Conoce a Leopoldo Abadía, el escritor de 89 años que es referente sénior

Con el objetivo de promover el envejecimiento activo y saludable, CaixaBank presenta ‘Bendita Edad’, un proyecto que nace para poder dar visibilidad a las personas mayores como parte activa y fundamental de la sociedad.

La creación de referentes del sector sénior es parte importante de esta iniciativa. Uno de los protagonistas de este proyecto es Leopoldo Abadía, un escritor y conferenciante de 89 años que resalta que cuando uno se jubila, es fundamental tener un plan desarrollado para el día siguiente.

En el video de CaixaBank, Leopoldo Abadía cuenta que un artículo que escribió lo hizo famoso cuando él tenía 75 años. Si bien hoy se dedica a la escritura, destaca que antes fue ingeniero textil, profesor del IESE durante 31 años y que logró montar una consultora antes de jubilarse.

Leopoldo cuenta como un artículo cambió su vida. “Escribí un artículo para entender la crisis. Se lo mandé a un amigo mío y él lo hizo circular. De repente, ese artículo llegó a mi despacho con una nota que decía: “Quizá os interesará. No sabemos quién lo ha escrito, pero por el estilo ha debido ser un joven estudiante universitario”. Ese era yo”.

El escritor ya cuenta con doce libros en su haber: ocho de economía, uno de la familia y tres de la tercera edad. Asegura que él no escribe para que la gente lo entienda, sino para él mismo entenderlo. Afirma que si lo logra entender él, la gente también lo entiende.

“Uno de los libros familiares es ‘Yo de mayor quiero ser joven’, que tiene como objetivo que los mayores no quieran ser ‘viejos’. Referentes sénior hacen falta siempre. Tiene que haber modelos, ya sea para una cosa o para otra, pero hace falta en la sociedad que todos seamos referentes de algo. Eso sería ideal”, agregó.

Leopoldo es uno de los referentes para que los mayores puedan tener más visibilidad como parte activa de la sociedad. “Cuando uno se jubila, es fundamental tener un plan para el día siguiente. Un amigo mío me dice que pare de una vez. Y yo le contesto que no paro porque no me da la gana”, reafirma Abadía.