La pena de muerte sigue siendo aplicada en 58 Estados. En cambio 138 Estados ya no la aplican. Los argumentos para tratar de convencer a los más reticentes de abandonarla en toda circunstancia son muy diferentes de una región a otra del planeta. En febrero 2010 tuvo lugar en Ginebra el 4° Congreso Mundial contra la pena de muerte para encontrar nuevas estrategias y llegar a una abolición universal.