Los pantalones de lino son de esas piezas básicas para el verano que siempre deberías tener, porque se pueden usar de muchas maneras y pueden ayudar a que te mantengas fresco, sin perder el estilo.
El lino es un material ligero, no es caluroso y al ser una fibra natural, también permite que la piel respire, es por esto que, año con año, puedes ver todo tipo de prendas de este material aparecer en las tiendas y en las colecciones de moda más importantes. Además, tiene la ventaja de que se considera clásico y no tiene límite de edad.
En el verano, por ejemplo, los trajes típicos se cambian por trajes de lino (incluso Brad Pitt los usa), también aparecen los shorts, las camisas y los pantalones de vestir, que puede ser un gran aliado en tus vacaciones en la playa o en la oficina, siempre y cuando los uses correctamente.
Hay que recordar que este es un material que puede ser delicado y que, para que los pantalones se vean perfectos, hay que evitar algunos errores comunes.
Cómo usar pantalones de lino: los errores que debes evitar
El color de la ropa interior
Lo que pasa con el lino es que puede ser un material un poco transparente, esto significa que, si no cuidas el color de la ropa interior, se puede marcar o ver a través de la ropa, y eso no es exactamente elegante o profesional.
Lo que puedes hacer es elegir ropa interior de un color nude, similar a tu tono de piel, o elegir un tono similar al del color de los pantalones, siempre realizando una prueba colocando los pantalones contra la luz antes de salir de casa, para estar seguro de que no vas a estar expuesto de ninguna forma.
No cuidar el estilo de los pantalones
Existen diferentes cortes de pantalones y no todos se van a ver bien con todos los materiales. El lino por ejemplo, es un material relajado y poco estructurado, por lo que no es ideal para los cortes o estilos skinny. Lo mejor que puedes hacer es apostar por estilos rectos o baggy, que son mucho más frescos y se pueden ver clásicos de manera moderna.
Demasiado largo
Como con todos los pantalones, aquí también hay que cuidar el largo, especialmente porque, al no ser un material muy estructurado o rígido, se puede ver muy desarreglado u holgado si queda muy largo.
La mejor opción es apostar por una pierna ligeramente corta, a la altura del tobillo, lo que además ayuda a mantener la frescura del look y a que te veas mucho mejor si llevas sandalias, zapatos sin calcetines o un par de tenis minimalistas.
No cuidar las arrugas
El lino es uno de esos materiales que se arrugan fácilmente y que se marcan cuando te sientas y doblas las piernas, y se llena de pliegues si no lo guardas correctamente. Es importante que, antes de ponerte los pantalones, te asegures de eliminar todas las arrugas, ya que se van a ir sumando más a lo largo del día y nadie se ve bien con un pantalón que parece un papel arrugado y descartado.
No siempre puedes evitar las arrugas, pero puedes elegir ponerte los pantalones hasta el último momento para reducir la cantidad y empezar de cero antes de salir.
Los zapatos incorrectos
Los pantalones de lino son ligeros y es por esto que no se ven tan bien con zapatos muy toscos o chunky. El look clásico va con un par de mocasines, pero también con tenis de tela o de piel básicos, o con unos zapatos de vestir que no sean muy exagerados. Las sandalias están permitidas, siempre y cuando sepas que, si vas a ir a la oficina o a una boda, tal vez no son la mejor opción.
