Enthymema
V 2011
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Università dell’Insubria
Abstract
En los últimos años se ha multiplicado la publicación de diccionarios especializados para
aprendices de lengua española como lengua extranjera. Este trabajo se propone analizar uno de
los productos lexicográficos pioneros de este sector, el Diccionario de Salamanca de 1996, para
mostrar ciertas pautas sobre los criterios que nos ayudan a calibrar la calidad de una obra así. Se
trata de comprender hasta qué punto debe ser diferente del elaborado para usuarios nativos en
general comparándolo con dos volúmenes representativos de lexicografía no especializada en
ELE: el de la Real Academia (DRAE) y el Diccionario del Español Actual (DEA), considerado
hoy en día como uno de los mejores que hay en el mercado. Se reflexionará por tanto sobre
cuáles son los elementos útiles, necesarios e incluso imprescindibles en el sector dedicado a este
tipo de usuarios.
Parole chiave
Lexicografía especializada en ELE, diccionarios de
aprendizaje, DRAE (digital y en papel), DEA.
Contatti
maria.arribas@uninsubria.it
1. El porqué de analizar un diccionario pionero en lexicografía para ELE.
Desde el advenimiento de internet, oímos hablar con frecuencia del inminente final del
diccionario de papel, es como la crónica de una muerte anunciada. Sin embargo,
estudiantes, profesores, traductores y escritores saben que en ocasiones el viejo volumen
ayuda a encontrar lo que en la red queda oculto, confuso o mezclado. Hoy día los
estudiantes usan internet sin dificultad, pero hemos podido constatar que en muchas
ocasiones no saben manejar un diccionario impreso sacándole todo el partido posible.
Son muchas las publicaciones que han surgido en las últimas décadas con el objeto de
mostrar a estudiantes y profesores las posibilidades del uso de la red para optimizar el
éxito de sus tareas en general (y de la traducción y la competencia escrita, en particular),
es indudable que ningún traductor puede prescindir de internet, pero uno de los
productos más consultados en la red, el Diccionario de la Real Academia Española
(desde ahora, DRAE) parece presentar mayor dificultad para el uso de estudiantes de
español como lengua extranjera (desde ahora, ELE) que algunos volúmenes en papel. En
esta ocasión vamos a volver sobre nuestros pasos dirigiendo la mirada hacia uno de los
primeros diccionarios en papel que se ponía como objetivo ayudar al aprendiente. Se
realizará un análisis detallado de uno de los primeros productos lexicográficos para
estudiantes comparándolo con otros dos diccionarios muy representativos, uno
descriptivo (DEA) y otro normativo (DRAE) del cual, además, se tomarán las
definiciones existentes en la versión digital en la página de la Real Academia Española
(www.rae.es). Nuestro estudio se estructura en una descripción de cómo estos
diccionarios presentan las diversas categorías gramaticales (sustantivo, adjetivo, verbo,
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
adverbio, preposición, interjección y conjunción junto a las locuciones –prepositivas,
conjuntivas, etc.– que contienen los lemas elegidos), cuyos ejemplos se han elegido
teniendo en cuenta especialmente una serie de problemas observados en estudiantes
italianos de español.
De entre los productos lexicográficos que más se han venido publicando y vendiendo
en los últimos años, uno de los tipos más importantes es el de «diccionario para
estudiantes», ya sea para escolares, ya para universitarios, ya sea en las diversas versiones
de diccionarios de ELE, entre los que podríamos citar:
•
el conocido como DIPELE: Diccionario para la enseñanza de lengua española,
Universidad de Alcalá, dirigido por Manuel Alvar y coordinado por Francisco
Moreno, Bibliograf, Barcelona, 1995;
•
el diccionario de uso conocido como Diccionario básico de uso de la lengua española
dirigido por Aquilino Sánchez, SGEL, Madrid, 1985;
•
Diccionario didáctico de Español Intermedio, dirigido por Concepción Maldonado, SM,
Madrid, 2002;
•
VOX Diccionario actual de la lengua española, dirigido por Manuel Alvar, Barcelona,
Bibliograf, 1991;
•
ESENCIAL, dirigido por Sergio Sánchez Cerezo, Madrid, Santillana, 1991;
•
CLAVE Diccionario de uso del española actual, dirigido por Concepción Maldonado,
SM, Madrid, 1996;
•
SALAMANCA Diccionario de la lengua española, dirigido por Juan Gutiérrez
Cuadrado, Santillana, Madrid, 1996.
Serían también de gran utilidad e interés para el uso de estudiantes:
•
Diccionario del Española Actual, dirigido por Manuel Seco, Madrid, Aguilar, 2000,
desde ahora, DEA;
•
Diccionario de Uso del Español de María Moliner, Madrid, Gredos, 2ª ed. de 1999,
(desde ahora: DUE).1
El Diccionario Académico (DRAE), en cambio, no está pensado para aprendices de
lengua pues obvia, por consabidos, detalles que para tales usuarios no lo son e incluso en
ocasiones presenta incluso dificultades para el nativo, como intentaremos mostrar.
Quienes utilizan la versión digital de este diccionario cuentan además con la posibilidad
de consultar varios bancos de datos como el Corpus de Referencia del Español Actual
(desde ahora, CREA).
1
Es muy importante distinguir las dos ediciones de este diccionario, pues solo la primera responde a
lo que María Moliner ideó (ver infra).
Enthymema, V 2011, p. 159
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Esta parte de la lexicografía que va dirigida al destinatario extranjero, es decir, al que
se halla en la necesidad de usar un diccionario desde un grado de interlengua2 más o
menos avanzado (pero no completamente equiparable a la de la competencia nativa de
un adulto medianamente culto) entraña una serie de dificultades concretas para el
lexicógrafo que se han venido descubriendo y han intentado resolverse en estos últimos
años.
Se han elegido para este análisis tres diccionarios por diversas razones, el Diccionario
Salamanca por tratarse de uno de los diccionarios pioneros realizados pensado
parcialmente en este sector, pues ya en su introducción se lee que está dirigido a
estudiantes (extranjeros o no) y a profesores de español. He querido comentar algunos
aspectos de sus macro y microestructura comparándolos con uno de los mejores –si no
el mejor– productos lexicográficos actuales para el español peninsular, el Diccionario del
Español Actual (DEA) dirigido por Manuel Seco, con Olimpia Andrés y Gabino Ramos
en la redacción. Finalmente he cotejado algunas entradas de ambos con el Diccionario de
la Real Academia (DRAE) en su vigésimo segunda edición, la de 2001, pero sobre todo
en la actual versión que encontramos en la red, con la intención de ver hasta qué punto
el estudiante extranjero puede encontrar en esa página web la información necesaria,
hasta qué punto en ello es diferente del usuario nativo.
Del análisis comparativo se quiere observar además en qué medida se desprende de
Salamanca y DEA una voluntad de diferenciarse del académico por ver si ya podemos ir
abandonando aquel lugar común del tan traído y llevado «academiocentrismo» ya
señalado en su día María Moliner cuando afirmaba, incluyéndose también a sí misma,
que absolutamente todos los diccionarios españoles habían tomado sus definiciones del
DRAE, (si bien se ha de señalar que la suya fue una operación que podríamos calificar de
incremental pues el resultado del «plagio» fue modernizar y mejorar la mayoría de los
artículos). Eschúchese a este respecto la conferencia de Manuel Seco Trayectoria de la
Lexicografía, dentro del ciclo El laberinto de las palabras: Introducción a los diccionarios de la
Fundación Juan March.3 En esa misma conferencia, Seco nombra tres obras
encuadrables en el marco de lo que Juan Gutiérrez Cuadrado etiqueta como «oleada de
diccionarios de tamaño medio que aparecieron después de 1990, con fines didácticos
claros y ciertos deseos, más o menos explícitos, de renovar la lexicografía española».4
Además del Diccionario de Salamanca, las otras dos obras a que se refiere su comentario
son: Esencial y Clave. Tras estos primeros pasos, han salido a la venta otros muchos
diccionarios para estudiantes con lo que este segmento de público se ha ido
especializando cada vez más ya que han pasado a editarse en volúmenes diferentes
atendiendo al grado de competencia: diccionarios para estudiantes nativos de primaria y
secundaria; diccionarios para estudiantes extranjeros divididos según los niveles de
referencia de competencia lingüística del MERC (Marco Común Europeo de Referencia
para las lenguas); diccionarios para estudiantes universitarios, etc. Seco (conf. cit.) comenta
que «[en ese grupo de diccionarios: Salamanca, Esencial y Clave] se corrobora el carácter
2
Para el concepto de interlengua, ver Larry Selinker, Language transfer, «General Linguistics» 9, 1969, pp.
67-92 e idem, Interlanguage, «IRAL», X (2), 1972, pp. 209-231.
3Manuel Seco El laberinto de las palabras: Introducción a los diccionarios, ciclo de conferencias impartidas en
la Fundación Juan March, en la red:
http://www.march.es/conferencias/anteriores/index.asp?busqueda_simple=manuel+seco&activador
_busqueda=Buscar, último acceso: 15 de septiembre de 2011.
4 Juan Gutiérrez Cuadrado, El «Diccionario de Salamanca» de Santillana, cinco años después. Actas del XI
Congreso ASELE, 13-16 septiembre 2000, Zaragoza, p. 123.
Enthymema, V 2011, p. 160
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
prioritario del destinatario […], pero, curiosamente son igualmente adecuados para los
no estudiantes y, de hecho, nos consta su uso más extenso fuera de las aulas».
Me propongo reflexionar sobre ello, observar detenidamente cuáles de los rasgos
especialmente pensados para estudiantes (definiciones sencillas y claras, abundante
ejemplificación, sistema de marcación e información morfosintáctica especializada en
ELE, sinonimia, antonimia, fraseología, etc.), ver si cumplen con la misión de ser
adecuados a esa porción de público, especialmente en lo que respecta a un hipotético
usuario extranjero del Diccionario Salamanca de 1996 cotejándolo con obras elaboradas
para un destinatario más amplio con el objetivo de dilucidar si aquellos rasgos realmente
contribuyen a disipar las dificultades de dicho estudiante extranjero y del profesor de
ELE. Analizaré para ello palabras de diferentes categorías léxicas cotejando la forma en
que las presentan, definen, ejemplifican y marcan esos diccionarios: cuatro sustantivos
(cábala, caballero, caolín, capo), tres adjetivos, uno que funciona siempre solo como adjetivo
y otros dos que también pueden funcionar como sustantivos (capcioso, capaz, capuchino),
dos verbos que funcionan como transitivos e intransitivos (cabalgar, cantar), dos adverbios
(casi, ya), dos interjecciones (¡ca! ¡caramba!), una conjunción (y) y una preposición (tras).
2. Reseña crítica del Diccionario Salamanca de la lengua española
2.1. Datos bibliográficos
El diccionario que lleva por título: Diccionario SALAMANCA de la lengua española, cuya
editorial es Santillana (Madrid); con fecha de publicación de la primera edición en 1996
tiene 1727 páginas (más 14, numeradas en cifras romanas, de introducción) y su formato
es de 15,25 cm. De ancho por 21, 5 de largo. Las tapas de esta primera edición son
blandas.
2.2. Caracterización tipológica, destinatarios y objetivos
El tipo de diccionario al que pertenece este producto lexicográfico es el de diccionario
monolingüe, semasiológico, general, actual y descriptivo. Es monolingüe porque está
exclusivamente escrito en español; es semasiológico porque los contenidos van desde el
significante (los lemas) hacia el significado o los significados de esos lemas, los cuales
están dispuestos alfabéticamente distinguiéndose dígrafos (o conjunto de dos letras que
representa un solo fonema) según la ordenación internacional estándar: el dígrafo ch va,
pues, dentro de la ce; el dígrafo rr, dentro de la letra erre y el dígrafo ll dentro de la ele. Es
cierto que en la micorestructura de algunas entradas hay un tipo de información
sinonímica que nos hace recorrer el camino opuesto: desde un determinado significado
hacia otros lemas de significados sinónimos o afines, pero no llega a hacerlo de forma
sistemática a la manera de la obra de María Moliner (DUE).
Además, según reza la introducción, es un diccionario que «comparte con otros
diccionarios generales de la lengua la información enciclopédica habitual, pero sobre todo,
pretende con sus observaciones morfológicas y sintácticas ayudar a los usuarios para que
incorporen activamente a su léxico las palabras consultadas». Sería, por tanto, una obra
general y actual cuya finalidad y destinatarios también quedan delimitados en la
introducción: se trata de una obra dirigida «primordialmente a todos los estudiantes, sean
Enthymema, V 2011, p. 161
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
o no extranjeros, que quieran mejorar su dominio de la lengua española, y a todos los
profesores que se dedican a enseñar español».
Nada se dice sobre si es normativo o descriptivo, da por supuesto que el usuario no lo
considerará del primer tipo porque la única entidad que tiene la prerrogativa de
normalizar es la RAE, sin embargo no todos los usuarios son conscientes de esto. Las
tres últimas características (a saber, constar de información enciclopédica habitual, ser
actual y estar destinado a estudiantes y profesores) tienen implicaciones tanto en la
microestructura como en la macroestructura pues suponen tanto la elaboración de un
cierto tipo de definiciones como la adquisición o descarte de ciertos lemas que no
interesen a esos destinatarios, tales como ruralismos, dialectalismos, arcaísmos y
tecnicismos demasiado restringidos. A este respecto cabe añadir que, según palabras
proferidas por el propio director del proyecto5 en 2006, aun partiendo con las mejores
intenciones de neutralidad, «todos los diccionarios son en alguna medida algo
prescriptivos», pues en la elección de los lemas para la nomenclatura o macroestructura
ya hay un riesgo de caer en una selección ideológica (se preguntaba Gutiérrez Cuadrado
diez años después de la primera edición: ¿tendría o no sentido en una obra así incluir por
ejemplo el lema judiada, las locuciones hacerse el sueco, merienda de negros o despedirse a la
francesa o las acepciones peyorativas de gallego, judío, gitano?). Años antes, comentando el
significado de la marca restringido en este diccionario, él mismo había escrito:
La marca de restringido está plenamente justificada probablemente en todos estos
casos [abaniquería, abarraganarse, abarrancar, aberrar, abigarrar, ablusar, aboldar]. No son
términos arcaicos, pero sí efectivamente desusados. […] Abarraganarse es
relativamente desusado también por varias razones. En primer lugar, una parte
importante de la sociedad considera el concepto de abarraganamiento como
obsoleto; en segundo lugar, abarraganarse es un derivado de un sustantivo que ha
perdido vigor frente a otros sinónimos más usados: así, si alguien se atreviese a
confesar en público que tiene una barragana, preferiría usar otra palabra: querida,
amiga, amante, etc. Pero aun en el caso de que se atreviese a desafiar las iras de los
guardianes y de las guardianas de la corrección política, es dudoso que acudiera a
un término repleto de connotaciones medievales y clericales. Por ello, no es
extraño que no aparezcan [tales términos] ni en CREA ni en CORDE6.
Se me ocurre que las connotaciones medievales y clericales del término pueden ser
vistas desde el punto de vista opuesto e incluir el lema por ser esas connotaciones
precisamente las que permitirían el uso irónico de la palabra haciéndola necesaria,
pongamos por caso, en un texto cuya intención fuera marcar lo políticamente correcto o
incorrecto, como pudiera ser una crítica feminista o algún comentario sobre las
costumbres del pasado, etc.: «cuando a convivir fuera del matrimonio se le decía aún
abarraganarse y estaba muy mal visto, Catalina de Erauso, disfrazada de hombre, tuvo la
osadía de embarcarse hacia América y hacerse alférez». En cualquier caso, esas
reflexiones de Gutiérrez Cuadrado nos dejan entrever que para la selección de la
5
Frase tomada el dictado de la clase de Juan Gutiérrez Cuadrado impartida en el curso universitario
El diccionario en la enseñanza del español como lengua materna y como segunda lengua organizado por Ignacio
Ahumada y Maria Vittoria Calvi en el seno de los cursos de verano Intendente Olavide, La Carolina,
julio 2006.
6 Juan Gutiérrez Cuadrado, El “Diccionario de Salamanca” de Santillana, cinco años después, cit., p. 126.
Enthymema, V 2011, p. 162
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
macroestructura se tuvo en cuenta la frecuencia de aparición de las palabras en los dos
corpus de la RAE. En este aspecto, el DEA documenta cada ejemplo con un sistema de
abreviaturas que permitirían al interesado llegar hasta el original, es como un diccionario
de autoridades pues todos los ejemplos proceden de textos reales, tanto de escritores
como de periódicos e incluso guías, manuales, etc.
Digamos, en definitiva, que a pesar de que toda selección implique dejar fuera algunos
lemas y que en tal proceso, además de la frecuencia de uso, pueda influir de alguna forma
la marcación no neutra de algunas palabras, la intención fundamental del diccionario no
es la de ser normativo, pues presenta –tal cual son– los usos léxicos, es decir, describe la
norma sin «prescribir», recomendar o prohibir el uso de unas formas respecto a otras,
proporcionando, eso sí, marcas de uso y registro en su microestructura que permitan la
elección de las palabras más oportunas para un determinado contexto comunicativo.
Tales marcas son: restringido, rural, jergal, vulgar, coloquial, literario, elevado, administrativo y
afectado. Cito de nuevo una de las conferencias impartidas por Manuel Seco del ya
mencionado ciclo El laberinto de las palabras: Introducción a los diccionarios, esta vez la
referente a la microestructura: «nadie puede decir que domina el idioma si no es
adquiriendo la pericia necesaria para discernir, tanto en el uso propio como en el ajeno,
entre un nivel de lengua y otro: lo literario, lo técnico, lo culto, lo popular, lo rústico, etc.
y entre un nivel de habla y otro: lo escrito, lo oral, lo formal, lo coloquial, lo afectado,
etc.»
Estos niveles, como sabemos, están también sujetos a variación diacrónica, palabras
que en su día fueron marcadas como rústicas, por ejemplo, pueden pasar, si los caprichos
del uso así lo imponen, al uso estándar o incluso al culto y lo contrario, así por ejemplo,7
la palabra incordio era en su origen un tecnicismo de origen latino: in- (en el interior) y cor,
cordis (corazón) y de base culta (antecordium, como concordia, discordia, acordar, recordar, etc.)
para nombrar un tumor pectoral que afectaba al corazón de algunos animales impidiendo
su normal respiración y movimiento y acabó siendo una palabra frecuentemente marcada
como coloquial para deferirse a «lo molesto y agobiante», así como el verbo incordiar indica
«causar <una persona> molestias con sus impertinencias».8 Tampoco la marcación
diafásica ni la diatópica son inmunes a variación diacrónica: palabras que eran propias de
una lengua de especialidad o de una zona restringida pasan al uso general, como por
ejemplo9 el verbo escaquearse, proveniente de las jergas militares, que ha pasado al lenguaje
coloquial con el mismo significado que tenía entre los soldados, esto es, «escabullirse o
zafarse». Esta es una de las razones por las que habría que revisar y actualizar
periódicamente los diccionarios. El propio Gutiérrez Cuadrado10 habla de esta necesidad
constante de revisión en la lexicografía, así por ejemplo, de entre las acepciones que
incluiría en la palabra práctica, cita una que descubrió Franz Rainer: en práctica falta la
acepción equivalente a «casi». Y ejemplifica: «La práctica totalidad asistió a la reunión».
7
Ejemplo de Pedro Álvarez de Miranda, tomado al dictado de conferencia Panorama histórico del léxico
español, impartida en la Biblioteca del Departamento de Iberística de la Univesità degli Studi di Milano
(Milán 27/03/2006).
8 Juan Gutiérrez Cuadrado (dir.), Diccionario Salamanca de la Lengua Española, Santillama, Madrid, 1996,
p. 853.
9 Ejemplo de Pedro Álvarez de Miranda, tomado al dictado de conferencia Panorama histórico del léxico
español, impartida en la Univesità degli Studi (Milano, 27/03/2006).
10 Juan Gutiérrez Cuadrado, El «Diccionario de Salamanca» de Santillana, cit., p. 132.
Enthymema, V 2011, p. 163
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
2.3. Evaluación formal
En la página 2 del Salamanca se detallan todos los elementos paratextuales de rigor:
autores del proyecto (Juan Gutiérrez Cuadrado y José Antonio Pascual Rodríguez),
director del proyecto (Juan Gutiérrez Cuadrado), equipo de redacción, equipo editorial,
colaboradores, diseño de cubierta, editorial (Santillana), coeditor (Universidad de
Salamanca), ISBN, imprenta y lugar de impresión, etc. La fecha de publicación (1996)
nos obligará a tener en cuenta varios elementos: que en la nomenclatura inevitablemente
algunos lemas se habrán obsolecido y que hace veinte años no se usaba Internet con la
misma fluidez que hoy.
En la página 3 empieza una introducción de diez páginas, seguida de otras tres con la
lista de las abreviaturas usadas, todas ellas (las de introducción y las de abreviaturas)
numeradas con cifras romanas, es decir, de modo diferente a las del resto del diccionario.
La introducción consta de los siguientes apartados:
El nacimiento de este diccionario
I. OBJETO Y CONTENIDO DEL DICCIONARIO SALAMANCA
¿Qué busca este diccionario?
¿Qué encontrar en este diccionario?
II. CÓMO USAR ESTE DICCIONARIO
Búsqueda de palabras
La información morfológica
La información sintáctica
III. MARCAS
Términos de especialidad o tecnicismos
El uso y el registro
Las marcas geográficas
La pragmática
IV. DEFINICIONES
Verbos
Adjetivos
Lemas gramaticales
V. EJEMPLOS
VII. FRASES Y LOCUCIONES
Locuciones de acepción
Locuciones de lema
VIII. APÉNDICE
Comentaremos brevemente algunos aspectos de la introducción firmada por
Gutiérrez Cuadrado, director y corresponsable junto a José Antonio Pascual del
diccionario del que nos estamos ocupando, pues es en la introducción y los preliminares
Enthymema, V 2011, p. 164
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
donde se espera que esté explícito el código de criterios autoimpuestos para la
normalización de la obra.
En el apartado denominado «¿Qué encontrar en el diccionario?» de la Introducción11
descubrimos indicaciones macroestructurales o relativas a la porción de léxico que tiene
cabida en la obra, ya que solo los diccionarios históricos pretenden recoger todo el léxico
de una lengua y no es este el caso. Se nos especifica en dicho apartado que la obra
contiene «palabras generales del léxico actual del español, sin arcaísmos, ni dialectalismos» y
además, que el usuario encontrará: «los hispanoamericanismos más generales, exceptuando
los específicos de la flora y la fauna; los neologismos actuales más frecuentes […]; las
abreviaturas y siglas más comunes de la prensa española contemporánea»12. Estas
indicaciones van mezcladas con otras sobre microestructura, ya que se nos da cuenta en
el mismo párrafo de que el diccionario contiene también una serie de palabras,
abreviaturas, unidades fraseológicas y otros elementos que localizamos dentro de los
diversos artículos, como:
[…] un conjunto de sinónimos y antónimos de acepción, seleccionados para evitar
errores en su uso; numerosas locuciones y frases hechas; los refranes más
utilizados en la lengua actual; muchos ejemplos […]; un conjunto de marcas […];
numerosas observaciones morfológicas que resuelven dudas de uso; un conjunto
estructurado de informaciones sintácticas que ayudan en muchos casos a construir
frases sin errores; un sistema de definición en los verbos y adjetivos que facilita
notablemente la incorporación activa de los términos definidos al léxico del
usuario; una gramática casuística de las categorías gramaticales cerradas […]; un
apéndice con verbos irregulares del español; observaciones esquemáticas sobre los
principales prefijos y sufijos tradicionales.13
Además de la anterior descripción que encontramos en la introducción firmada por el
director del proyecto, en la cubierta que cierra el diccionario se nos dice que el Diccionario
Salamanca consta de:
Más de 85.000 definiciones
Más de 10.00 locuciones
Más de 60.000 ejemplos
Sinónimos con indicación de registro
Incluye los americanismos más frecuentes de la lengua usual
Con los neologismos de más reciente creación
Amplia información gramatical
Indicación sistemática y matizada de registro
Abundantes marcas de uso, con indicadores de construcción
Apéndices con las conjugaciones de todos los verbos irregulares
Gutiérrez afirma en la introducción y en varios trabajos posteriores14 que los
hispanoamericanismos incluidos son siempre urbanos, habiéndose eliminado todos los de
flora y fauna anticuados que en RAE aparecían sin ejemplificación. Quedan, pues,
11
Juan Gutiérrez Cuadrado (dir.), Diccionario Salamanca de la Lengua Española, cit. p. V.
Ibidem.
13 Ivi, p. VI.
14 Juan Gutiérrez Cuadrado (dir.), El Diccionario de Salamanca de la Lengua Española, cit., p. 125.
12
Enthymema, V 2011, p. 165
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
excluidos dialectalismos y arcaísmos y se incluyen las palabras del léxico al uso en 1996,
es decir, como ya se ha indicado, los neologismos más frecuentes en el momento de su
elaboración.
¿Volvería a seleccionar el léxico que seleccionamos hace algunos años? La idea
general para elegir el corpus del SALAMANCA me parece correcta: reunir el
léxico contemporáneo, despojado de arcaísmos y regionalismos, que refleje, sobre
todo, los diferentes niveles lingüísticos del habla urbana, en primer lugar española
pero también hispanoamericana. […] Hace dos años o así, los periódicos
españoles anunciaban la publicación para el siglo que se avecinaba de la nueva
edición del Diccionario Académico. Algunos ofrecían una lista de palabras que la
Academia estaba dispuesta a admitir. A ojo de buen cubero calculé que más del
ochenta por ciento ya estaban en el SALAMANCA. No se trataba de ningún
milagro. El SALAMANCA, de acuerdo con las corrientes lexicográficas europeas,
consideraba sencillamente que la nomenclatura debía ser contemporánea15.
Algunas de las abreviaturas, así como algunos de los acrónimos y de las siglas de la
nomenclatura de este diccionario serían hoy obsolescentes si no completamente
obsoletas: PTA, CEE (no en su acepción de Conferencia Episcopal Española, sino en la
de Comunidad Económica Europea, hoy UE).
No hay en la obra ilustraciones, ni tablas. Los apéndices finales están exclusivamente
dedicados a conjugación de verbos.
No se menciona que para la elaboración se haya consultado corpus alguno, aunque se
nos indica que se han consultado obras lexicográficas. Por ejemplo en el apartado
denominado «Las marcas geográficas»16 se lee:
A veces se alude de una manera imprecisa a una región hispanoamericana, bien
por tradición o porque los datos de que se disponen son imprecisos. El hecho de
que se marquen varios países no significa que no puedan aparecer en otros
también no señalados. Se han utilizado los diccionarios disponibles, sobre todo los
de G. Haensch, el de Venezuela y la propia información de los corresponsales de
la editorial Santillana.
Asimismo, en el apartado «EJEMPLOS», Gutiérrez escribe: «En la mayoría de los
neologismos están seleccionados de periódicos y revistas. En los demás casos, un
porcentaje elevado está construido especialmente para el diccionario»17
2.3.2. Análisis de la microestructura
2.3.2.1. El lema y la información
La entrada o artículo consta de dos partes fundamentalmente: el lema o llave de acceso
por la que llegamos a la segunda o información propiamente dicha. Veamos primero
algunas cuestiones sobre la lematización del Diccionario Salamanca para pasar después a
analizar los contenidos de la información, deteniéndonos más en los gramaticales y
15
Juan Gutiérrez Cuadrado (dir.), El Diccionario de Salamanca de la Lengua Española, cit., p. 124.
Ivi, p. X.
17 Ivi, p. VII.
16
Enthymema, V 2011, p. 166
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
semánticos de las definiciones propiamente dichas que en aspectos fónicos, gráficos,
etimológicos de esa información global a la que llegamos a través del lema.
Desde el punto de vista tipográfico, vemos que los lemas están en negrita, con el
mismo tipo de letra pero de cuerpo ligeramente mayor y sangrados unos dos milímetros
hacia la izquierda respecto al resto de la información de la entrada. Por lo demás, la
lematización sigue los criterios formales más usados: si se trata de una clase de palabras
sometida a variabilidad de género y número (sustantivos, adjetivos, pronombres) se
lematiza en masculino singular, si sólo tienen variación de plural, va en singular, si la
palabra carece de singular va en plural; si es un verbo, en infinitivo, etc. Es de señalar que
algunos diccionarios para estudiantes no siguen estos criterios al pie de la letra por dar
una ayuda a quienes desconocen completamente la lengua española, así por ejemplo, la
palabra fue o fui quedan lematizadas cada una con su entrada a parte por considerarse que
el estudiante extranjero puede tener dificultad a la hora de encontrarla si no sabe que se
trata del verbo ir o ser.
Los nombres heterónimos (caballo, yegua) así como los referidos a personas o animales
cuya variación de género no se realiza añadiendo una –a, llevan entradas diversas, aunque
en la masculina ya se remite a la femenina: poeta, poetisa; héroe, heroína, etc.
actor, ra adj. / s.m. y f. 1 DER [Parte] que demanda en un juicio || s.m. 2
(femenino actriz) Hombre que interpreta un papel o personaje en una obra: Empezó
de actor en el teatro y luego se pasó al cine 3 (femenino actriz) Hombre con gran
capacidad de actuar o fingir: No le hagas caso, es un actor perfecto, no le duele nada.
actriz s.f. 1 Mujer que interpreta un papel o personaje en una obra: Es una famosa
actriz. 2 Mujer con capacidad para actuar o fingir: Tengo una nena que es una gran
actriz, no le hagas caso.
Casi como para confirmar que macro y microestructura no tienen sentido ni pueden
existir la una sin la otra, como señaló Manuel Seco en su quinta conferencia del ciclo
impartido en la Fundación Juan March,18 indicaciones referentes a ambas se hallan en el
mismo apartado de la introducción de Gutiérrez Cuadrado. Así, tras hacer explícitas
indicaciones macroestructurales como la intención, el destinatario y el contenido de la
obra en general (qué palabras tienen cabida y cuáles no), en el mismo apartado se da
cuenta de elementos microestructurales (sinónimos, locuciones, refranes, información
morfológica, sintáctica y pragmática sobre los lemas, sistema de definición verbal, etc.) y
se nos explica a continuación cómo buscar las palabras y cómo orientarse dentro de las
información de las entradas. Descubrimos que «los lemas homónimos no se numeran. Se
distinguen por su categoría. Así: tejar s. y tejar v. tr.; especular adj. y v. tr. / intr.» Dentro del
mismo artículo, pues, si dos acepciones son diferentes esencialmente por su categoría, se
señala con dos rayitas verticales que separan las abreviaturas de categoría gramatical.
Cuando se trata de diversas acepciones de una palabra de la misma categoría van en la
misma entrada con números diferentes, por ejemplo nota –escrita, musical, calificación,
etc., cada una con sus marca. Si cambia de género se separa con dos rayitas, por ejemplo:
orden s. m 1 [...] || s. f., por ejemplo:
18 Manuel Seco, El laberinto de las palabras: Introducción a los diccionarios.
http://www.march.es/conferencias/anteriores/index.asp?busqueda_simple=manuel+seco&activador
_busqueda=Buscar Último acceso: 15 de septiembre de 2011.
Enthymema, V 2011, p. 167
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
amante adj. / s.m. y f. 1 (antepuesto / pospuesto) Que ama: Le dedico este libro a mi
amante esposo. Soy un amante de la pintura impresionista. || s.m. / f. 2 Persona que
mantiene una relación sentimental plena con otra fuera del matrimonio: Somos
amantes desde hace tiempo. Es una poetisa excelente y la amante de un pintor de moda
diestro, tra adj. / s.m. y f. 1 Que utiliza preferentemente las extremidades derechas:
Es diestro porque escribe con la mano derecha. Casi todos los jugadores del equipo son diestros. ||
adj. 2 ELEVADO. Que está situado o mira hacia el lado derecho: el ala diestra, la
puerta diestra. 3 (antepuesto / pospuesto) Que tiene habilidad o experiencia para
hacer alguna cosa: un diestro electricista. Es muy diestro arreglando cosas en la casa. Es
diestro con las armas || s.m. TAUROM. Matador de toros: El diestro salió a hombros por
la puerta grande. FR. Y LOC. a ˜ y siniestro A todas partes, indiscriminadamente:
empezó a insultar a la gente a diestro y siniestro. Disparaban a diestro y siniestro
De manera que, como se expone en la explicación de signos y abreviaturas que hay
tras la introducción, diversas acepciones de una palabra (pertenecientes todas a la misma
categoría) son distinguidas por números:
yema s.f. 1 Parte central del huevo de los vertebrados ovíparos que contiene el
embrión: Carlos batió dos claras y dos yemas para hacer una tortilla. 2 Parte inferior de la
punta del dedo, opuesta a la uña: La secretaria teclea las letras de la máquina con las
yemas de los dedos 3 BOT. Brote en forma de botón de donde sale una nueva rama:
El rosal está lleno de yemas. 4 Dulce seco y redondeado que se hace con azúcar y la
parte central del huevo, típico de algunas ciudades españolas: En Ávila son famosas
las yemas de Santa Teresa.
Sin embargo, en la palabra cantar, la lematización por homonimia está incorporada en
dos entradas diferentes: cantar como verbo y la homónima como sustantivo constituyen
dos entradas, cada una con su lema sin llevar número alguno en ápice. Lo mismo sucede
con amanecer que está desglosada en dos entradas: una para el verbo y otra para el
sustantivo. La palabra contra tiene una entrada que engloba sus acepciones como
preposición, sustantivo masculino y sustantivo femenino y otra entrada casi igual –pero
seguida de guion (contra-) para indicar que no es palabra independiente, sino morfo– en la
que se exponen los significados del prefijo.
En la introducción se nos dice que si la palabra tiene varias formas (por ejemplo, espot
/spot) estará lematizada dos veces y puede buscarse por cualquiera de ellas (dentro de la
letra e y dentro de la ese), la entrada menos frecuente remitiría a la más frecuente en la
que aparecen las dos separadas por la conjunción o –excepto para aquellas formas que
solo difieren en el acento (austríaco /austriaco)– sin embargo, si buscamos espot en la letra e
vemos que la palabra sólo está dentro de la ese, en la cual aparece con los dos lemas, el
lema espot con remisión a spot no está en la letra e. La primera es siempre la forma
preferible, según se dice en la introducción.
A la derecha del lema comienza el desarrollo de la información de la entrada o
artículo, con dos partes fundamentales: gramatical (lo que la palabra es) –primer
enunciado– y semántica (lo que la palabra significa) –segundo enunciado. En cuanto a las
informaciones secundarias, del Diccionario Salamanca podemos decir que:
Enthymema, V 2011, p. 168
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
No queda especificada la división silábica.
No hay información etimológica.
No hay indicaciones fonéticas y solo «se indica la pronunciación aproximada más
común del neologismo que no está totalmente integrado en español»19.
Analicemos un primer ejemplo de entrada en el Salamanca para ver cada una de sus
partes:
linde s. m. / f. (preferiblemente en femenino) Límite que separa campos, terrenos,
casa, o cualquier otra propiedad administrativa: Ya se ha marcado la linde oficial entre
los dos pueblos. La vaca atravesó la linde y pasó al campo del vecino
El lema es linde.
El primer enunciado –o «lo que la palabra es»– sería: «sustantivo masculino y
femenino aunque se usa más en femenino» y va enunciado con abreviaturas y un
paréntesis: s.m. / f. (preferiblemente femenino). En este caso, aparte de la mayor
frecuencia de su uso en femenino, no hay más informaciones pertenecientes a el llamado
primer enunciado, como podrían ser indicaciones de uso limitado, restringido, etc., que
se dan a través de las marcas (lit., vulg., bot., etc.) El primer enunciado se distingue del
segundo en que el código del diccionario se autoimpone que el primero sea indicado con
abreviaturas en cursiva, aunque como vemos la parte de él que está dentro del paréntesis
no lo está, sin que ello parezca inducir a confusión. Hemos de decir que la experiencia
nos indica que esto no siempre es así: Maria Vittoria Calvi20 recuerda la corrección en
traducciones de estudiantes italianos en la que, por no tener familiaridad con el uso del
diccionario, el aprendiente ha traducido la palabra italiana pini [pinos] por botes al haber
pensado que la marca bot era ya parte del segundo enunciado. Dentro de toda la
información perteneciente al primer enunciado, una de las marcas más claramente
añadidas como por deferencia a los estudiantes extranjeros en este diccionario es la de
contable /no contable, siendo la de no contable la que se marca. Ningún nativo la necesitaría,
sin embargo esa marca ayudará enormemente al estudiante extranjero a no cometer
errores debidos a la diversa compatibilidad combinatoria, por ejemplo, incompatibilidad
de los nombres no contables con numerales cardinales: *ha comprado dos heroínas (en el
sentido de sustancia, no en el de mujer que acomete heroicidades); incompatibilidad con
plurales (a no ser que pasen a significar «clase»): *me han regalado dos heroínas; pero sí: han
analizado dos heroínas (clases de) o la incompatibilidad de los nombres contables de
cuantificarse con mucho, bastante, poco, etc. al plural: mucha heroína; *muchas heroínas
(como sustancia); mucha fe; *muchas fes. Sin embargo, estas incompatibilidades tienen sus
limitaciones, hay algunos nombres que pueden usarse a menudo como «clase de»: Hay
mucho tonto / idiota / listo por ahí suelto. ¿Debería un diccionario para estudiantes dar
cuenta, al menos por medio de algún ejemplo, de esta particularidad? Podrá asimismo
evitar errores debidos a las diferencias funcionales, como por ejemplo los derivados de
que solo los nombres no contables pueden funcionar como sujetos de pasivas reflejas: se
encontró heroína; *se encontró alijo; como complementos directos sin actualizadores: quiero
19
Juan Gutiérrez Cuadrado, (dir.), El diccionario Salamanca de la Lengua Española, cit., p. VII.
Comentario tomado al dictado en la conferencia de la profesora Maria Vittoria Calvi dentro del ciclo
de seminarios de los Cursos de verano Intendente Olavide organizados por el profesor Ignacio Ahumada
Lara de la Universidad de Jaén, La Carolina, julio 2006.
20
Enthymema, V 2011, p. 169
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
heroína; *quiero alijo; como sujetos de oraciones de ser + participio: fue encontrada heroína; *fue
encontrado alijo.
El segundo enunciado –o «lo que la palabra significa»– es todo lo demás, con sus
ejemplos. En la entrada del ejemplo anterior (linde) no hay polisemia, el significante tiene
un único significado y la definición cumple con todas las características necesarias. El
segundo enunciado pasaría la prueba de sustitución o ley de sinonimia que es:
[…] norma, universalmente aceptada en lexicografía […] según la cual el
enunciado definitorio, XY, es sinónimo de la palabra-entrada, A, de tal manera
que, en un contexto de habla en que figure el término A, este sería sustituible por
XY sin que ello lleve consigo ninguna alteración del sentido del mensaje21
Veámoslo con la definición de linde:
a) Ya se ha marcado el límite que separa campos, terrenos, casas, o cualquier otra propiedad
administrativa oficial entre los dos pueblos
b) La vaca atravesó el límite que separa campos, terrenos, casas, o cualquier otra propiedad
administrativa y pasó al campo del vecino
Observamos que funciona, quizá habría que cambiar de lugar el adjetivo oficial del
primer ejemplo (ya se ha marcado el límite oficial…), pero la frase es coherente. Nos
detendremos brevemente en esta cuestión que después analizaremos de forma
contrastiva con diversos ejemplos de diferentes categorías en los diccionarios elegidos
para este trabajo. La ley de la sinonimia no es aplicable a todas la categorías, las llamadas
palabras gramaticales (conjunciones, interjecciones, unidades fraseológicas, marcadores,
conectores, etc.) no suelen aceptarla y ante ellas al lexicógrafo no le queda más remedio
que recurrir a una definición impropia (del tipo: expresión que indica o expresa o se usa para,
etc.), lo veremos más adelante.
El director y prologuista del Diccionario Salamanca no utiliza la palabra contorno en la
explicación que nos da sobre los signos usados en las definiciones, a pesar de que no
podía dejar de conocerla pues los trabajos de Manuel Seco que empiezan a proponer un
sistema de aislamiento de los contornos en las definiciones propias (por medio de
corchetes, paréntesis, etc.) arrancan en nuestro país con un artículo suyo de 197922 y ya
Gili Gaya en 1945 y María Moliner en 1966 habían usado tal procedimiento. Sin
embargo, entendemos perfectamente que se refiere a ello cuando leemos:
Verbos. En todas la definiciones aparece marcado el tipo de sujeto con un
paréntesis de ángulo < >. Los complementos se marcan con corchetes [ ]
Adjetivos. Utilizan los corchetes [ ] para marcar el grupo de sustantivos al que
pueden aplicarse. Unas veces se utilizan entre corchetes sustantivos genéricos que
definen el conjunto al que se puede aplicar el adjetivo. Así: [plata] [persona]. En
otros casos aparecen entre corchetes uno o varios sustantivos que sirven de
ejemplo de todo el grupo. No es raro tampoco […] que entre paréntesis aparezcan
los únicos sustantivos que acompañan a un adjetivo determinado.23
21
Manuel Seco, Estudios de lexicografía española, 2ª ed. corregida y aumentada, Gredos, Madrid, 2003, p.
48.
22 Ivi, p. 47.
23 Juan Gutiérrez Cuadrado (dir), Diccionario Salamanca de la Lengua Española, cit., p. VII.
Enthymema, V 2011, p. 170
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
De esta manera, por lo que respecta a verbos y adjetivos, cuando el contorno es
sujeto del verbo definido aparece entre <> y cuando se trata de definir adjetivos, los
sustantivos calificados, modificados, cuantificados, etc. van entre corchetes; a diferencia
del DUE en este diccionario solo se indican los contornos del verbo cuando son
complementos directos, no los demás (indirecto, circunstancial); una palabra como
humedecer llevaría entre corchetes el complemento y entre paréntesis ángulo el sujeto:
humedecer v tr 1 Mojar <una persona o una cosa> [una cosa] ligeramente:
humedeció los labios del herido que pedía insistentemente agua || v prnl 2 Mojarse <una
cosa> ligeramente: las calles se humedecieron al atardecer ⇒ 5
⇒ 5 es una remisión que introduce la indicación del número del modelo de
conjugación de los verbos irregulares, que se corresponde con el que aparece en el
apéndice.
En los verbos pronominales el sujeto y el complemento directo sería el mismo. Según
la definición anterior, una persona no podría humedecerse visto que sólo dice <una
cosa> y no <una persona>, lo cual no parece cierto. Tampoco DEA contempla esa
posibilidad, pues en la acepción pronominal solo da el contorno de [algo] no de [alguien]:
humedecer (conjug 11) tr Hacer que [algo (cd)] pase a estar húmedo [1]. | Economía
225: Si alguna parte se ha secado o se le hizo una arruga al planchar, se
humedecerá con un paño limpio para poder plancharlo de nuevo. b) pr Pasar
[algo] a estar húmedo | Laforet Mujer 330: sintió humedecérsele los ojos, inesperadamente.
Vemos en este ejemplo tomado de CREA (cuyo contexto sería una narración mítica
que habla de la creación del hombre) que sí que sería posible, el hombre se humedece él
solo:
Entonces fue la creación y la formación. De tierra, de lodo hicieron la carne
(del hombre). Pero vieron que no estaba bien, porque se deshacía, estaba blando,
no tenía movimiento, no tenía fuerza, se caía, estaba aguado, no movía la cabeza,
la cara se le iba para un lado, tenía un cuello muy grande, no podía ver para
atrás. Al principio hablaba, pero no tenía entendimiento. Rápidamente
humedeció
se
dentro del agua y no se pudo sostener.
El ejemplo de humedecer no tiene más que una acepción como transitivo y otra como
pronominal, pero pensemos en un verbo más polisémico, incluso «desemantizado», de
los que algunos gramáticos llaman verbos soporte por actualizar una enorme cantidad de
sustantivos predicativos, servir de base a perífrasis verbales, etc. Veamos, sin los
ejemplos, el impresionante artículo que presenta el DEA para el verbo echar:
Echar A tr a normal 1 Hacer salir [a alguien o algo (cd) de un sitio] Tb sin compl
por consabido […] b) Hacer que [alguien (cd)] deje de realizar un trabajo […]
2
Despedir de sí [algo] […] b) (pop) parir [una hembra] […]
3
Producir o empezar a tener [un organismo (suj) algo (cd) que forma o
pasa a formar parte de su naturaleza] […] b) (col) Pasar a tener […]
Enthymema, V 2011, p. 171
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
4
Hacer que [alguien o algo (cd) vaya [a alguna parte] […] b) Tirar o
lanzar [algo a alguien a un lugar (ci o compl adv)] […] c) Inclinar […]
5
Poner [algo en un lugar (compl adv)] o hacer que pase a estar [en él compl
adv)] b) (Naipes) Poner [una carta] sobre la mesa […] c) Dejar o poner [algo en u
sitio]
6
Poner [una cosa a alguien o algo], o hacer que pase a tener[la] […] b)
Poner o añadir [algo] […] c) Poner [una cosa a alguien o algo] para que ejerza sus
efectos [sobre ellos (ci)] […] d) Tb en sent moral […]
7
Poner [algo] al alcance [de alguien (ci)] para que se lo coma o beba […]
b) Dar [alimento a los animales] […]
8
Poner [la hembra (cd)] al alcance [del macho (ci)] para que la fecunde
[…] b) Poner [un animal macho (cd)] con una o más hembras para que las fecunde
[…]
9
(col) Poner [algo o a alguien a una persona (ci)] para que se enfrente
con ellos […]
10
Depositar [una carta o algo similar en el buzón (compl A o EN)] […]
11
(pop) Presentar [una solicitud o algo similar] […]
12
Tender o tumbar [a alguien en un sitio] […]
13
Hace que [algo (cd)] recaiga [sobre alguien o algo (ci)] […]
14
(col) Gastar [tiempo o dinero] […] b) Jugar [una cantidad a la lotería u
otro juego de azar] c) Trabajar [durante periodos de tiempo determinados] […] d)
˜la Invertir tiempo […]
15
Seguido de un n de acción, o de n de cosa que la implica, indica que se lleva a cabo
la acción expresada o implicada por esos ns. A veces con un compl de interés […] b) Seguido de
determinados ns que designan cosas que se dicen: Decir […]
16
Cerrar [una llave, una cerradura i algo similar] […]
17
Correr [las cortinas] de modo que queden extendidas […]
18
Bajar [las persianas] […]
19
(pop) Exhibir o presentar [un espectáculo]. Normalmente con sujeto
indeterminado, en 3ª persona plural […]
20
(pop) Calcular hipotéticamente [los años, el peso o el precio de alguien
o algo (ci)] […]
21
Tomar o considerar [algo (cd) de una determinada manera]. Con compls
de modo como A BROMA, A RISA, A JUEGO […]
22
Hacer que [alguien (cd)] se dedique [a algo negativo] Gralm el cd es refl.
Tb fig. […]
23
(raro) ˜ a + infin = PONER A […]
24
˜ abajo. Derribar [algo] Tb fig. […]
25
˜ a perder. Estropear [algo] inutilizando[lo] […] b) pr Estropearse
[una materia, esp. un alimento] […]
26
˜ a perder. Enfermar o dañar [una parte del cuerpo] […] b) pr
Enfermar [alguien o una parte de su cuerpo] […]
27
˜ a perder. Pervertir [a alguien]. A veces con intención ponderativa […] b)
pr Perder [alguien] las buenas cualidades que tenía
28
˜ a rodar. Desbaratar o frustrar […]
29
˜ atrás. Rechazar [un proyecto o idea] […] b) Hacer que [alguien (cd)]
desista en su propósito […]
Enthymema, V 2011, p. 172
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
30
˜ de menos (o (reg) a faltar). Notar la falta [de alguien o algo (cd)],
frec. con sentimiento […] b) ˜ de más (col, humorist) […] Notar que [alguien o
algo (cd)] sobra […]
31
˜ de ver. Observar o advertir […]
32
˜ para atrás. Resultar repulsivo [a alguien (cd)] Gralm abs. […]
33
˜ por delante. Hacer que [alguien (cd)] actúe en primer lugar para
facilitar la acción posterior de otro […]
34
Forma numerosas locs: ˜ A PIQUE, ˜ A UN LADO, ˜ DE COMER
APARTE, ˜ EL GUANTE, ˜ LAS CAMPANAS AL VUELO, ˜ LAS CARTAS, ˜
MANO, ˜ TIERRA, ˜ POR TIERRA, etc.
35
pr 35 ˜selas. (col) Presumir [de algo] Tb fig. […]
36
Llegar a tener [un novio o un amigo] […] b) En constr exclam se usa
referido a perss con las que se tiene cualquier tipo de relación […]
B intr. a normal
37
˜ a + infin PONERSE o EMPEZAR A + infin […]
38
Tomar [una dirección]. Con un compl. de lugar, gralm con POR […]
39
b pr Abalanzarse [sobre alguien o algo (ci o compl. A o SOBRE)] […]
40
Salir de un lugar [a otro] esp. de manera rápida y decidida […]
41
Ponerse [un ave] sobre los huevos […]
42
Clamarse o sosegarse [el viento] […]
43
Bajar [el Sol] o calentar menos […]
44
Llegar [la noche] […]
45
˜se a dormir. (col) Descuidarse de una cosa o desatenderla […]
46
˜se (para) atrás. Retirar lo dicho o renunciar a la actitud que se había
tomado […]
47
˜se detrás [de alguien (compl DE o ci). Comenzar a perseguir[le] […]
48
˜se encima. Llegar [un periodo de tiempo] de manera que resulta
súbita o demasiado rápida. Frec con un compl de interés […] b) Cumplirse [un plazo]
de manera que resulta súbita […]
49
˜se fuera. (col) Desentenderse o desembarazarse de un compromiso
[…]
50
˜se para (a)delante. (col) Decidirse. […]
51
Forma numerosas locs: ˜SE A LA CALLE, ˜SE A LA CARA, ˜SE A UN
LADO, ˜SE AL COLETO, ˜SE AL MONTE, ˜SE EL TIEMPO ENCIMA, ˜SE
UN PEGOTE, etc.
II. Interj. 52 échale. (col) Se usa para ponderar lo que se acaba de decir […]
Si hacemos la prueba de la ley de la sinonimia algunas acepciones podemos
comprobar la utilidad de todo este complejo sistema:
Acepción 1: Se hicieron objeto mutuo de malos tratos, amenazando la madre a la hija con echarla
de casa con su marido.
Si no tuviéramos el contorno entre paréntesis, la sustitución no funcionaría: *Se
hicieron objeto mutuo de malos tratos, amenazando la madre a la hija con hacer salir a alguien o
algo de un sitio de casa…
Al tener claro que el complemento directo, ya sea de persona o de cosa es parte del
contorno, así como el complemento de lugar, la sustitución sería: Se hicieron objeto de malos
trato, amenazando la madre a la hija con hacerla salir de casa.
Enthymema, V 2011, p. 173
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Acepción 10: Depositar [una carta o algo similar en el buzón (compl A o EN)] […]
Una carta que se echa al buzón en un pueblo de estos a las seis de la tarde no sale hasta las cinco de
la tarde del día siguiente > Una carta que se deposita al buzón en un pueblo de estos a las seis de la
tarde no sale hasta las cinco de la tarde del día siguiente
Cuando salgas échame esa carta > cuando salgas deposítame esa carta
Acepción 11: (pop) Presentar [una solicitud o algo similar] […]
De joven fue muy amigo de mi abuelo Manuel, estuvo a punto de echar también los papeles para
Guardia de Asalto, como automovilista > De joven fue muy amigo de mi abuelo Manuel, estuvo a
punto de presentar también los papeles para Guardia de Asalto, como automovilista.
Acepción 12: tender o tumbar [a alguien en un sitio] […] frec el cd es refl […]
Sube un rato a echarte. Te conviene reposar después de las comidas > Sube un rato a tenderte o
tumbarte. Te conviene reposar después de las comidas.
Acepción 13: hace que [algo (cd)] recaiga [sobre alguien o algo (ci)] […]
No sería difícil echar la culpa a un cazador furtivo. > No sería difícil hacer que la culpa recayera
sobre un cazador furtivo.
El sistema presenta su complejidad pues en DEA, el aislamiento de los contornos (es
decir, de esos elementos que no deben aparecer en una definición propia que se precie si
no es «envueltos en una burbuja» –constituida por corchetes, paréntesis, etc.– que los
distinga) es extendido más allá de los complementos directos y sujetos: un complemento
de lugar (acepción 38: del lema echar), un complemento indirecto (segundo corchete de la
acepción 7 del mismo ejemplo), etc. Por experiencia sabemos que resulta un tanto
abrumador para los estudiantes extranjeros de ELE, tal vez porque generalmente no
todos proceden de un tipo de escuela cuya oferta formativa les haya dado un bagaje
metalingüístico, al menos en Italia, solo a los estudiantes que realizan estudios en el
llamado liceo classico se les ha familiarizado con el análisis sintáctico y no todos los
estudiantes que se inscriben a un curso universitario de lengua española tienen una idea
clara de qué es un acusativo, un pronombre, una preposición, un complemento del
nombre, un dativo, etc., o por la diversa denominación de tales categorías entre las
tradiciones lingüísticas española e italiana (por ejemplo, lo que en la escuela española se
llamaba complemento indirecto suele corresponder a un complemento di termine, pero no
siempre, o a un dativo, término conocido solo por unos pocos alumnos que han
estudiado latín). Por otra parte, algunos ejemplos, al ser tomados de una lengua literaria,
no son demasiado transparentes. No parece claro a primera vista por qué no aparecen
los contornos señalados cuando constituyen el sujeto del verbo, o aparecen unas veces sí
(acepción 27b o 41) y otras no (acepciones de 3). El Diccionario Salamanca presenta menor
complejidad en este sentido, aunque pueda resultar menos preciso.
2.3.2.2. Las marcas pragmáticas del Diccionario Salamanca
Información interesante perteneciente al primer enunciado –y por tanto antepuesta a
cada acepción y distinguida gráficamente de esta– es la denominada «información
pragmática» cuyas marcas (amenaza, ánimo, despedida, humorístico, intensificador, negación,
presentación, sorpresa, afectivo, anticipador narrativo, disgusto y enfado, infantil, ironía, petición,
Enthymema, V 2011, p. 174
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
resumidor final, tratamiento, afirmación, contestación a presentación, eufemismo, insulto, llamada de
atención, peyorativo, saludo) intentan, según Gutiérrez, «señalar, aunque no por completo, las
posibilidades de uso en ciertas circunstancias de algunas expresiones y términos». En su
opinión,24 El Diccionario Salamanca pretende ser «activo, pues es fundamental que el
alumno vaya haciendo su propio diccionario», el diccionario estaría al lexicón mental
como el mapa de carreteras al conocimiento que alguien posee de un territorio: debe
servir de guía. Dado que almacenamos las unidades en nuestro lexicón en forma de
redes, parece lógico que también esa guía que es todo diccionario proporcione
información organizada en tramas, de modo que aunque la macroestructura esté
dispuesta alfabéticamente, en la microestructura se pueden mostrar mallas de remisiones
que conformen una suerte de mapa cognitivo para permitir al usuario, especialmente si
se trata de un estudiante extranjero, encontrar la colocación correcta, la preposición de
régimen adecuada, etc.
Son muy interesantes, desde nuestro punto de vista, algunas de esas marcas
pragmáticas: las hay de gran transparencia semántica como en la marcación clásica
(humorístico, afectivo, amenaza); las hay que fueron novedosas en su momento (contestación a
presentación) sobre todo dentro de lo que hoy llamaríamos marcación discursiva (resumidor
final, anticipador narrativo, intensificador, etc.). Los estudios sobre este tipo de partículas se
han desarrollado considerablemente en los últimos veinte años25 hoy contamos con una
enorme variedad de etiquetas para ellas: modalizador discursivo (como por ejemplo: a
decir verdad), intensificador discursivo (desde luego), atenuador de responsabilidad (por lo
visto), formulador, reformulador (es decir), conector argumentativo (sin embargo),
focalizador discursivo (ni siquiera), focalizador de la alteridad (mira, oye), focalizador fático
(¿me entiendes?), etc. Parece claro que toda esa terminología confundiría al usuario no
especializado: resulta mucho más opaco el impresionante sintagma focalizador de la
alteridad que el de llamada de atención o contestación a saludo. A alguien podrían parecerle
innecesarias, sin embargo para el estudiante extranjero resultan de enorme utilidad, es
más, creemos que incluso habría que incluir otras, aunque, eso sí, simplificando al
máximo la terminología. Por ejemplo en el Diccionario Salamanca tenemos lematizados:
encantar, encantador, encantado y la entrada completa de este ultimo en la edición de 1996 es
la que sigue:
encantado, -da adj. 1 (estar) Que siente mucha satisfacción: Está encantada con
su coche. Estoy encantado de haberla conocido. 2 (estar) Que está sometido a poderes
mágicos: castillo encantado. El príncipe estaba encantado por una bruja mala. El bosque
encantado atrapaba a todos los niños que estaban en él.
Notemos dos rasgos propios del género especial para ELE: cómo se indica si van con
el verbo ser o con el verbo estar poniéndolo entre paréntesis y cómo se subraya en negrita
la preposición con que deben construirse los sintagmas para ayudar al estudiante. Faltaría
en ese artículo elegido como ejemplo, a nuestro juicio, no solo algún caso de su uso
como contestación a saludo en presentación (del tipo: –Le presento al Sr. López –Encantada de
conocerle), sino además la indicación de que tal contestación se usa sólo la primera vez que
a una persona le presentan otra y no, por ejemplo, cuando ambas se vuelven a encontrar
y una de ellas recuerda al interlocutor que ya se conocen (por ejemplo, no sería aceptable
24
Frases tomadas al dictado en el curso de verano citado en la nota 20.
Véase Óscar Loureda Lamas y Esperanza Acín Villa (coords.), Los marcadores del discurso en español,
hoy, Arco Libros, Madrid, 2010.
25
Enthymema, V 2011, p. 175
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
un intercambio del tipo: – Ya nos conocemos, nos presentaron en casa de Ana –*Ah, sí, es cierto,
encantada). Quienes nos ocupamos de ELE estamos acostumbrados a recordar que si no
se especifica esto, puede que usen la fórmula cada vez que se les salude.
También esta categoría está sujeta a variación diacrónica, constantemente el uso
lexicaliza como marcadores discursivos palabras que precedentemente no lo eran. Oigo
cada vez más utilizar la palabra fenomenal no ya en su acepción de adverbio con el
significado de «muy bien», sino como algo similar a «de acuerdo», «vale», por ejemplo, en
una farmacia he sido partícipe de este intercambio:
–Me duele la cabeza
–Fenomenal. Entonces, ¿una caja de aspirinas?
¿Se trata de un uso abusivo del adverbio fenomenal? ¿Acabará entrando tanto en
nuestro modo de hablar que quede lexicalizado y los diccionarios tengan que darle
entrada con la acepción de marcador, por ejemplo con la marca pragmática de
intensificador discursivo y un significado cercano a «de acuerdo», «entendido» o similar?
Dedicaremos una reflexión aparte a este problema de la marcación discursiva cuando
toquemos el de las locuciones.
2.3.2.3 El problema de la fraseología: locuciones
Además de las tradicionales clases de palabras entre las que se distribuye la
información relativa al funcionamiento de una palabra, pueden estas pertenecer a una
unidad superior constituyendo combinaciones estables (locuciones, refranes, marcadores
discursivos, fórmulas oracionales, etc.). Aunque sobre este tema haya aún mucho que
decir (véase la síntesis de teorías al respecto en García-Page 2008) y el acuerdo entre
lingüistas y fraseólogos actualmente diste de ser completo –la cuestión no parece tener
visos de poder quedar resuelta en breve–, podemos establecer que al menos en el caso de
las locuciones, la mayor parte de ellas pueden, por su funcionamiento, equiparase a las
categorías tradicionales de clases de palabras: una locución adjetiva (de armas tomar; de
cuidado) sería equivalente a un adjetivo (verbigracia: valiente, resolutivo, arriesgado); una
locución verbal (echar a perder; mandar al garete) sería equivalente a un verbo (arruinar); una
locución adverbial (a escondidas) equivaldría a un adverbio (subrepticiamente, solapadamente) y
así sucesivamente aunque no siempre sea fácil esta operación sustitutiva. En DEA, cada
locución se coloca tras la categoría simple a la que equivale, de manera que tras las
acepciones de sustantivo irían las locuciones sustantivas con el significado de esa
acepción, tras las de adjetivo las adjetivas, etc. En la Guía al lector de este diccionario, Seco
nos muestra el sistema de distribución y numeración (cifras árabes separan las acepciones
y cifras romanas las categorías): «Como las locuciones son combinaciones de palabras
dotadas de las mismas funciones sintácticas que las palabras simples […] no formamos
con ellas grupos aparte, sino que las incluimos sin marca especial, en el grupo que lleva la
marca de categoría simple»26 y da estos ejemplos:
gabinete I m 1 Sala […]
2 Oficina […]
26 Manuel Seco, Olimpia Andrés y Gabino Ramos, Diccionario del español actual, 2 vols., Aguilar, Madrid,
1999, cit. p. XIX (y conferencia citada).
Enthymema, V 2011, p. 176
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
3 Equipo ministerial […]
4 (hoy raro) Habitación más pequeña […]
5 (hist) Habitación contigua […]
II loc adj 6 de ˜. [Trabajo] que se realiza dentro de una oficina o despacho. Se
opone a DE CAMPO
En lo referente a la fraseología, es interesante que Salamanca no sigue el criterio de
lematización de la tradición hispánica según el cual, las locuciones se lematizan
alfabéticamente en la entrada de su primera palabra, pero no la que leemos estrictamente
como primera, sino según la siguiente jerarquización: nombre propio, nombre común,
verbo, adjetivo, adverbio, pronombre, con un sistema de flechitas que indican la
remisión al lema. De forma que en el diccionario fraseológico dirigido por Manuel Seco
o en el DEA, la locución soñar con los angelitos estaría dentro de ángel; viva la Pepa no estaría
dentro del lema vivir sino que se crearía el lema Pepa para albergarla; lo mismo sucedería
con tomar las de Villadiego que estaría dentro de Villadiego; a pesar de dentro de pesar; echado
para adelante estaría en echado; hablando del rey de Roma debería estar en Roma, aunque en
Seco está en rey, y así sucesivamente. Si observamos el ejemplo del artículo echar en DEA,
veremos que las acepciones que van de la 24 a la 33 son locuciones en las que el verbo
funciona como transitivo, por tanto van al final del grupo de las acepciones como v tr
(A); en el número 34 se nos remite a muchas otras locuciones que formarían parte de
otros lemas, es decir de la primera «palabra útil» según la mencionada jerarquía: echar a
pique estaría en pique; echar a un lado, en lado; echar el guante, en guante, etc. En el Diccionario
Salamanca, esas remisiones (a guante, a pique, etc.) se señalan con un asterisco junto a la
palabra donde el usuario puede encontrar explicada la locución: ˜ el guante*. ˜ balones*
fuera. ˜leña* al fuego, etc.
En la introducción del Diccionario Salamanca se presentan dos tipos de unidades:
locuciones de acepción (las cuales se dividen a su vez en dos subgrupos según el grado
de idiomaticidad: las más transparentes o menos idiomáticas –como guardia urbano– y las
más opacas o idiomáticas –diente de león; haber gato encerrado) y locuciones de tema, y se nos
indica que se definen y ejemplifican las idiomáticas de acepción y todas las de lema:
Locuciones de acepción.- Las que aparecen dentro de una acepción
numerada. En este caso pueden encontrare dos tipos:
a) las que equivalen semánticamente a la suma de sus dos miembros y no se
definen como, por ejemplo, guardia urbano, pase de modelos o instrucciones de
uso;
b) las que no equivalen a sus miembros y deben definirse. Estas aparecen
numeradas como una acepción, después de las acepciones que no son
locuciones: aparecen, por ejemplo, numeradas como acepción las
locuciones diente de león, oso hormiguero, que no tienen relación ni con el oso
ni con el diente; son definidas porque su significado no es deducible ni de
«diente», ni de «león», ni de «oso».
Locuciones de lema.- Las que aparecen al final del artículo, después de la
última acepción, ordenadas alfabéticamente y bajo el marbete Frases y locuciones:
hacer novillos, partir la cara, estar en buen uso, tener mala uva. Estas frases y locuciones
están siempre definidas, llevan la marca del nivel de uso y van acompañadas al
menos de un ejemplo. Figura además una remisión entre sus componentes.
Enthymema, V 2011, p. 177
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
El problema de la lematización o el de la definición de las unidades fraseológicas en
los diccionarios es muy complejo por ser un segmento extremadamente heterogéneo de
la lengua, escurridizo a clasificaciones y caracterizaciones. Muchos diccionarios, como
DRAE, suelen explicar al final de la entrada, normalmente ordenadas por orden
alfabético no por categorías, lo que se ha dado en llamar unidades o expresiones
pluriverbales y que puede englobar desde colocaciones y compuestos hasta frases
hechas, refranes, marcadores discursivos. Estos últimos merecen, por el dinamismo de
los estudios que se les viene dedicando y por su aparente inasibilidad, una reflexión
aparte.
2.3.2.4. Las fórmulas oracionales y los marcadores discursivos
Hay muchísimas palabras que usamos con un valor supraoracional que está por
encima de la categoría a la que pertenecen y que modifican a todo el discurso: digo; ya te
digo; digo yo; no te digo; lo que yo te diga… Tomemos el ejemplo de la palabra padre: en la
expresión la paliza padre o en la vida padre, adquiere valor de adjetivo; en la expresión de
padre y muy señor mío entra a formar parte de una unidad fraseológica27 (en este caso una
locución adjetiva con valor intensificador); en el sintagma padre político es parte de un
compuesto; en hacer padre puede ser parte de una colocación o de una locución de las de
casilla vacía (hacerme/te/le… padre y encima darme/te/le… las gracias); es parte de una
interjección en ¡su padre!; forma parte de una fórmula oracional en no tener padre ni madre ni
perrito que me/te/le… ladre; hace parte de una locución oracional (aunque para algunos
autores, más bien sería parte de una paremia) en no decir de esa /ese / esta /este agua no beberé
ni ese cura no es mi padre, etc. La mayor parte de los diccionarios ejemplifican esta
polivalencia funcional, incluso con alguna explicación pragmática sobre su uso, pero no
suelen atribuirles una etiqueta (del tipo: locución oracional, conector, fórmula oracional,
etc.), pues no es tarea fácil y además quizá no sea competencia de los lexicógrafos y,
aunque en un artículo lexicográfico cabal se debería decir tanto qué son como qué
significan, la falta de acuerdo absoluto sobre su categorización, su definición y sus límites
dificulta esta labor. Veamos por qué.
La existencia de lo que hoy englobamos dentro de la etiqueta de marcadores del discurso
fue ya intuida por Antonio de Nebrija quien de forma no sistemática advirtió la
existencia de ciertas partículas con funciones que no se ajustaban a las del marco de la
sintaxis oracional, algunos de ellos se llamaron también muletillas por llegar a ser meros
apoyos de la elocución coloquial. Las gramáticas de Gili Gaya y Alcina y Blecua los
llamaron enlaces extraoracionales dada su «ubicación» o «vinculación» a nociones externas a
la predicación que hay que buscar en los márgenes o periferia del la oración, en esa –
también lábil– frontera entre el análisis de la oración y el del texto. Además de lo dicho,
entre sus rasgos principales estarían: su carácter invariable por haber sufrido un proceso
de gramaticalización, su heterogeneidad categorial, su versatilidad distribucional y su
significado de procesamiento (esto es, guiar las inferencias que se realizan en la
comunicación según sus diversas propiedades morfosintácticas, semánticas y
27
Ejemplos, en parte, tomados de la conferencia El segundo nivel: la Microestructura de Manuel Seco,
dentro del citado ciclo El laberinto de las palabras: Introducción a la lexicografía, impartidas en la Fundación
Juan March.
Enthymema, V 2011, p. 178
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
pragmáticas). Sin embargo, dada la heterogeneidad del concepto, hay unidades que no
cumplen todas esas condiciones y dentro de las que sí lo hacen, hay una gradación.
Señalaremos en primer lugar que no hay, por una parte, un acuerdo unánime sobre de
qué ciencia, técnica o tipo de estudios son competencia estas unidades: ya en 2001
Bosque escribió: «en la actualidad, existe un acuerdo tácito de que el estudio de los
marcadores forma parte a la vez de la gramática y del léxico».28 En los últimos veinte
años el debate concerniente al qué y al cómo ha sido afrontado desde una pluralidad
científica y metodológica considerable: Lingüística o Gramática del Texto (tanto
sincrónica como diacrónica), Teoría de la Argumentación, Teoría de la Relevancia,
Análisis de Discurso, Pragmática a secas,29 Sociolingüística (sobre todo variacional) e
incluso Antropología y Lingüística del Corpus, lo cual más que mostrar que las fronteras
de lo que unos autores denominan conexión extraoracional no siempre están claras,
indica en nuestra opinión la necesidad de visiones holísticas que puedan dar cuenta de las
muy diversas caras del mismo prisma y sobre todo señalar las «zonas de transición»,
transiciones entre el habla y el discurso escrito, lo oracional y lo extraoracional, lo
semántico, sintáctico, pragmático, fraseológico: ¿es acaso posible deslindar lo
específicamente pragmático de todo lo demás? No todas las unidades consideradas
marcadores del discurso pueden extrapolarse, sin matices, al marco del texto.
En segundo lugar, no parece posible dominar todo el paradigma de lo marcativo visto
que tiende a considerarse una clase abierta: es notable su heterogénea procedencia, es
decir, las clases de palabras que pueden funcionar como marcadores: conjunciones y
locuciones conjuntivas, adverbios y locuciones adverbiales, interjecciones, vocativos,
sustantivos, y formas verbales –sobre todo imperativos y subjuntivos– gramaticalizados
y/o lexicalizados. En palabras de Martín Zorraquino y Portolés: «pretender una relación
biunívoca entre el concepto de marcador del discurso y una categoría gramatical determinada
es algo así como intentar ajustar el término deíctico a una sola clase de palabras».30
En tercer lugar, tampoco hay acuerdo absoluto sobre denominaciones de clases y
subclases: marcadores, conectores, enlaces, operadores, relacionantes –textuales, conversacionales,
discursivos, extraoracionales o supraoracionales– y también: enfocadores de la alteridad,
reformuladores,
digresores,
comentadores,
ordenadores,
compiladores,
argumentadores,
contraargumentadores, enumeradores, concatenadores.31 Últimamente se viene hablando también
de cameladores (del tipo: Ana, tú que haces esto tan bien, ¿me ayudarías?). En definitiva, no es
simple llegar a un consenso entre otras cosas porque la frontera entre conexión
extraoracional y conexión pragmática no siempre está clara, especialmente en los casos
en que la función de los marcadores supera el ámbito estrictamente gramatical, como en
el caso de los marcadores conversacionales.32
28
Ignacio Bosque, Bases para un diccionario de restricciones léxicas , «Moenia», n.7, 2001, pp. 12-13.
Desde el advenimiento de la pragmática los solemos situar a los marcadores del discurso en ese
ámbito pero tampoco parece existir acuerdo sobre la escuela pragmática de referencia: Sperber y
Wilson (Teoría de la Relevancia), Ducrot y Amscombre (teoría de la Argumentación, los topoi, etc.)
30 Ignacio Bosque y Violeta Demonte (eds.), Gramática descriptiva de la lengua, 3 vols. Espasa, Madrid,
1999, p. 4056.
31 Véase María Antonia Martín Zorraquino y José Portolés Lázaro, Los marcadores del discurso en Ignacio
Bosque y Violeta Demonte (coords.), op. cit., p. 4057, nota 6 y también la introducción de Óscar
Loureda Lamas en Óscar Loureda Lamas y Esperanza Acín Villa (coords.), Los estudios sobre marcadores
del discurso en español, hoy, cit.
32 Salvador Pons Bordería y Antonio Briz Gómez, Unidades, marcadores y posición en Óscar Loureda
Lamas y Esperanza Acín Villa (coords.), cit., p. 33. Últimamente se está consolidando como sinónimo
29
Enthymema, V 2011, p. 179
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Además, ciertos marcadores con determinados significados pueden actualizar sentidos
diversos, es lo que se ha llamado «efecto de sentido», esto es, la diversidad de valores
semánticos que adquieren las unidades lingüísticas en su uso discursivo.33 En la oralidad,
basta una modificación prosódica y/o kinésica para que el mismo marcador (bueno, pues,
claro, hombre, vamos) actualice sentidos bien diversos.
Por último, no todos los estudiosos señalan las mismas características como
fundamentales y definitorias; viene siendo patente el esfuerzo de los investigadores por
distinguir el comportamiento de los marcadores del de otras unidades (especialmente
conjunciones) hasta el punto de que el debate sobre si deben o no considerarse una
nueva clase de palabras o una nueva categoría gramatical o si se trata de una categoría
pragmática inclasificable onomasiológicamente es probablemente una de las cuestiones
más controvertidas de la investigación lingüística actual.
En resumen, desde las definiciones estrechas de la noción de marcador en las que éste
era término coincidente o reemplazable con conector (por lo que sólo se agrupaban bajo tal
nombre a las unidades engarzadoras de partes discursivas) se ha venido pasando a la
inclusión de otras unidades que señalan la implicación del enunciador en el enunciado, y
que por ello entran en el terreno de la modalización (evidenciadores, topicalizadores,
operadores argumentativos, etc.) como muchísimas unidades fraseológicas que, teniendo
la misma función, no se consideran marcadores quizá porque la idiomaticidad y
connotación expresiva son tan potentes que la mayor parte de los estudiosos, aun
comprendiendo que están en una zona fronteriza acaban decantándolas hacia la parte de
los marcadores propiamente dichos (así, por ejemplo, hay consenso en que ¡ojo! es un
marcador fático de contacto, mientras que nunca aparece en esa clase sus equivalentes
fraseológicos, como podrían ser: ¡ojo al parche! ¡ojo al Cristo [que es de plata/palo]!, etc.).
Como indica Pons, «una clase ecléctica como es la de los marcadores discursivos requiere
un enfoque ecléctico para su estudio».34 Como vemos, desde el punto de vista de la
función pragmática, locuciones y otras categorías se convierten en marcadores
discursivos de diversos tipos. Desde el punto de vista de la lexicografía práctica, tal vez la
categorización precisa sea menos importante que las indicaciones que permitan usar la
unidad adecuadamente: no parece tan necesario decir que una unidad sea un camelador,
como indicar que »se usa para atenuar la petición de un favor, convencer adulando, engañar
halagado» o algo así. ¿Cómo resuelven los diccionarios que hemos analizado esta cuestión?
Lo veremos en el estudio comparativo.
de marcador del discurso el sintagma partícula discursiva a pesar de las evocaciones que arrastra desde la
gramática tradicional (parecen denotar con el una clase de palabras formalmente dada) «ya que integra
a todas aquellas unidades invariables que por su significado guía el procesamiento del discurso,
independientemente del ámbito funcional en el que operen», Óscar Loureda Lamas y Esperanza Acín
Villa (coords.), Los estudios sobre marcadores del discurso en español, hoy, cit., p. 20), lo encontramos en el
Diccionario de partículas discursivas del español (Briz, Pons y Portolés) cuyo metalenguaje pretende ser
accesible a un gran público, prurito que parece ser el que lleva a Juan Carlos Barbero, Felisa Bermejo,
Félix San Vicente a llamar segnali discorsivi a una selección de los mismos en el capítulo que se le dedica
al tema de su gramática contrastiva (Contrastiva. Grammatica della lingua spagnola, Clueb, Bologna, 2010,
pp. 391-418).
33 Martín Zorraquino, Maria Antonia y José Portolés Lázaro, Los marcadroes del discurso, en Ignacio
Bosque y Violeta Demonte (coords.) Gramática descriptiva de la lengua española, cit., pp. 4078-4079.
34 Lola Pons Rodríguez, Los marcadores del discurso en la historia del español, en Loureda Lamas, Óscar y
Esperanza Acín Villa (coords.), cit. pp. 523-616.
Enthymema, V 2011, p. 180
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
3. Estudio comparativo
En este capítulo analizaremos palabras de diferentes categorías léxicas: cuatro
sustantivos (cábala, caballero, caolín, capo), dos adjetivos (capaz, capcioso), una palabra que
puede funcionar como sustantivo y como adjetivo (capuchino), dos verbos transitivos, dos
verbos intransitivos (cabalgar), un verbo que puede funcionar como transitivo y como
intransitivo (cantar), dos adverbios (casi, ya), dos interjecciones (¡ca! ¡caramba!), una
conjunción (y) y una preposición (tras).
3.1. Sustantivos
3.1.1. cábala
DRAE
cábala. (Del hebr. qabbãlãh, escrituras posteriores a las
mosaicas). f. Conjetura, suposición. U. m. en pl. || 2. En la
tradición judía, sistema de interpretación mística y alegórica del
Antiguo Testamento. || 3. Conjunto de doctrinas teosóficas
basadas en la Sagrada Escritura, que a través del método
esotérico de interpretación y transmitidas por vía de iniciación,
pretendía revelar a los iniciados doctrinas ocultas acerca de
Dios y del mundo. || 4. Cálculo supersticioso para adivinar
algo. || 5. coloq. Intriga, maquinación.
Salamanca
cábala s. f. 1 Conjunto de doctrinas y teorías filosóficas y
religiosas que surgieron en el judaísmo para interpretar mística
y alegóricamente el Antiguo Testamento: Algunos intelectuales
europeos sentían gran curiosidad por las doctrinas de la cábala. 2
Conjunto de doctrinas teosóficas o prácticas adivinatorias en
las que se mezclaban la superstición con los métodos
interpretativos de la Biblia que se transmitían entre los
iniciados: Los libros sobre la cábala del siglo XVII estaban condenados
por la Iglesia católica. FR. Y LOC. hacer cábalas Hacer <una
persona> suposiciones o conjeturas: La dueña se puso a hacer
cábalas sobre cuánto le costaría la reforma de la vivienda.
DUE
cábala f. 1 Conjetura o suposición sobre hechos
presentes. | CPuche Paralelo 255: Toda clase de cábalas,
algunas vergonzosas, cayeron sobre el cadáver que apareció
colgando de la misma reja de su celda. Arce Testamento 55: Me
imaginaba a Ángeles con su madre y Moncho, los tres solos en
el zaguán, comentando mi desaparición y haciendo cábalas.
2. Cálculo o previsión de hechos futuros. | CNavarro Perros
181: Andrés estuvo largo rato mirándome, sin dejar de hacer
cábalas sobre qué podría decirle cuando lo despertara.
Enthymema, V 2011, p. 181
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
3. Corriente mística hebrea, nacida en la Edad Media, en la
que se cultiva un arte de adivinación basada en la interpretación
de determinadas figuras, letras y números. | Carriazo Ya
11.3.78, 14: Salomón ha-Leví nació en Burgos el año 1345 y allí
murió noventa más tarde: de 1345 a 1435. Cifras apetitosas
para la cábala. Cossio Confesiones 24: El «Sésamo ábrete» lo
pronunciaba con acento de cábala, de un modo tan sutil y
penetrante que yo pensaba que con aquellas palabras, dichas
así, se abriría a nuestra curiosidad cualquier montaña.
DRAE: lo primero que notamos, tras el lema, es que solo DRAE da la etimología. Las
opiniones de Seco a este respecto se orientan a considerar inoperante, cuando no
contraproducente dar a conocer en un diccionario explícitamente el origen de las
palabras; transcribo de su sexta conferencia: «Diré ahora, para terminar, unas pocas ideas
sobre un elemento habitual en la microestructura de los diccionarios pero que, en
realidad no forma parte sustancial de ella puesto que es su parte más prescindible, en
verdad, puramente ornamental» (conf. cit). Trata a continuación del cratilismo e ilustra
algunas etimologías falsas de Isidoro de Sevilla y Covarrubias, para concluir así:
¿Son realmente necesarias las etimologías en los diccionarios de lenguas? Se suele
alegar que con ellas se entiende mejor la palabra: esto no es cierto, la verdadera
manera de hacer entender el significado de la palabra es dar bien su definición. Un
diccionario que pretenda dar razón de la lengua moderna no necesita mostrar el
origen de las palabras definidas que, a menudo, queda muy lejos de su sentido
actual y, por otra parte, en muchos casos no se conoce; en otros, está mal
adivinado; en otros, es falso. Otra cosa es el caso de los diccionarios históricos
donde sí debe indagarse y presentarse la etimología por ser la cuna real o supuesta
de la voz cuyo entero ciclo vital se trata de exponer.
Si la etimología es, en la microestructura un dato puramente histórico que solo
tiene sentido en un diccionario histórico ¿por qué la incluyen en sus entradas la
mayoría de los diccionarios españoles y de otras lenguas? Por una razón periférica:
porque una de las curiosidades -simple curiosidad– que la gente siente respecto a
las palabras es su origen.35
Confieso encontrarme entre esas personas a las que les encanta descubrir el origen de
las palabras, aun sabiendo que pueda ser algo periférico, anecdótico, e incluso a veces
«poco científico».
Las abreviaturas del DRAE en este artículo: U. m. en pl. quieren decir que se usa más
en plural.
Vemos que la definición es una definición propia y toleraría perfectamente la prueba
de la ley de sinonimia: Esas teorías no pasan de ser cábalas > esas teorías no pasan de ser
conjeturas, suposiciones / un conjunto de doctrinas […] / un sistema de interpretación […] / un
cálculo supersticioso[…] / intrigas, maquinaciones. No hay ejemplos; observamos que los
contornos no están marcados con ningún sistema gráfico especial (paréntesis, corchetes,
etc.) pues la única forma de distinguirlos que usa DRAE es un sistema de fórmulas: dicho
de, etc.; cuando no hay esta posibilidad va en letra redonda como todo lo demás.
35
Manuel Seco, conferencia, cit.
Enthymema, V 2011, p. 182
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
La única marca de esta entrada (coloq.) también va en redonda, la distinguimos de la
definición de la quinta acepción solo por empezar por minúscula y ser una palabra
abreviada.
Esta entrada no contiene ninguna unidad fraseológica.
DUE: el artículo consta de lema e información, la cual a su vez contiene tres
acepciones (la primera corresponde a la primera de DRAE, la segunda a la cuarta y la
tercera a la segunda del diccionario académico), todas dentro de la misma categoría de
nombre femenino señalada con una simple efe en cursiva: f pues las abreviaciones de este
diccionario no suelen llevar el punto. La primera acepción lleva dos ejemplos y la
segunda y tercera uno solo. Después de los ejemplos la siguiente acepción empieza en
otra línea. Entre cada definición y su ejemplo hay una pequeña rayita vertical. Los
ejemplos van precedidos de la abreviatura que nos envía al autor (una sola palabra
compuesta, en este ejemplo, por la inicial del nombre y el apellido completo), al
documento original (en cursiva) y a la página del mismo de la que han sido tomados, no
están en cursiva u otro carácter (por ejemplo donde dice: CPuche Paralelo 255, se refiere
a un ejlempo tomado de la página 255a obra literaria que lleva por título Paralelo de José
Luis Castillo Puche), aun así, para quien no tenga costumbre de usar este diccionario, en
una primera aproximación puede resultar poco evidente la diferencia gráfica entre
ejemplo y definición. Todas las definiciones tolerarían la prueba de la ley de sinonimia en
sus ejemplos: Andrés estuvo un largo rato mirándome, sin dejar de hacer cálculos o previsiones de
hecho futuros sobre qué podría decirle cuando lo despertara.
SALAMANCA: tras el lema, en negrita y sangrado hacia la izquierda respecto al resto,
el primer enunciado de la información (lo que la palabra es, o sea, un sustantivo
femenino) está marcado con la abreviatura en cursiva: s.f. El segundo enunciado consta
de dos acepciones correspondientes a la primera definición de DRAE y tercera de DUE
y a la tercera de DRAE respectivamente. Hay también una colocación (hacer cábalas) en el
apartado FR. Y LOC. que contiene las dos primeras definiciones de DRAE y DUE, es
decir, la de «conjetura o suposición». Este diccionario considera, por tanto, que en esa
acepción la palabra se usa siempre colocada con el verbo hacer: hacer cábalas, algo con lo
que no podemos estar completamente de acuerdo, en el ejemplo que dimos para RAE el
significante lleva el significado de «suposición» y no va colocado con el verbo hacer, sino
que es atributo de ser: Esas teorías no pasan de ser cábalas, si bien podría argüirse que se trata
de un uso figurado.
Las acepciones, que pasarían la prueba de la ley de sinonimia, van separadas por
números, pero cada una continúa la misma línea de la precedente. Tipográficamente se
ve bien la diferencia entre definición y ejemplo pues este está en cursiva.
3.1.2. caballero
DRAE
caballero, ra. (Del lat. caballarĭus).
1. adj. Que cabalga o va a caballo. Caballera en un rocín. Caballero
en una mula.
2. adj. Dicho de una persona: Obstinada, que no se deja
disuadir por ninguna consideración. Caballero EN propósito, EN
empeño, EN porfía, EN opinión.
3. m. Hidalgo de calificada nobleza.
Enthymema, V 2011, p. 183
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
4. m. Hombre que pertenece a una orden de caballería.
5. m. Hombre que se porta con nobleza y generosidad.
6. m. Persona de alguna consideración o de buen porte.
7. m. señor (‖ término de cortesía).
8. m. Baile antiguo español.
9. m. Depósito de tierra sobrante colocado al lado y en lo alto
de un desmonte.
10. m. Mil. Obra de fortificación defensiva, interior y bastante
elevada sobre otras de una plaza, para mejor protegerlas con
sus fuegos o dominarlas si las ocupase el enemigo.
11. m. ant. Dueño de una caballería (‖ porción de tierra
adjudicada a los caballeros que habían contribuido a su
conquista).
12. m. ant. Soldado de a caballo.
caballero andante, o ~ aventurero.
1. m. El que andaba por el mundo buscando aventuras y sirvió
de prototipo de los libros de caballerías.
2. m. coloq. Hidalgo pobre y ocioso que andaba vagando de
una parte a otra.
~ cuantioso.
1. m. Hacendado que en las costas de Andalucía y otras partes
tenía obligación de mantener armas y caballo para salir a la
defensa de la costa cuando atacaban los moros.
~ cubierto.
1. m. Grande de España que, como tal, gozaba del privilegio de
no quitarse el sombrero en presencia del monarca.
caballero de alarde.
1. m. El que tenía obligación de pasar muestra o revista a
caballo.
caballero de conquista.
1. m. Conquistador a quien se repartían las tierras que ganaba.
caballero de cuantía.
1. m. caballero cuantioso.
caballero de espuela dorada.
1. m. El que siendo hidalgo era solemnemente armado
caballero.
caballero de industria, o caballero de la industria.
1. m. Hombre que con apariencia de caballero vive a costa
ajena por medio de la estafa o del engaño.
caballero de la jineta.
1. m. Soldado que montaba a la jineta.
caballero de la sierra.
1. m. caballero de sierra.
caballero del hábito.
1. m. El que lo es de alguna de las órdenes militares.
caballero de mohatra.
1. m. El que aparenta ser caballero no siéndolo.
2. m. caballero de industria.
Enthymema, V 2011, p. 184
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
caballero de premia.
1. m. El que estaba obligado a mantener armas y caballo para ir
a la guerra.
caballero de sierra.
1. m. En algunos pueblos, guarda de a caballo de los montes.
caballero de trinchera.
1. m. Mil. Obras culminantes sobre las demás de ataque a una
plaza, que se construyen a inmediación de las trincheras para
instalar las baterías de brecha.
caballero en plaza.
1. m. El que sin ser profesional rejonea en plaza de toros.
caballero gran cruz.
1. m. gran cruz (‖ dignidad superior en ciertas órdenes
militares o civiles).
~ mesnadero.
1. m. Descendiente de un jefe de mesnada.
caballero novel.
1. m. El que aún no tenía divisa por no haberla ganado con las
armas.
~ pardo.
1. m. El que, no siendo noble, alcanzaba privilegios del rey para
no pechar y gozar las preeminencias de hidalgo.
a caballero.
1. loc. adv. A mayor altura o desde ella.
armar caballero a alguien otro caballero o el rey.
1. loc. verb. Vestirle las armas, para darle entrada en la orden
de la caballería. Hoy se observa y practica con los caballeros
de las órdenes militares y de algunas otras, que son armados
por otro de su orden.
de caballero a caballero.
1. loc. adv. Entre caballeros, a estilo de caballeros.
□ V.
espuela de caballero
maestro de los caballeros
perspectiva caballera
Salamanca
Caballero adj. 1 ELEVADO Que está o va a lomos de una
cabalgadura: El joven caballero en un corcel atravesaba la llanura. La
infanta, caballera en una jaca blanca, presenció el desfile de la compañía
de lanceros reales. El chico no es mal caballero, pero tiene que aprender
todavía mucho de caballos. SIN. jinete || s.m. 2 Hombre que se
comporta con educación y elegancia: Luis es un caballero con todo
el mundo. SIN. señor. 3 Persona adulta de sexo masculino:
servicios de caballeros, peluquería de caballeros, zapatos de caballero. 4
HIST. En la antigüedad y en la edad media, miembro del grupo
social que luchaba en la caballería: Lo han nombrado caballero de
Calatrava. el conde es caballero de Santiago. 6 RESTRINGIDO.
Enthymema, V 2011, p. 185
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Forma de tratamiento de cortesía que equivale a señor: Es
normal que en muchas tiendas y bares un empleado nos diga: «¿Qué desea
caballero?» || 7 ˜ andante Personaje heroico creado por la
literatura medieval, que recorría el mundo a caballo y se
encontraba con muchas aventuras para defender la justicia: Don
Quijote se creyó un caballero andante. FR. Y LOC. armar ˜ Declarar
<el rey u otra persona con poder> caballero a un hombre, en
una ceremonia especial: El rey armó caballeros a varios jóvenes de la
corte. de caballero a ˜ Como lo haría un hombre educado y
elegante. entre caballeros Se usa para señalar que es suficiente
con la palabra de los que interviene en un negocio porque
todos son de fiar: Entre caballeros no es necesario que firmemos ningún
contrato. El inquilino me dijo que bastaba con su palabra, porque entre
caballeros no era necesario más, pero no me ha pagado. espuela* de ˜.
pacto* de / entre caballeros.
DUE
Caballero -ra I adj. 1 Que cabalga [1] Tb. n. | Cela Viaje
andaluz 318: Un mozo caballero en una jaca torda y con la cola
rapada. Ridruejo Castilla 1, 22: No eran navegantes [los
cántabros]. Eran caballeros diestros, y su ocupación principal
fue la guerra de pillaje sobre los llanos de los vacceos. Cela
Pirineo 80: El único hombre capaz de llegar a caballero hasta
estos andurriales fue el viejo y casi mítico Sansa. CBonald
Ágata 108: Cargó Perico Chico con aquella .. porción de la
riqueza y salió una furtiva mañana de Malcorta con rumbo
ignorado, caballero en la vara de un carricoche ruinoso p[e]ro
de tiro alegre.
2 (raro) Obstinado o terco. | Palomino Torremolinos 192: Se la
pide [la bayeta] con malos modos ..: va hacia ella como una
fiera .. Reme llora y dice .. que a ella no la avasalla Amalia. –Ni
que la bayeta fuera una capa de visón. Lo que pasa es que
Amalia es muy caballera, pero yo soy más si hace falta.
3 (Geom) [Perspectiva] que representa de modo convencional
los objetos como si se vieran oblicuamente desde lo alto,
conservando la proporción de las formas y las distancias. |
Marcos-Martínez Matemáticas 93: La primera casa está
representada en perspectiva caballera, en la que dos rectas
paralelas aparecen siempre como para[l]elas. La segunda casa
está en perspectiva normal (tal como se ve), en la que las rectas
paralelas se cortan en un punto.
4 (Geol) [Piedra] de gran tamaño que se sostiene sobre otra por
una base muy estrecha. | Ybarra-Cabetas Ciencias 77: La masa
granítica inatacada queda a veces en equilibrio inestable,
formando las llamadas piedras caballeras, tan frecuentes en los
paisajes graníticos. SYa 18.12.70, 7: A la sombra de una cadena
de cerros que corona una «piedra caballera», todo el horizonte
norte es la inmensa muralla de la cadena central.
Enthymema, V 2011, p. 186
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
5 de ˜. [Palabra] de honor (→ PALABRA). En boca de un
hombre o con referencia a él | Villapún Moral 101: No son
fórmulas juratorias: a) Por mi palabra de caballero. b) Juro por
mi vida. * –¿Es verdad eso que dices? –Palabra de caballero.
6 de, o entre ˜s. [Acuerdo] basado en el honor y no en un
compromiso escrito. | * Hubo un acuerdo entre caballeros
de no difundir la noticia.
II m. 7 Hombre que se comporta con lealtad, nobleza y
cortesía. |
Palomino Torremolinos 49: Esto se lo digo
confidencialmente, don Arturo, por favor, yo sé que es usted
un caballero.
8 Varón, esp. adulto. Usado sobre todo para especificar el destinatario
de un servicio o artículo. Opuesto a SEÑORA. | GPavón Hermanas
11: Manolo, el barbero más antiguo del pueblo .., que a aquella
hora invariablemente colgaba las bacías de latón sobre la puerta
de su «Peluquería de caballeros». Gtelefónica N. 969: Antonio
Alonso. Sastre señora, caballero. b) Señor. Usado como
tratamiento de cortesía dirigido a un desconocido. | Carandell Madrid
54: Se acerca al mostrador y dice: –¿Me da un vaso de agua, por
favor? Y el camarero al darle agua: –¿A ver un lozoya,
caballero.
9 Miembro [de una orden militar o civil]. | Halcón Monólogo
28: Pedro, que nunca pasó de caballero del Santo Selpulcro,
llevaba las cruces de pasadores, en las tarjetas. TCR 11.11.90,
22: Los caballeros calatravos .. conquistaban el castillo de
Salvatierra .. El califa almohade Mahummad ben Ya’qub alNasir .. obligó a los calatravos a rendirse, trasladando los
supervivientes su núcleo vital y la sede maestral al astillo de
Zorita de los Canes, sobre el Tajo. Villapún Iglesia 78: Entre las
Órdenes militares que se fundaron en Jerusalén con motivo de
las Cruzadas tenemos .. La de los Caballeros Teutónicos. Fusi
Franco 141: El papa Pío XII .. le nombró caballero de la Orden
de Cristo, máxima distinción otorgada por el Vaticano. Ya
18.2.75, 41: El ministro de Educación y Ciencia .. ha impuesto
la Cruz de Caballero de la Orden de Alfonso X el Sabio a don
Manuel Foguet Mateu. Academia Anuario 1992 22: Excmo. Sr.
D. Rafael Lapesa Melgar .. Doctor en Filosofía y Letras;
Catedrático jubilado de Historia de la Lengua Española ..;
Caballero de la Legión de Honor. ZVicente Hojas 81: Los
títulos del tío colgaban de la pared, caballero Maestrante de no
sé qué, y Gran Cruz de San Hermenegildo .., Mérito civil
blanco. b) Se usa como denominación de los miembros de determinadas
congregaciones piadosas. Con compl especificador. | F. SVentura SAbc
9.3.69, 31: Este espíritu de indiferencia ha llegado a todo tipo
de congregación o cofradía. Los Caballeros del Pilar sospecho
que padecen también esta misma influencia. c) Se usa como
tratamiento de los alumnos de una escuela militar u otra entidad militar
análoga, precediendo al que expresa ka categoría de aquéllos. | BOE
Enthymema, V 2011, p. 187
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
3.12.75, 25202: Los que hayan ingresado en la Escuela o
Academia como caballeros cadetes usarán el uniforme
reglamentario de estos sin ostentar sobre él ninguna divisa. M.
Heredia Abc 8.3.58, 13: La nave .. trae sonrisas rubias cuajadas
de sueños y sorpresas de los setenta y un jóvenes alumnos,
caballeros guardia-marinas. Goytisolo Recuento 110: Por el
extremo opuesto del corredor [de letrinas] apareció un puto
caballero aspirante en traje de paseo, y plantándose con sonrisa
boba, empezó a desabrocharse la quincalla.
10 (hist.) Hidalgo de superior categoría. | DPlaja Literatura
140: La gran figura de la poesía catalana del siglo XV es la del
caballero valenciano Ausiás March. CBaroja Inquisidor 31: Al ir
unos caballeros a darle la enhorabuena, replicó, avingrado. b)
˜ de industria. Hombre que, haciéndose pasar por caballero,
vive de la estafa. | Blanco His 6.81, 121: La mayoría de ellos
pertenece a la innumerable grey de maleantes de suburbio y de
tugurio –timadores, estafadores, zascandiles, sablistas,
parchistas, tramposos, araneros o caballeros de industria–.
11 (hist.) En la Edad Media: Noble de segunda categoría, que
combate a caballo como vasallo del rey o de un magnate.
Normandía, .. invadió Inglaterra y estableció una nueva dinastía
normanda. Repartió muchos territorios entre sus caballeros y
estableció el régimen feudal. Castillo Polis 201: Así se
constituyó la jerarquía feudal, en cuya cúspide se hallaba el rey,
y luego seguían los duques y condes, poseedores de las grandes
circunscripciones del Imperio carolingio; los castellanos o
barones, propietarios de castillos, y los caballeros sin castillo o
valvasores.
12 (hist.) En la Roma antigua: Miembro del orden o clase social
inmediatamente inferior a la s de los senadores, caracterizado
por la riqueza y que sirve a caballo en el ejército. | FernándezLlorens Occidente 70: Los caballeros [en la antigua Roma] eran
gentes ricas dedicadas sobre todo al comercio. Tejedor Arte 46:
Nació el nuevo orden ecuestre, el de los équites o caballeros.
13 (hist.) Noble que en una fiesta de toros lidia a caballo con
rejones. | Mun 19.12.70, 5: El desafecto hacia la fiesta
mostrado por Felipe V y Fernando VI determinó que los
caballeros cedieran el ruedo a los peones del pueblo. J.C.
Arévalo Tri 15.7.72, 30: El varilarguero, aunque todavía se
contrata aparte y no acate aún ka disciplina de las cuadrillas,
representa al garrochista, al conocedor, más que al antiguo
caballero.
14 ˜ andante. (hist.) En la Baja Edad Media: Hidalgo o noble
que anda por el mundo en busca de ocasiones de lucir su valor
y su destreza en las armas. | Riquer Caballeros 10: En el siglo
XV español con el albañil y el banquero convive el caballero
andante; y precisamente porque a muchos parece todavía que el
caballero andante es un ser puramente literario .., creo que vale
Enthymema, V 2011, p. 188
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
la pena de bosquejar algunos aspectos de este tipo humano.
DPlaja Literatura 222: Imaginando en su locura [don Alonso
Quijano] ser uno de los antiguos caballeros andantes, sale al
campo acompañado de un villano de su lugar.
15 ˜ cubierto. (hist.) Grande de España, que, por serlo, goza
de la prerrogativa de ponerse el sombrero en presencia de
monarca. | Moncada Juegos 315: Es par del Retiro, consejero,
caballero cubierto, archicofrade, sollozador de María y
magistrado supremo de la Corte.
16 ˜ de (la) sierra. (hist.) Guarda de montes que va a caballo. |
Bermejo Estudios 43: Los antiguos oficios –juez, alcaldes,
notario, almotacén, caballeros de la sierra–tienen carácter anual.
III. loc. v 17 armar ˜ → ARMAR.
DRAE: a diferencia del sustantivo anterior, para este hemos utilizado el DRAE de la
página web de la Real Academia (www.rae.es). Como podemos observar, la disposición
de los lemas y la diferenciación de colores le da mayor inmediatez cognitiva y hace
mucho más agradable la visualización en una primera recepción global. Dicho esto, he de
añadir, que en mi opinión, hay pocos ejemplos, lo que dificultaría la comprensión del
sentido y el posterior uso creativo de la palabra al no nativo. La mayor parte de las
acepciones estarán recogidas en DUE, mientras que SALAMANCA prescinde de
muchas de ellas.
Categoriza el lema como adjetivo y como sustantivo. Como adjetivo da dos
acepciones una de las cuales lleva dos ejemplo en la que no parece adjetivo. Por otra
parte, en algunas explicaciones usa términos de difícil comprensión para un estudiante
no nativo (como por ejemplo, pechar).
DUE: este diccionario presenta una entrada bastante extensa, cuya información
consta de dos partes numeradas con cifras romanas: la primera, señalada en cifra romana
y negrita (I ) clasifica al significante como adjetivo (adj) y consta de seis acepciones las
dos últimas de las cuales son locuciones: un locución adjetival (de caballero, que
equivaldría al adjetivo caballeroso, -a: palabra de caballero = palabra caballerosa) y una locución
adverbial (de / entre caballeros, que podría equivaler a un adverbio o a un sintagma
preposicional con función de complemento circunstancial, algo así como noblemente,
cortésmente, lealmente, en confianza, entre personas educadas, entre nosotros que somos honestos, etc.) y
la segunda (II ) categoriza al significante como sustantivo de género masculino (m) y su
definición se distribuye en diez acepciones (de la 7 a la 16), algunas de las cuales
contienen locuciones (como 10: caballero de industria, sería una locución nominal, más o
menos equivalente a «pícaro, farsante») o subacepciones (9) que son más bien
matizaciones o sentidos que, sin llegar a constituir un significado diverso, se apartan
levemente del de la acepción que las contiene. Hay un último grupo formado por la
locución verbal (o colocación) armar caballero con una remisión al verbo armar. Entre las
subacepciones de (9) encontramos algunas definiciones que no son propias, sino
explicativas (9b y 9c) de la definición propia más general (9) a la que se adscriben. En
esta acepción nos parece ver un guiño del directo o pequeño homenaje a su maestro,
pues entre los ejemplos de caballeros, cita a su maestro, D. Rafael Lapesa Melgar.
Enthymema, V 2011, p. 189
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Esta entrada nos permite comprender la utilidad de separar los contornos al aplicar la
prueba de la ley de sinonimia, pues, como vemos las acepciones del primer grupo que
corresponden a la del significante como adjetivo, empiezan por que o por un adjetivo y
las del segundo grupo por un sustantivo; de esta forma la ley se cumple en todos los
ejemplos, nótese especialmente el caso de la acepción II 9:
I.
1. Un mozo caballero en una jaca torda y con la cola rapada > Un mozo que cabalga en
una jaca torda y con la cola rapada
II.
7. Esto se lo digo confidencialmente, don Arturo, por favor, yo sé que es usted un caballero
> Esto se lo digo confidencialmente, don Arturo, por favor, yo sé que es usted un hombre que se
comporta con lealtad, nobleza y cortesía
9. Pedro que nunca pasó de caballero del Santo Sepulcro, llevaba las cruces de pasadores, en las
tarjetas > Pedro que nunca pasó de miembro del Santo Sepulcro, llevaba las cruces de pasadores, en las
tarjetas
Las raras veces en que los lexicógrafos de este diccionario no encuentran una cita que
les convenza suficientemente como para usarla en el ejemplo, la crean y lo marcan con
un asterisco (I. 6 y 7). Si se suprime un fragmento de texto en la cita se marca con dos
puntos, así: ..
Además de las marcas diatópicas, de tecnicismos (Geol, Geom, Hist) o de uso (raro) hay
explicaciones contextuales, en cursiva y si la explicación lleva alguna palabra
metalingüística (autorreferencial o autónima, o sea, que se refiere al significante mismo y
no al referente) va en mayúscula para diferenciarla: Usado sobre todo para especificar el
destinatario de un servicio o artículo. Opuesto a SEÑORA (II. 8); En la Roma antigua (II. 12); En
la edad Media (II 11)
No se indica si la acepción II 14 (caballero andante) es un compuesto o una locución
nominal, quizá porque para muchos autores es lo mismo.
Se echa en falta la locución nominal caballero de noche para designar un mueble de
dormitorio que se usa para colgar la ropa al quitársela. ¿Se habrá obsolescido? ¿Ya no se
usa ese mueble o es que ya nadie lo llama así?
Esta entrada, en general, parece un tanto apabullante para un estudiante extranjero de
niveles intermedios (de A2 a B2).
SALAMANCA: en este diccionario, lo primero que encontramos tras el lema y la
información de categoría del primer enunciado es una marca de uso en mayúsculas:
ELEVADO que no aparece en el primer enunciado de la palabra como sustantivo pues
es cierto que, como adjetivo, es de uso más restringido. De hecho, el primer ejemplo, si
no tuviera la mención al corcel, podría presentar ambigüedad: el joven caballero (determinante
+ nombre + adjetivo o determinante + adjetivo + nombre?). Da como sinónimo de esta primera
acepción: jinete, que sin embargo es un sustantivo. De manera que aquí la ley de
sinonimia no funcionaría: va cabalgando un jinete > *Va cabalgando un que está o va a lomos de
una cabalgadura. Nos parece que este sinónimo debería estar tras la acepción siguiente, la 2
cuyo primer enunciado es: s.m., siendo el segundo: «Hombre que se comporta con
educación y elegancia», con un enunciado similar a este: 3 [hombre] que cabalga o va a
lomos de una cabalgadura.
Hay otras dos acepciones con marcas son la 4 (HIST.) y la 6 (RESTRINGIDO) de su
uso como vocativo que parece estar perdiéndose, al menos en el español peninsular.
Enthymema, V 2011, p. 190
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Este diccionario no incluye la expresión caballero andante dentro del apartado FR. Y
LOC., por lo que creemos que la considera palabra compuesta o compuesto. Tampoco
esta obra incluye caballero de noche. Entre las locuciones están: la colocación armar caballero;
la locución adverbial entre caballeros y de caballero a caballero que bien podríamos considerar
como un marcador discursivo conversacional modalizador, pues «moladiza» lo que se va
a decir advirtiendo al interlocutor de que se tratará de algo confidencial.
Al final del artículo hay remisiones a otras locuciones nominales que se definen y
ejemplifican dentro de los lemas correspondientes a las palabras marcadas con un
asterisco.
3.1.3. caolín
DRAE
caolín. (Del fr. kaolin, y este del chino kaoling, alta colina,
nombre del lugar donde se encontró).
1. m. Arcilla blanca muy pura que se emplea en la fabricación
de porcelanas, aprestos y medicamentos.
Salamanca
caolín s.m. (no contable) Arcilla muy dura y blanca que se
emplea en la fabricación de porcelana: Hay un yacimiento de caolín
cerca de mi pueblo.
DUE
caolín (Tb raro, con la grafía kaolín) m Arcilla blanca muy pura
constituida por silicato de alúmina hidratado, que se emplea
para la fabricación de la porcelana y el papel. | SInf 12.8.70, 5:
Extracción de minerales [en Asturias] .. Hulla .. Antracita ..
Mercurio .. Arsénico.. Caolín .. Espanto-flúor .. Hierro.
MNiclos Toxicología 25: Diarreas. Se empleará una poción con
astringente y tópicos (kaolín, óxido de magnesia).
Esta entrada no presenta interés especial, he querido incluirla por mostrar un artículo
en el que el Diccionario Salamanca marcara la característica de no contable. Por lo demás, de
nuevo DEA se nos presenta como más completo pues da dos grafías y si uno busca en la
letra Ka encuentra el significante kaolín, kaolinita con una remisión a caolín, caolinita; su
definición es más enciclopédica.
3.1.4. capo
DRAE
capo. (Del it. capo, cabeza, aplicado a los jefes de la mafia).
1. m. Jefe de una mafia, especialmente de narcotraficantes.
2. m. coloq. Arg., Bol. y Ur. jefe (‖ superior de un cuerpo u
oficio).
3. m. coloq. Arg., Bol., Par. y Ur. Persona con poder y prestigio
o muy entendida en una determinada materia. Es un capo en física
cuántica.
Enthymema, V 2011, p. 191
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
2 COLOQUIAL.
Salamanca
capo s.m. 1 Jefe mafioso: capo siciliano.
Patrón, jefe de un sitio: el capo de la empresa.
DUE
Capo m En la mafia: Jefe. | D16 19.2.84, 1: Cuando en
noviembre del pasado año fue detenido por la Policía
barcelonesa Antonio Bordellino, pendiente de seis órdenes de
búsqueda y captura por la INTERPOL y la Magistratura
italiana, los napolitanos recurrieron a los buenos oficios de La
Pepa y su protector .. con el fin de obtener la libertad del
«capo». Int. 31.8.83, 105: Villarino es un dios entre los
delincuentes. Es el más grande de los «capos» de los mafiosos
sudamericanos en suelo español. Cam 9.8.82, 62: Había caído el
primer pez gorde de una de las seis «collas» que funcionan en
Málaga .. Pero en la calle quedan otros «capos», «padrinos»,
«capitalistas» o simplemente promotores de «La Rápida». b)
(humorist.) En gral: Jefe. | VMontalbán Galíndez 88: Yo hago
mis averiguaciones y resulta que su única relación atada y bien
atada con el festival de Avignon es que practica el
sadomasoquismo con uno de los capos, el capo menor, del
festival.
He incluido esta entrada para hacer notar cómo DUE es el único diccionario en cuyos
ejemplos (DUE acepción l a) palabra capo aparece entre comillas pues se trata de un
italianismo, lo cual nos parece útil para un estudiante extranjero o usuario nativo que
quisiera resolver ese tipo de duda sin tener a mano un libro de estilo.
3.2. Adjetivos
3.2.1. capaz
DRAE
capaz. (Del lat. capax, -ācis).
1. adj. Que tiene ámbito o espacio suficiente para recibir o
contener en sí otra cosa.
2. adj. Grande o espacioso.
3. adj. Apto, con talento o cualidades para algo.
4. adj. Der. Apto para ejercer personalmente un derecho y el
cumplimiento de una obligación.
~ que.
1. loc. adv. coloq. Arg. y Ur. a lo mejor.
es ~ que.
1. loc. adv. Am. Es posible que, puede ser que, quizá.
ser alguien ~ de algo.
1. loc. verb. atreverse (‖ determinarse a algún hecho o dicho
arriesgado).
Enthymema, V 2011, p. 192
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
2. loc. verb. Existir la posibilidad de que haga algo.
Salamanca
capaz adj. 1 Que tiene capacidad o inteligencia para hacer
alguna cosa: El gerente es un directivo muy capaz para ocupar ese
nuevo cargo. Ese profesor es un científico muy capaz. 2 Que es lo
suficientemente atrevido como para hacer cosas arriesgadas o
extraordinarias: Eres muy capaz de colarte en el estreno. ANT.
incapaz. 3 Que puede producir un determinado efecto: una
película capaz de enternecer a los menos sensibles
4 Que tiene
capacidad de contener algo: Esa botella es capaz de contener dos
litros y medio. Ese congelador es capaz de guardar una gran cantidad de
carne || adv. 5 AMÉR. DEL S. Quizá, probablemente.
DUE
capaz adj.
1 Que puede contener en su interior [una
cantidad de pers. o cosas (compl. PARA)]. | DCañabate Abc
15.4.73, 61: En un recodo de ella [la carretera] se encuentra la
iglesia, no grande, pero capaz para un buen número de fieles.
b) Sin compl.: Que puede contener mucho.
| Torrente
Sombras 231: El comedor era capaz, aunque gracioso. Economía
190: Armarios de cocina. Deben ser capaces y de una pulcritud
extremada.
2 [Pers. o cosa] que puede hacer [algo (compl. DE)]. | Laforet
Mujer 33: Nunca sería capaz de vivir en este sitio. NAl 10.7.65,
7: En alguna ocasión salta a la palestra la noticia que por su
interés y transcendencia es capaz, por sí sola, de conmocionar
al más amplio sector de la opinión. b) [Pers.] de quien se
puede temer o esperar [algo (compl DE)]. Tb sin compl, por
consabido | Arce Testamento 14: Sabía que era capaz de
abofetearme. Torrente Vuleta 247: ¿Vas a dejar a tus amigos en
la estacada? ¿Eres capaz?
3 [Pers.] apta o con cualidades suficientes [para algo].
|
Escudero Juniorado 98: No se la dedica a estudios altos para los
cuales ella se sentía muy capaz. b) Sin compl: [Pers.] de grandes
aptitudes. Gralm. Precedido de u adverbio intensificador. | *Es un
hombre muy capaz y hará un buen papel. c) [Cosa] adecuada o
en condiciones [para algo]
| VozC 11.1.55, 3: Todos los
elementos, como palomillas de balcón .., herrajes, polipastos,
etc., deberán ser de dimensiones y naturaleza capaces para
resistir los esfuerzos que hayan de soportar. Bermejo Estudios
175: Se representaron en la corte en un barrio honrado y
discreto, pero muy capaz para sus fechorías.
4 (Der) Apto legalmente [para algo (compl DE o PARA).
|
Compil. Aragón 611: Cualquiera de ellos designado heredero,
donatario universal o, en otro caso, cualquiera descendiente sin
mediación de persona capaz de heredar, podrá pedir .. la
reducción de las liberalidades hechas en favor de no
Enthymema, V 2011, p. 193
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
descendientes. F.J. Peña Inf 21.6.77, 36: Con su promoción a
capitán general .. se trataría de alargar su edad de retiro y, por
consiguiente, de conservarle plenamente capaz para la vida
militar.
5 Susceptible (que puede recibir o experimentar [algo (compl
DE)]). | Vicens Aproximación 20: Un método capaz de ser
denominado «método de las ciencias del hombre».
6 (Geom) [Arco] tal que todos los ángulos que se pueden
inscribir en él son iguales [a uno dado (compl DE)]. | MarcosMartínez Aritmética 2º 145: Construir el arco capaz del ángulo
α, bajo el cual se ve el segmento AB.
DRAE: de nuevo observamos la falta de ejemplos que hace que sea muy difícil
entender las acepciones, especialmente las que proceden de lenguas de especialidad como
la jurídica: tenemos una acepción marcada con la abreviatura Der. (derecho) cuya
definición nada aclara.
SALAMANCA: tras el lema hay seis acepciones: cinco dentro de un primer
enunciado como adjetivo y una como adverbio. Se señalan en negrita las preposiciones
con las que construir las frases, lo cual es extremadamente útil para el estudiante de ELE.
En el caso de las primeras cinco, por lo que respecta a los segundos enunciados o
definiciones con sus ejemplos, diremos que nos parece que en ellos la prueba de la ley de
la sinonimia exige algunos ajustes: en la primera habría que cambiar el adverbio muy por
el cuantificador mucha que es el que puede ir delante del sustantivo capacidad y eliminar
para hacer alguna cosa que debería haber ido entre paréntesis, como contorno.
Veamos la primera:
1 El gerente es un directivo muy capaz para ocupar ese nuevo cargo. Ese profesor es un científico
muy capaz > *El gerente es un directivo muy que tiene capacidad o inteligencia para hacer alguna cosa
para ocupar ese nuevo cargo. > El gerente es un directivo que tiene mucha capacidad o inteligencia
para ocupar ese nuevo cargo.
En el segundo ejemplo, la sustitución produce una frase un tanto ambigua, parece que
la definición habría sido mejor así: «Que tiene competencia». Veamos: Ese profesor es un
científico muy capaz > *Ese profesor es un científico muy que tiene mucha capacidad > Ese profesor es
un científico que tiene mucha capacidad.
Tampoco en las demás acepciones la sustitución se hace completamente sin necesidad
de ajustes, en la segunda: 2 Eres muy capaz de colarte en el estreno > Eres muy lo suficientemente
atrevido de hacer cosas arriesgadas o extraordinarias de colarte en el estreno > ?Eres muy lo
suficientemente atrevido como para colarte en el estreno. La definición debería haber sido: «Que es
lo suficientemente atrevido [como para hacer cosas arriesgadas o extraordinarias]».
La tercera: 3 Esa botella es capaz de contener dos litros y medio > *Esa botella es que tiene que
tiene capacidad de contener de contener dos litros y medio > Esa botella tiene capacidad de contener dos
litros y medio o Esa botella es de las que tienen capacidad de contener dos litros y medio. La definición
debería haber sido: «Que tiene capacidad [de contener]. La anterior acepción contiene
también un antónimo».
La cuarta: 4 Una película capaz de enternecer a los menos sensibles > *Una película que puede
producir un determinado efecto de enternecer a los menos sensibles > Una película que puede producir el
Enthymema, V 2011, p. 194
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
efecto de enternecer a los menos sensibles. La definición debería haber sido: «Que tiene
capacidad [de producir un efecto de]».
Por lo que respecta a la quinta acepción, como adverbio, diremos que es un uso no
exclusivo de América del Sur, en Extremadura también se dicen enunciados del tipo:
capaz que llueva hoy («igual llueve hoy, aun pareciendo improbable»), aunque no creemos
que sea normativo en español estándar.
DEA: de nuevo nos encontramos ante la entrada más completa, con seis acepciones
dentro de la categoría de adjetivo, dos de las cuales pertenecen a lenguas de especialidad:
el derecho (5) y la geometría (6). No contempla el uso sudamericano como adverbio que
da SALAMANCA en su última acepción. Veamos si las definiciones son definiciones
propias aplicándoles la prueba de la ley de sinonimia:
1 En la primera funciona sin problemas:
En un recodo de ella [la carretera] se encuentra la iglesia, no grande, pero capaz para un buen
número de fieles > En un recodo de ella [la carretera] se encuentra la iglesia, no grande, pero que puede
contener en su interior un buen número de fieles.
b) En la subacepción habría que hacer algún pequeño ajuste: El comedor era capaz,
aunque gracioso > ??El comedor era que puede contener mucho, aunque gracioso > El comedor era de
los que pueden contener mucho, aunque gracioso
Armarios de cocina. Deben ser capaces y de una pulcritud extremada > ??Armarios de cocina.
Deben ser que pueden contener mucho capaces y de una pulcritud extremada > Armarios de cocina.
Deben ser de los que pueden contener mucho y de una pulcritud extremada
2 [Pers. o cosa] que puede hacer [algo (compl. DE)].
Nunca sería capaz de vivir en este sitio > ??Nunca sería que puede hacer de vivir en este sitio >
Nunca sería de los que pueden vivir en ese sitio o Nunca podría vivir en ese sitio
b) El mismo procedimiento, es decir, añadir un pronombre que pueda sustituir al
sustantivo del contorno haciendo de núcleo del antecedente de la cláusula relativa que
puede…
En alguna ocasión salta a la palestra la noticia que por su interés y transcendencia es capaz, por sí
sola, de conmocionar al más amplio sector de la opinión > ??En alguna ocasión salta a la palestra la
noticia que por su interés y transcendencia es que puede hacer, por sí sola, de conmocionar al más amplio
sector de la opinión > En alguna ocasión salta a la palestra la noticia que por su interés y
transcendencia es de las que pueden, por sí solas, de conmocionar al más amplio sector de la opinión.
c) En esta subacepción también habría que el mismo tipo de ajustes:
Sabía que era capaz de abofetearme > ??Sabía que era de quien podía temer o esperar de
abofetearme >Sabía que era de los que podía temer o esperar que me abofetearan o Sabía que era uno
de quien temer ser abofeteado.
¿Vas a dejar a tus amigos en la estacada? ¿Eres capaz? > ¿Vas a dejar a tus amigos en la
estacada? ¿Eres de quien temer o esperar eso? o ¿Eres de los que se puede temer que hagan eso?
3 Funciona perfectamente, sin necesidad de cambios:
No se la dedica a estudios altos para los cuales ella se sentía muy capaz > No se la dedica a estudios
altos para los cuales ella se sentía muy apta o con cualidades suficientes
b) Bastaría cambiar el orden de un adverbio:
Es un hombre muy capaz y hará un buen papel > Es un hombre muy de grandes aptitudes y hará
un buen papel > Es un hombre de muy grandes
c) Las subacepciones de este apartado funcionan perfectamente ante la ley de
sinonimia:
Enthymema, V 2011, p. 195
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Todos los elementos, como palomillas de balcón .., herrajes, polipastos, etc., deberán ser de
dimensiones y naturaleza capaces para resistir los esfuerzos que hayan de soportar > Todos los
elementos, como palomillas de balcón .., herrajes, polipastos, etc., deberán ser de dimensiones y naturaleza
adecuadas o con capacidades para resistir los esfuerzos que hayan de soportar.
Se representaron en la corte en un barrio honrado y discreto, pero muy capaz para sus fechorías > Se
representaron en la corte en un barrio honrado y discreto, pero muy adecuado o con capacidad para sus
fechorías.
4 La cuarta acepción lleva una marca de tecnicismo del ámbito de la lengua del
derecho. En los dos ejemplos que se dan tras la definición la sustitución de la palabra por
su definición funciona perfectamente, aunque en la primera la frase quedaría mejor
cambiando una preposición, lo que indica que se trata de una definición propia bien
elaborada.
Cualquiera de ellos designado heredero, donatario universal o, en otro caso, cualquiera descendiente
sin mediación de persona capaz de heredar, podrá pedir .. la reducción de las liberalidades hechas en
favor de no descendientes > Cualquiera de ellos designado heredero, donatario universal o, en otro caso,
cualquiera descendiente sin mediación de persona apta legalmente para heredar, podrá pedir .. la
reducción de las liberalidades hechas en favor de no descendientes
Con su promoción a capitán general .. se trataría de alargar su edad de retiro y, por consiguiente, de
conservarle plenamente capaz para la vida militar > Con su promoción a capitán general .. se trataría
de alargar su edad de retiro y, por consiguiente, de conservarle plenamente apto legalmente para la vida
militar.
5 También la quinta acepción tolera la sustitución sinonímica:
Un método capaz de ser denominado «método de las ciencias del hombre» > Un método susceptible
de ser denominado «método de las ciencias del hombre».
6 Para comprender la gramaticalidad de la sustitución en el ejemplo de la sexta
acepción habría que saber de aritmética, sintácticamente parece funcionar:
Construir el arco capaz del ángulo α, bajo el cual se ve el segmento AB > Construir el arco tal que
todos los ángulos que se pueden inscribir en él son iguales del ángulo α, bajo el cual se ve el segmento
AB.
3.2.2. capcioso
DRAE
capcioso, sa. (Del lat. captiōsus).
1. adj. Dicho de una palabra, de una doctrina, de una
proposición, etc.: falaces (‖ embusteras, falsas).
2. adj. Dicho de una pregunta, de una argumentación, de una
sugerencia, etc.: Que se hacen para arrancar al contrincante o
interlocutor una respuesta que pueda comprometerlo, o que
favorezca propósitos de quien las formula.
Salamanca
capcioso, -sa adj. [Pregunta, argumento, razonamiento] que
engaña o puede engañar porque está hecho con habilidad para
confundir, comprometer o forzar a una persona a decir alguna
cosa en contra de su voluntad o interés: Paco siempre te cuenta lo
sucedido de una manera capciosa, no te fíes. Ése es un periodista
peligrosísimo; utiliza preguntas y respuestas capciosas, y sales de la
Enthymema, V 2011, p. 196
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
entrevista con la sensación de que te ha tomado el pelo. SIN. engañoso.
DUE
capcioso, -a adj. [Argumento o pregunta] planteados con
habilidad para hacer caer al interlocutor. | Jaén 15: A esa
pregunta, probablemente con ribetes de capciosa, se
respondería: –Cabe distinguir.
DRAE: este diccionario, categoriza el lema como adjetivo con dos acepciones
correspondientes a dos contornos: por un lado el de palabras, doctrinas, proposiciones,
etc. con la definición de «falso» y por otro el de preguntas, argumentaciones, sugerencias,
etc. con la definición de «que se hacen para arrancar una respuesta comprometedora al
interlocutor». No hay ejemplos.
SALAMANCA: tras el lema tenemos el primer enunciado de su única acepción que
nos indica que la palabra es un adjetivo. Al final dará un sinónimo. La sustitución
sinonímica funciona en los dos ejemplos del artículo sin apenas necesidad de
adaptaciones (solo adaptar verbos y el atributo al plural en el segundo):
Paco siempre te cuenta lo sucedido de una manera capciosa, no te fíes. Ése es un periodista
peligrosísimo; utiliza preguntas y respuestas capciosas, y sales de la entrevista con la sensación de que te
ha tomado el pelo > Paco siempre te cuenta lo sucedido de una manera que engaña o puede engañar
porque está hecho con habilidad para confundir, comprometer o forzar a una persona a decir alguna cosa
en contra de su voluntad o interés, no te fíes.
Ése es un periodista peligrosísimo; utiliza preguntas y respuestas capciosas, y sales de la entrevista
con la sensación de que te ha tomado el pelo > Ése es un periodista peligrosísimo; utiliza preguntas y
respuestas que engañan o pueden engañar porque están hechos con habilidad para confundir,
comprometer o forzar a una persona a decir alguna cosa en contra de su voluntad o interés, y sales de la
entrevista con la sensación de que te ha tomado el pelo
DUE: he elegido este lema por su simplicidad y síntesis que parece responder a la
declaración de Don Manuel Seco de que «las definiciones de los lemas deben hacerse a la
manera de los juramentos: toda la verdad pero nada más que la verdad» (conf. cit):
A esa pregunta, probablemente con ribetes de capciosa, se respondería: –Cabe distinguir. > A esa
pregunta, probablemente con ribetes de planteada con habilidad para hacer caer al interlocutor, se
respondería: –Cabe distinguir.
O si se quiere: A esa pregunta, planteada probablemente con ribetes de haber sido planteada para
hacerme caer, yo respondería: –Cabe distinguir.
3.2.3. capuchino
DRAE
capuchino, na. (Del it. cappuccino).
1. adj. Se dice del religioso descalzo que pertenece a la orden
reformada de San Francisco. U. t. c. s.
2. adj. Perteneciente o relativo a la Orden de los capuchinos.
Enthymema, V 2011, p. 197
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
3. m. Café con leche espumoso.
4. m. Cuba. capuchina (‖ dulce).
5. m. P. Rico y R. Dom. Cometa pequeña de papel y sin varillas.
llover capuchinos, o capuchinos de bronce.
1. locs. verbs. coloqs. Caer la lluvia con gran intensidad o
ímpetu.
□ V.
cabello de capuchino
mico capuchino
mono capuchino
polvo de capuchino
Salamanca
capuchino, -na adj. / s. m. y f. [Religioso descalzo] que
pertenece a una de las ramas de la orden franciscana: Un
convento de capuchinos, una monja capuchina. || s. m. 2 (en plural)
Orden de los capuchinos. 3 Café exprés con crema de leche
espumosa: Un capuchino, por favor.
DUE
Capuchino1 -na I adj. 1 [Religioso] franciscano descalzo. Tb
n. | E. La Orden MHi 7.69, 32: Los conventos monjiles de
las capuchinas, con su «Torre del Retiro».
2 [Herrerillo] ˜, [mono] → HERRERILLO, MONO1
II n A m 3 mono capuchino (→ MONO1) | J. Rubio SAbc
22.11.70, 25 En total treinta y tres simios se han incorporado al
Arte: veinticuatro chimpancés, dos gorilas, tres orangutanes y
cuatro capuchinos.
3 (Autom) Tornillo pasante que mantiene unidas las ballestas.
|
Ramos-LSerrano Circulación 288: las ballestas están
constituidas por una serie de láminas de acero. La primera de
ellas se llama maestra .. Las demás hojas van unidas a la
maestra por medio de un tornillo pasante llamado capuchino, y
se mantiene su posición sujetándolas entre sí por medio de
abrazaderas. GTelefónica N. 116: Rodafres. Repuestos del
automóvil. Casquillos. Bulones. Capuchinos.
B f 5 Planta trepadora con flores anaranjadas en forma de
capucha (Tropaeolum majus). Con un adj. Especificador, designa otras
especies: ˜ CANARIA (T. Peregrinum), ˜ MENOR (T. Minus). |
CBonald Noche 56: A la izquierda, un tapial cubierto en parte
de jazmines y capuchinas, Gerona 10: Sus ventanas suelen
verse animadas y embellecidas con los vivos colores de los
geranios, clavelinas y capuchinas. Loriente Plantas 47: Trpoelum
majus L., «Capuchinas». Herbácea trepadora anual de América
del Sur, bastante común como ornamental.
6 Seta comestible, de sombrero gris oscuro, pie robusto y
carne sólida de sabor poco acusado (Tricholoma portentosum). |
Perala Setas 66: Tricholoma portentosum. Negrillas. Capuchinas.
Enthymema, V 2011, p. 198
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Ratones.
7 Cierto dulce de yema. | GSerrano Madrid 170: Se les ve
pararse con más frecuencia ante el escaparate de una agencia
turística que ante el escaparate de una pastelería. Su golosina
son los proyectos; su vicio, el soñar los viajes; no capuchinas,
no hay para ellos mejores yemas que los folletos de colorines,
capuchinas más dulces que un presupuesto para el itinerario de
los castillos de Europa.
8 (hoy raro) Lamparilla metálica de aceite, portátil, con un
apagador en forma de capucha. | Landero Juegos 150: Se
acercó a examinar tiendas de antiguallas, en cuyas vitrinas se
amontonaban imágenes religiosas .. y otros mil cachivaches
todavía vigentes en su niñez: trébedes, candiles, capuchinas.
CPuche Sabor 63: Don Jerónimo no encendía nunca la luz
eléctrica, sino que se estaba allí con una capuchina encendida
comiendo castañas asadas o patatas.
capuchino2 adj. [Café] con una pequeña porción de crema
espumosa. Tb n. m. | Marías Sociedad 168: Paseando y hablando
.. o tomando refrescos y café capuchino en los dos bares. *Yo
tomaré un capuchino.
He querido terminar las categorías de sustantivos y adjetivos analizando cómo
resuelven estos diccionarios los artículos en los que la misma palabra puede funcionar
como adjetivo o como sustantivo.
DRAE: este diccionario nos da la palabra italiana con ortografía española pues se
trata de un italianismo integrado en el español peninsular. La categoriza primero como
adjetivo (con la abreviatura que indica que también se usa como sustantivo) para
contornos referentes a la orden de franciscanos y luego como sustantivo. No dice si las
locuciones son dialectales o restringidas, aunque parecen poco usadas. Da cuatro
remisiones a otras locuciones que contienen el lema.
SALAMANCA: tras el lema, tenemos tres acepciones: una primera cuyo primer
enunciado nos dice que la palabra es adjetivo y sustantivo con variación de género y
número y cuyo segundo enunciado engloba el contorno entre corchetes; una segunda
como solo sustantivo masculino, sin ejemplo y una tercera como sustantivo masculino.
Apliquémosle la prueba de la ley de sinonimia:
Un convento de capuchinos >Un convento de [religiosos descalzos] que pertenece a una de las ramas
de la orden franciscana,
Una monja capuchina >una monja que pertenece a una de las amas de la orden franciscana.
Un capuchino, por favor > Un café exprés con crema de leche espumosa
Vemos que en el primer ejemplo se hace necesario especificar el contorno, mientras
que en el segundo ejemplo no: el problema viene porque en el primer caso es sustantivo
y en el otro, adjetivo. En el tercero la sustitución es perfecta.
Enthymema, V 2011, p. 199
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
DEA: este diccionario presenta dos lemas para la palabra capuchino por considerar
que se percibe como dos palabras muy diferentes aunque los significantes coincidan.
Cada lema lleva un pequeño número. En el primer lema: capuchino1 -na hay dos
grandes grupos: el adjetivo cuyo contorno es un religioso, con la indicación de que
también puede funcionar como sustantivo y una segunda acepción, probablemente
nacida de alguna similitud visual con la primera, que nos envía a las entradas herrerillo y
mono. La definición es sinonímica:
Los conventos monjiles de capuchinas > los conventos monjiles de franciscanas descalzas
Después viene un segundo grupo en el que se trata el lema como sustantivo, con dos
acepciones (la primera tiene un segundo enunciado coincidente con la del adjetivo y lleva
una remisión a mono y la segunda marcada como procedente del ámbito automovilístico)
y cuatro como nombre masculino como nombre femenino. Veamos si todas sus
definiciones toleran la ley de la sinonimia:
En total treinta y tres simios se han incorporado al Arte: veinticuatro chimpancés, dos gorilas, tres
orangutanes y cuatro capuchinos > En total treinta y tres simios se han incorporado al Arte:
veinticuatro chimpancés, dos gorilas, tres orangutanes y cuatro monos capuchinos
El primer ejemplo de la segunda acepción no admite sustitución porque ya va
definido el lema en él mismo y se crearía una redundancia, pero la sustitución funcionaría
en el segundo ejemplo, no metalingüístico:
La primera de ellas se llama maestra .. Las demás hojas van unidas a la maestra por medio de un
tornillo pasante llamado capuchino, y se mantiene su posición sujetándolas entre sí por medio de
abrazaderas > La primera de ellas se llama maestra .. Las demás hojas van unidas a la maestra por
medio de un tornillo pasante llamado tornillo pasante que mantiene unidas las ballestas, y se mantiene
su posición sujetándolas entre sí por medio de abrazaderas.
Repuestos del automóvil. Casquillos. Bulones. Capuchinos > Repuestos del automóvil. Casquillos.
Bulones. Tornillos pasantes que mantienen unidas las ballestas
En la primera acepción del grupo de sustantivos femeninos se nos hace transparente
el icónimo que dio origen a la nominación de la planta: «en forma de capucha», es decir,
por la similitud visual se llamó a la planta así. La ley de la sinonimia funciona en los tres
ejemplo, menos en el tercero que es ya una definición y resultaría redundante:
A la izquierda, un tapial cubierto en parte de jazmines y capuchinas > A la izquierda, un tapial
cubierto en parte de jazmines y plantas trepadoras con flores anaranjadas en forma de capucha
Sus ventanas suelen verse animadas y embellecidas con los vivos colores de los geranios, clavelinas y
capuchinas > Sus ventanas suelen verse animadas y embellecidas con los vivos colores de los geranios,
clavelinas y plantas trepadoras con flores anaranjadas en forma de capucha.
En la segunda acepción, también podemos sustituir el nombre de la seta por su
definición sin problemas puesto que se trata de nominaciones populares que siguen a la
nominación culta, latina:
Tricholoma portentosum. Negrillas. Capuchinas. Ratones > Tricholoma portentosum. Negrillas..
Seta comestible, de sombrero gris oscuro, pie robusto y carne sólida de sabor poco acusado. Ratones
Lo mismo en la tercera acepción:
Se les ve pararse con más frecuencia ante el escaparate de una agencia turística que ante el escaparate
de una pastelería. Su golosina son los proyectos; su vicio, el soñar los viajes; no capuchinas, no hay para
ellos mejores yemas que los folletos de colorines, capuchinas más dulces que un presupuesto para el
itinerario de los castillos de Europa > Se les ve pararse con más frecuencia ante el escaparate de una
agencia turística que ante el escaparate de una pastelería. Su golosina son los proyectos; su vicio, el soñar
los viajes; no ciertos dulces de yema, no hay para ellos mejores yemas que los folletos de colorines,
capuchinas más dulces que un presupuesto para el itinerario de los castillos de Europa.
Enthymema, V 2011, p. 200
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
La cuarta acepción de las pertenecientes a la categoría de nombre femenino lleva la
maraca de uso hoy raro. La definición deja claro el icónimo y es sinonímica tanto en la
primera cita como en la segunda, en la de Juegos de la Edad tardía de Luis Landero, apenas
hay que cambiar al plural, en el segundo, ni eso:
Se acercó a examinar tiendas de antiguallas, en cuyas vitrinas se amontonaban imágenes religiosas ..
y otros mil cachivaches todavía vigentes en su niñez: trébedes, candiles, capuchinas > Se acercó a
examinar tiendas de antiguallas, en cuyas vitrinas se amontonaban imágenes religiosas .. y otros mil
cachivaches todavía vigentes en su niñez: trébedes, candiles, lamparillas metálicas de aceite, portátiles, con
un apagador en forma de capucha.
Don Jerónimo no encendía nunca la luz eléctrica, sino que se estaba allí con una capuchina encendida
comiendo castañas asadas o patatas > Don Jerónimo no encendía nunca la luz eléctrica, sino que se
estaba allí con una lamparilla metálica de aceite, portátil, con un apagador en forma de capucha
encendida comiendo castañas asadas o patatas.
El segundo lema capuchino2 no es considerado solo sustantivo, como en Salamanca,
sino adjetivo, aunque luego se nos añade que también puede usarse como adjetivo (y se
ejemplifica), su definición también es sinonímica como muestran sus dos ejemplos, el
segundo de los cuales no es una cita:
Paseando y hablando .. o tomando refrescos y café con una pequeña porción de crema espumosa en los
dos bares > Paseando y hablando .. o tomando refrescos y café capuchino en los dos bares.
*Yo tomaré un capuchino > Yo tomaré un café con una pequeña porción de crema espumosa
3.3.Verbos transitivos e intransitivos
3.3.1. Cabalgar
DRAE
cabalgar1. (Del lat. caballicāre).
1. intr. Subir o montar a caballo. U. t. c. tr.
2. intr. Andar o pasear a caballo.
3. intr. Dicho de una cosa: Ir sobre otra.
4. intr. Equit. Dicho de un caballo: Mover los remos cruzando
el uno sobre el otro.
5. tr. Dicho de un caballo o de otro animal: Cubrir a la hembra.
6. tr. Poner una cosa sobre otra.
□ V.
pie de cabalgar.
cabalgar2.
1. m. ant. Conjunto de los arreos y arneses para andar a
caballo.
Salamanca
cabalgar v. tr. / intr 1 Estar o ir <una persona> montada en
una caballería: Cabalgando todo el día para alejarse del fuego. Aunque
era dama, siempre cabalgaba a horcajadas o a la jineta y no a la
mujeriega. A nosotros nos gusta cabalgar los caballos difíciles, porque
nuestro padre nos enseñó a dominarlos. El jinete cabalgaba en un
Enthymema, V 2011, p. 201
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
hermoso alazán. Yo sólo cabalgo en burro. SIN. Montar. || v. intr. 2
Estar o ir <una cosa> sobre [otra cosa] : Las gafas del maestro
cabalgan peligrosamente sobre la punta de su nariz. Aquellas vigas tiene
que cabalgar perfectamente sobre los muros. 56
DUE
cabalgar A intr. 1 Caminar, o estar, montado[sobre un
caballo, asno o mula (compl. EN o SOBRE). Tb referido a otro
animal, o a un objeto, como bicicleta o motocicleta, sobre el que uno se
puede colocar de manera semejante. Frec se omite el compl por consabido. |
Camón Abc 10.11.73, 3: Aquí están los dos símbolos de
España. El que cabalga en un caballo .. y el que monta en un
burro. b) Subirse a una caballería (compl. EN o SOBRE). Tb
referido a otro animal, o a un objeto, como bicicleta o motocicleta, sobre el
que uno se puede colocar de manera semejante. Frec se omite el compl por
consabido. | Torrente Sombras 273: Napoleón se le había
arrimado, y el coronel Dubonet l tenía el estribo .. Napoleón
había cabalgado
2. Ir o pasar [una cosa sobre otra]. | Faro 31.10.70, 19: En la
carretera de Tuy a La Guardia, y cerca ya de esta villa marinera,
la ruta cabalga sobre el tamuje con un puente de dos ojos.
Lozoya Abc 17.12.70, 10: Cuando .., a través de campos
desolados, sembrados de ruinas, tropezasen con estas arquerías
[el Acueducto] que cabalga sobre un hondo vallecito. b)
Sostenerse [una cosa sobre otra]. | Gnuño Madrid 73: La
soberbia rotonda, la cúpula central, sin linterna, cabalgando
directamente sobre pechinas. Gnuño Esculturas 85: Otras
oferentes llevan la misma copa, y el rostro les queda
apesadumbrado bajo la altura de la mitra o, más que mitra,
manto o velo cabalgando sobre una peineta.
3 (vulg) Realizar [dos pers.] el acto sexual poniéndose una sobre
otra. | FSantos Cabrera 47: Entendía también aquel cerrar los
ojos a la noche en tanto yo y la coima cabalgábamos.
4 ˜ de nuevo. (col, humorist.) Volver a actuar o intervenir. | DLi
30.3.78, 14 (C): «El guapo de la tele» cabalga de nuevo.
B tr. 5 Caminar, o estar, montado [sobre una caballería (cd)] Tb
referido a otro animal. Tb fig. | Pancorbo Ya 6.2.75, 6: Tanta
publicidad de coches lujosos, .. guapas que no hacen más que
ser felices-felices, beber licores maravillosos, cabalgar caballos
blancos y regar las flores de jardines espléndidos les debe sonar
a música celestial a los potenciales delincuentes que viven en
barracas de periferia. Rue 17.11.70, 20: ¡Qué integrista pureza
del toreo .. ha despertado nuestra invitación a la polémica sobre
las posibilidades de evolución de la tauromaquia tomando
como pretexto el gesto e Manuel Benítez en Jaén al cabalgar un
toro! GGómez Abc 21.12.83, 3: Neptuno, cabalgando olas y
vientos como el cosaco de los dioses.
6 Apoyar [una cosa sobre otras]. | Paso Cosas 255: Se dirige al
Enthymema, V 2011, p. 202
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
público mientras realiza su ademán automático de despojarse
de las gafas para cabalgarlas segundos después sobre la nariz.
7 (vulg) Realizar [una pers] el acto sexual [con otra (cd)]
poniéndose sobre ella. | Cela SCamilo 437: Da rienda suelta al
amor cabalgando a la primera moza que se deje.
DRAE: este diccionario da dos entradas para este significante: una como verbo y otra
como sustantivo con la marca de antiguo de la que no se nos da ejemplo alguno. En la
primera, tras el lema, nos muestra la etimología entre paréntesis y pasa al primer
enunciado: considera que la palabras es verbo intransitivo aunque añade la sigla para
abreviar: úsase también como transitivo. Consta de dos acepciones como transitivo y cuatro
como intransitivo. No da ejemplos de ninguna. Utiliza la palabra remos en un sentido que
en este contexto de la equitación correspondería al de «extremidades del animal», nos
preguntamos cuántos estudiantes extranjeros entenderían a primera vista que los remos
no son los de una embarcación: vamos confirmando que este diccionario está pensado
exclusivamente para nativos cultos. La entrada termina con una remisión a una locución
nominal.
SALAMANCA: tras el lema, presenta este diccionario una primera acepción como
verbo transitivo e intransitivo, con ejemplos del uso como transitivo e intransitivo
claramente pensados para estudiantes de ELE pues contienen varios complementos
circunstanciales de modos de cabalgar con las preposiciones en negrita y un sinónimo. La
entrada termina con una remisión al apéndice de las conjugaciones. La definición es
sinonímica, si el verbo va usado como intransitivo no necesita adaptaciones, si el verbo
es transitivo hay que realizar ajustes, eliminar el sintagma en una caballería o usar el
sinónimo:
v. tr. / intr 1 Estar o ir <una persona> montada en una caballería:
Cabalgando todo el día para alejarse del fuego > Iba montado en una caballería todo el día para
alejarse del fuego.
Aunque era dama, siempre cabalgaba a horcajadas o a la jineta y no a la mujeriega > Aunque era
dama, siempre iba montada a horcajadas o a la jineta y no a la mujeriega
A nosotros nos gusta cabalgar los caballos difíciles, porque nuestro padre nos enseñó a dominarlo >
*A nosotros nos gusta ir montados en una caballería los caballos difíciles, porque nuestro padre nos
enseñó a dominarlos > *A nosotros nos gusta estar montados en los caballos difíciles > A nosotros nos
gusta montar los caballos difíciles
El jinete cabalgaba en un hermoso alazán. Yo sólo cabalgo en burro. SIN. Montar.
La segunda acepción es exclusivamente verbo intransitivo. Para la sustitución en los
ejemplos propuestos, habría que suprimir la preposición:
|| v. intr. 2 Estar o ir <una cosa> sobre [otra cosa] :
Las gafas del maestro cabalgan peligrosamente sobre la punta de su nariz > Las gafas del maestro
estaban peligrosamente sobre la punta de su nariz.
Aquellas vigas tiene que cabalgar perfectamente sobre los muros > Aquellas vigas tiene que ir
perfectamente sobre los muros
Enthymema, V 2011, p. 203
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
DUE: de los tres diccionarios es el que contiene la entrada más completa, clara y bien
definida. Tras el lema, este diccionario separa las acepciones en dos grupos, los
pertenecientes a un primer enunciado como verbo intransitivo (A) y los que están dentro
del grupo de los transitivos (B). En el primer grupo tenemos cuatro acepciones la última
de las cuales es una locución verbal con dos marcas de uso: coloquial y humorístico. La
primera acepción tiene una explicación en cursiva y una subacepción con la misma
explicación. La tercera acepción lleva la marca de uso vulgar. Las definiciones son todas
perfectamente sinonímicas:
A intr. 1 Aquí están los dos símbolos de España. El que cabalga en un caballo .. y el que monta en
un burro > Aquí están los dos símbolos de España. El que camina o está montado en un caballo .. y el
que monta en un burro.
b) Napoleón se le había arrimado, y el coronel Dubonet tenía el estribo .. Napoleón había cabalgado
> Napoleón se le había arrimado, y el coronel Dubonet tenía el estribo .. Napoleón había subido a una
caballería
2. En la carretera de Tuy a La Guardia, y cerca ya de esta villa marinera, la ruta cabalga sobre el
tamuje con un puente de dos ojos. Lozoya > En la carretera de Tuy a La Guardia, y cerca ya de esta
villa marinera, la ruta pasa sobre el tamuje con un puente de dos ojos. Lozoya
Cuando .., a través de campos desolados, sembrados de ruinas, tropezasen con estas arquerías [el
Acueducto] que cabalga sobre un hondo vallecito > Cuando .., a través de campos desolados, sembrados
de ruinas, tropezasen con estas arquerías [el Acueducto] que pasan sobre un hondo vallecito.
b) La soberbia rotonda, la cúpula central, sin linterna, cabalgando directamente sobre pechinas >
La soberbia rotonda, la cúpula central, sin linterna, se sostiene directamente sobre pechinas
Otras oferentes llevan la misma copa, y el rostro les queda apesadumbrado bajo la altura de la mitra
o, más que mitra, manto o velo cabalgando sobre una peineta > Otras oferentes llevan la misma copa, y
el rostro les queda apesadumbrado bajo la altura de la mitra o, más que mitra, manto o velo
sosteniéndose sobre una peineta.
3 Entendía también aquel cerrar los ojos a la noche en tanto yo y la coima cabalgábamos >
Entendía también aquel cerrar los ojos a la noche en tanto yo y la coima realizábamos el acto sexual
poniéndonos el unos sobre el otro.
4 ˜ de nuevo. (col, humorist.)«El guapo de la tele» cabalga de nuevo > «El guapo de la tele»
vuelve a actuar de nuevo.
B tr. 5 Tanta publicidad de coches lujosos, .. guapas que no hacen más que ser felices-felices, beber
licores maravillosos, cabalgar caballos blancos y regarla las flores de jardines espléndidos les debe sonar a
música celestial a los potenciales delincuentes que viven en barracas de periferia > Tanta publicidad de
coches lujosos, .. guapas que no hacen más que ser felices-felices, beber licores maravillosos, estar
montadas sobre caballos blancos y regar las flores de jardines espléndidos les debe sonar a música celestial
a los potenciales delincuentes que viven en barracas de periferia.
¡Qué integrista pureza del toreo .. ha despertado nuestra invitación a la polémica sobre las
posibilidades de evolución de la tauromaquia tomando como pretexto el gesto e Manuel Benítez en Jaén
al cabalgar un toro! > ¡Qué integrista pureza del toreo .. ha despertado nuestra invitación a la polémica
sobre las posibilidades de evolución de la tauromaquia tomando como pretexto el gesto e Manuel Benítez
en Jaén al caminar montando sobre un toro!
Neptuno, cabalgando olas y vientos como el cosaco de los dioses > Neptuno, estando montado sobre
olas y vientos como el cosaco de los dioses.
6 Se dirige al público mientras realiza su ademán automático de despojarse de las gafas para
cabalgarlas segundos después sobre la nariz > Se dirige al público mientras realiza su ademán
automático de despojarse de las gafas para apoyarlas segundos después sobre la nariz.
Enthymema, V 2011, p. 204
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
7 Da rienda suelta al amor cabalgando a la primera moza que se deje > Da rienda suelta al amor
realizando el acto sexual poniéndose sobre la primera moza que se deje
3.3.2. cantar
DRAE
cantar1. (Del lat. cantāre, frec. de canĕre).
1. intr. Dicho de una persona: Producir con la voz sonidos
melodiosos, formando palabras o sin formarlas. Cantar con
buena voz. U. t. c. tr. Cantar una canción, zarzuela, un salmo
2. intr. Dicho de algunos animales, especialmente de las aves:
Producir sonidos continuados y generalmente melodiosos.
Canta un ruiseñor. Cantaba un grillo, una rana. U. t. c. tr.
3. intr. Dicho de ciertos artefactos: Sonar reiteradamente.
Cantar los ejes de un carro Cantar una ametralladora
4. intr. Componer o recitar textos en verso para destacar la
significación de algo o de alguien. Canté de amores. U. t. c. tr.
Cantar a la tierra natal, a la amada
5. intr. coloq. Descubrir o confesar, generalmente bajo presión.
U. t. c. tr. El detenido lo ha cantado todo
6. intr. coloq. Dicho especialmente de ciertas partes del cuerpo:
Oler mal. Cantarle los sobacos
7. intr. coloq. Tener señales evidentes de algo. Esta ropa canta A
vieja
8. intr. coloq. Llamar la atención, ser llamativo. Su forma de vestir
canta mucho
9. intr. Mar. avisar (‖ dar noticia).
10. intr. Mar. Sonar el pito como señal de mando.
11. intr. Mar. salomar.
12. intr. Mús. Ejecutar con un instrumento el canto de una
pieza concertante.
13. tr. En ciertos juegos de naipes, declarar el número de
puntos conseguidos al obtener alguna combinación especial de
cartas. Canté las cuarenta, las veinte en oros
14. tr. En el juego del bingo, declarar que se han completado
los números de una línea o de todo el cartón. Han cantado línea
He cantado un bingo
15. tr. celebrar (‖ alabar). Cantar las maravillas de la vida campestre
16. tr. coloq. Decirle a alguien algo de forma clara y sin rodeos,
y aunque le moleste. Le cantó lo que pensaba de él
~ alguien de plano.
1. loc. verb. coloq. Confesar todo lo que se le pregunta o sabe.
~las alguien claras.
1. loc. verb. coloq. Decir lo que se piensa de forma clara y sin
rodeos, aunque pueda molestar.
~ mal y porfiar.
1. loc. verb. coloq. U. contra los impertinentes y presumidos
que molestan repitiendo lo que no saben hacer.
Enthymema, V 2011, p. 205
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Salamanca
cantar v. intr. / tr. 1 Producir <una persona> sonidos
musicales: Ese señor canta muy bien las rancheras. || v. intr. 2
Producir <las aves> sonidos armoniosos: Este canario canta. 3
Producir <algunos insectos> sonidos: Los grillos cantan por la
noche. 4 Producir <una cosa> un sonido. 5 COLOQUIAL
Despedir <una cosa> un olor desagradable: Niño, ventila las
zapatillas, que cantan mucho. 6 COLOQUIAL. Ser <una cosa>
muy evidente: La policía lo pescó, porque cantaba un poco la misma
furgoneta todos los días delante del banco. || v. tr. /intr. 7 Decir
<una persona> una cosa que antes ocultaba] bajo presión: Al
final el preso cantó todo lo que sabía || v.tr. 8 Dedicar <una
persona> alabanzas o poemas [a otra persona o a una cosa]: El
poeta cantó las bellezas del lugar. 9 Decir <una persona> [una
cosa] con entonación: Mañana volverán a cantar la lotería los niños
del Colegio de Huérfanos. 10 Decir <una persona> que tiene [una
jugada especial de cuarenta o veinte puntos] en algunos juegos
de naipes: No me importa perder, lo que no me gusta es cantar las
cuarenta. Canto veinte en bastos. 11 Decir <una persona> que tiene
[premio] en el bingo: He cantado una línea. FR. Y LOC. ˜ como
los ángeles Cantar <una persona> con una voz muy agradable
y fina: Los niños del coro cantaban como los ángeles. ˜ de plano
COLOQUIAL. Decir <una persona> todo lo que sabe de una
cosa: el jefe fe la mafia cantó de plano. ˜ el alirón*. ˜ el
kirieleison*. ˜ las cuarenta COLOQUIAL. Decir <una
persona> abiertamente a otra persona las quejas que tiene de
ella: Esteban no podía aguantar más su desprecio y le cantó las cuarenta.
Ya le cantaré yo las cuarenta a tu hermano cuando llegue a casa. ˜
misa*. ˜ victoria*. En menos que canta un gallo
COLOQUIAL. En muy poco tiempo: Avise a Eva para que
viniera y en menos que canta un gallo estaba llamando a la puerta. otro
gallo* le cantara. Ser coser* y ˜.
DUE
Cantar1 I. v A intr. 1 Emitir [una persona] con la voz sonidos
armoniosos. | Halcón Manuela 41: Tenía una voz preciosa, sin
educar –para cantar y para decir–.
2 Producir [un animal, esp. un ave] sonidos más o menos
armoniosos o estridentes. | Lama Aves 24: Se dirigía hacia la
jaula de su animalito preferido, un preciosos Pardillo, y tras
invitarle a cantar .. le echaba un poco de agua en el fondo de su
cacharro. Torbado Tierra 241: Los animales no cantan, los
hombres realizan en silencio su trabajo, el rumor de los carros
se confunde con el del firmamento. Payno Curso 21: cantaba un
grillo.
3 Producir [algo] un ruido peculiar o característico. |
SFerlosio Jarama 120: En un silencio se había escuchado en el
grupo un burbujeo de intestinos, y uno comentó: «Alguien le
cantan las tripas…». APaz Circulación 124: ¿No se había reído
Enthymema, V 2011, p. 206
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
usted nunca de los que le cantan las suelas de los zapatos?
Hoyo Glorieta 108: La fuente cantaba dentro de los cántaros,
hasta que, una vez llenos, vertíase el agua por sus bocas.
4 Presentar [algo] un argumento decisivo. | S. Codina Mun
23.5.70, 60: Los cuatro primeros puestos de la Liga española
[de fútbol] han sido copados por equipos sometidos a la
dirección
técnica
de
preparadores
extranjeros.
Indiscutiblemente, sí, puesto que la clasificación canta.
5 (col) Oler, esp. mal. A veces con compl A. | Forges Forges nº 2
56: –José María: ya no me quieres como antes. –Vale. –…Y
además te cantan los pinreles. Marsé Dice 349: Hace mucho
tiempo, alguien descubrió el refugio y nos espió desde el
vestuario. Seguramente una caquetista, la almeja le cantaba a
incienso, la tuve sentada en mis narices. Tomás Orilla 221:
Toma, una china de chocolate. Pero hazte la fumata de noche,
que canta demasiado.
6 otro gallo le cantara → GALLO.
B tr 7 Emitir con la voz los sonidos y la letra [de una
composición musical (cd)]. | Ribera Misal 115: Para las Misas
cantadas, se señala con negrita lo que ha de cantar el pueblo,
como en los Kyries, Gloria, Credo. b) Tararear [una
composición musical]. | * No para de cantar el Bolero de
Ravel.
8 Recitar [un texto en verso] acomodándo[lo] a una partitura. |
Valls Música 418: Los «picayos» .. son danzas con letrillas
cantadas.
9 recitar [algo] con una entonación especial. Tb abs. | Ribera
Misal 452: Leído el Gradual y el Tracto, el que ha de cantar o
leer la Pasión pide la bendición con el munda cor deum.
ZVicente Hojas 120: Todos a clase .., mientras crece,
livianamente tibio, el run-run de la tabla de multiplicar, dos por
dos cuatro, .. cinco por tres quinde –¡Aquel rincón no canta!
10 Anunciar o proclamar [algo] con una entonación especial. |
Nue 22.12.70, 18: Sorteo extraordinario de la lotería. Se tiene la
intención .. que [sic] a las nueve en punto de la mañana se cante
la primera bola. Cuevas Finca 76: Cuando se desenlió el último
primal y se cantó su peso –9 con 8–, una libra menos por la
soguilla. Lera Olvidados 58: El comprador allegaba las seras al
pesador y este cantaba un número:
–¡Veintiocho! Delibes Madera 417: Una vez que el cabo Tubío
giró el telémetro y se puso a cantar distancias .., el cabo Pita
pronunció aquella frase lapidaria. b) En gral: Anunciar. |
Delibes Mundos 52: El mar se introdujo más de doscientos
metros en una extensa zona del norte del país, y el sismógrafo
cantó un tercer grado. Cam 21.7.75, 18: El keroseno esparcido
en el lugar donde cayeron los aparatos «cantó» el punto exacto
donde se encontraban los restos. Lo primero que encontró uno
de los civiles fue la punta de una de las alas de una «Saeta». c)
Enthymema, V 2011, p. 207
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
(Naipes) Decir en voz alta [puntos u otra circunstancia]. |
VAzpiri Fauna 46: Se confundían los blancos y los negros del
tablero; eran pardos y amarillentos. Cantó uno lejos las
cuarenta. Naipes extranjeros 91: Lo gana [el juego parcial] el
jugador contrario si el valor de sus cartas sin combinar es igual
o menor al de las 18: Es importante el cantar el número de
cartas que se pidan, porque esto orienta a todos los jugadores
sobre la jugada que se pretende hacer. [En el póker.]
11 Dar por seguro [algo que aún no ha ocurrido, esp. un gol o
una victoria]. | Tb fig. | L. Arnaiz As 7.12.70, 9: Ya se cantaba
el gol en los graderíos. Abc 20.4.76, 59: Se afianzan Burgos,
Celta y Málaga en los tres puestos del ascenso. Pero quedan
siete jornadas –catorce puntos– y nadie puede cantar victoria
todavía.
12 Convertir en tema de una obra poética [a alguien o algo],
gral. para ensalzar[lo]. Tb fig. | Valverde Literatura 42: La mayor
parte de los poetas «de cancionero» .. eran profesionales a
sueldo ..; con frecuencia, su misión era cantar a las amadas de
sus señores. Pedraza-Rodríguez Literatura 2, 578: esta
denominación [Caroliadas] .. engloba a todos aquellos poemas
épicos destinados a cantar las gestas imperiales. MSantos
Tiempo 170: La caída .. se produjo a través e los meandros y
complejidades que canta la fábula.
13 (col) Confesar [algo] en un interrogatorio, esp. policial. Tb
abs. | CBaroja Inquisidor 38: Las gentes «cantaban» lo que se
quería que cantasen y confesaban incluso culpas que se les
atribuían. Laforet Mujer 165: Eso de aguantar las preguntas
está muy bien para pensarlo, pero luego no se tiene resistencia
ninguna. Se canta todo. Goytisolo Recuento 174: –Pero, ¿qué
pasa? –Supongo que nada, acojonamiento colectivo. Lo único
seguro es que esos tíos han cantado hasta desgañitarse. Pero es
por si acaban por decir hasta lo que no saben y aciertan.
14 ˜ las verdades, o ˜selas, o ˜(se)las claras, [a alguien]. (col)
Hablar[le] francamente haciéndo[le] los reproches que merece.
| MSantos Tiempo 32: Le canto las verdades al lucero del alba.
Delibes Príncipe 105: –Y el Abelardo ¿qué? –Se queda. Pero ya
se las canté. Tenía ganas de cantárselas.
15 ˜ la gallina, ˜ las cuarenta → GALLO, CUARENTA.
II. loc adv. 16 en menos que canta un gallo → GALLO.
DRAE: este diccionario categorizará la palabra en dos lemas diferentes: uno como
verbo y otro como sustantivo. Como verbo, tras el lema es categorizado como
intransitivo aunque con la abreviatura que usa DRAE para explicar que también se usa
como transitivo. Los contornos se señalan con la frase dicho de + (el contorno en
cuestión). Hay ejemplos de las ocho primeras acepciones, pero no de las últimas, que son
quizá las más difíciles de entender. Algunos ejemplos no aclaran el significado: el detenido
cantó todo no nos parece que dé la idea de cantar como «confesar» más que por ser una
actividad propia de los detenidos, podría haberse añadido en el interrogatorio, por ejemplo.
Enthymema, V 2011, p. 208
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Todas las acepciones y locuciones que de este lema nos da el DRAE serán recogidas por
DUE, no así por el Diccionario Salamanca.
SALAMANCA: tras el lema, se categoriza la palabra como verbo transitivo e
intransitivo. La primera acepción lleva una definición que quiere ser propia o sinonímica
pero que solo lo consigue en parte dado el problema ya mencionado de mezclar en la
misma acepción las categorías de transitivo e intransitivo, lo vemos en su propio
ejemplo:
Ese señor canta muy bien las rancheras > *Ese señor produce sonidos musicales muy bien las
rancheras
??? Ese señor produce muy bien las rancheras (¿Sería equivalente producir rancheras y cantar
rancheras? No lo parece, la primera podría hacerse sin cantar, por ejemplo tocando la
guitarra o siendo productor de una casa discográfica de rancheras).
Siguen 9 acepciones y la fraseología, la tercera acepción, sin ningún ejemplo. En la
definición de la número 5 hay que cambiar el cuantificador del ejemplo para que
funcione la sustitución sinonímica. En general algunas definiciones parecen un poco
ambiguas:
2 Producir <las aves> sonidos armoniosos:
Este canario canta > Este canario produce sonidos armoniosos
3 Los grillos cantan por la noche > Los grillos producen sonidos por la noche. (También en este
caso la sustitución parece conllevar una pérdida, un residuo
5 Niño, ventila las zapatillas, que cantan mucho > Niño, ventila las zapatillas, que despiden un
olor muy desagradable.
6 En la 6ª, la sustitución se hace compleja:
La policía lo pescó, porque cantaba un poco la misma furgoneta todos los días delante del banco >
La policía lo pescó, porque un poco la misma furgoneta todos los días delante del banco era muy evidente.
v. tr. /intr. 7 Al final el preso cantó todo lo que sabía > Al final el preso dijo bajo presión todo lo
que sabía que antes ocultaba […]
v.tr. 8 Definición propia correcta:
El poeta cantó las bellezas del lugar > El poeta dedicó alabanzas a las bellezas del lugar
9 Mañana volverán a cantar la lotería los niños del Colegio de Huérfanos > Mañana volverán
decir con entonación la lotería los niños del Colegio de Huérfanos.
10 Definición propia correcta:
No me importa perder, lo que no me gusta es cantar las cuarenta. Canto veinte en bastos > No me
importa perder, lo que no me gusta es decir que tengo las cuarenta. Canto veinte en bastos.
11 He cantado una línea > He dicho que tengo una línea.
DUE: tras el lema, el DUE separa las acepciones en 2 grupos:
I (verbo): a su vez subdividido en otros dos:
A acepciones como intransitivo (seis, la última es una locución oracional con una
remisión)
B acepciones como verbo transitivo (nueve, las dos últimas son locuciones
verbales)
II (locución adverbial).
Sometamos las definiciones a sustitución sinonímica:
I. v A intr. 1 Tenía una voz preciosa, sin educar –para cantar y para decir– > Tenía una voz
preciosa, sin educar –para emitir con la voz sonidos armoniosos y para decir.
Enthymema, V 2011, p. 209
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
2 Se dirigía hacia la jaula de su animalito preferido, un preciosos Pardillo, y tras invitarle a cantar ..
le echaba un poco de agua en el fondo de su cacharro > Se dirigía hacia la jaula de su animalito
preferido, un preciosos Pardillo, y tras invitarle a producir sonidos más o menos armoniosos o estridentes
.. le echaba un poco de agua en el fondo de su cacharro.
Los animales no cantan, los hombres realizan en silencio su trabajo, el rumor de los carros se
confunde con el del firmamento > Los animales no producen sonidos más o menos armoniosos, los
hombres realizan en silencio su trabajo, el rumor de los carros se confunde con el del firmamento.
3 En un silencio se había escuchado en el grupo un burbujeo de intestinos, y uno comentó: «Alguien
le producen un ruido característico las tripas…» > En un silencio se había escuchado en el grupo un
burbujeo de intestinos, y uno comentó: «Alguien le cantan las tripas…»
¿No se había reído usted nunca de los que le cantan las suelas de los zapatos? > ¿No se había reído
usted nunca de los que le producen un ruido peculiar las suelas de los zapatos?
La fuente cantaba dentro de los cántaros, hasta que, una vez llenos, vertíase el agua por sus bocas >
La fuente producía un ruido peculiar dentro de los cántaros, hasta que, una vez llenos, vertíase el agua
por sus bocas.
4 Los cuatro primeros puestos de la Liga española [de fútbol] han sido copados por equipos
sometidos a la dirección técnica de preparadores extranjeros. Indiscutiblemente, sí, puesto que la
clasificación canta > Los cuatro primeros puestos de la Liga española [de fútbol] han sido copados por
equipos sometidos a la dirección técnica de preparadores extranjeros. Indiscutiblemente, sí, puesto que la
clasificación presenta un argumento decisivo.
5 (col) –José María: ya no me quieres como antes. –Vale. –…Y además te cantan los pinreles. > –
José María: ya no me quieres como antes. –Vale. –…Y además te huelen mal los pinreles.
Hace mucho tiempo, alguien descubrió el refugio y nos espió desde el vestuario. Seguramente una
catequista, la almeja le cantaba a incienso, la tuve sentada en mis narices > Hace mucho tiempo, alguien
descubrió el refugio y nos espió desde el vestuario. Seguramente una catequista, la almeja le olía a
incienso, la tuve sentada en mis narices
Toma, una china de chocolate. Pero hazte la fumata de noche, que canta demasiado > Toma, una
china de chocolate. Pero hazte la fumata de noche, que huele demasiado.
6 otro gallo le cantara → GALLO.
B tr 7 Para las Misas cantadas, se señala con negrita lo que ha de emitir con la voz el pueblo, como
en los Kyries, Gloria, Credo. > ??Para las Misas emitidas con la voz los sonidos y la letra… > para
las misas cuyos sonidos y letras emitidas con la voz, se señala con negrita lo que ha de emitir la voz del
pueblo
b) * No para de cantar el Bolero de Ravel > No para de tararear Bolero de Ravel.
8 Los «picayos» .. son danzas con letrillas cantadas > Los «picayos» .. son danzas con letrillas
recitadas acomodándolas a las partituras.
9 Leído el Gradual y el Tracto, el que ha de cantar o leer la Pasión pide la bendición con el munda
cor deum > Leído el Gradual y el Tracto, el que ha de recitar co una entonación especial o leer la Pasión
pide la bendición con el munda cor deum.
Todos a clase .., mientras crece, livianamente tibio, el run-run de la tabla de multiplicar, dos por dos
cuatro, .. cinco por tres quinde –¡Aquel rincón no canta! > Todos a clase .., mientras crece, livianamente
tibio, el run-run de la tabla de multiplicar, dos por dos cuatro, .. cinco por tres quinde –¡Aquel rincón no
recita!
10 Sorteo extraordinario de la lotería. Se tiene la intención .. que [sic] a las nueve en punto de la
mañana se cante la primera bola > Sorteo extraordinario de la lotería. Se tiene la intención .. que [sic]
a las nueve en punto de la mañana se anuncie la primera bola.
Cuando se desenlió el último primal y se cantó su peso –9 con 8–, una libra menos por la soguilla >
Cuando se desenlió el último primal y se proclamó su peso –9 con 8–, una libra menos por la soguilla.
Enthymema, V 2011, p. 210
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
El comprador allegaba las seras al pesador y este cantaba un número: –¡Veintiocho! > El
comprador allegaba las seras al pesador y este proclamaba un número: –¡Veintiocho!
Una vez que el cabo Tubío giró el telémetro y se puso a cantar distancias .., el cabo Pita pronunció
aquella frase lapidaria > Una vez que el cabo Tubío giró el telémetro y se puso a proclamar con
entonación especial distancias .., el cabo Pita pronunció aquella frase lapidaria
b) El mar se introdujo más de doscientos metros en una extensa zona del norte del país, y el
sismógrafo cantó un tercer grado > El mar se introdujo más de doscientos metros en una extensa zona
del norte del país, y el sismógrafo anunció un tercer grado.
El keroseno esparcido en el lugar donde cayeron los aparatos «cantó» el punto exacto donde se
encontraban los restos. Lo primero que encontró uno de los civiles fue la punta de una de las alas de una
«Saeta». > El keroseno esparcido en el lugar donde cayeron los aparatos «anunció» el punto exacto
donde se encontraban los restos. Lo primero que encontró uno de los civiles fue la punta de una de las
alas de una «Saeta».
c) Se confundían los blancos y los negros del tablero; eran pardos y amarillentos. Cantó uno lejos las
cuarenta > Se confundían los blancos y los negros del tablero; eran pardos y amarillentos. Dijo en voz
alta uno lejos las cuarenta
11 Ya se cantaba el gol en los graderíos > Ya se daba por seguro el gol en los graderíos.
Se afianzan Burgos, Celta y Málaga en los tres puestos del ascenso. Pero quedan siete jornadas –
catorce puntos– y nadie puede cantar victoria todavía > Se afianzan Burgos, Celta y Málaga en los tres
puestos del ascenso. Pero quedan siete jornadas –catorce puntos– y nadie puede dar por segura la victoria
todavía.
12 La mayor parte de los poetas «de cancionero» .. eran profesionales a sueldo ..; con frecuencia, su
misión era cantar a las amadas de sus señores. > La mayor parte de los poetas «de cancionero» .. eran
profesionales a sueldo ..; con frecuencia, su misión era convertir a las amadas de sus señores en tema de
obras poéticas
Esta denominación [Caroliadas] .. engloba a todos aquellos poemas épicos destinados a cantar las
gestas imperiales > Esta denominación [Caroliadas] .. engloba a todos aquellos poemas épicos
destinados a convertir las gestas imperiales en tema de obras poéticas
La caída .. se produjo a través e los meandros y complejidades que canta la fábula > La caída .. se
produjo a través e los meandros y complejidades la fábula convierte en tema de una obra poética.
13 (col) Las gentes «cantaban» lo que se quería que cantasen y confesaban incluso culpas que se les
atribuían > Las gentes «confesaban en interrogatorio» lo que se quería que confesaran y confesaban
incluso culpas que se les atribuían.
Eso de aguantar las preguntas está muy bien para pensarlo, pero luego no se tiene resistencia
ninguna. Se canta todo > Eso de aguantar las preguntas está muy bien para pensarlo, pero luego no se
tiene resistencia ninguna. Se confiesa todo.
–Pero, ¿qué pasa? –Supongo que nada, acojonamiento colectivo. Lo único seguro es que esos tíos han
cantado hasta desgañitarse. Pero es por si acaban por decir hasta lo que no saben y aciertan > –Pero,
¿qué pasa? –Supongo que nada, acojonamiento colectivo. Lo único seguro es que esos tíos han confesado
en el interrogatorio hasta desgañitarse. Pero es por si acaban por decir hasta lo que no saben y aciertan.
14 ˜ las verdades, o ˜selas, o ˜(se)las claras, [a alguien]. (col)
Le canto las verdades al lucero del alba > Le hablo francamente haciéndoles los reproches que merece
al lucero del alba.
–Y el Abelardo ¿qué? –Se queda. Pero ya se las canté. Tenía ganas de cantárselas > –Y el
Abelardo ¿qué? –Se queda. Pero ya le hablé francamente haciéndole los reproches que se merecía. Tenía
ganas de cantárselas.
15 ˜ la gallina, ˜ las cuarenta → GALLO, CUARENTA.
II. loc adv. 16 en menos que canta un gallo → GALLO.
Enthymema, V 2011, p. 211
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Como vemos, todas las definiciones son propias y están perfectamente calibradas.
3.4. Adverbios
3.4.1. casi
DRAE
casi. (Del lat. quasi).
1. adv. c. Poco menos de, aproximadamente, con corta
diferencia, por poco. U. t. repetido. Casi, casi me caigo.
~ que.
1. expr. Tiene sentido modal. Casi que parece de ayer.
□ V.
casi contrato
Salamanca
casi adv. cant. 1 Indica que falta poco para que se cumpla o
complete la acción, estado, cantidad, cualidad o cualquier otra
cosa expresada por la palabra a la que acompaña : Esto cuesta
casi cinco mil pesetas. El trabajo está casi acabado. La tela era casi
amarilla. El huevo ya está casi cocido. Casi tropiezo. || adv. modo 2
RESTRINGIDO, COLOQUIAL (con frecuencia repetido)
Expresa indecisión o duda: Casi me quedo con el abrigo verde. Casi
me voy de casa. Casi deberías avisar al médico. FR. Y LOC. ¡˜ nada!
Contestación irónica con que se resalta la importancia de lo que
ha dicho otra persona: –«¡Han venido unos cien coches esta semana!»
–«Casi nada!» ˜ que COLOQUIAL. Expresa indecisión e invita
a tomar una determinación: Casi que deberías acostarte.
DUE
casi (con pronunc normalmente átona delante de las palabras
NUNCA, SIEMPRE, TODO, NADIE, NADA, NINGUNO)
adv 1 No completamente, pero faltando poco para ello. A veces
(col) por énfasis, repetido. Precediendo al v, tb (pop) ˜ QUE. | Arce
Testamento 59: Cada vez que chupaba para tomar lumbre nos
quedábamos casi en tinieblas. RIriarte Noche 163: Ya, casi, casi,
sabemos quién es cada uno. FReguera-March Cuba 226:
Esteban Pedrell seguía de cerca de Carballo. Casi no pensaba
en otra cosa: seguirle adondequiera que fuese. b) A veces referido
a un n, al que normalmente precede. | Pinilla Hormigas 87: Las
piedras, las casi peñas, las fuimos llevando a vueltas. c) sin ˜.
Completamente. Siguiendo a un enunciado con ˜ . | * –Está casi
en ruina. –Sin casi. * Es casi un santo, y sin casi.
2 (col) Se emplea para atenuar, por cortesía o por indecisión, el sent de la
frase. A veces por énfasis, repetido. | *Casi podemos dejarlo para
mañana. *Casi casi me apetece más quedarme.
Enthymema, V 2011, p. 212
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
DRAE: tras el lema y la etimología, nos categoriza la palabra como adverbio con una
escueta definición. Nos añade que se usa también repetido, con un ejemplo un tanto
pobre y que después de que es de uso coloquial, con otro breve ejemplo muy poco
contextualizado. Esta entrada sería demasiado parca para un estudiante de ELE. Algunos
adverbios admiten una definición propia, otros necesitan de una explicación. Esta
entrada no da ni una cosa ni otra: ni podemos sustituir la palabra por su definición en
muchos ejemplos: casi me caigo > *poco menos de me caigo, ni podemos hacernos una idea
completa para un posterior uso creativo de la palabra solo con la definición.
SALAMANCA: tras el lema, se nos dice en el primer enunciado que la palabra es un
adverbio de cantidad, como tal lleva una acepción con su ejemplo y, después, tras las dos
rayitas que en este diccionario separan categorías, se nos dice que es adverbio de modo,
hay también una definición con su ejemplo como adverbio de modo. La entrada termina
con una unidad fraseológica y un uso coloquial del adverbio que va en la sección de
fraseología porque funciona supraoracionalmente: modifica no a un verbo o a un
adjetivo sino a todo el enunciado indicando modalidad. Las definiciones no sinonímicas,
pues no comienzan con un adverbio que pudiera sustituirse por casi, sino por una
explicación, seguida de su ejemplo. La segunda lleva además dos marcas: coloquial y
restringido.
Son definiciones explicativas. No estamos de acuerdo con el primer enunciado de la
locución, pues creemos no siempre ¡casi nada! es una contestación a lo que ha dicho otra
persona, aunque lo haga muy frecuentemente podría el hablante usarla para resaltar
(irónicamente o no) la importancia de lo que él mismo ha dicho: Me voy a China con el pesado de
tu hermano ¡casi nada!
DUE: a continuación del lema y antes de decirnos que se trata de un adverbio, este
diccionario nos da una interesante indicación de pronunciación, esto es, que la palabra es
átona ante ciertos adverbios y pronombres indefinidos. No se especifica qué tipo de
adverbio es (de cantidad, tiempo, etc.). No contiene el uso coloquial de casi + que
contenido en el diccionario anterior. La entrada termina con una segunda acepción que
lleva una definición explicativa con una interesante indicación de tipo pragmático y dos
ejemplos en que se nos muestra que con este adverbio solemos atenuar cortésmente
(decisiones, responsabilidades, decisiones, etc.) en la coloquialidad, este uso no estaba en
el diccionario anterior a pesar de ser muy frecuente ya en el 1996.
La primera definición, que lleva dos subacepciones, es sinonímica y los ejemplos
toleran bien las sustituciones, quizá el tercero y el de la subacepción (b) más
forzadamente:
1 Cada vez que chupaba para tomar lumbre nos quedábamos casi en tinieblas > Cada vez que
chupaba para tomar lumbre nos quedábamos no completamente, pero faltando poco para ello, en
tinieblas
Ya, casi, casi, sabemos quién es cada uno > Ya sabemos quién es cada uno, no completamente, pero
faltando poco para ello.
Casi no pensaba en otra cosa: seguirle adondequiera que fuese > No completamente pero faltando
poco para ello no pensaba en otra cosa: seguirle adondequiera que fuese o mejor Pensaba, no
completamente pero faltando poco para ello, en seguirle…
Enthymema, V 2011, p. 213
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
b) Las piedras, las casi peñas, las fuimos llevando a vueltas > Las piedras, las no completamente
peñas pero faltando poco para serlo, las fuimos llevando a vueltas >
La segunda subacepción de esta primera definición del lema es una locución adverbial
cuya definición sinonímica (acompañada de explicación en cursiva) es perfectamente
susceptible de sustitución en los dos ejemplos inventados ad hoc:
c) sin ˜. * –Está casi en ruina. –Sin casi. * Es casi un santo, y sin casi > –Está casi en ruina.
–Completamente.
* Es casi un santo, y sin casi > Es casi un santo, y completamente
3.4.2. ya
DRAE
ya. (Del lat. iam).
1. adv. t. Denota el tiempo pasado. Ya hemos hablado de esto más
de una vez.
2. adv. t. Inmediatamente, ahora mismo. U. t. en sent. enfático.
Aumento de salarios, ya.
3. adv. t. En el tiempo presente, haciendo relación al pasado.
Era muy rico, pero ya es pobre.
4. adv. t. En tiempo u ocasión futura. Ya nos veremos. Ya se hará
eso.
5. adv. t. Finalmente o últimamente. Ya es preciso tomar una
resolución.
6. adv. t. Luego, inmediatamente. U. cuando se responde a
quien llama. Ya voy. Ya van.
7. adv. t. U. como conjunción distributiva. Ya en la milicia, ya en
las letras. Ya con gozo, ya con dolor.
8. adv. t. U. para conceder o apoyar lo que nos dicen. Ya se ve.
Ya entiendo.
pues ~.
1. loc. conjunt. Por supuesto, ciertamente. U. m. en sent. irón.
que ya ya.
1. expr. coloq. U. para enfatizar lo que se acaba de decir.
si ~.
1. loc. conjunt. siempre que. Haré cuanto quieras, si ya no me pides
cosas impropias de un hombre de bien.
ya.
1. interj. coloq. U. para denotar que se recuerda algo o que se
cae en ello, o que no se hace caso de lo que se nos dice. U.
repetida, y de esta manera expresa también idea de
encarecimiento en bien o en mal.
~ mero.
1. loc. adv. Méx. En seguida, en un momento más.
~ que.
1. loc. conjunt. Una vez que, aunque, dado que. Ya que tu
desgracia no tiene remedio, llévala con paciencia.
2. loc. conjunt. Porque, puesto que. Ya que lo sabes, dímelo.
Enthymema, V 2011, p. 214
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Salamanca
ya adv. temp. Confirma la realización de la acción, circunstancia
o hecho del que se habla. 11 Cuando esta acción, circunstancia
o hecho es el resultado de un proceso previsto o natural: Ya eres
toda una mujer. 12 Cuando esta acción, circunstancia o hecho es
algo que se desea, se teme o se espera: ¿Ya has llegado? Ya
podemos irnos. OBSERVACIONES: En todas las acepciones
temporales, presupone que en un momento anterior se da la
situación contraria y por eso se niega con aún no y no con ya no:
¿Ya duerme? No, aún no duerme. 2 Con relación al pasado,
equivale e «en ese momento», «en la actualidad»: Pablito ya come
muy bien. Tenía su despacho de abogado en casa, pero ya no se dedica al
Derecho. Puedes utilizar la impresora, ya no la necesito.
OBSERVACIONES: No admite la matización con
preposiciones, excepto con desde en uso coloquial: Empezamos a
imprimir los carteles desde ya mismo. 3 (con verbos en futuro)
Equivale a «en otro momento», «dentro de algún tiempo», «en
el futuro»: Ya nos veremos. Ya lo haremos otro día. 4 (con verbos en
futuro) Intensifica especialmente la esperanza, promesa o
amenaza con que se dice que ocurrirá una cosa: Tranquilo, ya os
invitaré a cenar. Ya hablaremos cuando vuelva. ¡Ya verás cuando se entere
tu padre! OBSERVACIONES: Se repite a final de frase como
intensificador: ¡Ya estudiarás, ya! 5 (con verbos en presente)
Equivale a «enseguida», «inmediatamente», «pronto»: La comida
la sirven ya. OBSERVACIONES: Con la forma mismo toma un
sentido enfático o intensificador: Avisa a tu madre ya mismo para
que no nos espere. 6 INTENSIFICADOR. Intensifica la
afirmación, negación o pregunta que se hace: Ya he entendido lo
que quieres decir. Este árbol ya no crecerá más. ¿Ya quieres comer? 7
(con el verbo poder) En pretérito imperfecto de indicativo,
expresa queja o disgusto: ¡Ya podían haber avisado antes! 71 En
presente expresa ánimo o aviso: ¡Ya pueden ir pasando al salón! 8
En el diálogo, expresa asentimiento o resignación: – «No hemos
encontrado entradas.»
–«Ya» OBSERVACIONES: Se usa
frecuentemente para contraponer una cosa mediante una
adversativa fuerte: –«No tenemos zapatillas rojas.» –«Ya, pero yo las
quiero rojas.» || conj. distrib. 9 Relaciona dos posibilidades que se
alterna: equivale a «o… o»: Ya sea a las cinco, ya sea a las siete la
reunión se celebrará || interj. 10 (sola o acompañada de verbos
como entender o recordar) Se usa para indicar que se ha entendido
algo que no se entendía o se recuerda algo que ya no se
recordaba: Ya me acuerdo, tú eres la hija de Marcelo. Ya entiendo. Ya
veo. 11 Expresa incredulidad o sorpresa ante lo que dice una
persona: –«Soy actor profesional.» –«Ya, ya... ¡y yo cantante de boleros!«
–«Mamá, nos vamos al cine» –«¿Ya, tan pronto?» FR Y LOC.
desde* ˜. no ˜… sino o ˜ no... sino. 1 Se usa con carácter
aditivo para generalizar lo que se dice: Fueron invitados, ya no sólo
Enthymema, V 2011, p. 215
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
los familiares, sino todos los amigos y vecinos. 2 Se usa con carácter
adversativo: Los obreros negociaron no ya que les subieran los sueldos,
sino que les mantuvieran el puesto de trabajo. Espero que cambies de
conducta ya no por mí, sino por tu familia. ˜ que conj. causal Introduce
una causa como explicación de lo que expresa otra: Ya que no
hay solución, no insistas más. 1 Encabezando una proposición en
posición inicial, expresa un hecho evidente en el contexto, que
justifica otro relacionado con una decisión o impulso: ya que
hace tan bueno, ¿por qué no vamos al campo? Ya que estás de pie,
alcánzame un vaso, por favor. Ya que te pones tan pesada, me voy.
OBSERVACIONES: ◊ (En tono emotivo o enfático, a
menudo reforzado por al menos, siquiera) Introduce una
proposición que expresa una carencia o falta que el hablante
toma como justificación para pedir o exigir algo: ya que no haces
nada, al menos no estorbes. 2 Encabezando una proposición en
posición no inicial: Vámonos de aquí, ya que se ponen tan pesados. ¿Y
por qué no lo alcanzas tú ya que eres tan buen mozo? Que lo haya ella, ya
que tanto interés tenía. 3 Puede presentar una circunstancia
explicativa novedosa: Por favor, hazlo tú, ya que seguramente no
terminaré antes de las dos. En este caso puede justificar hechos que
no están relacionados con la voluntad: Sencillo no es, ya que
Einstein no logró resolverlo. No se veían bien las pisadas, ya que se había
hecho de noche. SIN: pues. RELACIONES Y CONTRASTES:
La locución ya que es mucho más usada que pues en el lenguaje
oral: Ya que nadie le recibía decidió irse. Ya que no tiene trabajo, podía
estudiar algo.
DUE
ya I adv 1 Denota que el hecho enunciado por el v al que acompaña se
realiza desde un momento anterior al indicado por el tiempo verba l. |
FSantos Catedrales 64: Antonio ya por entonces era medio
novio mío. Medio Bibiana 16: Pues ya ves. b) Con el verbo en
tiempo perfecto destaca la idea de anterioridad que ese tiempo indica. |
Delibes Guerras 238: Don Santiago nunca tenía prisas, doctor,
ya se lo he dicho.
2 (lit, raro) En otro tiempo. | Cela Judíos 57: Peñaranda ya fue
más de lo que es hoy.
3 Unido a un adv de negación, indica que no se alcanza en el tiempo el
hecho expresado por el v. | FSantos Catedrales 75: Miradas de
refilón al espejo con anuncio de una coñac que no existe ya,
que ya no se fabrica.
4 Denota que por fin se realiza un hecho que se esperaba, se deseaba o era
natural que ocurriese. | Cunqueiro Un hombre 9: Se podía ver ya
la alta torre de la ciudadela sobre los rojos tejados. Delibes
Príncipe 151. Les abrió la Valen: –¿Ya estáis aquí? –dijo
malhumorada.
5 Presenta como más seguro un hecho venidero. | Medio Bibiana 10:
¡Mátese usted a trabajar, Marcelo Prats, que todo lo que usted
Enthymema, V 2011, p. 216
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
gane ya lo tirarán los chicos en sus juergas! Delibes Príncipe 123:
ya verá cómo va a resultar que es su hija.
6 Inmediatamente. Tb (col), con matiz enfático, ˜ MISMO. |
FSantos Cabeza 59: –Juana… –Ya va. –El almuerzo. ¿Está? –
Ya va, ya va. CBonald Dos días 35: Lo dicho, ya mismo me
meto con eso. b) desde ˜. (col) Desde ahora mismo. A veces se
usa con valor sumamente enfático. | Cam 10.2.76, 9: Los partidos
de la oposición azuzaron al gobierno a reclamar esos territorios
y a nombrar el heredero, desde ya. «Príncipe del Sahar».
FSantos Catedrales 187: Luego me la encontré bailando con un
chino o un japonés o uno de esos del Vietnam que dan tanta
guerra, pero que desde ya, le llegaba al ombligo.
7 Formando or por sí solo, expresa comprensión de lo que se acaba de oír.
A veces con matiz de escepticismo. | Arce Precio 210: –¿Qué ha
tomado? – «Fanodormo» –Ya – asintió. SFerlosio Jarama 18: –
¿Por qué dices eso? –¿El qué? –Eso que acabas de decir. –¿Qué
tierra es esta? Pues será porque estoy mirando el campo. –Ya. –
No, no te rías.
8 Ciertamente. | Zunzunegui Hijo 38: No se trata de eso…,
pero a mí ya me gustaría verlos… Luego, si hay muchas fiestas,
algo disfrutaremos los pobres. b) (reg) Con valor expletivo |
Aldecoa Gran Sol 17: Pesca ya quieren que traigamos, pero
malleta no hay. ¡Gentuza! ¡Gentuza! c) En una réplica, seguido del
v en fut o antefut, denota objeción. | Aldecoa Gran Sol 18: –
¿Habéis hecho la SALAMANCA para el bacalao? –Sí, señor
Simón. –¿Cuánta sal? –Siete sacos –Ya serán más. Delibes
Madera 376: ¿Una reverencia? Ya sería una broma.
9 Repetido ante dos (o más) miembros de la frase, presenta estos como
términos de una alternativa. A veces ˜ … o … | E. Toda MHi 2.64,
31: Tener auto «importado» va adquiriendo prestigio. Ya como
signo elegante .., ya como señal de deportivismo. Huarte
Tipografía 65: La cubierta .. puede ir impresa en negro, en color
o a dos colores, y su estilo debe acomodarse al contenido del
libro: severo, elegante, de fantasía, etcétera, ya se trate de obras
científicas, libros de ficción o escolares.
10 que ˜ ˜ (col) Refuerza enfáticamente lo que acaba de decir. |
ZVicente Traque 65: Y es que menuda vocación tengo yo para
enseñar. Un impulso que ya ya.
11 no ˜→ NO
II conj 12 ˜ que. Puesto que. | Inf 12.12.73, 1: Las gestiones se
están haciendo con cierta prisa, ya que el Consejo .. se reúne le
próximo lunes día 17
13 ˜ que. Aunque. Seguido frec de v en subj. | *Ya que no
trabajes, deja. Goytisolo Recuento 386: El golpe, el golpe bajo,
consistía simplemente en que ese arreglo privado se hiciera
noticia pública, y en que no solo Bellido, sino también doña
Dulce y Nuria, ya que no los pequeños, lo supieran.
14 ˜ que. (reg) Cuando. | Aldecoa Gran Sol 66: cuando llegó
Enthymema, V 2011, p. 217
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
al rancho estaba congestionado de ira. Ya que se calmó dijo: –
Matao, a picar.
DRAE: tras el lema y la etimología, se nos dan las acepciones de la palabra
categorizada como adverbio de tiempo: a una primera definición impropia, de tipo
explicativo, con su ejemplo, siguen otras cinco definiciones sinonímicas con sus
ejemplos, breves, más una en la que se nos dice que también es conjunción y una octava
definición de nuevo explicativa, en este caso, de tipo pragmático: especifica para qué se
usa. La sexta acepción nos parece complicada de entender para un no nativo: úsase cuando
se responde a quien llama (¿cómo?) Tampoco se entiende demasiado bien la primera de las
locuciones, la locución conjuntiva pues ya, de la que ni siquiera hay un ejemplo.
SALAMANCA: tras el lema, como primer enunciado, se nos dice que la palabra es un
adverbio de tiempo (con 8 acepciones y sus ejemplos); conjunción distributiva (una
acepción, 9, y un ejemplo) e interjección (2 acepciones). Dentro de la fraseología se
analizan fundamentalmente dos tipos de unidades: un primer tipo con tres locuciones sin
categorizar: desde ya, no explicada pues lleva una remisión en forma de asterisco que nos
envía a la preposición desde y dos locuciones a casilla vacía (señalada esta con tres puntos
suspensivos) que son: no ya… sino; ya no… sino; el apartado de fraseología termina con
una unidad fraseológica categorizada como conjunción causal que lleva dos subacepciones
explicativas. Las definiciones son fundamentalmente de tipo explicativo. La entrada
presenta esta estructura:
Adv. temp. Confirma la realización de la acción […]
11 de proceso natural, previsto […] + ejemplo
12 de algo que se desea […] + ejemplo
2 con relación al pasado […] + ejemplo
3 (con verbos en futuro) Equivale a […]
4 (conversos en futuro) Intensifica […]
5 (con verbos en presente) Equivale a […]
6 INTENSIFICADOR. Intensifica
7 (con el verbo poder) En pretérito imperfecto de indicativo […]
71 (con el verbo poder) En presente de indicativo
8 En el diálogo, expresa […]
Conj. distrib.
9 Relaciona dos posibilidades […]
Interj.
10 (sola o acompañada de verbos como entender o recordar) […]
11 Expresa incredulidad o sorpresa […]
FR. Y LOC.
desde ya. No ya … sino. Ya no … sino Se usa con carácter aditivo para […]
Ya que conj. causal Introduce […]
1 Encabezando una proposición en posición inicial, expresa […]
2 Encabezando una proposición en posición no inicial, expresa […]
Enthymema, V 2011, p. 218
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
SIN.
RELACIONES Y CONTRASTES
DUE: tras el lema, se categoriza a la palabra como adverbio con nueve acepciones y
dos unidades superiores (que ya ya; no ya), la última de las cuales no se define ni
ejemplifica pues lleva una remisión al lema no. La mayor parte de estas acepciones están
definidas explicativamente, con la excepción de las acepciones 2, 6 y 8. La novedad de
este grupo es que también se le da una capción como oración por sí sola. Además del
grupo anterior se categoriza al lema en un segundo grupo como conjunción con tres
acepciones, que son unidades superiores (formadas por su unión con la conjunción que)
definidas sinonímicamente.
Estructura:
I adv 1 Denota […] b) Con un v en tiempo perfecto […]
2 (lit. raro) En otro tiempo
3 Unido a un adv de negación, indica […]
4 Denota que por fin […]
5 Presenta como más seguro un hecho venidero […]
6 Inmediatamente. Tb (col) con matiz enfático […] b) desde ya (col) Desde ahora
mismo
7 Formando oración por sí solo expresa comprensión de lo que se acaba de oír […]
8 Ciertamente
9 Repetido ante dos (o más) miembros de la frase, presenta a estos como términos de una
alternativa […]
10 que ya ya (col) Refuerza enfáticamente lo que se acaba de decir […]
11 no ya NO
II conj 12 ya que Puesto que […]
13 ya que Aunque […]
14 ya que (reg) Cuando
Al analizar las definiciones propias para comprobar si son sustituibles en sus propios
ejemplos, vemos que lo son:
2 (lit, raro) Ya fue más de lo que es hoy > En otro tiempo fue más de lo que es hoy
6 – El almuerzo. ¿Está? –Ya va, ya va > El almuerzo. ¿Está? Inmediatamente va, ahora mismo
va
8 No se trata de eso…, pero a mí ya me gustaría verlos > No se trata de eso…, pero a mí
ciertamente me gustaría verlos
12 Las gestiones se están haciendo con cierta prisa, ya que el Consejo .. se reúne el próximo lunes día
17 > Las gestiones se están haciendo con cierta prisa, puesto que el Consejo .. se reúne el próximo lunes
día 17
13 *Ya que no trabajes, deja > Aunque no trabajes, deja
El golpe, el golpe bajo, consistía simplemente en que ese arreglo privado se hiciera noticia pública, y
en que no solo Bellido, sino también doña Dulce y Nuria, ya que no los pequeños, lo supieran > El
golpe, el golpe bajo, consistía simplemente en que ese arreglo privado se hiciera noticia pública, y en que
no solo Bellido, sino también doña Dulce y Nuria, aunque no los pequeños, lo supieran.
14 Cuando llegó al rancho estaba congestionado de ira. Ya que se calmó dijo: -Matao, a picar >
Cuando llegó al rancho estaba congestionado de ira. Cuando se calmó dijo: -Matao, a picar
Enthymema, V 2011, p. 219
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
De nuevo estamos ante la entrada mejor estructurada, definida y ejemplificada de los
tres, si bien, para el uso de un estudiante de ELE, las definiciones y ejemplos de uso
literario y regional (acepciones 2 y 14), más que ayudar parecen llegar a complicar a una
persona de competencia media. El primer ejemplo de la acepción 13 resulta extraño
incluso para nativos peninsulares de cultura media-alta.
3.5.Interjecciones
3.5.1. ¡ca!
DRAE
ca. interj. coloq. quia
quia (De qué ha [de ser]).1. interj. coloq. U. para denotar
incredulidad o negación.
Salamanca
¡ca! interj. COLOQUIAL; RESTRINGIDO. Se usa como
respuesta para negar o poner en duda lo que dice alguien: -Me
ha prometido que me pagará. –¡Ca!, ¿y te lo has creído? –Me iré de viaje
durante unos meses. –¡Ca, señorito! Usted necesita una buena novia y no
tanto viaje. SIN. Quia.
DUE
ca interj. (col) Denota negación o rechazo más o menos vehemente de lo
que se acaba de oír. | LTena Alfonso XII 157: -Pues aquí
esperábamos de un momento a otro la rendición de los
generales Martínez Campos y Dabán. - ¡Ca! Lejos de rendirse,
lejos de rendirse, Martínez Campos y Dabán han emprendido
esta mañana .. la marcha hacia Valencia.
DRAE: no parece necesario argumentar sobre el porqué la definición de DRAE nos
parece completamente insuficiente para un estudiante de ELE: hay una remisión a quia,
que nos da el origen y una explicación sin ejemplos.
SALAMANCA: este diccionario, tras el lema (que va entre signos de exclamación),
nos dice que se trata de una interjección marcada por la coloquialidad y de uso no muy
frecuente (restringido). Como segundo enunciado tenemos una definición explicativa
con dos ejemplos bastante claros de enunciados dentro de un diálogo, visto que se trata
de una interjección propia de la conversación. No se entiende el uso de las comillas en
los ejemplos, visto que los guiones ya nos indican que se trata de enunciados
conversacionales. Da un sinónimo.
DUE: tras el lema nos categoriza la palabra como interjección, a continuación está la
abreviatura de la marca coloquial y seguidamente una definición explicativa, como no
podía se de otro modo pues sustituir una interjección por otra no resolvería el problema
de entender su significado sino que incluso lo complicaría más. El ejemplo, a pesar de ser
Enthymema, V 2011, p. 220
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
una cita de un texto literario, es muy comprensible. Como la interjección es un tanto
arcaica, se ha elegido un texto sobre un general decimonónico.
3.5.2. caramba
DRAE
caramba1. (Eufem. por carajo). 1. interj. Denota extrañeza o
enfado.
caramba2. (Por alus. a la Caramba, sobrenombre de María
Antonia Fernández, tonadillera española del siglo XVIII). 1. f.
Moña que llevaban las mujeres sobre la cofia, a fines del siglo
XVIII.
caramba3. (Quizá de carángano, infl. por caramba1). 1. f. Hond.
quijongo. 2. f. pl. u. c. sing. m. C. Rica. Joven, hombre,
muchacho. Ese carambas sabe tocar la guitarra muy bien.
Salamanca
¡caramba! interj. Expresa sorpresa, disgusto, enfado, protesta o
admiración: ¡Caramba…, no te esperaba tan pronto! Pero, caramba,
podías haber llamado a alguien para que te ayudara. Estoy harto de fregar
plato ¡caramba! OBSERVACIONES: ◊ Puede ir reforzada por la
partícula exclamativa qué: Y todos, qué caramba, os coméis la sopa sin
rechistar. ¡Qué caramba, yo sólo te esperaba a ti! ◊ si le sigue la
preposición con, ésta introduce aquello por lo que se manifiesta
sorpresa, disgusto, protesta o, especialmente, admiración:
¡Caramba con el coche, menudo precio tiene!
DUE
caramba (tb, raro, carambas) interj Denota sorpresa o enfado. A
veces con un compl CON, que designa el motivo del enfado o la sorpresa.
| Goytisolo Recuento 108: Pues al menos se pide permiso,
caramba. Ya os he dicho que no quiero que toquéis nada de mi
maleta. Medio Bibiana 49: Lorenzo Massó no es pariente suyo ..
–Pues como si lo fuera... ¡Qué caramba D16 15.11.84, 47: –
Tanta gente diciendo que si el libertinaje esto, que si el
libertinaje lo otro… Carambas, tiene que ser cosa buena…–
Defendió las relaciones prematrimoniales el señor
Cassamajor… –Así no tendrán que pasar el trago que pasamos
mi señora y yo la noche de bodas, carambas, qua aquello
parecía una operación quirúrgica. *¡Caramba con la niña!
DRAE: este diccionario contiene tres lemas para ese significante. Solo el primero es
interjección. Va marcada como eufemismo de la palabra carajo y lleva una sola acepción
explicativa, sin ejemplos. Poco entendería un estudiante de ELE sobre el uso de esta
palabra con esta entrada.
Enthymema, V 2011, p. 221
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
SALAMANCA: tras el lema, que va entre signos de exclamación, se nos categoriza a
la palabra como interjección, se nos da una definición explicativa y tres ejemplos de sus
usos para expresar sorpresa, disgusto, protesta o enfado. El diccionario añade dos
observaciones: que puede ir acompañada de la partícula exclamativa qué y añade dos
ejemplos y que si la palabra va seguida de la preposición con, esta introduce el motivo del
enfado, protesta, admiración, etc., añade ejemplo.
Creemos que un estudiante se haría una idea bastante acertada del uso de esta
interjección con estos ejemplos.
DUE: como el anterior, tampoco DUE explicita que se trata de un eufemismo de una
palabra soez, es por otra parte el único en dar, como intejección, la variante carambas que
DRAE considera sólo sustantivo. Tras el lema, la variante con la marca raro, la
categorización y una definición explicativa a la que siguen tres citas y un ejemplo
inventado ad hoc. Este diccionario también explica el uso con la preposición con, mientas
que el uso precedido de qué está ejemplificado pero no explicado, probablemente con
razón puesto que el qué exclamativo puede ir delante de casi todas la interjecciones y ante
caramba no adquiere un significado diverso del principal.
3.6. Un ejemplo de conjunción
3.5.1. y
DRAE
y2. (Del lat. et).
1. conj. copulat. U. para unir palabras o cláusulas en concepto
afirmativo. Si se coordinan más de dos vocablos o miembros
del período, solo se expresa, generalmente, antes del último.
Ciudades, villas, lugares y aldeas. El mucho dormir quita el vigor al
cuerpo, embota los sentidos y debilita las facultades intelectuales.
2. conj. copulat. U. para formar grupos de dos o más palabras
entre los cuales no se expresa. Hombres y mujeres, niños, mozos y
ancianos, ricos y pobres, todos viven sujetos a las miserias humanas. Se
omite a veces por asíndeton. Acude, corre, vuela. Ufano, alegre,
altivo, enamorado. Se repite otras por polisíndeton. Es muy ladino,
y sabe de todo, y tiene una labia...
3. conj. copulat. U. a principio de período o cláusula sin enlace
con vocablo o frase anterior, para dar énfasis o fuerza de
expresión a lo que se dice. ¡Y si no llega a tiempo! ¿Y si fuera otra la
causa? ¡Y dejas, Pastor santo...!
4. conj. copulat. Denota idea de repetición indefinida,
precedida y seguida por una misma palabra. Días y días. Cartas y
cartas.
Salamanca
y (se sustituye por e ante palabras que empiezan por i o hi)
conj.copul. 1 Enlace coordinante que une palabras, sintagmas u
oraciones de la misma naturaleza gramatical: Ayer me compré una
falda y dos pantalones. OBSERVACIONES: En ocasiones tiene
Enthymema, V 2011, p. 222
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
valor intensificador: ¡Y pensar que lo tuve todo! Mi hermana estuvo
llorando días y días. 2 Puede utilizarse sin valor de enlace en
expresiones interrogativas para preguntar por el estado,
circunstancia o cosa que se menciona: ¿Y el enfermo, cómo se
encuentra?¿Y qué tal el último examen?
DUE
Y2 (con pronunciación átona, excepto en aceps 2 y 3. Toma la forma E
ante palabra que comienza por el fonema / i / –cuando este no es
semiconsonante –, excepto en acep 2 cuando va seguida de n propio) conj
1 Une ors, palabras o sintagmas denotando la suma de las nociones
expresadas por ellos. | Ya 22.10.64, sn: Material de laboratorio ..
Termómetros químicos e industriales. Cunqueiro Un hombre
179: El músico se había levantado y se contemplaba en el
espejo. CPuche Paralelo 442: Dos y dos son cuatro. b) Con
matiz enfático: Y además. | Olmo Golfos 79: Yo sé montar y
bien. c) Precedida y seguida de una misma palabra denota repetición
indefinida. | JMiaya VozC 6.10.68, 8: ¿Por qué unas barandillas
rotas de un puente deben estar meses y meses sin que haya
ningún organismo que, o las quite, o las reponga? Cunqueiro
Un hombre 155: Mi padrastro reía y reía, no podía dejar de reír.
2 Ante sust o adv, formando con él una frase interrog, se usa para
preguntar por lo designado. | Torrente Señor 154: No solo los
varones de las familias Churruchaos, sino también las hembras,
podían sentarse en un banco del presbiterio .. –Pero ¿y los
curas? Cela Judíos 223: ¿Y más allá de Bohoyo, por los llanos y
el Barco de Ávila?
3 Iniciando una frase interrog o exclam, introduce una objeción. Cuando
esta no forma or completa, la conj es tónica. |
* –No recuerdo
cómo era. –¿Y qué más da? Neville Vida 384: –Los anuncios
me cargan siempre. –Y a mí que me distraen… b) ¿˜ qué? →
QUÉ
4 n en pl ˜ + el mismo n. Sirve para destacar la diferencia de calidad que
existe entre las distintas perss o cosas designadas opr el mismo n. |
Delibes Año 17: Acabo de leer los sucesos de Granada con el
triste desenlace de tres albañiles muertos .. Durante el Mayo
francés, con centenares de miles de manifestantes, .. solamente
se produjo un muerto. Hay países y países.
5 Se usa expletivamente en excl. | Cuevas Finca 23: –¿Pasa algo?..
–¡Los primales! ¡Lo que nos faltaba! –¡Válgame Dios1 ¡Y qué
mala suerte!
DRAE: de las tres entradas para el lema y, la segunda de este diccionario es la que
corresponde a la categoría de conjunción. Tras lema y etimología, las acepciones como
conjunción copulativa, con definiciones de tipo explicativo como corresponde a una
palabra «tan gramatical», se nos dice en esencia para qué sirve sintácticamente esta
Enthymema, V 2011, p. 223
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
palabra. Todas llevan ejemplos, incluso varios. Por otra parte, da algunas indicaciones
pragmáticas como en la acepción 3, pero no de forma exhaustiva, por ejemplo, ni DRAE
ni los otros dos hablan de valores condicionales: Tú provócame y verás la bofetada que te doy
(«si me provocas, te abofeteo»)
SALAMANCA: respecto al anterior, da una indicación útil para estudiantes: se
convierte en e ente i- o hi-. Tras el lema la categorización como conjunción, la definición,
de tipo explicativo y un ejemplo. Después observaciones pragmáticas no exhaustivas y
una segunda acepción como intensificador.
DUE: una vez más nos encontramos ante la entrada más completa aunque se
necesitan ciertos conocimientos lingüísticos, por ejemplo dice que se convierte en e ante
el fonema /i/, sin tener en cuenta que tal vez el usuario común no sabe qué es
exactamente un fonema, más adelante, en la acepción 5 explica que se usa expletivamente,
tampoco creemos que muchos usuario comprendan el significado del término
expletivamente, ni siquiera con el ejemplo. En el primer enunciado categoriza al lema como
conjunción sin especificar de qué tipo. Después da una definición explicativa y otras
acepciones de las cuales, la 4 no estaba en DRAE.
3.7. Un ejemplo de preposición
3.6.1. tras
DRAE
tras1. (Del lat. trans, al otro lado de, más allá de).
1. prep. Después de, a continuación de, aplicado al espacio o al
tiempo. Tras este tiempo vendrá otro mejor. En voces compuestas, u.
c. pref.; p. ej., trastienda, trascoro.
2. prep. En busca o seguimiento de. Se fue deslumbrado tras los
honores.
3. prep. Detrás de, en situación posterior. Tras una puerta.
4. prep. Fuera de esto, además. Tras de venir tarde, regaña.
5. m. coloq. nalgas (‖ porciones carnosas y redondeadas).
Salamanca
tras prep. 1 Después de: Vi una película tras otra. Fumaba un cigarro
tras otro 2 Detrás de: se escondió tras la puerta. Se protegieron de los
disparos tras los camiones. 3 Al otro lado de: tras la montañas, tras las
ventanas. 4 En busca de, persiguiendo a: El detective iba tras la
mujer. OBSERVACIONES: Acompañando normalmente a
verbos de movimiento como correr, andar, etc. SIN en pos de
(COLOQUIAL,
VULGAR,
(RESTRINGIDO).
5
INTENSIFICADOR) Además de, encima de: Tras que hace frío,
abre la ventana
DUE
Tras1 (con pronunc átona) prep. (frec. Va seguida por DE, formando
la poc prep ˜DE 1 Denota posterioridad en el espacio /real o fig.) o en el
Enthymema, V 2011, p. 224
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
tiempo. | Matute Memoria 38: Resonaban las pisadas de los
hermanos Taronjí, parientes de José Taronjí, padre de aquel
muchacho que salía de tras la barca. M. R. Pereda SInf 31.10.74;
El sermón de Agustín García Calvo se apoya también, tras su
lenguaje libre y profundamente irrespetuoso, en una serie de
clisés universales, históricos, ya hechos. Chamorro Sin raíces 42:
Tras de su ingreso en la escuela entró a formar parte de la
primera pandilla organizada. CoE 8.8.75, 29: La atleta
Marianne Adama mejoró el record mundial del lanzamiento del
peso femenino, remitiendo el ingenio de 4 Kgs. Hasta los 21,60
m., también primado planetario.
2 n + ˜ + el mismo n (o UN + n + ˜ + OTRO. Denota reiterción
indefinida. |
Castilla Alienación 27: Tenemos ocasión de
enfrentarnos día tras día con la realidad. *Se fumaba un
cigarrillo tras otro.
3 En busca de, o en persecución de Tb fig | Delibes Cinco horas,
29: Que Encarna desde que murió Elvira andaba tras él, eso no
hay quien me lo saque de la cabeza. Delibes Ratas 51: Nini,
bergante, llevo una semana tras el raposo y no le pongo la vista
encima. ¿Le viste tú? SHoy 27.9.74, 12: Nosotros dábamos larga
a los perros y corrían tras de los jabalíes, ciervos o venados y
les hacían ir cerca de los puestos, desde donde tiraban los
cazadores esa pregunta.
4 Además de, o encima de. Con intención enfática. | SFerlosio
Jarama 75, –Haces el primo, tú, si vas. –Y tú te callas. –¿Por
qué voy a callarme¿ Tras que saco la cara por ti. *Tras de feo,
caro.
Esta es una de las pocas preposiciones que pueden definirse perfectamente de forma
sinonímica sustituyéndola por locuciones prepositivas: detrás de, después de, al otro lado de,
etc.
DRAE: tiene dos lemas para el significante tras, uno como preposición y otro como
onomatopeya. El primero es la preposición, tras el lema, la etimología y después de esta,
cuatro acepciones como preposición y una como sustantivo. Las definiciones son
sinonímicas y están ordenadas progresivamente según su grado de metaforización,
empezando por las que son cognitivamente más transparentes: las espaciales, del espacio
pasamos al tiempo y de ahí a sentidos más figurados (en busca de) para terminar por el
grado mayor de abstracción: lo metalingüístico (encima de: tras de venir tarde, regaña). La
última acepción, la de sustantivo, no lleva ejemplo. Casi todos los procesos de
metaforización siguen ese sentido (como señalan los cognitivistas: Eleanor Ross,
Georges Lakoff y Marc Johnson, Mar Garrachana, y tantos otros) de lo más concreto a
lo más abstracto: en la cima de la montaña > en la cima del anillo > encima de la mesa > encima
me insulta; ante la catedral > antes, en el pasado > antes solo que mal acompañado, etc.).
SALAMANCA: este diccionario solo caracteriza al lema como preposición y, sin
decirlo explícitamente, como locución preposicional. Tras el lema, el primer enunciado:
Enthymema, V 2011, p. 225
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
es preposición, con cinco acepciones que no van ordenadas en el mismo sentido que
DRAE, es decir, en el que va de lo concreto a lo abstracto, ya que comienza con el uso
temporal que es sin duda posterior al espacial. Añade una observación un tanto pobre:
que puede ir con verbos de movimiento. A pesar de que las definiciones son sinonímicas:
se sustituye la preposición por una locución prepositiva, en el apartado SIN. solo da una
locución prepositiva como sinónimo, con la marca de uso restringido. La última acepción
lleva tres marcas: coloquial, vulgar, intensificador; estamos de acuerdo con la primera y la
última, un poco menos con la de vulgar, cuyo ejemplo además no nos parece del todo
claro, puesto que abre podría ser confundido por un estudiante extranjero por un
imperativo (en vez de presente) lo que le llevaría a colegir que tras pudiera significar «por
tanto, así pues, ya que»: como hace frío, haz el favor de abrir.
DUE: este diccionario tiene tres lemas para la palabra tras: el primero es la
preposición, por ser el más usado, suponemos; el segundo está categorizado como
interjección y corresponde a la onomatopeya del segundo lema de DRAE y el tercero es
un sustantivo, correspondiente a la quinta acepción del primer lema (preposición) de
DRAE. De nuevo estamos ante el mejor artículo de los tres diccionarios. Tras el lema,
hay una indicación prosódica (indica que se pronuncia de forma átona, como la mayor
parte de las preposiciones –excepto según, sobre cuyo estatus prepositivo no hay
acuerdo total entre los gramáticos), el primer enunciado (es preposición). A continuación
una indicación de uso frecuente y después las acepciones. Las primera definición es
explicativa, dentro de ella no se sigue la secuencia de más concreto hacia más abstracto,
pero sí se seguirá entre esta y el resto de las acepciones. Es muy interesante el primer
ejemplo, en el que hay un uso de de + tras que da muy bien la idea de cómo se ha
lexicalizado la locución prepositiva detrás de Hay varios ejemplos de cada denotación
8espacial, temporal). En la segunda acepción se nos da una secuencia frecuente y se
ejemplifica (día tras día, un día tras otro). La tercera acepción es sinonímica y más abstracta
que las precedentes y la última, enfática, a diferencia de otros dos diccionarios no la
marca ni como coloquial ni como vulgar y da dos ejemplos: una cita y otro inventado ad
hoc, mucho más claro.
4. Evaluación general
Daremos unas breves notas sobre el Diccionario Salamanca tras haberlo cotejado con el
DRAE y el DUE que resuman cuanto se ha observado. Teniendo en cuenta que hemos
analizado un producto del año 1996 y que el punto de vista elegido es fundamentalmente
el del estudiante de ELE, diremos que, a simple vista, el Diccionario Salamanca el formato
es adecuado a este usuario, tiene una disposición tipográfica que suscita menos rechazo
que la de DUE, quizá demasiado prolija para un estudiante extranjero. Los ejemplos son
abundantes, claros y van tipográficamente diferenciados de las definiciones. Quizá sea
más acertada la opción de Diccionario Salamanca de inventar ejemplos claros ad hoc,
respecto a la de tomarlos siempre de alguna autoridad literaria o documental, ya que no
siempre con esta segunda estrategia se logra encontrar ejemplo completamente
reveladores para los estudiantes. Por otra parte, en nuestro análisis hemos mostrado que
algunos de los ejemplos inventados ad hoc para el Diccionario Salamanca también podrían
confundir a un estudiante de ELE. Hay para este usuario una gran ayuda morfosintáctica
Enthymema, V 2011, p. 226
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
(preposiciones de régimen o frecuentes en negrita, apéndice de conjugaciones, etc.).
Desde el punto de vista del análisis puramente lexicográfico, algunas definiciones
parecen propias, pero en un análisis más profundo, resultan no superar la prueba de la
sustitución sinonímica, esto en algunos casos puede conducir a confusiones de uso en las
traducciones.
5. Conclusiones
Del análisis realizado, se nos imponen algunas ideas como difícilmente refutables:
DRAE tiene menos ejemplos que DUE y Diccionario Salamanca y definiciones que usan
un nivel léxico en ocasiones muy elevado para la comprensión por parte de una
estudiante de ELE. No es un diccionario pensado para este tipo de usuario y se confirma
como tal. En cuanto a DUE, se trata del mejor de los tres desde el punto de vista de la
coherencia lexicográfica. A primera vista puede parecer abrumador para un estudiante de
ELE, no parece necesario dar ejemplos literarios sobre el uso de la palabra euro, por
ejemplo. Sin embargo, si se analiza en profundidad, vemos que quizá valga la pena hacer
un pequeño esfuerzo cognitivo previo para aprender a conocerlo y usarlo, pues con este
instrumento se resuelven dudas (ya desde los primeros enunciados y las definiciones) que
con el Diccionario Salamanca quedan relegados a los ejemplo y su captación, por tanto,
depende en gran manera de la capacidad deductiva del estudiante de ELE. Los primeros
enunciados suelen ser mejores en DUE que en DRAE y Diccionario Salamanca, aunque
ninguno de los tres se atreve a dar etiquetas para categorizar las unidades fraseológicas,
ya que los mismos lingüistas no se ponen de acuerdo respecto a límites y fronteras entre
estas, es de destacar que DUE y Diccionario Salamanca dan más indicaciones pragmáticas y
de uso que DRAE y, de entre ellos, las de DUE nos parecen más claras.
En síntesis, para un estudiante de ELE, lo ideal sería un diccionario realizado con el
prurito de meticulosidad lexicográfica de DUE, pero quizá un poco más simplificado,
con una diversificación tipográfica entre ejemplos y definiciones mucho más clara que no
obligara al usuario sin experiencia a preguntarse cuál será el ejemplo y cuál la definición,
sino que se viera a primera vista.
Bibliografía
Alvar Ezquerra, Manuel, Función del diccionario en la enseñanza de la lengua, «Revista de
Bachillerato» 9, 1982, pp. 4-53.
Alvar Ezquerra, Manuel, Enseñar ¿con un diccionario?, «Apuntes de educación», 26, 1987.
Alvar Ezquerra, Manuel. El futuro de los diccionarios de español. Actas del Congreso de Lengua
Española. Madrid, Instituto Cervantes, 1994.
Barber, Juan Carlos, Felisa Bermejo y Félix San Vicente, Contrastiva. Grammatica della lingua
spagnola, Clueb, Bologna, 2010.
Enthymema, V 2011, p. 227
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Bosque, Ignacio, Las categorías gramaticales, Síntesis, Madrid, 1993.
Bosque, Ignacio e Violeta Demonte (eds.), Gramática descriptiva de la lengua española,
Gredos, Madrid, 1999.
Bosque, Ignacio, Bases para un diccionario de restricciones léxicas , «Moenia», n.7, 2001, pp. 1152.
Garachana Camarero, Mar, Los procesos de gramaticalización, «Moenia» 5, 1999, pp. 155-172.
Gutiérrez Cuadrado, Juan, El «Diccionario de Salamanca» de Santillana, cinco años después.
Actas del XI Congreso ASELE, 13-16 septiembre 2000, Zaragoza.
Kleiber, Georges, La semántica de los prototipos, Visor, Madrid, 1995.
Lakoff, Georges y Marc Johnson, Metáforas de la vida cotidiana, ed. española Cátedra,
Madrid, (1980) 1989.
Lakoff, Georges y Marc Johnson, Elementi di linguistica cognitiva, Quattro Venti, Urbino,
1998.
Loureda, Oscar y Esperanza Acín (eds.), Los marcadores del discurso, Arco/Libros, Madrid,
2010.
Maldonado, Concepción, El uso del diccionario en el aula, Arco-Libros, Madrid, 1998.
Martín Zorraquino, María Antonia e Estrella Montolío Durán (eds.). Los marcadores del
discurso, Arco-Libros, Madrid, 1998.
Porto Dapena, José-Álvaro, Manual de técnica lexicográfica, Arco/Libros, colección Biblioteca
Philologica, Madrid, 2002.
Portolés, José. Marcadores del discurso, Ariel Practicum, Barcelona, 1998.
Rosch, Eleanor, Human Categorization in Neil Warren (ed.), Studies in Cross-cultural Psycology,
Academia Press. London, 1977, pp. 1-72.
Rosch, Eleanor, Principles of Categorization, in idem and Barbara Lloyd (eds.), Cognition and
Categorization, Hillsdale, Lawrence Erlbaum ass., 1977, pp. 27-48.
Seco, Manuel, Estudios de lexicografía española, 2ª ed. corregida y aumentada, Gredos,
Madrid, 2003.
Selinker, Larry, Language transfer, «General Linguistics» 9, 1969, pp. 67-92.
Selinker, Larry, Interlanguage, «IRAL», X (2), 1972, pp. 209-231.
Enthymema, V 2011, p. 228
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema
Hojear y ojear un diccionario
María Nieves Arribas Esteras
Talmy, Leonard, Lexicalization Patterns: semantics structure in lexical forms, Cambridge
University Press, Cabridge, 1985.
Traugott, Eizabeth, «“Conventional” and “dead” metaphors revisited» , in Wolf Paprotté and
René Driven (eds.), The Ubiquity of Metaphor, John Benjamins, Amsterdam
Philadelphia, 1985, pp. 17-56.
DICCIONARIOS:
Alvar Ezquerra, Manuel (dir), VOX Diccionario actual de la lengua española, Bibliograf,
Barcelona, 1991.
Alvar Ezquerra, Manuel (dir), Diccionario para la enseñanza de la lengua española, Bibliograf,
Barcelona, 1995.
Gutiérrez Cuadrado, Juan y José Antonio Pascual Rodríguez (eds.), Diccionario Salamanca
de la Lengua Española, Santillana, Madrid, 1996.
Maldonado Concepción (dir), Clave, SM, Madrid, 1996.
Maldonado Concepción (dir), Diccionario didáctico de Español Intermedio, SM, Madrid, 2001
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA (2001): Diccionario de la Lengua Española, en la red:
www.rae.es.
Sánchez Cerezo, Sergio (dir), Esencial, Antillana, Madrid, 1991
Sánchez Pérez, Aquilino (dir), Diccionario básico de uso de la lengua española, SGEL, Madrid,
1985.
Seco, Manuel; Olimpia Andrés e Gabino Ramos, Diccionario fraseológico del español actual.
Aguilar, Madrid, 2004.
Seco, Manuel; Olimpia Andrés e Gabino Ramos, Diccionario del español actual, 2 vols.,
Aguilar, Madrid, 1999.
Enthymema, V 2011, p. 229
http://riviste.unimi.it/index.php/enthymema