Enriquecimiento ambiental en loros

Enriquecimiento ambiental en loros

¿Qué el el enriquecimiento ambiental?

El enriquecimiento ambiental consiste en la mejora del entorno de nuestra mascota favoreciendo el comportamiento biológico de la especie y las características de su ambiente natural.  Ofreciendo enriquecimiento ambiental a nuestras aves aumentamos su actividad física e intelectual favoreciendo el desarrollo de las conductas naturales.

Existen cinco tipos de enriquecimiento ambiental: social, cognitivo, físico, nutricional y sensorial. En este artículo nos centraremos en el enriquecimiento nutricional.

Los loros son animales que por norma general en su hábitat natural viven en amplios grupos sociales que dedican las horas del día en realizar una serie de actividades donde destacan la búsqueda y obtención de alimentos.  Estas mismas aves salvajes no distan mucho de los loros que tenemos en casa, que a pesar de ser dóciles precisan de las mismas actividades que sus congéneres silvestres.

Muchas de las aves de compañía no tienen, o no se les ofrece, la oportunidad de desarrollar aquellos aspectos de su comportamiento natural, dado que presentan limitaciones para las interacciones sociales, el vuelo, la conducta de forrajeo e incluso las conductas de acicalamiento, lo cual favorece que se desarrollen problemas de comportamiento al no poder satisfacer sus necesidades de manera adecuada. Aplicando algunos cambios en nuestra rutina de cuidados con ell@s podemos mejorar sustancialmente su calidad de vida.

¡Hablemos del enriquecimiento nutricional!

 

¿En qué consiste el enriquecimiento nutricional?

La alimentación es un aspecto fundamental que no siempre se proporciona correctamente a las aves.

Estamos acostumbrados a colocar diariamente el pienso y el alimento fresco de nuestros loros en sus comederos para que puedan comerlos y aparentemente no hay nada malo en ello, pero si volvemos a pensar en sus congéneres silvestres veremos que en comparación nuestros loros para satisfacer su apetito únicamente tienen que acercarse al comedero, llenar el buche y listo. En total el tiempo invertido en la búsqueda y obtención del alimento en cautividad es prácticamente nulo si lo comparamos con el tiempo que tardaría un loro silvestre en obtener su alimento y esto puede conllevar muchos problemas derivados de la falta de estímulos, el aburrimiento y el exceso de energía sin hacer esfuerzo (Un loro libre volará de un sitio a otro para encontrar la comida e irá quemando energía a la vez que la ingiere, mientras que un loro que viva en cautividad suele tener menor desgaste físico, por lo que este cóctel de comida rápida y falta de ejercicio es una mezcla peligrosa.

La alimentación debe  ser lo más variada posible, incluyendo pienso, verduras, fruta y mezclas de semillas, pero como ya sabes, esto no lo es todo, además de proporcionar una dieta rica y variada, debemos esforzarnos en presentar los alimentos de modo que suponga un reto para nuestras aves y es aquí donde entra en juego el enriquecimiento ambiental.

El principal enriquecimiento ambiental-nutricional se lleva a cabo favoreciendo el forrajeo, el cual es una conducta natural de las psitácidas y es la principal actividad en el día de un ave libre.

El forrajeo se puede favorecer por medio de dispositivos diferentes, siendo lo más habitual las BANDEJAS DE FORRAJEO.

 

Bandejas de forrajeo

Para ofrecer una bandeja de forrajeo a nuestros loros necesitaremos de una superficie amplia, adaptada al tamaño de nuestras aves, por ejemplo, una bandeja de plástico de uso humano puede servirnos para las pequeñas psitácidas (agapornis, periquitos, ninfas, forpus, etc.) mientras que para loros de especies más grandes necesitaremos bandejas más grandes.

Rellenaremos las bandejas con al menos 3 materiales no comestibles, como puede ser el sustrato de papel prensado, heno y tiras de papel y lo mezclaremos con el alimento, por ejemplo, con la mixtura y brotes de ensalada.

Al ofrecer el alimento de este modo, estaremos estimulando a nuestra ave a encontrar el alimento entre diferentes texturas no comestibles y tardará más tiempo en consumir el alimento.

En definitiva, estamos ofreciendo lo mismo que colocaríamos en su comedero, pero el tiempo y el intelecto que emplean para consumirlo aumenta y por lo tanto es mucho más enriquecedor para nuestros loros.

 

Jaulas/espirales para alimento fresco

Podemos colocar las verduras y frutas en pequeñas jaulitas de malla electro soldada que colgaremos de los barrotes de la jaula o por la casa, para que tengan que esforzarse en consumirlas a través de la reja en lugar de comerlo directa y fácilmente del comedero. ¡Todo un reto!

 

Paquetitos de papel o cartón

Con este modelo de enriquecimiento ambiental, esconderemos el alimento en bolitas de papel (sin colorantes ni tintes) o en cajitas de cartón, de modo que nuestros loros tengan que romper el papel o el cartón para poder comer.

 

Juguetes de ingenio comerciales:

Existen en el mercado distintos modelos de juguetes en los que esconder el alimento y nuestros loros tienen que resolverlos para obtener el alimento, la mayoría son aptos, lo único que hay que cerciorarse es que no tengan piezas pequeñas que puedan ingerir y que sean duros y resistentes.

 

Como ves existen multitud de formas originales y divertidas para ofrecer la comida a nuestros loros y que de este modo estén más entretenidos y por ende más sanos ¿Quién dijo que con la comida no se juega?

 

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