¿Sabes cuál es la diferencia entre el deseo y la excitación?
De acuerdo con Marilén Garcerán Aulet y Paola Obrador Pellicer, psicólogas en el Instituto Psicología-Sexología Mallorca, el deseo suele ser una consecuencia de haber visto, oído o imaginado algo erótico.
Señalan que a partir del deseo nacen las fantasías, imágenes o conductas que excitan y es en este punto donde inicia la fase de excitación, en la que a través de la estimulación erótica hay una tensión sexual que va en aumento.
Si la persona consigue relajarse y dejarse llevar, puede experimentar el orgasmo, aseguran.
Pero, ¿el deseo y la excitación son distintos en hombres y mujeres? Las expertas comentan que las diferencias son más entre personas que entre sexos.
Explican que en el caso de los hombres, se cree que la excitación es más rápida porque aparece la erección, que aunque es una de las respuestas del organismo en la fase de excitación, no siempre tiene por qué ser así.
En el caso de las mujeres, se asocia erróneamente excitación con lubricación. No obstante aunque la lubricación forma parte de la respuesta sexual femenina en la fase de excitación, también puede ser que una mujer lubrique y no esté excitada o viceversa.
¿Cómo se excitan hombres y mujeres?
A nivel físico, en el hombre la excitación se nota en una ligera elevación testicular e inicio de erección del pene, mientras que en la mujer se engrosan los labios menores, hay un ligero abultamiento del clítoris, engrosamiento de las paredes vaginales, lubricación y “rubor sexual”.
En los hombres, el deseo se desencadena tras haber visto, oído o imaginado algo erótico. En las mujeres pasa algo similar, pero en una relación, el deseo espontáneo disminuye debido a una cuestión biológica, no voluntaria.
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