Ale$tar pega el salto con su música libre

Alejandro Sebastián Dávalos, conocido como Ale$tar, a sus 21 años presenta “Modafoka”, su primer proyecto musical compuesto por trece canciones. Pero para llegar a esto el joven rapero comenzó desde abajo a pulso de versos propios. A sus 16 años grabó su primera canción en un estudio de Ramos Mejía, Buenos Aires. Al año siguiente volvió a Paraguay ya siendo consciente de su talento. “Era el don de hacer rimas improvisadas y se convirtió en mi manera de vivir”, afirmó a ABC Color.

Ale$tar indicó que el recorrido “no fue fácil”. “No es como que tenés un sueldo fijo, y sin embargo tenía que rebuscarme la manera de ganar dinero haciendo “freestyle” (rap improvisado) en los colectivos”. Allí cuenta, tenía “un público asegurado” y ese era su “pueblo”. “Además de sacarles una sonrisa y hasta una lágrima en algunas ocasiones, ganaba los suficientes como para poder pagar el alquiler y comer”, expresó.

El fluir de las ideas

El proceso de este disco se dio de manera vertiginosa y fue para el un placer plasmar sus letras en canciones. En febrero pasado lo contactaron desde Estudio 99 y le propusieron grabar un álbum “lo antes posible”. Al instante el artista empezó a dejar volar su imaginación y ya ese día grabó “Miran mal”. Terminando esa semana ya nacieron “Trapstar” y “Mala influencia”.

“Toda persona que tuvo el placer de escuchar antes del lanzamiento mostraba un gran entusiasmo y una actitud positiva. Eso fue el factor decisivo para seguir creando canciones”, mencionó el rapero, además de asegurar que “este álbum fue creado con las mejores intenciones para un público que quiera pasar un buen rato escuchando música extravagante, alegre, sad (triste), tranquila, agresiva” porque el álbum “no es como que tenga un tópico” sino es más bien para “disfrutar el momento, las historias y los ‘chanteos’ de cada verso”.

No obstante, Ale$tar reflexionó que le preocupa que “estamos en un país con muchas posibilidades y medios suficientes” pero “sigue sin figurar en el mapa a nivel urbano-artístico”. “Creo que hay talento en bruto por explotar pero no el apoyo suficiente, y hay un como estereotipo de música ejemplar que la mayoría de los artistas utilizan ese recurso para poder vivir de la música. Ese también fue el tema de inspiración que usé para hacer el freestyle que grabé y salió en el álbum, la canción se llama Ejemplo, y es una manera de decirles a mis colegas que sigan luchando por cumplir sus sueños haciendo lo que de verdad les gusta”, resaltó.

Por tal motivo, el cantante subrayó que le gustaría que este álbum “llegue a sonar en cada rincón del país” de cara a ser “un referente de la música urbana” y buscando también atraer “un público extranjero y representar a mi país colaborando con artistas internacionales”. Además, espera que “más artistas de este país podrían animarse a hacer música y obtener las mismas o mejores oportunidades”, remarcó.

“Para mí tener el don de contar anécdotas en una instrumental es una bendición de Dios, es lo que me hace un artista, es el arte que más me encanta y para mí representa la libertad, sin barreras y rompiendo cadenas”.