La familia de Lázaro es de clase baja y viven gracias al dinero que gana el padre trabajando en el, pero el padre de Lázaro fallece. Entonces la madre tiene un hijo con un hombre negro y más tarde los pillan robando alimetos, castiga a la madre y al padrastro de Lázaro. Lázaro finalmente se irá a vivir con el ciego, su primer amo.

Esta novela trata sobre la vida Lázaro González Pérez, un niño de ocho años que es más conocido como Lazarillo de Tormes que no por su propio nombre.
Lázaro nació en el río Tormes y vivía en una aldea de Salamanca (Tejares).

El ciego era tramposo, avaro y egoísta y casi no alimentaba a Lázaro, eso hizo que Lázaro se empeñase distintas ideas para robarle comida al ciego. Finalmente Lázaro deja a su amo por qué no lo alimenta suficiente.
El ciego representa la ira (furia o violencia de los elementos).

Lázaro aún muy joven vive en las tierras de Toledo con el ciego con el que está durante un año. El ciego enseña muchas cosas a Lázaro sobre todo a ser astuto, tramposo y pícaro, pero estas enseñanzas se las da a base de golpes.
La lección que extrae de la estancia con el ciego es que hay que ser hábil y hacer lo que sea necesario para conseguir comida y sobrevivir.

Con el clérigo, Lázaro está durante seis meses, come aún menos que con el ciego y tiene que mejorar su ingenio para poder alimentarse. Ahí aplica ciertos conceptos que le había enseñado el ciego.
El aprende que la avaricia y el egoísmo son normas de conducta del género humano y entiende que la hipocresía intenta ocultarlas.

El Clérigo representa el tema de la corrupción del clero, ya que este es avaro e inescrupuloso. El guardaba la comida en un arca para comérselo él sólo y no dar casi nada a Lázaro, solo le ofrece la comida que supuestamente había sido roída por ratones (en verdad había sido el propio Lázaro).
El clérigo representa la gula y la avaricia.

Lázaro con el escudero vive en una casa sin muebles ni nada, solo paredes oscuras durante menos de dos meses, el no se esperaba eso ya que por la apariencia del escudero parecía que era bastante rico y que tenia muchas pertenencias, pero Lázaro pronto se dio cuenta que por tener no tenían ni para comer.
Allí aprende Lázaro que la honra es pura apariencia y que con ella no se come, porqué el escudero aparentaba ser una cosa, y resultaba ser otra.

El escudero representa las falsas apariencias de la época. En este caso los papeles entre el amo y Lázaro cambian, el escudero depende de Lázaro para sobrevivir en vez de que Lázaro dependiera del escudero para salir adelante. El escudero luego lo abandona al no poder pagar muchas deudas, y Lázaro se queda sin amo.
El escudero también representa el orgullo y la soberbia.

Lázaro está poco tiempo con este amo, unos 8 días, ya que su principal problema era el ansía por comer y no por mujeres.
Con el aprende sobre la promiscuidad.

El fraile no le maltrata incluso le regala sus primeros zapatos pero para Lázaro el no es un referente de virtud ni de costumbres cristianas.
El fraile de la merced representa la pereza y la lujuria.

Con el buldero está casi 4 meses, Lázaro no es solo un espectador sino que interviene y ayuda a que las bulas vayan bien, callándose los engaños que el sabía.
Mientras está al servicio del buldero, aprende a obtener provecho de los engaños que este cometía, aunque esto sea indigno y no este bien.

El buldero fue el amo más falso y con menos escrúpulos de todos los que tuvo. Este representa la falsa religiosidad. El buldero vendía bulas solamente para beneficiarse de las ganancias, y convencía a la gente para que las comprara. Era tan falso que llegó al punto de hacer un pacto con un alguacil, para que la gente comprara las bulas. Lázaro lo deja porque no le daba mucha atención.
El buldero también representa la codicia (deseo de algunas cosas buenas o la riqueza).

El capellán le ofrece el primer trabajo a sueldo de la vida de Lázaro, está 4 años trabajando con el hasta que consigue comprarse ropa y una espada.
Con el capellán, Lázaro aprende que dando un trabajo honrado a alguien puedes ayudarlo, y aunque no puedas sacarlo de la miseria y de la pobreza, si puedes encaminarlo hacia una vida mejor.

El capellán es un oportunista que se vale de otras personas para recibir unos beneficios. Este le ofrece el primer trabajo con sueldo a Lázaro.
El capellán representa la envidia (deseo de algo que no tiene).

Lázaro está muy poco tiempo con el alguacil, ya que considera que es un trabajo demasiado peligroso.
Con él aprende que tampoco hay que tomar muchos riesgos si no es necesario.

El alguacil representa la ley en aquella época, en el poco tiempo que están juntos le intenta enseñar a diferenciar entre el bien y el mal aunque por esos tiempos Lázaro ya era consciente de ello.