Mejorar la flexibilidad parece algo que muchas personas no toman en cuenta cuando se trata de hacer ejercicio. Sin embargo, un buen nivel de flexibilidad facilita muchos de los movimientos que se realizan en todas las actividades físicas que hacemos durante el día, ya sea deportivas o no.
Un buen nivel de flexibilidad, además, ayuda a evitar lesiones al momento de entrenar. Aquellos dolores de espalda podrían haberse evitado si, antes de intentar cualquier movimiento que comprometiera su integridad, contaras con un poco más de flexibilidad.
Pero, ¿cómo se puede mejorar la flexibilidad sin lastimarnos? La respuesta es sencilla y fácil de hacer desde casa; además, puede convertirse en una rutina de ejercicio totalmente nueva. Si quieres saberla, continúa leyendo.
Yoga
Una de las maneras más convenientes de mejorar la flexibilidad, es a través de yoga (actividad que puedes hacer incluso durante tu embarazo). Ya sea que quieras poder tocarte las puntas de los pies con las manos o hacer un split completo, el yoga es la respuesta.
Para comenzar, puedes probar con Yin yoga, un práctica relativamente moderna en la que los músculos se encuentran totalmente relajados y las posturas, inicialmente, se mantienen de 3 a 5 minutos. Este tipo de yoga es muy delicado y permite trabajar sobre la estructura del tejido conectivo, tendones y ligamentos, además de todos los beneficios mentales y espirituales que puede ofrecer.
Bailar
¿Sabes bailar? Es momento de desempolvar tus zapatos de baile, pues además de ser un excelente ejercicio cardiovascular, bailar te permite mejorar la flexibilidad.
Los mejores son los ritmos latinos y hip-hop, pero también puedes probar con Zumba, un tipo de baile que se popularizó mucho en los gimnasios hace ya algunos años, y que otorga muy buenos resultados.
Pilates
Aunque el objetivo principal de los pilates, es fortalecer el core por medio de la resistencia, algunos ejercicios que se llevan a cabo en una rutina común de este método, mejoran la flexibilidad de forma notable.
Principalmente, puedes practicar posiciones como ‘la sierra’, ‘el arado’ y ‘la T con estiramiento’. Cada una de ellas te ayudará a mejorar la flexibilidad en diferentes zonas de tu cuerpo, desde las piernas hasta la espalda y cuello. Si quieres, también puedes probar otras versiones que se combinan con HIIT, una vez que quieras mejorar tus estiramientos y fortalecer tus músculos.
Tai chi
El Tai chi es un ejercicio de movimiento lento y de muy bajo impacto. Esta práctica es considerada como meditación en movimiento, en la que los músculos se encuentran totalmente relajados, mientras que los tendones y ligamentos no se encuentran estirados ni flexionados.
Este ejercicio es excelente cuando quieres mejorar tu flexibilidad a un nivel no tan avanzado, y puede convertirse en una rutina de meditación diaria que además te da balance, condición aeróbica y fortalecimiento en los músculos.