En cualquier negocio, el acomodo de productos en las perchas, debe ser una prioridad, ya que, en gran medida, de esto depende el éxito de las ventas.
En este artículo te vamos a compartir algunas estrategias para mejorar la ubicación de mercancía en tu estantería, así como información acerca de cómo influye en tus consumidores dicha práctica, para que elabores tu estrategia y alcances tus objetivos comerciales.
¿Porqué es importante el correcto acomodo de los productos?
En primera instancia, el orden siempre es atractivo a la vista. Es más grato acudir a un negocio que se observa limpio, ordenado y en el cual será más fácil encontrar rápidamente lo que se busca.
Y es justo de esta última parte, que se desprende la importancia de la organización en las perchas, ya que por lo general todos tenemos una rutina en la visita a un negocio que conocemos, por lo que respondemos a estímulos para integrar nuevas necesidades a lo acostumbrado.
Lo que no se ve, no se compra
Cada espacio tiene sus virtudes y hacerlo correctamente puede colocarte como la mejor opción para tus consumidores.
A cada producto se le debe asignar su ubicación por una razón, en respuesta al comportamiento habitual de los consumidores.
Para decidir “qué va dónde”, considera que los productos en las perchas se identifican de manera lineal y en tres niveles.
- A la altura de los ojos. Es de las posiciones elegidas por excelencia para exhibir aquello que quieres que se venda más y más rápido, lo que logre fidelizar a tus clientes.
- A la altura de las manos. Aquí van los productos de consumo diario. Esos para los que tus clientes no se detienen más de un par de segundos para tomarlos y casi lo hacen sin pensar.
- Cerca del suelo. Los productos pesados y de uso regular.
3 Estrategias populares de ventas.
- Ubicación de productos llamativos.
Observa ,por ejemplo, como en los supermercados colocan los cárnicos, la farmacia y la panadería, al final del local y distantes entre sí. En las farmacias, las medicinas suelen estar al final también y mientras caminas, ves cremas, champús, cosméticos, etc.
Para definir cuáles son tus productos llamativos, piensa en lo que vendes más, cuál es tu producto estrella y colócalo distante, al final de tu establecimiento, para que tus clientes deban recorrer mayor superficie y en el camino puedas ofrecer el resto de tu mercancía, aquello por lo que no iban y no necesitaban, pero acabarán comprando.
- Complementariedad.
Coloca los productos, de distinta categoría que se complementen, por ejemplo pan junto con mermeladas, pañuelos cerca de antigripales, etc.
- Venta en áreas de espera
Aprovecha los espacios como el trayecto a las cajas, lugares en donde la gente debe pasar tiempo sin mucho movimiento, mismo que puedes aprovechar también para vender. Exhibe productos pequeños, tal vez de uso común, como geles de mano, pañuelos desechables, o que pueden resultar de un “antojo”, como bebidas, chicles, chocolates o frituras, dependerá del giro de tu negocio.
Esperamos que esta información te sea de utilidad. Ten siempre dentro de tus objetivos el crear momentos positivos para tus clientes, que su experiencia en tu negocio sea lo más sencilla posible, con un servicio cálido y eficiente, para que te conviertas en su opción número uno.
