Para ser anfitrión hay que rellenar un formulario, enviar fotos y un menú
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¿Te gusta conocer gente nueva y empaparte por completo de la cultura de los lugares que visitas? Es común ir de viaje y quedar insatisfecho con las comidas que se hacen fuera de casa. Bien porque la calidad de los platos no es la que se espera, el ambiente no acompaña o incluso los platos típicos no resultan ser los que deberían. Pero como para casi todo, una aplicación tiene la solución.
EatWith, el Airbnb del sector gastronómico, te permite reservar una cena en la casa de un desconocido o ser anfitrión y preparar una velada para tus invitados sorpresa.
Guy Michlin, uno de sus creadores, tuvo la idea de ofrecer este servicio después de unas vacaciones en Grecia. Durante ellas, ninguno de los restaurantes a los que fue le terminó de gustar... Por suerte, una familia le invitó a comer a su casa. "Le encantó la experiencia, aprendió las costumbres, probó la comida griega y salió completamente satisfecho", cuenta a FCINCO Leire Laborea Lacasta, responsable de EatWith en España.
Han pasado cuatro años desde que la aplicación comenzara a funcionar en Israel, pero la siguiente parada de la plataforma fue Barcelona. A día de hoy, es la ciudad que más oferta tiene entre la docena de localidades de España que ofrecen este servicio. En la capital catalana, "el menú está enfocado para turistas con, sobre todo, comida mediterránea. Pero también puedes encontrar mucha variedad todos los días de la semana", apunta la portavoz.
Antes de formar parte del equipo de EatWith, Leire ya era usuaria de la aplicación. Y desde hace dos meses, también ha pasado a ser anfitriona de cenas con desconocidos. "Me encanta comer y cocinar. Suelo hacerlo para amigos y familia, y siempre dicen que lo hago genial, pero la opinión de desconocidos es más objetiva y además te lo pasas muy bien, a veces incluso te traen regalitos", nos cuenta.
No hace falta ser un profesional
Para ser un anfitrión no hace falta haber estudiado cocina, ni nada parecido. Aunque algunos chefs han optado por esta plataforma para ofrecer sus servicios como profesionales del sector. Pero hay algunos requisitos que hay que cumplir para llegar a ser convidante. "Para empezar, tienes que tener pasión por la gastronomía", señala la responsable de EatWith. "Además, gusto por la presentación y, sobre todo, don de gentes", añade.
Pero no está limitada para turistas, también es una manera de conocer gente nueva, darte una buena cena e, incluso, aprender un par de consejos y recetas culinarias. "El 50% de las personas que han venido a mi casa eran personas locales y el otro 50 extranjeros", destaca. Ella misma ha ido a cenas siendo local durante dos años.
Nunca ha tenido una mala experiencia, todo lo contrario. "Estuve en casa de un chico israelí e invitó a una amiga suya cantante, muy conocida en su país. Nos ofreció un concierto antes de la cena y pasamos la velada con ella", recuerda.
24 Comentarios
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@Gato_con_Botazas #19 pues no tengo hijos. Pero tengo negocios. Y pagamos íntegros todos los impuestos. Tú podrás creértelo o no. Pero afortunadamente por los que hacemos así las cosas otros tienen servicios públicos a los que no aportan. Y me encantaría no pagar ni un ¤, pero ese sería otro juego
Me llamo Leire, y soy responsable de EatWith en España. Nuestras mesas no son tan grandes como las mesas de restaurantes, la idea que hay detrás de nuestras cenas es que un grupo de amigos, todavía por conocerse, se unen en la mesa de un anfitrión para pasar una noche juntos de una manera social. No se trata tan sólo de "dar de comer" sino de una experiencia muy humana y social donde la gente conecta entre sí a través de la gastronomía. Sobre el tema de licencias e impuestos, cada país tiene sus propias regulaciones, por lo que siempre animamos a nuestros anfitriones a contactar a un consejero legal para que les ayuden con este tema. Nosotros, junto con nuestra comunidad de chefs, continuaremos luchando por una regulación justa que reconozca el nuevo mercado de la economía colaborativa con servicios como EatWith o Airbnb. Os animo a probar alguna cena y así experimentar vosotros mismos el ambiente que se crea alrededor de ella. Si tenéis dudas, os podemos ayudar en support@eatwith.com
@leire_laboreo #20 si tú cocinas para otros eres cocinero. Y debes pagar tu alta en la seguridad social, tu IRPF, grabar los platos con IVA y liquidar tu impuesto de sociedades. Nos guste o no. Esa experiencia que tú vendes es la misma que el restaurante de debajo de mi casa. Solo que el debe ser más caro. Por no hablar de lo irresponsable que resulta dar de comer a alguien ajeno a tu casa sin trazabilidad alguna de tus productos, cadenas de frío...
@leire_laboreo #20 "No se trata tan sólo de "dar de comer"". En otras palabras, se trata de dar de comer y más cosas buenas.. Dar de comer tiene una regulación. Me parece bien que descarguen responsabilidades en los anfitriones, ¿pero ustedes garantizan que los anfitriones pagan impuestos, tienen seguros, carné de manipulación de alimentos y demás? Sería un servicio diferenciador poner una "distinción" a aquellos que se hayan acreditado como """legales""".
Me llamo Leire, y soy responsable de EatWith en España. Nuestras mesas no son tan grandes como las mesas de restaurantes, la idea que hay detrás de nuestras cenas es que un grupo de amigos, todavía por conocerse, se unen en la mesa de un anfitrión para pasar una noche juntos de una manera social. No se trata tan sólo de "dar de comer" sino de una experiencia muy humana y social donde la gente conecta entre sí a través de la gastronomía. Sobre el tema de licencias e impuestos, cada país tiene sus propias regulaciones, por lo que siempre animamos a nuestros anfitriones a contactar a un consejero legal para que les ayuden con este tema. Nosotros, junto con nuestra comunidad de chefs, continuaremos luchando por una regulación justa que reconozca el nuevo mercado de la economía colaborativa con servicios como EatWith o Airbnb. Os animo a probar alguna cena y así experimentar vosotros mismos el ambiente que se crea alrededor de ella.
@yuripoe #15 Claro, claro. Seguro que tu pides factura hasta a tus hijos cuando les das la propina del domingo. Uff. Que honestos nos hemos vuelto de repente!!!. Que no me arregle mi cuñado el ordenador que estamos quitándole el pan al informático.
@selojuro@yuripoe #3 @arroyogago #2 @oisinmad #1 La experiencia de abrir tu casa a desconocidos entra dentro de la economía colaborativa. Yo tengo carnet de manipulador de alimentos y me llevó más de 6 meses ofrecer mi primera cena. Organizo ocasionalmente cenas para máximo 8 personas desde plataformas como EatWith que garantizan la máxima seguridad a mí y a mis invitados. El precio de cada cubierto cubre lo justo para los alimentos, su elaboración y el tiempo invertido. Para mí, el valor no está en lo que gano, si no en todo lo que me llevo: una experiencia única, el aprendizaje de cocinar para otros, las amistades que hago, etc. ¿Se parece a un restaurante? En nada. ¿Somos competencia? Para nada. ¿Por qué no es gratis como cuando invito a amigos? Porque los que vienen a mi casa son desconocidos. Muchos pagamos nuestros impuestos.
Está muy bien.. Pero el que llega paga un dinero por un servicio, o sea, una actividad económica con rendimientos lucrativos.. Que además está regulada.. Dar de comer exige unos cuantos permisos para proteger al que come.. El primero que envenene o estafe a unos comensales y se lave las manos por no tener seguro ni nada.. nos caeremos de la nube del buen rollo.
Siempre he tenido estupendas experiencias con Eatwith. Me ha dado la oportunidad de entrar en una casa particular de la ciudad que he visitado, he conocido gente nueva en mi propia ciudad, he comido espectacularmente...! Además, el concepto de economía colaborativa en estos tiempos que vivimos es un punto a favor.
@Gato_con_Botazas #7 claro! Y si tú colega viene y te arregla el baño tampoco le pagas, ni al rumano la revisión de gas, ni a tus primos por recoger las aceitunas... pues ya puedes rezar para tener un amigo que sepa de medicina y otro cachas que te haga de policía...