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TOPONIMIA

1. A Coruña: Según algunas teorías podría proceder de Clunia, quizás un antropónimo feminino
de estirpe céltica o incluso relacionado con el dios celta Cruni, equivalente a Cronos. Este
origen pudo derivar a Crunnia, Cruña, Curuña y Coruña. Algunos señalan un origen romano. Se
trataría de la evolución desde el latín acrunia (Península) que pasaría a interpretarse como
artículo + Crunia dando lugar a La Crunia. Otro posible origen latino es corona (“lugar alto”),
con numerosas variantes en gallego: curuto, curota, corote, coroa… Una extendida teoría
apunta a la raíz prerromana Cor- (también Car-) con el significado “roca, dureza, piedra junto al
mar”. Varias palabras célticas y mediterráneas sugieren la raíz indoeuropea. La coincidencia de
topónimos en la zona sirve de referente a los defensores de esta versión como Corrubedo.

2. A Estrada: Del latín (viam) stratam participio de perfecto del verbo sterno, sternere
“extender, en especial, el suelo; allanar, nivelar”. Es un topónimo viario referido a una antigua
calzada que pasaría por el lugar al que le dio nombre. Sin embargo, el topónimo de A Estrada,
provincia de Pontevedra, parece demasiado moderno para que se derive del latín. Se propone
que puede derivar del participio gallego estrada del verbo estrar, “extender mato (en gallego,
estrume), generalmente capas de tojo en los caminos”.

3. Acibeiro: Topónimo de origen latino formado por acrif-/ aquif- “acebo” y el sufijo
abundancial –arium. Lugar donde hay o hubo acebos, que en gallego se llaman acivros y en
latín ilex aquifolium. Fitotopónimo.

4. Armenteira: Topónimo de origen latino: armentariam formado por armentum “rebaño de


ganado mayor” y el sufijo abundancial –ariam. Lugar donde abundan los rebaños de vacas y
bueyes. Zootopónimo

5. Astorga: evolución natural y popular del topónimo Asturicam capital de las tribus de los
astures. El emperador Augusto le concedió el título de Augusta.

6. Bembibre: Dos teorías: de origen prerromano: Paemeiobris con significado de “oppidum


entre ríos”. Del latín bene vivere, “vivir bien”. Es el lugar en el que se puede vivir bien.

7. Bierzo: del latín [castrum] Bergidum, que procede de la raíz indoeuropea germánica beregh-,
"montaña, alto, elevado", y de -dum, "espacio cercado". El topónimo aludía a asentamientos
en colinas o montañas. Orotopónimo.

8. Bonaval: de bonam vallem, “buen valle”, conservándose el género femenino del sustantivo
latino vallis, -is. La etimología popular relaciona este nombre con las últimas palabras de un
herrero llamado Xan Tuorum, que encabezó una revuelta e invocó a la Virgen con las palabras
"ven e váleme" para que esta no permitiese que fuese ajusticiado: la Virgen lo hizo morir en el
acto.

9. Braga: de Bracaram topónimo procedente de los brácaros, gentes que habitaban el


convento bracarense, y que hace alusión a las bragas o calzas que vestían. Después de su
derrota ante Augusto en las guerras cántabras fue llamada Bracara Augusta, capital del
conventum bracarense.

10. Caldelas: deriva de (aquas) calidelas, diminutivo de aquas caldas, anunciando a presencia
de aguas calientes o termales. Hidrotopónimo.

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11. Cartagena: su nombre primitivo era Mastia, como figura en “Ora Maritima” de Avieno. A su
lado los cartagineses fundaron una nueva ciudad Quart-hadast (“ciudad nueva”) que luego fue
conquistada por P.C. Escipión que la renombró Carthago Nova. Su nombre actual parece
proceder de la forma arabizada Karthadjena, lo que que explicaría las anomalías fonéticas,
cuando la pretendemos evolucionar de su nombre latino.

12. Castrelo: forma híbrida de castellum y castrum resultando castrellum. También podría ser
diminutivo de castrum “castro, ciudad alta y fortificada”.

13. Cebreiro: significaba ya para el Padre Sarmiento “monte donde había habido asnos bravos”,
también llamados onagros o cebros < (e)quos feros con el sufijo abundancial -arium. De
montem *equiferarium se llegaría a montem Ezebrarium de que habla la Historia silense. Sin
embargo, se trata de una etimología discutida. Otros proponen un origen acifum, “acebo” de
modo que Cebreiro sería un topónimo similar a Acibeiro.

14. Celanova: del lat. cellam novam. Una cella era un cuarto individual de religiosos, monjes o
frailes, pero también se empleaba ese término para designar todo el monasterio. En efecto,
todavía hoy tanto en la Cillanueva leonesa como en la Celanova gallega existen importantes
asentamientos monacales.

15. Cimadevila: do lat. cymam (< gr. Kyma) de villa, “parte más alta de la villa”.

16. Compostela: muchas de las hipótesis propuestas se basan, en hechos relacionados con la
tradición y las leyendas jacobeas, según las cuales el apóstol Santiago el Mayor, tras haber sido
degollado por orden de Herodes hacia el 44 d.C. y privado de sepultura, es traído a Gallaecia
por sus discípulos desde el puerto de Jaffa.
De entrada, habría que decir que conocemos varios topónimos anteriores al de Compostela,
como Libredón, se dice que este se hallaba en un lugar llamado así, Libredón.
Es en el siglo X cuando se empieza a hablar en los textos de un suburbio Compostella, que
algunos sitúan en la actual zona del franco. Desde el siglo XI el nombre de esa zona se extiende
a la ciudad y se generaliza en la documentación la denominación urbe/civitaten Compostella.
Desde siempre la interpretación más popular fue campus stellae “campo de la estrella”, en
alusión a las luminarias que vio el ermitaño Pelayo en la zona donde actualmente está la iglesia
de San Félix de Solovio. A pesar de que se trata de una de las interpretaciones más conocidas,
existen grandes impedimentos, tanto desde el punto de vista histórico como filológico, para
que pueda ser aceptada.
Otra interpretación muy extendida y temprana (aparece ya por primera vez en el Cronicón
Iriense, compositum tellus, “tierra compuesta o hermosa”. Algunos autores (cfr. Amor Ruibal),
recordando otro significado de componere “enterrar”/compositum, “enterrado”, interpretan el
topónimo como “lugar donde está enterrado” (sc. el apóstol Santiago).
En el Códice Calixtino se cuenta la historia de una mujer llamada Compostella presuntamente
vinculada a la predicación del apóstol. Finalmente, otros estudiosos (cfr. Crespo Pozo y Luis
Monteagudo) lo consideran prejacobeo, porque aparecen más Compostelas por Galicia (y hay
una Compostilla en el Bierzo) y lo consideran un compuesto céltico de comboros “escombros” y
steel, “hierro”, significando “escorial de minas y herrerías”.

17. Córdoba: El significado etimológico del nombre de la ciudad ha sido largamente discutido
en la historiografía y no existe en la actualidad consenso al respecto. El primer nombre
conocido para la población es el de ‘Corduba’, otorgado bajo la forma de Colonia Patricia
Corduba tras la fundación romana de la ciudad en el siglo II a. C. Puede ser una adaptación
latina de topónimos anteriores, Kartatuba, “ciudad grande”. y que se supone anterior. Dado
que la primera aparición de Córdoba en textos antiguos hace referencia al establecimiento de

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un puesto comercial fenicio en las inmediaciones de la ciudad, se ha dado un posible origen
semítico al topónimo. De este modo Qorteba vendría a significar “molino de aceite”, para
algunos autores o bien “ciudad buena” a partir de Qart-tuba para otros. Otras etimologías
hacen referencia a la existencia de un asentamiento íbero anterior a la llegada de los fenicios
considerando que la terminación uba es ampliamente conocida en Hispania significando bien
“colina” o bien “río”, referido como Oba el antiguo nombre del río Guadalquivir, siendo Qart-
Oba la “ciudad del Oba”. Esperaríamos un resultado *Cuerva, por pérdida de la u átona.
Córdoba quizás sea un semicultismo con intención eufemística.

18. Couto: del lat. cautum, “lugar que se cercaba para poder defenderlo mejor”
(recuerda la palabra incauto “desprevenido”).

19. Chantada: posiblemente do lat. plantatam, en alusión a una piedra plantada en el suelo;
tenemos topónimos parecidos en Chanto, Chanteiro. A la misma idea también haría referencia
el topónimo Pedrafita, procedente de petram fictam “piedra clavada”.

20. Donostia: la forma vasca fue antiguamente Dono Bastia, puesto que la ciudad creció en
torno al monasterio de San Sebastián. Era habitual darle a los santos el título de Don.

21. Feans: del lat. fenales , que deriva del latín fenum, “hierba seca cortada para alimentar al
ganado, heno”.

22. Filgueira: del lat. filicariam derivado de filicem, “helecho” + sufijo abundancial -arium/am>
-eiro/a. Fitotopónimo.

23. Fisterra: del lat. finis terrae, “fin o límite de la tierra conocida”.

24. Fondevila: de fonte da Vila del lat. fontem “fuente” con apócope de–te de + villa “lugar”.

25. Fonsagrada: de fontem sacratam del lat. fontem con apócope de –te de fontem, “fuente
sagrada”.

26. Fontefría: del lat. fontem frigidam, fuente fría.

27. Fontoira: del lat. fontem auream, "fuente de oro", probablemente por el color de la
limonita (mineral de óxido de hierro hidratado) en el fondo del agua.No obstante, existen otras
posibles explicaciones.

28. Foz: del latin vulgar focem y este de faucem "garganta, desembocadura, fauces. Existen
numerosos topónimos en castellano con la forma Hoz, La Hoz.

29. Frades: de fratres "hermanos", seguramente en el sentido religioso de "monjes, frailes (cfr.
gallego frades)". Son numerosos los topónimos que se refieren a monasterios o congregaciones
de monjes o frailes (Sobrado dos Monxes, Freires, Freire, A Freira, Frádega, Frádegas,
Fradigas,.)

30. Lavacolla: nombre de un río y aldea, donde construyeron el aeropuerto de Santiago de


Compostela; tiene una etimología curiosa, derivaría de lava colea, literalmente "lava testículos"
y estaría relacionada con la tradición secular de que en ese río, se lavaban los peregrinos que
venían por el camino francés y que después echaban una carrera compitiendo hasta el Monte
del Gozo. Esta costumbre aparece ya descrita en el libro V del Códice Calixtino concretamente,
el libro V se suele denominar Guía del peregrino. Otros autores, en cambio, proponen un

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origen nava colla, donde el primer elemento podría remitir a un sustantivo nava "depresión o
valle por el que corre un río" La segunda parte suele relacionarse con una raiz indoeuropea
*kel- "altura" (cfr. latin: celsus "alto" "elevado"), que también estaría en el origen del sustantivo
latino collis, "colina"

31. León: del latín, -onis, "legión" Procede de la denominación romana Legio (Septima =
Campamento de la VII legión), el destacamento militar romano que controlaba el territorio
gallego después de su conquista, presenciaa militar que debió de ser uno de los principales
agentes del proceso de romanización de la antigua Gallaecia. La etimología popular siempre
relacionó este topónimo con el animal del mesmo nombre, que aparece incluso representado
en el escudo de la ciudad.

32. Louredo: del lat. Lauratium, derivado de laurum , "lugar donde abunda el laurel"

33. Lugo: del lat. lucum, "bosque sagrado, bosque, selva". Algunos piensan que el topónimo
puede ser prerromano en alusión al dios céltico Lugus o a la tribu de los lougei. Los romanos
denominaron al lugar Lucus Augusti, en honor de Augusto. Añadirle a una ciudad el nombre de
un militar o político (Stalingrado, Cabo Kennedy) sucede a veces, pero ese apéndice político
pocas veces dura: lo perdieron Astorga (Asturica Augusta) y Mérida (Emerita Augusta), pero lo
conserva Zaragoza (Caesaraugusta).

34. Maceda: del latín vulgar matiana o mattiana "manzano" y el sufijo colectivo -eta. El
topónimo Manzaneda es una "castellanización" posterior.

35. Mérida: de emerita, ciudad para colocar a los soldados "licenciados" (emeriti) después de
diversas campañas en Hispania. Su evolución fonética no deja de ser un semicultismo, ya que la
evolución patrimonial daría *Mierda.

36. Milladoiro: de humiliatorium "lugar donde los romeros o peregrinos, viendo por fin la
ciudad, se arrodillaban para dar gracias a Dios" o de *ad-miliatorium "lugar donde los
peregrinos echaban una piedra que traían consigo", formándose de este modo un rimero de
piedras que es el "milladoiro"

37. Mondoñedo: en la Edad Media Mindunietum. Las etimologías que se proponen plantean
muchas dudas. Las primeras hipótesis quisieron ver en Mindunietum/Mondoñedo un derivado
de la forma Monte Dumiense al relacionarlo con San Martiño de Dumio, pero hoy existe
consenso en considerar que se trata meramente de una etimología popular. Fundó el
monasterio de Dumio. Las investigaciones más recientes apuntan a un carácter prelatino del
topónimo. Así, Edelmiro Bascuas defiende la existencia de una raíz celta MIND- que se
correspondería con la raíz indoeuropea MEN- "elevación, monte". Podría pensarse que la
localización del actual Mondoñedo, en el fondo de un valle no se correspondería con el
significado de "elevación" de esa raiz prelatina. Algunos autores han señalado la posibilidad de
que el origen del topónimo se encuentre no en el conocido Mondoñedo, sino en el menos
conocido San Martín de Mondoñedo, en Foz, a unos 15 kilómetros. En San Martín de
Mondoñedo (Foz) hay que destacar su monasterio, cuya primitiva construcción dataría del siglo
X: hay teorías que defienden los orígenes de la sede episcopal de Mondoñedo en este
monasterio

38. Monforte: deriva de MONTEM FORTEM, probable referencia a una fortificación situada
sobre un monte. La palabra monte sufre aquí el apócope de su sílaba -te, igual que en
Monfero.

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39. Oleiros: puede referirse en un principio a las labores artesanales e industriales de los
ceramistas (en gallego "oleiros") pero también puede significar lugar de enterramientos
antiguos - Ollas Cinerarias-, según el padre
Sarmiento.

40. Ortiqueira: de URTICARIA, "lugar donde hay ortigas"( < lat. URTICA), con sufijo abundancial
-ariam> gallego -eira

41. Orxal: derivado del latín HORDEUM, "cebada" con el sufijo -alem. La forma tradicional
gallega orxo fue sustituida por "cebada", derivada de cibus
"alimento".

42. Oseira: remite a un antiguo URSARIA, derivado de URSUM "oso" y haría


referencia a la abundancia de este animal en el lugar.

43. Ourantes: hidrónimo de origen prerromano, de raíz *awer- con el significado de "mojar,
humedecer, fluir" (cfr. Pokorny, J., Indogermanishes etymologishes Wörtebuch, pp. 78-81). El
étimo deriva , pues, de *Awrantis con la terminación indoeuropea en -ntis (cfr. Serantes) con el
significado de "el río que humedece, que moja, que fluye". Es la misma raíz de la que proceden
los hidrónimos Vara, Varón, Avia, Avión, Auria> Ouro y, probablemente, Ourense (cfr. infra).

44. Ourense: procedente con seguridad de un adjetivo Auriense que sustituve el nombre de la
antigua Auria, relacionada para unos con explotaciones auríferas (cfr. aurum, i: "oro") y para
otros, más recientemente, con la raiz hidronímica mencionada en la voz anterior.

45. Outeiro: de ALTARIUM, "elevación del terreno, parte alta".

46. Padrón: algunos autores proponen un origen PATRONUM "patrón" pero parece más
verosímil que tenga que ver con PETRAM "piedra" (aumentativo), por la tradición jacobea
según la cual en Padrón, en la iglesia de Santiago, se conserva el "pedrón", una piedra grande
de la cual a su vez existen dos leyendas: según una, se dice que es la piedra que Santiago utilizó
en su misión evangélica para desplazarse sobre ella desde Palestina a España; según otra, sería
el pedestal en el que Atanasio y Teodoro amarraron la barca en la que traían los restos del
apóstol Santiago hasta Galicia.

47. Pedrafita: del lat. petram fictam, piedra fijada o clavada en el suelo, en referencia a la
tradición consistente en delimitar antiguos territorios o comunidades con piedras clavadas. Cfr.
Pedrafita do Cebreiro que delimita la zona gallega de la leonesa. Una variante sería Parafita,
étimo utilizado como apellido topónimo.

48. Peñalba: de PINNAM ALBAM, "pena (en gallego) alta/blanca", donde el segundo elemento
parece estar relacionado con la raíz preindoeuropea *alp-/*alb- "monte, altura'. más que con
el adietivo latino albam, "blanca"

49. Pereira: del lat. Pirus "pera" + sufixo abundancial -aria> -eira.

50. Poio: de PODIUM "altura, montículo"

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