Como si fuera un ocho tumbado casi asimétrico. Se trata de un analema solar, una curva lemniscata -más conocida como curva infinita- que describe la posición del Sol en el cielo si se observa todos los días del año, a la misma hora y desde el mismo lugar. Y es una de las imágenes más apreciadas por los fotógrafos de la naturaleza debido a la dificultad que supone retratar este fenómeno.
La imagen -cuanto menos, curiosa- es del astrofotógrafo catalán Juan Carlos Casado, del Observatori Astronòmic d’Albanyà, en Girona, el centro de divulgación, enseñanza y estudio de la astronomía en el que trabaja y que compagina con colaboraciones en el Instituto de Astrofísica de Canarias.
Analema solar
Casado, quien también participa en el proyecto europeo Stars4all a través del cual se pueden seguir en directo las retransmisiones de eventos astronómicos, se basó en el primer analema solar realizado en 1977 por el astrofotógrafo italiano Dennis di Cicco, editor de la revista Sky&Telescope, con el que Casado participa en el programa The World At Night (TWAN) que agrupa a los mejores astrofotógrafos del mundo en starscapes. “Pensé que con técnicas digitales sería más fácil y controlable su realización”, señala a La Vanguardia, Casado.
Obtuve toda la secuencia de soles y superpuse posteriormente por medios digitales el paisaje del Cabo del Creus”
En el año 2004, consiguió ser el primero en completar un analema solar en España. “Obtuve toda la secuencia de soles y superpuse posteriormente por medios digitales el paisaje del Cabo del Creus, con la orientación precisa respecto al horizonte”, explica el autor.
Pero no se quedó ahí. Al ser poco conocido y fotografiado, Casado quiso capturar un analema lunar. “Solo hay tres en el mundo y uno es el mío”, afirma. Así que repitió la misma operación que con el Sol, después de captar el movimiento de la Luna, “lo superpuse sobre el Teatro y Museo Dalí de Figueras”.
El autor admite que “se trataba casi de una curiosidad y un reto personal que se convirtió en una aventura por la dificultad” que conllevaba. Y pese a que, en comparación con la realización del analema solar, solo necesitas un mes para fotografiar un analema lunar, “hay que tener en cuenta que, cada día, la hora de la fotografía se va retrasando unos 52 minutos, al mismo tiempo que cambia la fase y va haciéndose de día”, apunta Casado. Un detalle que dificulta la actividad del fotógrafo puesto que, en el caso de Casado, “la imagen se realizó de manera manual”.
Analema lunar
La cámara debe estar situada en el mismo lugar, con el objetivo y orientación análogos, gracias a unas referencias marcadas con precisión”
“Una cuidadosa planificación y previsualización de las diferentes posiciones y horarios en que deben obtenerse las fotografías” es básica si se desea tomar esta imagen. Tanto para el analema solar como para el lunar, en el momento de sacar la fotografía, “la cámara debe estar situada en el mismo lugar, con el objetivo y orientación análogos, gracias a unas referencias marcadas con precisión”.
Lo mínimo aconsejable para conseguir capturar el analema solar es una foto cada semana o 10 día s “ya que con un intervalo mayor de tiempo, la curva no se distinguiría bien”. El lunar es diferente, en tan solo un mes puedes conseguir retratar el fenómeno pero debes hacerlo diariamente y “teniendo en cuenta que se retrasa casi una hora cada día sucesivo”, continúa.
Sin embargo, Casado recomienda tomar un número mayor de imágenes porque se debe tener en cuenta que “el principal problema, que escapa de nuestro control, es la meteorología”. “He tenido rachas de mal tiempo, por lo que el analema lo he comenzado varias veces hasta que he podido finalizarlo”. Además, al guiarse por el Tiempo Universal Coordinado, en invierno se debe restar una hora y en verano, dos. “Hay que calcular muy bien la hora con software astronómico para que ningún sol quede tapado por objetos del entorno como árboles o edificios, o ¡incluso bajo el horizonte!