El Dépor, en sus peores números

El Deportivo firma su tercer peor arranque de temporada de la última década ä El equipo todavía no ha ganado en Riazor y después de cuatro partidos, es el registro más negativo de las temporadas recientes

Lucas Pérez, a la cabeza de los jugadores el domingo después de la derrota contra el Celta Fortuna. |  // CARLOS PARDELLAS

Lucas Pérez, a la cabeza de los jugadores el domingo después de la derrota contra el Celta Fortuna. | // CARLOS PARDELLAS / M. otero

Marcos Otero

Marcos Otero

El Deportivo encajó el domingo ante el Celta Fortuna una derrota dolorosa que lo coloca ante uno de sus peores arranques de temporada de la última década. Siete puntos de 21 posibles es el pobre registro de un equipo empatado con la zona de descenso y que ve a diez de distancia el liderato cuando tan solo han transcurrido siete jornadas.

La preocupación se ha multiplicado después de caer contra el filial del rival histórico y firmar uno de los peores inicios de competición de las temporadas recientes. Es el tercero más discreto desde la temporada 2013-14, en el que el club ha militado en Primera, Segunda y la actual Primera RFEF, solo empeorado por los números de las campañas 2019-20 y 2014-15 después de las primeras siete jornadas del campeonato.

Para encontrar un arranque más negativo que el de esta temporada hay que retroceder hasta la 2019-20, culminada con el descenso a Segunda División B y el caso Fuenlabrada. El Deportivo anticipó en el comienzo del curso la que sería una campaña trágica, aunque estaría a punto de salvarse. Solo sumó seis puntos en los primeros siete partidos y eso acabaría desembocando en el despido de Juan Antonio Anquela. Tampoco enderezaría el rumbo con Luis César Sampedro y reaccionaría con Fernando Vázquez para acabar descendiendo sin ni siquiera disputar el último partido.

Peor sería incluso el arranque en la temporada 2014-15. El Deportivo había regresado a Primera de nuevo por la vía rápida tras un curso en Segunda, pero la planificación había estado marcada por el despido de Fernando Vázquez. En las siete primeras jornadas, el equipo, dirigido por Víctor Fernández, tan solo consiguió sumar cuatro puntos y se acabaría salvando de manera agónica.

El contexto de ambas temporadas era muy diferente al de la actual, en la que el Deportivo partía como el principal favorito al ascenso directo de un grupo en apariencia con menor exigencia y en el que sin embargo se ha visto descabalgado a las primeras de cambio de las posiciones de cabeza. La inversión no se ha visto reflejada hasta el momento en el rendimiento y el equipo no consigue arrancar. Mirando un poco más atrás, la temporada 2012-13, la de la vuelta del equipo a Primera tras dos décadas sin un descenso, también conllevó un inicio complicado. El Deportivo sumó seis puntos y anticipó un curso con muchos problemas.

Lo peor sin embargo del inicio de esta temporada está siendo el pobrísimo rendimiento del equipo en Riazor. Los blanquiazules todavía no han conseguido ganar ninguno de sus cuatro partidos en casa, algo que no había sucedido en la última década.

Incluso en esas temporadas con inicios peores —la 2019-20 y la 2014-15—, el Deportivo había sumado más puntos en su estadio de los tres que lleva actualmente. En la 19-20 consiguió cinco y en la 14-15, cuatro.

Sin gol

A ese mal arranque hay que añadir que el equipo no está encontrando el camino hacia la portería contraria. Solo lleva seis tantos en estas siete primeras jornadas, un dato solo empeorado por las campañas 17-18 (4), la 16-17 (5) y la 14-15 (5). De nuevo, el contexto era diferente y la exigencia mayor.

Primera derrota en Riazor un año después

El Deportivo volvió a perder en Riazor un año después. La derrota del domingo contra el Celta Fortuna fue la primera en casa para el conjunto blanquiazul desde que hace aproximadamente doce meses cayera (0-1) contra el San Fernando en el arranque de la temporada pasada.

Aquel tropiezo el dos de octubre en la que era la sexta jornada del campeonato encendió las críticas hacia el inquilino por aquel entonces del banquillo, Borja Jiménez. El empate (0-0) una semana después en el campo del Rayo Majadahonda precipitaría su despido y la llegada al banquillo de Óscar Cano, que tampoco acabaría la temporada y sería destituido en las jornadas finales.

El Deportivo no había vuelto a perder en casa desde entonces y se había mostrado muy solvente ante sus aficionados, pero en este comienzo de temporada todavía no ha ganado en Riazor.

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