Un autor,
del ámbito educativo, que ha incursionado en la
Teoría General de los Sistemas, es Edgar
Morin. Desde la visión de Morin,
la educación se enfrenta a una problemática producto
de la dispersión y compartimentación de
los conocimientos, frente a las realidades o problemas poli disciplinares. Desde esta
postura, se pregunta ¿cómo lograr el acceso de la información sobre “el mundo”
y cómo lograr la posibilidad de articularla y organizarla?
Morin entiende que esto es posible a partir
de lo que denomina “EL
CONOCIMIENTO PERTINENTE”, es
decir, un conocimiento capaz de abordar problemas globales, y este conocimiento
debe desarrollarse en un contexto, dentro de una globalidad, atendiendo la multidimensionalidad y evidenciando la complejidad.
Morin define los
conceptos anteriores de la siguiente forma::
Lo global
(las relaciones entre todo y partes)
Lo global
es más que el contexto, es el conjunto que contiene partes diversas ligadas de manera inter-retroactiva u organizacional De esa manera,
una sociedad es más que un contexto, es un todo organizador del cual hacemos
parte nosotros. El Planeta Tierra es más que un contexto, es un todo a la
vez organizador y desorganizador del cual hacemos parte. El todo tiene
cualidades o propiedades que no se encontrarían en las partes si éstas se
separaran las unas de las otras y ciertas cualidades o propiedades de las
partes pueden ser inhibidas por las fuerzas que salen del todo. Marcel
Mauss decía : « Hay que recomponer el todo » . Efectivamente, hay que
recomponer el todo para conocer las partes. De allí viene la virtud
cognitiva del principio de Pascal del cual deberá inspirarse la educación
del futuro : «todas las cosas siendo causadas y causan tes, ayudadas y
ayudantes, mediatas e inmediatas y todas sostenidas por una unión natural e
insensible que liga las más alejadas y las más diferentes, creo imposible
conocer las partes sin conocer el todo y tampoco conocer el todo sin conocer
particularmente las partes »’
Además,
tanto en el ser humano como en los demás seres vivos, hay presencia del
todo al interior de las partes : cada célula contiene la totalidad del
patrimonio genético de un organismo policelular; la sociedad como un todo está
presente en el interior de cada individuo en su lenguaje, su saber, sus obligaciones, sus normas. Así mismo,
como cada punto singular de un holograma contiene la totalidad de la
información de lo que representa, cada célula singular, cada individuo singular
contiene de manera holográfica el
todo del cual hace parte y que al mismo
tiempo hace parte de él.
Lo
multidimensional
Las
unidades complejas, como el ser humano o la sociedad, son multidimensionales ; el ser humano es a la vez biológico,
síquico, social, afectivo, racional. La sociedad comporta dimensiones
históricas, económicas, sociológicas, religiosas... El conocimiento pertinente
debe reconocer esta multidimensionalidad e insertar allí sus informaciones : se podría no
solamente aislar una parte del todo sino las partes unas de otras; la
dimensión económica, por ejemplo, está en ínter-retroacciones permanentes con
todas las otras dimensiones humanas; es más, la economía conlleva en sí, de
manera holográmica,
necesidades, deseos. Lo complejo: la complejidad es la unión entre la unidad y
la multiplicidad. Este aspecto será el arte que deberá desarrollar el docente,
para lograr alcanzar el conocimiento pertinente, que se espera, sea obtenido,
como resultado final de su trabajo.
Lo
complejo
El
conocimiento pertinente debe enfrentar la complejidad. Complexus significa lo que está
tejido junto; en efecto, hay complejidad cuando son inseparables los elementos
diferentes que constituyen un todo (como el económico,
el político, el sociológico, el sicológico, el afectivo, el mitológico) y que
existe un tejido interdependiente,
interactivo e interretroactivo entre
el objeto de conocimiento y su contexto, las partes y el todo, el todo y
las partes, las partes entre ellas. Por esto, la complejidad es la unión entre
la unidad y la multiplicidad. Los desarrollos propios a nuestra era planetaria nos enfrentan
cada vez más y de manera cada vez más ineluctable a los desafíos de la
complejidad.
En consecuencia,
la educación debe promover una « inteligencia general » apta para referirse, de
manera multidimensional, a lo complejo, al contexto en una concepción global.
Siempre
que vuelvo a repasar los conceptos de Morin presto
principal atención en el "sujeto", dado que, su accionar, es
determinante, en las consecuencias que producen sus acciones en los sistemas en los cuales tiene "participación",
tanto sea en forma directa o indirecta. Pensemos entonces, en las
consecuencias que desencadena "el sujeto cognoscente" considerando el
grado de responsabilidad en los sistemas de los que forma parte. ¿es igual el
impacto si es ministro de educación, profesor universitario, docente de una
escuela inicial o EGB?. No, sin duda no. Un ministro, formalmente, impacta en
un Metasistema (conjunto de sistemas). Un docente puede impactar en un
"sistema" (puede ser su unidad, un alumno) y cada docente, en forma individual, impactará
en su ámbito de gestión. Ahora, bien estos ejemplos con para entender el
impacto del "sujeto cognoscente" en un sistema educativo (sea un metasistema o sistema en menor dimensión), aunque
debemos mencionar, que la formalidad no siempre es el factor a considerar como
influencia, en realidad lo que hay que considerar, es el real impacto del
sujeto cognoscente independientemente que su rol sea formal o informal.
Si cabe aclarar el siguiente punto, que es muy importante en el tema que nos
une, que es la educación; siempre el docente, cuando está al frente de una
clase, es un sujeto cognoscente con el rol de "organizador" según
define este concepto la Teoría General de los Sistemas, razón por la cual su
accionar tiene impacto directo en otros sujetos cognoscente, de ahí la gran
importancia de su rol y la necesidad de su continua evolución. Podemos apreciar la importancia del rol docente, para que los alumnos, puedan asimilar el "conocimiento pertinente", que es ese, el que se espera que sea.
Fuentes:
Fuentes:
- Teoría General de los Sistemas, Ludwig Von Bertatlanffy,Fondo de Cultura Económica, año 2011.
- Los Siete Saberes necesarios para la educación del futuro, Edgar Morin, Santillana, 1999
- Luis Oterro Gil, su experiencia en el análisis de sistemas y como sistémico. 1980-actualidad
El artículo me pareció muy interesante. Creo que después del siglo de las especializaciones hemos vuelto a entender la necesidad de comprender y considerar también el todo.
ResponderEliminarCon respecto a la educación y las nuevas generaciones creo que es un desafío actual de los docentes ayudar a los alumnos a superar la dispersión y abordar la complejidad. Hoy en día reciben innumerable información de diversos temas. Incluso información a la que antes era impensable acceder, sobre todo si consideramos las variables distancia y tiempo. El verdadero desafío para ellos es seleccionar, jerarquizar e integrar esa información en un todo coherentemente articulado. Rescato la frase de Pascal que incluye el artículo: “creo imposible conocer las partes sin conocer el todo y tampoco conocer el todo sin conocer particularmente las partes”.
Saludos,
Analía
El artículo me pareció muy interesante. Creo que después del siglo de las especializaciones hemos vuelto a entender la necesidad de comprender y considerar el todo.
ResponderEliminarCon respecto a la educación y las nuevas generaciones creo que es un desafío actual de los docentes ayudar a los alumnos a superar la dispersión y acercarse a la complejidad. Hoy en día reciben innumerable información de diversos temas. Incluso información a la que antes era impensable acceder, sobre todo si consideramos las variables distancia y tiempo. El verdadero desafío para ellos es seleccionar, jerarquizar e integrar esa información en un todo coherentemente articulado. Rescato la frase de Pascal que incluye el artículo: “creo imposible conocer las partes sin conocer el todo y tampoco conocer el todo sin conocer particularmente las partes”.
Saludos,
Analía
Muy bueno Luis, se nota que te metiste en el tema de la TGS. Uno intuye que no puede aportar casi nada desde la brevedad de estos espacios, que son lo contrario de la complejidad. Pero es cierto que la TGS parece apropiada para abordar el estudio de la/s ciencia/s de la Educación, así prima facie.
ResponderEliminar