Diez usos sorprendentes del papel de aluminio

-Afila las tijeras. Coge un trozo de papel de aluminio y dóblalo varias veces. Corta después repetidamente ese trozo doblado antes. Y comprobarás que las tijeras están tan afiladas que parecen nuevas.

-Limpia la plancha. Para dejar la plancha impoluta y limpia, coloca un trozo de papel de aluminio en la tabla de planchar y añade un poco de sal por encima. Después, coloca la plancha sobre el papel de aluminio y simula el movimiento de planchar.

-Complementos de plata impolutos. Para conservar los complementos de plata como nuevos se debe forrar un recipiente con papel de aluminio e introducir en su interior agua hirviendo con una cucharada de bicarbonato. Mete después esos complementos y déjalos reposar en el agua por un tiempo. Al sacarlos, límpialos con un paño seco.

-Cocina brillante. Para mantener la cocina brillante, frota la parrilla con un trozo de papel de aluminio y para las ollas haz una bola de aluminio, añade detergente en la cazuela y frota hasta que quede impoluta.

-Protege las plantas de los insectos. Coloca trozos de papel de aluminio en las plantas y los insectos dejarán de comérselas y estropearlas. Para los árboles es mejor colocar tiras de aluminio colgadas de las ramas. De esta manera se evita que los pájaros acaben con los frutos.

-Más calor. Para esos días tan fríos en los que parece que la estufa no calienta lo suficiente, forra una tabla de madera con papel de aluminio y colócala detrás del radiador, en la parte superior. El calor se reflejará y la habitación estará más caliente al cabo de pocos minutos.

-Las pilas o baterías reviven. No podrás creer lo que un trozo de papel de aluminio puede hacer porque el mando de la tele vuelva a funcionar. Corta un cuadrado pequeño de papel de aluminio y dóblalo por la mitad, después colócalo entre el contacto de la pila o la batería.

-Cuberterías brillantes. Pon papel de aluminio en el fondo de un recipiente y añade sal y agua. Después introduce en el bote los cubiertos y déjalos un buen rato. Se dejan secar y, una vez secos, se frotan con un trapo o algodón.

-Adiós a las manchas de óxido. Para eliminar las manchas de óxido enrolla papel de aluminio en uno o varios dedos de la mano. Frota en el lugar donde ha aparecido la mancha.