• Cuándo cambiar las ruedas del coche: Las 5 señales claves

No importa lo mucho que mimes tu coche. Cada vez que lo dejas aparcado fuera del garaje, bien sea en un aparcamiento público o en una calle cualquiera, está expuesto a sufrir golpes y rozaduras que dejarán su inevitable recuerdo en la forma de rayones y abolladuras. Son, admitámoslo, 'cicatrices y arrugas' que van surgiendo de forma natural en la vida de tu automóvil, por frustrantes que sean.

¿Pero puedes hacer algo para remediarlas? La respuesta es sí. Dependiendo de la abolladura en cuestión, puedes encontrar profesionales del detallado dispuestos a rectificarlas sin necesidad de volver a pintar encima. Eso sí, a un precio que quizá puedes no encontrar razonable.

Por eso, si tus ganas por devolver la chapa de tu coche a su estado original están muy por encima de tu presupuesto, vamos a echarte una mano amiga y ayudarte para que, con calma y buenas herramientas, consigas hacerlo con tus propias manos.

Antes de nada: analiza las abolladuras de tu coche

Para empezar a solucionar las abolladuras de tu coche, primero tienes que fijarte en ellas a fin de saber a lo que te enfrentas. ¿En qué parte concreta del coche se hallan? ¿Está abollada una puerta, una aleta, el capó, el techo? ¿Qué profundidad tienen? ¿Ha saltado la pintura en alguna de ellas? ¿Afecta a partes de otros materiales, como plástico o fibra de carbono?

dent on blue carpinterest
Praween Pansuppawatt / EyeEm//Getty Images

En función de tus respuestas a estas preguntas, será necesario emplear alguno de los múltiples métodos y herramientas que existen para arreglar abolladuras en un coche. Pero lo mejor que puedes hacer, antes de ponerte a trabajar, es hacerlo en un espacio seguro, limpio y tranquilo como tu garaje particular. En su defecto, también puede ser una buena idea reservar plaza en un 'box' de alquiler cerca de tu zona, donde muy probablemente encontrarás también los utensilios necesarios.

A la hora de enfrentarte a una abolladura en la carrocería de tu coche todo dependerá de tu habilidad y paciencia. No obstante, si en este primer análisis observas que el desperfecto que deseas arreglar contiene óxido, lo más prudente es que no intentes ningún arreglo por tu cuenta y recurras, mejor, a tu taller de chapa y pintura de confianza.

Métodos para extraer una abolladura del coche

Si ya estás decidido a sacar esa molesta abolladura de tu coche, lo mejor es hacerlo siguiendo el método más sencillo: utilizar una fuerza de succión para devolver la chapa a su forma correcta.

Para este fin existen en el mercado varias herramientas, empezando por las más sencillas ventosas. Dichas ventosas cuentan con un asa para que, al fijarlas sobre el centro mismo de la abolladura, sea posible 'tirar' de ellas de modo que el metal reaccione y recupere su forma por sí solo.

close up of a dent in a gray car exteriorpinterest
bruceman//Getty Images

Este útil es sencillo y muy recomendable si la abolladura ha tenido lugar en un panel de la carrocería plano (como el capó o las puertas) y la pintura de su alrededor no ha sufrido desperfectos. Tan sólo hay que tener cuidado, eso sí, de aplicar la fuerza justa. Si nos 'pasamos' nada impide que las capas de pintura se quiebren o, aún peor, que la abolladura se 'revierta' y pase a sobresalir del resto de la chapa.

Otra herramienta, más profesional, es un kit de reparación dedicado. Consiste en una herramienta con aspecto de pinza compuesta por dos calzos que forman un 'puente', los cuales se apoyan a ambos lados de la abolladura. En el centro de la misma deberás adherir un vástago de plástico, que acoplado a la pinza permitirá tirar de él para recuperar la forma de la chapa.

El kit de reparación no es mucho más complejo de utilizar que la ventosa, si bien tiene el inconveniente de que sólo es apto para arreglar abolladuras muy pequeñas en sitios difíciles, como por ejemplo los pilares y montantes del techo.

auto body mechanic disassembling damaged vehiclepinterest
Nikola Stojadinovic//Getty Images

Por ello, la herramienta más empleada por los chapistas profesionales es el llamado 'martillo de inercia'. Básicamente se trata de una larga barra metálica con un mango pesado que se mueve libremente en toda su extensión, y que cuenta con un enganche para tirar de unos remaches que tendrás que adherir (o soldar) al centro de la abolladura.

Una vez hayas colocado los remaches en la chapa abollada, al enganchar el martillo y mover el mango hasta el extremo opuesto con un golpe seco, la fuerza del tirón te permitirá enderezar el metal poco a poco. Este sistema es relativamente respetuoso con la pintura pero no está de más que tengas a mano, por si acaso, un pincel de retoque del mismo color de tu coche.

Por último existe un truco muy casero para eliminar abolladuras, consistente en remojar la zona abollada con agua hirviendo y tirar de la chapa hacia afuera con la ayuda de un desatascador, tal y como se explica en vídeos como éste de YouTube.

No obstante, no te recomendamos seguirlo ya que los métodos que te hemos explicado antes se basan en el mismo principio de 'estiramiento' y son mucho más eficaces siendo apenas más 'aparatosos'. Y siendo sinceros los desatascadores, además de imprecisos para esta labor tan concreta, son herramientas muy poco o nada elegantes.

Las abolladuras en plástico pueden salir con facilidad

En ocasiones la abolladura en cuestión aparece sobre plástico en lugar de chapa, como por ejemplo en los paragolpes y otros apliques. Es el pan de cada día en los coches más modernos pero tranquilo, porque también tiene remedio.

En estos casos arreglarla puede ser tan sencillo como remojar la zona abollada en agua hirviendo y, si es una pieza hueca y puedes acceder a su cara interior, hacer presión para sacar la hendidura desde dentro.

dented car bumperpinterest
bgwalker//Getty Images

Si por el contrario la pieza es sólida o no puedes acceder a su cara interior, una alternativa es emplear un aplicador de calor (o un secador de pelo) para calentar la superficie. Seguidamente, con un dispensador de aire comprimido, al enfriar instantáneamente el plástico él solo volverá a su forma original.

Arreglar una abolladura requiere paciencia

Hagas lo que hagas para intentar arreglar la abolladura de tu coche, por encima de todo ten mucha paciencia. Este tipo de arreglos, como ya has visto, requieren una secuencia de pasos que no debes saltarte. Tampoco es buena idea aplicar fuerza sin moderación, ya que puedes acabar 'estirando' la chapa o el plástico de forma incorrecta, convirtiendo lo que era un pequeño desperfecto en un problema más difícil de arreglar.

Por ello nuestro mejor consejo es que, pruebes el método que pruebes, te tomes tu tiempo para ejecutarlo con tranquilidad y los medios adecuados. Si tienes suerte y consigues hacer desparecer esas molestas abolladuras, conseguirás ahorrarte una nada desdeñable cantidad de dinero en el chapista. Pero antes de meterte a 'cazador de abolladuras', si no lo ves claro, ponte en manos de un profesional de la carrocería. Tu automóvil y, a la larga, tu cartera, te lo agradecerán.