Cuando vivimos experiencias difíciles, es posible que sintamos que estas nos desbordan y que no sabemos cómo actuar. No obstante, las estrategias de afrontamiento son fundamentales para tener una mejor respuesta frente a esas situaciones que nos producen altos niveles de estrés.

La capacidad de afrontar las situaciones difíciles no solo tiene relación con hallar una solución específica y práctica para un determinado problema, también involucra la capacidad de gestionar el estrés y las emociones generadas por la situación.

Cada persona puede tener una respuesta diferente frente a las situaciones que les generan estrés, en algunos casos el estrés puede magnificar las emociones, mientras que en otros la respuesta puede ser inversa dependiendo de diversos factores. Así mismo, algunas de las respuestas pueden ser voluntarias y otras, involuntarias.

Estrategias de afrontamiento

Existen diversas estrategias de afrontamiento y muchas veces suele ser la situación la que define la respuesta. Conoce a continuación algunas de ellas.

Anticipación. Se trata de anticiparse a problemas o situaciones conflictivas considerando, así mismo, las posibles reacciones emocionales, las respuestas o posibles soluciones.

Confrontación. Se refiere a las respuestas que mediante acciones directas o agresivas buscan dar una solución a la situación.

Planificación. Tiene que ver con pensar y desarrollar estrategias para solucionar el problema.

Distanciamiento. Se trata de intentar apartarse del problema, evitar pensar en él y evitar que la situación le cause algún tipo de afectación.

Autocontrol. Hace referencia a aquellos esfuerzos dirigidos a controlar los sentimientos propios y las respuestas emocionales.

Reevaluación positiva. Se trata de prestar atención a los aspectos positivos que la situación pueda tener.

Escape – evitación. Se refiere a apartarse de la situación estresante para evitar pensar en ella e incluso al uso de pensamientos irreales. También al consumo de comida, bebidas alcohólicas, sustancias psicoactivas o medicamentos para evitar que la situación genere una afectación emocional.

Supresión. Hace referencia a evitar de manera intencional los pensamientos relacionados con la situación que genera estrés.

Postergación. Se trata de postergar cualquier tipo de acción frente a la situación estresante hasta que se tenga más información sobre esta o hasta que sea el momento oportuno para tomar acción.

Falta de afrontamiento. Deja ver la incapacidad de una persona para enfrentar la situación y su falta de control sobre el mismo.

No siempre la respuesta a las situaciones estresantes es una sola, en ocasiones, varias estrategias de afrontamiento pueden ser la respuesta.

Algunas estrategias de afrontamiento que podrías desarrollar

Además de las estrategias de afrontamiento ya mencionadas, existen otras que podrías desarrollar para tener una mejor respuesta ante las situaciones de estrés:

• Mantener un control activo en el problema.
• Análisis sobre los propios pensamientos, motivaciones, emociones y reconocimiento de la responsabilidad propia en el manejo de la situación.
• Intentar no añadir drama a la situación.
• Analizar la situación desde diferentes perspectivas.
• Confiar en nosotros mismos y en nuestras capacidades.
• Admitir nuestros límites.
• Pedir ayuda a las personas de nuestro entorno cercano, cuando sentimos que necesitamos apoyo.

Tener una mayor conciencia y autoconocimiento frente a las situaciones estresantes puede ser la clave para tener una mejor respuesta. ¿Qué tal si intentas analizar más y gestionar mejor tus emociones en lugar de dejarte desbordar por la situación o intentar huir?

 Afrontar el abuso sexual

Sin duda, una de las situaciones más difíciles de afrontar es el abuso sexual. Conscientes de ello, en el Movimiento #YoDigoNoMas te brindamos herramientas y recursos para que puedas afrontar este tipo de experiencia de una mejor manera. Así mismo, te brindamos un espacio seguro y de confianza para que puedas compartir tu historia. Conoce más de nuestro movimiento y súmate a nuestra causa.