Capi celebra su primer gol con la camiseta del Real Betis Balompié.

El Perfil: Capi

El exjugador del Real Betis cumple hoy 40 años

Capi fue un extraordinario centrocampista del Real Betis Balompié. Uno de los futbolistas más queridos de la afición a lo largo de la primera década del siglo XXI. Un jugador procedente de la cantera que destacaba por su calidad y su capacidad de lucha, a las que unía un sentido estético que lo convertía en un claro representante de la escuela sevillana. Un futbolista muy del gusto de Heliópolis.

Nacido en la localidad sevillana de Camas el 26 de marzo de 1977, Jesús Capitán Prada se formó en los escalafones inferiores del Real Betis, destacando en el equipo filial a mitad de la década de los 90. Ello lo llevó a debutar con el primer equipo el 26 de mayo de 1997, en partido disputado por el Real Betis en el estadio de Mestalla ante el Valencia, siendo entrenador Lorenzo Serra Ferrer.

Una semana más tarde jugó algunos minutos más en Heliópolis contra el Sporting, pero llegada la campaña siguiente retornó al Betis B, donde actuó durante dos temporadas más antes de ser cedido al Granada.

Volvió a la órbita verdiblanca en el ejercicio 2000-01 y a las órdenes del técnico gallego Fernando Vázquez se consolidó como un titular indiscutible de la escuadra verdiblanca. Fue protagonista del ascenso y en los años siguientes se erigió en uno de los futbolistas de referencia de la plantilla. Una brillantísima carrera que lo llevó a debutar con la selección española absoluta el 27 de marzo de 2002 en un duelo Holanda-España disputado en el estadio De Kuip de Rotterdam.

Con la selección disputó tres partidos más, todos ellos en 2002, y todos en suelo español, contra Irlanda del Norte, Paraguay y Bulgaria.

En la temporada 2004-05 formó parte de la plantilla que se adjudicó la Copa del Rey, aunque su rendimiento quedó muy mermado como consecuencia de las lesiones, que durante muchos meses lo afectaron gravemente.

Retornó a su mejor nivel en los años posteriores, permaneciendo en la disciplina bética hasta la campaña 2008-09 en que se retiró del Villamarín entre lágrimas tras un encuentro contra el Levante. Posteriormente jugó en el Xerez Deportivo.

Defendió la camiseta verdiblanca en once temporadas, vivió ascensos y descensos, jugó con el Real Betis la máxima competición continental y disputó 302 partidos oficiales (269 de Liga; 23 de la Copa del Rey; 6 de la Copa UEFA y 4 de la Champions League) marcando 20 goles.

En la temporada 2015-16 actuó como segundo entrenador del primer equipo, a las órdenes de Juan Merino, con quien ya había trabajo con anterioridad en el conjunto filial.

Capi fue uno de los ídolos indiscutibles de aquel Betis del principio de los 2000. De juego alegre y vistoso, entrega absoluta y excelente imagen pública, el beticismo siempre lo consideró uno de sus hijos más queridos.