En Lugo no triunfa la moda vintage como en las grandes ciudades

María Quelle / M.G. LUGO/ LA VOZ

LUGO CIUDAD

La fruslería de Madame Déficit es la única tienda vintage de Lugo.
La fruslería de Madame Déficit es la única tienda vintage de Lugo. ALBERTO LÓPEZ

A día de hoy solo queda una tienda y sus dueños alarman: «Lo vintage va a desaparecer en la ciudad»

24 ago 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El mundo de la moda está en constante cambio. Las tendencias aparecen y desaparecen en cuestión de años o incluso meses. En la mayor parte de los casos estas tendencias se las vemos a influencers o gente famosa. «A día de hoy lo que triunfa son las prendas de los años 90 y de los 2000», comentan expertos.

Sin embargo, hay productos que no nacen como una moda sino como necesidad. Este sería el caso de la ropa vintage. En países como Alemania, Reino Unido, Estados Unidos y demás, comprar ropa de segunda mano nació como una necesidad por la situación económica de estos países. De hecho, uno de los muchos orígenes que se le da a la ropa vintage, es su nacimiento con el crac del 29 en América del Norte. 

Actualmente en la ciudad lucense ya solo queda una tienda de ropa vintage, La Fruslería de Madame Déficit, situada en la Calle Serra Gañidora. Sus propietarios, Laura Coroas y Jesús Cendán, tienen una gran preocupación en cuanto a el futuro de lo vintage en España. «No sabemos que tiendas sobrevivirán, pero lo que está claro es que las de las ciudades grandes son las que tienen más futuro», comentan. La pareja lleva más de 20 años trabajando en el sector, y tuvieron otra tienda vintage en el centro de la ciudad. A pesar de ello, la situación económica en la que se vieron inmersos les obligó a cerrarla. «La gente busca cualquier excusa para no comprar, si es de segunda mano, si es para gente con pocos recursos, si es muy caro... En todo este tiempo hemos escuchado auténticas barbaridades», explica Laura. 

¿Qué diferencia hay entre vintage, retro y ropa de segunda mano?

Cuando se habla de ropa vintage se hace referencia a prendas que fueron realizadas en años o décadas anteriores y que cobran valor con el tiempo. Una prenda vintage mantiene las características originales con que esa prenda u objeto fueron hechos. Para poder clasificar a un producto en este grupo tiene que haberse fabricado hace más de 20 años, y su estilo tiene que representar a su época, señalan expertos.

En muchas ocasiones se confunde lo retro con lo vintage. Sin embargo, la estética retro es la que evoca al pasado a pesar de no haberse fabricado en él. Estas prendas siguen una estética antigua, de otra época. 

Además de la venta de ropa también cuentan con objetos raros.
Además de la venta de ropa también cuentan con objetos raros. ALBERTO LÓPEZ

Las prendas de segunda mano son aquellas usadas previamente por otra persona. Esto no tiene que significar que estén en mal estado o que no sean buenas, simplemente las personas cambian de estilo y reciclan sus prendas. En la mayoría de los comercios de segunda mano, los trabajadores se aseguran de comprobar el estado de las piezas y clasificarlas. «La ropa que tenemos aquí de segunda mano está tan limpia como cualquier otra. Es obligatorio que el distribuidor la mande limpia. Además nosotros la volvemos a lavar varias veces y la planchamos».

No todos los productos en las tiendas vintage son de segunda mano

«Puede que haya productos de segunda mano pero hay incluso tiendas que no tienen ropa usada. Por ejemplo, en Madame Déficit no tenemos calzado usado. A la gente ya le da grima el resto de ropa, como para que pongamos zapatos... Nosotros hemos escuchados frases de la gente dignas de recopilar, son completamente frustrantes y sobre todo ignorantes. Es humillante lo que llegan a decir de tu trabajo. Hace poco vinieron unas señoras que estaban mirando un perchero de camisas muy buenas. En una de ellas había una pequeña mancha marrón de un quemado, y una de ellas le dijo a la otra, ¿esto será un quemado o un cagado? Eso es humillante para nosotros», aseguran los propietarios.

Reacción de la sociedad lucense

«Hemos intentado hacer de todo para que la tienda tenga una buena acogida. Nos adaptamos a lo que quiere el público. Si se llevan las marcas, traemos marcas, se llevan las camisetas de fútbol, traemos camisetas de fútbol... La gente aunque venda que quiere ropa usada para no consumir, es todo una fachada. De repente la gente compra en el comercio pequeño para sentirse bien, y luego se hincha en Alyexpress, Shein... No decimos que eso este mal pero vendemos una cosa, hacemos otra, y en el comercio pequeño se nota mucho», comentan los dueños.

«Nosotros damos la posibilidad de caro, barato, de coleccionismo, nuevo... Hemos tocado todo y siempre hay una excusa. Y con la guinda de Vinted ya no sabemos que hacer. Es un movimiento muy desleal, estamos todos intentado levantar nuestro negocio», aseguran.

El hecho de que Lugo no sea una ciudad grande y su porcentaje de personas mayores es elevado, puede ser una de las causas principales. «Mucha gente mayor piensa que la ropa vintage es para aquellos con pocos recursos. Sin embargo, los chavales ya se han criado con este tipo de tiendas, no lo entendemos», cuenta Jesús.

 Lo vintage en otros países

Ambos trabajadores comentan que «estamos a años luz» del pensamiento sobre lo vintage que tienen países como Gran Bretaña, Alemania o Estados Unidos, entre otros. «Aquí la gente no sabe el trabajo que se hace en las tiendas, piensan que nos regalan la ropa», comentan.

En muchos países la gente« valora la ropa antigua, sabe el trabajo que hay detrás para conseguir piezas», en muchas ocasiones, «únicas». Por ejemplo, en Londres es muy habitual ver a personas en Camden Town cargadas de bolsas. Un consejo que le daría a mucha gente es que dejasen los prejuicios atrás y se atreviesen un día a ir a una tienda vintage, se sorprenderían muchísimo, en palabras de los trabajadores.

¿Qué competencia directa tienen estas tiendas?

Es raro la persona que no ha oído hablar de aplicaciones como Vinted o Wallapop en la actualidad. Sin embargo, no se sabe lo que esto supone para las tiendas que se dedicaban a vender ropa de segunda mano. En un comienzo, Wallapop no era un sitio donde la gente comprase ropa, sino más bien juguetes, libros... En cambio Vinted se creó específicamente para ello. «Es necesario destacar que las aplicaciones para vender ropa que ya no usas suponen un problemón para cualquier tienda vintage. Una comparación perfecta es el territorio que robaron los Airbnb a los hoteles. A nosotros nos han hecho lo mismo. Lo que no sabe la gente es que lo llevamos padeciendo en silencio desde Milanuncios, Chicfy, Depop... Si a una persona en Vinted le hicieran pagar lo que le toca, ya no era lo mismo. Tenemos que competir todos en igualdad de condiciones», explican Laura y Jesús.

Además los precios que pone la gente en Vinted en muchos casos son ridículos, haciendo que a nosotros se nos vea como locales caros. La pareja señala que es imposible competir con alguien que vende prendas parecidas o iguales a las tuyas por 30 euros menos. 

Productos más antiguos en La Fruslería de Madame Déficit

En este local uno se puede encontrar con objetos de los que desconocía su existencia. Hay desde juguetes hasta disfraces, productos para todas las edades y de diferentes épocas. «Tenemos productos que datan del año 1800 como las botas victorianas. Hace poco también nos llegó un conjunto de corsets de cabaret», afirman.

Botas victorianas, una de las piezas más antiguas de la tienda.
Botas victorianas, una de las piezas más antiguas de la tienda. ALBERTO LÓPEZ

Clientes habituales

Ambos trabajadores señalan que las personas que más compran en su tienda son turistas. De hecho aseguran que «para ellos es barato el precio que tenemos en muchas prendas, ya que en su país lo antiguo se valora de verdad. Ellos prácticamente piensan que estamos regalando la ropa».