Muchas veces me había planteado hablar sobre cómo reaccionar ante determinadas “agresiones sexuales” pero nunca había encontrado el momento adecuado. Hoy, después de que el pasado viernes un exhibisionista pretendiese sorprenderme, creo que ha llegado la hora de hablaros, desde mi experiencia, sobre cómo reaccionar ante un exhibicionista.
Primero de todo, aclaremos conceptos ¿Qué es un exihibicionista? El exhibicionismo se trata de una parafilia por la que la persona se excita al mostrarse desnudo o en actitud erótica ante los demás. Generalmente lo más excitante de la situación es el hecho de sorprender o asustar a la persona que le ve.
Si me sigues, sabrás que normalmente diferencio parafilia (término pseudo-psiquiátrico) de minoría erótica. En este caso prefiero utilizar el término “médico” porque, evidentemente, si tu disfrute sexual se basa en invadir la libertad de otras personas, no es legal y claramente algo no marcha bien en tu persona. Sobre esta diferencia te hablo en mi tutorial sobre parafilias y minorías eróticas.
Pues bien, no es la primera vez que me sucede algo así. Cuando vivía en Salamanca recuerdo que había un hombre que se dedicaba a pasear con su pene fuera del pantalón, de hecho, lo más normal es que ni te dieses cuenta porque pasaba desapercibido. En Madrid tuve otra experiencia de “exhibicionismo indirecto” en un autobús cuando el hombre que tenía al lado se puso a ver pornografía en su móvil con intención explícita de que yo la viese. Por último, en un viaje nocturno en autobús tuve la mala suerte de tener que echar a gritos a un frotteur que pretendía pasarla en grande a mi costa (el frotteurismo consiste en la excitación sexual por frotarse y rozarse con otro sin su permiso, suele ser habitual en aglomeraciones de gente o medios de transporte)
¡Menudo repertorio! y aquí va lo que me pasó el viernes: Salgo de mi local por la noche, después de un día intenso de trabajo, cierro la verja del local y veo cómo un chico (poco mayor que yo) pasa por detrás de mí y continúa andando. Termino de cerrar y mientras ando en dirección a mi casa veo cómo, un poco más adelante, ese mismo hombre se da la vuelta y está masturbándose. Nos miramos a los ojos y, como si fuese lo más normal del mundo, le obvio y sigo andando.
Seguramente pensase que iba a sorprenderme, asustarme o algo similar. La verdad es que me lo tomé con mucha naturalidad, tanto que me sorprendí a mi misma (lo más habitual es que le hubiese soltado “alguna perlita”)
Otra estrategia habitual es reírse del exhibicionista, hacer alguna broma sobre el tamaño…en mi caso creo que lo mejor hubiese sido darle una tarjeta o decirle “mira hacia arriba, a una sexóloga no se la sorprende tan fácilmente” jajaja. Quizás tan solo quería ser protagonista de un post, quien sabe…
Por último, si os habéis fijado, arriba he entrecomillado “agresiones sexuales” porque si bien exhibicionistas, frotteuristas, vouyeurs, etc. no suelen ser agresivos, si disfrutan haciéndose participes de la sexualidad ajena y eso es una invasión de la otra persona, una agresión.
y a vosotros (sobre todo vosotras) ¿os ha ocurrido alguna vez algo así?
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Estaba jugando en mi urbanizacion hace años, un extremo del patio daba a una especie de callejon desde el cual yo podia ver a traves de unas rejas que habia y el a mi, tendria unos 7 u 8 años, cuando se descubrio y se empezo a masturbar, me acuerdo que salí corriendo llamando a mi casa y los demas niños tambien. Sin entender nada, ni que significa y no sabía por que lo hacia tampoco, ahora 11 años despues entiendo perfectamente todo y si a día de hoy me pasase quizas actuaria como tú, dejandole en ridiculo y sin escandalizarme
abrevia para que pueda ayudaros a todos