Quique camoiras en un ensayo de la obra 'Y este hijo... de quién es'. (Foto: EFE)

Actualizado martes 28/08/2007 11:09 (CET)

MADRID.- Tras más de 60 años de trayectoria profesional, el veterano actor Quique Camoiras se despedirá este año de los escenarios con la obra 'Y este hijo... de quién es', una comedia de enredo de su amigo Adrián Ortega, que inicia este miércoles su segunda temporada en el Teatro Príncipe Gran Vía de Madrid.

Camoiras, a quien sus compañeros de reparto calificaron durante la presentación de la obra como "el último genio del teatro cómico español", dijo retirarse "de verdad y no como los toreros, que dicen que se van, pero siempre vuelven", para descansar, disfrutar de su familia y marcharse "con el teatro lleno".

Una noticia que ya había adelantado en el mes de abril y que este lunes se hizo definitiva. Aunque, según dijo, participará en festivales y eventos benéficos en los que soliciten su presencia.

"Me retiro en un momento en el que, al bajarse el telón, el público se levanta y me grita: 'No te vayas, Quique, no te vayas'", relató emocionado a EFE el veterano actor. Un profesional de la interpretación que, durante sus 64 años de carrera, ha participado en casi 50 películas, más de 170 programas de televisión y ha actuado en "todos los teatros de España", además de hacerlo en cuentos infantiles, novelas radiofónicas, circo y revista.

Nacido en 1928 en la madrileña calle de la Corredera Baja, Camoiras pisó por primera vez un escenario a los 10 años, como bailarín de claqué en la obra 'Shangai 1938', que se representaba en plena guerra civil en la localidad valenciana de Xátiva.

Rompiendo zapatos en el escenario

"Desde entonces no he parado de romper zapatos en el escenario", bromeó el actor, que de bailarín pasó a hacer 'sketches' cómicos y a alternar las tablas con sus estudios de solfeo, piano, declamación y baile, y con su trabajo de administrativo en el Instituto Nacional de Previsión (actual Insalud).

Quique Camoiras. (Foto: EFE)

"Entonces, estando en Madrid, me llamaron para actuar en el Teatro Apolo de Barcelona como primer actor y director, y al ver que me iba bien con el teatro, pedí una excedencia en mi trabajo y desde ese momento sólo me dediqué a actuar", contó.

Así, siendo ya un cotizado primer actor y director, y habiendo pasado por todos los grandes teatros de España y de la capital, donde mantuvo la cabecera de cartel durante 12 años consecutivos en el Teatro de La Latina y durante nueve en el Cómico, Camoiras se decidió a montar su propia compañía, con Lilí Larsson como primera 'vedette'.

Desde entonces, ha intervenido en películas como 'Secuestro a la española' (1972), 'La corte de Faraón' (1985) o 'Tú estás loco, Briones' (1980). Además, ha participado en programas de televisión como 'Cómicos', 'La locura de Don Juan' o 'Humor cinco estrellas', junto a Juanito Navarro.

Pero ha sido en los escenarios donde Camoiras, que siempre se ha considerado un actor de teatro, ha desarrollado fundamentalmente su carrera, en la que también figuran títulos como 'El hombre de rojo', 'La dama de Alejandría' o 'El José de las mujeres'.

Un actor que 'quiso hacer reír'

Ahora, echando la vista atrás, el actor recuerda los buenos y malos momentos vividos en una profesión "dura y de muchas subidas y bajadas" y pide que simplemente se le recuerde "como un actor cómico que quiso hacer reír".

En 'Y este hijo... de quién es' será donde dejará de hacerlo. Una obra que ha elegido por su vinculación y amistad con su autor, Adrián Ortega, con quien trabajó durante 15 años y de quien ahora se cumple el centenario de su nacimiento. "Esta obra lleva más de 30 años en el baúl de mis comedias y sin embargo es de actualidad", indicó.

Se trata de una comedia de enredo, en la que "se sale de un lío para entrar en otro", apuntó Camoiras, que estará acompañado en el escenario por los actores Carmen Latorre, José Luis Gago, Alberto Agudín, Vicky Lusson, Toni Ferrer y Víctor Díaz.

Todos ellos calificaron a Camoiras como "un verdadero maestro". Alberto Agudín también señaló que "cuando el público viene al teatro quiere ver a Quique". Con su despedida, "desaparece la gran dinastía de los actores cómicos españoles", manifestó.