Natalia Verbeke nació en Buenos Aires, Argentina, en 1975, aunque a los 11 años se mudo junto a su familia a España, concretamente a Madrid. Tuvo su época de gloria con participaciones en series como 'Los Serrano' y 'Doctor Mateo', aunque luego se alejó de las grandes producciones para centrarse en su familia.
Sin embargo, esto acabó, ya que estuvo algo apartada al no encajar en los papeles femeninos que se pedían. En 2022 regresó para protagonizar 'Todos Mienten', una ficción de Movistar +. Ahora, visita 'La Resistencia' para dar a conocer su nuevo proyecto.
Así ha sido la carrera de Natalia Verbeke
Debutó con la película 'Un buen novio' (1998), un filme que luego dio pasó a 'Nadie conoce a nadie' (1999), 'El hijo de la novia' (2001) y 'El otro lado de la cama' (2002). Esta última la encargada de llevarla a la fama, dándole la oportunidad entre 2007 y 2008 de participar en 'Los Serrano'.
A partir de ahí su carrera despegó, ya que entre 2009 y 2011 protagonizó 'Doctor Mateo', una de las series más seguidas de la televisión española. Ese año 2011 fue el momento de la caída, aunque siguió haciendo cosas, ya no con la asiduidad de antes y se centró en su familia y en papeles lejos de la televisión. Un ejemplo es su participación en la obra de teatro 'El sueño de una noche de verano', de William Shakespeare.
No fue hasta 2022 cuando comenzó su renacer, ya que es la protagonista de 'Todos Mienten', una nueva serie de Movistar +. Pero antes de esto, en una entrevista para El Mundo, contó todos los problemas que tuvo para encontrar papeles en el mundo del cine y la televisión.
"Hay un momento en que te pones de moda y lo haces todo, pero, claro, mientras lo haces todo vas cumpliendo años y llegas a esa franja de los treinta donde, aunque yo tengo cara de jovencita y aparento menos, ya no les encajas porque ya no eres la jovencita guapa y aún no das de madre. Eso es lo que pasó: llegó un momento donde no encajaba en los papeles que se escribían para mujeres. Y, bueno, tú ahí sigues como siempre en esta profesión: yendo a pruebas mientras te dicen que no, recibiendo algunas propuestas que ya no me interesaba hacer y, en resumen, pasé de tener muchas ofertas donde elegir a tener menos. Fue la edad. Me encontré en una franja donde dejé de existir", comenzó explicando.
Destacando que es algo que solo sucede en el mundo del actoraje femenino, es decir, a las mujeres: "Lo asumí. Hice más teatro, tele... Lo que sucede es que esto no les pasa a los tíos.Al contrario: el tío cuanto más envejece, más interesante se pone y más papeles de guapo le dan. Por ejemplo, yo en ficción he sido novia de Eduardo Noriega o de Leo Sbaraglia y, de repente, pasé a ser mayor para ellos pese a que en realidad soy más joven. A partir de los treinta y pico sus parejas eran actrices de 20. No es por supuesto culpa de ellos, pero es así, esta profesión es así. Por suerte, está mejorando", destacó, siendo muy crítica con todo esto.
