El Clásico Regio entre el Monterrey y los Tigres concluyó en un emocionante empate luego de más de 100 minutos de juego en el Estadio BBVA, conocido como El Gigante de Acero. La euforia se apoderó de los jugadores de Rayados tras lograr arrebatar la victoria a los felinos en los últimos segundos.
Por otro lado, la frustración invadió al conjunto dirigido por Robert Dante Siboldi, quienes vieron escapar la oportunidad de llevarse los tres puntos en los últimos segundos del partido y todo acabó muy caliente.
Tras el final, la tensión se respiraba en el ambiente cuando André-Pierre Gignac, referente de Tigres, se acercó a la tribuna en un gesto de saludo. Sin embargo, la reacción de algunos aficionados de Rayados fue desagradable, abucheando al delantero francés de 38 años y lanzándole cerveza mientras saludaba a algunos amigos.
Ante esta situación, Gignac respondió con un gesto obsceno, evidenciando la rivalidad intensa entre ambas aficiones.
Los seguidores de Rayados le lanzaron cerveza al delantero de los Tigres al término del juego.
Gignac explota contra su entrenador con un gesto
En el vibrante Clásico Regio disputado en el Estadio BBVA, el epicentro de la emoción se trasladó al minuto 57 cuando el cuarto árbitro anunció un cambio determinante: André-Pierre Gignac abandonó el terreno de juego, dejando su lugar a Nicolás Ibáñez con el número 10 resaltado en rojo en el tablero de cambios.
En un gesto que no pasó desapercibido, el delantero francés mostró palpable molestia hacia el cuerpo técnico liderado por Robert Dante Siboldi en su marcha hacia la banca, evidenciando posibles tensiones dentro del equipo de Tigres.
La trama ganó en densidad tras la salida de Gignac, ya que Gerardo Arteaga se encargó de descontar el marcador con un tanto decisivo, seguido de Germán Berterame, quien con temple igualó el marcador, culminando así en un empate que dividió puntos entre Tigres y Rayados en el Clásico Regio correspondiente al torneo Clausura 2024 de la Liga MX.
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Nahuel Guzmán vuelve causar mucha polémica
El duelo quedó marcado por su intensidad y trajo consigo polémicas que trascendieron la cancha. A través de las redes sociales, circularon imágenes impactantes que mostraban a Nahuel Guzmán apuntando con un láser a la cancha, afectando la visibilidad de jugadores como Esteban Andrada y Sergio Canales.
Este hecho no solo generó indignación, sino que también avivó el debate sobre la ética deportiva y el fair play en los encuentros de alta competencia.
Además, el encuentro estuvo plagado de decisiones arbitrales cuestionables que polarizaron las opiniones de los aficionados. La ausencia de penales señalados y faltas no sancionadas que parecían merecer una tarjeta roja encendieron la polémica en torno al arbitraje del Clásico Regio.
Estas controversias no sólo marcaron el desarrollo del partido, sino que también reflejaron la importancia de contar con una correcta aplicación del reglamento para garantizar la equidad y la transparencia en el futbol de élite.