Las maravillas que vemos en el universo "deberían sacarnos de nosotros mismos", aseguró recientemente una científica de Harvard, "mirando no solo hacia las maravillas mismas y las verdades que revelan, sino también hacia la fuente de todas las verdades y al Creador último de todas las cosas".
Karin Öberg, profesora de Astronomía y directora de estudios de pregrado en la Universidad de Harvard, señaló que su trabajo como científica la ayudó a apreciar que vivimos en un universo que "tiene un principio, un medio y un final que se desarrolla con el tiempo".
También dijo que creer en Dios, lejos de ser un impedimento para la investigación científica, en realidad puede ser útil para los científicos debido a la "base segura" que proporciona creer en un Creador. La propia Öberg es una católica conversa del ateísmo.