El Gobierno condena el apaleamiento de un muñeco de Pedro Sánchez ante la sede de Ferraz en Nochevieja

El Gobierno ha mostrado este lunes su condena ante los hechos ocurridos en una concentración frente a la sede nacional del PSOE durante la Nochevieja, en la que se simuló el ahorcamiento y apaleamiento de un muñeco del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, unos actos que el PSOE ya está estudiando si podrían constituir un delito de odio.

Ante las puertas de la sede ubicada en la madrileña calle Ferraz, Revuelta, una organización juvenil de la órbita de Vox, reunió a unas 300 personas para protestar contra la ley de amnistía y tomar las uvas de fin de año, según las cifras proporcionadas por la Delegación del Gobierno en Madrid.

Varios de los asistentes colgaron un muñeco que representaba a Pedro Sánchez. En diversos vídeos difundidos en redes sociales se puede escuchar insultos contra el Gobierno y gritos de "¡Dale!" o "Hay que acabar así con él" y ver cómo le propinaban golpes.

Tras estos hechos, varios ministros socialistas se han pronunciado para mostrar su profundo rechazo ante lo sucedido. "Ya no solo asedian nuestra sede, ahora también simulan el apaleamiento del presidente del Gobierno de España. Basta de odio. Basta de energúmenos", ha expresado el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, que se ha comprometido a trabajar "por una España más justa, libre, diversa, habitable y tolerante".

Igualmente, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha apuntado que acciones como esta ocurren "cuando se da aire a la extrema derecha". "Un grupo de energúmenos insultando gravemente al Presidente del Gobierno a la puertas de Ferraz y sin que Feijóo haya hecho nada para impedirlo ni lo haya condenado aún", ha censurado.

"Empezaron asediando las sedes del PSOE y ahora simulan el ahorcamiento del presidente del Gobierno. ¡Basta ya!", ha clamado la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, en su cuenta de X.

En la misma línea se ha expresado el ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, que ha afirmado que este tipo de situaciones "han dejado de hacer gracia hace bastante tiempo". "Las actitudes complacientes de algunos líderes del PP y de sus terminales mediáticas les han dado alas. Esto no se puede consentir ya", ha añadido.

Asimismo, la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant, ha denunciado que "la derecha y sus líderes convierten los insultos en lemas que invitan al odio". "De esos barros vienen estos lodos", ha agregado al respecto.

También se ha manifestado al respecto, el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, quien ha llamado a "condenar el odio, la violencia y la intolerancia". "Los discursos de odio tienen como objetivo deslegitimar lo legítimo y deshumanizar a las personas. Son una amenaza para la democracia y preceden a las acciones de odio", ha avisado.

"Una vez más, los intolerantes insultan gravemente y amenazan al presidente del Gobierno. ¿Hasta cuándo va el PP a mimimizar estos ataques? La democracia española no se puede permitir estas actitudes violentas. Estudiaremos las acciones correspondientes", ha dicho por su parte el portavoz socialista en el Congreso, Patxi López.

El PSOE estudia "todas las vías legales"

Por otro lado, el PSOE ha advertido de que lo ocurrido puede suponer un "delito de odio" y ha anunciado que estudia "todas las vías legales" contra los organizadores y participantes en esta convocatoria, que ha seguido la estela de las manifestaciones contra la amnistía que se suceden en Ferraz desde hace semanas.

"Los hechos, los comentarios vertidos en la retransmisión y todo en su conjunto es la realidad de lo que hemos venido avisando desde hace mucho tiempo", señalan a RTVE fuentes socialistas, que aseguran que "hay partidos políticos y organizaciones de todo tipo que están instalando el odio en la sociedad española".

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"Los demócratas debemos poner pie en pared. Sabemos que Vox y sus organizaciones satélites no solo no condenan, avalan este tipo de actos, pero nos gustaría saber qué opina el Partido Popular", continúan las mismas fuentes, que han mostrado, asimismo, su rechazo a "los graves insultos" que sufrió el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, durante algunos momentos de la pasada noche. "Cuando no se condena, se es cómplice", subrayan.