Por Bob Christie - The Associated Press
Los republicanos que controlan el Senado de Arizona votaron el martes a favor de prohibir el aborto después de las 15 semanas de embarazo, adelantándose a la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos, que podría provocar cambios sísmicos en las normas sobre el aborto en el país.
La votación se produjo a pesar de las objeciones de los demócratas de la minoría, que dijeron que la medida era inconstitucional en virtud del histórico caso Roe contra Wade y de otras decisiones de la Corte Suprema que el alto tribunal podría anular.
[No, es falso que haya un mayor riesgo de aborto espontáneo por la vacuna de COVID-19]
También recordaron que cualquier prohibición tendría un impacto desproporcionado en las mujeres pobres y de minorías que no podrán viajar a estados demócratas sin leyes estrictas sobre el aborto.
Pero la senadora Nancy Barto, patrocinadora republicana del proyecto de ley, dijo que espera que el alto tribunal mantenga la ley de Mississippi que prohíbe el aborto después de las 15 semanas que ahora está sopesando.
“El estado tiene la obligación de proteger la vida, y de eso trata este proyecto de ley”, declaró Barto durante el debate. “Un bebé de 15 semanas en el vientre materno tiene la nariz, los labios, los párpados completamente formados, se chupan los pulgares. Sienten dolor. De eso trata este proyecto de ley”, añadió.
Arizona ya cuenta con algunas de las leyes de aborto más restrictivas del país, incluida una que lo prohibiría automáticamente si el alto tribunal anula completamente el caso de Roe contra Wade, la sentencia de 1972 que consagró el derecho al aborto en todo el país.
Los republicanos esperan establecer la prohibición de las 15 semanas para que entre en vigor rápidamente si la Corte Suprema limita aún más el derecho al aborto, pero no llega a anular completamente el caso de Roe contra Wade. La medida es muy similar a la ley de Mississippi.
[La Corte IDH condena a El Salvador por criminalizar a mujer que sufrió un aborto espontáneo]
Según la normativa actual, el aborto es legal hasta el momento en que el feto puede sobrevivir fuera del vientre materno, que suele ser alrededor de las 24 semanas.
El senador demócrata Martin Quezada presionó a Barto sobre el estado de la ley actual, con el caso de Roe contra Wade y una serie de decisiones posteriores que consagran el derecho de la mujer al aborto.
“Entiendo las esperanzas de lo que hará la Corte Suprema desde su lado del pasillo”, dijo Quezada. “Pero tal y como está hoy, ahora mismo, ¿es esta ley constitucional o no?”, agregó.
“Yo creo que sí. Creo que lo es”, dijo Barto. “Creo que nuestra constitución defiende claramente la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad y la primera parte de eso es la vida”, apuntó.
Quezada, que representa partes de Glendale, alegó que esa argumentación está mal.
“Si estamos esperando a ver lo que hace la Corte Suprema, esperemos antes de empezar a tratar de cambiar estas leyes”, dijo.
También señaló que los residentes de Arizona de bajos ingresos que ya tienen dificultades para acceder a la atención sanitaria se verán afectados por la prohibición de las 15 semanas.
“En lugar de hacer que este tipo de atención médica sea más accesible para estas personas, estamos dificultando su acceso”, dijo. “Así que la realidad es que estamos haciendo la vida más difícil para las personas que necesitan más ayuda en nuestra sociedad”, afirmó.
El proyecto de ley pasa ahora a la Cámara de Representantes del estado, donde la mayoría de los republicanos también respalda habitualmente las restricciones al aborto. Si se aprueba allí, pasará a la mesa del gobernador Doug Ducey. El republicano se opone al aborto y ha firmado todos los proyectos de ley relacionados que han llegado a su escritorio en las últimas siete sesiones.
El proyecto de ley de Barto convertiría en un delito que un médico realizara un aborto después de las 15 semanas, pero prohibiría la persecución de las mujeres que practiquen uno.
Los médicos podrían enfrentarse a cargos por delitos graves y perder su licencia para practicar la medicina. Hay una excepción para los casos en que la madre corre peligro de muerte o de sufrir graves lesiones permanentes, pero no para los casos de violación o incesto.
De los 13,186 abortos realizados en Arizona en 2020, 636 fueron después de las 15 semanas de embarazo, según los últimos datos del Departamento de Servicios de Salud de Arizona.
Arizona también ha presentado una propuesta para reflejar una ley de Texas que prohíbe efectivamente los abortos después de seis semanas, pero no ha avanzado en la Legislatura.
La medida es única en el sentido de que permite a los ciudadanos privados presentar demandas civiles contra cualquiera que ayude a otra persona a abortar después de las seis semanas. Ha dificultado los desafíos legales porque el Gobierno no participa en su ejecución.