico de uno mismo “para que lastimarse
asi mismo si los demás también te
lastiman”.