Una alarmante semana para los empresarios de la minería: las compañías privadas más grandes de Chile sacaron magros balances este año en comparación al 2014. Números que muestran la debilidad de la economía local y la excusa de los patrones para seguir atacando trabajadores, ahora los afectados son 300 mineros de Collahuasi.
Sábado 3 de octubre de 2015 | 12:26
Sigue la caída en los mercados del cobre y con esto avanzan los ataques contra los trabajadores, que se suman a los despidos que ya se han producido en el área. ¿Y los dirigentes de los sindicatos mineros? poco están haciendo, y sus posiciones tibias no son más que complicidad con las políticas que afectan fuertemente al pueblo trabajador.
A finales de esta semana el cobre registró dos veces consecutivas un avance en la bolsa de Londres alejándose pequeños tramos de los mínimos mensuales llegando a US$2,3102 la libra del metal. A pesar de esto, el metal rojo cerró el trimestre con una acumulación de fuertes caídas. Durante el tercer trimestre el cobre retrocedió 10,9%, y en lo que va del año acumula un 20% de desplome. Es más, el pequeño avance que se dio en dos días en la bolsa de metales se debió principalmente a que las bolsas asiáticas terminaron positivamente combinando con esto el anuncio de las políticas de reducción de costos en minera Collahuasi.
Al ritmo que se vienen moviendo los precios de los commodities a nivel mundial y estas agónicas muestras de avances en el precio del metal cuprífero es de esperar que las reducciones sigan aumentando. Por lo tanto el precio de la libra de cobre seguirá dependiendo de la dinámica de la crisis económica internacional y los vaivenes de la economía china que no logra estabilizarse.
Las repercusiones de lo señalado anteriormente también viene a responder las fuertes caídas que hubo en el mercado durante el mes de agosto, que sorprendió con el desplome del 9,3% que registró la producción minera en relación al mismo mes del año 2014. Esto también hizo que se contrajera la producción de la industria, la cual anotó la peor baja después de cuatro años llegando a una caída de 5,2%.
De aquí se derivan varios análisis negativos de los departamentos económicos, desnudando la debilidad de la economía chilena que no logra repuntar mostrando que la recuperación planteada para este segundo semestre está lejos de las expectativas. El informe más pesimista fue mostrado por el BBVA que ante los signos de debilitamiento creen imposible que el crecimiento de la economía pueda superar el 2% este año.
Sin duda ante los registros alarmantes y la posición catastrófica de los economistas quienes seguirán pagando la desaceleración de la economía serán los trabajadores a quienes los empresarios le vienen cargando las repercusiones de la debilidad económica que estos últimos han generado, ya que cuando se habla de los motivos de la nula recuperación se habla que sus consecuencias son principalmente las paralizaciones de faenas por mantención y las movilizaciones sindicales de este último tiempo, pero nada dicen de las reducciones de costos producto de despidos, cierres y suspensiones de faenas que son políticas de las empresas y no responsabilidad de los trabajadores.
Las diez mineras privadas más grande de Chile caen en utilidades y en la bolsa
La baja de los precios del commodity rojo y sus acumulaciones a la caída anual se sintió fuertemente en la bolsa de metales como en el balance de las ganancias de las mineras privadas más grandes e importantes para el Estado chileno.
Entre las diez mineras se encuentran Escondida (Bhpbilliton), Collahuasi (Glencore-Angloamerican), Los Pelambres (Luksic), Angloamerican Sur, Zaldívar, Quebrada Blanca, Candelaria, Cerro Colorado y El Abra.
La minera que tuvo las bajas menos grave fue Escondida, que se anotó con una disminución del 17% en sus utilidades respecto al año anterior y una caída en la bolsa equivalente al 6% tomando en cuenta este y las demás operaciones de Bhp. Del resto de las mineras-sin contar Collahuasi y Los Bronces-tuvieron una caída de utilidades entre el 57% y 62%.
El caso de Collahuasi -de la firma Glencore y Angloamerican- fue el más negativo de todos debido a su derrumbe en la bolsa de Londres que llegó al 29%-de los cuales al día siguiente sólo pudieron recuperar un 13%- y tuvo una disminución en sus ganancias equivalente al 73% lo que equivale a US$141,5 millones. Otra de la minera que disminuyó significativamente sus ganancias durante este período fue Los Bronces- también de la firma Angloamerican con participación de Codelco-la que habría registrado el 76% menos de ganancias que el año pasado.
Tanta fue la noticia que se dio por los números Collahuasi, que el banco de inversión Investec salió a declarar que de seguir manteniéndose como hasta ahora los precios del cobre el valor de Glencore dentro de la bolsa podría ’evaporarse’, recomendando a la compañía implementar medidas de restructuración ’sustanciales’ para sostener el golpe de la crisis que se vive a nivel internacional de la economía.
Lamentablemente para los trabajadores, las firmas de Collahuasi salieron inmediatamente a resolver su ’problemática’ económica atacando a los mineros anunciando la reducción de costos mediante despidos.
Minera Collahuasi ataca a los trabajadores anunciando despidos y recortes productivos
Después de las bruscas bajas que tuvo la compañía en la bolsa de metales y siguiendo los consejos de Investec, la compañía anunció que sacaría del mercado 30 mil toneladas anuales de cobre fino. La minera controlada un 44% por Glencore y otro porcentaje igual por Angloamerican además dijo que esto traerá consigo reducción en sus operaciones incluyendo la planta de lixiviación.
El presidente ejecutivo de la compañía anunció además a los medios que el recorte de personal será de un 13%, es decir más de 300 trabajadores serán despedidos si tomamos en cuenta que es una planta que alcanza una dotación de 2.500 trabajadores.
A pesar de esto, el director sindical José Vergara planteó tibiamente que están consultando con los abogados del sindicato qué medidas tomar para no afectar mediante movilizaciones al resto de trabajadores que no se cuentan dentro del plan de despidos.
Este anuncio se suma a los diversos ataques que vienen dando los empresarios en contra de los trabajadores como el que viene haciendo Codelco que pretende dejar 3.000 familias en la calle, los frenos del proyecto Santo Domingo, los planes de Escondida a principios de año y El Abra que también descargaron la crisis sobre el hombro de la clase trabajadora.
Ante la nula respuesta de los dirigentes, los trabajadores necesitamos un plan de lucha
Mientras avanzan las semanas sigue apareciendo los planes de reducción y con ello los más brutales ataques contra los trabajadores. A cada caída del cobre y de las ganancias se profundizan las políticas de los empresarios para descargar la crisis económica internacional y desaceleración local sobre los hombros de la clase obrera. Y los patrones envalentonados por un gobierno como el de la Nueva Mayoría-el que les hace guiños retrocediendo en las reformas y planteando presupuestos de austeridad a la derecha y sus empresarios-no dudan en seguir atacando.
Pero también los trabajadores tenemos otro obstáculo delante de nuestros ojos, y ese límite son los dirigentes que hoy no quieren plantear las medidas necesarias para la defensa de los puestos de trabajo. Ya lo vimos con las tibias mesas que levantan los dirigentes del Partido Comunista en la CTC, las migajas de los dirigentes de El Abra ante los despidos, las acciones individuales y solitarias de los dirigentes del sindicato n°1 de Escondida e incluso ahora las tibias declaraciones del director del sindicato en Collahuasi respecto a los despidos.
Si los patrones atacan tenemos que defendernos, pero defenderse no es sinónimo de paralizarse. En estas circunstancias defenderse es poner la organización de la base de los trabajadores por encima los dirigentes que no quieren hacer algo y contemplan como los empresarios hacen lo que quiere, para esto es necesario la organización de la base a través de delegados representantes de cada área productiva con asambleas resolutivas para la defensa. Además este debería ser el impulso para exigirle a las grandes organizaciones mineras la elaboración de un Plan de Lucha con acciones para la defensa de los trabajadores.
Al mismo tiempo cada política debería ser llevado adelante con demandas estipulados en un Gran Pliego Único de Demandas, ya que los ataques sobrepasaron los marcos de una sola minera y se han aplicado en varias compañías. La CTC, la Federación Minera de Chile, los sindicatos de Codelco y la CUT deberían juntos levantar este plan, ya que esta es la única forma de mostrarle a los empresarios que no pueden hacer lo que quieran con nosotros, menos si los trabajadores se unen como un sólo puño.
