Un árbitro mexicano recuperó su trabajo tras denunciar racismo y despido injustificado

El presidente de la Comisión de Árbitros de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF), Arturo Brizio Carter, anunció que el silbante Adalid Maganda Villalva recuperó su trabajo luego de haber denunciado actos de racismo en su contra y tras haber hecho público que fue despedido injustificadamente.

El árbitro volvió a entrenarse en las instalaciones de la FMF por primera ocasión desde abril de 2018 cuando fue cesado de su cargo. Maganda Villalva tiene raíces afroamericanas, es oriundo del poblado de Huethuetán, municipio de Azoyú, en el estado de Guerrero. Durante una reunión con el titular de la comisión, Brizio Carter, recibió insultos como: "¿qué quieres pinche negro?".

"Adalid Maganda volvió a la Federación Mexicana de Fútbol el 2 de enero. Ha estado entrenando y cuando se sienta fuerte presentará las pruebas físicas. No hay rencores, no hay nada de rencillas. Todo eso se terminó", dijo Arturo Brizio.

El último encuentro que pitó Maganda Villalva fue el 16 de enero del año pasado entre Cafetaleros y León, correspondiente a la Copa MX. Tal fue su indignación que hizo una huelga de hambre el año pasado, lo que provocó que él y la FMF alcanzaran un acuerdo para que el juez fuera restituido a principio de 2019.

"Hace unos meses tuve una reunión con Arturo Brizio y Jorge Gasso, en eso dijeron '¿qué quieres pinche negro?'", me acercaba a saludar y siempre me esquivaban. No me daban la mano. Me hacían quedar mal frente a mis compañeros. Me decían de cosas: '¡eres malísimo, negro!'. Todos se burlaban de mí", recordó en su momento el árbitro.

Adalid también detalló el año pasado que fue vetado por un conflicto de intereses entre al antigua administración en la Comisión de Árbitro, presidida en aquel entonces por Edgardo Codesal, quien apoyó al silbante de forma incondicional y entre la nueva gestión, dirigida por Arturo Brizio.

Maganda Villalva refirió que fue uno de los silbantes que más defendió a Codesal para que no fuera retirado de su puesto, sin embargo, al final llegó Brizio Carter, quien le redujo las asignaciones arbitrales hasta que lo despidieron.

"Recibía mucho apoyo de Edgardo Codesal y de Gilberto Alcalá. Fui uno de los tres árbitros en todo el país que defendió al doctor Codesal para que no lo corrieran. En ese momento entró Brizio y me empezó a apartar, ya no me daban juegos…hasta que me corrieron", recordó en su momento.