La esgrima moderna es un deporte de entretenimiento. Puede ser practicado por cualquier persona, sin importar el rango de edad. Ofrece la oportunidad de hacer movimientos y la famosa estrategia de esgrimir, manipulando el florete con ligereza y velocidad, además de hacer otras acciones de protección frente a las agresiones del rival. Se confirma, por tanto, como uno de los deportes más entretenidos que, incluso, puede ser practicado en casa por todos los miembros de la familia.
Hay que tener en cuenta que la esgrima es un deporte de combate. Los contrincantes tienen un objetivo: tocarse con el florete. Este no tiene ni filo ni punta. El ejercicio requiere la habilidad de hacer movimientos rápidos y precisos, con el fin de no ser tocado por el arma del oponente, algo que requiere destreza y astucia, sin olvidar que también es preciso estar en buena forma física. Al fin y al cabo, es un deporte que supone desplazamientos rápidos, agilidad y muy buenas cualidades para tratar de acercarse al contrincante sin ser tocado por su arma.
Para practicar la esgrima de forma adecuada, es conveniente conocer qué movimientos son necesarios y cómo deben practicarse. Por supuesto, requiere entrenamiento y mucha disciplina, pero también es cierto que existe la posibilidad de practicarlo en la condición de amateur. En casa tienes la opción de aprender ciertas pautas y que, por otro lado, consigas practicar los movimientos básicos. De este modo, puedes lograr cierta aproximación a una disciplina deportiva que, a día de hoy, sigue teniendo un gran reconocimiento internacional.
A continuación, se explica cómo es la esgrima y sus movimientos básicos para ser practicados en casa.
1. La guardia
Consiste en una posición de inicio con el que se puede atacar y defenderse. Es una acción crucial para que, a partir de ahí, se puedan hacer los desplazamientos hacia adelante o hacia atrás. La rodilla y el pie de una pierna deben mirar al frente y flexionarse ligeramente. La otra pierna se pone en posición perpendicular formando un ángulo recto con los pies y haciendo que los talones se coloquen en la misma línea.
2. El paso adelante
Este paso consiste en avanzar con la pierna adelantada y recoger la otra inmediatamente. La punta del pie delantero debe mirar siempre al frente y no girarse, del mismo modo que se debe mantener en todo momento la linealidad entre los talones.
3. El romper
Este movimiento implica un desplazamiento de la pierna trasera sin que se flexione en exceso, sino que debe prolongarse teniéndola estirada. A su vez, la pierna delantera se recoge mientras se vuelve otra vez a la posición inicial.
4. El fondo
En el caso de este movimiento, implica el desplazamiento del cuerpo manteniéndolo recto. Hay que impulsarse con ambas piernas, estirando completamente la trasera y flexionando más todavía la delantera. El brazo con el que sujetamos el florete debe estirarse mientras se desplaza el cuerpo hacia adelante; de esta manera, se consigue hacer un ataque contra el rival. Finalmente, se puede recoger el cuerpo y volver a la posición inicial.