Las grullas coronadas cuelligrís son aves no migratorias y gregarias, pero cuando llega la época de cría se separan y buscan su pareja, que será la misma durante toda su vida.

No existe el dimorfismo sexual en estas aves, pero los machos suelen ser un poco más grandes que las hembras. Podemos diferenciar los sexos en la época de reproducción, cuando el macho realiza el baile de cortejo a la hembra. Este baile incluye reverencias, saltos y un sonido en el que interviene el saco gular de color rojo.

Sus plumas son de color gris, exceptuando las alas que son blancas y un penacho de plumas en la cabeza de color dorado que le dan su nombre. Cuando las crías nacen, estas tienen un plumaje de color grisáceo con las puntas pálidas.

A pesar de ser una de las grullas más abundantes de África, su población ha disminuido un 15% en las pasadas dos décadas. Se enfrenta a la degradación de su área de reproducción y además, son perseguidas por los granjeros. Estos ven en las grullas una amenaza para sus cultivos. Las grullas suelen invadirlos y alimentarse de los tallos jóvenes de las plantas de maíz.