que el país más rico y poderoso del planeta tenga problemas para garantizarle una vida sana a sus niños pequeños es verdaderamente una noticia que sorprende.
esta ha sido la conclusión a la que ha llagado la organización para la cooperación y el desarrollo económico (ocde): que durante la primera década del siglo xxi, el nuestro fue el país con mayor riesgo de mortalidad para niños, desde su nacimiento hasta su primer año de vida.
según un nuevo estudio científico publicado por la revista health affairs, un menor nacido en estados unidos posee más de un 70% más de posibilidades de morir antes de la edad adulta, si se compara su vida con la de los niños nacidos en otros 20 países ricos y democráticos.
de hecho, la patria de washington y lincoln ha quedado en el último lugar de esa lista.
esta investigación sobre la calidad de la salud infantil ha estimado que, desde 1961, el bajo rendimiento del país representa más de 600,000 muertes infantiles, fallecimientos que no se habrían producido si esos niños hubieran nacido en otros países ricos.
"en todos los países ricos y democráticos que estudiamos, los niños mueren con menos frecuencia que hace 50 años -apuntó ashish thakrar, autor principal del estudio-. pero encontramos que los niños están muriendo más a menudo en estados unidos que en cualquier país similar.”
el estudio se publica tres meses después de que el congreso permitiera que expiren los fondos para el programa de seguro de salud para niños, que les brinda un seguro médico a nueve millones de niños de bajos ingresos.
el análisis se ha basado en datos publicados a principios de este año, que encuentra que la expectativa de vida general en estados unidos ha disminuido en los últimos dos años, una tendencia preocupante que no se observaba desde la década de 1960.
en el periodo que va de 2001 a 2010, los investigadores encontraron que el riesgo de muerte en este país llegaba al 76%, el más alto para los bebés de todos los países analizados. además, ee.uu. arrastra con una tasa de mortalidad infantil por prematuridad extrema tres veces mayor que la de sus países pares.
al profundizar en las cifras, se halló que los 20 países han visto descender las muertes infantiles desde la década de 1960, pero que, al mismo tiempo, estados unidos se erige como el peor en muertes infantiles desde la década de 1990.
de acuerdo con thakrar, una de las razones de este triste lugar para eeuu se encuentra en el fragmentado sistema de cuidado de la salud, a partir del cual una mujer se puede quedar sin seguro de salud antes de quedar embarazada, cuando por lo general calificaría para medicaid, lo que podría conducir a problemas de salud no tratados que en última instancia afectan al niño.
“realmente parece deberse al impacto de nuestro fragmentado sistema de atención médica”, aseguró.
otros factores de índole social probablemente desempeñen un papel importante, como el aumento de la pobreza infantil en la década de 1980.
el estudio también se detuvo en la triste realidad de que los adolescentes estadounidenses de 15 a 19 años tienen 82 veces más probabilidades de morir a causa de un homicidio con armas que sus pares de las otras 19 naciones desarrolladas.
con el 4.4% de la población mundial, pero casi la mitad de las armas en manos de civiles en todo el mundo, la situación de eeuu transmite un único dictamen: mientras más armas haya en un país, más muertes de armas de fuego habrá.
además, adolescentes estadounidenses poseen el doble de probabilidades de morir en accidentes automovilísticos que sus pares en el extranjero, según las estadísticas, con el agravante de que el congreso no está financiando un seguro de salud para niños.
a principios de este año, el congreso no reautorizó los gastos para un programa de visitas domiciliarias que atiende a familias de bajos ingresos y sus hijos. los fondos para la visita domiciliaria a la madre, al bebé y a la primera infancia se agotaron, y parece que no hay intenciones de llevar a discusión una extensión de su presupuesto.
a thakrar le preocupa que la inestabilidad en la forma en que financiamos los programas de atención médica solo termine alimentando el pésimo desempeño de eeuu en la salud infantil, lo que hará difícil que la situación mejore sin un compromiso claro del gobierno para mejorar la salud de los niños.
“estamos viendo los efectos de la inestabilidad en este momento -concluyó-. en todo el país, las familias están esperando saber si continuarán teniendo un seguro de salud y si sus visitas familiares están en riesgo. los programas que han demostrado su beneficio en el país todavía se enfrentan a una inestabilidad constante”.
los países analizados fueron alemania, países bajos, austria, canadá, bélgica, noruega, luxemburgo, italia, islandia, dinamarca, españa, francia, grecia, irlanda, portugal, suecia, suiza, turquía, reino unido y estados unidos.