JiMin no tenía problema con eso, siempre respeto las creencias y religiones de toda persona; sin embargo, la tela ya lo estaba asfixiando y el bochorno de sus nervios solo empeoraba las cosas. Tuvo mucho cuidado de tapar él mismo la mordida gris en su cuello antes de que las omegas lo tocaran ahí.

Las mujeres le habían puesto otro aceite más aromático, el cual hacía resaltar más su olor natural, sabía que lo hacían con segundas intenciones.

Cuando salió de sus alas para dirigirse a la salida de la mansión, un alfa de placa escrita como "Omër" se inclinó y lo saludo. No pudo evitar extrañarse por la ausencia del brasileño, pero no dijo nada.

En las escaleras de la entrada pudo ver de lejos el bentley de uso común del alfa. Estaba YoonGi ahí junto con JungKook.

El auto estaba horizontalmente y se encontraban en el extremo no visible del auto, pero su altura era una desventaja para ocultarlos en totalidad.

También estaban alejados, pero JiMin pudo ver claramente sangre en la ropa de YoonGi. Por el reojo pudo ver cómo JungKook le pasaba una camisa azul limpia. Sintió su estómago agitarse por el color carmesí, pero rápidamente fue descartado por la imagen que se presentó sin previsión.

Sintió su rostro calentarse cuando el turco se quitó la prenda superior sin miramientos. Hace mucho que no veía el torso y los brazos adornados por los tatuajes del alfa, su omega estaba ronroneando de complacimiento.

Escuchó las risas ligeras de Elit, Kenia y Edith atrás suyo, su rostro solo se volvió más rojo al percatarse del aumento en sus feromonas.

—Ah, maldición —se susurró así mismo, sin poder comprender el por qué no verse tan estoico por la sangre pero si por la desnudez de YoonGi. Culpó al libido en aumento en los últimos días.

Para cuando llegaron a la altura del Bentley, el alfa ya estaba completamente limpio, sin ninguna mancha roja en sí.

—Amir —se inclinan las mujeres y el alfa alto que los acompaño. Era una reverencia mucho mayor a la que hacían con él y no pudo evitar pensar en lo incómodo que sería.

—Hürrem, feliz cumpleaños—lo saluda JungKook con una sonrisa mientras también se inclinaba ligeramente.

—Gracias JungKook —contesta JiMin con un asentimiento, YoonGi frunce el ceño y se acerca a JiMin.

El omega suelta un bajo sonido de sorpresa cuando YoonGi toca su cara, acomodando el hiyab y cubriendo sus labios. JiMin lo mira suspicaz cuando se aleja.

—Debes cubrirte más, podría ser más difícil si muestras tu rostro en totalidad. Esta vez vas conmigo, sabrán quien eres—dice YoonGi mientras abre la puerta, invitando a JiMin a pasar. La invasión al espacio de JiMin fue casi osada a segundo plano.

Agradece que la tela cubriera parte de su rostro para esconder el carmesí que ya era y se apresura a entrar al auto. YoonGi lo sigue y se sienta al lado suyo, esta vez no deja un espacio muy grande entre ellos, lo que lo desconcierta más.

—Omër bizi götürecek. [Omër nos llevará]—indica YoonGi cuando JungKook hace ademán para entrar en el asiento del piloto.

—¿Omër?

—¿Ben?[¿Yo?]

Dijeron los dos alfas al mismo tiempo, JiMin como siempre, no entendió el intercambio.

—Evet[Si] —responde YoonGi cortante. El alfa llamado Omër se inclina de hombros mientras entra al auto y JiMin ve confusión en el rostro de JungKook, no dice nada a pesar de la extrañeza en él.

El auto sale de la casa y se empieza a dirigir a la ciudad. El omega está sorprendido de no ver más autos siguiéndolos como de costumbre y pregunta.— ¿Y tus demás hombres?

Mafia Roja | YoonMin (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora