La poetisa cordobesa María Rosal recibió ayer el IX Premio de Poesía Aljabibe por Espeleología humana, un libro que supone una "bajada a los infiernos", una retrospectiva de su infancia y adolescencia a través de la metáfora de un pozo en un patio andaluz. Así describió la obra galardonada el jurado que falló el premio en un acto celebrado en la sede la Delegación de la Junta andaluza en Madrid.

El poeta Pablo García Baena, premio Príncipe de Asturias de las Letras y presidente del jurado, destacó no sólo el aumento de obras presentadas a este concurso (59 en total), sino también su mayor calidad respecto a otros años.

García Baena describió el libro ganador como "una bajada a los infiernos" a través de la metáfora de un pozo del que van surgiendo los fantasmas del pasado de la autora. Este pozo recuerda, subrayó el presidente del jurado, a ese "pozo que todos hemos tenido en nuestra vida, donde decían que había fantasmas" y al que los niños se asomaban con la esperanza de ver un espectro o un demonio. "Eso queríamos ver, y es lo que ha visto María Rosal", añadió.

Se trata de un libro "sin ningún adorno, amargo pero muy hermoso", según García Baena, que recordó que el galardón implica la edición de 1.000 ejemplares del libro, así como un premio económico de 12.000 euros para la ganadora.

Rosa Díaz, que fue la ganadora de la primera edición de este galardón y también miembro del jurado, destacó la forma de escribir de María Rosal y sus "micropoemas", piezas breves que ejecuta "con mucha categoría" y que se remontan a una tradición que en Andalucía viene de antiguo.

La autora agradeció el premio y recordó cómo aquellos fantasmas del pasado fueron surgiendo en su cabeza a raíz de una experiencia trivial: la decisión de cerrar o no un pozo en su patio. El premio le fue entregado por la consejera de Cultura, Rosa Torres, en el transcurso de una cena en Madrid.

La Andalucía que se recrea en su libro es una Andalucía de esencia "sobria", circunstancia que corrobora García Baena al subrayar que no se retrata un "vergel florido", sino un lugar "muy escueto; un patio caracterizado sólo por la cal de sus paredes y el pozo", que bien podría ser cualquier rincón cordobés.

María Rosal, nacida en la localidad de Fernán Núñez, ha publicado más de una docena de obras de poesía como Inventario, Tregua, A pie de página, Otra vez Bartleby o Inquisición.es, además de varios libros de narrativa y ensayo. Ha obtenido varios galardones, entre ellos el Ricardo Molina.