El entrenador del PSG pide disculpas por ironizar sobre los viajes en avión del equipo

La polémica no ha dejado de crecer desde el lunes, cuando el entrenador del París Saint-Germain, Christophe Galtier, reaccionó con ironía a las preguntas de la prensa sobre por qué el equipo capitalino tomó un avión privado de la compañía patrocinadora Qatar Airways para disputar un partido de Ligue 1 en Nantes, ciudad situada a unos 350 kilómetros al suroeste de París

Galtier, sentado junto al jugador Kylian Mbappé, respondió con ironía, explicando que hablaron con la empresa que organiza sus desplazamientos para ver si pueden "viajar en carro de vela".

Su declaración fue condenada por casi toda la clase política francesa y organizaciones ecologistas.

"La reacción de Christophe Galtier y de Kylian Mbappé muestra hasta qué punto están muy lejos de los desafíos del cambio climático", lamentó este martes en la cadena Cnews la ministra francesa de Transición Ecológica, Agnès Pannier-Runacher.

El martes, Galtier hizo un mea culpa. "Fue una broma que llegó en mal momento, de mal gusto, y me arrepiento", dijo en Canal+ tras la victoria por 2-1 ante la Juventus en la Liga de Campeones.

El entrenador defendió las prácticas de su club, citando como ejemplo un reciente viaje por carretera a Lille, no por aire.

 "Tengo jugadores a los que les preocupa mucho del clima, tengo jugadores serios, tenemos un club que presta atenci162. Viajamos en autobús durante 2 horas y 45 minutos para llegar a Lille y 2 horas y 45 minutos para volver, somos conscientes de los problemas climáticos", dijo.

“Creo que en Francia ya no se puede hacer humor... aunque mi chiste no fuera muy bueno y lo supiera rápidamente al llegar a casa", concluyó.

 "Tengo jugadores que se cuidan mucho del clima, tengo jugadores serios, tenemos un club que se cuida. Tengo jugadores que son muy cuidadosos con el clima, tengo jugadores serios, tenemos un club que es cuidadoso. Viajamos 2 horas 45 minutos en autobús para ir a Lille, y viajamos 2 horas 45 minutos en autobús para volver, somos conscientes de los problemas del clima", dijo.

“Creo que en Francia ya no se puede hacer humor... aunque mi chiste no fuera el mejor y lo supiera rápidamente al llegar a casa", concluyó.