¿Existieron los humanos gigantes?

Por Néstor Vidal*

Quizás seas muy joven para recordarlo, pero antes de que Facebook y Twitter se convirtieran en nuestras principales fuentes de información, acostumbrábamos a iniciar nuestras mañanas descubriendo lo último que acontecía en el mundo leyendo el periódico.

Hagamos un ejercicio: Imagina que te encuentras disfrutando de un buen café por la mañana mientras lees las noticias en tu periódico de confianza, un encabezado llama tu atención. “Descubren esqueletos gigantes en Sudamérica”.

Bueno, pues algo parecido sucedió hacia finales del Siglo XVIII en unos de los diarios más confiables y leídos de esa época, nada más ni nadas menos que The New York Times donde publicó dentro de la página número 7 en su edición del 25 de diciembre del año 1868, lo que llevaba como título "El descubrimiento de un enorme esqueleto".

Maravilló y alimentó tanto la curiosidad como la imaginación de quienes lo leyeron, esto solo podía significar una cosa, los gigantes caminaron alguna vez entre nosotros. Lamentablemente a partir del Siglo XIX ninguna noticia oficial y mucho menos un medio fiable volvió a tocar el tema ¿por qué?

La posible existencia de gigantes es un tema con el que ya se ha debatido durante siglos. Imaginamos y proyectamos esta posibilidad en decenas de fantásticas historias donde nuestra débil y frágil humanidad es puesta a prueba frente a estos colosales seres capaces de terminar con nuestra existencia, probablemente de un solo pisotón.

Pero en un inesperado giro de tuerca hace poco más de (7) siete años, una nueva noticia relacionada a los gigantes fue replicada por decenas de medios en Internet.

Esta noticia a grandes rasgos anunciaba lo siguiente:  La Suprema Corte de los Estados Unidos obligó a la “Institución Smithsonian” a publicar documentos clasificados de principios del año 1.900 en que ponían en jaque a la Institución, ya que servían como prueba de que la organización estuvo involucrada en un importante encubrimiento histórico los cuales nunca reveló.

Miles de restos humanos gigantes que alcanzaban casi los 4 a 6 metros de altura y que habían sido descubiertos en todo Estados Unidos fueron destruidos por órdenes de las autoridades y personas con poder.  El motivo era proteger la cronología principal sobre la evolución humana.

En aquel entonces, por ejemplo, antes de ser aceptada la teoría de la evolución propuesta por Darwin, la arqueología solo aceptaba la existencia de esqueletos gigantes. Según muchos investigadores y científicos, los gigantes poblaron toda Norteamérica en sus inicios. Solo como dato curioso el mismo Abraham Lincoln en uno de sus discursos del año 1848 refería a la existencia de los gigantes basándose en los relatos de varias tribus indígenas americanas.

Seguramente te estarás preguntando, por qué tuvieron que pasar más de 100 años para que estos documentos fueran desclasificados, al parecer todo se lo debemos a la Institución Estadounidense de Arqueología Alternativa por sus siglas en inglés AIAA, ellos fueron quienes acusaron directamente a la “Institución Smithsonian” de haber destruido miles de restos humanos gigantes.

El Smithsonian respondió a la vez a la Organización por difamación alegando que una reputación de más de 168 años les precedía. Las cartas jugaron a favor de la Institución Estadounidense de Arqueología Alternativa es algo terrible lo que se está haciendo al pueblo, estamos ocultando la verdad sobre los antepasados de la humanidad, nuestros antepasados los gigantes que vagaban por la Tierra como se recuerda en la Biblia y en los textos antiguos del mundo, declaró la Institución Estadounidense de Arqueología Alternativa

Añadiendo que la publicación de estos documentos sería de gran ayuda para los arqueólogos e historiadores que nos haría conscientes y nos obligaría a volver a estudiar todas las teorías sobre la evolución humana además entenderíamos mejor a la cultura antigua de los constructores de los montículos, esas numerosas tribus ancestrales que representaban gran parte del avance cultural americano.

Entre los archivos supuestamente desclasificados por el Smithsonian se encontraría uno que describiría a detalle el hallazgo en el año 1912 de 18 esqueletos colosales por un equipo de arqueólogos del Beloit collage de Estados Unidos esto ocurrió durante una excavación en el Lago de Levante de Wisconsin, los inmensos esqueletos se encontraban entre más de 200 montículos de efigies pertenecientes a la Cultura Woodland correspondiente al periodo Prehistórico Americano

Imagínense la sorpresa de los arqueólogos al descubrir aquellos extraños restos que incluso consideraron no correspondían a nuestra especie.

Habrá que tomar con pinzas esta noticia buscando por Internet, aún se puede encontrar en el Archivo Oficial de The New York Times la nota fechada en el año 1868 que habla sobre el hallazgo de los Huesos Gigantes

Lo cual es fantástico y nos da esperanza, pero lo que no se encuentra es algo que corrobore contundentemente con documentos oficiales y fuentes confiables un pleito legal entre el Smithsonian y la Institución Estadounidense de Arqueología Alternativa.

El famoso investigador James Vieira quien desde hace más de (2) dos décadas estudia el fenómeno y que incluso llegó a protagonizar el documental “SEARCH FOR THE LOST GIANTS” tiene una postura clara sobre el tema.

Los masones, los rosacruces, los teósofos, los documentos religiosos incluyendo la Biblia, los grandes místicos como Rudolf Steiner y Edgar Cayce y las tradiciones orales indígenas de todo el mundo creen que los gigantes existían.

Incluso todos los exploradores bien conocidos en las américas como: John Smith; Francisco Vázquez de Coronado; Fernando de Magallanes; Américo Vespucio o Armando De Soto aseguraron que al encontrar pueblos nativos había gigantes desde la actual Virginia a la Patagonia. Sí me preguntas a mí, opto por seguir creyendo en lo fantástico y maravilloso de estas historias.  ¿Y tú? 

*“Centro de Investigación Forense y Tecnología del Tránsito”