Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
y cuenta nueva
1
una higa.
*****
conservo la memoria de casi todas las cosas,
pero los nombres que las sujetaban a la certeza se me van
yendo a un cielo cuya dirección he traspapelado
descubierto bancario
ahora estoy empezando a pagar los ratos
rotos,
conque me veréis andar algún tiempo renqueando,
en números cojos
por prefijos muy contrarios
prerromano (por poco
prebiótico),
demasiado precavido,
presunto culpable,
un prenda, prêt-
à-
porter,
precocinado,
preterizante
y precario
postmeridiano,
postergado,
postizo,
poseur
postdata:
postmoderno (y muy antiguo),
y postpretérito (o sea,
condicional)
pruebas muy contestables de mi nobleza
éstos traen papelería que los hace guzmanes,
o godos, éstos
arrancan de los cien padres de Roma que puso su rey
primero,
a estos otros les corre por las venas una sangre cerúlea,
y éstos,
en fin,
descienden de la pata del Cid; yo
vengo de Guzmán el Bobo, uso,
detrás de la mamá,
para publicar el asombro y otros estados de ánimo,
la voz,
oriunda de Alborache,
“¡odo!”,
no soy patricio, sino un desperdicio,
estupendo orificio,
y de sangre turbia,
y bajé
érase una vez
del coño de Lucy,
en el suelo
y con nigromantes
aspaventero
es error gracioso,
y disculpable,
del Diccionario de Autoridades,
que cruza aspas y vientos para explicar el engendramiento de la
palabra; es
también
fecundísima equivocación que yo voy a aprovechar aquí
y es que son,
estos renglones bufos,
los vientos que levantan las aspas mal vestidas de un molino
tarado,
que da un orujo turbio
the it’s awkward visitations
it (das
Id)
usually comes unsolicited,
without an appointment,
like a boner to a teen boy
“en el siglo”
“Carmen, al secolo Fatma ben Gallud, tunisina, abitava al
numero 48.”2
una
Los italianos dicen en su romance,
a propósito de tu nombre civil,
de ley,
que es el que gastas “en el siglo”. Así,
el de esta “buttana” mora,
sería Fatma ben Gallud.
Y digo yo, ¿cómo llamarán,
entonces,
al que usa la loba para putear?
Ése de Carmen,
vale ¿su apellido para los cielos dudosos del barrio chino,
su estupendo nombre
de religión?
dos
Por aquí decimos,
de la cantonera,
que se ha echado al mundo,
como si la dueña decente estuviera encerrada en un universo
irreal.
Arrojan,
en cambio,
en Italia,
a las gamberras,
cuando se están empleando en su oficio,
fuera del siglo,
a un tiempo que no.
2
Andrea Camilleri, La forma dell’acqua.
Axa
quiero a Axa por amiga,
porque es el nombre de una de las tres “moricas” que
enamoraban a uno,
dentro de un zéjel,
y en Jaén,
y el de aquella mujer que se enlodaba por gusto,
y no era “ni viuda
ni casada”,
también porque significa,
en la gamberra germanía,
la deliciosa vaina
niñas,
al salón
yo,
de entre todo el puterío,
porque casa mejor con mis suertes,
y con mi genio,
escojo siempre a la rameruela,
pobreta
“y desastrada”3
3
Diccionario de Autoridades.
officium putearius
es oficio
de pocero,
pues ¿no saco con él “las inmundicias” que se van juntando en
las letrinas del alma?
(también,
si traslado a nuestro idioma,
travieso,
torciéndolas,
las voces latinas que lo significan,
mester
de putero)
*****
Renuncio
aquí
a mi cargo,
me quito de los empleos que me ocupaban
y,
paradójicamente,
venían vaciándome,
descuidaré desde ahora todas mis obligaciones,
arrimo para siempre mis trastos de enlatar
Fdo. El Dimitente:
4
Sebastián de Covarrubias, Tesoro de la lenguas castellana, o española.
paseaderos
*****
las horas hay que pasearlas,
andarlas despacio,
de a poco,
sin hacer pie en ellas,
buscando nada más el ejercicio,
y tu recreo,
y que sea por tomar el aire, y estarse al fresco5
*****
Solicito a su merced el cargo (pero es
ligerísimo) de paseante
en corte,
que no deseo oficio que tenga utilidad, “ni beneficio,
ni empleo”6.
*****
aunque soy muy casero, también me gusta pasear un rato,
ya que no la capa, las sandalias, o la rebequita,
según la estación,
y que fuera contigo
5
Diccionario de Autoridades.
6
Diccionario de Autoridades.
*****
va
mi Destemplado pizarrín,
que trae,
como rúbrica,
“repudios
y purgas
de todos los tontos y semitontos”,
y he armado con el propósito de que no sirva,
ni aproveche en nada,
a los músicos mozos,
y distraiga algo del mundo a los que ya conocen Marte7
Fdo:
Truhán Sebastián Aj
7
El clavecín bien temperado, de Juan Sebastián Bach, trae, como subtítulo, “preludios y fugas
en todos los tonos y semitonos, (…) compuestos para la práctica y el provecho de los
jóvenes músicos deseosos de aprender y para el entretenimientos de aquéllos que ya
conocen este arte.”
*****
pues tendré que llevar el alma al sastre,
que se me está descosiendo,
y se le han ido cayendo los botones,
y no sirve,
y necesita algunos arreglos
y composturas,
y habrá de hacerse sin patrón,
a lo que salga
hijo
de la pelusa
soy el discípulo
algo burro
de Zadéh,
porque defiende que a la verdad la cubre la borra,
una lanilla que la difumina,
y se hace su madriguera entre el 0
y el 1
remate de final de carajada
entrad
a pillar,
que cierro la paraeta,
y voy a tenerla abierta,
nada más,
hasta agotar existencias,
vidas,
personas
y personillas
perdulario
He perdido pie, y el ojo izquierdo
y el testículo derecho,
algo de pelo,
la cabeza,
los estribos
y toda mi caballería.
He perdido el norte
y el Mediodía.
He perdido la gracia
y la paciencia,
la cuenta
y los papeles.
He perdido la honra
(deshonrat!),
los zapatos,
todos los partidos de clasificación. He perdido
tres o cuatro trenes,
unas llaves que abrían qué puertas,
el esme
muchas veces.
He perdido el cielo,
y suelo.
He perdido a los cuatro angelitos que guardaban las cuatro
esquinitas de mi cama,
y a demasiada gente de mi Casa,
y de mi barra.
He perdido mucho tiempo,
mucho. He perdido,
en fin,
al parchís,
y a las damas,
y a esto de vivir.
segni particolari nessuno
Se había acabado,
y no tenía ningún signo particular que permitiese
[re]conocerlo.
Ha extraviado todos sus nombres.
No gastaba lunares,
o cicatrices (fósiles
de alguna aventura),
o tatuajes,
ni siquiera calcomanías.
Miraron más adentro. Ahí
sí:
un follón de hierros le sujetaba los huesos del alma,
la cual traía muy accidentada.
toro
quedón
yo soy “marrajo de media embestida”, algo
jodido,
que me suelo quedar,
y no arranco hacia el capote,
y derroto8,
y será por cansancio,
y también por los humores principales que me desordenan,
que son la flema y la melancolía, sobre todo
la melancolía
8
Ángel María de Lera, Los clarines del miedo.
a pedales
es muy posible que se pierda en eficiencia y productividad,
que no parezca lo más conveniente,
pero gana uno mucho,
mucho,
en las cosas que importan,
si escribe, y anda estas cosas,
a pedales
*****
¡vivir siempre,
siempre,
en noviembre y lunes,
o miércoles,
con el mundo en temporada baja,
vaciado de domingueros y veraneantes,
los hoteles, las tiendas, los chiringuitos cerrados!
dirección: San Gován, Pembrokeshire
Yo quería (quiero
aún)
tener mi habitación,
con oficina,
en la iglesuela de San Gován,
que se derrumba por el fondo de un precipicio hasta el mar en
el Condado de Pembroke,
en Gales del Sur.
Y sería,
también,
porque dicen que el beato fuera aquel don Galván, caballero
algo mujeriego
de la Tabla Redonda,
que se vino allí a quitarse de las palestras del mundo.
andadera de espartillo
sigo el oficio de andadera de espartillo, soy
buscona que va callejeando detrás de estos ingenios,
mis escondedizos puteros
escarbillos
pues he venido a ser de esos allegadores de ceniza,
y derramadores de harina,
que descuido el espíritu del pan,
y junto éstas,
y otras basuras,
que no aprovechan,
pero hacen,
me parece,
algo
a mi caso
tic
toc
Cronos,
o Zurván, entre los zoroastrianos,
figurines del Tiempo,
salen en el Prólogo de esta comedia de mamarrachos.
De una de las paredes de la Nada
Nadie, el metesillas,
y sacamuertos,
ha colgado un reloj escacharrado que no dice las nueve menos
cuarto,
las cinco de la madrugada,
las cuatro y diez,
y un calendario que no sabe los miércoles,
ni los sábados,
febreros
y noviembres,
el año 1961,
el 21 de agosto del 76.
trasoñarse
“Trassoñar. Concebir, o comprehender con error, o
equivocación, alguna cosa, como si verdaderamente fuera, o
hubiera sucedido, al modo de lo que acontece en los sueños.”9
9
Diccionario de Autoridades.
“Quis, quid, ubi, quibus auxiliis, cur,
quomodo, quando?”
Con el propósito de desmenuzar la naturaleza del pecado,
y calificarlo para luego,
Fray Francisco Larraga echó mano,
en su Promptuario de la Theología Moral,
del “Quis, quid, ubi, quibus auxiliis, cur, quomodo, quando” de
Cicerón y Quintiliano.