¿Por qué los docentes alegan sentirse solos durante sus sesiones sincrónicas?
Isis Condor
Innovación en procesos educativos / Gestión de experiencias de aprendizaje / Formación docente / Gestión curricular
En 2020, la pandemia del COVID-19 conllevó a una necesidad de formación online, esto implicó que los docentes dejaran las aulas para realizar sus sesiones de clase en una modalidad sincrónica a través del uso de plataformas de videoconferencia, a fin de matener el distanciamiento social y prevenir la propagación de la infección (The Chronicle of Higher Education, 2020).
Durante ese año, muchos docentes alrededor del mundo se encontraron enseñando de forma remota por primera vez, enfrentando un conjunto de nuevos desafíos vinculados a la enseñanza virtual (UNESCO, 2020).
Castelli y Sarvary, en un reciente estudio realizado con más de 276 estudiantes de The Cornell University, mencionan que uno de esos desafíos fue que los docentes no podían ver a los estudiantes durante las sesiones de clase sincrónicas realizadas a través de las plataformas de videoconferencia, porque ellos no tenían sus cámaras de video encendidas
Ahora bien, ¿cuáles son las razones que existen detrás de este accionar por parte de los estudiantes?
Los resultados del estudio realizado por Castelli y Sarvary mencionan que la razón principal por la que los estudiantes no encienden sus cámaras de video durante las clases sincrónicas (41%) tiene que ver con preocupaciones respecto de la apariencia personal, y la segunda razón (26%) es la preocupación por la posibilidad de que aparezca alguna persona de su familia detrás de ellos. Otras razones tienen que ver con el hecho de no querer mostrar su espacio personal (muchas veces sus dormitorios), o que no puedan ver que se alejan de la computadora o que están haciendo otras cosas mientras escuchan la clase.
Respecto de la razón principal (preocupación respecto de la apariencia), los investigadores encontraron diferencias significativas vinculadas con la pertenencia a ciertos grupos étnicos minoritarios y también en estudiantes mujeres.
Por otro lado, las razones tecnológicas también estuvieron presentes, dentro de las cuales figuran tener una mala conexión de internet (22%) o no contar con una cámara en buen estado (2%).
Asimismo, un aspecto importante de la encuesta realizada en el marco del estudio, proviene de la opción “otros” en la que más de la mitad de los estudiantes señaló que no encendían la cámara porque “es lo normal, nadie lo hace”.
A partir de estos hallazgos, los investigadores mencionan que el uso de la cámara debe ser voluntario y espontáneo, no por obligación. Para ello, sugieren la importancia de que el docente desarrolle estrategias que adopten un enfoque centrado en el estudiante, teniendo en cuenta la equidad, la inclusión y la diversidad de los estudiantes y las situaciones con las que puedan encontrarse mientras aprenden de forma remota, con la finalidad de fomentar que los estudiantes enciendan su cámara de video durante la clase.
Referencias:
The Chronicle of Higher Education (2020). Here´s our list of colleges reopening models.