Cultura

Academizar a la filosofía es un gran problema, dice Wolfram Eilenberger

ENTREVISTA. El filósofo alemán comenta su reciente libro Tiempo de magos: la gran década de la filosofía, 1919-1929, en el cual hace una revisión del pensamiento de Walter Benjamin, Ernst Cassirer, Martin Heidegger y Ludwig Wittgenstein.

ENTREVISTA. El filósofo alemán comenta su reciente libro Tiempo de magos: la gran década de la filosofía, 1919-1929, en el cual hace una revisión del pensamiento de Walter Benjamin, Ernst Cassirer, Martin Heidegger y Ludwig Wittgenstein.

Academizar a la filosofía es un gran  problema, dice Wolfram Eilenberger

Academizar a la filosofía es un gran problema, dice Wolfram Eilenberger

La Crónica de Hoy / La Crónica de Hoy

"La idea de tiempo es esencial para un ser humano y la pregunta más importante para los pensadores europeos Walter Benjamin, Ernst Cassirer, Martin Heidegger y Ludwig Wittgenstein fue: ¿qué significa ser un ser humano?", comentó en entrevista el autor Wolfram Eilenberger (Alemania, 1972), a propósito de su libro Tiempo de magos: la gran década de la filosofía, 1919-1929.

El título, publicado por Taurus, explica por qué esos cuatro pensadores son hoy clásicos de la filosofía, cuáles fueron sus planteamientos ante la crisis y qué tanto determinó la Primera Guerra Mundial.

“Hay un gran orgullo en Alemania por estos filósofos, pero se ha ido perdiendo la tradición porque ellos no eran filósofos académicos. Considero que hay que definir la idea de filosofía porque hoy pensamos que es una disciplina académica, pero para Heidegger, Benjamin y Wittgenstein no lo era, era una forma de vivir y existir, de encontrar un censo, de llenar el vacío dentro de su vida”, señaló en entrevista Wolfram Eilenberger.

El autor opinó que la filosofía es buena si hay alguna conexión fuerte entre la vida, la experiencia y los puntos de vista, “pero hoy en día academizar a la filosofía es un gran problema en Alemania, y me imagino que también lo es en México y Estados Unidos”.

— ¿Qué tanto impactó el caos en estos cuatros pensadores?

— La idea básica de mi libro es muy simple: una crisis puede ser algo bueno si eres un filósofo. En 1919, Alemania estaba en una crisis total: en lo político, económico y cultural…. y ésas son buenas condiciones para pensar. Los cuatro magos de mi libro vuelven traumatizados por la Guerra y tienen que encontrar una nueva manera de pensar sobre sí mismos, sobre su cultura y sobre la filosofía, entonces, eso marcará el inicio de una gran explosión de creatividad en mi país, que se extendió diez años.

— ¿Coinciden estos autores en una definición de tiempo?

— El concepto de tiempo es esencial para la filosofía y hay una razón muy simple: somos seres finitos, vamos a morir y lo sabemos, así que hay un horizonte de tiempo para nosotros, no para los gatos u otros animales; es importante, somos nosotros los únicos que sabemos que hay un tiempo de vida.

“Por eso la idea del tiempo fue clave para estos pensadores. Por ejemplo, Heidegger; su obra circula sobre la idea de la nada y el existir… es decir, así fue su forma de tratar el problema de infinitud en un mundo existencial”, respondió.

— ¿El tiempo también castigó a estos filósofos, como a Heidegger por su apoyo al nazismo?

— Se puede decir que las preguntas de la filosofía son eternas, son siempre las mismas, pero el contexto de las interrogantes cambia. Somos seres humanos y eso quiere decir que somos seres sociales y por eso, seres políticos, cada uno de nosotros tiene un acceso a la política.

“Lo que me interesaba en estos cuatro magos era su manera de acercarse al ámbito de la política, la cual fue muy diferente. Heidegger eran muy conservador, patriota y casi nacionalista de inicio; en cambio Ernst Cassirer que era judío como Benjamin, tenía una visión más cosmopolita, más abierta y democrática, así que las tensiones de los años 20 y de Alemania eran las tensiones entre la democracia y la dictadura, entre el cosmopolitismo y el nacionalismo”, indicó.

El caso de Martin Heidegger es una gran tragedia para la filosofía en Alemania, añade Wolfram Eilenberger. “El filósofo más talentoso se convirtió en un nazi, es todavía una cuestión trágica. Considero que pensar lleva un riesgo y eso también significa que se pueden cometer faltas, como el caso de Heidegger”.

FILOSOFAR ENTRE AMIGOS. Eilenberger fundó la Revista Philosophie en 2011 y fue el editor de la misma hasta hace dos años.

“Es una revista para toda la gente que quiera pensar sobre su vida de una manera filosófica, así que hablamos de política, deporte y cosas culturales. Cuando una persona la lee por primera vez siempre dice: nunca lo he visto así. Y ese efecto es invaluable. La revista tiene 70 mil ejemplares cada dos meses, es un gran éxito porque la gente quiere pensar”, comentó el autor.

— ¿Por qué se piensa que filosofía es sinónimo de dar explicaciones con teorías?

— Es un problema de la educación de los filósofos, no pueden hablar de cosas normales sin teoría. En lo personal, me pone triste eso porque mis colegas no tienen la capacidad de hablar de manera accesible a todos.

“Hay una forma de educarnos en la filosofía: a través del diálogo. La figura más importante para la filosofía es un amigo o una amiga que tenga más experiencia y que nos motive al diálogo. Para mí, la filosofía es leer, escribir y sobre todo, hablar con una persona experimentada, que pueda mostrarnos cómo cambiar la mente con palabras”, respondió.