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'· L •1 t i,j • ' l.;:; LO S MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA l'OR LUIS ENRIQUE AZAR OLA GIL -- - -- - · -- . - --- r f r- ::r: ,-...,4 o V'J .-¡ o C/) ,-...,4 > "'z 3:: .... ""O > n > m r- tT1 re > .-¡ > ES PROPIEDAD DEL AUTOR Queda hecho el depósito que dispone la ley No . 11,723 - ----·-- PIUNTED IN AR.GENTINE Imprenta López Perú 666 Buenos Aire11 LUIS ENRIQUE AZAROLA GIL LOS M ACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA 1604 ,-1814 BUENOS AIRES LIBRERIA Y EDITORIAL "LA FACULTAD" OBRAS LA socIEDAD t ·RcGCAL\ d orff, París: 1911. Y se s PROBLEJ\1AS. - Librería Paul Ollen- A'.'iC.\RIO DIPLOM .-\TICO Y CO:\'SlJ LAR DE LA REPÚBLICA Ü . DEL URUGUAY. Volumen inicial correspondiente a 19lí: 1nandado pu- blicar por el l\ilinisterio de Relaciones Exteriores: l\1ontevideo. L \ HUELL.\ SA~D.-\LIAS. Viaje~, problemas sociales~ literatura y crítica: crónicas de la gran guerra~ política internacional. Talleres Gráficos Cúneo: Buenos Aires, 1924. DE :\IIS EL BA.TLLIS~IO Y LA ENSEÑANZA :.\1ILITAR. Folleto político. res Gráficos Cúneo: Buenos Aires: 1924. Talle- VEI:'.'.TE LII\AJES DEL SIGLO XVIII. Contribución a la historia de :\1ontevideo. - Premio Hispano-Americano de 1931, otorgado por la Real Acad emia de la Historia. - Casa Editorial FrancoIbero-Americana, París, 1926. CRÓi\ICAS Y LI:\'AJES DE LA GOBER;'\ACIÓJ\ DEL PLATA . Contribución a la historia colonial de los siglos XVII y XVIII. - J. Lajouane y Cía.: Buenos Aires, 1927. AZAROLA. Crónica del linaje. 1929. Gráficas Reunidas S. A., Madrid~ FONDOS DOCL~IE:\7TALES RELATIVOS A LA HISTORIA DEL U RUGUAY. Informes al ~1in isterio <le Instrucción Pública. - Gráficas Reunidas, S. A., :Madrid. 1930. LA EPOPEYA DE ::'l'f A'.\' GEL LOBO. Contribución a la cróniea de Colonia del Sacramento: seguida de una recopilación de sesenta documentos. - Compañía Ibero-A1nericana de Publicaciones, :Madrid: 1931. Epoca fundacional. - Tipografía de la " ReYista de ArchiYOS: Bibliotecas y Nluseos::: Madrid. 1932. APORTACIÓi.\ AL P..\DRÚ.\ HISTÓRICO DE i\110:'\TEVIDEO. Los o_RÍGE'.'iES DE lHo ~TEY IDEO 1607-1749. Con una recopilación de crncuenta documento~ relatiYos a 1a fundación de la ciudad. DEL AUTOR Medalla de oro del :Ministerio de Instrucción Pública del Uruguay. - Librería y Editorial "La Facultad ", Buenos Aires, 1933. Nueva edición para uso de los estudiantes de Enseñanza Secundaria. - Casa A. Barreiro y R amos S. A., Monte video, 1940. LAS HEREJÍAS HISTÓRICAS DEL DR. EDUARDO AcEVEDO. Folleto de rectificación y crítica. - Librería y Editorial "La Facultad", Buenos Aires, 1933. DoN JOSÉ ARRIETA. Síntesis biográfica. Tirada aparte del homena je a D. D omingo Amunátegui Solar, auspiciado por la Universidad de Chile. -- Imprenta Universitaria, Santiago, 1935. LA PRINCESA LECZYKA (lVIemori as de un transeúnte) . Universitaria, Santiago de Chile, 1935. Los SAN MARTÍN EN LA BANDA ÜRIENT AL. "La Facultad", Buenos Aires, 1936. EL PROYECTO DE FUNDACIÓN DE LA VILLA Imprenta Librería y Editorial NUEVA ESTEPA. brería y Editorial "La Facultad", Buenos Aires, 1936. DE Li- LA AMANTE AMARGA. R elato novelado. -- Librería v Editorial " La Facultad", Buenos Aires, 1939. HISTORIA DE COLONIA DEL SACRAMENTO ] 680 - 1828. Edición para uso de los estudiantes de Enseñanza Secundaria. Casa A . Barreiro y Ramos S. A., Montevideo, 1940. Los MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA 1604-1814. Editorial "La Facultad" , Buenos Aires, 1940. EN Librería y PREPARACIO N APELLIDOS DE LA PATRIA VIEJA. Nuevos estudios históricos y bio- gráficos. LA SUPREMACÍA DE LAS FUERZAS ESPIRITUALES. gía y crítica religiosa. Ensayos de sociolo• SUMARIO Pág. ls'rRODUCClÓN . . Capítulo J . - . . . . 13 . . MELCHOR. MACIEL 1;':583-1033. Su procedencia. - El mercader. - La media arroba. - El hacendado. - Orígenes de la propiedad cm el pago de la Magdalena; u bica.ción de las tienas, de Maciel. - Introducción del ganado vacuno en la Banda Oriental. - El hogar de Macicl ; los linajes aliados. -- Su huella y su fin . - General Pedro de Rojas y Acevedo. - )'[aestre de campo P edro Homem de Pessoa de San. Capitán Pedro Pessoa de Figueroa . . . . . . . . . . . . . . Capíf'ltlo 11. - LUIS MACIEL DEJL AGUILA 1627-1710. Sus cargos públicos. - Sus tierras. - Su familia. Maciel. - Lucas Maciel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Capít·ulo 111. - -·· 9 " .Juan 31 ,PRAN d JSCO :MACIEL D~L AG UlLA, 16~5-17 . . Su vida pública. - Su matritponio ; ;,1, linaje ele Gómez R~cio. General Roque de ~1eucheta y Znrate. - Descendcnc:1c1 r alianzas matrimoniales. - Fuentes documentales. - La enco~ni011da de los indios tubichaminis . . . • . . . . . . . . . . . . . . . . 59 ,! Ca fJíl1llo 1 V . - F&A~ClSCO ~1:AClEL DEL AGU lLA EL Mozo 1652-17 . . Ru radie.ación y actuación en Corrien h s. -- l•,rancisco ~Ia<.:ic] ele Villanncva. - Maest re de campo• Alejandro do Aguine. Doña Bartolina Madel del Aguiln. - Descendencia correntina .. 1 Cft/l ~lulo Y . - \ ,JUAN :MACrnL DEL, .AG UlLA '., ,., ' ! lü37-17;¿9, .Noticias de su vida. - 8u familia . - Los Maciel Ual>allcro. - Diego Macie1. - Antonio Gonzúlcz de Acosta. - Antón Ga r_ eía. Caro. - Los descendientes .. .. .. .. .. . . .. . . .. .. 81 1 (l LOS l\IACIEL EN LA IIIS'rORIA DEL PLA'rA PÍ4g. Caz1ít ulo V J . - GENER.1,L BA'L'l'AS AR "MACIEL El fundador . - 1640-1701. El sucesor tronquero. - Doña :María de Lara y Aldercte. - D oiía Ana. d e Seqneira. General Pedro G-ómez d e Aguiar. _ , Maestre de campo Manuel Cabral de Alpoin. Pleito con dofia María Cu bral de l\Ielo. Pleito con Luciano d e A costa. - La informaeión de l 679. Sucesión d el general Maciel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Cap itulo V II . :MAESTRE DE CAMPO J\1ANUEL 1690-1764. MAClEL Su p ersonalidad y sus serv1c10s. Maestre de campo Juan <le Laeoizqueta. - La. sucesión. -- Los f)jp~ d e At,dino. Los Beha.güe y Anclía . . . . . . . . . . . . . . . . .. .. .. .. Capí tulo V III . - DOCT·OH, JUAN BALTAS AR MACIEL GE :>rER~H , JOAQU ÍN :MACIEL Su d estierro 125 1729-1780. S íntesis biogrúfic:1. Sus responsabilidades. Bienes d e fortuna. Sus hijos. - Los del Campo. Los V aJdineso y ~faciel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Cap í-tulv .Y. - DOMI NG O ~IACIET. J U ,\ N ::\{AN U EL yf AUKL E 1" RIQlll-1 ~ u r n~tl'o hiM{n·i<·l•. Los Cam e,i o 145 1753 -180 l. E l h ij o pr6digo. Su matrimonio ; :-;u pleito eon el m ,nqu és dC' Lorc•to. La etapn fi11:i l dP HH vi dn . Los ltarretón. L os Alvarcz d e Aee n 'do . . .. .. .. .. .. .. .. Capít ulo X 1 l . --- L uis 133 17:~7 -] 792. f; us fun cio11l's púb licas. Sus hij os y nietos. Cosme ~l:ickl. - J os(· Santos Ma cicl .. .. .. .. .. . . . . .. .. . . . . C apitulo XI . - 111 1727-1788. Su j c nuc¡ u fo, c·n ln h i~t.or ia . ·[i;J educador. y su fin . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Ca pítulo I X . 93 153 ~fAcm1, 17~0 -1801. S11 fa.mil ia. - hil'lh'R y ~u fin . 169 ( 'u¡,íl ufo ,\'lll . --- l•' IU N CI ~ ('O ~\ l\''PONIO "'.\fA CIEL 1737-1807. Hes t1llll'll lii ogr ú fi eo. - F m H1al i011 ch,} H os11ital ele Caridad. La nd u:m:t {l t> :\.J on tc•,·i<ll'O ; el }ll'Ot·r so d e l 78fl. Prisión de :\f n (• ic·l ; la j us t i<·in h :ijo Lurt'to: un in f orme m r dico en 178fl. L o s G:neía Jt, Z ú11i g a . La pl'OYC'0dur; :1 d e la H e:tl Armada; c' a Ho de• In~ r orbet :rn ' ' n l'seubil'.'rtn ' ' y · • Atredd:1 '•. Las confi sc•aeimll':-1 d p 1HO 1 ; t r: rnsg resión al trat a do con Ec;;tad°"3 Un id o~. L:t~ llli l ic·i a s <l t' )lout('\' idL'O · s us ; efes v ofiei:..iles. ' ., Lo '{ h ij o:-l d t' "\l 1ll' iel. - L os del Pino. .. .. .. .. . . . . . . .. .. 1 . 179 ]1 :-:iUl\IAHIO Pág. (;a,pitulo XIV . - U APIT...-\~ DE BLA~DENGVE S C ARLOS MACIEL 1 í 5D-1803. El soldado. Sus campañas. Su <lescl'ndencia. Juan Pedro Macicl. - El regimiento de blandengues de Montevideo; su creación ; sus oficiales; su historia . . . . . . . . . . . . . . • • • • 213 APÉNDICE DOCUMENTAL. l. Encomienda de la tribu de Telomyan conclic concedida a Juan Ruiz de Ocaña. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . - . . . 2 . Poder para testar otorgado por Melcbor Maciel . . 3 . Testamento instituído por los apoderados de l\Ielchor :Maciel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . _. . . . . . . . . . . 4 . Certificación expedida por el gobernador don José Martí.nez de Salazar sobre los servicios de Francisco Madel del Aguila .. 5 . Encomienda de los indios tubichaminis concedida a Francisco Macicl del Ag uila, el l\iozo . . . . . . . . . . . . . . . . . . 6 . Información del obispo don Antonio de Azcona sobre varios personajes de la gobernación del Plata . . . . . . . . . . 7 . Relación detallada d el P. Pedro de Orduña sobre el ataque a la fortal eza del Sa,cramento el 7 de agosto de 1680 . . 8 . Certificación sobre l a a ctuación del capitán Alejandro d e Aguirre en el asalto y toma de la fortaleza del Sacramento Información sobre los servicios públicos y antecedentes de 9. familia del general Baltasar Maciel . . . . . . . . . . . . . . . . 10 . Convenio entre Córdoba y Santa Fe para la pacificación de los indios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11. Testamento del maestre <le camvo Manuel Maciel . . . . 12 . Carta de dote de doña Rosa Maciel . . . . . . . . . . . . . . ]3 . Poder de testamento otorgado por doña Ana Mnciel de Dizido y Zamudio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Testamento de Luis E nrique Maeiel . . . . . . . . . . . . 14 . 15 . Testamento del brigadier <lon ,Tuan F rancisco Ga.r cía de 16. 17 . 18 . Zúñiga . . .. . . . . . · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · · Estancias y chacras pertenecientes a la t esta.mentaría del brigadier Ga1·c:ía <le Zúfiiga . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Ultima cláusu1a del testa.mento de doña :F'rancisca Warnes ' d e z--· de Garc1a umga . . . . . • • • • • : . . •. . . . . . Fojas militares de la guerra contra el 1mpeno del Brasil 229 231 233 237 238 240 242 246 24.S 2!54: ~55 262 264 26;5 :!69 279 28() 281 l<'mMAS l:IISTÓ.R.ICAS. Alonso de Esquive} . . . . . . . . . . . . . . Alonso de Mercado y Villncorta. . . . . . . Prancisco Macjel del Aguila. . . . . . . • . Pedro }..,ernández de la Madrid .. General Nicolás de Villanueva. . . . . . . General Baltasar Maciel . . . . . . . . • • General Pedro Gómez de A gniur . . . . . . . . . . . . Don Mendo de la Cueva y Beunvídcz . . . . . . . . General Pedro Bautista de Casajús . . , . . • . . . . 54 ül 63 65 75 97 $l9 105 112 1~ LOS J\IACIEL EN LA HlSTOHIA DEL PLA'l'A Plig. ~luc::;tre de (':tmpo Jlanul'I .Maciel . . . . . . YiITeY don .Juan José de Vértiz . . . . . . <·h'ue1:al Joaquín Macic•l . . . . . . . . . . . . }lanucl Joaquín de Val di vieso y ~facfol Uosrne Maciel . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Don 'l'omú,s Alvarez de Acevedo . . . . . . . . c+ober1wdor don .José ,Joaquín de Vürn;: Virrey MarquPs de Lo reto . . . . . . . . . . .-\lmum García de Zúíiiga. . . . . 'I' omas , (',arl'rn , d e z,-muga . . . . . . \'-irrey don Joaquín del Pino . . . . Virrey don Antonio Olagncr Feliú l~seribano Paulo Núñcz . . . . . . Don Pedro de Baygorri . . . . . . General Antonio de Vera ::\J uxiea Luis Emiquc ::\facieJ . . . . . . . . 114 12~1 I::~5 141 149 163 17G 184 190 193 202 218 .... 2v u !) 236 247 269 INTRODUCCIOJ\l A c,vol-ución ele las ciencias históricas ha quitado a los sucesos polít-icos y militares el carácter casi exclusivo qu e les concedían los antigiws autores. El h:istoriador rnoderno es un sociólogo que b,nsca, penetrar en el alma del pa,sado, y en la reali.zación de S'lt objetivo el estud1:o de la, producóón Utcrarfo, ele un p ucbln le aporta 11iayores elementos ele j1licio que la relación ele :,us tra tados internaóonales; el exanien ele las i11stitu cio11es ofrécel,e más interés q1(,e la descripción de las batallas ; .IJ la v ida fa,uiliar y social de las generaciones desapa·r ccidas 111ás i111 pol'f rr nci,1 que la 111 era cronología política. En la tarea ele reconstit1wión de las f pvcas mu c1·fos lo:-; cst ud1'.os Unajístfros son auxiliares eficac es o condició11 de desvojarlos de la sequedad vana ele que adolecía11 en el tiempo de los JJ1'iPilc.Qios, cuando la vrobanza de un abolrngo aristocrático daba dc1'echo a títulos, canonjías y cmple.o.s. Ba}o este 1tlt imo a.specto, la genealogía es una a1·scipUna lm ple11n raduddad. Pero su coovera-ción a la liú,foria resulta ef ectiva si se vincu1a la suces ión d e los Jw,mbres y las gencra(:io11es al proceso csi>irdual y social rfr 1rn delo determinado; s1· se establece la relación c11trc el poder art,nante de los linajes y la incnbación lenta de lo.~ f enóm eno:s pnlítfros que cmnbfon la fisonomía de las sociedades; .si constit uyf n una revelam'ón de costnmbrcs olvidadas _,· si el estudio dc las fa milias se encara como un elemento 1'(', prcsen faNvo del trabajo, la fortuna, los háb?°tos, la rnental1'dad 11 la moral de ·una épnrn,; y ~;¡' L H \.ll:-. \l.H 'll'L E'\ L\ lll:--Tl)Hi \ l>LL l'LAT.\ la luaa dt tl~l·t11d1 t 11ft ," .'I d (.>iCtlld1tnlc, ' ·" obst l'l't1<la, ,11 .,·u pasaJe ¡,vr la t'ida ¡níbl1ca . cuuw u11 indict clt la < 1·vlució11 !Jt'Hl ral. l.'J11 . tn 11ct ," un J)t ríodo h istúru·o a pan et' r1 rido. sus obra .. so n Sl nsiblrs 11 ~ll pfntcf1tra hu,wrna. porqut 110 ~f /, du:cribt cv n c-l mer o :wiilio dt. una clocuttit ntaciún uficial JI frío . ~iuo lJll f .'ie busca ahunclar u1 las capas ~aciales y tlt..ffrm111ar d influjo de los facfun .-, étnicos: ~l rntoz"-1 penetrar ni l a 111 t 1111idad d<1 los hogares µaru lhscubr1r u1 d pat10. fos i10bitacionu. los mu ebles y los tru jcs la hllclla v traza dl los anfrpa.,·(ufos: se c.ra minan los testamento.-; para i,erificar el t1po ele las lt t n ncios y los f ru tos realizados por €l traba jo: las cartas ch dote para co,wccr la co11 f :ció11 dd réy11uu1 eco nómico con la JHCl'i$ión y la," dispoúcio ncs familiares; y se ngislru d <:pistolario d( padns l' hijos. esposos y her,nanos. porque l'11 {l se halla la con[l:)1ún <le lo." ...;f' nfimientns, aportación más eficaz para d cunuc1111 icnt u d, la J>sicoloyia ambiente que la que ofrecen los r.rpcdicntrs ad ,J1i111st rat i1 os. Se argiiirá quizcí q1u. para con.wgwr la final idad de conocer los hombres y las sociedades del pasado el ltistorü1dor dispone de otras furntes de información. 110 siindol< ,n cncster establecer el parentesco de los linajes. E sto es i·e rdad respecto de ciertos pueblos y acerca de algunas rdadc.-.. : prro no lo es cuando lo qu,c se trata de analizar es la ,11,111cra como los homb res sentían., pensaban !f obraban c11 d lopso dr la conquistrr y 7([ colonización lle .!mi rica. En cfecto. la Edad JI edia /,egó n Espa Fía f ucrzas ca.pi tales cuya coalición fué la. base ele la sociedad peninsular y de su derivación en J;idias. Enirl" aquPllas sobresalieron la rr.ligión , el concepto del honor. la cs fruchll'a absolut ista del poclet público y ln organizació11 de la fam ilia. La religión vol>ló de nn'sioneros fl ¿Nuevo Jlundo, tornó inseparabl.es la conquista v olít-ica, y la con1·ersión rrist iana y alcanzó s11 cul minarión fan ática en la Inq1tisició11. El concevto del honor. celoso y hosco. fo rjó la educació·n rle los armns, el crr>uír a lo aventura heroica y el temple 1·011w110 que o·an incl1'spensablfs vara l.le1,ar a cabo la empresa. titánica de una dominación sin preccilentes en los anales hu.manos. El 1 1 l X TRODl' C'C'JÓK t~ absolut ismo awnárquico cm1ccnfró la su ma dl'l voder c-n manos d i autócratas que, aun los que fu eron incavaces. no m ermaron las at rib uciones omnímodas de la corona, que se basaban en u II origl 11 el i t1ino seg (cn la afirmación de la iglesia, puntal vigoroso el r:l :-ústema. r la f amilia fu é el cim iento d e toda una cd if icuciún social L, y económica, porqu e la ley, la costu mbre, el do min io., la hercnt i< las alianzas, la 1}ida y la muerte, se est ablecían y yiraba-n sobre t l núcleo plasmado por la consanguinidad y sustanciado 1>or el afecto. En los siglos viejos, la- fmnilia fu é el a~iento, el centro, el ~--z·llar y la célula madre de nu estra raza; tejió la legislación y creó -val,ores tradicionales que se trasmitieron como herencia j wn to a los bienes rnater1·azes. En nuestra época d e disol1t ción u; difícil concebir la entidad faniilia tal como ('Xi~día en el apogeo del coloniaje. La, autoridad paterna t ra inco ntestable; el apellido se conservaba, aun po,· las líneas f emenino~, al adoptarse el de los abuelos maternos vara inipedir su extinción; los cargos civ iles y ·militares, las concesiones de tien ·as y las encomiendas de indios se acordaban en razón de los mrrito~ de los ascendientes, y se daban en oposiáón a aquel vostulante qu e presentaba mayor número de abitelos y bisabuelos conquistadores y vobladort s. Y bien, si para estudiar un vueblo en el lavso de su florac1·ón a,·tística hay que obsen,ar sus ,m onumentos, su arquitecht1·a, sus cuadros y su vajilla, vara anal-izar una soc'iedad cuyas manif estadones históricas dimanaron del tronco familiar, hay que incl-incu-se sobre ese tronco y descubrir en su savia, en la. superpos1:ción de sus capas y en la. calidad de sus injertos, la razón y el carácter de sus frutos. He ahí por qué una de las fu entes de la historia colonial de Aniérica radica en el es.tudio de sus liila jes representativos. Hemos dicho que los empleos, las t-ierras y los i ndios sc daban con pref erenci·a a los hijos y nietos de con quistadores y pobladores. E s evidente que esas disposiciones aSC'[l nraban el poder y la actuación de itna clase en la escena vúbl1·ca, y p or ello los a1iales ele la colonia presentan durant e prolongados períodos los ndsmo~ apell1·dos en el e.fercicio de las t enencias de gobern ación. vrocu1 Hi Llh, )l.\ t' l EL F:\ l..\ ! 11:--TOHI.\ DEL PLA'J'.\ ,.,1Cl1t,·tus d< cwdaclc-.. alcaldía~. alyuacilazgo,-; . alf1:wecía~ l'ealcs, _; 11 , t u·10~ 111 a.11orcs y (ncv.mic.1~clas. El adelanta. w,< nto dt1 don J uan Orfi¿ lil Zú rafc (CJllll'alw a la f 1tndaC'ión <le una dlilastía ( 11 l ll<lws. p ll l~ a<1 1t él ll'gó el caryn. por f e:stamc·ufu !I ( 11 11 so de 1rn dertclw. al lw111bJ'f qHc S<' casa ra con su, hija, ·y , n i'azón de (SC 111atri111onio f ué adcl.aniado don Juan de T orre.°' dt r rra y ...-1.ragón. E n 11 11a sociedad e.~trucf 1trada de ese ·modo, la [lfil calngía !I la hi.-iforia tienen fun n~am entc quc. un irse c1wndo s( practica la i11!'estigació11 de los acontecim. ir11fos y de su.s autores. Se ha afirm ado c.0 11 cerdnil que hay hombres cnya vida condensa la historia de una época y c1tya biogta.fía ~inteti<-a el. v;-occso de su ticm1w: J)Cro r11 el colrrnia.ic la c.ristencia de 1111 hombre 110 alcanza rr rcsu111ir el tra1uu· 11r~o del cicl.o, que se alrnrt'o r.rtcnú1•a;11e11fe e11 cuan to Sl' eslabona al 7Hrso11a;ic lii:dóricn con la actuación ele /'arias ge nctaciones riP su pro~apia . .J112go ocio:,o e:rfc11der111 c en la c.rvosición de wna doctrina. que hr f 1111da111entrrdo r11 la i11 trod11 ccián de dos ob}'(rn a11teriores (1). <'tH-rtglHII< 11 tos. II La frlenf ificación de los poblaclorrs y prime1·os vecinos de las ciudade::; coloniales 1·a realizándose <lr 111a11 era vanla.tina Y le nta, siendo mrís fác il rtl in 1•cstigador rrcon::; fituir los episodios fu ndacionales que acumular datos sobre lo~ hombres qiw in frr1,inier on en aquéllo~. No habrá. (' IJ11)ero. hi:doria caba.l y comvlefa lwsfa que se hnya logrado la i·nd1\,iclualizació11 ilc los factores humanos que ('sfablccieron la civilfració 11 v lafc11sr . no sólo de 1.os que la dfrigieron o encauzaron, sino tam i if> n de aquéllos qw! laboraron en la penumbra y f uPron los sillares silenciosos de la ob1'a. Su papel dr coovc,.ado1·cs (' ficaces en la conq1tista de 1,a fiPrrn. rn lrr fu ndación dr 1n·hf's ,11 (' ¡¡ la poblnción de los desiertos . (1) J'cinlc linn.irs ifd si,qlo xr 111 " C'róni<'as 1/ lino ks r7r la .1Jober11C1· c,6n if Pl Plata. · · · .... I~'l' l10 DP CCI Ól\' J 1 es harto considerable para que v ennanczca en un anonimato que no se justifica por la humildad personal de niuchos, su analfabetismo y sus hiicllas vrecan·as en la cloe1,1,1nentación escrita. Aun tratándose de gobernadores y de jefes las noticias biográficas son pobres, aitnqite su cornplenicntación equivaldría a realizar la crónica de los tie1npos en que actuaron, dado el nexo notorio que existe entre la vida de los conqu,istadores y pobladores de los s iglos XVII y XVIII y la historia cornenzante de estas tierras, sirnplista y llana, sin v1:da literaria ni política y sin otras nian1·f estaciones espirituales que las qne se producían en tor110 de la iglesia, hasta el punto qu,e, si se la encara bajo el aspecto de la evolución de su cultitra, hay que reconocer que desd e el desciibrirnfrnto hasta fines de la centuria décimaoctava nuestra historia es una paitsa de tres siglos. En cambio, es ella la realización de un esfuerzo tres i·eces secitlar para impkrntar el régitnen hispánico, su lerigua. y religión, que al chocar y confundirse con los elenwntos nat1·vos crearon la civilización mixta heredada y practicada por las nacionalidacles de Aniérica. Para cmnprender los fenónienos sociales y 7Jolíticos de estas últimas durante su primer siglo de existencia, es rnenester remontar la corriente histórica desde la iniciac-ión clr la conquista; y para penetrar en la corr-icntc hay q1t c ú· directa'mente a los f adores hionanos, sin cuyo estudio la crónica es u na fría clasificación de fechas y hechos y la crwlfrión ldstórfra u na ilusión de biblioteca. Entre los linajes que se ofrecen al estudio como docum entos hitnianos capaces de revelar la curva, de nuestra hútoria vieja, he escogido el de los Jfaciel en virt1td de su act11ación pública mantenida du.rante más de doscientos a-ños en todas las fases de la evolución colon1'.al. Desde fecha inmediata a la. fundación de B11enos Afres hasta las invasiones inglesas, las cuatro ronzas de aquella familia tuvieron por esce~iarfo Bnenos Afres, Co?'n:entes, Santa Fe y lJllontevideo, cuatro centros 1.i tales de 1,na m1·sma c·uenca h1'.stórica. JJilelchor JJf aci'el, el f11crte na'l.'cgantc y 'mercader de los comienzos de la ccnturfo d,~rimaséptima, lu ego poblador 1 1~ Ll)S )L\ Cl EL l.:~ L \ lll ~ T,) i{L\ DEL .PLATA ciud~d ele .1.4.vdlan cda; .Francisco. L llis y Juan Jl acul dd A y utla , l'<'ruzos f cudatar·ios Y alcald fs tic la. capital ; el gc 11 u·al Haltasa¡· illa cicl, gncrrcro y colonizador de Corrient es ; los niacsfrcs d e ca mvo Jllanu.cl y Joa. 1 , gobernantes d e Sc1 11ia Ji e _: el d oct or J1,an Baltasa·r quin Jlacid_ Jlacicl, p rdado y ed ucador i nsigne ; L u i~ lt nriquc Ma.cü:l, regidor de Jlontcvideo; F rancisco .Ll nt on io Jlacicl, f,ilán tropo y héroe, son jalones de u na ru ta olvidada por los pueblos cle.l Plata en su marcha. actual por otros derroteros ; pero d escubren S'l.l s reUe'l.'es de piedra cuando la mano ele u n viajero 1·etarda.do avatta la. broza acumulada vor el tie mpo; asoman entonces los signo.s esc1dpidos por el bzo;il de una gral'e Y p uja nte est ir1)e que cwmpl1'ó en silencio su destino civilizador; signos i ndelebles corno esciidos hcrcíldicos, que contienen, como éstos, trozos de histo1·ia cuya revelación convertirá los vilares en estatuas. La f1wrza de asimilación impuc~ta vor el nwdio se cmnprueba en la crón-ica ele este lina je desde lci v n ·rnera generac1:ón nacida en el suelo riozJlatcnse. Ya el fnndn d ot , en los tres últi1nos liisfros de sn vida., sitstituyó sus actividades ele 1nwrino y rnercader por el ejercicio de la. labor ganadera y agrícola,, atraído por los ele'm entos esenciales ele la riqu eza autócto na; y los hijos iban a ele!ini-r sn {irme adaptación a la época qu e exi:gía pobladores Y soldados capaces de reclucir la violcnc1·a indí gena y ganar espacios al desierto, af'iwnzando en él la civnización hispánica. Conw va ª 'l)erse, los 1llaóel jalonaron con su e.-;f nerzo las d,u1·as etapas ele los siglos .YVII y X V III . Qll eclaní n al d escu.bforto sus vestig,ios casi cles·van eciclos 1Jor el volvo de <los 11 tres ceni'n1·ias. A poco • · esas J¡u ella::; a p u t CC(' ;i ·1•ni presa~ en los ca.m1JOS que se in vestignc de batalla, los padrones ele la vropiedad y la riqueza, los ac1ier~os · ., znt' bl,zca · d e l os ca bi·laos, l os consc.1os ele gobüJrno y l a ed1,.cac'wn Son los peldafws recios ele la lt1·st orici colonial y los sillares de nuestra socfo clad trad1'cional y bás fra . -Y ducfl o de fos tierras donde ~e al~a hoy ~a 1 1 I~TRODUCCIÓ~ 19 III L as vrimerc:.s noticias sobre las f aniilias históricas de que úiforma esta crónica, las obtuve vor tradición oral en el hogar ele rni bisabuela, doria Isidora Sostoa y Achucarro d e Maciel. Esta dama, venerable por tantos conceptos, había nacido en Montevideo en 1795 y vivió cien afias. La veo aún en su vatio colonial, sentada durante las tardes ot01iales cerca de un aljibe, bajo la sombra de 'una Santa Rita centenaria, como ella y cuyos floron es de rnatiz 1norado formaban un marco augusto a su, blanca ancianidad. Vivía de recuerdos, y a su rnemoria vrodigiosa afluían anécdotas y relatos de wn pasado rniterto vara todos pero que 1 ella hacía revivir con la f'uerza evocadora de su espíritu. ]J.li 1n·ñez se irnpregnó d e historia. Hablaba ella de S'U abuelo, don Juan d e Achucarro, el teniente de gobernador y justicia rnayor d e Mon tevicleo, primo de Alzaybar y aniigo de Andonaegui, Viana y de la Rosa; de su abuela, doña D01ninga Caniejo, que llegó d e Canarias con su padre, el al/érez real de 1730, cuyas manos alzaron por vez vrimera el estandarte real en la ciudad nacfrnte. No había alcanzado a conocer a éstos, p ero las narraciones d e su rnaclre se ·reproducían f ielniente en sus palab1·as; y la figura austera d e su vadre, don José F'l·ancisco d e Sostoa, el minú tro d e R eal I-Iacienda, r eapa1·ecía bajo el influ.fo d e su c1,ocación faniiliar junto a la ele su sueg ro, clon Francisco Antonio 1llaciel, " el padre ele los pobres", caído gloriosamente al oponerse al paso de las bayonetas extranjeras. R elataba ep1·sodios d e las in vasion es inglesas, que la habían sorprendido en Buenos Aires alojada con su madre en la casa d e su vfr.io a'lnigo don Miguel d e Azcuénaga; c01ulucidas a San Isidro, 11,0 lograron llevarse el archivo del di/un. to ministro d e Sostoa, cuyos papeles f1wron quemados por la soldadesca, que se apoderó d el dinero, las ropas y la plata labrada . Oyent e silencioso d e aquellas c1·ónicas, m.i iniagin.ación i nfa11til 111ate1'ial·izaba los hechos y las figuras d el coloniaje; y por 1 ~o J.JOS :;\fACIEI, EN L.\ JíIS'l'OHf A r>EL PLA'I'A la noch e, al clism in uir:ic la, J,l(,z d el velador, rnientras el 1·ezo del rosario llegaba hasta mi lecho, creía ver a, los antepasados ele calzón corto rodeanllo a la 1Jfr.ia bisabuela en su patio florecido; los verfiles ele Zabala y Alzaybar, Camejo Soto y Achucarro, Viana, clel P1:no y Sostoa, ~e 11ie c~nto.iaban, s'iluctas de apóstoles que llegaban de E spafía vara evangelizar una tierra bárba1·a; rnc parecía asistir a las j untas de 11n cabüclo d e viejos desdentados, envueltos en ponchos, qu.e hablaban de vacas y de cue1·0s •mientras 'Un grnpo de indios bailaba en la puerta una zarabanda inf ernal; los fra1·zes de San Franc1·sco se 1ne revresentaban corno una procesión de 'maestros calvos y barbudos; las carretas cargadas desfilaban por la calle fangosa y sin aceras, al lento compás de la boyada; adivinaba a los negros esclavos atareados en los menesteres dom ésticos; y los ingleses se nie aparecían cmno gigantes 1·ubios, trajeados de rojo, que trepaban a saltos las 1nurallas de ll1ontevideo . . . L a historia escuchada en la ta·t de se convertía en leyenda vor la noche, niientras la tenue l1iz clel velador dislocaba las imágenos p'licstas :;obre la cónioda de caoba, Y se oía el niurmullo ele las oraciones vronunciadas po1' las viejas tías solteronas, llenas de •ingC'nuas excentricidades. Todo eso acabó, disu elto po'I' la m,uerte, pero quedaron grabados en nii 'mente recuerdos únperecederos; y en la edad nwd1tra, sintiéndorne heredero ele aquella tradición farniiliar ·e histórica. cm~r~ndí la tarea ele conivletar con una invcstigac1'.ón severa las no~icias orales recogidas en la infancia. Il e ext1·aído de los archivos los datos clocionentados que 1ne han pcrrn#ido confrontar l_a tradidón con la verdad histórica y reconstituir etapas Y li•naJes de un pasado que se aserneja va a una vasta honba- abandonada. ' No alza1·,.e su (,(1.p1 1 ,, ·d a, vorque •no quiet·o parecerme a, esos· violado-1• . de z11,cro P1•ofm1a · modernos . , e.s. <ze sep1tl eros c1t y a ans1.a • las c1·iptas real dos,. .11Jero. . , . . , es Y se apodera ele los ornan-ientos sagra 7 tare_ visibles las huellas que dejó el paso de las genera.cwnc~ pat1·iarcales en 1 z ¡ · ét,1ll· , tn s11e o i ollado ele s1n1rés 1~Jor los aluv·wnes · , z de~cos· y la r; / · , · paginas de los 1nan uscritos roülos pondran ª' " 1 1 INTRODUCCIÓN ~l cubierto la filiación de los hombres y la filiación de los principios que f uero·n al ni1'.sm,o tiempo su, cócligo y su f e. La kisto ricidad ele los Maciel abarca itn p eríoclo niayor de dos siglos, y a su crónica deben .afíadirse las rese1ias sobre una v eintena de linajes tradicionales, vincitlad:os todos {U proceso colonial de la sociedad arnboplatina. En esa labor de reconstitución he contado con la cooperación de amigos ilustrados y desinteresados. En Bitenos Aires, los doctores R icardo de Lafuente "Alachain y Raúl de Labougle, que 1ne proporcionaron elementos básic.os de información; y la señorita Hubertina de Gomensoro Moyano, que ha prachcado investigacfones útiles. En Santa F e, el doctor Manuel M. Cervera y el P . Antonio Torres, ex cura rector de la I glesia Matriz. Dejo constancia de nii gratitud hacia ellos, conio hacia la memoria de otro amigo desaparecido, el doctor Federico Silva d 'H erbil, cuya colaboración espiritual, sonn·enfe y arnable, procedía de su carácter generoso y de su culto a los antepasados. 1 C~\ PíTt.:L:J PR i l\fERO MELCHOR MACIEL 1583-1633 A L ·e1npezar el siglo XVII, el r eal establecido por Garay veinte aiios antes en las cercanías del Riachuelo había trocado su carácter de campamento temporario y n1ilitar que ]e dier on las ca bañas y tiendas de cuero de la fundación, por un a8p ecto ele aldea cuyas habitaciones de adobe crudo, alternando con ranchos de barro y paja, alzábanse en el interior o los flancos de ]os solar es cubiertos de plantas, tunas y cardales. Por las calles anchas y fangosas transitaban las priineras carretas ; pero a pesar de sn traza mísera Buenos Aires era un embrión social que f orjaba su vida en un medio rudimentario y sin C"stÍlnulos. Las necesidades provocaron ]as iniciativas, y ante la derisión de vivir que animó a la ciudad desde sus orígenes, se gestionaron autorizaciones para el fletanliento de barcos que condujesen a la metrópoli los frutos de la incipiente labor aldeana e importasen de aquélla los abastecimientos y artículos necesarios. Buenos Aires era puerto, y por el n1ar debían veuir]e la ciYilización y la riqueza en trueque de los valores dispersos en sus campañas y de los productos de sus industrias prünitivas. P ero esta aspiración ha1ló la traba de un prohibicionis1110 que hubier a n1anteuido en l:t miseria a 1a ciudad naciente, si algunas concesiones y muchas ~t 1,0:-; )1.\l' IEL 1::--: L ~\ Ill STOf:L\ DCL PLATA Yiolaeiones 110 se hubieran rncargad o <le iniciar y 1nantener un intercambio del cual dependía la existencia d e la población. En el último decenio del siglo XVI se produjo una corriente innüaratoria lusitana y lusobrasilera que se acentuó en los co. mienzos de la centuria siguiente. A las perspectivas de un tráfico comercial a crearse añadíanse razones de seguridad personal de parte de n1uchos judíos portugueses que se incorporaron al núcleo colonial hispano. Negóseles 1nuchas veces la licencia de ingreso al territorio, pero ellos obviaron el obstáculo mediante expedientes y desembarcos sigilosos; y r ecibidos al principio con aprensiones sectarias y raciales, admitióseles luego con mayor franqueza al advertirse las ventajas económicas que sus actividades producían al vecindario. En 1606 el cabildo de Buenos Aires no vaciló en interponer su influencia ante el gobernador Hernandarias de Saavedra para obtener la derogación de una orden ele extrañamiento ele nun1erosos portugueses; y esta postulación, sometida a infonne del obispo Martín Ignacio de Loyola, fué resuelta faYorablemente, es decir, en oposición de las ordenanzas reales. (1 ) Fué bajo estas circunstancias que llegó a Buenos Aires, en 1604, el portugués Melchor l\iaciel, fundador de su linaje en Pl Río de la Plata ; pero ningún indicio deja cr eer que fuese sefardita. Su procedencia. - Era hijo de Antón Fernaneles y de :\Iaría Días :M:aciel, Y de acuerdo con la costu1nbre d e su tie1npo adoptó el apellido ele su abuelo 1natern o en r azón de su nobleza. Consta, en efecto, esa calidad ele los J\iaciel 0n la nobil itate probancla litigada en 1756 por un vástao-o del lina;,J r ) Do1nin<.,.os Antunes 1\1:aciel. o t:, cuyos aut os ob ran en el protocolo lle justifica cion es de la antigua cor te de Lisboa (2). i\Ielchor l\laciel había naeido hacia 1583 en Vianna do Castello, ciudad clel litoral norteño hasta cuyo pie accede el océano por la ría de L iina Y que r ecibió su n o1nbre del -viejo castillo ~e Sao _Thiago ; fué euna de 1narinos esforzados a quienes el genio del ~nfante d.on Enrique señ aló l as rutas d e la expansión ultrainanna; Y coino se Yerá n1ils adelante. de ella procedieron inuchos 1 ~IELCHOR )IACIEL "- _.) portugueses que se radicaron en la ciudad platense en la época a que nos venimos refiriendo. Con certeza, las posibilidades del lugar natal resultaron estrechas para Melchor Maciel, ho1nbre de confianza en sí mismo. Tenía el mar ante su audacia, y supo por los naYegantes que volYían al puerto desde lejanas tierras que a dos meses de viaje un mundo nuevo despertaba a la vida. l\farchó hacia él sin vacilar, antes de cun1plir veinte años; arribó al Brasil, y después de una estancia acerca de la cual nada saben10s, en1barcó con10 maestre en la carabela San B enüo y llegó a Buenos Aires en 1604 conduciendo por su cuenta 1nercaderías por valor de 8.907 reales de plata, suma apreciable en la época. No era, pues, un inmigrante desarrapado el que llegaba : era un capitalista dispuesto a negociar y acrecer un intercambio del cual dependía la vida de la ciudad naciente. Pagó al arribo de su buque 668 y l j2 reales de derechos e introdujo las mercaderías ( 3 ). Desde esa hora empezó para él una existencia de actividades n1últiples, de desplazamientos, intervenciones y negocios cuyas huellas docu1nentadas permiten establecer con precisión. El mercader. - Los protocolos reYelan que el 14 de n1ayo de 1605, Alonso Díaz Caballero, vecino de Córdoba del Tucu1nán, otorgó escritura por reconocimiento de deuda a l\Ielchor ~Iaciel, ante el escribano Francisco Pérez <le Burgos. NueYe días después y ante el mismo notario, el mercader estante Francisco de l\fatos legalizó sus obligaciones hacia l\Iaciel. Éste, con fecha 6 de junio del n1is1no año, acordó poder ante P érez de Burgos a Blas de l\íora y Francisco Núñez, vecinos de Córdoba, para representarle en esa ciudad; y el 20 ele febrero <le 1606 otorgó carta de obligación a Francisco de l\1atos con intervención del no1nbraclo escribano ( 4 ) . Tres días después, Pérez de Burgos registra en su protocolo una escritura de venta de l\felchor l\Iaciel en favor de IIernando .Alvarez ; y el 1 <le juuio del 1nismo afio, otro -vecino de Buenos Aires, García IIernández, otorga poder a l\iaciel para que ejerza su repreBentación en un pleito que sostenía contra los oficiales ::G LOS ~IACIEL E'X LA llISTOlUA DEL PLATA reales '" la Real Caja. Debía conceptuársele ya co1110 ho1nbre de respon; abilidad, pues habiéndose efectuado por el cabildo, el 21 de dicien1brc de ese año, el arrendanüento de '' la 111edia arroba'', adjudicóse a l\1aciel ese órgano nn1nicipal a cuyos detalles nos referin1os más adelante. En abril de 1607 hallábase en Buenos Aires, pues figura en esa fecha entre los testigos de un pregón; pero debió partir in1nediatamente después para las costas del Brasil, según referencias de actas capitulares del mes de agosto. Fué un viaje fructuoso del cual r egresó antes de finalizar el año conduciendo lotes considerables de 111ercaderías en dos buques: no se ha expresado el non1bre del prin1ero, cuya in1portación ascendió a 38.253 reales, tasándose los derechos en 2.814 reales. El segundo era la carabela S an A nt onio, a cargo del n1aestre Antonio González de Roda, declarándose n1ercaderías por valor de 15.787 reales de plata ( 5 ). En algunas escrituras se designa a :\lekhor ~M acicl como '' merc-ader estante". Según 1a acepción de la époc3, el calificativo estante definía al sujet o de permanencia transitoria, cu la ciudad; morador, al rad:i>:?ante con asiento pero carente de los derechos y cargas inherentes al vecino; y dábase este último título solamente a los españoles y criollos con arraigo y ''casa poblada'', o a los ext ranjeros que habían adquirido privilegio de naturaleza medi3nte matrimonio con hija o nieta. de conquistadores o pobladores :Y posesión de bienes raíces, o de tienda para venta al por menor. La calidad de vecino implicaba pago de tributos y uso de derechos, y entre estos últimos la obtención de oficios públicos y honoríficos, así como el goce de los pastos y bienes comunales. Como se ve, esta organización social y división en clases t enía semejanzas con la vigente en la época en \"arios países europ eo-s, donde la calidad de bo·zirgeois equivalía a la de vec1no Pn muchas p rovincias españolas. Como se establecerá en su lugar, 1facie1 adquirió el avecindamiento nños más t a rclc. Durante el priiner cuarto de siglo que siguió a la fundación de Buenos Aires, el g·anado fué escaso y caro. Recién en 1608 se produj o un a prueba d e la existencia ele reses cin1arronas con 1notivo del p er1niso solicitado el 21 de enero de aquel año por J\íaciel al cabildo '' para y r a 1natar bacas de las cbnarronas por quanto Fran cisco de Barrios su parte di(}e que las tiene en su co .. 1\IELCIIOR l\IACIEL .. _, 1nunidad" ( 6 ). Sin embargo, la prin1cra resolución de los capitulares denota dudas, pues decretaron '' que diera ynformagion Y que dandola se le dara ligengia o se probera lo que 1nas conbenga sobre ella". El 28 del mismo n1es el solicitante se presentó en la sala del ayuntanliento expresando '' que tenia dada bastante ynforn1a~ion para que se le de ligen~ia para n1atar el ganado que pidio' '. Llevados y vistos los autos se acordó conforme a lo pedido. En su Historia ele las vaqucdas clel Río d e la Plata, el señor Emilio A. Coni establece que el cabildo, al conccc1er a lVIaciel el primer per111iso de vaquería, seguidos de dos a otros interesados al año siguiente, sentó también el primer antecedente en el ejercicio de una proficua industria, destinada a alcanzar proyecciones vastísimas y constituir durante dos siglos la fuente principal ele recursos de los l1abitantcs del país. Esta solicitud sirvió al cabildo p,1 ra ~entar la doctrina ele que proviniendo el ganado cimarrón <le] cloinéstico alzado, los duC'ños de este último debían ser los primeros en g·ozar de •;u s frutos. Por esto se abrió la matrícula en base de las d eclaraciones juradas de los vecinos, constatando el número de cabezas que se lrs habían huído. Estos vecinos se llamaron accioneros y trmmiiticron su derecho por herencia, donación o venta hasta el siglo XV] l [, llegando a confundirse la propiedad de la~ tierras con la acción de vaquear. Ausentóse nuevainente Maci cl en 1609 y r egresó Juego de los puertos brasileros como maestre del navío San lJlal co, trayendo por su cuenta partidas de hlerro, aceite y pólvora que fueron declaradas <le conliso. El hecho de haberlas 1na11ifestado a las autoridades aduaneras excluye toda sospecha de contrabando ; p ero revela también que el rico 1nercader había contado demasiauo con el valimiento de su influencia para introducir géneros cuyo acceso estaba forinahnente prohibido. Sin ernbargo, su vinculación con los hombres dirigentes de Buenos Aires era ya eficaz. Bajo la f echa d el 16 de junio de 1610 figura en el protocolo del escr ibano Pérez ele Burgos un poder general acordado al capitán Fran- :2S LOS :\IAC'IEL EX LA HISTORIA DEL PLAT .\ . tase en todos sus n.egocios, eisLlO de Salas para que este le rep1 useu l b' 1ª rn • . eomo .. e ~abe . at1nel durante una nueYa ausencia . . persona.Je . , • D ~ - d o 1a te11e11"1 poco tien1po an• d esempena '- ·a eaeneral de la proY111c1a , tes Y debía ser alcalde de la ciudad e11 1 ti 11 y 16 L). í) · En el pri1nero de los años citados :\Iaciel sr hiz? a la ,~ela para Bahía con un cargmnento de harinas. sebo Y cecina t.iue 11:1• portaba 15.640 reales~ y YolYió de aquel puerto a bordo del naY10 San J uan con n1ercaderías por Yalor de 11.013 reales de plata. El año inn1ediato aparece con10 1naestre de la carabela "ft"" ucstra S €iiora. de "!\"azarcth . que arribó también de Bahía con d u ciendo abastecimientos y n~gros. siéndole confiseados e~tos últil110s. H en10s señalado las prohibiciones puestas por las autoricla• des al ingreso de gentes que carecían de la lieencia correspondiente, y los expedientes de que se Yalíau aqu éllas, principahuente las de origen lusitano. para introducir se en el territorio. I-Iubo, sin eluda, n1uchas toler aneias al respecto; per o hubo tan1biéu mon1entos de reacción y 1nagistrados inflexibles en la aplicación de las disposiciones Yigentes. l Tno de éstos fué el gobernador Diego )Iaríu Kegrón. que dictó dos bandos. en 1610 y 1611, el prin1ero de los cuales 111ultaba en $ 500, con añadidura de proceso: a quienes encubriesen o faYoreciesen la entrada. de pasajeros sin permiso. Debían existir tan1bién sanciones previstas por la R eal Audiencia de la Plata. pues se alude a ellas en algunos papeles. Y debe presunlirse que fné el incu1nplüniento de las disposicion es susodichas el que dió n1oti-ro a la responsabilidad incurrida por iraciel en 1613, originando su prisión. En efecto, la 1nención contenida en la escritura de fianza relatiYa a su libertad, alude a '' la acción de nación por ejecuto~ ria d e la R eal Audiencia de La Plata·,_ La explicación es YaO'a :J • b ' p er_o c~eJa ~reer que era asunto de nacionalidad el que inotiYaba la 1ne1de11e1a ; y dado el tie1npo va laro-o qt1,:) lle,·ab· 1 • '-<1 e encausado. entrando y saliendo ele Buenos Aires con buques y niercaderías, · 'la acción de nación·' pudo haberse ejercido ei¡ razón del n1nparo prestado a alguno o algunos l)o1npatriotas que entra. MELCIJOR MAClETi ~!1 ron sin licencia a la ciudad, quizás a bordo de las nusmas embarcaciones conducidas por 1'1:aciel desde C'l Brasil. La parte sustancial del acta que se reproduce, autorizada por el escribano Cristóbal Remón el 8 de agosto de 1613, señala a Juan Martín co1no fiador. Este portugués, a quien no debe confundirse con su homónimo el hijo del poblador de 1580, Juan 1\1artín, era oriundo de Vianna do Castello, como Maciel; habíase radicado en Buenos Aires hacia 1595, sin licencia; estaba casado con una criolla de Santiago del Estero ; y poseía casas y estancia con mil cabezas de ganado mayor y quinientas ovejas, según expresa Lafuente Machain en su citacla obra. Juan :M:artin morador <lixo que por quauto en la ca.·zel publica y a cargo de Juan Duran alcay de della esta preso melchor mnciel por mandado de los oficiales rreales por quinientos pesos ensayados de la acion de nacion por executoria de larrP!Ü audiencia de la plata y el dho alcayde le deja andar sin priciones con que le de fian<;as de no ausentarse y el dho otorgante le quiere fiar y por,icndolo en efeto se constituyo por fiaidor del ílho melchor maciel (7) . La construcción de la iglesia n1ayor, co1nenzada desde largos años atrás, se activó en 1618 con la llegada de un lote considerable de madera dura enviada de Asun ción por IIernandarias de Saavedra, quien, catorce años antes, hubo de perder la vida en un encuentro con los indios de la costa del Paranú, al concurrir allí con un grupo de vecinos en busca de cafias con que techar provisoriamente la iglesia ( 8 ). A la llegada de los barcos que conducían las 1naderas paraguayas, el ca bildo de Buenos Aires designó co1no peritos a Lorenzo "1\1:enagliotto y a l\Ielchor Maciel, con el cometido <le tasar el 1nateria1. En su virtud, el 6 de n1arzo del citado año juraron los nombrados aute el t eniente de gobernador Pedro Gutiérrez '' hacer la dicha tasac;ion vien y fielmente como alcanzaren en Dios y en sus conziengias . . . y dixeron que han visto por bista <le ojos la n1adera que se truxo de las ciudades de la Asunp~.ion en las bar cas del Señor Governador para la obra de la I glesia Mayor <lesta ciudad" ( 9 ) . La tasación de la mader a asrendió a $ 1129 Y 2 r eales. :';O L08 ~,IACIEL E~ LA H!srrOIUA DE r_J PLA'l'.\ La media ar¡·oba. - El ~1 ele dicicm l>rc d e J GOG, e n las puertas <le la iglesia m ayor y en presencia del gen eral Sim6n de Valelés, t eniente de gobernador ; del genera l don Francés ele B ca umont y Navarra y d el capit án Diego N úñcz de Prado, alcaldes ordin:.i rios, se r ealizó el r emate de la m edia arroba por voz del pregonero púlJlico Bartolomé Delg:1110, obteniéudola l\11elchor Maciel en $ 26. E ntre las condiciones ajustadas se determi naba que la utilización de aquella medida sólo podía ha cer se por los vecinos de la ciudad, mediante una tarifa de mc<lio )_)eso por día. La vasija usada en Buenos Aires era <le colire, p ero diez años despué9 del acto r eferido, y tambif n por intervenci ón de Maciel, se adoptó una de madera dura, aná-loga a las exist entes en Santa Fe y Asunción del Paraguay. En efecto, al reg resar de un viaje a. ctias ciudades, el mercader portugués fué r ecibido por el cabildo trinitario e;n ln. r::esión d el 16 de abril de 16] 6, realizándose el acuerdo ele que informa el a cta de esa fecha : '' En este cavildo higo demost ra~ion y exsivio ~{elchor Ma~iel la medida de media arroba de palo que cli.xo ser la que se le entrego por el Cavildo de la ciudad de la Asumpcion que es la que se usa en ella conque se mide el vino y binagrc para que se use della en esta eiuu.ad y con la dicha medida presento una p ctiQion y un t estimonio del E scrivano de Cavildo de l a dicha ciudad de como se ajusto y cotejo la dicha mooida co11 la d e la. dicha ciudad Y en el midieron y ansy mismo presenta otro t estimonio del E scrivano de Cavildo de Santa Fe de como se usa de la dicha medida e11 ella y pidio el dicho ).fo1chor 1fa~ie1 que se le 'c1e rccivo de la di'cha medida''. El hacendado. - A partir de Rn prisión en 1613 la vida de Maciel toma otras orientaciones: n o vuelven a n1en cionarse viajes al Brasil y sus actividades de tráfico comercial con aquel país aparecen reemplazadas por adquisiciones de tierras y explotaciones ganaderas. Su marcha al Paraguay y Santa Fe fué probablemente la sola excepción a su nueva existencia estabilizada, y debió tener lugar en 1615, pues en abril del año siguiente el acta capitular anteriormente aludida consig nó su regreso al referir la innovación de la media arroba que propuso al ayunta1niento. La primera escritura de compra de bienes raíces lleva la fecha del 30 de noviembre de 1617 y fué legalizada p or el escribano Cristóbal Remón ( 10 ) . Según ella, Maeiel adquirió ele lVIateo de Mon serrate el 1nedio solar y la casa que poseía aquél en la .., J ) MELCitOR MACIEL ciudad, situados entre los vecinos que non1bra y donde parece haber establecido después el n1ercader su residencia urbana. Por la misma escritura compró también a Monserrate la nütad de su estancia, ubicada al sur del Riachuelo y en términos de la ciudad: eran mil quinientas varas de frente por una legua y 1nedia de fondo, que el vendedor había adquirido precedenten1ente de l\Ianuel Cabral de Alpoin. El solar importó $ 520, la casa $ 400 y la estancia $ 120. ... la mitad del solar y cassas que he y t engo en esta Ciu:l. en que bivo que lindan por una pte. con casas .de rrodrigo alv:ucs y por otra con cas-s as de agustin Perez calle en medio y por dctras con geronimo de bcnavidez y por delante cassas de juan quintero que la mitad que ansi le beudo del dho solar es la que cabe a la calle y linde del dho agustín Perez y se la bendo con los quatro aposentos y una cosina que es lo que esta edificado y cabe en el dho medio solar por lo quel otro medio con lo edificado en el lo dejo para mi bibienda y ansi mismo vendo al sussodho media estancia de tierras que he y tengo en t ermo. desta ciud. de la otra banda del rriachuelo de los nabios de mill y quinientas baras de frente y legua y media tierra adentro lo que pareciere tener conforme a los titulas la qual ube y conpre de manuel cabral y linda con tierras de los menores do franco . alvares gaitan por una pte. y porotras con tierras bacas el qual dho medio solar y lo en el edificado y tierras le beudo }:)Or libres de otra benta enpeño yPoteca eensso carga ni oblign.. y con ,sus entradns e salidas pastos e aguadas de las tierras ussos costumbre derechos y scrbidumbre cuantas le pertenecen por precio y quantia. de quinientos y beinte p:~- corrientes de a ocho rreales el medio solar y lo edificado en quatro cientos y laB tierras en siento y beinte que todo hase la dha suma la qual h r rre~ibido del susso<liho .. . Esta escritura fué seguida de otra que tiene la n1isn1a fecha ( 11 ) y por la cual Maciel y Monserrate estab1eceu una sociedad entre ambos para la cría y explotación de ganado vacuno. El prin1ero aportaba a ese efecto un capital constituído por ochocientas cabezas que había traído de Santa Fe; pero cedía al segundo la mitad de aquella tropa en pago del solar y casa que acababa de comprarle en la ciudad, así como por su cooper:.ación cu la conducción del ganado desde Santa Fe. 1 ¡ <>,") ,) _ LOS'. ~L\1..~lEf; EX LA H I~'l'lHHA n EL l 'LATA La iuieiatiYa 1..•oi ncidía l'úll l H$ in:--tmwins t1el golwrnador l ler- nnndarias d e SaaYedra para que los yeeinos de Hnenos Aires, f n Yez de 1natar las reses para utilizar solanwntr rl enero y el sebo, las aproyechasen para poblar estandns (1:! ) . E sta orden se just.ifieaba p or la escasez de ganado y;.u•nno, y Coni r eeuerda que en 160-! Hernandarias tuYo qnr t r aerlo desde A suneión para su expedición a los C6sares efectuada al año ~ig:uicnte. l Jna vaca, que sólo valía un peso y 1nedio en aquella eapital, SP rleYaba a tre8 y 1nedio en Buenos Air es; y en 1Gl2 el l'Hbildo se vió oblig·ado a cerrar la 1natrícnla de accioneros de ganatlo ante la n1er1w1 sufrida por éste. '-- :Melchor ~faciel y llat eo de :ifonserrate . . . ()torgnron que cada uno Por lo que le toca por su pte. e yn terc>ses H :1sen y selebra n rompafiia p nra crianea. dt> gana do bacuno ( n In qunl met en de puesto prinripal :rnbos ot'.hosientas can $:1S del dho gan ado bncnn o cad a uno qua.trosientas las quales estan nl Preste. eu las tierras que el dh o mateo de monserrate tiene de la otra banda d0l r rinchu elo fü, los na.bios el qual ul>o las quatrosien· tas cavesas que mete en su puesto del dho melr h or masid que se las dio las ducientns trece de rresto d0l medi o solar con lo c difirado en el dho para.je del rriachuelo de que le otorg·o benta oy dho dia por nnte mi ol Presste. escrivº y lns siento y orlwnta y sil't0 c:tVL'sn s rrestautes que l e dio en pago del precio de los canlllos saln rio y g-astos dl'l ye. y no.~. y carreta con que ayudo al dho melchor mas h~l par a. t rahr r l'l ganad o qnc saco de la. ciud. de santa. ffee las quales d has ocho:-ir nl ns t•awsa s d e ambos Puest os destn. compañia son Para efoto de balerse dell as y de sus mnltiplicos los dhos conpañeros para matarlas t' n las carnisrrias O harer d ellas lo que les P areciere. 1 Ot r a r efer eneia n otar ial inforn1a qne el 15 de e11ero de 1620 ~fonserrate otorgó poder a l\Iaciel ante P edro de la Pobeda. La sociedad entre a1nbos fen eció ese n1ünno afio con 1notivo de la n1uerte del p r imer o. E s en sus t ierras de la 1\1agda10na que l\felch or l\iaciel concentró su ener gía d e trabaj ador. Consta, en ef ec· to, que algunos años 1nús tarde el establecinliento principal estaba poblado con n1il quin ien t as cabezas d e ganado n1ayor, cuatrocientas oYejas. cincuenta cerdos, Yeinte caballos y orh o buey es ; t enía allí MELCIIOR MACIEL ::~ diez negros esclavos; y había plantado tres mil cepas de viña, aden1ás de las sementeras de trigo y maíz. El área de la prin1era estancia debió resultarle estrecha y se decidió a a1npliarla mediante otras adquisiciones. El 8 de julio de 1619 compró a Agustín Fernández y su mujer, María de Luque, un predio colindante con tierras del adelantado Juan de Torres de Vera y Aragón y con la estancia de Francisco Alvarez Gaytán ( 13 ). ... seys quadras de tierras por frente y ]egua, y media de largo en el pago de la madalena en jurisdission <lesta ciudad que lindan por una parto con estancia de franco. a1vares gaytan y de la otra con tierras del adelantado tores de hera las quales dhas quadras las ube yo la dha maria do Juque por la parte que me pertenesio entre los <lemas mis hermanos como yjos y herederos de nuestros pnidres .. . por precio y contia de ochenta pesos corriente de a ocho rreales que nos a dado y pagado . .. Esta con1pra fué seguida de otra, efectuada a Luis Gaytán el 10 de diciembre de 1619 y legalizada por el misn10 escribano Pedro de la Pobeda ( 14 ). Como va a verse, se trataba de cainpos eontiguos a los suyos. un pedazo de tierra que es en el pngo d<> la mad alt~mt que t ien e quinientas bnrns de frente y legua y modin do htrgo q\H:\ linda por una partL' c>on tiNras <lel dho m<'lehor masiel y por la otra t'onmigo <'l dho lnys gaytan y con jun. · rrodrig ues gayta n mi h0rmano por prt>ssio de O<'hen t:1 1,rssos d o n ocho rrcnles que por cllns m e hn. dado ü los <' rressivido .. . las qua.les dhas tierras quo nsi le vendo me l!npieron de mi pt e. como hc r<•tlero que soy d e franco. nlvnres gaytnn 111i pudre Difunto ruyo t itulo t•stn. en mi pode r ... La a<lquisiciún de nuevos campos caracterizó a lHelchor ~fa(li(\l con10 uno de los terratrnientes de su tiempo. En efecto, a las cmnpras efectuarlas a l\1Ionserrate, los cónyuges F ernández I11Htue y Gaitán, siguió otra en el pago de 1Iatanzas, de dos :--uertes de estancia, respecto d(\ Ja eual 110 se han hallado detalles en los protocolos, p ero euya posesión está señalada entre los bie1ws declarados en l 033 por los con1isarios t estainentarios del portugnr8. En cambio, nparece otra eseriturn legalizada por el 34 LOS 1'IACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA escribano Paulo Núñez el 14 de abril de 1632, por la cual Maciel adquiere de Juan de Matías y su n1uje~~, María Jiinénez, una estancia que ésta había recibido en dote, situada en el pago _de la lVIagdalena, de niil varas de frente por una legua Y 1ned1a de fondo, contigua a las tierras de .Agustín Pérez y las de Francisco Jin1énez. En 1623 se asentaron en el protocolo de Pedro de Rojas y Acevedo tres contratos típicos de la época. Según ellos, los indios Lorenzo rioJ·ano de la encon1ienda de Diego Velasco ; An' ' drés cordobés de la encomienda de Pedro de ..A.costa; y Francisco, ' ' santiagueño, de la enco111ienda de Fernando de Toledo, '' otorgan asiento" a lvlelchor l\1aciel. Se trataba de servicios a dar durante un cierto lapso, en los que intervenían escrituras públicas en razón de estar sujetos los peones al señorío de personas bene1néritas, institución a la cual se refiere por extenso el capítulo III. Orígenes de la propiedad en el pago de la Magdalena; ubicación de las tierras de Maciel. - La situación de las tres l)rimeras estancias de Melchor lVfaciel está definida en los t extos transcriptos gracias a la especlficación de sus linder os. Estos antecedentes inéditos hasta ho"'-· vie· J' en ' nen a ilustrar el <li-scutido problema de los orígeiws de la propiedad el pago d e la Magd::il enn . Groussac ha sostenido con acrit ud que no huoo l'C'p:u-timicntos de tierras al sur del Riachuelo en la época d e la fundación, y que la r egión de la Magdalena se hallaba '' en el ignoto sur entre bá,rbaros irreductibl " , d ' es , tratan ose de ' ' parajes entonces lojanos'' (Anales de la Biblfoteca, tomo X, pág. CCLVII ) . Es un doble error : el pago de la l'lfagda.lena empezaba en la ribera. del Riachuelo, a una lecrua escasa de la ciudad; Y e~ la distribución del 24: <lo octubre de l f580, Garny in cluyó treinta es· t an cias de ganados en la zona que se extiende desde la desembocadura del Riachuelo hasta el valle de Sant" Ana 110,n - d d A · 1 «· , ., caua a, e rregu1, en e actual partido de Mag<lale11" , · ·, , «, umca y p rqueua fraec10n que conserva en nuestros dias el nombre de la antigua y vasta r co-ión. En efecto, después de repartir ent r e ocho poblador es las tierras '' del valle de Santana de la otr" and '' 1 t d ,,. v a , e ac a e 1580 senala inmediatamente la mer ced de Pedro P"-1' á d ,' d . , . , , "' n n ez e esta otra vanda del Valle de San.bago ' y rontmua con las me1· d d · _ ,, ce es e otros cuatro Yecmos. En seguida. anade: Luego el Alcalde Rodrigo Ortiz <lo Zara te ha de empcsar desde nnn Ysla que ]]amamos la Ysla de los Gu ar a niz ' ' . Incluyendo la. de Ortiz 11ELC'IT0l1 ::\1 ACJEL ;-:,) 11e 1/.áratc, Garay concede tres estancias : al C'itndo, a P edro Alvarez Gay tún y a Víctor Casco de Mendoza. Después agrega : '' Luego a de c-, mpezar Diego de Olavcrri~ta desde la Ysla que llamamos la Ys]a de el Gato''. Desde este topónimo hasta una punta innominada entonces, que se llamó después la punta de Gaytán ( actual estación Wilde), corren 1 trece estancias con frentes a las barrancas del Plata : son las del nombrado Olaverrieta., Juan Fernández de Enciso, Baltasar do Carvajal, Alonso de Escobar, Antón Higueras de Santana, y entre ambos '' una aguada Grande que esta en el Camino por donde pasamos" (actual laguna del Pato); Cristóbal Altamirano, Estevan Ruiz, Alonso G6mez, Ant6n Roberto, Pedro de, Izarra, Pedro de Quirós, Pedro de P~rez o do Xerez y Luis Gaytán. Inmediatamente después .de éste, Garay uuica las tierras de Torres de Vera de manera precisa: '' Luego desde aquella punta a de empesar el Señor Adelantado Juan de Thorrez de Bcra y a de correr asía el río Digo asia el Parana .. . y desde alli a de correr por frente hasta dar en la voca del riaehuelo del puerto de Santa María de Buenos Aires .. . y a de correr a la tierra adentro legua y media". Este señalari1iento concreto de las tierras de Torres de Vera est:í confirmado en un plano levantado en 1836 por el agrimensor Nicolás Descalzi (15) que intentó fijar las propiedades situadas en la zona de la Magdalena, sobre el Riachuelo y el estuario hasta las proximidades de La Plata actual, añadiendo menciones posteriores a la época de que nos estamos ocupando. Un breve análisis de este plano agregará informaciones útiles al asunto histórico. Con frente al Río de la Plata y comenzando por la parte sudeste del plano, aparecen las tierras <le Víctor Casco de Mcndoza, colindantes con las de Diego de 0lavenieta, y superponiéndose a éstas ln. ' ' suerte del Gato". Continuando la línea de las barrancas, Desealzi fija varias pare0las que dejan advertir el fraccionamiento de las tierras del primitivo poRccdor, Juan Fernftndez de Enciso; siguen las :mtigua~ rne1X'cdes de Alonso de Escobar y Antón I-Egueras de Sant:rnu ; y después de otros fraccionamientos que corresponden a ]os iniciah' s dominios colindantes, el plano señala ías estancias de Pecho de Quiróa, Pedro de Pérez o de Xerez y Luis Gnytán. Llegado a la 1rnnt:1 a que se l'efi erc el r epartimiento de 1580, Descalzi ubica las tierras de 'forres de Yera. en el punt o 'preciso determinado por aquella neta : el úngulc formado por el territorio con sus dos frentes al Plata, a partir de la boca del Riachuelo, y su extensión al interior hasta Iinda1· con el dominio de Luis Gnytán. Ahora bien, relacionando estos ,elatos históricos con los contenidos C'n lns escrituras de Mncicl, llegarnos sin difirultnd :1 e~tableccr la situa<'ión de las estancias que nos intcrcsnn. En el :1<•to de VPnfa de] 80 <ll' 110Yicmllrc 36 LOS :MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA de 1617, ~iateo de Monserratc, dice : '' Media estancia de tierras que tenoo en término de esta dudad de la otra banda del Riachuelo de los 0 navíos, de mil y quinientas varas' de frente Y legua. Y me d'1~ t·ierra a dentro . . . linda con tierras de los menores de Francisco Al varez Gaytán, por una parte, y con. tierras vacas por otra'' . . . Téngase presente que Fra~cisco Alvarez Gaytán había heredado esa propiedad de su padre, Luis Gaytá,n, el agraciado por Garay; y que '' los menores" eran sus hijos Luis Gaytán, segundo del nombre, y Juan Rodríguez Gaytán. A su vez, María de Luque, al vender a Maciel una parcela el 8 de julio de 1619, dice : '' En el pago de la Magdalena, en jurisdicción de esta ciudad, que lindan por una parte (las tierras que vende) con estancia de Francisco Alvarez Gaytán y de la otra con tierras del adelantado Torres de Vera''. La tercera escritura, fechada el 10 de diciembre de 1619, Luis Ga.ytán, ya mayor de edad, enajena a Maciel un lote que sitúa de este modo: '' En el pago de la Magdalena .. . linda por una parte con tienas del dicho Melchor Maciel (las adquiridas de Monserrate en 1617) y por la otra conmigo el dicho Luis Gaytán y con Juan Rodríguez Gaytán, mi hermano . . . las cuales tierras me cupieron como heredero de Francisco Alvarez Gaytáin, mi padre difunto''. Como puede juzgarse, la ubicación de las estancias de lvlelchor Maeiel resulta clara; pero antes de fijar algunas conclusiones que fluyen de los textos consulta.dos, vamos a examinar otro plano, aun inédito ( 16), de autor• anónimo, que también consigna noticias interesantes sobre esta z-ona de la Magdalena. Tomande :como punto de partida las posesiones de Luis Gaytán, establece su clivisión posterior en cuatro parcelas : la primera, que comienza fuera de sus límites, fué atribuída a losi indios quilmes ( es el actual partido de ese nombro), pero debido a su posición oblicua y arbitraria, invadió una fracción de la segunda parcela, motivando un pleito con el propietario de ésta, don :Manuel Cabot; la tercera fué de don ~Tuan Antonio Santa Coloma; y la ,cuarta lo fué de doña María Arroyo y después de la orden de Santo Domingo. Es la antigua '' estanzuela de los domínicos". Desde su primera fracción estas tierras aparecen cruzadas por la cañada de Gaete que se denomina después arroyo de Santo Domingo. Ubicando luego la propiedad de Torres de Vera en el punto correspondiente, el plano que estamos comentaudo esta.blece que un fragmento fué comprado JJOr el maestre de ,campo Homem de Pessoa de Saa y heredado después por doña Juana N epomuceno Echeverría de Zamudio. Nues· tras informaciones difieren en un detalle de la. expuesta. : Pessoa de Saa adquirió aquella parcela por merced y no por compra. En efecto en 11 de diciembre de 1636 el maestre de campo, que había casa-do ya 1 la viuda co; 37 MELCHOR MACIEL de :Maciel, obtuvo del gobernador Dávila '' un pedazo de tierra'' a '' una legua desta Ciudad", 1indando "con el Rio del Parana (Plata) y por la otra con tierras d e mi antecesor Me}chor Maciel, hacia el Riachu elo''. Rrlacionando estas precisiones con las expresadas en las escrituras arriba transcriptas, deb e ~ferirse que se trata de una parte del a ntiguo dominio del adelantado, que despu és de p a~ar a manoR dl3 Pessoa de Saa fué trasmitido a los Zamudio. No debo confundirse esta estancia del maestre d e campo con otra que poseía en las cercanías de San Vicente, colindante con la de Francisco García Romero. En cuanto al hecho de c¡ue el gobernador Dávila haya dispuesto d<" las tierras de Torres de Vera p ara efectuar otra merced, deb e atribuirse fundadamente a que aquéllas eran baldías en 1636. E n efecto, el adelanta do, de cuya presencia en Buenos Aires sólo hay una breve men ción en 1588, no debe haber ejercido actos de donunio sobre un bien desierto y sin valor en la f echa de su concesión por Gar a.y. Torres de Vera se marchó a. España y r egr esó para rn:<licar~c en Cha rcas donde vivió como un filó sofo, alejado de las veleidades del poder ; no hubo usufructo d r un3 m n ced que probablemente nunca conoci6 ; y el incumplimien to de la clnusula que exigia la vcrindad pa ra fijar el derecho a la posesión , fn cultó n la autorida d p a ra disponer nuevamente do la s tierras. Contiguas a éstas, pero ya sobre fa rihcra del RiachuC'lo J r on sus fondos <lo legua y m edfo que tocaban Jo~ linclC's do Guytán, s<' hallaban los campos de Maciel. El pJuno precitado, al ostnblt'lt•or lo~ n omb r c>s de los durños posteriores, srfinla '' a loi~ hcrcd(•ro~ d C' Gnmhoa'' Pn 1n primera parcela que fuó despu és dr rlon PPrlro CnJHlC'vi la, y HlH'<'SOr<'s dC' don R:im ón Díaz ; la suerte inmediata ronti<1 no la lllC'H<'ión siguirnt<' : ' 1 T Prrr n os que llaman ele Zuloaga y pcrtenecientC's a los llC'red<'ros tk dofia J osefa Mnciel d rl Aguila''; y la t rrrora c0IHlig·na C'l d omin io d C' don .Juan 11:uía F c-rnñndez, que pnsó Juogo n. su nieto don l"<'lipc Piiiero. F.l nrroyo l\fvcicl que, romo es ~nhi rlo, d<'sngun a pocos pnsos de la r onflur n cia rl<' l Pinta y el RincJmolo, es Jn. eontinuación de otro arroyo <lcnominndo de In f'r ucesitn. El prhnero tomó su n ombre dt l p oblador y rlu r iio de la zon.n ; n, su flanro se uh.Hbn probablemente la casa <le ~fol rhor Mncic>l, crntro dol estnbk rimiento que co1ltPn ía. g:urndos Yacuno, lana r, caballa r y p orcin o, St' lllr ntcr:1s de tri go, mn íz y ,·ifü,clos. Desapa r ecido hn c~ y a tres f:ligJos ~l ,·nrón furrte q1w pns0 r n 1a. r egión sah·n.i0 ":-' solitnrin. (•1 A<'llo inicial ne ln r.iv iliz::tri6n , sn lnwlln históri<•n perdura. l' fl el <'11rso de ngun que ronsl'n-n su n ombre y que fu ~ trstigo d<.' su <'sf uc>rzo. 'f'orlt1, esa extt111Ri611 for ma pnrt e hoy <le la cindnd dC' AY<.'llnned:1. A ln Ralicln '1<.\l Rinchuclo y n inmr ll inción d<'l arroJ'O ~fa<'irl cst ú, la h:1a <le esto 1 ¡i ''8 , ) LOS ~LACl EL E~ LA HISTORIA DEL PLATA mismo nombre, que en la €poca en que el poblador portugués laboraba la tierra colindante, era, no una isla sino una, zona anegadiza. Introducción del ganado vacuno en la Banda Oriental. Como se ha leído más arriba, J\1aciel condujo de Santa Fe a Buenos Aires en 1617 y con la cooperación de Mateo de :M~onserrate una tropa de 0O'anaclo que constituyó el capital inicial de la soci~dad entre amb os. Este hecho sin iinportancia aparente está vinculado a uno de los sucesos de 111ayor relieYe de la historia colonial del Uruguay. En efecto, con10 se verá por los documentos que se exponen más adelante, Hernandarias de Sa~vedra confió a Maciel las reses que destinaba a poblar el territorio oriental. Era la prhnera partida de ganado que aquel gobernador introducía en la tierra firme uruguaya, habiendo llevado otra, seis años antes, a la isla del Vizcaíno. En 1611, el gobernador don Diego 1\1:arín N egrón hizo n1erced a su antecesor I-Iernandarias de Saavedra, de dos islas situadas en la confluencia de los ríos Uruguay y Negro, que indicios fundados pernüten creer que fueron las llan1adas mús tarde del Vizcaíno y de Lobos o Gallinas. En señal de posesión hizo el agraciado echar en ellas algunas cabezas de ganado ; y seis años después envió cincuenta reses más, junto eon una pequeña tropa de cabras. Al n1is1no tiempo, mandó introducir en la banda de tierra firme frente a San Gabriel otras cincuenta vacas y cuatro toros, solicitando de los indios que no destruyesen ese plantel destinado a reproducciones proficuas. En 1628, y con 1notivo de haberle sido robados varios clocu1nentos entre los que se hallaban los títnlos de la 1uerced susodicha, I-Iernandarias solicitó de la justicia ordinaria de Buenos .Aires una información conforme a derecho, que restableciera la exactitud de aquellos actos y legalizara su donünio sobre las islas y los ganados. Las declaraciones a que nos referi1nos más abajo confirn1aron y detallaron las circunstancias expresadas, y esta blecieron que en el año 1617, Melchor lVIaciel, hallándose en Santa Pe, se hizo cargo de un centenar de terneras mayores de un año lHELCIIOR l\L'..f'IEL ;¡g que procedían de la estancia del gobernador en el Salado Grande (1 7 ) y que le fué entregado por dos conlisionados de aquél. l\Iaciel reunió esa tropa a la suya más considerable que conducía a Buenos Aires con Mateo de l\ionserrate ; y llegado a esta ciudad, adonde vino también Hernandarias, pidióle éste que le entregase las reses por pequeñas partidas para mnbarcarlas, con algunos toros más, con destino '' a la otra Vanda desta ciudad, en tierra firme de Charrúas''. Los antecedentes que reproducimos, entre los que se hallan el escrito de I-Iernandarias y la declaración de l\liaciel, docunientan la forma en que se realizaron las primeras introducciones del ganado Yacuno en el Uruguay ( 18 ) . Hernando Arias de Saavedra Go\·ernador y Capn. gral que e sido de esta Provincia del Río de la Plata y Paraguay por Su l\i.agd. digo que a mi cho combiene hazer ynformacion ad p erpetua1n y de memoria como abra diez y siete años poco mas o menos como en nombre de Su :M agd. siendo governador desta Provincia Diego Marin Negron me hizo mrd de dos Yslas en el rio del Uruguay arriva de San Salvador enfrente dd r io Negro cercadas de agua y en el mismo tiempo heche en una Ysla dellas cantidad de ganado vacuno y abra diez años he.che otras cinquenta Ca uesas mas hembras y cantidad de cabras que traxe de Cordoua de Tucum:m que fue la postrera vez que fui Govr. desta Prouincia y los titulos que tenia de las dhas Yslas me los hurtaron con otros papeles de importancia y en este mismo tiempo beche en la tierra firme de la Ysla de Sa.11 Gabriel deste rio seis o aiete leguas desta Ciuda.d otras cinqucnta Yacas con quatro Toros el qual dho ganado que a nsi e hechado en dhas Yslas como en tierra firme son mios y sus multiplicos sin que otra persona ningunas hasta oi aian puesto ni hechado otro niI1guno por ninguna manera y estado en possecion y propiedad dello y de Jas dhas Yslas y para que en todo tiempo conste : A Vmd pido y supo. mando se me RcciYa la <lb.a In fo rmacion y los Tgos que presenta re se examinen por el tenor dcsta Peticion y f echa se me de el original y los traslados que pidiere para on guarda de mi dro y mis sucesores interponiendo Vmd en ella y en ellos su autoridad y decreto judicial que es ju~ticia que pido &. Hernmnda rias ele Saai·cclra. El 12 de julio de 1G28 el alcalde Pedro Sánchcz Ga1·zón proYeyó de conformidad, r ecibiendo las dedaraciones ele los tes- 40 LOS )IACIEL EN" LA HISTORIA DEL PLATA tigos presentados por I--Iernandarias, autenticadas por el escribano Pedro ele la Po veda. La prin1era de ellas fué formulada por el general Pedro Gutiérrez, quien afirn1ó que, efectiva1nente, el gobernador l\Iarín N egrón había hecho a su sucesor, al tomarle residencia 1nerced Y enco1nienda ele las islas señaladas en el es' .. crito; que aquél envió en sus barcas varias terneras para ser echadas en sus islas, en señal de posesión ; y que el testigo las vió embarcar y se llevaron públicamente. Añade que por los años de 1617 n1andó unos cincuenta terneros, machos y hen1bras, a las citadas islas, y otras cincuenta cabezas, poco n1ás o menos, "mando hechar en tierra firn1e frontero de las Y slas de San Gabriel que por todas son Cien Cauesas las quales traxo a esta Ciudad por orden del dho governador, l\ielchor Maciel de la estancia del dho Governaclor como todo es publico y notorio''. Y por último dice que le consta que Hernanclarias mandó echar cabras en San Gabriel y Martín García '' las quales mando traer para el dho efecto de la ciudad de Cordova ". El capitán Gonzalo de Caravajal declara, a su vez, que fué uno de los conductores del ganado, y agrega que Hernandarias encargó a los indios charrúas '' que no n1atasen ningun ganado de aquellos por que los echaba para que n1ultip]icasen " . A su vez, el capitán Francisco de Salas inforn1a que aco1npañó en el co1netido al anterior, su yerno. Melchor lviaciel, llamado a declarar, expresó detalles que a través de los tres siglos que nos separan de aquel hecho, adquieren indudable interés. 1 En la ciuda d de la trinidad Puerto de Buenos Aires en dos días del n1es de Agosto de mill y seiscientos y veinte y ocho años el dho GovrHernan Darias de Saavedra para la dha informacion presento por Tgo aJ1te el dho Alcalde P edro Súnchez Garzon a 11:elchor 1'Ia.ciel vecino de es~a ciudad del qual .se resivio Juramento p or Dios nro S eñor e por una senal d e Cruz en f orma. de dro so cargo del qual prometio de decir verdad y siendo pr eguntado p or el t enor do la P cticion dixo que lo que della s~ve ee_ q~e este t go p o~· el año de mil y seiscientos y diez y seis O diez Y sicte vmiendo d e la crndad de S anta f ce p a ra esta. de la Tl'inidad el Govr , H ernan Darias de S aavedra que est:1vn ciiton 7.cs en la ciudad de MELCHOR MACIEL 41 Santa (Fe) le mando entregar en su estancia cien t erneras de año para arriva Y unas pocas de Cabras hasta una docena po,co mas o menos las quales se le entregaron en la estancia del dho Govr. que hera en aquel tiempo en el salado grande por mano de Bartholome Caro y Garcia Der. Y este tgo las metio entre el Ganado va.cuno suio y de Monteserrate (sic) para esta ciudad y despues que el dbo Ganado llego a.esta Ciudad vino aella el dho Govo. y mando aeste tgo y ael dho Monteserratc que le traxesen por Rezes la cantidad que cupiese en cada Varea para las embiar a la otra V anda des ta ciudad en tjerra firme de Charruas y se trajesen al Rürnhuelo desta ciudad en (dos) Vczes toda la dha cantidad con algunos toros para que engendrasen y r eembarcaron en Barcas del Para guay y se hecharon por quenta del dho Govo. para que alla multiplicasen. Y asimismo mando embarcar las dhas Cabras con dos machos y se hecharon asimismo en las Y slas de ,S an Gabriel Mrn Garcia y assi por esto como porque otra persona no eaue este Tgo que ,aja hechado Va<cas ni cabras en Jas dhas partes las tiene este Tgo por del dho Governr. y sus multiplicos y esto es lo que saue y la verdad so cargo de su juramento en que se afirmo y ratifico y lo firmo de su nombre y dixo ser de edad de qua.renta y cinco años poco mas o menos y que no le tocan las Gener,ales. - Melchor Mc,c-iel - Ante mi P edro d e la Poveda cscrivano publico. El testimonio siguiente tiene mayor importancia debido a la relación que guarda, aunque sin rnencionarla , con dos hechos históricos considerables: el envío de la prinrnra 1nisión religiosa a las tierras de los charrúas y los chanás, y los orígenes de Santo Domingo Soriano. Dicho testimonio e1na11a de f ray P edro Gutiérrez, que acompañó a fray Juan de V erg-ara, de la orden de San Francisco, como él, y al capitán Salvador Barbosa de Aguilar, protector general de los indios de Buenos Aires, en el viaje que efectuaron al comenzar el año 1625 a la r egión situada entre San Gabriel, el Uruguay y el Negro, por disposición del gobernador don Francisco de Céspedes y con fines de conversión y pacificación de los aborígenes. Lograron de éstos un recibimiento favorable, procedieron a nu1nerosos bautismos y dejaron establecidas dos reducciones que denominaron San Francisco de Olivares de los Charrúas y San Antonio de los Chanás, la últiina de las 10 cuales a parece llamada ta1n bién San Juan de Céspedes ( ) . Es p osible que una de ellas haya sido el núcleo inicial de Santo 42 LOS ~IACIEL EN LA Hl~TülUA DEL PLATA Domingo Soriano, pues fray GutiérrezJ en la declaración a que nos referi1nos, dice '' haber ido a la otra banda en tierras de los charrúas co1no doctrinante de los indios, y Yió 1nucha cantidad de ganado vacuno que ha multiplicado; y en la isla del Río Negro, siendo tal doctrinante, se sustentó el tie1npo de dos años en que estuvo''. Esa permanencia del franciscano en la isla del Vizcaíno, prolongada desde 1625 hasta 1627, revela su intervención en los orígenes del pueblo más antiguo del Uruguay acerca de los cuales se han divulgado nombres que la investigación ha señalado últin1amente como inexistentes ( 2º). La declaración expresada por Cristóbal N aharro dice textualmente "que supo este Tgo. que lVlelchor Masiel vecino de esta ciudad traxo de Santa fee por orden del dho Governr- cantidad de vacas sacandolas de su estancia para las traer a esta ciudad y hecharlas de la otra V anda'' . .. El hogar de Maciel; los linajes aliados. - lVIelchor Maciel contrajo matrin1onio a los treinta y cinco años, edad en la cual la adquisición de bienes raíces y de hábitos sedentarios estabilizó su existencia. Casó con doña Catalina de lVlelo el 5 de agosto de 1618, formalizándose ante el escribano Cristóbal Remón una escritura según la cual la n1ujer aportaba en dote cincuenta fanegas de harina de trigo. El dato es sugerente Y conviene relacionarlo con las costumbres y las posibilidades de la época. Perduraba en Maciel una fuerte vinculación sentiinental con su país, pues la esposa elegida era de origen portugués, sin que pueda afirmarse si vió la luz en Buenos Aires a poco de llegar sus padres o si vino con ellos de 1nuy corta edad. Eran éstos Gil González de Moura y doña Inés Núñez Cabra1, cuya radicación en la ciudad platense databa de los últimos años del siglo XVI, probablemente de 1599. Doña Inés Núñez Cabral era hermana de doña 1\1:argarita Cabral d e 1\ielo, mujer del n1aestre de campo Amador Báez de Alpoin, según declaración t estamentaria de esta .MELCIIOR MACIEL .¡ :{ últüna al legar una sun1a "a nli hijada y sobrina francisca de nielo hija legitima de gil gonsales y de mi hern1ana ynes nunes" ('21 ). En 1674 el capitán Francisco 1iaciel del Aguila afirmaba en un documento que su abuelo materno Gil González '' vino como poblador de Jos reinos de España' ' ; y en el padrón de 1664, bajo el asiento NQ 134, se concede al mismo el título de general por uno de sus descendientes. Creemos útil rectificar ambas menciones. Una serie de indicios hace presumir con fundamento que González de Moura era portugués, eomo lo eran los Báez de Alpoin, los Núñez Cabria] y los Cabra! de Melo; y al decirse que procedía de los reinos de España <lebe creerse que Ja¡ afirmación se basaba en el hecho de que Portugal constituyó de 1580 a 1640 una monarquía dual con su vecina peninsular, bajo el cetro de los reyes españoles. En cuanto al generalato, cabe atribuirlo a algún mando militar de desempeño transitorio que los descendientes del nombrado exageraron para dar mayor lustre a su abolengo. Los asientos del padrón de 1664 abundan en inexactitudes semejantes y dificultan su utilización como fuente histórica si no se verifica previamente el grado de autenticidad de sus aseveraciones. La genealogía de ]os Núñez Cabra! y los Cabra! de Melo señala entre los ascendientes a Gonzalo Velho Cabral, conquistador de las Azores, y a Pedro Álvai-ez Cabral, descubridor del Brasil : pero preferimos limitar nuestras noticias a los radicantes en el Plata, omitiendo referencias linajísticas anteriores, mal documentadas y sin atinencia directa con el p1oceso colonial que nos interesa. • Gil Gonzáilez, suegro de Maciel, poseyó casa en la. ciudad y chacra en el Monte Grande, primitiva denominación de San Isidro. En 2 de abril de 1612 consta su petición al cabildo sobre rectificalción de Jos límites de su dominio, petición que motivó los nuevos amojonamientos quo se efectuaron "en el campo donde esti la cruz de San Sebasti:ín" (22). Debió vincularse desde su arribo a los vecinos de relieve, por umistad y convenios de intereses, pues ya. el 29 de octubre de 1604 se registró por ol escribano Francisco Pérez de Burgos una carta de obligación del ''morador'' Gil González en favor de Tomás de Garay (~ 3 ) . De su matrimonio con doña Inés Núíiez Cabral nacieron seis hijos, todos los cuales a.doptaron el apellido del abolengo materno : Elena de Melo que casó con Matias Machado; Catalina de Melo, la esposa de Mclchor Maci~l . María de ~felo, que dió su mano en 1629 a Tomás Machado, natural de Ev~ra que vino en el navío que trajo al primer obispo de Buenos Aires Pedro de Carranza; Francisca de l\folo, bautizada en Buenos Aires' el 17 de diciembre de 1606 y casada en 1636 con :M iguel Rodríguez Ferrero, natural de Lisboa, que vino como soldado con el gobernador Pedro fr¡y LOS ~IAC'IEL E~ LA III~TORlA DEIJ PLATA -U Esteban Dfwila y se dedicó luego a la labranza (H); Juan d e Melo, que contrajo enlace con doña )fayor López; y Salvador de ~lelo. Gil González de Maura casó en segundas nupcias con doña Lui-sn. ele ~íendoza, en quien tuvo un solo hijo, Antonio; y otorg ó testa.mento en Buenos Aires el 19 de junio de 1630 ante el escribano Paulo Núñcz (2fi), d esignando albaceas a sus yernos Melchor }iiaciel y ~la.tías 1\1:acliad'o. E n la fecha citada no parecía poseer ya bienes r níccs. l\l elchor Maciel y Catalina de 1\1:elo tuYicron seis hijos, nacidos en Buenos Aires : . , l. Tularía Cabral l\íaciel del Aguila, a quien puso ole? Y crisma el P. Alonso de Torrijas el 9 de dicie111bre ele 1622, hab~:11• do sido bautizada "por necesidad", en su casa, por fray D~inu~n, de la orden de san Francisco, el 10 de julio de 1619, segun 1nfor1na la partida (2 6 ) ; fueron sus p adrinos lVIanuel Rodríguez Y doña Ñlaría de Figueredo, su mujer. l\faría Cabral lvlaciel del Aguila contrajo matrilnonio con Antonio Moyano y Cif u entes de n1edina, natural de Santiago de Chile y vecino de 1iencloza. donde había contraíuo primeras nupcias con doña Elena J ofré de Arce. De su segunda unión tuvo l\Ioyano, entre otros hijos, a l\Ielchor Moyano Cornejo y :n,f aciel del Aguila, que fué encomendero en San Juan ; casó en Córdoba con doña María de Oscáriz y Beau1nont de Navarra, y luego en San ,Juan con doña ~1:argarita Jofré de Arce; testó en esa últilna ciudad, ante Ran1írez de Arellano, el 28 ue novien1bre de 172:J (~ 7 ) . 2. Isabel ~'.laciel de nielo a quien se puso óleo y crisn1a . ' eu la nus1ua fecha que sn hern1 ana l\'[aría, y que había sido bautizada por ig ual 1notivo que la anterior, en s n t asa, por fray Alonso 1\'I artíuez, dominicano ; la apadrinaron 1\1:atías Nlachaclo Y Elen.a de Melo. D eb e presunlirse <-1ue Isabel lVIaciel niurw en la infancia pues no se la 1nen ciona en el testamento de sn padre. el?~ª 3. J uana de l\ielo y Aguila, <-1ue C! asó con el capitán Pedro Pessoa de Figueroa de quien se h ace 1nen c·ión 1n(ts adel ante. J ~rónima ue ~lelo, que fué bautizada el 9 d e octubre <le l(L.3 siendo apaclrinaua por Antonio de GoYca y su n1ujer MELCHOH )f Af'IEt -t.~ doiia Isabel Cabral de )Ielo. Pasó a Santa Fe eou los suyos Y <lió allí su 1nano a Cosme Damián Dávila, vecino de aqu~11a eiudad y su regidor en 1641. En el protocolo priinero que se conserYa en los archiYos judiciales de Santa Fe y que va de 1635 a 1656, está registrada la carta de dote de doña Jerónima de 1[elo, en la cual consta su filiación. Fué otorgada ante el escribano Juan de Cifuentes el 21 de octubre de 1645 y aparece en el documento el nombrado marido recibiendo la dote (~) . 5. Fr~ncisco i\Iaciel del Aguila, cuya actuación histórica se expresa en el capítulo III. 6. Luis l\faciel del Aguila, a quien se refiere el capítulo II. Su huella y su fin. - En el a1nbiente somnoliento y mezquino del primer medio siglo de Buenos Aires, i\felchor Maciel fu é una expresión activa y dinámica, un motor humano en rnarcha y el animador de un tráfico vital que, al realizar un intercambio prohibido por los reyes, era tolerado por los gobernadores, admitido por los cabildos y favorecido por la población al advertir sus proficuos resultados. Era un contrabando nacional que se llevaba a cabo a puerto abierto y Yelas desplegadas, con la añadidura paradójica de abonarse derechos aduaneros, y gracias al cual una sociedad incipiente vivía, trabajaba y progresaba. En esa etapa comenzante de la historia de la ciudad, que pudo terminar con un aniquilamiento análogo al acaecido en la centuria precedente, el núcleo laborioso de radicantes portugueses aparece desempeñando el papel fundamental y salvador. Por sus actividades múltiples, ejercidas fuera de los cargos y las influencias oficiales, Melchor Iviaciel se destaca como una de las figqras centrales de aquel 1novimiento que salvó a Buenos Aires del estancamiento y la miseria. Después de tres siglos de anonimato su nombre se eleva al primer plano del proceso civilizador d~ la época, a la sola enunciación de su labor y sus intervenciones vigorosas. Gravemente enfermo en el otoño de 1633, fué asistido por el licenciado en medicina Paulo Francisco; Y previendo su pró- 4(3 LOS l\IACIEL F.X LA l!If;'l'ORIA DEL PLATA ximo fin to1nó disposie;iones acere a de su f anülia Y ele sus bienes. A ese efecto r edactó una n1e1noria en la que constaban sus con1promisos y el estado de sus negocios; adquirió un sepulcro en la capilla 1nayor del convento de Santo Do1ningo; y ante el escribano Paulo Núñez extendió poder de testa1nento en favor de su 1nujer y de su amigo P edro de Rojas y Acevedo, "porque entiendo no tendré tiempo para hacer 1ni testa1nento". El documento está fechado el 11 de junio de aquel afio. Murió en esos días, y cln11pliclas las disposiciones r eligiosas que él mis1no había deternünado, extendieron sus apoderados el testa1nento ordenado. El inter és de ambas piezas se acrece por las n1enciones concr etas que contienen, relativas a personas, costu1nbres y procedinüentos de aquel oscuro tie1npo ( 29 ). General Pedro de Rojas y Acevedo. - El comisario testamentario de lvlelchor Maciel es una. figura de relieve histórico en l os anales de la sociedad trinitaria . Oriundo de Garachico, en la isla de Tcnerife, sus primeras funciones públicas en Buenos Aires fueron las ele solicitador del fisco en 1619 y las de escribano en 1620; seis años después fué alcalde ordinario; y obtuvo tierras en el }Jago de la :1Iagdalena por mercedes de los g obern adores Pedro Esteban Dá,vila y Ventm·a de :M ujica. Como se sabe, este último sólo ejerció el mando durante seis meses, sustituyéndole Rojas Y Acevedo como teniente general del r c>y lmst a el 16 de j ulio de 1641, r n que entregó el bastón a Andrés de Sa ndov~1l, por decisión de la audiencia de Cha rcas. Estaua casado con doiia María de la Vega, natural ele Santiago del Est ero, en quien tuvo Beis l1ijos, y n o ci11(•0 como lo lian establecido menciones incompletas. Pnerou ellos : Pedro <.le Rojas y Aeevrdo, r egidor decano del cabildo, que se d istinguió por la onergia de su actitud en l as junt3s con ,·oca das por el gobcrnador don .T osé de Garro con moti YO de l a ocupación portuguesa de San Gabriel ; Amador dt' Roj as y Aeevedo, capitán de la guarnición de Buenos Aires, alcalde en 1660 y corregidor en 1666 ; el dortor Gregorio <le Hojas, jurista. ilustre que pasó a Lima., desempeñó una cátedra en l a universidad de San 1'1arcos, fué asesor del tribunal d el consulado y oidor de la ::nuliencia de Quito; T omús de Rojas, alférez r eal de Buenos Aires y su alcalde en 16.34; Agustín <le Rojas y Juan d e Rojas, el último de los cuales pasó n E spaña. Unn 11ict a, <loña ~In.ría de Rojas y Acevedo, dió RU mnno nl maestre de campo Juan Vúzquez de Velaseo. )IELC' HOR )f ACIEL 47 Maestre de campo Pedro Homem de Pessoa de Saa. - Doiia Catalina de lfelo, ,-iuda de 1laeiel, contrajo segundas nupeias con el m:.iestre de campo Pedro H omem de P es-s oa de Saa, dos ~liios después de la muerte de su primer marido. Era aquél Lle origen portugués, natural tle Santa F e, según unos, o de Chile, según otros, pero en t odo caso con una larga penuanencia en Santiago, donde constituyó su hogar en unión de doiia Isa bel de Figueroa y ~[endoz..'l. Posterio!'mente .a la muerte de esta dama se trasladó a Buenos .\ires, intervino en la vida pública y fué elegido alcalde ordinario en 1G~9 y 16-l0. tn 13 de diciembre de 16:36, Pessoa <le Saa obtu,o una cesión de tierras por auto del gobernador don Pedro EBteban Dá,ila, quien dico en el texto '' que lindan con estancia de Melchor Maciel, difunto' ' . Consta que aquel dominio limitaba por otro de sus frentes con el río Paraná-. Años después pasó a Santa Fe con el nombramiento de t eniente de gobernador, rargo que ejer.ció hasta el :! de diciembre de 1648 en que fué destituido y r eemplazado por Diego Gutiérrez de Humanes. Capitán Pedro Pessoa de Figueroa. - Doña Jua na de Me1o y Aguila, hija de ~lelchor Maciel, que no usó el apellido de la varonía, dió su mano al capitá,n Pedro Pessoa de Figueroa, hijo d(ll maestre ele campo y de la primera mujer de éste, doña I sabel de Figueroa y ).fcndoza. No d ebe confundirse a Juana de )1elo y Águila con su prima hermana Juana de ~lelo, que vivió en la misma época, cuyos padres fueron Juan de Melo y doña :M ayor López, y que casó con el capitún P edro Hurta do. J~s esta última la que aparece en los papeles de 1680 recibiendo como esclavos a indios tupís hechos prisioneros en la toma de San Gabriel. El capitán Pessoa de Figueroa había nacido en Santiago de Chile, y su avecindamiento en Buenos Aires, así como su filiación, estado y p er sonas de su familia con quienes vivía, consta n en el padrón de 1664. Hall{. base al mando de una compañía de caballos de la guarnición al producirse la expe. dición armada de don Manuel Lobo, y con este motivo asistió a la asamblea de jefes y vecinos principales celebrada en la casa del obispo don Antonio <le Azcona el 8 de febrero de 1680, que decidió al gobernador uon José <le Garro a conminar a1 adversario la evacuación del punto. No deja de llamar la atención la parte activa que tomaron loa des• cendientes de portugueses en los hechos históricos de aquel año, sosteniendo los derechos de la corona y la soberanía españolas sobr e el t erritorio di sputado. Los Báez de Alpoin concurrieron al asalto y toma ele la ciudadela de San Gabriel; y de las tres compafiías de caballería que se hallaban en la ea.pita], dos estaban mandadas por oficiales ele notoria filiaci6n lusitana : el 1 4R LOS ~1 A( ' CEL E~ LA lllSTOIHA 1>EL PLA.11.i\ nombrado Pcssoa do Figul•roa, y el rapit:m Antonio Lobo Sarmiento, llij o de un antiguo militar portugués, Antonio de Rocha Lobo, natural d e Vianna do Castello, que Re radicó en BuPnos Aires y casó con doña María Encina.ci do Rojas despurs de haber pertenecido n. la dotación d e infanter.ía d e Rfo de ,Janciro. Debe inferirse quo la asimilación al medio regional e hispá nico era tan rápida l,ajo el régimr n colonial como l o ha sido 1iosterior m cnte a la independencia, en que la incoq.1oración a la soci~1a<l tradicional se produce desde 1a primera generación n acida en el su elo argentino (J uruguayo, aunque proceda d<> lo8 orígenes más opuestos. ~O'I'AS Ur~L C:APJTTJ LO I. (1) R1cA11.Do siglo XV II. DE LAFUF.N'fF. ~fACIIAIK , Lo.s portug 1trses en Biwnos A ires; (2) PEDRO TAQUES DE ALMEIDA., Nobiliarchia paulfatama, tomo I, publicada por el Instituto Histórico y Geográ,fico Brasilero. El autor c?n,signa las noticias que subsiguen acerca <le la rama de ~aciel que se radico én el Brasil. J oao Maciel, vecino de Vianna, pasó a San Paulo con sus hijos, hija6 y yernos. Una de aquéllas, Anna Maciel, era esposa de d on ,Jorge de Barros Fajardo, hijodalgo gallego, n atural de Pontevedra, cuyos padres fueron don Bdchior de Barros y doiía Catalina Vaz, según con stan cias de su tes~amento, otorgado en San Paulo en 1615. Jorge d e Barros y Anna :M:ac1el tuvieron una. bija, Catharina de Barros, que testó en la misma ciudad el 9 de septiembre de 1687, habiendo estado casada con .\1anoel Alvares de Sousa, natural de la isla de San Miguel, en l as Azores, y noble ciudadano de San Paulo. Otra de lag hijas del precitado J oao "Mac:iel acordó su man~ a Antonio Antuncs, uno de cuyos sucesores, Domingo Antunes Maciel, fue quien litigó en 175(5 las pruebas de n obleza a que nos referimos en el texto. Branca Días M.aciel casó en Vianna con Gon<;alo de Guerra y tuvo .ª J oáo Guerra Branco, que también oc avecindó rn San Paulo donde contraJO matrimonio el 17 de junio de 1G4:1 con Ursula Pcclroso hija d e Paschoal Lcite 1"urtado y de Isabel do Prado. ' 'l'RELLES, Registro Estadís'lico, aiío 1839 tomo II. ( 3) ( 4) Archivo de los Tribun ales, Buenos Airds; protocolo N9 3, .f olios 185 v., 216 v., 266 y 459 v. (5) T&ELLES, R egistro citado. (6) .Acuerdos del extinguido Cabildo clr B ucno8 Aires, tomo II, p úgi• nas 15 y 19. ( 7) Archivo ele los Tribunales, protocolo Nv 5, folio 272. ( 8) AzAROLA GIL, Los orígen es de Montevideo, cap. I. (9) Acuerdos, tomo IX, pág. 31. (10) Archivo de los Tribunales, protocolo N11 8, folio 234 327 antº. ( 11 ) Misma fuente, folio 236, 329 antº. ' (12) EMILIO A. CoNr, Historia de las vaquerias (1el Río de la Plata. (13) Prot-Ocolo N 9 10, folio 84, 132 ante,. (14) Mismo protocolo, folio 232 v., 280 "· antr•. ifELCHOR 1\IAClEL 4{j ( 15) ' ' Terrenos en Quilmes, Ensena da, Lomas, Barracas y otros con frente a la costa entre el Riachuelo y el arroyo del Gato' '. Plano inédito en poder del doctor :F1élix F. Outes. (H1) En poder del Dr. Félix F . Outes. (17) En nuestra obra La epopeya d e Manuel Lobo se deslizó un error al expresar que ~a estancia del Salado Grande, en Santa Fe, era propiedad d e Melchor J\Iac1el ( cap. I, nota 3) . Éste se hizo cargo, efectivamente, en el establecimiento mencionado, del ganado destinado al Urug uay; pero el dueño de los citados campos era el gobernador H ernandarias y no Maciel. Archivo general de la Nación, Buenos Airee ; sección Tribunales, ( 18) leg°. A, N9 3. '' Pleito de Fernando Aria s de Cabrera contra el Cabildo de Buenos Aires y la Compañía de Jesúe sobre derecho a las islas de Martín G.arcía y San Gabriel y a los ganados en el Uruguay''· Citado por don Emilio A. Coni en su conferencia en la Junta de Historia y Numismá tica Americana el 6 de julio de 1929. ( 19) ENRIQUE PEÑA, Don Francisco de Céspedes, -noticia sobre su gobierno en el :@ío d e la Plata, 1624-1632; AZAROLA GIL, Los orígenes de Mon-1 evialeo, cap. II. (20) El expediente que analizamos contiene algunas menciones r elativas a la edad de los t estigos. Según ellas, el general Pedro Gutiérrez t en ía 50 años en el citado año de 1628, '' mas bien mas que menos''; Gonzalo de Caravajal, 46; el suegro de éste, Francisco de Salas, 60, '' antes mas que menos'' ; Francisco Muñoz, 71 ; y Cristóbal Naharro, 66. (21) T esta mento de doña Margarita Luis Cabral de Melo, protocolo d e 1630, archivo de los Tribunales. (22) La R evista de B'/1,enos Aires, año 18~5, _tomo XII, p~1gs. 40i/ 8. (23) Archivo de los Tribunales, protocolo N9 3, folio 13. (24) LAJ'UENTE MACHAIN, Los portugueses en Buenos A ires; siglo XJ"ll. (25) Protocolo N9 16, folio 172 v. (2G) Archivo de la ig lesia de J~ Merced, libro 2 <le bautis1Uos )' ma trimonios. (27) Noticia emanada del erudito genealogista chilC'no don Juan Luis Espejo, secretario de la Academia Ch~lena de la Historia. (28) Misma fuonto que la anterior. (1~9) Apéndice, documentos núm. 2 y 3. ') ':, I CAP1TULO SEGUNDO LUIS MACIEL DEL AGUILA Teniente de gobernador de Buenos Aires 1627 -1710 HIJOS y nietos de Melchor Maciel usaron el apellido paterno con el adita1nento "del Aguila". La explicación probable debe hallarse en el blasón de la familia, descrito por los heraldistas portugueses como un escudo partido, que llevaba, en el primer cuartel y en campo de plata, dos flores de lis azules, una sobre otra; en el segundo cuartel, también de plata, media águila de gules con garras de sable, explayada, moviente de la partición; en la cimera, una flor de lis de oro entre dos ramas verdes de manzano, frutadas de plata y reunidas en punta; alias, un águila ,...--.de oro, explayada ( 1 ). / \o Es posible también que los descendientes de Melchor liaciel y Catalina de Melo tomaran su segundo apellido del blasón materno. En efecto, el escudo de armas de los Melo traía, en campo de gules, una cruz de oro a doble faja, acompañada de seis bezantes de plata; orla de oro; y en la cimera un águila de sable, explayada, con garras y bezantes de plata (2). El emblema del águila, al figurar en los escudos de las dos ramas progenitoras, pudo derivar en la composición del apellido fami]iar, según la costumbre generalizada en la época. 52 LOS l\ÍACIEL EN' LA HISTORIA DEL PLA'l;A Cargos públicos. - Breves son las menciones existentes acerca de la personalidad de Luis l\iaciel del Aguila, hijo de 1íelchor :i\1aciel y de Catalina de lVIelo, nacido en Buenos Aires en 1627, poco más o n1enos, y fallecido en 1710, según indicios fundados. Debe inferirse que en casi toda su dilatada vida debió consagrarse a las actividades privadas, entre las cuales predominó la explotación de las tierras que poseía. Sin e1nbargo, en un n101nento dado fué lla1nado al desempeño sünultáneo de las dos funciones más elevadas a que eran admitidos los criollos: la alcaldía de primer voto y la tenencia de gobernación de Buenos Aires. Esta doble investidura municipal y política revela que 1\1:aciel del Aguila era una figura representativa. Recibió la primera de aquéllas el 1 de enero de 1687 ; y por auto expedido al día siguiente por el gobernador d_o1: José de Herrera y Sotomayor, fué designado para el ejer cicio de la segunda. El docu1nento concreta los con1etidos que incu1nbían al 1nagistrado : En la ciudad de la t r inidad P uerto de Bs. ayres a dos dias del mes de henero de mili y seis <.}ientos Y ochenta Y siete aflos el señor Don Joscph de herrera Y sotomayor governador y cappn. genl. dcstae provincias del ri-0 de la plata p or su magd. ( que Dios guarde) Dijo que por qua u to de IJrescntc se halla sin tener lugar t henicnte de governador que asista a. los negocios Y despachos que se ofrec;en Y a que como tal debe asistir y para que aya persona que con plena j urisdiccion pueda acudir u lo r ef erido desde luego elixe y nombra para este ministerio al cappn. l uis maciel del aguila alcalde hordinario de primer voto desta dha Ciudad P ara que como tal asista y presida en los ayuntamientos y acuer dos que el Cavildo Justi~ia y rexi.nliN· to desta Ciudad se les ofre ciere haser Y .nssi mismo a las visitas de entrada. 1 y salida a este P uerto ele Carretas y requue. Visitas usi nlismo de Pulpe· ros Compuestas con la Real hacienda y conosímyento de causas de indíOS naturales q. para. t odo este govierno se le ele bastante coniission poder Y facultad y este auto lo ara. notorio dho al calde hordínario al dho Cavild0 Justic;i a y r eximien to clesta ciudad para que le conste y del se copiara tee· 1 timonio en el libro corriente de sus acuer dos y asi Jo proveyo mando Y firmo en este papel ro mun en que Se despacha por falta del sellado __, DON ,JOSEF DE H ERRERA Y SO'l.' 01IAYon. unte mi th om.a.s gayosso escrivUll0 3 de govcrnncion ( ) , LUIS l\fACIEL DEL AGUI LA r:•~ i) ,) Las actas del cabildo registran los por1nenores dr un conflicto que se suscitó entre la ma gistratura civil, representada por l\faciel del Aguila, y el prior del convento de Prediradores, fray Jacinto de l\foratta. El criterio 1noderno califica ría hoy de banal el entredicho, pero la in1portancia que adquirió entonces constituye un signo revelador de la 1nentalidad del siglo. Estaba instituído que los días jueYes y Yiern es de semana santa la justicia de la ciudad debía hacer se cargo de las llaYes de los sagrarios; y en cun1pliiniento de lo prescripto el alcalde de primer voto solicitó del religioso non1brado que aquéllaR le fuesen entregadas. Negóse el prior a acatar la disposieión, arguyendo que el depósito debía hacer se en n1anos d el patrono o protector del convento, don Juan Pacheco de Santa Cruz. E sta tergiversación de las disposiciones fu é r echazada en la sesión celebrada por el cabildo el 22 de n1arzo ele 1687 (4 ). Solidarizándose con Maciel la corporación ordenó que su escr ibano, Tomás Gayoso, notificara al citado patrono que debía n egarse a aceptar la interpretación de fray l\foratta; y habiéndose n oticiado que el prior del convento de la l\íerced. f ray Juan del Aguila, se proponía adoptar una actitud análog-a a la ele su colega de Predicadores, hízose extensiYa la notificación al patrono de aquel convento, Jua n Bá<1z de ...:\lpoin. El eonflirto no tuYo 1nayores consecuencias. Sus tierras. - Por compra rfretunda al capit5n J osr de .A.h·arado, poseía uua suerte d e estaneia en el pag-o de la P e~quería, próximo al río de las P cthnas o S('a ·'la parte baja del Yalle .. del E spíritu Santo", seg-ñu explit)ación <le Gron~sac e ). En paraje cercano, el gobernador don Agustín de Robles hizo 1nerced a l\faciel. en 1694, de dos suertes de estancia~ lindando ron tierras de Francisco l\fanzano de ÜL)a1npo SaaYedra Y de ' Francisco P ér ez de Burgos. Presumiblen1ente este últin10 <lato ~e refiere a la sucesión del antiguo escr ibano . Era dneño tmnbién de otra fracción de ean1po en el pago <le l\fntanias. a la que nñadió una chacra que adquirió del cnpi• •· 5-1 LOS :MAClEL EN LA IIISTORIA DEL PLATA tán don Francisco de la Cán1ara, oficial que había rnandado el destaca1nento de Buenos Aires en la primera carnpaña de San Gabriel. La chacra susodicha fué vendida por l\1aciel del A;;uila a Felipe de Arcayaga Salcedo, según escritura de 29 de abril de 1700, ante el escribano Clemente Rodríguez Carrillo ( 6 ). "Trescientas baras de frente y que cae al Riachuelo que llaman de los navíos y linda por una parte con tierras mias propias y por la otra con tierras de doña lVIaría Gutiérrez, viuda del capitan Alonso Esteban de Esquibel y tiene una legua de fondo". El precio ajustado, $ 793 y 4 rls., señala un alza considerable sobre el valor anterior de esos ca111pos. Su familia. - En 17 de septie1nbre de 1664 se registró en los libros de la iglesia 1natriz el 1natriinonio de Luis l\iaciel del A.guila con doña María de Aguirre ( 7 ). Dice ese asiento que, "con licencia de su Señoría Ilma. desposó el Rdo. fray F eo. Sarnliento de Soto1uayor, 'ÍtJ , de la orden de Predicadores, al capn. Luis :M:aciel y Aguila con Da., l\íaría Aguirre, y dispensó en las tres an1onestaciones por causas justas, y presidió las de1nás que dispone el Concilio de Trento, siendo testigos el capu. Alonso Esteban de Esquibe1 y el capn. Dn. Pedro de Pessoa y otros n1as. '' Firrna el acta el p. Diego Rosen do de Trigueros. De aquel tálan10 nacieron cinco n1ujeres : I. Catalina Maciel, que debió ver la Juz a l año siguiente del casamiento de sus padres; vivió soltera v falleció el 15 de '. enero de 1718, habiendo otorgado poder de testa1nento en favor de su her1nana Rosa e~ ). 2. Luisa o Lucía Maciel <1e .Aguirrc, que natió en noYieUl~ ' L ers. ) L\ C'II:L DEL .\ GU IL A :;~ bre de 1667 Y fué bautizada por el obü,po d e Buenos Aires, fray Cristóbal d e la ~lancha y elaseo, siendo confirmada r l 18 de sep tien1bre d e 1670 bajo el padrinazgo de l\l iguel de V crgara ( 9 ) . 3. niaría l\íaciel de Aguirre, que nació en julio de 167-1: y se le puso óleo y cr isn1a el 7 de junio d e 1676, siendo sus padrinos l\!Iartín P ér ez d e Lavandivar y doña Catalina Gutiérrez de l\folina. El expediente de su pleito con el general Miguel de Riglos, en 1717 y 1718, contiene referencias sobre sus bienes y asuntos de familia (1º). 4. Rosa };faciel, que fué bautizada el 14 de agosto de 1679, apadrinándola Baltasar de Quintana Godoy y doña Leonor d e Quintana ( 11 ). 5. Ana Maciel y Aguirre, qne vió la luz el 22 de noviembre de 1684 y fué conducida a la pila bautismal el 2 d e dicie111bre inmediato por sus padrinos Antonio Guerrero y Ana de San l\fartín. Dedicó su existencia de dama soltera a obras filantrópicas ( 12 ). Producida la muerte de sus padres, las hermanas l\faciel de Aguirre designaron árbitros extrajudiciales para efectuar la tasación y partición de los bienes que les correspondían por herencia, a Domingo González de Acosta y a Francisco de l\ifedina, Yecinos de Buenos Aires. Procedieron éstos a ejecutar su cometido en el año de 1710, y r epartieron entre las cinco herederas bienes por valor de $ 4.576, entre los cuales aparecían trece esclavos de ambos sexos y la casa habitación de la familia, Yaluada en $ 800. ,r .. Juan Maciel. - Natural de Vianna do Castello, llegó a Buenos Aires sin licencia por los años de 1630. Su apellido, su proceden cia y la fecha de su arribo inducen a cr eer en su parentesco con l\felchor Maciel, sin que la investigación haya logrado establecerlo documentahnente. De Lafuentc Machain en Los portugueses en Buenos Aires, informa que Juan Maciel ' dehacia 1608; que le~íti!n 9 de Antonio l\.Ia ~ió nacer . . era hijo . . .. ciel . . LOS :.IACIEL EX L.\ HISTORIA DEL PLArrA G6 y de l\Iaría N. Calafate, ayudaba al 1nanejo de la artillería por su co1npetencia en esa arma. Contrajo matrimonio con doña 1\1:argarita Pacheco el 1nismo año de su llegada, aportándole su mujer una dote de $ 1.300. Poseyó casas pobladas, carretas con cuarenta bueyes y tres esclavos. Con1pró un solar en la ciudad a Andrés Xünénez y pidió al cabildo autorización para edificar, el 10 de julio de 1643. De su citado matrimonio tuvo cinco hijos, tres mujeres y dos varones. Llamáronse éstos Lorenzo y Lucas l\1aciel. El prin1ero fué bautizado el 16 de agosto de 1637, siendo sus padrinos don Pedro de Giles y doña Paula Remón (1 3 ) ; casó con Ana María de Ayala, teniendo a Pedro J\1:aciel, que recibió el bautisn10 el 27 de octubre de 1672. Lucas Maciel. - El segundo hijo de Juan lHaciel Y I\iargarita Pacheco recibió el bautis1no en Buenos Aires el 26 d e dicie1nbre de 1642, bajo el padrinazgo de Gaspar de Ahedo Y Ursula Pacheco (14 ) . Las breves not icias r ecogid as sobre su vida revelan que ocupó una situación honorable en la sociedad de su tie1npo, pues entroncó con un linaje destacado por su matrhnonio con doña Juana de E scobar, celebrado el 5 de noviembre de 1671 ( 15 ) . En algunos docu1nentos oficiales se le denomina capitán. El 1 de enero de 1684 f u é elegido alcalde de la Hermandad Y al año siguiente 111ayordomo de propios. En el Archivo gen er al de la Nación se con ser-van los autos de su pleito contra Francisco Carrera, por la po:scsión de unas fincas en la traza de la ciudad, h er edadas por Lucas 1\1:aciel en razón de la compra hech a por su p adr e al capitán Juan de ,, (16 ) • San Martin Su hija , María de E scobar y l\Iaciel, fué esposa d el teniente de la guarnición de Buenos Air es, Juan Francisco J\'Ianzanares. Lucas l\'.íaciel otorgó t estamento el 5 de septien1bre de 1692, · ante el escribano Juan Cast año Becerra ; no1nbró albaceas a . los capitanes llerna nd o a~ River a Y Don1in g·o González de A costa . v fueron testigos l\Tiguel de Obragón , a]guac il 1navor . DieO'Q 1 ' t' , . -~ ' ' l';l 57 LUIS MACIEL DEL ÁGUILA González de Acosta, Ventura de Abalos y Mendoza, Bernardo Pacheco y el ayudante Pedro Navarro ( 17 ). NOTAS DEL CAPITULO II. Armorial portugués, edición de Lisboa, núm. 894. (2) Misma obra, núm. 952. En los escudos partidos o bipartidos es frecuente la media á,guila que ~e halla siempre moviente de la partición. Se entiende que la media águila es siempre la del imperio romano, es decir, de dos cabezas; de otro modo el diseño quedaría defectuoso, principalmente en el caso de que la media águila se halle en el segundo cuartel del partido. Las águilas de dos cabezas y las medias águilas que se encuentran con frecuen'da en los blasones portugue6es, representan, por lo general, concesiones de los emperadores d el sacro imperio romano, y más particularmente de Carlos V. (~fisma obra, III parte, vocabulario heráldico ). (3) .Acuerdos del extinguido Cabildo de Buenos Aires, tomo XVII. ( 4) Mismo tomo. (fl ) Anales de la Biblioteca, tomo VIII, pá,g. CXXXIV. (()) Archivo de los Tribunales, protocolo NQ 9, folio 463 v. antQ. (7) Archivo de la iglesia de la Mer ced, libro 3 de matrimonios, folio 27. ( 8) Archivo general de la Nación, Tribunales, M 3, oxp. 9. (9) Iglesia de la Merced, libro 3 de bautizados, folio 162. (10) Archivo general de la Nación, Tribunales, R 14, cxp. 26. ( 1) SANTOS FERB.ElRA, ( 11) Iglesia. de la Merced, libro ::l <lo bautizadoe, folio 257 ( 1:!) Archivo de la Curia Y. Eclesiástica de Buenos Aires, leg9 35, 11úm. 27. Iglesia de la Merced, libro 1 do bautizados, folio 143 v. :Misma fuente, libro 3, folio 11_. . . . r.: Misma fuente, libro 3 do matrunomos, folio 4.:> v. Legajo M 1, cxp. 10. • _ _ ( 17) Archivo de los Tribunales, protocolo de Casta uo Becerra, ano lG92, folio 175 v. (13) ( 14) (15) ( 16) t'¡ ,.,1 CAJ.>JTl l li() 'l' J;1u :1; IH) 1 1 FRANCISCO MACIEL DEL AGUILA Alcalde de Buenos Aires 1625 -17 .. Su vida pública. M.acicl del .Ag-uila, J1 ijo de l\Ielcho1· Maciel y de Uatalina ele Melo, roc~ibió el bautismo en Bueno:-; Aires el 20 <le oct11hre de 1(j2G, Hinndo apadrinado por sus tíos Matías Machado y B .l c na ele Mrlo (1). J>ai-;ó <•n su niiícz a Santa Pe, acompañando la ra<li ca,:ió n dr, s n padrastro P<•ssoa <le Saa, y einpezó aJlí a Jos q11in,~c aíios de edad s11 carrera militar. En 1653 formó parte de laH fuerzas qur el rnacstrP. <le earnpo Juan Arias de Saavcclra eondujo a los valles de CaJchaquí eon 1notivo del a lzand< 11to de Jm; indios co]asti11fa,, c·on<~nrrjc11do a esa campaña t01l sus propias a1·mas, criados y eahallos, "voluntariamente y por eontinuar Jos servic·ios de mis aJJtrpasados" (2) . Aquella expcclicjón culminó con la pacificaeión de la tribu rebcJ<le, que fué conducida a las i111nediaciones de Santa Fe donde estableció su r educción. 1 Juan Arlas de Sanvedra habfo. siclo bautiza do cm Buenos Aires el 11 de cnl•ro de ] 608. Era hijo de Nicolfls de Ocampo Saaveclra, n atura l de :\léxico, y de doña. María de Jos Cobos, portcfia. Realizó Arias de Haaved1·11 1m <'arrern militar en dnras rnmpañns contra las tribu'i búruara~ <le 8onicntcs, Santa Pe y el Chu1·0, alc-aJ1 ztw <lQ :i\l<:Csivuwc·ntc l os gra<lo."1 <le 60 L08 MACIEL EN LA HIS'fORIA DEL PLATA . de campo. Avecindado mayor y maest 1c capitán de infantena, sarg_c~ o . lcalde de primer voto en 1667; teu • corregidor por despachos P,Xpel uego en Buenos Aires, ehg1ósele 't ' guerra ) , d 1 <Tobernador don José Martmez e n iente de gobernador, cap1 an a di<los el 21 de octubre de 1669 _por e º 1 d la Puobla de Al cocer' 81\ Galmdo natura e . , .:1 Salazar. Casó con dona na ' _ p la Rcmón con suces1011 ue d peía~ con dona au ' Badajoz, y en s;gun as nu ital el 13 de abril de 1683 (3). la primera. Testo en esta cap , t b ·1 l 1654 al producirse las hostilidade8 de otr~ En a r1 e e .' . t de vecinos, contriindiada con saqueo de estancias y muer e . . d buyó Maciel del Aguila a la represión sa~grienta ,incorpora, o a la compañía del capitán Roque de Mend1eta y Zarate, tocandole combatir en el valle de Flecha después d_e u~1 ~ marcha de sesenta leguas, efectuada al pie. A 1a term1nac1on d~ esa campaña decidió radicarse en Buenos Aires, con su muJer e hijos, lo que llevó a cabo siendo electo alcalde de la Hermandad en 1657, es decir, en fecha casi inn1ediata a la de su aYecindamiento. Al afio siguiente la flota francesa al 1nanclo de Thnoleón de Osmat intentó el ataque a la capital; y temiéndose en ésta que el desembarco de las tripulaciones acl versarias se efectuase en la costa de la Magdalena, dióse a Maciel el con1etido de ., oponerse en aquel paraje a la tentativa de inva~ión. Concurr10 al punto al frente de un destacamento de españoles, pern1aneciendo durante veinte días a la vista de las 1utves que procedían a sondeos del río ; al variar aquéllas su fondeadero siguiólas la tropa a lo largo de la ribera hasta situarse en el dese1nbarcadero de Palern10, donde hubo también otro an1ago de invasión, pero logróse mantener inviolado el territorio aunque el enemigo se sostuvo por espacio de varios n1eses al acecho de Buenos Aires. El aban dono forzoso ele su hacienda de la Magdalena costó a Maciel ese año la pérdida de sus cosechas y una 1nern1a considerable de sus ganados. Al finalizar el gobierno de don Alouso de Mercado y Villacorta tuvieron lugar_~raves n1alones de indios en las proxiinidades de la ciudad, resolv1endose dar nna batida <¡ ue aleanzó hasta los ""' FRAXCISCO MACIEL DEL ÁGUILA Gl lindes del desierto. lVIarchó 1\1aciel del Ag uila con la fuerza del capitán Juan del Pozo y Silva, produciéndose la batalla en las márgenes del Saladillo. Las cargas llevadas contra los nat iYos ocasionaron violen- ~1/A~'1/1/'/!l;l/r¡f tos choques cuerpo a cuerpo, en los _P. " cuales hubo Maeiel de perder la vida al matar con sus propias manos algunos de los indios más belicosos. Su coraje, consagrado en las campañas de Santa Fe, cobró nuevo relieve con motivo de estos episodios; y al producirse pocos años más tarde una nueva aparición de buques franceses eu el Plata, el gobernador don José 1\fartínez de Salazar le confirió el grado ele teniente de la tropa de caballería a órdenes del capitán Pedro Pessoa de Figueroa, hern1ano político de Maciel, a quien éste sustituyó eu el mando durante un alejamiento del j efe titular. En 1673 fué electo alcalde ordinario y alférez r eal, en cuyo desempeño dice un documento "que gastó $ 500 de su raudal en el lustre de su persona" ( 4 ) . En el curso de aquel año la gobernación del Plata oyó circular las primeras nuevas de una próxima expansión portuguesa a las tierras bañadas por el estuario ; las juformaciones recibidas por las autoridades confirmaron los proyectos del gobernador de Río de J aneiro, J oao de Sil Ya de Souza, '' de poblar la isla de 1\1aldonado y t ierra firme, a la boca y entrada u.el Río de la Plata''; y obtuviéronse noticias fundadas acerca de las medidas que to1naba el príncipe regente de Portugal en apoyo de la política sugerida por sus delegados en el Brasil ( 5 ) . Ante esos inforn1es el goberuador de Buenos Aires dictó el auto del 6 de abril de 1673, ' ' para que se haga una junta de personas de las 1nás principales de esta ciudad, que sean de c·iencia e inteligencia, donde se confiera el caso presente" (º) . Cr]ebróse efectiva1nentc esa junta el 1nismo día, en la sala de 6~ LOS MACIEL EÑ LA HISTORIA DEL PLATA gobierno, bajo la presidencia de don José ]Vlartínez de Sa~azar ; con asistencia de un grupo de prohombres; y al enunciarse ~piniones sobre las medidas capaces de salvaguar~ar derechos territoriales españoles, el alcalde l\ilaciel del Aguila dio su apoyo al parecer expresado por su colega don Juan Pacheco de. Sa~;ª Cruz, alcalde de prin1er voto: que se elevara una comu111cac1on inmediata a la corte de l\íadrid, conteniendo las informaciones recibidas, y que se enYiara una expedición a la isla de Maldonado donde debía quedar una guarnición per1nanente. Como se sabe, el plan portugués de expansión colonial y ciYilizadora que aspiraba a llevar hasta la ribera norte del Plata la frontera del iinperio lusobrasilero, tuvo comienzo de ejecución en enero de 1680, al fundarse por don Manuel Lobo la ciudadela del Sacramento. La reacción hispana no se hizo esperar, y una concentración de fuerzas procedentes de Buenos Aires, Santa Fe, Tucumán, Corrientes y l\fisiones, puso bajo el 1nando del n1aestre de campo Antonio de Vera l\1uxica los efectivos que aquel jefe criollo condujo al asalto de la fortaleza. Sin e1nbargo, antes de disponerse el ataque entabláronse negociaciones entre los jefes responsables; y la n1edida inicial del gobernador don José de Garro consistió en repetir la consulta que su predecesor había fornndado siete años antes a una junta de notables. Convocó a este efecto a una reunión en la casa capitular, el 8 de febrero, a los alcaldes y regidores de la capital, a los jefes inilitares y a los vecinos destacados. Francisco Maciel del Aguila no desempeñaba ¿ a -la sazón ningún cargo oficial, pero era el hon1bre capaz de ilus(>, trar con su consejo y experiencia una deliberación graYe que iba quizás a decidir el destino político del territorio rioplatense. Presente en la asamblea, su firma aparece estampada al pie del docun1ento que soli_~arizaba_ a los ho1nbres representativos de la capital con la acc1on que iba a desarrollarse contra los ocupantes to ¡µ;:- ' 'd.AÁ;_¿ FRANCISCO MAClEL DtL ÁGUILA 6~ de San Gabriel. Una nueva junta cclebraJa eu ~tro días después contó asimismo con su adhesión al plan de asalto inmediato a la ciucJadela lusitana ( 7 ) . Su matrimonio; el linaje de Gómez Recio. - Franeisco Mac=iel del Aguila contrajo enlace en Santa l<'e el año 1650 con doña ,J nana Félix de Velasco. Por escritura formalizada ante el escribano Gayoso el 26 de n1arzo de aquel año, consta el compromiso matriinonial de los nombrados, así como la filiación de d oña Juana, que era hija del capitán Juan Gómez Recio y de doña Bartolina González de Vallejos, ambos difuntos en la f echa, según referencia de la escritura citada. El lin a je d e la mujer de M11ciel del Aguila nos conduce a revelar algunos antecedentes sociales e históricos que remontan a la infancia d e Santa Fe. J uan Gómez Recio vino al P lata en 1624 siendo alférez de infantería y formando parte del grupo de hombres de guerra que trajo de la p enínsula el gobernador don Francisco de Céspedes. Radicado luego en Santa Fe, casó a11í con doña Bartolina González de Vallejos, hija de Cristóbal Gonzá,lez, vecino principal y alcalde de la ciudad en 164.2, y de doña L eonor Rodríguez d e Vallejos. Este apellido Vallejos aparece en los má'l viej os papeles del archivo santafecino, pues en 1617 se cita a J"acome Yallejos y su m ujer, I sabel de San ~Iiguel, por la venta que hicieron en aquel año al colegio de los jesuítas de 27 o 77 '' pasos de tierra en el pago <le a rriba'', heredados de sus padres, Alonso de San :M iguel y Lu<>ía <le Arévalo. Cervera menciona también a Antonio Vallejos quo en 1619 tenía población de ganados iniciada treinta años atrás. Doña Bartolina González de Vallejos ordenó su t estamento en 1644, en la ciudad vieja, y en él puede leerse que tuvo una l,uena dote y fué acc:ionera de ganados, con sus hermanos, en la otra ban da del Paraná ( 8 ). De su matrimonio con el capitán Gómez Recio dej ó los siguientes hijos : l. Juan Gómcz Recio segundo del nombre y capitán como su padre; fué alcalde de su ciudad ' natal en 1650 procurador general en 1655, re. ' gidor en 1656 y alférez real en 1657. Celebró nupcias el 19 de abril de ]G;"j3 con doña Juana Díaz y testó el 21 de f ebrero d e 1688 declarando ' ' que tenía heredadas d e su madre cuatro cuerdas de t ierra''. 2. J uana Félix de Velnsco, }a prccitada esposa de Francisco l\Iaciel «~l Aguila. G-1 LOS MACIEL E~ LA HISTORIA DEL PLA'f A 3. Felisa. González de Vallejos. . . . G'oro ez Rac · " 1·0, que en 1666 contr.aJo matnm01110 con do , 4 . F ranc1sco ña Isabel Cortés de Santuchos. 5. Cristóbal González Recio, cuyo t estamento, otorgado_ el 24. ~e enero de 1704 establece su filiación y que fué casado con dona F ehciana de Añasco 'y Zavalía, con estancia en Corrientes. 6. Gregario González. 7. Jerónima Gómez de la Vega, o Jerónima de Vallejos, que dió su m ano a. Juan de Arce. 8. Manuel González de Yallejos. 9. Juan Bautista Gómez Recio, que fué bautizado el 9 de mayo de 1641; sobrenombrado '' el mosso' ', casó el 20 de diciembre de 1669 con doña Juana de Pineda. Como acaba de verse, los hermanos citados, a pesar d e serlo enteros, usaron distintos apellidos, adoptando los del padre, la madre -0 los abuelos, o vinculando los unos y los otros. Tal era la costumbre de la épocl, que ocasiona hoy no pocas confusion<'s a quienes intenta n 1·econstituir aque· llas familias extinguidas (9) . Carezco d e noticias respecto del apellido F élix de Velasco, que per· duró en, las generaciones paraguayas de eso linaje, pues el dictador J osé Ga spar de Francia era nieto del doctor :Mateo Félix de Velasco, que casó con doña Maria J osefa de Ycgros y Ledesma, teniendo a. dofia Josefa de Velasco, madre <lel personaje 1iist óri<'o. General Roque de Mendieta y Zárate. - La informa ción ele serYi· cios del capitán Maciel del Aguila a que vamos a aludir m ás abajo con a1guna extensión, establece, al Tcfcrirse a la mujer de a quél, que su abuelo materno, Cristóbal Gonzá,lez, tuvo otra. hija además de doña. Bartolina: d oña Juana. <?onzftl ez de Vallejos, que acordó su mano a Pedro de l\Ieu· dieta, J1ermano del t ercer adelantado <lcl Rio de la Plata, don Juan Ortiz d e Zárate, y tío político del cuarto adelantado, don Juan de Torres de Vera y Aragón, por el matrimonio de éste con dofin. Juana Ortiz de Zárate. Los mencionados redro de :Mendicta y cloñn ,T uana Gonzál ez de Va· llejos fueron padres del general Roque d<' 11enclicta y Zárate personaje santafecino que ilustró la historia de su provincia y l a de 'corrientes; fu6 teniente d e la compañía de caballos mandada. por el capitán don Cristóbal de Garay, por n ombramiento del goberna dor don Jacinto de Lariz en 11 de setiembre de 1647 ; promovido a <'apitán de la misma arma por el maestro de campo Juan Arias de Saaved ra el 18 d e diciembre de 1656, y confirmado al año siguiente en aquel grado por el gobernador don Pedro de Baygorri. Fué .alcalde de Santa F e, teniente de gobernador FRANCISCO MACIEL DEL ÁGUILA 65 de Corrientes Y capitán a guerra en 1659. Casó con doña Juana Cortó11 de Santuchos. F ué bajo las inmediatas órdenes de su pariente Mendieta y Zárate que Francisco Maciel del .Ag uila combatió contra los indios sublevados en el ntllc de Flecha. Descendencia y alianzas matrimoniales. - Fueron hijos de F rancisco 1\1:aciel del Aguila y de doña Juana Félix de V el asco : l . Francisco Maciel del Aguila, sobrenombrado el Mozo, a quien se refiere el capítulo rv. 2. Bartola o Bartolina Maciel del Aguila, bajo cuyo nombre se expresa una noticia en el mismo capítulo IV. 3. Juan Maciel del Aguila, cuya síntesis biográfica puede leerse en el capítulo V. 4. Melchor Maciel y Velasco, que fué bautizado el 22 de octubr e de 1658 por el presbítero Jacinto de Villanueva, apadrinándole el n1aestre de campo Pedro Ho1nem de Pessoa y doña Juana de Melo y Aguila. Se le puso óleo y crisma el 7 de julio de 1660, siendo padrinos en este acto Juan Pacheco de Santa Cruz y su 1nu jer doña Dionisia Leal ( 10 ) . Debe presumirse que este vástago no sobrevivió, pues su nombre de pila fué ta1nbién puesto a su hermano, que sigue. 5. }lfelchor 1'1aciel del Aguila, a quien bautizó en 1669 el obispo fray Cristóbal de la lVlancha y Velasco; fué su padrino Alejo de Figueroa. 6. Antonia Maciel del Aguila, que vió la luz al finalizar el año 1672 y recibió el bautismo el 29 de abril de 1673; fueron p adri no s el m a est r e de a. ,;;¡;-Jt e; (7 / c~ mpo Autof/J JtVr1/ l/t{ll4 n10 ~ e Ve ra x1ca y dopr, na A nto,nia Flores, y t estigos el capitán 11 Juan Matheo y el general José Gil Negrete ( ). El : de octubre de 1693 contrajo matrimonio con don Pedro Fernandez de la 66 L08 MACIEL EN LA HIS'l'ORIA DEL PLATA JYiadrid, teniente de una compañía de la guarnición de Buenos Aires ' quien otoraó carta de dote a su mujer en la misma :fecha ( 12 ). b 7. Inés Maciel y Félix de Velasco, que fué bautizada el 19 de agosto de 1676, teniendo un año y n1edio de edad, siendo su padrino el maestre de ca1npo .Antonio de Vera Muxica. Casó el 14 de septien1bre de 1693 con el alférez Alonso Estevan de Esquivel, siendo testigos del acto Juan Báez de Alpoin, Pedro de Saavedra y el general Miguel de Riglos ( 13 ). Doña Inés Maciel 1nurió en 1714 bajo testamento otorgado ante el escribano Domingo Lezcano. Dice que su marido "está ausente en el reino del Perú", y que sólo tiene una hija, Josefa de Esquivel; designa cuatro albaceas : a su esposo, a fray Juan de Arregui, más tarde obispo de Buenos Aires y gobernador del Paraguay; a Baltasar de Quint ana Godoy y al capitán Pedro de Saavedra ( 14 ). 8. Catalina Maciel del Aguila, que dió su mano el 30 de n1ayo de 1693 a lVIartín de Segura, natural de España, capitán de una compañía de caballos de Buenos Aires, que en 25 de agosto de aquel mismo año extendió a su mujer carta de dote (15). Doña Catalina lviaciel casó en segundas nupcias con Mateo de Cossío y rrerán, de quien también enviudó, según constancias documentales ( 16 ). María lVIaciel del Aguila, que contrajo enlace con el capitán Bernardino de Avendaño, hijo de Juan de Avendaño y de Potenciana de Añasco, naciendo de ese tála1no Rosa e Ignacio de Avendaño y J\1:aciel. Doña lVIaría l\i:aciel 1nurió antes de 1693, contrayendo su viudo nuevas nupcias con doña Beatriz de Arroyo, en quien tuvo también sucesión (1 7 ) . 9. Fuentes documentales. - La documentación que informa sobre la historicidad del personaje se encuentra dispersa en las distintas fuentes que se señalan en las notas al final del capítulo. y una infor1nación más co1npleta está reunida en un exp edi~nte que se conserva en el ~rchivo ge:1eral _de la Nación (18). Su importancia radica en la c1rcunstanc1a fehz de que vincula . . ) FRAXCISCO MACIEL DEL AGl"ILA 1¡ .; U/ la actuación pública de l\iaciel del A.guila con los acontecilnientos del período en que le tocó vivir. .Antes de r eferirme a estos documentos, debo indicar que el título expedido por el gobernador don José de Herrera y Sotomayor, confiriendo a 1iaciel el grado de capitán de la compañía de lanzas españolas de Buenos Aires y fechado el 10 de junio de 1682, no integra la información de servicios que voy a detallar : forma parte de otro expediente (19 ), y fué utilizado en 1715 por su nieto, Francisco l\ii aciel de ·villanueYa, al postular una encomienda en la jurisdicción de Corrientes. El primero de la serie arriba eitada es una certificación e1nanada del gobernado_r don José l\Iartínez de Salazar por la que declara conocer a Francisco 1\1:aciel del Aguila desde la fecha de su arribo a la capital; manifiesta que ha servido en todos los cargos ciYiles y nülitares a satisfacción suya, y que le estiina 1nerececlor de r econ1pensas reales. LleYa la fecha del 1 de dicien1bre ele 1673 ( 2 º) . Otra certificación, expedida por don Juan del Pozo y Silva, "ca pitan que lo soy de una de las co1npañias de cavallos corassas lansas ligeras de Su 1\1:agd.' ', informa que su autor conoce a :\Iaciel desde el año 1655 '' en que vine del R.eyno de Chile y 1ne abesinde en esta"'. Confirina y an1plía el documento anterior. Sigue la declaración del capitán Pedro Pessoa de Figueroa, quien conoce a Maciel del Aguila desde 1654, '' que governando esta prouincia el maestre de campo don Pedro de Baigorri cavallero d el orden de Santiago entre a este puerto donde 1ne abefii nde de la ciudad de Santiago Reyno de Chile''. Dice haber visto a ~Iaciel '' en todas las malocas corredurias rondas sentinelas y alardes que se an ofrecido en el real servicio"; y consigna los cometidos 1nilitares llenados por aquél en 1658 y 1670, durante las an1enazas de desembarco y ataque de las fuerzas francesas en :Magdalena y Monte Grande. Añade que fu é r eeinplazado por )iiaciel en el co1nando de su con1paííía durante una larga enfermedad que padeció. ti~ LOS MACIEL EN LA lUS'l'OlUA DEL PLA'1;A La pieza que dió 111otivo a la forrnación del expediente e1naná del propio Maciel y la constituye su petición al gobernador don Andrés ele n obles para que se otor gue a su hijo Francisco la en. co1nienda de los indios tubichaminis. Según lo establecido por la legislación en casos semejantes, el peticionario basó la solicitud en sus servicios públicos y en los ejecutados por los ascendientes de su mujer, o sean los abuelos y bisabuelos de su hijo por la línea n1aterna, cuyos n1éritos debían invocarse para la obtención de 1ner cecles, probándose la genealogía y los méritos por medio de t estigos juraincntados. Una buena parte del legajo está destinada a la justificación ele los asertos, y para su mayor comprobación J\'.Iaciel del Aguila reproduce el texto de una probanza establecida aííos antes por el general Roque de J\iendieta y Zárate al solicitar la enconlienda de los indios chanáR, Yacante por el falleciiniento del titular García de E spinosa. Las revelaciones y docu1nentos contenidos en el expediente 1Iacicl del Aguila nos pernliten referirno:;; hoy a una de las insti-. tuciones n1ús eousiderahles de la época y an1pliar noticias vinculadas u los orígenes ele Bue nos Aires. La encomienda de los indios tubichaminis. _ En el cum bio ac cartas entre Trcllc~ y Gut!érrcz (" Revista patriótica. del pasado nrgcntino ", tomo I), el pnmero di~c que Garay, a1 h:wcr mC"reed d e C'aciq ues a los pob1~<lores_ ~e Buenos AHcs el 2~, <le 1rnnzo de l 58:1, " 110 pone el nombre Tu b1eha nnm como C'1 d o 1a nac10n de c¡u(~ provt'nía la t ribu s ino como sobre110111Lre dul eucique, ([UF! por otro nonibre se ll@na Tu,bfoha,n iinL Y (,.st~ es un eu m proba.n te au.tén tico incontestable de que ese nombre se re: d • · ·tl f errn, a. la p ersona. dol cae1quo y no a h nu.eiu'n tle su procc encrn.. ni • . · nombre dt>I Jug ar q u e ocnpaba la triLu' '. Y bien, no. Na d acl o que G ar ay . HC'cesario hallnr tal intcr¡>i·ct ·\c· • 1un afiado: ele nación M cgnay. N ü S consta flin embni·cro q - 1 s • • • ' ' b , ue 1os cspano e , post.or10rmente, nl referirse n esa tnhu no la. llaman 1Ieguay: la tribu o l:l. par cia lidad de la tribu sujeta a .Juan d e G..., 1,..,v 1 ·J· u 1 l o, y a SUS S . . , , , u "J I <'<'s ores en Ja cncom1c111la, f ne con ocida. por 'l'ubiehamiui. De ahí se deduce <JIIL' los t u biell:rn1inis ernn una parcialidad o 8Ubtribu <1"' l" 1 a •, M a)' ..,., l ClOll J.: cgu . ' 0 que se dió por los c•spnñoles ese nombre general n los descendientes de los indios sujetos primit iva mt1ntc al cacique 'rubichamini. Donde rrrclles Pstú S(1 gurn nw11te en lo cierto es cuando dice , , que el ·FRAKCISCO ::'l [ A('IEL IJEL ÁcrILA GD arroyo o riachuelo que al presente lleva ese nombre, Jo a dquirió por la circunstancia de haberse estaLJecido la reducción a sus inmed iaciones ... Antes que el n ombre, es el hombre. Antes del arroyo Tubichamini el nombre guaraní''. ' De las equiv.alencias de 1fontoya y las explicacion es de Trcllcs y Gutiérrcz, confirmadas por Manti1la ( 21 ), sabemos que Tubichamini es una denominación compuesta de d os voces guaraníes : t u.bichá, gr ande, mini, pequeño. Como se ve, son dos adjetivos contradictorios en apariencia ; y digo en apariencia porque si lo son r ealmente en español, podrían n o serlo en el idioma de los dueños primitivos del suelo, ya que el genio de In. lengua guaraní traducía una mentalidad opuesta a la gen eradora de nu(>stro idioma paterno; y es .así como el adj etivo tubicliá se convertía p or extensión en el sustantivo jefe, derivación de grande, y por ende, en cacique. La t raducción interpretativa del vocabl o compuesto tuuichamini es, pues, cacique chico. Dfaz de Guzmán, al escribir su obra en 161~. mencion a el río Tubicb:imini, y aunque la vaga. 'situación que le señala no coincide con 1a dd curso de agua que así se denominó después, d~be lógicamente inf-:rirse que la ubicación de la tribu tubichamini no era extraña a la mención toponímica <lel cronista. En 1640, un camino real cru7,aba el pago d e la :\1agdalena. 1l esdc la capit al hasta la r educción de los tubicbaminis . En aquel año 1a t ribu alzaba sus aduares entre la isla de las Flores y l a del Trigo, isl3s de á-rb olcs, se entiende, según la d enominación de la época. Llamfs':.' l u<>go al punto '' cañada de Giles'', en razón de t en er la estancia <fo P r_,il.ro de Gile6 su extenso frente sobre e1 citado camin o r ea1 c¡uc conducía a 1a r educción indígena . y cambió d espués aquel nombre p or el d e Cajarnville ' . al adquirirse las tierras p or Andrés Cajaravi1le. Doña GuillrrP11 na • or~ du T ricerri, al deta11ar la zona histórica en su nota ble estudio E!. puerto de la ensrnada de Barragán, informa <JUe la reducción est aba lintita <la, hacia el 1ado de la ciudad, por un frente de tres mil varas sobre la ra- iin rla de Aregui. Bn 1635 y J 636, el goberu a dor P edro Estcb:rn Dávila hizo me_rced de _<los rst:rnc-ias al t eniente Juan Muñoz Vejarano, uno de cuyos titulos tien B < st0 r ncabezam iento : , , Unas tierras y cabezad as para estaEcia <1oee 1e¡~uas en C'l camino de la reducción de tubicha mini " ( 22 ) . P osteriormente, ;1fuiíoz VcJ·arano va capitán obtuvo en segunda ,'ida la cncomi_cnd~ ile • ' J ' ,,... ·v ~~ar.ano · f , H<JueJla tribu por h erencia d e su pa.dre Alonso 1uunoz ; y n~ su sucesión la postulada por M aciel d el Aguil_~ para su h1Jo, cuyos cmnpos se hallaban también p róximos a la r educci~n: , ., E l título de encomendero de los tuhicham1111s fue postula~lo tamh1en 1 íO LOS ~1.\C'IBL EN LA lll~TOlUA DEL PLA'fA cu 167-! por Juan Ruiz de Oca ña, vecino d e Buenos Aires y capitán retirado a la sazón. Nieto del sar gento mayor J u a n Ruiz d e Ocaña, qu ~ hatía venido del Paraguay con don Jnan de Garay, basó su oposición en uu título que 1>rcsentó, f echado el 15 de junio de 1583, y según el c ual el t en iente d e gobernador y justicia mayor Antonio de Torres Pineda., había a cordado al citado poblador Ruiz de Ocaña la encomienda. del cacique T elomyan condic, con su tribu y tierras, ubicadas en la costa del R iachuelo, a cuatro leguas de la ciudad. E ste documento es una d e l as 1·aras piezas d el trienio f undacional d e Buenos Aires que se conserva jnédita (23) . Como puede leerse en dicho texto, las dos notas escritas a l pie dc•l documento por el poblador Ruiz de 0caña revel an el nombre y fecha del n acimiento de sus hij os Isabel y ,luan, a quienes debe añadirse un tercero, Diego, según constancias de otra fuente ; e hijo d e uno d e los varone~ cita<los, o de una bija llamada Catalina, fué Juan Ruiz d e 0caña, t ercero del n ombre, que era quien r eivindicaba el d er echo a la encomienda t otal de los tu bichaminis. Sostenía. en los escritos que presentó al gobernador Robles, que la tribu de T elomyan se había dividido en parcialidades d esde la ronccsión de la en comienda, a su abuelo en 1583, y que algunas de esas fraccion es fueron a.tribuidas a Gabriel de E-squibel, Juan d e Abalos, Domi.ugo Gribeo, Cristóbal Morán y J uan Muñoz Vejarano. La vacancia deja.da por este último al fallecer sin heredeTo inducía a Ruiz de 0caña a r eclamar su sucesión en la parte de la encomienda que aquél había cje-l'cido, fun d á ndose, como queda dicho, en <'l título de 1583 que él iuterpretab:-i como extensivo a la tribu entera. Conservaba. a la sa.zón tan sólo una fracción de esa tribu, fracción que era precisamente aquella. que r econocí,1 como cacique a. un descendiente d e rrelomyun, llamado don Diego; y sostenía romo argumento jurídico que t odas las ramas dimanadas del nntiguo tron co tubichamini d c-bían St'r r eintegradas nl lwredero del tronco originario. La t esis era interesante y el gobern ado r R obles la admitió en priu cipi.o y como base do discusjón, decla rando abic•rto el asunto a prueba. Entre las noticias que re\'cla <'l cxpc<licu tc h(tUasc la 11ana,·i{111 de h . odisea. del cacique que succuió a Telomyan en la j ef atura d e l a, tribu. Habiéndose negado a mantenerse bnju la sujeción d e los conquistadorc:3 y a lterado la, paz de s u comarca, fu(, dest errado al Brasil por el gobern u· dor Céspedes. La nostalgia de sn patria. y s u tribu le movió a Cl'uzar de nuo,~0 las tierras cxtraiías que le separaban de l os suyos ; <'ami n -5 mr~cs ente ros, solo, g ui:'m dose por el sol Y las <'~t.rcllas a través de soleuadr.s :t)'(lientcs basta llegar otr a vez a la ribera nrndr e. Su amor a In. i uclrpcn drncia. y qnizús el d eseo de n.' n g arse p udie ron más en s u (mimo que la cx peri<' n eia rasada, :· Yolvió a en cabezar otra desobediencia arm~d:..i. que FHA~f'lSC'O MAf'TC:L DE L, .{GUILA 71 lt' rnli6 un l\\H'YO dt1sth,rro nl Brnsil, orékna(1o por C>l gol.Jernador EstC'ban P:\dln . .Aiws d.c-spués se 8Upo rn Buenos Aires que el caudillo bárbu ro }rnbia mm'l'to dt' dolor t.~u t'l lugar d e su exilio. El l'npitán ~ n<"il'l d t'l Aguiln contest ó las rawnes de su opositor nrguyt'llllo l}Ul' nndn. dl~mostraba quo l os tnbichamis ruya eucomieudx postul~iba. su hijo, .fm'seu una rama, de, la tribu del antiguo cacique rreiomyan; y hnhil'lldo trnnscunid o los términos kgales sin que Ruiz de Oca.tia prce,;t•ntas(' los t<'stigos ofreeidos, el gobernador dictó un auto acordando la t'lh'Omit-nda a Fruneisco ~Iadel del Aguila, ol Mozo. Reproduzco ~u t exto 1,orque (•onstituye una do las piezas más acabadas que presenta la lcgis)u('i6u sobre l a mate ria en el siglo X VII ( :.!4). XOT:\B DEL C.\PlTULO Ill. ( 1 ) ArchiYo d e la iglpsin dp la ::hl crcccl, libro de bautismos LI folio füi v. ' (:.!) . Información d e servicios d el capitán Francisco Macicl del Aguila, ~.\relnYo gonernl ch.1 la, Naci6n, Tribunaks, cxp. 1, N~ l. (3) Koticia c:>mnnadn drl Dr. n. d e L afucn tc Macha.in. ( 4) lnformurión d e senirios citada. (:.) A ZAROLA GIL, La e.popcya d·e Ma1111 el Lobo, cap. l. (n) CARLOS CORREA LUNA, Ca-ni.pafia del Brasil, tomo 1, documento 5. ( i ) ~ismn obra, documentos 27 y 42. ( S) Datos proporcionados por el historiador doctor Manuel M. Cervera. (ll ) Drjo constancia. de mi gratitud al P . Antonio ~rorrcs, t'X enra rl'dor <l<' la I glesia Matriz de Santa Po, cuya cooperacit)ll dcsintercsud1. ha t·ontril' u ~do a establ ecer muchas noticias genealógicas que figuran cu rst<' libro. ( 10 ) AnhiYo c]o la lglesia do la Merced, libro do bautismos IIl, fo- lio ~{;1 v. }lismn. fuente, folio 14~ v. En el protot•olo del escribano Jerónimo K úii Pz est:'1 fonna lizada la_ rnrt:1 dr dote de <loiía Antonia. ~{neicl del., .Aguila, <.' stablcc.iéndosc t¡UCI l'N:' tho d(' sus p~1drcs : una, mul utilla. llamada :1uana, tnsad:i. en $ 500; dos eanfü,Ieros, un jarro y un salero d e plata, ''que p esun onee m nrco::; y J nntos monta n $ 110 "; un vestido d e- l.Jror:1to musgo quo so t asn. r n $ 117 ; ~"'.'- pollera y juh6n cnraruados, $ 40; una sobrre-ama aXl'Jpada de colores, " ,);); un m~1nto us:1do $ ~O· un pnr d o zarcillos perlas, $ 40; una fraG~G en JJlata '' que sr le dar(m do vuelta del znda <h'l C' uzeo ,$ ] ~ • 'y . , , • ,r '",Je '.Jlll' h:m d,, hact•r nnrot r os hijos" ( Archivo de los Tribnnnlcs, prolo· 1:olo citado, n úm. ;-:í:~, folio ~-!6) . (1:1) Iglc,sia do ln Merced, libro III d t' rn ntrimo1iios, folio 18G v. ( H ) A re hivo .¡fo los Trilm11alcs, protocolo dl'l <•~cri1ano Doming o _( 11 ) ( l:.! ) LPzeano. nñ 1l 1714. folin 4:M. • ~ ~•) ~ii~ma fur n l l' p rotol'olo l1el cscrilnm<> J ('rúuiiuo K úiiez, ':'\ •: ,-:í-:l , 1 ÍllllO ,, " t¡q .. . . ' . ' ... ,., '. LO~ MACIEL EN" LA HISTORIA DE L PLATA ~:fisma fuente, protocolo del escribano Domingo L c-zca n o, 17241733, folio 64. ( 17) Testamento del capitán Bernardino de Avendaño oto rgado ante Angulo el 12 de enero de 1706; archivo de l os Tribunales, expediente sucesorio NQ 3857. (18) Arehivo general de la Nación, Tribunales, legajo l\1 1, e xp. 1. (11l) '' Franco. :M aciel de Villanueva sobr e información como benemérito de la ciudad d e Corrientes para optar a la encomienda de indio6 en el año 1715 " . Archivo general de la Nación, Tribunales, legajo 1:I: 3, ( 16 ) exp. 3. ( i20 ) (21) (22 ) (23) (!?4) Apéndice, documento N 9 4. :MANTILLA, Crónica hi.stóri.ca de la provi.nc-i a d e Corrientes, tomo I. TRELLES, R egistro Estadí-stico, 1862, I, 31. Apéndice, NY l. Apéndice, NQ 5. C'.\PlTPLO Cl'.\ HTO FRANCISCO MACIEL DEL AGUILA, EL MOZO Conquistador de Colonia del Sacramento 1652-17 .. f R .:\~:--,lSCO_ l\f ACTEL .DEL AGH!LA. primo~~nito de < Is< o l\Iariel <lr·l Ag·u1la y de dona ,Tnana F<'hx de ·v elasco, fu{> sobrr nnmbradn el lVIozo para Llistingnirlo de sn padre 1nientrm; Yh·ió rste. Na< ió en Suntn F e por los uíios 1652 y se le puso óleo y l'l'i~ma l"'ll Buenos Aires el 22 dr ~rp tfo1nbre ele 1659, establcriéud~~t"' l' ll <'l a~iento parroquial qne tenín a la suzón siete años de rdad y había sido bau tizado en <·aso de nC'eesidad por fray Pedro ele Cabrera, d e la orden de San Frnuciseo. Fueron sus padrinos e] all•aldl' proYi ncinl Alonso GuerrN·o y :-:11 1nnjer, <loíín. l\1aria de ~ama nirgo y Zúrrag-n. y testigos el capitún Alonso Gadea y Juan th' E sq uibel (1 ) . 1 Su radicación y actuación en Corrient.es. - 001110 se informó <'ll l'l capítulo precedrnte, Frnneisco 1\1:aciel del Aguila, el :\Iozo. obtnYo 1uediante la iuterve11eióu paterna la encon1ienda Lle 10~ indios tubiclrnn1inis en febr<-'ro de 1G75. No parece esta ÍluPnrt ante nwreed h nberle r etenido en Hucuos Aires ui en las tierras <le su f amilia en el pag-o de la l\1ag-dnle1rn. pues precismnente l'n t'l l'itado uño se trasla<lt> a la ciudad de San Juan ele ·vera, <lnncle :se avecindó y foriuó s u hogar. Tenía entoll<'es Yeintitrés ilÚO~. Sin duda, iuflnreron Cll S ll detcr1niuaeión la autoridad r 74 LOS MAC'IEL EN LA lIISTORIA DEL PLA'f A · · · t es corren t1'11os , uno de los v1uculac1ones de sus parien . cuales, el maestre de can1po Manuel Cabral de Alpoin, había sido por espacio de treinta años el señor feudal de la región; Y otro, el general Baltasar lVIaciel, ejercía alternativa1nente la tenencia ,de gobernación las alcaldías y el mando de las fuerzas. No deb1a tardar su voc~ción militar en acordarle la oportunidad de manifestarse ; Y al producirse en 1680 el lla1na1niento del gobernador don José de Garro para constituir el ejército destinado a desalojar a los portugueses de San Gabriel, el Mozo tomó las ar1nas y se alistó en el tercio correntino que cooperó al asedio y toma de la ciudadela lusitana, bajo el mando del sargento mayor Francisco de Villanueva y la presencia de otros siete oficiales de San Juan de Vera: Luciano de Acosta, Gabriel de Toledo, Pedro de Almirón, Alejandro de Aguirre, Antonio Sánchez Moreno, Juan Delgado de Espinosa e Ignacio Flores ( 2 ). La participación de Maciel del Aguila en la campaña de 1680 nos concede la oportunidad de revelar un antecedente docun1ental inédito sobre aquel in1portante episodio histórico: es la carta enviada por el P . Pedro de Orduña, procurador general de las 1nisiones jesuíticas del Paraná y el Uruguay, al padre provincial Diego Altan1irano, y que constituye el único relato extenso y detallado que se ha producido hasta hoy sobre los preparatiYos, la ejecución y los r esultados del ataque a la fortaleza del Sacramento, escrito por un testigo presencial del suceso. Figura en el apéndice bajo el número 7. .Alférez, teniente Y capitán de caballos, en orden a sus servicios militares, Francisco Maciel del Aguila deseinpeñó tainbién los cargos civiles de alférez real de la ciudad, dos veces alcalde ordinario y alcalde de la liermandad. En 1689 edificó a su costo la casa del cabildo correntino. Al producirse durante la semana santa de ese año el asalto de los indios a la ciudad de Vera, con 1nuerte del capitán Pedro ele Burgos y de veintidós n1ujeres españolas, cupo a Maciel del Aguila, alcalde a la sazón, cont ribuir con sus hon1bres a la salvacióu del vecindario e in1 poner a los bárbaro::; el castigo de las arinas. 1 • l'lt.:\~l' l~l'O ~1.\l'll:L DEL .\\,PILA, El, ~tozo , ,1 Tomó parte en la (\Xpetlillit)n niilitar (lllC l'OJHlujo Oabriel de Tt,ledo ul valle eakhaquí. 'l'ln\, t\n su esposa. doña 'l'lHlHl8a dt\ YiJlan lH' YH, eH tro ot ros hijos, a Fraueisl'O ~laeiel de ,.illauueYa, qup ~ig·nEl. y a ..Antonia :\Iaeit'l de Yilla11urYa. que dió su ruano al eapitiin SilYrstre dr l''ampu~ano. Doña 'l\nuasa de ,~illn nnt?Ya era hija del µ-en eral Nic\olá~ lk Yilli.11nH~Ya y tlr <loiia . A.na de S equeyra y Bohorqncs, y 1iieta o hi znietn del pritner Xit•olús y ·¡11anneYa, escribano del en l>ilclo, r edador y antorizante del acta de la fundal'i011 de Corrit'ntes. e u Y a firma npareee .innto a la clel . ade lanta do don J ua11 de Torre~ de era y Arngón . En su ca lidatl de l'Oll<t ni~tador y poblador obtuYo t\l pre1nio de una f'lll'omi t'IH.1a por auto ,r llt'l de octubre de 1588. Su hijo. el suegro ch"' l\Iat irl drl .Aguih1, desempeñó t odas las 1nag·istratnras ciYiles y miliütn's de' la eindad ; f ué teniente <1e g0bernatlor, jnstil'ia n1ay or y enpitúu a guerra en lH-!O y 1G58: ">. perdió la Yida e0111hatir11do, Rie11do de~ollat1n por rl C'll C'llligo abipón. Francisco Maciel de Villa.nueva. - Nctl'ió <'ll Sa n ,Juun <k Yera ltéwia 167G o mny poro c1espnPs, ). cmprzó su earrera a 10s Patoree años ck edad; pas6 por los grados subaHPr110s hasta al canzar rl de eapitán de caballoÍ'\ ; ? en 17l!'i produjo informneión t·nmo hen emrrito de la cindnd de y ·rra para optar por una lle fa~ rneomit"'11<lns Yaea ntrs en ltatr. El (.lXpedirnt-< orig inal. qne se (•nstollia hoy ('ll t'l .ArchiYO grn r ral tlt"' la Niwión ei)' enntieuc ]as llotieia" históriea~ y los autrrcdl"'nt cs quC' ht\ r rprod1wi<lo 1nás a1·1·1 h:\. r rb1 1y 0 ~ n l:; artnfHlión paterna ~r Hbonndo~ por una doculll"11 l n(•i611 f('h ¿!eicni c. 1\ n te el ('11pitií11 Albert ~) Hodrígw';.,; (k Sv1 76 LOS MACIEL EN LA HIS'rORIA DEL PLATA ton1ayor, lugarteniente y juez, declararon c o1110 testigos el maestre de campo Alejandro de Aguirre, de ochenta y cinco años; el capitán Pedro Sánchez Negrete, <le sesenta; Antonio Frutos, de sesenta y dos ; y Juan Díaz Moreno, de setenta; y por auto fechado en Buenos Aires el 4 de novie1nbre de 1715, don Baltasar García Ros, gobernador de las . provincias del Río de la Plata' otorgó una de las enconüenclas a Maciel de Villanueva. • Maestre de campo Alejandro de Aguirre. - Una información de servicios instruída en abril de 1702 y cuyos documentos originales se custodian en el Archivo Nacion al de Chile (4), a porta algunos datos inéditos sobre el famoso caudillo correntino. N a ció éste en San Juan de Vera del enlace del canitán P edr o de Aguirre con doña. Ana D elga do, y fueron BUS abuelos Juan de Agnirrc y Bern a.bé Delgado, a tribuyéndose a éstos y otros antepasados la calidad de conquistadores y pobla dores del Paraguay y post eriormente de Corrientes. Refiriéndose a la carrera de Ag uirre los p a peles establecen que en 1702 llevaba cincuenta y .tres años <le servicios, comen zados ' ' desde sus t iernos años' ', lo que permite fij ar la f echa de su nacimiento entre 1632 y 1635; fu é durante ocho a ños solda.d o ras0; ascen dido a t en ien te de caballos; tomó parte en t odas las campañ as que se r ea lizru-on cont ra los salvaj es en la jurisdicción clo Corrien tes y las Misionrs, distinguiéndose part icularmente en las que ~e llevar on a ca b o b aj o el m ando del maestre de enmpo Ju:m Arias d e Saavedra y d el sargento mayor G:ibriel de Toledo. Respect o de sus servicios civiles, consta que fué dos veces nlférez r C'al y cuatro veres nlcaldc ordin ar io d e su r iudad n a tal. Con el t er cio corren tino concurrió al asedio y toma de la fortaleza. del S a cramento en 1680, incorporúndoso al ejército hispanogua raní en la. costa del Rfo Negro y Santo Domingo S orian o, donde con fecha 6 de junio Vera Muxica le e xp idió el t ítulo de capit án <le caballoo, cuyo orig innl se halla <'ll el legaj o arriba citado. E n 1 701 el gobernador don :Manuél de Prad1J Ma ld on aclo le asigu ó la jefat ura de una fuerte expedición compuesta u.e dos mil guaran íes procedentes de las doctrinas de la Compa ñía d e J esús, que nrrean do cua t ro mil ca ballos Y dos mil mulas operó durante los m es<'s d e ener o y feb rer o dr l año inmediat o en la dilat ada, r egión comprendid¿l. al or iente del Uruguny, entre- los ríos Ibicuy Y Yi, batiendo n las tribus host iles dt' ya,roti, hohanes y charrúas. . F.n el escrito que <nca beza el expediente, Alejandro de Aguirre dice estar '' cargado de a ños Y obligaciones Y pobre para nrn ntcnerlas ' ' . Pre1 ~ent a fa certifiea ci6n autógraf a que le extendió su j efe Ver a Muxica. d etnl~,mdo la participación que t uYo en el nsalto a la ciudadela de l1mrnrl , l'R.\Xl'ISf'O )f.\ C'lEL DEL AGt'ILA, E:L ~rozo 77 Lobo, y que apar0ec feebfüla el ~O tle ngosto do 1680 en el '' f uerte del Hosario' ·, n ombre que uió (•l gt'u C'rnl sa nt nit'l'Íno a S:111 Gn briel después de su , ictoria . Este doeument o t ie ne m1 valor h istóri co n.prcciablc porque contiene la ,·rrsiún <lel jefe d el rjército sobre la forma en que dc~arrolló 611 ataq ue a. la fo r taleza portug uesn. S e l e reprodu co en l'l :ipéndice bajo el número 8. 1 Doña_ Bartolina Maciel del Aguila. - Esta hija de Franr1seo 1 far1el del .Ag uila y de doña tTnana F 6lix de Velasco acordó . su ~1a110 a Antonio G u ~iérrez de Paz, vástago de un linaje que hab1a d ado tres gener ac10 ues de proho1nbres a Burnos Aires ( 5) . he refe1:ic~o al fun<lador, el capitán P edro Gutiérrez, y a su h1Jo, el r ehg10s0 fran ciscano, al tratar de la introducción del ganado vac:uno en la Banda Oriental y a los orígenes de Santo Domingo de Soria no. Doña Bartolina lV[aciel tuvo de su 1neurionado en lace dos hijos, Diego y l\íaría Gutiérrez de P az, siendo esta última la rnujcr del capitán )Iiguel de P cñalosa. Doña Bartolina quedó Yiu<la antes de 1700 y falleció en 1711, habiendo otorgado iestan1ento e instituído albaceas a su hijo y su yerno. X o parece esta dan1a haberse consagrado exclusivamente a las tareas de su hogar, p or lo 1nenos durante su viudez, pues su nombr e se encuentra en las escrit uras de la época ron n10tivo de sus int ervenciones en litigios <le intereses y operaciones con1ertiales. En 26 d e n1arzo de 1700 dió poder a clon Miguel de Riglos, a1Jte el escribano Clemente R,0dríguez Carrillo (º), para que deinandase en su n onibre a su her111ano 1\1elchor Maciel del Aguila por el Ya]or de seiscientas cincu enta 1nulas ele su propiedad que había confiado al citado para que las condujese a invernar a Salta. Al año siguiente de su muerte sus hijos iniciaron querella judicial <·ontra s u tío Francisco 1\faciel d el Aguila, segundo del nombre, l'C'<·lamando con1o bien su cesorio el ya}or de dos carretas y veinte lJUeyes eon su cargamento de setenta arrobas de yerba y treinta dr tabaco que los peones del susodicho ha bían t ransportado, por f•nenta de ]a causante, desde .Asunción del Paraguay basta Buenos Aires, por vía de Corrientes y Santa I¡,c. El demandado sostuvo ~ue los gastos d e la conducción Jiabínn sido considerables; pero ¡li~ ' '- tos MACIEL EN LA HIS'l'ORI.A DEL PLA 'l;A · d e 7 de octubr~e de 1713 el_ alcalde don Antonio de por sen t enc1a . Larrazábal dió razón a los hijos de dona Bartolina; Y apelada la r esolución fué ésta confirmada por don Juan José de Mutiloa y Andueza, alcalde de casa y corte, del Consejo de S: M., a cuyo 7 caro-o se hallaba a la sazón el gobierno de Buenos Aires ( ). b Descendencia correntina. - A pesar de la antigüedad de la ciudad, los r egistros parroquiales de Corrientes sólo se conservan desde 1746, lo que dificulta el establecimiento de las filiaciones. Salvo algunas excepciones no ha sido posible reconstituir la genealogía de la rama correntina ' de 1os vas ' t agos, de los' hlaeiel, ni saber de manera. cierta, en la may ona si éstos descienden de Francisco Macicl del Aguila o de sus p arientes Balt asar y Andrés Maciel, los· tres troncos de la familia. en aquella. provincia. Con el carácter de mero índice consigno los nombres y fechas que subsiguen, dejando a algún investigadÓr local la tarea de establecer documentalmente las ramas y la historiciuad del lina je durante los siglos XVIII y XI X. Bernardo Macicl, na.tura! de Corrientes, . casó en ~1ontevideo el 10 de uovicmbrc de 1755 con Juana Mendoza, natural de Buenos Aires; Antonio Maciel del Aguila, capitán del t ercio de Corrientes en 1768, presunto padre de Manuel Antonio, que fué bautizado el 20 de j unio de 1767; Baltasar Maciel, hijo de Baltasar y de Ro,sa Cabral, bautizado el 11 de abril de 1764; Teodoro .Maciel, hijo de Juan y do :1\farfa, Gómez, el 7 de enero de 1765; 1v1argarita M~cicl del Aguila, hija. do Francisco y d e Luis!l Cabral, el 11 de mayo de 1765; José I gnacio M:aciel d el Aguila., hijo de los mismos, bautizado el 21 de febrero de 1769 ; :1\fnnuel 1\fueiel, }lij o ele l\fanuel y de Juana ·M aría de Insaurraldc, el 22 de setiembre de 1799, San' tiago l\íaciel, hijo de los mismos, el 24 de julio de 1805; J"uan Estebnn Maciel, hijo de otro :Manuel y de Bernarda Aynla, el 4 do setiembre <le 1801 ; Pedro :Maciel, hijo de Pascual y de Isabel Ibarra casó en Montevideo, el 18 de julio de 1777, con ~Tosefa. de la. Sierra., viuda de José Antonio Rodríguez e hi,ia <le Pedro Hcrn:índcz de la. Sierra v Rita de Vera P erdomo ; Manuel Victorio :Macicl, hijo de Juan José y d e Hamona Torrea, fué bautizado el 23 de diciembre do 1804 ; ~1nnucl do la Rosa Maciel, hijo de Faustino y de Andrea Soler, el 5 de enero de 1806 ; Teodoro Maciel, hijo de José I gnacio y de Margarita García, el 4 de abril de 1808; Manuel de los Reyes Maciel, hijo de Félix y de Inés de Arévalo, el 30 de ngosto de 1807; Juan I gnacio Maciel, hijo de .Tuan Francisco y d~ :M aría Clara de Arnnda, el 4 de agosto de 1810; Justo Pastor :M:aciel, hijo de los mismos, el 21 de julio de 1815; Y Lucas Ma;ciel, hijo de Francisco Javier y de Santos Delgado, el 23 de octubre de 1814. FRANCISCO MAóiEL DEL ÁGUILA, ÉL :Mozo 79 XOTAS DEL CAPíTULO IV. Iglesia de la :Merced, libro 3 de bautismos, folio 27 v. (2) AzAROLA. GIL, La epope-ya de Manuel Lobo, cap. II. (3) Archivo general de la Nación, Tribunales, leg9 M. 3, exp. 3. (4) "Jesuítas", Argentina, vol. 274. ( 5) DE LAFUENTE MACHAIN, Los Saavedra en Buenos Aires d1.trante la colonia; V.ARELA ÜRBEGOSO, .A.punte,s para la historiaJ de la sociedad colonial. (º) Archivo de los Tribunales, Buenos Aires, protocolo XQ 9, fo(1) lio 379. (7) Archivo general de la Ración, Tribunales, legQ P 3, exp. l. CAPITULO QUINTO JUAN MACIEL DEL AGUILA Alcalde de Buenos Aires 1657-1729 . , Noticias de su vida. - Juan Maciel del Aguila, hijo del capitan Francisco Maciel d el Aguila y de doña Juana F élix de Velaseo, vio ·, l a luz en Buenos Aires a l 1nediar el afio 1657. La partida r espectiva informa que el 22 de septieinbre de 1659 le fueron impuestos el óleo y la cris1na ten ieudo dos años y t r es meses, habiendo sido ba utizado en caso de necesidad por fray Fe_rnando Mejía, de la orden de Predicadores ( 1 ) . Fueron sus padrinos el alférez Gabriel de Toledo y doña I sabel de Frías. En la elección celebrada el 1 de enero de 1707 fué designado altaldc de la Santa Hermandad, en unión de Alonso del Pozo Y Gar_ro. En las actas capitulares figuran ainbos con el grado de <:apitanes. Reeibióse Maciel de la vara de justicia el 8 de aquel mes·, p rev10 · el Juramento · · T res anos ' f ue' e1ect o de rig·or. el espues alc~,1de d e segundo voto y juez de n1enores, jurando el cargo en ~esion pr esidida por el almirante don l\1anuel de Velasco Y TeJada. gobernador <lel R.ío de la Plata ( 2 ) • Los acuerdos del cabildo correspondientes a 1710 consignan la f~lta de asistencia de Maciel del Aguila a nn1chas sesiones con li1otiyo el e una larga dolencia que pa d ec10. ·' R epuest a su sa l u d , ..v 82 L O$ l\IACIEL EN LA IIISTORlA DEL PLA'l1A en razón de acumular a sus funciones antedichas las de alférez r eal, cúpole enarbolar el estandarte en una de las cere1nonias más típicas de la época, según lo registra el acta curiosa del 21 de octubre. . . . Y en este estado se propusso que Respecto de estar tan Proxsimaa las fiestas del Patron de esta ciud. en que ae acostumbra Passear el Real estandarte Y tener nombrado este cavildo Para este fin desde el a.cuerdo de las €lecciones a la Perssona del Sr. Alcalde Dn. J uo. Massiel sino Ubiesse alferes Propietario y en conssequencia de esto Proveydo autto por el Sr. Govr . Y cappn. gra l. als ando el Juramento Y Pleyto omena.je al cnppn. J oseph Ruiz de Are11ano :ilandando que lo hissiese dho Sr. Alcalde ordinario J uun Massiel Pareciendo que Su mediacion el dia de Sn. Martin Ynstava ya la ejecucion se passo con efecto a hazer el Pleyto omenaje acostumbrado y en dha ejecucion est ando el Real estandarte Sobre Un taller en una messa yo el pre~st o. essno. lo cogi y el dho. Sr. Alcalde Sentado de Rodillas y Juntas sus manos las pusso entre las del Sr. Govr. y le recivio Juramento. y Pleyto omenaje de guardarlo a ley de cavallero Y enastarlo en lae ocassiones que Se ofrcciessen del Real servicio sin acudir con el a otra ninguna P erssoua que no sea a Su ssa. So pena de Aleve en nombre del ser vicio ele S u Ma gd. y guardando todos los fueros y privilegios . . .. En el curso de aquel 1nis1no año 1710, el gobernador Velasco y Tejada llan1ó a licitación para proYeer el cargo de depositario general, de acuerdo con lo tlispue8to por las reales cédulas (3). Ilallábase aquél vacante por 1nuerte del últüno titular, don José Gil Negrete; y en la puja abierta triunfó por $ 1.600 el general don Miguel de JUglos, a qnien se ha hecho referencia anteriorn1ente. Debió el no1nbrado oblar una 8Un1a al contado y constituir fiadores regulares por la cantidad <le $ 4.000 "en plata enzayada y n1arcada ". Ofreció con10 tales a los vecinos Juan ~Iaciel del Aguila lVIiguel J eróniino <le E sparza y Pedro de Saavedra, cuya ' . . responsabilidad 111oral Y financiera queda acreditada por el hecho. La calidad de accionero de Maciel consta en varias resoluciones del cabildo. El 23 <le abril de 1717 se le acordó autorización para efectuar una recogi~a ~e ganado en San Gabriel ; el 5 de diciembre de 1718 se le adJnd1caron 2.000 cueros Yacunos en JrAX 1L\ ('IEL DEL .-\\trIL.-\ S3 el repart iniiento Je prúctiea; y en In sesión del 20 de octubre de l~l~ se le Cün1prendió, así emno a su her1nano Francisco, en la tíispúsit·ión que obligaba n los Yeeinos aeeioneros a justificar sus dereehos de tales ( 4 ) • Su familia.. - El eapih1n Juan ::\Iaciel llel ....-\.guila contrajo matrimonio el ~S de agosto de 1696 eon doña Bernarda González de A.L'osta, perteneciente a una familia pobladora de Buenos Aires t:Hy,1 antecedencia figura en este capítulo. Bendijo el enlace el 1-n·esbíter o }Ielebor de Izarra, y fueron testigos el doctor Antonio J e Yt")rgara, el c:apitán Dan1ián del Toro y Rodrigo de Arroyo (5 ) . Dt)Üa Bernarda González de A.costa había nacido el 12 de juniu de 1666~ siendo lleYada a la pila bautismal por sus padrinos 'f icente Pé-rez de Otálora y doña Luisa Barbosa, el 2·7 del mismo mes ( º) . ...:\.1 casar con }Iaeiel del Aguila recibió de su s padres, en dote ... una chacra con un n1onte grande en el pago de la ~Ia. tanza. y un frutal de quinientas Yaras de f r ente eon la longitud que le eorresponde ~' ... Testó ante Don1ingo Lezcano el 3 de diriembre de 1725~ por hallarse enfer1na de grayedad. .é\.finna no haber tenido hijo alguno de su rnatrimouio; no1nbra h eredero uniYersal a su esposo, :-- lega a sus sobrinas l\Iarín y Ana Gutifrrez u.e Carabajal el re1nauente del quinto de sus bienes; y a otra sobrina. Dionisia Guti~rrez~ '·por el bien que le ha heeho'', una eselaYa parda. llainada Catalina. Designa albaeeas a su 1narido Y al regidor Santiago de Zan1udio. El 9 de enero de 17213 doña Bernar da revocó y anuló este testa1uc>nto ( 7 ) . Tern1inó s u Yida el lG de abril del nlis1110 año. Yiudo. el ex alcalde de Buenos .A ires contrajo segundas nnptias. a los setenta años lle edad. eon dofia ~Iartiua de Lizola y Esto bar. el 17 de uovien1bre de 1727. La desposada era hija de ::\Iauuel de Lizola y de doña .AJ1a de E scobar Y Gutiérrez, aYecinJad os en Santa Fe. de donde aquélla era natural, así con10 su hermano Juan Franeisco de Lizola y sus her1nanas doña Josefa Y doña J uaua. esta última ('asada eon Alonso García de Zúñiga, r egidor p erpetuo de Buenos Aires. 84 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA Juan Maciel del Aguila otorgó poder de testamento y albaceazgo a sus amigos Juan Bautista de Sagastiberria Y Juan de Arozarena el 3 de febrero de 1729 ante el escribano J oseph de Esquivel ( 8 ). Declaró por su legítima y universal heredera a su hija María Josefa l\ifaciel, habida en su nueva esposa Y que acababa de nacer, designando en calidad de tutores y curadores a los citados albaceas conjuntamente con su mujer. Terminó sus días el 14 de aquel mes. En virtud del poder recibido procedió Sagastiberria a extender las disposiciones testamentarias ante el mismo escribano, debiendo consignarse el hecho de que el segundo albacea se excusó de intervenir en el asunto. En el documento se mencionan los datos arriba señalados y se informa que durante la vida matrimonial del causante con su primera esposa, doña Bernarda González de Acosta, hubieron y adquirieron los bienes de que disfrutaron y cuya relación de casas, chacras, haciendas de campo y esclavos, constan en los inventarios realizados. Es muy probable que sea la hija de Maciel del Aguila, doña María Josefa, la poseedora de la vasta estancia de la Magdalena mencionada en el plano inédito en poder del Dr. Félix F. Outes, aludido en el capítulo I de esta crónica al tratar de los orígenes de la propiedad en aquel pago. En efecto, una de las hijas de doña María Josefa Maciel, Angela Reyes l\tlaciel, casó con Juan Bautista de Zuloaga, lo que explica el texto del plano : '' 'rerrenos que llaman de Zuloaga y pertenecientes a los herederos de doña Josefa Maciel del Aguila ' '. Los Maciel Caballero. - Además del alcalde de Buenos Aires, los papeles del primer tercio del siglo XVIII se refieren a otro Juan ~Iaciel del Aguila cuya filiación no he logrado esta• blecer. Entre 1712 y 1714 estaba ya casado con doña Sicilia o Cecilia Caballero. También en esa fecha existía en la ciudad Ilernardo 'Maciel, igualmente deudo de Juan el mayor . celebró ' , enlace con doña María Catalina Herrera, y una hija de ambos, María Hilaria Maciel, segunda de este nombre, dió su mano el ,JUAN l\1A<'flo:I. l>ET, Áf:t /lJ,A 8;j :1 de abril do 1783 a Aucl1·i'•H Chas o Cha1rn, p1·oer,clrnt,• dP. Pulma de Mallorca. Doña Sieilia Cnhnlloro de Miu·iel del Aguiln t!ra hija de Diego García Cnbnllcro y de doña María (J uer1·e1·0. 11 r. rrnauo suyo crn el alférez Bernardo CnlmJlero, llnmndo en algunoHdocumentos Bernardo Gonzúlez de AeOf.;tn y ( !nlmIJ,~ro, Hin ,, ue haya podido el cronista verificar el tnotivo. Cow,f.a qu" niurió dcni entr. Jiahía eonstituí<lo su 11ogar en 1712 <~on doíiu J néH de Barrales, parienta pr6xi1na del prin1er cura vienrio de Montevideo. hijos del alférez J unn Mm•ir] del Aguila .Y Sirilia Cnha]lcro : l . María M aeiel, qnc nació en abril de 17 l.'5 -:-· ref•ibió el bautismo el ] 3 de mayo inmediato, bajo rl pad rinaz~o de Pedro 06n1ez de Sarabia y doña Ana Montes d e Oca. 2. Pedro Pascual Macicl , enyn partida Re asentó PI l fi <it> noviembre de 1718, tenicnclo 1111 año de edad y habiendo sido bautizado ni nacer por Cll fraiJc n1ereerlario Lenndro de Almirón . :l. María ,Toscfn Mnciel, que vi6 la luz rl 1 O() ag-ost o rlr• 1719 y fn~ bautizadn nl 7 de1l n1hnno por <'l P . PrAn<'is<'o I zarra 4. Dief,?o Maeiel, ])P,va<lo n In piln hnut ismnl rl 14 d(' i'nC'ro <le 1721, de 6 rlím, de edacl. 5. FrnndRco Macirl, 1HH'ido rn 1732 r hnntizatlo rl :l <lf' mayo de' 1723. 6. Di<'go Mnriel, sngnnclo <lPl uomhrr. n quiC'n 1108 rPfrrimos por cxtenRo 1116.s nhnjo. 7. Mnría Antonin. 1\1,winl, naridn Pll 1727 Y hnntizfil1a rl 4 clr fí'br~ro de 1734, hnhiénrlolo Nido Pll <•n~o <1<' ne<'<"SÍtlnd por fra y Prrlro d<' A~uirrc. n1err<'<lnrin; tnYo por padrinos n , . ,.<'ntn ra rlr la Cruz '" ~in ria ,T mmfn nallri:;t<'ro~. 8. 1\'fnría Tlilnrin l\f1wie1. n quit'n no <lf•ht' c•nnfu nrlirsP ron ~11 probnhl(\ llriinn. ]n hijn dr Hri·nnr<lo; ~iwió rl :!4 dP P11rr ~ dP li:l4 y fut~ llC'va<ht a ]a piln hnut.i~mn1 rl a ,JE' ft'hrr ro d C'I m ismo nfio; <li<'l su nrnno n ,Tos~ Anttntio Lozano r hn·o. l' lltr<' otros hi.ios, 0 ,Tuana Mnrín, l\fnrÍH Tttt~H. c¡n(• muri6 c·n la infarwia. y ~fa rinno Lozano y 1',fnt'iC1l . 1Hwido <'n 177:l. Sli LO~ MACIElJ E~ LA 111::;'rOIUA DEL VI,A'rA Diego Maciel. - Este hijo de Juan Maciel del Aguila y de Sicilia Caballero llevó el nlisn10 1101nbre de pila del hermano 81tyo 1nencionado bajo el nú1nero 4 de la nó1ni11a que precede. Debe presu1nirse que el priiner Diego 111urió en la infancia. Un hecho n1ás in1portante que debe sefialarse es el de la :-;upresión, desde esta generación de los ]\'Iaeiel de Buenos Aires, de su segundo apellido, del Aguila, que sólo parece haber usado doña María Josefa, citada bajo el nú1nero 3 de la nón1ii1a anterior. En ca1nbio, ainbos apellidos han continuado siendo usados hasta nuestros ,Has por la ra111a correntina que desciende de .Francisco Macicl del Aguila. Diego Maciel nació en Buenos Aires en l 72!), siendo bautizado en caso de necesidad por fray Pedro de Aguirre, de la orden de N. S. de la Merced; y púsole óleo y crisma el P. Juan Pascual de Leyva el 4 de febrero de 1734, segúí1 constancia de la certificación respectiva. Contrajo matrin10nio con Pascuala Cepeda, hija de Pablo Cepeda y de Josefa Flores, teniendo a Evaristo y a Celedonia l\Iaciel. El primero parece haber fallecido sin sucesión, y la segunda dió su 1nano a Pedro Pablo Carnero, natural de Catainarca, aportándole una dote en ganado 1nayor, y teniendo dos hijos, lHariano y Valentín Carnero. · llabiendo enviudado, Diego lVIaciel contrajo segundas nupcias con Francisca de Armida, en quien tnvo tres hijos: Juan, Francisco e Isidro ~faciel. El segundo casó con su parienta Jerónin1a l\!Iaciel. . Diego Maciel 1nurió el 20 de junio de 1791, bajo testamento otorgado la víspera ante el escribano Mariano García de Echaburu, dejando bienes por valor de $ 20.656 (u). F1 ig-uraban entre ellos una estancia en el pago de la lV[agdalena, de media legua de frente por dos de fondo, poblada de ranchos corrales v O'anados ' .. b vacuno y caballar, con su 1narca ; Y dos cuartos en la ciudad de Buenos Aires, ubicados en el barrio de la Concepción, por con1pra hecha a José Rodríguez. Declaró deber solamente $ 70 a su c01npadre José Ignacio Gaete Y $ 5 ó G a Ramón Freire; cedió ,. .J lT .\X ;1LH' IEL DEL AGl- ll,.\ 87 cuatro caballos, a su elección, a fray )Iartiniano )Iígnez; y nouibró albaceas testamentarios a su 111u jer , al c.:itado J osé Ignacio Gaete y a Fran cisco L eandro Sosa. Consta que fué su n1édico don J erónimo de Aréchaga. Jerónimo de Aréchaga, m édico y olYidado fil&ntropo, era miembro de la. Hermandad de Caridad de Buenos Aires, habiendo sido electo consiliario do la misma en 1792. Cirujano del H ospital de llujeres desde su fundación, suministró las medicinas de su peculio particular mientras el establecimiento careció d e farmacia. Como única. gratificación se le acordaron en su vejez doce carretadas anuales de leña ( 10 ) . Por auto del alcalde José Jfartínez d e H oz se procedió al in ventarjo <le los bienes de Diego Maciel, y la tasación que le siguió n os permite establecer los precios de los ganados en la :Magdalena durante el citado año de 1791. 3.000 varas de tierra . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . $ 562 Un primer rodeo de ganado vacuno de ;j65 cabezas a 12 reales cada una .. . ..................... . ..... . • • . . . . . . . . . . . . ,, 54 7 Un rodeo de ganado menor de 200 cabezas a 4 reales por cabeza ,, 100 Un rodeo de tambera6 (vacas lecheras) de 350 cabezas a 12 rls. - •)~ cada una ... .. . . .. . .... .. . . . .. ........ . ............ • • ,, o_ü 47 Otro rodeo de ganado menor de 9-1 cabezas a 4 rls. . . . . . . . . . . ,, 23 bueyes a $ 4 cada uno . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ,, 02 58 caballos a $ 2 cada uno .... ...... . .... . .. • • . ... • • • • . • ,, 116 17 redomones a 12 rls. cada uno .. . ..... .. .. . .. • • . • • • • • • • • • ,, ~5,4 81 yeguas a 2 rls. cada una. . . .. . ........ • • • • • • • • • • • • • • • • · • ,, 10,2 Se señalaban también 203 ovejas, 2 burros, 5 potros do doma y 21 potrillos de un año. Esta herencia dió motivo a un pleito entre los hijos d e Diego Maciel y su padrastro, Juan Bautista, Falcón, segundo marido de Francisca de Aranda. En 1806 los primeros vendieron a su primo Juan Francisco Maciel y Almirón, por poder acordado a Ramón Freirc, l a parcela de campo en que vivían. Antonio Gonzá.lez de Acosta. - Nació en 1578 rn Vianna do Castello y vino de veinte años de edad a Buenos Aires. Su nacionalidad n o obstó a que Hernandarias de Saavedra le concediera :ic_rras en e~ ~ago dr. :.\fatanzas, cuyo antecedente hizo valer, siendo. ~a v~~J O, al sohc1tar d:l cabildo en 19 de octubre de 16,10 que le permitiera ~)Oner una, estancrn y hazer los edificios en unas cabeceras de tierras que tiene en el pago de las matancas q. le dio el governador Hernando Arias Y a.vi<~ndose leydo so lo dio licencia para hacer labores y edificios que le parez1cre c~1e1los sin LOS ~L\ (' lEL EX LA 111:-;TOHlA DEL PLA'I1A perjuizio de tercero conforme al titulo y mercrd que do lns dhas tierras tieno sin yncurrir en las penas puestas" ( 11 ). Su adaptación al medio hispano fu6 inmediata., pues en 160a figura entre los contribuyentes n. la canonización de San Isidro, vatrono do Ma· drid ; en 1607 fué uno de los t estigos del r emate de las carnicei•¡as; y <\11 un rnemorjal que en 1635 presentó n.l gobernador :Esteban Dú vil a y que 'frollcs reproduce, expresaba : ' ' Ya ha mus de treinta y siete años que entré en ella, y me casé con hija (h• conquistador y poblador, y tongo muchos hijos y siempre me he ocupado en servir a .S. M. en todns las ocasiones que se han ofrecido, de correclurins y Cl'ntinelas, sirviéndola a mi costa ron mis armas y caballos" (12 ) . .En rsc documento srñalaba las compras de chacras que había hecho a ~fanuel Rodríguez y Bernardina do Guerra, y solicitaba del gobernador las cabezadas do aquellos predios. Esteban Dávila, estando en la estancia de González dr Acosta, hizo lugar a la pe· tición y acordó las tres cabezadas por auto del 14 de octubre de 1635. En 1639 y en virtud del auto del gobernador don 1'1cndo de la Cueva y Benavídoz que ordenaba. una manifestación de títulos de las tierras en el río Luján, González de Acosta exhibió el otorgado a. su suegro, Antón García Caro, por el adelantado Torres de V era en 1588 y cuya. posesión disfrutaba en unión do su mujer. Adquirió también la estancia contigua por compra efectuada. antes de 1640 a don Eugenio do Castro, según constancia quo siguió al precitado bando del gobernador de la Cueva: '' La suerte núm. 3 de la dha medida desta vnnda se declara pertenecer a Crietóbal Naharro y a sus herederos y sucesores, en que ha sucedido Antonio González do Costa, por venta que lo hizo don Eugenio d e Castro, yerno del dho Cristóbal Naharro. A esta. estancia pretende de recho el alférez Roque de San Martín, por un trueque y cambio de tiorrns del pago de la Matanza que dice haher hecho con ol dho Auto. Gonzáloz de Costa; que se reserva pru:ezer en ello conforme a. justicin'' ( 13). Fué uno de los portugueses desarmados en 1643. Apnrcco bajo el núm. 10. Drclaró '' ser natural de Vinnna, dC'l reyno de Portugal, de 65 afias, labrador; está casado con criolla, hija. de conquistador destns provincins; tiene casas pobladas en est::i. ciudad, chacrn, y estancia, de un cuerpo, poblada en 1.000 cabezas do ganado mayor y 400 ovejas y 7 es· clavos; quo todo olio y el <lemas caudal que tiene a su parecer valdra $ 5.000 ; tiene 6 hijos, 4 varones, el mayor do 21 años, una hija. casada con criollo do la tierra y otra. doncella, y rl hijo mayor es religioso do San J?ranco. ; ha 46 años que entró por este puerto en un nuvio de contrato que vino u. este puerto' ' ( 14 ) . Hizo cntn'ga do un arcabuz vizcaíno con sus frascos y una espada negra, vie,ia. En junio de 1646 le fué devuelta la espada que en agosto de 1648 debió Yoher n entregar. = = :z :X = = -g-> - = = > > = 2 -= 2 = = :::> :e -- -=- -- > --- z -5 -- -= - o i; e - > z a. X = = :r = -= -- - - - t .: = --- ::r ~)0 LOS :MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA las pam1' as desta ciudad '' (18 ) . Consta igualmente que poseía una chacra en el Monte Grande. Como queda dicho, García Caro estaba casado con doña Guillerma Méndez de Sanabria, siendo padres de doña lviaría de Sanabria, la precitada esposa de Antonio Gonz&lez de .A.costa. Los descendientes. - De este últ imo tálamo nacieron: l. Simón González de Acosta, bautizado en Buenos Aires el 1 de noviembro de 1624, y que debe haber sido el religioso de San Francisco aludido en la declaración de su padre, aunque éste le atribuye veintiún afias en 1643. 2. Domingo Gonzálcz de Acostu, bautizado el ~W de octubre de 1628; fué elegido mayordomo de la ciudad el 2 de cuero de 1660 y nombrado a lguacil mayor el 13 de julio de 1682 por el gobernador don José de Herrera, '' atendiendo a sus buenas partes calidad y buenas costumbres . . . y ser descendiente de los Pobladores y Conquistadores y ser abil y suficientte" (19) . En 1689, siendo capitán, f ué electo alcalde de primer voto y alférez real por los sufragios de t odos los capitulares, y al añe> siguiente desempeñó la procuraduría general de la ciudad. En ese carácter presentó un memorial sobre introducción de aguardiente, que apar ece transcripto en el libro capitular (20) . E l ayuntamiento le recibió en la sesión del 8 de junio de 1702 como síndico de los Santos Lugares d e J erusalén. Estaba casado con doña Prancisca 1\farquin a, hija de Francisco de Uzueña y de doña Isabel Marquina, El 1 do setiembre de 1717, su nieta doña Francisca del Toro, mujer de don Prancisco de Merlo, escribano del cabildo, pidió ser matriculada .c omo accionera; y el 23 de setiembre de 1784 su biznieto José de Albéniz y 'l'oro solicitó de las autorida des ' ' una certificación de los empleos onoríficos que obtuvo en esta ciudad su Yisa huelo ,don Domingo Gonzalcs de Acos ta, en conzepto do lo que resulte de l os recuerdos de este Muy Ilustro Cabildo'' ( 21). 3. Juana González de Acosta, bautizada el l!J de agosto de 1629 por el P. Francisco Caballero de Bazán y bajo el padrinazgo ele Antonio X uares y l\1nría Leal, su mujer. Contrajo matrimonio con Gonzalo Villoldo. 4. Gregorio González de Acosta, cuya rcrtificación bautismal no hemos obtenido, y que casó con doña María. c1o la Rocha Bauptista, hija de Antonio Rocha Bauptista. y de Prancisca B arbosa. 5. María o l\íariana. González de Acosta, bautizada el 14 de junio de 163G y a quien el gol>ernador Robles llama :\Iariana de Sanabria al conceder a su marido, rl capitán I gnacio F<'rnúndez de Agüero, en 1674, ]n encomienda de los indios serranos. , J l;AN ,;\L \( ' IEI J DEL .\l:C Tl l. A rn G. Jlicgo Uonzúlez dc Aeo:-;ta, qu e 1·11 el a s Í L'1lio lJ:wtismnl r orrtspundieutc apa reco con r1 mis mo n o111hre el(' :;u lwrmano I>omingo y a. cuyu respecto se r efiere la nota 22. Recibió c-1 ól<'o el 1 tk :1 gosto de rn:~8. F ué elegido mayordon_ 10 d e la cit1dad en lüü 5, p ero 110 so hiw cargo del puesto; alcalde de la H erma ndad en 1675 y 16Hfi; promotor fiseal y defén sor <le la Real Hacienda en 1692; era vecino nccionero. Diego González de A costa cel ebró enlace con Maria E lena de la Rocha Bauptista, hija también de Antonio de lu. R ocha Daupt ist a y de Francisca Barbosa, teniendo seis hijos quo vivían aún al comenzar el si glo XVI U, según consta en los testamentos de don Diego y ·de su mu,iN , otorgados ante el escribano Francisco do Angulo el 2 d e mayó de 1704 y l'l 6 de octubre del :mismo año. De la· citada unión nacieron P edro González de Arostu, una de cuyas hijas, doña Ignacia, fué esposa de J uau Antonio Carrión ; Simón · González de A costa; Francisca. Gonzálcz de Acost n, q u~ dió su mano al capitán Pcclro Gutiórrez de Carabajal; Bernarda Gonzú l1?z do Acosta., la precitada mujer del alcalde Juan :M.aciel del Agni1a ; .Ann Gon z:'i l<•z d(' .Acosta, que celebró nupeius con el rupitftn Domingo de Yidl'l:t, C' l gnacia C1onzúlez d o A costa, sordomuda (:.?:J). Las genealogías son t oma fatigoso d o estn1,l u<'l'I' y il'llil,so dt' st>gnir ~i 11 0 sr saue vincularlas a los caracter es y nl JH'O<'cso dt' nna. rplwn. Dnr:m h • d eoloninjc rnustituyeron el nC'xo insC'par:lhle <ll' ln villa pri\·ada r l:1 ' id:i públirn. Y r n nuestros días 811 jnvcstigndón e1ptivnlo a ,mn, rt'con~t itut>h-m moral de las vicjns cflulua fnmiliurcs y sol'inles q,w fueron la s ustnm•iu , h·a 0 de nuc6trn historia . l\'O'f AS DE L CAPl'I,ULO V. ( .1) cl iPn / - ) Archivo dt> la iglesia. d<' la ~frr<"e<l, lihro l l 1 tk b autismo~, f olio :!7. AciuTdos d<'l r:rti11r,uido Cnbildo de B11n10.~ - ' irfS, t(nno ~ln·n~spon- ,<'/ 1· loR _níios <.,) r) ( ri ) ~73 1.701-1707. :\lismn fuouto, id., íd., 1708-1 í 1:L Arur' l'do,-,, afios 1714-1718 y 17lfl-l7:!:!. Arl•hi\-o ele la iglC'sin de la. l\frrel--<l, lihro 111 dP m:1tl'imouios, f olio .Mismn fuonh', libro 111 th"' hnntismos, folio ~fl. t'an ( ? .Ard1ivo dt' los 'rrihunnl0s, protorolo d0l t's\•ribano Domingo Lezo, r\gtst,:o ·1, 1\iins 1.7:..!4 -l7aa, folio~ li·l ,·. Y l!ll v. ~ist ( 1~mo nrl'hivo, proto('olo <kl {'srrihano ,Josl'p h \le Esqui\'cl , re· rnll ,l, U t\() l _i:..!H, folios 44 y 270. ~ ~ ) Ar<' hn·o th' lo~ 'l'ribun :tks, Jt,gnjo ;1 3:t 1 ; 1<' 1" ' 1'dos, nño 17~7, p!\~. •l:.W. 11 ~l:! ~ l'l!-l•~LL},; ~, ]1'1 ·o i,,;f/'O Tt' .,tadfst ir•t>. i ol\Hl lX, p:t•g. fü). )ltsmo nut or, 1800, t onl\) 1, p:\g. ~:t (~) 1 ! :\_: !'12 LOS :MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA Mismo autor, 1861, pág. 55. . Re1,'i.sta. del Archivo gene·ral de Buenos Aires, 1871, tomo III. TRELL~, Revista patriótica del pasado argentino, tomo I. Mismo autor, Registro Estadístico, tomo I, pág. 50. ~17) 'L a Re'vi.sta ile Buenos Ai.res, tomo V, pág. 633. (18) .Acuerdos, tomo V, pág. 308. (19) Misma. fuent~, tomo XVI, págs. 100 y 104. (20) Id., id., tomo XVII, págs. 306 y 307. (21) Id., íd., serie III, tomo VII, pág. 392. (22) La partida asentada en el libro I de bautismos y matrimonios folio 146, dice "Domingo Gons. Sanabria, otro al año de 1628 (se refiere al asiento del primer Domingo) en el librito de cuartilla folio 89 ". En esta primera. partida el nombre de pila está alterado. Queda, pues, la duda de si Diego es el Domingo de 1628 o el de 1638, pero la: confusión de los nombres no modifica la filiación de ambos hermanos enteros. (23) Archivo de los Tribunales, protocolo del escribano Francisco de Angulo, año 1704, expediente 6249. (13) (14) (ló) (16) CAP1TCLO SEXTO GENERAL BALTASAR MACIEL Teniente de gobernador de Corrientes 1640 -1701 _El fundador. - "Mandamos que los quinientos pesos que el .difunto dejó ordenado se le diesen a Baltasar Maciel, su sobrino, Re le paguen de sus bienes ... '' Esta mención figura en el testamento instituído en 1633 por los apoderados de l!elchor Maciel, siendo la primera que se refiere al fundador de las ramas de ese apellido en Corrientes y Santa Fe. No solamente revela el lazo de consanguinidad existente entre el testador y el legatario, sino que demuestra también el vínculo afectivo que unía a ambos parientes. ?\IIelchor Maciel debía consi<lerar a su sobrino romo uno <le sus hijos; de ahí que le hiciera su heredero como a ~Htos; y es harto probable que la venida de Baltasar !Iaciel al Río de la Plata haya sido sugerida por su tío veinte años después <le haber éste realizado la suya. Procedía también aquél de Vianna do Castello Y se ha dicho que era hijo de Baltasar Paes de Puga y de Ana ~faciel. Xo me PS posible confirmar Ja versión ni rectificarla, pues carezco de noticias documentadas al respecto ; pero juzgo exacta o muy aproximada ]a fecha de 1625 que se ha expresado como correspon1lir•ntr a sn Jlegada al Plata. }fás dndosa es la relativa a su ave- 94 tos 1'1AC1EL EN LA HU:iTÓRIA bEL PLATA cinclamiento en Corrientes, y aunque una infor1nación producida en 1679 dice '' que abra 1nas <le quarenta años q. entro en esta ciudad", la vaguedad del dato no facilita la fijación de una fecha concreta. Consta, en cainbio, que era cabeza de fa1nilia en 1640; y que fué con1prenuiclo en el <lesarn1e de los portugueses en 1643, aunque su nombre no figura en las listas publicadas hasta hoy, en las cuales aparece su her1na:no A.ndrés Maciel que le acompañó en su radicación correntina. Baltasar Maciel poseyó casa y chacra en la ciudad de Vera, dedicándose a la labor agrícola "y sustentando vecin'dad, ariuas y cavallos' ', segú~ rez~ la fórn1ula empleada en. los docun1entos de la época. En 1647 fué nombrado tesorero de la Santa Cruzada, con cuyo 1notivo concurrió a _la sesión celebrada por el cabildo el 14 de marzo y presentó, con su título, una real cédula sobre sus cometidos (1). Aparece fir1nando co1no testigo el acta que el alcalde Luis Antúnez IIon1e extendió en el libro capitular de la ciudad el 29 de marzo de 1647., al registrar la provisión de don Felipe IV que acordaba igualdad de derechos entre los vecinos del Bermejo refugiados en Corrientes .y los vecinos naturales revistió de ..esta última ciuclad (2). La n1isn1a calidad de testio·o b al firmar el traslado al libro de actas d el t ítulo de teniente de gobern~dor que el general Amador Báez de Alpoin presentó al cabildo _el 3 de octubre de 1647 ( 3 ). Una información levantada un siglo n1ás tarde por su nieto el.maestre de can1po Manurl lv1aciel no añade datos a los breves que quedan consig·nados. Dijo que ha t enido n oticias por voz comun <m esta Ciud. que el dho Dn. Balthasar 1.faziel el primero <leste nombre fue úatural de _Eui·ornt del Rcyno de -Portugal que vino a esta Ciud. en tiempo que est::rnau· en vna las dos Coronas, que se havecindo en esta Ciud. con la Srri. nombrada, arriba en tpo. que e.st aua esta Resien poblada en que los Indios naturales ostigaban mucho alos Pobladores, en que cxersit6 su valor siruieudo con Armas . Caua-. Bos y d emns peltrechos de Guerra todo asu costa y mension exersindo los _ puestos de :Milicia ·y politicos como ~ombre noble que _h cra ,tenido y r eputado_ por tal, honorificado COll l~scudo de Armas qüe se le ha1i . puesto preBentéiii OENEflAL BAL'l1ASAR MACIEL !) ;j ul declarante que dize le ha visto vsar y tener a to<los los que desiendeu de la dha casa. de Maziel ( 4). Baltasar Maciel contrajo 1natrhnoni~ en Corricutes eon doña Ana de la Cueva, cuya her1nana, doña Mag<lalena de Ja Cueva, era 1nujer de Andrés 1\1:aciel. Eran ambas naturales de la Concepción del Bermejo, hijas del capitán 'roribio de la Cueva y de cloiía Isabel del Prado, y nietas por la rama n1aterna del capitán Diego López del Prado y de doña Isabel de Ochoa. En el documento que se reproduce en el apéndice consta que López del Prado y su mujer, antiguos vecinos de Asunción del Paraguay, dejaron esa capital al fundarse la ciudad de la Concepción en 1585 y se constituyeron en pobladores de ésta, adonde condujeron ~us g·anados y adquirieron bienes raíces. 'l1omó parte el 110111brado en las campañas de la conquista chaqueña y ejerció n1agistraturas civiles y militares hasta que la presión de las tribus enemigas impuso en 1632 el abandono del Bermejo y su ciudad, jalón avanzado de la civilización hispánica. Diego López del Prado terminó sus días en San Juan de Vera, donde tuYo que refugiarse con sus familiares y convecinos, dejando en nu111os de los feroces vencedores casa y ganados, muebl es y seinbrados, qne no tardaron en ser siste1nática1nente destrnídos. Del enlace entre Baltasar Maciel y doíía Ana de la C1wYa nació el general Baltasar lVIaciel, que sigue. El sucesor tronquero. - "V"ió la luz en Corrientes hacia los años de 1640 y tomó las arn1as desde la adolescencia; tuvo casa propia, criados y ganados; a sus obligaciones 111ilitares unió el desen1peño de magistraturas civiles; y e~ · 1_6~8 fué n~~1brado tesorero de la Santa Cruzada, en cuyo cJerc1c10 rennnc10 a loR emolumentos que le correspondían. En 1670 eligiósele alcalde J e primer voto siendo reelecto dos años 1nás tarde y acu1nulando al mhano ti~n~po las funciones de alférez real. C~r~cterizó .su administración por el iinpnlso que dió a las obras publicas e lnzo recidifiral' a ~us expensas, con la cooperación del n1aestre de ea1npo !it] LO~ :\1AC1 EL E~ LA ll l~'l'OBT A nEl i P{¡A'l '~\ .Alrjnndro de. Aguirre, una 11UYP j ' c>l frontispiC'io de In iglesia 1natriz. Por título expedido en 1676 por don Andrés de Robles, fué designado teniente de gobrrnador, jnstil i:t 1nayor y capitán a guerra de Corrientes y sn jurisdieeión, en euyo cargo per1ua11eció hasta fines de septiembre de 1678. No1nbrado patrono del convento de San Francisco, reconstruyó a su costa la iglesia de esa congregación, que estaba en ruinas, con cqyo rnotivo se esculpió su nombre en el pórtico del te1nplo. La inforn1ación ya citada que levantó en Corrientes, en 1754, su hijo el 1uaestre de ca1npo Manuel Maciel, contiene el siguiente testin1onio expresado por el sargento 1nayor Tomás de 'Villauueva y ratificado por los cle1nás declarantes: 1 Dijo que snuo y conoeio nl dho General Dn. Ba.lthasnr 1'-1nziel segdo. deste nombre padre lexitimo del dho Dn. Manuel q~ fué nnturnl destn Ciud. y que ha oydo dczir a sus mnyores comunte. sirvio en esta Plaza con su persona n.rmus y cauallos y <lemas 11eltreehos en la defensa della empleado 011 los oficios militares y politicos como porsonn, noble y hnuil para exl'rserlos hasta que el declarante le vio excrscr ol do tcuicnte de G-ovor. Justieia maior y Capn. u. guerra. en cuio empleo murio el nño pnsaclo do mil setecientos y \"llO. • • A In scxtn dijo que f.lUUO por hnucrselo oy<lo dczir a la. dha su Ansinna. madre y notrns nntiguns pcrsonns quo el dho Dn. Baltb:umr l{nziel tubo particular aplicazn. 0 n n.delnntnr o ylustrar esta Ciud. qu~ lo manifesto on lns obrns do los reductos de los estromos della donde so guare• cían las milicins que prosorvabnn las lmbnzione,s de los enemigos diaria y nocturnnmte. Ilustrando su zolo en la. fabrica y rcdificuzn. de la. Iglesia de el Convento de Nro. Padre San franco. desde sus zimicutos hasta su rolo• cn.zn. que hasta oy pornumceo muy lustrosa y perfactn y l'jecutorin esta verdad el nom brc d<' el referido esculpido de firmo en el portiro de dha Iglesia. En 1679 hizo la infornuwión de linaje y serv1c1os cuyas partes principales se reprodutlen en razón de los antecedentes históricos que revelan. A esa inforn1ación reeurri6 1nás tarde el general l\faciel para fundnr su postulación a la enco1nienda de los indios guacarás, que vacó por 1nuerte del capitán Antón !vluñoz y para ~uya provisión llan16 a concurso de 1néritos el gobernador don Jo~é de Jlerrern en 1690. Fué- e11co1nendero de dos tribus y agra- GENERAL BALTASAR l\L\CIEL 97 ciado con una merced de extensas tierras en Lag-unas Saladas. :KueYan1ente alcalde de priincr Yoto en 1fi93 ; juez <le cuentas por decreto de los oficiales reales de Buenos Aires el 1 de ag-osio ele 1699, 1nurió a los sesenta y un afios de edad, en 1701, pocas semanas después de haber siclo 110111 brado por segunda Yez teniente de gobernador y justicia 1nayor de su ciudacl n atal. Se ha afirmado que Baltasar l\iaciel contrajo niati·imonio cuatro veces, siendo sus esposas doña Antonia de Garay y Cabrera, que se presu1ne descendiente del general Juan de Garay e hija de Gonzalo Martel de Cabrera ; doña V'_ / 1Iaría de Lara y Alderete, doña '-t"""" / / Ana de Sequeira y doña Gregoria Cabral de Melo, esta úJtiiua hija del célebre maestre de campo l\lanuel Cabral de Alpoin. 1Ii investigación concuerda con estas noticias en cuanto se refieren a las tres últilnas dama~ nombradas, en las cuales tuyo d~seendencia. Nada puedo afirn1ar ni negar respecto de In presunta unión con doña Antonia de Garay. ./'~1 a Dofia. María. de Lara. y Alderete. - - Ern. ésta }lija d <' Pt>dro G on 1:í lez de Alderete, tesorero oficial r eal d e Corri ent<'s, <¡lH' al cnsnrla C"ún ~faciel diólo carta de dote cediéndole ' ' dos laiHH's d(, ra~n Yn sitio. . . , otro de estancia" (5). Doña :M aría d e L a r ::i murió en ln .im·entud, fü,j and:l a su ma rido una hija a quien llamaron tnmbi(,n Mnrín d <' Lara . Acordó ésta su mano al alférez Prancisco Florf"R y r <'ci hi ó nl <.>ni:iar ~C' los bienes dotales quC' su madre hnbín. Ilevn<lo nl m ntrimonio, d:rntl o lug:lr alios nds tarde a un litigio fiscal y a un embargo de aquellas propicdadcR, al sostenerse por la. Real Hacienda que GonzálPz de Aldercte no pudo ceder hien~s personales mientras se hallaba en el ejercicio de la t esorería. de la proYincia . Dofia María de Lu.ra, esposa d(• :Maciel, tuvo dos }l('rmanos : el capitán J uan Gonz{tlez de Velasco, que fut.> 1wrs01i:1je en Corr ientes y Sant:1 Fe a fin<'s d el siglo X VII y comienzos <1<'1 XVIII ; y d oiin Ts!l h0l <le Al d e rete o de Velnsro, qnc usó inclistintamr ntf• ambos apellidos Y (}lll' easó ron el capitán Gregorio de Rojas, ::il<.':1Jde de 1~ r iudad. F.l precitado alfr rez Francisro Plor es, mnrido dt~ la segunda ~Iarfa tlr L :t rn y yp i•no el<' lblta sa l' ~lat•iPl, t' l'!l li ij o dt'l enpitú n Rdt:H:1 r F lü r C's y ~)8 LOB MAC'lBL EK L A II IS'r OHl A DEL PLA'rA de d oiía, Marga r ita Cal>ral de 11:clo. Este rnnt r imon io tu vo también u n a hij a, d oiia Inés F lo res de 11elo, que f u é mujer d e Lucia no de Acost a . Ba1t asar F lor es halúa sido alca lcle ord ina r io <le la ciuda d de Ver a y d esempeñó d espués el cargo de t e6orero offrial r eal desde el n de junio de ](579 hasta el 29 de d iciem bre de 1088, fecha de sn dceL•so. Al ocurrir ést e, hizo acto de presen cia en ln, casa mortuoria el ten ien te de g oberna dor, Gabriel de Toledo, quien mallll ó poner gr illos en las pier nas del ca dá ver confinándole eu una habitación con guardias en la p uerta hasta que personas d e reconocid a solvencia rn oral y fimrn cicra ofrecieran su fia nza por las ev(;ntuales irre gula rida des que se verific:rncn en las cuentas del t esorer o fall ecido. . . (G ) . A l d ía siguiente se aceptaron las fi an zas d L• la viuda, <loíia 1\f a rgarita Cabrnl d ~ Molo, y de s u yern o, Lucinno <le Ar ost u ; levantúronse e ntonces los grillos y proccuiósc a d a r sepultura. a l cucl'po. Los expedient es de la. é poca, <.1 11 E s p;,1 üa y cu ln<lias, r evel:rn rnuelias fo r rnali<la<les t[ln ingenuas como la que q ueda r elatada (7). Doña Ana de Sequeira. - Est n esposa d e M aei cl, en segundas o terceras nu pcias, era hija del gener al Gómez de Aguiar y de dofia .Juana de Scqu cira. S u bisa huelo, Antón M artín de D on B enito, f ué un a vent urero <le garra que recorri ó las I ndias en la sC'gnnda mit ad del siglo XYI, conquistando tierras y f unda ndo u rhes. Su segundo a pellido, m ús c¡ue indicio d e n obleza, d ebe t omarse como una r evelación <le su p r oceden cia ext remeña. E m pezó a mcncion{u·sclc con motivo de los al za m ien tos iud í.genas en el P erú; a ctuó luego en l as gucrr::is de Chile, 1rns6 los Andc>s y t om<í parte en la conquist a del 'l'ucum(.,n y ln fu nn.ari(m de la ri mlad <le E st eco, la recia a t alaya que so leva ntó ante ln. auH•nazn. de l us hor das chaqneiia s y que un sacuclimieuto sísmiC'o r cclujo a r uinas nntes <le fin a li?,H1' la r en t urb d écimasexta. N o scr.ín im poti ible que Pl Ant ón ~for t ín a quien Alon so de V era acordó un a encomiend a <l<' in di os <•n Cor r in1tes en J;":i88 y que f ué n oml>rauo regidor <le esa ciuda<l sciH níios rn:'ts 1ardc, Sl'a el miBmo p erson :-ij~ a vent u rer o y comba tivo que d ej ó lrncJla s en P e rú, Uhil c y 'J'ucumún; pero lo que const a documen talment e es que al llegar n r <lad es tuLilizú su existen cia a.vccin dú,ndose en la, Conccpci6n del Brrmejo c•n uni ún de su mujer, d ofin An a d e V alcnzuela, y d e sus hijos. H eredaron ést.os la vocación pa terna, pues en 1633 a par ece un Antón Martín de Don Ben ito en tre los oficia les de h s milicias correntinas qu(' comuat ieron aquel a iio en <'l valle de Calchaquí ( 8) ; c.n 164-7 fu é electo r egidor ch· San ,hum dt~ Y c• rn ; y otro, o el mismo, ya que usaba sin va rian tes el n ombr e Y apellidos del fun d a dor de l a fa milia, d esempeíió treinta a íios má s t:n dr !ns l'lrYadas f nnciones de teniente de g obprnador y j nsti <'i:1 m:1y or . Antón Martín ele Don Benito de,i<> ta rnbi{,n tma hija que llevó el nombr e \... E~EnAL HAL'l'A.,) An ~r .\C'lEL 99 de la ma<lre, Ana de Yalt nzuela ; acordó su mano a Gaspar de Sequeira, capitá,n de milicias, r egidor, alférez real y alcalde de la Concepción, que paaó también a Corrientes con la caravana de vencidos en aquel trágico afio de 1632, logrando salvar de la ferocidad indígena. a su mujer y sus dos hijaa, :Micaela y Juana de Sequeira. Esta última contrajo matrimonio con Pedro Gómez de Aguiar, siendo padres de Ana de Sequeira, la precitada mujer de Baltasar Maciel. General Pedro Gómez de Aguiar. - Nació en la Puebla de Gu'.lmán, Extremadura, siendo hijo ele Diego ::\fartínez de Aguiar, portugués, y de I sabel Alonso de Salazar, extremeña.. Hasta la edad de siete años p ermaneció en el lugar ele su nacimiento, siendo luego conducido por su padre a Lisboa, a la casa de la abuela paterna; al fallecimiento de ésta entró ::il servicio de fray Cristóbal de Aresti, en la capital portuguesa, en momentos en que este prelado se aprontaba para su viaje al Paraguay, cuya cliúcesis iba a desempeñar. Llegó en su compañía a Asunción en 1630 y se avecindó en Corrientes a lg unos años más tarde, contrayendo allí enlace en 1638 con doña Juana d e Sequeira. Constan estos antecedentes en la información que produjo Gómez de Aguiar en 1642, siendo alcalde de San Juan de Yera, a fin de r ectificar la versión que le presentaba como natural de Lisboa, restableciendo la a ut enticidad de su cuna r spaíiola y su oriundez extremeíia por la rama materna. Dicha información se levantó en Buenos Aires y formularon declaraciones concordes los t estigos Gonzalo Gúmez de Amaya., natural de Alburquerque, en Extr<.'ma<lura, y antiguo vecino de la despoblada ciudad del Bermejo, de setenta y cinco años de edad; Scbasti{m de Aguiar, natural de Canarias; fray P lácido de Aresti, benedictino; el maestre de campo d on Lufa de Arcsti, a la sazón teniente general de la gobernación del Plata y sobrino del obispo de aquel apellido; Y fray Francisc.o de Ibáiiez, franciscano, de setenta afios (9) . Pedro Gómez de Aguiar fué regidor, alférez real y alcalde de primer Yoto de San Juan de Vera en tres ocasiones; diputado del caLildo para r epresentarlo en la gestión de los intereses co· muna.les; por su iniciativa y bajo su dirección se procedió a reconstruir en 1652 el edificio del ayuntamiento ; dió impulso a otr:is ol.,ras públicas ; tomó parte cn las expediciones que se organizaron contra los in <lios lOcJ LOS )[ACIEL EX LA IIlS'l'OR!A DEL PLA 'l'A bajo las órdenes de Pedro Alvarez Gaytán y Juan de Vargas Machuca: y acompañó al maestre de campo Juan Arias de Saavedr~ en la r epresión armada que llevó a cabo eu 1655 contra la conjuración de fas tribus hometés, chaguayasqucs y dagalastc~, que pu8o en grave riesgo a la ciudad. ~mez de Aguiar fué también tesorero oficial real, corregidor y juez de residencia del gobernador don Alonso de Mercado y Vi1lacorta. El sucesor de éste, don José Martínez de Salazar, le acordó el generalato al designarle su lugarteniente, justicia mayor y capitán a. guerra. Con la simplicidad patriarcal do los hombres de su tiempo, se inclinaba sobre sua sembrados de trigo y de maíz en las horas que le dejaban libres sus funciones públicas (10). Maestre de campo Manuel Cabral de Alpoin. - El común origen lusitano de los Maciel y los Cabral y el parentesco existente entre estos últimos y la raina de los iiaciel del Aguila, de Buenos Aires, influyeron quizás en la decisión del general, viudo dos o tres veces y ya próximo a la vejez, de contraer nuevas nupcias con doña Gregoria Cabral de lvlelo, natural de Corrientes, hija del maestre de ca1npo ~1:anuel Cabral de Alpoin y de doña Inés Arias de Mansilla. Esta alianza nos obliga a fijar algunos antecedentes históricos y biográficos. Doña Inés Arias de 11:ansilla era viuda del general Alonso de Vera y Aragón, el Tupí ( 11 ), e hija del capitán Francisco Arias de Mansilla, quien nació en Asunción del Paraguay en 1570; fué vecino fundador y encomendero de la ciudad de Vera; regidor de la misma en 1594, 1597 y 1608; alguacil mayor en 1597, 1598 y 1599 ; lugarteniente de gobernador y justicia mayor de 1627 a 1630; su fortuna y su autoridad sólo fueron sobrepasadas por las de su yerno Cabra! ele Alpoin. Contrajo matrimonio con doña Lucía de E spinosa, cuyos padres eran el capitán Juan de E spinm;a Belmonte, vecino feudatario y encomendero de Corrientes, y doña Isabel de Balmaceda. La fig·ura de l\tlanuel Cabral adquiere, eu las perspectivas lejanas de la formación, las características de un gran señor feudal. Esto es lo que fué, ante todo, aquel hombre que contó con las calidades que reclamaban el an1biente y la hora: linajudo, rico, batalJador y nntoritario. I-Iabía nacido en San Miguel de (lENEHAI , BAJ/f AS A!t .l\li\C' I 1,:r, 101 las Azor es hacia 1591 y llegado a Buenos Aires eon 8US padres, Amador Baez de Alpoin y doña Mar garita Cabral de Me1o, cuando apenas contaba ocho años de edad. La situación destacada de su familia le creó vinculaciones distinguidas desde ]a juventud, como lo den1uestra su primera información de antecedentes aun inédita y que está datada en marzo de 1621. Era ya alfére~ de una compañía de caballos y alcalde de la llermandad de la capital, y solicitó del alcalde ordinario Mateo Leal de Ayala una ' de su origen y de los' sercomprobación conforme a derecho acerca vicios de su padre. Afirmaba que éste descendía de casa de hij odalgos de Francia y su madre del linaje portugués de los Me1o y Belmonte; que Amador Baez de Alpoin y sus hijos habían servido al rey con sus criados, armas y caballos, practicado la caridad eon los pobres y socorrido a los conventos. Presentó por testigos al presbítero Gabriel de Peralta, juez comisario de la Santa Cruzada, que tenía cuarenta y cinco años de edad en el citado de 1621 ; y a los capitanes Francisco Muñoz. de sesrnta y dos afi m; ; Ba1·tolomé López, de sesenta y cinco; P edro de Tzarra , de la misma edad; Felipe Navarro, de cincuenta y cuatro ; y Imis de NnYarrete, de treinta y cinco. Desde Juego, sus declnrar iours C'omprobaron los asertos del litigante; hicieron mención de la amistad personal que había vinculado a Baez ele Alpoin con el gohrrna<lor H ernandarias; y fray Gabriel de P eralta r ecordó que el primero había reedificado a su costa la iglesia <lel ronvento de N. R. de las l\Iercedes, que amenazaba ruina. Si el comentario histó_riro ha menester de detenerse en el abolengo noble de esta prosapia. <lrbe ser para d estacar el hecho de que, a pesar de su aristoeratismo 0 quizá gracias a él, Baez de A]poin y sus hij~S' se consag:a~·~n a 1111 fecundo trabajo p ersonal y manual. Desdenando el ¡1re,1n1c10 dif:nn<lido entre ciertos nobles que cr een ver en la labor físira un signo de plebeísmo. los vnroncs de este linaje fueron ganaderos y l abradores y forjar011 su fo:tuna con el P~fuerzo de sus n1 úsculos. D ebe acordarse mayor r elieve a esta calidad que a los títulos heredados cu yo lustr e amengu a el orio: pero como una mnnifestación del criterio dr Ja rpoca conYicnc señalar el formal IO~ L OS ~l/1( ' lEJ , EN LA .IL! STOHIA D E 1, Pl JATA distingo que estableeía Manuel Cabral en 8U declaración, al SORtener la dignidad de la labor agrícola y ganadera, propia de señores, frente al tráfico 1nercantil y al contrabando, propio de plebeyos: "Nos sustentainos asimisn10 sus hijos con nuestras labranzas y crianzas, y nosotros no he1nos sido mercaderes ni tratantes por mar, tierra ni puertos prohibidos'' ( 12 ). A su vez, el capitán Francisco Muñoz dió este testimonio: "que sien1pre vio al dho capitan Amador Baes de Alpoin que tubo casa poblada y chacara y aora de pocos años a esta parte bió que con su trabajo y sudor hizo otras dos casas junto a la plaza desta ciudad; y que saue asimisn10 que tiene una chacra donde tiene su labor que sera tres leguas desta ciudad. . . y que tiene asin1ismo en los terminas della una estancia poblada de ganados maiores y n1enores, nuebe leguas desta ciudad; y saue que siempre se sustento el dho capitan y su familia de su trabajo''. Dieciséis años más tarde, y siendo ya Manuel Cabral lugarteniente ele gobernador en Corrientes, presentó a su colega de Santa Fe, general Juan de Garay, hi,io drl fundador, un pedido de reconocimiento de su escudo nobiliario, en virtud de la certificación emanada del rey ele armas de la corona portuguesa y fechada en Lisboa el 15 de febrero de 1612. El documento fué traducido y autenticado por el escribano de Santa Fe~ Juan López de Mendoza; y consta de su texto que lVIanuel Cabral había vjsitado Lisboa el referido año y probado docu1nentahnente su filiación, estableciendo que era nieto por la línea paterna de Esteban de Alpoin, y por .Ja 1naterna de Matías Cabra! y biznieto de Nuño Lorenzo, siéndole reconocido con tales n1otivos, por el rey de armas, su derecho al uso de los blasones correspondientes. Dicha traducción los describe así: Alpoin. De azul, partido en roquete, con una cuna de plata; bordura bermeja con un t:iángulo de oro abierto. Cabral. De plata, con dos cabras de purpura. Melo. De berrne,jo, gratado (?) de oro, con seis roeles de plata; · a , Ull ave de su c1mer . color, pico y patas de oro; yebno de plata, abierto, guarnecido de oro ( 13 ) • t : t,,!\ t, l i \lj J: \! .'!' '\~~ \ii :\l.\f ' ll : 1, 1(1:! X n l'u t.'• l'I liitl11b.ro porl11 g- u(•s p:i,·c·o e•,, i11 f'rn·11 1a<·i<,11<'s, y ~i euidó l\ 11 prinH'l' 1 t' l'tni110 dt• po11c·1· l>i1·11 ,, 11 ,·Jaro :-;u <Jr igr, 11 y blasones, apli<•ósp tn111l>i1•11 11 p o1JC t· dn rc•Ji c•vp :-; 11 ~ propi os 1w'• rj . toR. En uu1yo dP l(i:Hi p1·omo rió <' 11 Corri<>111c!:-; n11<!vas a<:tu aeioll <'s ante el alt•alde J\ifnt.<'o C:011:1.11 l<•r. <l<' Nau1 a Cl'11z, con pr cse nta c·i6u d e testigos cali fi <·a<los c•1itr0 Jm, qn r :-;e hallaron c•l fnd l<' f rail<'i!,rauo Juan de Gan1arra, 11ahu·a] d el Para~uay, fU11da<l c,r y dottrinautc ele r ecluccionrs indígena:-;, cm1nisario vi<'. Pprovineial y procurador de corte dCl su orden, ele ,~uarrnta. y n11cvc años <]~ c<lad en aquella fecha; <1] 1nner.;tr(\ <le cam110 .Jnan <le A halos rl ,i Mendoza, de treinta y ocho años; el alf<'rcz C1·istóbal Gall rgo, <le treinta; Pedro <le Aguirr<', d e treinta y i:-;r is; r,l c·~pitiin Dieg-0 P ér ez, regidor en 1!5f>7 y 1599, alférez 1·eal en 1604, antiguo alralde ordinario y diputado de la <~indacl, ele Retenta y cl os años; Fc>lipe Rui Díaz, vecino encomendero, de treinta y dos años ; el capitán Gabriel de Insaurralcle, ta1nbicSn en comendero. de srsrnta años; e] presbítero Francisco de Alarcón , qnc había r.;ido enra beneficiado de la ciudad de la ConccpC"ión fl()l R 0r1nejo, de treinta y C"natro años; J erónin10 Prrez ele Tharra, v<1rino rnromrnder o, de cincuenta y ocho años; -:,.1 el prPshítcro TJnis Arias el<:' ~Iansill n. cura vicario y juez ecJesiástiro clr Corrientrs, <'uñacl0 ele lVIanuel Cabra], d e trei11ta y cuatro nños (1 4) . Mannel Cabra] se radir·6 rn 8an -Tnan el e Vrra har ia 1627. y al finalizar el año signjento <lifnndi6i--o nllí la nnrva clel asrRinato en el Caaró ele lrn" religiosos jr:-;nHns Rocp1r Gonznlrz de Rt1nta Cruz, Alonso Ro<lríg-n ez ~r ,Tnan clr l Ornüillo. Ofr0ció a<JnPl r.;ns servicios a] cabik1o pnra org-m1ir.n1· 1ma <'x ¡w,lir i6n clr rn stigo; p ero ]as fuerzas ne la C'inclacl rrnn r~<•nsns y sn alrjmnic>n t o hubiera <lcjado sin defensores nl vrrh1<larin r n n11n rr~i{m front.Priza con tribus hostiles. En C'SH h orn <•1111<lió 1n 110tiria ele r¡nr rl alzamiento h1dígena era grner:11 rn rl alto TTrng-1rn~·. lo (111(\ jndnjo a] cahilclo corrrntino a r011sprvm· r11 l:i (•incl a<l a t ocl n~ los r10 mentos 111ilitarrs ? nntoriznr {111i 1·anH'11 t-r H Cahrn] a flll<' <' f r<'tnn sr :-;n exprd ir ión ( 011 ¿Jlg·111H>s vo1 1111 t arios <'1-q1n ñolC's r in<lio~ nnligos. Ofreeif•ronsc lo:-: priJu('ros Pn 11 (nnrro <lP sir tr y as1 1 104 LOS ).1ACIEL EX LA HISTORIA DEL PLATA centlieron los segundos a Jo~<.:ientos. Con esta fuerza exigua adcntróse el vengador audaz en las tierras insurrectas; halló a los bárbaros próximos ya al pueblo de la Candelaria y resueltos a incendiarlo; dióles batalla y les venció a pesar de la desigualdad numérica recibiendo él dos heridas en la acción; e hizo duro ' castigo en los capitanej os y caciques que fuer on r econocidos culpables ele la 1nuerte de los j esuítas. Al escarmiento siguió la obra de pacificación, consiguiendo reducir nueva1nente a las indiadas a su actitud de pasividad anterior. Los ecos de esta campaña, al difundir el prestigio de l\fanuel Cabral, decidieron al gobernador don Francisco de Céspedes a dotar de autoridad legal al caudillo correntino, a cuyo efecto expidióle con fecha 27 de junio de 1629 el título de teniente de gobernador y justicia mayor de San Juan de Vera y su jurisdicción. El 4 de agosto del mismo año nombróle Céspedes capitán a guerra. No limitó Cabral sus medidas a la esfera militar, y una de sus primeras providencias al hacerse cargo del gobierno fué decretar la edificación de la iglesia parroquial de la ciudad, que fué el más bello templo, según la tradición, de toda la provincia durante largas décadas y a cuya fábrica contribuyó su iniciador con su propio peculio. La destrucción de la ciudad de la Concepción dió 1notiYo a nuevas expediciones que estuvieron a cargo de los capitanes a guerra Juan de Caravajal y P edro Dávila Enríquez; sus contingentes transitaron y se aprovisionaron en Corrientes a cuyo ' . efecto puso lVIanuel Cabral su hacienda personal a la disposición de los jefes, a quienes alojó en su casa, incorporándose a las fuerzas del últin10 con una compañía ele soldados .,v los indios de su encomienda, a cuyo frente hizo la campaña y recibió el 21 de abril ele 1634, de manos de Dávila Enríquez, el nombra1niento de maestre de campo. Fuéle confirmado poco después por el gobernador don Pedro Esteban Dávila, cuyo sucesor, don l\Iendo de la Cueva y Benavídez, extendió al caudillo correntino una excepcional certificación de servicios que está fechada en el fuerte de "fodos lo& Santos el 20 de noviembre de 1640 ( rn ) . GENERAr; BAI/I'Af:i An 1\'IACIEI, 10G La multiplicación prodjgiusa del ganac1o cimarrón había convertido las vaquerías o acciones en fuente de beneficios conside~ rables ; y al efectuarse la visita a Corrientes del oidor de la audiencia de Charcas, don Francisco ele Alfaro, para estudiar los ser-v1c10s de los indios encomendados, estimó el n1agistrado que la explotación del ganado cimarrón había 111e11ester de ser reglan1en- "'capitan de lan<;ns espa.fiolas del consejo supremo de guerra de su magestad de los astados de flandos governador cnpitn n .~ cnornl justicia mnyor enestas provincias del rrio de In pinta vrugvny tapo viasa por el Rey nro aofior" . tada y utilizada en favor de la ciudad y de ciertas fainilias que, en f avor de sus servicios a la causa pública, 111ereciesen aquel privilegio, completando así las disposiciones ya ton1adas por el cabildo. A ese efecto creó el oidor Alfaro un 1ninisterio público para el gobierno de las vaquerías y non1bró a Manuel Cabral para tlese111peñarlo ( 16 ). Debe reconocerse que la intervención del maestre de campo 110 se ejerció exclusivamente en favor de los intereses comunales sino también en beneficio propio, pues era él el prüner accionero de Corrientes y dió 1nuestras de que sabía defender su privilegio con tenaz energía. En 1638, ante el propósito evidenciado por los jesuítas de ejercer acción sobre la riqueza ganadera, aunque ésta nada tenía que ver con la difusión del Evangelio, Manuel Cabral se trasladó a Buenos Aires y siguió pleito contra aquéllos en unión de su her1nano Cristóbal. Ganó la causa, y obtuvo del general Dávila Enriquez un apoyo armado Para amparar sus derechos. Menos siinpática fué su actitud hacia los antiguos vecinos <le la Concep ción del Bcr1nejo que ::;e habían lOu LOS I\1:AC fl~~L EN LA IIISTOHJA DEL PLA'f A refugiado en Corrientes. Algunos de ellos, ap1'einiaclos por las estrecheces, faenaron reses dn1arrouas para a]in1entar a sus fa1nilias, lo que 1notivó prohibiciones ternünantes del caudillo accionero, que sólo consentía en que vaqueasen los refugiados m enesterosos a condición de beneficiarle a él con el cuarto de lo faenado. Apelaron aquéllos ante el gobernador Esteban Dávila qne, en su 1nemorable auto del 26 de agosto de 1637, sostuvo la causa de los pobres contra la autoridad feudal de Cabral de Alpoin (1 7 ). El egoísn10 puesto en la defensa de su don1inio no ha obstado al reconocimiento de sus calidades. '' La tenencia de gobernador - dice Mantilla - fué activa en sus 1nanos. En el interior estiinuló e hizo progresar la edificación urbana, los cultivos, la cría ele haciendas, las faenas de cueros del ganado cimarrón, que ya abundaba ; fundó las reducciones de Santiago Sánchez, sobre el río E1npedrado, y Santa Lucía de los Altos, sobre la desembocadura del río Santa Luda; expedicionó sobre los charrúas, que invadieron el norte del río Corriente ; rrunió nuevos pueblos en Ohoma, Guacarás e Itaty. La renta .general triplicó bajo su administración. I-Iizo varias campañas en el Chaco con el doble propósito de alejar el peligro de los asaltos de los abipones y procurar el restablecimiento de ]a Concepción del Bermejo. El gobernador Pedro E steban Dávila r ec01npensó la utilísima consagración de Cabral de Alpoin a los intereses públicos, nombrándole maestre de r ampo gen eral ele la gobernación" (.1 8 ) . Poseía Manuel Cabral una estancia en e] Rincón de Santa Catalinai donde consta que elaboraba vino gracias al cultivo de 10.000 cepas; rosechaba trigo, maíz y 1nandioca; dió impulsü a las industrias del algodón e hilanderías para la fabricación de lienzos, ponch os y r opas interiores; y afirmó de 1nodo tan categórico su señ orío f eudal , que el gobernador E steban Dávila declar aha en 1637 ' ' que en la provincia no se hace cosa contra la voluntad d e Manuel Cabral ''. A pesar de esta influencia decisiva fu é desarmado como portugués en 1643, E>ntregando su lanza de con1bate ' ' qu e 1neclía veinticinco _palmos de largo''. GEXERAL BALTA¡..;An MA<, IEL lC í Su autoridad pareció declinar desde entonces, pero la ciudad de Vera volvió a elegirle alcalde ele priiner voto en 1656. Su herinano, el general An1ador Baez de Alpoin, ejerció dos veces el gobierno ( 10 ) . IIay indicios de que lHauuel Cabra! pasó sus últimos años en Buenos Aires. Viudo de doña Inés .Arias de l\íansilla contrajo su segundo matrünonio con doña J uc1na Del. gado, teniendo de a111bas esposas a los siguientes hijos : l . Cristóbal Cabra!, que casó con doña 1\1:aría de Arana ; 2. Agueda Cabra!, que dió su 1nano a Pedro Gómez de Aguiar, hijo del general; 3. María Cabral de Melo, que contrajo enlace con e1 capitán Juan José de Villan ueva ; 4. J eróniina de E spinosa, qnc easó con el sargento n1ayor Juan de Basualdo; 5. Juana Cabra} de l\felo, que ton1ó estado con el general Francisco ·villanueva; 6. Margarita Cabra! de 1\1:elo, 1nujer del tesorero Baltasar Flores; 7. Gregoria Cabra! de Melo, tercera o cuarta esposa del general lviaciel ; 8. Blas de Melo y Alpoin. Pleito con doña Maria CabraJ de Melo. - E n 169~ d ofia María Ca.b ral de Melo y su marido ol sargento mayor Juan José de Villa nue-v:i Yendieron al g eneral Maciel una casa que pertence.ía n. los bienes dot.alr s do aquélla y cuyo precio fué eatipulado en ochocirntas e1rnn'nta enbC'zns de ganado vacuno; y cuatro años después la. n ombrada señora. se presentó a la j usticia ordinaria de Corrientes solicitando la anulaci6n de la escritura , en razón, decía, de haber realizado la operación bnjo una. violenta compulsión moral que había ejercido sobre olla su marido. A pesar do los argumen t os aducidos por el comprador de la finca <'ll f:wor de la legitimidad de la escritura, el alcalde de primor Yoto, general Ga.bri<'l do T oledo, hizo lugar al pedido de nulidad; pero Macicl apeló dC' 1H senten cia ante el gobernador de Buenos Aires de8ignando a.poderado al efecto a su amigo el capit:ín Hcrn:mdo do Rivera l\fondragón. El gobernador d on Ag ustín de Robles rC'vocó la sentencia, anterior y dió •:il gC"neral la posesión definitiva de la. finca. Consta en el expediente que doíia ~1:nía Cabral de l\folo no sabía fir ma r ( 20) . Pleito con Luciano de Acosta. - Hadendo lugar a mm p etición f ormulada por Maciel, el gobernad or d on Ag ust ;n do Robles a cordó a aquél una merced de tierras en Lagunas Saladas, ' ' que distan de aquella dha ciuclnd dp las Corrientes veynte y cinco leguas y caen Y cstan ~itas Jia eia In parto del poniente hasta la Y~la que llaman de Juan Dias co:xiendo p or frente el 108 LOS l\L\Cl.EL E);" LA HISTORIA DEIJ PLATA Río do Santa Lucia y Rio de Ambrosio" (21 ). El auto de concesión del goberna dor Robles está fechado el 1~ do agosto de 1699 ; per o, seguidamente al deceso de Maciel, acaecido dos años después, reclamó la posesión de la8 mismas tienas el capitán Luciano de Acosta, que sostuvo estar poblado en Lagunas Saladas desde hacía largo tiempo y en uso de un derecho f undado en su calidad de descendien te de los conquistadores de la comarca. Originoso un largo pleito en el cual intervinieron de una parte el citado Acosta i de la otra la viuda e hijos del general, representados por el primogénito sargento mayor Baltmmr Macicl. La querella, en sí misma, carece de inter és histórico; pero los escritos del litigante Acosta contienen algunas menciones que el cronista honesto no debe pasar en silencio, porque afirman la invoracidad de varios puntos contenidos en la información de 1679. Era ésta altamente elogiosa p ara los Maciel y los linajes aliados; se hace menest er oír la opinión adverea para formar un juicio desinteresado. Según Acosta y los t estigos que presentó, el título de capitán que so atribuía al primer Baltasar Maciel era imaginario. Tampoco ora exacta la aseveración según la cual aquél había venido '' de los reynos de España '', dado que ora natural de Portugal. Respondióse a esto que el fundador de la familia so había 1·adica do en Corrientes cuando España y Portugal f or · maba.n una monarquía dual bajo el cetro do los reyes españoles. A su vez, el impugnador recordó que tanto Baltasar Maciel, p rimero del nombre, corno su ]1ermano Andrés, habían sido aprehendidos y desarmados como portu· guescs en 1643; quo el general no mencionaba a su abuelo paterno en su genealogía ; y negaba el hecho de que hubiesen t omado parte en guerra a lg una, admitiendo sólo que el segundo habfa asistido '' a una correduúa contra los indios del P araná ' '. E l lenguaje de Acosta. era agresivo, lo quo quita fuerza a sus argumentos ; y si bien dos testigos ratificaron aquellas expresiones, otros se limitaron a decir '' que nada sabían'' .. . La conclusión a que se llega anto estas versiones contradictorias e ig ual• mente documentadas, es que las informaciones de nobleza y de servicios, basadas en declaraciones de testigos complacientes, carecen de valor para el historia.dor avisado si no se las somete a una verificación previa y severa compulsa, que permitan distinguir la dosis de verdad a. t ravés del interés y l n vanidad que han inspirado a los hombre6 en todas las épocas. La ilúormaci ón de 1679. - Dos expedientes obrantes en el Archivo general de la Nación contienen traslados de la información de linaje y ser· vicios producida por Baltasar Maciel en 1079 (22) . Constan en ella las declaraciones de seis testigos calificados, vecinos de arraigo de San Juan do Vera y todos ellos an tiguos mu.gistrados do la ciudad: el sargento mayor Francisco de Agüero, de setenta y cuatro a,iios de edad en la f echa citada., quion había sido tesorero de la Sauta. Cruznda en 1636, alcalde de segundo 111:1 ,;1•"1 :,: \!. 1: \J.':' \=' \I: \f.\l '{EL 1l,• ~11h( rnnt.!or dt: lli·W a 1t·- . ) <I''' <l•• wri; 1.."l.'~~-~"'t'r :, l0c: ~ ::tl'it'l lh :-dt' !.a ·ía e· i1h'lh nta afro:--: rl {'npt~.n Francic;{'o Dd f:S.~1...". d~ st'ttni:t y d o~ af <'~. : a n :,:idor r n rn:,1i. Juan de :--,1lma-., ti c setc-nt:1 : \'.'.!lltc . t?l ra: it.rn h ,tbnd Lt',pez i<' .\rn !a. natural <l • ! <..e nrep<·1,,n del Fe:-!l!c>Jl' : Banolom{· Polo, d t• otbenta añM d(• eda d: y J erúnimo :\fartínez, ce "-.i :.cnta y seis, eu:·:i derla raeiún ~¿ transeril;e te:t~oalruent~ por ~u inducsb:c> r iqueza en la :ielaraeiún d e aspec tos hist ór icos de la. Concepción del Bc:-::uejo y de Sa n J uan de YHn . Consta en el ap;.ndiee bajo el número 9. ,-.-:,-~.::tifo ~1,;ui·mt• y · t11 ;•1•11t,, Sucesión del general Maciel. - Como queda dicho, doña lliría de Lara parece haber sido la primera hija del gener al 1Iae:ie:: habida en doña )laría de Lara y .A.lderete. E n doña .A.na de Sequeira tu,o a Baltasar )Iaciel. tereer o del nombre. E n los documentos de la época se titula a este , ástago sargento mayor y ,ét ino f eud atario de Corrientes; fué apoderado de su fami lia e!!. el pleito sostenido por ésta con Lueiano d e .A.costa sobr~ po~ión de las tierras de Lagunas Saladas ; ,;-i,ía ai'u1 en la ciudad de , era en tr e 1703 y 1707 y parece haberse radicado posteriormente en el Paraguay. O~r o hijo, habido en d oña Gregoria Cabral de )lelo. fu~ d n:.a~t!'e de campo )Ianuel )Ial·iel, a q uien ~e r efiere tll t>apítulo s_iguiente. rna ruja, d oña .z\ g-u Pda )I,it'i~l y Cubral J~ :,\felo. ~•l)tltrajo rr:..atr:mc,nio con e] ::;arg-r nto nrn}~l1r J osl; )f:ir qntlz :\hHttiel, que hi r;rJndu jo a San ta !4"'e. d mHlt~ t uYo j u nh) u su m~1ritfo una dt.\~taeada prl')i,.:ión sociaJ. Su hermana. dofin )lnriu )[nt\it\l. tnmtl ~~tadn '-•l) ll P,?dl'l) I~ rJÍz ,fo B,,laíío~, ,·npit,,n dt' In" milil•i:1~ t't\rl"\'ntinn~. lJr1ña .Ana )I ,wi,·1. 1tt tt 1 JHll't'l't' hnlwr :-:ido la ttltima hij a dt'l c.,,-n,·r~ J y <lofiu <: rPi,:ori1t. d 1t') "u 111:llh' a l UHh' -...( rt.' lh' \'~lm p 1) ,J ua n (r:•.Íf-:l<1Tfl'J <le• l> izidn .,. 1/.u11t lltli,,. 11ntu1·n1 ,h, \ ·izl ll_\"H. :-,1britHl ,J,.J !!' t»·rnador dt• T 111·111nHI\ dnn .1ua n dt• l:1m ud h\, l'nbnllt't\) dt' f-fi1t1 •i:1f,!1,, ,,,,11 'l lliPII \ l llO al H 111 d( t., Pb tn l ll l tmti. ]),,ún Ana 1 .lf ;,1•,1•J '" dl' t' tll' r l, tlt' 17~:i. ~it' nd,, 11 Suu ,J 11 H u d,· \ · 1 1'.1 1 l ~ ':1:cí N•fd!•r1urju ,~/\ 1 1 1 t•~"'" .. 1 1 110 LOB :\IAf'iEL F.X LA HISTORIA bEL PLA'rA NOTAS DEL CAPITT~Lü YI B et'ista dl'l arcl1ii:o de la vrorincia de Corrien tes, tomo I, entrega 5~ Misma publicación, pág. -136. (3) :Misma publicación, págs. 4-17 / -19. ( 4) Documentos sobre los ~aciel en poder de la familia de Silva Garretón, Buenos Aires. (5) R evista del archivo de la ptúl:incia d e Corrientes. ( G) Misma publicación. (7) Otro ejemr lo típico de C'er ingc>nuo criterio ll'gnlista ha sido rerc• lado }JOr el doctor don ATILIO C. BRIG:NOLE, que en su importante contribueiúu a los estudios coloniales titula<l.a, La justicfa en Colunia, transcribe de nn expediente criminal incoado c,m motivo del suicidio de un inglés en 1815, la siguiente mención textual : "Declaración del cadái:er. En uha Plaza, d ía mes y año. Yo el )Jguacil ).foyor a presencia ele los testigos pegando al Cadabcr tre1 golpes en el pecho preguntandole eomo se llamaba, nada resµondi6 y Dn. Tomas Bridgman dixo se lla maba Dn. Diego ?\liclemon; preguntandole que quien le avía muerto, tampoco res pondió y los concurrentes dijeron qe. segun su postura y la herida el mismo se abia muerto, todo l o qe. cer t 1'f'1co .. . ' ' (8) níA~TEL V. FIG UER.ERO, H istoriografía de Corrie11tcs, págs. 233/ 36. (9) Rev·ísta dl'l arohi1.:o ele la. p rovinci,a¡ de Corr1n1t cs tomo I entrcoa 5~ . ' o ( 10) FIGUEREno, obra citada, púg. ~5G. (11) MAN'l 'ILLA, Crónica históri,c a de la prol'incia d e Corrientes, pág. 58. (12) Documentos sobre los Maciel en poder de la familia de Silva Garretón, Buenos Aire3. ( 13) Estas descr ipciones ofrecen vari:rntC's con las l'L' Yeladas por los heraldistas portugueses. (1-1) Documentos sobre los ).laeicl en pode r d 0 la familia de Siha Garl'etón, Buenos Aires. ( 1;;) :Misma fuente documentnl. ( lG ) FlG UERERO, obra citada, púg. ~:17. ( 17) i\Iisma obra, púg. 2-!5. MANTIT,LA, obra citada. ( 18) . . (19) Desde el 29 ele diciembre da H,:36 hn-stn el mismo mes del año (1) (2) s1gme.nte ; y por segun?~ vez desde el 3 <le octubre de 164 7 hasta ener o de lü·l8 en que ocurno su muerte-. (20 ) Archivo genernl de la Nación, Buenos Aires ,• Tribunale , s, 1egQ e. 1, exp. 8 . (21) ::\fisma fu ente <1ocumC'n tal. "f'1s mo are111Yo, · ''E,• nconu· en d as vacantes'' leoQ E ] ,,,,) 1, ( -' º '· , exp. 7 • (t?8) Apéndice, documento NQ 13. CAPITULO SEPTIMO MAESTRE DE CAMPO MANUEL MACIEL Alcalde y procurador general de Santa Fe 1690 -1764 E L maestre de campo Manuel Maciel vió la luz en Corrientes, como su p adre, y siguió como éste la carrera (1e las armas. Al igual que la mayoría de los hombres de su tiempo la profesión militar no obstó a que interviniera también en los asuntos ciYiles, políticos y religiosos. Su actuación pública f ué, pues, intensiYa ; se prolongó por espacio de medio siglo y abarcó dos jurisdicciones : la de su ciudad natal y la de Santa Fe, donde se radicó definitivamente con motivo de haber consti.tuído allí su hogar. Su personalidad y sus servicios. - E xisten dos series de documentos en poder de sus descendientes, que arrojan luz sobre su personalidad y sus intervenciones públicas. La primera de aquéllas es la información levantada en Corrientes, en dicicn1bre de 1754, por el gener al Pedro Bautista de Casajús, apoderado de Maciel a dicho efecto, y versa sobre los antecedentes de fmni1ia y los servicios del personaje a su ciudad n atal. Y la segunda es otra información producida en 1756 ante la justicia ordinaria d e Santa Fe por el maestre de cimnpo y se r efier e al linaj e de su mujer, doña Rosa de Lacoizqueta ; a sus propias intervenciones 112 1.()8 :\[At' IETi E:--: r,.\ 1n:=:.'l'OHTA J)l-:f, PLA'f.\ e ini(•intivns en a~u11tos ele intN·rs púl>lit•o, y a la <•arrrrn de :-;u hijo el doctor ,Jnan Baltrn:mr 1\1:wirl. -va111 os n eonerrtar r11 c1o:-; páginas las notieias l'on1 cnü lns en la prosa r rtlnnclantc y difuRa de los testhnonios. . En virtud del po<ler recibido, el general Casajús llevó a declarar ante el alcalde de San J uun de V era, Alonso de IIidalgo, a seis testigos calificados: Jos sargentos niayores Juan Eusebio de Chávez, que en el precitado afio de 1754 había cun1pli<lo setenta y siete de edad; 'l'on1ás de VillanneYa, de sese nta; José de Frutos, de más de cincnc11 ta ; ,J nan de V crgara ; León Pérez, protector de loi:; naturaleH; y d rnaest re dP eainpo Ignacio de Soto, mayor d e cincuenta afios. 'fomús de Villauueva d ejó ta1nbién constancia del testimonio de ~n ntadr(\, dofia I sabel l\{or eira, que tenía 1nás de un siglo de edad. Al tenor d el interrogatorio, las deposicionc8 C8tal>le(•ierou qne .M-ai1ul'l Maciel era hijo del general Ilaltasar 1\1:aciel y de doíia Gregaria Cabra} <le ~lelo; nieto paterno del eapitán Baltusar lVlaciel y d e doña Ana de la Cueva; nieto n1a1 cruo del general 1\1annel Cabral de Alpoin y de dofia J uaua l)elgado ; que el citado (•apitún Haltasar Maciel, prin1cro del n ombre, era natural de P ortugal y se había avecindado en Corrientes cuando su país de origen se hal Jaba regido por el cetro de los 1no11arcas españoles; Y añadieron acerca d e aquellos antepasados las n otieias que han qucrlado consignadas en el capítulo VT de rstc libro. Arrr cin ele\ la (•n1·1·r 1·n el<' Mau ur1 1rat>iel, la información de- 113 ).tAI:.:::,Tl{t DE l'A~tl'O M.\~l1EL i\t.\c..'IEL clal'a que había aquél ingresado desd e su primera juyentu<l eu la 1nilicia regular de 8an Juan de V era, en cuyas filas ascendió de grado en g rado hasta llegar al de capitán de caballos. P ormó también parte de los cabildos y r ecibió en 1714 la vara <le alcalde or<linario que ejer ció dignamente a p esar de su juventud. Nombrado notario del San to Oficio '' usó en su persona la venera y las armas del Santo rrribunal, cuyo empleo no se da sino a persona executoriada y de filiación notoria". En 1726 pasó a Santa F e donde se aYecindó y fundó su hogar en unión de doña Rosa de Lacoizqueta, hija del maestre de campo Juan de Lacoizqueta y de doña María Martínez del Monje (1 ) . La segunda información se hizo, con10 queda dicho, treinta años después de haberse radicado l\íaciel en 8anta F e, llevándose a cabo las actuaciones ante el alcalde de segundo voto L or enzo José de César y autenticándose los testimonios por el escribano :i\ilateo Fuentes del Arco. Figuran en el expediente, como declarantes, Marcos de rroledo y Pimentel, alcalde proYincial, de cuarenta y cuatro años de edad en el citado de 175G; Juan de Cevallos, regidor decano del ayuntainiento, de más de sesenta años; los maestres de campo José Márquez Montiel y Juan de Frutos este último de setenta y cinco afíos, " por euia razon ' eze del sentido de la vista corporal qnc le impide el quasi car poder firmar" ; y el capitán Peclro Carballo, lle más de Retenta años. Constan también las certificaciones emanadas de los alcaldes de la ciudad, P edro de NarYaja y Lor enzo José de César . Substancialmente quedó establecido que a raíz de su aYecindamiento y su 1natrimonio continuó 1\1:aciel sns sfrYicios públicos y desempeñó diversas magistraturas. En 1727 reemplazó en la alcaldía <le la ciudad al titular a usente; dos años después fué electo alcalde de segundo voto ; en 1734 Y 1741, alcalde de primer voto acu1nulando a estas fun cion es, en el último año, las ele juez de r~ntas; en 1737 fné procurndor g·enera l de la ciudad y defen sor de menores; y en 17--17 11ncvament(l alralde de prinwr voto. Su elevación al ma(lstrazg-o de ra mpo c1nta de 17-1-1. Jiallfüulosc la primit iYa iglrsia matriz rn rstado ruinoso, 0 ' lU 1,0S :.\lAClEL E~ LA lllS'l'ORIA DEL t>LA'fA to1nó la iniciatiYa de edificar una nueYa desde los eünientos, y aceptada su proposición ejecutóse la obra con un estilo arquitectónico superior al del t en1plo precedente, con tres naves, torre y pórtico con sillería ele piedra en sus partes esenciales, cuyo material fué 1nenester conducir des<le cinco leguas de la ciudad, a través del Paraná. Duró la fábrica de la iglesia cuatro años e invirtió lviaciel en ella una buena parte de su fortuna, además ele su consagración per sonal en la dirección y contralor de los trabajos. Largos años después, en carta que escribió el obispo de Buenos Aires al conde <le Aranda sobre el estado de las iglesias al expulsar se a los jesuítas, y que lleva la fecha del I de abril de 1768, se recuerda la donación y generosidad de JVIanuel l\iaciel, "que invirtió gran parte de su ca11dal en la edificación de la iglesia matriz ele Santa Fe". Su fe religiosa era ferYiente, y no111brado patrono del convento de Santo Do1ningo de Guzmán, ayudó también generosa• 1nente a su congr egación ; construyó un edificio que substituyó las 1níseras celdas <le barro y paja en qne se albergaban los frai• les; Y dotó al t e1nplo de un bello retablo y piezas de plata labrada destinadas al culto. Por clisposición testanwntaria de doña Celedonia de Cepeda Y Guzmán fué tutor ele los ldjos menores de esta dan1a, vecina de Santa F e Y viuda de Santiago Rniz Gallo ( '."!). En 1750 hizo un viaje a Santiago de Chile para asistir al 1natriinonio de su l\ij? J oaquí,n. _Dehe presu111irse que Yivía :va apartado de las art1V1<lalle~ p~bhcf¾s pnes sólo vuelve a _n1e11c10nars:~e pocos años iníts ~,,[}¿_;? tai de en ocas1on de las informacioncs que quccla_u referidas. .........W,,1, Manuel 1\íac1el y su niuj er se otorgaron recíprocam ente poder para te!:itar el 29 dr agosto ele 1763 ai_ü e el rsrribano Greg-orio Antonio clr Segad0 ; cle~ignaron alba- /47 ZJ~ 1¿#:' 1IAESTRE D:C C'.\ l\!PO )fA N L' EL :\IA(' IEL 115 ceas a sus hij os Juan Baltasar y Joaquín J\'lac:iel ; y habiendo fallecido prin1cr an1ente el 1naestre de ca1npo, su viuda cumpli<J la estipulación dictanclo en 11on1bre de aquél sus disposiciones ante el 1ni8n10 notario el 16 de 1uarzo de 1765 ( 3 ) . No <lcbe confundirse este t estan1ento con el que ordenó doña Rosa <le Lacoizquet a diez años más tarde, por su propia cuenta. i\lianuel Tuiaciel 1nurió en Santa Fe el 20 de octubre de 1764, al mediodía, según detalla la partida correspondiente ( 4 ) , qnc consigna ta1nbién los imponentes funerales que le hizo la iglesia. Otro documento de la época infor1na "que fué su cuerpo enterrado en la iglesia del convento de los reverendos padres predicadores, en la sepultura que para sí y sus descendientes tenía en el 1nismo presbiterio, al lado izquierdo y más inmediato al altar mayor, con 1nisa de cuerpo presente, habiendo sido amortajado con el hábito de Santo Domingo y conducido hasta la puerta de la iglesia con la cruz de la parroquia y clero de esta ciudad vestido de sobrepellices''. Maestre de campo Juan de Lacoizqueta. - La mujer do .Mnnu C'l Maciel era 11ija de Juan de Lncoizqueta, hijodalgo n:wnrro natu ral ck L egasa, e n el valle de Vértiz Ara na, cuya rasa solnr ndoptó por blasón lns :armas de aquel valle cuando gozal.Ht del fu ero de hidalguía : a zul, una siren a sobre ondas de mar, llevando un espejo en la mano derecha y uu J)cin e de oro en la i z quierda, todo d e su color n ntural (ó). Militar desde su adolescencia, Juan de Lacoizqueta fué enviado de la metrópoli al Perú, de donde vino a Buenos Airrs hacia l os níios de 1691, siendo ya sargento mayor. Tres aiios después so le lialla avecindado en Santa F e y en el ejercicio d e un a. magistratura municipal; fué electo procurador general d e la ciudad en 1695, siendo r eelecto en lüDü, 1701 y 1708 ; alcalde en 1711 y 1712 ; y en 5 de agosto de este último afio se l<' nombró t eniente de gobernador y justicia mayor. Desempeñó las mismas funciones en 1716, tor:tndole actuar C'n uu lustro difícil durante el runl los indios mocov:íes, aguilotcs y abipones renovaron sus agresividades, aumentaron sus depreda• cioncs y llegaron n cometer muertes de españoles hnstn en los <linteles ele la ciudad. La f a lta d e armamento y municiones, cuyos envíos r etaceaba el gob ernador de Buenos Aires, colocaron a lns autor i<lades en una situación do crisis; muchas familias emigraron con sus bienes y se extendió una triste miseria e n los pngos seminbnn<lonados. .116 LOS ~!AC'IEL E~ LA 111s1~orUA DEL PLA'rA El maestrazgo de campo uc J ua n de Lacoizquct-:1 data de 1704, en que le fué acordado por el gobernador don Alonso de Valdés al nombrarle comandante de las milicias santafecinas que cooperaron al desalojo de los portugueses de Colonia del Sacr amento. Consta que contribuyó con su peculio personal al equipo y a rmamento de aquellas fuerzas, a cuy°: frente permaneció durante el asedio de la ciudadela lusit ana y hasta la fecha de su toma. Poseedor de ganados y extensas tierras, Lacoizqueta tuvo también su casa-quinta en la ciudad, a la usanza colonial ; situada en el punto que puede verse en el diseño de la página 13í, ocupó primitivamente toda la manzana y fué uno de los centros de la sociabilidad santafecina durante todo el siglo XVIII (6). Contrajo matrimonio con doña 1íaría 1Iartínez del Monje, hija de Francisco Mart1nez del Monje, natural de Santo Domingo de la Calzada, en Logroño, y de doña Isabel de Pessoa y Figueroa. Tuvo el maestre de campo un sucesor ilu6tre en su hijo Juan José de L acoizqueta, que llevó a cabo sus estudios en Europa.; fué apoderado de su ciudad natal, y en virtud de sus informes y gestiones proveyó don Felipe V su real cédula de 1743 que devolvió a Santa. Fe las ventajas de su puerto. H ermanas suyas fueron doña Rosa de Lacoizqueta, la citada esposa. del maestre de campo Manuel Maciel ; doña María Y entura de Lacoizqueta, que dió su mano a Sebastián Ruiz de Arellano, oriundo de Tudela ; cloña iliencia de Lacoizqueta, que tomó estado con el capitún Ambrosio de Zuviría ; y doña María Ignacfa de Lacoizqueta, que casó con Manuel Fcrnández de Terán, siendo los padres de doña María J oscfa de Tcrán, esposa de ::\[anucl Ignaeio Diez de Andino. La sucesión. - n'lanuel Madel y doña Hosa de Lacoizqueta celebraron su unión 1natrin1onial en Santa Fe el 27 ele julio de 1726,. naciendo de ese tálan10 los siguientes hijos: . l. Juan Baltasar Maciel, doctor en a1nbos derechos, ª quien se refiere el capítulo siguiente. 2 · Joaquín Maciel, 1naestre de ca1npo O'eneral teniente de gobernador de Santa Fe, cuya síntesis bio;ráfica 'se establece en el capítulo IX. º ' 3 . · Martín José Maciel, que fu é bautizado el 18 de 110• v1embre de 1730. 4. ~,rancisco Mac1 · ··e1, e1 ¿º4 d e septien1bre de 1732 . ~- Juana 1:Iaciel 1 ·,. • de . , que c110 su 1nano a Bartolomé Diez An d1no, sobr e cuyo 1· · ., inaJe se e1a una noticia a continuac1on. )L\ E~TRE l>E C.\)1f'O )l.\~l'EL .:\L\CIEL 117 6. Don1ingo iraciel, alcalde de su ciudad nata], a quien se r efiere el capítulo X . 7. l\Iaría Isabel l\Iaciel, que Yió la luz en 1739 y contrajo enlace con l\Ielchor de E chagüe y Andía, de antecedencia ilustre, teniente de gobernador de Santa F e, siendo los padres d e Jua n Francisco de E chagüe y Andía, que casó con su prhna Rosa l\IacieJ. Doña María Isabel Maciel <lió poder de testamento a su marido el 12 de febrero de 1760 ante Gregorio Antonio de Segade ; pero sobrevivió a la enfermedad que la aquejaba y terminó sus días en Buenos Aires, a los ochenta años de edad, siendo ya viuda, el 24 de septiembre de 1819, habiendo testado ante Mariano de E chavuru ; fué sepultada en la iglesia de Santo Domingo ( 7 ). 8. Juan ,José 1\1:aciel, que recibió el bautis1no el 15 de junio de 1742. 9. Do1ninga Maciel, bautizada el 5 de agosto de 1743; celebró nupcias con José Fernández de Valdivieso, natural de Chile, de quien tuvo la descendencia histórica señalada en el capítulo IX. 10. l\Iatías l\Iaciel, a quien se 1nenciona como interYiniendo en asuntos de su familia en documentos de 1773. En el año de 1765 sólo vivían seis de estos herinauos : Juan Baltasar, Joaquín, Domingo, 1\1:aría Isabel, Do1ninga y 1\íatías. Los Diez de Andino. - La casa solariega de los Diez de Andino ha sobrevivido en buena parte a las transformaciones de la urbe santafecina. Mues1ra aún sus patios y huertos interiores poblados de viejos á,rboles, sus muros anchos de una vara y sus tejas cubiertas del musgo de dos siglos. Las ventanas conservan sus rejas primitiYas ~· los portales claveteados la herrumbre d e su edad. Es toda ella una reliquia que :ispira a ser consagrada monumento. Se d iría que en la penumbra de las habitaciones <'Stá refugiado el espíritu de una época, y que la mudez de los corredores coloniales, cuyos aleros ee a.poyan en recios pilares de algarrobo, trasuntan la nostalgia de las antiguas t ertulias f amiliares. Llrno está el caserón do t estigos calJa<los y huellas de las generaciones que vivieron allí su existencia simplr, idílica y piadosa. El fundador de nqucJJa podr ros:i f:uni lin cr iolla fué don Juan J>iez • 118 LOS :'IIACIEL EX LA H ISTORL\ DFL PL.\TA de _.\ndi no, ilijodalgo de alcu rn ia andal uza que g uerreó en I'or~ugal y Pª:/J a gobernar el P a ra guay por les años de 166:J. L oza no CYOC 1 .:,us rasgos c1~ desinterés y elevados m éritos (8) . Tu-ro el procón sul en una esposa guaran1 a d on )Iiguel Diez de _.\nd ino, que nació en .\sunción y fu ~_ educado p or los frailes; se r a dicó en sus mocedades en Santa Fe ; cons tituyó- allí su f or t una formó su hoga r en unión legitima de doña, Petron:i Alvarez de la Vega; ~irrió a la ciudad en el ejercicio de cargos electiYas; alcanzó el título de maestre de campo; y otorgó t est amento r errado el 30 de junio de 1718 ( 9 ) . Tuvo de su matrimonio cin co hijos: Ana, Sofia , D iego, Bartolomé y Agustina. El cuart-0 de éstos, Bartolomé Diez <le _\.11dino, nombrado por Cen"era en r azón de sus servicios públicos ( 10) , contrajo enlace con la cit ada doña J uana Maciel, naciendo de ese t t..Ja:no un hijo único, ~Ianuel Ignacio Diez de Andino, que casó a su vez con doñ a )la ría Josefa de Terán. Don Bartolomé Diez de Andino y su mujer se otor garon r ecíprocamente poder para t estar por escritura fechada el 22 de septiembr e de 1757. ::llurió primer amente el marido, y luego doña J uana. el 5 de julio de 1775, habiendo a cordado antes a su hijo ~fanuel Ignacio Ja facultad de dictar en su lugar las disposiciones testamentarias. En virtud de este mandato las manifestó aquél ante el escribano .\.mbrosio Ignacio de Comin os por instrumento que 11eva la data del 19 de en ero de 1776 (11 ) . Fuer on hijos de ::.\Ianuel Ignacio Diez de Andino v doña ~farin Josef a de Terán : 1. Josefa Ram ona, que casó con José Pujol; ~- Bartolomé Romualdo, que falleció a los once a ños de edad ; 3. ~Iaría )lcr cedes, que permaneció soltera ; 4. José Cla udio, también sol tero; 5. Sinforosa Antonia, que dió su mano a José Zudaur ; 6. ~Ianuela Delfina, esposa de Ycntura Coll; 7. Juan ~fanuel _Pascual, a quien se r efiere el parágr afo siguiente ; 8. Juan José, que nació en 1787, estudió en la universidad d e Córdoba, fué alcal<le de bar_rio en S_a nta F e en 1805, procurador s ustituto en 181~, regidor en 1815, a lfer ez nacional y fiel ejecutor a l año siguient e, diputado a, la junta de re~res.e a tantes _en 1820 Y alcalde de segundo voto en 1822; casó con doña Tra nsito de Iriondo Y murió asesinado viniend o d e sus minas de Bolivia, el - 18"ano ._ ' · D. F ran cisco RafaeJ, soltero ;' 10. ::\Ian ucla Angcla, también célibe. J uan )fanuel P as cual Diez. de Andino nació en Santa F e el 16 de mayo de 1i 82 y estudió preparatorios en el r eal colegio de San Carlos de Buenos Aires· • . ' d on d e , ' a los veinte años d e e a d paso, a la umvers1dad de Córdoba, a gano t_res cur sos de a rtes y dos de t eología , y de allí fué cn,·iado a Santiago d e Chile. ' en hist onca ' · · · ., unin~rs1dad obtu,·o el doctorado en cánones Y . cuva 1:!es, SJguic n <lo tres a ños de JJr iicti ra en el c.;;tudio del licenciado Juan "\-1cen te de 1\ guirr e · E xpi·a·1oselc ' tí tulo de a bocrado en Santiago el 19 de octubre ele 1812 · fu' · b . 6 . ' e :rmem ro de la Real A ca demia. d e Leyes, y regres a su crnclad nutnl dcs1JuC-s de I· .,, ·1 dI1;-;os a1J os de uusen cia, p ar:.i ¡)Oncr Sll 1 us· i-, ' ' ::\f .\ESTRE DE ( ' A7'Tl'O ~T.\ ):U EI1 : \í .\(' U:L 11 !) tra.ción y su cn·1smo ~11 sern t•10 de los in tereses públi cos. Se constituyó r n uno de los dirigentes del movimiento p oI;tico que se declaró en f ::w or d e In autonomía p rovincial, siendo electo dip utado nl Congreso de Oriente p or el ayuntamiento de Santa Fe, reunido bajo la. presidencia del gobernador Frau• cisco Antonio do Canclioti, el 1-1 de junio de 1815; y recibió las instruccione~ que constituyen uno de los documentos f undamentales de la historia de aquel movimiento y que se conserva, aún inédito, en poder de uno de los linajes tradicionales de la ciudad (12) . Reunido el congreso en el arroyo de la. China el 29 del citado mes, supo por Artigas, '' el protector de l os pueblos libres", según el título discernido por las provincias de Santa Fe, Corrientes, Córdoba y Eí1trc Ríos, que eran necesarias negociaciones previas con Buenos Aires, a cuyo efecto se trasladaron a dicha ciudad cuatro diputados, y entre éstos el doctor Pascual Diez d e Andino, sin que sus r epresent aciones al director supremo Alvarez. Thomas tuviesen resultados para la causa de la autonomía ni <le la liga f ederal organizada por Artigas. Vuelto a Santa Fe y a las actividades privadas, intentó establecer una corriente comer cial entre su provincia y el Paraguay, a cuyo efecto pasó a Asunción conduciendo un buque cargado de mercaderías, siendo encarcelado al d esembarcar, a l iniciarse el año 1820, por orden de Francia. Terminó sus días en las prisiones de la dictadura paraguaya ( 13). Los Echaglte y Andia. - Las dos alianzas matrimoniales celebradas entre los linajes de Maciel y de Echagüo y Andía. nos llcYan n esta blcccr una noticia sintética sobre esta última poderosa familia santafr<'ina. I. Fué fundada por Francisco Pascual de Echagüo y Andín, rapit ún de infantería cuyo nombre se menciona por primera vez en la historia de1 Plata, aJ convocarse por el gobcrnndor don Jo-só de Garro, el 28 de julio de 1680, en la casa episcopál de Buenos Aires, a los jefes militares, en bildantes y vecinos caracterizados de ln capital, para examinar la situación creada en San Gabriel por la ocupación portuguesa y dcridir el ataque a l a ciuda<lela. He reseñado en otra obra las conclusiones de aquella histórica junta de guerra (14), que detcrmi1u:11·on el asalto del 7 d e agosto u la fuu• dación lusitana; y consta en el acta de ln sesión que el capitán Echagüe y Andía emitió un parecer análogo al d e los qnc aconsr j:uon la acción militar inmediata. Era hijo de Juan clr Erhagüe y An<lía y d e Catalina de Lastrrra, y proced5a de fa casa navarra .Y solnrirga <le su familia, sita rn Artajon :1, construida de piedra, 011 cuyo frontis cstnhan esculpidas las armas del linaje : en campo de gules, un grifo de oro. Posteriormrnte a los sucesos de 1680 pasó el capitún Echagi.ie a Santa fe, dond~ ae 1~ encuentnt cuatr<? aíios mú,13 tarde en el desempeño d e la i :. ') Le) , :: \ T=L L~ !....\ H ::"1 1);-lL\ [JEL í': ..\T..-\ · c: ,.¿:nar.a. -· · - ::--: ·ir•,...:: •·6 1•ro·ural<Jr d.:• e: n -lt'.- ,-•J . . . . . •• =· -- la ciudad •v d ef ensor a l t::i.·d .a de m~nc,res: y por a:.:to de 15 dt:: n o.iemb re de 16~11 el gobernado~ A gustín d': R i:. ble le designó Fniente de g obernador:. c~rgo que :Jercw hasta su muerte. a caecida en f€:bre:-o d-: l f:l~ ..•. al cumplir cincuen ta anos de edad. Batía contraído matr imonio a! avecin-:Jarse en Santa F e con doña >la ria )I árqnez ~ ontiel, descendiet · e de conquistadores y pobladores, en quien t u \·o. en tre otrús hijos, a Francisco J ancr de E rhagüe y An d.ia. II. Empezó este ilustre santafecino su carrera pública en 1723 al ser elect o a leal de de segundo voto: tres años desp ués su ciudad n atal le ennó a Buenos A.ires como diputado, en unión de Pedro de Zabala, ante e! gobernador del Río de la Plata; a su regreso proyectó la creación de f uer tes en la Bajada del Paraná para a~egurar la de fensa d e la ciudad contra las temibl~ incursiones de los payagua es ; y en 17~9 penetró hasta las en t r añas del Chaco, al frente de las tropas de Santa Fe y Corrientes, logrando batir a los bár baros en su p ropia guarida. X ombrado teniente de gobernad or Y just icia ma yor por don Bruno de Zabala, t omó el bastón de mando el 1:; de j unio de 1 í 33 ; y uniendo la acción b élica a la habilida d política obtu:rn des-1e el a ño siguiente la pacificación de las tribus moco, ~es y abiponas, que perduró basta 1741. Dice Cervera "que trabajó Echagüe con inf atiga ble des\·elo, pareciendo insensible a los tra ba jos e incomodi dades, n egándose las más de las noches al preciso descanso'' ( 1;; ) . Gobernó la ciudad durante diez años sin percibir sueldo ni gratificación alguna : y mu rió en d iciembre de 17 4:? en los días en que se preparaba a fu n 1ar la reducciún de San J:nier. que se logró después gracias a los trabajos d e su preeursC1r. Alcanzó el título de maestre de campo y ejerció el generalato al manda r en jefe las fuerzas d e su jurisdicción frente al enemigo. Cenera ha difundido los rasgos serenos y ,aroniles de su fisonomía, p ero falta aún la obra hist órico-biogrú· fica que saque de la injusta penum bra la personalidad d l~l goberna nte y el soldado. Constituyó su hogar en unión de d oiia Josefa ~le Gaet e, hij n de ~ elchor de Gaete y de doña Juana d el Casal. En una escritura de 1 í -13, Xa rciso .T:n·ier y :\Ia ría Francisca de E chagüc y Andfa, hijos mayores de Francisco J a \·ier de Echagiie y ..:\nd in, -:,· de doña Josefa de Gaete, c-stablecen In, drscen<lrn r ia le~ítima d e est os últimos, al declarar '' que están pron tos a (lar la pa rte de b ienes que les corresponde por herencia de padre Y madre. a sus menores herman os, bien r s que han ~dministrado ha sta ahora ' '. Cit an a d ichos he rmanos : Juana. Francisco. F ermín I g nacio, ~Jelehor, Estefanía, ~Iarin I gnacia, Frauciscn JaYiera , R osa, :Yieaeln y .JostS L ucas ( IG). El primogénito parece haber sido, pues. :Xarriso Javier de E eha qiie y t . e, ]l l: 0 .\ ndín, '!lle fué alealde de Santa F e nn 1-, -,,) ,. 1- c·1 (' t . ' '·- . , ) . on r n10 ma .run o Cvll doña Tl..' rcsa Ruiz (le .\ rcll:1n') J¡; ~.l r1n 1...•C'\1) •1s·1·, R . l • \ ' l an • , ·. • "· ol t , an ,mz tH' .'"l.re1 ano y ,. MAES TRE DE CAl\l P O 1\1.\ i\UEL MACI.EL \. 121 dofia ~laría Ventura de Lacoiz4ueta, naciendo de aquel tálamo Francisco Javier de Echagi.ie y Andía, segundo de estos noml1}es, que fué bautizado en Santa Fe el 10 de marzo do 1753 ; siguió la carrera eclesiá6tica, pasó al Perú, fué canónigo d e la catedral de Lima. y rector eminente de la universidad de San Marcos. Tuvo dos hermanos, José Ignacio y José Manuel de Echagüe y Andía., según consta de la escritura de cesión que hizo en favor de aquéllos, en Lima, el 16 de enero de 1805. El último de los hijos del t eniente de gobernador y de doña Josefa d e Ga.ete, José Lucaa de E chagüe y Andía, f ué también alcalde de su ciudad natal en 1779, 1798 y 1804; 1·ecaudador de propios y arbitrios en 1793 ; casó con doña María Josefa de Vera Muxica, y al quedar viudo, con doña Bonifacia Carballo, teniendo entre s us vástagos a Frm1cisco de Ecbagüe y Andia, que pasó a Chile donde fundó la rama do su apellido en unión legítima de doña Ana Teresa Tocornal. III. Melchor de Echagüe y Andia reprodujo en el curso de su vida pública las calidades y servicios de su padre y su abuelo. Alcalde de segundo voto en 1765 y procura dor de la ciudad en li 72, dejó las magistraturas civiles al aiio siguiente para desempeñar el mando militar de las fuerzas que Santa Fe envió a la expedición del río Pardo contra los portugueses. Al crearse el virreinato del Río de la Plata tomó posesión del gobierno de su ciudad natal, que ejerció por espacio de diez años. "Realizó todo~ los esfuerzos imaginables - dice Ccrvera en su citada obra - para rechazar a los indios fuera de las fronteras, organizar las milicias y regularizar le administración. . . Efectnó dos campañas anunloo de pacificHción de indios ; salió a la del río P ardo con los blan<leng u<'s y milicias ele Santa F ~; y desdo 1777 expcdicion6 a la frontera anualmente. Después de ha bor dcfendi<lo el pueblo de charrúas de C:ayastá, hubo de trasladnrlo mfts ul sud d r su lugar primitivo ; reedificó el pueblo clo San Pedro, destruido por los abiponcs, y sirvió en todo sin sueldo alguno y sin reparo de costns. Imitó en t odo a su antecesor y a otros gobernantes de S:mb J'e cuyo despr<'ndimicnto y celo en el gobierno y administración veremos roproducirso' '. Cesó en el mando el 20 .de ma rzo d e 1786, al recibir el nombramiento ele subdelegado do guerra y hacienda ; tres aíios más tardo fné comandante <le armas de la plaza, retirándose de las ncti vida des militares el 4 de marzo de 17!)3 con el grado de coronel. E staba ca sado con doiin 1\farí:t Isabel Mn ciel, hija del maestre <le campo M:mucl :Macic1, romo se ha informado en su lugar. IV. Juan Francisco <le Echagii<' y Andín, hijo ,del anterior, siguió la carrera de las armas y fué nombra do capit{m de los blundengues de Santa Fe por r eal despacho frchndo ('ll Snn Lorenzo d el Escorin l el 1 O <l<' octubre d<' 1790, Obtuvo so retiro seil; aiíos después. CoutraJu nwtri1nonio por poder <'(lB 1 -,o 1._.., Rll J ,m-; :\J .\( ' !Ef, EX J,,\ l!I S TOl-:JA l>1': I , Pl ,AT .\ prima doiia Hosa :.laeid , hija dl·l rnarnt r u t1c• <':,nipo g('ll(' l':t l ,l oaqu;n 7'1:t<•iPl do doiín biidora. l•'1•rnú n dt•1, dt' \'alcli \'ieso, n'pt'l'~í•n túnclolo en Hu enofi y Aires, d onde tuvo lugar c•l a do, s 11 amigo 1'1anu l'l d e Bmmvilba:-w ( 1 7 ) , Puede le<• n.;e en <'I a p(;ndi('(', bajo (•1 11Íl11H'ro 1:.!, la ca r ta d o doto d o Ia dospo8:tda. Do clil'ho matri mouio fu (, Jiijo J>cdro d l' J•: <' h:tgiic MaC'ic~l, que pns6 :1 C{>rdobn. do11<k ('aA6 t•o11 lloiín. J u a 11a d t• J\ rrNlo1H1o, siendo los pndrcs de P ('dro t•:<•hagLir, s<•gundo dt'i nomhn·, qt1<' i lttHtrú lo:.. annlcs ~1e la Jitoratura a rg<mtina Pll d s iglo pasnclo. No intl'rt•sa a est a s notas l>iog rúfiro-gcncalógiras ol añadir n otirial'l Hnbrc la dC'Sl'l' Hd<'ncia. y los hombres ele épo1·a reeiento, pues ello atafic mi1s a In vnuida<l quo a la hiHtorin; pero no debo terminnr esta breve crónica sin moncionar <'l n ombrn del grn cra l Pns<'ual Echagiie, tambi é n figura d estacada d o s u lin nj c, que go be rn ó s u provincia na ta l y la. de Entre U.íos; man<ló l'll j ofo el rjrreito que invadió el Uru g uay (' 11 18:rn y libró el 20 do diciembre do aqu el aiío la mcnwrahlc hatnlla dr Ca g nn eha eontra ol ej ército oriental H órdenes del prcsjdente de la R e pública, gene ral F,ructnoso RiYcra. N OTAS DE L UAPI'rULO V IL ( t ) Lus dos informaciones <JIIO se cxtrnet.a n íorma.11 pnrte de la d rcu men ta ri ón Hobre los Macid qu e con sNva. la fa1 11il in d o Sil"n Garrctt.511, d e Buenos Aires. (2) Arnhivo gcnrrnl ele In N a<'i<'í n , lcgHjo .M 7, exp. ](L .. - . (=l) Apéndi ce, dornnwnto N 9 1 t. (·1) Lihro <l e fü,fmH' ionrs <'fo ln, igh'sin. mn1ri :e; dl' ~anta, 1•\-, 1 7,U-~ ,ti 1 folio 7•J v. A l folio !5~ d el mismo libro ~o ha llu. In <·0rtifieneiün dt"'l e n tierro <}p otro ~fn 11u p J Mnril'l, proba hl p de udo p1·6ximo dt1l llllll'Ht rp dl' <'arnpo. tamLi(m n 11L11ral de Corri<'ntrR y r nfl:ulo l'n Bt1<'no 8 Ah•pi3, sPgú n i11for1~1a 1:l p artida. 1,;fcctiva111('1tfr, el :{ 1 d e' j ulio d,, 17G~ <'on trnjo mntrimom 1, <'11 <.•sta capitn l u11 ..\1 nmH•I :MaC'id <·on doiia. Junna <lC' la ( 'ruz :XinH~IH'7. dl' AJmma da ;· y un hijo do esta, 11 ni (lll, Hor¡uo ,l a<'into :\1:h•icl , t omtS l'~ll~~P n HU11 vt>1. ol a ele fclirero d o l 7,n c·on d oña ~litría ch•l Pilnr Carrasco, 111,FL de J r1mciR<'o Cnrrn nco y dn <loíi a Mada. Prmwi Rra U ondl-h'z. (ó) Clur:H.nti, Hsturl·ios iln hctáldica 1;a,<wa, Sitn 8ohu1:d.i{m . ( <i) Carla dPl dort.or CarloH A. Al<lao al autor fo<·lmda en Bncuos Aires Pl !.l~ cl r dic>i ombrc <lP l H:!7. ' (7) Are.liivo d r la jglcsin. <lü 111 nh'l'<'l'tl libro (8) lUsturia, llr la 0011(/lli,-;la <id Pnr<;.(Jua,¡ :~ <1 <' <l<•fnu<'ionC's, folio !):t 111án , tomo I IT, eap. XV. '' H'ío <fr la Jlfatci !I 1'ucu- 1 (n 10 ) ( ) (l.~) 1 ( ~) ( U) A~·chiv_o dr lo:-. 1'1'. ih11nnl<'s <l t> ~a11ta I•\,, 1':snlt urn ~ pÍlblit•a s, tomo 11. t omo l. A1:~·h_1:'º de lo:-. _'l:rihun:dPs, E s<' riturai; púhlic:u-i,' tomo ]8. Aichno <l e• fnrntl111 dP! do<>tor ,l11 n11 G. MaciPl, Banta Fr. 1>nt ofi •·m:mados ll( 8 11 dt•~ernd icntc ._,1 do<: tor E nriq u e },. , Achcn· 111.-;to_na <Ir 1a cuulacl .ll ¡n·o11in<'ia, <fr Sant a ],'t !tncht <1<.! ~ /lnla l"<', 1 ' _ . 1\l AESTlU} DB C'Al\iPO MANU.EIJ l\IACIEL 13:J .AZAROLA Cin,, L a (:11opcya ele Mmiucl Lobo, cap. II. Obra eituda, tomo J. Archivo del doctor Manuel M. Corvorn. En mi obra Crón icas y linajes de la g obemaci6n d el Plata, en 90, nl estnbleeer la crónicu. genealógica de l a familia de Basavilbaso, señalé l\l matrimonio ele Manuel de BMavilbaso con doña Rosa Maciel, sin especificar quo aquól lo hacía en el ejercicio de un poder y rn r epresentaciór de Juan l!,rancisco <lo Echagiio y Andía. Queda salvada la omisión. (H) ( Hi) (lG) ( 17 ) la página CAPITULO OCTAVO DOCTOR JUAN BALTASAR MACIEL Provisor del Obispado de Buenos Aires Rector del Real Colegio de San Carlos 1727 -1788 J UAN BALTASAR MACIEL, primogénito del maestre de campo Manuel Maciel y de doña Rosa de Lacoizqueta, nació en Santa Fe el 7 de septiembre de 1727 y fu6 bautizado el 16 de los mismos, dándosele los nombres de pila de sus abuelos materno y paterno, Juan de Lacoizqueta y Baltasnr ~Iaeiel. Le apadrinaron el primero de aquéllos y sn 1nujer, doña ifaría Martínez del Monje. De la síntesis biográfica publicada en una obra anterior (1) sólo vamos a reeditar las noticias esenciales, añadiendo aquí nuevos datos y rasgos que completan los perfiles históricos del personaje. Su jerarquía. en la. historia. - El linaje que venimos historiando había producido des<le su radicación en el Plata, al comenzar el siglo XVII, algunos varones que se destacaron por sus servicios militares, su ardiente fe r eligiosa, su generosidad Y sus empresas civilizadoras; pero le faltaba el hombre capaz de ilustrar la prosapia gracias a su inteligencia brillante y su l 2G LOS MACIEL E~ LA IITSTORIA DEL PLATA fecunda labor intelectual. Ese ho1nbre apareció con Juan Baltasar lVíaciel, que se r eveló como un 1noclelo de cultura en el seno de la sociedad colonial y se consagró con10 un 1naestro de la época. Su contemporáneo, el P . Francisco Javier Iturri, dijo de él que "sus talentos, sus virtudes, 8US letras, podrán tener éinulos envidiosos, mas no tendrán sucesores en ese virreinato". L e definió "como uno de aquellos n1oclelos en que trabaja la naturaleza sig1os enteros y con el cual n1uestra de tarde en tarde sus fuerzas, su va.lor y 1naestría en la for1nación de un hombre, que ella 111,isma ~lestina a la gloria de la especie hu1nana" (2) . Funes, a su vez, ha escrito "que 11:aciel fué for1nado por la naturaleza para el cultivo ele las letras y que estaba do• t ado de un entendinüento profundo, de un genio vasto, de un exquisit o gusto, de una 1nemoria feliz y de una elocuencia irre• sistible en el foro y en el púlpito"· (3 ) . Y el doctor Juan María Gutiérrez funda111entó este juicio en el estudio biográfico del prócer : "No es posible dar 1nayor escala a las facultades intelect uales de un hombre; y si a estas dotes añadi1nos la 1uoclest ia, la bondad de caráct er y el ejercicio de las virtudes que le acuerda el 1nismo historiauor , serú forzoso convenir en que la celebridad de J\iaciel 110 fué efecto repentino de su ruidoso contraste sino obra lenta de sus talentos y de sus prendas u10r ales". ( 4 ) Tr es elementos fundamentales concurrieron a dar al doctor J\1:aciel el r elieve que distinguen sus biógrafos. El primero, la posesión d e calidades espirituales e1ninentes; el segundo, la alta cuna cr iolla que 1e acordó la Proyidencia v .sobre la cual se hicieron sentir poderosas influencias ancest¡·ales representadas por abuelos Y bisabuelos forjadores d e la historia nativa, sillares h umanos de u na sociedad destinada a alcan2íar,- siglos· n1ás tar de, su culminación <:ultural y política . v el tercero la edu., . '" ' ., cacion ~n~p~rrnr_ que r ecibió y a cuyas disciplinas se s01net10 desde la 1nfan c1a hasta la ed ad adulta, en Santa Fe1 Córdoba Y Santia~o de Chile, Y qne le permitió adquirir un a erudición excepcional p ara s11 siglo. Fué con aquellos antecedentes Y estas· bOCTOR J U AX DALTASAR ~L\ ClEL 1~7 dotes que el doct or 1IaC'iel a ctuó en el f or o, el profesorado y la iglesia del Río de la Plata. Alumno del colegio de l\Ionserrat, en Córdoba, eursó los progra1nas d e la lengua y literatura latinas, de filosofía y teología, ciencia esta últin1a cuya enseñanza se dictaba desde dos cátedras de escolástica, una de moral, y otra de cánones y de escritura sagrada. La universidad le acordó el grado de maestro en artes y el doctorado en derecho canónico; y después de nueve años de per1nan.,encia en aquellas aulas, pasó a Chile e ingresó en la uniYersidad de san Felipe, donde obtuvo su segundo doctora<lo, el de derecho ch·il, recibiendo el diploma de abogado en la audiencia de Santiago y 1nús tarde en la de Charcas. Radicado en Buenos Aires en 1755, fué asesor de los obispos de la Torre y Basurco. Desde 1770 hasta 1787 desempeñó la dignidad de "maestrescuela", cargo que implicaba la supervigilancia y dirección de la enseñanza de las ciencias sagradas en la jurisdicción de la diócesis. Durante diez años fué provisor y vicario general del obispado de Buenos Aires, y al producirse en 1776 el deceso del titular de la Torre, volvió a no1nbrársele para ejercer el gobierno de la diócesis, juzgándosele el prelado de cualidades intelectuales y morales más eleYadas, por un cabildo eclesiástico del cual forn1aban parte personalidades cmno don José de Andújar, deán; don Miguel José <le Riglos, arcediano; don Juan José Fernández de Córdoba, chantre; don Pedro Ignacio de Picasarri, maestrescuela ; y don l\tliguel González de Leiva, canónigo de gracia. El doctor lVIaciel declinó esta Yez la alta dignidad que se le ofrecía. El educador. - No fueron, sin embargo, los títulos académicos ni los cargos oficiales los que acentuaron la personalidad del doct or Maciel. En efecto, la calidad que r onstituyó su 1navor mérit o fu é la doble independencia, de criterio y d e carú ct er , ~ue n1ani'festó en el curso de su vida Y que se tradujo tanto en RU a ctitud frente a un -virrey autori t ario como en sns opi- 125 Lü ~ ~L\l' IEL E~ L.\ llISTOlH.\ DEL PL..\.T.l uiones de educador. E $a independencia la traía en el ahua ; f ormaba parte de su señorío moral; y aunque ejer cid a eo u la mesura propia de un prelado digno de su niisión, 1nantúvola inflexiblemente en todos los casos y pudo, gracias a ella, emanciparse de la tutela que las erróneas tendencias d octrinarias de la época in1primían en la forn1ación uniYersitaria. Funes y Gutiér r ez coinciden en la crítica de aquellos 1nétodos, y el prünero de estos historiadores, refirifndose a la liberación espiritual de l i aciel, dice textualmente : .. ~ in n1ás libros extranjeros que los pocos que podían llegar a sus 1nanos por el c-01ner cio de una nación como la española, sien1pre a la zaga de su s iglo, supo él "purgarse'· de las antiguas preocupa ciones por la crítica, por el estudio de los padres, por el de la historia y por el de ]os libros a1nenos'· . .. Gutiérrez. a su Yez, es 1nás explícito : Y a fe que era ardua, y por lo tanto Bleritoria, ]a obra de extirpar en su propio espíritu los errores en que le imbuían la filosofía y la t eología que en aquellos días se enseñaba en Có¡doba. El mismo historiador argentino a. quien acabamos de citar, clasifica a quella escuela con el singuhlr epíteto de ' ' grotesca pagoda' ', en donde circulaban r eYueltas las añejas ideas de .Aristóteles con los bárbaros comentos de los árabes, con virt iendo la lógica en el arte del sofisma, y la física eu un estudio inf ructuoso de a ccidentes y cualidades ocultas que nada t cn;an que ver con el conocimiento de los f e· n ó menOB naturales. L a teolog;a, envuelta. también en las redes de la escoJ~-3tica, corría cenagosaJ apartada de sus fuentes puras que son los santos padres, por el campo de las sutilezas y de las disputas frívolas a que d aba lugar el espíritu de facción introducido <'Il las cRcuc)as monústicas q ue de· clinaban ya ( !j) . E st e cr iterjo liberal del educador se destaea en el informe que redactó y firn1ó, en unión de Jos <le1nás n1ie1nbros del ca~ bildo eclesiástico, relativo a la erección y sost én d e una pública universidad y de un coleg-io convictorio. Refiriéndose a los sueldos de cada uno de los dos p rofesor es que p r oponían para la enseñanza de la filosofía, no Yaci]aba en ag-regar qu e Jos maestr os n o tendrían que seguir ning-ún sistema impuesto, especialment e en Ja física, en que se podrían apar tar ele Aristó- DOO'rOR JUAN BALTASAR n[ACIEL 129 teles y enseñar, sea por los princip10s ele Descartes, o de Gassendi, o de Newton, o de alguno de los otros creador es de escuelas, o apartándose de todo siste1na para la explicación de los efectos naturales, y seguir sólo la luz de la experiencia por las observaciones y experimentos en que tan útihnente trabajan las academias n1odernas ( 6 ). No podrá negarse que esta independencia de criterio, revelada en pleno siglo XVIII por un hombre de iglesia, colocaba al doctor Juan Baltasar Maciel por encima de su época y de los prejuicios sectarios, y le consagraba como uno de los precursores de la enseñanza moderna. Su actuación con10 educador caracterizó el lapso durante el cual la cultura hizo sensibles progresos en Buenos Aires. El espíritu civilizador del virrey Vértiz estiinul6 a los hombres que poseían una percepción clara de las necesidades a1nbientes, y entre éstas, la más urgente, la de con1batir la ignorancia y la rutina, dotando al país de elementos cuya eficacia se desconocía hasta entonces. V értiz creó la policía urbana, n1ejoró la administración, introdujo la imprenta y fundó el teatro. Maciel, apoyado por el gran virrey, quebró las nor1nas estrechas de la instrucción, an1p]ió sus principios búsicos y contribuyó a la creación de la pri1nera institución de estudios públicos, digna d e ese 130 t ó~ MACIEt tN f_,A. HIS'J'ORf A t>Ét PLA'í'A 110111bre: el real colegio de San Carlos, que si bien recién tuvo instalación oficial en 1783, funcionaba ya co1no casa de in~trucción desde Yarios afíos autes, bajo la dirección rectoral del doctor lVIaciel. En efecto, éste fué 1101nbrado en 1772 por Vértiz, "cancelario <le los estudios públicos" deno1ninación que correspondería hoy al titular lle la dirección general de instrucción pública; y al instalarse de 1nanera definitiva el real colegio <le San Carlos, fué el cancelario no1nbrado su primer rector; le sucedió luego don Vicente Atanasio J uanzarás y a éste, desde 1786, don Luis José Chorroarín. Las clases ele teología, gramática, literatura y filosofía contaron al iniciarse con siete profesores y cincuenta y siete alu1nnos, "y al poco tien1po pudo advertirse un resultado feliz. La vida intelectual de la ciudad notó los síntomas de una agitación hasta entonces ignorada. Los jóvenes que asistían a las clases pugnaban por superarse en los conociinientos ... Los alu1nnos de entonces iban a ser los organizadores de la E scuela <le Náutica, fundada en 1796, y la de Mateináticas, creada por la junta de 1nayo en 1810" ( 7 ). A esta actuación en el profesorado <·iYil afia.dió su _iniciativa de fundar en Buenos .Aires un ::;en1inario eoneiliar cuya finalidad no consistiría sola1ncnte en la difusión de las doctrinas y preceptos bíblicos sino qnc tendría tan1bién por objetivo ]a for1nación del futuro clero argentino. l Jn eYidente propósito na cionalista y patriótico inspiraba al prelado criollo, hijo y nieto de criollos, que aspiraba leg-ítiinan1ente a dotar a la iglesia del 11ío de la Plata de sacerdotes nativos, sabiendo la influencia que en 1o dos sentidos ej erce el clero en el ahna de las 1nasas. El proyecto y sus funda1nentos fueron expuestos por el canónigo Mnciel en la sesión que celebró el cabildo ecle·s iástico el 9 de agosto de 1777 ( 8 ) . Su destierro y su fin. - Su disidencia con el virrey, n1ar• qués d e Loreto, fné 1notivada por la independencia de carácter del prelado, que se puso de n1 anifiesto en la defensa de la dignidad clrl sacerdocio y <le los der echos de su propio cargo, frente boc·roR JUAN BAL'l'ASAR ) 1.AC'IEL 131 a la arbitrariedad Lle Lorcto ; p ero ~abe agregar también como causal del episodio, algún n10tiYo oseuro que originaba eu el espíritu del Yirrey un sentiniiento de r en cor contra la faiuilia. de l\Iaciel, pues como veremos 1nás adelante, fué igualn1ente víctima de atentados don Francisco Antonio Maciel, person aje n1ontevideano. . . El canónigo J'.vlaciel fué desterrado el 11 J e enero de 1787 y remitido en calidad de preso a Montevideo, ante el asombro y la indignación de la opinión pública. l\.iurió en esa ciudad el 2 de enero de 1788, y no tuvo tiempo, por consiguiente, de conocer la real orden del I de septiembre de ese año, que le reintegraba a sus funciones y desautorizaba las medidas vejatorias de Lo.r eto. Como lo revela Juan lVIaría Gutiérrez, la justicia póstuma fué más completa algunos años después, gracias a los fallos dictados por la audiencia de Charcas y el supremo consejo de Indias en el proceso que instauraron contra el virrey los sobrinos del doctor l\1aciel, y d el cual se da noticia en el capítulo XL Por herencia de sus padres era hombre rico, y el inventario de los bienes revela detalles de sus prendas de lujo : un sello de armas de plata, puño de marfil; un bastón de ca.rey; una venera de oro del santo oficio de la inquisición ; dos mates de plata, uno de ellos de fragante palo santo, y doce piezas de plata labrada con peso de 22 marcos. A 1nás de los libros y muebles, consta de autos que se tasaron otros bienes de la casa de Maciel, entre los cuales es verosímil que entrasen las alhajas que dejarnos enumeradas. La casa fué tasada en $ 7.237 . . . Gutiérrez, que produce estos datos, se detiene particularmente en el inventario de la biblioteca, la n1ás considerable de Buenos Aires al finalizar el siglo XVIII, pues contaba con 1099 volún1enes sobre teología 1 historia, literatura y derecho en general; algunos poseía también contraídos a la geografía y a las ciencias físicas. Se ve por el catálogo que los idimnas griego, latino, italiano y portugués, l e eran fa1niliares a su <lueño, y que no era extr anjero a la l engua francesa, pnes g uardaba en sus estantes 108 escl'itos 132 LOS j tAC1EL EN LA IlIS'110RlA bEL t>L..\ t A originales de Bayle, de V oltaire, de Bossuet, de ~1assillon, d.e Flechier, de Fenelon. El valor de estos libros se reguló en la cantidad de 4.162 pesos y 4 reales. 11ás que por el relieve oficial de los cargos que desen1peñaba, su silueta se define en la historia por las facultades que poseía y que constituyeron el fundamento de su obra como sacerdote, escritor y organizador de la enseñanza. Honró el púlpito y la tribuna; no rehuyó la polémica ilustrada; su consejo se escuchó con respeto en el aula, el cabildo, la silla virreinal y la sede episcopal ; y para consagrar su procerato no le faltó siquiera la injusticia de un déspota, que al decretar su destierro le acordó, sin saberlo, una muerte glorificada. NOTAS DEL CAPITULO VIII. V e-inte linajes clcl siglo X.V111, ca1J. VI!. La R evista de Buenos Aires, tomo VI, pág. 344. (3) Ensayo hfatórico, tomo III, págs. 359 y 361. ( 4) La Revista d e Buenos Aires, tomo cita.do. ( 5) Misma obra, pág. 346 y 34 7. (6 ) Obra citada, pág. 429. (7 ) AGUSTÍN DE VEDIA, El colegio San Carlos. A los 150 años de s1t tundación, "La Nación", nov. de 1933. ( s) Docurnen tos para la historia d el virreinato del Rto de la Plata, tomo II. (1) (2) AZAROLA GIL, CAPI TULO !\OVEXO GENERAL JOAQUIN MACIEL Teniente de gobernador de Santa Fe 1729 -1780 Síntesis biográfica. - Joaquín ~faciel, segundogénito del maestre de campo l\{anuel l\Iaciel y de doña Rosa de Lacoizqueta, nació en la casa solariega de su familia en Santa Fe el 20 de junio de 1729, y fué bautizado por su tío abuelo el P. Pedro :M:artínez del 1\-1:onje, comisario del Santo Oficio, siendo sus padrinos Pedro de Urizar, cabildante, y su mujer doña Ana Martínez del Monje. Constan estos datos en la información de filiación y bautisn10 que produjo el propio Joaquín Maciel en 1763 ante el cura vicario y juez eclesiástico Antonio de Oroño, en razón de no haberse asentado su partida bautisn1al en el libro correspondiente (1) . Cursó los estudios elementales en la escuel a de los frailes franciscanos y fué enviado luego a Santiago de Chile para seguir los superiores, que quizás fueron interrumpidos por un matrimonio precoz seguido del nacimiento de varios hijos. En efecto, a los veinte años de edad enamoróse Maciel en la capital chilena de una niña cordobesa radicada allí con su familia, y cuyas ran1as paterna y materna pert~neGían a linajes ronsagrados ~n l,:1 hi,s.- 134 LOS ~I ACIEL E:N LA HISTORIA DEL PLA'fA toria y la sociedad ele Lin1a y Córdoba. R,ealizó su enlace en Santiago con doña Isidora Fernández de Valdivieso ( 2 ), cuyo hermano, José Fernández de Valdivieso, era ya esposo de doña Dominga Maciel. Asistieron al acto del enlace el padre y dos herrnanos de Joaquín, así como su cuñado Melchor de Echagüe y Andía, que se trasladaron al efecto desde Santa Fe; y a esta ciudad fué a radicarse luego el nuevo 1natriinonio, llevando dos hijas nacidas en el suelo chileno, a las que debían añadirse en breve otros vástagos que vieron la luz en el hogar santafecino. Desde su retorno a la ciudad natal comenzó a actuar Joaquín Maciel en la vida pública, siendo elegido alcalde de segundo voto en 1755 ; al año siguiente se le no1nbró protector de los naturales; y por auto firmado en Buenos Aires el 1 de diciembre de 1766, don Francisco Bucareli y Ursua le designó teniente de gobernador, justicia mayor y capitán a guerra de Santa Fe y su jurisdicción. Ejerció el n1ando por espacio de cinco años, siendo suspendido en sus funciones el 10 de agosto de 1771 para tomarle cuenta de los bienes de las Te1nporalidades, cuya adn1inistración desempeñaba; alcanzó el título de maestre de campo general; y terminó sus días el 2 de junio de 1780, al cu1nplir cincuenta y un años de edad. Sus resp,onsabilidades. - Dos acontecin1ientos históricos acaecieron . durante el gobierno de ,Toaquín 1\iaciel y caracterizaron la actuación de este personaje. El primero, de carácter político, fué la expulsión de los jesuítas, que tuvo ejecución en Santa Fe en julio de 1767 ; y el seg-undo, de orden n1ilitar, fué la dura campaña llevada a cabo en 1769 contra los indios pan1pas bajo Ja jefatura personal de Maciel. Por instrucciones del gobernador Bucareli, la expedición se organizó en Santa Fe con fuerzas de esta ciudad, de ]os Arroyos y de Córdoba. Ccrvrra, al historiar la campaña, dice '' que no quedó en Santa Fr vecino que pudiera servir, pues los 1nás fneJ'Oll a rsta guerra: contribu?enclo Jo:-; otros con ganado, cabé;l Uos 1 1;15 Ul•: ~El,Al , ,hl.\(~ ll ÍN ~IA C' IEI , y(\rba, tnbaeo, t.'Ít.'. " . ,ronquin l\I1wil'l fut~ inYrs tido t•o11 <'l título de u1aestre <le t!mnpo general, y supo t•o1Hl1wir lus nlilil·i11 ~ t·on tal pericin que la agrrsiYidnd pumpn fn() <}llPl>rudu dl'l'init iYn1ne11te. Las f~·ou tt'ras quedaron gnnrueeidas eon los furrtes de lV[clincué, I u di a l\f uerta )' Pavón. @ r1/~ l\Ienos eficaz fnó la intervención de l\rfa- eiel en los asuntos de las Ten1poralidades, qnc drl>iun aein-r~ar)p disgustos y r('~;p011snbilidades que n breviarou su vida. (\)1110 Sl' ~u be, el extrHÍÍitrnic'n1 o de la Co1npañía de Jesús fu~ siinultilneo a la tonfis('a<·i6n dP :-:us bienes. Los inventarios llevados <1 efecto rrvelnron lns 1·iqt1t'ZHS <1en1nnladas por la Orden : ig-lesias, estancins, tnlleres, 11wreHllrrías. ganados, esclavos. alhajas. solares, 1nohilinrios, biblio1l'Nts, etc~tera. Sin duda, elenlC'ntos adeptos n ln Compniiín tratnron <le n1ni11orar las consetlurncias de las cou fisciH·iones pl'estil tHlosp a cooperar en oenltaeione8 y traspa:sm,; p01· otra 1rnrtr, los invt'ntarios se lleYaron n rabo en for1nn ctt'fit,ü·ntr; ]1uho 11ot-orio desorden en la ndministraeión rle luwienclns y l'H wlnlrs, disp('l'~ión de esclaYos y títulos de. tierras irt·<'g-n lari<hu1Ps 011 lns Yrnt as. EJ g-obernador Bncareli ronfia ha rn qnl' ::-u rrp1•N;<'n1 Hnte rn Santa Fe no era adicto n los jesuHas, ~· HSÍ lo c·omtndc)ó t'n t•arta que dirigió al conde de Aran da ( 8 ). Do11 fT()nqn ín lWn<1 iel f ut\ pues. comisionado para proceder a ln rxpnhüón <1(' los l'(.lg-nln1·cs y non1brado luego adn1iuistrndor de sus biPnrs. I1n rr~ponsuhiIidad de la gestión rrrayó sobre 61. La polít.foH nldrmrn 11tilizó la oportunjdarl pnrn agredir10. y lor, drsron1 en tos qnr ntizm1 la oposici6n a los g-ober1rnntes r.alifiNtrou el tl rs< mwirrto dr cl<,fr~udRrión .v eonvirti(lro11 la hnprr visi6n rn <le~fa h 0; <l<'n t11wi:n·on unos a J oaqn íu M,wi(_ll clp hn lwr oc'nlt.ndo bt{'ll<'S pn1·n fnvo1•prc\1• n loR j(lsnftn~, ;\. Jr 11cnsnro11 otros rlr a1>oclrrnr~r <lPl pro<hH·i<1o de las veuta~. El historiador CrrYerH, qnr hu exaiuinndo los nu1 1 136 LOq nI.\ C' IEL EN LA IIl!--iTOHIA DEL PLATA t os, dice que era ~Iac·iel afecto a ]a Orden, "pero procedió en todo correcta1nente, aunque 1nás tarde se le iniciaron algunos juicios, tachándolo de p oco activo y previsor'' ( 4 ). Sea con10 fuer e, la oposición triunfó obteniendo el desplazamiento del gobernante en agosto de 1771. Desde esta fecha Maciel parece haberse confinado en la vida priYada. El proceso contra ,Joaquín l\tia~iel tuvo graves derivaciones y dió origen a disidencias profundas en el seno de la sociedad santafecina. No solamente 1notivó la r etirada del 1naestre de cmnpo de la Yida pública, sino que constituyó una de las causas del quebranto de su cuantiosa fortuna . Sus bienes fueron en1bargados, y sólo obtuvo el desen1bargo cuando interYinieron en faYor de esta 1nedida las fianzas de su 1nadre, doña Rosa de Lacoizqueta, de su herinano l\Iatías Maciel y del acaudalado vecino Juan Francisco de Larrachea, aden1ás de la que dió el propio encausado en Buenos Aires, fianza person al que se elevó a 10.000 pesos. E stos últiinos hethos fueron eonsider ac.los por la junta provincial de T en1poralidades de Buenos Aires en la sesión celebrada el 12 de enero de 1773, en la cual se dió cuenta de una con1unicación del presidente de la junta 1nunicipal de 'l'en1poralidades de Santa Fe, Juan Francisco de la R,iYa Herrera ( 5 ). En las actas d e la precitada corporación proYinci::l1, pueden leerse, entre otros datos relat iYos al largo proceso, Ulla f or1nal prote:,sta de Joaquín Maciel por la parcialidad de la Junta en contra suya, pues habiendo el ex gobernante r ecusado al r egidor santafecino Juan de Cevallos, por ser su enfn1ig-o personal, la junta no hizo lugar a la recusación ( 6 ). Los autos de aquel juicio debiC'ron ser volu1ninosos~ pues en )a fuente citada en las notas, se lee ta1nbién la siguiente certificación, en1anada del escribano ,T osé Zenzano : '' Asimismo certifico que p enden en la 1nis1na Ul. ,T unta las enenta8 docu1nentos y nutos de las Temps· de Santa fe, del e.ie<'ntor D 11 - ,Juachin I\,fn1,iel. que tiran wn m.1'l Y quarenta ?I dos f ox. pasadas por el Exmo. Sr. ·virrey a esta nneba J nnta. rte. - /)"• J oscph Z cnza 110 (7 ) . 137 GE~EHAL JOAQUÍN l\IACIEL Bienes de fortuna. - Poseyeron los l\ilaciel dos casonas señoriales en Santa Fe: una situada frente a la plaza Mayor, for1nando ángulo con la iglesia matriz ; y la otra en la manzana que seguía inn1ediatamente a la situada al flanco oeste de aquella iglesia. La primera de las casonas citadas formaba esquina; en cuanto a la segunda, sábese que fué construída hacia los fondos de la finca solariega de los Lacoizqueta que primitivamente, es decir, a co1nienzos del siglo XVIII, ocupaba con su huerto toda Ja n1anzaua. Dividido este solar entre los herederos del maestre de cainpo Juan de Lacoizqueta y subdividido luego en razón de nueYas sucesiones, la vieja propiedad presentaba al mediar el siglo XIX el fraccionamiento que puede verse en el pequeño plan0. N ...... "' O ,-.l u ... c., ·- .. o .. :-::= :, u "'O ,e:¡ -~ u O' N ·o u V< "O .. E o .,, Serapia Maciel de Ordóñez .. -·"" "'"' ... - u CJ ('C ...e:o ... IGLESIA ti) - "' .. ~:=s -u ·¡:¡ MATRIZ JMACIEL PLAZA MAYOR s Estos datos proceden del doctor Carlos A. Aldao, nieto materno de don José Santos Maciel, que 11aci6 en la casa de este prócer señalada en el plano, y que recordaba fa distribución que tenia hacia los .años de 1870 la antigua manzana de sus antepasados, entre cuyos detalles se dest acaba el yortnl enorlllC de Ja morada de los primeros Maciel de Santa Pe. 138 L0 8 1'tACIEL EN LA IIH-;TOHTA DEI-' PI,ATA A comjenzos d e 177fJ, al dcta11ar los bienes dotales de su hija Rosa, Joaquín Maciel le adjudica un departan1ento del caserón familiar, " el que cae a la parte del Leste, que se compone de sala, aposento y quarto a la calle, con su dornütorio, y otro quarto que sirve de cochera, en $ 1.500, con prevención la ha de tener franca por la puerta de calle del patio principal". Acuerda también a su hija una fracción de la estancia que p oseía a cinco leguas de la ciudad, con sus habitaciones, "sala, aposento, tres quartos chicos y oficina ; un ramadán para criados, cubierto todo de texas, con la huerta y arboleda cercada de estantes, todo en $ 1.500 ". Agrega el horno de cocer, varios esclavos, muebles, un reloj de repetición y "un coche de asiento fabricado a qui, con su tiro de caballos". No detalla el ajuar de la novia "por haberle sido suministrado en Buenos Aires, donde se halla, y no poder arreglarse este gasto hasta que se me remita razón de su costo". La carta dotal establece qne todos estos bienes 1nnebles e in1nuebles son a cuenta de "su Jexitilna ", es decir, de la herencia que le corresponderá a su tiempo. Como J oaquín lVIaciel t enía ocho hijos~ el documento permite apreciar el 1nonto aproxhnado de su f ortuna. Sus hijos. - Fueron hijos de Joaquín l\iaciel y de doña Isidora Antonia Fernández de Valdivieso : l . Rosa Maciel, que debe haber nacido en Santiago de Chile, y cuya carta de dote se r eproduce en el apr ndice docu1nental bajo el nún1ero 12 con motivo de su enlace con BU pri1no Juan Francisco de E chagüe y Andía. El acto 1natriinonial se celebró por poder en Buenos Aires, r epresentando al novio D. I\íanuel de Basavilbaso. Rosa Maciel tuvo cuatro hijos: Baltasar, Francisco, Mercedes y María Rosa E chagü.e, según meneiones del testan1ento materno otorgado el 14 de septiembre de 1829. 2. Rafaela Maciel, qnc parece hab('r visto tambirn la luz en la capital de Chile. 3. tT uan lVIan uel l\'Iaeiel, a <-Jllirn ~e refiere por extenso el capítulo XL GENERAL JOAQUÍN :MACIEL 139 4. Pedro Antonio J\iaciel, nacido en Santa Fe el 5 de septiembre de 1756. 5. María Antonia J\iaciel, que nació en la misma ciudad el 17 de enero de 1758, siendo la segunda esposa de su tío Domingo Maciel de Lacoizqueta, y cuya sucesión se señala bajo el nombre de éste. 6. José Joaquín Maciel, que vino al mundo el 17 de junio de 1759, siendo ápadrinado por su abuelo l\rlanuel Maciel y por doña Teodora de Sabiñán. 7. María Dolores Maciel, nacida el 29 de septien1bre de 1760; acordó su mano a lVIanuel de Alfaro, siendo padres de Dolores de Alfaro _y Maciel, que casó, a su vez, en Buenos Aires, el 4 de enero de 1809 con José Mariano de Vera y Pintado, natural de Santa Fe, hijo de José de Vera Muxica, alférez real perpetuo de aquella ciudad, y hermano de Bernardo de V era y Pintado,. autor del himno nacional de Chile. 8. María Juana Maciel, que fué esposa de Augusto Nicolá~ del Campo, presunto hijo del virrey marqués de Loreto, cuyas noticias subsiguen. Los del Campo. - El 20 de febrero de 1784 tomó tierra en :M'o . ntevideo el excelentísimo aeñor don Nieol&s Francisco Cristóbal del Campo, Maestre, Cuesta qe Saavedra, Rodríguez de las Varillas, de Salamanca, Solís, García de Olalla y Sánchez Salvador, primer marqués de Lo reto, gentilhombre de cámara con entrada, mariscal de campo de los reales ej ércitos ; virrey, gobernador y capitán general de las provincias del Río de la Plata y sus dependencias; presidente de la Real Audiencia Pretorial de Buenos Aires ; superintendente general, subdelegado do Real Hacienda y del ramo de azogue-s y minas, y ,de la Real Renta de Correos del virreinato. Tales eran textualmente citados, sus tres nombres de pila, los ocho apellidos heredados de ignal número de bi~a buelos, y los diez títulos que habíale conferido la piedad del rey, para que viniese a relevar en Buenos Aires al virrey don Juan José de Vértiz. Recibióse del mando en Montevideo el 7 de marzo, y seis <lías después hizo su entrada en la capital del virreinato, cuyo cnbildo levantó tres arcos ' ' a. modo de triunfales' ', bajo los cual<'s pasaron el personaje y su séquito, entre flores y ac]amaciones Tres ftñ~~ n:ntQs hubíí' llegado a Buen os Ai rci, don Aug1.\st 0 Nico){ls del 0 140 L OS )f .ACIEL E:\T LA llIS'fOHIA l>E L J>l ;ATA Cam po, qt1L' Yino in n 'st id o u el morlesto c:irgo do reca udador <lo diezmos de la iglesia. Conoció aquí a. doiia ~la r ía J uana. .M a.c iel, quo a.compaña ba a su madre ('n la. r apital con moti•rn d(, los pleitos en q uo so veía. onYuolta. l a sucesión del g ener al Joaquín Maciel. Don N irolfls (lC'l Campo había nacido en YillaYiciosa, Q\°i('do, por los aíios d e 1658, y su enlace con la dama santn,f~ina fu ndó el linaje de 106 d e1 Cam po en el Río do la Pla t a, d el que dimanó t n.mbién u na rama chilena. Uno de los hi j os d o aquel t úlamo f ué Estauislao <lel Campo Maciel, guerrero de la indt>pendencia argen tina . S u foja d e ser vicios establece que ing resó como cad et e en el regimiento d e g ra na d er os en los días que siguieron al g rit o d e mayo ; f ué nsccn dido el 17 d e ene ro de 1814 a subteniente a banderado d el p rimer batallón ele aquella unidad; el 26 d e septiembre del mismo año n, t eniente seg undo, y el ~O d e mayo de 1815 a. t en iente primero. Las campañas d e la ema ncipación le lleva r on al gra do de coronel. Actuó l'Il las p r ovin cias del norte dura nte los a ños ca ót icos d e las guerras civiles y sufrió un largo ('xilio en Chile bajo el g obierno d e Rosas. i\f u rió en Buenos Aires el 15 de ma rzo d e 1861. H a bía easn d o con d oña Gr cgoria Luna, natural de Tucumá,n, en quien t uvo a E st a nislao y a Adria no Cupertino del Ca mp o. Estan islao fü,J Ca.mpo, aegundo del nombr o, vió la luz en B uenos Aires e.l 7 de f ebrer o de 1834. Se halló en la acción do Cepeda a las órden es de Ad olfo Alsina; fué secretario de este p atricio mientras dcsPmpeñó la gobcrnaci6n d e B uen os Aires y formó parte de la legislatura d o esta provincia; per o la celebrid ad d e E stanis1ao d el Ca m po p r oYieno m r n os d o su a,ctuación como solda d o, político y legislad or , que de su mag n ífica inspira ción d e p oeta. Sus producci ones unieron u b r ima sobria y pura. una admirable arm onía. de colores y notas. E n la d escripción versificada, nadie ha superado su fac ultad de sín tesis. La elocuencia d o su Jt'aust.o cr iollo ha quedado consa gra da como un m onumento de l a. litera t ura nativa . . . . . Constituyó su hogar en unión d e d oña Ca r olina Lnvalk. Su hermano, Adrjano Cupertino del Campo, f ué oficial de gra n aderos como su padre, y en el ejercicio de f un cion es civiles dest acó su eficiencia cu la org anización ele las a.duanae a rgentinas, s iendo el p rimer dir<'ctor general de r entas e n 1878. F ué su esposa d oña Ana Guti6rrez Súcnz. La a buela d e est os per sona j es, d oña ~f nr :a Suana ?\Iuciel, murió en Buenos A ir es d e rl'sultas de un a lumbramien t o, ocho d ías dcspuóe d e p erder a s u úl t imo hijo, Ju::m Nepomuceno, y f nr SC'pultudn el 1 d e octuurr dl' 1806 (S) . S u marido, el f undad or de la f amilia, f a lleció r epentinamente a los sesen ta Y e u nt ro aiios de cdn.11 el l 6 de a l>ril d e 1822 siendo enterrado en .. ' San Nicolás de Bar i. E st a d efunción, debida men te d ocumentada (9 ) , pone fin a una Jeyrnda según la cua l N ir olR-s del Cnm po había mµerto en ]806 C'll el Ycst:bnlo d(.' st1 r,¡¡sa, clcfrnd irndo su hqgn r rcnt ro, la soldadesca ingle~tt1 GEXER.:\L JOAQl'Í N MACIEL 141 Los Valclivieso y Maciel. Como se ha. expresado, los hermanos ~T oaquín y Dominga 1facitll t>ntroncnron por su doblo alianza matrimonial cün tq linnje d e YaldiYieso, cuyo f undndor en Indin~ fué Juan Fcrn{mdcz de Yaldh·ieso, natural de las montaiias de Burgos, que pasó a Lima <'n el último t erl.'io del siglo .X.Yl r y casó allí con dolia Micaela de Arbisú. De este consorcio nació, entre otros llijos, Silvestre Fcrnúudez de Yaldivietm, que vino al mundo en Lima rn 1685 ; fué capitán de caba.llos c-n Salta; sargento mayor y luego maestre de campo de las milicias de Jujuy y procurador de Córdoba del Tucumán, donde contrajo enlace con doña Jerónima Rosa de Herrera y Cabrera, descendiente de Jerónimo Luis de Cabrera y de Juan de Garay, según la antecedencia documentalmente establecida. por Espejo en su Nobilia1·i-0 d e la an.tigua capitanía g eneral de Chile. Del matrimonio entre José Ft>rnández de Yaldivieso y <loña Dominga ~aciel n:i.cieron ocho ·n.'istagos (10) : l. Sike8tre, que eontrajo enlaee en 181, con doiiu Liberatn. Luco y Caldera, y en segundus nupcias con doña Rosa de la Cerda y Santiago Concha; ~- Joaquina, primera esposa de Mateo Aguilnr de los Olivos Y Ynlenzuela ; 3. Gabriel, uno de los promotores del mo,imiento revoluciona- rio de 1810 en el suelo chileno, que tuvo n su cargo el cometido de obtener el reconocimic-uto d el gobierno republicano t'n las provincias del norte ; casó con d oña Dolores :Uorandé Prado, en quien tuvo catorce hijos ; -1. Manuel Joaquín, que sigue; 5. Isabel; 6. Francisca de Paula; 7. :llnría .Antonia ; S. Josefa. :Manuel -J oa.· quín de Yuldivieso y Mnciel, cuarto hijo de J osP Fern:índez de Valdi / rieso y de doñn Domingn Mac.iel, nació en S:1n tn Fe ~l ~9 de marzo de 1 iiO; curs6 e~tud i o s elemen.tales en la escuela de los frailes franciscanos y obtuvo su doctorado en leyes e-n Santiago. Primo de los Carrera, formó parte del grupo patricio que encabezó la emnncipación de Chile y fué nombrado scereta.rio de la junta ejecutiva crenda por el congreso do 1811. Fundó la primrra n ~ r6polis de la cnpital, al pie del c>rrro Blanco ; y C'onsidcrndo c.omo L-~3/~ . . ·cuo/ 1-l~ tos ~ÍACIEL EN LA HISTóRtA DEL PLA'11A una de las más altas personalidades del foro, aceptó la judicatura, y fué ministro de la Corte Suprema. Hombre de tradición, el doctor Valdivieso y :lfaeiel estableció la antecedencia de su linaje, obteniendo testimonio de la información de servicios de su abuelo, Silvestre F ernáudez de V aldivieso, que fuéle expedida en Santiago a 28 de noviembre de 1806, con citación del fiscal y del síndico procurador y por ante el escribano don Antonio Garfias. )Iurió en julio de 1839. Había casado con doña Mercedes Za.ña.r tu y Manso de Y elasco, sobrina nieta del conde de Superunda, virrey del Perú, teniendo cuatro hijos: l. Rafael Valentín, que sigue; 2. José Ramón, que casó con doña Milagro Contreras; 3. Carmen, que fué esposa de Juan Crisóstomo de la Plaza Salinas; 4. Rosario, que fué tercera mujer de Francisco Javier Errázuriz y Aldunate, padre, en otro de sus matrimonios, del presidente de la Repúblicn don Federico Errúzuriz Zaiiartu y suegro del pr~sidente don Germá,n Riesco. Rafael Yalentín de Valdivieso Zaña.r tu y 1Iaciel, primogénito del doc· tor Manuel Joaquín de Valdivieso y de doña ~1:ercedes Znñartu vió la luz en Santi:igo el 2 de noviembre de 1804. Cursó estudios de ' derecho, fué juez de menores y diputado al congreso de 1831; al año siguiente design6sele ministro suplente del Tribunal de Apelaciones; pero impulsado por una ferviente vocación r eligiosa dejó el foro y orden6se sacerdote. Misio· nero en las provincias del norte, rector del Instituto Nacional miimbro de . ' la Facultad de Teología, fundador ele obras y publicaciones piadosas, fué consagrado arzobispo de Santiago en 1848. Tomó parte en el Congreso Ecuménico de 1870 y falleció ocho años más tarde en su ciudad natal, donde se venera su memoria como la de uno de los más ilustres prelados de la iglesia chilena. NOTAS DEL CAPITULO IX. (1) Documentos sobre los l\Iaciel en poder <le la familia de Silva Garret6n Buenos Aires. . (2) Las investigaciones pr_n cticadas . en los archivos parroquiales de Santiago no han logrado producir la J?Urtlda matrimonial, pero los papeles de la familia establecen de manera mcontestable que el acto del enlace se efectuó en la capital chilena hacia los años de 1750, añadiendo los detalles que figuran en el t exto. . _ _ (3) La Re·v ista de Buenos Ai1·es, ano III, NQ 30, octubre de 1860. (4) CERVERA Historia de San:ta F e, tomo I. (ó) Archivo 'Nncionul, Santiago de Chile; "Jesuítns, Argentina", vo· lumen 271. (º) Misma fuente, volumen 2~7. ( 7) Misma fuente, volumen 2,0. OEN~RAL JOAQUÍN MACitt j43 (8) Las pal'tidas do dofunci6n d e doña :M aría ,Tuanu. Maciel y d ü su hijo Juan Nepomuceno tlol Campo ostúu ascnta.claa en el libro II do d efunciones, folios 74 y 74 v. d el archivo dr la Merced. (1l) Libro III do defunciones, folio 158. ( 10 ) L a noticia relativa a esta sucesión procede del archivo del caba llero chileno don Guillermo• Edwards Matto, erudito genealogista que ha reunido milla.res do datos en un diccionario, aun manuscrito, cuya publi· <·ación significará una considerable aportación al estudio de las anteceden · <'ias socinies <le Chil('. ----- CAPITULO DECIMO DOMINGO MACIE L Alcalde de Santa Fe 1737 1792 L sexto hijo de Manuel Maciel y doña Rosa de Lacoizqueta nació en Santa Fe el 27 de 1nayo de 1737 y recibió el ba n tismo nueve días después bajo el padrinazgo de sus tíos el sargento mayor José Márquez Montiel y doña Agueda l\!Iaciel. Fué alcalde de segundo voto en los años 1769 y 1775, y luego r ecaudador de arbitrios, en cuyas funciones fué suspendido obteniendo su reposición y desagravio por auto del virrey Cevallos ( 1 ) . Al reconstruirse en 1789 la iglesia matriz, 1101nbrósele n1ayordomo ele fábrica. Tuvo estancia y ganados en el arroyo del l\Iedio. Contrajo matrimonio tres veces: la prin1era con doña l\Iaría Ventura del Casal, el 7 de enero de 1765; la segunda con sn sobrina María Antonia Maciel, el 7 de dicien1bre de 1774; y la última 0011 doña María Josefa López Pintado, el 22 de julio d,e 1782. Dmningo Maciel n1urió ab 1·ntestato el 23 de julio de 1792 ( 2 ) . E Sus hijos y nietos. - Tuvo dos hijos en sn primera esposa : 1. Francisca Rosa lV[acie], que naeió el 15 de dicie1nbre ele 1766; dió su mano a Tomús Fornen, natural de Barcelona, con qnien pasó al Pnragna~~ cloncle fallPC'ió aqn{,l rn 180:-i . El hi jo J-Hi LOS:, JL\CIF.L E'\"" LA 11 Is·ronrA DEL PLATA habido de este 1natrin1onio, J osé ~Iaría Pornell, 111nrió a su vez el 18 de agosto de 1812. Doña Francisca Rosa lV[aciel instituyó h er eder o a su h ern1ano nlanuel Francisco lvlal'.iel por instrumento f or 1nalizado en San ta l?e el I ele 1narzo de 1818 ante el escribano J osé Gregorio Bracan1onte. E ste testan1ento fué iinpugnado por un presunto hijo natural de la causante, cuya demanda dió lugar a un larg·o pleito ( 3 ) . 2. i.iranuel Francisco i'laciel, que vió la luz el 10 de dicie1nbre de 1769. Ileredó de su tío materno, el presbítero Pedro José d el Casal, dieciocho cuerdas ele tierra en el H.incón de Antón Martín, por testan1ento hecho por aquél en 6 de septiembre de 1776. Fué procurador general de la ciudad en 1808 y 1809 y diputado a la junta ele representantes, en 1815. Al año siguiente, siendo cabildante, protestó por la designación que hizo el gobernador Mariano Vera de su propio hermano como secretario, y renunció el cargo, ordenándosele volver a desempeñarlo so pena de una multa <le $ 500. Pué electo diputado suplente a la junta de representantes en 1822 y 1823, y alcalde ordinario al año siguiente. Contrajo enlace con doña Josefa Rolclán el 18 de junio de 1817, teniendo a F élix l\Iaciel, que nació en Santa Fe el 18 de mayo de 1819. Don1ingo lVIaciel tuvo cuatro hijos en su segunda esposa: l. Nicolás fJ oaquín Maciel, nacido el 6 de abril de 1776. 2. Francisco Antonio Maciel, el I de abril de 1778. Fué fiel ejecutor en 1823, juez de policía al año siguiente y procurador sustituto de la ciudad en 1826 y 1829. Otorgó poder de albaceazgo y testamento a favor de Juan Manuel Soto y Juan Gualberto Puyana el 13 de julio de 1829 ante el escribano José Alejo de Caminos, declarando ser soltero y que deja sus bienes a dos hijos naturales, cuyos nombres expresa, así como a su herinana doña María del Itosario Maciel ( 4 ) . 3. 1\1:aría del Rosario Maciel, que vió la luz el 20 de julio 1 de 1779. José l\ifanuel' iíaciel, el 19 <le abril de 1781 ( 5 ). Fueron hijos de Domingo Maciel Y sn tercera 1nujer: 4. DOl\JINCO ñT AC'IEL 1~!7 l. Cosn1e lVIaciel, cuya 11otieiu biográfica subsigue. 2. Ansehuo l\tiaciel, que nació el 7 de abril de 1786; dese111pcñó algunas magistraturas 1nunicipales y se sindicó en 1822 con10 nno de los conspiradores contra el gobernador López; casó con doña Isabel 'l'roncoso, teniendo, entre otros hijos, a Florentino . A.ntonio, que nació el 14 de marzo de 1825 ; Petrona Celestina, el 19 de marzo de 1829; Melchor, el 8 de enero de 1832 ; y María Josefa, el 15 de septiembre de 1833. 3. Marcelino Juan Maciel, que vió la luz el 2 de junio de 1788 y fué bautizado el 4 del 1nismo, siendo sus padrinos el general Melchor de Echagiie y Andía y doña Micaela López Pintado. Fué regidor en 1817, alférez de la navegación en 1822 y procurador general de la ciudad dos años después. Celebró su matrimonio el 29 de octubre de 1817 con su prima segunda doña Cecilia Antonia Aldao, hija de Félix Aldao y doña Andrea Duarte Neves ; nieta paterna de ,Tuan Francisco Al dao, fundador de ]a familia de su apellido en Santa Fe, y de doña 'I'eresa Ordóñez Echeverría; y nieta materna de Juan Duarte Neves y doña .A.ntonia de Lacoizqueta. De aquel tálan10 hubo una 11 tnnerosa su. ,,. ces1011 . Cosme Maciel. - Nació en Santa Fe 01 7 de septie1nbre o el I de noviembre de 1784. Su fuerte personalidad se destacó en las primeras luchas políticas de su provincia, iniciándose en la vida pública durante los días caóticos ele 1816 con10 uno de los jefes de la insurrección encabezada por Mariano Vera contra Viamonte. Como se sabe, la finalidad de dicho n1ovimiento y la acción dirigente de Cosme Maciel caracterizan a éste como uno de los fundador~s de la autonomía de Santa Fe. Sostenida por Artigas, cuyas tropas cooperaron a la realización de aquel propósito, la causa autono1nista obtuvo su prin1er éxito político el 9 de abril de 1816, al firmarse el acuerdo de Santo 'l'orné entre Cosme Maciel, representante ele las fuerzas santafecinas "y autorizado por el jefe de las fuerzas orientales" ( 6 ), y el coronel Eustaquio Díaz "Vrlez. Por ese acuerdo Re separaba ele sus res- 148 LOS :MACIET, EX LA ITI S'l'OHIA DEL PT,A'r A pceti ,·os cal'gos al dil'ee tor snpre1uo Al:·a rcz 'r 1t<.:n1as y al g ~u cral lVIanuel Belgrano, j efe del ejército de Buen os Aires, Y_ se estable,, e1 co111pronuso · de celebr·ar· tratado~ de }HlZ v annstad entre cia _ . los gobiernos de Santa Fe, Buenos Aires y Banda Or1en!al. El 27 de aquel 1nisn10 n1es Cosn1e l\Iaeiel f ué electo diputado por su ciudad natal para ratificar el conYenio; pero rotas nueva1nente las hostilidades, clese1npeñó el ruando de las fuerzas naYales de la provincia, bien precarias, por cierto, en aquella hora inicial de los acontecinüentos; y al frente de una flotilla de canoas, ejecutó con J aYier Abalos la e1npresa d e sorprender Y apresar ele noche a la cañonera '' A1nérica'' y demás buques adyersarios que se hallaban en la boca del Colastiné. En 1narzo de 1817 tuYo a su cargo el co1netido de dar libertad a los esclaYos. En julio del año siguiente enea bezó con l\ianuel Roldán, Juan Francisco S eguí )~ ::.\'Ianuel Larrosa la reYolución contra el gobernador Vera, consiguiendo d el L·abildo la eonvocatoria a una nueva elección. A pesar de Jrn her sido reelecto. Vera renunció el n1anclo, conYiniéndm;e luego en dar a la provincia una constitución , a cuyo efecto se proeedió a elegir diputados, aunque su r eunión debió aplazarse en razón de nue,;-ns complicaciones armadas. En 1819 el gobernador don Estanislao López confió a i\faciel una misión ante Artigas, que 1na11tcnía YiYa la resistencia de la proYincia Oriental contra Portug·al. Fué secretario ele López durante la campaña <lr este caudillo contra DorreO'o v conúsio· b ' •· nado luego para tratar la paz en nmnbre del gobierno de Santa Pe. Disidencias políticas produjeron nuís tarde el roinpinliento de l\íaciel con el general López; y r etlneido a prisión bajo la incu1· pación de haber fon1entado e-1 asesin ato del gobernante, procuró éste a 1\íacie] los 1nedios de alejarsp de la. proYincia, a lo que se negó el acusado, siendo entonres re1nitiuo a Buenos .Aires C'On la prevención de que si regresaba a Santa Fe sería fusilado. Este destierro parece haber si<lo clefini t iYo Y señala e1 térn1ino de ln Yida pública del patricio. El inoh ·idnblP trnc1i,·ion:11ista nr~r ntinn don P n-._tor ~ - Obli- DO~llXGO )L\ClEL HD gaclo CYOl'a en una ele sus obras el episodio hi::;tórico de que f né protagonista Cosn1e l\iaciel en los días iniciales de la independen cia. En 1812 el general l\'.Ianuel Belgrano, hallándose en Tiosar io de Santa F e, determinó consagrar la bandera lllle acababa de crear para la patria, y ordenó a ese fin que fuese izada rn un alto mástil ]eYantado entre las baterías que guarnecían las barrancas del Paraná. Todos los oficiales que rodeaban al peóc.:cr aspiraban a la honra de izar por Yez prin1era la insignia blanca y azul; y entre ellos Cosme l\íaciel, a la sazón ayudante del co1nandante de cívicos don Celedonio Escalada. Fué precisa1nente al joven santafecino a quien Belgrauo atribuyó aquel histórico conietido, en premio de los servicios que su actividad y patriotis1no venían prestando a la causa nacional. En 1862, cincuenta años después de aquel hecho, Obligado Yisitó a Cosme Macicl en su retiro del pago ele la lVfagdalena y escribió esta página : {ftJ'rn1e cflt:v¡r:' Un poco apartado a la derecha del camino real, entro el puC'n tc de Gálvcz y el puente viejo d e la Crucccita ( camino a. los Quilmcs ), en el ancho corredor ele la casita que blanqueaba sobre una lomada, bajo maj<'stuoso ombú: tomaba el sol de otofio un anciano de blancos ca bellos, sobre sillón de vaqueta, m{ts viejo que él. Al saber que era portador de r ecuerdos de su familia (primer bordado de su nieta, la bella :Manuelita), entre viejos cuentos del pasado n os r efirió el presente: '' Aquí donde ust ed me ve, est a mano trémula que apenas puede soskncr el bastón de mi vej ez, fu é la que izó la primera bander a argen tina. Ya h an pasado muchos años, p ero no olvido las emociones de aquel día. Vecino de Santa. Fe, mo hallaba accidentnlmcnte en la villa de R osario, y entusiasta romo todos l os jó,·en cs de mi tiempo por la causa de la patria, ayudé al general Bcl gr::m o a levantar la bater ía sobro la, barrnnc::i tras de ln nctnnl iglesin . ¡ Qué g r a ta sorpresn tuv<> cu:indo (.' } día. de su inauguración, nrnb::i do de plantar el mástil , formada ya la t r opa sobre ]a batería, mr dijo el general Belgr:rno : 150 LOS :\IACIEL ES LA lllSTOHIA D.EL PLATA - ' ' Y ea si está corricn te la (:Uerda y a t e bien la bandera para Jlevarla bien alto, como debemos mantenerla siempre''. Fué para mí lo inesperado de tan grata sorpresa, que repitiéndose el h echo por t odas partes, al Yerme pasar me apoda.han en los fogones de los campamentos: '' Ahí viene la bandera de B el grano''. Y esto, señor oficial porteño, desvirtuará ante usted el nombre d e santafecino que odia a los porteños, con que fray Castañeda me sindicaba en sus papeles. Como amigo de los porteños es que me distinguió Belgrano. Quiera Dios que la campaña de que u stedes vuelven, ( 1862), sea la de esta segunda Pavón, últimas etapas de sangre entre porteños y provincianos, que todos somos hijos del mismo Dios para nvir como hermanos bajo la bandera azul y blanca que yo levanté el primero ' ' (i). Cosn1e Maciel había constituído su hogar en Santa Fe el 19 de octubre de 1811 con doña Juana de la Quintana, hija de :i\Ianuel de la Quintana y Aldao y de doña María Josefa de Quiroga. TuYieron, entre otros hijos, a Feliciano, que nació en Santa F e el 18 de junio de 1815 ; Francisco R-0sario, el 4 de octubre de 1817; Juan Francisco, el 16 de junio de 18:22; "'>. :rvraría Salmur. que casó con el doctor :M:arcelino Freyre, dejando nn111erosa sucesión . José Santos Maciel. - La certificación bautis1nal de José Santos l\'.Iaciel no ha sido hallada, lo que iinpi<le establecer su filiación y la f echa de su naciiuiento. En 1816 se le encuentra en el desempeño de la tenencia de alcaldía del segundo cuartel de Santa Fe; fué electo defensor de n1enores en 1826 y diputado a la junta de representantes en aquel 111is1no aiio. Poseedor de una importante biblioteca, profesó ideas liberales y se sindicó eu política como adversario de Rosas. A principios de 183!) se puso de acuerdo con Rivera contra Juan Pablo López. pero fué descubierto y obligado a e111igrar a Chile. , José Santos Maciel contrajo n1atrin1onio en Santa Fe en 1813 con doña Petrona Autoni.a Piedrabuena. Fueron sus hijos : l . Francisca Antonia l\faeiel, que nació el 5 de 1narzo ele l816 siendo bautizada al día siguirnte; fu é sn madrina doña Frfu~cisca Rosa :rv1nriel. ., Anselnio 1'1aciel, segu11llo <kl 1101nbrC'. que uac10 el 20 de 9. .., D0111INGO nIACIEL 1.31 abril de 1818, siendo sus padrinos Cos1ne Maciel y doña Juana de la Quintana ; se trasladó en su juventud a Coronela, donde estableció la adnlinistración de las propiedades ele su familia; desempeñó todos los cargos directivos del departan1ento de San J eróniino y se condujo en su vida co1no un filántropo; una calle de Coronela lleva su no1nbre. 3. José Elías lVIaciel, que nació el 20 de junio de 1821 ; fué su padrino el P . Nicasio Romero ; 1nurió en Coronela a los veintitrés años de edad. 4. Nicasio Maciel, nacido el 13 de diciembre de 1824. 5. Esperanza Antonia Maciel, nacida el 2 ele junio de 1828, siendo sus padrinos Pedro Antonio Piedrabuena y doña Laureana Correa. 6. Francisco Javier lVIaciel, que nació el 11 de marzo de 1831. 7. Luisa Maciel, que vió la luz el 25 de agosto de 1834, siendo conducida a la pila bautis1nal por el P . Nicasio Romero y doña Laurcana Correa; casó con Carlos .A.lclao y Candioti, con sucesión. NOTAS DEL CAPITULO X. (1) Archivo de los Ttibunales, Santa P e; Expedientes civilPs 1776-1778. aiios ' (2) Archivo de los Tribunales, Santa Fe; testamentaría. de Domingo Maeiel, tomo 43. (3) Misma fuente, expedientes civile-s, nño 1828. (4) Misma. fuente, testamentaría de Pra.ncisco Antonio l\{aciel nño 183G. ' (5) El nombre de pila del fundador de la. rama. sant:úrcina Manuel, Al' repito en varios de sus nietos y biznietos, dando motivo a conf{1sioncs n l intentarse identificar a algm1os de cllos con el desempeño de :funciones públiras. El investigador qne se cmroñe en individualizarlos deberá seíialar a .Ju:111 Manuel, hijo de J-0aquín y de Da. Isidora. Frrniíndrz do Valdivirso ; M anuol lí"rancisco, citado bajo el número 2 del primer matrimonio de Domingo ; José Manuel, cuarto hijo del segundo matrimonio del mismo Domingo ; Manurl , sin nditnmrn1 o. qnr civJ6 eon Da. 1foría F:Hías e] 8 dC' octnl>rc> de 1813; otro ~fonnel, n:H'ido el 18 de junio de 1816 ; Manuel Ignacio, que npnrcee desempeñando cargos electivos <."ntro J 812 y ] 819; )' }.fanuel Mnrin, hijo de Mnrcelino Juan, que nació en la Navidad de 18~7. ( G) DANA MONTAÑO, 'La a.'lttonom.ía de Santa. F e, sus orígenes; documento VII del apéndice. (7) Our.IGAD0, Tracl'icion es <le B,iw1ws A ires, 3•! serie. CAPITULO UNDECL\f O JUAN MANUEL MACIEL Tesorero general de Chile 1753-1801 EN la perspectiva histórica de este linaje, sobre la cual se han ido definiendo los perfiles de personalidades vigorosas, la figura de Juan Manuel Maciel y Valdivieso presenta una silueta contradictoria aunque no 1nenos sugestiva bajo su faz psicológica. No fué un hombre de acción ni un espíritu conte1nplatiYo; estructuró su vida fuera del molde severo y tradicional <le sus mayores ; y el dinamismo que aquéllos emplearon en la lucha, la labor tenaz, ]a religiosidad o el estudio, lo aplicó este vástago, en su juventud, a la disipación; pero apenas entrado en la edad 1nadura triunfaron en su ser fuerzas morales y atávicas que le conYirtieron en un hombre de hogar y un funcionario recto. Su desapar ición pre1natura le impidió, sin eluda, brillar eu el grande esceuario que iba a abrirse y en el cual s11s ainigos y parientes desempeñaron luego los primeros papeles. En efecto, primo de los Carrera, los Valdivieso y los Verdugo, 1íaciel se extinguió en Santiago ele Chile, en el desempeño de un elevado cargo, breves años antes ele que aquellos próceres interYinieran decisivan1ente en la independencia y organizaran la vida institucional de su patria. 154 LOS ~L\ Cl I:L EX L.\ H I::,TOHIA nm, PLATA El hijo pródigo. - ,Jua n l\Ianuel ~1:aciel. t er cer hijo <le J oaquín l\Iaciel y de doña. I sidora Fernández de Valdivieso, nació en San ta F e en 1753. P or una roinciden cia singular ron el caso paterno, su p artida bautisn1al n o fué asentada en el registro p a rroquial , lo que deter1ninó a su 1nadre a llevar a cabo, var ios años después, una inforrnación de filia ción y bautisn10 ante la autoridad eclesiástica. Terminados los estudios ele1nentalrs. fué enviado :M:aciel a San tiago de Chile p ara seguir la carrera de leyes, a cuyo efecto 1natricnlóse en la uniYer sfrlad de san Pelipe el 1 ele julio de 1777 ( 1 ). .A.loj ado en la c,rna d e s us tíos el oidor don Juan ·v er dugo (2) y su nn1jer , no tardar on 6stos en adYertir que las inclinaciones de su j oven huésped le apa rtaban de la aust eridad del claustro nniYer sitario y le aeer cabau, ~n ca1nbio, a la Yida del ocio, el juego y la p arr anda.. L os <'onsej os no tuviPron eficacia, y ante la agraYación de las disposieioncs licenciosas rrsolYióse el oidor ·v erdugo a aparta rle de su hogar. L e r eco~ió Pll el suyo el tío mater no don l\1Ianuel l~ernán rlez de ahliYie~o, a la sazón síndiro p r ocu r ador gener al ele la l'indarl, quien se iinpn~o. a su Yez, con indudable disgusto, de la inutilida d d e su interYención tutelar. 1\1:aeiel f ué acusado de delitos punibles, y resuelto a ej er cer un act o de autoridad y r epresión capaz dr corregir esas tendencias y e,,itar el escnnc1a1o próxin10, elcYÓ F ernández de V aldiYieso un escrito al pr rsiclente ele la r eal audiencia. don Agustín de tTá nregui, exponiendo el Paso r solicit ando que fuese l\iaciel enYiado a u no de los presidios de Chile. En la prosa ele la ép oca se e~tablere la responsabilidad que pesaba. sobre el hogar en que vivía y los esfuer zos hecho~ p ara or ienta r al joven ln1l'sp ed hacia una comprensión n1ás elara de sus d eber es, de acuerdo con las instrueeion cs enYia<las 1,or ~n 1nad re, qne quería verle . . vnr1r ,r 1 . . . . sin m r n osrabo d el h onor eo11 que habín n:1 seido : in <.'ll In Ca rr<:'r a d e J:1s Letras, en l a dr l Comercio, 0 en qunlquiC'rn qe. se le pndit'S<' p r opor cionar . Estas idens t an christiun ns eomo propins ue una b uC'un ma u re, p r ocuró fo m entarlas, )' llrYnrlas adelan t e el r efer id o Sor . mi H ermo. t enién dol o en su pr opjn ca~n con igualdad a sus mas queri(los hixos, asi en la instruccon. JeAN MANUEL ) IAC'JEL 1.'í,i Y buena crian za como cu la p roYicon. dP todo lo ncr csario para su sust ento; pero apesar desu vigilancia y notorio zelo por su maior adelantamiento n o pudo con-seguir la aplicon. al travaxo que de él espcrava, y se n ecesita para conseguir una honrosa colocación en qualquiera carrera, r orrespon· diendo asus desvelos con una vergonsoza ociosidad, y distracciones propias de una juventud rclaxada y que no se componían con la delicadeza <le con riencia do dho. Sor. Ministro. Por estos motivos tan poderosos con dolor de su Corazn. se vio obligado a 6acudirse de una carga qe. voluntariamte. se había hechado sre. sus ombros estimulac.o del tierno amor de una. H erma. y de los impulsos el e su propia Sangre, tomando l a dura resolución de apartarlo de su casa y familia . En estas sircunstancias, queriendo Y o tener parte en el alivio de una propria Herma. y creiendo que con la máior hedad se corrixiesen los defectos que suelen ser comunes en una hedad en qe. se dá poco lugar nla. refleccon. y juicio por el maior impetu y poco freno de las paciones; francamte. le abri las puertas demi Casa y le dispensé los mismos favores que babia disfrutado en la de dho. Sormi Hermo, sin embargo de no tener iguales facultades y verme cargado de la obligon. de un:i nnmr1·osa familia a que ntender con solo el sudor de mi ro-stro y honrados p!·occderrs. Pero oste segundo arvitrio no ha querido Dios tuviese mcxor ex1to, ni efecto en mi Casa que <-1 que tiene en la de dho. Sor. mi H('rmo.; antr!vicn haciendose cada dia mas sordo a las continuas mn011rstaciones ron que Je hechava en cnrn sus defectos, y excitava al rrtiro d<:> ilicitas di,erriones, y al amor al travaxo, para 'que por medio de él sin dM<'redito de su familia adquiriese honradamente. su manutencon. y sustrnto : l•a ('nido r n nna rsp:rn tosa obstinacion hacicndose cada din mas ocioso y deshechand0 los arvitrios que l e he propuesto para alivio y C'onsuelo clr su Madrf' y proceguido tan velosmente rn sus desordenes, que no vastando ia los medios suaves con qe. se Je ha procurado a traer a una vida regular y christiana ; se lrnco pr eciso, <>n medio de c 8 ta triste desconfianza en qur n os hnllmuos t 0clos ] 09 Pn r1cnt<'s recurrir al brazo fuerte de V. F,xa.. para que dignándose rnirnr por tan hon rada "familia, cort<' ]os pasos a la malicia rle este> .Joven Y libr rte n su parentela. <le un 6onrroxo publico n que por instant0s sr halln amenasada . En esta atenr.ión A. V. Exa. Pido y suplico : se sirva dnr 1a mns conventC'. provda. a fin de precaver los j ustos rc-zelo_s r~n qne me hal~o, destinandolo a uno de los Presidios del Heyno; para cmo fm, y en segundad d e todo lo q e. llcYo expuesto hngo mnuifost.:H'ºn . n V. Exn. de lu. car ta q~. he r~~r~\'ido .· ~f'ndre . v en caso de que Y. Exa. n o tenga esto por suf1c1ente , _, .,. d C SU l)rO})l l:1 .:.u ,. comprovncon. estoy pronto n flegnr:u la. resoluron. d.e ' . Bxa. ron la dei1oco:1. 0 Yuformc de suxeto:.; de est e Pueblo de ronot:1da Ycrdn<l y Supor. 15G LOS l\L\CH~L E~ LA II 1:-;TOHI A DEL PLA'l'A caracter, esperando merecer de la piedad de V. E.xa . que todo se haga con el sigilo corrcsponte. y a que es acrebedora su honrada familia ( 3). El presidente J áuregui hizo lugar en parte a la solicitación de don Manuel Fernández de Valdivieso, disponiendo que se levantase una infor1nación con carácter reservado. El testin1011io ele varios declarantes vino a confir1nar el hecho de que l\Iaciel había abandonado por con1pleto sus estudios y entregádose a la vida nocturna, e] juego y las orgías, en cuyos desórdenes varias veces rozó la delincuencia. Pero el expediente que contiene estos datos aparece interrumpido, y no hay indicios de sanción alguna contra el acusado . . . Aunque no conste el 1notiYo, fácil es presu1nir que intervenciones fanliliares 1nenos severas que la que redactó el escrito, e influencias sociales poderosas lograron que quedase sin efecto la dura represión que esperaba al joven despreocupado. Tres n1eses después n1oría su padre, y es casi seguro que los brazos de la madre, al estrechar al hijo pródigo que regresaba. signaron su perdón y le dieron el prin1er in1pulso hacia una vida nueva. Su matrimonio; su pleito con Loreto. - Circunstancias que la investigación no ha logrado esclarecer n1antenían en Buenos Aires a doña Isidora Fernández de Valdivieso y todo induce a ' creer que fué tan1bién en esta capital que se radicó su hijo al retornar de Chile. Aunque no haya a su respecto 1nenciones docun1entales hasta 1784, puede creerse fundada1nente que halló aquél en dos ho1nbres tan eminentes con10 piadosos a los consejeros capaces de influir derisivmnente en su orientaeión n1oral: uno de ellos era el doctor Juan Baltasar 1\íaciel, y el otro el doctor MiO'uel José de Riglos, a ]a sazón arcediano de la catedral y amigo tradicional y fiel <le la fa1nilia 1\íaciel. Fué este prelado quien bendijo la boda de Juan iíanuel el 31 de diciembre de 1784. La esposa, Yreina <le Buenos Aires, era doña l\{argarita Caldrrón y Velasco. ~- an11l1ne la partida 1natri. l establece los 1101nb1·es ele sus pa<lres1 debe creerse que ,. 1110nm 110 , . ~ J 1 , t Sebastián Calderon v e ona uana Teresa Marhnez eran es os 011 .. ., . a ,JUAX :\f AXUEL .J\rA(' TEL 15i de \ Telasco, qne figuran en el asiento parroquial con10 padrinos de la ceren1onia. Es indudable que una Yiuculación estrecha y afectiva unió en aquella época a Juan lVIanuel con el doctor l\iaciel. :Hay de ello dos pruebas : la una, en su can1bio de conducta que se tradujo en la formación de un hogar irreprochable ; y la otra, en su fidelidad hacia el sabio sacerdote, a quien acompañó en su exilio y en la hora de su muerte, co1no ha quedado relatado en su lugar. Fué, en efecto, en los brazos de su sobrino que expiró el ilustre desterrado; pero no se contentó aquél con el cumplimiento de esos deberes piadosos, sino que condujo al causante de las arbitrariedades ante la justicia. Juan Manuel l\íaciel obtuvo de la real audiencia de La Plata la condenación del marqués de Loreto. La apelación interpuesta por el ex virrey ante el supre1no consejo ele Indias llevó a España la substanciación del ruidoso pleito, y el acusador no vaciló en trasladarse a la n1etrópoli para sostener su causa. Debía ser ésta 1nuy justa y fundada, pues el alto tribunal confirmó en segunda instancia, co1no se ha expresado, el fallo del anterior, condenando a Loreto a las costas del juicio. al pago de las honras que se habían tributado al doctor 1\1:aciel y a una indemnización en faYor de su so brin o ( 4 ) . La etapa final de su vida. - Las ainistades creadas por éste durante su estancia en la corte no fueron vanas y coadyuvaron a obtenerle una solución honrosa en la grave situación en que quedaban él y su fami1ia al producirse la pérdida de su fortuna . En efecto, después de un siglo y medio de bienestar e independencia económica, los Maciel estaban arruinados. 1lay indicios sobre el resultado adverso de pleitos que se siguieron en Buenos Aires y en Charcas entre 1779 y el fin del siglo; y no es aventur ado pensar que se hayan hecho valer ante el trono Jos servicios ele varias generaciones de antepasados para conseguir un cargo público que per.m itiera subsistir con decoro a uno de los vástagos, a Ja sazón jefe de una ran1a del linaje. La instancia fué escurlrn rl:i ). por r cnl Htnln f irurn<lo rl ] :, d<1 clicirmhrl? tlr 1797, don 158 L08 1L\f' íEL EN LA ITIS'l10I:TA DEL I'LA'l,A Carlo~ f\- llesignó a Juan l\[anucl l\ifaeiel tesorero gcnernl de !a real r en ta de tabacos d e Chile. Debió l\1aciel hacer se cargo dt\ s us f uncjoues eJJ el eurso del año siguiente, pero n o trajo consigo a su 1nujcr e hijos, quienes per1nanecieron en Bucno8 Aires. Poco tien1po duró el desempeño de sus tareas financieras, pue~ habiendo enferrnado gravemente y prolongftdose su <loleneia por espacio de varios 111eses, vió acercarse su fin, con cuyo n1otiYo extendió poder de testa111ento en favor de sus priinos el general I gnado de ]a Carrera y doña Paula Verdugo y Va]divieso, esposos a quienes le unía un profundo afecto y que le asistieron física y espirituahnente en la últin1a etapa de su existencia. Así lo reconoce n'laciel en su citado docu1nento, extencliJ.o el 10 de octubre de 1801 ante el escribano S osé lVIaría Luque, n on1 brúndoles sus albaceas y dee larando '' que les había co1nunicado las cosas relativas al <lescargo de su conciencia y alivio espiritual ''. E11 tregó su alina etistia11au1entc el 16 de dicien1bre del 1nis1no nüo. Doña Margarita Calderón ext endió pod<' r ( n Buenos . Aires a favor de los albaceas no1nbrados p or su n1arido, el 5 de febrero siguiente, ante el escribano 'ro1nás J o~é Boyso, para que gestionase en Santiago la pensión que le corr espondía, así co1no a sus hijos 111enores, sobre el sueldo de $ :!.000 (1ne había disfrutado l\faciel, aunque debió r econocerse que 110 pudo { ste abonar dos 1neses de 1nontepío debido a los gastos qne le oc")asionó su enfermedad ( 1 ). Ji1ueron sus hi,ios, tollos 11aturales de Buenos 1\ires : 1. Francisc0 Joaquín, que fué bautiza do en la iglesia de san Nicolás el 11 de matzo ele J 786; 2. Lupercia Victoriana, que reci bió <~l bautüuno el 31 <le octubre de 1787 y falleció en su n1enor edad; 3. Silvania Dorotea, que fué bautizada en la catedral el 9 de febrero de 1789, siendo s11s padrinos don Nicolás del Can1po doña Juana lYiaciel, sus tíos; dió su ni.ano al coronel Juan Anyt •0 Garretón cuya noticia biográfica se leerú más abajo. 0111 , • • l _ Juana l\fan u ela, el 23 ele Jlnno e e 1791. 4 1 1 ,JU .\ '.:'\ ~L \ ~Ul: L .\LA C' IrL 1:~ !) Los Garretón. _ _ Procedía t . f' . . . l" G . es a . am11i a d e un a nti g uo t ru neo it-a iano, arrotom una -ele cuvas ra, mas, · a l fº1,Ja · rsc t' n ol suelo hiBpúnico rno• • , • , o1 • á ta 11. • ' d1f1co , el apellido .. · Un v "s • go, •J uan ~1.ntomo b arret on, n acido rn Zaragoza , paso a Chi:c poco antes <le mediar la centuria d éeimaoctava y t uvo allí extensa Y destacada actuación militar. Soldado distingu ido Y en el Peru_ de la guarnic10n de Valdivia, llegó a ser gobernador de esa misma pla za en 176\ Y d~ Chiloé en 1765. rrrusladado al Perú fué corregidor de Jauja Y mando en Jefe la artillería de Lima, que hubo d e entrar en a cción cont ra el edificio del tribunal del Santo Oficio, al ser Garretón convocado a esa sede por motivos que le hicieron t emer por su libertad O por su vida. Vuelto a. Chiloé como gobernador por segunda y por tercera vez r etir6sc del ejército en 1781, después de cuarenta y siete años de servicio ; falleció en Lima en 1782 (6). De s u matrimonio con doña Benigna Fcrn:rndez <le Lorca, efectuado en Va1divia, tuvo, entre otros hijos, a Luis Garret6n y Lorca, que fué milita r corno su padre y sirvió como él en Perú y Chile; fué comandante de la plaza de Tuca.pe! y secretario de la primera junta de guerra de Concepción en 1812. Cw3ó en esta ciudad en 1792 con doña, :María .r cs ús Pollony, t e· niendo a J ·uan Antonio Garretón, entre otros hijos. l•'uó éste quien pasó a Buenos Aires en los comienzos de la revolución de mny o y fund ó la rama argentina de su familia. Había nacido en Concepción en 1793 y ompt'zÓ su t:U'l'l'ra milit ar ('ünw cadete de infantería on su ciudad natal, u los dO<'t> ufws do t•d ~Hl. l ' 01110 queda <lieho, pasó a Buenos Aires al mPdiar el aiío 1811, :u,ee1Hlil•1Hlo a sub t eniente del arma de artillería en Clll'ro del afio sigui('ntP ; en 18 LS f ué promovido a capitán, rotir{mdoso momentáueanH'llU.' d el ejt'.'• r cito poco después, para volver a las actividades militares en 1826; continuú s u carrera hasta 18;1:3, en que fué dado de bnja por razones de ordl'u políti<'o, ha bil'IHl o alcanzado el grado do coronel. Tome'> parte en d primer sitio de Montevi deo y combate del Cerrito do lu Victoria; (' ll la r:uupafüt ckl Br~sil y uatallu. de I tu:rningó; en 18:30 fué jefe del Estado Mayor y secreta n o del jefe del ejér cito don Juan Manuel de Rosas ; bajo las órden es de ést e hizo la cai;1 paiia 'contra los indios, y la que se lle\'Ó a cabo <'outra la lig::l del interior . sc> bnii6 <·ontra. La valle l'll apoyo de Santa .P e y t omó parte t."n todas la~ campaiías que S(' snced ieroll hns tn la r a ida. de R o-sas. _Yenrido en Caseros, expntri6sc de I3tH' nos Aires n donde rl'gresó en la H'Jez_ pa ra vivir retirado de la vida púl.,licu hastn la f r eha d e su muer t e, ocurr ida el 26 de abril <le 1868 en San Nicolús de los Ar royos. De su mut rimonio con dofin. Silvania Dorotca ~fuciel, quednron dos bijns : d oiin Puu la On.rr ('t{m y Mn.cicl, que d ic'1 au muno :.11 r oroncl J uan 1[a nuel dt--. L ur rnz:Hntl, cuya d t•S<'t'IHk n ria entron ró <'On el lin nje de los lGO LOS 1IAC1EL EX LA H IS'l'OP.TA DEL PT..\'rA .Aharez de .Aecvcdo; y d oiia Benigna Ga rrd(m y :ilac il'l que cuulrajo enlace con don Adolfo Siln1, <:on ~ucesión en Bucuos Aires. Los Alvarez de Acevedo. - La cuna señorial de los Alvarez de Ace-vedo radicaba en el lugar de Lois, en el reino de León, y la descripción de la casa solariega se halla en el expediente de pruebas de nobleza litigado por don Ton1ás AlYarez de Acevedo. presidente de la capitanía general de Chile, para ingresar en la orden de Carlos III. Construída toda de piedra, con cuatro fachadas, una de las cuales 1niraba al río Dueñas, alzábase como una fortaleza en el punto n1ás alto de la coinarca de Lois. De los ángulos salían dos ran1ales de 1nuralla en terraplén, que corrían hasta dos cubos con sus aln1enas y troneras; y sobre la. puerta principal, tallado en piedra, aparecía en relieve el blasón del linaje, adornado de 1a1nbrequines y coronado por un casco cin1era con plun1as, asentado sobre la cruz de la orden de Santiago, a que perteneció el fundador de la casa y 1nayorazgo de AceYedo en Lois, don Alvar Yáñez de Acevedo Núiíez de Gnz1nHn, en los inicios del siglo XV. El escudo de arn1as de esta casa 1nostra ba : 1c;i En ca111po de plata, un castillo pardo acon1pañado de tres calderas negras en jefe y tres flores de lis de azur, en punta; 2c;i en ca1npo ta1nbié11 de plata, un acebo simple con dos lebreles atados a su tronco Y afrontados. Los entronques con las casas de Guz1uán, Quiñones y Villanlizar añadieron cuarteles al escudo troncal, según práctica de la época. El primero de ellos conservó las tres calderas en jefe; el de a bajo, las tres flores de lis ; otro, el castillo fuerte; y el últitno enseñó cinco roeles en aspa, lleYando el escudo una bordura y sobre ella ocho aspas de san Andrés. La genealogía docu1nentada ele esta prosapia se inicia con don Hernando Alvarez de Acevedo, de quien era tercer abuelo el encionaclo fundador ele la casa Y su n1ayorazgo, don Alvar YAm · · con los relieve~ de un ñez de Acevedo que aparece en 1a 1ustor1a gran sen- 0 r feudal · ·vivió don Hernando en la priinera nutad del . ·l X\rI v unió t1 sns 1nunero:-:os t1tu los 0l ele raba lJero de1 Sans1g o ... . • • ;o JU AX 1'IAKTEL ~IA.Cl EL lGl hago, in~estre <le campo en Plandes, patrono niayor e.le la iglesia parroquial de L ois y regidor p erpetuo de la ciurlacl de L eón. Casó con doña Guiomar de Villarroel ( 7 ) . Hijo de este tálamo fué don Diego .Alvarez <le .Aceve<lo y Villarroel, que heredó con los títulos paternos el 1nayorazgo de la casa, Y fué gobernador y capitán general del nuevo reino de Granada, en Indias. Contrajo n1atrirnonio con doña Catalina Gutiérrez ele .A.cevedo, probable prima suya. De esta unión nació don Fernando .Alvarez de .Acevedo al' mirante de la armada del reino de Nápoles, a quien dió su 1nano doña María de Llamazares, dama que falleció en el castillo ele Lois el 6 de mayo de 1656; e hijo suyo fué don Lupercio Alvarez de .Acevedo, que recibió el bautismo en la. iglesia del solar paterno el 30 de marzo de 1592. .Alférez mayor de Lois, inaestre de campo y regidor síndico en el consejo de Alcón, don Lupercio celebró enlace con doña María Diez de Canseco el 12 de julio de 1642. Dió esta matrona diez hijos a su marido: Antonio, Fernando, que fué obispo de Llerena; Bernarda, Luisa, Rodrigo, 1\1:atías, que fué cura párroco de Lois; Baltasar, abogado de los reales consejos: Angela, Felipe y María Alvarez de Acevedo. Don Baltasar Rodrigo, a quien no debe confundirse con su hermano el doctor en leyes, que llevaba también el primero de aquellos nombres, fué caballero de la orden de San Juan, y casó con doña Manuela de Argüelles y Estrada, en quien tuvo a don Bernardo Antonio Alvarez de Acevedo, que vió la luz en el castillo de Lois al comenzar el siglo XVIII. Fué juez del consejo de Alcón en 1740, merino mayor de Valdeburón y miembro del supremo consejo de Castilla. Contraj~ matriino~io con doña__.A.1fonsa de Ordás y Robles, de cuyo talamo nacieron tres h1Jos : Bernardo Alfonsa y Tomás Alvarez de Acevedo. Este 'último vástago, destinado a brillar en .An1érica en el ejercicio de las más altas magistraturas, nació en el castillo de sus mayores el 10 de febrero de 17~5. Siguió estudios en el col~gio de san Pelayo, cursó jurisprudencia_ en Sala1nanca y ª..los treinta años ele cdnd pasó a Tnclias, inYc~tido clcl cavgo ele f1Scal de ]a lG~ L02. 1L\C'IEL EX LA nn;rrornA DEL PLATA audiencia tle Charcas. En 17G8 Yiuo a Dueno~ .A ires en el desempeño de un c01netido secreto, relacionado con lo~ propósitos snbYersivos que se atribuían a elen1entos Yincula<los a los jesuítas, r ecientemente expulsados. En 1774 fué trasladado a Lin1a en el carácter de fiscal del crimen; y tres años después nombrósele regente de la audien cia de Chile y visitador de los tribunales, casas y ra1nos de real hacienda, llegando a Santiago precedido de una reputación de jurista eminente y trabajador incansable. Ruiz Guiñazú, en su erudito estudio sobre La rnagistratura indiana., se refiere por extenso a los infor1nes que produjo el fiscal Alvarez de Acevedo en 1770 y 1771, en los cuales for1nu] a proposiciones y dictámenes acerca de la conquista del Chaco, la remoción de reducciones de indios en Tucumán, y especialn1ente sobre la creación de una nueva audiencia pretorial en Buenos A.ires, que la corona hizo efectiva años dei;;pués, y cuya iniciatin1 corresponde al fiscal de Charcas. Rniz Guiñazú califica este último docu1nento de "dictamen sesudo, que 1nerece elogio, no tanto por la revelación y el remedio ele un sü,te1na caótico y desordenado, cuanto por la claridad de la suerte futura del país; la feliz intuición de su grandeza, y el tino, atierto y seguridad de las reforinas aconseja das'' ( 8 ) • Al ausentarse don Agustín de .Júuregui al Per(1, le sustituyó interinan1ente don Ton1ás Alvarez de . L\.<:evedo en la presidencia de Chile, según correspondía en virtud <.le su jerarquía <le regente de la audiencia. Gobernó desde el 6 de julio al 12 de diciembre de 1780. Durante ese breve lapso dictó una serie de 1ncdidas útiles, como la división de la c~iudad ele 8antiag·o en cuatro cuarteles que colocó bajo la autoridad Y vigilancia de otros tantos oidores que adoptaron el título de '' alcaldes de corte'', dotando, al mismo tiempo, a cada rnanzana de un '' jneí: ele barrio''. Organizó los abastos 1nunicipales, instaló un puente n1aderizo sobre el Mapocho y ton16 la iniciativa de fijar la no1nenrlatura de las calles y la nun1eración de las casas por n1r dio de tabletas pintadas que se clavaron bajo lo~ al:ros d e _la~ vivicnclas. Como_ la ignorancia del vecindario santiaguino tc1n1c;-;e qne aqnella 1nechda ,JUAN l\[AN'CJEL MACIEL 1 'i:3 tuviese una finalillad ocul1a, Ja de org·aHiznr nn empadronan1iento previo a algún Ílupuesto, ~e 1110vieron tales hostilidades contra las tabletas que debió el presjdente Alvarcz dejar sin efecto su iniciativa .. . Fué también el creador de un cuerpo de policía nocturno que llevó, como en otras ciudades eoloniales, la designación de "cuerpo de serenos". En su IIistoria crítica y social de la ciudad de Santiago, Vicuña Mackenna formula el siguiente juicio sobre el ilustre togado : '' Tuvo interinamente por sucesor don Agustín de J auregui a u11 hombre dig-no de su r eputaéión. Fué éste el regente de la audiencia, don Tomús AlYarez de Acevedo, antiguo gobernador de Potosí, y que así eo1no r igió sólo cinco 1neses hubiera adnúnistrado rl reiao igual níunero de años, le habría transforn1ado con su actividad, su energía y cierta especial y admirable expedición en los negocios públicos que suele 9 llamarse el don de gobierno" ( ). En realidad, fueron la influencia y el consejo de Alvarez de Acevedo los que continuaron gobernanuo a Chile durante la presidencia de don A1nbrosio de BenaYides ( 1780-1787), qne Yivía entregado a sus prácticas deYotas ante la proxiinidad de su fin. .Así lo consigna Ann1nátegui, qnc bosqueja en breves y firmes r asgos la p ersonalidad d el regrutr : '· A falta de presidentc1, la r r.presentación de los interese~ dP In metrópoli estaba realmente dPsmnprñada p 01· d on 'romits Al\'nre.z dt• A<'eveclo, c¡nP era 1111 164: LOS ~IAC!EL E~ LA ItISTOR!A Dl.;;L PLATA cu1nplido togado español, austero de costumbres, grave en las 1naneras, cuerdo en el consejo, infatigable en el trabajo, exun10 en el conociiniento de las leyes, idólatra de su rey, perspicaz en sus juicios, prudente como el que 1nás, r eservado con10 él solo, incontrastable en las resoluciones, desdeñoso de las apariencias" (1º). Alvarez de Acevedo ejerció su segundo interinato de la presidencia en 1787, y designado luego 1nie1nbro del supremo consejo de Indias, volvió a España en 1792, después de veintiséis años de ausencia, y recibió, antes de llegar a la corte, entre otros títulos, los d e caballero de la orden de Carlos III y gentilhombre de cámara de S. lVL Murió cubierto de honores el I de noviembre de 1802, en Madrid, sepultándosele en la iglesia de San Sebastián, debajo del altar de N. S. de la Blanca. Durante su magistratura en Lin1a había contraído matrimonio con doña María Josefa Salazar y Carrillo de Córdoba, en quien tuvo cinco hijos: l . Don Juan Alvarez de Acevedo y Salazar, que vió la luz Santiago de Chile; llevado por sus padres a Madrid, cursó allí estudios en el Se1ninario de Nobles; permaneció célibe Y murió en aquella corte siendo ministro del supre1no consejo de Ordenes; 2. Don Tomás Alvarez de Acevedo, segundo del nombre, también natural de Santiago de Chile y alu1nno en l\'.Iadrid del mismo seminario que el prilnogénito; fué 1nagistrado de la real audiencia de Lima ; 3. Don José Al varez de Acevedo, a quien nos referimos más abajo; 4. Doña Rufina Alvarez de Acevedo, que dió su mano al diplomático español don José l\1:aría Pando; 5. Do~ ña María Fidela A.lvarez de Acevedo, que nació en Madrid el 25 de abril de 1792 y casó en Lima, adonde se trasladó con su n1adre, con el coronel don Martín de Guisasola y Meave, natural de Eybar, en Guipúzcoa. Don José Alvarez de Acevedo nació y recibió el bautis1no en la capital de Chile, según lo es~ablece la siguiente partida, que . los antecedentes enunciados : conf 1rma en JUAN MA NllEL l\rAC'lEL 165 En la. ciudad do Santiago de Chile, en 2~ días del mes de marzo <le 1781, el Ilmo. señor doctor don hlanuel de Alday y Azpe, del Consejo de S. M., dignísimo obispo de esta santa iglesia cat edral, est ando en su oratorio episcopal, exorcisó, catequizó, bautizó, puso óleo y crisma a J osef Tomás, nacido en el mismo día, hijo legítimo y de legítimo matrimonio del señor don Tomás Alvarez de Acevcdo, natural del lugar de Loys, en el reino y obispado de León de España, del Consejo de S. M., rrgcnte de esta Real Audiencia y visitador de todos los tribunales, casas y ramos do Real Hacienda del reino ; y de la señora d0iia María Josefa de Salazar y Carrillo, natural de la ciudad de Lima, capital del Perú; nieto por línea paterna de los señores don Antonio Alvarcz de A cevedo y doña Alfonsa Ordá ( Ordás 1) , vecinos del dicho lugar de Loys; y por línea materna de los señores don J osef de Salazar y doña J osepha Carrillo, vecinos de la mencionada ciudad de Lima. Y consecutivamente a estos actos Su Señoría Ila. confirmó al dicho J osef Tomá,s, siendo padrinos de uno y otro el señor doctor don J oscf Clemente de Tr.anslaviña del Consejo de S. M., su oidor jubilado en esta dicha Real Hacienda. De todo lo cual doy fe. - Dr. D . Nicolás Morán. Educado por su padre en la metrópoli, don José Alvarcz de Acevedo siguió, como aquél, la carrera del derecho, graduándose en leyes en la universidad de Valencia en 1801. Nombrado oidor de la audiencia de Buenos' Aires, no alcanzó su sede, debiendo detenerse en ]VIontevideo en 1811 en razón de los acontecimientos políticos y militares de la f echa; y asistió en aquella plaza al asedio puesto por 1as fuerzas de Rondeau, Artigas y Alvear. r.romó parte en las negociaciones entabladas con la junta de Bue11 nos Aires para la celebración de un armisticio ( ) ; e integró la comisión designada por el gobernador Vigodet para celebrar el convenio que debía poner fin a. las hostilidades, en junio de 1814. Pactó condiciones honrosas, mediante las cuales se eliininaba la capitulación de los sitiados y el gobierno de Buenos Aires declaraba r ecibir Montevideo "en depósito" hasta la terminación de un ajuste definitiYo. Co1no se sabe, las cláusulas del convenio fueron violadas por el general Alvear ; pero Alvarez de Acevedo p ermaneció en la ciudad, en la que fu é censor de La Gaceta. Allí murió repe11tinan1ente el 7 de diciembre de 1819, a los treinta Y ocho años de edad, siendo sepultado en la iglesia 1uatriz. Su H Hl • L OS ) lACIEL E~ L.\ IllSTOHIA DEL PLATA retrato está bos(1uejaclo en la noYela hÜ:;tórica }lativa, de que fué autor su n ieto, don Eduardo Acevedo Díaz. Don José Alvarez de Acevedo había casado en 1\1:ontevideo el 13 de noviembre de 1814 con doña Manuela de Maturana, hija de don Pedro de Maturana y Alde1nir, oficial de 1narina, y de doña Josefa Durán y Pagola, dama descendiente de los pobladores de la ciudad. De aquella unión nacieron: l . Eduardo Acevedo, jurisconsulto, codificador del derecho civil en el Uruguay y ministro de Estado; contrajo matriinonio con doña J oaquina Vázquez; 2. Manuel Acevedo, que casó con doña Julia Larrazábal ; 3. Doña :Thfaría Josefa Acevedo, que dió su 1nano a Ramón Vázquez, siendo padres del doctor Alfredo Vázquez Acevedo, rector e1ninente de la universidad de Montevideo; 4. Norberto Acevcdo, que nació el 6 de junio de 1819, y constituyó su hogar en unión legítin1a de doña Fátima Díaz, hija del brigadier general don Antonio Díaz y de doña María Soriano, teniendo, entre otros vástagos, a don Eduardo Aceveclo Díaz, consagrado en los anales del Uruguay con10 ilustre pnblieista,.. parlan1entario y diplomútico (1 2 ) . KOTAS DEL CAPITULO XI. (1) Archivo Nacional, Santiago de Chilo; real audiencia. (2) .Juan Verdugo, oidor d e la r eal audiencia d e Chile estaba casado con una hermana de doña I sidora Fernández de Va]divies¿ y fueron ]os pa,lres de doña Francisca <le Paula Verdugo, esposa del ge1ieral Ignacio Carrera y madre de los héroes chilenos de este apellido. (3) Archivo N acional, Santiago de Chile; Ca pitanía g eneral, causas particulares vol. 149. ( 4) ' Archivo general de la Nación, Buenos Aires; Hacienda, leg. SG, exp. 2225. . . . (G) Archivo Nacional, . Santiago d~ Ch1_Ie, vol. 84~, piezn 689. E st e diente contiene la partida d e mntnmomo de Juan Manuel Macicl y arita Calderón; las certifi~aciones bautismales de sus hijos; el poder de tfstamento otorgado por Mac1el ; el poder a eordn clo por la viuda a favor de los albaceas, etc. .. , ·) L THAYER OJEDA, La fam ·t l·i a (fo.rre~on _ ; ,TU AN L UIS E SPEJO, 6 _( • VIS l a.n tlg1ta .capita.n'Ía gen eral d~ Chile, to1!10 I. Nob-i(ianoAdel . a Hi'st6rico Nacional, ~Iadn<l ; (•xpcd1c11tcs <le Ordenes (7) re uvo ~i: :Mili tares. JUAN MANUEL l\'lACIEL l t37 Ru1z GUIÑAZú, La magistratiira indiana. Obra indicada, capítulo XIV, '' La avenida grande''. (10) MIGlTEL LUIS AMUNÁTEGUI, Los vrem¿rsores de la, independencia de Chile, tomo III. (11) LÓPEZ, llistoria de la R epú,blica Argentina, tomo III. (12) Archivo del doctor Eduardo Acevedo Díaz, Buenos Aires. (8) (O) ENRIQUE CAPITULO DUODECI MO LUIS ENRIQUE MACIEL Regidor de San Felipe de Montevideo 1720-1801 LA historicidad de esta familia prosigue con Luis Enrique Maciel, fundador de su linaje en l\1ontevideo. Al venir e:--e v~stago al mundo su apellido tenía ya 1nás de un siglo de prestigio en Buenos Aires, Corrientes y Santa Fe. No se quebró el arraigo con el trasplante de una r ama a la ciudad nacie11te : antes eonsolidóse con más vigor al fijarse allí un gajo de la 111isma s.c1.via, que no iba a tardar en p r oducir f r utos maduros de carida<l y de heroísmo. • w ;' ~ 1 ·~-,..r•1 Su rastro histórico. - La per sonalidad de Luis Enrique Maciel acusa sus modestos relieves en el lapso de Ja gestación montevideana, durante el cual un grupo de labriegos echó las bases de la ciudad, la riqueza y la historia. En la vida :-;imple ele aquel poblador hay dos puntos indeterminados : el de su 1incimiento y el <le su inrorporación al esfuerzo fundacional. En su nómina de 1743, Gorriti le menciona entre los v€cinos ; pero ~u r adicación databa de bastantes nfios antes, pues en los papelrs de 1740 consta su querella judicial con el alcalde provincial Miguel de l\1:igueleua ( 1 ) . Su inscripción bautismal no ha sido lrnllada, aunque datos documentados indican que vió la lnz hacia 170 LOS lUAC LEL EX LA IllSTOHIA DEL PLA'l'A 1720. En su testa1nento, otorgado cuando t enía él setenta Y cuatro años, declara forn1ahnente " que es natural de la capital Buenos Ayres, hijo lexitin10 de Dn. Juan lVIaciel y de Da. Bernarda González, naturales an1bos d e la expresada capital" ( 2 ). Pero una negación de esa filiación surge de los testa1nentos de los non1brados. En el paterno; instituído con posterioridad a la muerte de Juan l\t[aciel del Aguila por su apoderado Juan Bautista tle Sagastiberria, sólo se declara co1no hija única y universal heredera a María Josefa Maciel d el Aguila, habida por el causante en su segunda 111ujer, a los setenta y un años de edad ... El segundo albacea y apoderado, Juan de Arozarena, se negó a intervenir. ¿ Qué dra1na íntin10 y qué con1plicidades inconfesables ocultaron la senilidad y la n1uerte del ex alcalde de Buenos Aires? En cuanto al testa111ento de doña Bernarda González ele Acosta, n1ei1cionado en la página 83, dice esta dan1a, graveinente enfer1na, que no ha tenido hijos ele su matriinonio. 1Jn 1nes después, ya 1nejorada, la testadora lla1nó al escr ibano autorizante para revocar y a nular sus declaraciones y disposieioneR . . . E stas circunstancias contradictorias originan una perplejiclad que no intento desvanecer y que un deber de integridad históriea n1e oblio-a a revelar o en este libro. El I de enero de 1742 Luis Enrique Maciel fué electo alguacil 1nayor de lVfontevicleo, jurando s u cargo en la sesión celebrada por el cabildo el dia 8 con otros regidores que, en la fecha de su designación, '' estaban ocupado::; en sus cosechas''. Esta referencia . del acta capitular prueba que Maciel ya era agricultor a la sazón. La Compañía d e Jesús, que había obtenido en 1739 un solar de dos cuadras en la eiudad, había 1nenester de la a utorizaeió11 del cabildo para establecer en aquél una residencia p erinanente. SoHcitóla por escrito, sien<lo clekeehada en la sesión del 9 de abril de 1742, 110 obstante la intervención favorable d e Maciel, que nianifestó hallar '' justo y bueno qe. dhos padres bengan A edi~ ficar su rresidencia Con el conosilniento que Ande venir ellos ~olos sin yndio ni tape Queles asista''. La oposición capitular L UIS ENHIQUB ~I ACIEL J 7l fu é. anulada veinte n1eses después por una r eal eéJula de d on ~ ehpe V, que autorizó el establecimiento de la orden en Montevi~e?, ejecutá~1dose desde entonces por aquélla la obra de pros~htism~ iba a agregarse a la política de acaparamiento de tierras_~n1c1ada en la región de las Vacas, y que convirtió a la compan1a en el más poderoso latifundista de la Banda Orien tal. La elección anual de cabildo estaba sujeta a una 1nodalidad dictatorial : los alcaldes y regidores salientes designaban a sus sucesores. El procedimiento era legal, con las solas r eservas ele que para ciertos cargos la reelección no era admitida sino con intervalos de tres años y que la validación de todos dependía de la aprobación del gobernador. Contrariando el primer p recepto aludido, en enero de 1743 el cabildo saliente se reeligió a sí mismo, con excepción de uno de sus miembros; a esta ano1nalía que iinplicaba la prorrogación del 1nandato opuso veto el gobernador don Domingo Ortiz de Rozas, por lo cual se proced ió a una nueva elección de alcaldes ordinarios y de fiel ejecu tor ; pero dióse validez a la designación de Luis Enrique Maciel p ar a el a]guacilazO'o mavor que desempeñó nuevamente durante aquel o • ' año. No volvió el nombrado a formar parte de los cuerpos capitulares, pero hallamos otra intervención suya en ]os asuntos públicos en 1745, con motivo de los procesos seguidos contra varios Yc<·inos por incu1nplimiento de un bando que obligaba la traslación d e sus trigos a la ciudad 0 a sus chacras i111nediatas. Uno de los procesados Cristóbal Cayetnno de Herrera, se d ef endió con éxito ; y otro, J ~an Delgado Melilla, a la sazón alcalde de .Ja l-Iermandad, 11 0 vaciló en trasladarse a Buenos Aires y presentar una prot est a al gobern ador. D edicó el cabildo una larga sesión al ~onflict o y exigió explicaciones del alcalde de segundo voto, Miguel de Miguelena autor del bando, quien sostuvo su !acultacl de proced ~r com~ lo había hecho ? pidió la d~stituc1ón de su : ºlega Delga<lo Melilla. Opúsose el cuerpo capitular .ª tal med1~a y clecl ., 1 1·sposición d e Mignelena relativa a los trigos, a1o n u1a •a e 1 . ( ,3) l\ . negándole el d er echo de dictarla sin prcY10 acueruo .. . ... iaciel 172 LOS )fACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA ejercía en la fecha el con1etido 1nunicipal de rematador de diezmos, función que implicaba su intervención en las cosechas de granos y la verificación de sus 1nedidas. Haciendo causa común con los agricultores procesados por el alcalde ordinario, no presentó a éste la r elación de los trigos r ecogidos, dando lugar a que se extendiese contra él la acusación y una 1nulta que le fué aplicada por l\1iguelena antes de que el cabildo se pronunciase sobre el fondo del asunto y decretase la anulación de aquellas n1edidas arbitrarias. El expediente no dice si el multado volvió a coger su dinero, pero r evela que el diezmo triguero se elevó en febrero de 1745 a doscientas noventa y tres fanegas y dos cuartillos ( 4 ). Sus servicios 111ilitares fueron cierta1nente n1ás útiles que sus cometidos civiles, en una época en que la conservación de la propiedad Y la paz del vecindario dependían de la eficacia de las armas. Desempeñó la segunda j efatura del cu erpo de 1ni1icias de Montevideo, cuyo coman do ej er ció por .] argos años el niaestre de can1po Manuel Do1nínguez, y que contó entre sus oficiales ª Manuel Durán, lVIarcos de Velasco, Antonio Can1ejo, Juan Est eban Durán, Antonio F ernández, Bartolo1né P érez de Sosa, Fern ando osé Rodríguez, l\1anuel Tej era y Antonio Hernánd_e~todos hiJos de pobladores. Al finaJizar el otoño de 1767 1novih· zóse aquella unidad por orden del O'Obernador de la Rosa, con el propósito de 1narchar a los punt~s de San Miguel y Santa Teresa, an1enazados por los por tuo-ueses. la oposición del cabildo . ] t, ' re d UJO ª expedición al env.ío de dos d estacan1entos dando wo~ tivo_ ª ~ue aJgím tie1npo d espués solicitase el gobernador. un testin1onio de Domínguez Y Mariel en el cual constasen las instrucciones que habían ambos r ecibido de aquél para la defenSll de los_derechos reales ( ri). En esa fecha los anlagos lusitanos se cornphcaban con las depredaciones ej ecutadas por bandas de salteadores obliO'ando Ja . . , qne recorrían arin!ldas las ca 111 panas, º o~·gan1zac1011 de expediciones destinadas a castiO'ar esas violen, cias • '11as aeb.10, contar con sesenta ºvecinos, que . re· . . · Una de aque c1biero11 orden de concentrarse e11 1u es t uncia . d e Ma.cie · l, sobre e1 <) LUIS E X IUQU E 1f AC' IEL li3 arroye> Pando; la falta de algunos de los convocados 1notivó u11a comunicación del nombrado al cabildo, qne fué considerada en la sesión del 14 de 110Yie1nbre, r esolviéndose bajo 1a presidencia del vice-gobernador don Juan de Achucarro la instrucción de un severo sumario. En marzo del año siguiente hizo acto de presencia en una r eunión del ay untanliento y reclamó un suplemento de proYisiones para un destacamento que debía operar en la frontera, siéndole negado '' por no tener esta ciudad fondo ni ran10 de guerra" ( 6 ) ; pero meses después vióse forzada la corporación municipal a mostrar 1nejor voluntad ante los nuevos actos vandálicos perpetrados en la jurisdicción. Reunidos en la sala de sesiones los jefes y oficiales de las 1nilicias, resolvióse la salida armada de doscientos hombres que debían batir la campaña durante dos meses; fijóse el paso de Cuello, sobre el Santa Lucía, como punto de concentración; y a él concurrieron el gobernador y los alcaldes para revistar y despedir la tropa. Su familia. - Al otorgar testamento en plena lucidez, Maciel consignó sus datos de familia expresando que su primera mujer fué doña Rosa Méndez; que contrajo nuevas nupcias con doña Bárbara Camejo; y non1bra a sus hijos y a. los hijos de su segunda 1nujer, que era viuda de José de Silva Reys. Cumple a esta crónica ampliar las noticias enunciadas en la declaración testamentaria. Rosa Méndez era hija de Antonio Méndez y de doña .Tuana Casilda de Villavicencio, que llegaron a Montevideo el 27 de marzo de 1729 formando parte de la segunda. expedición de colonos canarios conducida por don Francisco de Alzaybar . Eran los Méndez n aturales de Lanzarote, y el jefe de la familia obtuvo chacra en el Miguelete y estancia sobre el Pando, pero parece haber da do preferencia a las actividades comerciales, pues estableció una tienda en la calle que por lar gos años llevó su nombre, por designación espontánea del Yecindario; fué al guacil m ayor en 1732 y alférez real en 1738; y dió poder de testamento a su mujer el 11 el e agosto de 1753. E l matrimonio de ff!.1 hija r on ~fadrl s ~ cfcrt u:> l'l 18 <lr julio Ut:> 1i41, ] ... ..1 1 • LO~ ~L\f'IEL E~ LA HISTORIA DEL PLATA siendo Yela<los por el P. :\fonu Pl Contrrras. capcllii n de lns fuerzas de desembarco de la es~uadra mand:ida por el genera l J os~ Pizarro. Fueron testigos Luis de Sosa ~fasrarcn has y s u muj er Leonor de :M orales. Fallecida doña Rosa ~féndez, contrajo el ,,iudo nueYas nupcias con doña I3árbara Ca1nejo, cuya antecedencia subsigue. De este túlamo nacieron Yarios hijos de los cuales sobrevivían los cinco siguientes al testar su padre en 1794 : l . Francisco Antonio 1'1acie1, qu~ fué el prin1ogénito aunque la declaración t esta1nentaria le asigna el quinto lugar. 2. Carlos 1\1:aciel, que sigue en el capítulo XIV. 3. Juan P edro Maciel, señalado al final del n1ismo capítulo. 4. Laureana l\Iaciel, que fué bautizada el 4 de julio de 1766; casó con J osé Morlote, con sucesión. 5. Paula 1\1:aciel, bautizada el 15 de enero de 1768; dió sn 1nano al doct or Francisco Jurado cirujano del regimiento de infantería ele Buenos Aires, hijo ' de Juan fJurado y de dona I sabel JVIontilla, Yecinos de Santaella, en Córdoba. Bendijo 111 unión el capellán B errocta y fueron testigos '1'01nás d e Estracla y doña 1\1:argarita de ·viana. D oña Bárbara Ca n1ejo de l\Iaciel 1nnrió quiuec días dr~pw~~ del naciiniento ele su última hija. En 1748, Luis Enrique Maciel erH P?seedo~ d e un solar en la ciudad, sin que los padrones de pro· piedad, 1ncon1pletos en la época, per1nitau referencia alguna acer- Sus bienes Y su fin. - ca de_ la f ec. .ha Y forina de s n adquisición ; pero la constancia de ese bien raiz se halla en la escritura de venta <le un t erreno, otorgada por el vecino Alonso Serrano a faYor de Ignacio de A costa' el 18 de ab1·1·1 el e 1748, a l t ons1gnar · que ese pre 10 lin· cl~ba p or e~ oeste con sitio de Luis Enrique l\Iaeiel" ( 7). Cuatro anos clcspues el ca bilclo 0 t , , . Jas • orgo a este una n1erced de tierras en nacientes d el arroyo Pando, de inedia legua de frente sobl'e ese curso_ de agua Y nna legua Y n1edia de fondo lindando por el snr ron t1rrra~ ch~ ,Tos(. l\f(.n clez, cnya inei·eecl le'¡' fn (. c_¡o11firn1acla pol' 1 a· '' Lt: rs EXRIQUE llf .H ' TF.L 175 el gobernador don Josp ,Joaquín ele '?iana poi· auto lle 13 dr octubre de 1752. C01no lo establece en su testamento, lviaciel conserYaba esa estancia, poblada ele ganados, cuarenta y dos años más tarde. No hay n1enciones docu1nenta<las r especto de la fecha en qne adquirió su casa habitación, situada en la antigua calle del Portón oZ, o/~ -4. J?~,,., ,;iejo, y cuya descripción se encuentra tan1bi6n en el texto de Rus disposiciones testan1entarias. Puera de esas tre8 propiedades Y de algunos escla,;os, no contó con otros bienes, lo qne den1uestra que no poseyó fortuna dado el valor prr1eario de aquéllos en la , epoca. Luis Enrique l\!Iaciel , testó en l\Iontevideo el 1!J de abril de 1794 ante el e~cribano Juan Antonio Magariíios, siendo testigos Fernando I. Márquez, Agustín Arismendi y el doctor lviateo Magarifios (8). \ Tivió aún siete años después de realizar aquel acto, y tern1inó su existencia a los ochenta y 11110 de edad el 30 de mayo de 1801, siendo sepultado en ]a iglesia del convento de San Francisco. Los Camejo. - Don Bruno <1c Zab[lla, al nombrar primer alférez real ele Montevideo a don Juan Camcjo Soto, l1izo preceder en el actn rcspect1va el nombre del magistrado del título de Don, sólo aplicable a los nobles en la época. El caso forma excepción entre los miembros del cabildo de 17:10 (9) . Era, en cfcC'to, don .Tn:rn C:1 mf'jo Roto C'l hombre m{t,s destacado .. 1~6 LOS ::.\L\CIEL E X L.\ IIJSTOR I.-\. DEL PLATA de la colonizaciúu tauaria. J>crte11cda a n u linaj e de arraigo solariego en la isla de Tcnerife, cuyo estudo traía, cu campo do plata, tres veros de azur, tocados de oro, en roqueta (10). Consta la antecedencia d el poblador en una inf ormación que, conf orme a derecho, hizo practicar en La Laguna don Melchor de Viana, ' ' marido y conjunta persona. de doña ~faría Auto• nia de Achucarro ", sobre los antepasados canarios de esta dama, nieta de Camejo Soto. Dicha información, extensa de un centenar de folios y custodiada hoy en el archivo de los marqueses de Villasegura, en San .l!,crnando, Cádiz, contiene testimonios de partidas y certificaciones parroquiales que establecen la filiación de los Camejo desde los comienzos del siglo XVII, así como atestaciones legalizadas de los 1n·otocolos de la isla donde aparecen escrituras, cartas de dote y testamentos de la familia de-sde 1563 en adr· lante. Entre otras similares, hay una declaración que dice: '' Siempre ha oído decir ( eL testigo ) , y ser muy común en esta ciudad, que el referido don Juan Camejo de Soto, que pasú a Buenos Aires con su precitada mujer doña Victoria María Alvarez y su familia, no t eniendo en éste su país mayor necesidad de desampararlo, y habiéndolo hecho p or Jns buenas noticias que corrían de aquellas provincias y ventajas que se prometió en concurrir a la población de la ciudad de nlontevideo ' ' . . . Había visto la luz hacia 1680 en la casa que poseían sus padres en 1,:i calle de la. Sota, en La Laguna entonces capital de Tenerife · y eran aqut>· ' y dofia María de Soto. Contrajo ' llos don Juan Rodríguez Camejo matri·. monio en su ciudad natal el 3 de junio de 1716 con doña Victoria Mari:1 Alvarez, viuda de Juan Rodríguez Durán e hija de Juan Alvarez IzquierJo Y de doña María Martín de Saa; y desembarcó en San Felipe de Monte· video el 27 de marzo de 1729, f ormando parte de la expedición pobladora que condujo don Francisco de Alzaybar C'n los navíos San Fracu:isco, sa11 Bruno Y San M{J;rtín ( 11 ) . Le acompa ñaban su citada mujer, sus hijos dt' corta edad Antonio, Dominga y Búrbara · su en tenada Francisca Durán y su pa_rienta María Rodríguez Camej o, ~ue debía casar con el ¡Joblador Francisco Luis y en segundas nupcias con F elipe Pascual Aznar, siendo abuela . del general José Artigas . • Soto , :Maríll ., ~ . L..,,~ u' lt·m1a h'1,1. a d e Ca.meJo 1 Petromla,_ nac10 en los días del ar ribo a :Montevideo y fué bautizada 8 d~ abril de 1729; fué tía y madre política de don }.,rancisco Anto1110 Mac1el, el padre de los pobres. Al avecindarse recibió Camej o una chacra de 400 varas sobre el :Miguelete, una suerte de estancia sobre el Pan<lo y 4 00 b d d Como queda d, 1 z ca ezas e gana o. 1 ic 10, abala _le nombró alférez real del primer cabildo dándole también e grado de capitán de la compama -, d e caballos corazas de ' Montevideo, . . ,;11 .ni t . nto le desigJI 6 resolverse la construcci6n de la. iglesia matriz el m:ivordomo de ffthrir 011 11 11 10 ·, ' ayun amie , (lr · ª n ,1(,1 prn cnrntlor gr ncr:i.1 J·osé GonzH1rz ' LUIS EXR!Ql'E )l!ACJEL 177 ~lelo. El acta capitular dr l 13 de nbril <lC' li 30 señn la un:, couvocatorla a se-sión a, p edido de Camejo Soto, qu ien sometió al <::1bildo va rias iniciativas sobre m ejora-s del t emplo y defensa d e los intereses gan::tdcros. Al decretarse por el gobernador d el Río de la Plata la suspensión del a lcalde de primer voto José de Vera Perdomo, hízose cargo de esa vara el alférez real, que usó con la suya durante tres meses hasta la reposición del titular d e la primera. La condición de puerto de mar de Monte video y el relativo incremento de su comercio decidieron a las autoridades de Buenos Aires a crear el cargo de teniente de tesorero y oficial real en la nueva ciudad, con el cometido de recaudar los derechos correspondientes a la corona e impedir la introducción fraudulenta de artículos. Don Juan Camejo Soto fué nombrado para desempeñarlo, por auto que lleva las firmas de don Diego de Sorarte y don Alonso de Arce, contador y tesorero, rcspectivnmente, de la gobernación del Plata. A su vez, el cabildo de Buenos Aires tuvo oportunidad de informarse acerca de la personalidad del poblador por una comunicación que le fué enviada por el cabildo de la isla de T cnerife. Consta, en efecto, que en la sesión celebrada por el primero de aquéllos el 27 de junio de 17:!9, se di6 lectura a una carta emanada del segundo, recomendando a Camejo Soto a la atención de la autoridad municipal (12), No debía el alférez real utilizar su influencia y ejercer por mucho tiempo Bus honrosos cargos, pues su vida se extinguió cuando empezaba a dar toda la capacidad ele su valimiento a la ciudad r ecién fundada. No hay constancias sobre la fecha exacta. de su muerte, que d ebió acaecer entre 1731 y 11:12, pues al afio siguiente el cabildo hizo merced a. 1a viuda de una nueva fracción colindnnte con sus tierras del :M iguelete. Le sucedió su hijo en la prosecución del esfuerzo fundacional. Antonio Camejo fué hacendado y agricultor, y dueíio d e extensos campos r n uno de los cuales debí-a situarse, a poco de ser vendido a don Bartolomé Mitre, el pueblo de San Juan Bautista, hoy Santa Lucía (13). i~né alcalde de la Hermandad en 1742. alcalde de segundo voto en 1749 y de primer voto en 1750 y 1753; proc~rador genernl en 1752; alcalde provincial en 1766 ; depositario oeneral en 1767 y fiel ejecutor <"ll 1773. S u hermana, clona Dominga Cam:jo casó en Montevideo el 1 do enero de 1740 con don Junn de Achuearro, ~uya. actuación histórica hemos es~ablecido en otras oh;·as 14 ) . La viuda d el poblador, d ofia Vietoria Mana Alvar~z, que pose1·a bienes el" en ~~fontendeo hasta su deceso, e n T eneri'fe, permanec1'ó a l Jndo .• " los •suyos . · ocurrido el 8 d e c·nero de 17GJ. ii8 LOS ~\f AC'lEL El\ L.\. l i TS'tOR íA DEL NOTAS DEL CAPITB.LO X II • Rerisla del arcl1ii:o 9encral adm inistrativo, tomo IJ. Documento 14. Be vista citada, tomo I I. ArchiYo del juzgado de lo tidl, 1,r ilnc r t urno, }Ionte\·ideo, año 1745, N<> 47. (5) R ei·ista del archivo general adm.inist ra t-ivo, tomo VII. (G) Revista y tomo citados. (7) Archivo general de la Nación , :Montevideo; ' ' Tomas de razón de las concesiones de tierras en esta ci ud a d de M onto. y su jurisdicción " . ( 8) Archivo del juzgado de Jo civil, p rimer t urno, Montevideo ; libro de pr otocolos de 1794, f olio 2i5 v. (9) R evista del archivo, tomo I. . Información producida por d on Dacio V. Darias y .Pa.drón, histo• ( 10 ) riador de las islas Canarias. 11 ( ) AzAROLA GIL, L os orí.ge11 es lle Montevideo, ca p. IX. 12 ( ) .Acuerdos clel exting'u,iclo Cabil do de B uenos .Aires, tomo corr<"spon· diente a los años 1729-1733. 13 A~AR.OLA GIL, Crónica.-: y l-inajcs de la gobernación del P ~ata. ( ) (1~) , ~hsmo autor, V einte linajes d<>l .<:i.(Jl o .YVJ JI y A porta c16n al pa( 1) (2) ( :1) (4) drón lustorico de Mont evideo. CAPITULO DECIMOTERCERO FRANCISCO ANTONIO MACIEL Pndre de los pobres 1767-1807 LA vida de este prócer hn suscitado en su l)tlÍs un sentimiento de reconocüniento que sólo crean la elevación del carácter y la consagración desinteresada al bien público. Sus biógrafos han presentado al "padre de los pobres" como una de las personalidades más nobles y puras de la patria vieja; y el conociiniento de sus hechos y virtudes ha sido de tal 111anera difundido, que sería ocioso repetir en estas páginas lo que se encuentra en publicaciones anteriores. Esta circunstancia aconseja sintetizar en treinta líneas los aspectos biográiicos ya conocidos, y dedicar, en cambio, más amplitud a los episodios e intervenciones de J\íaciel que aun se conservan inéditos y cuyo interés aun1enta en razón de su vinculación a hombres y sucesos poco conocidos de la historia colonial. Fué el primogénito de Luis Enrique Maciel y de doña Bárbara Ca1nejo, y nació en San Felipe de Montevideo el 6 de septiembre de 1757. Apenas terminado el ciclo de su educación pri1naria, reveló calidades de iniciativa, laboriosidad y dinamismo semejantes a las que caracterizaron a su remoto abuelo Melchor Maciel y que contrastaban con la pereza y la rutina del a1nbiente nativo y aldeano, que supeditaba el término de las sequías y el 1SO 1 LOS )IAC'IEL F.~ LA HTS'l 0RI.A DEL PLATA éxito de las cosechas a interYrnciones 1nilagreras. l\1aciel aplicó sus energías al comercio y la industria nacientes, al 1nisn10 tiempo que cu1nplía sus deberes 1nilitares y ganaba sus galones grado a grado. En 178-:l era subteniente de la con1pañía de granaderos que 1nanclaba don Bruno l\.iuñoz; ascendido a teniente lo fué luego a capitán, en cuyas funciones 1nurió. Durante más de veinte años fué hermano 1nayor y animador de la her1nandad de Caridad. En 1788 fundó el 1nás in1portante saladero de Montevideo, dotándolo de vastos edificios entre los cuales se destacaba una bella capilla; estableció un criadero de infinitas aves, que en1belleció con plantíos exóticos, aclimatando en el país ejen1plares que hizo venir de Francia e Italia. En 1789 erigió la primera alfarería, a la que siguieron fábricas de velas y jabón. Gest10no ante el cabildo de Buenos Aires la iinplantación de un estableciiniento saladeril e industrias derivadas en Colonia del Sacra1nento; fué e¡ pro1notor y realizador del alu1nbrado público en 1\1:ontevideo; dió iinpulso al con1ercio de este puerto con los de España Y Brasil, fletando buques y convirtiéndose en armador ; Y obtuvo de la n1etrópoli una disn1inución de -las trabas iropuestas al interca1nbio de productos. La capilla leYantaua por Maciel en el centro de su establecimiento del Miguelete estaba destinada a convertirse en 1nonnmento histórico, pues en dicien1bre de 1813 sesionó bajo su techo el primer congreso general de la Provincia Oriental, integrado por los representantes de veintitrés pueblos y presidido por Rondeau; Y del seno de aquella asa1nblea surgió la primera junta gubernativa del país, a la cual nie refiero en la noticia sobre la fan1ilia de García de Zúñicra t:, • • I . Producida la_ segunua invasión inglesa y asediado Mo1~te; video ~or 1nar y tierra, el con1ando de la plaza dispuso una sahd para hbrar batalla al enemigo. Como se sabe, llevóse aquélla.ª cabo el 20 de_enero de 1807, siendo quebrantada la ofensiva }nspanocriolla por las fuerzas británicas después de una sangrienta , , 1 . , f te pugna. Ali1 cayo e capitan Francisco Antonio Maciel al reo de sus ho1nbrcs, defendiendo la entrada de la ciudad 'natal coll' F HA.i\Cl~ro A'.\"TO.:\ 10 )l .ACII::Li l 81 tra el orgulloso inYasor y culminando en una 1nuerte estoica su abnegada existencia. Ko se cerró, e1npero, con su d esaparición, el ciclo heroico d e su linaje, pues quedaba aún <le pie y junto a los 1nuros de nionteYideo, el eapitún de blandengues Carlos 1\1:aciel, a cuya Yida se refiere el capítulo siguiente. Fundación del Hospital de Caridad. - En noviembre <le 1778 el procurador general de la ciudad, Mateo Vidal, presentó al cabildo, con la cooperación y el estímulo del gobernador don Joaquín del Pino, un proyecto de creación de un hospital civil que fué aprobado en principio pero que no tuvo ejecu ción por falta de medios financieros. Tres años después Vidal reiteró su loable iniciativa dirigiéndose esta vez al Yirrey Vértiz, en ocasión de sn Yisita a Montevideo; y gracias a la influencia del virrey y al apoyo del gobernador, consiguió que el ayuntamiento invitase a los vecinos principales a cooperar al establecimiento del hospital y que convocase a los habitantes de la plaza a un cabildo abierto. No llegó éste a celebrarse, pero la idea maduraba, los vecinos acaudalados aportaron óbolos, y 11enada8 las formalidades administrativas y legales se adquirió un solar y i:;e desig-nó a Vidal para regir y administrar la construcción del edificio. Tuvo esa fábrica que suspenderse luego d e iniciada, por la insuficiencia <le los recursos afectados a la obra; y hacia 1784 se utilizó la casa inconclusa para alojar en ella provisoria1nente a una fuerza militar. Al ser desocupado, el edific-io fné entr egado por el cabildo a la hermandad de Caridad, que se había ofrecido a tern1inarlo y administrarlo, en cu1npli1niento de los cometidos hospitalarios que aquella institución había añadido, desde 1779, a los primitivos que originaron ~n fundación, cuatro añm; antes de dicha fecha. Nada log ró hacer, sin embargo, la hermandad de Caridad, durante dos años: el hospital continuaba sin habilitarse; a l os enfermos desvalidos de la ciudad se nnían los peones y g-entes de la campafia qne llegaban a l\fonteYicleo en procura d e un albergue para aten<ler sus dolencia~. La turba <le desechos humallo'.,; Yagabn por las ca lle!) exhibiendo sus lacr as y moría en lo:s 182 LOS )IACII.:L E); LA HIS TORIA DEL PL~'\'l'A suburbios siendo sus r estos sepnltados en las za11jas. An te esta situación t r ágica la en er gía de Francisco Antonio ~Iaciel intervino de manera decisiva. N om braclo h er1nano mayor de la Caridad, puso t ér1nino a la autoridad que venía ejerciendo Vidal sobre la obra; obligóle a r endir cu entas y a devolYer al cabildo la regencia del edificio; y habilitando otro local con doce ca1nas, fundó el 6 de junio de 1787 el prirner hospital civil de Montevideo. Desde ese instante se dedicó activamente a reunir nuevas sumas de diner o, y antes de que finalizase el año susodicho estaba en condiciones de p edir al cabildo que r eintegrase a la hermandad que presidía la construcción destinada a hospital. Hízose efectivament e cargo d e ella, co1npl etó su f á brica, dotó al establecinliento de los elementos necesarios e instaló entonces en sus 1nodestas salas a los prilner os enfern1os. Mat eo Vidal fué el pron1otor ele una noble idea; l\'laciel fw! su r ealizador fecundo. El p rimero 110 logró llevarla a efecto. a p esar de sus plausibles esfuerzos ; el dinanüsmo y las fuert es virtudes del segundo se encargaron de traducir en éxito lo que durante nueve añ0s había sido sólo una aspiración. Para conver· tirla en 11echo, Marie1 debió t on1ar 1nedidas un tanto autoritarias; p ero la elevada e imper~mn al finalidad que perseguía bastan para justificarlo. Desd e entonces v lrnsta el día de su 1nuerte, por espacio de vei11te a ñ os, Maciel ilizo d e la fundación hospitalaria uno de los ob,j etivos de sn ('Xisten cia; insumió en ella y en otr~~ obras filantrópicas un a buciHt p ar te de su fortuna; y n1erecio con estos ej e1nplos ~l n1ot r el e ' ' p ad re de los pobres'' con que le . ' l a socie( · l ad de su t ien1p o y bajo el cu al le conoce -l a d esign_o posteridad. La aduana de Montevideo; el proceso de 1789. - La Pro· 1 n111lgación del histór ico est atuto del 12 de octubre de 1778 por ...e, . h.bre de E sJ)an,1 cu al el gran r ey Carlos III acordo, el co1ner e10 1 a Tndins ( ) , f n(. scg·uiclo n breve plazo de la creación de la acl~: ~ na de l\f onteviclro. Estabkcióse ésta en una vasta finca per 811 neciente a doña l\i aria Antonia de Achucarro, hija de don J u l·'l!AXCIS C'O A~TOXIO '.\l.\ C'l ETJ 1 S3 de A ehnearro Y esposa de don :\Iclehor dr Viana. a<ln1inistra<lor <le correos ( :! ) ; Y fueron designallos administrador y vista del nueYo or ganismo don José Simón tle Enseña v <lon .Juan Antonio de la S ierra, correspondien do a] primer;) u11 a asigna<:ión anual de $ 1.800 y al seguudo d e 1.500. Por r eal cédula d e 22 de septie1nbre de 1779, el mouarca cr eó el puesto d e comandante <lel r esguardo, confiriéndolo a <lon l~raucisco <le Ortega y ~1onroy, a la sazón capitán de infantería de la plana mayor de 11:álaga. * José Sirnón de Enseña, primer a dministrador y contador de la aduana de )'fontevideo, era hijo de Martín de Enseiia y de ).faría Teresa de Endara; recibió el bautisn10 en Vera, villa navarra, el 28 de a.b ril de 174:3; -rino al Plata con la expedición de d on Pedro de Cevallos ; y a lgún tiempo después de avecindar-s e en Montevideo constituy ó su hogar en unión de doiia :\1aría. :Magdalena de Pagola, celebrando el matrimonjo, el 27 de fc,brcro de l 780, el herm~mo de aquélla, P edro de Pagola, t eniente cura y beneficiado de la iglesia m:-ttriz. La desposada era hija <le Francisco de P agola, uno de los primeros vecinos d e la ciudad, y de 1faría Martina Burgues ; nieta por la línea paterna de Juan de Pagola y de J osf'fa de Jrarzabal, vecinos de AJbiztu r, en Guipúzcoa; y por la línea materna do ,Jorge Burgucs, primer pobla.<lor de M,:mtcvideo, y de María Martina Carrasco (:l). El a dminist rador Enseña, que rontinuaha en sus f uncioneR c•n 179!3, produjo en ese año información de hidalguía y nobkzn ante el gobernador don Antonio Olaguer F eliú, presentando nl rfocto t estimonios nutrntirados de su nntecedencia y la de su mujer (4). De su matrimonio con l:t nombrada María 11agdalena de Pagola n acieron siet e hijos c•n Montevideo : Juan .José, que fu é bautizado el 8 de febrero de 1781 ; Juan Victorio, el 24 do diciembre do 1783 ; P edro F erm1n, el 8 de julio de 1785 ; F L•lipe, el 27 <le mayo de 1789 ; 1fa ría Inés, el 21 d o enero de 1791 ; Juan Bautista, el 12 de febrc:-o de 1793 ; y Policarpio, el 11 de julio de 1704 ( 5 ) . Don Francis~o de Ortega, co1nai1dante del resguardo, dC'hía servir s u empleo con subordinación al administrador ele ln aduana; disfrutaba de un sueldo de $ 1.200 anual0R ~.,. fümmió sns func iones en 1780. Hombre de inicjativas, no se limitó al c·nrnplimieuto de su cargo burocr~tico y formalizó nna sociedad <·on Francisco Medina, V(lcino de l\1ontevidco, para (lXplotar un salackr o ele carnes en el Colla. 1\1:edina lrnhia logTac.lo r r ear una fortnua romo estan ciero, Juego co1no proveed or clel ej6rcito de Cevallo~ 18-1 LO:-; .'.\LH l EL E:'\ L A lllST O~aA DEL 1'1 .'.TA y después como en1presario de la pcsea <le la ballena cu el m:1r patagónico, cuyas expedicion es fructuosas fue1·ou prohibidas por la oposición del virrey, 1narqués de Loreto, que anuló así el desarrollo de una industr ia que hubiera producido beneficios considerables para l\fontevideo. La n1uerte de Medina, ocurrida el 13 d e agosto de 1788, privó a Ortega de su socio, y al constituinc en albacea del difunto p or disposición testa1nentaria de éste, chocó ta1nbién con L or eto, quien juzgó inco111patibles las funciones ad1ninistrativas de Ortega con su cometido de albacea, fundándose en el interés que l e guiaba en las exportaciones de tasajo, en la presunción de defraudaciones a la Real Hacienda, con1etidas al amparo de sn autorida d de e o n1 a n d a 11 tc ele1 rcsgnar• ./1 /y{ I do .,y en su . ~ 77/ ,LW, """'1,,/ #J ñ c. 0 111 p 1 i e i- da tl ron eI administrador ele Buenos Aires, Francisco :Xi1nenez de l\Iesa que en esos días fué declarado en quiebra " procesado bajo la ;cusación ele haber con sentido a Orteo·a una .. stuna de $ 20.000 pertenecientes ti "l · a 1 f 1sco, que f ue' uti·1·izada por aquél para establecer su ernpre~, saladeril con 1\1:eclina ( G) . Tales fuer on las acusaciones del 1na rqués de Loreto, sin sea dable Yerificar la parte de pasión o ele injusticia que inovi~ ' . ., al d espo't1co virrey rn este asunto, cuya snstanciac1011 e1·, 1o 1uua1 º al 1nás graYe escándalo ad1ni11istrativo :r judicial del Río de ]a Plata al finalizar el siglo XVIII. El ad1ninistrador Xin1enes de ' cr- l . coH Ortega Y otros func1onal'l · ·os· '· etll· Mesa f nP' ll p,•acl o a l a c•ur , · ., · · ientn l ):1 1•<1~1·on se los h1cnc8 < 1< \ n1nbos. " ~r Y10 11cr e<•f 1· el rstabkenn ¡-, . t Fr?AX CI~n.l .\~ TOX IO :\l.\ t.' ltL J " ,) llel Colla. (!lle eontaba ya con 30.000 cabezas de ganado y un eapital de $ ~00.000, eifra ex or bitante en la ép oca. Prisión de Maciel; la justicia bajo Loreto; un informe méclico en 1789. - El 31 de marzo d e 1789 el gobernador de l\Iontevideo, don J oaquín del Pino' recibió del virre, . la orden de proceder a la prisión de Francisco A..ntonio ::\Iaeiel y de su esposa doña ~Iaría Antonia Gil; simultánean1ente fueron e1nbargados sus bienes; y si bien se acordó a los nombrados el privilegio ,le permanecer en su domicilio, conYirtióse éste en cárcel, se separó al marido de su compañera incon1unicándose a ambos y colocándoseles centinelas de Yista. La emoción eu la ciudad fué considerable, y se recordó que un año antes había fallec-ido allí, desterrado y encarcelado, el canónig-o Juan Bah asar 1\laciel, deudo del nuevo "delincuente". ¿. Influía a easo en el ánimo de Loreto un sentimiento de r encor originado por el parentesco y la identiclfül del apellido? La razón aparente de las ~raYes medidas se basaba en una d e1ación formulada por un tal Sebastián Rían , an1anu cn'ie de don Franciseo de Ortega, que declaró haber entregado a la mujer de )faciel, en su casa, dos baúles o cajas que parecían contener dinero o alhajas. a pedido de la esposa del comandante d el resguardo, quien intentaba por ese n1eJio sustraer algunos valores a la acción del embargo ( 7 ) . La lentitud desesperante de la justicia colonial se agravó en este ca~o con el propósito d eliberado <le prolongar indefinidamente la prisión del padre de los pobres. En efecto, surge del estudio <le los autos que nneYe 1nesw; después de proceder se a la prjsión: continuaba ésta con todo rigo:?.' sin que se hubiese tomado declaración a los presuntos r eos. A pesar de su interés, Ja historia ha g-uardado silencio sobre cier tar.; proyecciones del r égimen inquisitorial. El documento que subsigue es ilustrativo al respecto r demuestra en qué condiciones se colocaba a los detenidos bajo 1111 r(.g-imen careelario que S(} jnzgaba benigno. Ordrn1;s que debe ohserv:n Pl C'onwn<lc r] r In Guar<l in puesta <'ll 111 r•:i ~a d e Dn, Franco Anto. ~facie) = Priu1crn, ~J:mtendrú c:inco r•entinelua 1.SG LOS l\IAC'IEL EN LA HISTORIA DEL PLA'f A la una a la Puerta de la calle, dos a las delos Aposentos de dho Dn. Franco. y de su esposa Da. Maria Antonia Gil y otras dos en el segundo Patio para precaver cualesquiera extracciones de cosas que pudiesen haberse ocultado en lo interno ele la casa = Segunda. No ha de comunicar el expresado Dn. Franco. Maeiel por si ni por interposita persona o por papel con su esposa Da. Maria Antonia Gil, ni con otra persona de afuera con pretexto alguno sea el que fuese, y la misma orden guardará la dha su esposa hta. nueva providencia = 'l'ercera. N~nguna persona de ·a dentro de la casa comunicará con las de afuera ni tampoco estas con las d e adentro, aunque sean de la calidad que fuesen ni menos con el r eferido Dn. Pranco. ni con su esposa y demas criados y dependientes de ella = Cuarta. Solo un 'criado nombrado J oaquin Leites tendrá permiso <le entrar o salir a traher cualesquier comestible o de vevida o de otra cosa que sea pura1nente necesaria para la manutencion personal, y la centinela destinada a la Puerta principal de la · calle por donde uuicumcnte ha de entrar o salir este criado y no por la otra correspondiente a la Plazuela de Dn. Franco., le rexistrará de cuerpo Y faltriqueras a ver si lleva o trahe algun papel escrito dela. casa para afuera o de ahi para adentro de ella; a los dos criados pequeños nombrados J uan Y nla.rcelo se les permitirá entrar y salir a sus respectivos aposentos de los referidos Dn. l..,ranco, y su esposa para ser servidos = Permitirá a Dn..Juan Franco. -G-arcia o a la persona que fuera de su orden a la casa del citado Dn. Franco. 1vlaciel, saque de ella los comestibles y demas cosa~ que se ofrecen de provision de Marina para los bajeles de M. = Pcrmitirú a do3 Peones O negros que enviare Dn. Juan Franco,. Garcia entren a. dicha casa a partir leña para el abasto de la Marina. No pondrá embarazo que entre un Barbero los Domingos y ,J uc,·es de cada semana a afeitar a dicho Dn, 0 F ianc · • d o siempre · 1 ' el · presencian este acto desde su entrada hasta la sal'd•1 ' dico · eornan ae. de la Guardia = Todas las veces que fuese el 'f 1\ e nnsmo · o de noche a visitar a los referidos · M c.iel D n. J ose, G.n · ' b.ien sea de dia .i: ª y su esposa para consultar el alivio de las cn-f ermedades que padezcan, le perm1·t·ira,, su entrada presenciando el mismo Comande. los actos de la · ·ta = P ernn·t·ira· a Dn. Pranco. Cruz de Alemau vecino de esta ci.:,iu dad visi , V entre en dicha casa a tratar con 1\1:aciel sobre el asunto de cuentas · registros qnc han hecho los r egistrantes de cauda.l~ para España con e1 referido níacicl en tiempo que este ha sido Apoderado 0 , sostituto del que Jo es principal fü,1 Consulado dc> Lima, Dn. Tomas de In Peña, presendu nd o el Comando, de la. Gunrclia los a ctos de contextaci on <'11 semejante asunt: las veces q~e se ofrezca = Dejará que Dn. Juan Pranco. García neve poder los vienes o trastes que le parezca mns convenient<' tenerlos eu s ·· d el os v1ene-s · c;1sa como D epos1·t·ct110 embar ga d o¡;¡ a dirho 1vlaciel, las yeceS . s. °, ª\ FRANCISCO AN'f01\"IO M:AC'IEL ]87 que se le ofrezca presenciará el Comandr los actos de meter o sacar cnla dicha casa los Vienes o trastes que le parezca. - Montvo. dos de octubre de mil setecientos ochenta y nueve. - PIXO. La salud de Maciel se resintió, y solicitada la presencia de un médico visitóle el doctor José Giró ( 8 ) quien le practicó dos sangrías y pidió a las autoridades que permitieran al det enido algunas salidas a caballo. Fuéle acordada la O'racia pero condiº ' cionada al acompañamiento de un soldado que 1nantuviera la incomunicación durante los paseos, r a Ja constitución de un fiador. Llenó este requisito su amig-o don Juan Francisco García de Zúñiga, alférez real al año siguiente. L a certificación expedida por el doctor Giró dice así : En virtud del Decreto del Señor Juez comisionado por Su Excelencia ']Ue so me ha hecho saber }lOr el escrivo. <le su comision en el dia de la fecha, certifico y juro que fui Jlamado, habrá como mes y med io mas o menos, para visitar a D. Franco. Anto. :Maciel, y lo hallé obeso, perezoso, entorpecido y pesado de todo el cuerpo, con algunos vertigos minorandoscle el tacto y aun inchandose1c alguna parte del cuerpo, quedando esta adormecida ; he continuado a su existencia ( asistencia 1) y despuee de usar de las sangrías, diluentes y <lratticos perseveró en los referidos simptomas y en engrosarsele los tegumentos comunes siendo mi1 s visible en el rostro ; por todo lo ref erido dige al paciente ( como nsi lo siento ) ser necesario pa. precaver un accidente repentino como una aploplexia de que son 6eñales precedentes los accidentes ref eridos que lo transfiriese al siglo et erno (sic), que haga excrcicio viol~nto tanto acaballo como apie, o travajo cor poral. En lo presente continua siempre con el mismo peligro y soy de parecer ser necesario el exercicio que llebo expuesto. Asi lo certifico y juro en Montevideo y tres de octubre de mil setecientos i ochenta y nueve. - Dr. J osé Gfró (9). Al finalizar aquel año de 178.:J el Yirrcy Loreto entregó el bastón a su sucesor, d on Nicolás de .ll rredondo (1° ) ; Y el caiubio de titular en Buenos Aires fné sirr!nltaneo al traspaso de la gobernación (le Montevideo, que dejó t-1 brigadier don J oaquín del Pino pnra ir a ocupar la presidencia de Charcas, siendo sustituído interinamente por el coron el don l\fi~p tel de T ejada, jefe de] r egi~ miento de infantería de Bnenos Air<'s, • l SS L O::-; l\I ACl EL E.K l; A 11I8 '1'0 RI A DEL PLA'fA El proceso <le los esposos i\.1aciel se r egularizó, y el 23 ele enero de 1790 depusier on ant e T ejada, a quien asistían el doctor Francisco de los Angeles l\i uñ oz, asesor de la gobernación, y el escribano Manuel J oaquín de Toca. Las d eclaraciones fueron terminant~1nente negativas del hecho que les imputaban. El apoderado de los acusados en Buenos Aires, don José Antonio Gil, de acuerdo eon el defen sor en Montevideo, don Juan Francisco García de Zúñiga, solicitó la libertad de los prevenidos, a cuya medida se opuso el fiscal, prolongándose las incidencias del juicio hasta la senten cia definitiva pronunciada p or el Yirrey Arredondo el 15 de n oviembre. Co1no debía presumirse, convenía en que había existido base para la det ención de los esp osos, "en una n1ateria eu que se n1anifestó tan grave y de tan difícil averiguación ' '; pero a r englón seguido r econocía la falta t ot al d e pruebas y hasta Jo inseguro de la delación de It ian, ya que n o fué éste quien había entregado los baúles. "llabiendo estado sien1pre negativos l\ifaciel Y su l\'1:ujer en quanto a haver recivido las cajas o frasqueras que Dn. Miguel Rian dijo havia destinado p ara la casa de aquellos. test igo unico de esta esp ecie, sin que asegure ni diga que el niismo las huviese entregado en persona y sin que hay a otro testigo al~ guno con que se prueve esa entrega, no h ay 1neritos bastantes ni el Proceso da 1nargen para constituir a :rviaciel .,v su 1nujer en fa clase de r eceptador es y ocult ador es <le las cajas. . . En cuya consequen cia declaro ser bastante p ena arbit raria el arresto ineoinunicaclo Y las dc1nas estr echeces eon que ha sido preciso tener n D . Francisco Antº· Maciel y a Da. J\íaria Antonia Gil . . . Pougaseles en libertad y chan celense todas las fianzas, etc ' '. A p esar de la r eserya contenida en el encabeza1niento, salta a la vista qu e las gr aYes 1nedidas t omadas contra :M:aciel Y 511 esposa fuer on al'bitrarias ; p ero cabe pensar que la inco1nnnicación entre aquéllos n o debió aplicarse rigurosainente, 0 qne ]os centinelas en car gados de iiupedir t oda aproxin1ación entre el u1arido y sn 1nujer se dejaron vencer al~~·tnias n oches por el sueño. 0 r errnrnn los oj os bajo la g-rn tn p1·r~ión cl r ln<:. chí <liva~... En eferto, t 1rn ll do 11 rva ha ~·a qn ill(•e nw~<\-; (1P cnc·ir 1To, d ofi n ~fu r ía .A 11 Ülll i,l 1 l n .\ ~(' JSCO .\ ;\"'1'()~1 0 1,-.:i l \ I \( ' 11:í J Gil tli<) a luz a sn JH'in10gt~n ito. l~s tn duh·C' l'Oll1 Jh' 11s;H• iL1n l'tH; sr- guitla d~ otra: e l de~agT:iYio (}llL' l\lontt'Yi dL'O aeor tló a su ilu~tre h ijo, eligiéndolo 1n·ot•urador gen(•rn l d e la <·i ndad ~eis ~en1a1ws después de su liberiwión. El umigo <lo Mnl°iL'l, s u clefcnsor t'n el Los García de Zúftiga. grn ve procL-..so Y ('} padrino d t' s u primer hijo, ,J nan li'rancisco Garcín, de Zúñign, pert<:-ueria a unn fn m ilia (le origen a ndaluz que <lió a l os pueblos del Plata Yarias generaciones históricns (11 ) . Ifo nqui su a n tecedencia his pánica, seguida de unn sínt('sis dt' su nctua.<.•it'> n en Buenos A ires y la Banda Oriental durante ('} lapso caótit' o de la formación. • I. Cristóbal Ruiz, veC'ino de Alcnlú del Río, t' ll Sevilla, hijo de L á~aro 1Iuñoz y de Cato.linn Ruiz, rontrajo matrimonio en 15!.);{ con An a P~rez de Zúfüga, naciendo de este t:dnmo l'Jl la mismn Akalú II. L:'tzaro :\luiioz de Zúñign, qu<." usó el apellido de su nbuelo pn• terno y el d e s u madre; c a só en ln. Yilh1 nntnl, <•u el niio 1619, t•ou Cntalina Rodrig uez de fa Torre, en quien h1,·o a III. Ana de Zúiiign, que f n(• lrnutiznd:i t'll Aknlú dd Rfo l' U H)~ "'i J. dió s u mn n o a los diecisi('te años de <.' dnd a .Juan EstClhau dt' Higut.>ra, unciendo de esa unión, <.' ntn, otros hijos. l\'. Ginés Gnrcí:t dt' Higuern, t)llt' l'Ontrnjo t' nl:H't' ron ~foría dl' Aguilar e l ~5 d e mnyo <I<.> 1ü•Hl, 8i Pndo ¡1:uirt•s d e \', Joseph Ga r cía y A g uilnr, q lll• rt'<'ihi,, t•l bnuti~mo t'U la mismn ,·illa de Alcalú del R fo e l 1 dt• ngosto d t"' .llHHl, )' t't'k·hró su boda <.'on An a Josefa Berna rda Hignl'rn, probnble 11 :nit'Htn :rny:,, t•l l :l fü, odubre dt• lGSl, en q uien tuvo, entre otn)6 hijos, :1 YI. Á-\lonso Gnrrín tll' Z{1ñig a , fundnd1H· dt' In rnma lfo su linnjC\ pn PI Río de In Plutu, quL' 1.•. ompuso sus :1¡wllhlos yinl.'uluJ1do t'l Gnrr ia. de la \'Uronin nl Zúfiiga d e la bisnlmeln ¡ rt.•cibió t'l bnutismo 1.'. n A l<'nlft• dt'l l{io C'I ~o de agost o 'al, 16HO; llO c.>jer<'h~ l'll Sl' Yilln l:t mngistratum (}lll' SC' ll' ha atrib uido, sino L'll BiH•nos Airt•~, dondt' f u(• t'ft' l'ti\':llllt'nh' regidor perpC'tuo. A,·r l•ind6se t'n esn ~npitn l bnj t> t"l gohiNno d t> don Hruno dl' Znb:1ln, y :tllí 1.•. 011trnjo matrimonio pl 1 dt' st>ptit, mbrC' dt' 1,:Hl t' tm dofin J n:rn:1 dP Lizola, hij n de :-..J:rnlll'l (lC' Lizn):1 y dt• An n dt' Est•ohn r. euyn lwrnrnfü1, :llartina (l t> Lizola " Esrobnr hahín t•a~:llfo in'~ aih~ nntt'S <'tln <'l l'apitím .Tunn . ' :\í11t>ir l 111,1 Ag n il:,. primt>rt) 11t,1 rn, 111hr1' . .-\ l11n~() n nrl' Í:1 dL• Zú iiig:1 constit uyó lDO LCS :\[ACIEL E ~ LA HISTORIA DEL PLATA una. de las fortunas más considera.bles de Buenos Aires, con ramificaciones en Santa Fe y la Banda Oriental, y actuó en la. vida ~/_¿_,o._/ pública. en los años finales de su existencia siendo regidor perpetuo de Buenos Aires, su procurador general y alférez real. De su citado enlace nacieron siete hijos: l. Ana Jacoba1 que di ó su mano a :ilannel Antonio \Varnes; ~- ~Iaría Eusebia., que contrajo mat rimonio con Juan Angel de Lazcano, administrador de los pueblos de Misiones, con sucesión en Chile; 3. Bárbara, que easó con Juan Ignacio de Elia, con sucesión ilustre en la Argentina ; 4. Pedro •.T osé, presbítero i ;'j,t Juana, que celebró su boda con José María Calaicete, oficial de dragones, de origen italiano ; 6. Juan Francisco, que sigue esta línea; 7. Justo Esteban, que casó con Junna o Agustina ~folins y Crespo. -- VII. Juan F'raneisco García de Zúñiga vió la luz en Buenos Aires Y pasó en sus aüos mozos a ~outevideo donde constituyó también bienes cuan· tiosos. Hubo de comprar t odas las tierras que habían poseido los jesuita~ en la Banda Oriental, según lo 1·eveb e,l acta de la sesión celebra.da el 1;) de abril de 1771 por la Junta ProYineial de Temporalidades de Buenos Aires, '' Junn F rancisco García . . . hizo postura. n la e6tancia grande nonibrada Nuestra S eñora de los Desnmparados, alias la Cale1·a.; igualmente que a las estancias de la Orqueta, de Chamizo y la de Pando ... se proveyó que no l1a lugar por motivos que reserva la Junta (12) ". Sus 8/Ctividades comerciales no obstaculizaron su vocación militar .,v política·' fué electo alfé· , rez rral en 1790, Y al organizarse el batallón de voluntarios de infanteriít de Montevideo como unidad incorpornda al fue1·o militar García de Zúñiga ' 'é reeilJi6 su mando eon l os despachos de coronel, a los que hizo llono1· bnti n· dose hizarramE:'nte contra los invasores ingleses. El 21 de septiembre de . r1 pueblo de Montevideo al auto de L'iniers • que 1808, a l negar ob ed .ienem nombraba a don Junu A. Miehr lC'na gobernador de la ciudad, García de Zúfiiga fué designado primer diputado del cabildo n.bierto; depuesto :Michc· lena y reeusndn la nut.oridad virreinal, ronstituyóse unn. junta de gobierno 18 que fué la primera establecida en Am{>rica ; pero en los años inmediatos · º6n en contró al pNsonaje fiel a la. corona, Y du rnntc eausa de l a emanc1pnc1 • stl el asedio de ifont0,·idc'o continuó al frent(, dt~ su batallón a pesar de l¡;RA KC ISCO .AXTOK IO MAl"ItL HH a rnnzada e dad y de Ja eircunstancia d e que sus h ijos militaban bajo las banderas de la revoluciúu. Al caer prisionero de hi s f uerzas de Alvcar era brigadier de infantería. Su esposa, doña Francisca \Varncs, tambi,~u porteiia, tle6cendia ele una :mtigua familia irlandesa que emigró de su país durante las persecuciones religiosas, y que después de una permanencia en Amberes se fijó en Cádiz donde obtuvo una posición destacada. Su padre, Manuel Antonio \Varnes, vino a Buenos Aires como dueño y maestre de una fragata de matrícula francesa ; radicado aquí, fué regidor, alcalde, alférez real y juez d() menores entre los años de 1755 y 1775; contrajo matrimonio con doña María Josefa de Arraez y Larrazábal, y en segundas nupcifü1 con doña Ana J acoba García de Zúñiga, hermana. de Juan Prancisco. Con motivo de una incidencia personal y callejera con fray Antonio de San Xavier, procurador del hospital de Belén, el obispo don Manuel Antonio de la Torre fulminó excomunión contra \Varnes, la eua.l fué confirmada por el arzobispo de Charcas (13). El matrimonio entre Juan Francisco García de Zúñiga. y doña Josefa \Varnes tuvo lugar en Buenos Aires el 10 de enero de 1777, naciendo de ese tálamo doce hijos: l. Javier García, de Zúñiga, que con su esposa doiia Segunda Diago 1 fué tronco de la familia de su apellido en el U rugua.y; en unión de los doctores Nicolñis de Herrera, Francisco Juauic6 y Francisco Llambí constituyó el tribunal de apelaciones de la provincia Cisplatina. 2. Zenón García de Zúfliga, que ,contrajo enlace el 26 de junio de 1818 con su prima doña Manuela de Elío y tuvo por hija única a doüa I sabel García de Zúñiga, esposa que fué de su primo Cipriano de Elí:..1. 3. Tomás García de Zúñiga, que sigue esta linea. 4. P edro García de Zúñiga, que cursó el baphillrrnto l'n Sa.ntingo dcChile y se ordenó sacerdote. 5. Victorio García de Zúñiga, que siguió la cnrrera de leyes en l a. universidad de -San F elipe, en Chile ; fué presidente do la junta de la provincia de Buenos Aires y ministro de Estado; casó el 7 de julio de 1804 con su prima doña Carmen García de Zúñiga y Molins, siendo, padres de doña Clara, que se unió en matrimonio con 'l'ornás Manuel de Anchorena, miembro del congreso que declaró en Tucumán la. independencia argentina. .Jua.na Francisca García de Zúñiga, quo nació en l\lontcvideo el 26 de enero de 1789 ; su existencia se adornó ele méritos, pues olvidando sn fortuna se convirtió en la enfermera de los heridos e n las crueles guerra s de en pat ria; ayudó a la, educación pública y nl s ostenimiento d e los hospitales y fundó con su hermana Rosn el convPrlto dc- monjn s salesas de ~fontcvidPo, donde fa 1leci6 el 24 de a gosto d P 1R6G. 6. tos 191 ~IACÍEL EX LA HISTORIA DEL PLA'l\.\. Bernardina García de Zúñiga, que contrajo mntrimonio con r.Hguoi )lontestrue. 8. Estanislao Gure:ía de Zúñiga, quo casó con doña María Sainz do la ~faza. 9. ~ artín García de Zúñiga, con doña 1Iarcelina Allende. í. 10. Rosa García de Zúñiga, que vió la luz en :Montevideo el 17 de octubre de 1797, y fué desde su juventud un raro ejemplo de virtudes, al de· dicarse a la enseñanza de los niñ06 pobres y a la edupación de los lmér· fanos; no vacilaba en preparar con sus propias manos los medicamentos destinados a los enfermos a quienes asistía; destinó una ca.sa suya para · ejercicios espirituales, que le fué confiscada de maue1·a arbitraria; legó su fortuna al monasterio de monjas salesas del cual fué cofundadora, Y tomL1 su hábito bajo el nombre de sor Francisca d e Sales. Pasó a m ejor vida el 24 de diciembre de 1865. 11. José Luis García de Zúñiga, que casó con doña Prudencia de la Sierra. 12. María Gregaria García de Zúñiga, que vivió soltera. YIII. Tomá-s García de Zúñiga, hijo del general Juan Francisco García de Z úñiga. Y de doña Josefa W arnes era natura l de Buenos Aires, eomo sus padres ( 14 ) . Enviado en la adoles~encia a cursar estudios en la capit:ll chilena, su expediente universitario r evela que en 1794 obtenía excelentes notas en las asignaturas de bachillerato ; cursó luego jurisprudencia Y obtuvo el grado de doctor en cánones y leyes el 30 de enero de 1801. E st fl· blecido en Montevideo, fué electo síndico procurador general en 1808 ; pro· · · · 1t a de mot or d el movmuento popular de ese año, formó parte de la Jlll gobierno en cuyas deliberaciones mostró tnl independencia de carácter que ·, · de (lli). Poseedor más tarde de la famosa estancrn. provoco, su exonerae10n la Calera, sobre el Santa Lucía acumuló allí una nut rida biblioteca; puso ' su influencia a favor de la emancipación política y no vaciló e-n to1nflI' \' personalmente las armas en 1811, poniéndose al frente <le 1ma division · tomando parte en la batalla de Las Piedras como jefe de las i-ese1•vas, Integr6 el gobierno pro\'incial inst ituído por Artigas en el :\1:iguelct e el 20 de abril de 1813 ; elegido diputado al congreso general celebrado en diciembre del mismo año eu la. capilla de Maeiel se opuso a que R,oudenu 1a pres1·d enc1a · del cuerpo, sin obtener ' d esempenase éxito a causa de la pusilanimida d de sus colegas ; pero fué electo miembro de la. junta guber· nativa que surgió del congreso, en unión de don Juan José Duriin y don Fran~isco Remigio Castellanos. . ; Comandante ele la d~,'i.sión de _s_an ..Tosé frente a. las fuerzas inv~sor~: portuguesas, su person ahdnd adquirió tnl prestigio que una nsamblc:t PRA ~ C'ISC'O A~TO N IO 1\1.AOI EL 192 jefes n~ilitares -~e_lebr ~da o_n Santa Lucía el 2:3 de ma yo de 18 17 proclam6 a Ga rcia de Zuniga Jef e mterino d el e j ército oriental en substitución del ge_neral Fructuoso Rivera, p ero Artigas n egó su aprobación al n ombra16 miento ( ) . Concluída la guerra dió todo su apoyo al nuevo r égimen p olítico ; f u é diputado por Montev:i.- deo al congreso cisplntino de 1821 y procurador g en eral de la provincia, r e e ibiendo, e n t r e otros títulos y honores, los de brigadier de los ej ércitos imperiales y barón de la -3 . ~.;/ y ~""C40- '/, ~f/hl~O......_~ Calera. El triunfo de la causa independiente anuló su carrera pública, y perdidas su influencia y su fortuna emigró a. Río de Janeiro donde , iYió largos años como un estoico. Había contraido matrimonio con su prima doiia, María Ignacia. García de Zúñiga y 1\-f olins. La memoria de ese per sonaje ha sido obscurecida por los cultores <le la epopeya de 1825 ; pero la histor ia genética formulará a su tiempo un dictamen mús desinteresado, viendo en T omá s García de Zúñiga a un miembro de la (.•Jase civilista y culta que upo~·ó el régimen cisplatino como un factor de autonomía y evolución p ncífica y eomo un medio de impedir la nnarquín de 1a Na indcpendic>nt<'. La proveeduría de la real armada; caso de las corbetas "Descubierta" y "Atrevida". - MaCliel era proveedor de la real armada en Montevideo, función luf•rativa sólo en apariencia pues hay constancias de los serios perjuicios que ]e causó su desempeño. Al arribar al Plata en Sil viaje cjentífico de circunvalación las corbetas D escubierta y At1'evida, el asentista hallábase preso, n1otivo por el cual traspasó el contrato a su padre, don Luis Enr ique Maciel, y a su amigo don lVIanuel P érez de Sosa. El aproYisiona1niento de los dos barcos fué considerable, efectuándose rn relación con la nueva v extensa etapa que iban a recorrer hasta <'l Callao. Recibiéronse a bordo, a] con1enzar noviembre de 1789, . tos 19-i :\IACIEL EX LA H ISTORiA DEL PLATA los sun1inistros de yh·eres r leños, y expidieron los maestres respectivos los con1probantes del caso, que pasaron a manos del oficial real, quien los puso a disposición de los contadores de las corbetas a fin de asentar los textos en los libros del viaje. llué en esos días que los buques se hicieron nueyamente a la vela, llevándose los comprobantes. Las gestiones que se hicieron en Li• n1a y el Callao para obtener la restitución de -los documentos no dieron resultado, motiYando un Yiaje de l\1aciel a Buenos .Aires para reclamar el reconociinien to de la deuda, como apoderado de su padre y su socio ; den1anda infructuosa, desde luego, a pesar de los testin1onios presentados, pues las autoridades de la real hacienda no hicieron lugar a f'll<l. El proveedor perdió el 1nonto total de sus a bastos, de cuyo detalle dan cuenta los papeles que figuran en el expediente respectivo ( 17 ) . Dn. Francisco Bruzo, encargado de la corveta de S. ~- nombra.dn la Descub ierta, recivi de Dn. Luis Enrique 1fa.ciel Asentista de Yiveres de los Va.jeles -de S. :iL en ('-St c Puerto los Generos que a bajo se <:'xpresar{rn Y me ha entregado pa ra r epuesto de la Tripula111 y Gmunicion de dho Buque asaver Veinte y tres mil cuatrocientas treinta y ('Íll('O libras de Yiscocho ordinario. ~.Iil noYeeientas cincuenta libras de tozino. ::\1il setecientas setenta Y cinco libras de miniestra ( ?) fina. Dos mil quinientas ochenta y ocho libras de miniestra. basta. Veinte y quatro mil libras de leiía rajada... Cuatrocientas cincuenta librae <le sal. En,ases. Veinte y un ba rriles con arcos de fierro. Yeinte y un S!lcos ele cuero. . De cuios generos y envases me ha(Yo caro-o en virtud de este conoei· miento a fa\·or del expresado Asen t ista~ )ifon;evideo. y nobre. 7 de I 'i89 · Franco, Bruzo. Dn. 11ateo Garcia de la T orre, encarc:rado de la corveta de S. M. notn· . ' d e D n. L ms · Enrique t• s de los h raoa la. At rev1'd a r ec1n Mnciel Asentista. de nvere Bajeles de S. M. en <'st e Puerto loa Gen e ros que a bajo se expresan Y 111l' ir ha entregado para r epuesto de la Tripulacion y Guarnicion de dho Bn<¡t asaver Veinte y quatro mil non~cientas Yeinte y c.inco libras de Viscocho_ ()~. t . . . . . t tn•1nt,1 dinario. 1Iil novec1en as cmcuenta libras <le tocino. Dos mil cien o. . ra libras de minirstra fina . Dos mil noyecientas veinte y dos librns de nun1<'tit 1'HA1' CISCO A.:\TOXIO MACIEL 1q• í)-· basta. \"cinte y quatro mil libras u~ lefia rajada. Cua trocientas cincuenta libras de sal. E n Ya-ses. Ycinte y siete liarrilcs C'()U arcos de fierro. Yrinto sacos de cuero. De cuios generos y r m ·ases me hago cargo en virtud de este conocimiento a favor del expresado Asentista. ~íontevideo y nobiembre 8 de 1 í 89. Jfatheo García de la T orre. La confiscaciones de 1801 ; transgresión al tratado con Estados Unidos. - Las franquicias acordadas al comercio del Río de la Plata eran relativas, pues persistía co1no base del sistema establecido la prohibición de las importaciones extranjeras. Sus disposiciones no se cumplían siempre, tolerándose a veces las infracciones, pero solían aplicarse también con todo rigor, y cuando esto acaecía las sanciones eran graves y considerables los intereses perjudicados. Lo singular era que la legislación vigente constituía una lesión a los principios del derecho de gentes y hasta una transgresión de tratados celebrados por España. Vamos a referirnos a un caso no conocido y cuya divulgación permitirá advertir la oposición creada púr las trabas del 1nonopolio comercial, los preceptos de la r eciprocidad internacional y el conYenio celebrado entre la corona española y el gobierno de Estados Unidos en 1795. En 1801, don Francisco Antonio l\iaciel importó de Río J e Janeiro un cargamento de 1nercaderías que fué conducido a 1\1:ontevideo por la fragata Elisa, de la matrícula de Boston, la cual traía también efectos destinados al comercio de Buenos Aires y consignados a Juan Viola. Al presentarse los interesados a las autoridades solicitando la correspondiente valuación de derechos aduaneros, viéronse aplicar la pena de la confiscación in1puesta por las leyes. Arguyeron los importadores que sus 1nercancías habían salido del B!'asil antes de la ruptura de r elaciones entre las coronas peninsulares; que la clase de artículos adquiridos no estaba incluída entre las sujetas a prohibición; que la fragata Elisa había sido fletada por sus apoderados españoles; y que de8cargados los efectos en l\fontevideo saldría el buque con destino 196 LOS :\fAC!EL t.N LA HISTóIUA úE!L PLATA a BataYia. N'o se hizo lugar a las recla1naciones, y por decretos de 10 y 12 de septien1bre de 1801 el gobernador don José de Bustamante y Guerra 1nantuvo el deco111iso de la fragata y la totalidad de su carga, remitiendo los autos a Buenos Aires donde se siguió un largo pleito ( 18 ). Figura en ese expediente el escrito presentado por el capitán de la Elisa, Caleb Loring, de 27 años, natural de Boston, cuya exposición se encargó de revelar el conflicto existente entre el régimen prohibitivo mantenido por la metrópoli y las cláusulas VI, VII y XV del tratado firmado seis años antes en San Lorenzo por el príncipe de la Paz y el ministro americano Pinkney. La tesis presentada por el marino Loring era una novedad para los funcionarios coloniales, y constituye un antecedente en la historia de los esfuerzos hechos en el Plata para quebrar la rigidez de un sistema ya insostenible en los comienzos del siglo XIX. Los españoles, los aliados de los Esta.dos Unidos los que por un solemne tratado de garantía. y amistad celebrado y firm;do en San Lorenzo . el Real el 27 de octubre de 1795 por medio de sus plenipotenciarios el ciu· dadano don Tomás Pinkney y el señor príncipe de la Paz, ajustaron una recíproca protección, una paz sólida e inviola-ble, una amistad sincera Y perpetua entre una y otra Corte (sic), habrán de ser los que faltando 8 la buena fe que en todos tiempos los han hecho acreedores del respeto de }as naciones, Y vulnerando los más sagrados principios del derecho de gentes, quieran hacer presa de mi expedición j Tampoco me ha de valer la buena fe con que he venido a este puerto f Oh, señor! y O se bien quanta es la religiosidad de los españoles en la mas exacta observancia .de los tratados · que aJustan, Y no temo que contra lo convenido en el pacto de confedera· ción (sic) Y alianza con los Estados Unidos no respeten los derechos que por él concedieron a todos los individuos de esta nación. '' Cada una de las dos partes contratantes - dice el artículo sexto de aquel tratado -: procurará por todos los medios posibles proteger y defender todo~ 10. . , a·t otros efectos pertenecientes a los sub 1 os y c1uda buques y cualesqmera danos de la otra que se hallen en la extensión de su jurisdfoción, por 111~r . Y emp1eara, t od os sus esfuerzos para recobrar y h acer restituir . dO o por t ierra, a los propietarios legítimos los buques y efectos que se les hayan quita ·a. · · dº1cc16n, · en la extens1'6 n d e d'1ch a. Juris estén o no en guerra con 1a potenCJ . _ cuios súbditos hayan interceptado dichos efectos''. '' Se ha convenido FHA!\l ' ISCO A~ TO ~I O .:\IA('lEL 107 dice el artículo séptimo - que sus buques y efectos no pod rán sujetarse a ningún embargo o detención de parte de la. otra'' . . . '' Se p ermitirá dice el artículo quince - a todos y a. cada uno de los súbditos de Su Majestad Cat ólica y a los havitantes, pueblos y ciudadanos de los dichos Estados, que puedan navegar con eus embarcaciones con toda libertad y seguridad, sin que haya la m enor excepción por este respeto, auuquo los propietarios de las mercaderías cargadas en las referidas embarcaciones vengan del puerto que quieran... Se permitirá igualmente a los súbditos y havitantes mencionados navegar con sus buques y mercaderías y frecuentar con igual libertad y Beguridad las plazas y puertos de las potencias eneñiigas de las partes contratantes o de una de ellas'' . . . ' ' Se estipula también por el presente tratado que los buques libres asegurarán igualmente la libertad de las mercaderiae, y que se juzgaré., libres to<los los efectos que se hallaren a bordo de los buques' '. En vista de e8to - añadía el capit~n Loring - ya considerará V. S . si debería sorprenderme la noticia de haverse declarado por perdidos la fragata El isa y su cargamento. Y o creí siempre que mi benida a este puerto no me estaba entredicha, y para esto sobre la noticia que tenía del tratado entre mi nación y la corte de España. Y como no me ha de valer el sagrado de esta buena fe! Kosotros los americanos hemos entrar diariamente en nuestros puertos buques españoles; los recivimos con aquella hospitalidad que dicta Y prescribe el derecho de las gentes; nuestros gobiernos los protegen como a nuestros amigos y aliados. El gobernador Bustamante y Guerra no hizo lugar a la reclamación de Loring y mantuvo sus resoluciones anteriores, "respecto a que los artículos de los tratados que se citan tienen su verdadera inteligencia en sus propios casos, sin que por ellos se haya permitido jamás el libre comercio y expediciones n1ercantiles de puertos y buques extranjeros a los de nuestra América, ni rebocado las leyes fundamentales de estos Dominios, que lo prohiven; a que de ser asi excusado huviera sido la especial gracia concedida casi dos años despues de aquellos tratados en la real orden d e 18 de novie1nbre de 1797, ya ta1nbie11 rebocada por la de 20 lle abril de 1799 y 18 de julio de 1800. cuias real(ls disposiciones no es presumible las i~·norm,e d Sl\plicaute <~apitit n Lori11g-'\ 198 L06 MACIEL E:,.; LA lll~TOHIA DEL ~•L.\.TA Las milicias de Montevideo; sus jefes y oficiales. - En 1776 mandaba la con1pañía de milicias de caballería el capitán Fernando José Rodríguez, antiguo alcalde de la ciudad, siendo su segundo el teniente Lorenzo Figueredo, hijo del poblador de este apellido; y era jefe de la compañía de milicias de infantería el capitán Bruno Muñoz, que desempeñaba sin1ultáneamente magistraturas civiles, y segundo jefe el teniente Antonio Lopas. Ambas unidades fueron reforzadas algunos años más tarde, creándose la compañía de granaderos que entró a formar parte de la infantería y que se puso bajo el mando del citado Bruno Muñoz. En 1784 era teniente de los granaderos Plácido Gallardo y subteniente Francisco Antonio :M:aciel. La reorganización de las fuerzas de milicias de MonteYideo. proyectada en la última década del siglo XVIII, recibió sanción real el 24 de septiembre de 1800, correspondiendo su ejecución al marqués de Sobremonte, a la sazón subinspector del ejército. Las dos unidades anteriormente existentes deno1nináronse desde entonces "regimiento de milicias disciplinadas de voluntarios de caballería", Y "batallón de n1ilicias disciplinadas de volnn· tarios de infantería". Los reales despachos relativos a la cons· titución de la plana mayor de anibos cuerpos fueron sella.dos en Aranjuez en 1802 y 1803 v confir111aron las designaciones hechas precedenten1ente por ei virrey del Pino. Este aumento de fuerzas había sido precedido de la crea· ción del regimiento de blandengues de Montevideo, cuya organización, jefes y oficiales se detallan en el capítulo siguiente. Confióse la jefatura del regimiento de milicias de caballería al coronel don Joaquín de Soria (10) ; la segunda jefatura al comandante Felipe Pérez de Sosa, que había ejercido precedentemente el mando de la antigua unidad de aquella. arma : y non1bráronse capitanes a Juan de Medina Ranión de Cáceres. ,Juan Ignacio 1\1:artínez, lVIateo Gallego, M~nuel Gordillo, ~~nnuel José Pércz, .Juan de León, Francisco Sierra, Juan Cau1110 Trápani, SebafJtián Rivero ? Rartolon1 é Pérez. A_ estos ofieiaJes :-;e agregaron los ayudantes Berna'bé Cerineño y· Francisco Ven· FRANCISCO AXTOXIO :MACIEL 199 tt~ra del Hío; ~- los portaestandart es José l\Ialdonado, Francisco Silva y Estanrslao Rodríguez. Dióse el in ando del cuerpo de infautería al coronel Juan Francisco García de Zúñiga; no1ubróse segundo jefe al sargento mayor To1nás de Estrada ( 2º ) ; capitanes a , ríctor García de Zúñiga, Juan García, Crü;tóbal Salvafiack, Pablo Pérez, Juan Balbín de Vallejo, J\figuel Za1110:ra, Andrés Yáñez, Félix Mas de Ayala, Juan Fernández, Manuel Diago, l\Iatías Sánchez de la Razuela y Francisco Antonio :M:aciel; tenientes a Juan Antonio Gutiérrez, Félix Sáinz de la lVIaza, Jain1e lila, Jeróniino Olloniego, 1\1:anuel Nieto y Bernardo de la Torre; ayudantes a l\Ianuel Granada y Juan López, que procedían del regin1iento de infantería de Buenos Aires; y n1anteniéndose incorporada a esta unidad a la con1pañía de granaderos, se desjgnó su capitún a Joaquín de Chopitea y teniente a Juan de Ellauri. Son casi todos apellidos tradicionales de ~Iontevideo. P ersistía al con1e11zar el siglo XIX el .fPrreo espíritu 1nilitar de la conquista, y si los antiguos pobladores de ciudades habían nu111ejado el arado con una 1nano y con la otra el arcabuz, ta1nbién los Yecinos civiles de la época final del eoloniajc mai1tuYieron la organización bélica que hacía de cada hon1bre un soldado apto, fuere cual fuese su función en los períodos de paz. 1\sí, Francisco Antonio l\1:aciel, fuerte comerciante, prestó serYicios militares efectivos hasta el punto de afrontar al eneuiig-o y rendir Ja vida cuando las circunstancias lo exigieron. El despacho de don Carlos IV noinbrándole eapitán eomanclante ele una compañía de infantería. dice así : El Rey·. Por quanto atendiendo los servicios ~r rn eritos de Yos, dn. Franco. Anto. l\Iaciel, J1e venido en confer1r una de las <·ompañías del Batallon de nülü•ias disciplinadas_d e voluntarios <lr infautería de Montevideo. <1~ nneYa forrna<•1011. P or tanto mando :tl Virrey y Capn . Genr1·al dr }a<:; ProYinrjaR (lPI Rio <le la Plata <lP Ja ornen conYenien1 {) pél ra qur sr os ponga en posr~ión <1e ln referida con1paiíía: ~ r a los ofieia1es y soldados ele . aii .,· i·es11eten J)Ol' su Capita11, obedecien<lo ClJ a que os reconozec ' . 200 LOS MACIEL EN .LA HISTOHIA DEL PLA'fA las órdenes que les diereis de nü servicio por escrito y de palabra, sin réplica ni dilacion alguna ; y que asi ellos como los <lemas Cavos mayores y menores, oficiales y soldados de mis exercitos os hayan y tengan por tal Capitan de infantería de milicias, etc. - Cúmplase lo que S. M. manda en el antecedente Rl. Despacho y tómese razón en el Tribunal de Cuentas y Rls. Cajas de esta capital. - Joaquín del Pino ( 21 ). '- Los hijos de Maciel. - Francisco Antonio Maciel contrajo matrimonio en Montevideo el 29 de julio de 1787 con su prima María Antonia Gil, hija de Juan Gil y de doña María Petronila Camejo. Dióles la bendición nupcial el P. Juan José Ortiz, cura de la Matriz, "habiendo - dice el acta - el señor arcediano de la santa Iglesia Catedral de Buenos Aires, vicario general Y administrador del Obispado, sede vacante, dispensado el parentesco de consanguinidad en segundo grado, y las tres conciliares proclamas sobre el matrimonio". Cuatro de sus hijos llegaron a la edad n1adura: l. José Antonio Maciel, que nació el 15 de junio de 1790 ; permaneció fiel a los principios y costun1bres del coloniaje, Y se abstuvo de participar en los acontecimientos históricos que conmovieron al país en el curso de su vida. Perdida su fortuna, aceptó el modesto eiupleo de encargado del r egistro del hospital que fundara su padre ; pero dejó su voluntario retiro al producirse en 1857 la epide1nia de fiebre amarilla que die.zmó la población de Montevideo, esforzándose abnegadamente en salvar la vida de los enfermos a r iesgo de la suya. Estaba casado con doña Isidor a Sostoa y Achucarro, hija de don José Francisco de Sostoa, ministro de real hacienda dfl la Banda Oriental, Y de doña María Isidora de Achucarro. l\.iurió en su ciudad natal a los ochenta y dos años de edad. ' 2. !Iipólito Maciel, que abrazó la causa de la indepen~ dencia americana, ingresando como cadete en el primer escuadrón de g-nardins de cahaller fa del gobierno de Buenos Aires ; fné ascendido a alférez cl(\1 seg un ll o escuadrón por decreto F HA¡\ l'l ~l'O A~ TO~ lO ~IA('IEL ::!01 del director supre1no don Carlos de Alvear, e] 24 de febrero de 1815 e :! ) . 3. J osefa :\Iaeiel, tiue dió su 1na110 en 1830 a Juan l\.Iaría de Yargas y , ·iana, hijo del capitán de navío Juan Jacinto de Vargas (2 3 ) y <le doña Marí~ i\.nionia de Viana y Achucarro. La sucesión de aquel enlace ha ilustrado el foro, la cátedra, la medicina y la diplomacia de la sociedad amboplatina. 4. Vicente P. níaciel, hijo póstumo, que vió la luz en l\íontevideo el 28 de abril de 1807 ; hfa') la campaña de la guerra grande como oficial; ton1ó estado con doña Dominga Villegas; y terminó sus días el 28 de n1ayo de l 890. Tuvo doce hijos de su citado enlace: Lu cicloro, que casó co~1 Leonor Golfarini; Angela, con Juan Cruz Quinteros; Do1ninga :v Sofía, solteras; Jacinta, que dió su mano a José Puig; l\1aría, que celebró enlace con Alfredo Benausse; Nerea, soltera; Vicente, coronel del ejército uruguayo, que casó con Edelmira Dagne·re; Emilio, que lo hizo con su prima Rosa Villega1;;; Enrique, oficial n1ayor del 1\1:inistcrio de Hacienda y gran maestre de la nw~onería uruguaya, que ?ontrajo matrin1onio con J rene Flangini; Julio, con Rosa Morillo; y Delfina. Los del Pino. - El virrey don ,Joaquín del Pino naci6 en la villa de Baena, en Córdoba, el 20 de enero de J 7~9 y fué bautizado el 22 de febrero inmediato en 1a iglesia parroquial de Santa María la :M ayor por el eura vicario don Enrique Félix de la Chica. Amadrinóle su tía doña Juana de Yalenzuela y Pino ; y consta cu el asiento bautismal que sus pa<lres, Francisco del Pino y Romero y doña María Sánchez de R-0zas y Negrete, '' eran naturales de la ciudad de Orán ele donde salieron cuando la pérdida de dha. ciud a<l ' ' . Linajes ambos de arraigo histórico en la urbe morisca, uno de sus miembros, don José del Pino y Criales, abuelo del futuro procónsul rioplatense, murió en la pérdida de Orim en J 708; Y al abandonarla los españoles, fuéronse Jos hijos de aquel bravo soldado a las tierras cordobesas de Baena, d onde parientes de su apellido poseían mnyornzgo. Sin embargo, a Orán fué Joaquín d el Pino a, iniciarse en las nrmns cuando llególe Ja hora ele escoger carrera; ingresó como cadete en el regimiento fijo do aquella pbz:-i y <>ursó matemúticas en la Renl Academia )filitur que fun• c·i 1111Hba c·n ella, 203 L()~ :\IAC'IEL E~ L A lll $TOLUA DEI J PLATA Una, nota r ed actada por el p r op io del Piuo e·n 1776, siendo g olJcrnador d e )lon tevideo, y elevada p or Vértiz al m inis tro ,tle lns Indias don José G{tlvez, est ablece la siguien te iu f orm~.ción. de serYicios: ' ' H a scrYido a S . :\L d e c.a d e t c Pn el r eg imiento fijo d e Or:í.n desdo t'l 11 de ma)·o de 17-1 i ha sta el de marzo de 175 2, en cuyo tir mpo estudió las matemá ticas en la R eal y Militar Academia estn.blecid:1 en aquella plaza. De ingeniero d elineador desde el de ma.rzo <le 1752 hasta. el 21 de marzo de 1753 ; de ingeniero extraordinario del ~l de marzo de 1753 hast a el 2~ dé julio de 1760 ; de capitá,n e ing eniero ordinario d esde el ~2 de j ulio do 1760 hasta el ~-! de octubre d e 1770; d e teniente coronel de ingenieros en . segundo desde el ~-! d e octubre de 1770. Estuvo de gu:uuici6n en la plaz:i de Orá n cua tro años y s iet e m<'ses. En Cataluña, admuús ,d el servicio 0rdinario en el cuerpo d e i ng enier os y d e vm·ios r econocimientos en aquel prin· eipado, a sistió al levantamien to d Bl mapa que se hizo e n el Ampurd:'tn, Y :il que se le\"antó, de veint isi0h k g uas, de B:ncelona a Lérida, para l:i rons· trucción de la. nueYa carret era. E stuYo uuove años enearga.do de las reales obras del castillo de :.fonj uich, de B a r celona desdo el 53 hast:1. r l o::, qur de 0rden de S. ~ . se sus pend ieron 1· y se le dió el d r-stino de la proYineia de· Guipúzcoa, de donde fué eomision por igual real orden para lns obi·ns Y reparos que se cj eeutaron en las baterías y fortificaciones do la <' 0st :~ de Ca stilla, en que permaneció die z meses. En 11 de agosto de 1 7mJ fur comisionado de ord en del r e~- por comandante d e los ingenieros espaiiolcR q ue concurrieron al 1 . t • . 6 en l os confinrs e, a n a nuento d el mapa que s e eJrcut de N aYarra "J F r ancrn · , en los montes de- Alduidcs, en cuyo tra b a J·o ih\ • ' reducción d e pla n os y copias · d e los mismos . permauec1. 6 h ast·•<• e,1 °4 - dr enero de 17"1 Ult · · 1·10 ch' 1 • una.mente, en virtud d e orden de S. 1':L de 30 d o JU 1771 pasó a csh lll' .1· ncrn • d onde pernrnne('e , d e comandante d e l os jngc· 1 ado L ' ' º' r:ir- nieros d e ella, en la que ha P ' · · to del ticado así el reconocmucn • ('ll Río Grande como otros vanos . d unus S anta T er esa y Maldona 0 , ·t:tu ,re· veces ncompai"iando nl cnp 1 ' :, , u crnl p ara el r xpresndo ef.et•to · ' ·' . in ten· otras por sí solo nl nns mo d m)· to· hallúndose i o·tinlmentt' e e ' 1]nZtl bernndor iutel'ino de est.a 1 ' d esde el 10 de febrero d e 177·1 '[ t ·a -1 - d e JlllUO . . ,.,, ~ - .Tn(I · . , · - ., on ,ev1 eo ~o t1e 1. ' 0 · quf n del P 111 0 . - A (•st e of'1 .-1. l 1 ., ' . • and de • c ,1. o coucedw el r ey el o-ou1crno en pro¡ne , esta plaza en t¡ue sir,·e ro n ., • · º l· ite <l 1 . . ex,,etitud. I g uulmente se halla 1.l. e comalll ,u mc,em eros d t' est a 1wm·incin R0 1 , .:i •oroll~1 e eon sulto por neroed or n 1 gTndo ue e • "-= desde el 1-! de marzu de lii.3. - Ju an Jo.sé lk r ért fa ". (~-1) , FRANCISCO ANTONIO l\IACIEL :?.03 Cupo en suerte a del Pino actuar la mayor parte de su mandato en la Banda Oriental bajo la dirección de Vértiz, cuya talla de soldado y estadista se modela en la historia como la de un procónsul romano. Las iniciativas del gobernador de Montevideo hallaron el apoyo y el estímulo del virrey, continuándooe la obra de civilización comenzada. por el ilustre Viana. Las fortificaciones de la ciudad, reducidas a las viejas obras de Petrarca y Cardoso, fueron ampliadas y perfeccionadas; fundáronse Guadalupe, Pando, San Juan Bautista - hoy Santa Lucía - San José y Minas ; Maldonado, fué erigida en ciudad; fijáronse nuevos límites a la jurisdicción de Montevideo, que se ensanchó con la incorporación de Colonia del Sacramento, Santo Domingo Soriano, Maldonado, Santa Tecla y Santa Teresa ; se obtuvo autonomía en la administración de la real hacienda con la designación de un ministro en propiedad; afianzósc la industria sala<leril en el país; 6C creó la aduana y se mejoró el servicio de correos ; y la expedición decisiva de don Pedro ide Cevallos, que sólo l1a sido encarada bajo su aspecto militar, convirtió a la ciudad en un centro activo de tráfico, negocios y aprovisionamientos, sin que el término de la campaña implicase la vuelta al e-stancamiento anterior, pues el impulso recibido perduró parcialmente en el comercio y acreció la importancia política do la plaza al quedar anulado el factor lusitano de Colonia. E l :3 de abril de 1789 firmó don Carlos IV el titulo que nombra.bu a del Pino gobernador y capitán general de la provincia do Charras y presidente de la audiencia. de La Plata. Esta alta sedr judicial y uniYersitari:i veía mermar su antiguo poderío desde la creación del virreinato del Río de la Plata, que al desmembrar el del Perú y divid irse en ocho intendencias subordinadas al virrey de Buenos Aires, convirtió a. Charcas en un elemento secundario de corte de alzadas ( 25) . N neve años permaneció don Joaquín ocl Pino en el ejercicio de su magistratura; a. su ascrnso al grado de brigadier, recibido al dejar Montevideo, siguió en l 795 el de mariscal de campo, equivalente al actual generalato de división ; y n su misión en l1mrcas 3 uccdi6 la de Chile, cuyo gobierno dosemprñó desde 1799 hasta 1801. Vicuña Mackenna en su erudita Hi.storia crítica y social de la ándaa de Santia.,go, nana. la' entrada del presidente ,del Pino en su capital ; y deteniéndose en el detalle de los agasajos deeretados por el Cabildo, dice que los $ 4.000 que éste votó para sufragar los gastos, so convirtieron en más de $ 8.000 ; ordcn:íronse , , cuatro corridas do toros, dos comedias y tres días ele juegos de alcnncías, ca,b czas y pnrejns . .. que . se pueda rer~rntnr la plaza Y disponga que u mús del precio que por cl1n. dieren: se obligue ul subnstaclor al apronto ele toros iluminnci6n ele ln. plaza, refresco n.costumb1·ado a todo~ It,s trihunnks y ,t1e;w:,s <tdyaccntc~ 11 estu fun ción .. . quednndo a dis- jQ-1 LO$ MACIET, EN LA TII8TOHIA l>EL P LA'l'A posieión tll'l tcnkntc asesor letrado la ejecución ele carros y demás mojigangas' '. En abril de 1801 dej ó las riberas del Mapocho y emprendió viaJe a Buenos Aires. Había recibido el nombra.miento do virrey del Río de la Plata en el cunl debía culminar su cxt C'nsa vida pública. Tenía entonces setenta. y dos años ; la. obesida{l deformaba una contextura que había sido excepcionalmente robusta ; su frente espaciosa se prolongaba en una calva no disimulada por los mechones de la vejez; y bajo la nariz de pico de águila los labios apretados insinuaban una, energía en guardia. En la silla virreinal sucedió a Avilés, que había venido tam.b ién de Chile y que pasó de Buenos Aires a Lima ; poro apenas llevaba dol Pino varios meses en el ejercicio del poder; cuando las intrigas palaciegas hicieron sentir en la metrópoli su sigilosa acdón y obtuvieron la exoneración del magistrado acusándole de adoptar actitudes censurables frente al adversario portu· gués . . . Bastó un claro y enérgico memorial del virrey para conseguir su reposición en el alto cargo, del cual se encargó de alejarle de nuevo Y definitivamente una grave dolencia. La real audiencia se hizo cargo del gobierno al comenzar abril de 1804, y abiertos los pliegos de providencia quo contenían el nombre del sucesor, hallóse que era éste el marqués . ,de So bremonte, que estaba a la sazón en Montevideo en viaje de inspeccion. Sucumbió del Pino el 11 de aquel mes de abril, y el día 28 tomó Sobremonte el bastón do mando que debía conaervar luego 011 propiedad, pues el nom· bramiento de Abascal como virrey del Uio de la Plata, efectuado por real orden ,de 24 de abril de 1804, no se cumplió 011 virtud de haberse trasladado a aquél al Perú. De la actuación de don J oaqu.í n del Pino en Buenos Aires, abreviada por la muerte al cabo do tres años, informa la respuesta lapidaria enviada por el cabildo al interroga torio d el juez de residencia : , 'El excelentísiil1_0 señor Pino se manej{) en ésta con notorio desinter,és, celo e incesante aph· cación al traba.jo ; se manifestó entera.mente adicto a loa adelantamientos de esta ciudad y su jurisdicción ; se contrajo con especialidad al ramo de policía ; por estas razones informó est e Cabildo al soberano en favor suyo; y en su última enfermedad hizo pública plegaria por la salud de tan benemérito jefe" (20). Del Pino había contraído matrimonio en San Sebastián el 30 de marzo de 1763 con doñu María Ignacia de Ramery y Echauz, natural de aquell:1 . ciudad, hija de don Agustín de Ramcry, alcalde de la capital guipuzcoana y diputado por la provincia, y de doña :rvt:anuela. 'reresa de Echauz ( 27 ) • De aquel tálamo nacieron varios 11 ijos en Espafia y en Montevideo, y en ~ta ciudad falleció la esposn del g-obern Ui<.l or pl 17 ele junio de 1780, a lo~ tr~int~ v seis años de e clad, siendo srpulta,l:1 en la io-lcs ia matriz " f " ' PRA~CJRCO .\X 'f O~ IO MACJEt r.o.. ..; ,1 1'res aiíos des pués cclebrú <lon .Toaquín d el Pino nuevas nupcias con doña Rafaela de V era, dama santafecina de antecedencia ilustro. La partida matrimonial est ablece noticias que completa n las contenidas en Ja informa món que produjo el contrayente sobre s us propios :mtccedcntes (28): ' ' En primero de Marzo de 1783 aiios : haviendosc Dispensado por el Illmo. S r. Dn. Pr. Sebastian Malvar Dignissimo obispo de esta Diocessis en 13 de enero del corrte. año las tres conciliares Moniciones sobre el Matrimonio que mediante la Licencia dada por el cxmo. Sr. Dn. Jua n J ose de Vertiz y Salzedo, Virrey y Capitan Gral. de estas Provw. en 16 de Diciembre del año proxmo. pasado 82, intentaban contrnher el Sr. Coronel de I ngenieros Dn. J oaquin del Pino, natural de los Reynos de España, Gover nador actual Politico y Militar de la ciud. de Sn. F elipe de Montevideo Y Juez de arrivadas, Viudo de primeras Nupcias de Da. Ma. Jgna. Ramery, con Da. Rafaela Franca. de Vera Muxica, hija L exmo.., del Mre. de campo general Dn., Franco. Anto. de Vera Muxica y Dn. Juana Ventura Lopez Pintado, todos vezinos de esta Ciud. de Sta. Fee ; y no haviendo rooultado impedimento alguno canonico: Yo el D.r. Dn. Franco. Anto. de Vera Muxica Cura y Vicario de ella despose por palabras de presente segun forma de nra. Sta. ~fe. Iglessia al dho. .Sr, Governador Dn. J oaquin del Pino con la menciona da Da. Rafaela Franca, de Vera Muxiea, representando la misma persona del contrayente el Thente. Coronel de Milicias Dn. Franco. Xavier de la Torre, vezino de la Ciud. de Cordova del Tucuman, en virtud del poder que para este ef ecto otorgo el precitado Sr. Govr. en la referida Ciud. de Montevideo en 17 del mismo mes d e Dizbre. d el citado · nño de 82 ante Dn. José Zenzano Essno. real de Govicrno y Guerra de est e Yirreynato cuyos Documentos paran en mi poder; y mediante la azcptazion jurada que para este efecto hizo el expresado Dn. Ji,rnnco. Xavier de la Torre en 28 de febrero del corrte. afio. Haviendo oido advertido y entendido sus mutuos consentimts. a los dhos. Dn. Franco. Xavier de la Torre como poder habiente <lel enunciado Sr. Gover. Dn. Joaquin del Pino y Da. Hafael:t F ranca. de Vera ~fuxica de que por mi fueron reciprocamt.e. preguntados, siendo testigos el thete. de Governr. de esta dha. Ciud. Dn. ~felchor de Echague y Andia, Dn. Juan Franco. de Larrechca y Dn. Salvador Igno. de Amenabar Alcaldes ordinarios y el resto del Cabildo; y por verdad lo firme. - 'nr. Dn. Franco. Anta. de Vera Mu xica ( 29 ). El virrey del Pino tuvo diecisiete hijos en sus dos esposas. Nacieron de la primera, doña María Ignacia de Hamery Y Echauz: 1. Ramón de] Pino, en San Sebastián, el 31 de ~gosto de 1 !64, s~c>ndo bautizado al día siguiente en la iglrsia de San Vicente Martm baJo pl padrinazgo de sus abuelo~ maternos. Siguió la carrera_ de las nr~as y fu(, eapitán <lel regimiento d<' dragones de Buenos Aires; nsccudido a tos ~Oíl tenit' nto l.. MAf'IEi.J R~ LA ítn_,,~rúntA DEÍj :t>LA'i;A oronrl, se k nomhrú {onia1Hlanh, polítiro y militar de la plaz:L 0 dl' l'olonin. del S:H'rnmPnto, dnndt' so halln.bn al produ('irsc rl movimiento de mnvo 1 al cual ndhiri6 C'n los JHimcros <lías, scparú,ndose de él cuando la rovolul'ióu so orirnt6 n hi<'rtamrntc contra. la r.a.usa rcul ( 30). Contra.jo matrimonio en Buruos Airrs ron doña l•1rancisca Huct, hija del general do brigudn don Luis Hnet. ~- José ~lar in 1kl Pino, que nació Pn San Scbastiún el 8 de septiembre {k lílW; rcnliz6 sus Pstuclios militar<.'s on el colegio de artillería de Segovin. y llc.,gó al grado de brigndicr de los reales ejércitos. Casó en Buenos Ain's el 9 ele diciembr(l ele 180!'> con doña María l\{crcedes Saraza, viuda de Casimiro Pranciseo de Necocheu. 3. Mnrin J oscfa del Pino, que tnm bién vió la luz en San Sebasti{tn y fué bautizada el 2 <le febrero de 1768; dió su mano en Montevideo nl brigadier do ingenieros José P~rcz Brito, siendo padres del gen eral José Brito del Pino, que nació en la misma capital el 6 de enero de 1795 ; prócer de In. independencia uruguaya, se cubrió de gloria en Ituzaingó Y conoció el destierro en lns horas caóticas de la formación nn.cional ; fuJ tres veces ministro de la guerra en los gobiernos de Suárez, Giró y Busta · mnnte y murió oetogenario en su ciudad nntal (31), 4. Francisco Antonio del Pino, que vió igunlmcnto la luz en San Sebnst.ifm y fué bautizado el l:! de dicic,murc do 1769 en la. iglesia de San Vicente 11:artín. Ingresó a. los trece nfios de edad en la escuela militar de Segovia y fné promovido a. sul>teni(•ntc en 1787; eapit.{111 en 179!>, teniente coronel rn 1807 y coronel en 181 o, pasó a Caracas uurante In. guerra. de la independencia como subinspector del ~jére.ito, siendo pro· movido en 1832 a ln. alta dignidad do mariscal de los reales ejércitos. Ha,bin cnsado en 1808 con do fin ;r unna Shclly y murió en Madríü a. los ochenta y un nños de edad. 5. l\tI,urnola Josefa del Pino, quo nn<.'i6 en Vucntcrrubía ol 30 de junio do 1771 y falleció de sei::-i ll1(!8cs rn Guetaria. 6. Dionisia .Tonquina del Pino <flW nadó en IvTontevidco el 9 de ' . octubre de l 772 y fué bautizada en la iglesia matriz, siendo sus padnnos Antonio del Olmo, teniente del regimiento de infantería de Buenos Aires, d y doña Ana del Pino. :M:u~i6 en la. misma ciudad a los ocho años d~ edª 7. Tomhs José del Pmo, que nació y fué bautizado en Montevideo e 18 de septiembre do 1774, siendo su padrino don José Francisco de S 0stºª' ministro de real hacienda; murió de trece mesos. 8. Pedro Juan del Pino, que ta1nbién vi6 la luz en Montevideo el 18 de noviembre de 1776; murió de seis meses. 9. Juan Ramón José del Pino, que nació en la misma ciudad el 6 do mnyo lle 1778; siguió 1n rarrern militar, fné ofirinl del l'Cgimicnto i t'RAN'CIS('O AX'l'OXJO :\JA C'TEL ~01 de iufantería de Buenos Aircs y mfts tal'dc ,jefe de policía de esta capitnl. Casó con doña. Marcelina Nctochra y Saraza el Hl de junio de J80!l, y en segundas nupcias con doiia C'andcla ria. Somellern, Yiuda de don Julifm Grcgorio do Espinosa. 're rmin ó sus días en Buen os Aires, siendo t cn iC'n tc general, el 6 de abril ele l 8 11. Nacieron do la segun da esposa, doiia Ha.fa ela de Y era 1luxica : l. Francisco Pío del Pino, r n ~fontevideo, el 5 de ma yo de 1784; como todos sus hermanos, si guió la, carrera de las armas; fu{• gobC'rnador de León en 18~2 y murió en ~1adrid a los cuarent a. y seis aiíos de edad. 2 y 3. '\Venccslao y ~iigud del P ino, mellizos, que vieron la luz rn 11ontevideo y fueron bautizados en l a. iglesia matriz el '.!8 de septiemb1 e de 1785, siendo apadrina dos por 1'~st<.>ban Lifi{m, subteniente del r egimiento de infantería de Buenos Aires, y doña Ana del P ino. Ambos siguieron la carrera militar, C'studiando en Zamora y Alcalá de Henares. Miguel d(•l Pino era eor onel de infantería y gobernador militar de Aranjucz en 183-J ; lo fué luego de Murcia y Orense. W en ceslao del Pino contra.jo matrimonio en :Madrid el 25 de m ayo de 1813 eon <loiia 1faría Fcrnanda P érez Yillamil. 4. Juana del Pino, que nació y fué bautizada en :M ontevideo <'1 28 de diciE'mbro de 1786; contra.j o enlace en Buen os Aires el 14 de agosto de 1809 con el prócer argentino B erna r<lino Rivadavia, hijo de Benito Gon · zúlez de Rivadavia y d e doiía. ,l oscfa de Rivadavia y Rivadaneyra. 5. Rafa el Saturnino del Pino, que nació en M ont evideo C'1 11 de febrero de 1789; siguió la carrera, militar en España, donde murió en JS;n. 6. María. del Carmen del Pino, qno naeió en Chuquisaea el d0 julio de 1790 y r ecibió el bautismo en lu <'apilla d<' -Gn::idnlup<', de b iglesia cat edral ; dió su mano al c:rpit{m <h• na,·ío .Tn:rn An~('l lle 1liclwlN1a y terminó su vida en Madrid el ai10 18(-i l. 7. ~Iarinno Joaquí n del Pino, ft\H' tn.mhirn \'ió ln lnz t' n C'lmqu1s:1ca siendo bautizado el 11 u.o febrero U<' l 79~ por d arzobispo fray J osíAnton io de San Albert o; entró de cncl<'t<' t' n las guardias reales y murió en Buenos Aires a. l os trc>inta nüos dtt ('(}ad. 8. Frnequita ( T) del Pino, que 11nr i{1 t'n Chnquisaca <'ll 17~)-1 :-· t erminó sus díns C'n Buenos AirC's, soltr-ra, <'l -~ tlC' fl'brcro de 18i0. Doña. Rafacla dE' Vern, '' ln virreina duda'', pr<'sen ció en C1'b eapital los sucesos que dctcrminnron C'l cl <'rrumlw cl l'l rrgimC'n <'Il el cu:11 <>lla tanto había brillado; y falleció {•l I dC' julio d<' l RlG, n los sl.'sC'nta y tres aiios, siendo sepultndn l'n C'l pjlnr. La eor¡)na t,cordó n eadn uno de los hij os <le\ virrey un a pensión a nual de $ ~00, qur nuu r a se hi1.o efectiva. 208 tos MAC!EL E N LA HISTORIA DEL PLATA NOTAS DEL CAPIT'U LO XIII. (1) Documentos para la historia argentina, tomo VI edición de la Facultad de Filosofía y Letras de Buenos Aires. ' (2) AZAROLA GrL, Veint e linajes del siglo XV 111, capítulos III y VIII. (3) Mismo autor, Padrón histórico de Monte'IJideo. ( 4) Este expediente, hallado en :Madrid hace algunos años por el autor de esta crónica, formó parte luego del archivo del doctor don Julio Le· rena Juanicó. Entre las piezas que contiene figuran las declaraciones de don José Francisco de Sostoa, comisario de guerra y ministro de real hacienda de la plaza, y del coronel de artillería don Francisco de Oribe, fundador de la familia de su apellido en el Uruguay, que llegó a Montevideo en 1777 con la expedición de Cevallos. Entre las partidas matrimoniales re· producidas se halla la de Jorge Burgues y María Martina Carrasco, f echada en Buenos Aires el 20 de febrero de 1720, y la de Francisco de Pagol_? y María Martina Burgues, fechada en Montevideo el 16 de marzo de 17-fo, Constan igualmente certificaciones de los servicios públicos de Burgues Y Pagola. (5) Libros de bautizados de la iglesia matriz de Montevideo. . (6) La real cédula de 7 de diciembre de 1790, dirigida al virrey del Río de la Plata, concreta las denuncias formuladas por el marqués de Loreto. Docurncntos para la historia argentina, tomo VI. ( 7) Archivo general de la Nación, Buenos Aires, Criminales, lega· jo 5, NQ 33. •a (8) El doctor José Giró, médico español, fué tronco _d e la hist6~'1\ familia de este apellido en el Uruguay, y padre de don Juan Franci~~s Giró, que nació en Montevideo el 3 de julio de 1791, se e_d~c6 en 13 Estados Unidos y culminó su vida pública siendo electo presidente de República el 1 de marzo de 1852. r-ín (9) Este diagnóstico del doctor Giró y su terminol~gía, parece1;as singulares a los clínicos de nuestra época; pero esas conclusiones ! fori el de expresión eran las usa das por los médicos de España Y A~érie~ ~~xto siglo XVIII. A este respecto, considei·o de interés informa~ivo e fecha de otro diagnóstico que fué formulado en Santiago de . Chile den quelltt p r óxima a la del anterior. Se conserva en el Archivo Nacioual e ª Licen· capital, volumen 265 de "Jesu'ítas", Argentina, particulares: , 'El Dr. Dn. José Antonio Rios, Protomedico de este Rno. Y. e1dad en 'ciado D. Jose Gomez d el Castillo, Medico Cirujano de est~. Ciu debajo cumplimien to del Superior Decreto de VS., que manda certifiqu; nipor11,· ,de Juramen to s.re. el p edimento que hace el Administrador de e desde }ida.des D. P edro Viguera relativo a los quebrantos de que adole~e:0 n su que llegó a este Rno. de Chile, con ocacion del Temperamento nocn or que salud Decimos: Ser cierta y constante la verdad de este hecho, d~ido Y han . sido y son varios los a ccidentes que dlio. cavallero ha Ptiernente, padece. En el estio le a.comet e una disenteria que le atenua n;ota;ente Jllt11 a causa de que siendo su t emperamento ardiente, y por conc\~~ en este dis u esto al phogosis, con el calor de la atmósfera tan _qu: Clh~ a y tan seco, se exaltan las !_:l a les acres y partes_ sul.f~ les excit::i abuna'a su masa Sanguinea y vcllicando las fibras rntestmn ª\~:as de PRANC'ISC'O AX'fONIO 1'IAC IE1-, ::!0!) molestisimos_ ten ?s1110~. Al rnis~10 tpo. que ~n sangre es tan biliosa y uci·c•, los st~eos diges~1vos de las pn~ncra~ vias c:irecen de aquella actividad y e~ergi~ n cces~r13: pa~a una d1gcsho11 pcrfrcta, de donde provien en Jns D1spexias, o mdigestioncs, que d(• tpo. en tpo. padece, originandose de aqui 1~11 cl~il o crudo, que llevado n, lH; misma maaa de la sangre aumen ta. la a.c:11noma d_c sus sales; esta tamb1en ~s la causa de los dolores vagos y <l1fercntes s1mptomas que en su maquma se notan, cuya concequencia con el tiempo será, una caquexia formal quizá escorbutica. No podemos dudar, que a vista de semejante constitucion y de tanta divercidad de sirnvtomas sea el clima en que havita tan caliente y seco, y absolutamente vario en sus qualidades senciblos, la causa primordial de estos padecimientos, por lo qual jusgamos, que si dho. Don Pedro Vigueras pasara a otro temperamento mas benigno, en que ae familiarisase recobraria la salud que tiene l)erdida; que es quanto pode1nos certificar baxo del juramento mandado Santiago y Agosto dies y siete de mil setecientos noventa y seis. - Doct or J ose .An-tonio Rfos. - El Licenciado J ose Gornez clel Castillo''. ( 10) El virrey don Nicolás do Anedondo, emparentado con los aseenclientes de las f amilias uruguayas de Haedo y Zorrilla. de San Martin, nació en Bárcena de Cicero Santander, el 17 o el 24 de abril de 1726 ; ingresó a l os diecisiet e años ~n el real cuerpo de guardias españolas y t ?1:16 parte en las guerras de Italia, de donde regresó con el grado de cal?1~an de fusileros; en 1778 pasó a Cuba como 1~rnyor general de la. expedición ~le don Vi ctorio Navia, siendo después designado · par~ el gob:erno de la isla; nombrado virrey del Río de la Plat_a p~r r eal titulo de 21 <le marzo de ] 78H, ej erció el cargo durante sms anos hnsta, su reemplazo yor don P ed ro Melo de Portuo-al. Do r etorno a la J?c>nmsula, . fue ca¡ntán gc>ncral de N avarra y luego de Valencia y Murcia ,Y_ presidente de la Audiencia. Estaba casado con dofia Josefa Rosa de M10no Bustamante, en quien t uvo entre otros hijos, a don Manuel de Arredondo, eab~llero _de , d e san J u an l ,,'ala t rava. 'marques - de NeJ)omuceno ' <1uc peleó on las · campanas l 1 del Rosei'Ión y del Quinto y en el Perú contr~ San M~rbn, 1asta a · capitulación del Callao; mun'ó e~n 1545 · siendo . , mariscal de campo. . prnncra b·z · rw· de la antigua caip tfmna gen eral de Ch1le, ,:. , N (11) .1.,SPEJO o t laf - Ota egm,. S·~m t'-rn~o O' '· d e don Carlos p ena t oino II· · y arclnvo de ami·1·, ia , ,.. de ChilP.' · d Chile '',Tesmtas'', volumen 261 . 1 ( :!) Archivo Naciona l, Santrn.go e. . ti' e i·cgi·sti·" esta fuente hav . • t la reso1uc1011 q · "' · ' .; S lll Pmbargo, postenormeu e a que 9wl 0 de la misma. colección . • , . • , d t d an el volumen • , Ot l .. ,. 1 · ..., rnene10n ocumen a a 'de las tierras de los Jesmtas revela que García de Zúñiga adqmrdo gu~~!utas ~stablecido por ei admien la Banda. Oriental. En el e st a O tº 'd"o don Andrés Yáñez en 22 d e l'd d en Mon ev1 "' , , 11 · ~s!rauor de la~ 'fem~~ora 1 a es. don Juan Prancisco adeudando a las , , or el r esto del remate ~ue hizo d11e1emlirc de 1786, f1g~ua el ci~ac1O 08 'l t•mporalida<lfs la cantidad de $ 11:6 d' 1; Calera Pnndo y Cha nuzo, con al fi ado, de fas estan cias Y gana d ods ee1.~0 d"' 1776· en adelante' '. " , . d d 1 1 Q e en .e· • lll ,1s los rechtos nl 5 % es e e ,ade1nia Chilena de la Hist01'la, ( 1:1) PEÑA ÜTAF.GUI, B oletín de la A.e . 1 . niio I , n úm. 2. . univ<'rsicl:ld de San F~lipe, con1 ( H) .E xpedientes do cst~tdlO~ ~e ,~ Cn pitnnía general, Umversidad" servnclos en el archivo de Sn ntiugo, r ol unwn IX. 210 LOS 1\fACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA (1~) , R e vista d el arcJiiro g cn('ral administrati,1:0, l\1ontevidco, tomo IX, ') t pag...-:t. Historia d e la do111,inación español,i, tomo III documento d e prueba N9 19, A, B, C, D y E. ' (17) ArchiYo general de la Nación, Buenos Aires; división Colonia, Tribunales, lcgQ 76, núm. 10. (18) 1Hsma fuente, legQ 68, núm. 22, y legQ 115, exp. 2848. ( 19) AZAROLA GIL, Veinte linajes del siglo XV 111, cap. IX. ( 20) Tomás de Estraida, teniente del regimiento de infantería de Buenos Aires, f u é ascendido a ayudante mayor de la misma unidad el 30 de abril de 1779; a capitán graduado el 29 d e mayo de 1782 ; deBt~ca~o a las milicias de 11:ontevideo, promoviósele a capitán efectivo el 2 de J~nio de 1783, y a sargento mayor del r egimiento de infantería de Montevideo el 24 de mayo de 1802. Se vinculó a la sociedad montevideana. por su enlace con doña niaría. T er esa de Viana, hija del primer gobernador de la ciu<lad, y tuvo, entre otros hijos, a doña Concepción de Estra<l~, que di6 su mano a su tío materno el mayor general don Francisco Javier ~e Viana, y fallecido éste, a don Agustín Urtubey. E l sargento mayor Tom~s de Estrada murió gloriosamente junto a su amigo Francisco Antoino :Matiel, el 20 de enero de 1807 cerrando el pa8o de :Montevideo ª los . ' invasores ingleses. Archivo O'Cncr al de la Nación Buenos Aires; T omas ele raión, ( 21 ) .b ' l 1 ro 21, f olio 182. º (22 ) :Misma fuente, libro 77, folio 10. (23) AZAROLA GIL, Veintt:, lina jes del siglo XVIII, cap. X. _ A" 1ºJ·-!·3, . 24 Arclnvo general de Indias audiencia de Buenos ires, ., ( ) legajo 529, con carta de Vért iz a GáÍvcz, de 8 de junio de 177ü. (25) Rurz GuIÑAzú, La magistratura iri ll·i ana. . 0 26 ( ) Acuerdos del extingwido Cabilclo ele B ,u enos Aires, volumen e rrespondiente a los años 1805-1807. (27) GUERRA, Padrón histórico de G'nip{¿zcoa. . Jo ? p · 0 sien 8 (- ) En la información presentada por don Joaquín del in ' }. de - Rafae ªaes· gob erna d or de :Montevideo JJara contraer matrimonio con dona · 111 . V era, :figuran, entro otros 'documentos, algunos m emoriales , del ce' lebre obispo 1 tre de campo_ Antonio de Vera Muxica ; la noticia elevada por e hoinbrCS de_ Buenos Aires, don Antonio de Azcona, a. S . }.f. acer~a de 109 cuYº 680 1 mas destacados de la go b crnación del Plata por los anos de . , ' reln· . . rmac1on1 re:11 t ex t O e-st a, reprod uc1do en el Apéndice bajo el NQ 6 · la ID.LO tiva. a la antecedencia de familia de doña Rafaela de Vera; ccic 6U5 título de don Carlos III nombrando a del Pino coronel gradu~dot 0 br:1 ·, · · d1en e 11 <.'Jercitos; la partida de bautismo del mismo et c Este expc 1·a e ' ol A r cluvo · ' atur · a 132- 5 18 '· cop ' En general de Indias bajo la sign podi~r ,de don Carlos Peña Otacgui, Santiago de Chile. de 111 (!?O) El doctor Prancisco An tonio de Vera Muxica, heri~un;1 ¡78_0; desposada, que era cura rector de la iglesia. matriz de Santa. Fe z.{tJez a~ de~lara que en el libro de l;autizados que ll evó el P. Mjguel Goientcs ~11 L oiva (cura <le 1745 a 1760 ) , faltnn varias partidas ('ol'respon (16) BAUZÁ, FRANCT8('0 A1\'l'OX JO :\I AClEL ~11 año 1753. Son las de Juan :M anuel Maciel , ~1anuel Antonio de Zabala. y Rafal?.la de Vera. Con este motivo lleváronsc a cabo informaciones de filiación y b a utismo ante la a utoridacl eclesiástica, a not á ndose las r csvectivas partidas al margen ele los folios 83/87. Consta, en una de ellas c1ue la esposa del gobern ador del Pino había n acido el 24 de octubre de 1753. (30) AZA.ROLA GIL, La epopeya1 de Mamtel Lob o, cap. XI. ( 31) De esta rama d esciende la distinguida dama uruguaya doña J osefa Hrito del Pino, qu0 ha colaborado Pn el -e.sta:jlecimiento de esta noticia g enealógica. CAPITULO DECIMOCUARTO CAPITAN DE BLANDENGUES CARLOS MACIEL 1769-1833 E ,l soldado. Carlos Maciel, 11ijo de Luis Enrique ~Iaciel de doña Bárbara Camejo, vió la luz en San F,elipe de Montevideo el 31 de octubre de 1759. Puede considerarse a este fuerte soldado con10 uno de los representantes típicos del final del r égünen español. Bajo ést-e nació, se educó y actuó; defendióle con el espíritu y las arnu ts · , ' cayo con él; y fiel a su pasado, su tradición y su bandera, rompió su espada cuando triunfó la causa c1nancipadora. .Apartóse <lel mundo y rnurió solo, corno un caba11ero antiguo Y<'ncido Y no humillado. Su historia es breve y digna. llela aquí, en tJ·es páginas, como una síntesis de l a l1i8toria del ciclo en qne le toc·ó vivir , luchar y morir. Sus campañas. - Empezó su carrera en las 1ni]icias de l\1fon tcvideo y acompañó a su padre en los co1uetidos n1ilitares que fuero n asignados a don Luis Enrique Maciel Y que quedaron seíialados en el capítulo XII. Al or6 anizarse el r egiiniento de milicias de caball ería, tuvo en esta unidad los grados d e alférez Y tenirnte ; y al cr earse el cu(lrpo veterano de bla~1dengues, el Yirrcy OJagner Feliú ascendió a don Carlos Mae:e,l al grado de c·apitán, dándole el 111 ando de la cuarta compan1a por des- 21-1 LOS n!ACIEL E~ LA HISTORIA DEL PLATA pacho fechado en l\Iontevideo el 31 de dicien1bre de 1797 ... '' y guardándosele y haciéndole guardar las honras, exenciones. y prerrogativas que por este título le pertenecen". . . Por rea l despacho de 2 de enero de 1799, don Carlos IV confirmó la designación, por "quanto atendiendo a las circunstancias que concurren en vos, an. Carlos Maciel, y al servicio qe, habéis hecho de presentar 100 hombres vestidos y con dos caballos cada uno para el Cuerpo de Caballería de Blandengues de la. Frontera de iíontvº· ( 1 ). El real título está re'f rendado por el conde de Casa Valencia. El año de 1800, el nuevo virrey, marqués de Avilés, perseguía el propósito de fundar los pueblos de Belén, San Gabriel, San José y Santa Ana en la ribera del Uruguay, entre los ríos Arapey y Cuareiin. Desde luego, tuvo que chocar contra la oposición charrúa enseñoreada en la región. Tocó a Sobremonte disponer el plan de las operaciones de represión, y a ese efecto ordenó una concentración de fuerzas en la zona. El capit:ín lVIaciel hallábase a la sazón en Cerro Largo, al mando de dos con1 pañías de su reginliento, y en ejecución de las disposiciones dictadas cruzó el territorio hasta el Arapey incorporándose coi; sus blandengues a los del capitán J orp- J Pacheco. La ca111paña :ne dura, coino lo reYelan los documentos que se han publicado (:] : pero cuhninó con el eastj ~o de las indiadas y la fundacion tro , , · , d e B el en, un1co nucleo que se logró establecer de los cua proyectados. , . , sa1·1ente del capitan . , Mac1el . tuvo 1ugar durante I.1a· actu a c)1011 ' . · · · • l b: 1as invasiones inglesas, pues fué su regimiento la un1dac ªs1ca ene, · con que cont o 1a defensa p ara contrarrestar los ataques · . migos. Condujéronse los veteranos con 1nás heroísmo que eficacia en el curso de los sucesos acaecidos en enero Y febrero de 1807 ; batiéronse ruda1nente en lVfaldonado Punta Carretas 13 . ' . nto Y u ceo, Y sostuvieron casi todo el peso del choque sangrie del Cardal, el 20 de enero, perdiendo nu1nerosos oficiales Y sol; dados. Al frente de sus hon1bres, el capitán ~1:aciel no tu" 0 tiempo para detenerse a llorar 80bl'e el cadáver de sn herinan , CAPITAX DE BL.\XDEXOPES CAHLOS )IAC'IEL 215 el padre de los p obres, y Yoh·ió a resistir al ene1nigo en el asalto lleYado por éste contra la p!aza el 3 de f ebrero, soportando estoicamente el bo1nbardeo de las piezas de 1nar y tierra. E s en su infor1ne acerca de las a cciones susodichas, que el comandante Ramírez de Arellano, jefe de los blandengues, destaca la conducta heroica de Carlos l\Iaciel entre los oficiales que pelearon a su lado (3 ). Como se sabe, la guerra de la independencia produjo un Yerdadero cisma entre los oficiales del brillante cuerpo. Como se leerá en la crónica que consagran1os al regiiniento de blandengues en 1as páginas siguientes, hubo oficiales que optaron por incorporarse al n1oviiniento revolucionario 1nientras otros permanecieron resueltamente leales a la causa tradicional. Los primeros han adquirido relieve de próceres en la historia del Plata, y la memoria de los últi111os ha quedado borrada de los anal es nacionales. Carlos l\faciel está entre éstos. Permaneció firme en su puesto de batalla, en las 1nurallas de l\íontevideo, durante los tres años del sitio; y caído el poder español en el Uruguay, juzg-ó terminada su carrera militar después de cuarenta años de servicios desinteresados. Se enclaustró en su hogar, donde murió cristianam ente, con10 sus mayores, el 10 de setiembre de 1833, se pul tándosele al día siguiente en el cement~rio de la jglesia matriz ( 4 ) . Su descendencia. - De su 1natrimonio con doña Ran1ona F ernández tuvo la siguiente sucesión: l. José J ulián lV[aciel, que sigue esta línea; 2. Francisco Antonio :r.faciel, segundo del nombre, que casó con doña Aurora Ca~ml, con sucesión; 3. José Rainón 1\1aciel, q ne se afirn1a pasó . al Brasil ; 4. Luis :r.íaciel; 5. Mercedes lvfaciel. J osé J uliá 11 l\íaciel, hijo del efl pHún Carlos 1\Iac1el y de doña Ramona Fernández. contrajo matrimonio con doña Paula l\fartínez, hij a d e F élix ,l\1artínez y de doña P etrona Villavi. . cencio. naciC'nclo de ese túlan10 : ··t a. l\tr,1.ac1 .·e1, c¡nc vió la luz el 20 <1e Jnho de 1824 ] . 1\I ... élrga11 ~Hi LOS )IAC'IEL EK LA HIS'l'ORIA DEL PLATA y fué bautizada el 5 de agosto del mismo año, siendo sus padrinos Bernardo Susviela y Manuela Santalices. Consolación i1aciel. 3. José J ulián iraciel, que nació el 5 de noviembre de 1830 y recibió el agua bautismal el 24 de los nlismos, siendo apadrinado por Sebastián Oger y doña Consolación Herrera y Obes. 4. Jerónimo Federico Maciel, que vió la luz el 1 de abril de 1833 y fué bautizado el 17 de mayo del mismo año, siendo sus padrinos el escribano J erónüno Pío Bianqui y doña Catalina Mas. 5. Ramona Prudencia Maciel, nacida el 28 de abril de 1835 Y bautizada el 8 de mayo del mismo año; fueron sus pa~rinos Lázaro Luis De i1:aría y doña Nicolasa Martínez. _ 31 6. Carlos Justo Maciel, que nació el 19 de julio de 18 Y fué conducido a la pila bautismal el 12 de octubre por sus padrinos 1\1:anuel Freire y su esposa doña Gregoria l\iai~t~iez. 7 • Dolores Manuela Maciel que vió la luz el 12 d e di cielll· bre de 1840 Y fué bautizada el 2'9 de septie1nbre de 1841, sieutlo sus padrinos José Castro y doña Manuela Herrera. 8. Delfina Paz ~Iaciel, nacida el 6 de septie1nbre de l S-!~ Y llevada a la pila el 6 de junio de 1843 por sus padrinos :Manne Wich y doña Paz Vargas. • .. . . f . n baut1· T od os es t os lUJos nacieron en 1\1:ontevideo y uer O · • , zados en la iglesia n1atriz. Su padre quedó viudo Y v01" 1º ª casar con doña Dolores Largacha, sin sucesión. 2. . l ¡?obres J uan .P dro Mac1el. - Este her1nano del Padre_ de os de 22 Y del ca pitan don Carlos l\iaciel nació en l\1ontev1deo el 0 febrero de 1764; en1pezó su carrera militar en Buenos Aires c?Jll z 11e · f anter1a; ' cad et e d e 111 y por real despacho fechado en AranJ:ado el 8 de febrero de 1794, fué ascendido a subteniente abautleI ,\ idel terce~ batallón del regimiento de infantería de Buenos J ar res (G) • Al organizarse el cuerpo veterano de blandengues )Jl .d . te (' l 1\1ontcv1 eo obtuvo su pro1noción al grado de tenien ' 1 , CAPITAN DE: IlLANDENGUES CARLOS MACIEL :217 destino a la segunda compañía a cargo del capitán don Jorge Paeheco, siéndole confirmado el despacho por don Carlos IV e] 2 de enero de 1799 ( 6 ). Fué nombrado fiscal de la causa seguida en 1801 contra los asaltantes del pueblo de Las Víboras y estancia de don Francisco .A.lbín, cuyo proceso tuvo lugar en Buenos Aires, siendo sentenciados los criminales a la horca y descuartizamiento, trágica sentencia que se ejecutó en la plaza l\!ayor el 5 de diciembre del año citado, originando una enfermedad a Maciel, que debió presidir el acto (7). De resultas de esa dolencia solicitó su retiro del servicio activo, siéndole acordado por real orden fechada en San Lorenzo del Escorial el 3 de octubre de 1803. Sin e1nbargo, producida la invasión inglesa volvió a tomar voluntariamente las armas y participó en la reconquista de Buenos Aires como agregado a la plana mayor de la infantería veterana ( 8 ). Don Juan Pedro Maciel contrajo n1atrimonio en ~Iontevideo el 19 de octubre de 1795 con doña Mónica García, hija de Pedro García y de doña Rita ~1:ontes ele Oca. El regimiento de blandengues de Montevideo; su creación; sus oficiales; su historia. - Esta unidad 1nilitar tuvo su antecedente en la creación de tres compañías qne el rabildo de Buenos Aires se vió obligado a ordenar, en 1752, para defender las fronteras de su vasta jurisdicción contra las depredaciones de los indígenas. La cooperación del gobernador Andonaeg~i parece haber sido precaria; carecieron los soldados c e vestuar~o 2 1nilitar; su arman1ento fué heterogéneo; Y pocos anos -~espues · · ·· - fort1·ues· , l '·1s tres ue prestar serv1c1os en 1eJanos . ron1¡)an1as . . hude la n11ser1a . d e e1·1so1verse b aJ· 0 la amenaza b 1eron · · .. . . .. R1n en1que se · · bargo, ]os scrv1c1os el e esta· tropa eran de tal ef1cac1a ., -, arb't ] - Cl11·sos l ogro 1 rar os re , • necesarios a sn . n1anutenc1on ., .Y .paga. El gobierno de Vértiz tornó próspera la s1tuac1on del_ r eg1m:ento. - , , f u e .au1nentado a seis, dotandoEl nú1nero de sus con1pan1as _ , . · urnian1 e1ito · El .cuerpo perduro ha.Jo 8elas <le uniforn1e y 1neJor . ., · (!lle su Jefe, el coronel don su de1101n111ac1on ha sta 1810 , en ~18 LOS )IACIEL E~ LA. HISTORL~ DEL PLATA .Antonio de OlaYarría, propuso y obtuYo que se cambiase su designación dándole la de regimiento de caballería de la Patria. La creación del '' Cuerpo "\Teterano de Blandengues de la Frontera de l\Iontevideo" fué decidida por el virrey don Pedro nielo de Portugal en los primeros días de 1797, pero los cometidos que se le asignaron fueron sensiblemente n1ás a1nplios que los que había tenido la unidad similar en Buenos ....\ires. Esta se constituyó para defender a los vecindarios de los malones indios, mientras que a los blandengues de la Banda Oriental, además de este objetiYo esencial, se les con1etió el de la defensa de las fronteras contra el tradicional eneniigo portugués, y el de la represión del contrabando. Al finalizar el siglo X"\TIII la sociedad inorgánica carecía de especializaciones, sólo concebibles en una organización adelantada. El blandengue fué soldado, gendarn1e y aduanero. El Yirrey l\lelo de Portugal concentró en el nuevo cuerpo los Pl'l~pósitos de defensa militar, de seguridad de las poblaciones ri Yiles Y de cumplimiento de las disposiciones aduaneras. La . ., t . l El organ1zac1011 y el número se ajustaron al triple co1ne 1c o. . . reg1m1ento no parece haber reunido nunca la totah.dad el e Sll' elementos en una sola concentración, o mejor dicho, sns eoi~_., es t uv1eron . d estacadas en distintos puntos de l a caiupan11 pan1as '. , de 11ontevideo Y del territorio que constituía su jurisdiccioll n1ilitar. . , 11('() En carta de 7 de enero de 1797 l\Ielo de Portugal coni ni ' ·t o d e constituir · · el' reo·1nuento · · la n1isn1:1 a1 1' ey su p1·opos1 v en t"I ' ., • l •) · · · , al n11n1stro • . . f ecl1a se d 1r1g10 de real hacienda de l\, I on t·ey 1c e'. . par1e Ins ine·• para pa.rtic1 e . . l a d c11 ( ----~.....- d1das destinac as .tl'• O ejecución al proyecto, ·~ f,JAA ~ - - nando $ 30.000 a los t=-' . ,ll'V"N ., ]Jst,1 ·, , ~ . ' tos de oro-anizacion. · b • (' 1 . . . pasar ~c/42' ,~ tuyo pr1nc1p10 a 1 y1uel . :1 J t o·obierno de l\Ion e ºdel n1ar1scal . d e e~an1Pº !Ji/4 • · ª:.~. , CAPITA~ DE BLANDENGUES CARLOS :)L\C'IEL ~19 don . A.ntonio Olaguer Feliú al brigadier don ,Tosé de Bustamante Y Guerra. Y por una singular coincidencia de cir cunstancias, pasó también en esos días el bastón virreinal de las manos de J\1:elo de Portugal a las de Olaguer Feliú. En efecto, el prin1ero de estos procónsules n1urió casi repentina1nente en Pando el 15 de abril de aquel año, cuando se dirigía al este del país en viaje de inspección militar. Estos can1bios en la dirección del gobierno no afectaron la ejecución del proyecto. El 10 de marzo un hombre de accióh ' joven aím, conocedor profundo del territorio y de las modalidades de su tiempo, recibió la misión de salir a campaña y buscar los primeros elementos para constituir el nuevo i·egimiento. Era don José Artigas. Y cun1ple destacar la fecha y la nlisión citadas, por la historicidad que ambas revisten en la vida del {!ran soldado. En efecto, hasta entonces Artigas había sido un hon1bre civil; a contar de aquella data einpezó a ser caudillo. Fué, con certeza, gracias a su ascendiente natural y a la autor idnd que en1anaba de su persona, que recibió el mandato d e salir a ca1npaña y de traer hombres dispuestos y capaces d e dese1npeñar los deberes asignados a los blandengues. Artigas cumplió la orden recibida y trajo a l\'1ontevideo los pri1neros c•incuenta soldados. El caudillo nacía y el regi1niento de bland engues se formaba. Por real orden de 12 de 1nayo del niisn10 año, don Carlos IV daba respuesta a la carta que el virrey Melo le había escrito el 7 de enero. La creación del cuerpo de blandengues de la frontera de Montevideo recibió la aprobación real. Esa comunicación llea-ó a manos de Olagucr Feliú, a ia sazón en ~onteYideo al fin:lizar agosto. El 4 de setie1nbre el nuevo v1rrc)· , ' fº . del documento ¡Jor el cual se to1naba Pon 1a su 1rma a 1 pie mes se non1braban los )·az..on d e 1a rea1 or d en. El 23 del niisn10 · ,, primeros oficiales y el 6 de octnbre se extend1a el despacho d e comandante de la nueva unidad a favor del sargento mayor don Cavetano Ramírez de Arellano. ., ., . •c:iez con que se proced10 a fundar I •1ama la atenc1on 1a rc1p1 .l " 220 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA y organizar el regimiento de blandengues, en una época que precisamente se caracterizaba por la lentitud de los procedimientos y el aplaza1niento indefinido de las resoluciones. Debe deducirse que se sentía en grado máximo la necesidad de disponer de una fuerza militar veterana y homogénea, y que existía un acuerdo entre los hombres que compartían las responsabilidades del gobierno en Montevideo y Buenos Aires. La unidad se constituyó con ocho compañías de cien homHres cada una, y se designó su oficialidad mediante una selección previa de veteranos procedentes de los dos cuerpos de milicias 1nontevideanas y de los infantes, dragones y blandengues de Buenos Aires. Su citado jefe, Ramírez de Arellano. era miembro de la ilustre familia española de ese apellido >' primo del marqués de Sobremonte. Realizó casi toda su carrera en el Río de la Plata. Fué nombrado ayudante de la asa1nblea de infantería de Buenos Aires por despachos fechados el 3? de octubre de 1784 ; promovido a capitán graduado de la nusroa unidad el 20 de febrero de 1793 y ascendido a sargento mayor. con el cometido susodicho. Estuvo al frente de los blandengues durante diecisiete años hasta el aniquilamiento del cuerpo durante el sitio d e M¿ntevideo por las fuerzas de la iu<le· pendencia. - ,. a 1 capitán Se nombro, comandan te d e la primera compan1a ,. F raga, que desen1peno - , ese puesto hasta su deceso, J uan L opez ocurrido en 1804. Procedía d el regimiento de infantería de Buenos Aires, donde tenía el g-rado de teniente. . ,. a doll P ara 1a segunda co1npañía, ascendióse a capitan ·a , erv1 J orge P ach eco, que durante cerca de veinte años habia s . co }1, l . . } en e1 r eg1m1ento de blandengu es de Buenos Aires. Pac ie ,. si·dO pro b able1nente el 1nilitar que se 1nantuvo durant e Ill~~ • co1n° 1argo tiempo en esta histórica unidad• se le encuentra ya d , ' ue R alferez en 1781 Y teniente años después· capitán, coino q _ . h0 1 ' ll1 •1nte d ic , a cr earse la unidad en Montevideo en 1797; Y l , . , d f. l ' btU' 0 O nien ose ie mente en su seno hasta el año 1810 en que 0 · H · , ' p cbeC su retiro. e de ref er1rme mas adelante a la acción de ª ° , C' APITAN DE BLANDENGUES CARLOS lfACIEL ~21 en el curso de sus can1pañas; pero debo recordar que, vinculado por alianza 1natrimonial con doña Dionisia Obes, hermana del doctor Lucas Obes, el enünente consejero político de Rivera, fué padre del prócer de la defensa de 1íontevideo, general Melchor Pacheco y Obes. Para 111andar la tercera éompañía se nombró al capitán Felipe Santiago Cardoso, que pasó casi de inmediato a la sexta, siendo reen1plazado en aquélla por el capitán Francisco Esquir el Y Aldao, que murió en la campaña contra los indios rebeldes antes de terminar el año 1798. El capitán Esquivel y Aldao acababa <le dejar el mando del fuerte de San Carlos, en la frontera de Mendoza.. La cuarta compañía fué confiada al capitán Carlos Maciel, como se ha expresado, portaguión de la compañía de milicias ele eaba1lería de Montevideo. Para mandar la quinta compañía se no1nbró al capitán Bartolomé Riesgo, que servía con ese grado en las milicias de caballería de Montevideo. Para la sexta compañía se designó al citado capitán Felipe Santiago Cardoso que procedía de la guarnición de Buenos Aires. Para Ja séptin1a compañía al capitán Juan A~ustín Pago_l~. teniente d e las milicias de infantería de Montevideo. Era hiJo <le ~Juan Bautista Pagola, natural de Guipúzcoa Y uno, de los · . fue• padre O 1)rimeros • vecinos de Montev1'deo. El cap 1·ta'n Pao·ola del c·oronel l\fanuel Vicente Pagola, jefe del fam?so r_eg1m1ento ele línea número 9, que se cubrió de gloria en Sip~-Sipe. , capitán J\h o-uel J\íar1n, • , l I_ja octava compañía se con f 10 a º . . , adete del reg1m1en to que hab1a con1enzado su earrera como e c1r dragones de Buenos Aires. ,.,, J d º'" e nombró teniente de la primer . a co1npan1a a ' uan e , d B C • • t de infanter1a e uenos uesta subteniente del regimien d ·t, .1 ' . , t de al urado e cap1 an \ • res. Este oficial fué ascendido mas .ar º , d • d b a con el alferez e1 n11s1no e 1andengues, y su vacante llena ª rr~im iento José I gnacio Warnes. ° , \,l ,l LOS :\L\l'IEL EX LA HISTORIA DEL PLATA J)L'SÜ.!·n0st\ t oliL'll Ü' dt' ln ~eg-tuHla t·o1n paü ia.. a tTuan P1:drn ::\IaL•iel. ht' r111a111..). '-\<HUO rl capitún de la enarta, del padre d, lv~ pobres y cuya fnj a (le serYieios consta en las p:íginas an 1eriore~. l)it'lo·o Fernúndt'Z f u~ non1brado teniente de la tercera comt:' paiiía. habiendo sido subteniente de infantería en Buenos J..ires. Be le asl\entlió en 110Yie1nbre de 1804 a capitán de la primera t\ornpañía, al prodt1L' Ü'Sf esa Ya ean te por n1uerte del ofi cial ti'-' tular~ Juan L6pez ~.,rag·a. En la cuarta co1npaíiía npar eeen dos no1nbrn1nien tos dt' tenientes : los de Bebastiú n Pizarro, cadete del regimiento de infantería de Buenos . .:\..ires, y de Rafael l\.farín, subteniente de la n1is1ua ar1na en dicha capital. En ca1nbio, no h e hallado la designación correspondiente a la tenencia de la quinta compañía, lo que 111e induce a creer que alguno de los oficiales nombrados debe haber pasado a la citada quinta poco despuJs de su no1ubra1niento para la euarta ; pero no teniendo constancia do eun1ental del hecho, he preferido consignar los nombres de an1bos oficia les rn la eoinpafiía para la cual t1parecen designados p or sus despachos. . . Se non1bró teniente d e la sexta coinpafiía al alférez del re: guniento de dragones de Buenos .A..ires, l\'.1iguel Borrás, que fue ascendido a capitán ele la t ercera co1npañía al producirse la iuuerte del. titular, capitán EsqniYel y .i\ldno, al año siguiente de la creación del regiiniento. . Para. la séptima Y och1Ya co1npañías, fueron designados tenientes, respectiYan1eute, Ignacio ~1:artínez, alférez d e dra· genes de Bueuos .1\ires, ~- .Agustín Belgrano. No he lood eternunar · ,., , s en 1· d r a O con exactitud las con1pania q_u~ prest aron s er~~icios los diez alféreces que he conseguido jden: tif1car. Para e,·itar· e11. .01.es, pref'1ero cons1gnar . . • . sus n 0 1 ~,.bre:, sin es~ecific~r. s us r espectivas co1npañías. Son los siguien~es: Isidro Fehx de Quesada ; en 1803 fué ascendido a tenientr de la cuarta ro1npaíiía. 'ñ'l Alejandro l\T edrnno: en 180-! fué ascendido a teniente ~1e la tercera co1n pañía. > CAPITAX DE BLA~DEXGUE S CARLOS MAC'lEL 223 José Ignacio \Y arnes, que nació en Dueuos .A.il'cs en 1770 • tomó parte en la defensa de su ciudad natal durante las inYasione~ inglesas; adoptó la causa de la independencia y p eleó en las batallas de Tucu1nán, Salta, Las Piedras, \ Tilcapujio y Ayohuma. Fué gobernador de Santa Cruz de la Sierra, to1nó parte en la expedición a la provincia de Chiquitos y 1nurió gloriosamente en la batalla de Parí, siendo coronel, en 1816. Su hermana, doña Josefa W arnes, fué una de las clamas de n1ayor destaque de la sociedad colonial montevideana, pues era esposa de don Juan Francisco García de Zúñiga, el hombre de 1nayor fortuna de la Banda Oriental al comenzar el siglo XIX, brigadier de infantería y padre de don Tomás García de Zúñiga. José Pérez. José Con1ulat; en 1802 fué ascendido a teniente de la sexta compau1a. ].1anuel Langueneheim, que procedía del r egiiniento de blandengues de Buenos Aires; en 1803 fué ascendido a t eniente de la cuarta compañía. Fué hecho prisionero en 1814 al caer Montevideo, siendo ayudante 1nayor de la caballería de lVIaldonado. Gregorio Patiño. Francisco Ventura del Río, que figura el año de la creación del reo-imiento como sar(J'ento distinguido, siendo ascendido a b o . .d 1 alférez al comenzar el año siguiente, lo que pern11te cons1 erar o también conlo uno de los oficiales fundadores de la unidad. -/ Pi]ar 1'.fartínez. , R d liabía empezado su ca rrera en 1793 ,Jose :\iOn eau, que . . A' · f t ' de Buenos 1res · como cadete del regin1iento de 1n an eria . ' bl d ngues de 1\íontev1deo en , . , f ne ascendido a alferez de 1os an e ~etien1bre de 1797 . promovido a teniente de la sexta c?n1~, ' • , La bioO'rafía de este procer Pan1a y luego a capitan en 1807· º . . de I · d d • d R/ ct-e la Plata es de1nas1ado conocida a 1n epen enc1a e1 10 Para que sea necesario r ecordarla. . . lo cine se refiere a Artigas; pero Otro tanto debo <l ee1r en 224: LOS MACIEL EX LA HISTORIA. DEL PLATA conv1ene aclarar un punto que hasta hoy no aparece consio-. nado en su verdadero carácter. º Artigas fué, con10 lo he dicho antes, el ejecutor primero del propósito fund_a cional del regimiento de blandengues; pero 110 podía ingresar con10 oficial del mismo, porque no había pertenecido antes con ese carácter a otra unidad militar. Como lo indica su denonünación, el regimiento de blandengues era un cuerpo veterano, lo que en el espíritu de la época significaba que sus oficiales debían poseer el grado de tales antes de ser incorporados al nueYo cuerpo. Y co1no se ha visto, todos los que he mencionado procedían de otras unidades militares. Habían acreditado servicios en distintas unidades; en el vocabulario de la época, eran veteranos. De ahí que Artigas, para alcanzar su grado de ayudant.e 1nayor de blandengues, haya debido aceptar primera111ente el prestar servicios como oficial en las milicias de caballería de iiontevideo. He dicho que el blandengue era soldado, gendarme Y adu~: nero; pero debo añadir que sobrepasó esos con1etidos Y reunio ellos otro que r ealza aún 1nás el papel que desempeñó 1 la formación social del país. En aquel período en que el desierto era el peor obstáculo para la r ealización ele la obra civilizadora. , • peraaquellos soldados fueron los 1nejores y mas eficaces coo , . . , t or1cn dores en la fundación de pueblos. Melo, cuya erecc1o1: e .1 databa de 1795, recién constituyó el número de ciento c.incuent, · 1. co1ncolonos, diseminados en su zona estanciera, cuando as 1 f ontern. pañías de blandeng ues en1pezaron a sucederse en ª d io. alejando a los indios y a1nparando el trabajo del vecin En 1800 y 1801, cuando el Yirrey Avilés dispuso que don eios ' fueron . de Azara fundase pueblos en el noroeste del pais, carCTOI 011 hombres de 11aciel y de J org() Pacheco los que se en. º 1 }os . a 1os 111 · d'omitos · ' · · do que surO'iesei -~llí eh arruas, permit1en d e b a t 1r villas de Batoví y Belén después de una dura campana. ;ióll . . . . la protec se establec1eron los pobladores baJo el ausp1c10 Y ¿1t.l . d sn erl1 de los blandengues. Don Setembr1no E . Pere a, en . L 0· renzo obra sobre "El Belén uruguayo histórico", y el doctor e: a ;~li~ O ,., > CAPITAN DI>: BLAXDE~GrES CARLOS MACIEL 225 B~rbageiata en, su estudio sobre "Artigas antes de 1810", publicado hace 1nas de treinta años en la "Revista Históric-:1 de la Universidad", han documentado antes que yo la coope_ración de aquellos soldados al establecin1iento de los colonos, el fraccionamiento de las tierras, el castigo de la delincuencia y la creación de comunicaciones. No es en una breve disertación que puede revelarse la influencia que ejercieron en el surgimiento de las primeras manifestaciones de la civilización hispanoriental. Ésta se llevó a cabo y fué capaz de difundirse gracias al empleo de la fuerza, inteligente y honestamente aplicada; y esa fuerza tuvo su exponente más eficaz en la acción desarrollada por los soldados de Ramírez de Arellano. Está todavía por escribirse uno de los capítulos más importantes de nuestra historia colonial: el que se refiere a la colaboración fecunda del blandengue en el proceso inicial de la cultura uruguaya. Conocemos, en cambio, su actuación militar. Sabemos cómo se condujeron durante las invasiones inglesas, en las horas de los combates recios y los sacrificios sangrientos. En Maldonado, en el Buceo y bajo las murallas de Montevideo, el cuerpo de blandengues fué la unidad básica de la resistencia contra el invasor, superior en número, en elementos y en disposiciones t écnicas. Otra etapa de heroísn10 en1pezó con las guerras de la independencia, pero esta vez acompañada del sentimiento de an1argura que debía originar la división de las opiniones políticas en el seno de la entidad n1ilitar, cuya homogeneidad fué quebrantada antes que sus filas se rompiesen en choques hon1éricos. Los compañeros de ayer cruzaron sus armas en defensa de ideales opuestos. La mitad de los oficiales acmnpañó a Artigas en la epopeya de la emancipación; la otra 1nitad perinaneció vinculada a la causa tradicional. Estamos de1nasia<lo lejos de aquellos sucesos para que la pasión en1pañe nuestro juicio; Y si el corazón nos inclina decididamente hacia los hombres que lucharon por constituir una patria libre, nuestro respeto debe alcanzar también a los que hicieron gala de entereza desde el campo con- LOS 1LAl'IEL EX L.·\ HISTORIA DEL PLATA tr~riv. El -ralor es digno de adniirar~e sea cual fu er e la causa q uc lo engendra. El :¿3 de junio de 181-1-, al entrar en l\tiontevideo las tropas de AJ-rear hallaron entre los <lefensores a un grupo de hombres ' con unifonnes en andrajos, que hacían saltar sus ar1nas en pedazos contra las piedras grises de la ciudadela. Eran los últimos blandengues. Al la<lo del co1.nandante Ra1nírez de Ar ellano estaban los capitanes Bartolomé Riesgo, Juan Agustín Pagola y Carlos Maciel: el jefe y tres oficiales fundadores del cuerpo. Junto a ellos se apiñaban cincuenta y siete ho1nbres. Eran los sobreYivientes de la bizarra unidad que había contado con ochotientos soldados en sus filas. Al llegar frente a aquel puñado de valientes, los oficiales de Alvear alzaron sus espadas. Pué el homenaje de los vencedores a los gloriosos vencidos. 1\l evocar su recuerdo histórico, eabe forn1ular esta afirmación verídica: en la hi st0r ia uruguaya, blanden g ue ha sido siempre sinónimo de héroe. XOTAR DEL CAPlTl:LO X I Y . 1 1 bro ) . ~rchi\:o ~enc:ral . di· la _Xaeión, Buenos Aires; T omas de ra:ó1!1, '.; Itl"ntü' f oll:os 1J8/i.HJ; m1su1a fue11tP, libro 5 folios 140 y 1-! 2; nm lll• ,._ e, o lOB 149 y 154 . , ·. t · (2) B uz ' B · <le prueba Aistf{w ele la dorninaci6n española, tomo II, d ?cu_rne\ ~~ S mo I. N9 d En el Di .' ' C, D, E, Y 1,, ; PEREIDA, Pa1J'8aniJú patru5tu:o, ·,. Peª:C..1a de esa, c~mpaña, escrito por don Jorge Pachef:nes publirado por i;obre Maciel la . . en su citada. obra, se leen entre otras mene el 6 cabo José Pérez s~guiei;te: ' ' Día 4. Como a ]as 6 de la tarde Jieg el eapit(tn don Carlos º~a ; hombre~ despachad os desde el Arapey Pº:oce· e e1, que viene a cargo de los 200 hombr es P 8 d:i dentes d el Cerro L a rgo. dTrae tr · · · . es o f.1c1os: en el pri~ero a.visa s u lleª ,ai~cias a aquel punto el día 28 <los hombres por e f e noviembre, y de haber retirado a las est · st' halla su caballada n de,rnios; en el segundo trata del deterioro en qu~·esa 1 t ene: . t ambien 25 t~ta~~ c uale~ p erdido 47 por cansados, Y effdos; manifiesta traer 4lB . d 1ente inutiles por flacos mancos Y Illa todo d~ repuesto. l~n el tp1e ras. de chispa, 8360 cartuch~s y 14 carabinas, pOil' dientes al cif\ado m:rce~o mcluye las certificaciones de revista corr~i e!l este ~ía ". s e noviembre. y fué todo . cuanto acaec1 (v) , BAU.zA, obra citad 764. Archivo de h i l ª! ,docum entos d e prueba del tomo III, p g. 1 (~)) T ~nias de 1-~zó-! cf¡:r m~triz, .libro 8-9, folio 35. ( Misma f uente i'-b , foho 289. ( 7 ) VI CENTE G Q' 1 ro v, folio 178. B Uf'nos A . . . U F.S ADA . La Rcrisfa Je ' ' ' sungrienta eJ·ecución'' tres, tomo r 8 ( ) B A UZÁ. ' . ' J'l , obra r1tada d II, p{1g. 7> · ' ocum<>nt os de prueba d el tomo 3 (!) ~a: , APENDICE DOCU MENTAL L 1. Encomienda de la tribu de Telomyan condic concedida a Juan Ruiz de Ocafia.. - Buenos Aires, 15 de junio de 1583. Antonio de Torres Pineda ca.pitan y t eniente de ,g ovcrnador justicia mayor desta ciudad de la trinidad y puerto do buenos ayres p or el muy Ittro. Sr. Juan de garay teniente de governador y capitan general 0 justicia mayor e a lguacil mayor en todas estas probincias e governasion dcste Rio de la plata por el muy Ittre. Sr. el licdo. Juan de Torres de V era adelanta;Jo y governador y capitan gcn<'ral y justicia mayor desta governasion del Rio de la plnta por Su Mg,t como susesor del muy Ittre. Sr. Juan ortiz d e zarato que dios aya C'n gloria ndclantado y governador que fuo destns probincias y govrrnasion del Rio de la plata. Por la presento acatando que bos ,Tunn Ruiz. d e ocaüa sois hijod L·a1go y que con •gran zclo do srrhir a di os ~· a :-iu ~fo. ge!. <'S detrrniinastrys y mobistcys d o vra. c·nMt n 1,('nir r on t'l g<'fü•rn 1 ,l n~n de ga ray con vras. armas y cavu JloR y j<•nto dr vro. sr•rbisio a vrn. co~tn Y mension ayudar en ostn pu eblnsion y ronquit:itn dl•sta l' iudad 1lE' In trinidn<l Y puerto d o buenos ayros y lo ahcis nsi lH'cho ~· nyurlndo halhntloos <'n Jos Rccuontros y quns. alnrclca (JtH' c•on los indio~ t' n<'migos s~ han tPnido y lo nbeis fcc•ho ('11 todn lH's c•on10 hu<'n iwldntlo y nsist irndo y ayuda ndo ron todo valor y nyucla. Y nrntantlo n lns enlidnd<'s de ,·rn. pcrRona y mNitos y qu<' ~n todo nhris srrhido "!-. sNhirc':'R a ~u ~fngd. por la prC'IH'nte os dov v seii:lto v non bro un <'llsiqn<' llamndo telom,,·a n rondi<Pl qu:-il fu r C' l prlm~r rnsiqu~ qtH' Rl' dt•s('ubrio quatro k~uas d('sta ('iucfad f.'l Ri.v nd1ur lo nrribn donde Sú tubo una r rnda gurrrn ro n ('} y su jente; Y Rirnrlo ynformn<lo y anbido quo t-1 g-c'lll'rnl ,Tunn O(' gn ray os le 1E>nia •Indo :'\' nonbrn<lo por vro. :· pnrn hos ( rot o) n lo murho que :-tY<'i 111 l'il'J'h icl n t' n t odns oRtns ro nqnistns d,,sta pur hlasion de sa rgento ma:·or ron to,ln <'1 cu;vdnclo <JU" Rt' den• trnt'r pnrn rl tal ofir io :.r porque lo lllt1rC'sl'yH ? av r ht trn\'njado y s<'rvitlo por la prrst-• ut(' "!-' <'n nonbrc ~n M11g-11 y d i'} llluy 1 tt r<.'. Sr. ,luan <k toHt•z dt.\ v('ra ntlrla ntado y g O\'C'r nn dnr y r11 pitan g't.' JH'T:l 1 t' jus ti<'in ma.,·or destn go,·<'rnasion d C'l Ri o d e 1a Pla t a por Ru Mng<l. 08 <'tH•omy<'wlo t•l t'nsiqnc frlo m~•un ro nclic y p or dho . ·1 • ' l . . l t.'S 11 on l H<' c¡ualquiera que tuhit' r c c•on todoq suH rnuios SUJ(' os y Jlrms1pn ª" ,")- u... o L0-S ~L-\C'IEL E~ L.\ IIIST0RL\ DEL PLATA con sus tierras aguauas l'.a LaUl' ros y prsqucrias y que pod ays de doquiera a doquiera qut:> indios del dho easiqut' hallarcdeys pedir y sacar de tll.i· lesquier Repartimiento ~- d e poder de qualesquicr p ersona que tu,·iert:-. colll.o Yra. e rropia y metello en la j urisdisiou y n1ando Yro. rl qual ea,ique con sus indios e rrensipal(•s os doy para bos y para Yr os. hijos y ni~!J ( s 1) como lo manda y . . . Su Magd. por sus cedulas con tal que lo, dotrineys ~· castigueys y pon gays en pulisia segun y como Su i\IagJ lu manda por sus probisiones •v os encarcro Yra. consiencia d escargando b t::de Su ~ agd. ~- la mya. Por la presente 1nando a la justicia e justicfa, 1uayores y menores de~ta ciudad os amparen y defienda n en todo ~!l y en la posesion de todo ello os metan que yo 1, or la presente os ponrJ en la posesion• •de rod º v• amparo "'Y defiend o ..,y os meto d esde lueO"o b ... (1, ello; Y mando .. . v corporalmente os d en todas las , ,eces que pidierey:, · . . a· ll dho. casique ~- R eparto. sin t1 ho m a ndato alguno. Sobre lo qual . . . fra ~rn pt' presente firmada de my nonbre " R efr enada d el esenYano ~'1.1 qu e- es. Pee.ha en esta ~iud acl de la trjnidad "5' puerto de buenos :iyrcs :i q uinze d e junio de mill v quius. v ochenta y tres años. · · ······ · ·· ·~· · . • d n ('t1.1 Y digo que las tierras " ª""nadas v eaeerins que digo fas oy e~ n•· . • . • . TT Q"'\ I 0 l '• d1c1on que no se a~van dado a otra Persona Alguna. - A~ . : t~ 11¡, TORRES PIXEDA. - Por mandad o del señor caPitHll ";>' tinirn l 1• • ( Al m:1r!?l ' J~OY<'rnador. ga.sPar de quercdo eseriYano p eo. de r anldo. · Tomose la razon en :!l de j unio d(' lGl 1. t~ ,· • • • s " oehrll · En b eynte y dos d1as del 1nes de agosto dl'l null ~r quin · · r rl'ren <1n a tro años ante el señor eaPitan " tiniente de goYernador Y en rui~ . . • . · Juan r cia de m1 gasPar de queYedo escriV ano d e ca Y1ldo parecio . sciíCl" d . p1· b al d1rho d e oca na Yezo. est a crndad v di J. o que J)edia v su !<.'a a " . dh1• dos '• 11 • • • • ll hn1en te le metiese ~- nn parase en l a Posesion y Prop1echtd . nitlit'' . . I s d1chos que est,un SUJCtos al casique ... que se 11:nna. t elomyan ~- 0 cdnJ:1 dt' en que pide la Posesion ~a vac.:11 " ralnqua Por birtud de st n e 0 0 rti:. · • d • rr · que vzo Precentacion " el d]10 señor tiniente de goYertHl 01 . dri d th' . t d.. . . . • prop1e . 1.' I d e ~ar a t.' . lJO que el le anpn ra l)n y me tia e-u la Poscs1011 . . , no- i, . · . h O escn'·1 . los dhos ynd10s eaycal y cula qun l'n presencia de nn el d hr:it'Ll ' 1 clho Juan rruiz en señal de posesion tomo n Yno dellos por e d ch' ~t1· fcrunn , . . 1e em b 10 n su casa a lo que f ueron testi <YOS v1tor casco Y - 11. J' 1 doy 7-· Jnnn mC'11a :v el n.ho sefior tinie~'lte l o firmo d e su n~n; t qutr1(1' ORTIZ DE ('ARAT8 . - Todo lo qunl Paso ante- my. _ qasPm 0 • • • ;::i ° escrivano pbo. de ra vi]clo . nl1rl ¡tll • ,·s1• (Al pie del título ) . E n prim("ro d 0 j unio d e- 1584 n:tzlCl ch' ,. hija fue-ron sus padrinos el pe frny seb nsti:111 (Cid i) <le l:l or • ¡e fr anr 0 - 7-' d o. lahaRil"tn ~- su hijn m a fnc>ron eompndres. };>Su 1J:1t 1Cº 1 do :1 r ri 11: • Xascio mi h ijo J uan martes 15 de ahrill d este :1fio de el pe. fray sebustiu n (Cid~ ) y ftwron sus pa drinos los niesmos dl'll APÉi\DI C'E DO('U :\l EN'f.\L ~:11 (Archivo general <le la Nación, l ego. M 1, cxp. 1 "Información d e servicios u.e l capitán Franco. Maciel d el Aguila y postulación en favor de su hijo Franco. de la. en comie nda de los inuios tubirhaminis. Año 16i5' '). 2. . P~dcr para testar otorgado por Melchor Maciel. - Bue uos Aires, 11 de J UlllO de 1633. - Sepan quantos osta carta v ie re n como y o m elcho r m:icicl vecino morador en esta ciudad natural d e la billa de biana en el reino d e portugal hijo le xitimo de anton f ernandes y de maria dias su mugcr esta ndo enfermo y en mi juizio y memoria digo q ue por estnr afligido con la enfe rmedad entiendo no tendrc tiempo para haze r mi testamrnto y Jispone r mis cosas como conbie ne y porque las he comunicado Y mi Yoluntad mue.has veces con ca talina de m olo mi legitima muger Y con el capita n p e dro d e rrojas y asevedo vesino d esta ciudad de quien es siempre e t enido satisfa zion por su Cristiandad e buen zelo por fa via e form a qu{' mejor d e d e recho aya luga r otorgo , por la p:esente qnc d oy mi pode r comission cumplido como es n ceesario d e dr0 - a la dha catalina d e m clo mi muge r y cappn. P o. d e rojas y asevedo ¡1ara que en mi nomb r e y representando mi persona ambos juntos y n o el uno por el otro sa lvo e n casso d o jus to y npedimento muerte o a usJ. dentro d este poder derecho d el que pudieren que para e11o les prorr ogo h agan e ordrnC'n mi t est a m e nto e ultima voluntad h rr.óc ndo mandas kgndos Y dispo11i r n J o d e mis bienes hasta en la quinta parte d ellos o lo q uL' 111 enos furs <'n ::-u voluntad en quanto a mandas y l egados y tlemas l>ienL'S a1oc1ue dcdara sscn yo elevo e p a recier e d over quo quiero lo d eclaren en C'l testamrnto que hiziere n que para ello ]es d ejo me moria de lo que se m e ncuerda y ellos declararan lo mas que snpirrcn o lo que se m e deb(• lo que este poder e tal testamento no se <'nti e ndn pnra i:,(•fia lar r n si e no nomhrnr testamentarios e hered er os y Jo que <'S1a drdaracl o que esto ~ r no oh-a cosa rrcse rvo e n mi. .:i 1 .1 que' 81·n11tlo clioH servido ll c',·:um C' d cst a preY t] csu e u ego mnnuo " ' _ sonte vida q ue, luego sea enterrado en la ~·g1csia del con bent o del se1_10 r s·111 t d • t • d d con el ,1 bito d e l:1 dha ordrn q ue pido '• O om111go (1es a cm O ' _ . cntierrcnme ron cruz a lta a toque d o Ja ca mpana .ncompa~1cn_ nn cuerpo orns v srn o el s1gmente se m e · · f r 1 curn e s ncristan y que el d1a s1 ucse a '. :. . · · . su y1g1ha e responso d o cuerpo d igan un a. misa cantada d<' rrequi en con _ . pres, t • lt .. v <'O ll ('] d<'mns a eompann n11cnto ponpal 1 ,, en e o soül'C m1 scpo u 1 .1 . . . . . cuva r lceion Jo d r:xo funera l o si no <'1 qur n m is aJhacc:1s les p n1ec1c1c ,1 . . t 1 go e n In dha vgles1:1. • d d Y me entie rren e n In sepoltura qur et ,. t O rcc niil)S que soy cnsa o L' Ye1a o O It e n declaro que abra t r rssc c.i • .1ha catalina ele m P1o '1 1 · · t <lre yglesrn ron 1u u • · · e1 e b endision <le ln snn n mn • · · d a d con qmen · l1e fu e eles ta crn h1Ja lexitima t1e g i1 gou :.rn l cz vczrno quo o_,>..., ., C) LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA estado y estoi haciendo vida maridable n1andaronme a lgunos bienes en dote de que di scriptura por ante xpoval rremon s cr i v a no P ublico y de ~avildo que fue <iesta dha. ciud ad y d e todo -el dho dote no se me entrego mas que cinquenta fanegas d e arina de trigo. Declaro que quando m e case con la dha n1i muger t enia }Jor capit3J e bienes mios siet ecientos P essos corrientes. Declaro que durante el matrimonio con la dha mi muger ubimol> e procreamos Por nuestros hijos lexitimos o por ta.les los declaro a francisco luis maria geronima y Juana. Y Porque los dhs nuestros hijos son n1enores de d ozc e catorce años nombro por tutora e c uradora de sus personas e b ien es a fa dh:i catalina de melo mi muger su madre y pido a la justizia r ea l a. quien tocare le dexen la dha tutela y administracion sin fianQas que yo les rresoryo dellas por la via que mejor puedo. Yten mando que llevandome dios desta ,ida se tomen P a mi almn seis bulas de comnusision Y_ ~ombro por albaceas testamentarios y cumplidores del t estamento q~e hizicren la dha mi muger ~r el dho capitan pedro de rrojas :t ellos mismos Y a matias machado vezino d esta ciudad a los quales Y H ca d3 uno de por si ynsolidum doi poder cumplido el que se rr equierc Y dr derecho para. que entren en mis bienes los pidan e. . . . y en almoneda 0 fuera d ella hendan los que bastaren v c unplnn y executen el dho trst :l· mento como en el se contubiere e cu~plido e pagado en el r remancntt' de . todos mis bienes d en d as o d er cchos aciones . dexo y n ombro por mis universales hereder os l dh . .. . I r tdos ª os s nus b1Jos e hijas Iexitimas a qtn dec n • para que los a.yan v h er d p l otro . . e en or ygunlcs partes tanto el uno e como e con la bendtciou de dios y mia . . Y en P todo lo de mas 1os d hs catalina d e m elo v capit a n pe dro de rroJas rocednn O dis ,. "' do 'í · P or el reboco o'l:ros pongan de. lo que t eugo como va d ec]a.ra 1 f echo p . qua esqm er n co dicilos mandas leg ados que · · . or scnpto de pala b 1. 0 1 nn 111 h f • • • ª en otra forma para que no "ª g agan ee en JU1z10 ni f d . 1 dhO testamento que h' . uera el su.10 lo que se con t ubiere r n e . d ti 1z1eren los d· h rr1r n d' suso i c os o qualquiera dellos ocu los dhs , ,•nJIYi1 .,rnpe 1mentos por d d on e n o le puedan hazer j untos que ' \ or t al en l f O P n ormo. que • d p:ir, p meJor e do. a ya lugar y d esde agora 1·1 qun-ndo fuere he<' ho 1 misma fu cr~a que si eo ~ e ru~b.o e r atifico y es rui v oluntad ten!ll y1~corporado v de berbo yd b h1z1C'ra otorgara y o que fuera yu serto -~rt' ., a erbun 'f' cqu1t ese le doi con inciden . espec1 icado que el poder que se rr ,}ttl cins -v depe d . d 1 d efl'l si os necesario 0111 • •• · n en eias Y con la salvacion e c 1go nns b · • pre 5 abra todo por firme ,; . . IOlles presentes e futuros que sieiu ,rt ¡1 • ,1ss1 1o otoro-u l . . 'd rl p11t de buen os ~vres en a· b e en a ciudad de la tnn1 n r once rns del mes do junio de mill e seisdcntos .. ~"ª w APÉNDICE treinta e tres años el otorgante que el escrivo. doy fce conozco y que al parecer estaba en su juizio la firmo un testigo a su ruego porque no pudo con la enfermedad tes- DOCUMENTAL ()•"lt'\ -uv ~-~au..Ln O!» tigos anta. de la r1·0 cha batista a.nto. de la rrocha lovo gonzalo anclres de oli- vera juan perez de godoy y alonso rrodriguez presss. A ruego y por t estigo antonio de la rrocha. Ante mi Paulo nuiie: scriro. dros 4. 3. Testamento instituido por lo8 apoderados de Melchor Maciel. Bue- nos Aires, 10 d e JU . 1·10 d e 1633. - SePan quantos esta carta n . eren como nos el cappn. Po. de rrojas y azcvedo y catalina de mclo biuda muger de mclchor maciel ya difunto que dios aya en ,·cz y C'n nombre del susodho Y por virtud de su poder que en dro. otorgo por a nte el presente escri,._ano Y para que por el testasemos que sacado de su original es del t enor sigt~. (Está reproducido el texto del poder que antecedo) . E nos los rlhs capit:rn pedro d e rrojas y catalina de mc lo d ezimos que dios fue servido llevnrse desta Presente vida por c1 mes de ,iunio a1 dho melchor m aciel ·V CUnp J'i endo con su voluntad e manda del dho poder suso yn(.'orporado o_torgamos que hazemos e ordenamos su t estamento en la forma e manera siguiente. . ? cclaramos que el dho mekhor maciel murio eomo c:itolico y fue rristiano reconociendo 3 dios nuestro señor o rrccibicndo los sacramentos de la rglesia. En conformidad d e lo que mando en el dho poder y de lo que '}Ue- do a nuestra clecion fue e nte rrado en la yglcsia del com·ento del Señor Rnnto d omingo <lesta ciudad eon r l avito de l:t hordcn acompañaron su ruC'rpo <'l cura e sarristnn a toque de campana acornpañaronle <los Raecrdotcs retirados de la <lha horden y d os d el señor san francisco r <_1uatro rle rig or y e l dia. d el ('ntierro so lo dixo una misa cantada d e l ren 1· · ·1·ia e r esponso d o cuerpo ·1U r 11 C' On diacono O subdiacono con su v1g1 Ptrsente fu e enterrado 011 In c:npilla mnior de dho conbento en la parte que se seiialo. ,l " Í L0::5 JlA CIEL El\'. LA l J l!'.,'l'Ol~IA V.l!;L J'LA'l'A -"~ YtL•n hordcnamos que se le clixcssc un novenario do rnis,u1 rc:mrJ,rn ... . y al fin del novenario cnutado en el <11io conbcmto dccl:uumos que asNi se hizo. Y ten mantlamo., se dixcsen en e I día d el c.mtjcrro y en el de Ja~ honras en el dho conbcnto de s:rnto domingo veinte y tres misas rrcRadus y algunas de ellas dixeron los l'cligiosos <lcl sefior san fran co. y do tudos se pago la limosna. Yten declaramos o mandamo8 qu e dcm:1s de to<las las misas dichas se digan por el alma, d el dlio melchor macicl otras vciI1tc misas rrr.sa<las mas cinco en la iglesia maior cinco en el conho. de Rr· santo domingo cin<'o rn san francisco y cinco en la merced. Y ton mandamos a las mandas for~osas y a cada una quatro rrcaks con que las apartamos sus bienes. ao Ytcn mandamos se tomen bulas ele cornpussiaion que d ejo hordenado el dho <lifunto no se ha tomado por 110 avellas de presente en la ciudad Y assimismo se tomn una bula de difuntos. Ytcn declal'amos que la memoria de ]as deudas que declara el di· funto en el poder que no esta firmado de su nombre y es simple qu~ dixo dcver son las sjguientcs. Declara que <leve a a lon so no<lrigucz mercader treR p 5 • an sele p:igado d espucs de su muerte. A j unn pete¿ galdo cinco pcssos. . A gonzalo andl'CR ele olivera. v einte JJCsos o lo que el dixcsc ajuSfo:ie con esta qucnta y pagaronscl c veinte v dos pesos. A d · • agad05• omrngos antunes y para al varo de acosta once ps. estan P . ' a 11 Demas rl c lo ron t cn1do · en Ja memoria declaramos se 1e devHl de' marcoR ele Hequcra v<>sino d es t a crnc . ]a d oc h en t a pesos ...,,,inco rrenles , d sus 1 a,~ya Y otras cosflas que dio a1 c]jfunto mandamos se Je pague e bienes. Ytcn domas d e la m emoria declaramos le que;do deviendo al cnpit:in juan b arcito noventa y quatro Pesaos . .. e cossas que le bcndio y de que 5 m e clio a mi la dh a r:1ta1ina d e mclo mandamos se paguen de sus biene · D eclaramos que q ucrlo d cviendo a antonio gonsales zapatero de obrns0 que hizo pnrn. sn rasa veinte y tres pessos y medio que se Je an pagnd d espu <•s d e su muerte. sos ac . Ytcn declaramos se cJ.cve a gaspar ele acosta d10z Y sietr pes mcrcaderias que hcndio al difunto mandamos se le paguen. )Jerre· Declaramos que el difunto quedo dcvicndo a manue1 gonsa.Ics ae,·eJI, , ro do catorce a quince pesos mandamos se le paguen que se 1:autis!• "· Declaramos que entre el difunto y nntonio d e la rrocha , APEND1 CE DO CUl\fE~'f AL 233 qucntas mandamos se ajusten y si se l e devicrc se lo pague y si deve se le cobre. Yten d eclaramos por bie nes d e l difunto a manera de v uhcntario los siguientes • . . . fruto por la memoria <leve <lel capn. gon~ulo de carava,jn l veinte y cinco fanegas de arina de trigo que le quedo a paga r por sn s uegro francisco d e salas de que tiene hechas conta. Declara mos qu e demas de lo contenido en la m ema. nos c omunico el difunto deverle el alguacil maior francisco gonsales pach eco cien cave~us de ganado bac uno dos m a s o menos que le avb dado pura el gasto de su casa y chacara y que no se la ha pagado mandamos se cobren. Declara mos nos comunico deverl e matias machado vesino desta c iu dad cien pessos corrientes mandamos se cobren descontandoscle ocho o dics fanegas de maiz que dio en bida del difunto. Yten declaramos dever al difunto ma.tias gomez einqur nta p c>s:,os corrientes sobre unas prendas de oro mandamos se cobren y se le buc Jban sus prendas. Ytcn d eclaramos mas por sus bienes unai- casas d e morada con tres quartos d e solar con casas nuevas edificadas en que b iYia el difurito lindan con casa d e matiafl machado y por las pieza s con geronimo d e benaYidez. Diez piezas de esclavos negros dr guinen bann1rs Y hembras c on sus despachos. U n mill quinienta s cave~as ele ganndo ha<'nno l'h h·:ui C' grandes Poco mas o menos. · · Qua troc1entas en v e~as clucns e g1.,,lll<] l,s ¡1c> u" J 1n:1s o m r nos d e ganado hovcjuno. _ ,... .<1· ,,.r•uHks e pcqucnas. . 1 c '- 1 •1 º • Cmqucntu c avc<_;as de ganac1o te V Pinte caballos al s ervicio d e la estancia . Ocho hueves d e atada y caretcros. Trrs caret:1 s usa das c on yugos y coyundas. d 1 do11de esta el ,. de ]a mn a rna a • T • • l . . d Yiña JlO<'O ma s lTna cstnncia do tierras cu 0 p ... go r, , 111 ] t 1 .. tres 11111 re¡us e f~• :H O ron sus ca sns corrales a a 1011 c .\ L 0 . • menos · il cstanl'i'l que ubo ele agustm Un peda<;o dp tierra junto n la < l:1 ' ' <l Pl corro . Otro p e d a~o ch• tierra junto a la tlha estnneia que ubo d e jua n gaitan. U na c harm·n d<' tie rra e n rl pago <lo ]a mat an~a con d os s u ertes ro n un .. . . 1T na cuja d e servicio d e cn sa. rn hufctl'. _.:> º"6 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA Seis sillas de jacaranda nuevas con su clavason. Tres caxas grandes con su serradurR y llaves. Mas dos pie<;as de esclavos que llevo a hender al per u fra nco. barbosa por quenta y riesgo del difunto. Un ch:u~e de lana de colas. Una sobre cama de tucuman labrada. Unos sa rci llos de oro. Una cruz de ~Ío~ . . . t cosas manifestara y yn· dh catalina de y haviendo ynvcntano y s1 ub1ere o ras . dh t en poder de la a trado cosa 1 ventar1ara porque todos os s es an oro. · melo que en el del capitan pedro de roJas Y as evedo no a en alguna. . . h ordenado se Mandamos que los quinientos ps. que el difunto deJ 0 bienes J le diesen a baltazar maciel su sobrino se le paguen de sust dolc de declaro la dha catalina de melo que el dho d 1'funt·0 preguu an frutos que se avian de pagar estos quinientos PessoR me dixo que de 1os r maciel que se sacasen de la chacara. Declaramos que el licenciado paulo franco . curo a 1 dho me1c1i o. se Je de la enfermedad de que murio mandamos que por s u t rabaJO paguen de sus bienes lo que esto fuere. d rrojas Declaramos que el dho difunto debia a mi el dho Pedro 0 diez pessos y dcspues de su muerte se me paga1·on. Yten avernos por nomb:i· ada en conformidad del dho poder a mi la dha catalina de melo por tutora e curadora de mis hijos Y del dho mi maria.o sin cargo de fian<;as. lbncens ' en Yten nos avC'mos por nombrados y a 1natias macha d O Por a bo . . · . t o f ec t estamentanos del dif unto en conformidad del nombramien el dho poder por el dho difunto. e he Y l . :i , cump H lO e pagn do lo r ontenido en este testament Y lo qu iHleS °• c,e aver yo la dh a ca t alina de melo de mi dote y bienes gananc del <dM :i • en el rcmaniPnt e de todos los bi enes deudas derechos acioncs dhº · 1 nomb ram os en ronformidad de lo que dec1ar.a en e•1 ~- e m or. macrn . deros un1vcrsnles . . . mana . g eron11n,1rl(l poder por sus 11010 a' francisco hns 11 11 · l · .10s · l cxitimos · · de coni Juana d el <lho difunto v de mi la dha cat a J'na 1 0 para que los dhs nya n v hereden Por vgualcs partes tanto e1 uno tos 0 . . el otro Y rrebocamo s y - damos por ningunos cnalesquieras test a.inen ript 0 d . '] os man d as o legados que n.ntes de este aya liech 0 por se co 1c1 ; AP E NDIC.E DOCUMENTAL 2:~7 o de palabra y en otra f ~nna o p od e res que a ya <la tlo para testar para que no valga en juizio ni fu e ra d el salvo e1:;t c q ue v a lga por su t estam e nto ultimo p ostrim er a. voluntad o por a quella Yia e forma que m Pjor Pn derecho lugar aya a ssi lo otorgamos e n el dho n omb re r n la ci udad de la t rini dad pue rto d e bu enos ayres e n diez días del mes d e j ulio d e mili e seiscientos e treinta e tres años los otorgantes que yo el cscri vo. doy f ee conozco. Lo firmo el dho cappn. Po. de rojas y a sevedo y a ruego de la dha. cata lina de m elo un testigo porque dixo no savia e lo fizo !amados e rrogados el cappn. alonso agreda de vergara a.ntonio de la roch a bautista mor. franco. gaspar de acosta y franco. gonzalez de (cabraU ) vezs. y residentes en esta ciudad. Po. Roxas y .Azevedo. A ruego y Por to . .Also. a_orRda d e v ega. - Ante mi Paulo nufiez scrivo. (Ar chivo d e los Tribunales, protocolo del escribano Paulo Núñ eL, nño 1633, folios 152 v. y 178 ). 4 Certificación expedida por el gobernador don Josó M.artinez de Salaza~ sobre los servicios de Francisco M.aciel del Aguila. Buenos Aires, 1 de diciembre de 1673. E l P r esidente y Maestre de Campo Don ,Toaeph ~nrtinez c~e Snlazar, cavallero d el Horden d e Santiago, Governa dor y Capitun Gencrnl dest ns Provincia s d el Rio de la Pla.tta por Su i{ugd. certif ico nl Rey nuest ro señor y sus Rls. Conssejos d emas tri'b una 1es Y govcrnndort's •v a donde • • =>} d o] A guiln Vezo. do esta nins comb en ga que conosco a fra ncisco m.ns1t::: ' . . . ' _ d <le~ :M.ill seyse1ont os y se) Au dienC'ia . ciudad ele B uenos Ayrcs, d es d e el au o passa • J P ros1dcn r ia ue 1ll 1~·1• B<'nta y t res , que fu e qua ndo vmc con ª D ' t . t .) . 'll quul O ·d sto . o7 ·i or tl o su is n .(' 'v • n todos t que se ext in g uió ( f) c on G o v1c rno 1.. upoi . cn.vallos n s u cos n . · · · scrv1r a Su :Magd. con sus a r mas Y • . · of recido en el orredurias que se nn 1 os AlardPs muestras ele ~rmas Y c lo <'l f n n <'es q u iso • . . . lo pasado quan< . n ssi r on la Yigilnncia y h <'mpo d e dho mi Govierno; Y po~ Imbadir rstc Pue rto, t engo e nteudido 10 1u zo b •por t henient e d e una ·d · . , •a causa le n orn r 0· . "u~ arlo qu(' so r equ eria, por cUJ • t 'uda d de que es cap1t an . 1 1 umo, d o es a ri ' . l< o ln s com pa ñrns d o cavn Uos e e n · dido ron Ja a t en c1on Y est o a procc T) 110 • P.-dro P Pson, v en el <l pu . d cumplir enteramente las . d y Jrnc1c n o . dl'f!Vrlo <'Om b('ni en•te ,•mnphe n <'S t <' :di o de sC'ysc1entos ' d s · v nss1 nusmo orcl e1l(ls r¡uo por mi Je fue ron d n ª", . ·' Jlordinnrio y Alf e r ez 1 B nra d <• A 1rn 11 'e Y HetPntn y tres ]e v i exNcer a · . . t do n ,le justicia que com• bl ·n • ' t l r •\dnu111s rn 1 l\l. <' n <'stn, ciu dnd con la re<'t .uc 3 • . R ~ri 1c n. por hombre no e •t ido P ll e st .i h Pnin · : v SC' nuo es' t e nulo • Y respc 1 . l o r t.tl c la mrd. que S u Mngd · ·• • nw r cre< a· •. y de hn<'n prorC'd ('r p or lo que le JU Zg 0 . .· l ] (' h nrerle y n su Pe I· O ( sei ' ic srllnd t. · . n con el sello d e mis Y sus miuist ros e'n RU n ombre ) f u eso n1<'nto ,l ov ln prPscmtf' firmn{ln .:1 · de • <l e m1 mnno Y , s A,·r('s en prnuero . , • " ' . · d . Pto. <l t' TI11t no Armn~ f'n ln <' turln <l d l' In '1 1111 °. . . ~:~8 LOS :\IACIEL EN LA HISTOHIA DEL PLATA diciembre de mill seyscientos y set enta y tres aiíos. - JºOSE PH 1IARTINEZ DE SAL.A.ZAR. Por md0 - del Sr. Presste. Cleniente Rodrigue::. (Archivo general d e la ~ación, Tribunales, lego. !\í 1, oxp. 1). 5. Encomienda de los indios tubichaminis concedida a Francisco Maciel del Aguila, el Mozo. - Eu la ciudad de la Trinidad puertto de Buenos Ayres en veinte y cinco días del mes de feb1·ero de mill y seiscientos y setenta y cinco años, el señor mre. de Campo Don Andres de Robles Cavallero del horden de Santiago Governador y Capitan General destas provincias del R.io de la Plata por Su Magestad que Dios Guarde y haviendo visto los auttos fechos sobre la Vacantte de la encomienda de yndios de nassion tubichaminis que vaco por muertte del capitan Juan muñoz Vejarano vezino que fue desta ciudad que los poseía en segunda vida y por muertte del susso dho a tenido en dc-posito eL capn. Don Carlos Gil negrette vezino desta ciudad; a la qual dha vacantte mande poner Edictos que se publicaron y fixaron en esta Ciudad zitando llamando Y empla<jando a todas las personas b~nemeritas }Jara que dentro de Cinquentta Dias se opussiessen a la dha encomienda y dentro del t ermino 1 ·eferido consta se opusso el capn. franco. Mazfol del Aguila en vos Y en nombre de franco. Maziel del Aguila su hijo Para que se hiziese mrd. de la dha. encomienda en el, rep1·esenttando sus meritos y serbissios Y los _de .D a. Juana felis de Velasco su muger y los de sus anttepas.sados haziendo pi·esentassion de ciertas zertificaciones y dando como drn en est e Jusgado de govo. Informassion de los servicio·s representados por 1ª dlia su muger Por ser Vnico opositor y concurriendo en el dho francº· Maziel del Aguila el mosso las buenas parttes y calidades que Su 1'fage st ~d rd ho ena Y manda por sus Reales Cedulas y en Remunerassion Y premio de los dhos meritos · • . y ·tassion Y seru1c10s y esperando lo~ continuara a mi de sus antepassados el susso dho y el Real Servicio y que tendra los dhos yndios en Reduc1'on 1 . . . b' ie nssu Y con a Doctnna y pohc1a que com iei • conscrbassion y que 1 h . . b zalloS . . es a1a todo buen tratannentto como a ª libres; Y sin embargo de cierta conttradission fecha por partte del Juan Ruys de ocaf .· ped1n· ia vezino encomendero desta ciudad por la qua1 1 aele yncorporasse esta encomienda a la suia Y no se issicsse merrf'C della Por a uer sido D t · l bien· es ronca.da de la que como dho poseva · que 1ª dosele mandad 0 · t'f' J ' p s::i r • Jus 1 icar este derecho no lo ha IIecho dejando as · los termmos de prueba contrn· por 1o qual dechne por ninguna la d1Ut . . d 1z1on y en atenssion a l 0 dl dl10 cnpº· . . · 10 y alegado por la Partte del , f ranco. 1-faziel del Aguila y 10 d d . .. 01brt 110 1'Kt d . emas eduz1do = D1Jo que en . ne de Su ..i.v.L,Uges a y en virt d d 1 R al tic u e os poder es que de su Persona e como su governador y e •t 11 Jor sn gral, destas dhas probiucias que 1 .• d d ,,. · . ,~pi not o1 1e a no u,lll nqu1 1nz n ·t 1 l . d ·11 (1110 e 1n SC' rn<'rre<l y cncon11en u • ~d os car ª APÍ-:N DTCE DOCUMEN'rAL ~:19 fr::nc 0 - 11a zicl tlcl Aguila d e la clha c·11 eomie nda ue los clhos inuios de 11a:,sio11 tubich aminis que fueron del uho ca pitnn Ju:111 muñoz Vejaruno subjettos al Cassiquc Don Pedro tubi chami.ni d e que se ha de hazer Padron con los d cmas indios del subjcttos y Pcrtenccienttcs eucomcndandoselos corno se los encomienda por Dos Vidas la suia y la de su lexitimo subccssor conforme a la L ey e.le la. Subcession y con el mismo derec.ho de antigüedad y propiedad que ]a deue hauer y gozar; y l e p('rtencce con sus tienas aguadas montes y criaderos Vssos y Costumbres d('rechos y ser vidumbres segun y de la manera que les pertenece conforme a hordenanzas conttal que el dho franco. Maziel del Aguila el mosso haya de ha-zer Vezinclad en esta dha dudad teniendo Cassa poblada Armas y cavallos y acudir a todas Jas Cargas que por Razzon de tal Vezino encomendero esta obligado y que quando tome possession de esta dha encomienda v la administre hara todo buen tratamientto los dhos indios sus enco;nenda dos y les dara y hara dar la doctrina Y ('nsefian~a de que n ecesitaren eu las cosas ele nra. Santa f ee Catholica Y hazer el Pleyto omenaje de fidelidad y lo <lemas que se a costumbre dcnias que a de ser obligado a defender los dhos !ns. en todos sus Pley tos Caussas y negozios Ziuiles y criminales y gunrdar y cumplir en to~o ~o <lemas el thenor y forma de las Reales hordcnancns en esta probmcrn. por lo qual en quauto a estos Particulares ? obli gadones referidas Su Nrñoria le encarga al dho franco. Maziel del Aguila la ctmcienc~ Y des<'arga, la de Su Magd. y suya = Con lo qual y tomada la posess1o_n desta C'ncomienda se acudiran con las tazns tributos y listas que e sta dispue st o ))or dbas Rs. hordeuancas sin exceder d ellas = Y el s usso dho ª de ser obligado a pagar el dero. de la :Media Anntn que le to<'n por Ra zon desta nirtl. Y encomienda Pª· lo qual ocurrirn. nnte los Juezes ofizs. d e la Real liaza · d es t ns provmc1as . . que Rez1'den en es t" ,,~ Ci'ud·td · n l}UC l e .tazcn lo que cl euera (sa) tisfazer deste dero. y con cnrgo y ndvertencm qu~ a de sattisfaeer y pagar lo que le tocare por eadn yndio de ta~sa la hmosnn rle nzeyte v vino que Su Mngd• por su Hl. zedula d e bernt~ y quatro ele oet ubre · d el año passado d e mill y se1scien . • t os Y <'inqta. •y •cmco manda. • 1 sc· collre de los enromenderos d esta pro,r'mci·a Pª · hs • .Religiones .y su ru1 1· Hp unicnto de lo dispuesto por Rs. z edulas a d e ocurnr C'l dho f1 aneo. t.fazieI del A . 1 . . procurador eon poder bastantte y testo. de gu1 a poi ss1 o su e.bar d esta mrd. y todos estos auttos y titulo que se le a. de despa . a· enco · . de las Indias a. pe ir en e1 '. f' d Su l\{agd. llHenda a nte S u M:gd. en su R.l. ConseJo l :1 conf' 1r111n. desta mrd. v estnr n. dero. con e~1 8 1,::;"llOr 1sca1 e . • e Instnnciao con pena y seua1amo. "n rlho R d<' l ConseJo en todos grados aüos que corren 8 dn d<'strados en basta ntte forma de clero. y dentrfo. de ses.yo l~s JlCnas conte"s e oy l' J dhn con irmn. • ni<l· l 1a do la fhn. pro!iontn.ra n ·· d ue nl susso dho se le ,ls en clhas Rs. Zs. que d csto t1·:1tnn = Y mnn q ° 240 LOS :M:ACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA d espache titulo en forma desta mrd. y encomienda con y nsercion dcste autto con tal que primero y ante todas cossas conste por cer tif n. de los dhos Juezs. ofizs. de la Real Haza. a entrado en la Real Caja de su cargo el año de demora d esta encomienda que por la Rl. Za. de diez y siette de marzo del año passado de mill y seiscientos y einqta. y siet t e esta asignado para la paga de Cassas de aposenttos de los señores del R.l. Consejo de Indias y el d ero. de la media ana tta y assi lo Proveyo mando y firmo. - D. ANDRES DE ROBLES. - Ante mi J1tan de Relus y Huerta esero. de Su Magd. (Archivo general el e la ~ación, misma signatura que el documento anterior). 6. Información del obispo Antonio de Azcona a S. M. sobre varios personajes de la gobernación del Plata. Buenos Aires, 30 de marzo de 168º· .. . El maestre de campo Antonio de Vera Muxica, nat ural de la ciudad de Santa Fó, de esta provincia, vecino feudatario, es de las fs· milias nobles que hay en ella y de muy buena suerte en lo personal ha servido muc.ho en l os cargos políticos y en las guerras que se h~n ofr;~ cido y ofrecen de ordinario con los indios calchaquíes fronterizos i dicha ciudad. Y ahora últimamente fu é por cabo de la gente que _enr 3 , desaloJar el gobernador de este puerto a la otra banda de este no u. . . do f or tif1ca ' O d portugués d e las islas de San Gabriel donde se ha pobla Y iil - 1 v t res IJ y lleva a su cargo cerca de cuatrocientos hombres, espano es, • , ur.1 indios de las doctrinas d e los padres de la Compañía de J egusi· acades 1 facción se ha fiado de este sujeto por su valor, industria Y otras ca importantes para ella. de esa El sargento mayor don Juan Cebrián de V elasco, natural 'dio de t pres1 corte, que hoy ocupa el puesto de sargento mayor de es e apeles . . t do sus p Buenos Aucs por merced de V. M. ha servido como cons ª . . to de 1~ en el Estado de Milán, <:'j ército de Extremadura Y Regnnien ·tán de · de V. M. en que ocup6 los puestos de Alfé r ez ·Y capi Guardia uerra vi'· ·ª Infanter1a Ay udante ele Sargento General d e batalla en g le nonr6 y por estos servicios V. lvI. le graduó de Sargento Mayor YedidO roll con el puesto q u o hoy tiene en este presidio -en que ha pr~c es sujeto mue.ha acepta ci ón y satisfacción d e todos; y en lo ~ersona benemérito de cualquier puesto así militar como político. . 1 de est s 11atu1n ae El Sargento Mayor don ,Juan Pacheco de Santa eruz, ?t{aYºr . . d S rgento co11 ciudad de Buenos Aires, ha. ocupado el puesto e a ciudad, ¡e este presidio v el de Alcalde ordinario y Procurador de Ja. sona nob . . per 1r~· cuyos poderes fué a esa Corte de dos años pnsa dos, e~ des n1or!l . . . , . est 8 us v1rtu • tes d0 Y bien acreditada y estimada en esta repubhca por C rr1eil El Capitán don Baltasnr Maziel, natural de las 0 APÉNDICE DOCUME~'fAL 2-H pl'ovincia, h a ocupado el puesto <le Gobernador y C:qiitán Ucncr:1J en aquella ciudad en que procedió con gran prudencia y satisfacci ón de todos, y en la guerra con los indios fronterizos que continuamente están haciendo hostilidades a estas ciudades, el de Capitán; es persona entendida, política y de otras buenas prendas. El Capitán Fernando de Rivera Mondra-gón, vecino feudatario de esta ciudad, nieto de los conquistadores de esta provincia, ha. ocupado los puestos de Capitún del presidio y alcalde ordinario con mucha satisfacción. Es persona noble, prudente y entendida, y se halla con mucha pobreza, porque aunque V . 1f. por los servicios de sus pasados mandó dar a esta familia 1000 indios de encomienda, no ha habido modo porque todo este gentío se ha consumido. El maestre de campo Pedro de Aguirre Labayen, vecino feudatario 11e la ciudad de Yuxuy, es natural del Reino de ~avar~a de donde_ ha muchos años pasó a éste del Perú y se casó en dicha crndad con n:eta <le los conquistadores y pobladores de aquella tierra, por cuyos méritos se le hizo merced de una encomienda, aunque corta; ha ocupado en 1:1. guerra continua que hay con los indios de la Provincia del Chaco, l?s puestos de capitán comisario de caballería y maestre de rampo, sin . . ' 1 , !lado y últimamente el IIarer expedición alguna en que no se 11uya 1..1 • • ' afio pasado de 1679 en la entrada que hixo el g·oberna d or du aquella . . . esto de maestre <le campo ¡,rov1nria a pacificar los indios, fué con e 1 pu . t. ·ción le dieron unos Y sa lió mal herido de unos macanazos que a uu . . . T t · , polH1co. inu1os. }~s persona de buenas prendas para lo m1 1. ::u \ d C , ·doba del 01 El capitán Juan de Perochena, vecino de la cmda( _e • ó T ha muchos anos que pas ucum:.ín, e~ natural del Reino de Navana Y . ' conquishdores e8 t r · , · h · d•1d con metn e1e 1os · as ntlrn s; casos e en die a cm ' • • F s persona 1 . . . f' d le estas pronncias. • <e ella y d e la fam1ha mús cah ica ª e . . ..,cturlmeute ocupa l · Jd linnno v 1lO\ " l ( e mur has prendas, hn sido alca e on : . ·t ·í· · d e la com¡lafiía de · t1, de rnfan e1 ,l ' · . , · ..J <lc,~::doJ·'ll' al Portugués en este puesto el puesto de capi ,m f . }a fncCHJll uC .. ' bl do " fortificado, siendo orasteros qu<' se ha formado parn. · ' de las I slas (le San Gabriel, donde se h~ po ª oc..nsi{m de comprar un t· . • , t puesto con ' ierrns que toean a Y . Jvf. BaJ6 ª ( s e V l\[ y ¡ 0 despacha. a es<' navío qur R<' yendí:l. C'n él por cuenta de . . RPino <'on licf'nria de Vuestro Virrey. rn con algún ofirio no . . V 1\1 le 1wn ... Es pe rs ona de cnudal Y si · · •querer que es el motn·o n · . • ·as para cnn . . C'res1tarft d e valerse de 1ntehgcnci a!Travios a los mdrns Y 1 r Jnecr mucws ·~ on que loa corregidores suc1en 1' d<'m(is súhditos. • de esta riudad de Bued O Gndcn, vec111 0 . . l bº E 1 r npitán A lfo11s0 1v1unoz pcrsonn prmr1pn Y ien ' 8 t108 1 Reves <' • ' Ai r<'s v nacido en la. de os · ' R · 10 ele Chile ? aqm ocupo ·ttn en el .cu . . f'nt en d1dn ; tu,·o rl puC'sto ck rnpi ·•1 LOS 1tACIEL EN LA liIS'Í'ÓRiA l>EL PLAirA :!-!~ el de Juez Oficial Real de Vuestra Real Hacienda algún tiempo; ha sido akalde ordinario y cuando residió en e~te puesto la Real Cancillería, Yuestro·s Oidores le nombraron por acompañado para la determinación de muchos negocios por ser muy inteligente en ellos. Estas son las personas que por ahora se ofrece proponer a Y. M, en conformidad de lo que tiene mandado por su Real Cédula y lo mismo ltaré de las que en adelante se ofrecieren, solo con el celo de que V. M. acierte en la. elección d e los sujetos para estos puestos por ser materia que tanto importa para mantener estos vasallos en paz y justicia como V. M. lo desea. ( Archivo general de Indias : sign atura 122-5-18). 7. Relación detallada del P. Pedro de Orduña, sobre el ataque a la fortaleza del Sacramento el 7 de agosto de 1680. - Mi Padre Prod. Sabado a 27 de Julio a las 7 de la noche vino el Señor Govor. Y exorto al P e. Ror. <'O nvcnia al servicio de Su Mao-d. qe- yo fuese a la otra 0 b an d a. R espon d1osc . 1e qc. se executaria · ass1. · .n·1spuso su Señoria' fuese d la tar e . d en el barco dentro de tres dias • el Domingo 28 a las cmco e determino de nuevo me fuese en' la lancha que salia aquella noche, pero . . l ~.1,·a sm por no avcr Y1cnto se d etuvo hnsta l a mañana del Lunes a · mas abio salí, qc. mi breviario frezada y c1uatro pesos de pan n <'ompre y con viento contrario a' fuerza de• barlo,·entear llegue al del . de la tarde y en canoa qe. me d esp achasen . (l e S an J unn a las seis 11 Real, llegue a lns 11 de la noche. E l dia siguiente ha ble toda ~. . lt persu, gente, Y a los Yndios y como los conocia no fuó dificu osO . í . 1es l a importancia. · · del n egocio y el rm1)eño ('U que se ballav!ln , · d ir · .·nn • t e a, 1., el servo. de su Magd. ni n ellos rosto mucho mostrar el guS t o q •a' eu1es rec1v1 o con nn vemda y la promptitud con qe. se ha1la,' an por dilllos pcñarso ; con qe . el M'o. ele Campo Antonio de Vera y yo aprehen . cstn.van clcsscosos d e mostrar ser verd aidero s vassn nenl que los Y nd10s de su 11:agd. Dc-sde el Martes hnsta el sabado se padezio en el el . d n ecrtH ngurosn. hnm bre por nver faltado ln s vacas v no ncavur e r:, :-ido, . . t cr gan~ P . Jucmto Marqu es qe. nvin. ido con la. g-cntu de Yn.peiu a ra oldaaos Llrgo <•on 3000 hacns y asi mismo e1 bnrco del Rey con 5o s y se E'spnfiolcs del Presidio. Refrescada la gente tratose de lab arse Únrsl" . · • al enfessiol1 pu bl1eo pnra C'1 nncrrolC's octnYn de Nro. San Ignacio la Luna poco nn tes d e :unanezcr previnieronsc los mas con la con .1¡i11 5 . ' y el 1'.1artes por la roa ñana · ccr comun1on y otroR exC'fcs. espirituales, 110 "' d e Campo Anto. de Vera n. dnr vista nl enemigo, . e l 1,fo. •"l.7 rero rlr~, . Ascreo9 su fu erte y la pnhzrr dn. qc-. est.nvu bien pertrcchnda y fuerte. . croll 1 • 0 u10 ' n h:inr.o n unn poen de gente qc. {'Stnva eortanclo pajn; y nsi e ª . ·a . . no· r ~. APÉNDICE 24:J DOCUl\fEN'l 'AL a los n~~·os. se reti r aron a su fo r ta leza d ejando Jas ho.les y capotes, tp~. retoJ1ero11 los 11 tras. uispararou d e la fortnluza <los piezas ~in hazcr daiio. Al ruydo se alboroto ntro. R eal p en sa ndo CJC. el Mo. de Campo escaram uc ease, l e fueron luego m as d e GOO ginetcs d e socorro. Esto fue con tanto promptitud qo. e l M .o. <lo Campo quedo agradczido y satisfecho de qc. el dia siguiente mostrarían s u valor. A<1uella tarde saco el Mo. de Campo l a g ent e a la Campaña y diridio 2.730 Yndios qe. se hallavan para poder p elear tn t r es esqu:i<lrones, el uno dio al Sargto. Mayor D. Ignacio Amanda u Cazique principal <le S. Joseph, el otro a encargo al Mo. d e Campo D . F ranco. Curet u de Ytavoa Y el t erce ro quedo a cargo de D. Christobal Capis de Sa nto Home. A D. Y g nio. le mando acometiese la estacada por la parte m(1s reforzada d el e ne migo por donde juzgaron siempre los avian d e embestir. Y guardava este puesto que era ,hacia el rio arriba el Capn. :Manuel d e Aguila y Helgueta Portugues ~uy valiente qe. tenia en su rompañ_ia. muchos reforsa dos entre ellos a D. Franco. de Lemos del abito de .-\bis. Dt•~<le a<1ui d efcndia la cortina hasta el valuarte el C'apn. Simon Farr o toii una buena compa dentro d el valu:uto estaba el C'a pn. .ltanul' 1 Gal\'all Port ug u es vale~tisso. por extremo con MU C<~mpa. Y desde : 1 Stigunclo vaJu:ute h asta la casa d e la J)Olvoru y c•stn<.•nda (]lh' eorn• hazi a la pa rte bajo del río esta va la compn . dt• un fu lano Lop<'l t·o n las . ' l't•11 t 1 m•las y cuerpo d e guardin . l'st:ll':llla Vuelvo a .D. Igno.: Digo que le mm1d:1ro11 :1 t' Ollldl'l' lid _rio arriba. por dond e rstava Agui]n; Cur0t u t•o:1 t- U tt~rr10 lfU ~ . ac~111t' l1t•1;t' )lor t•l ,·aluarto ge. 11:ize frente pa. la Compa. lhiml tt ust:n .1 Cal\'au ; Y a D. Xptobul. Cnpis por la rstnl':llla. que r:t<' ha zin la p:ute lkl rio ali:ijo. A rada t ercio se l o dio un r :ipn. Espnfwl para qt>. ~e go. , 0 con t' l l\J o. dl' ( am po ,·<' 1· , , .., . ll ,tSl'. hl Pe. Pedro Ximoncs <.~l pe. So 1rn:is ) .\ nto ¡ .J: ' ¡ .• l ·tbnJ'o eon ](Is rt' fors:Hlos , · < t' Vera pasamos hnzin la pa rte t t' 1 1 H • • J.~-sp,•1110 - 1rs y toda la gente del Presi 10• • 1 r.·,) T,adre · . , 1 Y ·ipcrn q<'. iban ron e I 1 • Jacinto quiso s<'guir a los l t cr~10 . th' J.. 1 • A · ll a t·,Hll t qt' • t odos sennst"n d D1'osr Ord<'n uqtH' ), gno. mnn au. · l ,uzr.ir t Pn1 11. d ,1, u o<' 11 0 sr n n n l <' conH , 1 a110 v durmiesen por c¡c nlns once e .i h hurn·t Lun:i , - mue o 1 · • .o "'1· fuc:1·an {:los ª. inarl'11a . llizose assi y ulas once p ol~o m:1s coi~ f r1 • 1 t ercio t' lHll ., • o a la Yoz de un r n bo se kYtllltO c:H n. . s· . nnda t ercio hom1 • -·1er·l gentr. , 1g 10 ... •• 1 •r nlto qe era . ,r,,s, <.' on tnuto 8i]cncio como si no iu, · . ,¡ <U } º ' ' lº (1l' 1l!'I Z( •• • t o ,l , d <HH e R<' •· • " • . t ' c)s•¡tt"t" .Ju I•1, t ,..·1h o }insta lk1rn r ni puc~ .1 ,. t, • 1 ,1 r w •1 1n • u e 111 , ... , • 0 11 n. <.c :il fn e rtr. Lol:I <le D. l~n°• en la ori t : n 1111 , 1 Jomn c•ntr<' 1• 0 H de n 1' C'u1Í'Hlll l' ll 1m'r os l (1 • (1 ) • • ra11co. Cur<'tu (.,n unn · · l >~ E~priftolt•s Ruar• . • 1· t•st:lt':ll1:1 ro n ( • · · ,·11111 t ..:i,. ar <'; y los dt•111:1s <h,ba.Jo <1<' ~• • ..l , <lll(\ •tlli espernse n ''"C1O!-! 11 . J • bn JO e <Hl orul 11 ' ~· "~ JH' r:rndo sufri<'ndo sp · l' una Joma orilln s d t•l r10 rn zrn n · ' PJ1 t r• ¡, 1lt1~· 110, ,1:-1 ' · ,l o.; p la L1111 n . F.:;tu\'inws 11111:- 1 1 !:l ·a· 244 LOS 1\i!ACIEL EN LA HISTORIA DEL PLA'l,A mucho fl'io . Entrose la Luna luego ; al punto se levanta.ron los Yndios de los t el'cios y comensaron a iisercarse y hizolo D. Igno. sin ser sentido, y que de el pie do la estacada esperando la seiial de un mosquete. D. Franco. Curetu nbanzaba a prisa ha·Lia la puerta quo esta pegada al valuarte primero ; fue sentido de la sentinela de a caballo, rctirose olla hazia la puerta sin saber lo que oy n y asegurada de qe. era gente disparo lu carabina, al ruido do la cara.bina cerro eon el valuar t e y arrimosc; a cudio Galvan con su Compa . y co1nenzo la pelea defendiendo la entrada. Asi como D. Igno. oio la griteria deste tercio en un insta nte desiso eon los nlfarges parto do la estacada, salto el foso y enti·o dentro con la gente de S. Joseph S. Carlos, S. Nicolas y Apostoles qe. tenia en su v anguardia y cerrando con la Compn. de Manuel de Aguila sela. llevo¡ subio la loma y gano dos piezas Viendo Galvan que por a quella parte le entravan eeho en socorro de Aguila la Compa. de },arto cerrandose todos contra D. Y gno. y los suyos y los llevaron hasta la estacada menos n D. Y gnacio que con la espada y rodela liizo prodijios. R et irose en busea · Y !le· de los suyos que estavan en la estacada Jugando la. arca b uzena e heria con lindo orden, a nimoles D. Ygnacio • y alentados con sus razones, cerraron con tan gran fuerza que se llevo' a l Aguila de dos estocadas Y una cuchillada; y u. est e segundo a ba nze y ala r esistencia grautle quol • Galvan en el valuart o a los do F ranco. Curetu entro v. 'N Xptobn h az1a . por 1a otra estacada del río abaJ·o • gano luego la casa d e 1n pol,;orn, Oap1s 1 cerro con el Capn. L opo·_¿ y su Compa. '; aqui le alcanzo una val ª en det\ frente al buen Xptobn1. Oapis yncio mal herido Al Capn. Junn 1 . • l . i otra vn n A gu1·1era que f ue el unieo que abanzo con los Yndioe le ur O ndo en un brazo. Galvnn ncudio a t odas partes animando n los suyos; qua 0 comenzaron a. entrarle en el valunrto los de Curetu y los p or tugueses Y do . • estan lb d to a orota os D. Ygno. siempro valiente contra los de su oposicion, en esto llego por ol valuar t e por donde estavan los de Ourctu la ge~c. del Presidio, asorcoscle Galvan qe. andava todavia muy valiente. aun un • h erido ele dos f leclrns en los b razos y sus armas llenas de f lec-has tiro u)Jn· • · cuclullnda al Capn. Leon y lo llevo un dedo tiro otra a un s Idado elo, . . . nevos d se mnd º. S na.ve d ro. ; res1stiola d1spnrole el soldado el mosquete Y • ' don e Aqui se entrn.1·on en el cuerpo do guardia algunos Portugueses 1li 0 · · f t d • • JJluchn, l11z1eron uor os y e donde mat aron alguna g ente b1z1eron yo . ' •d' D ygnº· t D D 1 en.yo mor n1 • 1ngu1to Snl zcclo y otros qua tro del pres1 0, · · yr. . .d uadron t.en1a vonc1 o lo do Aguila y Simon farto viendo este esq rdill, . t ' de aun v1c on oeo y qe. por los vnlunrtes y sobre la Ca sa del Cuerpo · te deJ tremolando lns vauderns so fue retirando hazia el rio por la f~en }ln•till Puerto, y saltando en una lancha con otros trece hombres se }uzo 011te· ier ne nuestra zumaca qo. estnva a la vista armada para qua1qu dich!\ 0811 dmto. y alli el Alfer ez Franco. do Elguot a los r ecogio. No tuvo ° , APENDICE DOCUl\lENTAL 245 la gente de Aguila que se entro en la otra lnncha; por qe. arrojandoae al agua loa del tercio de D. Y gno. los apresaron y defendiendose asimesmo los Portugueses fueron todos muertos o agogados algunos, algunos huiendo se escaparon en la Y glesia, otros en casa del Govcrnor. D. Manuel Lobo Y la mas de pocas obligaciones, en toda la refriega nos hallamos el Padre Jacinto Marques y yo ayudando bien morir, confesando y absolviendo a todo genero de gente qe. de todas partes nos llamavan; mucho riesgo corrimos, pero Dios nos ayudo. Los otros dos Padree tambien trabajaron muy bien y gracias a Dios, que acudieron todos con mucho zelo del bien do las almas como hijos de la Compa. Luego qe. el M.o. de Campo Anto. de Vera entra en el fuerte, ( que fue ya de dia) acudió a casa del Govor. n. Man l. Lobo; el qual aunqe. enfermo se levanto de la cama y reeivio a l :Mo. de Campo en la puerta y le rindio la espada y el estandarte Rl. reciviolo <'l M.o. de Campo y luego le volvió la espada diziendole, la reziviese como caballero qe. era en señal de su abito. Retiraronse a su recamara Y cargaron sobre la casa mas de docientos Yndios para entrarla con tan gra n fu f' rza, que el Sargo- Mayor Villnnueva con muchos reformado_s, que estava.n ala puerta no pudieron Tesistirlcs. Acudio D. Ygnacio Amnnda u y hizo campo c~n la espada, apoderose de la pt~~~tn Y la ~efe nd io ~nlio el M 0 . de Campo a defenderla y ,halloso tan nfhJido que ~uzgo 1~ . · r<' forinndos ·• ncud1 alla. ·Y nt ropella sen fueron en mi busca cmco o seis hnllc a D. 'y gno. hecho un rnyo e.ontra los suyos nl lado <lol Mo . de (,ampo def endiendo la puerta hablo a los y n a·109 Y se a¡lnrtaron. D1x~' • cogido a rlln algunos ronme (} <' . In. Yglcsia corria riesgo por qe. se nvum n . d • , ln misma func1on Y que 0 P ortugueses Yndios y chusma· fu1• alln Y 1uzo d ' ' l 11 • ln 1mertn et,.rru a v qe. 11·1lrf', a,, alli ¡rnrti n cusa de los Padres Hl e b • • l •110 Yndios dentro, n n <"On 3 . nvrnn echo pcda·Los la venta.na Y estavan oc • . 'do por mi por ll p d c iba muv R!'Sl ave que mo dio el negrillo de los n res q · f ·. .. ,.. nsa Puest~s • • no te • 1 on<1i 1·• v 1•I 3881 trmor d o qc. le matnssen Y misi n dc los Padres, comenzaron • gunrdns en ln Cnsn. c1o Govor. Y glesia Y Cns . h ron algunos mucho, lo 1' . d 0 do se npro, ec n ~ . !i nd 1os y Esp3ñoles el saco uodnron ese dia muertos 15 otros lJO<'o 0' otros nada. De los 'Y ndios q 1 del presidio han muerto 11 <-ridos 11!1. Jinn muerto hnstn oy 30 - do os terrºmos aquel dia 18 l10 1 p tugueses ('1\ .. or () y si 11 0 es que ayan flt l oy seis, )1('ridos 14, de los 1 3 rl din Rigt c. n1 do los nl10gados 14, con qe. sonl n ... 'ri~·isndo. Uizose luego no nos U\ • R11r1 1 rccivio con nplnueo, ' o rnns ahogAdos por las playas Y d . d •l suceso qt. s O h E'i¡pnl'ho n CRt o Puerto dnndo n viso · do muertos qt. <!nusa ª lln cntl•rrnu , ) nlrgrin v nosotros nos qucdnmos n t nl Oovor. Lobo los 10 111 •• ' • • este Puer O ••• i.t n11 R t'l verlos. Hnn trnido yo n ., t ·\n misernb1hs1mos, des· l' t <lo~ dlos t:s . l <•rt u¡.cue!\es snnos v l1C'ridos quo o . )nd<> dc lns mu nos e e ' ' • . , bt\ l'9<.1 íll nudo~ 1,obres v flacos v t'omo qu1<'n sc 1· t"ª v sin tcmor alguno 1· 11111 · • • t d lS ,·u ll'll ""' ,\ t•rtc-. Los Yudioe qufülnn nlcu n l ' 246 LOS 1\IACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA a los Portugueses ni a sus piezas d e artilleria, pues aunqe. dispararou 15 piezas, l as mas dos vezes 8 pedreros J' dos medios cañones, no hizieron daño por estar apuntados a la caballería, y los Yndios en viendo e! resplandor se arrojaban al suelo con mucha presteza y pasaba todo por alto. Pelease de una y otra parte con gran diss0 - corage, los Yndios co11 grande aliento por vencer , y los Portugueses con casi <lesesperacion hasta morir. Los del Presidio 40 o 50 qu~ entraron lo hizieron muy bien y por t odo se alcaU"zo gloriosisima v ictoria. Su Ma.gd. nos de la Coron~ en el Cielo, que gde. a VR. en Cuyos Santos Sacrifos. etta. -En una carta para el Padre Latuo Nuñez d el mismo Pe. dize dE D. Ygno. Amandau y otros lo sigte. Nuestro Ygno. Amandau ha andadc prodijioso, Dios le ha ayudado, no es como quiera, ha echo a zañas, ne de Yndio sino de un gra n soldado y el pobre se ha quedado sin un:i hilacha de pillage por acudir a d ef ender a Lobo y a otras .obligaciones. Al Pe. d e Lauro lo hirieron muv mal ...v aun hermano suvo le pasaron ... la pierna de un balazo, y al ermano menor de Lauro llamado J orgitc Oyba le tiro un balazo un Portugues, bajo la cabeza paso la bala rt1 3· pandole l a espalda cerro con el el muchacho v le abrio la. cabeza de mi alfanjazo, lo dejo a sus pies muerto y de a; paso a otro P ortugues Y le hizo lo mismo, con qe. dentro ele un cr edo derribo ados, Y de eS tJ suerte fue entrando y haziendo v elle-z.as (sie) . (Archivo Nacional de Chile, '' Jesuitas, Argentina'•, Y OL 29o). \,, 8. Certificación sobre la actuación del ca.pitán Alejandro de AglUl· rre en el asalto y toma de la fortaleza del Sacramento. - Fuer t e de .. · 30 de agosto de 1680. - Certifi,•o a 1 R ey Ntro. . - scii or ' 1,· R osario, Senor rrey S enor Mtre. ele Campo Dn. J oseph de Garro. Cavallero d el OrdenD'dL. . d JO~ Santiago Gvor. y Cappn. Gl. clesta provincia por Su Ma.g • qe. t· . t d·1 es .1 gde, y a l_os demas juescs y Tribunales ante qn. f u ere presscn n · una certificazn. como el Cappn. Alcxandro de Aguirre que lo es de en Compañía de Cavallos y Lanz~s españolas a servicio de Su :Magd, .~: nc5 esta guerra con toda puntualidad o·u ardando y cnmJ)liendo las 0 1 . 1.1 ~, •• • S1 ' qe. le dí para qe. fuese asta el Rio de Sta. Lucia a ver y reconocei t n~º fragata portuguesa toma va :1.lg-nn puerto y qe. la apresase Y nic · · { t1 · r azon sierta de haver cogido el rumvo al Vrassil y todo el f.ieu1PO · ,or duro el sitio qe. p usr a la poblazn. v fortaleza d c los pol'tu~neses \10 . tinu:1n orden d e dho. Senor Govor. arudio a l servicio de Su Mngd. con , ~e, con todn pnntua1iclac1 trayendome p risi oneros n los Yndios gunrnnis dt, . b . dolos se romun1ca an <1e SccrC'to con t1hos. portugueses socornen " rt' l' S< ( cava1los y va cns dP qe. rosulto :ltaj:trse los YneonYenientcs l ·· 11: ente . · el cl cor cresrnn y en to d o at uc1io como yucn Ca ppn . h;tsta el (lia seis 0 APÉNDICE DOCUl\IENTAL 247 qc. resolYi ir en p e rsona a la vista de la poblazn. y fortaleza portuguesa para toma r la forma y resoluzn. qe. so ha.via de tener la madrugada siguien te en el abanse qe. se havia de dar para poderla ganar llegando cerca de elfo. puse por señal una laguna de donde nos huviamos de dividir en t res trosos y aun qe. los portugueses nos dispararon dos picsas de artille ria se hizo la rcpartii:u. de los puestos en la forma sigui en te desde el primer v::duarte y Garita de la frente del Sur foso y estacada señal e por ser el mas 1:ugo aquella gente qe. havia de abansar conmigo y desde el dho. Yaluarte al otro d el Norte aquel Lienzo ele muralla señale a l dho. Cappu. Alexaudro de Aguirre para qe. lo ocupase con el troso que liaYia de entregar y deje desde la dha. garita a la parte del Xorte al Cappn. Gabriel de Toledo señalado el lienzo hasta el mar como todo se hizo y ejecuto con mucho silencio y muy en particular el dho. Cappn. Alexand ro de Aguirre abansando con mucho esfuerzo con los dcmas t ertios Y gente del presidio a un tiempo mediante lo qe. fué ganada LI fortn.kza ton dies y ocho piesas de Artilleria seis pedreros Y todos las munidonc's y fué preso el Mtre. de Campo D 11. Manuel Lovo, Cnxallcro <lrl ha\'i to de Scpto. Govor. y Cappn. Gl. del Rio de J cnero ron todos los portugueses e Irnlios tupis aqncs. se dio quartcl d cspues (1(' ha.ve r peleado mas d e dos oras y muertole mucha gente port.ugue 5 a Y_ todos sus Capn es. y por qe. es digno el dho. Cappn. Alex:rndro de Aguure d~ , '1°- se le haga rnrd. en el Rl. nomvre Y es uno e1O los Cappncs. de •1111 • l· ¡uosente Cerhfl· 1 1 mayor satisfaczn. v confianza en el Rl. servicio •" • 114· • e u\'O cargo cst.\ " razn . Yo el Mtrc. <le Campo Antto. de Vera. lúUX1ca n . ., • 1· ,¡ . . lürtuguescs como se <-' go\'ierno de las armas para dcsnloJar a 1os l . tia l10 J10 }lo d e 1ms armas cn es e r Y ej ec utado. Y lo firme y selle con 1 1-..: C' fl . . . '. drl sellado v es i.t. en p,ipel corn un en f}C. se despacha por no ha-v ci wf ntc de la dl108 1lOrtuO'uesPR cn re , , 1' t : <' fuerte d el Rosario que se gano a • ñ. º t 0 de mil sei:scien tos l ~:la <le 8::tn gn vricl en treinta dias d el mes <le • g os ,. l11 . · º'' ' Ht:l afios. - .A-nto. de Vera Mu,a;i,ca. · . , , . l 0 74: ) · Arrrentrna , ,.o· -(Arr hi vo Ka c ional do Chllr, "Jcsmtas, b .' r ° ~¿; ~-±8 LOS l\LACIEL E~ LA lllSTOIUA DEL l"L.\TA 9. Información sobre los servicios públicos y antecedencia de f amilia del general Baltasar Maciel. - . .. l. El dho. capita.n Geronimo Martinez t estigo jurado y pr esenta d o p a ra esta lnformn. siendole preguntado por el t enor y preg untas d el y nterrogatorio y en la primera dise que tiene noticia de esta ynf ormacion que pretende haser el Genl. Baltasar Masicl y que conoec a las p artes de mas de cinqta. años a esta p re. y que no le toca en las Gen era les, y que es de hedad de ochenta y seis años poco m ás o men os, esto R cspdc. 2 D e la segunda pregunt a dice que conocio de vista y comunicason. al capitan B alt hasar Ma siel y a D .i. Ana de la Cueba su lexitima muger Y que save de cierta cien cia y conocimiento que el General Balthasar Masiel es hixo lexitimo de los susodhos., por que· los vido criar Y alimentar desde los pech os de su m a dre llamandole de hixo, Y el 3 · dad ellos de P adre y por t a l es t enido y r eputado en esta dha. cm y provas. y esto r espdc. 3 De la T er cera p regun t a dice q. sa ve que el dho. capan. B althasar ma· . l a b r a m as d e qu:ue nta años q. entro en esta ciudad, . sie Y que 8upo era de los Reyos. d e E spa. a dond e se ca so inf acie cclesie con la dlL'L ' . sustent ªi- re· D .a. Ana de la Cueba dura n te el m atrimo. los conoc10 . d • . r todo el cm · casa p obl a da a 11nas y cavallos con lust re de sus Pe1son3 s) . :i tie mpo que v1v1O · · el dh o. Capan. Balthasar Masiel le vi·d O 'acudir. Je· t odos los efectos q. se ofreci eron d el R eal Servo. d e esta R,ep'~· f . Y cuyJado, uer on or d ena d as por los superiores con mucha obedien cia . cías por y que dh o. fue t en ido v r eputado en esta dha sd. v Prov1n , t 4 . J e • J • gun a persona de men tos y calida d esto responde = de la quarta pie b cue a ice q. conocio de vista y comunicason. al capan. '1'onb10 de la db0S· Y D a . I savcl de Pra do su !exima. muaer y c1ue sa.ve q. los 10s abne f • º · ucron v eci nos Y mor a d ores ele ln ciuclnd d el Rio BernieJO, dela mater nos d el q. le presen t a p or testigo v que la dha. V.t- Ana da, Cucba f u e hij a lexitima de l os dhos por tal fue tenida y reputª·11·n . ., fanll , quienes d uran t e el ma t r imo. su st entaron ca sa y vecindad Y diÓ :i Armas y cavos. conc!, el dh o. capan. 'l'oribio de la Cueba acu su· tod? lo qu e le fue man dad o en los ef ectos del R!. servo. por Jo~ fue p er10res en dh ...u. 1U d a<.1 por ser como era frontera de Guerra ' •' ·tos • t enid o Y esti , d O , bl de 1ncr1 . · ma entre los P obla d o r es por p ersona no e or que 5 . y calidad esto r espdc. = De la quin t a p reo-t. dice q. la sa ve p ocio estan do este q d . t=i • .,. J. co11 p o11~ . ue ec1ara en dha. cmdad d el R10 V ermc 0 do vista y con llllllcon. · . d y n }:I nl ca pn. D iego Lope·1. dePra o, I savel de Ocho,. I Ann u. su exma. m ugcr visabuelos de la dha. D 3 • , , c:l Cueba, y Padres le:xmos. tl r h cl hn D:i Is l 1 PI'"ªº q. s~VC • ,.,o, · ••· · . a ve t e •• nJP co . .· PP . y n oto110 que los d hos, ,·uja ron <le In ciudnd de Jr1 AsU a· . . ' .. e· ac , APENDICE DOCUMENTAL 249 P ro n . <lel Paraguay a la, poblacion y conquista de dlrn. ciudad del Río Bermejo adonde asistiei·on con gran costo de sus hazda,. y que al tpo. q. los vido los conocio sustentar casa y vecindad con mucha familia armas y ca vos. con lustre de sus Persas. y como tal Poblador y conquistador el dho. capn. Diego Lopez de Prado oyo decir a los antiguos Pobladores se a via hallado en todos los enquentros y vatallas que se tuvieron en la Pacificazon. de los natlcs. adonde asistieron cerca de cinqta. as. poco mas, o menos, y eran tenidos y reputados por persa. de meritos calidad y servs. y por tal assi mismo supo q. el dho. cappan. Diego Lopez de Prado fue siempre ocupado en aquel1a R€pca. en oficios honrosos de Guerra y Justicia dando buena qta. de 6 lo q. se le encargaba, y esto responde = De la sexta pregunta dixo que la save por q. los años pasados de seiscientos y treinta y do_s se despo blo aquella zd. de Res el o del enemigo Guaycuru en cuyo tiempo est e c¡uc declara vido }leo-ar á esta dha. ciud. los vecinos Y mob • radores de dha. ciud·ad del Rio Bermejo y entre ellos al dho. Capitan Diego Lopez de Prado con su muger y familia q. llegaron muy po• d as en dha· ciudad ·y desb res por ha ver dejado sus cassas y 11ac1en . . . algunos anos propues los viclo asistir en es t a dha· ciudad adonde . de la septima pregu. .· . . . d 1 s1gm eron en el R eul Scrv1c10 y esto respon e · . . . . . avo de cierta cien cm 1 dic e q. la s:1ve por que el tpo. q. la pregu. ice S e • sado y 1 ltl asar M~asie es ca . Y conocimiento que el dho. Genera1 B a h · . . dha es 1 1 ,·eln <lo infacio cclesie con Doña Ana d e Scc1ucH't . ' Y que J . • . de• • Sel .. d A mar y Da, u~rn,1 llJa lexma. del capitan Pedro Gomez e g · · dl fue natura l . . . ve q la suso rn. · D la octava. prequena sn lexma. muger y assi nnsmo sa 1 • to respde. = e ' ( e la dha . ciudad del Río BermeJo es dh ciudad del Rio ª· t d en la Communon. gnnta diro que la save por que es an º. al Capan. b I b(.rmexo C'S tc que declara conoc10 • de vista Y ·ma. muger a ue os 1 e; d VaJenzla. su ex rnspar d e Scciucira y a DJ, Ana e ' save que la dha. s ueira v que lllat0rnos de la dha. Doña Ana de cq ·1 dhos v por tal era J • ·"tima de os " s )a .T ua na d e Se queira es lnxa lexi . . tenidos por persona. t 0 111· · d d quienes el an la da v r cputnda en dha. c1u a . d d esto respdr. = !) • • en dha. Clll a. so contiene • por nuc l] C' lrlC'I'l: t os calidad y servicios ·1 11 no en e a • R' Ber110,·C'11a Jl l' (' rrt.1. dixo q. la. save coi dhº ciudad de1 io ,., t bo en · ,~. G ar roll!o tiC'n c dho. este q. declara es u . a.l dho. capitan ~sp 1 · • t Communon . n. quienes nc.1o y en clln conocio de vis Y r zucla su mugei ' . d 1 1 <1 e-, A d~ \ u e1 .. sustentan o fl ,-iequl' ira " la. dha. DJ, nna. . • hiJ'os e Jn.1as · d, ,. · l O • h fanuha <.1e . 110 lustre e ir con casas })Obladas mue a . d ente con mue • t d . v . . ' bentaJtt am Conquis a o 3 C'rin uac] a nuns y cnvos. muy pobladores Y esp<lr. los entre 1os r,•os. esto r Ru ] > • 8 r rsas. v que eran estima<. ·to cnlidad y se di cnp¡1:in. re.•~ l 1 .. . bl de mer1 , El io. • lo · l" l h n. l' iu<.lnd fior no es : ,> " 811 ,·c q, -- a la Del'ima Prcguntu d1et~' qti.o .c ª ª LOS l\lAC[EL EN LA HISTORIA DEL PLA'rA ~50 naspar ]1 ]2 1:1 14 1;¡ de Scqucira y la dhn. Da. Ana de V n lenzla. asistieron muehos años en dhn. ciudad d el Rio B ermejo a donde por ser perssJ. capa-¿ de m eritos y calidad el dho. cnpan. Gaspar de Scqueira siempre fu e ocupado en oficios ppcos. d o Guerra y justicia todo el tpo. que nsistio en dha . ciuda d a sta tanto que por ocasson. de la facciou q. el enemigo Guycuru hizo en dha. ciud. y entrada en los Pueblos de mata la y d el R ey y Guacara e n cuya d efensa dho. enemigo mato muchos soldados vecinos y moradores procurando nsi m esmo ynf estar :i dha. ciudad por cuy o r ecelo se r etiraron a un fu erte adonde el resto que quedaron de Españoles pasa ron muchos travaxos y estuvieron asta tnnto que les entro el Socorro de esta dha. ciudad en cuy o tiempo el año de Scistos. y treint a y dos s e despoblaron y vinieron los demas a esta ciudad en cuy o tiempo por la ocasson. referida es cierto el rlho. ca pan. Gasp ar de Sequeira d ejo sus cassas y ajuares y demas ere• dndf's que t enia y llego pobre a cstn dha. ciudad con su muger Y muchos hi j os y hijas adonde vivio algunos años y continuo en los ef ectos del Real Ser vicio y esto R espdc. = De ]ns once preguntas dü:o esto t estigo que no la save v est o Repde. = D e las Doce preguntas . · d 1xo que no las savc que tan solamente oyo de cir en dh a. eiudad del Rio B ermejo a los Pobla d or es y conquis tndores della como t'I r.appan. Anton Martin de Don B enit o abuelo de ]a dha. D·1 · Junn:i . f ue Pohlador v Conquis t a dor <le la crn . dn d de estc~t' <l 0 Seque1ra. P r ova. d el tueum :m de dondo " dt' 1 t eniendo noticin d e unos I na·os . . G . . naeion ua ca r a s do su cn com1cnda se v ino c on su mugor Y hiJOS. :i . l nd d el R10 . Bermcxo n donde a via ny udado a 1a co nqu1s!a d}ut. eme . . • t respdi, . Y P oblncion Y Poblo ca sa susten t ando :irmns v r.a vos. Y es O 1 = D las t r ece prcgtas Dixo q. ~·a tiC'nc dho. <'ll pregt.1 . :rntrztt·. Y1'1~1· t0 "J\ t' . r espdc. = De la s <'n t or cc Pr<'guntnA dixo q. ]n snve como L t'I . que t ir:il se con icn e por q. uvrn t~unr<'ntn a s. poco mas o monos 11 ea pan. P edro Gom<'z <le A guiar entro en es t a dha. ciuclnd ;• f ue ;: ~ 11 a 1 ~n las R?yos. de E spaíi a Luego q. s e caso con ln dha. Dª· rdin"' e O S equ~irn.. v or ser pcr ssa. ca p a z f uo n ombrado por alc.nlde : fid11 Y de primrt voto y dcspucs por R cxor. v nlfcrez RJ. Y que 1. " · • <'On much a pnz · y quietud do Jos ' ·cc111°~ 'ndmin'18t ra.r <ll ios. of1r10s . <' prr·· mor ndore~ ele 0st n <lh n. d uda d y esto r cspdc. = D e las qu1ns ser,·•' gunt~s di ce <1· 1n sn V<' p or q. t"'] strno<lho. continua ndo el R'· rr"._. :rnud10 si 0m1ll'C' ,.1 t o,l as l ll8 or ns1ones . . d"l q. se ofr<'c1cron '- Rl· s1. ue7 G0n r rnl Dn. P edro d e A dl n E n\r ~,sft' c·omo f ul' r n la O<':,si on ([f'. Raco solc1a <lo•· t1 "-1·1·n 1 . Ri .... lll' r, \ i , , < f ' es t n cn1c1. y r nso :1 1.':t o t rn l) ,•t1u l n <níf' q11t' 0 • al <'nSbgo llf' los Indios n'vclntl os cl cl V nllc d e Cnlclrnq q111' lllf estu.ban est·•·i (111n. <' lll • d· ,v la cll' At a. f c,o clondt-"' supO estf'd ,mn~ (1e(",1nríl, fü•sr)n"ho mi sold nel o n su r o&t a con todas sus nri111n•-e:. '·r t " in. APÉNDICE DOCUl\IEN'l'AL 251 peltrechos u.e G u erra ll, asistio todo el tpo. q. duro la G uerra asta q. se r etiraron y asi mismo en la ocason. q. El Govor. Don Prdro d e Baygorri Pidio a esta zd. Socorro uc soldados por recelos q. t u vo d el en emigo d e mar en fu<'ra despacho otro soldado en la mesma forma con todos los pertrechos d e Guerra y en la ocassion q. El capan. P edro Alvarez gaitan siendo tente. de est a dha. ciudad passo a la otra banda d es te Rio Para n a a buscar unas canoas y cm barca eiones q_ los yndios r evelados t enian escondidas con q. ynfcstaban esta dha. ciudad y su comarca vido pasar al dho. capitan P edro Gomez de Aguiar por uno de los soldados q. fueron a la faccion y allando las embarcazes. las raxaron y quemaron y así mismo dice que en otrn ocasion que el teniente Juan de Bargas machuca hizo jornada a los p ueblos de Santa Lucia Vido Salir al dho. capan. Pedro Gomez de Aguiar por uno de los capitanes que salieron en dha. jornada coi~ 1G sus armas y cavos. y d emas peltrechos d e Guerra y esto r espdc. = a las diez y seis p1~eguntas dice q . la save como en <'l b se contiene porque en el vño q. cit a el articulo savc de cierta <'tt'n<'i!l .'" <'Onocimto. q. aviendo h echo Junta Gen!. las nacionPs HotnC'frs Chagua yasqu es y Dagalastes y otros sus nliados para t1ar l'll dh a . 11 8 ciuda d y ynfcstarla d evajo d e v az y con frnude <' p:1sm·o en ~1•11: 1 ys]a qu e esta en medio <l e estos <.1os Ríos ron ::;ius mug~,·r,'H Y hiJo: Cl'ºl' fuerte v a~rcro fk monta nn dt' <lonch . y se pus1C'ron en un L ut--"' ' • · • ta dha (•iuth,1 v sa'mprC' 8 t' · . 1 dcvaxo d e pnz entravan v sa rnn e n <'H · · • · tpo l]eo-o ('1 mrr do lam po · rstubo ro n reec1o y ruydado e u c uyo · r• t· • :i, t pt d o ]ns armas tk t'1' .1 11 ,Juan Arias ck Saavc<lrn superrntPn < n <' · . . , . . . t 00 1,1 ynfrt1c•1011 del 1'1\l nng n • l os <'~¡ 1a provi na. v en a de udo rcrono r ido Y a,1us n · ' . , r p·utc tlr todos 1os so11 \ ,tt , • ron tocl a hrevc<lnd saco ln m~lYO • ,111 1rirca z,~. <'n eu11 t • ' · ' · · n ele ui1 ·' <lr la~ iioles (' v ndios v 1rnsso tk la O t rn l) ll 1l Ll o r:ivn por <':tP·' · ·• 1 1 0 ya orason. dice <'ste q. clo<·lar::t ' .... d<' 1.\ rrui nr C'O n toda s ':l}Jª " · Prdro (1 omr1. • l"' rom¡ias. <¡n e fueron nl e] 1io. (,. l r s¡itl"S su110 d e lo~ • • . Cut"rl''l ,. < sus armas y d<"mns p r ltrec'h os 0 <' ' ' · n<' udio :l <'X<'c·utnr con • • 1 el suso<111º· · solílados <¡. f urro n r 11 l:1 oras 101 • 1 · lh) Grnl. n~ta q. se cnnc1u~·n 1 1 rcl<'nndo 1ior (' • • d o1e~ ~n va 1o r todo Jo q. l r f ue o < • · h os vndios qmt:rn •cnd1cron a Jll ll<' · · · J Ja íluorrn y c•on In <fJª l P1 · • t" sta f!\C'.eion cst:l dhn. c·1u v n1 Nh :1n e r.. Irts orrn:u, r r fcndns ·. h'11.1) r hm~mn v rast ignron a o t ros . 1· , , (J • . •u,··ls jorna<1:i .s )' · ·rtr pn"yun t :-is nH <]Urclo li h rr ,. srn nesgo e . • , e · ' • . ]ns olt'7. y ~1 17 a su <'OHt:l v esto r<>spo1Hlc n . . ' .('ll ln qni11t:1 p regu nt a r 't' lo 1•011t 1t1ll t , vn ti c'll(' dho. l o que {'1 :H H tt t •1s tl itl' e¡ . l:i s:1H' por qrn . , • 0 ,•hc> pr egu n · • • · 1 ofi<' i1) l S ·rsto r espdc = dP l ns (1'JLZ . , ,\ ,"ni:tr :-ulm1111:.-itro <' . • p (, lrn C.onH'~ <.1t • 1 · istr·111d,, • ·l. n untu:1 lill:1t1 :, , 1n 111 · . ,· lClo q tH' <'l cl ho. <'n p1hrn • ¡ Rt < 011 111 U ( i.l r noto. cho tl (' t h 1~SRO. .Tt1(' 7. t,f1 7. '. lk <JllC l'8 P'º· J C'~ta . . -·a ·,. = 1 1 . rt'<·ox i<"n <lo " col,rando 108 H Jf:n·rrcs °~ " 252 LOS MACIEL EN" LA HISTORIA DEL PLATA 19 buena quenta con pago de dho. oficio esto respde. = de las diez y nueve preguntas dice q. la save por q. las tres veces que el articulo dice vido administrar al capan. Pedro Gomez de Aguiar oficio de Alcalde ordinario y de primer voto y el postrer año reedificar las casas d e cavildo cuyos oficios administro con mucha paz y quie• tud en esta repca. distribuy endo la justicia en Igualdad a las ptu. 20 y esto r espde. = D e las V eyn t e pregtas. dice q. la save por q. el año que cita el articulo sa v e q. fue nombrado el dho. Capan. Pedro Gomez por correxor. thente. de Govor. Justta. mayor y capan. Aguerra en esta dha. ciudad y su jurisdiccion que la administro cerca de dos años poco mas o menos en cuyo tpo. se ocupo en los efectos q. se ofrecieron del Real Servicio guarda y dcf ensa de esta dha. ciudad y los pueblos de los naturales m a nteniendo esta repca. y sus vezos. con mucha paz y quietud: y que save que el El Govor. Dn. Joseph mtz. de Sala~ar, quien le nombr o p or correxidor le ordeno q. obrase doce ca· n etas Y dos ataonas Pª· acarrear los materiales d e aquel fuerte Y que se pagasen en esta ciud. d e 1n. R,1. hacienda de su M'agd. Y que sa"c are se obraron y se despacharon a la ciudad de Santa fe, Y q. 8 • ass1, mesmo que qua ndo fue nombrado por corrcxor. f ue tamb1en . J uez de r es1denza. de la que se tomo al Govor. Alonso de :Mercado f ,, Y Villacorta y durante su oficio acudio a otras obras peas. como ud: resp •· ader ezo de la Y glesia Parrochial d el Señor San Sevastian e st o ">1 n ella se e r " = d .e las V eyn t e y una preguntas dixo que la sa ve como ro 1 Ba1tas:i t con iene p or que como dho. tien e conoce al dho. uen · . de razo0 Masiel desde que nacio ast a oy Y desde que tubo uso ,· . • vos. mu. 1e ha visto sust entar casa pobla da y f a milia armas Y ca . pre . d d' do s1eIJ1 t aven ªJª a mente y m ayo-r lustre de su p ersona acu ien . fron· al Cuerpo de Gua rdia que continuamte. se tiene por el enemigo fue d~eJlZ'· t erizo Y a los demas ef ectos del R,l. Servo. y de esta Repca. en qu 1 obe d O ocupa que le fuer on ordenados p or los aupes. con mueh a t as di:(º 22 Y mos. cuy dado y esto r espde. = D e las Veynte y dos pregun f' •o de l 1 o 1Cl }tnas:ir q. a save por q. el a ño que la pregu. di ce vido usar e t hesorero de la sta. Cruzada en esta dha. ciud. al dho. Genl- ~ ~1'1·o cofl Massie · l Y q. supo q. el dho. por mas servir a su magd. 1e SlfT . di0 l · · cierto 15 pe h e seis por ciento qu e se da. a l os thesoreros y que es 23 buena qta. de la limosn a d e l a santa Bulla esto r espde. to por V t · n1en eyn e t res pr egun tas dice q. las save de vista y conocn Bnltbnsnr q. El a no passado d e seistos. y set enta el dho. General tp0• O Masiel fue n ombrado por alcalde ordino. del primer voto en c_udy 11 el 0 a cudio a fomen t a1. 1as ob ras publicas . . le v1. ·o y en particu1a r qv.,~ d}1 Y n1 Capan. Al exdro. d e Aguirre s u• compañero en e1 o fiCl. de ' 1" · 1 111 obraron ª su costa una medi a n nrnnxa e n la r apilla flYº º· ,I APENDICE DOCU~MEN'1'AL Yglessia Parroquial Junto con ella uu frontispicio que asta oy esta tomo se Ye y assi mismo y consecutivamte. el afio de aeistos. y setenta y dos fue nombrado segunda vez por alcalde ordinario de primer voto y alfer es Real cuyos oficios administro sustentando esta rep,~y sus vecinos en paz y quietud distribuyendo la justicia en ygualdad ~4 a las p ees. esto responde = a las Veinte y quatro preguntas dice q. la save como en ella se contiene que por ser como es el dho. Genl. Balthasar Masiel avil y capaz y de meritos el Govor. Don Andres de Robles el año pasado de seiscientos y setenta y seis le nombro por teniente de Govor. Justicia mayor y capitan Aguerra de esta dha. ciud. y Su Jurisdon. que uso y administro asta el año q. cita la pregu. en cuyo tpo. se ocupo en todos los efectos que se ofrecieron del Real Servo. bO'Uarda y defensa de esta dha. ciudad y su Jurisdicion • Y pueblos de los nles. acudiendo siempre a todas las corredunas que continuamtr. se hacen por el recelo que se tiene de el enemigo fr~nterizo y en particular durante su oficio mando hacer dos cor~edurias Rio abajo y rio arriva y reconociendo los puertos del eneung~, con embarcazes. y que es cierto ayudaría al costo que en s~mcJant_es o · casioncs se ofrece azer con los .yn 10s anugos y assi nusmo d1s· • t ri'b uyo la Justicia en yQ'Ualdad a las ptes. d an d buen pasaxe a los ~5 f 01. º . · preguntas d1xo q. _ asteros y esto respde. = De las Vemte Y eme 0 1 " · • d 1 convento d el Senor 1 p ª save por q. haviendose caydo la Igles1:1 a e ' San francisco el dho Gen!. Ealthasar Masiel fue nombrado po~ at · co notorio se obhgo a ron de dho. Con vto. en cuyo tpo. fue PI' · Y . fue uom· reedificar la yglesia a su costa y despues de ay a tiempo t .. e an Aguerra como Vva ll'ado por thente. de Govor. y Justicia mor. Y ap · d 1 materiales tie11 d dh 8 0 bra acarrean o os ' e ho. en cuyo tpo. ompezo • b In dha. <le t·1 d'1os y empe·Lo a o rar d erra con sus carretas Bueyes e yn ,. n algunas liy r,] . • y mora ores ..,0 ess1a ndonde ayudaron los vecinos d su voluntad n10 8 t españoles que e O carreo a esta dha. · nas e y ndios con los quales Y ros ncuu · t 1 maderas que 1eron, e ntro al monte y cor o as uchos Españoles • e1ua a . d dole despues m ve . a con mucho travaJO ayu an a traer las latas para einos a labrar las maderas de azuela Y de tapias acudiendo dha b •guio la obrct . de 0 • • ra con c uyo fomento prosi ,. oles e ynd1os s1e1 d 1 obreros espan npre eon el gasto v susto. e os . ntas que fueron ne_ ro · berram1e e rn 1i,n, de ~'erba y ta vaco y las d e mas . , la pregunta dice el tiempo que resa · d ' rias y llurante la obra que uro diante su asistenza. c·onr 1 ente que me • inua mte. le vido asistir persona m . d 1 Santa ygles1a y v d'fº ac1on e i. · ninyor eu,ydado tubo efecto la ree 1 ic t b gasto el dho. Gcnl. ('s . d que u o D e ~(l cierto que sin embargo de la ayu a 1 . enda esto respde. althasnr M:asiel muy gran parte de su iac~ l calificndos servicios 1Hfi v • . sa ve s1 . os · emte y seis preguntas d1xo que n 0 a· · ° . i-, ª· ,1 B = 254 1,OS :MACIBL E~ LA HISTORIA DÉL PLATA de sus antepasados suyos y lo s de l a dha. su muger an sido premiados conforme la calidad de sus Perssas. que · solo save que el dho. Gent. Balthasar Masiel asta oy esta ocupado en los efectos del Real Servo. que l e son mandados y sustenta cassa y familia de muxer hijos y hijas ~l que por los Seryos. de sus antepasados, y los suyos es digno y merecedor que su magd. Dios le g<le, y los sres. Governadores ~¡ en su nombre le hagan m er ced esto Responde = De las Veinte y siete y Ultima pregta. Dice que todo lo q. tiene dho. y declarado es publico y notorio publica Yoz y fama. en esta dha. ciud. y Provas. y la verdad de. lo que save y se le a preguntado so cargo del Juramco. que fh o. tiene leyosele su dho., J1 aYiendolo oyd~ dixo que en el se afirma :' ratifiea y que esta bien escripto, y lo firmo y assi lo zertifico firmo Y autorizo passo ante mi dos testigos por falta de escriv 0 • ppcJ. mi RL J u.an Goniez ele m es;a = Geron·fono Martinez = Te-stigo Este1·m1 de Arriola = Testo. Ignacio Flores. (ArchiYo General de la Nación, lego. E 1, exp. 7, ~1ño 1690). ,r . . 10. Convenio entre Córdoba y Santa Fe para la pacificación de los mdios. Santa Fe, 5 de abril de 1,36. - Yo Andres Joseph de Lorca Ess:io. PP'º·, Y mr. de Cavdo., pro9ietario de esta Ciudad de Santa feé de 1:1 Vera Cruz, Provincia del Rio delapla tn l) Or su 1\1.a o-d. qe. Dios g~. Zertif'ico, d 01· f e Y Verdadero T estimonio a' todos los Señores i::, ' qe. Iapresen t t' Vieren d e como los Señores M aestres de Campo dn. }..,rauco. Xadcr de Echague Y a ndia Luga r Thente. Gral.; d e Governo. Justicia mr. Y CapnGrr.i. de eS t a Ciudad, Y Mre. de Campo Don B enito Calvo de Arana, Go,·ern-'r· Capn. a guerra de los armas de la Ciudad de Cordova por el Seiior Coron el Don Mn th ius Iph. Angles y Gortaris Adtual Governor. Ycapº· GrJI. d e l a P rovm · c1a · del Tucuman dic ho Sr. Don B enito havdo. llegado ' el dfa .. quatro del Corriente con su T e r cio Militar a las Zereanias de esta C1:: en pros:cucion del rexistro delas Campañas d e su Jurisdicion deld: J...1ld10s Enem10-os qe · ost 1·1·izan 1a Ciudad . e· dad l 0 Y Jurisdixon. de dha.. iu ·Cordova, Ipassudo a esta casa de l ' d d dh Sr. Thence- GrJla morn a e o. f'1elt'~ p ropus o asu ,"" ....uerzed qu d d a· Jn · •• ' e esean o el tener Pazes con los In 10s ~. ~--ªª. ;: e~~!:~::~o b J ~ri~dicion d e su Vezindad. con muertes, robos, ... est a Ciuda d len \ ano.s ~pos ; I ocasiones, I bien do, I experimentand: de az qe 'M su Junsdizon., Goza de '1.1ranquilidad con las Tregua ¡"1 P I . . ·a 1)or :io •, . su erzed con s u Z l con dhos 1 d' ' . e o, a dhv1dad {t. extablee1 o r ~oJc:i . n ios, a tra1endo los l t t . d 1 espan pedia r s r a ra o, y Oomun1eazon. e os .. . up icava n su :Merced e • le ellos , .1 , q · quando alguna Patrulla ( . tursl' J·asse 8· esta c·1u d a d les pr · d111 in1s · ron ellos trntaiic:i 1 d opusi ere el deseo que T enia de n e"t:1 ... , .lo C's C'hs · con • Ciuu:1.d I linll d l ~' nusmas P:1.zes qe. tienen á sentadas s. ' • , u an o os 'l11·1 1. • • d . l , e1i ••1 ' ' eJ,l os, Y (h spucstos n. cxtn ble ser n:s 1,, , APÉNDICE 255 DOCUMENTAL Pazos conla Ciudad de Cordova, procurase de tenerlos, yle hiúesc propio ásu Costa a dha. Ciuda.d, para que luego, y sin perder tpo. ponerse en Camino para esta Ciudad il Verse con dhos. Indios, y tratar con ellos la paz qe. desea para la Quietud de aquella Vezindad I su Jurisdicion por ser los medios qe. por Aora le parezen Convenientes, I hazerles algunas dadibas Pª· mas obligarlos al modo qe. su :M;erzed se habido con ellos para lo cual I en su efecto puso luego ymcontinenti despachando a un Indio llamad o Miguel de Nacion ~ocoví residente a mucho tiempo en esta Ciudad con amistad, I fidelidad al español, el qual abiendo entrado alas tierras delos enemigos en busca de algs. dellos para qe. atraidos se a sentase el Con zierto dela Paz, admistad, Intentada, I solizitada porsu Merzed, se bol vio sin tener efecto dha. Pretension porque bisto, Ireconozido delos Indios Enemigos estos J usgando no ser este delos suios si no de otros qe. les Intentase algun daño, .Juieron con lo qual se bino ala Ciudad dando esta quenta, y razon I oída la representazon., Ech~ por <l lio. 1víre. de Campo Governor. I Capn. delas Armas dela dha. Ci~dad <le Cordoba pro metio poner en practica la dha clelixencia con la cxsa~it~d, y empeño, qe. el caso pide y que luego qe. halle Coi untura de. Indios conqe. haze r es te Parlamen;o, I trato de Pazes, dara luego ª Vizo con Chasque ftsu Merzed, para qc . ponga en execucion lo Contratado; I ambos <los Señores, 1Jidicron se ponga en rexhitro lo Contenido y se s~qumI1 e·Opias . autorizadas en publica forma pata los ef ec t os qe· sean ne znos. '. ., le3 C t Od O l O referido · el Sor. ' • J 1 onvenga n y fu eron presentes por tgos a Alcald e dn. J o'~wph Troncoso I Sotomor., El Mre. do Campo Dn. osdepl • ia 1[, h V zinos de esta • ,trquez Mont iel y Don lv[ a nuel Rechuello C a.con e' . sus Ciud 1 I f' I Autorizo con ne, Y en fe dello I para qe. conste O irn10 ' . d de M:crzed ' t f en Cinco chas e1 mes . C z de .A.i·ana . · es en esta. dha Ciudad de San a e, abril 1 . . . _ Benito, avo le m1l setezicntos Tremta I Seis anos. . . dad _ Andres - Fra»,,,co . .,·v-\_a'IJier de Echague y .Anc1uz. - - E 8 Testm1o. de 'er Josep¡1 le 7 Lorca - essno. ppco. v de cav d 0 • T . 11) _ Afio A · l · • e· ripción orno ( · 1.. 30 ic nv o Gcnernl Santa Fe, J.a. ircunsc T 1 ' • 40, folios 16G a 467 ys. 1 :Manuel Maciel instituido por Testamento del maestre de campo 6 de marzo de 1765. Viu(la, doíia Rosa ele Lacoizqueta. Santa Fe, :u santa gracia amen. B En ol nomb ro tlo Dios todopoderoso y con Yo da. Rosa de t vieren como ..,,, ' rpa n J . qnantos esta Carta de testamen o . t cla. Maria .i.u.itr· Jfl<' o17r¡u t J de Laco1zque a y . . tine 7, , (' hij a 1cxitima de dn. ~an ' de Ic:dtimo M.utnmomo d(l l1 drl Monxo ya difuntos, y Viuda. que so~ tud de la facultad qui:' rnr n. Mnn ucl Mnz icl assimismo difunto envir t tamcnto y declarar . roinm . r.. otorgar su es .:3 su 11 <' 1) y ampl io (pudor) para ~ll. U] t · . . poder qu e cstnnuo en i n1 v ª <1lun t:1 d segn. ·apnreze del J·ll 11• d1co · , su l. ª L LO8 'MAClEL EN LA 1IIS11ORlA DEL PLA'l'A sano Ju1c10 me confirió .. . .. ordeno HU testamento en la forma ;y manr.rn siguiente: lt> (Contiene la c1oclaraci6n d e fe do rigor). 2' Itcm d eclaro que en conscr1ucn ci a do su expresa boluntad ma nifestada en su poder, fue d o su c ue rpo e nterrado en la Iglc:üa dr:I Conbento de los R cbercndos Ps. Pre<licadore~ de esta CiucJ. en la sepultura que para si y sus desccudicntes t enia en el mismo prcsvictcrio al lado isquierdo y mas inmediato al altar m a ior, con misa de Cuerpo presente havicntlo sido amortajado couel á vito do mi Pe. santo Domi0 , y conducido hasta la Puerta d ela Igla, por la Cruz de la Parroquia, Y Clero de esta Ciud., vestido de sobrcpcllizus, cinco 'l'apas de Coro, dcclárolo nssi para que conste. 3" Iten declaro fue su bo]untad se diesen ocho rrs. acada una delas M.andas forsosas, como ensu nombre lotcngo verificado; declárolo assi para que conste. 4' Iten declaro fue su boluntad que sc,bre los quartos que es::in enla Casa demi hermana da. Loren cia de Lacoizqueta, y en que con Liv de dho. mi Marido fundé una Capellanía e n vida, de quinientos PP' ª veneficio d esu alma y d ela. mia, nombrando por Capellan al Dr. a~. Bartholome de Zubiría; so fundase otra en su nom hre do quinir ntos r• · quesr que val en d cmas los m en cionados quartos con cargo de tres nnsns . . 1u. xos, siendo h an d e ap 1·1car por su alma, y porla. mia y dctodos mis .· . a~ servir, "l . D d B . . . l l c. mismo r. n. artholomc de Zub1rrn. el capcllan que a ia • • • ;J ·o hemos Y porque ass1 por el particular amor riue el dho mi Mariüo Y ) • · com0 siempre profcsa<lo a Da. Maria E lena d e Zubiria nuestra sobrmn, ' . por l a f iel cor responda. que hem os experimentado de ella, f ué 8 u des"º 1,19 v l . 1 b f' . l . . . lmte. en en o 1crnr a con alguna dcmostrac16n, princ1pn v e mio e 10 · t · circuns anc1as d ch allarsc n ccC'sit.uda de cusn enquo vivir, Y gua rdnr di11, · muchos h1xos que el cielo le lta. d a do d esde luego en nombre de . ·1 M · l ' · · de pro ~ an< o, Y i~iio, le zcdo, traspasso, y doy todo el do~mio de eJlo3 piedad, que t clll nmos en los referidos qunrtos pa. que se sirva. i · . ' do dh o n1 como smos propios, y aparto atodos mis h er ederos y los dhll Marido detodo dominio nc<üon Y clro. á dhros quartos; con tal que ¡11 D .i . M nrrn · EI l cmn f unde so hre ·ellos la cnpellania dc]os quin · ientos d11• · ~n p rimer lugar su he rmano el expresado (lr- efe· que 11 d e s ervu 1 Bar th010 me snbirin, Y <'n se,gundo elquo fuere su boluntad, con_ ª r d<'· ridn. penRión det-res mi sns, nvcncficio dclalma demi Mardo., nua, Jfl'l nuestros lexitimos hijos, y a1m1smo tiempo se haga cargo dePª.~¡entos otra s tres misns que ti<:'ne <l t"pcn cion laotra. Cnpellania de qu1ntíendt' P'· quC' S<' fund ó <'ll v idn d omi M rnido vaxo do cuio grnbamcn sce aor~ l n D onnc ·wn <1e dhos qunrtos qu" en caso ' de omicion, d ecloro desde ' pornohechn, Y clcmingn . e f ecto; declarolo .nsi pn.rn. queconsto. ]l{nzir 11 G~ Ite n d C'rlaro qnc qunndo Re d esposó conmigo dho dn. Maul ª :r APÉ~DIC'E 2í)-~Í DOCUMENTAL l!ere yo al ~iatrim onio en Dote qe. me dieron mis Padre s, treze mili quinientos nobrn t a y un ps., que con un mil y quinientos que me donó por bía de a rras, hazen la cantid. qe Catorzemill quinientos nobenta y un p5 -, los qua les se obligó aentregarme en la conformd. que aparece del instr umento dotal, y dho mi M.a rido traxo por su parte, y tenia entre los vienes deque hizo Capital, cincomill y trescientas arrovas de Ierba depalos, con di ez. y ocho Carretas y dos carretones aperadas, eon los bueyes correspondientes, y mas cinco mill ps, en plata dequcle he1·a deudor dn. Jua n de Zamudio, vezo. de la Ciud. de Corrientes, de cuias cantidades, sed e ben rebajar los mill y quinientos ps, enplata que medió en Arras Pª · el cómputo de dho Capital, y delas Ganancias qu~ so~re uno y otro p rincipal se hallaren, durante eltiempo denuestro Matrimonio, declárolo assi para que conste. 'd · expresso 6• Iten d ecla ro que ha viendo dho mi 1-fardo. en v1 a con mi eonsenttimi ento y con el consexo de varones Doctos gastados gran parte desu Caudal y ehnio enobras pias y del maior Culto de Dios, co1:11o son ' . . d ta Ciud. En cmas dos e1 eombento de santo dom10. y la Igla. Matriz e es . y ' adorno de 1a 0 1 suntuosas fab ricas conlo que ynpend10 para e ase ' d • tL" d lata conpeso evem lt I g}¡_ de dho combento como son una cruz ª :i ep arcos. un esqui•¡on cou b Y dos marcos, dos faroles con veinte Y nue e m . . ' diez y seis d'1 d d los siria1es con ez marcos qua tro onzas· dos blan ones e dera del '', .. les una de 1a van .:u.treos; seis vara s de palio, dos delos siria ' b deplata que G· t arcos· un au1 mon, con pesso de cinquenta y qua ro m ' 1. dorado un platillo, un ca iz t ' mcho . deJ·,1. sirve te 1 L"epos1to . · · ramto. Pª· el santiss1mo sac ' cnel vinageras y campanilla. quinze rosas deplata que es an to de Brocato y· ' . ' d 1 t un hornarocn d irgen del Rosario • Dos Atriles ep a a; Dalmaticas, Paño e bl ' d eOro casullo, • . ' recado necesario' aneo, quese compone de capa e P'l 1 es y demas . . u pito pa ño de fasistol con sus ga on ' . fundado assinnsJ • (t · ta rnd f) ps, Y f ' · de seyn sumiero n cer ca d etrecientos mill rein cadauna n,vene icio 5 mo 1 • d quinientos p • d el quinto as clos expresad as Capellanias e mplease to 0 su l t d que no se e · por su ª ina, y de l a mia · fue su bolun a , te en sufraxios del . ' d desumucr , s alvaceas, os vienes que s e hallasen espue 8 dispusieren su .. alm · • d aquellos que 8 b1Jos, por xitirnas deau • t a, sino que <lespues depractica os 0 1• ndtt se ad· . arte delas alqu1n ,Juchqne l o que quedare a 1ap ·a quela correspo . eficio supo . • r cantl • osido ven ner JU8tnm t e. que mucha maio f 8 con con Re ·a obras p a ' g:H,tt6 en vida e n las rcfcn as . · fazie desu • ueconste. •0 conmigo in a 1ma; d ccla r olo a.ss1 para q . que contraJ tubimos y Pe :~ Itcn decla ro que del Matritnon;e. la Iglª· romana,n Balthazar les1e ; y scgn. el orden denuestr~ . al Dor. .Dº· Ju~r... ria Isabel "Ptocrci b ' . 8 1ex1timos . l n da- .JU.P ,,. nmos por nuestros 1J0 :Maz1e , • -ri.azieJ . • l a Dn- Doillº· , a. dn. J oaqu1n M,az1e , · °, 4 ::!58 tos :MACiEL EN LA HISTORÍA DEL PLA'r A l\rlaziel, a Da. Dominga Maziel, y a Dn. ~fathias Maziel, como assi mismo se espressa enel referido Poder, declarolo paraque conste. 81!- Iten declaro que haviendo dado estudios al expresado Dn. Juan Barthasar nuestro hijo enel colexio denuestra señora de Monserratet dela Ciud. de Cordova, y eJexido este, despues de haverlos concluido, y obtenido. el grado de Doctor el estado sacerdotal, le asignó dho su Padre, y yo para su congrua substentacion, y quele sirvieron de titulo para las órdenes .Dos mill ps. sobre las casas de nuestra morada, con mas cien marcos deplata labrada, y dos esclavos para su uso, y servicio, que ya le tengo entregados, segun consta dela Escriptura de Patrimonio aqueme refiero ; y fue la voluntad de dho mi Marc.!o., quese le aplicasen a la parte desu lexitima Paterna, y Materna como lo tiene con sentido dho Dor. declarolo assi paraque conste. 9• Iten declaro que por los años demil setecientos cinquenta Y quatro, despachó dho mi M,ardo. un mill y trescientos ps. en doblones de· oro apoder del Pe. Pedro AltamiTano dela compa. deJesus residentte en el Colexio irn perial dela Corte de Madrid para las pretenciones de dbo dor. Dn. Juan Balthasar nuestro hijo los ouales haviendo pasado por . ' su d isposicion á manos de Dn. Nicolas' de Sagarminaga su Apo dera do' '"· 1 Pe rd 1· d ose pormuer tt e deste, se deben aplicar al ha ver de su Iexitini: · en loque está llano dho Dor. declarolo assi parq_ que conste. lO• Iten declaro que haviendose hecho car<Yo dho mi M'a rido, Y lo del:1 . . demi sobrina da. Theresaº de Arellano, despues del:1 enanza Y educaz10n muer t e d e su Mr. y mi herma. Da. Ventura de Lacoizqueta, ent rar on enr poder de dho mi Ma rdo. las alhajas .v trastes quese le adjudicaron Pº 1 ·r1 M' v negro su exi ma aterna; con mas trescientos ps. en plata, ymporte de u~ . ,· llamado xavier, qu e compro, dh o un. Mando . .· pubhca, · por escnpa. pertenecí 1 h.· ' ¡ qua1e5 . a a a 1Juela dela expresada Da. Theresa: todas as . · tr1n1on10 alhaJas y d t M , emas rastes, oele entregaron al tiempo decontraer ª . tos . d e E chague .. y Andía y por razn. de1os tresc1en r con dn. Xavier N arc1s0 0 ps. Y delos corridos del cinco porciento seÍe dio toda la. ropa que en tonzcs sel e d1· d b ' alhll} º e nue o Pª· su mayor descencia con alguna 8 . der, de oro y es ld ' m1po iü . ' mera as, que todo consta dela razon quepara en • bestuar s1ntraer aco · d · nsi erac10n loquese ympcndió en sus alimentos, Y rse en el espacio d d a· de casa emas e 1ez y ocho años que corrieron antes Y que estubo en · d· .' mi compa. ecl a rolo ass1 para queconste. ,tro lh Iten de 1 h · 1 nuel) • e aro, que aviendose casado dn. Juachin Mazie ' . •eso, segd º· h1xo en el . d h' Bnld1V-l remo e C lle, con da. Isidora Antta. f ernz. de n1i ~sp.ues deobtendo. elveneplasito desu Pe. y mio leentreg6, y di6 dhº J!l arido por qucnta de su l exitima Pat~rna v ' Materna Pª· sostener etl ear ga d 1 t · . . ' ., ' 111 °· e ma rimomo cm co mill trescientos sesenta ps- tresrrs- y J APENDICE DOCUMENTAL d1ncro, alhaxas, y trastes c omo parcze de unn Mema. firmada mía, y del dho un . •r un quin, d eclarolo asi paraqueconste. e(t Iten declaro que biendo dho mi :Marido que el expresado Dn. Juachin nuestro hixo no tenia casa propia, enque vivir, le travaxó (sic) una aqucnta desu lexitima Paterna, y Materna en uu solar de sitio enquadro, distanttc <los quadras dela Plaza, ala parte del Poniente ahorrando en su construcion mucha partte de suregular costo, assipor su conosida industria, -e yntelixa., como por los esclavos, úfiziales, herramientas, y demas necesario, que tenia propios para las principales faenas de su fabrica, la qual despues de concluida sele entregó abaluada en tres mill ps. teniendo presente los gastos qe. dho dn. Juachin ynpendio en algunas obras, de Maderas, y otros materiales, queconsu propio dino. compró Pª· lamisma casa, declarolo assi para queconste. .· d ª· Maria Isavel 13ª Iten declaro qe. haviendo casado anuestra h lJa . . Maziel, con dn. Melchor de Ecbagüe y Andía, le dio dho dn, 1Wnt. M;iziel ., de Dote.' enel . Y r o, Catorzemillochocientos doze ps. y quatro rrs. porvia tl.ino., plata labrada y alhajas que constan de su carta dotal' cmo un. terna como Ma.tcrn.•, ' . . . porte seha de aplicar alaparte desu lex1t11na, aai pa ' r tado el caudal que po , porno exceder dela que le correspondia, compu ' st entonzes teníamos declarolo assi pra. quecon c. . , ropia ' • Da. M.an:i. Isabel 0 .tsll P · 14-ft Itcn declaro qe. no teniendo dha · t •rioun·t en el . . M . a ú. cons .rul en que vivir se dedicó el expresado mi an o, t y Jos vrs. y solar qc. temamos enla Plaza deesta ,e·iu d. sobro qun.ren u .. Casa de nro. lnJO una tere1a • defrente adha plaza dexan d 1Odemas . Pª·d '' •Jia.·L erk cargo Dr D . , . mira cno ' · n. Juan Balthasar conla yntencion, Y se empleasen en ::ttlh 1 ' • d JOs esclavos que . • a ( ·'· 1fa. IsnYel ni del travaJo e • estos traYaJascn, dha fabrica ni t nm,poco dcel costo delos materialesbquls~r para la compra 1 . , ' · desem O ,~ • sino unirnmente del dinero que fuese prcs1s~ , )ara el salario de ~s delas madcrns v dcmas que fuese nece~ano, J I . deracion ]oque bavia Peo ' · t nnsmo consi . semenes ron ehnvados teniendo en es O t'ca yntehXª· en · ·. 1 de a.11orrnr c1ho mi ' Marido con supcnc1 · · a! .y prac dido• concluir · en vida ' :x~nt hnviendola. po l stado que ' es obras; en cuia atencion, Y no : ·, hor mi hijo ene e desse]a t c11 go <'ntrcgada al r e f e n ·a dn, J.V.LJC1e b Pª· e11:1, • que esta an . . de f!Uerl'0 • demas cosas fizrnJrs, ~· <'on todos los materiales, Y . mos esclavos O ercsitn . t 1nnc1a . d de }os JnlS a 1as qc. 11 ' s, nf1n ele que sirven oce t ··aJ y lo en · ·endo todo8 l b . . del ma cu, ' , x )ensas, s1 , os 07nstrumcntos Pª· la fu nea propias e. l tid:id dha .. . barla. nsus . ifordo. In can , , 1 ' <',H,n , pueda conelmrla, Y a.ca ·ía de dho nu sideracion de su ta nentn1 • do con dente y tcnien d porclho did ' <'arg-o el sn tisfazcr a la tes 1 lJe Dos mil] ps. enplata cnque ajuicio prn ib~lso practica o . p1·:1 de In u oqu ' el descn or p1 o , f e f) urda expres ado, sccomputa · lo cual queda P C sn ron Jns Unto , por loqu e se h ::i lln ed1'f.1c,u , 1o, con (h r 1 1101111'n •:1d,,. n ' , n ·'P"c•s· . ' \(l n D.,. 11:tri :1 Tsnvcl, Y u.1n · l\{<'leho ° ° 26Ó Lós 1'iACíEL EN LA itISTORlA fiEL PLA'fA quarcntas y dos varas y tercia de sitio deftente, y fondo correspondiente sin que en ella tengan parte, ni dro. qe. alegar sus coherederos; declaro}~ asi para queeonste. :i.5• Iten declaro queenel fondo correspondiente alas quarenta y dos varas y tercia de frente en que mi difunto Marcio. dio principio aedificarle anuestra hija da. Maria Isavel, la casa en la plaza desta Ciud.; se hallan edificados asi del norte lindero, calle real enmedio condn. franco. Martinez, un Almazen, y Cochera, qe. antes de dar principio aquel edificio mantubo siempre, sirviendose de ellos; cuya cochera, y almazen con el sitio que ocupan fue la yntenzion, y voluntad de mi difunto Marido setubiesen por reparados dela casa, y sitio de dha Da. Maria Isavel nuestra hixa, como yo ensu nombre los separo, y aparto, para que solo del resto del fondo delas dhas quarenta y dos y tercia varas de frentte pueda disponer asu Yoluntad como suyo propio. assi lo declaro para que conste 16• Iten declaro que anuestro tercer bixo dn. Domingo Maziel, para quep·..ieda sostener las cargas del Matrimonio, que con veneplazito desu difunto Pe. ajustó en vida, y ha contrahido despues desu muerte prezedieni:o mis consentimto. conda. Ventta. del Casal, le tengo dado en parte desu lexitima Paterna, y M;aterna, ocho mill ps. como apareze deuna Memoria firmada del y mia, declarolo assi para que conste . 17• Iten declaro que quedan por vienes propios dela testamentar~a de dho. mi M:'ardo. y mios, una estancia situada enel Arroyo del medio jurisdizion deesta ciud. poblada deporcion de Ganado vacuno, obexuno, Y un:\ e ria d e M;u1as; con mas otra estancia sobre el rio .S alado con casn de t exa, edificadas at odo cost o, suhuerta con Arboles frutales, porcion de G lnado vacuno, con onzc earretas un' carreton y sus Bueyes corres· · t es ; como tambien una quinta ' en distancia ' pon dien de quatro quadras deeat a Ciud. con suhorno de t exa, y Ladrillo, con los Galpones necesarios Y d"mas aperos Pª· sufabrica, dcelarolo assi para qe. conste. . IS• Iten declaro por vi enes iguales comunes la casa en que vibo con veinte esclavos entre muger es y varones, quatro sienttos veintte Y do: marcos deplata labrada, seis pates de Manillas de Perlas con otras alhaxa ' de oro ' y D'a ' . nstan 1 man tt es, con el homena je y demas Utencilios queeo dela ra.zon quese hntomado la qual junt¡mente conla que se está tomandº d el Ganado vacuno d .· . dos refc· . . , Y emas espesies de animales que ay en las , d . tt dec1n· r1daa estancias sea ., , e gregara espues de concluido, aeste testamen rolo ass1, para queconste _ °, 9 . : ' halla:~;. Iten declaro que por muerte dedho mi Marido solo se Qum1entos ps. <'n p1 t d {l.los 1u. . a a se11 a a, los que se emplearon en pagar •ns dlcos q~~1e asistieron, en su enfermd. Y parte del funeral, y e)(equ1 quesc h1sieron por su 1 d 1 • • It n, ma i ec aro lo ássi para que conste rdº· 20 en declaro que al tiempo delfal1 ezimientto de dho. roi :M:n APÉNDICE DOCUl\IENTAL 261 Je quedaron deYirndo varias canttidades de dinero, muchos sugetos doesta Ciud y de otras d el r eino, como apareze de los apuntes, de su libro de ~:ixa, Yalcs, y escrip turas que se hallan en sor á que me remito, declarolo :isi para queconstc ~l• Itcu Decl a ro queel dho. mi Mardo. no deve cosa .alguna, a nadie, por que un a y otra confianza qe. tenia, !atengo satisfecho, como ronsta tlc los resguardos que h e tomado, y fue su voluntt_a d qc. qualquiera DependJ. qc. sa lie re contra él, s e pague ymediatamentte d esus vienes comiltando ¡)Or Yale, ó escriptura y aunque no constte, siempre ge. no ll egare aquatro ps., s e satisfaga con solo el juramco. d ela parte, declarolo assi para que conste - Itcn d ecla ro fue su voluntad como apareze del Poder que me ronfirio, que yo fuese la tuttora y Curadora d e las personas vienes denucstros menores hixos da. Doma. y Dn. Mathias Maziel relebada del grayamcn de las fianzas, por la entera confianza, y satisfaccion que tenia de mi persona, en cuia y ntelixa. arreglandome á su boluntad, Y r epr esentnndo s u persona, m enombro y constituio por tal tutora, Y Curaaora en los mismos t crminos qr. aparezen de dho. Poder: y desde luego aze¡.~to rl <'a rgo dela t utela v Curaderia d e1os expresados d.a, . Dom.a., Y º· )J ' · ' que t omen d e M:antenerlos Y e auc:u1os, 11~ sta · athias, con 1a obligazion t est ªdo, Y les entreg ue la parte desu lexitima; doclnrolo ª 881 Pl- quecona e. ()') t a gad os lns Mnndns, -•1 ~ Itcn Cumplido que sea este t estamcn Y P . . ,. 1 J d tod os los b1on cs, <1ros. Y · _ • egue os, qr. comprehende en el remanente e · . M ·a nombro on su nom ncciones, correspondientes a dho. mi difunto ari o, . . ·1 . b 8 us Je:otunos y u111 >Cr . J. h' Maziel n re, r en ronformd. d e la cla usula d el Poder, por , s1 · l {i Dn uac m ,a es hpredrros al Dr. D n. Juan B a ltbasai· Macie' i · ..,.r 1·e1 v adn Dn. D . . • l l7J. Domó), J.uaz " . omo. Maz1el á da. M.ana Isavel lfazie , a rtes y Icxi~fot h·1 1 ' . es por y(l'ua1es pa ' • : s Mazi ('l pn r a que parttan sus vien , &:> . • de Dios y la hm•13 . ' la vend1z1on • • ]'ors1on es, y los h aya n y poseen con dP,1ho. mi M arid~ d erlar olo paraqe. con st te la del '1:! ' npareze dela e1ausu , . d testamtt0 • a mi . ~ l.\ Iten de c lnro f ue su voluntad como ' . citado n 1 cxccuz1on esu . .1.-oder, d exar por Alvacea para a · f erhlos sus h1xos, Y 1 a otorgn ntte en l)rimcr lu<Yar y en segundo alos"'A..,re . 1 •1, todos tres de m· J: º h" J.Uaz1e < tos l'l Dar dn. Juan Balthasar, y dn- Juac 111~. ' . arre<Tlandomc adho 0 maneomn. eynsolidun ac nd·i uno · e n c urn. · •ynte 1x.a, •' l x sorcio de os e · taria en con d 1 Pou · " • • ' C'r ll1 l' nombro 11or tal Alvacea t esta men • ''. ziel con tto O e l r(\sn l d J uach1n .11: ª ' menciona · dos '< os dor Dn. J unn Ba lthazar Y º· . y los -codt1 r . f' d que puedn ) o, · publica • quC' en d ro. sen necesario, a lll e • reinatar los en 11ns hi · ·enderJos, J . a f'fceto . .1 •1os C'nt ra r t.'n todos los v1rs., ' mpln, Y t.eng, •"\ln:onuo . · ra que se cu . t facultad, ]() · oco mo JtISgnremos conbcn1r, pn )• orrespond1en e ' 'nnt('nido :' dispuesto cnel t estam cn tto, con .l, e ~:?• °, l ""A.,[ , 1 l) 262 LOS ¡\IAl'IEL E:--¡ LA HIS'l'OllL\ DEL PLATA para que podamos sobstituir ennuestros ofizios, y subrrogar otros ennuestro lugar, qe. lleven a devida execucion la voluntad de dho difuntto declarolo assi para queconste 25• Iten declaro qc. poreste Testamentto, y en conformd. del referido Poder, re:boco, anullo, y doy por ninguno, otro qualquiera testamentto, o testamentos, eobdizilo o cobdizi1os, Poderes, M.e morias, y qualquiera disposiciones . . . . .. . qe. haya hecho, ó otorgdo. antes, dho mi difunto marido, para que no balgan, ni tengan efecto ninguno, en juicio, y fuera dél, aóra, ni en ningn. tiempo, que parezcan, y sean mostrado, aún que contengan clausulas derogatorias, y palabras ó expresiones particul;.ues que necesiten expezial mencion Pª· surebocacion, de quenose acordó altiempo de otorgar el contenido Poder, y si le hubieran benido ala Mema. las hubiera repetido de verbo, adverbtnn; todas las quales fue su voluntad que no baliesen que solo sirva, y balga esta presentte dis· posicion por su testtamentto, cobdizilo, ó postrimera voluntad en la for ma, Y manera que mas haya lugar en dro. en cuio testimonio assi lo otorgo por antte elpresentte Escrivano publico de Cavildo y real hazienda deesta Ciud. De Santafee dela Vera Cruz, en c>lla a diez y seis de Marzo demil setezientvs sesentta, y cinco nños. I la otorgo antte a quien doy fee eono·zco assi lo otorgó, y no firmo porque dixo 110 saver, hizolo a su ruego uno de los testigos que se hallaron presentes que lo fuero n dnJph. Gabriel deLacoizqucta, Dn Antonio Barrcnechea, dn, Jph. Gomez Dela Palma, dn. Hipolito Casal, ydn . .Juan Prauco. Roldan vczs = A ruego de la otorgante Antonio Ban·enechea - Antte mi - G?'egorio Anttnio. de Segade. - Essno. pubco. de Cabdo. y R.1. hazda. . (Archivo de los Tribunales de Santa Fe 1" circunscripción, tomo lb~ años 1763-69, folios 293-302) . ' 12. Carta de dote de doña Rosa Ma.ciel. Santa Fe, 7 de enero de 1779 - Seo 11 ot · , t d t d erCJI · ª ono a o os los que este público instrumen como yo Don J a , ~,4"1 • • , sernc10 . . o q~1n .i.n.acicl vez1no ele esta r.iudad. Digo que n. osa de ~ios nuestio Senor he combenido en que mi hija lexitima dona R, .. 0 Ma_c:el se ca,se con Don ,Juan Francisco de Eclrngüe y Au día, }u~ lexituno del Teniente de Gobernador Don 11:elchor de Echagiie Y .Au d~:i Y Doiía María I b 1 M · · • el se11 c1~ . sa e ac1el y para que vivan con la necesann e ri· ofrecí dar en dote r.. n1· n . d h'. l 'f' st1 in~t t • n, 1 omina a IJa ucgo que veri 1care • . . ' efec 0 mon10 por cuenta d 1 . e su cxitnna vanos bi enes y para ponerla en 1 siendo sa.vedor que v 811•'f'1 6 . . con D01 c ya su matnmou10 en BuC'nos Ayrcs M Je _.anuel d~ Basnbilbaso el día veinte y ocho de Noviembre l1el presen\ ano en virtud d el d . . do poi e1· qu e {t dicho fin le confirió el nomina 1,, J uan Fra11cisco dP po F h .. forn' - ,e ague, por la presente en :1quc1la. via. Y . :id:l ° .. l que mas haya lugar C' n <lcrecho, Otorgo que mando v dono • {i mi 110111111 , ; APEXDICE DOC"C)IEKTAL :ija en dote y po r cuenta de su lexitima los bienes siguientes. Primeramente las casa s con t odo lo d emas edificado que t engo en la Estan- zuela distant e d e esta ciudad como cinco leguas que se compone de Sala, Aposento, tres quartos chicos y oficina, un R.amadon para criados curierto todo de texa con la Huerta v Arholeda cercada de estantes todo "' en mil : quinientos pesos. - Iten dies cuerdas y las tierras donde estan los edificios mitad de ellas á la parte del Sur y mitad á. la parte del Xorte con su fren te al Rio Sala<l.o, á real vara que ha-zen eiento veinte Y rinco :pesos. Iten el horno de coser materiales que tengo en ellas eu,·icrto de texas con todos sus utencilios para las faenas, en dos_ rientos y cincuenta pesos. Iten tres Esclavos nombrados Matheo de edad de Yeinte y cinco años en doscientos pesos. Antonio de edad de ,•cinte ~- seis en doscientos pesos y Tadeo de edad de veinte Y ocho lten La mujer de este último llamada en doscientos y quarenta . ~I~ria Ignar ia de edad de veinte y quatro años con una hijita _ae_ poco mas de año y otro hijo de tres años todos tres esclav os en se1scientos En esta ciudad un lanze de las c:s:ls sesenta Y cinco pesos. Iten que ten;Jo el q ue cae á la parte del Leste que s~ compone de sal~, .- p;~ sento ~: qua rto ú la calle con su Dormitorio y otro quarto que sirf, e Cor·h • . . · · l ha de tener ranca · ei a en 11111 v c¡u1nientos pesos con prevencion ª • ¡io l d echos part.icu1a r a puert a de calle del patio principal sin a.dqu1nr er_ . . d. a· ase res d. h . •• · á qmenes a JU ic, ic a nu hija ni n inguno de los demás lnJOS nnos ' . It _ lo d b r dicha sahdn . en , emas de la casa los quales no podran em araza It 111 1 , ' t ¡1esOS. ('ll ,) ª r or,cna de Ta bu retes de J acaranda en docicn os · dos mesns uos pap l • . t pesos Iten d e crns d e lo mismo en se1sc1en os · · R 1 • de repetieion r ar1 imo d 1 Iten un e OJche de asiento r · e o mismo en cien pesos. on su Iten - un co . t pesos. Con def, : raxa en ciento v cinquenta pesos. ,i 1it1ra <1 • qua troc1en os 1 0 a quí eon s u tiro d e caba los en r] ', • d. a· :1cirn por lo pre · arar•1r n d 111. . es·1 a ]U ic. s que l e ha go ú, mi n omina a. Jª • • ' . t es que r econo· ente ,. 11 ten o-o pene1ien 1 rid't • , ast a liquidar yarias cuentas que º d·il d eYerú entcra rs t' e , ,. f . lt e de ea u , :-t1 l ener:Hlns sco-ún que me r esu .as . . t :nnbien que • º d preY1J11Cll(1o • . o r1r-n1 , ª8 que j ustam ente le correspon a, a su desencrn por 1rrsrnt 0 alguna par. donde ha hr, . nn le pon go en esta Dote ropa . - d de Buenos-A:vres r ~ir1o· l11.ec1so • . . 1a ei1 la· C1uda flp su b n11n1strarse se me rero it'l· razon · 11alh n nomt 0 hasta que rle . ' )' no pod er nrr(',g}arse este gas · ' . <Y'ie v Andrn e Ru r i. ._ • d e E c118 0 1 haber t Dote, por ' h, os,º· Y v o el dicho .Junn FranctSl'º . • ••enes de es ª . 1 narme t ¡ ,1(\ s1rln . mi "Espos:1 ~- po r mi acepto los \ · l . f cion y conf1ezo HI • 'b ,1, a.lu · . <l i s:1bs a • , "º rec1 o · . f sobre cu. rnt ' nc.tos por 1wrson r~ p entn e m 011 l'(•rrn l . 'l t 1'l. ac1 • er::ir·1 T"r '""' e o y re r i b id o <k todos ellos ú nn s. ~1 r(' S de la non umn •. no ~<' 1 rion Y e, . del easo. '1rp 111 : r ' '-' lHP s 0nt e r0nm1rio 1:i ercp • · t e ; 111111 0 v d<>1nns t' .l~d i.:1 lo ('TI<Ya n o. · :Ja l':t can w. 1 r nlí' í)h] jc, <; r1(' 1:t en tre1-rr:i . s u pru C\'tl, ] . , e- ronta •nsi~o-ul':llh < :::, 1 -..,n il r¡ne en t odo tkrnpo t en<. e P V 1 ' • • : T • 264 LOS MACIEL E N LA HISTORIA DEL PLATA de esa Dote sobre lo mas bien para<lo d e niis bienes derechos y acciones y todos los hipoteco espresamente para que gosen del privilegio de los mismos bienes dotales qu e he 1·cci v ido y no los obligaré á mis deudas crimines ni excesos y si lo hiziere no balga en lo que los dichos vienes que obligare baliere esa Dote y sin aguardar á la, dilacion del derecho pa,garé la dicha cantidad caso que por muerte ó por divorcio 6 por otros casos de los permitidos sea disuelto nuestro matrimonio de la dicha mi Esposa y á sus h erederos y á quien por ella fuera parte lexitirua y se me execute con esta escritura y su Juramento en que lo difiere. y para ello doy poder á. todas las Justicias y J uezes de su Magestad. de qualesquieraa partes que sean ú cuio fuero y Real jurisdiccion roe obhg~ someto y r enuncio mi propio fuero y otro que deba gozar con la le! 91 con venerit de jurisdiccione omnium judicum y las ultimas Pragmati~ns de las sumisiones para que á su cumplimiento me compelan y apremien por todo rigor de derecho via. breve y executiva, y como si fuere por sentencia definitiva de Juez competente consentida y no apelada ~r pa· sada en autoridad de cosa Juzgada sobre que renuncio las demas Ieyrsl fueros, derechos y privilegios de mi favor v defensa con la genern · as1· l o otorgamos que 1o pro h 1.b e y der echos d e ella: en cuio testimo1110 . d st ambos por ante el presente Escribano Publico del numero de e ª Ciud~ d e Santa f ee d e la Vera Cruz á siet e d e Enero de mi1 setecientos scten ª y nueve años . firinnTOI1 I los otorgantes á. quien es doy f eé eonosco as'í otorg:Hon Y a· . . h 01. de EcIt , siendo t estigos el Señor 'l'eniente de Gobernador Don Melc .. A . o ,Agua:0 . gue Y ndia, D on Antonio de B arrenechea y Don Francisc . - 1Lrl· Vezinos. - J ooq''lt-ín Ma-0icl - ,h.wn, Franci..sco d e E.chaqiie Y A nd,za c1wr de Echagüe Y Andía - Antonio Barrcnechea - Franc-isco Á [Jllll!Iº · Ante mí: J osé Manuel V illase·ñor, Escrivano Publico. ·zidO 13. Poder de testamento otorgado por dofia Ana Maciel de ])t:s :1 Z · ' Y amud.1 0. - ,:, J-:. n la Crndad de San Juan de V era de l n.s Corriell sin<'º v einte Y ocho dins del Mes de Enero d e mil setecientos ochenta y 9,rtes años: P or quanto h e sido vo <>1 infracrito Escribano llamado por ; 0 es· . . . . . l cf ec d e D ª· A na M]·ae1r1, vecina v natural ele esta clha. Crudad Y a :N"orhC t.ando en l as casas de su M~raca romo . . las nueve v media ele l:tQt1 e rll d e dho. d ia, 1a dha. gravemente enferm a e n la Cama; Y d 1Jº· e1ifer· a.ten cion á hallarse bastante aehacosn y' por la gravedad de ln d rt,t1i1 m e d a d , que pa d ce i n, no podra otorgar su T estamento, en esta rao, •,. 1 · f •· en l n. m cJor ormn. que . sea de D ro. otorga y da su Po d er cun1P :BedoYª' es!' bastante, se,gun se reqm ere y es neecsurio, a Dn. :Manuel d<' 1Jodre • 1 · t · r este p ec1a meu o pnrn. que ordene y cumpla su Testamento, que P 0 iJl qu . · 1 M · cnclo s se h 1c1crc, con as andas y Legados. segun l e tie ne comun 1 • ' U, ( ., ••• APÉNDICE l>OCUl\lENTAL 26.1 <'_ut.iemla ~iSJ)', ne r desu entim·ro, por quo esta dispoeision la rescrba, º ." d1spoue . as1 : hlnnda que quando la voluntad d e Dios nuest ro ¡.:')enor, sC'a serndo lloYarla para si su cadaber sen sepultado en la Yglesia de Nn. Señora d e M erc edes, y amortajado con el Abito d esu Sagrada Religion . cuyo:; funerales, y entierro sea ndispocisión desus albaceas : No 1nbra com~ atafrs l'H primer lugar asu 11i.1a Da. Maria .Anton,ia de Dizi.do y Z ammdio : y ensC'gundo, al Suso dho. Dn. J{ant. de B cdoya,, dandoles todo el poder c¡ue es neeesnrio; para que executen el Tost.nmento, conformo les tiene <'<Hnunit•ndo, en lo que les incumbe, como sus Albaceas Testamentarios Xombra e instituye por sus lexitimos o universales Erederos, d e todos ~us Yll'nes, qup al preRente posee y en lo venidero, pertenecerle puedan, a ~ns Hijos l exitimos Dn. Juo.n Manuel; Dn. Francisco Xrni.er; Da. Maria Ant.1 : n;l. Grogorin ; y D3. Ana d o Dizido y Zamudio; para que los gosrn ~· d isfruten pr. iguales partes, con la vendiciou de Dios y la Su~·a a!-us libres yoluntades; F.ntodo lo d emas procedan sus Albaceas, aordenar ~u Trst:mwnto, a.su el eccion, que desde haorn para cuando tenga ef ect o, h) aprueba , ). ratifi('a, quC'rbuoo se guarde y cumpla todo lo que en el ordenado, eomo si nqui, fuera elongado su Honor ( i) que, en su Yoluntad, rt'horar, l'Omo reboea., y nnula, otra qualesquier dispocision,. que unt es <k t'sb hu hier e dispuesto y otorgado ptll'a que no bnlgn., si haga f ee. l'll j ni eio. s i fuern d e el soinmcnte, este que haortt otorga : Asi lo ot orgó <'st:uulo <.'n su snn o juicio, y entero rnsonnr seg-un 1rnre('e . · · pre sentes G . de Cosio. Dn, Mnnuel Y por tt,stigos Dn. Zipria n d e Lagrnnn . . . . are.in · . ' • es vo eonosco s1rYa s _ ' M l3<'dova: ... Gutie rrez Iln dh1. otorgante , n qurnn " . 39 - o 178•! v 8,1 un rea1. PJ t'I sello 39 Rrvnndo dt~1 Sr, Dn, Carlos Y nn · T t' de . · . do los dhos. t'S igos no firmo por no sn b er lo )nzo nsu ruego, uno _ A t · . Rnll . · d lngrnnn · n e nu .... . l\lll' tlo\· fe(, A ruego v µor t estigo: Zipnnn y lr _ Es . . . ' . e rd o Entre HnNl : 1ns: n . . t de foJ·.15 ('tmrrntn hago Gonznl<'z - Esno. Peo. y de n, · . 1 d 'gin·,1 corr1cn o • f lt' lll<'ntl' eonf ormo n. la letrn. e su ori _ · . se halla en el ' ,. 01·ho n1 e1to a r nnrenta y nueve d e <lir110 Escnbnno qur . ' · N9 14. .\ rrhivo ele los Tribunnlcs en el le>gn~o A.·11·es) • ( Ar r hiYo dr1 doctor Raúl d o L~,bougle, Buenos St' °· · · 'd Hl de :1 bril Montcv1 eo, . 14. Testamento de J.,uis Ennque .u.1. · • , con su Santa grat>m ) l . u·105 'l'odopod eroso r'eren r r l, !tt, En nombre de c,omo Yo D 11• Luis 1 · t estamento ' • l Buenos -\ 11H'n : Srpnn t od os qunntos est (' nn · ne la cnp1tn 1 F llnqu<' · e· dnd ·Y natura · Icz na) f :tdt'l y e /.ino d e esta. in D Bernnrdn Gonza · ~r · 1 :Y de H , h 11 n\. vres yn finados ; n a . .\~· rt'S, hi,io lexit im o d e Dn. Junn .., ne1e .. t ' t nl Buenos 1 • , • ·a , memorin . t 11 c 1·,1s v ~euh os ) urnlrs nn1bos de l n (\X¡1resada cnpi · · r10 po e · · T rst'l· l ' on entern salu d Y <.'n mi cnbal ~u1 . d otorgnr este nu ' t n111<' < . l c..1<:-ternunn o t '" P1'tf t'r to uso de la. rn zon .. • ie . ern signien e: 'l\l~ V lll,l 11 ' 1 111 ' Ht 0 • ' . lo ordeno v hago en ln f ' •u•aciel - . ° 266 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA 1' Primeramente encomiendo mi alma a Dios Nro. Señor para que así como la crio e hizo de ln, nada se sirYa tener 111isericordia y picdud de ella y llevarla al eterno descm1So de la gloria . . . y el cuerpo mande a la tierra de que fue forma.do. 2• Item quiero y mando que cuando el Omnipotente Dios fuese servido llevarme de esta vida mortal, mi cuerpo sea enterrado en la iglesia de nuestro seráfico padre San Francisco y con el hábito de su venerable orden, como tercero que soy de ella; y en ti erro, misas, exequias y demás funerales los dejo a la disposición de mis albaceas que abajo nombro, y les hago especial encar,go que me depositen en la ya nominada iglesia, eviten y excusen e.n mi entierro toda pompa y ostentación mun· dana, y lo declaro asi par:i que conste. 3• Item mando y dejo a las mandas forzosas dos mates a. eada una por solo una vez los que desde ahora separo de mis bienes por derecho y acción qu. tienen a ello y lo declaro para que conste. 4• Item declaro fuí casado de primeras nupcias por nuestra sant~ madre iglesia con doña Rosa Méndez Casilda, de cuyo matrimonio t un mos un hijo sólo, que murió a los pocos días de haber nacido, lo qnl' declaro para que conste. 5' Item declaro fuí casado de segundas nupcias por nuestra santa ma d r~ iglesia con doña Bárbara Josefa Camejo, viuda que habfa sidti del frnado don J oseph de Silva1 de cuyo mntrimonio trajo a mi podrr tres hijos llamado~ ~anuel, José y Josefa de Silva, a los quale~ tres después del fa1lecmuento ele su expresada madre les entregué fiel Y 11gn mente todas sus lexitimas, paterna y materna como consta d e las hijut'· 1as que t·ienen en su po<lcr, y lo declaro nsi para ' que conste. 6 . . ' ~t:m declaro que durante este matrimonio hemos procreado cinc; saber, Paula, La.uriana Juan Pedro Carlos Miguel · hi,Jos _le:nbmos, Francisco Antoni 0 M · 1 1 ' '. •• :1 q tH' aeie , os qne declm·o por tnles m1s lnJOS pnr, conste. 7 fJ. Item declaro por bien es propios tres esclavos llamndos Fr:lllcisro, ~osef Y María ; juntamente una casa cu la calle del Portón Yido, qul' linda por el oeste con l d 1 f • . te co11 e maclo Francisco Lores y por el 1es la del finado Ezquerra . . ' · sola , en cuyo sitio tengo edificada a la calle una, puerta ele zaguán v otr 0 t . al sur, , • cuar o mas a la calle real, que nnra n frente a las ca sas de don Mclchor Rodríguez v en el fondo hn v edifir:](1 1 un cuarto de nwdia ngu . ' · : r orr:i . ' a , una cocina y un tinglado su patio O , correspon d 1('1lte . C'l frent d 1. ' · ,;:tnrn11 ' . e e < iehn cnsa y fondo v los linderos conu : n poder como :1si n11sn1 l eln !ºs pla peles e mstrumcntos que se hallnn en .:i ' • d con r f' üCrer 10 que t0n rro '\ m1 1l ·11 ]este v lm :i 1 f on d o d el c>xpres:ido finndo r.,Psng uaucro c¡ue mira ' • · • . es cn1 , · ' i:;zquel'r:i, en loR términos v cond1e1011 que ln ec 1n. ('Ompr~ de dil'h 0 1 . tos qui < ~,irngn,Hl 1' ro, co11 st.n.r(1 en los iustnnnrn ª . ª mi 1-, ' 2n7 p:1ra11 vn l'I 01' i(·i11 p ú bli (' O d o rn;t.;1 duda1l II la lflll} mo para qtlll l'lll Hd t' . l'(! lliito, y lo dcclu,ro S' H1•m dl' clnro füÜmismo una 08f,andn, miu. fuir.dada tlll lnH nncicn(ps ll(, Pa ndo, e uy o H fondos y mojon eti eonHtar{m on l oH doc uru,:ntoR ']Ue paran 1•11 t,rp m iH pnpt1 los, como nsimi:m10 todo o l gunn.do m:w:.ulaa do ~-l'gun::i, l':tb:tll o:; quo Ro en contraron con mi marca, y otroR utensilioH qu e HO h:11l:l1'l'11 Pn la diel1a ostnncin al ti nmpo do mi fallo cimionto, se tendrán por mfos y prop io~, y loH dceluro para quo ronstc. !H Tt em nom hro o instituyo por mis únieos y universales h er edero~ a mis citH'o hijos <JUO hemos procreado dura.u t;o el s egundo matrimonio l'O ll 1:i finn dn tloíi:i Búrbarn. ,Tosofn. Oame,jo, mi lox itimn. mujer, a Prandsro An to nio, Carlos M.iguol, .Juan l)odro, Lnuriann y Paula M.:icicl Y Camr.io, l' n t od os mis bien es, <lere ehos, :wcioncs y futuras suhccsioncs, pura <JIH' lo <lis frut c n con la bonclici6n c1o Dios y la mía en pn-1. Y quietud por ig11 a1 pa rtr, Jo quo declaro nsi para que consto. . . l\l' l t< m mando a mi hijo Francisco Antonio nn S anto Christo d<' mnd(\rn, eom o <lo t1·es cmirt.aR ele largo, con su diade m a de plata Y su nil'ho ? pC':1iia 11 ucvn, como lo eonservo en mi habitndón , Y 10 d ecla ro nsi p:trn c¡ut' <.'OH Ht.o . orlos :Mig.,.ncl un Sa nt o Chriiü o 1l 1 frm <l<'cln. ro y mando 11 mi 11 ijo "' dp mPtal, v lo d ('c]aro · nsi para que eonste. . t· e .1 l j el n•lox que rnn . 0 <e . 1~\I l t 1 m m:rndo a. mi hijo ,Tunn P odrn 8 0 C'On ~t c (' 11 . í· l a O· (•hromupnra quo . . . Hli ]>O<l Pr pn ra HU uso por permiso m o, Y O ' • .. 1 ,¡ con~ Jn orclon t err.PJ ,t ( ( . 1, 11 l fr m m:111<10 Jlor modo clo hmoAn a . _ lo (, 11 0 t • -f od 8018 pesos, -1 '"P.n to 11<' ll tiC'H t. ro pndrc San l¡,raueiseo do es ,tl, CHH' ' · · 11 1 ~ tl<' <•l:tro p :ira q u o consto. S a11 .losó ele· 1-!? 11.(' lll mnn c1o a J J1rn;pitnl <lu In cari<lncl clo11 so1,11or asi pa ra que rs t :1 110 m i 11 a <1n C'iuclad, RC le den BC'ÍS ¡)osos, Jo que <- oc· nro 1 º <'OnRt(', 11 1 11 ª ~lit' 1:i,,t l1 11<'m m rrnclo n Jn Mo · t : ~ Rt' hnu 1l P <1 :1 1· 11 " <·1:i ro n~ i J)fl l"a. r todas est H~ . ncln d clio:r. p<'sos, ·. d e osta c1 . 1·10 d<-' hmosna , lo p:-irn por me( , . por unn. soll.l vez, t nuo (',Qnste. 111 ropa dr mi 1 mi f atl ocimirn o. . l. 11 J·o Jun11 lt0111 mnnno que d espu us ( n . 1111 tomr m1 ll~o 'l'H' . v fue ra ifr o ' rt1'rn e n m1s fi <' l1:1 1l n t1 C'ntro ,lo una ca;¡a , t R<' ropn · ' Pt1drn t 1 • . y ln rr~tnn .r · . · ·0 Carlos O( n l :1 q tH' 11r<'rsitnso y qmcrn, · · :i , cloio n m 1 111 ,l r~1•hv 0 e la manoo ) . ~. · ~· ~· l:i e:1 .ia <londt• s<' linllnro 8 , • • · 11 ~11"1 ¡0 <¡H<' <lt'<'lnro ns1. pnrn q 11·'",... ronstc. . f ll••eim1cnto r~ . ,, <1" n11 :t .. 17" T nuo de~pucs . hneno~ ,n nt.enc16n n ·8118· . f <'m 111:n 1<l o n mis nlbncNtS ·1 111 i ,-11 1 · esrln vn, t . ('}lo escrir eesnrl 0 pnr:t d , .1 . nn1:tll qnP :1 l n n r-grn J\{n.rin , nu · ~ '1"\ 11 in · , l 1n <Jll<' f-lefl 11 , • voluntn en j q ~,, l p (l (í <':1rtn dr hhorttH, S d ]lll ult1J1l!l • lfr:, ·1 r . · , (•lf1usuln . , fi cio d~ llll 1 ¡,. 11, in:i l ,. i p t f' Hir v :1 801 ,) rs .a v '1<'10 :i lu ne i1 l r~ 1 1,•~t · ·1 ' ' , llll <' l11o : ,. • f. ] i V 111:in<l O , · :t ~illli HJll O 0 1'( CIIO , , 268 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA esclava llamada Maria, cien pesos corrientes para que los disfrute con la bendición de Dios y la mía, y lo declaro asi para que conste. 18• Item encargo a mis albaceas y herederos que los cien pesos que dejo a mi esclava se los pongan a réditos o se los administren con econom1a para que le puedan servir en sus mas urgentes necesidades o entierro, quedando asimismo al cuidado de mis dichos herederos para que la atiendan en caridad con consideración al amor y fidelidad con que mas de treinta años me ha servido fielmente y los ha criado, lo que declaro asi para que conste. 19t Item decla-ro y señalo y nombro por mis albaceas t estamen· tarios exeeutores de esta mi última disposición a los tres hijos lexitimos, a saber: en primer lugar a Francisco Antonio, y si éste no puede exercer las funciones y diligencias necesarias, por sus enfermedades u ocupado· nes que lo impidan, puede nombrar a otro para que las exerza en su nombre, por ser asi mi voluntad, lo que declaro para que conste. 20• Item nombro en segundo luga-r a mi hijo Carlos Miguel, Y en tercero a Juan Pedro, a quienes por el orden asignado les doy Y co_nc_edo amplio poder y cumplidas facultades para que den el debido cumph~ ien· to a este mi testamento, sus mandas, mejoras y legados, en él contenidos, a cuyo fin les prorrogo todo el tiempo que necesiten aunque sea trans· curso el año, lo que d eclaro para que conste. :i ona a.Igun, 1 21• Item declaro no hago memoria d eber nada a pers dell mas por la fragilidad de ésta quiero quo siempre que se me demangue mis bienes hasta la cantidad d e cuatro pesos, es mi voluntad se le p:an· con solo su simple juramento ; mas si alguno otro me demand ªre en docn· • • que presente ti·aa d d emas crecida mando que no se le pague sin t mentos en que lo justifique, lo que declaro asi para que conS e. . cinco . .l minados mis 22• rtem mando y es m1 voluntad que s1 os no • . n:unados hijos procreados durante el matrimonio de segund~s nupcias, la :Maciel Francisco Antonio, Carlos Miguel, Juan Pedro, Laurinna Y Pau éstos que y Came jo, si después de mi fallecimiento tuviere alguno de mnten1n, represe~tar o p edir algo por lo que le c orresponde por la parte ~eclatO es mi volunta d que del montón de mis bienes Re le pague, 10 que para que conste. dcspüés dC · b'1enes , ' s que se 23• ltcm d eclaro y mando d el quinto de mis 1 · demás funern e d n· sacados los gastos d e mi entierro, exequias Y dos y on• l andas Jega · ,te hagan, mando y es mi voluntad que to d as as m ' d 8 1 re111 :1ne1 ciones que tengo hechas en este mi testamento, se saque el de él_. y lo declaro asi para que conste. . valor qualquic~; Por el presente revoco anulo y cloy pr. de nm~n d puJnbfll . 0 O otro t estnmento, codi.cilo, me moria simple u autentica ºfe en juicl · ni haªª antee de ahora haya he cho; pues quiero no v alrra r.i 269 APÉNDICE büé-0:ME~T AtJ ni fue ra de él, solo este en que declaro 4uedar completamente especificada y conculuida mi ultima y postrimera Voluntad. En euyo te.xtimonio asi lo otorgo por ante el presente Escribano públíco de esta Ciudad do :Monte Yideo a diez y nuebe de abril de mil setecientos noventa y quatro años. Y yo dicho Essno, qe. presente soy doy fe que conosco al otorgante, y qe. asi lo dijo dispuso y ordenó, estando en su correcto y cabal juicio potencias y sentidos cumplidos y con entera salud, lo que firmó conmigo siendo testigos Dn . Pernando Ino. Mar- quez, Dn. Agustin Arismendi y el Dr. Dn. Mateo ::Uagariños, y en eS t e papel comun / ~-,.,,/Y,1~ ,,_,,.,..,. Lit.-'-""V- 1. . . . , . . , ~ ~ - ; ..... Por privilegio.Luis Enriqe. Macicl, -- Ante m1· J1tan LJ."nto. Magatiños, essno. ppc_ 0 • turno, Montevidro ; · ·1 primer . (A rchiYo del juzgado letrado de lo civi, libro de 11rotocolos del año 17941 folio 275 v.). naneo. Garcia. de zúfi.ige.. . eras cláusulas con 1 15, Testamento del brigadier don Juan _fonto. 24 de septiembre de 1814. - Las _tr.es pnp:ra el entierro, ctC". tiene l . . f disposiciones ,. . lesiac n a habitual declarac1é.n de e, · , . te in facte ecc 4 d Ieg1timamcn te J. Itrm declaro que me hallo casa O • • h -.mos procreado Y · con D matru11on10 e 'do tales ( ucs Jo han 81 ona F rancisca Warnes, en cuyo nenias por nuestros hijos legítimos de presente Jp sé doñ:t B enita , don (' va f l] t don Pedro • o ' 1 res don 7. • • a edcron el presbítero doc or . X 1 doctor en rJ ~e ¡n6n y rl on :M anuel Ignacio), a don Victodr10, zªen6n don F ranCº· d~ l 10 1 r,. • 1 on '.-' ' B nr 1n,., .,.,. n,1A, a don José Luis don Estan18 n0 ' G goria dofia ern, h . rier d ' d ña :trC ' t es 11' Y 1' - on Martín, doñ.a Juana Mana, o . once }lijos presen ltn <i;s . (on~ R f 'dos mis l fa.cu ,,,, nlg-un . osa; y como entre los re eri ·1ar usando de ns Curadora menores v en edad pup1 ' por Tutora y . v qU(I. hosT t odavía . ., . d. ha esposn. . 6 gov1eruo . de 1· .ey me confiere nombro a nll ic " 1 eta nplieaci n ,. ,. con el . • lar con< u , . t cu1darn e los • 111nt consigu1en e bienes ' :V en atención a su exemp que por to de 1os ern:)1 ,1 1nnvo • rno r que les profesn, Y a · '{in v aun1 cn t quien se de 'sur 7'.rlo y vijilancia do la conscrval'Cl) ~1. señor Juez un no1nbrn· . sup iro . f'1 1nr es e , s hi1' Ptf's · os, ln relevo de finnzas Y · b o y con r t'ntp T t' 1 ,. }•1 aprue . t( te~ es nnonio de esta C a usn " ' ,)"O _, LOS MACIEL EN LA IIISTÓRIA DEL PLATA miento, y la discierna este cargo con la devolución de fianzas mcneionndn, que as'í es mi voluntad. 5• Item declaro que quando contraxe matrimonio con Doña :Francisca Warnes llevé por caudal mio propio sesenta y siete mil pesos, porque aunque en la ~·s critura de Capital otorgada en Buenos Aires ante el escribano Boyso en nueve de Enero de mil oetecientos setenta y siete, solamente manifesté el capital de sesenta mil pesos, también es notorio, y constante a mi muger que no se comprendió en dicho Capital una casa de mi propiedad, que me servía de habitación en esta Ciudad, cuyo valor en aquella época era de siete mil pesos, y por lo mismo estando de acuerdo con mi muger sobre éste particular, mando se tengan presentes los expresados sesenta y siete mil pesos como capital propio mio para la deducción de los gananciales. 611- •;. Item declaro: que quando Doña Francisca Warnes, mi muger, se casó conmigo no traxo sino la ropa de precisa desencia para su persona, y quatro palmatorias de plata, pero yo la ofrec1 en arras Y donación propter nupcias seis mil pesos, y de ello otorgué a su favor el correspondiente resguardo: mando que se le satisfaga, y haga pago de la dicha cantidad de seis mil pesos, deduciéndolos del Capital con qu(', según la claúsula anterior, entró al Matrimonio. 7• Itero declaro : haber recivido de mi suegro Don Manuel ,vn.rncs setecientos pesos que se han adjudicado a mi muger, en su hijuela pa· terna, y mando se le paguen de mis bienes a mi dicha muger, como que es herencia suya propia. 8• Item declaro : que habiendo entrcoado a mi hermana Dou:l 1 Juana Josefa García varias cantidades, ya cnt:, la cesión que le hite de ª . herencias . paterna y materna, ya en ot ros suplemcn· mayor parte de mis . _ . . . es un vo tos, que reunidos podrán importar cerca d e quatro mil pesos, a luntad que no se le requiera ni cobre cosa alguna a dicha mi herman~~ . · ·ro se rep porque todos aquellos suplementos, empréstitos y cesiones quie ue ten como una justa donación y remuneración ~ia al singular afecto ~011 me ha profesado esta hermana, al cuidado, desinterés Y esmero rgo que ha educado a casi todos mis hijos, a quienes por lo mismo enca<rr::t· procuren conservar acia su Tia los sentimientos de amor, respeto Y "' titud que le son debidos. ·sc:t }""ranr1 9• Item declaro: que de mancomun con mi muger Dona . esos, :i • mil l1 Warnes tenemos fundada una Capcllan'ía de principal c,e seis ión se nd E clesiástica para nuestros hijos y descendientes, y de ésta fu ªc nrªº . . . cnCP o otorgó Escritura en Buenos Aires ante el Escribano Echavm u , d un:1 3 n mis Albaceas cuiden del puntual cumplimiento de todas Y ca de las Claúsulas contenidas en la expresada funda ción. • 1h', das 1111s 10• Iten declaro: que tengo chancelnclns y concluidas t o ) APENDICE DOCUMENTAL penJencias vasi\"as de alguna. consideración, habiendo satisfecho a mis acreedores todo lo que por ellas les debía, de :f orma que en el día solameute soy deudor de unos dos mil quatro cientos pesos a Don Juan L:ltre, según resultará mas exactamente de mis libros de cuentas corrientes. Tambien soy deudor de unos seis cientos y tantos pesos a don Domingo Xavarro, según aparecerá de los mismos libros. Finalmente declaro estoy de bien do a mi cuñada Doña. Tomasa '\Varncs cerca de mil ochocientos pesos, cuya cuenta y las de los demás acreedores que van referidos en esta cláusula, seran liquidadas por mis Albaceas con arreglo a 1os asientos y apuntes que se hallen en mis mencionados libros pagandose á. la mayor brevedad posible, el alcance que contra mí re 3 ulte. Igual encargo hago a mis Albac-eas con respecto a unos doscientos pesos que en el día considero estar debiendo a la Fábrica de la Iglesia Matríz de esta Ciudad de ~{ontcvideo de que soy Mayordomo; con preveución de . . .' d ' d mil ochocientos que ya he fenecido y liquidado en el ano pasa o e . nueve la cuenta principal de Administración de dicha fábncn Y de q~_e b v ice · Patrono \ 10 tu\'e la competente aprobación y finiquito del Senor_ rrey <le estas Provincias Don Baltazar llidalgo do CiSneros. . ,· , .. . d Don :P1 anc1:se0 1 l lten declaro: que la rrestamentaría del f lila o d l,' nndo v· d me estú. {"uh \nt . • . onio M:aciel por cuentas liquidadas con su ltl .ª 'b de cuentas, Vemtit . lt ., ele mis h ros res n111 y tantos pesos, según resu aia . dos mil pesos t· d d stan comprendidos . ton 1·ireYenc1011 . , que en dicha . can 1 a e r:\n mis que d. . · cobro procura • ª eudun intereses de cinco por ciento cuio Alba.ceas. <l , Don José Sccco me C9 12 ' Tten declaro: que la Señora Viutla e 1. •dar·'t con arreglo deudora de tres mil y tantos pesos, cuya cuentu se iqu1 • d l (!obro a lo d r, mis Aibnccas e d s asientos que dexo en mis libros, y cui ar.lll el alcanc e, que en nu. favor resu lt e. lir1.s personas, se· 13• lt d d res otrus mue • ·is· • rr em declaro: que me son eu O en mi poder ex t-Un const bligac1ones que . d los t an de las Escrituras vales Y O 1iqu1dnn en d ' ·s Albaceas, Y d á a eré:1. t e que tomando una razon e:xacta ~111 d cuentas, proce er, n • . d o 1111·s libros• ' e su Ul úS P'en a·1entes, a presencia cobro d nven1cnte. •olarr:1 . •nrias cusa s Y 15 1 l 4• J el modo que estimen mas co · nuos ' ,. rvo os .t em declaro: por bienes propios picclnd eonse qu . d , de cuya pro Buenos e :notor· rorr iamPnte poseo en esta C1udn , ) ( ue tengo en 0 A.ir espondientes Títulos: como tnmbion, clecla,ro,d l mi difunto }lernut~o es una. t cntarrn e -o pnsu f'l J> · • cas a. que compré ele la Tes am z--·cr•t en el au el G fo. de ;U1llr-• ' d frentC'S resb ít de tn ·l ero Doctor Don Pcclro nrc ' Soln.r eon os Culle 1 oeh · • 1 Oeste, • 1 ente un UlJ.o · l oe1c-ntos v nueve· e 1gun m 1· dero ¡1or e ' t· su 1n • Elfa, n ba nea1 1 xo <lel Rio y el otro fr ente u~ne . Junn J~11a c10 • d d que .. ,.l e n,,or medio ' con r.asns del f'inn. do· Don. dr n11. -pr 0111e a l ,JQ. Tt ' e~qu1n:1 t'lu declaro: que rn ln Cns.a . . e; ° 272 túS :M:AC!EL tN tA 1tISTOR1A b~L PLA'PA habita Don Francisco Fernandez en la calle de San Juan, yendo desde la Plaza Mayor acia el Parque de Artillería, está fundada una Capellanfa de pr.incipal de dos mil pesos cuyos réditos están pagados al Capellan que lo era el finado Presbítero Don Martin Alvarez hasta el veinticinco de febrero del año pasado de mil ochocientos diez, y satisfechos además hasta el veinticinco de Junio de mil ochocientos trece al señor don José del Pozo, Albacea de dicho Capellan finado. 16a Item declaro: que la casa que tengo en la Calle de San Miguel y que fué de Don Andrés Yañez, está gravada con el censo de seis mil pesos, que de mancomun con mi muger Doña Francisca Warnea fueron destinados para la fundación de la Capellan1a mencionada en la cláusula novena. 17• Item declaro: que en la Casa que según la cláusula decima quarta tengo en Buenos Aires, está fundada una Capellanía de dos mil docientos y tantos pesos por mi Señora Madre Doña Juana Lizola pa• ra sus descendientes, y a mas do esto reconoce dicha finca un Capital de un mil pesos a censo, correspondientes al Monasterio de Monjas Teresas de Córdoba del Tucuman. 18• Item declaro: por bienes propios mios las varias Estancias que notoriamente poseo en esta Campaña, y cuyos terrenos se hallan entre los Ríos Santa Lucía grande, Santa Lucía chico, Arroyo del Tala. frente al Tornero, Arroyo ·Casupá, y (on la Costa del Sud del Rio Yi) entre los Arroyos Timote y Monzón, como igualmente otros terrenos entre Olimar Y el Sauce que compré a Don Benito L6pez. Asimismo dec1aro . Imen t e poseo por bienes propios una chacara cerca d a Y •¿an· que 1gua jeada en el arroyo Colorado con los terrenos anexos a ésta poseción, Y otros que le son contiguos en las Puntas del Miguelete: de todos los cuales Terrenos · referidos en esta claúsula conserve, en mi poder los corrcspon· dientes Títulos de propiedad á ~xcepci6n de los títulos pertenecientes a- 1ª ' Tierras del Colorado compradas a Don Juan José Duran, por no hªbcr hecho éste la mensura, que me ha prometido, y en las antedichas E stªn· casns, . t . cias engo una gran cantidad de ganados en diversas especies, ranchos, corrales Y utencilios de cuyos bienes no puedo fixar el deter· . ' por mmado número y valor, que procurarán esclarecer mis Albaceas medio de un Inventario y tasación exacta o imparcial. 19• Item declaro: que tengo una porci6n considerable do esclavos de ambos sexos, Y de varias castas y edades que en mi concepto pasadn · das o en e l d 'ia d e d oscientos, contando con los que' tengo en mis haeien Campo y en esta ciudad. . . '>O• It em d eclaro: que en atención a la lealtad y buenos 8ervic1os ... • d Ja,·1tU . I d e a gun_os d e ~ns. esclavos, es mi voluntad dexar libres de ese_ J ose a los criados siguientes. Domingo Ximenez y su muger Marfa. , APENDICE DOCU)lEX'rAL 27~ ~astre y su muger Lorenza: Casimiro el negro, que t.·ompré a mi hermano 11olíti<:o Don José Ca lacey te ; el negro viejo Gregorio; el negro Yiejo Jo:1qui11 el Albañil : el negro viejo Sebastián, viudo de Maria del Rosario; d negro viejo Bartolo, Maestro Carpintero de Carros; el negro viejo :\lanuel M:ulita; el negro ya de edad, F1·ancisco de la Señora; el negro ya de edad Juan, que fué Capataz del Paso del Cuello, y su muger la negra Yieja Doming-a; el mulato Agustín, que compré a mi hermano Don Isternn García; el negro :Manuel, de Nación M.ujumbé, que está casado con ~faría del Rosario la Nambá; el negro Antonio el Zapatero, que compré de mi hermano Don Estevan García; a todos los qua les diez Y seis nominados esclavos mando se les dé por mis Albaceas la correspondiente carta de libertad. Y como entre éstos habrá algunos, que por su edad 1 b · . d a mis Albaceas que, 0· ·•1b't . 1 ua es achaques ya no poclran tra aJaI, or eno .1 1 . 1 381·stau con alimentos, ' os tales <: riados inhábiles para el trabaJo, os . t . . . . les que sean propor' es uano y dcmas auxilios esp1ntuales como corporn , . _. ., 1 Estancia del mismo uonados a sus necesidades manteniendolos rn ª . 'd do ' d psclav1tud, cm an lllo<l O que se mantcndrú a los demás, que que au en ' . . . lada e 1 . . . . uardcn la vida ,ir1eg n posible no se abandonen a v1c1os, Y que g . l'vicluos de mi 1 v el · · d todos los 111< 1nstiana que siempre he procura o en . . , mi casa 0 · uu · ·rn contrnua1 en lllerosa fam ilia. Los demás libres que quier, . ue sea justo Y 10 lJ · seran , satisfechos . l t del snh1r · Esta ncia, puntua men -e Jirovorcionado a su servicio. onsidrraren mis •)1• 1 d m·1s esclavos e . de . . .1 igual gracia - · Item declaro: que si entre os e " Alb ncreecloi c:s ' Jn ú algunos que sean_ • he nombrado en ' . aceas haber alo-uno O libertad • • a quienes no • yolunt:id :por sus fieles serv1c1os, Y c 1110 rin rs 1111 d, , 1 11 1:t e1au sul·a an tenor . h , n ' ,.18 se e 11or no tenerlos a oia e d is AlbacC • que a· ·eción . he lllAlbaceas considercn ' según el arbitrio y prudente isei tamb', • . d que die os 'b rtad que . ien carta de libertad a los cria os, • ro que la h e . . •1<:rc-ed · • 1 ,e fecto quie . 0 lCl hubJC'T,l ores :'t la ex11rcsada gracia, Y ª · ,·o nnsm sr eo 11 f' f ·z ., eon10 81 • l l• t·a sea de tanto valor ~r net ·• ·. . <l"s11r11 •do un eons1 nd0 en ('stc Testamento. . , trilnonio he tent , quando 2<:>, It d te m1 m,t r 1lose1a, ,] ... em declaro: que urílll · d 1 CaJ)it:11 qn · fsí·1ga n rrahle . s11ect o e ·, · 1 sr sn 1 ' ° ,t umento de gannnciales, re . 1 mi Gap1tn · . , resulten, n1; c:nsé: mando que liquidada la cuellltda d( r los (Yanandales qu\to por el ' l tita e t:, • 1 . acree l ,. lnun-c º 1. Dona Francisca vVarnes a 11 , 11:ll't1cu 111 • • • " en e ()1110 c.:a l· . tiene n1t1~ ¡is h1Jos, . . . 1n (\~in Ut ci l suyo pro¡uo, y a que duc•1ciót1 ele n p ·oddcneHl t ero d h <' ' • • rn l au ' (·on que me ha ayucla o en • 1:i J)1,· 11 • mento d eon que propio, e los bienes de f ortu~a t . bnJ' 0 • l r 111 otn }itos¡l •. f<'llgo C'1 Mlo , . d tnn y ,,1a • 1pl<' <t 8, ') · nuestra comun 111 us ' · . ent.o s1n Tboni:1 ' :1 1 ~3• l t i11stn1111 Don p('~<';, ~- , em declaro: que por un . . 1 1,oetor dr t 1nil 111 8in h . lu JO e 1irrn, · HJ('nor insinuación de un ·. . i:iu('1<1° ,t(1·1 h1·1 , te 111~0 e1 ' n g-nción de pagar a es · l1t /\L• LOS :M:ACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA año por la administración de mis Haciendas de campo que h e confiado a su dirección y cuidado; y a cuenta de estos sueldos t engo ent regado a mi dicho hijo algunas cantidades que constan en mi-s libros, mando que, liquidada la cuenta por mis Albaceas, ac le pague a m i hijo Don Thomas el alcance que resulte en favor suyo, abonandosele los un mjl pesos annuales desde el día en que, segun el documento firmado, se los ofrecí, y por · todo el tiempo que ha administrado y siguier e administrando en lo sucesivo dichas Haciendas de campo, iuterin yó ó mhi Albaceas no dispongan otl'a cosa. Con esta ocasión prevengo a mis Albaceas que estando yo íntimamente convencido de la honrradez y providad de mi dicho hijo Don Thomas, no he querido sujetarlo a que mr rinda cuenta de la administración de los intereses que he puesto a su cuidado y así tampoco he llevado yo una cuenta exact a, o razón formal de los efectos, ni del dinero, que le he remitido ó entregado por su orden para la habilitación de las estancias; por todo lo qual, estando bien seguro, que lejos de defraudar mi hijo Don Thomas en lo mas mínimo los intereses que le he confiado, ha procurado eon el mayor zelo su conservación y fomento como consta a mi muger v a mis demas hijos ; ruautlo que no se le tomo cuenta despues de mi f;llecimiento sobre la adwinistrac~6n que ha estado á su cargo, y que se le considere como un dependiente, que baxo mi inmediata dirección ha corrido con aquellos intereses sin responsabilidad alguna. Por lo tanto deberán mis Albaceas Y herederos contenta rse con la manifestación que mi hijo Don Thowas les haga de las existencias que se encontrasen en su poder Y de Jos · · 1 ere·a·t a c t 1vos y pasivos que hubiere pendientes con los peones Y dein•19 • asalariados de dicha Hacienda. 24' Item declaro: que por un instrumento privado de maucotu~n . D d'18tiu· con mi esposa ona Fra ncisca Warnes y en remuneración a los · · ' gui· d os servicios que ha prestado mi hijo Don Thomas hemos conveni·ao en hacer donación a dicho nuestro hijo de la cantidad de ocho mil pesos, ª sa_ber : los quatro mil por mi parte, y los quatro mil por parte del caudal iic mi muge:. Mando a mis Albaceas que paguen a mi hijo Don '1.'bolllns, los referid os ocho mil pesos sacando la mitad de ellos del quinto ~e · t' ' ·111·c10 nu respec ivo caudal, Y la otra mitad del de mi muger, sin perJ d e lo que deba percibir este hijo por su respectivo haber h e reditario en concurso . . . t n mb'ien de· lo que d b. de sus demás h ermanos, y sin perJu1c10 . se es 1e e. iere por la razon de los sueldos explicados en la cláusuln. v eintitr anterior. 11 . quatro hijas, Dona ,., Jua· stln ,,25• Item _ declaro ·· que d esean d o que nns ?ª Maria,. Dona Gregoria, Doña Berna rdina y Doña Rosa queden por h erencia paterna e on un capital · ' . que les proporcione una decente Y eon(Tru!l , ~ríll sustentación, es mi Yo]untad qu e a m1• h'IJa • mayor n 01-1 a Juana J.U- APÉNDICE 27,i DOCUMENTAL se le adjudiquen quando menos catorce mil pesos; a mi hija Doña Gregoria se le adjudiquen doce mil pesos pesos; a mi hija Doña Bernardina se le ~dj udiquen doce mil pesos; y a mi hija Doña Rosa se le adjudiquen <luce mil pesos, de forma que si entre la División y partición que se haga entre mis once hijos no cupiere a. cada u11 a de las expresadas quatro hijas, Ja cantidad que les dejo designada, maudo se deduzca del quinto, y en defee.to de éste del tercio de mis bienes, y por vía de mejora. la tantidad necesaria para completar a mi hija Doña Juana rl valor u.e eatorce mil pesos, proporcionalmente a mi hija Doña Gregoria el de doce mil pesos, a mi hija Doña Bernardina el de doce mil pesos y n mi hija Dofta Rosa el de doce mil pesos, cuyos valores cleberún adjudicarse en los bienes ra1ees más bien parados, para que de este modo se facilite n mis dichas hijas, una renta fixa, estable y segurn. '.2Gll Item declaro: que en ntcnción a los servicios particulares que ha hetho mi hijo Don Victorio, y a estar ya casado Y con ~amilia. qur mantener le tongo dado en cuenta de su legítima paterna 381 en dlncro rumo en libramientos contra la Viuda y Albaeca de mi difunto herma~io D011 E' t . y setcc1cn · t os prso s , . l)Ol'. cu ·v·1' rn s evan García, diez y ocho nul . zon E natla me debe ya la Testamentaría de mi expresado hermano Don s t i.. '6 t cautl·1l · .evan. Mando que mi hijo Don Victoria traiga a colaci u es e en l · • J·11• • 8 lo reci b·1 ~n pn.rt.e ª partición con los demas hermanos, nus J0 , Y ' . . de ¡1n . . g·u c ,1 sus h enn,l 11 0~ 'go (1e su legítima • y si excediere quiero que p:i ' , ('St · ' ]' ns'L porqlH' e c>xceso en plata efectiva. Bien entendido que 10 e ispongo • · ' •· me h • ·08 , l 1s ·1mo v apn•t tú , e propuesto manifestar a todos mis 111J , que t • · con · . ' b hoHrrn<los ~' o1w . igual cariño y dilección porque todos son u enos, . 1 . • .1 dientes, sin embargo de qu: In circunstancia do haber sHlo t•stt• · 111Jº <lt , JJJ·' • ('} 'lg'l'l'(Y~ll O ( . llnogénito, y primer objeto de mi nmor pnterunl, con , ·d' ~l ·1 1ht>· sus g r •1 l respetuosa coi tcl ' l stl . 'ne es prendas personales 1·eal.utdas por · 'l en l':-iÍ l' s1on a . . d emostrar con t.' nrt rn i persona, me impulsaron no poco ª . . ti mnY. :-un:id:i . o nlgu E ) r lo nnslllO ,l 1l e n<1 singular b~neficcncia. ~ne argo 1 ,t .) hi 1· 0 primosposa t t·11 3 :1 l'Sie 11n0:,; 1t • L r • • ° r,'·n·t··•o enga l'n mucha consideración .Y es a uu hcrl . . n 'e• rcspet en t•<itno . ' Y mando á todos los demas mis llJOS J • duet·1 111 nno rn · " . •t su j uic10i,";a con ·· C) ~ ayor, aprecien sus consejos, e 11111 .en · · .1 mi hcrnurno el . · 1O nombradob Pº• , T('st~1m(•ntarrn. Pr "', It c-m declaro: que habi•endo sH rs 1Hte1· O D , z, -·g:1 s u Al ac.ca .. p oetor Don Pedro Garc1a do mn 1 prrnut1eron to('cdí d, , , . 1· . del modo que o lns . cs¡,ues de su finamiento a cump JI, . c]ouie posiblt~ e n· · ciri•unst · ·ao· v no 81 6n h ancias quanto me dojó proveni ' . n•ceotr1m cntaria, su g tunn<, 1 " s r.o t·1 '6 d a riuc l ·t i •., ' , tit .. · · n nun.r con la Administrac1 n ' I q u H 1 con "~i1Tuieutc, :t .., 1 f• 1 ' . e ''. . I"' • 111¡ A lhaceazgo en mi hijo Don V1etono, e l . nuC' sP fnrn11} 8 ór<lpn • . · . d e ne rece 01 C'S ·1 • r·rin tr . es, lnzo cesión de bie nes al <'on cmso . ¡uincip:d :idn11 • 1 1 .1 . n d1 C'1t T . d'6 189 cuentas e(' •·o 1 111s1 .• • n estamontarfa y r1n . 1 _ Jttt' '' th•l ('oni er, 1 ,tc 1f1n ' · . . 01. , J ~c>nor • .,. <le e11a, que fueron a prohndn~ P <:: ,..,1c l 276 I.0S MACIEL F.N LA HISTORIA DEL PLATA quedando pendiente Ja rendición de la cuentu de los bienes existentes en la Ciudad, y que no se habían podido vender hasta aquella fecha: sobre cuyo particular podrán los interesados entenderse con mi dicho hijo Don Victorio que como mas instruido que yo en los asuntos relativos a dicha. Testamenta11a espero les dará una razón satisfactoria; debiéndosele abonar a mi dicho hijo el estipendio 6 comisión correspondiente á su trabajo y al mío, de cuyo importe le tengo hecha antes de nora la correspondiente cesión. En la inteligencia que apruebo y doy por bien hecho quanto mi hijo Don Victorio ha practicado y en ade]ante practicase en la. expresada Testamentaría, á cuyo fin le r enueYo ·s confirmo en virtud de ésta declaración el poder que tengo de antes otorgado á su favor. 28• Item declaro : que para fines muy del servicio y agrado de Dios nuestro Señor hemos convenido con maduro acuerdo mi esposa Dofia Francisca Warnes y y6 en destinar diez mil pesos de nuestros respectivos caudales :í, tal objeto ; los cinco mil que se deducirán del quinto de mis bienes, y los otros cinco mil de los bienes de dicha, mi muger, cedidos por ella desde luego como expresa donación enb.·e vivos; para la imposirión y destino de cuyos diez mil pesos procederán de conformidad y acuerdo con la expresada mi esposa Doña Francisca "\Var11es mis Albaceas á su debido tiempo, con arreglo al comunicado reservado, que de nuestro mau· comunado convenio y determinación les tengo hecho. Mando a mis A1· baceas que verificado mi fallecimiento extraigan los mencionados cinco mil pesos, del quinto de mis bienes, é incorpo1·ada esta suma ron ln otra igual, de parte de mi mugcr, cumplan con In mayor exactitud y posiblt' prcs!eza la disposición que les he comunieado, sobre que les encargo mu:· 11arhcular y estrechamente sus conciencias. . 29' _Item declaro : que profesando cordial afecto y devoción :11 Glo· noso Senor -San Juan Nepomuceno por cuya intercesión he alcanzado del C!elo cono~idos favores, y descoso por lo ·mismo de propagar el culto ~o d~cho glo:1~so Santo, mando ú mis Albaceas separen del quinto de 1111 s bienes ~umientos pesos Y los impongan á réditos de un cinco por cicn~o sobre fmc~ segura, para que con su producto !U1Ual se pague el estipc~1 1º una Misa cantada cada uño con inelusión del gasto de cera, el nusmn din en que celebra la Iglesia la memoria d e dicho glorioso Santo, Y en 3 el .Altar · y que la expresada Mi sa t enªI:', . , en que se. halle _su imagen, aphcaci~n en _s~tfragio de 1111 alma, y por el bien espiritual y t ernpora~ dt toda mi fa~uha Y descendi('ntcs ; é impuesto que sea dicho Capital. encargo F. · . . .á m1 esposa n0 na •1anc1sca Warnes, cmde durante su vi·a·•... drl <'Umpl~m1ento de esta memoria, y por fn.llecimiento de dicha mi ningc_r, hago igual en cargo á mi hijo mayor Don Victorio y " su descendencifl. ' e:" J·1 ª' f ª lt ª d 9 1ª qual entrar:\n ñ desempeñarlo mi hijo Don Thomas Y · d: º APÉNDICE DOCU.MEN TAL 'J7i suy,'. , y a sí mis d c ~ás hijos por .su orden, á todos los quales aconsejo rult1Ye11 esta dcvoc1011 para que siempre fl orcscan. en christ ianas v honrradas inclinaciones. w 30' Item lego, para la Casa de pública cnsefi a nza de niiiaA pobr es rstableeida en esta Ciudad la cantidad de dos mil pesos que se deducirán 1k mi quinto, d cxando al arbitrio de mis Alba ceas el entregar los dic hos <los mil }Jesos al Administrador de la nominada casa , ó ret ener el prin('ipal, ,eontribuyendo anualmente con los cien pesos de réditos, á un cineo 11or ciento, según dichos Albaceas consideras :!n ~er mas conveniente " JHOVl'choso ú la Casa de enseñanza. ~1 Item lego, para el Hospital de Caridad d r esta Ciudad quinientos prsos que se deducirán del quinto de mis bienes, y procurarán pagar mi~ Albaceas dichos quinientos pesos con la pref erencia posible. · 32• Item lego al Convento de MonJas Capucbºmas d e B uei10 s Airl's· · · t os pesos del quinto · · bº1cnes, qu e P rocurarr,,..11 mis A lbar<':J ~ de nns qmmen 11 ngar ú la mayor brevedad. . • ugcr Doña F rane1St'!l ·>3a "' · ltem declaro que de mancomun con nu m \\· ' l t erreno J)ar-1 la Ca!-:, un il's t engo hecha donación a1'!tes de ahora ( 0 nn , · · , , i•f' . d•t dir ha Casa ron l 1 1 ¡ • xr r cicios Espirituales v en efecto f ue e< i c,l • • ( C' E ' " 011st lllencionado Solar · lo declaro pnrn que c <'• • '> • E t . ron (r•uwdos <tl' van:.1 ~ ,J4• Item declaro que teniendo uun ':..S :rnr rn ~· 1. • romA.. 1 1li1 ún y Cnsura, 1uce r· · ' 110 ~ os ·. 'l ) hnbilitúnJol <' ~prc1es en el rincón que forman los ,, ., J C l rC'r n(vafrn:w o ' 1 ] <1ma, ahorn unos años con Don Mnnue ª 1 ' :l rrre~un • , t ., oreión con o t ,l P 0 1 011 • dicha E stancia7 ú cuvo prinripal gana< '~. . d . Cabrera. cu ··u " , •(l ll\'lllll' ll O (:Oll si era bl l' de ganndos vacunos ~, c>nhall:t1 cs, c. . , h <'OH!:H'rYnci6n ., . t' l· 1· los ,rnstog de , <¡ur sr rrnn de su cuenta par 1cu ,l · ::, l l·i Compnu_,1:1, n H ' f 1· 1 •l pJn1.o ú <' ' 'l omento de dicha Estancia, y quo curnp H O l u 0 yo habfo int r oducH n, ilevolvrría mi Estancia con los cnpitalcs ganndof'< <l 1 ·11uhil'SC' suplido pnrn . . d es 'i u<' "º e ·. y que hts utiT1• iéndome igualmente lus c:rntid:i • t ~ntlsfac 1 rl . . ., d, J·1 d if•lw Es nnr i , ' .. 'bl rntn' pago <le peones v hab1ht:1<•1un e ' serínn parti es l a · 1 · f('SUltnrl'll t icntP 4 H r~ que <lesJmÍ's de <'stos docmnen ·os . <l hnber ndcl:lll am · l ., ne le 1os C' . • J qui• ,1111 >os socioR. A los pocos n.ilos cono<'t, 'l , ,.. 11 .· orn ndo el prmc1pn ' ' r n 1· í iha de t. "d , · e('C'S 1( ' H·ha Estancia. df' día en d n sc> • . t l 1ior r epl'tl as ., -i l ('S h v 1r U < !'l pcnd1 1o 1\1.-;p nl c·uidado d e Cabrern, Y f'll · ' ..1 i uistrn<'ión, ~· su. bnst :i 1h , , . 1 ~u ..~1 ulll 1 l1o pero • • ll) p u Yri'n qu<' rindiese cuentas < e · lC' h nhín lN' ' !iUph'nwntos ilr dinero que ]1:1stn t'll toncr; . ,·rrcs solic•itn dns, ~o ;ni .. H~1orn he podido conseguir las. ct1<' nt n~ t :111 l·~~r t odo lo i•u :11 1(.1!a1 1•r:lr~1 q11 1' 1'1rc> • • ( "'·t brer n : t 1lr :1 l •' 0 11 unstan<>ias ha fn.Becido d1C' 110 • • • t1 o<' m11l' ~ • • t :t su Alba , ·~ 1i1J ros, 111 ,mifH•s l'n ¡>PtHlicnte~. • d·t rl'Ull ien' <'eas que liquidnndo sC"gun mi. r•ons • t 1. (> l t<>n;~o . -.r pue , , 11 0 1 r<' n lo que' • loR. <''trg·os ('0 \~¡ .<'r , ' . 1•ue t , • f. •or v eo > ttda el d~bito que resultr :1 mi · ,1' • · 278 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA do e incorporaudo la dicha Estancia del meJiauero Ca b rera con todos sus ganados á. las demás de mi dominio y propiedad. 35, Si en poder de mi muger Doña Francisca W a.rnes se hallase. una memoria firmada de mi puño y letra, que contenga mandas, declaruc1ones u otras cosas concernientes á mi última voluntad, mando que se t en ga y estime por parte de este Testamento, que se protocolice con él en ios Registros públicos, y que su contexto se obserYe íntegra é inviol:lblemente, pues así es mi voluntad. 36• Autorizo a mis Albaceas, on virtud de las facultad es que para ello me confiere la Real Cédula d e veinte de Enero de mil setecien tos noventa dos, y porque as1 es mi voluntad, par a que despues de mi fa11ecimiento, -procedan ext rajudicialmente al Inventario, tasación, división, Y partición de mis bien es, procurando por todos los m edios conciliatorios la mayor concordia ~' unión entre los h erederos partícipes. 37• Y para cumplimiento de quanto contiene este T estamento, Y contubiere la memoria mencionada en la claúsula treinta y cinco ( en caso de dexarla) nombro por mis Albaceas Testamentarios á mi muger Doña Francisca \Varnes, ú mi hijo Don Vi ctorio Garc1a de Zúñiga , Y fl mi hijo el Doctor Don Thomas Garcia de Zúñiga, -para que de maucomun entre los tres, y con acuerdo reciproco cumplan y executen t odo quanto dexo mandado, y prevenido, y les confiero amplio pode1· pura que lueg-o que yo f allezca se apoder en de mis bienes, vendan si fuer e p reciso, los que basten en púhlicn. almoneda O fuera de ella, ~r con su producto eumplan, ~r paguen lo contenido en este mi T est.amento, cuyo encar~o les dure el año le.g al, y el mas tiempo que n ecesita ren, pues se les 1n·o· rroga sin limitación alguna , con libre, franca y gonernl a dmin jstraci6~. 38:i. Y despú::-s do cumplido y pagado todo <'n el 1·c-mnnenfr <l e m1'bienes muebles, raíces, d er echos v a cciones presentes y fut uros instit uyo })Or mis únicos Y universales h~rederos á los expres;dos D on Victorio, Don Thoma s, Don José Luis, Don Estanislno, Don Francisco Xavirr. Don :Martín , Doña Juan a María. Doña Gre~ol'ia, Doña B ernardit1 a, Y Doña Rosa, mis once hijos legítimos ( exist entes en la uctun.lidud) h ab ido~ en m~ legítima }nuger D oña Fran eisca W arnes para flU P ron l n b cndici.fm 00 . Drni:i Y la mia, los h ayan, llev en y gozen dichos bien «:>s, con la misnlil unión Y fra t ernal afecto que gracias a la 'Divina Misedcordi n h nn <'on· ~ervado <'ntre, s1 hasta· l1 oy :i' • a·1e110s h1.1os · · , a, qmenes • • . ctm 1ms en car go 1nu'· · cspccrn,h~rnute el Santo t emor de Dios, puntual observn nein de sus di.dn os mand amientos , Y el respet o. amor y ohedienci n :l su 1-Indre '" mi mugl'r, que tanto se ha desYelado por procurarles su felieidn. ll cternn. , t eu1pornl. 38• Y por el 1n·esente revoco v anulo todos los T estamentos · ,. dcrn,n8 disposiciones T()stamrntnrias (snlv; en tocl o ln c·l:rnsuln tl·ein t a ~. eine0 ) que antes <le nl\Ora hayo formalizado por e~('rit o 6 de palabrn, 6. en otr,l APÉ~DICE DOCUl\lENT.AL ~:-!l iurm:i, para que ninguna valga, ni h aga féc judicju} n i extra judi<:ia lmente, excepto t'S1(' Testam e nto y m emoria citaua, q ue qui ero y m ando se t enga y estime p or tal, y por mi última deliber ada v ol untad, 6 en la vía y forma, que mas lugar haya en d erecho, con 1,reven ción de que tambien rs mi Yoluntad, que este Testamento s e conserv e cerr ado y sellado con d sello de mi u so, y no s e a bra hasta despúes d e Ja consumación de mis ,lías. Que así rs f echo para que conste, en siete f oxas tlcl papel sell ü tercero ( con sobrante de igual número d e foxa s blancas, po r ca recer de s~llo In. mitad de cada pliego d e l papel sellado que s e ven de en el día) rnbrieadas las seis primeras y firmada la última de mi man o en esta Ciudad de San Felipe y Santiago d e J\fontev ideo, día de nuestra :Ma dre 1~ Santísima Virg l'n de Merce des, Sábado veinticuatro de Septiembre del ano de mil ochocientos y catorce. - Juan Fran co. Garcia., de Zíí.ñiga. di 16, Estancias y chacras pertenecientes a la testamentaría del briga~ er don Juan Franco. Gs,rcía de Zúñiga. Afio 1815. Rinc:é,n d e 1a t ·i d , sa ··is· e·' 1d sit ·. u~do e1J t1·c . 1 l b:1 l'l':1, d l e- C alera , con úr ea d e 55 lc~ua s superfiei :tk:-, una a $ 475. (El Rincón d e ln Cnleru cs tnh:i l os nos ' · d es<1<' Santa Lucü.1 "'randc y thH·o • 1 este hasta sus T"c-i-tien1l"'Ies en I:1 r uchilla. di• 1sor1a . d e T'nuote; des d e esas ve r tieut es siirnirndo la 1l'Op1 ;1, • ' '' rrl(', ' r n cbilla, h ast a las punta s d e 1'1ilú11 en Casup:'t: • orq uda clP C'h·o;;,1"~. e st e punto tirando una líu <'a h asta Ja •Hn120 · o a rroyo d e la Pistoln · desd e este ¡iunto hnsta la 1):nra el , •• ' Chamizo en Santa Lucía (J'rand<> · v d esd <' rsa • • t:, • ar1•,.. b " s1g u · d . ag1ws a lJnJo · 1en o la c osta de dieb o Snnta Lu c"i:1 ¡ .., st ' · 1 lí« , . u la· b arra d e Santa Lu cía ch ico. Deutro do est os n11tei,. <'S t á n comprendidas las 55 Jeguns eundr:1 d:1s) · · $ f:(l'f' 1 3 '':ll•. 1<' 1o ei <' l a Calera, capi1la ron s u s ornament os Y u't'I eS, 1 1 <'h s 300 fi• l ' ' <'Ub C'ZaR d e o-unndo cabnllnr m u e bles " u' t' Jc-s. ¡..;.,1 pon h , • Hii1<, es, ranrhos, cereos y corrales . . 6 º n Ramón . con 2 JcL,rnns :t $ 4, fi en d n un n 11ei1i:1n .<l e "n T) · :-;uertc d e est a n c ia Jin<lnntC' con L ntorrr 08 ' ~uel't e8 d e estanr1a . d (' V c ch:1 . · t L u r í·1 0ri., , · •,· 1 C'ntre R:1 n :1 l""' •~•11 J1')• ' ª $ 475 la suerte . . . . . . . . . . . . • • · · · · · · 08 11 1 1 An t' RU. P l't e <l e estanri:t entre don 1\fnrtí11 .ToRL' ~, l cnt 'T ' ·0 n 10 A 11¡ nc•ó rtigaa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . s1111r f~ .<le Cnbrern C'ntre J\fil(rn y Cns up:í , <10n O Ir;{u nR r 1e1 nl ' n¡ ll (',';l es n $ 400 CH Oíl l1ll:l . . .. . . . · · · · · ' . ' ' . . . fi<• iale: . 01 Tnla "Y Santa L u c1a c hi co eon !) Jt>g-nn-i Super· , l $ ·i OO en d n unn . . . . . . . . . . • • · · · · · · . . . . ª , .· • L ° C) ., .¡ fi .., j l.( d !26 . 1 25 5 . 94~ 950 ~ºº fl50 47:5 ~.400 3 . GllO • 280 o. 10 . 11 . 12 . 13 . 14 . 15 . 16 . 17 . 18 . 19 . 20 . 21 . 22 . LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL }?LATA Rincón de San José, entre Timote y Mansevillagra, con 26 leguas cuadradas, las primeras 10 leguas a $ 400 y las 16 a 360 . . . . . . . . . . . . . . . • • • • • • • • • • • • • . . $ Campo entre Timote, línea de Viana, y cuchilla de Santo Domingo, con 4 leguas superficiales a $ 300 . . . . . . . . Rincón de San Ignacio, entre Mansevillagra e Illescas, con 44 leguas a $ 360 la legua . . . . . . . . . . . . . . . . Rincón de Monzón e Illescas, con 26 leguas a $ 340 Rincón de Nico Pérei;, con 12 leguas u $ 300 . . . . . . Rincón de Casco, entre l\fonzón y a1·royo Grande, con 20 leguas a $ 300 la. legua . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Chacra de Maciel en el Miguelete, con la casa, capilla y ollería . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . Chacra ele M.aciel en el Pan tau oso . . . . . . . . . . . . . . . . Terrenos de Maciel frente al norte en el arroyo Colorado Otros terrenos del mismo frente al sur en dicho arroyo . . Terrenos en la chacra del Colorado junto a Las Piedras Arboleda y casa de dicha chacra . . . . . . . . . . . . . . . . Terrenos de Sierra sobre el Colorado, frente al norte . . Terrenos de los Saavedra en el Miguelete, fondo a Las Pied1·as . . . . .. . . . . . . .. . . 9. 760 1 . 200 15.840 8.840 3 .600 6. 000 3. 700 2. 134 1 .050 8_,);)- 8.250 140 500 ~.100 $ ] 04. 5S1 Al valor de estos bienes rurales debe añadirse el de las cusas situadas en la ciudad, que ascendía a . . . . . . . . . . . . • · $ 203. 537 Valor de las cantidades recibidas en dinero por los hereder os 67 . n s . . . . . . . . •• a cuenta de su legítima paterna . . . . . . Id. de 207 esclavos . . . . . . . . . . . . . . 43.380 Id. de los ob,jetos de plata labrada . . . . 3 .692 2, 951 Id. de los efectos y artículos del almacén Id. dC' la feneter'ía y barraca . . . . . . . . 3. 079 5~1 Id. de la biblioteca . . . . . . .. .. .. .. .. .. Id . de los créditos cobrables . . . . . . . . . . . . . . 55 .950 $ 484 . 709 17. Ultima, cláusula del testamento de dofia Francisca Warnes de Ga.rcía de Zúfllga. 23 de diciembre de 1819. 36• ... Tnstituyo por mis únicos v universales hered eros los p~· · . don 11resados don Victorio, don Tomás, don José Luis, don Estnn1slno, . Zcn6n, don Franco. Xavier, don Martín, doña Juana Maria, doña Gregorlll, APÉNDICE DOCUMENTAL :!81 uoiía Bernardina Y Doüa Rosa, mis once hijos legítimos existentes en la uctualidad, habidos d e mi legítimo marido don Juan l!-,rancisco García de Zúñiga, ?ara q~e con lu. bendición de Dios y la mía los hayan, l1eYcn y gocen dichos bienes con la misma uni6n y fraternal afecto que mantuvieron en vida de su padre y madre, para lo cual Jcs encargo muy especialmente el santo temor de Dios y puntual observancia de sus <li viuo·s preceptos; que ]Jara conservar su relio-iosidad loables costumbres v la o ' . paz y unión entre si, que con todo mi corazón les recomiendo, se acuerden de contínuo no haber visto jamás, en su padre ni en mi, e l meno r m al ejemplo; que a una los dos consortes pusimos sumo esmero y cuidado en educarles cristianamente y conducirlos por seguros caminos, a fin ele hacerlos honrados ciudadanos y que supieran <lirijirse en todas sus ob1·as :t l fin sublime para que fuimos creados; que llevé n cada uno nueve meses e n mis entrañas, Jes dí a la luz a 1·iesgo d e mi vida, les :1 brigué y :i.limenté a mis p echos, y sufrí con indecibl(' amor las impertinencias y flaquezas de su infancia J' 1rneri1ida.d, y que todo s nuestros afanes y desvelos no han tenido otro objeto que el <le procurarles su f elici dad et<:'rna ~' temporal. Si cabe, no obstante esto, el que pueda ser turbada por desgracia la unión y buena armonía que tanto a mis hijos los r ecomiendo, recuerden para restablecerlas prontam ente, que ninguno podrá ofender, inquietar ni perjudicar al otro, sin que en ello injurie y clesa ratC' a la sangre' -:,r memoria d e unos padres, que a todos dis pensaron su dilerción con C'Xacta igualdad, "!>' principalmente nJ mismo Dios, que nos mnnda perdonar, :nnar y b eneficiar a nuestros mayores enemigos. 18. Fojas militares de la guerra contra el Imperio. - H cgimientt1 ele cabaJJer'ía de linea N 1> 9 n 6rdencs <lel ,•oronel M'nnut>l Oribe. Campr11ia de los años 18~5 a 1827 y batalla <le Ituzningó. Manuel Maciel Teniente 19 Mayo 19 ,Julio Ayud:.1ute Mayor 13 Abril 1R25 Regnncht corn paiifo del prime r f'R· <'t1ndr6n del Rrgimiento de Dragones Libertadores. 1826 Reg imiento <le 0nbnllería NQ !l, por cambio <h... dC'nominación . Regunda compañ"ía del primer escuadrón. 18~ 7 .. g'mHlo rscuadrón del id., según consta <·n las órdenes generales d<'l t<'r<'C'J' <'UNJlO del Ejército Repu( rostcriorm entc RC'gimiento d(' CnTfrgimiento rlc C'ri hnllerín XQ fl blicnno. En !ns listas muy in<·ou1pld :1 s del LOS ~IACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA ballería Nv 1) ., correspondient<>s al año 1828, n o figura. Tampoco se hán hallado an otaciones que justifiquen ser vicios posteriores al 13 de ;ibril ele 1827, ni su pase a la República Argentina o baja de· finitiva. Patricio Maciel Capitan 2 Diciembre 1826 Se r econoce por capitán de la se· gunda rompañ1a del primor escua· drón, siendo ayudante mayor del primer escuadrón en el regimiento 4Q de caballería. tTosé Antonio Maciel Cadete Porta Alférez 2~1 1825 Alta en la plan a m ayor del cuerpo '' E scuadrones de Húsares Orientales'' del m a n do del comandante Gregorio Pérez. 5 SctieÍnbre 1825 Pasa al primer escuadrón, segunda compañía, como J osé tia ciel. 1826 R evista como porta en ]a Pinna :M arzo Mayor de la misma unidnd. 1826 Según órden general do la fech:i, 15 Agosto se le reconoce, en virtud de eles· pachos conferidos por S. B. el pre· sidente de la Repúbli ca, por alféreL 2Q de la primera co111pañin del · · to segundo escuadrón del Reg,.nnen 1·and No 8 de Cuballerfa. Esta un ' fué formad a p ol' decreto de 19 de julio de 1826 y según órdcn ge· n eral rlel 27 a·o j ulio. en lareco· que 1 t a mbién se expresa qne ser:· icuto nocido con el N o . 8 el Regun t orO':un·. de Caballería últimamen e º zado en este punto. zuf fl•·:1· J Su jefe fué el coronel uanforn1ll do t egui y el r egimiento f ue oric11· con la h ose clel d<> Jfús:1res coi1· de unfl t ale s, según se ded uce ('\' lR . t"•'' frontació n de listns de r : te 1111 Cabe a clarar qu e en 182 9 csis 15 Agosto APÉNDICE Alférez 6 Marzo DOCUMENTAL ~8:~ R egimi 0 nto de Húsares Orientales del mando <le Manuel L a,·a lleJ·a . organizado en Paysandú, que no' iicne relación con el anterior. 1827 tb le r econor e como n lfél'cz <le Ja p rimera compañía del primer escuadrón, en el R egimiento N ? B. No se ha hallado documentac ión que j ustifique servicios post eriol'<'S, ni sn pase a la R.f'púhlica Argentina o baja definitiva. Manuel Antonio Maciel. - Fig ura en el R egimiento de l\f.ilicias d e Entr e Ríos, Yí y Negro, desde 1uayo a diciembre de 1825, únicas li stas. Claudio Maciel. __, Figura en el Regimien to de :M.ilicias de Ent re Ríos, Yí y N eg ro, desde septiembr e a diciembre de 1825, únicas listas. Mariano Maciel. - Figura en el R egimiento de Dragones de la Unión en mayo y junio <le 1825, desertando con fecha 10 ( 51!- Compañía ). José Maciel. - Figura en el R egimiento d e Dragon es Libortndore~ desde j ulio de 1825 a junio d e J 826. Gabriel MacieL - Figura en e l segundo escu:Hlrón ele D'ragon r ~ L ib ertadores, desde diciembre d e 1825 a junio de J 8~6. Manuel Maciel. _ Figura en la segunda ,'. ompnfiíu dl• la rlfr is i0n d e Ran José en Jos meses de julio a noviembre i11 cJ usiV( d t' 18:25. (Certificaciones expedidas por la serci6n do His toria ~-r ArchiYo del Estado Mayor General del Ejército, l\fontcvideo ). 3 , . INDICE DE NOMBRES DE PERSONAS A Abalos, Javier: 148. Abalos, Juan de : 70, 103. A~alos y Mendoza, Ventura de : o7. Acosta, Ignacio ele : 17 4. Acosta, Luciano ele: 74, 98, 107, 108, 109. A eosta, Pedro de: 34. Achenbach, Enrique A.: 122. Atlrncarro, ~Juan de : 20, 173, 1s:), Achucarro, M.aría Antonia de : 176, 182. Ae h ucarro, Mp.ría Isidora de : 200. ' .. 1<guero, Prancisco de: 108. A.guiar, Sebastián de: 99. Aguila, .Juan de: 53. Aguila, Manuel de : 243, 244. Aguilur de los Olivos, :Ylateü : 1-} L Aguilera, Juan de: 244. Aguirre, Alejandro de : 74, 7fi, no, 246, 24 7, 252. Aguirre, .Juan de : 7fi. Aguirre, Juan Vicente de : 118. Aguirre, M~!·~a de: 54. Aguirre, Pedro d e : 76, 85, "'13, 10~, 241. Ahedo, Gaspar de: 56. Alarcón, Francisco de : 103. Albéniz y Toro, José d e : 90. Alb'in, Franeis~o: 217. /\ld:10, Carlos A . : 132, 137. A 1uao de :Maciel, Cecilin: 137. Aldao, Cecilia Antonia : 147. Aldao, Félix: 147. Aldao, Juan Francisco : 147. Aldao y Candioti, Carlos: 151. Alday y Azpe, Manuel <le : 163. Alderete, Isabel de : 97. Alemán, Francisco Cruz dr : 18G. Alfaro, Francisco de : 103. Alfa ro, Manuel de : 139. Alfaro y 1\1.aciel, Dolores de : 1;rn. Almirón, Leandro de : Sfí. Almirón, Pedro d e: 74. Alonso de Sal azar, I sabel : fi!I. Alpoin, Esteban de : 10~. Alsin:1, Adolfo : 140. Altamirano, Cristólrnl : :{.í. Altamirano, Diego : i 4. Altamir.ano, Pedro : 25.:-l. Al tan u, Car.ique : 1'9. Alvarado, José d e : 53. Alvarez CalHal, Pedro : -13. Alvarez de Aeevetlo, los : ltiO ! t lti;". .Alvarcz de 1:i Vega, Pctron:1.: 118. Alvarez Gaytún, Francisco : 33, 3G. AlvarC'7. Gayt{rn, P edro : 33, J oo, ~51. AlYarcz, Hcrnnndo : 2.í. Alvarcz Izquic rrlo, J uan : l ilL Alvarez, Rodrigo : 31. Alvarez 'l'homas : 11!:), J48. Alvarcz, Victorin. María : 176_, 1 i7. Ahcar, Carlos dl' : l G,"i, ~O 1, :!~tL ..Alzayhnr, Francisco de : 20, 173. ·o· •">43 ,-,i ... "4'! A nu111 d au, I gnac1 . .,,, , .,."k•l, .... . u. Amun{ttegui, Migu<'l Luis : 1'1:1, 1 Gí . Audonaegui, ,José d1• : :.!l i . Andújnr, .José de : 1!?7. 286 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA Angles y Gortaris, Mat"ías : r54. Angulo, Francisco de : 9~. Antunes, Antonio : 48. .An tunes Maeiel, Domingo : 24, 48. Antúnez Home, Luis : 94. Añasco, Potenciana de: 66. Añasco y Zaval1a, F eliciana de : 11-l-. Ar.ann, Marín de : 107. Aranda, conde de : 114, 135. Aranda, Francisea de: 86, 87. Aranda, María Clara de: 78. Arbisú, Micacla de: 141. Aracayaga Salcedo, Felipe de : G-1. Aree, Alonso de: 177. Aréchaga, Jerónimo de : 87. Ares ti, Cristóbal de : ·99. Aresti, Luis de : 99. Aresti, Plácido t1e : 99. Arévalo, Inés de: 78. Aré val o, Lucía de: 63. Arias d e Cabrera, Fernando: 49. Arias de Mansilla, Prancisco : 100. Arias de Mansillu, Inés: 100, 107. Arias de Mansilla, Luis: 103. Arias de Saa vedra, Juan : 39, (34, 76, 100, 251. Arismendi, Agustín : 17 5. Arozarena, Juan de: 84, 170. Artigns, José : 119, 148, 176, 192, 193, 219, 223, 224. Arráez y Larrazú.bal, :María: Hn . Arrcdondo, .Juana de: 122. Arredondo, Manu el de : 209. Arredondo, Nicolás de : 187, 188, 209. Arrcgui, Junn de : ü6. Arriola, Esteban de: 25-l. Arroyo, Beatriz d e: G6. Arroyo, Ma r"ía de : 36. Arroyo, Rodrigo de : 83. A ven daño, Bcrn aruino de : 66, 72. A v en daño, Juan d e : 66. Avendafio y :Vfaciel, Ignacio d e : G6 . A ven daño y Maciel, María Rosa de: 66. Avilés, virrey: 204, 21-1, 224. Ayaln, Ana María d e: 56. Aynlu, Bernarda: 78. Aza ra, F élix de : 22-1. Azaro la Gil, Luis Eurinuo : ! S 49 ' ' 71, 79, 123, 132, 178,' 1 208, 210. Azeona, Antonio d e : 47, 210, 2-10. Azcuénaga, Miguel d e: 1Q, Aznnr, Pelipe Pascual : 176. B Balmaceda, Isabel de: 100. B áez de Alpoin, Amndor : 42, 101. 102, 107. Báez de Alpoin, Juan : 5;3, 66, 94-. Ba lb'in de Vallejo, Juan : 199. Ballesteros, María Josefa : 85. Ba rbagelata, Lorenzo : 225. Ilarbosa d e Aguilar, Salvado1·: 41.. Barbosa, Francisca: 90, 91. Ba l'bosa, Lufsa : 83. Barrales, Inés de : 85. Barra les. José Nicolás : Barreneéhea, Antonio : 264-. Ba nios , Francisco de: 26. Barros, Belchior de : 48. Barros, Catharina de : -!8. Barros Fajardo, Jorge de : 48. Basavilbaso, 1'1nnuel de : 12:?, 1~:~ . 138, 262. Basualdo, Juan de : l0'i. Ha.surco, obispo: 127. Bauz:1, l!,rancisco: 210, 226. Baygorri, P odro de : 64, 67, '.:!!'ii • Bedoya, Ma nuel d e: 264, 26:5. B e lgrano, Agustín : 222. Bel grano, ~1auuel : 148, 149, 350. Benumont y Navarra, Frnncé.;;: 30. Bello, Scbastiún: 89. Benav"ídez, Ambrosio de : 16::l. Benavídcz, Jerónimo : 31. Benaussl', Alfredo : 201. B err oetn, capellán: 174. Bianqui, J erónimo Pío : :2Hi. Borr{1s, Miguel : 222. Boyso, 'romús José: 158. Braca.monte José GrcO'orio: Hü. ' I"!> Bridgman, Tomás : 110. Br1gnole, Atilio C.: 11r1. Brito d el Pino, José : 206. Brito de l Pino, Josefa : 211. Bruzo, Francisco: 194. Bucareli y Ursúa, Fr:1neisr.o: 13-l. 135. Burgues, Jorge : 183, 208. , Hurgues, :Mar"ía Mnrt iirn : 18:j, ~o~. ,, INDICE DE NOMBRE8 Burgos, Pedro de: 74. Bustamante y Guerra, José: 197, 219. e Caballero, Bernardo: 85. Caballero, Sicilia: 84, 83, 86. Caballero de Bazán, F rancisco: 90 . Cabot, Manuel: ~6. Cabral, Agueda: 107. Cabral, Cristóbal: 107. Cabra}, Luisa: 78. Cabra!, Rosa : 78. Cabra} de Alpoin, Isabel: Ca bral de Alpoin, Manuel: 3J, 74, 97, 100 a 107, 112. C::tbral de Alpoin, Margarita: Ca bra} de Alpoin, Mai·ía: 107. Cabral de Melo, lsabd : 45. Cabral de Melo, Gregoria: 97, 100, 107, 109, 112. Cabra1 <le :Mela, Juan:1 : 107. C'aLral de Melo, Marga rita: 42, 49, 98, 101, 107. Cabrera, J érónimo Luis de : 141. Cabrera, Pedro d e : 73. C'úccres, Ramón de: 198. Cajaraville, Andl'éS: 69. Calderón, Sebasti{m : 156. . C'a lder ón Velasco, M~rgan t a: 156, 158. -Calv o de Arana, Benito : 234, 2:.:>D, Uáma.ra Francisco de la : GJ. Camejo,' Antonio : 172. ,.. ,.. 0 Cam ejo, B á rba r n. : 173, J ' 4, l '· • 2G6, 267. ( 'a me,io, lJoming a : l ,7. Ca me J·o los· 175 a 177. ' ' :María • Petronila: 200 · Camejo, Ca me jo Soto, Juan : ~O. Caminos, José Alejo: 140. Ca mpo, Esta nisla.o d el : 1-l0. Campo, Juan Nepomuceno clrl : J 40 ' 143. Campo, los d el: J 39, 140. .., Campo, Nicolás del : 139. Cnmpusano S ilve stre d e : 7:>. . · Francisco ' · "11·1u•llfl. e., un d 10h, 1'\ n to · Capdovila, P e dro : 37. Carpio, Crist6ba:: 244. 28: CaravaJ'al C . ' Gonza1o do : 40 49 23:,arava,1al, J uan de: 104 ' ' ü. Carballo, Boniíacia: 1•>1 . Carballo, Pedro: 113. - . Ca rdoso, Pelipe Sa n t'iago· <>9] . __. . earlos III : 160, 182 Carlos I V: 158, 1:H'l . :203 214 "17 219. ' ' , - , ~arnero, Mariano : Sü. c~unero, Pedro P a ulo : 86 Carnero, V al en t'in : SG. · Caro, Bartolomé: .n . Carranza, P edro de : ,!3. Carrasco, ~{a ría M a rtina : 183 208. Ca n era., Francisco : 56. ' Carrera , Igna cio de la: 15S. Carrión, Juan Antonio: 91. Oa.rrillo, J osepha : 1ü5. Carvajal, B a ltasnr de : 3,í. Casajús, P edro Baut ista d r : 111, 112. Casa Valencia, ('Onde d<' : 214. Casal, Aurora : 215. Casal, Juana dc·l · 120. Cusnl, María Vent ur:1 <lel : 113. Casa 1, Pod ro J os(- del : HG. Cnsco uc 1\l cndoza, \~frtor : :r~. Cas t añeda, frny : 150. Cnstaiio Beccrrn, Ju:rn : ;16. Castollnnos, Frnuciseo R cm igi0 : I !'.l:.!. Cnstillo, Jun n del : l0il. Cn st r o, E ugen io d e: dS. Cebri{m de Y<,Jnzro, J uan : :!-:lll. Cepeda, Pn blo : 8G. Cc1wdn, P:1s('u:1ln : fW. CepNb y Guzmún, Celcdoni~ de: ] 1-1. ('erd:1 v Santia go Con<:h:1. Ros:, tk . la: 141. ffermcú o, B erna b é: l 9S. Ccrvera, Mnnud l\l.: 21, ü~. íl. 1~0, 12], 1~3, 134, 13J, 1-l:!. César Lorenzo ,fosé de : 113. Céspc'dcs, Franciseo de: 41, li3, ííl, 104. Ccv:illos, J uan de: 113, 136. Cevallos, drrey: 145. JS3, ~O•( ('ifuentes, ,Tunn ele : 4_J. obas 1'[:Hín de los: ;_i!l. C ' cu tura : 1 1_8. ' ('oll. Y . Conlinos, .Ambrosw Tgnne10 . '•. (),)•~ Coniulnt, J ost . ---ª· 1 (l(' : 1 1¡,,¡, 288 LOS 1L\CIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA Coni, Emilio A. : 27, 32, 48. Contreras, Manuel: 17'.1. Contreras, Milagro: 142. Correa, Laureana: 151. Correa Luna, Carlos: 71. Cortés de Santucho, Isabel : G-L Cortés de Santucho, Juana : 6f,. Cossío y T,e rán, M:.ati:-o de : 13n. Cruz, Ventura de ln : 85. Cuestu, Juan de : 221. Cue\~a, Ana de Ja: 35, 112, 248. Cueva, Magdalena de la : 95. Cueya, Toribio de la. : 95, 248. Cueva y BenaYídez, :Mrndo de J~ : 88, 104. Curt'tú, }'l'ancisco: 24;-l, 244. CH Chaus, Andrés : 85. Chávez, Juan Eusebio de : 11::!. Chopitea, Joaquín de: l 99. Díaz, Jlátima: 166. Dfaz Caballero, Alonso: 25. Díaz de Guzmán, Rui : 69. Díaz, Juana: 63. D'íaz Moreno, Juan : 76. Diaz Ramón : 37. Díaz Vélez, Eustaquio: 147. Díez <le Andino, Bartolomé : U 6. Diez de Andino, los: 117. Diez de Andino, Manue l I gnncio: 116. Dizido y Zamudio, Juan C.: J 09. Dizido y Zamudlo, los : 2tr5. Domínguez, Manuel: 172. Dorrego, Manuel : 148. Duarte Ne ves, An drea : 14 7. Duarte Neves, Juan: 147. Durán, Francisca: 176. Durán, Juan: 29. Durán, Juan José: 19~. Durán, Juan Esteban : 172. Dur[m, Manuel : 172. Durán y Pago]a, .Tosefa : J füi. Chorroarin, Luis Jost> : 130. E D Echagüe, Baltasa.r: 138. Echagüe, Francisco : 138. D!tmiún, Fray : -14. Dana Montaño, Salvador M. : 151 . Darias y Padrón, Dacio : lí8. Dávila, Cosmc Damián : 45. Dávila Enriquez, Pecho : 104, 105, 250. Dávila, Ped1·0 E steban : :n, -t-4) -!G, -17, 69, 71, 88, 104, 106. D elgado, Ana : 76. Delgndo, Bartolomé : 30. Delgado, B ern a b[. : í'G. Delg ado ele Espinosa, :Frnu<'iseo : 109. Delgado de Espinosa, Juan : 74. Delgado, Juana : 107, 112. Delgado Mclilla, Juan: 171. D"clgado, Santos : 78. Descalzi, .N"icolás: 35. Diago, Manuel: 199. Días M.aci'-'J , Branca: 48. Dina Macicl, María : 24, 231. Drnz, Antonio : 106. Echagüe Maeiel, Pedro ch"': 1~:!. Echagüe, María Rosa : l 3S. E chagüe, M ercedes: 138. Echngüe, Pedro : 122. Echagiie Andía, Franciseo ,J.: 254, 255. ,.. Eclmgiie y Audín, Ju:m P . : 11,. 123, 138, 262, 264. Echag-üe y Andíu, los : 119 a 1~:.1. ,. Eehagüe y Andía, Melchor : 111 · 134, 147, 259, 262, 264. Echavuru, :Mariano de : 117, 27'0. Echcverrfo <lC' Zamudio, Juan::i. M. ·. 36. Edwards Ma.tte, Guillermo : H-31. Blía., Juan Ignacio do: 190. Ellauri, Juan de : 199. Encinas de Rojns, María ; 4~·-, Endara, María Teresa de: J~.,. Enseña, José Simón de: 183. Enseña, los : 18:1. Errazúriz v Alclnnatc>, FranciAeo ,T.: 142. ' ÍNDICE DE NOMBRES Errazúriz Zañartú, :Federico : 1-12. Escalada, Celeclonio: J 49. Escobar, Alonso de: 35. Escobar, Ana de: 189. Escobar, Juana de: 56. Escobar y Gutiérrez, Ana de : 83. Escobar y Maciel, María de: 56. Esparza, Miguel Jerónimo ele : 8:!. Espejo, Juan Luis: 49, 166, 209. Espinosa Belmonte, Juan de: 100. Espinosa, Jerónima de : 107. Espinosa, Lucía de: 100. Esquive!, Alonso Estevan de : ;)4, 66. Esquivel 1 Gabriel de : 70. Esquivel, José de: 84. Esquive!, Josefa de: H6. Esquivcl, Juan <le: 73. Esquive} y Aldao, Francisco : 221, 222. Estrada, Concepción ele: 210. Estrnda Tomás de : 174, 199, 210. ' F l''aleón, ,Junn Bautista : 87. Fa11as, María: 151. Felipe IV : 94. :F'clipe V : 116. Félix de Velasco, Juana: 63, 65, L•,ernúndez, Agustín: 33. Pernúndez de Agüero, Ignacio : SU, 90. Fernúndez de C{,nlobn, Ju:m ,Jos~ : 127. Fcrn:índez de Enciso, Ju:rn : H3. Pernándcz de la l\ilndrid, Pedro : (j.). L•'prnflnue7, de Lo rea, Benigna : 1 f>!). Fernúndez de Terfm, l\f:rnucl : J 16. Fernúndez de Tcrún, ·María Josl'fa : 116. Fcrnández de Val di vi oso, 1sidorn: 1~2, J 34, 138, l 54, 156, ~58,. ,.. 134. Pern:mdez de Y:1Jdivicso los • J.t-1 142. ' . . ' :F,crnfmdcz de Valdivieso, Manuel : 154, 15ü. Fern{mdez, Diego: 222. Fernández, l•,r:rncisco : 89. Fcrn:índez, J·unn : 19fl. Fernándcz, Juan Marfa : 37. Fernández .Lobo, Nuño : 8!). Fernández, Pedro: 34. Fcrnández, Ha mona : 215. Ferreira, Santos : 57. Figueredo, Lorenzo : 198. Figueredo, María de : Figuercro, Manuel V.: 110. Pigueroa, Alejo de : 05. Figueroa y Men<loza, Isabel de : 4i. Plores, Antonia: fi5. Flores, Baltasar: 97, 107. Flores de Me lo, Inés : fl8. Flores, Ignacio : 74, 25-1. Flores, Francisco : 97. Flores, Josefa : 86. Fornel1, .José María : 146. Fornell, Tomús : 145. Prancia, José Gaspar CTl' : ti4, 1 1:). Francisco, Paulo : 45. Freire, l\J anuc>I : :!Hi. Freire, M:trrrlino : 150. Frl'irc, namón : ~O. Frfas, I s abc•l de : S l. l<,rutos Antonio : 711. Frutos' José dr : 112. J,,ruto;, ,Juan dt> : 11:1. _ ., Ft1t•ntt-s <kl Areo, l\fotro : 11.,. 1 , : 1•>r. Punes, el <1eau - 0 , 1·_ ,s • 73, 81, 238. Félix de V clasco, Mateo : 64. Fernandcs, Antón: 24, 231. Antonio: 172. Pc>rn{rndcz de Val(livic'lo, ,Tose : 289 ]1,, G n. Gndca, Alonso : Uaete, ..Tos(> Ignac io : S(i, ~i. Gaete, .Jose fa de: t~O, 121. G:wtr, :Mrlehor (lt': l~O. Oalinoo, Ana : tiü. Gallardo, J>J(tcido : lfl~. G(tlvei, ~ JO. (;:il l(•go, Crist<íbal : 10,1. O:d!C'go, 1\tatc•o : l!l1'. Gam:1rra, .luan cll' : 10:t 290 LOS )'!ACIEL E!'\ LA IIISTOHIA DEL PLATA Gamboa : 37. Garay, Cristóbal de : <H. Garay, Juan d e : :!3, 34, 37, ti8, 70, 8~, 97, 102, 141, :229. Garay, Tomás de : 43. Garay y Cabrera, Antonin de : 07. (~arr ía Caballero, Diego : 85. García Caro, Antón: b9. García de E(·haburu, l\Iariauo: 86. Garc'ía de Espinosa : fi8. García de la Torre, Mateo : 19-1, 195 GarC'ía de Zúñiga, Alonso : 83. García de Zúñiga, los : 189 a 193, 269 a 280. García de Zúíiiga, Juan Prnn~isco: 186, 187, 188, 199, 209, 223, 269 :1 280. Garcfo de Zúñiga, Víctor : 199. García, ll ernán<lez : :?.5. García, .luan : 199. Garc'ía, Marga.rita : 78. García, Mónica : 217. García, P edro : 217. Gareía Romero, :F r:rncisco : :n. García Ros, Baltasar : 70. Garfias, Antonio : Garretón, Juan Antonio : 158, lfü). Garretón, los : 158, 159. Garro, José de : 4<i, 62, 11B, 24n. , : v~, -•) ,J, r:3 , vr.3· • G ay oso, '1' ornas Gaytán, Luis : 33, 85, 36. Cil, .Juan: 200. Gil, José Antonio : 188. Gil, María Antonia: 185, 186 188 200. ' ' fHl Negrete, ,José: 65, 82. Giles, Pe<lro dr : 56, 69. Giró, José : 187, 208. Giró, Juan Pranrisco : 206 208. Golfarini, Leonor : 301. ' Gomensoro :Moyano, H uhcrtinn de : 21. Gómez, Alonso : 3:'5. G6mez de A.guiar, P edro : 9~, 99 100 107 249 250 or:) 1 25') ' ""'' ' ' ' ' ' ' Gómcz de A maya, Gonzalo : ~hl. Gómez ele Mesa, Junn : 254. G?mez del Castillo, José: 208, 200. Gomez ele Saravia, P edro : 83. Gómez, María: 78. G(nnez R ecio, los: 63. Gcnzúiez, Cristóbal : G3, 6'1. -· Gonzúlcz de Acosta, Bernandn : 83, 84, 170. González de Acos ta, Domingo; 55, 56. Gonz{dez de Acosta, los : 87 :i DI. Gonzá]ez de Al<ler etc, P edro : 97. González de Leiva, Miguel : 127. González <le :M elo, .José: 17ü . González d e Moura, Gil: 42, 43, 4·! . Gonzálcz, de Roda, Antonio : 2ü. González de Santa Cruz, :Mate•J : 103 González de Santa Cruz, Roqu-:~: 10:J. Gonzúlez de Val1ejo, los : 63. González de Velazco, .Juan : fi7, González, Mar•ía :Francisca : ] {),) Gordillo, :?\fanuel : 198. Gorriti, Francisro d(' : 169. Govea, Antonio de : 44. Granada, Manuel : U) J. Gribeo, Domingo : 70. Groussac, Paul : 34, 53. Guci-ra, Bcrnar<lina de: 88. Guena Branco, J oáo : 48. Guerra, Gonzalo de : 48. Guerrn, Juan Carlos d e : ~10. Gu<.'rrero, Alonso : 73. Guc'rrero, Antonio : 5t,. Guerrero, M·aría : 85. Gutiérrez d e Ca1·ayaj:1l, Ana ~ a ría : 83. Gutiérrez de CaraYaja 1, l\1:ufa : s;t Gutifrrcz de Ca1•ay:1jal, Pedro : t/1. Gutiérrez, Dionisia : &3. Gutiérrez, Juan Antonio: 199. Gutiérrez, Juan María : Gg, 69, J:!6, 128, 131. Gutiérrcz, l\far•ía: 34. Gutiérrez, Pedro : 29, -10, 41 , 4~, 49, 77. Gutiérrcz de Humanes, Diego : 47. Gutiérrez de Molina, Catnliun · 5.:,. Gut~érrez de Paz, Antonio : 77. Gutiérrez de Paz, Diego: 77. Gut~~rrez de Paz, 1\'.laría: i7. Gutierrez Sácn1., Ann : ]-t-0. H Haedo, familia de: 20n. 1T crnúndez, Antonio : 17~. -~ Hernúndez de la Sierra, Pcd n• : 1 ' • ,, INDICE DE NOMBRES Herrera, Cristóbal Cayctana de: 171. H erre1·a, 1'1aría Catalina: 84. Herrera, Nicolús de : 191. Herrera y Cabrera, J erónimn Rosa de: 141. H e rre1·a y Sotomayor, J osP de : 52, 67, '96. Hidalgo, Alonso de: 112. Hidalgo de Cisne ros, Baltasar: 271. Higueras de Santana, Antón: 35. Hurtado, Pedro: 47. 1 lbáñez, l•'rancisco de : 99. .lbarra, Isabel: 78. Illa, Jaime: 190. Insa urraldC', Gabriel ele : 1 O:·t Insaurr.:11de, Juana: 78. l riondo, 'l'rúnsito de: 118. lnsaurralde, :\1aría : 78. Irarzabal, J oscfa de : 18:L Iznrra, Francisco de: 85. Iturri, Francisco Javier: l~ü. Jzarra, :Mekhor de: 8:L J zarra, Pedro de: 35, 101. Lei va, ,Juan Pnst•un l •le : SG. '"'•l , -, ,s•Y .., , 91. 15-1, 156, ,J imé nrz, Mar'ía : 34. ,J ofré <le Arce, Elena : 44. ,Jofré ele Arce, Margarita: -H. ,Tuanic <>, Francisco: 191. .Tuanzarás, Vicente Atan:isio· ,Jurndo, Francisro: 174. ,]tirado, Juan : 174. Lnco~zqueta, Juan José <1e : llü. Laco~zqueta, los : 116, 1 37. Laeo1zqueta Rosa de· 111 lB 11 :- . ' .' 0, 9r.: 13' 1.'"'º, 3, 'J 36, 205 a 262. Lafuente Machain Hieardo de · 9J 9 ' • - ' ..,9, 48, 49, 55, 71, 79. Lagrniia, Zipri:'rn de : 265. Laguencheim, Manuel, 223. Lara, María de: 97, JOH • Lara y Alderetc, :María de ; 97 109. ' Largacha, Dolores : 216. .Lariz, ,Jacinto de : 64. Larraehea, Juan Franc-isco de : 13ti. Lar raza bal, Antonio de : 78. Larraz:ilw], .Juan Manuel d e : 15!1. LarrazabaJ, Julia : 166. Larrosa, Manuel : 148. Lasterra, Catalina de : IHI. La valle, Carolina : 140. Lazcano, Juan Angel de : 190. Leal de Ayala, Mateo : 101. Leal, Dionisin : 6,1. Leal, María : 90 . Lci te, },u rtn do, Pase hoa l : 48. .Lc6n, ,Juan d e : Hl8. Lrren:.t ,Juanicó, Julio : :!OS. • <Y : 1l•'6, ""1 , , I_.pzc:ino, D om1nMo J ,Jauregui, Agustín de: 16~. ,Jim{:>ncz, Frandsco: 34. 2!H 1:.w. L La bougle, Raúl d e : ~l, ~65. Lacoizqucta, An toniu <le : 1-t 7. 1 j .,, Lacoizqu<•tn, .Tu:u1 de : 11:l, 116, 1 ~5, 255. Linicrs, S:111ti:1g-o : 1!lO. Lizoln, Manuel tk : 83, 189. Lizoln y Escobar, ,losef:t : 1-1:l. Lizo1a, Juan 1•,r:mcisco : ~3. Lizo la, .Juana : 83, ~72. Lizol:1 , Mn rtina de : 83, 189. 1,. q •> , ;1, - -•> -d1 - . .Lo l10, ~,· 1, anne l : ":11, ,l, -~ Lobo Sarmiento, Antonio : 4~. Lopas, Antonio : rns . Ló1wz, B:utolonu• : 101. López de~ Arriola, Gabriel : J 09. Lbpcz, Est:rnislao : 1-48. L6pcz , L op<'z Lópcz, López, I,6pez, Lúpcz ~49. Lópt'Z López L6pez, de 1\1cndoza, .Juan : 10~. Fr ng.1, • J11"11 •)')()__ . ,, .• ')• --,o, ,...._, ,T nan : Hl9. .Juan Pablo : 150. 1\-layor: 44, 47. del Prado, Diego : H5_. ~48, Pintado, María ,Josl'fo : 1.J.R. Pintado, l\1iraela : 14 7. Viel•nk F . : Hii . !92 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL, PLATA Lorca, Andrés ,Toséph de : 254, 2GG. Lorenzo, Nuño: 102. Loreto, MarquPs de : 131, 156, 15'i , 184, 185, 187. Loring, Caleb: 196, 197. Loyola, Martín Ignacio de : 24. Lozano, .José Antonio: 85. Lozano, Pedro: Lozano, Juan María: 85. Lozano, lfnría Inés: 85. Lozano, Mariano: 85. Luco y Caldera, 1.Jiberata : 1-H. Luis, Francisco : 176. Luque, ~foría de: 33, 36. Luque, José María: 158. Luna, Gregorb : 140. LL Llambí, Francisco : 191. ~l MneiPl. Agued~1 : 109, 14:í. Macicl, Ana: 93, 10~, ~64, 265. Maciel, Anna : 48. Maciel, Andrés : !J4, 95. Macie1, Anselmo : 14 7, 150. Macie1, Antonio : 55. Maeicl, Baltasar: 18, 74. 78, ~la :1 ]10, 112, 125, 137, 236, ~40, ~48 a 254. Macicl, Bern:udo: 78, 84. MacieJ, Caballern Diego : 85, 86, ~¡ . Macicl Caballero, Frnneiseo : 85. Maeicl Caballero, María Antonia : 85. Maricl Caba11ero, 1'farfa Francis<'n : 85. Maciel Caballero, 1'f.:1ría Josefa: 85. Maciel Cahnllero, María Hila ria: 85. Maei<:> I Cn hall ero, Pedro Pnscun]: 85. Maeicl, Carlos : 174, 181, ~J R n 226, 266. Mnciel, Carlos ,Tusto : 21 fi. Macie1, Ccledoniu: 86. Macicl, Cln u dio : ~83. Maciel, Conirnla<>i(rn: 2 Hi. Maciel, Maciel Macie l Mariel Maciel Ma cie l Maciel Maciel Mnciel 77. Cosme : 147 n ].í0. d e Aguirre, Aun : ;,5. de Agnirre, C:i ta lin:-i : 1>4-. d e Aguirre, Luisa : fi4. de Aguirre, Mar'.ía : 5:'). de Aguirre, Rosa : 55. del Aguila, Antonia : n.i, 71. del Agui1a, Antonio : 78. del Aguila, Bartolin:i : 65, Maciel del Aguila, Catalina: f 6. Macicl del Aguila, F'rancisco: 1 ~, 43, 45, 59 a 72, 73, 77, Rl, 8G, 231, 232, 237. Maciel del Aguila, El itozo, Fra11cisco: 65, 71, 7~ a 7 g, 238 a ~-tn. Maciel del Aguila, .T osefa. Mn ciel d el Aguila, Jos(> Ign:tr io : 7~. Maciel d el Aguiln, .l n nn : l S. ít"i, 81 a 92, 170, l S!l. Mnciel del Aguila, Lni~ : 1~. -!;') , 51 n 57, 23~. Maeif'l del Agui In, 1'fanuf'l i\. n ton i o : 78. Ma eicl del Aguiln. María : (i<i, ~;:~. Mn<>iel d el Aguiln. )[n r í:1 C':1br:11: 44. M:aci i:-1 d el Aguila, M n r'ia .T osrfa : ~\7, 84, 86, li0. Mnci<'l d ('l Aguil:i. l\I:irgarit:1 : 7~. Mal'icl oel A g-uiln. ).l p}rhor : (i .í . ii'. Mn<>i<'l. Delfin:1 ra z: 21fi. 1\-facie] de Ord{ifiez, Re r:1pin : l ~i'. Muc~el de VillnnuC'va, Antonia : i:í. Mrt<'l('} de Yill a nu<:> Y:-t, Fr:111rh«• 1) : 67, 7~, 75. Mneiel, Dolor('~ 1tnnuC'l:1 : ~lG. Mnei<'l , Doming-n : 117. 13-1. 141. ~:í..i.. l\in ciel. Domingo: 117, 13fl, ]4.í :i 151 . ~fl7, !:?60, 261. Maciel, Diego : 85 a 87. Maci0l, E speranza Antoni:i : l.í 1. M:aeiel, EYaristo: 86. l\{a ciel Faustino : 78. Maciel, Pe licia no : 150. Ma e~el , 'Félix : 78, Mul'~e1, FlorC'ntino l\la c 1e l, Francisca Ma<>i<.'1, Francisca ] 46. Antonio : 1-li . Autoni:1 : I,i (). R,os:i : 1-t.\ 1 lfi, l fiO. Mnrh•l, Fr:rn<'iseo : 86, 11 " · , INDICE DE l\OMBHE:::; Mad~l, Francisco Antonio: 18, 1~), 14?, 174, 179, 200, 215, 266. Mac1el, Francisco ,Javier: 78, 151. Mac~el, Franc_isco Joaquín: 158. Mac1el, Francisco Rosario: 150. Maciel, Gabriel: 283. Maciel, Hipó lito: 200. Maciel, Isabel: 44. Maciel, Isidro: 86. Maciel, Jerónima: 86. Maciel, Jerónimo Federico: j16. Maciel, J oao: 48. 1\-Iaciel, Joaquín: 18, 115, 116, 122, 133 a 143, 257, 258, 259. Maciel, José Antonio: 200, 282. Maciel, José .Elías: 151. Maciel, J oscfa: 201. Maciel, José Ignacio: 78. M aciel, José Joaquín: 139, 154. Maciel, José Julián: 215, 216. M acicl, José ~Ianuel: 146. Maciel, José Ramón : 215. Maciel, José Santos: 137, 150, 15.1. Maciel, Juan: 55, 78, 86, 170. Maciel, ,Tuana: ] 16. Maciel, Juana M.anuela: 158. Maciel, Juan Bn1tasar : 18, 112, 115, 116, 125 a 132, 156, 185, 257, 258, 259. Macicl, Juan Esteb~n: 78. , _ Maciel Juan Franc1sco: 78, 87, lnO. ;d aciel: Juan G.: 1~2. Maciel, Juan Ignac10: 78. l\:iaciel Juan José: 78, 117 · r: ·~ 3 Maciel,' Juan Manue l : 13 0°, 1v• 167, 211. 11 • 9] 7 1-Jaciel, Juan Pedro: 17 4 , ü, ... ' 266. :u acic], ,Justo Pastor: 78. M acie], Laureana: 174, 26!i . 1\faciel, Lorenzo: f>6. 1\,faciel, Lucas : 56, 78. Mad eJ, Luis : 215. . J('C) . 1\,faciel, Luis Ennque : l , ?,.. \e,;1 178, .179, 193, 194, ~l:3, ~f);J :, - ) • • Maciel Luisn: 151. . -s 'fn"1· el' Lup('rcia Victonnna : 1.,.1 · D ()(' 10 ) ' ._ , 1·,, .'¡ n;i' !\1:leic 1, M.a nue J: l 8, 78, 108 n 12:~, ll~, 1 2 1, 1.2,J, .), 1 ' • • i'/' "'80 V .., •> ,...:"·i · 1 i,; 9 r:)r:> <•1 <>62 ' •• :-l 1'1I a(•i c l Manuel Antonw: ... ~. ·,.. , Maeie l: :M anu el 1l c los H(•y cH : ' :,,;, "j'- .._, ' ... '- \_ t,') '\ ~tn Ma c~eJ, M·anucl de la Rosa : 78. MaCiel, Manuel Francisco : 146. Mac~eJ, Manuel Ignacio : 131 . :Mac1el, Manuel María: 151. 1\.1 aciel, Mm1ucl Victorio : 78. Maciel, Marcelino Juan : 147. 1IacieJ, Margarita : 215. J\f acicl, l\r1:uía: 109. l!aciel, María Antonia: J 39, 14!5. l\faciel, ~a1'ia Dolores: 139. l\laciel, Ma1·1a .Josefa: 147. M.aciel, l\fariano : 28:-J. l\f aciel, :M aría del Rosario : 146. l\if aciel, María Hnaria: 84. l\faciel, :Mana Isa bel: 117, 121, 2-37, 259. Maciel, María Juana: 139, 140, 143. l\faciel, l\faría Salomé: 150. Maciel, Martín José : 116. 1[aciel, M.a tías: 117, 136, 258. :Maciel, Melchor: 17, 23 a 4H, 51, 52, 55, 5!l, 93, 147, 17!l, :!31, :!:33 a ~37. Maciel, Mercedes: ~15. l\facicl, l\j casio : l !H. l\fa ciel, Nicol:ís Joaqu ín : 146. l\.laciC'l, Pas(' ual: 78. Macicl, Patricio : :28~. :Maciel, Paul:1 : 174, :!<ili. l\,[ acicl, Ped !'o : .56, 7K. l\faciel, Pedro Antonio : 1:w. l\faciel, P ctrona Ct,J PstiJJa : 147. MacieJ, Hafada : 1 :1~. \f:t('Ít>l , H :llll()ll:l PnHl(' ll (·ia : ~rn. :MacieJ, Roque ,J aciuto : 1:2:!. ·, 1 • J .\, :l C lt' , l'\ÜS..cl .. ] --, • ) •l ] , )•) _ ,l , 1,l,, '>~ -•) ,~l ,)_ • ,l ~ü4. l\Ja('i cl, Santia g o : 7~. 1\fadd , ~il vania lloroka : 1., s, ] .i:l. ::\[al'il'l, T c•odoro : 7~. )1 aeiel, Vi<-entC' P .: :!01. ::'l[neh•J y J'\; lix (h' Y t•las l'n, In és: tifJ. Macha<lo, l\tatfas : 44, :i!l. ")laehado, Tom:í s: 4;1, Mag arifios, ,Juan Antonio : 17',-,, :!ti!). l\la garifios, .M ateo : 173 , :!tiP. l\l a hhrnatlo, ,Jo:::i{•: -1nrL l\l":dva r, ~1•lw :-t i(111 : :2ll.i . ;\) :111 <' !1:1 y , ~clasl·o, <'risU1h:ll dt• J:1: .í:i, o.3. .) _\! :111 t i ll :1, .\t :w u 1•l F lo rt' n 1• io : ' l l11i, 110. --. 294 LOS l\IAC'IEL E~ LA HlSTOlUA DE L PLATA l\lanza nares, Juan Frnncisco : 5 í5. :María, Lúzaro Luis De : ~16. Marín, Miguel : 221. Mar1n N egr ón, Diego: ~8, 38, 39. Ma rí n, Rafacl : 2~~Marq ues, Jacinto: 242, 2-!fi. Márquez, Ferna ndo I. : 175, ~69. ~f:irquez :M.onticl, .Josr : 109, 113, 145, 255. Márquez M'o ntiel, Maria : 120. M arquina, Prancisca : 90. ~f arquina, Isa bel : 90. :Martel de Cabrera, Gonzalo : 97. :Martín de Don Benito, Antón: 98, 250. M artín de Saa, María : 170. M.artínez, Alonso: 44. Martínez de Aguiar, Diego : 9!), Ma rtínez d el Monje, F rancis co: llG. Martínez del Monje, l\faría: 113, 116, 125, 255. M:utínez del Monje, P edro : 133. Martínez de Hoz, José: 87. Martínez d e 8a1nzar , J·osé : 60, <n, 62, 67, 100, 252. Mart"ínez <le V eJasco, ,Juana : 156. Jvfartínez, fgnacio : 222. 1fartíncz, .Jerónimo : 109, 24-R, 254. M:nt'ínez, ,Juan Ign :l<'io : H)8. M:u·tínez, Pilar : 223. 1fartínez, Juan : 29. Mns de Ayaln, P élix : ] ~)!l. Matheo, Juan: 65. l\{atías, ;ruan <le: 34. Matos, Francisco de: 25. Mat ur:m a, Manurla d e : lGf>. M ..1turan a y Aldemir, Pedro de : 16H. M edina, F l'a ncisco: 55, 183, 184. Medina, Juan de: 198. Medran o, Alejandro : 2~2. M ejí a, Fernando : 81. M<'lo, Cata lina de : 42, 47, 51, f>2 59, 231, 233, 2~6, 237. ' M elo d e Portugal, Prdro : 218, ~I n. 1folo, Elena de : 44, 59. Mrlo, .Jerón ima <lr : 44, 4;1, !?:{2, M elo, ,Tnnn dr : -47. Melo, Juana de : 47. :Melo, los de: 43 y 44. Melo y Aguil n, ,Tu:rnn d e: 44, 47 65, 232. ' Melo y Alpoin, ,Juan de: Melo y Alpoin , Blns d e : J 07. l\1enngliotto, L or e11zo : ~9. Mrndez, Antonio: 173. Méndez, ,José : 174. l\féndez, Rosa: 173, 174, 2 6G. Méndez de Sanabria, Guille rma : 89, Mendietn, P edro de: 64. Mendietn \v Z:ír:.i tr, Roque <le: 60, G4, ñ5, 68. Mendoza, Juana: 78. Mendoza, Luisa d e : 44. ?\ferrado y Yi11acorta, Alonso ,] (_l : 60, 100, 252. Merlo, Frnnrisro de: 90. Michel cn a, Ju::m A.: l flO. l\ficlemou, DiC'go : 110. Migue lena, Miguel dr: 171, 17:?. Mignez, :Martinia no: 87. Mioño Bustnmante, Josefn d r : :?O;). Mitre, Bartolomé: 177. Monserrate, l\fateo <l<' : 30, :n , :~:?, 36, 38, 39, 41. 1\fontes de Ora, Ana: 85. Montes de Oc::1 1 Rita : :217. Montilla, I saheJ: 174. l\{on to~·::1: 69. Morn, Bias d r: ~:'). Mornlos, L<'onor fü,: 1i-L :M . :or{m, Cri st óh:-i 1: 70. 1for:rn, N'irol:-ís : 16,5. 1\'Lornndé Prndo, Dolores : 1.t. l. i1:or:-ittn, ,JuC'into ilP: trn. l\{or0irn , Isa hC'l : 112. 1vforlo te, José: 17-t. Moyano, Corndo, .M<•leh or : -i-L M 'o .vnno y CifuC'ntC's {i p l\fC'rli n:i : Antonio: 44. l\fu,iica, VC'ntu ra de : 4f>. Muñoz, Antón : 96. Muñoz, Bruno : 180, 198. Mnñoz de Gndca, A lfon ~o : 241. Muiio1., Pranei s ro : 49, 101. 1 O~. l\fuñoz, Frnneisro ele> l os An o c_•JC's : 188, M Muñoz Yejarano, .Alonso: 6!). 1\{ufioz Vejnrnno, ,Juan : 11fl. iO. 1{ntiloa y Andueza, Ju:tn ,Jo;;:(, tfr: 78. ÍXDI CE DE X0:\lBRES N Naharro, Cristóbal : 42, -!~, 88 59. Narvaja, Pedro d e: 11~. ' Navarretc, Luis de: 101. Navarro, 1...,elipe : 101. Navarro. P edro : 57. :Kieto, :M anuel : 19H. Núñez Cabral, Inés : 42, 43. Núñez Cabral, ~{atías : 102. Núñez de Prado, Diego : 30. Núñez, Frnncisco : 25. Núñez, Jerónimo : 71. Núñez, Lauro : 246. N úñez, Paulo : 34, 4-t, 4G, 233. o Obes, Dionisia : 22] . O bes, Lucas : 221. Obligado, Pastor, S.: ] 48, 1:-il. Obrngón, Miguel de : 5G. , O cnmpo Saavedru, Frandseo M . lk : 53. Ocampo Saavcdrn, Nicolús d0 : 30. Ochoa, Isab<'l de : Di\ 24~. Oger, Sebastián : 2.16. Olngucr F eliú, Antonio : .1 8~, 21:l, 219. Olavarrfo, Antonio de : ~18. Ola verriet a, Dirgo dt' : 35. Olivera, Gonznlo And r{,s <l e· : :'!:n, 234. 01 loniego, .T nónimo : ] ~!1. Ordóíiez Eehevc-rría, 1'erL' 3:l : 1-ii. Or<luíin . PL' dro <1e : 74, 2Hi. Orib e, Francisc•o d<' : :.?08. Oribe, :M nnu<'l : 281. Oroño Antonio d<' : 1:\:1. Ort eg-; , Francisco <l C' : JS~. l S--1-, v~.í. Orti z. d e Ro zas, Domin go : 171. Ortiz d e Zárnt 0, Ju:1H : lti, (i i , ~~fl. Ortiz ele Z:'t rn tü, .T un 11~1• : 6+. ,, t • >'' n • Ort1z d e 7,{ir:1te , R onn go: ,n, _,) • Ortiz, .Juan ,Tosé : 200. Orc:1riz V H N1t1mont .11, x:1,·:1rr:1, Mnrín ·a c : 44 . O ~mnt, Timol<'ún cll' : CiO. Out <'R, F t'• lix F .: •t!l, S-L ~ !).) p Pa checo, B('rnardo : ,)7. Pnt'h cco de SaHta Cruz ,Ju a ii : 62. 65, ~40. ' ' P:1chcco, .Torg<: : ~14, ~17, 220 29-1 226. ' - ' Pach eco, :!\fargarita : [ífi. Pachcco, Ursula : 56. Pa checo y Obe~, l\lielchor : ~~l. Pag·ola, Frall(•isco d e> : 183, 208. Pagola, Juan fl e: 18~. Pagola, ,Juan Agustín : 221, 226. Pago la, l\fanuel Vicente: 2~1. Pagoln, J\!Iarfo J\fa g d a lena d ü : 133. Pago la, Pedro d 0: 183. Pa es de Puga, Baltnsar : fl3 . 0 93 . . - orregono . : __ P n t 1no, Paz, príncipe de la : 196. P{~droso, Ursul::i : 4S. Peña, Enrique: 4!). Peña, Otaegui, C.a r los : :?O!), 11). Peña , T omú s d<> ln : 186. P cfia losa, Migu<l de : 77. P e ralt.a, Gn briel el e : 101. P('redn, SotPmbrino E .: P ér ez, Agustín : :n, :~L ; , 2~t'i. P~rc>z, Bnrtolom r: Hl~. Pércz Brito, ,losé : ~OG . P Í' r!:'z <lP Burgos, Fr:111 r i:.ro : :.!."í, 27, 43. j:1, 89. Pérez, DiC'go : 10:1. PérC'z de lbnrra, JNúnirno : 10J. Pérez dr La,·amliY:ir, M :1 r tín : 5::5. P{>rrz dC' Otúlnrn , Yi r Pnt r : ~rn. :) , l , ,),)') <)•lG I l'l'C' Z, , 08t:' : --•J, - - >. P{-rez, Lrón : 112. Prrez, Manu<•l ,Jos{• : 1!l~. Pa h lo : HH1. de· Sosa, R:utnl om ~: 1 í~ . de> Ros:i, Felipt"' : l!)~. <k Sos!l, ::'.f:tnut'l : lfl~{. PPror hrna, .ln::i n de : ~-tl . PrsRoa cll• s:1:1 , PN1 ro I lomrn, : :-W, :1 í' i' .i!), (i., . PPR~o:i v Figu"ro:1, babel : llll. Pí'sso:1 ;lt, Fi¡..!'U !..· ron , Pt•dro : 44, -17, !í-i, ffl , li7. Pi<·asarri. P r dro l g-nal'io de : 1'.!7'. Pi,~<l r:1 h11t"'n:1, Pt'I ron:1 Antonia : J .il) . PiPdr:1h11t•1i:1, Prdro .\nto11 io : 1,i l. p {>rc>z, p (,r <:z Pí-rez Pt; r r•7, 296 LOS MACIEL EN LA HISTORIA DEL PLATA Pineda, Juana, de: 64. Pino, Joaquín de]: 20, 181, 185, 187, 198, 200, 210. Pino, los del: 201 a 207. Pinkney, 'l'omás: 19H. Piñero, Felipe: 37. Plaza Salinas, Juan C. de la: 142. Pizarro, José: 174. . S e b ast'' '> 9_, P 1zarro, rnn: 9_... Pobeda, Pedro de la: 32, 33, 40, -H. Polo, Bartolomé: 109. Pollony, María Jesús: 159. Pozo y Garro, Alonso del: 81. Pozo y Silva, Juan del: 61, 67. Prado, Isabel del : 95, 248. Prado, Isabel do : 48. Prado Maldonado, Manuel <le : 76. Puig, José: 201. Pujol, José: 118. Puya na, Juan Gualberto: 146. Q Quesada, Isidro Félix de : 222. Quesada, Vicente G. : 226. Quevedo, Gaspar de : 230. Quintana. Godoy, Ba]tasar de : 55, 66. Quintana, Juana de la : 150, 151. Quintana_, Leonor de ]n : 5fi. Quintana, J.,fanuel de la : 150. Quintero, Juan: 31. Quint eros, Juan Cruz: 201. Quiroga, María .Josefa d e: 150. Quir6s, l'edro de : 35. R Ramery v Echauz, María I. de : 20-1. R.amírez do Arcllano : 44. Ram'i!rez d e Arel fano, Cnyefm10: 215, 219, 220, 225. Re1us y Huerta, Juan : 240. Rcm6n, Cristóbal : 29, 30, 4-::?. Remón, Paula: 56, 60. Reyes, Maciel, Angela: 84. Rinn, Sebasti:ín: 185, 188. RicRco, Gcrm:ín : l-t2. Riesgo, Bartolomé: 221, 226. RigJos, Miguel de: 55, 66, 77. Riglos, José de: 127, 156. Río, Francisco Ventura del: 19a, 223. R,íos, José Antonio: 208, 209. Rivadavia, Bernardino: 207. Riva Henera, Juan .F . de 1a: 136. Rivera, Pructuoso: 122, 19:t Rivera, Hcrn::mcfo de: 56. Rivera Mondragón, Hernando de: 107, 241. Rivero, Sebastián: 198. Roberto, Antón: 35. Robles, Agustín de: 53, 107. Robles, Andrés de: 68, 70, 89, 0-6, 240, 253. Rocha Bauptista, Antonio: 90, 31, 233. Rocha Bauptista, María : 90. Rocha Bauptista, María Elena: '.JI. Rocha Lobo, Antonio de: 4S, ~33. Rodr'.Íguez, Alonso: 103, 233, 234. Rodríguez Came.io, J na n : 176. Rodríguez Camejo, M:1 r•ía: 17'1. Rodríguez Carrillo, Clemente : 54, 77. Rodríguez de Rotomayor, Alberto : 75. R.o<lríguez <fo Vallejos, Leollor: t-33. Rodl'Íguez Durán, Juan : l 76. Rod1~íguez, Est:mislao : H)9. Rodríguez, Pen1ando ,Tos(-: 17'2, 198. Rodríguez Ferrero, Miguel : 4:3. Rodríguez Gaytán, ~luan: 33, 36. Rodr1guez, Manuel : 88. Ro.ias, Grcgorio de: 97. Rojas y A cevedo, los : 46. Hojas y A ccvedo, PPdro de : 34, 46, :?31, 233, 236, .337. Roldún, .Josefa : 146. Roldán, M:muel : 148. Romero, Nicasio : 1.11. R omano, Pranciseo: 89. Rondeau, .J osP: 22:~. Rosas. Juan 1Innuel d e: 140 1:w, 159. ' Ro~enc!o de Trigueros, Diego : 54. Rm Diaz, Ft--lipe: 103. Ruiz de .Ardlano, ,]<HH' }lh: ~:?. , ~!1 7 INDJCE DE KOMBHEl':i Huiz <le Arel]ano, Sebastián: 1 H5, 120. Ruiz de Arellano, '!'cresa: 120. Ruiz de Bolaños, Pedro : 109. Ruiz de Ocañu, Catalina: 70. Ruiz de Oca.ña, Diego: 70. Ruiz de Ocaña, Isa be]: 70. Ruiz de Ocaña, Juan: 70, 71, 22q, 230. Ruiz, Estevan: 33. Ruiz Gano, Santiago: 114. Ruiz Guiiiazú, Enrique: 162, 167, 210. s Saavcdra, Hernandarins de: 24, ~9, 3~, 38, 39, 49, 87. Saa vedra, Pedro de: fü>, 8~. Sagas ti berria, .T uan Bautista tle: 84, 170. S[iinz de la Maza, Félix: 19~. Súinz e.le la Maza, ].far'ía: 19~. R:-11as, Francisco de: 28, 40, 49. Salazar, J osef de: 165. Salazar y Carrillo, J oscfa de: 16+, 165. 8alinas, ,Juan de: 109. Sa]vañack, Cristóbnl: l!H). Snmanicgo y Zárraga, María de : 73. ~:111a bria, ~:laría d e : 89. Sanabria, Mariana d e : 89. S únchcz d e la RazueJa, Matfos: 19!J. Sfmchez Garzón, Ped1;0: 39, 40. Sánchez l\1oreno, Antonio: 74. Riln<'hcz Ne gr etc, P edro: 7ó. Randova 1, Andrés de: 41L San Martín, Ana d<>: 55. ~an :Martín, Juan dC': !'56. ~ :rn Martín, Roqu(' de: 88. San Migu e l, A Jonso de: (t1. . San Miguel. Isabel de : O:l. Snrmic>nto d e Sotomnyor, F'rune1 <J· <' O: 54. Ranta C olomn ,Juan .Antonio : :Hi. ' i-;cgndr, G rl'gorio Antonio el<': 1 H , 117. ~<-' ~uí .•Tn:rn F'ranri s t•o : 14~Hegura, Martín dC': ü(i. Ri•qu l'ira, Ana <le : Di, flR, HW, ~-W. S cqucira, ,Jururn <fr : !J8, !J9, ~49. Scqueiru, ).fi<·ac Ja de : 39. Sequeyra y Bohorqucs, Ana de : 7.1. Sequcyra, Gaspar de : 90, 24!). Serrano, Alonso: 17 4. Siena, }'ra11eisco: 198. Sierra, Jos efa d e Ja : 78. 8ierra, .Juan Antonio de Jn : 18:3. Silva, Adolfo: 160. Silva d 'Hcrbil, },ederico: 21. Silva de Souza, Jo:io: 61. ~ilva, Francisco: 199. Silva Gerretón, familin. d e : 11 0, 122, 142. Silva Rc>ys, Josó de: 173, 2<HL Sobrcmonte, virrey: 198, 220. Soler, Andrea: 78. Sora rte, Diego d e: 177. So ria, Joaquín de : 198. Soriano, :M aría : lHG. Sors de Tricerri, Guillermina : 69. Sosa, Franrisco Lcandro : 87. Sosa Masca.renhas, Luis dl·: J 74. Sostoa, José Fr:rncisro de: lfl, 200, 208. Sostoa y A c huc:Hro <le M:1ch' l, lsidora : Hl, :WO. Roto, Ignacio ele : 11:2. Soto, ,lunu Manul'l ch•: 1-HL Roto, 1\1-nr'ía de : l 76. Supcrun<ln , <'OJH.k d<' : 14:.!. 'I 'J'aqu<'H dt' 1\ lnH.' td:11 Pt•,lro : -l ~. 'f<'jada, )ligucl d<' : 187. 'l'f'jcr:i, Manul'I : 17:2, JS7, l~~•rcJom,v:111 r on1lic·: 70, 71, ::?:.:!:l, ~30. '['("r:í11, ~fnrí:1 ,los<'f:l d<' : 11~. 'fhaycr O.i<'d:t, LuiR : l(i(i. To~a, M:rnn<' l Joaquín <lt• : l '-1~. Toe o niri l. A 11 a 'l't' r rsn : J 1. 'foktlo, F<'rn:11Hlo d<' : :~ -L 'l'o h-<l o, <~ahrit>I 1k : i -t, 7ti. "1 , tl ~. 107. :247. 'J'oll'do :'' Pimc nt<' l, M:HeO!'i ,k : 11:t To ro, n:1rni :'111 1lt•l : ~:L 'roro, fr:111 r is <':t dp] : flO . 'J'orn•, R ,,r11 :irJo d <' l:t : l !)!l. 'l'orrt', 1l h i:s }Hl dt• la : 1~7, 1!l l . 298 LOS l\lACIEL E~ LA HIS'fORIA DEL PLA'f A Torres, Antonio : 21, 71. 'rorres Pinedn, Antonio ele : 70, 2~:I, :230. Torres de V era y Aragón, ,T uan: 16, :~3, 35, 37, 64, 75, 88, 89, 2~:l. Torres, Ramonn : 78. 'l'orrijos, Alonso ele : 44. Trnnslaviña, .fosef Ckmente : 16->. Trúpani, ,luan Camilo : 19R. Trell('s, Manuel A .: 48, 68, fil), 12, 88, 91, 92. Troneoso, Isahr l : 1-:1-7. Tubic-hamini, rariqu(' : GS, fül . u U rizar, Pedro de : ] :rn. Urtubey, Agustín : 210. Uzu<'ñn, Francísro de : 90. V V:1lcnzuela, Ana lh• : f18, PJ, 2 Hl. Ya)dpfü•Lro, Ju:ma df' • S :1. Valdés. Alonso de : 116. Vnldés·, Simón de• : 30. Valclivieso y 1'f:1eiel, los : 141, 1-1~. VallC'jos, Antonio : 63. Vallejos, .Jacome : ü3. Vallejos, Jerónima : ti3. Varc1a, Orbcgoso, Luis : 7n. Vnrgas, ,luan .lnrinto ck : ~01. Vargas, Juan l\farín de: 201. Varg::1s Mn ehuca . •Ju:m : 100, ~51. Vnrg':i~, Paz: 216. Vargas y Viana, ,Junn María d e- : 201. Vaz, Cata tina : 48. V{1zquez Al'<'vedo, A1fredo : 1trn. V(1zquez de Vc,Jasro, ,Tunn : 41i. Vúzqu0z, .Ton(luina : 1üfi. Vá.zquez, Rnmún : 16fi. V odia , Agustín <.lc> : lR~. V <'g-:t, M.arín de la : 4H. V olasco, VPlns<'o, Ve-lasco, Velasro -· ~•) ' Dh go : 84. ,Tosc:'fa il<': 64. Jvfarros d r : 17~. y '1'ej:1da, M ¡tnn<'l d (•: SI. 1 Yelho Cabrnl, Gonz:110: -t3. Vera, Alonso do : 98, 100. Vera, 1\1ariano: 146, 147. Vera l\.fuxica, Antonio de: 6~, G.í, 66, 210, 240, 242, 245, 247. Vera Muxica. ,]osé de : 13B. Vera Muxica, l\-Inrfa .íosefa de: 1 l. Vera Muxira, R:1faela de : 205, •) 11) - ' 211. Vera Muxica, F1·anciseo Antonio de : 203, 21 O. Vera Perdomo, .T osé de : 1 í7. Vera Perdomo, Rit.a dt' : 78. Vera y Pintado, Berna rt1o : urn. Vera y Pintado, .José Mnri:m o: l:{9. Verdugo, J uau : 154, 16f>. Verdugo y Vnldivieso, Paula : 1."H, 166. Vergara, Antonio de : 83. Vergara, ,luan (le : 41, 11~. Ve_rgara, MiguC'l <le : 55. Vértiz, Juan .José. ele• : 1:2fl~ ]~O. 1:1:l. 181, ~02, 205, 217. Viamonte, general : ] 47. Viana, Francisco Jader dl' : ~10. Viana, .José ,Toaquín 1lr : :20. I ,:;. 203. Viana, Margarit:1 Ul' : l i -l. Via na, Mclchor d<': l ~3. Yiana y Achuca.rro, Marfa An tonia el<' : 201. Vicuña Mnrkenna , n0nj:rn1ín : l 1i.t. 203. Vid al, }.1:n tco : 181, 1 Vide la, Domingo de : :n. Vigodet, gobc-nrndor : ] H;i. Villanueva, Jacinto de : 65. .. Villanuevn, Fr:rnrisro de : 7-1, l il. • 245. Villanueva, .Juan .José de: ] 07. Villnnuevn, Nicolás <le: 77>. Villnnu(>va, Tomús dP : !Hi, 11 ~Yillanuevn, Tomnsa d e: 7.í. Villa segura, .marquesf's dr : 17fi. Villascíior, .J os(, ~ianue 1: ::!fi-t ViJlavicencio, ,Tn:rn:1 Casitd:t ,k: 173. Villavicencio, P<'tronn : ~ l .í . Villegns, I1ominga : ~01. Villoldo, 0-onz:ilo : flu. Viola, ,Tu:rn : 19,""i. ÍNDICE DE NOMBRES ~99 w W arnes, Josefa Francisca: 191, 19:1, 223, 269 a 280. Warnes, José Ignacio : 221, 223. Warnes, Manuel Antonio : 190, 191, 270. Wich, Manuel : 216. X Xerez. Pedro de : 35. Ximenez, Andrés: 56. Ximenez de Ahumada, Juana d,J la Cruz: 122. Ximenez de Mesa, Francisco : 184. Xunres, Antonio: 90. y Yúñez, Andrés : 199, 209. Y egros y L eclesmn, Ma rí::i .J oscf a d e: 64. z Zn bala, Bruno ele: 20, 120, 189. Zaba la, M:111uel Antonio de : 211. Za bala, P edro de : 120. Zamora, Miguei: 199. Zamudio, ,Juan de : lüil, !257. Zamudio, Santiago de : 83. Zañartu y Manso d e V elasco, Mercedes : 142. Zenzano, Joseph : 136. Zorrilla de S an Martín : 209. Zufriategui, Juan : 282. Zuloaga, Juan Bnutista ele: 84. Zuvia ur, José : 118. Zuviría, Ambrosio d e: 116. Zuviría, B::irtolomé de : 256. Zuviría, Mnría Elen:1 de : 236. ESTE LIBR.O SE TERMINO DE IMPRIMIR EL DIA 2 5 DE MARZO DE MIL NOVECIENTOS CUARENTA, EN -LA IMPRENTA LOPEZ CALLE PER U BUENOS 666, AIRES '- lb